Profesor Segundo B
Profesor Segundo B
Profesor Segundo B
LENGUA
CASTELLANA
Y
LITERATURA
CURSO 2016-2017
ÍNDICE Págs
1. INTRODUCCIÓN 4
1.1 Lecturas para este curso 5
1.2 Normas de calificación de los textos escritos 5
1.3 De la actitud en la clase 5
1.4 Criterios de calificación y mínimos 6
1.5 Atención a la diversidad 6
1.6 Estructura de las pruebas escritas 6
1.7 Organización de las unidades didácticas 7
Permítasenos, antes de empezar con los detalles del curso, expresar algunas ideas
pedagógicas, clarificadoras para el alumno y su familia, sobre la línea metodológica
seguida en esta programación.
Siempre me ha molestado que me lean un texto que tengo encima de la mesa. ¡Si ya
sé leer! Si lo que se desea es hablar sobre esos documentos, lo que debería hacerse es
que ambas partes lo leyeran antes, reflexionaran sobre ello y, posteriormente, hablaran
sobre sus conclusiones, comentaran las dudas, y así, uno y otro interlocutor se
enriquezcan con las aportaciones de cada uno; si no, la clase se convierte en que uno
habla y el otro escucha y el segundo interviene si se le deja o se atreve a interrumpir la
charla-lectura.
Esta será la base metodológica de nuestra actividad en clase: charlar sobre los
temas, y, para ello, las dos partes deben conocer el tema de trabajo, tener una opinión
sobre el mismo, unos conocimientos y unas dudas que exponer en el diálogo.
Por ello, esperamos, deseamos e incluso reivindicamos un alumno participativo, que
llegue a clase preguntando sus dudas, solicitando ayuda para resolver las actividades
que previamente ha trabajado en su casa, relacionadas con la actividad lectiva del día.
Ese es el alumno que aprende y se desarrolla personal e intelectualmente. En este
presupuesto creemos. No está de más la colaboración de todos los interesados en el
buen funcionamiento del proceso de enseñanza y aprendizaje, con un objetivo principal:
que el alumno aprenda, nada más ni nada menos; lo demás se dará por añadidura.
El aprendizaje es propio del alumno y se concreta en el proceso de reflexión del
propio alumno, ayudado a veces por otras personas o medios. El profesor abre caminos,
marca metas, propone retos; el alumno asimila, discurre, trabaja y, como consecuencia
de todo ello, aprende.
El aprendizaje es, pues, algo activo.
También se aprende escuchando las explicaciones del profesor, ¡cómo no!, y, por
ello, el profesor orienta, explica y comenta continuamente.
Pero lo trascendente no es que el profesor enseñe, incluso que dé unas maravillosas
clases, sino que el alumno aprenda y esa es labor del propio alumno.
Empero, el profesor enseña lo mismo a TODOS. El alumno aprende, unos más y
otros menos. La diferencia, además de en las capacidades, está, sobre todo, en el trabajo,
el interés y el esfuerzo.
El presente trabajo recoge el temario y ejercicios de Lengua Castellana y Literatura
para el segundo curso de bachillerato, y continúa en forma y contenido lo dado en
primero. Comenzaremos con un repaso general y recordaremos con mayor detenimiento
lo dicho sobre el comentario de texto en sus diversas variantes: lingüístico, literario y
crítico, morfosintaxis y literatura. El contenido propio de este curso se centra en los
tipos de textos y los comentarios sobre los mismos, la oración simple y compuesta, el
análisis léxico-semántico y la literatura del siglo XX. Ya avanzado el curso, iremos
adaptando las actividades a la prueba de bachillerato.
Se han establecido unas lecturas, en los diez últimos días de cada mes
comentaremos esos libros o se entregarán los trabajos que se indiquen.
Para el trabajo diario es necesario, además de lo dicho, un cuaderno en el que se
trasladarán los ejercicios resueltos, los escritos, los esquemas y las fichas de lectura, en
tres apartados debidamente preestablecidos y perceptibles.
En cuanto a los criterios de evaluación, remito a la programación del Departamento
de Lengua y Literatura. Os recuerdo que la nota final del curso puede verse modificada
positivamente con relación a la media aritmética en el sentido que se establece en la
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Primera evaluación:
-Primer examen, primera semana de noviembre. Día
-Segundo examen, primera semana de diciembre. Día
Segunda evaluación:
-Primer examen, segunda semana de febrero. Día
-Segundo examen, primera semana de marzo. Día
Tercera evaluación:
-Primer examen, segunda semana de abril. Día
-Segundo examen, tercera o cuarta semana de mayo. Día
-Posible tercer examen, en junio. Día
1. Formato: fuente, Times New Roman 12. Párrafo, justificado, 0 en todo, sangría
primera línea 0,7, espaciado sencillo.
2. Redacción. Solicitamos un uso culto, formal del castellano y adecuado a la
tipología textual: el ensayo, con los elementos de cohesión necesarios e intención de
estilo.
3. Ortografía.
4. Contenido. Profundidad y originalidad de los contenidos. Se valorará muy
negativamente la copia parcial y con un suspenso, la general.
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4. Literatura:
-Textos para identificar movimiento, época, autor y hablar sobre estos aspectos
razonadamente.
En los trabajos en equipo, en unos casos, que se determinarán, todos los equipos
trabajarán los mismos temas y en otros, cada grupo se hará cargo de un subtema.
En todo caso, el trabajo final se presentará en un texto mecanografiado interactivo
con las especificaciones antes reseñadas, con vídeos, hiperenlaces diversos (PowerPoint,
vídeos, fotografías, etc.).
1. REFLEXIONES PREVIAS
Para algunos autores ser un lector competente es saber leer. Y saber leer consiste en
comprender e interpretar, es decir, comprender el significado y el sentido. Un buen
lector es el que alcanza a desentrañar el sentido de un texto, es decir, realiza inferencias,
interpretaciones, deducciones y valoraciones de todo tipo.
Solo gracias a la comprensión del sentido es posible hacer una lectura comprensiva
propiamente dicha. Las inferencias son, pues, la base de la lectura comprensiva.
Por lo tanto, la mejor animación lectora que se puede hacer en el aula es desarrollar
la competencia lectora del alumnado.
2. OBJETIVOS
3.1 PRELECTURA
-Descifrar el texto, diccionario, tipología, etc. Se trata de establecer una toma de
contacto con el texto para ver de qué va. Esta parte se puede evitar con la ayuda del
profesor, cuando realiza una introducción al texto.
-Lectura detenida punto por punto y parada para reflexionar, tomando notas,
subrayando, etc.
-Realizar inferencias sobre lo que dice y quiere decir el texto, sobre lo que seguirá,
las posibles conclusiones del texto, intenciones comunicativas (predicciones).
-Generar hipótesis sobre lo que seguirá, las intenciones comunicativas, etc.
(interpretación del texto)
-Tomar notas sobre las conclusiones parciales en hoja aparte y/o en el propio texto.
-Subrayado de palabras clave e ideas principales para establecer más tarde el tema,
elaborar el esquema y posterior resumen.
-Relacionar lo que dice el texto con los conocimientos previos del alumno
(conocimiento del mundo). De ahí la importancia de activar la memoria para realizar
conexiones e inferencias.
-Ir estableciendo la estructura del texto a partir de los marcadores textuales, los
párrafos, las ideas principales, etc.
La meta no es capturar el significado, sino el sentido.
Actividad 1: Comenta los pasos que debe tener una lectura comprensiva y
ejemplificarlo con el siguiente texto.
TEXTO 1
PLANIFICACIÓN (INUENTIO)
Proceso:
-Buscar el tema o partir del que nos han dado y los subtemas.
-Reunir, en una tormenta de ideas, expresiones relacionadas con el tema.
-Buscar subtemas.
-Hacer una lista de palabras sobre el tema: sustantivos, adjetivos, verbos, etc. que
más tarde servirán para facilitarnos la redacción. Se puede utilizar el diccionario
ideológico, el de sinónimos, etc.
-Buscar documentación sobre el tema.
-Concretar una intención comunicativa: información, ironía, etc.
LA ORGANIZACIÓN (DISPOSITIO)
Debemos, antes de escribir, establecer la estructura que tendrá nuestro texto.
Debemos tener en cuenta la tipología textual a la que pertenecerá el texto que
preparamos: carta, instancia, texto expositivo, argumentativo, narrativo, etc. (Son muy
importantes los conocimientos previos.)
-¿Qué deseo escribir? –Un cuento. ¿Qué es un cuento (tipología)? ¿Qué tipos de
cuentos hay?¿Cuál es o puede ser su estructura? Etc. Pensaré en ello.
Organizaremos el argumento. Primero una introducción. A la introducción le
seguirá un nudo, con un conflicto. Y, por fin, la conclusión.
LA ELOCUCIÓN (ELOCUTIO)
Se trata del proceso de redacción. Como en los apartados anteriores, hay que pensar
antes de hacer. Debe revisar sus conocimientos previos sobre lo que va a escribir. Por
ejemplo, si es un cuento, cómo se organiza un cuento, su estructura: introducción, nudo
y desenlace. La importancia del conflicto.
Es un texto literario, por lo tanto, tendré que pensar cuál es el lenguaje más
adecuado, figuras literarias, etc.
La elocución requiere seleccionar el léxico, el uso de las categorías morfológicas
para distinguir entre un texto informativo, argumentativo o con intención literaria.
Ahora hay que ponerse a escribir y surgirán preguntas antes de eso, como ¿qué tipo
de vocabulario utilizaré? ¿Muchos adjetivos? ¿Qué tiempos verbales? ¿Qué tipo de
narrador? ¿Por qué? ¿Qué punto de vista narrativo?, etc.
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Tendré que cuidar las características que debe tener un texto para ser tal:
coherencia, cohesión, adecuación y corrección.
Una vez respondidas estas y otras preguntas para que el texto sea adecuado, ya
estaremos en disposición de escribir.
LA REVISIÓN
Es muy importante revisar el texto antes de leerlo en público o entregarlo al
profesor, para intentar que todo esté correcto y sea adecuado.
Revisaremos si el texto tiene las características ya reseñadas: coherencia, cohesión,
adecuación y corrección. Si hemos conseguido transmitir la intención comunicativa.
Revisaremos la ortografía, la redacción, el léxico utilizado y su precisión, etc.
¿Cuántas palabras baúl o verba ómnibus he utilizado?
Tendré que leer una o varias veces todo y cambiar cosas.
ESQUEMA
1. Observación del texto..........................................................................................
1.1 Lectura del texto................................................................................................
1.4 Conclusión.........................................................................................................
En el proceso de análisis debemos tener en cuenta las dos partes de todo texto: el
contenido y la forma.
En el primer apartado identificamos el tema, realizamos el resumen y
determinamos la estructura del texto.
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Para la redacción del comentario tendremos en cuenta las fases de toda expresión
escrita:
1. Planificación.
2. Organización.
3. Elocución.
4. Revisión.
***
Le sucede algo al catalejo con que estábamos observando la ciudad y la campiña.
No se divisa nada; indudablemente se ha empañado el cristal. Limpiémosle. Ya está
claro; tornemos a mirar. Los bosques que rodeaban la ciudad han desaparecido. Allá, por
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aquellas lomas redondas que se recortan en el cielo azul, en los confines del horizonte,
ha aparecido una manchita negra; se remueve, avanza, levanta una nubecilla de polvo.
Un coche enorme, pesado, ruidoso, es; todos los días, a esta hora, surge en aquellas
colinas, desciende por las suaves laderas, cruza la vega y entra en la ciudad. Donde
había un tupido boscaje, aquí en la llana vega, hay ahora trigales de regadío, huertos,
herreñales, cuadros y emparrados de hortalizas; en las caceras, azarbes y landronas que
cruzan la llanada, brilla el agua que se reparte por toda la vega desde las represas del
río. El río sigue su curso manso como antaño. Ha desaparecido el obraje de paños que
había en sus orillas; quedan las aceñas que van moliendo las maquilas como en los días
pasados. En la cuesta que asciende hasta la ciudad, no restan más que una o dos
tenerías; la mayor parte del año están cerradas. No encontramos ni rastro de aquella
casilla medio derrumbada en que vivía una vieja que todas las mañanas salía a por vino
con un jarrico y que iba de casa en casa llevando chucherías para vender […]
(Una tremenda revolución ha llenado de espanto al mundo; millares de hombres
han sido guillotinados; han subido al cadalso un rey y una reina. Los ciudadanos se
reúnen en Parlamentos. Han sido votados y promulgados unos códigos en que se
proclama que todos los humanos son libres e iguales. Vuelan por todo el planeta muche-
dumbre de libros, folletos y periódicos.)
En el primero de los balcones de la izquierda, en la casa que hay en la plaza, se
divisa un hombre. Viste una casaca sencillamente bordada. Su cara es redonda y está
afeitada pulcramente. El caballero se halla sentado en un sillón; tiene el codo puesto en
uno de los brazos del asiento y su cabeza reposa en la palma de la mano. Los ojos del
caballero están velados por una profunda, indefinible tristeza...
***
Otra vez se ha empañado el cristal de nuestro catalejo; nada se ve. Limpiémoslo. Ya
está; enfoquémoslo de nuevo hacia la ciudad y el campo. Allá en los confines del
horizonte, aquellas lomas que destacan sobre el cielo diáfano, han sido como cortadas
con un cuchillo. Los rasga una honda y recta hendidura; por esa hendidura, sobre el
suelo, se ven dos largas y brillantes barras de hierro que cruzan una junto a otra,
paralelas, toda la campiña. De pronto aparece en el costado de las lomas una manchita
negra: se mueve, adelanta rápidamente, va dejando en el cielo un largo manchón de
humo. Ya avanza por la vega. Ahora vemos un extraño carro de hierro con una chime-
nea que arroja una espesa humareda, y detrás de él una hilera de cajones negros con
ventanitas; por las ventanitas se divisan muchas caras de hombres y mujeres. Todas las
mañanas surge en la lejanía este negro carro con sus negros cajones, despide penachos
de humo, lanza agudos silbidos, corre vertiginosamente y se mete en uno de los
arrabales de la ciudad.
El río se desliza manso, con sus aguas rojizas; junto a él -donde antaño estaban los
molinos y el obraje de paños- se levantan dos grandes edificios; tienen una elevadísima
y sutil chimenea; continuamente están llenando de humo denso el cielo de la vega.
Muchas de las callejas del pueblo han sido ensanchadas; muchas de aquellas callejitas
que serpenteaban en entrantes y salientes -con sus tiendecillas- son ahora amplias y
rectas calles donde el sol calcina las viviendas en verano y el vendaval frío levanta
cegadoras tolvaneras en invierno. En las afueras del pueblo, cerca de la Puerta Vieja, se
ve un edificio redondo, con extensas graderías llenas de asientos, y un círculo rodeado
de un vallar de madera en medio. A la otra parte de la ciudad se divisa otra enorme
edificación, con innumerables ventanitas: por la mañana, a mediodía, por la noche
parten de ese edificio agudos, largos, ondulantes sones de cornetas. Centenares de
lucecitas iluminan la ciudad durante la noche: se encienden y se apagan ellas solas.
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(Todo el planeta está cubierto de una red de vías férreas; caminan veloces por ellas
los trenes; otros vehículos -también movidos por sí mismos- corren vertiginosos por
campos, ciudades y montañas. De nación a nación se puede transmitir la voz humana.
Por los aires, etéreamente, de continente a continente, van los pensamientos del hombre.
En extraños aparatos se remonta el hombre por los cielos; a los senos de los mares
desciende en unas raras naves y por allí marcha; de las procelas marinas, antes es-
pantables, se ríe ahora subido en gigantescos barcos. Los obreros de todo el mundo se
tienden las manos por encima de las fronteras.)
En el primer balcón de la izquierda, allá en la casa de piedra que está en la plaza,
hay un hombre sentado. Parece abstraído en una profunda meditación. Tiene un fino
bigote de puntas levantadas. Está el caballero, sentado, con el codo puesto en uno de los
brazos del sillón y la cara apoyada en la mano. Una honda tristeza empaña sus ojos...
***
¡Eternidad, insondable eternidad del dolor! Progresará maravillosamente la especie
humana; se realizarán las más fecundas transformaciones. Junto a un balcón, en una
ciudad, en una casa, siempre habrá un hombre con la cabeza, meditadora y triste,
reclinada en la mano. No le podrán quitar el dolorido sentir.
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MORFOLOGÍA (3)
1. RASGOS GENERALES
La Morfología estudia la forma y las combinaciones de los componentes internos de
las palabras
EL MONEMA
Una de las características del lenguaje humano es la de ser articulado; esto quiere
decir que cada elemento está constituido por diversas partes, y su articulación nos da
como resultado la palabra dotada de significante y de significado. Pero el lenguaje
humano no es solo articulado, sino doblemente articulado.
La primera articulación del lenguaje es aquella con arreglo a la cual todo enunciado
se analiza en una sucesión de unidades dotadas cada una de ellas de un significante y de
un significado.
Me duele la cabeza.
dependientes
lexemas
independientes
Monema
independientes g.ro, no,
morfemas grado. t/a,
flexivos n/p
dependientes
derivativos Prefijos
Sufijos
Interfijos
MORFEMAS DEPENDIENTES
Los morfemas dependientes se dividen en dos grandes grupos: constitutivos o
flexivos y facultativos o derivativos.
a) Morfemas flexivos o constitutivos: Son formantes necesarios para constituir la
palabra: género, número, persona...
gat- o - s amá - ba - mos blanc - a - s
3. Interfijos: No son morfemas, pues están faltos de significado, son átonos y están
colocados entre el lexema y el sufijo, o entre el prefijo y el lexema:
pec - ec - it - o - Ø
pan - ad - er - o - s
polv - ar - ed - a
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en - s - anch - ar
En realidad son meros elementos de enlace. Es importante no confundirlos con los
sufijos. En pec -ec - it - o - s, -ec- no es un sufijo, pues no existe la palabra pecec, sino
el lexema pez, que se une con el interfijo al sufijo -ito
Actividades
Divide en sus componentes las siguientes palabras y di su significado:
ultracongelado, ultraconservador, intolerable, biológico, capitalista, bondad,
papelería, anochecer, férreo, bélico, epidermis, bronquitis, humareda, celebérrimo,
aristocrático.
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8. FORMACIÓN DE PALABRAS
La Etimología y la Lexicología son las dos ramas de la lingüística que se ocupan del
estudio del léxico. Mientras que la primera trata del origen y evolución de las palabras,
la segunda estudia el léxico de la lengua en un momento dado.
La lengua es un organismo vivo que se adapta a las necesidades de sus hablantes.
Así añade y modifica continuamente las palabras y sus significados adaptándolos a los
nuevos instrumentos o necesidades. Algunas palabras caen en desuso (arcaísmos) y
otras nuevas aparecen (neologismos. La lengua dispone de los medios internos y
externos.
8.1 DEFINICIÓN
PROCEDIMIENTOS INTERNOS
Las lenguas están permanentemente en evolución, como la cultura o las costumbres.
Continuamente se crean términos nuevos para adecuar la lengua a las necesidades
idiomáticas.
Desde antiguo el sistema de la lengua utiliza dos procedimientos básicos para la
formación de nuevas palabras: la composición y la derivación.
Derivación. Consiste en crear una nueva palabra añadiendo uno o varios formantes
facultativos o derivativos a un lexema: clari- dad, jardin- er - o, im - pur - o, ultra -
congel – ado, multirracial...
Entre la composición y la derivación podemos considerar las palabras compuestas
con prefijos, sufijos o lexemas griegos o latinos considerados como compuestos cultos
por algunos autores. En muchos casos son lexemas de este origen que en castellano, al
no tener uso independiente, los consideramos como prefijos o sufijos. Así: -antropo-,
electro-, -cracia, etc.
Composición. Consiste en crear una nueva palabras uniendo dos o más lexemas:
lanzatorpedos, paraguas, lavaplatos, rojiblanco, limpiaparabrisas o morfemas
gramaticales independientes: aun - que, por - que.
Hay dos tipos de procedimientos para formar palabras compuestas:
1. Por simple suma de los componentes: sacacorchos, motocarro.
2. Por la adaptación del primer componente a una forma especial: rojiblanco.
Es muy frecuente que estas primeras partes de la palabras compuesta tenga origen
griego o latino: acueducto, xenófobo.
A veces esta unión no se expresa en una sola palabra, aunque poseen un significado
conjunto. Son compuestos no perfectos, llamados a veces lexías o compuestos
sintagmáticos: hombre rana, mesa camilla, guardia civil, letra de cambio, tinta china,
hombre rana, coche cama, cama nido...
Otras palabras: compraventa, largometraje, artimaña, pasatiempo, hincapié,
alicaído, boquiabierto, cejijunto, pelirrojo, manicorto, grandilocuente, malvivir,
malformar, menospreciar, vanagloriarse, malversar, bienaventurar, menospreciar,
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LÉXICO
PROCEDIMIENTOS EXTERNOS
Con frecuencia la lengua toma de otra los términos que necesita para denominar
nuevos objetos o ideas. A estas palabras se les denomina préstamos. Estos préstamos
han venido apareciendo desde la constitución del castellano, a partir del latín. El propio
latín recogió palabras o voces prerromanas: vega, barro, páramo. Con la llegada de los
germanos se introdujeron: agasajar, esquila, estaca, ganar, guerra, rico, ropa, yelmo;
antropónimos: Álvaro, Fernando, Rodrigo, etc.
Otros préstamos
Arabismos: alcalde, zaguán, almohada, noria, albañil...
Galicismos: Edad Media: adobo, afán, doncel, hereje, barón, pincel, joya, coraje...
S. XVIII y ss.: bayoneta, metralla, brigada, funcionario, gabinete, espectador, catastro...
Italianismos: arsenal, asalto, campeón, piloto, centinela.
Anglicismos: bistec, club, ponche, champú, túnel, vagón.
Lusismos: biombo, buzo, mermelada, caramelo, bandeja, mejillón, ostra.
Americanismos: patata, chocolate, jícara, tiburón, huracán.
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Una vez incorporado el préstamo a la lengua, sufre las evoluciones del resto de los
vocablos que posee esta:
Élite > elit -ism - o
Transistor > transistor - iz - ad - o
Líder > lider - azg - o
A veces, el préstamo es innecesario, pues ya existe alguna palabra con ese
significado en el idioma (e-mail, correo electrónico). Algunos préstamos no alteran la
forma escrita originaria: zapping, sándwich; otras veces admiten morfemas: zapear,
sandwichera, liderar. Otras veces se produce el calco semántico que consiste en que una
palabra castellana adquiera otro sentido por parecido con el préstamo: firma con el
significado de “empresa”, por firm.
8.2 LA DERIVACIÓN
La derivación es un proceso de creación de elementos léxicos nuevos (palabras
complejas) por la adición de una base ya existente en la lengua de afijos (elementos
inseparables) o por la supresión de algún elemento (derivación regresiva). Si el afijo
añadido es un prefijo colocado delante de la base, se denomina prefijación y si es sufijo
(pospuesto a la base) es sufijación. Si se aplica simultáneamente la prefijación y la
sufijación sobre la misma base es la parasíntesis.
Prefijación
Algunos prefijos pueden aparecer independientemente como verdaderas
preposiciones (sobre, contra, en, etc.) o como adverbios (mal, bien, etc.). Los prefijos no
suelen producir cambios en la categoría gramatical sino que conservan la categoría de la
base.
Principales prefijos:
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Sufijación
La sufijación es el procedimiento de formación de palabras que consiste en añadir
un sufijo a la base o elemento léxico ya existente en la lengua.
Su productividad y el número de sufijos es enorme.
Por sufijación se crean palabras nuevas de las cuatro principales categorías léxicas:
Del sustantivo reloj > relojero
Del sustantivo calle > callejear, callejero, calleja.
Del adjetivo bueno > buenísimo, buenazo, buenecito, buenamente.
a) De nombres:
-A. -E. -O: muda, empuje, canto.
-AJE: aterrizaje, cortinaje.
-AL. -AR: arenal, pinar, centenar.
-AMEN: maderamen.
-AZO: cabezazo.
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b) De adjetivos:
.ADO: anaranjado.
.AL, .AR: ministerial, familiar.
-ANO, .IANO: americano, machadiano.
-ARIO: fraccionario.
-BLE (-ABLE, .IBLE): deseable, crefble.
-DIZO (-APIZO, -EDIZO, -IDIZO): resbaladizo, movedizo, huidizo.
-DOR (-ADOR. -EDOR, -IDOR): madrugador, cumplidor.
-ENSE. -IENSE: badajocense, parisiense.
-EÑO: velazqueño.
-ÉS: irlandés.
-ESCO: novelesco.
-Í: israelí.
-ICO: volcánico.
-ISTA: partidista.
-IVO: sorpresivo.
-NTE (.ANTE. .ENTE. -IENTE): estimulante, sorprendente, perteneciente.
-ÓN: barrigón, llorón.
-OSO: seboso, estudioso.
-TIVO (-ATIVO, -ITIVO): comparativo, competitivo.
-TORIO (-ATORIO, -ETORIO, -ITORIO): compensatorio, supletorio, inhibitorio.
-UDO: orejudo.
c) De verbos:
-EAR: bromear.
-ECER: entontecer.
-IFICAR: electrificar.
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-IZAR: nacionalizar.
Sufijación estándar
Los sufijos se pueden clasificar desde distintas perspectivas:
-Por el tipo de base de origen: denominales, deadjetivales, etc.
-Por los contenidos que actualizan: agentivos, locativos, instrumentales...
-Por su productividad: alta (-ito, -ble), baja (-dumbre).
-Por la compatibilidad con distintas bases (-ista), etc.
Sufijación apreciativa
Es una derivación homogénea, pues no se produce cambio de clase gramatical.
Los sufijos apreciativos se subdividen tradicionalmente en diminutivos,
aumentativos y despectivos. Los sufijos se aplican a sustantivos, adjetivos, participios
(sentadito) y gerundios (calandito).
Destaca también su gran recursividad acumulando sufijos sobre la misma base:
chiquito, chiquitito, chiquillo, chicazo, chiquitajo, chiquirritín...
La infijación (interfijos)
Los interfijos son elementos sin función gramatical ni significativa que enlazan la
base léxica y los sufijos. Este procedimiento puede tener una finalidad antihiática, como
en cafe –c- ito o bien de ayuda para la pronunciación de algunos derivados te –t- era,
pan – ad – er– o, etc.
Ejemplos:
Tirotear, pelirrojo, cafecito, panadero, tetera, polvareda, humareda...
Derivación regresiva
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8.3 LA COMPOSICIÓN
Es menos productiva que la derivación. Es, sin embargo, otro de los procedimientos
de formación de palabras nuevas en la lengua española, y, por tanto, de enriquecimiento
de su léxico.
A diferencia de la derivación, la composición tiene un carácter sintáctico. En el
aspecto semántico el compuesto es una unidad pero su significado no se deduce
necesariamente del significado de sus componentes: malhumor, medianoche,
duermevela, aguardiente, aguafiestas, pelirrojo, lavaplatos, correveidile, dinero negro...
En general los compuestos en español están construidos con dos bases que pueden
ser de la misma o de distinta categoría gramatical y los mecanismos de unión son
variados.
Compuestos cultos: son los formados con bases que son préstamos de las lenguas
clásicas (griego y latín), raíces prefijas y sufijas. En realidad son lexemas que se unen
para formar una nueva palabra: megá-fono; termó-metro, perí-metro, biblio-teca,
antropo-morfo, megáfono, mega-vatio, bio-logía, lito-grafía, aero-lito; dudas plantean
auto-, macro-, micro-, etc.
Compuestos populares: construidos por bases autóctonas y se unen siguiendo el
orden y sintaxis de la lengua española: guarda-espaldas, saca-corchos, etc.
En los compuestos ortográficos se distinguen los compuestos contrapuestos o
contraposición (camión-cisterna; físico-químico) y los compuestos yuxtapuestos, con
fusión total: calientaplatos, bocacalle, hincapié, metepatas, chupatintas...
Debemos recordar que los compuestos pueden convertirse en base para una
derivación posterior y admiten sufijación: agua-ardient-illo.
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Composición
a) Por yuxtaposición de palabras, con o sin guión: mueble-cama, buque hospital.
b) Por agregación directa de palabras (a veces con alguna modificación del primer
elemento) formando una sola unidad gráfica: malestar, pasodoble, correveidile,
baloncesto, abrebotellas, friegasuelos, tontiloco.
c) Por agregación de una forma prefija griega o latina a una palabra española:
monoplaza, cosmonave.
d) Por agregación de una forma sufija griega o latina a una base española:
petrolífero.
e) Por suma de una forma prefija y una forma sufija griega o latina: teléfono,
audímetro.
8.4 LA PARASÍNTESIS
Clasificación:
1. Atendiendo a la categoría a la que pertenezca el producto: formación de verbos
denominales y deadjetivales (embarcar (barco), embellecer (bello), afinar (fino),
alunizar (luna)...; formación de adjetivos participiales (cristal > acristalado; cebolla >
encebollado...)
2. Atendiendo a la categoría a la que pertenece la base: postnominales (a-caramel-ar,
en-sombr-ecer), postadjetivales (a-bland-ar, em-brav-ecer), etc.
Ejemplos:
Abotonar, entristecer, endulzar, acogotar, empedrar, enlatar, acolchar, anidar,
ennegrecer, enfervorizar, embarcar, embellecer, anochecer, afinar, alunizar, acristalado,
apepinado, encebollado, encapsulado, acaramelado, ensombrecer, ablandar, embravecer.
Esquemas
A + adj +ar = atontar (tonto) en + sust + ar =enjaular (jaula)
A + adv + ar = alejar (lejos) en + adj + ecer =enrarecer (raro)
A + sust + ar = acolchar (colcha) en + sust + exer = ensombrecer
(sombra)
En + adj + ar =ensuciar (sucio)
La base léxica no forma una palabra independiente ni con el sufijo (*tontar, *jaular)
ni con el prefijo (*atonto, *enjaula).
Tipo en + sust + ar
Enviudar, engordar, emparentar, empeorar, enfriar, engrosar, ensuciar, enturbiar,
embotellar, encalar, embalsar, embarcar, embolsar, embotellar, emboscar, embotijar,
embuchar, empaquetar, emparedar, encajonar, encapsular, encarcelar, enclaustrar,
enchiquerar, enfundar, engavetar, enjaular, enlatar, ensobrar, encumbrar, enfrascarse,
empantanar, encaminar, encuadrar, engarzar, enmarcar, ensartar…
33
Algunos verbos alternan con formas derivadas como barnizar, tiznar (sust + ar).
El sufijo –izar (procedente del griego, a través del latín) produce algunas formas
parasintéticas con los esquemas:
A + sust + izar (aterrorizar, alunizar, atemorizar, aterrizar…)
En + sust + izar (encolerizar, enfervorizar, entronizar…)
1. OBSERVACIÓN O INVESTIGACIÓN
Para recoger esta información utilizaremos fichas de trabajo. Una ficha es un papel
o cartón de tamaño reducido (una cuartilla...) que nos permitirá recoger la información.
Existen fichas de distintos tamaños y formas ya impresas, pero hay también otra forma
más sencilla y económica de hacer una ficha que consiste en dividir a la mitad un folio,
con lo que conseguiremos dos fichas.
Camilo José Cela, Viaje a la Alcarria, Madrid, Espasa-Calpe (col. Austral, n.º
1141), 1977, 10.ª edic.
TEMA: argumento
T
E
X
T
O
Ejemplos:
- Leonor Romo, Nieves Mínguez, Elsa Aguiar, Enrique Ferro, Lengua y Literatura
31, Madrid, Santillana, 1995.
- José María de Cossío, "Dos notas para la biografía del Marqués de Santillana",
Boletín de la Biblioteca Menéndez Pelayo, V, 1923, págs. 340-342.
LA FICHA DE CITAS
La ficha de citas es un instrumento muy útil en cualquier trabajo de investigación.
Se utiliza para anotar aquellas frases de un libro que tengan interés y se relacionen con
el tema de un trabajo determinado.
Cada ficha debe contener tan solo una cita, habitualmente acompañada de aquellas
ideas o reflexiones que esa cita nos sugiera.
No conviene que la cita sobrepase los límites de una ficha; en el caso de que el texto
sea muy largo, es mejor sintetizarlo o copiarlo parcialmente.
Los datos que debemos recoger en una ficha de citas son:
- Asunto sobre el que trate la ficha.
