Decalogo Del Abogado
Decalogo Del Abogado
Decalogo Del Abogado
Eduardo J. Couture
La lógica del derecho no es lógica formal, sino una lógica viva con
todas las sustancias de la experiencia humana.
IV. Lucha. Tu deber es luchar por el Derecho, pero el día que encuentres en
conflicto el Derecho con la Justicia, lucha por la Justicia.
VI. Tolera. Tolera la verdad ajena en la misma medida en que quieres que sea
tolerada la tuya.
VII. Ten paciencia. El tiempo se venga de las cosas que se hacen sin su
colaboración.
VIII. Ten fe. Ten fe en el Derecho, como el mejor instrumento para la convivencia
humana; en la Justicia, como destino normal del Derecho, en la Paz como
substitutivo bondadoso de la Justicia; y sobre todo, ten fe en la Libertad, sin
la cual no hay Derecho, ni Justicia, ni Paz.
Estoy de acuerdo respecto a las exigencias que enumera, ya que como toda profesión necesita
unos lineamientos básicos que la caractericen y, él de un modo casi poético los resume en diez
títulos.
A pesar de que cada una tiene igual importancia, que en la realidad suenan hasta un poco
idílico algunas de ellas ya que, muchas no son tenidas en cuenta dando como ejemplo claro la
cuarta referida a la lucha (más específicamente a quienes dilatan el proceso), la sexta, que
habla de la lealtad entre adversarios e inclusive la primera respecto al estudio.
Es decir, que es claro que habrán abogados que cumplen con todas estas condiciones y por ello
estarán tranquilos en su conciencia, pero los medios y la misma sociedad, solo ponen a la luz,
o les interesa hablar, de aquellos que no cumplen estas aptitudes, que solo pueden ser
conocidos por infames, lo cual hace que la abogacía sea vista con malos ojos por la sociedad.
Es por ello, que el decálogo debería ser un libro que tendría que estar en la biblioteca de todo
abogado, porque, pese a ser escrito en el año 1949, no pierde su vigencia, y hace recordar a
muchos, la noble razón por la que eligió esta carrera entre tantas existentes.