San Agustín de Hipoma

SAN AGUSTÍN DE HIPOMA
Nació en Tagaste en el 354 y murió en 430 en Hipona de donde era obispo. Es el

más importante Padre de la Iglesia latino, los padres de la iglesia eran los
pensadores de la época. Al conjunto de obras y doctrinas de estos Padres de la
Iglesia se le llama Patrística.
La vida de San Agustín coincide con la decadencia del Imperio Romano de
Occidente, producido por la amenaza exterior de los pueblos bárbaros, la crisis
económica, etc.
Desde el punto de vista del cristianismo, el hecho histórico más importante es la
privilegiada situación institucional en que quedó a partir del s. IV. El reconocimiento
de la libertad religiosa por Constantino suprime las persecuciones y coloca al
cristianismo en una situación de igualdad frente a las otras religiones, este es el
paso a su transformación en religión oficial del Imperio bajo el mandato de Teodosio,
en virtud del Edicto de Tesalónica. A partir de Teodosio el Imperio se convierte en
un Estado confesional.
En lo cultural la época agustiniana está marcada por la decadencia de la ciencia
antigua, por las controversias sobre los principales dogmas del cristianismo y por la
lucha contra las herejías: arrianismo, nestorianismo y pelagianismo.
En lo filosófico el neoplatonismo fue la filosofía imperante y tuvo una gran influencia
en el pensamiento cristiano. San Agustín intentó conciliar las tesis cristianas con el
neoplatonismo, pero abandonó tal propósito. Plotino es el más importante del
neoplatonismo.
El problema de las relaciones razón-fe
Es el problema de las relaciones entre dos fuentes de conocimiento:
La RAZÓN fuente natural de conocimiento para el ser humano, produce la filosofía.
La FE fuente de conocimiento sobrenatural. Se puede definir como una creencia
basada en una fuerte adhesión del entendimiento. El resultado es la Teología
Revelada, conjunto de verdades reveladas por la autoridad de los libros sagrados y
por los escritores inspirados por ellos y creídos por fe.
San Agustín resuelve el problema explicando que razón y fe colaboran en el

esclarecimiento de la única verdad que existe, el cristianismo. Una verdad a la que
se puede acceder por dos caminos: la razón, que nos acerca a ella parcialmente, y
la fe, que nos la da a conocer en plenitud. La verdadera religión es también la
verdadera filosofía ya que la filosofía, si es correcta y no se desvía de la verdad,
estará de acuerdo con los contenidos de la fe. Esta colaboración se realiza del modo
siguiente: la fe ilumina a la razón y la precede ya que es preciso creer para poder
entender. L fe se vale de la razón ya que la comprensión racional de la doctrina
cristiana es la forma más elevada y autentica de la fe. San Agustín propone la
comprensión racional de la revelación cristiana.
El problema del conocimiento
Frente a los escépticos que dudaban de todo, San Agustín afirmó que era posible
hallar una verdad de la que no es posible dudar, la convicción de mi propia
existencia.
San Agustín distinguió entre: Conocimiento SENSIBLE, compartido por el hombre
con los animales, es el grado más bajo del saber, no puede considerarse un
conocimiento fiable y válido debido a la inestabilidad de las cosas sensibles y a que
los sentidos corporales son engañosos. Conocimiento RACIONAL INFERIOR, es el
conocimiento propio de las ciencias particulares. En parte es sensible, ya que se
refiere a las cosas del mundo y en parte es racional ya que aspira a verdades
generales o universales. Conocimiento RACIONAL SUPERIOR (sabiduría), es el
auténtico conocimiento filosófico y tiene por objeto las verdades eternas, las ideas
universales y necesarias.
San Agustín sitúa las ideas o esencias permanentes e inmutables en la mente de
Dios, ya que si son eternas e inmutables no pueden tener su origen en el alma
humana. San Agustín elabora la Teoría de la iluminación, inspirada en la Idea del
Bien platónica.
El problema de Dios
San Agustín trata de demostrar la existencia de Dios con varios argumentos:
-Argumento histórico: todos los pueblos han creído en la existencia de un Ser
Supremo.
- Argumento psicológico: el ser humano descubre con absoluta evidencia a Dios en
su alma, prueba segura y firme de su existencia.
- Argumento cosmológico: el orden interno y la belleza del universo es la prueba
palpable de la existencia de su Creador.
- Argumento epistemológico: las ideas o verdades eternas que encontramos en
nuestra mente no pueden provenir de nosotros mismos; únicamente pueden tener
su origen en Dios mismo, ya que sólo Él es eterno e invariable.
- Acerca de la esencia divina, San Agustín explica que todos los hombres que
atribuyen a Dios son insuficientes para entender su esencia.
Dios es el creador de todo lo que existe. Creó el mundo a partir de la nada. Esta
doctrina se llama ejemplarismo y es de inspiración platónica.
Antropología
·San Agustín adoptó y adaptó el dualismo antropológico de Platón, el ser humano
es un compuesto de cuerpo y alma y es ésta la que nos hace semejantes a Dios. El
alma humana es espiritual, simple e inmortal. Es principio vital e intelectual y se
encuentra unida accidentalmente a un cuerpo mortal, pero no cree que el alma esté
unida al cuerpo como un castigo.
·En cuanto al problema del origen del mal, San Agustín negó la teoría platónica de
la preexistencia y transmigración de las almas. Dudo entre creacionismo, Dios crea
cada alma con ocasión de la concepción de un nuevo ser humano y traducianismo,
los padres generarían el alma de forma semejante a como engendran el cuerpo.
Ética: felicidad, liberta y mal
Se puede afirmar que la ética de San Agustín es una síntesis de platonismo y
cristianismo.
El fin último de la vida humana es la consecución de la felicidad que solo puede
alcanzarse en la otra vida. El camino de la felicidad coincide con el camino de la
salvación y para salvarse hay que practicar la virtud. No es posible alcanzar la virtud
sin la ayuda sobrenatural de la gracia divina (ayuda de Dios).
San Agustín se interesó por la existencia del mal. Según él, el mal carece de
identidad, no es. Distinguió tres tipos de mal: mal FÍSICO consecuencia del pecado
original y procede de la justicia divina. Mal MORAL (pecado) consecuencia del libre
albedrío. Proviene de nuestra propia voluntad. Mal METAFÍSICO u ONTOLÓGICO
sería el mal que creemos que hay en el mundo porque aportamos un pensamiento
propio, pero en realidad no lo hay.
Las dos ciudades
Según San Agustín, la historia de la humanidad se divide en dos ciudades:
- Cuidad terrena: hombres que desprecian a Dios, pero aprecian todos los bienes
creados por Dios. Pagan impuestos por piedad a la ciudad.
- Ciudad celestial: hombres que aprecian a Dios, pero desprecian los bienes creados
por él. Pagan impuestos por piedad a Dios.

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