- Nombre del autor y título de la obra de la cual se ha extraído la cita.
- Página donde se encuentra la cita.
- Cita encerrada entre comillas y, en su caso, comentario personal.
37
LA POÉTICA DEL 27
2. REDACCIÓN
Una vez recogida toda la información, debemos redactar nuestro trabajo siguiendo
las fases del proceso de redacción:
1. Planificación.
2. Organización.
3. Elocución.
4. Revisión.
http://www.cibem.org/paginas/img/apa6.pdf
Un ejemplo de artículo:
http://usie.es//SUPERVISION21/JULIO2012/EvaluaContinua.pdf
Forma
Todo sintagma consta de un elemento principal llamado núcleo y de unos elementos
secundarios, relacionados con el núcleo y dependientes de él, llamados adyacentes y
actualizadores.
Para que una secuencia de monemas (palabras) sea considerada un sintagma, debe
desempeñar alguna función sintáctica y los elementos que la componen estar
interrelacionados y formar un significado común.
En un grupo sintáctico pueden integrarse otro u otros grupos más pequeños.
_________________
grupo
Tipos de sintagmas
Por el núcleo:
- Sintagma verbal: el núcleo es un verbo.
- Sintagma nominal: el núcleo es un sustantivo o pronombre personal tónico.
- Sintagma adjetivo: el núcleo es un adjetivo.
- Sintagma adverbial: el núcleo es un adverbio.
En general los sintagmas se reducen a dos tipos: sintagma nominal y verbal.
41
42
1. Introducción
43
3. Noción de sujeto
3.1 Definición
3.2 Sujeto gramatical y sujeto léxico
3.3 La concordancia
3.4 Categorías con función de sujeto
3.5 Sujeto con preposición
4. Noción de predicado
4.1 Predicado nominal
4.2 Predicado verbal
4.2.1 Adyacentes del verbo predicativo
5. Contexto y situación
6. Clases de oraciones
6.1 Esquemas básicos
6.2 Por su relación con otras oraciones
6.3 Por el significado o actitud del hablante
6.4 Por la forma de la oración
6.4.1 La relación sujeto-predicado
6.4.2 Por el predicado
1. LA IDEA DE FUNCIÓN
Funcionar consiste en hacer algo en algún sitio. Si nos referimos a las categorías
morfológicas (sustantivo, adjetivo, verbo...) decimos que funcionan como núcleo,
adyacente, etc.
Si partimos de lo dicho en el apartado anterior, afirmaremos que las palabras, como
signos que son, tienen un significante y un significado, pero, además, están colocadas en
un lugar, al lado de otras palabras con las que se relacionan y hacen algo, es decir,
funcionan. Así, pues, significante (o forma), significado y función son tres elementos
inseparables en la palabra, en la categoría morfológica.
(8)
F U N C I Ó N Estructura del SN
Determinante Núcleo Adyacente
44
Por otro lado, una palabra puede realizar varias funciones, como ocurre en (9):
(1)
-Paco / El niño es bueno.
-Que vengas esta tarde es bueno.
-Lo posible es bueno.
-Él es bueno.
-Vivir es bueno.
-El de atrás es bueno.
45
-¿Podrías explicar por qué estas formas consiguen funcionar como si fueran
sustantivos, como sujeto?
-Que vengas tarde. La conjunción que hace que la oración vengas tarde pueda
funcionar como si fuera un sustantivo.
-
-
Pues bien, al fenómeno que permite que un elemento lingüístico funcione como si
fuera otro, lo llamamos transposición. Podemos transponer una oración a la función de
sustantivo o de adjetivo o de adverbio. Para ello, o bien el segmento puede realizar esa
función por sí mismo o bien necesitará de algún elemento transpositor: determinante,
preposición, conjunción, pronombre relativo, interrogativo o exclamativo.
Hay varios tipos de transposición. Acabamos de ver como formas que no son
sustantivos funcionan como si lo fueran. A este fenómeno de transposición lo llamamos
sustantivación.
También aparecen en esta función solos algunos sustantivos que compatibilizan con
la idea de tiempo, por ejemplo:
-Viene el martes.
-Vive en el pueblo.
-Viene de mi casa.
-Viene lento.
-Lo dijo por lo bajo.
-Viene cuando quiere algo.
-Viene cantando.
-Vive donde lo conociste.
-Lo dijo sin pensar.
-¿Qué transpositor necesitan en cada caso para funcionar como si fueran adverbios,
como complementos circunstanciales de cada verbo?
-
3. LA IDEA DE RELACIÓN
Sin duda el aspecto más novedoso de los vistos hasta ahora es la idea de relación.
Como verás, las ideas de relación y de transposición están muy cercanas y unidas a la de
función.
Al hablar del sustantivo y del adjetivo, hemos tratado sobre la transposición. En el
caso del sustantivo, a la transposición a función de adyacente la llamábamos
adjetivación.
-¿Qué elemento permitía que un sustantivo, que normalmente funciona como
núcleo, funcione como adyacente? Pon algún ejemplo que te sirva de guía.
En el sintagma verbal, el núcleo es el verbo y al núcleo le acompañan unos
adyacentes; uno de ellos es el complemento directo. Observa estos dos ejemplos y
contesta a las preguntas.
-Veo el campo.
-Veo que has llegado.
Podríamos concluir, por tanto, que tanto la preposición como la conjunción que
permiten relacionar elementos para que funcionen como adyacentes de otros.
-Señala los elementos que se unen en los ejemplos siguientes y di si son iguales o
diferentes en su categoría morfológica y posibilidad sintáctica:
-Juan y Pedro.
-Que vengas o te quedes.
-Bueno, bonito y barato.
-
47
¿Qué es y?
-
Podremos concluir que la conjunción y une elementos del mismo nivel funcional:
dos sustantivos (núcleos), dos adjetivos (adyacentes), pero no un núcleo y un adyacente,
o sea, une elementos equifuncionales, independientes.
Existen tres formas básicas de relacionarse, dos de ellas ya las hemos visto aunque
las volveremos a ver aquí. Pongamos un ejemplo simple de relación entre la gente. Con
relación a tus padres, tú tienes una relación de dependencia, tú los necesitas para crecer
y desarrollarte en todos los sentidos.
No te ocurre lo mismo con tus amigos. Unos aparecen, otros desaparecen a lo largo
de la vida sin que cambie nada apenas en nuestra situación personal. No hay, pues,
ningún tipo de dependencia. Es una relación autónoma (de independencia o de
coordinación).
En el nivel sintáctico lo que importa es la función que los elementos realizan dentro
del conjunto de la oración. Pero, aunque no hemos trabajado la sintaxis, sí que la has
estudiado en cursos anteriores; por ello sabrás que en sintaxis, dos son las funciones
básicas: núcleo y adyacente. Eso quiere decir que las palabras, cuando se relacionan
entre sí, lo pueden hacer entre elementos nucleares, entre elementos adyacentes o entre
elementos nucleares y adyacentes.
Esto implica que las relaciones entre las funciones sintácticas pueden ser entre
iguales (dos núcleos o dos adyacentes) o entre diferentes (núcleo y adyacente). A las
relaciones entre funciones de igual rango las denominamos coordinantes (coordinación)
y a las que se dan entre elementos con funciones de rango distinto, subordinantes
(subordinación).
Los dos tipos de relación más importantes son los de dependencia o subordinación
y de autonomía o coordinación.
2. IDEA DE ORACIÓN
2.1 ORACIÓN Y ENUNCIADO
48
Clases de enunciados
Hay dos clases: los no oracionales y los oracionales.
1. Enunciados no oracionales: están formados por una palabra o conjunto de
palabras sin estructura oracional:
¡Silencio! Buenos días
Las interjecciones y locuciones interjectivas constituyen enunciados por sí mismas.
2. Enunciados oracionales: constan de una oración o varias, aunque, a veces, puedan
tener el verbo no expreso:
Guarden silencio. Si viene Juan, me lo dices.
Los enunciados también se clasifican atendiendo a la actitud del hablante:
enunciativos, interrogativos (totales o parciales), imperativos, desiderativos, dubitativos.
Estructuras unimembres
Las frases unimembres se comportan como las interjecciones, tanto si están
constituidas por una palabra (¡Lástima!, Gracias), como si consisten en un grupo
unitario más o menos complejo (¡Mi madre!, ¡Buenas noches!).
En el diálogo, en estructuras coloquiales, aparecen sintagmas o unidades nominales:
1. ¿Quién ha venido? –El cartero.
2. ¿Estás de acuerdo? –No.
Estructuras bimembres
Toman formas muy variadas:
1) Los dos miembros yuxtapuestos con pausa intermedia e inflexión melódica
de contraste: Año de nieves, año de bienes, ¡A mi edad, cambiar de aguas!, Buena vida
la del canónigo.
2) Sintagma nominal o adjetivo: Prohibido el paso, ¡Qué tiempos aquellos!
3) Un sustantivo o sintagma nominal y un sintagma preposicional: A mal
tiempo, buena cara, En casa del herrero, cuchillo de palo.
4) Un sustantivo o sintagma, infinitivo, etc., y un sintagma nominal adyacente:
Genio y figura hasta la sepultura, Vivir para ver.
5) Los términos coordinados: A Dios rogando y con el mazo dando.
6) Titulares y pies de ilustraciones: Jugador lanzando un golpe de castigo; Dos
viejas riendo.
7) A veces aparece como adyacente una construcción transpuesta: Buena vida la
del canónigo, aunque tenga que ir al coro; ¡Ay de vosotros, si os pillo!
8) Dos términos: uno de predicación y otro de soporte: ¡Vaya sermón, hijo, qué
barbaridad!
Cláusulas absolutas
La cláusula (construcción absoluta) es aquella cuyo predicado es una estructura de
participio, de gerundio o de infinitivo, la cual complementa a una oración principal o se
interrelaciona con ella. Se suele separar de esta por una breve pausa.
Dichas estas cosas, Pedro se fue.
Cláusula absoluta or. Principal
______ ______
predicado sujeto
A veces la cláusula absoluta tiene como predicado un adjetivo con valor aspectual
perfectivo (contento, lleno, vacío...).
Ejercicio 3
Señala los elementos y las funciones de las siguientes oraciones:
Juan trabaja
El niño que vimos trabaja.
El niño trabaja en casa.
El niño que vimos trabaja cuando tiene vacaciones.
51
Oración
SN (sujeto) SV (predicado)
Núcl Ady.
Det Verbo Argumentos Adjuntos
SN o Sprep
3. NOCIÓN DE SUJETO
3.1 DEFINICIÓN
En general, el sujeto designa un elemento de la realidad (persona, cosa...) del cual
se dice algo, y el predicado es lo que se dice de ese elemento de la realidad. Esta es una
definición lógico-semántica, propia de la gramática tradicional. Nosotros definimos
sujeto como aquel constituyente oracional que concuerda en número con el verbo.
Juan es alto.
Camión es un sustantivo.
El lexema del verbo (viv-) expresa el contenido del verbo (vivir), el morfema de
tiempo-aspecto (-a) nos informa sobre un tiempo pasado, modo indicativo y acción
imperfectiva; y el morfema de número y persona (-n) lo refiere a una tercera persona del
plural.
52
El sujeto, pues, está presente en el verbo. En otros casos aparece explícito un sujeto
léxico (sintagma nominal, pronombre, proposición subordinada...) que realiza esta
función y mantiene la concordancia con el verbo de la oración.
3.3 LA CONCORDANCIA
La relación entre el sujeto léxico y el verbo se manifiesta en la concordancia, que
consiste en la coincidencia en las desinencias de persona y número del verbo con los de
número del sujeto.
La concordancia, relación imprescindible entre sujeto y predicado, es la única
referencia segura para localizar el sujeto léxico de la oración. Las conocidas preguntas
al verbo suelen inducir a errores graves.
- ¿Cuál es el sujeto de esta oración y por qué?
Me gusta tu hermano.
Ejercicio 4
- Busca el sujeto de los verbos resaltados:
“Yo no tengo la culpa de que la gente que vive sobre sus propiedades sean unos
granujas y unos ladrones” (Pío Baroja, El laberinto de las sirenas).
Por tanto, solo la concordancia es un método válido para reconocer el sujeto. Para
ello, si el verbo está en singular lo pasaremos al plural, en la misma persona; el
sintagma que cambie de número será el sujeto.
Ejercicios
1. Incrementa el sustantivo, núcleo del sujeto de esta oración (La casa estaba en el
campo), y forma un SN con las siguientes estructuras:
(Ej. Una gran sala (que estaba) desprovista de paredes era sostenida por unas
columnas de piedra azul.)
4. NOCIÓN DE PREDICADO
Se suelen añadir otros verbos con los que el supuesto atributo forma una unidad de
sentido. Los más importantes son: hallarse, mantenerse, andar, ir, continuar, seguir,
quedar, acabar, terminar, hacerse, volverse, tornarse, ponerse, llegar, aparecer, ofrecerse,
resultar, salir, caer, venir, verse, etc. En estos casos, como ocurre con el atributo con ser,
estar, etc., el llamado atributo es necesario para el verbo; no se puede eliminar mientras
que el predicativo sí se puede eliminar.
En estos verbos, sin embargo, no es correcta la sustitución del atributo por lo:
CUASIATRIBUTIVAS
Al lado de estas oraciones que llamamos copulativas o atributivas, están las cuasi-
atributivas. Se trata de oraciones con verbos que no son ser o estar, pero que llevan
unos elementos que concuerdan con el sujeto, como lo hace el atributo:
Vi la casa ardiendo.
Argumentos
Algunos verbos pueden tener algún elemento que precise su significado, de acuerdo
con las necesidades de expresión que tenga el emisor. Sin esos argumentos el
significado queda muy general. Así ocurre con verbos como comer, ver, tener, hacer,
cuyo significado es tan amplio que apenas le sirven al emisor para su comunicación así,
sin que una forma concrete ese significado. Esos adjuntos reciben el nombre de
atributos, complementos directos e indirectos y complemento de régimen o suplemento.
Adjuntos
En muchas ocasiones el emisor desea dar más detalles al receptor, detalles no
sustanciales, pero que pueden tener interés para situar el hecho, el momento, etc. A estos
complementos los llamamos adjuntos. A este grupo pertenecen el complemento
predicativo y los complementos circunstanciales.
En primer lugar nos encontramos con una serie de términos que aparecen
pospuestos al verbo (come uvas, bebe vino, escribe la carta), que se parecen al sujeto,
pero que se diferencian de él porque no concuerdan con el verbo, sino que restringen el
significado o contenido semántico del verbo. Además podemos sustituirlos por un
referente pronominal (las come, lo bebe, la escribe). A veces estos elementos aparecen
precedidos de la preposición a, cuando se trata de personas y de seres animados:
Muy parecidas son las formas escribo a los amigos, escribo a mi madre. Parecen
iguales a los objetos directos que acabamos de estudiar, pero la sustitución pronominal
nos hace ver que no: les escribes, le escribes. Estamos ante objeto indirecto. Este
58
Si comparamos los siguientes enunciados con los anteriores, a primera vista parecen
iguales: Entregaron el regalo a la señora y entregaron el regalo al día siguiente. Pero si
eliminamos "a la señora" aparecerá el referente "le": le entregaron el regalo; si
eliminamos "al día siguiente" no aparece necesariamente ningún término en su lugar.
Además, posee una gran libertad; podemos situarlo en cualquier lugar de la oración: Al
día siguiente, entregaron el regalo a la señora; entregaron el regalo al día siguiente, a
la señora; entregaron al día siguiente, el regalo a la señora.
Semánticamente no tienen una relación directa con el verbo y su significado, no lo
restringen, sino que indican las circunstancias en las que se produce la acción o el
significado indicado por el verbo.
Sería nuestro complemento circunstancial.
A veces nos encontramos con enunciados como este: hablaba de noche, hablaba de
política, hablaba de corrido, hablaba del tiempo. Si hacemos desaparecer "de noche" o
"de corrido" no se altera el contenido del verbo-núcleo del sintagma verbal, aunque
perdamos esa circunstancia de tiempo o de modo, pero la acción de hablar es la misma.
Si sustituimos "de política" o "del tiempo", alteramos el contenido del núcleo del
sintagma verbal, hemos ampliado el contenido semántico del verbo, "de política", "del
tiempo" concretaban el significado de "hablaba". Poseen, por lo tanto, la misma función
que desarrolla el complemento directo: precisar el contenido verbal; pero no se puede
hablar de complemento directo, pues ya hemos dicho que al CD no le precedía otra
preposición sino a cuando se trataba de seres animados. A estos sintagmas preposi-
cionales con la función parecida a la de CD les llamaremos complementos regidos.
Estos adyacentes prepositivos del verbo vienen solicitados por el verbo: es el verbo
el que precisa, en ciertas construcciones, de esa preposición. Ejemplos: confiar en,
contar con, hablar de, dudar de, acordarse de, autorizar a, aspirar a, creer en...
Actividades
1. Construye tres oraciones con cada uno de los siguientes esquemas:
Suj ( det + N + CN prop. Sust) + SV (V + CD (det + N + ady prop. Adj. espec))
SV (CD prop. Sust est. Dir) + V perífrasis reiterativa )+ suj ( Det + N + ady prop.
Adj espec o CN prop. Sust)
Suj (Det + N + apos) + SV (V + CD prop. Sust est indir)
Suj (Det + N + apos) + SV (V per. reit + CD prop. Sust est. Indir)
Ejercicios
1. Construye tres oraciones con cada uno de los siguientes esquemas:
1. CD (det + N +prop. Com) + V + suj (det + n +ady prop. Adj. Espec) + CI (propñ
sust de persona) (adj, sust a quien)
2. CI (prop. Adj. Sust) + V + CD (det. + N + apos)
3. Suj (det + N + CN prop. Sust) + V per. Modal + CD + CI (prep. + N + apos)
Ejercicios
1. Construye tres oraciones con cada uno de los siguientes esquemas:
1. CD (det + N +prop. Com) + V + suj (det + n +ady prop. Adj. Espec) + CI (propñ
sust de persona) (adj, sust a quien)
60
Ejercicios
1. Construye tres oraciones en las que aparezcan dos circunstanciales de tiempo,
uno obligatoriamente proposicional y señala su estructura.
Compón un breve texto narrativo que incluya, entre otros, los siguientes elementos:
tres circunstanciales de tiempo, dos de ellos en forma de proposición.
Se podría ampliar la actividad pidiendo a los alumnos que señalaran el enlace y
tipo de proposición empleada.
6. CLASES DE ORACIONES
Ven aquí
Que se callen todos.
Norma
Es incorrecto hacer concordar el verbo precedido de se con el complemento directo
de persona con la preposición a o con algún complemento de régimen:
*Se recibieron a los reyes con entusiasmo.
1. Copulativas o atributivas
2. Cuasipredicativas o copulativas
3. Predicativas
3.1 Transitivas
3.2 Intransitivas
3.3 Pasiva
Paradigma
yo --- me
tú --- te
él --- se
nosotros --nos
vosotros --os
66
ellos --- se
Hay que tener en cuenta que la forma se aparece también en sustitución de las
formas le o les, para evitar la cacofonía en unión de lo, la, los, las. En realidad esta
forma se es una variante del pronombre le. Aparece así siempre que vaya seguida de un
complemento directo lo, la, los, las. Desempeña la función de complemento indirecto
Para analizar el reflexivo pueden servir a veces tener en cuenta dos ideas: si la
acción se exterioriza o no, y si el reflexivo se refiere a todo el antecedente o
consecuente o solo a parte de él.
Cuando la acción se exterioriza y se refiere a todo el sujeto, el reflexivo funciona
como complemento directo:
Juan se lava.
CD
Juan se afeitó en la barbería (sujeto no agente)
CD
Casos dignos de estudio por romper una de las reglas y seguir otra son:
Juan se cree simpático (a sí mismo) (cuasiatributiva)
Juan se golpeó en la cabeza al salir del centro.
Si se refiere solo a parte del sujeto, el se funciona como complemento indirecto:
Juan se lava las manos.
CI CD
Juan se hizo una herida al salir por la puerta.
Juan se cortó el pelo en la peluquería (sujeto paciente).
Cuando la acción recae sobre el sujeto pero sin salir de él, sin exteriorizarse, hay
una intencionalidad por parte del sujeto en la acción y hay un complemento directo ya
estamos ante un complemento indirecto de interés.
En Juan se levanta o Juan se duerme, la acción no sale del propio sujeto; en todos
estos casos la acción es interna. También son morfemas intrínsecos del verbo los
reflexivos de los ejemplos:
Juan se alegra, Juan se marchó.
MV MV
Juan se murió de infarto Juan se levantó de la mesa
Juan se puso nervioso Juan se preocupa de sus hijos
67
Hay otros dos casos en que aparece el pronombre reflexivo: en las impersonales
reflejas y en las pasivas reflejas; en ambos casos el reflexivo es un morfema verbal. Se
ya no es un pronombre, pues no forma parte del paradigma pronominal átono (me, te,
se...).
Se vende leche.
MV
Se recibió a los turistas; Se trabaja mucho en esta casa.
Se vende piso.
MV
Se solicitó permiso a la autoridad; Estos libros no se venden.
Se dice que va a haber guerra; No se sabe cuántos alumnos han aprobado.
Para diferenciar una de otra nos tenemos que fijar en la concordancia con el verbo;
si el elemento que suele aparecer inmediatamente después del verbo concuerda con él
estamos ante una pasiva, si no ante una impersonal.
Se me antojó un pastel
No se me ocurre nada
Se produjo una explosión.
Oración
Idea: No te olvides de que tanto las oraciones llamadas simples como las
compuestas por subordinación se analizan de la misma manera. No debes hacer
diferencias.
2. Comentario:
69
8. LISTA DE ORACIONES
Se viste así para llamar la atención de los que tú sabes.
Aunque lo supiera no te diría la causa de mi decisión.
La policía pregunta quién ha estado aquí y un vecino se lo ha dicho.
Te plantearé un enigma, de cuya solución depende tu suerte.
Los perritos fueron abandonados por la persona que vive en la casa de al lado.
Es una decisión difícil, pero no dudaré si tengo que hacerlo.
Esta oración es la última de todas las que tienes que resolver hoy.
Anoche me prometió que si hoy se sentía generoso me llevaría al teatro.
El pobre hombre decía que llevaba sin comer desde la víspera y que había pasado la noche
anterior en un banco de la plaza.
Me confesó que antes le caías muy simpático, pero que después te tomó manía y que en
aquel momento prefería no verte.
La televisión anunció que al día siguiente nevaría otra vez y recordó que desde la noche
anterior estaban cerrados varios puertos de montaña.
A los mayores se les debe hablar con más respeto porque han trabajado toda su vida para
nosotros.
El piloto, viendo que tenía incendiado un motor, se dispuso a aterrizar donde había un
campo despejado.
Ese equipo tiene que espabilar si quiere volver a jugar en Primera División.
Juan vive a margado desde que bajaron las acciones que tuvo la imprudencia de comprar.
Deseaba con todas sus fuerzas que su enemigo fracasara en el intento de conseguir una
plaza.
Se sintió muy feliz de que nos acordáramos de su cumpleaños porque nunca nadie lo había
hecho.
Al volver a encontrarme en aquella calle, entre todas aquellas caras conocidas, experimenté
un fuerte sentimiento de rechazo que me estremeció profundamente.
Se puso muy nervioso por su comportamiento.
Todo esto me resulta muy raro.
Eres una persona encantadora.
Estaba muy preocupada.
Esta marquesina ha sido puesta por un empleado del Ayuntamiento.
Con nosotros no va a venir al partido de fútbol que se celebrará el domingo.
Su hermano, vecino tuyo, no se ha dirigido a él con buenos modales.
Se pasa el día hablando de política.
Salió muy contenta al recreo.
Les dijeron el resultado a los asistentes.
Los vecinos del piso de arriba han sido desalojados por la policía.
Lo realmente interesante del caso fue la respuesta que les dio.
Fuimos donde habíamos quedado.
Tengo un pantalón que es de deporte.
Partiremos cuando el sol se oculte.
Tenemos un loro que habla mucho.
Tenía miedo de que me riñera.
Tengo la seguridad de que vendrá.
Estaba sorprendido de que le fuéramos a ver.
Me dijo que quería verme.
70
1. Definición
2. La proposición
3. La oración y los sintagmas
4. Etapas del análisis sintáctico
5. Gramática y semántica
6.4.1 Definición
6.4.2 Clasificación
6.4.2.1 Circunstanciales
6.4.2.2 Correlativas
6.4.2.3 Mediatizadoras
7.3 Yuxtapuestas
1. DEFINICIÓN Y ESTRUCTURA
La oración representa una unidad de pensamiento (es un enunciado), con
independencia fónica, sintáctica y autosuficiencia semántica. Se caracteriza por ser una
unidad de enunciado.
Dos características intrínsecas parece tener la oración: posee un significado
completo y es independiente.
Juan come mucho.
Luis se levanta a las ocho.
Son oraciones, pues expresan un significado completo cada una, lo que queremos
decir, y son independientes, ya que están entre dos puntos. En realidad toda oración es
independiente, como veremos.
Formalmente se define la oración como la unión por concordancia de un Sintagma
nominal (SN) + Sintagma verbal (SV).
La oración anterior consta de un sujeto (SN) Juan, y de un predicado (SV): come
mucho.
Ejercicio 1
Analiza la estructura de las siguientes oraciones:
Objetivos:
1) Que los alumnos vean la estructura, independientemente de que sea oración
simple o compuesta.
2) Vista la estructura, hablar del tipo de oración: simple o compuesta y la razón y la
función de las subordinadas o de las coordinadas.
3) Que vean que las oraciones 1, 2, 3 y 7 tienen estructura simple y las 4, 5, 6 y, en
parte, 7, estructura compuesta.
Oración
SN
SV
Núcl Ady.
Det Verbo Argumentos Adjuntos
SN o Sprep
O
L
e
n SN SV
g
u
a DET SN GV GN
N ADY V CD CI CC
73
Antes de seguir adelante, repasa el tema del sustantivo, atiende a las funciones del
sustantivo especialmente y pon algunos ejemplos diferentes a los que allí aparezcan.
1. Núcleo de un SN:
- Sujeto, son las llamadas subjetivas
Es necesario que hagas el trabajo.
Sujeto (prop. sust.)
El que haya tanta gente me preocupa.
No está claro si lo han hecho Marta o Ana.
No me interesa dónde has estado.
Me gusta bailar.
Norma: Dequeísmo
Como el sujeto se construye sin preposición, son incorrectas las oraciones
sustantivas de sujeto que van precedidas de la preposición de.
*Me consta de que había más gente.
*Es fácil de que llueva.
- Complemento indirecto:
Son muy pocas, e incluso algún lingüista duda de que existan, y van introducidas
por las conjunciones que o si (esta última en interrogativas indirectas):
No (le) di importancia a que no me invitaran (No le di importancia a eso).
Dedica muchas horas a que todo salga bien.
C. I. (prop. sust)
-Complemento circunstancial:
Se fue sin conocer a sus hijos.
75
C. C. (prop. sust.)
Se aprobó sin que nadie protestara.
Lo hizo como quien no tiene miedo.
- Atributo:
La duda es si llegaré a tiempo.
atributo (prop. sust. interrog. indir.)
La gran ilusión de los padres es que sus hijos sean felices.
- Complemento de un adjetivo:
Cansado de que le insultaran dimitió.
Compl. de cansado (prop. sust.)
Los nexos son las conjunciones que, si o sin nexo:
-Complemento de un adverbio:
Estuvo cerca de que le premiaran.
Cuando dependiendo de estos verbos, lleva elemento de enlace, se trata del estilo
indirecto y no reproduce textualmente lo dicho o pensado.
Puso el grito en el cielo diciendo que iba a tomar las medidas necesarias.
Hay una tercera forma denominada estilo indirecto libre que recoge elementos de
las anteriores: como en el estilo directo no suele tener enlace, hay generalmente pausa y
manifiesta el pensamiento del personaje; como en el estilo indirecto hay
transformaciones gramaticales en el verbo introductor:
Otras sustantivas
Pueden considerarse sustantivas oraciones que complementan a pronombres como
lo, esto, aquello, eso, dentro de grupos nominales cuyos núcleos son precisamente esos
pronombres:
Tipos
Podemos distinguir tres grandes grupos dentro de las proposiciones sustantivas:
Ejercicio 3
No sigas adelante sin revisar tus conocimientos. Has estudiado las oraciones
interrogativas. Vuelve a este apartado y revisa lo dicho allí.
Por favor, clasifica las interrogativas, explícalas y pon ejemplos diferentes a los allí
expuestos antes de seguir leyendo.
Ejercicio 4:
Fíjate que el elemento de enlace no tiene función en el resto de las proposiciones
sustantivas. ¿Podrías decir por qué?
¿Por qué si es solo nexo y no tiene función en la proposición sustantiva?
Haz un mapa conceptual de las proposiciones sustantivas.
Ejercicio 6:
Al igual que hiciste con las sustantivas, revisa tus apuntes sobre los adjetivos y sus
funciones.
¿Cuál es la función habitual del adjetivo?
78
¿A quién modifica?
¿Puede realizar otras funciones? ¿En qué circunstancias?
6.2.2 CLASIFICACIÓN
Ejercicio 7:
Entrégale la instancia al empleado que está en la ventanilla.
No puedo entregarte las pruebas de que te hablé ayer.
1. Analiza las oraciones anteriores y explica si las proposiciones relativas poseen las
tres características señaladas.
2. Observa la preposición de en la proposición de que te hablé ayer.
- Puesto que se trata de una proposición adjetiva de relativo, ¿es necesaria
esta preposición para destacar la adyacencia?
- ¿Por qué aparece esta preposición?
3. Compara esta preposición con la que aparece en las proposiciones sustantivas con
función de adyacente de un sustantivo y adyacente de un adjetivo y señala las
diferencias.
Ejercicio 8:
Analiza estas tres oraciones:
1) El jardín y el palacio tenían esa vejez señorial y melancólica de los lugares
por donde en otro tiempo pasó la vida amable de la galantería y del amor.
2) Yo también los evoqué un día lejano cuando la mañana otoñal y dorada
envolvía el jardín.
3) No conocía la noticia cuando lo llamaron.
1. Proposición de participio
Se trata de proposiciones en las que el verbo aparece en la forma de participio, que
es la forma en que el verbo funciona como adjetivo.
Las participaciones de lotería vendidas por la lotera eran falsas.
2. Proposición de gerundio
80
El gerundio es sustituible por una forma personal del verbo precedido del relativo
que: Había un chico que vendía postales.
En todo caso debemos utilizar el gerundio con prudencia y evitarlo siempre, por
inelegante, cuando el complemento directo al que complementa no es nombre de
persona (*Detuvieron un camión transportando explosivos). Hemos de tener en cuenta
además que el gerundio expresa una acción simultánea o algo anterior a la proposición
principal (Me fatigo subiendo las escaleras). Es poco elegante cuando expresa una
acción posterior (Lo atropelló un coche, muriendo poco después).
Ejercicio 9:
Haz un mapa conceptual de las proposiciones adjetivas.
Ejercicios
1. ¿Cuál es el esquema del siguiente texto?
A pesar de que sus padres no habían llegado, los ocasionales contertulios
decidieron que empezarían mañana su viaje vacacional.
-Concesiva prop. Adv + suj (det + N + apos) + V + CD (det + N + ady prop. Adj
espec + CC finalidad prop. Adv)
-CCT prop. Adv + CC fin prop de infn + V + CD + Suj (det + N + ady prop. Adj
espec.)
-CCM prop. Adv + suj (det + N +ady prop. Adj espec) + V + CCL prop. + CC fin
prop. Adv)
-CD prop. Sust est. Dir + V + Suj (det + N + ady prop. Adj espec + CCL + CC fin
prop. Adv)
Ejercicio 10:
Siempre ha admirado a los que consiguen triunfar.
1. Analiza esta oración.
2. ¿Qué tipo de proposición es a los que consiguen triunfar sustantiva o adjetiva?
3. Razona tu respuesta con argumentos gramaticales.
4. ¿Cómo explicas la preposición a que inicia la proposición?
5. ¿Qué razón darías para explicar que una proposición introducida por un
pronombre relativo funcione como un sustantivo o sintagma, en este caso como
complemento directo del verbo ha admirado?
Hay otro tipo de proposiciones que tienen en común con las sustantivas la función
propia de un sustantivo (núcleo de un sintagma), y con las adjetivas de relativo, la forma
característica de estas, es decir, están introducidas por un pronombre o adverbio
relativo.
