Ensayo Lazarillo
Ensayo Lazarillo
Ensayo Lazarillo
Según los estudiosos las fechas de las primeras ediciones de la obra datan del
año 1554 y fueron publicadas simultáneamente en las ciudades de Burgos, Amberes,
Alcalá de Henares y Medina del Campo. Es catalogada una novela picaresca en la que
se realizan diversos juegos lingüísticos1 que demuestran una estructura compleja que
dan cuenta de la condición letrada de su autor.
El autor coloca al pícaro y al mundo que lo rodea dentro de una verosimilitud narrativa,
en consonancia con su personalidad y el medio ambiente en el que vive, esto se
consigue intentando que la lengua sea un reflejo de este telón de fondo social; de ahí
que abunden los vulgarismos y un estilo coloquial, con el que se intenta un
acercamiento a la situación existencial del protagonista y de su medio ambiente.
(Rahmoune, 2015/2016, p.69)
1 Con estos juegos lingüísticos me refiero a la unidad temática de la obra. Unidad que se consigue
a través de la organización de los tratados (los tres primeros pueden pertenecer a un grupo, los 4
siguientes a otro), la temporalidad discursiva y la efectividad con la que se organiza su trama para
demostrar lo que lleva a Lázaro ser como es.
adelante, sino una obra de arte por su estructura interna. Sobre este respecto menciona
Jaen que la obra Lazarillo de Tormes puede entenderse desde un posible carácter
binario; una “tremenda sátira a la sociedad (...) [y] una compleja obra de arte” (1968, p.
130).
La historia responde a una orden hecha por un amigo del Arcipreste San
Salvador para conocer “el caso muy por extenso”, lo que queda claro en el prólogo,
pues te funge como una introducción al porqué de la obra. Lázaro, como narrador y
personaje principal de la obra, recorre a través de los diferentes tratados un camino en el
que “la afirmación del ser lleva implícita la conciencia de un progreso activo, de una
larga batalla librada contra el mundo, de un "haber llegado a ser," es decir, la conciencia
del tiempo.” (Guillen, 1957, p. 272). Lázaro reflexiona sobre su vida para explicar a
Vuestra Merced, desde el prólogo, aquello que le lleva a su posición y situación actual.
En la sociedad cristiana medieval el pobre tiene necesidad del rico para sobrevivir, pero el
rico tiene necesidad del pobre para comprar su salvaci6n; en esta sociedad en donde los
campos de lo sagrado y de lo profano se intrincan estrechamente y en donde se supone que
la organización de las estratificaciones sociales procede de la voluntad divina, la caridad
ejecuta la función de una fuerza reguladora de las impulsiones sociales. (Cros, 1996/1997,
p. 83)
La crítica más dura del relato se proyecta asimismo sobre los religiosos, y no tanto por las
acres censuras que se realizan sobre cada uno de ellos, sino, sobre todo, porque el ascenso
material y social del protagonista lleva anejo un simultáneo y marcado descenso moral
(Pavon, 2001, p. 288)
La violencia
Carente de una familia normal según los parámetros de la época. Esta frustración se
extiende a toda su historia y aspectos de su vida, ya que no sólo fracasarán sus intentos de
construir una célula familiar compensatoria (con sus amos, con su mujer) sino también la de
satisfacer su hambre e incluso la de cambiar de status social. (Pavón,2016, p.7)
Por estas razones Lázaro siempre debe obediencia, siempre padece y debe aceptar
lo que puede. Su condición de vulnerabilidad no le permite aspirar a más de lo que se le
da. Por tanto, la violencia que genera esta situación de precariedad y pobreza se
transforma en “el elemento que echa a andar la maquinaria narrativa” (Pavon, 2016, p.
2). El Lazarillo lleva consigo la enfermedad de la pobreza que le da a otros poder sobre
su ser y su quehacer; es lo que permite que otros violenten sus derechos. Su moralidad
está trastocada, su estructura familiar desdibujado, su ser, por tanto, oscurecido y
deslegitimado.
Así, buenos no son los que se pensarían ‘buenos cristianos’, sino que “son los
que le facilitan el dinero que le hace falta para comer, los que le aseguran la
supervivencia” (Wardropper, 1961, p. 442). Ejemplo de esto es “el caso muy
mencionado” (p. 96) que es muestra del interés de Lazaro por este “arrimarse a los
buenos” pues estos le dan cierto cobijo y noción de estabilidad, aunque realmente su
situación resulte precaria. Lázaro, ya no Lazarillo, se aferra a esto y lo transforma en “la
presunción de honra y ostentación de ascenso (...) a contrapelo de todo y de todos.”
(Wardropper, 1961, p. 443 ). Él no tiene nada a lo que apegarse, su pobreza y, por tanto,
hambre de afectiva, emocional y económica hacen que no acepte dicha situación, sino
que se convenza a sí mismo de su inexistencia.
Conclusiones
Los vínculos familiares, además de ser una condición sanguínea y genética, son
una experiencia de lazos emocionales que, aunque no se desprenden a lo largo de la vida
del ser humano, sí deben separarse física, mental y emocionalmente para encontrar el
equilibrio. No obstante, en aquella separación debe existir la entrega de una herencia
simbólica de los padres hacia sus hijos como fuerza e inspiración que los motiva a
tomar su propio camino y a encontrar en su ruta las condiciones necesarias para sentirse
plenos, autónomos, libres, felices, sólidos, sanos y satisfechos. Igualmente, esto
reproduce un legado que es entregado a sus hijos como una herramienta única, sutil y
completa, una condición que lleva al ser humano a ser consciente de su postura en el
mundo.
Así, Lázaro es excluido y esclavo de sus propias necesidades como de otros. Por
esa hambre que siente Lázaro sigue a múltiples hombres. Al final, inclusive, por hambre
se somete a un matrimonio donde la lealtad y la honra que ha querido alcanzar se ven
mezcladas y turbias. Se trata de una lealtad y una honra puestas en duda, que por
hambre decide aceptar y hasta autoconvencerse de la transparencia y ventura de estas.
Referencias Bibliográficas