Lirapopular Marcela Orellana
Lirapopular Marcela Orellana
Lirapopular Marcela Orellana
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Taller de Letras N° 38: 199-225, 2006
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Reseñas
Por otra parte, Orellana nos remite, con su publicación, a otra proble-
mática: la de la relación entre literatura popular e identidad nacional. La lira,
como poesía urbana, popular y masiva, surgida en el período de la turbulenta
organización de la nación en los años que siguen a la Independencia, fomenta
una identificación con el mensaje emitido. La lira popular se erige así en
descubridora de rasgos de identidad. La cultura popular se instala, entonces,
como sujeto para la construcción de identidades nacionales; gana rápidamente
los sentimientos y la conciencia de las multitudes. Analizar la lira popular
implica, pues, estudiar los procesos de conformación de identidades: la lira,
aglutinadora del sentir y vivir del pueblo, refleja la idiosincrasia del chileno
y ocupa un papel importante en relación con el imaginario social y colectivo.
Gracias a la lira popular nos es posible conocer la propia historia, la que
se suele omitir de los documentos oficiales, la historia “privada” y sentida,
la de los marginados o sin historia. Los cultivadores de la lira popular se
convertirán en verdaderos poetas cronistas de la intrahistoria; sus versos son
reflejo de la vida citadina con sus personajes y procesos, y revelan motivos
contingentes que permiten una mirada a la vida de la época. Estudiar la lira
popular implica, por consiguiente, adentrarse en la memoria nacional y en
el testimonio —personal y colectivo— de todo un pueblo. Tarea ineludible,
por consiguiente, tanto para la historia como para la literatura. Tarea que
Orellana asume con responsabilidad.
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la lira popular una forma de expresión. Era el único medio para un grupo
social que no tenía otro espacio de representación. En este sentido, estudiar
la lira popular conlleva prestar atención a las minorías culturales. De especial
interés para el tema de la marginalidad resulta el capítulo consagrado a la
figura de Rosa Araneda (‘Vuélvase mi pluma espada’: Rosa Araneda y su voz
femenina), poeta popular que vivió en Santiago en la segunda mitad del siglo
XIX y cuya voz fue ya reconocida —no sin polémica— en su tiempo. En
un medio donde la voz masculina dominaba, logró imponerse con su arte y
talento. Orellana repasa el proceso de conquista de un espacio para una voz
femenina. La lira popular permite, en definitiva, otorgar señas de identidad a
gentes marginadas de la cultura, ya sea por su condición de pobres e iletrados
o por su condición de mujer. Y lo hace por medio de una voz colectiva, en
complicidad solidaria con sus iguales, fruto de la conciencia de pertenecer a
un grupo con condiciones de vida y preocupaciones similares, en momentos
en que se evidencia una crisis y se siente la urgencia de una solución.
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Reseñas
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Para concluir, agreguemos que parte del interés que suscita la obra
de Marcela Orellana radica en el hecho de que el tema tratado resulta
atractivo por sí mismo. Reflexionar sobre la lira popular obliga a replantear
el tipo de historia de la literatura que se ha cultivado y la noción misma
de literatura nacional, y a adoptar una amplitud de miras. El propósito es
desterrar todo juicio de definición que implique un juicio de jerarquía. El
trayecto reflexivo de Marcela Orellana nos ha llevado a valorar esta poesía
viva y hondamente sentida, poesía que rescata lo cotidiano para cantarle a
lo humano y a lo divino. Como consecuencia de esto sería esperable que
las colecciones de lira popular que aún se conservan fueran cada vez más
asequibles al público lector.
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