Se trata de las proposiciones con las formas el, la, lo, los, las + que y las
proposiciones introducidas por quien, lo cual, cuanto (todo lo que) y los adverbios
donde, como, cuando y cuanto.
El problema está en la consideración de las formas el, la, lo, los, las, como artículos
sustantivadores de la proposición de relativo o como pronombres o formas
pronominales.
6.4.1 DEFINICIÓN
Llamamos proposiciones adverbiales a aquellas que funcionan en la oración
compuesta como un adverbio en la oración simple.
Sin embargo la función de adverbio es múltiple. Entre otras funciones el adverbio
posee las de complemento del verbo (llegó hoy), modificador del adjetivo (libro muy
aburrido), modificador del adverbio (lee muy bien), modificador del sustantivo (es muy
hombre), etc., e incluso modificador oracional (él no lo hizo).
Las proposiciones de este tipo suelen desempeñar la función más característica del
adverbio: la de complemento circunstancial del verbo de la oración.
Clasificación:
1. Según el significado que aportan a la proposición principal se dividen en:
Circunstanciales (Ahora dentro de las de relativo sustantivadas semilibres). Su
función suele ser de complemento circunstancial:
Lugar: Lo vimos donde te dije.
Tiempo: Lo vimos cuando salíamos.
Modo: Lo vimos como te dije.
Propiamente adverbiales:
Tiempo: Mientras veían la película, comían palomitas y bebían zumos.
Mediatizadoras:
Concesiva: Lo vimos, aunque él no quería.
Final: Lo vimos para que nos hablara de ello.
Causal: Lo vimos porque lo deseábamos.
Condicional: Lo veremos si nos da tiempo.
Ilativa: Todavía sigue ahí, luego mucha prisa no tendrá.
Correlativas:
Consecutiva: Lo vimos tanto que nos cansamos.
Comparativa: Lo vimos más que tú (más de los que nos proponíamos).
Tiempo.
TIEMPO
Indican una circunstancia de tiempo referida a la proposición principal.
Los nexos que introducen estas subordinadas son la conjunción mientras y las
locuciones conjuntivas apenas, tan pronto como, antes de que... Algunos son adverbios
en función conjuntiva, seguido o no de que: siempre que, luego que ... Otras son
preposiciones con valor adverbial o conjuntivo, seguidos o no de que: según, desde que,
hasta que ... En tercer lugar existen conjunciones y locuciones con valor conjuntivo:
mientras, en tanto que, una vez que ...
Hay que añadir, además, la construcción al + infinitivo (Al salir, apaga la luz).
Tipos:
anterioridad: antes de que.
sucesión inmediata: luego que.
simultaneidad: cuando. Cuando salga el sol, yo ya estaré levantado.
posterioridad: después de que.
reiteración: siempre que.
Norma
No es correcto emplear el adverbio relativo cuando con futuros o condicionales:
*Cuando vendrás, te daré el dinero.
Las secuencias a la que y en lo que como locuciones conjuntivas temporales son de
uso popular exclusivamente:
A la que sales del colegio, me compras el periódico.
En lo que yo escribo esta carta, tú lavas la ropa.
La locución conjuntiva de que con el significado de cuando es vulgar o dialectal:
*De que termine la clase, hablamos un rato.
El adverbio mientras no debe emplearse con valor contrastivo:
Mi padre es médico, mientras que el tuyo es albañil.
85
6.4.2.2.1 COMPARATIVAS
Ahora llegan más turistas que antes. (compara el número de turistas que llegan
ahora con el que llegaba antes)
Tiene más trabajo que su marido. (compara la cantidad de trabajo de uno y otro)
verbo), por lo que constituye un grupo adjetival comparativo. Desde un punto de vista
semántico, sin embargo, la comparación que se establece afecta a toda la oración, que
viene a significar ‘el grado en que hoy está espeso el café es mayor que el que tiene
habitualmente’. En otros muchos casos similares el grupo cuantitativo puede ser un
componente de la oración o bien un subcomponente de ella, como en Necesito un
diccionario de latín más completo que este. El análisis semántico de las construcciones
comparativas exige, sin embargo, que intervengan elementos sintácticos que no
aparecen en el grupo que contiene el cuantificador comparativo”.
En general, en cuanto a los adjetivos, admiten construcciones comparativas la
mayor parte de los adjetivos calificativos. Lo rechazan los adjetivos relacionales
(algebraico, legislativo, parlamentario...).
A estos complementos semánticos se añaden los sintácticos: era mucho más alto
que la casa es un grupo verbal y mucho más alto que la casa es un grupo adjetival.
87
María había dedicado más horas que su amiga a preparar el examen de Física.
CD de había dedicado C. de régimen
Tengo [menos tiempo por las tardes que cuando trabajaba en la otra empresa]. CD
Primero segundo
Clasificación
De desigualdad:
Inferioridad: menos... que.
Superioridad: más... que.
6.4.2.2.2 CONSECUTIVA
RAE: “Se llaman consecutivas las construcciones formadas por los determinantes
tanto/tanta/ tantos/tantas (o su variante apocopada tan), así como tal/tales cuando
aparecen seguidos de una oración subordinada encabezada por la conjunción que”.
En estas construcciones se expresa el hecho de que cierto número, cierta cantidad o
cierto grado alcanzan un rango o un nivel extremo de forma que se obtiene como
consecuencia el estado de cosas significado por la oración subordinada.
Algunos gramáticos extienden esta denominación a las llamadas ilativas, pero estas
no expresan cantidad.
Son dos:
1. Un grupo cuantificativo constituido a partir de un determinante de interpretación
ponderativa, un adverbio (tan, tanto).
2. Una oración encabezada por la conjunción que.
¡Cómo estaré tan relajada que con los temporales se me llovió una pieza que tengo
en el patio de servicio en que está guardada mi ropa de verano y no he entrado a verla!
Las proposiciones consecutivas con que pero sin apoyo en intensificador alguno
complementan directamente al verbo como circunstanciales:
Se unen mediante los nexos tal, tan, tanto en la llamada proposición principal, y la
conjunción que que introduce la construcción consecutiva.
CONDICIONALES Y CONCESIVAS
Es posible decir tan solo una estructura inacabada: Si sales mañana..., pero no
tendría el mismo sentido de la oración completa: me verás en el parque.
Esto quiere decir que si sales mañana modifica o condiciona el significado de me
verás en el parque, y que solo se producirá lo dicho en la principal si se produce la
subordinada condicional.
Algo parecido ocurre con las proposiciones concesivas.
Se suele decir que las relaciones entre prótasis y apódosis están más próximas a las
conexiones lógicas o en general argumentativas.
Las prótasis correspondientes a estos períodos no constituyen, en suma,
modificadores del predicado verbal y no se considera correcto en la actualidad
interpretarlos como complementos circunstanciales suyos. (t. II, pág. 3530)
Se deduce de las características analizadas en los apartados anteriores que los
períodos condicionales y concesivos contienen oraciones subordinadas que no están
insertas o incluidas en las principales.
Mientras esto ocurre, una sustantiva lo está en la principal y sustituye un elemento
de ella.
Entre los componentes de los períodos concesivo y condicional se establece una
relación de interdependencia en el sentido de que ninguno de los miembros puede se
suprimido sin alterar el significado del conjunto, o incluso comprometer la
gramaticalidad de la construcción.
CONDICIONALES
oracional.
Se llama prótasis a la proposición condicional y apódosis a la principal.
Incluso si el crítico intenta ser honesto y riguroso, es difícil que se evada de los
prejuicios de su entorno.
Tipos:
Reales: en indicativo, presente o futuro o imperativo: Si llueve, leeré un libro.
Potenciales: imperfecto de subjuntivo + condicional simple: Si fuera, te lo llevaría.
93
Enlaces: si, siempre que, en caso de que, con tal (de) que, a no ser que...
CONCESIVAS
Adverbios aun, hasta, incluso seguidos de gerundio: Aun cenando poco, duermo
mal.
CAUSALES Y FINALES
CAUSALES
Enlaces: porque, pues, puesto que, ya que, a causa de que, dado que, toda vez que...
La función de una proposición causal es diversa: causa del enunciado (cc de causa)
o causa de la enunciación (modificador oracional), o sea, complemento circunstancial
del verbo o de toda la oración. Indica la causa de la acción expresada por el predicado
verbal.
Causales (adjuntos)
Circunstancial, complemento del verbo: Se fue a su casa porque le dolía mucho la
cabeza.
Complemento del nombre: La supuesta dimisión del concejal porque no quería
perjudicar a su partido.
Complemento del adjetivo: ¡Qué alivio! –dice ella, feliz, porque él le ha dicho
Laurita, y solo la llama así cuando está contento.
Lleno de desesperación porque iba a alejarse, caminaba maquinalmente.
Causales argumentales:
Complemento del verbo: Se desvivía por que su presencia y figura fueran
admiradas de cuantos pudieran verlas.
Complementos del nombre: Conocen ustedes nuestro interés por que el servicio
mejore.
Complemento del adjetivo: Conocí a estudiantes muy preocupados por pasar el
curso.
FINALES
Aquí nadie sabe nada de esos países ni de esa guerra, para que luego diga que las
noticias llegan a todas partes.
Unto a ello se añaden otras formas en las que las finales son adjuntos o argumentos
del verbo principal.
Adjuntos:
Complementos del verbo: leía un rato antes de dormir para que le viniera el sueño.
Complemento del nombre: gruesas mantas de lana para soportar las duras noches
96
de invierno.
Complemento del adjetivo: Siempre sigiloso para no despertar a los niños, entraba
en casa cada noche a eso de las once.
Argumentales:
Complemento del verbo: El termostato sirve para uqe la temperatura no suba
demasiado.
Complemento de un sustantivo: Los manuales para aprender informática están en
la segunda planta.
Complemento de un adjetivo: No era la postura más adecuada para recibir
noticias.
ILATIVAS
Tú no eres la persona más indicada para hablar de este asunto, conque lo mejor es
que no digas nada.
7.1 DEFINICIÓN
Hablamos de oración compuesta por coordinación cuando las proposiciones que la
forman son equifuncionales, unidas o no por elementos de enlace. Así, hablaremos de
proposiciones coordinadas sindéticas (tradicionales coordinadas) y asindéticas
(tradicionales yuxtapuestas).
Ejercicio 11
1. Expresa esta idea en un diagrama de árbol.
2. Observa las siguientes oraciones, señala las proposiciones de que constan y
estudia la relación que se establece entre ellas:
2.1 Juan dijo a su novia que la esperaría a las ocho y la llevaría al cine.
2.2 A trechos la neblina se afinaba; bajaba desde el sol una lluvia de ámbar y se
encendía la esmeralda de un prado (R. Pérez de Ayala, El ombligo del mundo).
2.3 Belarmino entonces, resolvió poner en orden de paz y hermosura su mundo
interior, y, por lo tanto, el mundo exterior, que no es sino imagen sensible del otro (R.
Pérez de Ayala, Belarmino y Apolonio).
2.4 Lázaro es un pueblo bonito, oscuro como todos los pueblos del Cantábrico;
pero de los menos sombríos (Pío Baroja, Las inquietudes de Shanti Andía).
Aparecen introducidas por nexos coordinantes (y, e, ni, o, pero, mas, sino),
locuciones (sin embargo, etc.) y algunos sintagmas preposicionales (por este motivo,
por esta razón, etc.).
Desde el punto de vista semántico, entre las proposiciones coordinadas se
establecen relaciones de adición, oposición y exclusión. Estos valores se clasifican en
copulativas, adversativas, disyuntivas. Se añaden a veces las explicativas y distributivas.
7.3 YUXTAPOSICIÓN
100
Son las primeras horas del día; una luz sutil, opaca, cae sobre el campo; el
horizonte es de un color violeta nacarado; cierra la vista una neblina tenue.
Yuxtapuestas coordinadas:
Fui ayer al cine; volveré mañana (copulativa).
Iré a Barcelona; volveré pronto (adversativa).
Mi hermana lloraba; mi padre reía (distributiva).
Yuxtapuestas subordinadas:
Haya vuelto o no, no importa (sustantiva de sujeto).
Lo suspendieron; no estudia nada (causal).
Os suplico me acompañéis (sustantiva de C. directo).
Ejercicios
Forma dos oraciones con cada una de estas estructuras:
Suj (det + N + ady prop adj espec) + V + CD prop sust + O + CD prop sust
Suj (prop sust) + V + CD + Nx pero + Suj + V + CCM prop de gerundio + adv CD
propo sust
Suj (det + N + apos) + V + CD prop sust est indir + ni + CD(prop sust est indir +
CCT prop adv)
CC fin prop + ni + CC fin prop + suj prop adj sust + CCc prop + V + CD
ORACIONES COMPUESTAS
Mi amigo lee y escribe muy bien. No ha nacido en Perú, sino que es
venezolano.
Ya sepa francés, ya domine el inglés, no lo quiero como intérprete.
O yo no entiendo nada o usted no se explica bien.
Trabajó todo lo que puedo, sin embargo no aprobó las oposiciones.
Ni tiene interés ni ha estudiado lo suficiente.
Se puso a escribir mas no tenía los útiles necesarios.
Aquel turista no es español, sino que habla castellano correctamente.
Trabajó durante toda la noche, sin embargo no pudo acabar el vestido.
Unos se dedican a la música, otros danzan alegremente.
Ya sea por dinero ya sea por otro motivo, nunca está contento.
Tiene tres hijos, no obstante le gusta tener gatos.
No se contentaron con el aumento de salario, sino al contrario, pidieron otras
concesiones.
Estaba medio alelado y ni hablaba, ni reía, ni tocaba la guitarra.
Estoy triste, por lo tanto no te aconsejo mi compañía.
Al despuntar el día salimos de viaje.
Mientras ve la televisión, lee el periódico.
No fue al cine porque no tenía dinero.
Si no me dices la verdad, no podrás acompañarme.
Una vez despojado de la camisa, se puso a pelear.
En saliendo de casa, se lanzaba a beber.
María me dio cuenta de que se reían de ella.
Que vengas tarde me preocupa.
El que vengas tarde me preocupa.
Se vio que lo pájaros salían de la jaula.
Conviene que estés aquí primero.
Consulta cómo puedo resolver el problema.
Observo que no llevas el traje nuevo.
Jesucristo dijo: “Amaos los unos al os otros”.
Averigua quién llama.
El propósito que traigo es que me escuchen.
Agustín se dio cuenta de que lo estaban observando.
Circulaba la noticia de que era muy valiente.
Este alumno es apto para estudiar.
Los padres están deseosos de abrazar a sus hijos.
Le pregunté si quería casarse conmigo. Lo dejé donde lo vi.
Estudió tanto que obtuvo unas calificaciones magníficas.
Lo dejé en el lugar donde lo vi. No sé dónde lo vi.
La niña es menos hacendosa que era antes.
Aunque haga mal tiempo, saldremos al aire.
Trabajó duro para que sus hijos pudieran estudiar.
Conviene que lleves bastante dinero para el viaje.
El que esté viuda no quiere decir nada.
-Buena idea- gritó el niño al salir.
El jefe estaba cansado de oír siempre lo mismo.
¿Te has acordado de que hoy es mi cumpleaños?
Aún estoy persuadido de que eres el culpable.
Los que quieran pasar que pasen.
102
“De nuevo besó las manos Sancho a la duquesa y le suplicó le hiciese merced de
que tuviese buena cuenta de su rucio, porque era la lumbre de sus ojos.” (Quijote)
“Empezaban a caer gruesas gotas de lluvia, y por el camino real venían ráfagas de
polvo y en lo alto de los peñascos balaba una cabra negra.” (Valle-Inclán, Flor de
santidad)
“En nuestro paseos por la ciudad vamos recorriendo las callejuelas, entramos en la
iglesia, nos asomamos a los viejos caserones.” (Azorín, Los valores literarios)
“La mitad de los urbanos o habían muerto o estaban fuera de combate.” (B. Pérez
Galdós, Zumalacárregui)
“Es un secreto a voces lo suyo; pero ahora, después de casi dos años, ninguna
autoridad del pueblo se ha atrevido a molestarla.” (Alfonso Groso, La zanja)
non me curo,
así que yo soy seguro
sin temor del enemigo.” (Santillana, Diálogo de Bías contra Fortuna)
“Quería preguntarte, mi alma quería preguntarte por qué anhelas, hacia qué
resbalas, para qué vives.” (Dámaso Alonso, A un río le llamaban Carlos)
Los espectadores estaban que echaban chispas por el comportamiento del árbitro.
“Estaba seguro Mosén Millán de que servirían en la comida perdiz en adobo.” (R. J.
Sender, Réquiem por un campesino español)
“Pisadas de algún devoto que entraba o salía y silabeo tenue de rezos eran los
únicos rumores que turbaban el silencio, en cuyo seno profundo arrojó el cesante su
plegaria melancólica.” (B. P. Galdós, Miau)
“A las labranderas que vienen a coser la ropa blanca no las quita ojo; se entiende
con los ropavejeros que se llevan las estrazas y trastos viejos de la casa; llama al leñador
que lanza su grito en las calles y le recomienda la soldadura de un barreño o un tinajón;
hace observaciones al arcador que en el patio de la casa sacude con su corvada vara la
lana de unos colchones.” (Azorín, Castilla)
“Todos los forasteros que por aquel tiempo recorrían las calles de Macondo tenían
que hacer sonar su campanita para que los enfermos supieran que estaba sano.” (Gabriel
García Márquez, Cien años de soladad)
104
“Cuando pregunté al Cantueso qué podrían haber hecho aquellos posaderos para
evitar la calamidad me dijo que no eran calés puros, porque en ese caso habrían llevado
consigo un perro.” (Ramón J. Sender, Nancy, doctora en gitanería)
“Oyole decir esto el estudiante poeta, hijo de don Diego, que con su madre había
salido a recibirle, y madre e hijo quedaron suspensos de ver la extraña figura de don
Quijote; el cual, apeándose de Rocinante, fue con mucha cortesía a pedirle las manos
para besárselas.” (Quijote)
“No es que no hubiera olvidado a Encarna sino que había sido el recuerdo de
Encarna lo que impulsó a Pedro a recurrir a él” (García Hortelano, Nuevas amistades)
“Eso de que hombres de esa madera sean tratados como chicos de escuela, no puede
aguantarse más.” (Galdós, Juan Martín, el Empecinado)
“Lo bueno fue que la dama, lejos de mostrar extrañeza, saludó a Pacheco como si
encontrarle allí a tales horas le pareciese la cosa más natural del mundo.” (E. Pardo
Bazán, Insolación)
“Así que llegó a los cuarenta años, y a pesar de gozar una salud robustísima, se
reconoció como un anciano decrépito.” (Armando Palacio Valdés, La novela de un
novelista)
“De estos fracasos era producto la costumbre de echar pestes aquellas mujeres
contra el lugarejo en que residían, al paso que suspiraban por los que iban dejando
detrás.” (Pereda, La
Loc. comparativa
puchera)
“La experiencia los había hecho sabios y les había enseñado a no confiar en las
expediciones de socorro” (Jack London, Los buscadores de oro)
“Nunca me dijiste por qué viniste a estas tierras.” (Jack London, El silencio blanco)
105
“Se hundieron en un letargo físico del que no había escape posible y que los hacía
rebelarse ante la tarea más insignificante.” (Jack London, En un país lejano).
PRUEBA 1 (2)
2.º Yo comento algunos aspectos del movimiento, autores y sobre todo establezco
un esquema para la elaboración posterior del tema.
3.º El trabajo se hará siempre en clase, salvo el estudio personal del alumno.
4.º Lectura de textos significativos en verso y en prosa con los siguientes objetivos
prioritarios:
4.1 Descubrir los rasgos estilísticos.
4.2 Reconocer los elementos identificadores del movimiento y del autor.
4.3 Descubrir por qué es un texto trascendente, especialmente los poemas por ser
obras cerradas. En los textos en prosa habrá que cuidar la selección del texto para que
sea significativo.
4.4 Disfrutar con la lectura comprensiva del texto.
106
i) Figuras retóricas. Son una serie de recursos destinados a llamar la atención del
receptor y embellecer el mensaje. La retórica clásica las ha catalogado y sistematizado
como figuras de dicción, de pensamiento y tropos.
Es decir, la lengua puede emplearse con el propósito de realizar una obra artística.
El discurso literario se sitúa en el extremo opuesto al del científico: lo que es
objetividad, monosemia, significado denotativo, se convierte en ambigüedad,
complejidad, connotaciones…
3. LA LENGUA LITERARIA
Como ya hemos mencionado anteriormente, es posible localizar en textos literarios
determinados aspectos lingüísticos peculiares que no suelen darse en el lenguaje común.
Los abordaremos siguiendo el hilo de los distintos niveles de análisis del signo
lingüístico. Pero es interesante tener en cuenta que estos rasgos por sí solos no
convierten al texto en literario, ni tienen por qué darle un significado concreto. La clave
está en ver si la relación entre los distintos aspectos apunta hacia un mismo significado
o conjunto de significados.
1 De hecho, las culturas primitivas suelen recurrir a este procedimiento para marcar claramente lo
que son textos “cerrados” (leyendas, mitos, folklore, literatura oral) de lo que es la comunicación habitual.
El progreso de una cultura va haciendo mucho más sutil esa diferenciación, hasta lograr, en algunas
108
Es decir, un texto literario se caracteriza por el uso de la función poética. Con ella,
el autor emplea el código para atraer la atención del receptor sobre la forma del
mensaje, para crear belleza. Lo importante no es solo lo que se dice, sino, sobre todo,
cómo se dice. Se preocupa con medios lingüísticos de producir extrañeza. El autor se
centra en cómo decir las cosas, y, a veces, cuando se cae en el exceso, se llega a
producir un texto difícil, como sucede en la literatura barroca o surrealista.
La función poética aparece también en los mensajes publicitarios y en el habla
coloquial, por ejemplo. La diferencia está en la finalidad: en el texto literario el
propósito inmediato es estético, artístico, mientras que en los otros textos esta función
se emplea con fin esencialmente práctico: intentar atraer la atención del oyente.
El rasgo principal que caracteriza a la función poética o estética es la alteración del
código lingüístico para invocar la extrañeza del lector.
Tanto en verso como en prosa se utilizan recursos estilísticos que hacen el texto
muy complejo.
Los medios para producir esta extrañeza son muchos y variados:
-empleo de palabras poco usadas en el lenguaje común (arcaísmos, neologismos,
cultismos…);
-construcciones sintácticas no habituales;
-búsqueda de ritmos marcados mediante series binarias, ternarias, etc.;
-uso del epíteto;
-frecuente utilización de figuras retóricas;
-repeticiones de esquemas gramaticales (paralelismo, quiasmo, etc.).
Género lírico
Los textos líricos presentan una visión subjetiva de la realidad, desde una
perspectiva íntima del emisor. El vehículo de expresión más habitual es el verso.
Al género lírico pertenecen:
-La oda. Se identifica muchas veces con la canción. Hoy se identifica con el poema.
Expresa la reacción lírica del poeta ante un estímulo externo o interno, reflejando así sus
sentimientos.
-La elegía. Es una composición que manifiesta un sentimiento de pesar ante una
desgracia individual o colectiva.
-La égloga. El poeta expone sus sentimientos amorosos poniéndolos en labios de
pastores, conforme al modelo del poeta latino Virgilio.
-La sátira. Composición en prosa o verso que censura vicios o defectos
individuales o colectivos.
110
Género épico
O también llamado género narrativo, en el que un narrador relata hechos reales o
inventados que suceden a unos personajes en un tiempo y un espacio determinados.
En verso:
-La epopeya. Narra una acción memorable para la Humanidad o para un pueblo:
Ramayana, Ilíada, Odisea, Nibelungos…
-El poema épico. De gran extensión, relata hazañas heroicas con el propósito de
glorificar a la patria: Eneida, Os Lusiadas, La Araucana…
-Los cantares de gesta. Poemas escritos en la Edad Media, que narran hazañas de
un héroe famoso.
-Los romances. Se cantaban en España en el siglo XV.
En prosa:
-El cuento. Son relatos breves, inventados, de origen folclórico.
-La novela. Es un relato complejo, normalmente extenso que expone
acontecimientos que suceden a personas preferentemente.
Género dramático
En el texto teatral se representan las acciones de los personajes a través del diálogo
y del monólogo. Los tres géneros dramáticos fundamentales son la tragedia, la comedia
y el drama. Los griegos crearon los dos subgéneros primeros en el siglo VI antes de
Jesucristo.
-La tragedia. Presenta terribles conflictos entre personajes, víctimas de grandes
pasiones que no pueden dominar. Suele acabar con la muerte del protagonista.
-La comedia. Desarrolla conflictos amables, divertidos muchas veces.
-El drama. Posee rasgos de la tragedia y de la comedia. En España se denominó
tragicomedia.
Otros subgéneros dramáticos son:
-El auto sacramental, de creación española (siglo XVII), es un drama en verso con
personajes alegóricos que termina con una exaltación de la eucaristía.
-El entremés. Obra corta de carácter cómico y popular.
-El sainete. Obra normalmente corta que refleja costumbres y habla populares.
-Etc.
Otros géneros que se añaden a los tres básicos son la Didáctica (obras con
pretensión de enseñar), la Historia (narración de hechos pretéritos) y la Oratoria
(persuadir mediante la palabra hablada). Entre los subgéneros didácticos destacaremos
la fábula, la epístola, el ensayo.
5. MODALIDADES TEXTUALES
Podemos decir, en principio, que el autor literario recurre a tres grandes
procedimientos de construcción del texto que pueden combinarse dentro de una misma
obra independientemente del género empleado:
a) La narración.
b) La descripción.
c) El diálogo.
111
MODERNISMO Y 98 (3)
1. EL MODERNISMO
El Modernismo literario nace en Hispanoamérica, aunque la renovación literaria y
la reacción contra los movimientos anteriores sean generales en toda Europa.
El Modernismo, como movimiento de Fin de Siglo europeo, es un inconformista.
Sus seguidores se oponen al espíritu materialista y utilitario de la sociedad europea de
finales del XIX. Exigen libertad, derecho a ser diferentes; se oponen al sistema político
y, crean otros mundos, ante la imposibilidad del cambio o por pura oposición, se aíslan
de la sociedad y recrean mundos aristocráticos.
La mirada de estos jóvenes autores se dirige a los movimientos europeos ya citados
como el Parnasianismo, el Simbolismo que serán los que influyan en la literatura
española de este momento. El Modernismo hispánico es, en gran medida, una síntesis de
Parnasianismo y Simbolismo. Junto a ello, el gusto por la literatura antigua, determinará
la influencia de autores como Hita, Manrique, los literatos del Siglo de Oro y, más
cercano, Bécquer.
Como rasgo general del movimiento modernista destaca la experimentación con el
lenguaje y con las formas literarias.
1.1 CARACTERÍSTICAS
Temas
La temática del Modernismo apunta en dos direcciones: una hacia fuera: leyendas,
mundos exóticos, evasión; otra hacia la intimidad del poeta.
1. Una desazón romántica. Como movimiento de origen romántico, posee las
características de este movimiento: rechazo de su sociedad, soledad, subjetivismo,
imaginación... La melancolía y la angustia existencial son temas recurrentes.
LO FATAL
A René Pérez
Dichoso el árbol que es apenas sensitivo,
y más la piedra dura, porque esa ya no siente,
pues no hay dolor más grande que el dolor de ser vivo,
ni mayor pesadumbre que la vida consciente.
Sonatina
La princesa está triste... ¿qué tendrá la princesa?
Los suspiros se escapan de su boca de fresa,
que ha perdido la risa, que ha perdido el color.
La princesa está pálida en su silla de oro,
está mudo el teclado de su clave sonoro;
y en el vaso olvidada se desmaya una flor.
ESTÉTICA
LA MÉTRICA
La influencia del Simbolismo les lleva a investigar con nuevos versos y
combinaciones rítmicas y a renovar y experimentar con las existentes. El verso
preferido es el alejandrino, enriquecido con nuevos esquemas acentuales. Por influencia
francesa se utilizan los dodecasílabos (6+6) y eneasílabos, poco usados en la métrica
española. Junto a ello, se mantienen los metros tradicionales como el octosílabo o el
endecasílabo.
A los ritmos ya conocidos añaden la imitación de los pies acentuales latinos binarios
o ternarios.
La renovación alcanza también a las estrofas. Descubren nuevos tipos y modifican
las ya existentes, como sucede con el soneto, en el que se añade la cuarta rima en los
cuartetos, ya experimentado por Santillana, o se añaden a los endecasílabos los
alejandrinos, combinaciones de distintas medidas, distintas distribuciones de rimas,
hasta llegar a versos mínimos como el sonetillo Verano de Manuel Machado en
trisílabos.
ESTILO Y LENGUAJE
La búsqueda de perfección y de belleza parnasianas, de armonía, les lleva a
perseguir nuevos hallazgos sensoriales y a jugar con el idioma. Los versos se llenan de
adjetivos y sustantivos que se refieren al color, al sonido en busca de una belleza
ornamental.
Son abundantes los recursos fónicos como las aliteraciones vocálicas y
consonánticas; el léxico se enriquece con vocablos exóticos, cultismos (unicornio,
ebúrneo, sacro, hiperbóreo...). En la prosa gustan de las formas esdrújulas y de la
adjetivación colorista y abundante. Este afán por plasmar lo sensorial se evidencia en el
uso de la sinestesia (rojos destinos, sol sonoro), las imágenes y metáforas novedosas.
Actividad: Lee estos dos poemas de Manuel Machado: Adelfos y Castilla, que
encontrarás es esta página http://www.los-poetas.com/j/machad1.htm, y comenta con el
primero las características del Modernismo en él. Y el segundo compáralo con los
versos del Cantar de Mio Cid al llegar este a Burgos, en el cantar del destierro.
LA GENERACIÓN DEL 98
Con el término de Generación del 98 nos referimos a los jóvenes que iniciaron su
carrera artística en los últimos años del siglo XIX y a los que influyó decididamente el
desastre de 1898, por lo que también se les denominó Generación del desastre y que
adoptaron al menos en su juventud una postura crítica ante la sociedad y la política que
había permitido llegar a esa penosa situación al país.
Fue Azorín el difusor del nombre en unos artículos en ABC en 1913, más tarde
recogidos en su obra Clásicos y modernos, pero en ella coloca a autores que luego
llamaremos modernistas como Valle-Inclán o Rubén Darío. Si lo analizamos
detenidamente, parece claro que para Azorín el término nuevo es sinónimo o casi
sinónimo de Modernismo.
EL GRUPO DEL 98
Esta corriente literaria se forma a partir del llamado “Grupo de los Tres”, integrado
por Ramiro de Maeztu, Pío Baroja y Azorín, que firman artículos con el seudónimo de
Los Tres. Azorín dirá que “No podía el grupo permanecer inerte ante la dolorosa
realidad española”. En 1901 publicaron un Manifiesto con el deseo de generar un nuevo
estado social en España. El fracaso de su campaña les llevó al desengaño, como también
había sucedido por otras razones con Unamuno. Desanimados de poder cambiar la
historia de España, se propondrán analizar la intrahistoria e intentar influir en la
mentalidad del pueblo.
Hacia 1905, los noventayochistas han abandonado la acción y se encierran en
posturas idealistas. La preocupación por España se manifiesta a través de la actitud
contemplativa del soñador.
Pasado el radicalismo juvenil, se configura lo que se ha llamado la mentalidad del
98. En esencia, podemos destacar como notas comunes en sus integrantes el idealismo,
junto a los siguientes rasgos:
118
2. ANTONIO MACHADO
2.1 VIDA
recurre a los símbolos para expresar esos temas: el agua, el camino se convierten en
símbolo de la vida o de la muerte. El agua que fluye es vida, frente a la estancada, que
recuerda la muerte. La tarde simboliza la tristeza, el tedio. Etc.
De influencia modernista es también el gusto por los versos dodecasílabos y
alejandrinos, junto a formas sencillas como la silva.
XXXII
LXX
En Campos de Castilla (1912) Manchado busca el alma de Castilla. Los temas son
variados: los enigmas del hombre, el paisaje (visto de forma objetiva unas veces y las
más de modo subjetivo, proyectando sus sentimientos), la preocupación patriótica en
poemas que hablan del presente, pasado y futuro de España, visión crítica que lo
acercan al 98. En los poemas añadidos posteriormente, esta visión de España se plantea
desde una nueva visión política que prevé una nueva España (El mañana efímero, Una
España joven).
