Dolor Abdominal - Semio
Dolor Abdominal - Semio
Dolor Abdominal - Semio
La consulta médica por dolor abdominal es un hecho frecuente. Sus causas son
múltiples y abarcan desde enfermedades de escaso riesgo hasta otras muy graves que
comprometen la vida del paciente. Alrededor del 30 al 40% de los casos carecen de una
etiología demostrable.
El abdomen agudo se define como un síndrome clínico con signos y síntomas referidos
al abdomen, de los cuales el dolor abdominal es el predominante, y que requiere una
conducta diagnostica o terapéutica rápida. No existe consenso en cuanto a las horas de
duración del dolor, que según los distintos autores, puede extenderse desde menos de
6 horas hasta 7 días de evolución.
Debido a sus múltiples causas, el diagnóstico de la etiología del dolor abdominal agudo
es un difícil desafío para el médico. Una historia clínica detallada es muy importante
para realizar una interpretación correcta. Cuando el dolor abdominal persiste más de 6
horas, en general su causa es una patología quirúrgica.
I. EPIDEMIOLOGIA:
Los trabajos epidemiológicos que investigan las causas del abdomen agudo en las
guardias hospitalarias, en los servicios de internación quirúrgicos y en la consulta
domiciliaria coinciden en que el dolor abdominal inespecífico (DAI), es el motivo de
consulta más frecuente.
II. FISIOPATOLOGIA:
El dolor visceral se origina en órganos abdominales que son cubiertos por el peritoneo
visceral. Los receptores dolorosos se ubican en la pared muscular de las vísceras
huecas y en la capsula de los órganos macizos. El estimulo es transmitido por las vías
aferentes viscerales junto con los nervios simpáticos hasta las astas dorsales de la
medula espinal, y de allí a los centros nerviosos superiores. Los receptores son
sensibles al estiramiento o contracción de una víscera hueca (obstrucción del intestino
delgado), la distensión de la capsula de un órgano macizo (hepatitis, pancreatitis), la
isquemia (trombosis mesentérica) o la inflamación (apendicitis, colecistitis). El dolor
visceral es sordo, mal localizado y puede percibirse en el abdomen a distancia de la
viscera afectada. Con frecuencia se ubica en la línea media abdominal, debido a que
ingresan a la medula espinal fibras nerviosas bilaterales.
El dolor somático se genera en el peritoneo parietal, al que inervan las fibras nerviosas
espinales que abarcan los segmentos D7 a L1. El estímulo es inflamatorio y puede ser
bacteriano (peritonitis) o químico (jugo gástrico estéril por perforación de una ulcera
duodenal). Lo acompaña un espasmo reflejo de la musculatura del abdomen. Se localiza
en el sitio de la lesión, es intenso, de aparición brusca y se agudiza con los movimientos,
la tos y la respiración.
El dolor abdominal puede clasificarse en primer lugar por su duración. Cuando es menor
de 7 días, se denomina dolor abdominal agudo, que puede ser producido por múltiples
etiologías de origen intraperitoneal o extraperitoneal.
El dolor abdominal crónico es muy frecuente. La mayoría de las veces no se asocia con
alteraciones estructurales orgánicas. La dispepsia no ulcerosa, el síndrome del intestino
no irritable y los dolores de origen indeterminado son los más comunes.
IV. ETIOLOGIA:
1. Dolor abdominal agudo de origen intraperitoneal:
Puede deberse a causas inflamatorias, mecánicas, hemoperitoneo, isquémicas
y traumáticas.
Entre las inflamatorias, en primer lugar se encuentra la peritonitis, que es la
inflamación del peritoneo o del líquido peritoneal producida por bacterias o
contenido gastrointestinal.
El segundo grupo de causas de dolor abdominal agudo de origen intraperitoneal,
está constituido por las mecánicas. Las causas mas frecuentes de obstrucción
mecánica del intestino delgado son bridas por cirugía previa, enfermedad
inflamatoria intestinal, tumores y apendicitis aguda con peritonitis localizada.
V. ANAMNESIS:
Debe incluir los antecedentes familiares y personales. La edad del paciente es
importante, ya que ciertas enfermedades están claramente limitadas a
determinados grupos etarios. La apendicitis aguda y el dolor abdominal agudo
inespecífico son frecuentes en los jóvenes. La diverticulitis aguda y la isquemia
mesentérica aparecen en edades avanzadas, como también las enfermedades
torácicas acompañadas por dolor abdominal.
El antecedente de alcoholismo, por su relación con la hepatitis alcohólica, la
pancreatitis aguda y crónica o la ulcera péptica, es importante. L ingestión
crónica de antiinflamatorios, por su asociación con la ulcera perforada, es otro
antecedente que hay que considerar.
La cirugía abdominal previa puede estar relacionada con el cuadro actual, en
particular por la presencia de bridas intraperitoniales que provocan obstrucción
intestinal o por la recidiva de enfermedades operadas previamente.
También es necesario evaluar los síntomas asociados. Las náuseas y los
vómitos son síntomas concomitantes muy comunes; los cambios en el habito
intestinal orientan hacia el cáncer de colon; en las mujeres, la historia menstrual
debe indagarse por su relación con el embarazo ectópico o con las
complicaciones ováricas.
El dolor se categorizará de acuerdo con la forma de comienzo, la localización,
las características, la intensidad, los factores que lo agravan o alivian y los
síntomas asociados.
El comienzo brusco se asocia a menudo con perforación o estrangulación
visceral. En ocasiones aumenta gradualmente, como en la pancreatitis aguda.
Las perforaciones pequeñas con escasa filtración de contenido intestinal, como
las del colon, el apéndice, el intestino delgado y la vesícula, originan dolor de
parición gradual y localizada.
La localización del dolor en el epigastrio puede producirse por ulcera péptica,
pancreatitis o isquemia de miocardio. En los procesos pancreáticos, la irradiación
al dorso es común. El dolor originado por distensión hepática aguda, cólico
vesicular, colecistitis y obstrucción coledociana se localiza en el hipocondrio
derecho. En el cólico vesicular, la irradiación al hombro o al dorso es frecuente.
Los dolores del abdomen inferior provienen del colon y el aparato genital y suelen
irradiarse al dorso. El cólico renal a menudo se irradia hacia la ingle.
El dolor por obstrucción brusca de una viscera hueca tiene las características de
ser tipo colico, intenso y con ritmo. La obstrucción del intestino delgado provoca
dolor periumbilical o supraumbilical, y el ritmo es de 2 a 5 minutos.
La intensidad del dolor esta en relación con la gravedad de la enfermedad. El
dolor del colico renal, vesicular o del infarto mesentérico es de iniciación aguda
y de elevada intensidad.
Los síntomas asociados con el dolor abdominal con el dolor abdominal pueden
ser útiles para el diagnóstico. La pérdida de peso previa se observa en
enfermedades malignas, las náuseas y los vómitos, en la obstrucción intestinal,
y los cambios en el habito intestinal, en las lesiones del colon.