Clara entra en la habitación de su abuela, que estaba dormida, para decirle que era su cumpleaños. Clara le pide un caimán como regalo, a lo que su abuela se niega horrorizada al principio pero accede si los padres de Clara también están de acuerdo.
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Clara entra en la habitación de su abuela, que estaba dormida, para decirle que era su cumpleaños. Clara le pide un caimán como regalo, a lo que su abuela se niega horrorizada al principio pero accede si los padres de Clara también están de acuerdo.
Clara entra en la habitación de su abuela, que estaba dormida, para decirle que era su cumpleaños. Clara le pide un caimán como regalo, a lo que su abuela se niega horrorizada al principio pero accede si los padres de Clara también están de acuerdo.
Clara entra en la habitación de su abuela, que estaba dormida, para decirle que era su cumpleaños. Clara le pide un caimán como regalo, a lo que su abuela se niega horrorizada al principio pero accede si los padres de Clara también están de acuerdo.
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GUÍA DE COMPRENSIÓN LECTORA
CLARA Y EL CAIMÁN
Clara entró en el cuarto de su abuela, que estaba todavía
completamente dormida.
- Buenos días, abuela –saludó Clara en voz bastante alta.
- ¿Uuuuhhh? –gruñó la abuela- ¿Qué te ocurre?
- Nada, no me pasa nada.
- ¿Nada? ¿Estás segura? Me alegro –dijo la abuela- Me habías
asustado.
- ¿Sabes, abuela? Hoy es mi cumpleaños –dijo Clara.
- ¡Ah, es verdad! ¡Muchas felicidades! Luego te compraré un regalo.
- ¿Qué me vas a regalar?
En el calorcito de la cama, la abuela estaba ya empezando a sentirse
adormilada.
- Pues... te puedo regalar libros... o un jersey... o... Bueno, lo que tú
quieras. Pero ahora déjame dormir.
- Lo que yo quiero es un caimán.
- ¡Un qué...?
La abuela se sentó en la cama, despierta y completamente horrorizada.
- ¡No puedes tener un caimán en casa!
- Es sólo una cría. Es pequeño; así de pequeño –dijo Clara. Y marcó el
tamaño con los dedos.
- ¿Qué van a decir tus padres?
- No van a decir nada, estoy segura –dijo Clara-. El caimán vivirá en una pecera grande en mi cuarto y yo lo cuidaré. Será muy fácil. Me ha dicho el chico de la tienda que un caimán come de todo... ¿Me lo comprarás? Di, abuela, me lo comprarás, ¿eh?.
La abuela lo pensó un momento. Luego volvió a escurrirse entre las
sábanas:
- Bueno, si eso es lo que quieres... Pero ya veremos qué dicen tus
padres.
Responde las siguientes preguntas
1) ¿Cómo estaba la abuela cuando entró Clara?
a) Dormida b) Despierta c) Con los ojos entreabiertos
2) ¿Qué dijo Clara a su abuela?
a) Que era su santo b) Que era su cumpleaños c) Que estaba enferma