Destaquemos aparte el largo romance La tierra de Alvargonzález, intento de escribir
un nuevo romancero, expresión popular de lo fundamental humano.
Otro apartado lo forman los Proverbios y cantares, poemas breves, chispazos líricos
o filosóficos, inspirados en las coplas populares.
Entre los poemas añadidos hay que citar las evocaciones de Soria o de la esposa
muerta. Se completa el libro con una serie de elogios a algunos amigos.
XCVIII
120
RETRATO
3 Dos modelos de libertinos y seductores: Don Miguel de Mañara fue un caballero sevillano del
siglo XVII, auténtico tenorio en su juventud y luego riguroso asceta; el Marqué de Bradomín protagoniza
las Sonatas de Valle-Inclán, quien lo definió como "un donjuán feo, católico y sentimental".
4 Los jacobinos eran un grupo extremista de la Revolución francesa; por extensión se llama así a
los que siguen ideas políticas avanzadas.
5 Ronsard (1524-1585) es el más grande poeta renacentista francés. Alude Machado a la
influencia francesa en su poesía.
121
CXIII
CAMPOS DE SORIA
VI
VII
¡Colinas plateadas,
grises alcores, cárdenas roquedas
por donde traza el Duero
su curva de ballesta
en torno a Soria, oscuros encinares,
ariscos pedregales, calvas sierras,
caminos blancos y álamos del río,
tardes de Soria, mística y guerrera,
hoy siento, por vosotros, en el fondo
del corazón, tristeza,
tristeza que es amor! ¡Campos de Soria
donde parece que las rocas sueñan,
conmigo vais! ¡Colinas plateadas,
grises alcores, cárdenas roquedas!...
VIII
122
IX
CXX
CXXII
PROVERBIOS Y CANTARES
http://www.youtube.com/watch?v=Lj-W6D2Lslo
I
Nunca perseguí la gloria
ni dejar en la memoria
de los hombres mi canción;
yo amo los mundos sutiles,
ingrávidos y gentiles
como pompas de jabón.
Me gusta verlos pintarse
de sol y grana, volar
bajo el cielo azul, temblar
súbitamente y quebrarse.
II
XXI
XXIV
XXIX
XLIV
L
-Nuestro español bosteza.
¿Es hambre? ¿sueño? ¿Hastío?
Doctor, ¿tendrá el estómago vacío?
-El vacío es más bien en la cabeza.
LIII
lirismo. Lo más característico de este ciclo son los nuevos proverbios y cantares más
conceptuales.
Con posterioridad a esta fecha su producción poética es escasa. Edita sus poesías
completas (1928, 1933, 1936) a las que añade algunos poemas, como los que
constituyen el Cancionero apócrifo de Abel Martín y Juan de Mairena. Destacan entre
estas composiciones el ciclo dedicado a Guiomar y los poemas sobre la guerra civil,
como la elegía a Lorca: “El crimen fue en Granada”.
CLXXIII
CANCIONES A GUIOMAR
Tras publicar algunos cuentos y relatos, la obra cumbre de esta primera etapa
modernista son las Sonatas (Sonata de otoño (1902), Sonata de estío (1903), Sonata de
primavera (1904) y Sonata de invierno (1905). Representan una alegoría de la vida
humana; son las memorias del Marqués de Bradomín, un don Juan “feo, católico y
sentimental”.
La evolución estilística se acentúa en la trilogía de novelas La guerra carlista,
escritas entre 1908 y 1909 (Los cruzados de la causa, El resplandor de la hoguera y
Gerifaltes de antaño). Junto a recuerdos modernistas aparece un lenguaje desgarrado y
bronco.
126
Su trayectoria es una línea ininterrumpida en las que los recursos más cercanos al
esperpento van aumentando con el paso del tiempo. Es decir, se trata de una progresión
estilística al estilo de lo que le sucedió a Góngora en su momento.
En sus primeras obras – El marqués de Bradomín (1906) y El yermo de las almas
(1908)-, dramatiza el tema decimonónico del adulterio. En El marqués de Bradomín
desarrolla en encuentro en el palacio de Brandeso del Marqués y la Dama, al igual que
en Sonata de otoño.
El ciclo de las Comedias bárbaras: Águila de blasón (1907), Romance de lobos
(1908) y Cara de plata (1922) tiene como escenario el ambiente rural gallego con toda
su miseria, personajes extraños, violentos o tarados. Sus personajes encarnan los
impulsos elementales del ser humano y actúan movidos por oscuras razones. Divinas
palabras (1920) cierra este ciclo mítico.
La producción dramática de Valle culminó en el esperpento. Él mismo denominó
así a cuatro de sus obras Luces de bohemia (1920), Los cuernos de don Friolera (1921),
Las galas del difunto (1926) y La hija del capitán (1927), estas tres últimas publicadas
bajo el título general de Martes de carnaval, en 1930.
Valle-Inclán define lo que es el esperpento en Luces de bohemia (escena XI):
[...]
Max: ¡Don Latino de Hispalis, grotesco personaje, te inmortalizaré en una novela!
Don Latino: Una tragedia, Max.
Max: La tragedia nuestra no es tragedia.
Don Latino: ¡Pues algo será!
Max: El Esperpento.
[...]
Max: Los ultraístas son unos farsantes. El esperpentismo lo ha inventado Goya. Los
héroes clásicos han ido a pasearse en el callejón del Gato.
Don Latino: ¡Estás completamente curda!
Max: Los héroes clásicos reflejados en los espejos cóncavos dan el Esperpento. El
sentido trágico de la vida española solo puede darse con una estética sistemáticamente
deformada.
Don Latino: ¡Miau! ¡Te estás contagiando!
Max: España es una deformación grotesca de la civilización europea.
Don Latino: ¡Pudiera! Yo me inhibo.
Max: Las imágenes más bellas en un espejo cóncavo son absurdas.
Don Latino: Conforme. Pero a mí me divierte mirarme en los espejos de la calle del
Gato.
Max: Y a mí. La deformación deja de serlo cuando está sujeta a una matemática
perfecta. Mi estética actual es transformar con matemática de espejo cóncavo las
normas clásicas.
Don Latino: ¿Y dónde está el espejo?
Max: En el fondo del vaso.
Don Latino: ¡Eres genial! ¡Me quito el cráneo!
127
Azorín destaca, sin embargo, más por sus ensayos como Castilla, La ruta de don
Quijote, Clásico y modernos, etc.
Si queréis ir allá, a la casa del Henar, salid del pueblo por la calle de Pellejeros,
tomad el camino de los molinos de Ibangrande, pasad junto a las casas de Marañuela y
luego comenzad a ascender por la cuesta de Navalosa. En lo alto, asentada en una ancha
meseta, está la casa. La rodean viejos olmos; dos cipreses elevan sobre la fronda sus
cimas rígidas, puntiagudas. Hay largos y pomposos arriates en el jardín. Hay en la
verdura de los rosales, rosas bermejas, rosas blancas, rosas amarillas. Desde lo alto se
descubre un vasto panorama: ahí tenéis a la derecha, sobre aquella lomita redonda, la
ermita de Nuestra Señora del Pozo Viejo: más lejos, cierra el horizonte una pincelada
zarca6 de la sierra; a la izquierda, un azagador 7 hace serpenteos entre los recuestos8 y
baja hasta el río, a cuya margen, entre una olmeda, aparecen las techumbres rojizas de
los molinos. Mirad al cielo: está limpio, radiante, azul; unas nubecillas blancas y
redondas caminan ahora lentamente por su inmensa bóveda. Aquí en la casa, las puertas
están cerradas; las ventanas cerradas también. Tienen las ventanas los cristales rotos y
polvorientos. Junto a un balcón hay una alcarraza 9 colgada. En el jardín, por los viales
de viejos árboles avanzan las hierbas viciosas de los arriates. Crecen los jazmineros
sobre los frutales; se empina una pasionaria10 hasta las primeras ramas de los cipreses y
desde allí deja caer flotando unos floridos festones11.
6 Zarca. Color azul claro.
7 Azagador. Senda por donde los animales tienen que ir azagados (de uno en uno).
8 Recuestos. Sitio o lugar en declive.
9 Alcarraza. Vasija de arcilla porosa.
10 Pasionaria. Planta originaria del Brasil.
11 Festones. Bordados de flores y frutos.
128
sean los seres más felices de la tierra o lo más desgraciados: la lucecita roja aparece a su
hora y después desaparece.
La voz de la niña: Ya está ahí la lucecita.
La estación del pueblo está a media hora del caserío. Rara vez desciende algún
viajero del tren o sube en él. Allá arriba queda la casa del Henar. Ya está cerrada, muda.
Si quisiéramos ir hasta ella tendríamos que tomar el camino de los molinos de
Ibangrande, pasar junto a las casa de Marañuela, ascender por la pendiente de Navalosa.
Aquí abajo, a poca distancia de la estación, hay un puente de hierro que cruza un río;
luego se mete por el costado de una loma.
Esta noche a la estación han llegado dos viajeros: son una señora y una niña. La
señora lleva un ancho manto de luto; la niña viste un traje también de luto. Casi no se
ve, a través del tupido velo, la cara de esta dama. Pero si la pudiéramos examinar,
veríamos que sus ojos están enrojecidos y que en torno de ellos hay un círculo de
sombra. También tiene los ojos enrojecidos la niña. Las dos permanecen silenciosas
esperando el tren. Algunas personas del pueblo las acompaña.
El tren silba y se detiene un momento. Suben a un coche las viajeras. Desde allá
arriba, desde la casa ahora cerrada, muda, si esperáramos el paso del tren, veríamos
cómo la lucecita roja aparece y luego, al igual que todas las noches, todos los meses,
todos los años, brilla un momento y luego se oculta.
Azorín, Castilla.
3. PÍO BAROJA
3.1 VIDA
Nació en San Sebastián en 1872. Estudió Medicina en Madrid, pero ejerció poco
tiempo. Baroja fue conocido en los años treinta por sus opiniones individualistas y
anarquistas. Regentó una panadería familiar y pronto se dedicó de lleno a la literatura.
En 1935 ingresa en la Real Academia Española. La Guerra Civil le sorprendió en el País
Vasco, desde donde pasó a Francia. En 1940 vuelve a Madrid, donde murió en 1956.
3.2 OBRAS
Fue un escritor fecundísimo. Sus novelas pasan de sesenta, frecuentemente
agrupadas en trilogías.
absurdo. Sus fracasos le llevarán al suicidio. Como otros personajes barojianos, Andrés
fracasa en la vida a causa de una voluntad desorientada. Posee un pesimismo implacable
y es incapaz de adaptarse a las circunstancias.
-Las ciudades. La forman César o nada (1910), considerada como una de las
principales obras de Baroja. Es la más extensa. Domina la figura de César Moncada, un
hombre de acción que vuelca sus energías en la vida política. El mundo es ansí (1912) y
La sensualidad pervertida (1920).
Su agrupación está poco justificada. No hay nada en común entre sus protagonistas,
excepto el fracaso que comparten: el fracaso político en la primera y el sentimental en
las otras.
-El mar: Se compone de cuatro novelas: Las inquietudes de Shanti Andía (1911),
El laberinto de las sirenas (1923), Los pilotos de altura (1929) y La estrella del capitán
Chimista (1930). Son novelas de aventuras protagonizadas por marinos vascos. En ellas
domina la presencia del mar, lleno de misterio. Es evidente el influjo de las lecturas de
infancia y adolescencia de Baroja.
A esta selección de trilogías se podrían añadir otras, así como una serie de novelas
sueltas, relatos y novelas cortas de menos interés.
Entre 1913 y 1935, Baroja se consagró a desarrollar una serie narrativa titulada
Memorias de un hombre de acción. Veintidós novelas con Eugenio de Aviraneta como
protagonista.
4. MIGUEL DE UNAMUNO
4.1 VIDA
Miguel de Unamuno nació en Bilbao en 1864. Estudió Filosofía y Letras en Madrid
y ganó en 1891 la cátedra de Griego en la Universidad de Salamanca, de la que fue
elegido rector en 1901. Fue desterrado de 1924 y 1930 por oponerse a la dictadura del
general Primo de Rivera. Diputado durante la República, fue destituido y confinado en
su domicilio tras el levantamiento de Franco. Murió el 31 de diciembre de 1936.
Fue un hombre de intensa actividad intelectual; vivió en perpetua lucha consigo
mismo y en lucha con los demás, contra su tiempo, intentando sacudir las conciencias.
Varias crisis juveniles le hicieron perder la fe. En 1892 se afilia al PSOE, pero ya en
1895 expresa algunas reservas. Abandona la militancia política y volverá los ojos a los
problemas existenciales y espirituales, sin dejar nunca su preocupación por España.
4.2 OBRA
Cultivó Unamuno todos los géneros, y todos ellos están recorridos por dos grandes
ejes temáticos: el problema de España y el sentido de la vida humana.
Es uno de los más decididos renovadores de la novela y ello sobre todo por su
propósito de hacer de ella un cauce adecuado para la expresión de los conflictos
existenciales. Unamuno considera la novela como el vehículo más idóneo para dar
cabida a sus reflexiones sobre la vida y la muerte porque, al no tener que seguir a
técnica de argumentación propia de un tratado, le deja mayor libertad para la fantasía.
En Unamuno confluyen novela y filosofía.
Niebla, la mejor de sus narraciones, presenta la historia de Augusto Pérez y su
frustrado matrimonio con Eugenia que prefiere al libertino Mauricio. Augusto decide
suicidarse, pero antes visita al ensayista don Miguel de Unamuno y descubre que no es
más que un ente de ficción, novelesco, sujeto a los deseos de su creador, que ha
131
Actividad 1: Una vez acabado el tema del fin de siglo o Modernismo y 98, os toca
elaborar el tema-informe con lo que aparece en este libro y otras fuentes de información
con el siguiente esquema:
http://e-
ducativa.catedu.es/44700165/aula/archivos/repositorio//4000/4217/html/2_parnasianism
o_y_simbolismo.html
2.2 Su influencia en España
3. El fin de siglo en España
3.1 Modernismo y 98
http://cc.lourdes.madrid.educa.madrid.org/departamentos/len/LEN4/modernismo.ge
n98.mapa.pdf
http://centros.edu.xunta.es/iesportadaauga/lengua_espanola_e_literatura/trabajos_al
umnos/modernismo_y_generacion_de_98.ppt
http://www.slideshare.net/lengua4eso/modernismo-y-generacin-del-98-11212704
http://www.spanisharts.com/books/literature/contemp2p.htm
http://www.spanisharts.com/books/literature/xxpro.htm
http://www.spanisharts.com/books/literature/tcontxx.htm
4. Modernismo
4.1 Orígenes
4.2 Características
4.3 Autores y obras
5. El Grupo del 98
5.1 Origen
5.2 Características
5.3 Autores y obras
134
El comentario crítico debe ser un escrito que contenga una explicación profunda del
texto y un juicio crítico, valorativo y razonado acerca del propio texto, con dos partes:
comentario crítico de la estructura y comentario crítico de las ideas y juicio personal.
Opinión personal
Para concluir se manifestará el asentimiento o disentimiento (total o parcial)
respecto al tema o al enfoque que el emisor ha dado, aportando argumentos
personales que corroboren dicho acuerdo o desacuerdo, y se analizarán las
posibilidades de interpretación del texto en función de sus posibles lectores.
Para la redacción del comentario tendremos en cuenta las fases de toda expresión
escrita:
1. Planificación.
2. Organización.
3. Elocución.
4. Revisión.
EL SIGNIFICADO
Ramón Trujillo
EL RESUMEN
COMENTARIO CRÍTICO
severamente, sin alharacas, con la evidencia de una muerte que nadie puede asumir por
mí, en la que nadie puede sustituirme. Asumir personalmente la acción de morir supone
percatarse de que no nos morimos para nosotros mismos, sino también para otros. "En
Orihuela, su pueblo y el mío, se me ha muerto como el rayo Ramón Sijé, con quien
tanto quería", escribía con toda verdad Miguel Hernández. Porque las gentes no "se
mueren", con esa desagradable frialdad del pronombre impersonal: se nos mueren. Se
me mueren aquellos con quienes hice la vida, aquellos -como decía Unamuno- que me
sueñan y sueño.
2. EL DISCURSO HUMANÍSTICO
Así como el discurso científico era el de la descripción y explicación del
funcionamiento de la realidad, el jurídico, el del establecimiento de la normativa social
y el periodístico, el de la información cotidiana, el de los hechos humanísticos es un
discurso de reflexión.
El discurso humanístico se mueve en dos niveles: la nueva descripción y análisis de
los sistemas complejos de la realidad social y la reflexión sobre los modos que tiene el
hombre de interpretar, modificar y expresar su acción sobre las cosas.
3. EL VOCABULARIO ABSTRACTO
El ensayo, al tocar tan gran variedad de temas, abarca los planteamientos de las
llamadas ciencias humanísticas y participa de su vocabulario abstracto. El uso de este
tipo de vocabulario es característico de la Filosofía, de las Ciencias y Humanidades.
Pero algunas ciencias utilizan el concreto.
Las Ciencias Naturales emplean con más frecuencia los términos concretos porque
han de nombrar "cosas": neurona, lípido, protón, bacteria, nitrógeno...
Desde el siglo XVIII ha sido constante la formación de nombres abstractos con el
sufijo -ismo para designar escuelas filosóficas y después doctrinas políticas:
empirismo, materialismo, panteísmo, existencialismo, etc. Otros sufijos muy frecuentes
son –ción, -ación (socialización, abstracción, legitimación…), -ancia, -anza, -encia
(predominancia, esencia, templanza…), -dad, -idad (intencionalidad, temporalidad,
moralidad…), -ez, -eza (sensatez, validez, certeza), -tud (aptitud, verosimilitud…).
Al utilizar las lenguas naturales aparecen connotaciones y ambigüedades propias del
léxico; por ello algunas disciplinas (Filosofía, Lingüística…) han creado una
terminología propia (tecnicismos).
El vocabulario humanístico no se renueva fácilmente, su característica es la
permanencia, aunque dando muchas veces significados nuevos a las voces antiguas.
139
5. EL ENSAYO
(Ver lo dicho en el tema 1 de literatura)
6. EXPOSICION Y ARGUMENTACION
Los ensayistas suelen valerse de la exposición y de la argumentación como formas
de elocución apropiadas para expresar sus ideas de forma subjetiva.
6.1 La exposición.
La exposición es la presentación de una cuestión cualquiera con el propósito de
darlo a conocer.
Una buena exposición depende del cuidado que se tenga en los tres momentos
fundamentales de su elaboración: Inuentio, Dispositio y Elocutio.
La Dispositio o estructura puede ser muy diversa; algunos esquemas son los
siguientes:
- Esquema analizante (deductivo): La idea inicial es desarrollada a continuación.
- Esquema sintetizante (inductivo): Expone las ideas de las que se obtiene una
conclusión.
- Esquema encuadrado: La idea principal da lugar a una explicación que tiene
también su conclusión.
"En la danza el cuerpo, y en la danza moderna cada dedo, traza líneas de
expresión muy nítidas. El bailarín "moderno" se mueve en el escenario conforme a las
líneas exactas, que se introducen en la composición de su danza como elementos
esenciales (Sakharoff). El cuerpo del bailarín es en todo momento, y hasta la punta de
los dedos, una composición lineal (Palucca). La utilización de líneas no es un invento
140
de la danza moderna; salvo el ballet clásico, todos los pueblos trabajan en sus danzas,
y en cada etapa del desarrollo con la línea".
(Kandinsky: Punto y línea sobre el plano, 1983)
La idea inicial: El bailarín traza líneas de expresión muy nítidas" origina una
explicación. Tras la explicación cierra con una conclusión semejante a la afirmación
inicial: "todos los pueblos trabajan... con la línea.".
- Esquema paralelo: No hay subordinación en las ideas, sino que todas tienen igual
importancia.
6.2 LA ARGUMENTACIÓN
Consiste en aportar razones que sustentan ideas u opiniones sobre un tema dado. Su
propósito es convencer o persuadir.
Exposición y argumentación suelen aparecer unidas en el texto.
Basta con que el autor defienda razonadamente su punto de vista, su opinión sobre
un tema determinado, par que haya argumentación.
En una argumentación se distinguen tres elementos importantes:
- La tesis: es la idea básica de la argumentación, colocada al principio o al final.
- El cuerpo de la argumentación: está formado por el proceso reflexivo que
desarrolla, reafirma, refuta o aplica la idea principal.
- Conclusión: En la inducción, la conclusión es la tesis; en la deducción, este
apartado suele estar dedicado a recoger las conclusiones.
2. Argumentación
2.1. Aceptación de algunos hechos: la población negra de USA y los hijos de
obreros frente a los de empresarios e intelectuales... (párrafo 1)
2.2 Refutación de la tesis anterior
2.2.1 Hay que interpretar debidamente los hechos que sustentan dicha tesis (párr.2)
2.2.2. Se pone de manifiesto la poca validez de los procedimientos aplicados para la
medición de la inteligencia (párrafo 3).
2.2.3. Se hace hincapié en la necesidad de investigar otras causas de desigualdad
distintas de las condiciones culturales (párrafo 4).
2.3. Conclusión: tesis defendidas por el autor.
2.3.1. Mención de nuevos experimentos que invalidan la tesis inicial de algunos
psicólogos (párrafo 5).
2.3.2. Tesis defendida por el autor: La capacidad mental de las distintas razas y
clases sociales esencialmente es la misma (párrafo 6).
142
MOVIMIENTOS DE VANGUARDIA
El principal promotor del Ultraísmo fue Guillermo de Torre que ilustró sus
doctrinas con los poemas visuales de su libro Hélices (1923).
144
El Surrealismo
El Surrealismo supone un cambio radical en la concepción del papel del arte y del
trabajo del artista. Surge del Dadaísmo, como continuación, pero también como
resultado de las divergencias personales entre Tzara y André Breton y la intención de
superar el nihilismo de Dadá.
Bretón lanzó el primer manifiesto surrealista en octubre de 1924 y el segundo en
1925, haciendo bandera de antirrealismo, de la imaginación y de la liberación del
pensamiento. Con Louis Aragon fundó la revista La revolución surrealista como órgano
del movimiento, sustituida en 1930 por El surrealismo al servicio de la revolución.
Pero la vanguardia en general y el surrealismo en particular influyeron sobre todo
en los autores del Grupo poético del 27.
145
LITERATURA (3)
En 1914, escribió Azorín: “Otra generación ha llegado. Hay en estos jóvenes más
método, más sistema, una mayor preocupación científica. Son los que este núcleo
forman, críticos, historiadores, filósofos, eruditos, profesores. Saben más que nosotros.
¿Tienen nuestra espontaneidad? Dejémosles paso”.
Sin embargo, es difícil hablar de un nuevo grupo homogéneo, sino más bien de un
clima intelectual distinto. A este grupo de escritores intelectuales se los denomina
Generación de 1914 o Novecentismo, este último término, más frecuente, lo acuña
Eugenio D’Ors en 1916.
Aunque no poseen la conciencia de grupo, comparten algunos rasgos coincidentes,
entre los que destacan la sólida preparación intelectual; su europeísmo, que anteponen
al castellanismo noventayochista; una obsesión constante por la obra” bien hecha”,
lejos de toda improvisación, y cuidado exquisito de la forma. Su influjo en la vida
cultural e intelectual del país ha sido grande.
Forman el grupo novecentista, entre otros, José Ortega y Gasset, Eugenio D’Ors,
Manuel Azaña, Américo Castro, Gregorio Marañón y José Bergamín. También los
novelistas Ramón Pérez de Ayala, Gabriel Miró y Ramón Gómez de la Serna y los
poetas Juan Ramón Jiménez, León Felipe, José Moreno Villa y Fernando Villalón entre
otros.
En 1916 se casa en Nueva York con Zenobia Camprubí Aymar. Viven en Madrid,
pero con la llegada de la guerra se instalan definitivamente en Puerto Rico. En 1956 se
le concede el Premio Nobel, justamente el año en que muere su esposa. Él murió dos
años después, en 1958.
Hay en Juan Ramón una permanente búsqueda que podemos dividir en varias
etapas, según las declaraciones del propio autor. En 1918 escribió un poema que resume
su evolución:
Y se quitó la túnica,
y apareció desnuda toda...
¡Oh pasión de mi vida, poesía
desnuda, mía para siempre!
Eternidades
Primeros libros
En 1903 publica su primer gran libro: Arias tristes, aquí sí hay una poesía sencilla.
Modernismo
Entre 1908 y 1915 compone poemas que recogerá en libros como Elejías, La
soledad sonora, Poemas mágicos y dolientes, Sonetos espirituales... En ellos, sin la
147
ELEGÍA
Poesía desnuda
Estío (1915) representa el primer paso hacia la sencillez: vuelta al octosílabo, a la
asonancia, al poema breve, etc. La ruptura definitiva con el Modernismo se produce en
1916 con Diario de un poeta recién casado. Elimina lo anecdótico y deja paso a la
concentración conceptual y emotiva. Aparecen poemas en prosa y otros aspectos que lo
acercan a la poesía de vanguardia.
Siguen otros libros: Eternidades (1918), Piedra y cielo (1919), Poesía (1923)... El
poeta sigue en su proceso de depuración, de conseguir decir más con las menos palabras
posibles. Su poesía se hace difícil, poesía para una minoría. Busca en su poesía la
esencia de las cosas, que la palabra se convierta en el ser. Él mismo se refiere a esta
etapa con etapa intelectual.
¡Intelijencia, dame
el nombre exacto de las cosas!
Que mi palabra sea
la cosa misma,
creada por mi alma nuevamente.
Que por mí vayan todos
los que no las conocen, a las cosas;
que por mí vayan todos
los que ya las olvidan, a las cosas;
que por mí vayan todos
148
Etapa final
En este proceso cada vez más ambicioso aparecen ya en el exilio En el otro costado
(1936-1942) y Dios deseado y deseante (1948-1949).
NARRATIVA NOVECENTISTA
Los novelistas de la Generación de 1914 pueden reducirse en dos líneas: los que
continúan modos narrativos de etapas anteriores y los que plantean intentos de
renovación que enlazan con las vanguardias.
Entre los autores novecentistas destacan las figuras de Ramón Pérez de Ayala y de
Gabriel Miró.
Ramón Pérez de Ayala nació en Oviedo (1880), se licenció en Derecho. Fue
embajador en Londres durante la República y se exilió a Buenos Aires. Regresó en 1955
a Madrid, donde murió en 1962. Cultivó la poesía simbolista y el ensayo.
Destaca entre todas sus novelas Belarmino y Apolonio (1921), cuyos protagonistas
-dos zapateros- ilustran dos actitudes ante la vida: la comprensión y la meditación y la
expresión y la acción. O Tigre Juan y El curandero de su honra (1926).
Gabriel Miró (1879-1930) creó una novela de poderoso lirismo. Sus novelas tienen
el paisaje levantino como fondo. Miró destaca por su sensibilidad y por su capacidad
para captar sensaciones: luz, color, sonidos, etc. Junto a ello un gran dominio del
lenguaje. En sus novelas la acción deja de ser un elemento fundamental y pasa a ser
soporte para sus espléndidas descripciones y sus hallazgos verbales.
De entre sus primeras obras, destaca Las cerezas del cementerio (1910), sobre un
amor apasionado en un sensual ambiente levantino. Añade, además, elementos
decadentistas.
Sus dos obras maestras son Nuestro padre San Daniel (1921) y El obispo leproso
(1926) que constituyen una sola novela centrada en la vida de Oleza, lugar imaginario
que simboliza a Orihuela. El tema es el paso del tiempo y la visión de un ambiente
estancado, en el que la inocencia y las ansias vitales se estrellan contra la intolerancia
religiosa.
13 Extraordinario y complejo poema que precisa la poética desde la que está escrito Eternidades.
149
Actividad 1: Lee y subraya los textos expositivos que tratan sobre la Generación del
27, a lo que añadirás lo novedoso que se haya dicho en la exposición de tu compañero/a
y con todo ello deberás redactar un tema-informe sobre la Generación del 27.
2. LA GENERACIÓN DEL 27
2.1 INTRODUCCIÓN
En los años veinte se abrió paso una excepcional promoción de poetas que condujo
a las letras españolas a uno de los momentos más brillantes.
En 1927, el Ateneo de Sevilla organizó un acto para conmemorar el tercer
centenario de la muerte de Góngora. Allí están, entre otros poetas, Alberti, García Lorca,
Guillén, Dámaso Alonso, Gerardo Diego. Añadamos a ellos Pedro Salinas, Aleixandre,
Cernuda, Altolaguirre y Prados y tendremos completo el llamado Grupo poético del 27.
Y decimos grupo porque los poetas del 27 no son una generación, sino un grupo
dentro de una generación de artistas. Forman, eso sí, un grupo compacto unido por la
amistad y por experiencias comunes. Si aplicamos los criterios de Petersen sobre lo que
se entiende por generación, esos criterios añadirían a estos otros muchos autores de
otros géneros. A pesar de ello, se le han aplicado varios nombres como Generación del
27, Generación de la amistad, Generación de la Dictadura, Generación de la
República, pero de todos parecen los más correctos el de Grupo poético de 1927 o
Generación del 27.
Existen, sin embargo, varios aspectos que los acercan a la idea de generación. En la
Residencia de Estudiantes de Madrid viven varios de ellos o acuden otros a sus tertulias
y actividades culturales. Otro lugar de convivencia es el Centro de Estudios Históricos,
donde comparten, de la mano de Menéndez Pidal o de Américo Castro, el fervor por los
autores medievales.
Entre los actos comunes, destacen los organizados para el centenario de Góngora en
1927, de donde toman el nombre, no solo el acto del Ateneo de Sevilla, sino los actos de
Madrid (“auto de fe”) y el número monográfico de la revista Litoral (octubre de 1927).
Colaboran en las mismas revistas, especialmente en Revista de Occidente y La
Gaceta Literaria. A ellas habría que añadir otras como Litoral, de Málaga, fundada por
Altolaguirre y Prados, Verso y Prosa en Murcia, Caballo Verde para la Poesía (1935),
de Madrid, dirigida por Neruda.
Primera etapa: la poesía pura, hasta 1927. En sus inicios se nota la influencia de
Bécquer y elementos posmodernistas. Pronto llega la influencia de las vanguardias:
Ultraísmo, Creacionismo...
A la vez, el influjo de Juan Ramón les lleva a la poesía pura. Decía Guillén que
“poesía pura es todo lo que permanece en el poema después de haber eliminado de él
todo lo que no es poesía”. El gran instrumento de este arte puro es la metáfora, con
150
audacias nuevas procedentes de las vanguardias. Por ello, se les tildó de herméticos y
deshumanizados.
PEDRO SALINAS
Nació en Madrid (1891). Doctor en Letras, en 1918 gana una cátedra en la
Universidad de Sevilla. En 1922-23 enseñó en Cambridge. Exiliado tras la guerra,
ejerció en diversas universidades americanas. Murió en Boston en 1951.
En sus versos se observa la presencia de dos temas de forma recurrente: el amor, no
solo a las personas, sino también a las cosas, como una búsqueda de las realidades
esenciales de la existencia y el afán de absoluto, de comprensión y conocimiento,
supone la búsqueda de lo permanente en el tiempo y en el espacio, así como la
integración entre el yo y el mundo.
Sus primeros libros son Presagios (1923), Seguro azar (1929) y Fábula y signo
(1931). Los tres pertenecen a la llamada poesía pura, al Futurismo y al Creacionismo.
Vienen luego sus dos obras maestras: La voz a ti debida (1933) y Razón de amor
(1936) a las que se añade Largo lamento (1939). Conforman como una especie de
cancionero amoroso. En la primera, el amante canta a la amada, a sus cualidades, a la
realidad que la rodea; la segunda celebra el sentimiento amoroso que se ve condenado a
desaparecer; Largo lamento expresa el dolor por la separación inevitable de la amada.
Tras la guerra, aparecerán en América El contemplado (1946) y Todo más claro
(1949). Después de su muerte, se publica en España Confianza (1955). En todos ellos
aparece una lucha entre su fe en la vida y los signos angustiosos que ve a su alrededor.
De esta última etapa destaca el poema Cero, suscitado por el horror de la bomba
atómica.
151
PEDRO SALINAS
Y cuando me preguntes
quién es el que te llama,
el que te quiere suya,
enterraré los nombres,
los rótulos, la historia.
Iré rompiendo todo
lo que encima me echaron
desde antes de nacer.
Y vuelto ya al anónimo
eterno del desnudo,
de la piedra, del mundo,
te diré:
"Yo te quiero, soy yo."
RAFAEL ALBERTI
Nace en Puerto de Santa María (Cádiz) en 1902. En 1917 se traslada su familia a
Madrid. Durante una etapa de reposo en la Sierra de Guadarrama, comienza a escribir
versos. En 1925 compartió con Gerardo Diego el Premio Nacional de Literatura por su
primer libro, Marinero en tierra. En 1931 se afilia al partido comunista. Al acabar la
guerra se exilia y vive en Argentina y Roma. Vuelve a España en 1977 y recibe el
Premio Cervantes en 1983.
Su poesía tiene gran variedad de temas y tonos. Los tres primeros libros aparecen
bajo el signo de la lírica popular y de las viejas canciones tradicionales.
Marinero en tierra (1924) es ya un libro magistral. Su inspiración básica es la
nostalgia de su tierra gaditana, de su mar, de sus salinas, recordados desde Madrid. Los
versos se inspiran en su mayor parte en las formas ligeras de la lírica tradicional.
152
RAFAEL ALBERTI
El mar. La mar.
El mar. ¡Solo la mar!
¿Por qué me trajiste, padre,
a la ciudad?
¿Por qué me desenterraste
del mar?
En sueños, la marejada
me tira del corazón.
Se lo quisiera llevar.
Padre, ¿por qué me trajiste
acá?
*****
y dejadla en la ribera.
Llevadla al nivel del mar
y nombradla capitana
de un blanco bajel de guerra.
¡Oh mi voz condecorada
con la insignia marinera:
sobre el corazón un ancla
y sobre el ancla una estrella
y sobre la estrella el viento
y sobre el viento la vela!
Finalmente, entre 1935 y 1936, emprende un Libro de sonetos y Sonetos del amor
oscuro, inéditos hasta hace poco. Representan otra cima poética. La gloria y el dolor de
amar alcanzan en estos poemas expresiones hondísimas.
***
-Antonio Torres Heredia,
Camborio de dura crin,
moreno de verde luna,
voz de clavel varonil:
¿Quién te ha quitado la vida
cerca del Guadalquivir?
-Mis cuatro primos Heredias,
hijos de Benamejí.
Lo que en otros no envidiaban,
ya lo envidiaban en mí.
Zapatos color corinto,
medallones de marfil,
y este cutis amasado
con aceituna y jazmín.
-¡Ay, Antoñito el Camborio,
digno de una Emperatriz!
Acuérdate de la Virgen
porque te vas a morir.
-¡Ay, Federico García,
llama a la Guardia Civil!
Ya mi talle se ha quebrado
como caña de maíz.
***
Tres golpes de sangre tuvo
155
y se murió de perfil.
Viva moneda que nunca
se volverá a repetir.
Un ángel marchoso pone
su cabeza en un cojín.
Otros de rubor cansado
encendieron un candil.
Y cuando los cuatro primos
llegan a Benamejí,
voces de muerte cesaron
cerca del Guadalquivir.
LA AURORA
Podemos dividir su evolución en tres etapas: los tanteos de los años veinte, la
experiencia vanguardista de los años treinta, y la etapa de plenitud de los últimos años.
Su primer éxito es Mariana Pineda (1925), sobre la heroína que murió ajusticiada
en Granada en 1831 por haber bordado la bandera liberal. Formalmente, es un drama en
verso, con resabios del teatro histórico modernista.
En 1926 presenta ya una obra maestra, La zapatera prodigiosa, subtitulada “farsa
violenta”. Trata de una joven casada con un zapatero viejo. En el fondo se esconde la
lucha entre la realidad y la fantasía, entendiendo por fantasía todo lo que es irrealizable.
Tras el éxito del libro de poemas Romancero gitano, Lorca sufre una profunda crisis
vital y estética. A esta época pertenecen dos tragedias y dos dramas. En casi todas ellas
la mujer ocupa un lugar central. Las mujeres se presentan como criaturas marginadas o
marginales y representan a la vez la inocencia y la pasión elemental.
Bodas de sangre (1933), Yerma (1934) es el drama de la mujer condenada a la
infecundidad. El ansia insatisfecha de maternidad y la fidelidad al marido provoca la
tragedia.
La casa de Bernarda Alba (1936) es la obra cumbre del teatro lorquiano. No se
estrenó hasta 1945 en Buenos Aires, pues su autor murió poco después de acabarla. La
obra se subtitula “Drama de mujeres en los pueblos de España”. La llama drama y no
tragedia, aunque en realidad parece una tragedia.
Inspirada también en un hecho real, desarrolla el tema de la lucha entre el principio
de autoridad, encarnado por Bernarda, y el principio de libertad, representado por Adela,
la menor de las hijas, que mantiene relaciones ocultas con Pepe el Romano, el
prometido de su hermana Angustias. Descubierto el hecho, Bernarda dispara contra
Pepe, y al creerlo muerto, Adela se suicida.
JORGE GUILLÉN
Nació en Valladolid (1893) Catedrático de la Universidad de Murcia (1925-1929) y
Sevilla (1932-1938), con un intermedio en la de Oxford (1929-1931). Tras la guerra se
establece en Estados Unidos. En 1977 se traslada a Málaga. En 1977 se le concede el
Premio Miguel de Cervantes. Muere en 1984.
Guillén considera su obra como una unidad orgánica, por ello le ha dado un título
común Aire nuestro que engloba cinco ciclos: Cántico, Clamor, Homenaje, Y otros
poemas y Final.
Cántico es un canto a la creación. En las cuatro ediciones (1928, 1936, 1945 y
1950) la obra se fue ampliando hasta llegar a los 300 poemas. En este libro, la
contemplación de la realidad provoca el gozo de la voz poética, que exclama: El mundo
está bien hecho. El libro está basado en un tema fundamental: la realidad y su relación
con el hombre. En esta realidad conviven fuerzas positivas y negativas en constante
conflicto.
En 1950 inicia un nuevo ciclo, Clamor. Se compone de tres libros: Maremágnum
(1957), Que van a dar a la mar (1960) y A la altura de las circunstancias (1962). El
157
título equivale ahora a gritos de protesta ante los horrores y las miserias del momento
histórico.
(De Cántico)
GERARDO DIEGO
Nació en Santander en 1896, Catedrático de Lengua y Literatura en el Instituto de
Soria, Gijón, Santander y Madrid. En 1925 obtuvo el Premio Nacional de Literatura. En
1979 se le concedió el Premio Cervantes. Murió en Madrid en 1987.
La poesía de Diego sorprende por su variedad de temas, de tonos y de estilos. Su
obra presenta dos direcciones: la poesía vanguardista y la poesía clásica.
Su primer libro, El romancero de la novia (1918) tiene la influencia de Bécquer.
Pronto se enrola Diego en la vanguardia, especialmente en el Creacionismo. Así ocurre
en Imagen y Manual de espumas (1918 y 1922), donde encontramos esa poesía de libre
imaginación, al margen de toda lógica. A la misma tendencia corresponden Fábula de
Equis y Zeda (1926-1929) y Poemas adrede (1926-1941)
En la poesía tradicional incluimos Versos humanos (1918-1924), donde incluye
canciones, glosas, sonetos, etc. De 1924 es Vía crucis, hondo ejemplo de inspiración
religiosa. A esta inspiración se deben sus Versos divinos (iniciados en 1938).
En 1941 publicó la Primera antología de sus versos. Gracias a ella conocemos
muestras de otros libros inéditos. En 1989 se publicaron sus Obras completas.
EL CIPRÉS DE SILOS
( De Versos humanos)
Indiferente o cobarde,
la ciudad vuelve la espalda.
No quiere ver en tu espejo
su muralla desdentada.
(De Soria)
DÁMASO ALONSO
Nació en Madrid en 1898. Enseñó Lengua y Literatura en universidades alemanas,
inglesas y norteamericanas, hasta que, en 1933, obtuvo la cátedra de la Universidad de
Valencia. Tras la guerra, pasó a Madrid. En 1978 se le concedió el Premio Cervantes.
Murió en 1990.
En Dámaso Alonso se unen la vocación de crítico e investigador, la de poeta y la de
profesor. Dámaso Alonso se llamó poeta a rachas, pues escribió poco y muy separado en
el tiempo. Su primer libro es Poemas puros, poemillas de la ciudad (1918-1921) está
dentro de la poesía pura. Lo mismo sucede con el siguiente, El viento y el verso (1923-
1924)
En 1944 sorprende con Hijos de la ira, obra fundamental de la posguerra, centro de
lo que se ha llamado poesía desarraigada, es decir, la de aquellos poetas que ven el
mundo como un caos y una angustia. Se trata de una poesía existencial. El libro está
escrito en versículos que recuerdan a la poesía de la Biblia. El lenguaje es desgarrado,
brutal incluso.
También en 1944 publica Oscura noticia, igualmente traspasado por una religiosa
desazón. En 1955 publicó Hombre y Dios, donde mantiene un apasionado diálogo con el
Creador acerca de los eternos temas del vivir humano. De la misma época es Gozos de
la vista y sus Canciones a pito solo.
En 1985 publica Duda y amor sobre el Ser Supremo, última y patética expresión de
sus inquietudes y zozobras existenciales.
INSOMNIO
VICENTE ALEIXANDRE
Nació en Sevilla (1898), pero a los dos años se trasladó su familia a Málaga, la
“ciudad del Paraíso”, donde transcurrió casi toda su niñez. En 1909 pasó a Madrid.
Estudió Derecho y Comercio, pero su escasa salud le hizo dedicarse por completo a la
poesía. En 1977 se le concedió el Premio Nobel. Murió en 1984.
Sus primeros poemas recuerdan a Juan Ramón. El descubrimiento del Surrealismo
marcará buena parte de su producción. Lo más característico de su estilo son las
metáforas visionarias. Se suele servir casi siempre del verso libre o versículo amplio.
Atendiendo a su visión del mundo, se suelen distinguir tres etapas en su poesía:
1. Su visión inicial del hombre es radicalmente pesimista: el hombre es la criatura
más penosa del universo. Su aspiración profunda sería volver a la tierra, fundirse con la
Naturaleza para participar de su unidad. Siete libros corresponden a esta etapa: Ámbito
(1924-1927). Le sigue un libro en prosa poética, Pasión de la tierra, cuyo título indica
el desolado impulso de fusión con la naturaleza. Espadas como labios (1930-1931),
Mundo a solas (1934-1936) o Nacimiento último cierran el ciclo.
En La destrucción o el amor (1932-1933), la pasión amorosa se confunde con una
muerte liberadora.
El libro Sombra del Paraíso (1939-1943) es, sin duda, la obra cumbre de
Aleixandre. Desde el destierro, el poeta recuerda o imagina un prodigioso edén, libre de
sufrimiento y de muerte. Es la visión del cosmos en su gloria, antes de la aparición del
hombre y, con él, del dolor y de la limitación.
2. Entre 1945 y 1953, escribe Historia del corazón. Ahora el hombre es mirado
positivamente. La palabra clave en esta etapa es solidaridad. En esta línea de profunda
humanidad se sitúan En un vasto dominio (1958-1962) y Retratos con nombre (1958-
1964).
3. A los sesenta años sorprende con otro giro y una nueva cima poética: Poemas de
la consumación (1968). El poeta ve la juventud como la única vida. El estilo se ha
hecho más escueto, más denso y vuelven a aparecer elementos ilógicos y surrealistas.
Semejante línea sigue en su última obra, Diálogos del conocimiento (1974), conjunto de
largos poemas filosóficos.
LUIS CERNUDA
Nació en Sevilla en 1902. Vivió en Madrid. Durante la guerra apoyó activamente la
causa republicana y en 1938 se exilió. Murió en Méjico en 1963.
Su centro temático es un doloroso divorcio entre su anhelo de realización personal
(el deseo) y los límites impuestos por el mundo que le rodea (la realidad). Sus temas
predominantes serán por ello, la soledad, la añoranza de un mundo habitable, el ansia de
belleza perfecta y, sobre todo, el amor.
Desde 1936 reunió sus diversos libros bajo el título común La realidad y el deseo.
El volumen fue engrosándose en ediciones sucesivas, hasta alcanzar su versión
definitiva en la de Méjico de 1964.
161
MIGUEL HERNÁNDEZ
https://www.youtube.com/watch?v=QxeFEBSAOUs
ACEITUNEROS
Andaluces de Jaén,
aceituneros altivos,
decidme en el alma: ¿quién,
quién levantó los olivos?
Andaluces de Jaén,
aceituneros altivos,
decidme en el alma: ¿quién
amamantó los olivos?
No la del terrateniente
que os sepultó en la pobreza,
que os pisoteó la frente,
que os redujo la cabeza.
Andaluces de Jaén,
aceituneros altivos,
pregunta mi alma: ¿de quién,
de quién son estos olivos?
Actividad 1: Lee el siguiente texto expositivo sobre Miguel Hernández, así como la
elegía posterior y comenta tus conclusiones.
ELEGÍA
http://www.youtube.com/watch?v=Us4OucjUWAQ
ÍNDICE
1. Panorama general
1.1 Introducción
1.2 La comedia benaventina
1.3 Teatro en verso
1.4 Teatro cómico
1.5 Renovación teatral
1.6 Teatro de la Generación del 27
1.7 El teatro a partir del 39
1.7.1 Introducción
1.7.2 Teatro de posguerra
1.7.3 Teatro en el exilio
En las primeras décadas del siglo XX se produjeron diversos intentos de renovación del
panorama teatral, dominado al final de la centuria anterior por el drama realista y las
obras de corte romántico de José Echegaray.
Como espectáculo, el teatro tiene unos condicionamientos comerciales muy
importantes: predominio de locales privados, cuyos empresarios tienen muy en cuenta
los gustos del público, burgués en su mayoría. Ello tiene consecuencias en lo
ideológico: son escasas las posibilidades de un teatro que vaya más allá de donde llegue
la capacidad autocrítica del público, y en el terreno estético: resistencia ante las
experiencias que se salgan de las formas tradicionales.
Así se explica que el teatro español de este primer tercio se pueda dividir en teatro
que triunfa y teatro que innova.
El teatro que triunfa continúa en parte con los gustos del XIX: teatro posromántico,
alta comedia, costumbrismo... En esta línea se sitúan:
1. La comedia burguesa. Benavente compuso una obra caracterizada por la mesura
en la composición de situaciones y de caracteres, por un minucioso realismo en la
escena y por tratar temas que agradaban a la alta burguesía.
2. Teatro en verso. Aborda temas históricos o fantásticos en metros modernistas.
3. Teatro cómico. Predomina el costumbrismo. Incluye música, canto y baile.
Los primeros intentos de renovación teatral fueron llevados a cabo, entre otros, por
Jacinto Grau, por Miguel de Unamuno, con su teatro desnudo; y por Azorín, con su
pretendido antirrealismo. Y, por supuesto, Valle-Inclán.
Jacinto Benavente (Madrid, 1866-1954) compone una crónica, casi siempre amable, de
las preocupaciones y los prejuicios burgueses, por medio de una suave ironía. Concebía
el teatro como un instrumento de ilusión y de evasión.
Tuvo un comienzo audaz con El nido ajeno (1894), sobre la situación opresiva de la
mujer casada en la sociedad burguesa. Los jóvenes inquietos aplauden la carga crítica,
por su pulcritud y su discreción tan opuestas a la grandilocuencia echegarayesca, pero
tuvo que retirarse del cartel ante la indignación del público. Benavente, entonces, acepta
la situación y atempera las críticas en las siguientes obras: La noche del sábado (1903),
Rosas de otoño (1905)... Critica a las clases altas, pero sin extremos.
Su obra maestra es Los intereses creados (1907), deliciosa farsa que utiliza el
ambiente y los personajes de la Commedia dell’arte, pero que encierra una cínica visión
de los ideales burgueses. Desarrolla el tema del poder del dinero. Leandro y Crispín
fingen ser un gran señor y su criado. Leandro se enamora de Silvia, hija de Polichinela,
el hombre más rico de la ciudad, deseando ascender socialmente. Finalmente, el padre
accede al matrimonio para que no se sepa que él también fue pícaro.
Intentó también el drama rural en La Malquerida (1913), sobre una devastadora
pasión incestuosa.
En la segunda década, la fama de Benavente se ha consolidado. En 1912, entra en la
Real Academia Española. En 1922 se le concede el Premio Nobel.
La finalidad básica del teatro cómico fue el entretenimiento del público. Podían tener
música o no. Entre los subgéneros del teatro cómico podemos citar:
1. Obras con música.
Opereta: pieza que presenta asuntos frívolos y que concede gran importancia a los
aspectos visuales y a la música
Revista: serie de espectáculos que hacen hincapié en los elementos eróticos y
vistosos ambientes cosmopolitas.
Vodevil: del francés voix de ville, es una comedia frívola, ligera y picante, que posee
una intriga muy compleja en la que destacan las agudezas del autor.
como Juan Ramón, artistas jóvenes (Dalí, Buñuel) y poetas con los que constituirá
grupo poético. Durante el curso 1929-1930 marcha a Nueva York como becario,
experiencia que lo marcará profundamente. De regreso a España, funda en 1932, La
Barraca, grupo teatral universitario con el que recorre los pueblos de España
representando obras clásicas. En 1933 hace un viaje a Buenos Aires, donde sus dramas
obtienen un gran éxito. En España también tiene gran éxito su poesía y su teatro, pero
también se granjea enemigos por su acercamiento al pueblo, lo que fue causa de su
asesinato en 1936.
Obra dramática
Federico García Lorca creó un verdadero teatro poético. En él, además de la
palabra, cobran importancia otros componentes, como la música, la danza y la
escenografía, configurando, así, un espectáculo total.
La temática profunda de las obras teatrales asombra por su unidad, y no es distinta
de la que vertebra su poesía. Expresa el choque entre la realidad y el deseo; el elemento
neurálgico es la frustración.
Podemos dividir su evolución en tres etapas: los tanteos de los años veinte, la
experiencia vanguardista de los años treinta, y la etapa de plenitud de los últimos años.
Comienza con un ensayo juvenil que resultó un fracaso, El maleficio de la
mariposa (1920), obra de raíz simbolista. El tema ya es el amor imposible, la
frustración.
Su primer éxito es Mariana Pineda (1925), sobre la heroína que murió ajusticiada
en Granada en 1831 por haber bordado la bandera liberal. Formalmente, es un drama en
verso.
En 1926 presenta ya una obra maestra, La zapatera prodigiosa, subtitulada “farsa
violenta”. Trata de una joven casada con un zapatero viejo. En el fondo se esconde la
lucha entre la realidad y la fantasía, entendiendo por fantasía todo lo que es irrealizable.
Lorca recurre al tópico del matrimonio desigual. La protagonista re rebela contra la
realidad, no logra su plenitud como mujer.
Le sigue una “aleluya erótica”, con aires de farsa, que presenta otro caso de amor
trágico, Amor de don Perlimplín con Belisa en su jardín (1928). Y la farsa para guiñol,
Retablillo de don Cristóbal (1931).
Amor de don Perlimplín con Belisa en su jardín es una bellísima fábula de amor.
Recoge el tema del viejo impotente y la ardorosa joven insatisfecha, tratado desde
antiguo como en El viejo celoso de Cervantes, A pesar de reconocerse engañado, el
viejo es feliz porque ha descubierto la vida y los sentimientos. Perlimplín se hace pasar
por un héroe romántico, amante para gozar del amor imposible de su esposa. Bajo el
disfraz del joven de la capa roja consigue ser amado por su mujer. Logrado este anhelo,
mata al rival que él mismo encarna para que el ensueño de Belisa, el ansia de amor
deseado y no alcanzado, se mantenga eternamente vivo.
Tras el éxito del libro de poemas Romancero gitano, Lorca sufre una profunda crisis
vital y estética. Todo ello cuajará en las llamadas comedias imposibles. Con esta
denominación se reúnen tres comedias –Así que pasen cinco años, El público y
Comedia sin título- en las que se observa la influencia del surrealismo. La puesta en
escena de estas obras ha tenido que esperar hasta fechas recientes para poder mostrar
todo su valor y belleza.
Así que pasen cinco años (1931) presenta un complejo simbolismo que ha originado
diversas interpretaciones. Se centra en el drama existencial del Joven que lleva
esperando cinco años para casarse con su novia, durante los cuales no atiende al amor
de una Mecanógrafa. Expirado el plazo, la Novia prefiere al Jugador de rugby, y el
169
Joven busca a la Mecanógrafa, quien le impone otros cinco años de espera. La idea de la
muerte y la frustración amorosa son los temas de esta obra.
El público (1933) dramatiza el proceso mental del Director de escena, que ha
intentado reprimir su homosexualidad. El eje temático es la búsqueda de la verdad. La
obra utiliza el recurso del teatro dentro del teatro. Tiene como personaje central al
Director. Tras una representación de Romeo y Julieta, tres hombres vestidos de frac y
con barbas oscuras vienen a proponerle la necesidad de llevar la verdad a los escenarios.
Pero el público no está dispuesto a enfrentarse con la verdad y en la nueva
representación de Romeo y Julieta adaptada, mata a los actores y se frustra la liberación
del teatro. La fuerza oculta que el teatro debe mostrar para redimirse es el amor por
encima de la distinción de sexos. Hay una defensa decidida de la homosexualidad.
Tras estos pasos, Lorca da un giro decisivo hacia un camino propio, cuya identidad
radica en hermanar rigor estético y alcance popular. Es su etapa de plenitud. A esta
época pertenecen dos tragedias y dos dramas. En casi todas ellas la mujer ocupa un
lugar central. Las mujeres se presentan como criaturas marginadas o marginales y
representan a la vez la inocencia y la pasión elemental.
Bodas de sangre (1933) se basa en un hecho real que Lorca leyó en el periódico,
acaecido en julio de 1928, que se conoce como el crimen de Níjar, en que una novia
escapa con su amante el mismo día de la boda. Se trata de una pasión que desborda
barreras sociales y morales, pero que desembocará en la muerte. El estreno de la obra
fue un éxito clamoroso.
Desde la primera escena se hace palpable el clima de violencia y fatalismo. El
simbolismo lorquiano luce en todo su esplendor. El hombre es equiparado a la figura
trágica del toro, destinado al sacrificio.
La Novia huye con Leonardo el mismo día de la boda y deja al Novio; los dos
rivales luchan y mueren.
La obra está escrita en prosa y en verso, modalidades que se corresponden con el
mundo cotidiano y el mítico.
comparaciones.
Divinas palabras (1920) cierra este ciclo mítico. Es un violento drama en el que las
deformidades morales y sociales se corresponden con un lenguaje desgarrado y brutal.
La acción se construye en torno a Laureaniño el Idiota, un enano hidrocéfalo, cuyos
familiares lo exponen en las ferias para ganar dinero. Cuando Mari-Gaila deja a
Laureaniño para encontrarse con su amante Séptimo Miau, un grupo de gente
emborracha al enano hasta ocasionarle la muerte. El consejo de familia de los Gailos
decide abandonar al muerto a la puerta de Marica del Reino. De madrugada los cerdos
se comen parte del cadáver. Mientras se produce el entierro, Mari Gaila vuelve con
Miau y son descubiertos fornicando, por lo que los vecinos la llevan desnuda en un
carro de heno. Pedro Gailo, viendo su deshonra puesta en público, se lanza desde el
campanario, pero no muere y acoge a su mujer y lee un texto del evangelio en latín
calmando al pueblo.
Es difícil encontrar en el teatro europeo una obra más desagradable, negra y
atrevida. La España más sombría y desazonante aflora en cada escena.
normas clásicas.
Valle. La hija del capitán es una crítica de Madrid y de la vida nacional, centrada en el
ejército español.
175
PRUEBA 2 (2)
Los textos de la vida cotidiana son aquellos que usamos habitualmente en nuestra
vida, desde el correo electrónico o el WhatsApp a una instancia o reclamación, pasando
por un currículum vitae para solicitar un trabajo, unido a una carta de presentación,
personal o una instancia.
Buscamos en Internet este tipo de escritos y realizamos algunos ejemplos.
LECTURA 1 (1)
-Oraciones anteriores.
-División de palabras de las oraciones analizadas.
Estos autores arrancan de la crisis española que culmina en el 98, crisis que asumen
como problematización ética del mundo, del yo y de la patria. Sus presupuestos
regeneracionistas e ideológicos conducen a conclusiones idealistas.
de indagación y recreación de valores literarios son Tomás Rueda, Don Juan y Doña
Inés. Destacamos además libros de artículos publicados en periódicos, como Castilla,
Lecturas españolas, Clásicos y modernos, Al margen de los clásicos.
Gregorio Marañón, médico y humanista, dio valor científico a sus estudios con
un estilo espontáneo. Tuvo también ensayos literarios e históricos. Sobresalen Tres
ensayos sobre la vida sexual, El Conde Duque de Olivares o la pasión de mandar,
Ensayo sobre el origen de la leyenda de Antonio Pérez, Ensayo biológico sobre Enrique
IV y su tiempo. De esta misma corriente científico-ensayística destacan López Ibor y
Pedro Laín Entralgo.
- Análisis y reconstrucción textual: Cantar del Mio Cid, Flor nueva de romances
viejos, El romancero español, La Primera Crónica General.
a) En la investigación.
Los lexicógrafos Joan Corominas, Vicente García de Diego; y los arabistas
Julián Ribera y Emilio García Gómez; T. Navarro Tomás con sus trabajos sobre
métrica y pronunciación; y Rafael Lapesa, con sus estudios de morfosintaxis histórica
y crítica literaria.
Jorge Guillén es autor de una obra ensayística menos extensa, pero muy
influyente. Además de un extenso prólogo a una edición incompleta de las obras de
Lorca (Federico en persona), fue autor de un volumen de ensayos sobre varios períodos
literarios, desde Berceo hasta sus coetáneos titulado Lenguaje y poesía. En ellos se
combina la sensibilidad literaria y una nutrida erudición, con una alta habilidad
expositiva.
Son muchos los escritores de menor edad que han publicado ensayos a partir del
final de la guerra civil. La dificultad de análisis de esta copiosa producción, debido a la
cercanía cronológica, nos inclina a ofrecer una mención sucinta de unos cuantos
representantes. Los principales ensayistas en castellano de la segunda mitad del siglo,
especialmente hispanoamericanos, han alcanzado fama internacional con una
producción de gran altura sobre temas diversos, entre los que predominan los estéticos y
literarios. Nos referimos entre otros a Jorge Luis Borges (Historia de la eternidad),
Alfonso Reyes (Tragedia de Goethe) y Octavio Paz (Puertas al campo)
Dentro del ámbito español nos ceñiremos a dos notables representantes de dos
tipos de crítica: la académica y la más puramente ensayística. En la última orientación
citada merece destacarse la obra ensayística de Francisco Ayala: El escritor en la
sociedad de masas, Ensayos, teoría y crítica literaria. De la primera orientación, la
voluminosa obra del profesor Francisco Rico: El pequeño mundo del hombre, Alfonso
el Sabio y La General Estoria, Textos y contextos.
LA HISTORIOGRAFÍA
En las últimas décadas del siglo XX el ensayo es el género preferido por los
intelectuales para plasmar sus reflexiones, opiniones, ideas...
En la década de los cincuenta aparecen en el ámbito universitario figuras como la de
Antonio Tovar, Pedro Laín Entralgo o José Luis Aranguren que plantean cuestiones
poco gratas a los dirigentes del régimen.
En los años sesenta y setenta los ensayos se multiplican. Se publican autores
extranjeros como el francés Herbert Marcuse o de Erich Fromm. Del mismo modo,
revistas como Índice, Cuadernos para el diálogo o Cambio 16 impulsan ideas
renovadoras también en lo político.
Ya en la etapa democrática los límites del ensayo se extienden invadiendo todos los
campos culturales.
Entre los autores más reconocidos destacamos
Pedro Laín Entralgo (1908-2001). En su obra tiene un tema principal la cultura
española: España como problema (1957), La espera y la esperanza (1957).
José Luis López Aranguren (1909-1996). Se preocupa por los problemas éticos y
los vínculos entre ética y sociedad en Ética (1958), Moral y sociedad (1966).
Se podrían citar otros muchos ensayistas como María Zambrano (El sueño creador,
1965), Francisco Ayala (El escritor en la sociedad de masas, 1055), Carmen Martín
Gaite ( Los usos amorosos de la posguerra española, 1987), Rafael Sánchez Ferlosio
(Campo de Marte, 1986). Luis Rojas Marcos (Las semillas de la violencia, 1995), Álex
Grijelmo ( La seducción delas palabras, 2000).
182
Proyecto: la hipertextualidad.
2.1 El papel de la imitación en la construcción del texto literario.
2.2 Estudio de la hipertextualidad en autores y/o obras literarias de distintas épocas.
Objetivo: Analizar el proceso de construcción literaria y el concepto de
originalidad.
Proyecto: Redactar un trabajo de investigación por equipos.
EL TEXTO (2)
1.1 EL PÁRRAFO
Un texto extenso puede constar de subunidades, que suelen ser distintas según el
tipo de texto de que se trate. Así un texto teatral se subdivide en actos, cuadros y
escenas. Una conversación se subdivide en réplicas. Muchos libros de subdividen en
capítulos. Las leyes, en títulos y artículos, etc.
184
Actividad
He aquí un fragmento del texto de José Ortega y Gasset, del libro titulado La
rebelión de las masas (1930). Comenta la organización del mismo en párrafos: sus
temas, etc.
A simple vista, se observa que este fragmento del texto mencionado consta de tres
párrafos. Las oraciones que integran cada uno de ellos contribuyen a producir el
significado de cada párrafo, relacionado con el de los otros dos.
El primero desarrolla la idea que enuncia al principio: “Europa se ha quedado sin
moral.” Sus oraciones se combinan para hacer firme la aserción.
En el segundo, más breve, se asegura que los europeos se sienten satisfechos con la
falta de moral que se le atribuye en el primer párrafo.
El tercero da un paso adelante en la argumentación. La amoralidad del hombre
moderno se manifiesta en que todos creen tener derechos y no obligaciones.
Los tres, pues, se refieren al hombre-masa moderno y a su manera de ser.
La coherencia es la propiedad, inherente al texto, que hace que pueda ser percibido
como una unidad comunicativa. Si no hay coherencia, no hay texto. Trabaja desde el
Significado Global (tema) para organizar el Plan Global y su posterior articulación en la
Estructura Superficial.
Se ocupa de los siguientes aspectos:
185
Actividad 1: Leer cada uno de los textos siguientes y ver si tienen coherencia: un
tema, lógica semántica y progresión del tema, intención comunicativa.
Los periódicos se han convertido hoy en envoltorios de mucho más que un diario
clásico: suplementos dominicales, anexos de ocio, coleccionables. Todo un mundo de
publicaciones que se venden juntas, al amparo de una cabecera común que les da
prestigio y credibilidad.
Sin embargo no todo es igual. Esos coleccionables a veces se realizan y se
imprimen en lugares remotos, por empresas especializadas que nada tienen que ver con
el diario que luego los distribuye, y su contenido editorial no es siempre muy
equiparable al del periódico. Es comprensible: desde luego, todo el mundo se da cuenta
de que un fascículo es otra cosa.
Víctor de la Serna. El Mundo.
TEXTO
Iván y su padre están pescando en el lago Baikal, un hermoso lugar situado en
Siberia, una fría y lejana región. El lago Baikal es el más profundo del mundo, y en él se
encuentran centenares de especies de plantas y de animales que no se conocen en otros
lugares del planeta.
2.3 IMPLICACIONES
Son informaciones adicionales que contienen los enunciados.
Por ejemplo, si digo El marido de Susana llegó ayer implica que Susana está
casada.
En sentido estricto decimos que la proposición P implica la proposición Q cuando,
si P es verdadera, Q es también verdadera necesariamente.
Para la gramática del texto, implicación se usa para indicar que un hecho entraña
forzosamente otro, o que un concepto incluye otro.
2.4 PRESUPOSICIONES
Son proposiciones implícitas, es decir, aquellas ideas que el emisor supone que el
receptor conoce. Por ejemplo, si digo al tratar sobre la oración que está formada por
sintagmas, presupongo que ya conocéis lo que es un sintagma y sus tipos.
El sentido estricto de presuposición es que una proposición P presupone otra
proposición Q, cuando si Q es falsa, no tiene sentido P (no es ni verdadera ni falsa).
3. LA COHESIÓN TEXTUAL
Mecanismos de cohesión:
- Repeticiones.
- Sustitutos.
- Referentes.
- Deixis.
- Elipsis.
- Relaciones semánticas entre lexemas.
- Marcadores y conectores.
La cohesión textual depende de las relaciones gramaticales que se establecen entre
los elementos de un texto.
Una vez elaborado el Plan Global, es necesario plasmar ese Plan Global en la
Estructura Superficial más adecuada. En el texto aparecen elementos que permiten
entender el texto como un conjunto, darle amenidad, etc. Son los llamados mecanismos
de cohesión.
El recurso más sencillo para unir dos oraciones de un texto es que la segunda repita
alguna palabra se la primera o que en ella aparezca una palabra con significado igual o
parecido:
Por el valle, discurre un río. El río tiene poco caudal.
...Ahora Arnie elige sus guiones, consiguiendo que el nuevo "terminator" sea un
buen chico.
...se cumplen las diferentes funciones de la lengua. Ello implica que la educación
lingüística ha de incidir en diferentes ámbitos.
f) Sinonimia referencial:
2 Conocimiento del mundo. La relación que se establece entre los elementos léxicos
está basada en el conocimiento de la realidad que poseen los hablantes.
Has sido injusto. La conducta de Pablo no era censurable. Obró de ese modo por un
impulso generoso. No le movió interés personal alguno.
3.2.3 REFERENCIA
Anáfora: mecanismo mediante el cual un elemento del discurso remite a otro que
ha aparecido antes. Su opuesto es la catáfora.
Pedro y Juan iban paseando. Este tropezó y cayó al suelo.
Vio que algunos aún no habían llegado: Pedro, Rosa, Luisa.
La deixis
Es un mecanismo de señalamiento personal, espacial o temporal: determinantes,
pronombre y adverbios.
...fue allí como todas las demás, porque esa mañana vio allí a la Muerte y porque
la Muerte le hizo un gesto.
Acaban de traer el traje de la tintorería.
...las puertas de esos graneros estaban cerradas con llave para que los niños no
entráramos, pero yo entraba y salía fácilmente volviendo a dejarlas cerradas.
3. 2 4 LA SUSTITUCIÓN Y ELIPSIS
1. Conectores semánticos. Vinculan una parte del texto con otra anterior. Se
suelen dividir en tres tipos:
a. Aditivos. Unen: además, aparte, incluso, es más...
b. Consecutivos. Por tanto, por consiguiente, por ende, en consecuencia,
entonces, de ahí, pues, así...
c. Contraargumentativos. En cambio, por el contrario, sin embargo, antes
bien, no obstante, con todo, empero...
3. Reformuladores. Presentan una parte del texto como una expresión más
adecuada de lo que se quería decir en otra parte anterior. Pueden ser explicativos,
rectificativos, distanciadores o recapitulativos.
a. Explicativos. O sea, es decir, esto es, a saber, en otras palabras, dicho de
otro modo...
b. Rectificativos. Mejor dicho, mejor aún, más bien...
c. Distanciadores. En cualquier caso, en todo caso, de todos modos, de
cualquier modo...
d. Recapitulativos. En conclusión, en suma, en resumen, en síntesis, en
definitiva, total, en fin...
5. CORRECCIÓN
192
No solo se trata atender a la ortografía y la dicción, sino el formato propio del tipo
de texto, el registro adecuado, relacionado con la adecuación, etc.
Los textos pueden ser orales o escritos. Entre unos y otros existen diferencias
relacionadas con su constitución, situación comunicativa, grado de planificación,
permanencia, redundancia.
Por el objetivo comunicativo que se pretende, los textos suelen dividirse en
- Textos informativos: sirven para dar noticia de algún hecho: periodísticos,
científicos, humanísticos...
-Textos preceptivos: ordenan o determinan algo: jurídicos, administrativos,...
-Textos persuasivos: inducen con argumentos a creer o hacer algo:
propagandísticos, publicitarios, ensayos...
-Textos estéticos: crean un mundo de ficción: literarios.
EXPOSICIÓN Y ARGUMENTACIÓN
Al concluir la guerra civil española, yo tenía trece años, y toda la década siguiente
-durante la cual pasé de niña a mujer, empecé a "alternar" con personas del sexo
contrario y terminé mi carrera de Letras en Salamanca- estuvo marcada por una
condena del despilfarro. La propaganda oficial, encargada de hacer acatar las normas
de conducta que al Gobierno y a la Iglesia le parecían convenientes para sacar
adelante aquel período de convalecencia; insistía en los peligros de entregarse a
cualquier exceso o derroche. Y desde los púlpitos, la prensa, la radio y las aulas de la
Sección Femenina se predicaba la moderación (...)
Las consignas que durante la guerra habían instado al ciudadano de la retaguardia
a apretarse el cinturón se materializaron ahora en dos palabras claves "restricción y
racionamiento".
Ningún niño de aquel tiempo podrá olvidar el cariz de milagro que adquiría una
merienda de pan y chocolate ni el gesto meticuloso y grave de sus padres cuando
cortaban los cupones de la cartilla del racionamiento, como tampoco los frecuentes
apagones que les obligaban a hacer sus deberes del Instituto a la luz de una vela o
aquella urgencia de las madres por llenar bañeras o barreños cuando se anunciaba un
inminente corte en el suministro de agua. Aun cuando estas restricciones de agua, luz,
carbón y alimentos fueran desapareciendo poco a poco, dejaron unas secuelas muy
hondas de encogimiento y tacañería, que los sectores de la moral imperante supieron
aprovechar para sus fines. Las palabras restricción y racionamiento sufrieron un
desplazamiento semántico, pasando a abonar otros campos, como el de la relación
entre hombres y mujeres, donde también constituía una amenaza terrible dar alas al
derroche. Restringir y racionar siguieron siendo vocablos clave admoniciones
agazapadas en la trastienda de todas las conductas.
A la sombra de esta doctrina restrictiva, fuimos creciendo los niños y niñas nacidos
antes de la guerra civil, aprendiendo de mejor o peor gana a racionar las energías que
pudieran desembocar en la consecución de un placer inmediato. Despilfarrar aquellas
energías juveniles, a cuya naturaleza no se podía aludir tampoco más que mediante
eufemismos, se consideraba el gasto más pernicioso de todos, el más condenado. Eran
energías que había que reservar para apuntalar la familia, institución gravemente
cuarteada tras las turbulencias de la contienda reciente, pilar fundamental sobre el que
había de asentarse ahora el nuevo Estado español.
194
LA ARGUMENTACIÓN
1. DEFINICIÓN
2. LO IMPLÍCITO
En la argumentación concurren todas las dimensiones de la pragmática. Por otra
parte, toda argumentación está asentada sobre lo implícito y en la captación del sentido
son imprescindibles las inferencias relevantes.
Los supuestos
El átomo argumentativo ha de apoyarse de manera necesaria en principios o
conocimientos implícitos compartidos por el emisor y el receptor: los supuestos.
“Son los supuestos, esas hipótesis compartidas, los que convierten en aceptable o no
un razonamiento. La concatenación argumentativa de la recurrencia Ha aprobado dos
asignaturas. Ha tenido suerte no sería válida en primero de Primaria pero sí tendría
aceptación si el alumno referido estudiara, por ejemplo, primero de Teleco” (Gutiérrez
Ordóñez, 2002:62).
En muchas ocasiones apoyamos nuestras argumentaciones en lugares comunes, en
principios de amplia base de aceptación, Son los topoi aristotélicos.
Las contradicciones con los topoi (el turrón más caro del mundo, 1880) obedecen al
carácter contextual de la argumentación pragmática. En este caso el destinatario.
195
de la danza moderna; salvo el ballet clásico, todos los pueblos trabajan en sus danzas,
y en cada etapa del desarrollo con la línea".
(Kandinsky: Punto y línea sobre el plano, 1983)
La idea inicial: El bailarín traza líneas de expresión muy nítidas" origina una
explicación. Tras la explicación cierra con una conclusión semejante a la afirmación
inicial: "todos los pueblos trabajan... con la línea.".
- Esquema paralelo: No hay subordinación en las ideas, sino que todas tienen igual
importancia.
4. LOS ARGUMENTOS
Falacias:
Los falsos argumentos son, en realidad, modos de persuasión ajenos a la lógica
argumental. Los más utilizados son los siguientes:
Apelar a los sentimientos del destinatario. Este procedimiento persuasivo va desde
el halago hasta la compasión pasando por la amenaza. Por ejemplo: Como ustedes son
personas inteligentes y muy preparadas científicamente, sabrán comprender la
importancia que tiene la teoría que defiendo.
Apelar a la importancia, al prestigio o a la autoridad del emisor. Este tipo de
argumentación trata de captar la adhesión incondicional del destinatario o del auditorio
no por la tesis en sí, sino por la persona que la defiende. Se utilizan, por ejemplo,
cuando el argumentador emplea falsos argumentos como este: Ustedes saben que yo
nunca defendería nada que no fuera cierto...
5. Marcadores textuales
Ej.: Tiene diez años puede constituir base argumentativa para cualquiera de las
conclusiones contrarias: Puede entenderlo /No puede entenderlo.
La presencia de aún en el enunciado orienta la argumentación en un solo sentido: la
segunda conclusión: Aún tiene diez años. No puede entenderlo. La presencia del
operador ya lo orienta al contrario.
2. Conectores argumentativos. Son de naturaleza transfrástica, combinatoria.
Unen o enlazan dos o más enunciados.
Conectores formales: pero, pues, conque, luego... Conjunciones puras.
Conectores semánticos: en consecuencia, en conclusión, concluyendo, no obstante...
199
LA INTERTEXTUALIDAD
Transtextualidad o rescritura
(Resumen del libro de Amparo Medina-Bocos Montarelo (2001): Hacer literatura
con la literatura, Madrid, Akal.)
y la Adjunta al Parnaso:
Ítem, se advierte que no ha de ser tenido por ladrón el poeta que hurtare algún
verso y le encajare entre los suyos, como no sea todo el concepto y toda la copla
entera, que en tal caso tan ladrón es como Caco.
“Cualquier texto, por su condición de tal, puede ser objeto de un nuevo texto que
lo incluya, lo imite, lo parodie, lo evoque, lo comente... Nadie escribe desde la nada,
sino desde lo que ha leído” (Medina-Bocos, p. 10).
“Nadie escribe desde la nada. Si las propias lecturas determinan la escritura
individual –el acto de escribir es inseparable de la experiencia de haber leído otros
textos-, lo que habitualmente se llama tradición, lo que nos ha sido dado, actúa siempre
como una difusa influencia a la que nadie puede escapar. La literatura o es tradición o
no es nada, tal como afirmó, de nuevo, Borges.” (p. 12)
Umberto Eco recoge este diálogo entre los protagonistas de El nombre de la rosa:
-¿Cómo? ¿Para saber qué dice un libro debéis leer otros?
-A veces es así. Los libros suelen hablar de otros libros.
[...]
Hasta entonces –continúa diciendo el personaje narrador- había creído que todo
libro hablaba de las cosas, humanas o divinas, que están fuera de los libros. De pronto
comprendí que a menudo los libros hablan de libros, o sea que es casi como si hablaran
entre sí. A la luz de esta reflexión, la biblioteca me pareció aún más inquietante. Así
201
mezquita, una casa y por el decreto de Dios Todopoderoso, una pandilla de ladrones
atravesó la mezquita y se metió en la casa, y las personas que dormían se despertaron
con el estruendo de los ladrones y pidieron socorro. Los vecinos también gritaron, hasta
que el capitán de los serenos de aquel distrito acudió con sus hombres y los bandoleros
huyeron por la azotea. El capitán hizo registrar la mezquita y en ella dieron con el
hombre de El Cairo, y le menudearon tales azotes con varas de bambú que estuvo cerca
de la muerte. A los dos días recobró el sentido en la cárcel. El capitán lo mandó buscar y
le dijo: "¿Quién eres y cuál es tu patria?". El otro declaró: "Soy de la ciudad famosa de
El Cairo y mi nombre es Mohamed el Magrebí". El capitán le preguntó: "¿Qué te trajo a
Persia?". El otro optó por la verdad y le dijo: "Un hombre me ordenó en un sueño que
viniera a Isfaján, porque ahí estaba mi fortuna. Ya estoy en Isfaján y veo que esa fortuna
que prometió deben ser los azotes que tan generosamente me diste".
Ante semejantes palabras, el capitán se rió hasta descubrir las muelas del juicio y
acabó por decirle: "Hombre desatinado y crédulo, tres veces he soñado con una casa en
la ciudad de El Cairo en cuyo fondo hay un jardín, y en el jardín un reloj de sol y
después del reloj de sol una higuera y luego de la higuera una fuente, y bajo la fuente un
tesoro. No he dado el menor crédito a esa mentira. Tú, sin embargo, engendro de una
mula con un demonio, has ido errando de ciudad en ciudad, bajo la sola fe de tu sueño.
Que no te vuelva a ver en Isfaján. Toma estas monedas y vete".
El hombre las tomó y regresó a la patria. Debajo de la fuente de su jardín (que era la
del sueño del capitán), desenterró el tesoro. Así Dios le dio bendición y lo recompensó y
exaltó. Dios es el Generoso, el Oculto.”
Jorge Luis Borges, Obras completas, I, Barcelona, Círculo de Lectores, 1995, págs.
370-371.
El juez le preguntó:
-¿Qué te trajo a Persia?
El hombre optó por la verdad y le dijo:
-Un hombre me ordenó en un sueño que viniera a Isfaján, porque ahí estaba mi
fortuna. Ya estoy en Isfaján y veo que la fortuna que me prometió ha de ser esta cárcel.
El juez echó a reír.
-Hombre desatinado -le dijo-, tres veces he soñado con una casa en la ciudad de El
Cairo, en cuyo fondo hay un jardín y en el jardín, un reloj de sol y después del reloj de
sol, una higuera, y bajo la higuera un tesoro. No he dado el menor crédito a esa mentira.
Tú, sin embargo, has errado de ciudad en ciudad, bajo la sola fe de tu sueño. Que no
vuelva a verte en Isfaján. Toma estas monedas y vete.
El hombre las tomó y regresó a la patria. Debajo de la higuera de su casa (que era la
del sueño del juez) desenterró el tesoro. Así Dios le dio bendición y lo recompensó y
exaltó. Dios es el Generoso, el Oculto.
GUSTAV WEIL, Geschichte des Abbassidenchalifats in Aegypten (1860-62)
¿Qué me decís de este sueño del rey y el diálogo de Unamuno con Abel Sánchez en
Niebla?
EL SUENO DEL REY
LEWIS CARROLL (Charles Lutwidge Dodgson), escritor matemático inglés.
Nacido en Daresbury, en 1832; muerto en Gui1dford, en 1898. Autor de: Alice's
Adventures in Wonderland (1865); Through the Looking-Glass (1871); Phantasmagoria
(1876); Curiosa Mathematica (1888-93); Sylvie and Bruno (1889); Symbolic Logic
(1896).
XXXIII
¿Recuerdas la amapola
que calcinó el verano,
la amapola marchita,
negro crespón del campo?...
INVESTIGACIÓN (4)
PRUEBA 3 (2)
205
SEMÁNTICA (2)
1. CONCEPTO DE SEMÁNTICA
La semántica tiene nombre oficial desde 1833, fecha en la que Bréal, a partir de un
adjetivo griego (σημαιον) usado por Aristóteles con el valor de ‘señalístico’, empleó el
término semántique para referirse a las “leyes intelectuales del lenguaje”. Con este
término Bréal denomina “la ciencia de los significados opuesta a la Fonética o ciencia
de los sonidos hablados”.
Según Saussure todo signo tiene significante y significado, del primer componente
se ocupan la Fonología y la Morfología, del segundo trata la Semántica.
CONOCIMIENTOS PREVIOS
Recordemos lo que ya has estudiado:
¿De qué partes consta el signo lingüístico?
¿Cómo definirías el significado?
¿Qué diferencia estableces entre significado y referente?
Si afirmo: El significado es abstracto, conceptual, el referente concreto, existencia,
¿estarías de acuerdo con ello?
¿Explica lo que es significado denotativo y connotativo?
Ratifica o critica esta afirmación: “Una semántica desarrollada es el estudio de
todos los aspectos de la cultura vistos como significados”.
DENOTACIÓN Y CONNOTACIÓN
El término denotación ha sido empleado con diversos valores metalingüísticos. Por
ejemplo, denotación = referente o denotata; denotación = designación en general;
denotación = contenido denotativo opuesto a connotación. A este atendemos.
En la lingüística, la dicotomía denotación/connotación equivale al contenido
conceptual (significado denotativo) frente al contenido emotivo o asociativo
(significado connotativo). A la vez equivaldría la denotación a la significación primaria
y connotación a la significación secundaria.
La denotación se refiere al significado estable y con un vasto asiento social, es
decir, al significado objetivo de un término valedero para todos los hablantes. La
connotación se refiere al significado inestable y, a veces individual, en otras palabras, al
conjunto de valores según los hablantes.
Así, rojo. Denota primer color del espectro solar.
Connota sangre, violencia, pasión, peligro, amor, persona radical,
revolucionario, etc.
Análisis sémico
206
INTRODUCCIÓN
Las relaciones de significado son de dos tipos fundamentalmente: sintagmáticas y
paradigmáticas.
Hasta una época reciente se han estudiado las relaciones léxicas enmarcándolas en
dos agrupaciones:
1. Relaciones entre la forma y el significado: sinonimia, polisemia.
2. Relaciones entre los significados: hiperonimia, hiponimia, antonimia.
MONOSEMIA Y POLISEMIA
Para evitar la multiplicidad de términos que habría de tener cada idioma, la
economía del sistema se vale del papel desempeñado por la complementación. Un
significado no se define solo por sus rasgos positivos, sino también en términos
negativos. En realidad, el sistema dispone de un número menor de expresiones que de
contenidos: cuando una expresión recubre varios contenidos hablamos de
polisemia. La polisemia tiene un papel considerable en la economía lingüística
permitiendo la multiplicación del número de significados sin aumentar el de
significantes.
Una palabra es monosémica cuando a un significante le corresponde un solo
significado.
La polisemia aparece, por lo tanto, cuando a un significante le corresponden varios
significados:
OPERACIÓN: quirúrgica, de guerra, una suma, etc.
En la polisemia la palabra tiene un mismo origen, lo que cambia es el significado.
FLAMMA
Llama CLAMARE
voz quechua
He apuntado al blanco
Hay identidad total cuando dos palabras son conmutables entre sí en todos los
contextos (mas, pero). La sinonimia perfecta es difícil porque la tendencia de la lengua a
la economía hace desaparecer uno de ellos (salir, exir, incluso pero y mas).
Metáfora
Tradicionalmente se ha sostenido que la metáfora es una comparación abreviada o
una comparación elidida y que su estructura comparativa se basa en analogía o
similitud.
En los procesos metafóricos hay una desestimación de unos rasgos o semas y la
actualización de otros que sirven de base de comparación. Se destruye la relación entre
el término metafórico y el objeto que designa habitualmente.
El contexto puede intervenir para trastocar la jerarquía normal de las unidades de
contenido y convertir en contenido denotativo algún contenido implícito.
Ej.: Eres la sal de mi vida, por metáfora quiere decir ‘eres mi alegría’.
Va a llover que significa ‘coge el paraguas’.
Es muy listo, que, por ironía, significa ‘es muy tonto’.
La metonimia
La metonimia da cuenta de la transferencia de una palabra en la designación de otra
cosa, en virtud de una relación de contigüidad.
La contigüidad puede ser espacial (pergamino < piel de Pérgamo), temporal
(siesta < latín hora sexta (mediodía), causal (estilo > lat. Stilus = instrumento para
escribir).
Algunas preguntas:
1. ¿De qué partes consta un comentario literario?
2. ¿Y un comentario lingüístico?
3. Hacer un comentario literario de cada uno de los textos.
La biblioteca tenía tres puertas que daban sobre una terraza de mármol. En el jardín
las fuentes repetían el comentario voluptuoso que parecen hacer a todo pensamiento de
amor, sus voces eternas y juveniles. Al inclinarme sobre la balaustrada, yo sentí que el
hálito de la primavera me subía al rostro. Aquel viejo jardín de mirtos y de laureles
mostrábase bajo el sol poniente lleno de gracia gentílica. En el fondo, caminando por los
tortuosos senderos de un laberinto, las cinco hermanas se aparecían con las faldas llenas
de rosas, como en una fábula antigua. A lo lejos, surcado por numerosas velas latinas
que parecían de ámbar, extendíase el Mar Tirreno. Sobre la playa de dorada arena
morían mansas las olas, y el son de los caracoles con que anunciaban los pescadores su
arribada a la playa, y el ronco canto del mar, parecían acordarse con la fragancia de
aquel jardín antiguo donde las cinco hermanas se contaban sus sueños juveniles a la
sombra de los rosáceos laureles.
Se habían sentado en un gran banco de piedra a componer sus ramos. Sobre el
hombro de María Rosario estaba posada una paloma, y en aquel cándido suceso yo hallé
la gracia y el misterio de una alegoría. Tocaban a fiesta unas campanas de aldea, y la
iglesia se perfilaba a lo lejos en lo alto de una colina verde, rodeada de cipreses. Salía la
procesión, que anduvo alrededor de la iglesia, y distinguíanse las imágenes en sus
andas, con los mantos bordados que brillaban al sol, y los rojos pendones parroquiales
que iban delante, flameando victoriosos como triunfos litúrgicos. Las cinco hermanas se
arrodillaron sobre la yerba, y juntaron las manos llenas de rosas.
Los mirlos cantaban en las ramas, y sus cantos se respondían encadenándose en un
ritmo remoto como las olas del mar. Las cinco hermanas habían vuelto a sentarse. Tejían
sus ramos en silencio, y entre la púrpura de las rosas revoloteaban como albas palomas
sus manos, y los rayos del sol que pasaban a través del follaje, temblaban en ellas como
místicos haces encendidos. Los tritones y las sirenas de las fuentes borboteaban su risa
quimérica, y las aguas de plata corrían con juvenil murmullo por las barbas limosas de
los viejos monstruos marinos que se inclinaban para besar a las sirenas, presas en sus
brazos. Las cinco hermanas se levantaron para volver al Palacio. Caminaban lentamente
por los senderos del laberinto, como princesas encantadas que acarician un mismo
ensueño. Cuando hablaban, el rumor de sus voces se perdía en los rumores de la tarde, y
solo la onda primaveral de sus risas se levantaba armónica bajo la sombra de los
clásicos laureles.
Valle-Inclán, Sonata de Primavera.
211
TEXTO 2
ÁNGEL DE ROCÍO
EL PERIÓDICO
Géneros de opinión
2) Editorial. Se analizan asuntos de interés público según la ideología del periódico
en un lugar destacado del mismo. Predomina el texto expositivo-argumentativo. El tema
es actual y el tono suele ser serio y reflexivo.
214
Géneros mixtos
5) Crítica cultural. Puede ser teatral, cinematográfica, etc. Se trata de juzgar las
obras de teatro, cine, libros...
6) Deportes.
7) Tiras cómicas.
8) Entretenimiento.
9) Crónica. Género híbrido, pues al mismo tiempo que se cuenta un hecho, se
introduce la interpretación y el comentario del cronista. Un ejemplo suele ser la crónica
deportiva. Tipos: deportiva, parlamentaria, taurina, sucesos, etc.
10) Secciones varias.
11) Suplementos dominicales.
en un género que debiera ser objetivo. Suelen ir destacados en un tipo de letra mayor y
anticipan el contenido de la noticia. La finalidad del titular es triple:
a) sirve de selector de noticias.
b) Debe indicar brevemente y con claridad el contenido de la noticia que encabezan.
c) Debe despertar el interés del lector.
La noticia suele estar planteada desde la perspectiva ideológica del periódico, de ahí
que, a veces, un mismo hecho aparezca en la prensa tratado de diferente manera en unos
lugares u otros.
En relación con el lenguaje oral, el lenguaje periodístico introduce rasgos del habla
cotidiana, preferentemente en las encuestas, entrevistas... Es frecuente la aparición de
determinados diminutivos, el empleo de artículo con nombre propio, cláusulas
exclamativas. Son frecuentes las incorrecciones como deteriorización por deterioro;
catorce congreso por decimocuarto; anglicismos como spot, spray, etc.; adjetivos en
función sustantiva como la coordinadora por la comisión coordinadora...
PRUEBA 4 (2)
218
PBL en anexos.
Actividad 1: Exposición oral sobre la literatura de posguerra.
2. CULTURA E IDEOLOGÍA
219
El nuevo estado controla la vida española. Para la difusión e imposición de las ideas
se impulsó la Sección Femenina y la Acción Católica, para las mujeres, y el Frente de
Juventudes, para la juventud. En el ámbito universitario, Falange dispuso del Sindicato
Español Universitario, que controlaba políticamente la enseñanza. En la enseñanza no
universitaria se combatieron la tradición progresista, la Institución Libre de Enseñanza,
la coeducación.
Las manifestaciones artísticas y espectáculos presentan los siguientes rasgos: la
arquitectura se caracterizaba por el monumentalismo, las artes plásticas se estancaron y
hubo unos años de vuelta al clasicismo y al academicismo. Triunfan la música popular y
la zarzuela, la revista musical, los toros y el fútbol. El NO-DO (Noticias y
Documentales) fue la herramienta fundamental de la propaganda política y del control
informativo.
En los años cincuenta surgió una minoritaria conciencia innovadora que se opuso a
un sistema que rechazaba moral, estética e intelectualmente.
Ya en los años sesenta, la universidad fue centro de revueltas. La segunda mitad de
la década estuvo marcada por grandes movilizaciones de estudiantes y obreros.
En 1977, el país comenzó a cambiar vertiginosamente: regresaron importantes
personajes del exilio, la democracia defiende la libertad de expresión...
Tras la guerra, la literatura vive unos años de búsqueda. Unos autores han tenido
que exiliarse para evitar la represión, otros permanecen en España. En el interior los
autores literarios afrontan la situación desde perspectivas diferentes: unos se unirán a la
llamada literatura arraigada, formada por quienes ven la vida con optimismo, y otros a
la literatura desarraigada, literatura angustiada.
Hacia 1955, un grupo de escritores se orientan hacia el realismo social, un tipo de
literatura que intenta dar testimonio de las miserias e injusticias (Blas de Otero, Celaya,
Delibes, Aldecoa, Buero, Sastre...).
Pero el realismo social terminará por anquilosarse. Se buscan nuevas formas en
todos los géneros. Hacia 1968 el realismo social queda definitivamente relegado. Ya no
se piensa que la literatura pueda transformar el mundo, sino que se intentará transformar
la literatura misma. De ahí las nuevas corrientes de experimentación. Asistimos a un
nuevo vanguardismo.
A partir de 1975, y sobre todo en los años 80 y 90, el experimentalismo se modera.
Las tendencias se diversifican. Hay nuevas búsquedas, pero también un retorno a líneas
más tradicionales.
Actividad 2: Lee el siguiente texto y analiza los rasgos que relacionan esta obra con
la picaresca.
Yo, señor, no soy malo, aunque no me faltarían motivos para serlo. Los mismos
cueros tenemos todos los mortales al nacer y sin embargo, cuando vamos creciendo, el
destino se complace en variarnos como si fuésemos de cera y destinarnos por sendas
diferentes al mismo fin: la muerte. Hay hombres a quienes se les ordena marchar por el
camino de las flores, y hombres a quien se les manda tirar por el camino de los cardos
220
pescado. En las paredes teníamos varias cosas; un calendario muy bonito que
representaba una joven abanicándose sobre una barca y debajo de la cual se leía en
letras que parecían de polvillo de plata, “Modesto Rodríguez. Ultramarinos finos.
Mérida (Badajoz)”, un retrato del Espartero con el traje de luces dado de color y tres o
cuatro fotografías - unas pequeñas y otras regular - de no sé quién, porque siempre las vi
en el mismo sitio y no se me ocurrió nunca preguntar. Teníamos también un reló
despertador colgado de la pared, que no es por nada; pero siempre funcionó como Dios
manda, y un acerico de peluche colorado, del que estaban clavados unos bonitos
alfileres con sus cabecitas de vidrio de color. El mobiliario de la cocina era tan escaso
como sencillo: tres sillas - una de ellas muy fina, con su respaldo y sus patas de madera
curvada, y su culera de rejilla - y una mesa de pino, con su cajón correspondiente, que
resultaba algo baja para las sillas, pero hacía su avío. En la cocina se estaba bien: era
cómoda y en el verano, como no la encendíamos, se estaba fresco sentado sobre la
piedra del hogar cuando, a la caída de la tarde, abríamos las puertas de par en par; en el
invierno se estaba caliente con las brasas que, a veces, cuidándolas un poco, guardaban
el rescoldo toda la noche. ¡Era gracioso mirar las sombras de nosotros por la pared,
cuando había unas llamitas! Iban y venían, unas veces lentamente, otras a saltitos como
jugando. Me acuerdo que de pequeño, me daba miedo, y aún ahora, de mayor, me corre
un estremecimiento, y cuando traigo memoria de aquellos miedos.
El resto de la casa no merece la pena ni describirlo, tal era su vulgaridad. Teníamos
otras dos habitaciones, si habitaciones hemos de llamarlas por eso de que estaban
habitadas, ya que no por otra cosa alguna ahora que no sé por qué la llamábamos así, de
vacía y desamparada como la teníamos. En una de las habitaciones dormíamos yo y mi
mujer, y en la otra mis padres hasta que Dios, o quién sabe si el diablo, quiso
llevárselos; después quedó vacía casi siempre, al principio porque no había quien la
ocupase, y más tarde, cuando podía haber habido alguien; porque este alguien prefirió
siempre la cocina, que además de ser más clara no tenía soplos. Mi hermana, cuando
venía, dormía siempre en ella, y los chiquillos, cuando los tuve, también tiraban para allí
en cuanto se despegaban de la madre. La verdad es que las habitaciones no estaban muy
limpias ni muy construidas, pero en realidad tampoco había para quejarse; se podía
vivir, que es lo principal, a resguardo de las nubes de la navidad, y a buen recaudo - para
lo que uno se merecía – de las asfixias de la Virgen de Agosto. La cuadra era lo peor;
era lóbrega y oscura, y en sus paredes estaba empapado el mismo olor a bestia muerta
que desprendía el despeñadero cuando allá por el mes de mayo comenzaban los
animales a criar la carroña que los cuervos habíanse de comer.
Es extraño pero, de mozo, si me privaban de aquel olor me entraban una angustias
como de muerte; me acuerdo de aquel viaje que hice a la capital por mor de las quintas;
anduve todo el día de Dios desazonado, venteando los aires corno un perro de caza.
Cuando me fui a acostar, en la posada, olí mi pantalón de pana. La sangre me calentaba
todo el cuerpo, Quité a un lado la almohada y apoyé la cabeza para dormir sobre mi
pantalón, doblado. Dormí como una piedra aquella noche.
En la cuadra teníamos un burrillo matalón y escurrido de carnes que nos ayudaba en
la faena y, cuando las cosas venían bien dadas, que dicho sea pensando en la verdad no
siempre ocurría, teníamos también un par de guarros (con perdón) o tres. En la parte de
atrás de la casa teníamos un corral o saledizo, no muy grande, pero que nos hacía su
servicio, y en él un pozo que andando el tiempo hube de cegar porque dejaba manar un
agua muy enfermiza.
Por detrás del corral pasaba un regato, a veces medio seco y nunca demasiado lleno,
cochino y maloliente como tropa de gitanos, y en el que podían cogerse unas anguilas
hermosas, como yo algunas tardes y por matar el tiempo me entretenía en hacer. Mi
222
mujer, que en medio de todo tenía gracia, decía que las anguilas estaban rollizas porque
comían lo mismo que don Jesús, solo que un día más tarde. Cuando me daba por pescar
se me pasaban las horas tan sin sentirlas, que cuando tocaba a recoger los bártulos casi
siempre era de noche; allá, a lo lejos, como una tortuga baja y gorda, como una culebra
enroscada que temiese despegarse del suelo, Almendralejo comenzaba a encender sus
luces eléctricas. Sus habitantes a buen seguro que ignoraban que yo había estado
pescando, que estaba en aquel momento mismo mirando cómo se encendían las luces de
sus casas, imaginando incluso cómo muchos de ellos decían cosas que a mí se me
figuraban o hablaban de cosas que a mí me ocurrían. ¡Los habitantes de las ciudades
viven vueltos de espaldas a la verdad y muchas veces ni se dan cuenta siquiera de que a
dos leguas, en medio de la llanura, un hombre del campo se distrae pensando en ellos
mientras dobla la caña de pescar mientras recoge del suelo el cestillo de mimbre con
seis o siete anguilas dentro!
Sin embargo, la pesca siempre me pareció pasatiempo poco de hombres, y las más
de las veces dedicaba mis ocios a la caza; en el pueblo me dieron fama de no hacerlo
mal del todo y, modestia aparte, he de decir con sinceridad que no iba descaminado
quien me la dio. Tenía una perrilla perdiguera - la Chispa -, medio ruin, medio bravía,
pero que se entendía muy bien conmigo; con ella me iba muchas mañanas hasta la
Charca, a legua y media del pueblo hacia la raya de Portugal, y nunca nos volvíamos de
vacío para casa. Al volver, la perra se me adelantaba y me esperaba siempre junto al
cruce; había allí una piedra redonda y achatada como una silla baja, de la que guardo tan
grato recuerdo como de cualquier persona; mejor, seguramente, que el que guardo de
muchas de ellas. Era ancha y algo hundida y cuando me sentaba se me escurría un poco
el trasero (con perdón) y quedaba tan acomodado que sentía tener que dejarla; me
pasaba largos ratos sentado sobre la piedra del cruce, silbando, con la escopeta entre las
piernas, mirando lo que había de verse, fumando pitillos. La perrilla, se sentaba enfrente
de mí, sobre sus dos patas de atrás, y me miraba, con la cabeza ladeada, con sus dos
ojillos castaños muy despiertos; yo le hablaba y ella, como si quisiese entenderme
mejor, levantaba un poco las orejas; cuando me callaba aprovechaba para dar unas
carreras detrás de los saltamontes, o simplemente para cambiar de postura. Cuando me
marchaba, siempre, sin saber por qué, había de volver la cabeza hacia la piedra, como
para despedirme, y hubo un día que debió parecerme tan triste por mi marcha, que no
tuve más suerte que volver sobre mis pasos a sentarme de nuevo. La perra volvió a
echarse frente a mí y volvió a mirarme; ahora me doy cuenta de que tenía la mirada de
los confesores, escrutadota y fría, como dicen que es la de los linces... un temblor
recorrió todo mi cuerpo; parecía como una corriente que forzaba por salirme por los
brazos, el pitillo se me había apagado; la escopeta, de un solo caño, se dejaba acariciar,
lentamente, entre mis piernas. La perra seguía mirándome fija, como si no me hubiera
visto nunca, como si fuese a culparme de algo de un momento a otro, y su mirada me
calentaba la sangre de las venas de tal manera que se veía llegar el momento en que
tuviese que entregarme; hacía calor, un calor espantoso, y mis ojos se entornaban
dominados por el mirar, como un clavo, del animal.
Cogí la escopeta y disparé volví a cargar y volví a disparar. La perra tenía una
sangre oscura y pegajosa que se extendía poco a poco por la tierra.
[...]
223
En los años cuarenta y comienzos de los cincuenta nos encontramos con poetas
coetáneos de Miguel Hernández, que suelen ser agrupados en la llamada generación del
36. Nacidos en torno a 1910, algunos de ellos continúan su obra en el exilio. A los que
siguen en España Dámaso Alonso los ha divido en seguidores de una poesía arraigada y
de una poesía desarraigada. Pero hay otras tendencias además.
Poesía arraigada se denominó a la de aquellos autores que se expresaban con cierto
optimismo ante la organización de la realidad. A ella pertenecen poetas que se
autodenominan juventud creadora y que se agrupan en torno a la revista Garcilaso,
fundada en 1943; de ahí que se les llame garcilasistas. Vuelven los ojos a los poetas
clásicos españoles, especialmente hacia Garcilaso. En formas clásicas presentan una
visión del mundo ordenada, serena. Uno de los temas dominantes es un firme
sentimiento religioso, junto a temas tradicionales (el amor, el paisaje...). Entre ellos
debemos recordar a Luis Rosales (1910-1993), que toca temas religiosos, y alcanzó la
plenitud con La casa encendida (1949); Leopoldo Panero (1909-1993), autor de una
poesía intimista, cuyos temas son la familia, la tierra y Dios, junto al paso del tiempo
(Escrito a cada instante, 1949); Luis Felipe Vivanco (1907-1962) habla de la
naturaleza, la religión, la familia y la vida cotidiana son sus temas favoritos
(Continuación a la vida, 1949); Dionisio Ridruejo (El Burgo de Osma, 1912- Madrid,
1975) evoluciona hacia una poesía intimista, cotidiana, familiar (En la soledad del
tiempo, 1944).
La poesía desarraigada presenta el mundo como un caos y una angustia. A esta
desazón dramática respondió el libro de Dámaso Alonso Hijos de la ira (1944), que
preside toda una veta de la creación poética de aquel momento. Estos poetas se unen en
torno a la revista Espadaña, fundada en 1944, en León, por Victoriano Crémer y
Eugenio de Nora.
Estamos ante una poesía arrebatada, de tono trágico, que se enfrenta con un mundo
caótico, deshecho, invadido por el sufrimiento y la angustia. La religiosidad adopta un
tono de desesperanza, de duda, o se manifiesta en desamparadas invocaciones a Dios.
Este tono desgarrado tiene un entronque con la poesía existencialista. A esta poesía
corresponde un estilo muy diferente, un estilo bronco, directo, más sencillo y menos
preocupado por los primores estéticos.
EL TEATRO DE POSGUERRA
existencialista pasarán al teatro social, especialmente Sastre, pues Buero Vallejo supera
esta y otras denominaciones.
NOVELA DE POSGUERRA
Dos fechas suelen señalarse como indicios de un nuevo arranque del género: 1942,
con La familia de Pascual Duarte de Cela, y 1945, con Nada de Carmen Laforet.
Camilo José Cela nació en Iria Flavia en 1916. Alentado por el éxito de su primera
novela, se dedicó a la literatura. Se le concede el Premio Nacional de Literatura en
1984, el Premio Príncipe de Asturias en 1987 y el Premio Nobel en 1989. Murió en
2002.
Su obra literaria es muy variada: poesía, libros de viajes, novelas cortas, artículos,
ensayos, novelas... Lo primero que destaca es la diversidad de construcción de sus
novelas. En 1942 aparece su primera novela, La familia de Pascual Duarte, gran éxito.
El protagonista, un condenado a muerte, relata su vida. Retoma Cela el realismo
decimonónico y la novela picaresca. La novela ilustra una concepción del hombre:
criatura arrastrada por la doble presión de la herencia y del medio social. Esta novela
dio origen al llamado tremendismo.
Su obra más importante es sin duda La colmena, publicada en 1951 en Buenos
Aires. El tema central es la incertidumbre sobre los destinos humanos, pero existen una
226
TEXTO
Mosén Millán movía la cabeza con lástima recordando todo aquello desde su
sacristía. Volvía el monaguillo a apoyarse en el quicio de la puerta, y como no podía
estar quieto, frotaba una bota contra la otra, y mirando al cura recordaba todavía el
romance:
El romance hablaba luego de otros reos que murieron también entonces, pero el
monaguillo no se acordaba de los nombres. Todos habían sido asesinados en aquellos
mismos días. Aunque el romance no decía eso, sino ejecutados.
Mosén Millán recordaba. En los últimos tiempos la fe religiosa de don Valeriano se
había debilitado bastante. Solía decir que un dios que permitía lo que estaba pasando, no
merecía tantos miramientos. El cura le oía fatigado. Don Valeriano había regalado años
atrás una verja de hierro de forja para la capilla del Cristo, y el duque había pagado los
gastos de reparación de la bóveda del templo dos veces, Mosén Millán no conocía el
vicio de la ingratitud.
Haz un resumen y esquema del siguiente texto siguiendo los pasos que conoces:
Generalmente, las ciudades tienen grandes dificultades para destruir las enormes
cantidades de basuras que generan cada día sus habitantes. Por un lado, pueden ir
acumulando todas las basuras en ciertos lugares, que reciben el nombre de basureros.
Pero estos basureros llegan, tras un periodo de actividad, a estar llenos totalmente, por
lo que hay que cubrirlos y buscar otro lugar como futuro basurero. Por otro lado, pueden
quemarse las basuras, como se hace en muchas ciudades, pero los gases que se
desprenden durante la incineración pueden contaminar la atmósfera, por lo que el
remedio suele ser peor que la enfermedad. En otras ciudades están intentando reciclar
las basuras, es decir, transformarlas para después volver a usar sus productos. Por
ejemplo, las basuras orgánicas (como los restos de las comidas y los desperdicios
alimentarios) pueden transformarse en abonos para la agricultura. Pero entre las basuras
también hay otros productos como papeles, cartones, etc., que se transforman en
materias primas para volver a fabricar papel (el llamado papel reciclado). Sin embargo,
para conseguir estos objetivos es preciso establecer un sistema que permita al ciudadano
separar sus basuras: las que son reciclables, como las citadas antes, y las que no lo son,
como los plásticos.
PROPUESTA DE RESUMEN 1
Las ciudades tienen grandes dificultades para destruir las grandes cantidades de
basura que generan cada día sus habitantes. Las basuras se pueden acumular en los
basureros, que tienen una duración limitada, ya que cuando están llenos hay que
buscar otros. También pueden quemarse las basuras, pero los gases que se desprenden
de la incineración pueden contaminar la atmósfera. También se pueden reciclar las
basuras, es decir, transformarlas en abonos para la agricultura o en materias primas
para fabricar otros productos. Pero para que sea posible el reciclado es preciso esta-
blecer un sistema que permita al ciudadano separar sus basuras: las que son
reciclables y las que no lo son.
PROPUESTA DE RESUMEN 2
Grandes cantidades de basura. Necesidad de su eliminación. Procedimientos
existentes: acumular la basura en basureros, pero pronto se llenan, buscar otros. Otros
sistema: quemar la basura, pero puede contaminar la atmósfera. Lo mejor: reciclar las
basuras para abono o para crear materia prima: nuevos productos.
PROPUESTA DE RESUMEN 3
Se pueden destruir las basuras que producen las ciudades mediante dos
procedimientos: acumulándolas en los basureros o quemándolas; pero ambos
procedimientos presentan inconvenientes, ya que los basureros terminan por llenarse,
por lo que hay que buscar otros y la incineración contamina la atmósfera con los gases
que produce.
Tu propuesta:
228
CUESTIONES
Son textos de carácter expositivo que explican las características de algo, hechos,
acontecimientos, productos, etc.
Pertenece al grupo de los textos expositivos y, por lo tanto, participa de sus
características ya estudiadas con anterioridad.
LECTURA 3 (1)
ACTIVIDADES (1)
Análisis sintácticos.
Formación de palabras.
Lipograma (falta la e)
231
Actividad 1: Lee el texto expositivo sobre la literatura en esta etapa, subraya lo más
importante y elabora un tema sobre ello.
Salvo algún caso, las novelas citadas analizan la vida del momento. Junto a ello, es
frecuente el tema de la Guerra Civil, especialmente los efectos de la contienda en los
niños o adolescentes que ellos fueron en ese momento: Duelo en el Paraíso (1955) de
Goytisolo, o Primera memoria de Ana María Matute.
En este tipo de novelas el contenido tiene preferencia frente a la forma, ello ha
provocado que se les acusara de pobreza técnica. La estructura del relato suele ser lineal
y las descripciones tienen un mero papel funcional (presentación de ambientes). Muchas
de estas novelas concentran la acción en un tiempo reducido: un día e incluso menos, lo
que obliga al autor a hacer un ejercicio de concentración. Es frecuente la utilización del
personaje colectivo: Los bravos, La colmena... Junto al personaje colectivo, es frecuente
la presencia del personaje representativo, tomado como síntesis de una clase o grupo.
Ello enlaza con el rasgo fundamental de esta corriente: el rechazo de la novela
psicológica, que se centra en el análisis detenido de las almas. A la vez se emplean de
técnicas conductistas, en las que la mirada del novelista suele semejarse a la de una
cámara cinematográfica. El novelista no comenta: es lo que se ha llamado la
desaparición del autor.
El lenguaje adopta generalmente el estilo de la crónica, desnudo, directo. Hay un
empeño en recoger el habla viva de campesinos, obreros, etc.
Como ejemplo de la técnica conductista hay que citar a Rafael Sánchez Ferlosio,
autor de El Jarama (1956). La obra se caracteriza por la extrema reducción de la
historia. Presenta a una pandilla de jóvenes trabajadores que pasan un domingo a orillas
del río Jarama. Apenas pasa nada, salvo el drama final. El autor se limita a transcribir
los distintos momentos de aquel día con gran precisión. Todo ello nos hace pensar en el
drama de nuestro tiempo: la alienación de la vida cotidiana. En la novela predomina el
diálogo, recreando el habla coloquial con una fidelidad asombrosa.
La narrativa de Ignacio Aldecoa se compone de algunas novelas y de numerosos
cuentos. Con las novelas (El fulgor y la sangre (1954), Con el viento solano (1956),
Gran Sol, 1957), el autor pretendía realizar una pintura de los distintos sectores sociales.
De esta manera, la obra de Aldecoa constituye un testimonio de la España de posguerra.
Actividad 1: Lee el texto de Cela y señala los rasgos propios de la novela más
social.
TEXTO
C. J. Cela: La colmena.
233
El teatro de testimonio social tiene como pioneros a Buero Vallejo y Alfonso Sastre,
si bien Alfonso Sastre, nacido en 1926, es, además, principal teorizador del movimiento.
En 1956 publicó el libro Drama y sociedad, donde expone sus tesis, como la de que lo
social es una categoría superior a lo artístico.
Alfonso Sastre (Madrid, 1926). Formó el grupo de Arte Nuevo, cuyo propósito era
conseguir “la renovación general del teatro”. Colaboró con el Teatro Universitario de
Ensayo (TUDE) y elaboró junto a José Mª del Quinto el manifiesto del TAS (Teatro de
Agitación Social).
En 1953 se dio a conocer a un público amplio con Escuadra hacia la muerte,
estrenada en el teatro María Guerrero de Madrid, bajo la dirección de Gustavo Pérez
Puig, fue prohibida después de su tercera representación. La escuadra se rebela contra la
autoridad, en clara alusión a la desconfianza hacia los que inducen a una guerra que
nadie entiende. En 1955 estrena Muerte en el barrio. Sus dramas comenzaron a ser
objeto de veto por parte de la censura y representados por aficionados. En 1965 escribe
La sangre y la ceniza, no representada hasta 1976, y en 1966, aunque no se estrena hasta
1985, La taberna fantástica, por la que recibió el Premio Nacional de Teatro en ese año,
y posteriormente, en 1993, por Jenofa Juncal. Pertenecen estas últimas a las llamadas
tragedias complejas, pues incorporan un humor de situación, negro y profundo y en las
que se presentan héroes irrisorios.
Tras Buero y Sastre aparecerán autores nacidos en torno a 1925 como José M.ª
Rodríguez Méndez, autor de Los inocentes de la Moncloa, 1960. La obra presenta una
juventud amargada, destinada al fracaso.
José Martín Recuerda (Granada 1922). En 1958 obtuvo el primer premio Lope de
Vega por El teatrito de don Ramón. Los temas de las obras de Recuerda se expresan a
través de personajes ansiosos de libertad. Entre sus obras destacamos Las salvajes del
Puente San Gil (1961), reflexión contra la intolerancia y alegato contra la hipocresía de
muchos españoles de posguerra, y Las arrecogías del beaterio de Santa María
Egipcíaca (1970), estrenada en 1977), en la que narra los últimos momentos de Mariana
Pineda, heroína liberal condenada a muerte durante el reinado de Fernando VII.
Lauro Olmo estrenó en 1962 La camisa. La obra pretende tener un valor
documental. El tema es la pobreza ocasionada por el paro y la necesidad de emigrar.
Otras obras son La pechuga de la sardina (1962), English Spoken y José García
(1967)...
Carlos Muñiz sobresale con El tintero (1960).
Se suele introducir también entre los realistas a Antonio Gala (Los verdes campos
del Edén, 1963; Anillos para una dama, 1973; Petra Regalada, 1980...); Alfredo
Mañas (Tiempo de luz, 1953; Historia de los tarantos, 1962...).
La temática de todas estas obras es característica del teatro social: la burocracia
deshumanizada, la situación de los obreros, de los opositores. Lo común sería el tema de
la injusticia social y de la alineación. Tanto por su temática como por su actitud,
representan el intento de crear un teatro comprometido con los problemas de la España
en que vivían.
Como contraste, debemos aludir a un teatro que triunfó en este momento y que se
mantuvo en los años sesenta y posteriores, cuyo autor más característico es Alfonso
Paso (1926-1978) quien prefirió el camino del éxito, con obras al gusto del público, hoy
olvidadas (Los pobrecitos, 1956; Las que tienen que servir, 1960; Enseñar a un
234
sinvergüenza, 1967...). Dentro de este teatro comercial están Jaime Salom (El
mensajero, 1955; La casa de las chivas, 1968; Una hora ante el televisor, 1986...);
Juan José Alonso Millán (Operación A, 1959; Pecados conyugales, 1966; Golfos de
cinco estrellas, 1988...); Jaime de Armiñán (Eva sin manzana, 1953; El último tranvía,
1965); Ana Diosdado...
POESÍA SOCIAL
Hacia 1955 se consolida en todos los géneros el llamado realismo social. De esta
fecha son dos libros que marcan un hito: Pido la paz y la palabra de Blas de Otero, y
Cantos iberos de Gabriel Celaya. Ambos poetas superan su anterior etapa de angustia
existencial y se sitúan en un marco social.
En este giro, se encontrarán acompañados por el magisterio de Vicente Aleixandre
que publicó en 1954 Historia del corazón, centrado en la idea de solidaridad.
Para Celaya, la poesía debe tomar partido ante los problemas del mundo. El poeta
debe ser solidario con los hombres; la poesía debe convertirse en un arma capaz de
cambiar el mundo.
Junto a Otero y Celaya cultivan esta poesía Victoriano Crémer, Eugenio de Nora,
Ramón de Garciasol o Leopoldo de Luis, José Hierro...
En cuanto a la temática, hay que destacar la gran proporción que alcanza el tema de
España. Proliferan títulos o poemas con este topónimo: Que trata de España (Otero),
Tierras de España (Garciasol), España, pasión de vida (Nora), Dios sobre España
(Bousoño), etc. Es fácil ver la influencia de libros anteriores de autores
hispanoamericanos: España en el corazón (Pablo Neruda) y España, aparta de mí este
cáliz (César Vallejo).
Además de este tema, aparecen otros ya señalados al hablar de la novela social: la
injusticia social, la alienación, el anhelo de libertad, el mundo del trabajo...
Los poetas se dirigen a la mayoría, pretenden llegar al pueblo, lo que les lleva hacia
un lenguaje claro, de tono coloquial. Algunos caen en la poesía prosaica.
2.2 AUTORES MÁS REPRESENTATIVOS
Gabriel Celaya (Hernani, 1911-1991) es considerado como uno de los poetas más
representativos de la poesía social, aunque participa también en otras orientaciones. Tras
unas primeras experiencias surrealistas antes de la Guerra Civil, se decantó por la poesía
existencial. A esta época pertenecen Movimientos elementales (1947) y Objetos
poéticos (1948).
Con el libro Tranquilamente hablando (1947) inicia su poesía “de urgencia”. La voz
poética se fusiona con un nosotros que representa a la inmensa mayoría. La interioridad
lírica se sustituye por la solidaridad. Tras Paz y concierto (1953), llega la cima de la
poesía social con Cantos iberos (1955), en los que defiende una literatura como arma de
lucha social. Mantiene esta línea en Rapsodia euskara (1961) y Baladas y decires
vascos (1965).
En los años sesenta reinició el camino vanguardista con Mazorca (1962) o La
linterna sorda (1964). En El derecho y el revés (1963) toma conciencia del fracaso del
humanismo marxista que había inspirado la poesía social.
Con Los espejos transparentes (1968), Celaya inicia su producción más
experimental, que tendrá continuidad con Campos semánticos (1971) y culminará con
Función de uno, equis y ene (1973).
236
ESPAÑA EN MARCHA
Nosotros somos quien somos.
¡Basta de Historia y de cuentos!
¡Allá los muertos! Que entierren como Dios manda a sus muertos.
No reniego de mi origen,
pero digo que seremos
mucho más que lo sabido, los factores de un comienzo.
No quiero justificarte
como haría un leguleyo.
Quisiera ser un poeta y escribir tu primer verso.
Gabriel Celaya
HOMBRE
Luchando, cuerpo a cuerpo, con la muerte,
al borde del abismo estoy clamando
a Dios. Y su silencio, retumbando,
ahoga mi voz en el vacío inerte.
Oh Dios. Si he de morir quiero tenerte
despierto. Y, noche a noche, no sé cuando
oirás mi voz. Oh Dios. Estoy hablando
solo. Arañando sombras para verte.
Alzo la mano, y tú me la cercenas.
Abro los ojos: me los sajas vivos.
Sed tengo, y sal se vuelven tus arenas.
Esto es ser hombre: horror a manos llenas.
Ser -y no ser- eternos, fugitivos.
¡Ángel con grandes alas de cadenas!
Blas de Otero
José Hierro nació en Madrid en abril de 1922, pero pasó a Santander a los dos
años. Estudió en los Salesianos de Santander y pronto se aficionó a la literatura. Estuvo
en la cárcel entre 1939 y 1944.
En 1947 aparece su primer libro Tierra sin nosotros. También es el año de la
publicación de su segundo libro, Alegría, premio “Adonais” de poesía. Con las piedras,
con el viento, editado en Santander en 1950, venía a poner fin a un primer ciclo de su
poesía. El paso del tiempo y las pérdidas que produce, junto a la alegría como
afirmación vital y el amor visto con nostalgia son sus temas.
En 1952, en pleno apogeo de la poesía social, publica Quinta del 42. En 1953 recibe
el Premio Nacional de Poesía, el Premio de la Crítica y el Premio de la Fundación Juan
March en 1957, por su libro Cuanto sé de mí. Otra vez el Premio de la Crítica, en 1964,
por Libro de las alucinaciones. En 1974 aparecen sus poesías completas con el título
Cuanto sé de mí. Hierro se acerca a la poesía social, pero su poesía se centra en el
conocimiento tanto de la realidad exterior como de su ser íntimo.
En 1991 apareció Agenda. En 1990 recibió el Premio de las Letras. Ya en 1981
había recibido el Premio Príncipe de Asturias. Su último libro apareció en 1998 con el
título de Cuaderno de Nueva York. Murió en Madrid en 2002.
FE DE VIDA
Sé que el invierno está aquí,
detrás de esa puerta. Sé
que si ahora saliese fuera
lo hallaría todo muerto,
luchando por renacer.
239
INTRODUCCIÓN
Junto a lo que podemos llamar "lengua común o estándar", existen otras
posibilidades de utilización del lenguaje. Entre ellas se encuentran las "lenguas
especiales" de los diversos oficios y profesiones, de las ciencias naturales y humanas y
de las diversas técnicas, que se apartan, a veces, tanto de la lengua normal, cotidiana,
que algunos tratadistas utilizan para designarlas la denominación de "metalenguas".
Predomina en ellos la función metalingüística.
Estas lenguas especiales no tienen generalmente una difusión amplia; son lenguas
"de grupo", que tienen un carácter reservado y limitado, por lo que normalmente se
requiere preparación previa para su utilización.
Concretamente el lenguaje científico y técnico ha experimentado un desarrollo
continuo y creciente desde el siglo XIX, como consecuencia de la expansión que se
produce en los conocimientos acerca de la naturaleza.
Desde hace algunos decenios, el vocabulario técnico y científico crece en
proporciones muy superiores a las del lenguaje común. Por ello, actualmente abunda la
publicación de léxicos particulares de cada ciencia o técnica por separado.
Llamamos lenguaje científico a un tipo especializado de discurso que engloba
campos del saber muy diversos, con un nivel de especialización dependiente del
receptor a quien se dirija el mensaje.
Tiene por finalidad transmitir unos conocimientos objetivos.
7) Es el único lenguaje que trata de seguir límites objetivos. Es, por tanto,
impersonal.
8) Al lenguaje científico y técnico lo caracteriza, de manera esencial, un vocabulario
propio (más que una gramática). Los vocablos que lo integran constituyen la
terminología. Cada uno de los vocablos en un término o un tecnicismo.
Distinguimos dos niveles de lenguaje científico: el lenguaje de operatividad y
aplicación, es decir, el docente, caracterizado por su univocidad, su objetividad y su
precisión; y el lenguaje científico de la discusión, de la investigación del momento
heurístico del descubrimiento, que actúa con poder polisémico, metafórico, próximo al
lenguaje poético.
Los adjetivos se emplean con objetividad, sin afán ornamental, para aclarar el texto y
facilitar la monosemia del mismo. Uso de adjetivos descriptivos que no presuponen
juicio alguno (no agua caliente, sino agua a 901, etc.
Frente a los adjetivos, son frecuentes los complementos del nombre, con lo que
aumenta el número de sustantivos.
1.3 Verbos.
Gramaticalmente en la exposición científica se utilizan las construcciones en
presente de indicativo (si se trata de tesis) y en presente de subjuntivo (si se trata de
hipótesis), también se emplea el futuro para expresar las hipótesis, muy abundantes en
los textos científicos.
Se suele emplear la 30 persona del singular, por ser más objetiva, incluso con
expresiones propiamente impersonales (se dice). Puede utilizarse también la 10 persona
del plural: "Decimos..." Es lo que tradicionalmente se ha llamado plural de modestia.
2. Sintaxis
Los textos científicos y técnicos poseen, normalmente, una sintaxis lógica
esquemática, estrictamente recortada. Es frecuente, además, la ausencia de elementos
subjetivos y connotativos. Se tiende a la "economía lingüística", aunque, si es preciso,
se repiten términos para evitar ambigüedad. Si en un texto científico hay
enumeraciones, paralelismos, etc. son necesarios.
Las oraciones que más se emplean son:
- Las enunciativas: El lenguaje científico es especialmente rico en este tipo de
oraciones. Se exponen los hechos, evitando matizaciones afectivas de cualquier género.
Es un sistema típico del discurso científico.
-Las condicionales: se suelen utilizar en la expresión de las hipótesis, propias de
toda ciencia. Las hipótesis obligan al empleo de un lenguaje en que se condicione la
verdad de un aserto o afirmación. Junto a ellas, causales, consecutivas y finales.
-Es frecuente el uso de construcciones impersonales, sintácticas o semánticas:
Esto se puede deducir de....
En ningún caso ha podido ser descubierto un animal así...
3 Léxico
Remitimos a lo expuesto sobre el vocabulario científico y técnico. A modo de
síntesis diremos que es preciso, denotativo, monosémicos, unívoco, muy especializado,
y permeable a los préstamos de otras lenguas. Muchos neologismos formados con
palabras griegas y latinas. Uso de palabras del lenguaje coloquial con un significado
especial.
4. Semántica
Generalmente los textos científicos no admiten metáforas ni otras figuras
estilísticas. Sin embargo, en ocasiones, pueden aparecer metonimias, utilizadas como
sinónimos.
Estilístico-semánticamente hay que señalar la abundancia de sustantivos abstractos
(reacción, estructura, semejanza).
c) Conclusión.
inesperada muerte de su mujer -(una Gauss, que le trajo una buena dote!-, pero el dinero
era su verdadera pasión. Con íntimo bochorno se sabía menos apto para ganarlo que
para conservarlo. Era muy religioso; creía tener con el Señor un pacto secreto, que lo
eximía de obrar bien, a trueque de oraciones y devociones. Calvo, corpulento, enlutado,
de quevedos ahumados y barba rubia, esperaba de pie, junto a la ventana, el informe
confidencial de la obrera Zunz.
La vio empujar la verja (que él había entornado a propósito) y cruzar el patio
sombrío. La vio hacer un pequeño rodeo cuando el perro atado ladró. Los labios de
Emma se atareaban como los de quien reza en voz baja; cansados, repetían la sentencia
que el señor Loewenthal oiría antes de morir.
Las cosas no ocurrieron como había previsto Emma Zunz. Desde la madrugada
anterior, ella se había soñado muchas veces, dirigiendo el firme revólver, forzando al
miserable a confesar la miserable culpa y exponiendo la intrépida estratagema que
permitiría a la Justicia de Dios triunfar de la justicia humana. (No por temor, sino por
ser un instrumento de la Justicia, ella no quería ser castigada). Luego, un solo balazo en
mitad del pecho rubricaría la suerte de Loewenthal. Pero las cosas no ocurrieron así.
Ante Aarón Loewenthal, más que la urgencia de vengar a su padre, Emma sintió la
de castigar el ultraje padecido por ello. No podía no matarlo, después de esa minuciosa
deshonra. Tampoco tenía tiempo que perder en teatralerías. Sentada, tímida, pidió
excusas a Loewenthal, invocó (a fuer de delatora) las obligaciones de la lealtad,
pronunció algunos nombres, dio a entender otros y se cortó como si la venciera el temor.
Logró que Loewenthal saliera a buscar una copa de agua. Cuando éste, incrédulo de
tales aspavientos, pero indulgente, volvió del comedor, Emma ya había sacado del cajón
pesado el revólver. Apretó el gatillo dos veces. El considerable cuerpo se desplomó
como si los estampidos y el humo lo hubieran roto, el vaso de agua se rompió, la cara la
miró con asombro y cólera, la boca de la cara le injurió en español y en ídish. Las malas
palabras no cejaban; Emma tuvo que hacer fuego otra vez. En el patio, el perro
encadenado rompió a ladrar, y una efusión de brusca sangre manó de los labios
obscenos y manchó la barba y la ropa. Emma inició la acusación que tenía preparada
("He vengado a mi padre y no me podrán castigar..."), pero no la acabó, porque el señor
Loewenthal ya había muerto. No supo nunca si alcanzó a comprender.
Los ladridos tirantes le recordaron que no podía, aún, descansar. Desordenó el
diván, desabrochó el saco del cadáver, la quitó los quevedos salpicados y los dejó sobre
el fichero. Luego tomó el teléfono y repitió lo que tantas veces repetía, con esas y con
otras palabras: Ha ocurrido una cosa que es horrible... El señor Loewenthal me hizo
venir con el pretexto de la huelga... Abusó de mí, lo maté...
La historia era increíble, en efecto, pero se impuso a todos, porque sustancialmente
era cierta. Verdadero era el tono de Emma, verdadero el pudor, verdadero el odio.
Verdadero también era el ultraje que había padecido; sólo eran falsas las circunstancias,
la hora y uno o dos nombres propios.
249
Trazo grueso
LA PINTURA de los impresionistas copa la cartelera expositiva madrileña con
ruido. Responsables del Thyssen y Mapfre han polemizado sobre la idoneidad de sus
respectivas muestras, sin duda picados por la coincidencia. España es una gran bronca, y
ya levantan la voz hasta los refinados comisarios de los museos. Según se mire, y entre
tanto griterío político, no está mal que se produzcan controversias culturales, por lo
menos para que parezca que la cultura está viva y ocupa algún lugar en el interés de la
gente.
Pero, lamentablemente, este pequeño lío viene de un fenómeno hace tiempo
detectado: la entrega ocasional o persistente de los museos a los gustos más comunes
del público. Los agentes culturales buscan hacer caja, a ver. La oferta no arriesga a
mover al público de sus conservadoras y cómodas posiciones, sino que se deja llevar
por la demanda como en cualquier comercio.
No vamos a hablar mal ahora de los impresionistas, pero está claro que es la última
vanguardia que el personal ha digerido y ante la que se siente complacido porque,
aunque en su momento suscitara escándalo, hoy está asimilada, es entendible y
gratificante.
Pero el mundo y la España de hoy no encuentran en el impresionismo las formas ni
los contenidos que mejor sirven al relato que nos incumbe. El paisajismo y sus
delicadezas son una ventana para la fuga hacia universos ideales e idílicos. Quizás
necesitamos esa fuga como necesitamos ir al campo los findes.
Habría que mostrar más a los expresionistas. Estamos viviendo un momento de
trazo grueso, de estridencia. La estética deformante y caricaturesca es la más adecuada
para poner en evidencia esta farsa urbana. Habría que rescatar a un Otto Dix o a un
George Grosz, si queremos que el pasado nos explique el presente. O a ciertos
abstractos para comprender lo incomprensible: la fragmentación, la dislocación, la
deconstrucción, la explosión dispersa de signos que hacen irreconocible una sociedad
que, a ratos, no se explica ya con un ordenado discurso naturalista. Ni hiperrealista.
¿Estética deformante? Para una ética deformada e informe. ¡Esto es el esperpento!
Tenemos receta propia: Valle-Inclán. Lo que vemos en las televisiones y los periódicos
es, sin matemática perfecta, las imágenes de los espejos cóncavos y convexos del
Callejón del Gato.
Manuel Hidalgo
250
TIPOS DE DICCIONARIOS
http://recursos.cnice.mec.es/lengua/profesores/eso3/teoria.htm
El primero de ellos es el consumo, por el cual los hablantes deciden que una forma
es buena o correcta y otra no. Un segundo criterio, el de autoridad, es el que se basa en
buenos escritores o hablistas.
El segundo criterio suele completarse con la autoridad de una institución que asume
el papel de árbitro, la Real Academia.
La diferencia que parece haber entre estas lenguas que poseen esa norma culta y los
dialectos está en que la lengua aparece como más fijada, el hablante se siente menos
libre para modificarla. Los dialectos, en cambio gozan de mayor movilidad. En el
contexto del castellano actual en España esta situación afecta fundamentalmente al
dialecto castellano más progresivo: el andaluz.
El andaluz extiende sus caracteres generales muy hacia el Norte.
EL ANDALUZ
El habla andaluza reúne todos los meridionalismos enumerados; pero, además, se
opone a la castellana en una serie de caracteres que comprenden la entonación más
variada y ágil; el ritmo, más rápido y vivaz; la fuerza espiratoria, menor; la articulación,
más relajada, y la posición fundamental de los órganos, más elevada hacia la parte
delantera de la boca. La impresión palatal y aguda del andaluz contrasta con la gravedad
del acento castellano.
- El seseo ocupa una zona intermedia occidental de Huelva, el Norte y ciudad de
Sevilla, la llanura de Córdoba y su capital, el Sur de su provincia, el Norte de la de
Málaga, con Antequera y Archidona y en Jaén la orilla derecha del Guadalquivir hasta
Baeza. El área actual del ceceo comprende el Sur de la provincia de Huelva, toda la de
Cádiz, la mayor parte de las de Sevilla y Málaga, Oeste y Sur de Granada e islotes de
Guadix, Zújar... Sur de Almería y focos en Jaén. La consideración social del seseo es
superior a la del ceceo.
- Peculiarmente andaluza es la relajación de la / /, que llega a despojarse de su
oclusión inicial y convertirse en / / fricativa ([nó e], [mu a o]) fenómeno muy extendido
por Cádiz, Sur de Sevilla, Occidente de Málaga, vega y ciudad de Granada y costa
almeriense.
254
EL EXTREMEÑO Y EL MURCIANO
Extremadura, reconquistada por leoneses y castellanos en los siglos XII y XIII,
ofrece en su lenguaje mezcla de leonesismos y rasgos meridionales. Entre aquellos se
cuentan las vocales finales [-i] [-u], dominantes en Cáceres, por /-e/, /-0/; /r/ por /l/ en
los grupos /pl/, /kl/, /bl/ y /fl/; el mantenimiento del grupo /mb/; el sufijo diminutivo –
ino.
En general, leonesismos y arcaísmos están más acentuados en Cáceres, mientras
que en Badajoz es ostensible la influencia andaluza.
El reino de Murcia fue incorporado a Castilla antes de mediar el siglo XIII; pero la
sublevación de los moriscos obligó a que Jaime I interviniera en auxilio de Alfonso X,
con lo que se establecieron en la región muchos catalanes y aragoneses. Años después,
Murcia fue ocupada casi en su totalidad por Jaime II, quien no la restituyó a Castilla
hasta 1305. Estas circunstancias y la vecindad de Levante han determinado influencias
lingüísticas bien perceptibles. Se da a veces /ll-/ por /l-/ (llengua) con la palatalización
que es normal en catalán. De procedencia aragonesa es la consonante sorda
intervocálica (cayata, cocote).
Por lo demás el habla albaceteña y murciana responde a los caracteres generales del
Mediodía, salvo en no aspirar la [h] procedente de [f-].
En general el dialectalismo es más intenso en el Sur, sobre todo en el panocho o
jabla de la huerta murciana, con fuerte neutralización de /-r/ y /-l/ (calne, farta).
EL CANARIO
La incorporación de las Islas Canarias a Castilla, iniciada en tiempo de Enrique III,
fue llevada a su término durante el reinado de los Reyes Católicos. Las expediciones
partieron casi siempre de puestos andaluces. El habla canaria serca con /s/ predorsal del
tipo andaluz; pero en el campo de Tenerife hay restos de ceceo con una variedad
postdental de [z] (camiza). En la pronunciación vulgar se aspira la [h-] procedente de
/f-/; la /-s/ implosiva se convierte en aspiración o se asimila a la consonante inmediata
([ihla]).
- Existe el yeísmo, general en Gran Canaria, en Santa Cruz de Tenerife y
otros puntos.
Como el andaluz y el español de América, el habla canaria conserva la distinción
etimológica entre le y lo. Solo en las islas más alejadas subsisten vosotros vais, lo
general es usar ustedes van.
El léxico conserva algunas voces guanches (gánico `vasija de barro’)
EL JUDEO-ESPAÑOL
La mayoría de los judíos expulsados de España por los Reyes Católicos se
estableció, tras complejas vicisitudes, en diversos puntos del imperio turco. Allí
255
EL ESPAÑOL DE AMÉRICA
En la actualidad, el español se habla como lengua oficial en Argentina, Uruguay,
Chile, Bolivia, Ecuador, Venezuela, Colombia, Panamá, Costa Rica, Honduras,
Nicaragua, El Salvador, Guatemala, México y República Dominicana; como lengua
cooficial en Perú (junto al quechua), Paraguay (junto al guaraní) y Puerto Rico (estado
libre asociado a Estados Unidos, cooficial con el inglés); como lengua muy extendida,
aunque no oficial, en los estados del sur de los Estados Unidos (California, Texas,
Florida, Arizona, Nuevo México) y en grandes urbes como Chicago o Nueva York.
256
En esta página Web puedes encontrar datos sobre el origen del español:
http://recursos.cnice.mec.es/lengua/profesores/eso3/teoria.htm
257
La romanización.
La ocupación de la Península comenzó el 218 a. de J. C. con el desembarco de
Escipión en Ampurias. El territorio estaba habitado por distintos pueblos que hablaban
lenguas diferentes (celtas, fenicios, tartesos, iberos...). Con los romanos se impuso el
latín.
El latín que llegó fue el latín vulgar, no el clásico, usado por los soldados,
comerciantes y colonos. El latín culto se hablaba en las escuelas. Esta variedad de latín
estaba muy alejada del latín clásico de Cicerón, César, Ovidio, Virgilio, etc.
Con la desmembración del Imperio Romano y la formación de los reinos, el latín
evolucionó de forma diferente en cada nueva nación, dependiendo de las características
lingüística de las lenguas de sustrato.
Los germanos
El año 409, los germanos empezaron sus invasiones por los Pirineos. El reino
visigodo de España quedó definitivamente implantado por Leovigildo (568-586), que
fijó en Toledo la capital. En lengua, adoptaron el latín.
Tras una pequeña etapa de bilingüismo (uso indistinto de dos lenguas por una
persona o por una comunidad lingüística) y diglosia (convivencia de dos lenguas en una
misma comunidad, de tal manera que una de ellas es utilizada para usos más
importantes) todos fueron utilizando la nueva lengua romance.
Del germano quedan muchas palabras: espía, espuela, esquila, galardón, ganar,
guerra, guardia, hato, rico, ropa, rueca, yelmo, parra, Álvaro, Rodrigo, Fernando, etc.
Los árabes
En 711 llegaron los árabes por Gibraltar. En menos de siete años ocuparon todo el
territorio peninsular. Las tropas cristianas supervivientes se agruparon en las montañas
del Norte. Desde allí iniciaron la Reconquista. Se crearon distintos reinos: León
(Castilla), Navarra, Aragón, Cataluña y los reinos árabes.
El bilingüismo inicial fue cediendo ante la progresiva imposición del romance.
Muchas palabras árabes, algunos con el prefijo al- pasan a los dialectos romances
existentes: alcalde, alguacil, alférez, almacén, aduana, tarifa, alfombra, almohada,
tarima, taza, jarra, alcoba, azotea, tabique, arroz, aceituna, acequia, noria, etc.
Al muy alto y muy poderoso prínçipe y muy humano señor don Juan el
Segundo, por aspiraçión de la divinal graçia muy digno rey de los reinos de Castilla
y de León etcétera. Vuestro muy umill y natural siervo, don Juan de Mena, las
rodillas en tierra, beso vuestras manos y me recomiendo a vuestra alteza y señoría.
Soy contento. Bien os debéis acordar cómo, al tiempo que agora ha dos años
partistes desta tierra para Roma, nos prometistes a todos tres que conservaríades y
entreterníades nuestra amistad, como avéis hecho, con vuestras continuas cartas.
Agora sabed que, después de vos ido, nosotros nos concertamos desta manera, que
qualquiera de nosotros que recibiese carta vuestra la comunicase con los otros y
esto avemos hecho siempre assí, y con ello avemos tomado mucho descanso,
passatiempo y plazer...
El vasco o euskera.
Es la única lengua hispánica viva continuadora de una lengua prerromana. Se habla
en las provincias vascongadas, norte de Navarra y en el departamento francés de Basses
Pyrenées (Iparralde), denominado en su conjunto Euskalherría.
Apenas se ha cultivado literariamente hasta el siglo XIX y está fragmentado en
dialectos fuertemente diferenciados: vizcaíno, guipuzcoano, alto navarro septentrional,
alto navarro meridional, bajo navarro oriental, bajo navarro occidental, labortano,
suletino...
Sigue siendo un enigma el origen de la lengua vasca, posiblemente procede de las
lenguas caucásicas.
El catalán
El catalán procede de la evolución del latín vulgar en el territorio de los antiguos
condados carolingios. Posteriormente se escinde en dos grandes modalidades: oriental y
occidental. La primera incluye el catalán central, el rosellonés, el balear y el alguerés
(Alguer, Cerdeña). El segundo engloba el tortosino, el leridano, andorrano, ribagorzano
y pallarés. Es lengua cooficial con el castellano.
El catalán, durante la Edad Media, está muy ligado en su desarrollo al de otra
lengua romance, hablada y escrita en el sur de Francia: el provenzal. Hasta el siglo XV,
la mayor parte de la poesía escrita en Cataluña seguía los moldes de la lengua y la
literatura provenzal.
Durante los siglos XIII, XIV y XV las letras catalanas viven una época de gran
esplendor. Destacan en este período las figuras de Ramón Llull, Ausías March...
Durante los siglos XII y XIII la lengua catalana alcanzó su mayor expansión
territorial gracias al avance de la Reconquista, hasta llegar a las Islas Baleares, reino de
Valencia y su expansión por el Mediterráneo (Sicilia, Cerdeña, Nápoles).
Con la unión de las dos coronas de Castilla y de Aragón, el castellano se convierte
en la lengua de mayor poder y prestigio. A partir del XVI comienza la decadencia
literaria del catalán.
En el siglo XIX surgió la Renaixença, movimiento de recuperación del catalán. La
Oda a la Pàtria, de Aribau señala su comienzo. Desde entonces no ha cesado la
actividad cultural. En 1907 se creó el Institut d’Estudis Catalans, que publicó las normas
ortográficas (1913), la gramática (1918) y el Diccionari General de la Llengua catalana
(1932).
263
El valenciano
Se discute hoy si el valenciano es lengua o, como hasta ahora se ha sostenido,
dialecto del catalán. El valenciano tuvo un brillante cultivo literario en el siglo XV
(Tirant lo Blanch).
Con la aprobación del Estatuto de Autonomía de 1982, se reconoce al valenciano
como lengua cooficial de la Comunidad Valenciana. En 2001 se creó la Academia
Valenciana de la Lengua con el fin de normalizar el valenciano.
.
El gallego
Procede del latín y lo hablan más de dos millones de personas. El gallego se formó
en los territorios situados al norte y al sur del río Miño. A finales del siglo XI se
constituye al sur del Miño el condado de Portugal, que se declara independiente a
mediados del siglo.
En esta lengua gallego-portuguesa se escribió una poesía muy bella en el siglo XIII
representada por las cantigas. Fue lengua literaria también de castilla hasta finales del
siglo XIV. En ellas escribió Alfonso X sus Cantigas de Santa María y los poetas líricos
sus canciones. El último poeta castellano que escribe en portugués es Gómez Manrique.
A partir del siglo XV gallego y portugués fueron diferenciándose. El castellano se
instala a través de las clases más influyentes de la sociedad, y el gallego como lengua
escrita queda reducida a la mínima expresión.
A partir del siglo XVI el gallego es propio de zonas rurales y de las capas más
populares de las ciudades.
A mediados del XIX surge un movimiento de recuperación de la lengua gallega
llamado Rexurdimento. Junto a la aparición de obras literarias en gallego como la de
Rosalía de Castro, surgen las primera gramáticas y diccionarios. En 1905 se constituyó
la Real academia aGallega.
Tras la Constitución de 1078, en 1981 se aprueba el Estatuto de autonomía de
Galicia y en 9183 la Ley de Normalización Lingüística de Galicia.
Dentro del gallego se distinguen tre sáreas dialectales: el gallego oriental, al
occidental y el central.
TEXTOS
EL SUSTRATO PRERROMANO
Aranjuez, Aranzueque, etc. Es hacia el Oeste del actual País Vasco donde la toponimia
de este tipo es menor, aunque elementos como Selaya, en Cantabria, Iria Flavia, en
Galicia, y otros hayan hecho pensar en sus tratos antiquísimos relacionables con el
vasco.
Un sufijo muy abundante en casi toda la toponimia peninsular, sobre todo en el
Levante, Sur y Portugal, y menos en el Centro y Noroeste, es -én, -ena, quizá ibérico, y
casi idéntico al derivativo vasco de relación o posesión. Curiosamente, suele aparecer
unido a nombres latinos, indicando probablemente el primer poseedor del lugar:
Leciñena (de LICINIUS), Villena (de BELLIUS), Lucainena (de LUCANIUS),
Mairena (de MARIUS), Galiena (de GALLIUS), etc. Otro sufijo, éste ya más
claramente vasco, también muy vivo en época latina, es -urri, -uri ('ciudad'):
Gracchurris (Rioja), Crescenturi (Cataluña), etc. (como el preindoeuropeo
CALAGURRIS > Calahorra).
Los elementos indoeuropeos prerromanos de la Península presentan también
problemas de localización. En primer lugar, pueden aislarse algunos elementos no
célticos, dada la presencia en ellos de una /p/ que el celta perdió: Páramo, quizá
CAPANNA (> cabaña), PALANTIA (> Palencia), y algún otro; para algunos, también
lama 'cieno', aliso o nava 'tierra llana entre montañas' tienen este origen; conocida es la
procedencia «ligur» atribuida al sufijo -asco, frecuente en el Norte peninsular (Velasco,
Biosca, Benasque, etc.). Naturalmente, hay que descartar los numerosos celtismos del
latín difundidos desde éste al romance (camisa, cerveza, legua, carro, carpintero, etc.).
Por otro lado, siempre habrá que contar con que los celtas trajeran a la Península voces
no indoeuropeas, o con que en ésta existieran ya términos que en otras zonas europeas
habían sido incorporados por los celtas: en ninguno de los dos casos se trataría de
«celtismos» propios.
Hechas estas salvedades, del léxico celta peninsular parecen proceder unas pocas
palabras (en menor número, ciertamente, que de otras procedencias): álamo, huelga
'huerta a la orilla de un río' (hoy sólo subsiste en el topónimo Las Huelgas), comba,
brezo, greñón y greña, quizá porra, colmena, gancho, huero y brío, uno de los pocos
términos no materiales de origen prerromano. El sufijo -iego: anda- riego, mujeriego,
gallego, manchego, labriego, etc., es también considerado céltico (aunque en él hayan
confluido luego elementos latinos, y aun posteriores); su mayor presencia parece
haberse dado en el Noroeste de la Península.
La toponimia céltica es más abundante, y delimita bastante bien la zona
indoeuropea peninsular: así, los nombres con -briga ('fortaleza') abundan en todo el
Oeste (aún llegaron a formarse en época romana: juliobriga, Flaviobriga, etc., todos en
el área occidental), con alguna incursión en el Levante (Segóbriga, en Valencia); los
nombres con Seg- ('victoria') se hallan también en el Centro y Oeste: Segovia, Sigüenza;
en cambio, son escasos los topónimos con -dunum, que parecen responder a una
invasión céltica posterior (curiosamente, éstos se dan más en Cataluña y Aragón). El
resto de la toponimia céltica: los derivados de Clunia (como Coruña) o los compuestos
con Argant- 'plata' (Arganda, etc.), y otros, presentan la misma distribución geográfica
que los primeros; aquí la atribución céltica es siempre mucho más segura.
Las colonias fenicias, púnicas y griegas dejaron sólo unos pocos topónimos, aunque
entre ellos figuren algunos muy conocidos. De origen fenicio parece ser el primer
nombre de la Península, el adoptado por los romanos (frente a la [hería de los griegos):
Hispania procede de *i- sephan-im 'isla (costa) de conejos'; tienen la misma
procedencia Cádiz (< GADIR), Málaga, Medina Sidonia (donde se reconoce el Sidón
fenicio), etc. De origen cartaginés son Cartagena (con el ibérico -ena añadido), Mahón
o Ibiza.
266
De los nombres que los griegos dieron a sus enclaves costeros quedaron pocos:
Ampurias, Rosas, etc. Pero ningún helenismo del español pertenece a este primer
contacto del mundo griego con la Península.
Rafael Cano Aguilar, El español a través de los tiempos, págs. 21-25.
El léxico del latín vulgar olvidó muchos términos del clásico, con lo cual se
borraron diferencias de matiz que la lengua culta expresaba con palabras distintas: g r a
n - di s indicaba principalmente el tamaño, y m a g n u s aludía con preferencia a
cualidades morales; el latín vulgar conservó sólo g r a n d i s .Al i u s era 'otro,
diferente'; a l t e r 'otro entre dos, el otro'; pero alter asumió el papel de a l i u s. Muchas
voces clásicas fueron sustituidas por otras que al principio no eran sinónimas de ellas: j
o c u s 'burla' reemplazó a l u d u s 'juego'; casa 'cabaña', a d o m u s; a p r e h e n d e r e
'asir, coger', a d i s c e r e; c a b a l l u s 'caballo de carga, rocín', a e q u u s. Son
frecuentes las metáforas humorísticas: p e r n a 'jamón, pernil' se aplicó a miembros
humanos en lugar de c r u s; t e s t a 'cacharro, tiesto' se empleó para designar la cabeza
(> fr. tete, esp. ant. tiesta), al lado de c a p u t (> it. capo, cato cap); junto a c o m e de r
e (> esp. comer), que sustituyó al clásico e d e r e, cundió m a n d u c a r e (> fr. manger,
prov. manjar), formado por derivación de M a n d u c u s, personaje ridículo de la
comedia. A veces los términos vulgares eran extranjeros: g 1 a d i u s sucumbió ante el
grecismo s p a t h a (> esp. espada y d i v e s ante e germánico r i k s (> rico.
El latín vulgar fue muy aficionado a la derivación. La expresividad afectiva prefería
usar diminutivos como a u r i c u l a, g e n u c u l u m, s o l i c u l u m (> esp. oreja,
hinojo; fr. soleil), en vez de a u r i s, g e n u, s o l. Muchos vocablos con sufijo átono lo
cambiaron por otro acentuado: así r o t u 1 a pasó a r o t e 11 a (> esp. rodilla; f i b u 1 a
a * f i b e 11 a > esp. hebilla. Adjetivos derivados de nombres se sustantivaron: d i u r n
u m (> fr. jour, it. giorno) ocupó el puesto de d i e s en gran parte de la Romania; m a n e
'mañana' (> la man en el Cantar de Mío Cid) decayó ante *m a n e a n a o m a t u t i n u
m (> esp. mañana, ant. matino, fr. matin, it. mattino). La formación verbal fue muy
fecunda también: se crearon verbos derivados de nombres, como de c a r r u s, *c a r r i
c a r e (> esp. cargar), y de f o l l i s, f o l l i c a r e (> esp. holgar); derivados de
adjetivos, como de a l t u s , * a l t i a r e (> alzar) y de a m a r u s, a m a r i c a r e (>
amargar); y derivados de otros verbos. Estos últimos, en especial los frecuentativos
formados sobre participios, tomaron tal incremento que en muchos casos reemplazaron
total o parcialmente a los verbos de que pro- cedían: * a u s a r e (> esp. osar) sustituyó
a a u de re; a d j u t a r e (> ayudar), a a d j u va re; * f i g i c a r e (> port. ficar, esp.
hincar), a f i g e r e; *usare (> usar), a u t i; * a c u t i a re (> aguzar), a a c u e re, etc.
PRUEBA 5 (2)
INVESTIGACIÓN (4)
267
RENOVACIÓN, AÑOS 60
Actividad 1: Lee los textos expositivos siguientes sobre la literatura en los años 60,
subraya lo más importante y elabora al final un tema sobre la literatura es esta etapa.
Actividad 2: Lee el texto explica el contenido y señala los rasgos que lo caracterizan
como monólogo interior.
TEXTO
Los pliegues del corazón y del cerebro de una vieja. La trampa. La femineidad
vuelta astucia cuando la carne ha dejado de ser carne y es solo una materia
indescriptible. La celestina que es celestina para no morir de hambre o para no tener que
269
quitar los visillos de sus ventanas. Para no tener que fregar el suelo siendo viuda de. La
caza. Lan ventajas de la caza sobre la venta o el alquiler. Tenerle del todo, porque al fin
ha caído, y siendo como es, no podrá escapar. Y cumplirá. Qué bien hizo en no dormir.
Las viejas tienen que ser duras. No necesitan dormir. Para qué quieres dormir cuerpo
fatigado si ya no distingues entre el cansancio y el reposo. Para qué queréis cerraros
oídos finísimos a los que todavía no ha llegado el frío de los huesos. Para qué queréis
cerraros párpados con azules bolsas con pliegues, con tegumentos supernumerarios, si
gozáis todavía de la capacidad de ver de noche y asustar al que miréis cara a cara
sabiendo que sabéis lo que él también sabe que habéis visto. ¡Es tan inocente! Su carne
ya no está sobre los que siguen siendo sus huesos, sino en el mejor colchón de la casa.
Su carne ha dado el salto de las generaciones y se ha posado allí, siendo la misma,
dispuesta a sentir lo mismo que ella ha sentido, de lo que se acuerda y todavía puede
imaginar, pero que ya no siente. ¡Al fin! ¡Venganza contra el repugnante protervo
bailarín hembra! ¡Desquite contra el banquero grueso con sus gafas, astuto catador de
mercancías! ¡Al fin! ¡Ríete en la tumba, militarote altivo, correteador de tagalas,
coleccionador de las fotos de las indígenas en cueros, envenenador de la sangre de tu
esposa, perdedor del honor de tu hija única y de tu viuda entregada al rhum negrita!
¡Ríete porque todo ha sido reconstruido y la legalidad de tu apellido, por
acompañamiento de firmas y testigos, de generación en generación!
3.2 AUTORES
El Páramo es una inmensidad desolada, y el día que en el cielo hay nubes, la tierra
parece el cielo y el cielo la tierra, tan desamueblado e inhóspito es. Cuando yo era
chaval el páramo no tenía principio ni fin, ni había hitos en él, ni jalones de referencia.
Era una cosa tan ardua y abierta que solo de mirarle se fatigaban los ojos (...). Padre
solía subir a aquel desierto siempre que se veía forzado a adoptar alguna resolución
importante (...). Yo me sé que Padre subió varias veces al páramo por causa mía, aunque
en verdad yo no fuera culpable de sus disgustos, pues el hecho de que no quisiera
estudiar ni trabajar en el campo no significaba que yo fuera un holgazán. Yo notaba en
mi interior, desde chico, un anhelo exclusivamente contemplativo y tal vez por ello
nunca me interesó el Colegio, ni me interesó la petulancia del profesor, ni el tablero
donde dibujaba con tizas de colores las letras y los números. Y un domingo que Padre se
llegó a la capital para sacarme de paseo, se tropezó en el patio con el Topo, mi profesor,
y fue y le dijo: "¿Qué? Y el maestro respondió: "Malo. De ahí no sacaremos nada; lleva
el pueblo en la cara". Para Padre aquello fue un mazazo y se diría por sus muecas y
aspavientos y el temblorcillo que le agarraba el labio inferior que le había
proporcionado la mayor desilusión de su vida.
Por el verano él trataba de despertar en mí el interés y la afición por el campo. Yo
miraba a los hombres hacer y deshacer en las faenas y Padre me decía: "Vamos, ven
aquí y echa una mano. Y yo echaba, por obediencia, una mano torpe e ineficaz. Y él me
decía: "No es eso, memo. ¿Es que no ves cómo hacen los demás?" Yo sí lo veía y hasta
lo admiraba porque había en los movimientos de los hombres del campo un ritmo casi
artístico y una eficacia palmaria, pero me aburría. Al principio pensaba que a mí me
movía el orgullo y un mal calculado sentimiento de dignidad, pero cuando me fui
conociendo mejor me di cuenta de que no había tal sino una vocación diferente. Y al
cumplir los catorce, Padre me subió al páramo y me dijo: "Aquí no hay testigos.
Reflexiona: ¿quieres estudiar?" Yo le dije: "No". Me dijo: "¿Te gusta el campo?" Yo le
dije: "Sí". Él dijo: "¿Y trabajar en el campo?" Yo le dije: "No". Él entonces me sacudió
el polvo en forma y, ya en casa, soltó al Coqui y me tuvo cuarenta y ocho horas
amarrado a la cadena del perro sin comer ni beber.
ÁNGEL GONZÁLEZ17
17 Nació en Oviedo, en 1925. Se le incluye entre los poetas de los 60, y representa el paso de la poesía
social a nuevos tonos. Junto a la denuncia, cargada de ironía, hallamos el retorno a la poesía íntima. Su
estilo combina sencillez y sutileza.
272
Pero hoy,
cuando es la luz del alba
como la espuma sucia
de un día anticipadamente inútil,
273
estoy aquí,
insomne, fatigado, velando
mis armas derrotadas,
y canto
todo lo que perdí: por lo que muero.
LECTURA 4 (1)
274
La continuidad generacional
Durante la democracia siguen en activo algunos narradores que habían desarrollado
su trayectoria literaria en las décadas anteriores. Miguel Delibes escribe Los santos
inocentes (1981), donde presenta las brutales desigualdades sociales que persisten en el
ámbito rural mediante técnicas narrativas experimentales; Señora de rojo sobre fondo
gris (1991), El hereje (1998), novela histórica cuya acción transcurre en Valladolid
durante la primera mitad del siglo XVI.
Camilo José Cela vuelve la mirada a la Guerra Civil en mazurca para dos muertos
(1983). Gonzalo Torrente Ballester recrea subgéneros como la novela de espías (Quizás
nos lleve el viento al infierno, 1984), histórica (crónica del rey pasmado, 1989, sobre
Felipe IV).
Siguen escribiendo autores de los años cincuenta y sesenta como Ana María Matute,
con Olvidado rey Gudú (1996), donde crea una geografía imaginaria, medievalizante;
Carmen Martín Gaite escribe El cuarto de atrás (1978), novela metaliteraria encuadrada
dentro de la literatura del yo, o Nubosidad variable (1992); Juan Marsé publica El
embrujo de Shanghai (1993) y Juan Benet, Herrumbrosas lanzas (1983-1986) en la que
retoma el tema de la Guerra Civil.
El placer de narrar
Como reacción a la dificultad y al hermetismo, algunos autores reivindican el placer
de narrar, de contar historias que atrapen al lector. De este modo, se recuperan
estrategias narrativas decimonónicas y subgéneros como la novela histórica, policíaca,
etc.
En la trayectoria de Almudena Grandes (1960) se ven dos vertientes: El corazón
helado (2007) inicia un ciclo en el que, con el referente de los episodios nacionales de
Galdós, se novela el pasado reciente de España desde la Guerra Civil; otras con Malena
es un nombre de tango (1998) o Atlas de geografía humana (1998), retratan la
intrahistoria de las clases medias.
275
Otros autores cultivan el realismo de raíz cervantina, como Luis Mateo Díez (1942),
creador del territorio mítico de Celama (La fuente de la edad, 1986), o Luis Landero
(1948), autor de Juegos de la edad tardía (1989); Álvaro Pombo (1939) presenta una
trayectoria narrativa singular. En sus retratos de la burguesía (El héroe de las
mansardas de Mansard (1983), El metro de platino iridiado (1990)) incorpora
reflexiones filosóficas, análisis psicológicos. En otras obras como El cielo raso ((2001)
o Contra natura (2005), cobra importancia el tema de la homosexualidad.
La novela policíaca
Durante las últimas décadas se ha producido un florecimiento de la novela policíaca
y negra, adecuada para mostrar las transformaciones del país, la corrupción o la
injusticia. El autor más relevante es Manuel Vázquez Montalbán (1939-2003), su
detective, Pepe Calvalho, protagoniza las obras como Tatuaje (1974), Los mares del sur
(1979). Cultivan también este género Alicia Giménez Bartlett (1951), creadora de la
inspectora Petra Delicado, Juan Madrid (1947) y su investigador Toni Romano y
Lorenzo Silva (1966), con los guardias civiles Bevilacqua y Chamorro.
La novela histórica
Son muchas las novelas que recrean el pasado, como Mansura (1984), de Félix de
Azúa (1944), No digas que fue un sueño (1986), de Terenci Moix (1942-2003). En
busca del unicornio (1987), de Juan Eslava Galán (1948).
Su principal cultivador es Arturo Pérez Reverte (1951). Entre sus obras sobresalen
las protagonizadas por el capitán Alatriste, ambientadas en el siglo XVII, y otra serie de
relatos sobre el fracaso de ideales ilustrados como Trafalgar (2004), Un día de cólera
(2007), El asedio (2010) y Hombres buenos (2015).
Otras tendencias
Está en auge la literatura autobiográfica, como Mira por dónde (2003), de Fernando
Savater (1947), la serie de diarios Salón de los pasos perdidos, de Andrés Trapiello
(1953). En este terreno fueron destacadas las figuras de Francisco Umbral o Jorge
Semprún.
4.2 Tendencias
1977), J. García Hortelano (Gramática parda, 1985), José María Merino: La orilla
oscura (1985) y El centro del aire (1991). Una síntesis de varias posibilidades
(escritura, lectura, diálogo autorreflexivo) la llevó a cabo Juan José Millás en El
desorden de tu nombre (1988).
Otra tendencia es la novela lírica, que centra el máximo interés en el texto y en la
calidad poética. Es la modalidad preferida por Francisco Umbral en muchas de sus
novelas y de Julio Llamazares en La lluvia amarilla (1988). En esta tendencia aparece
también el relato de aprendizaje, en el cual se desarrolla un individuo en formación, la
autobiografía. A estas características responden algunas novelas de Javier Marías:
Todas las almas (1989) y Corazón tan blanco (1992).
Con gran interés se ha recurrido a la novela histórica: Urraca (1982), de Lourdes
Ortiz, La verdad sobre el caso Savolta y La ciudad de los prodigios, de Eduardo
Mendoza, En busca del unicornio (1987), de Juan Eslava Galán, El hereje (1998), de
Miguel Delibes, El capitán Alatriste (1998), de Arturo Pérez Reverte, Soldados de
Salamina (2001), de Javier Cercas ... Quizás influenciados por el éxito de El nombre de
la rosa (1980), de Umberto Eco, este tipo de novelas ha tenido un gran auge.
Algo relacionadas con la historia, referidas al pasado inmediato, se encuentran las
crónicas y novelas generacionales, como La noche que llegué al café Gijón (1977(, de
Francisco Umbral. La formación en los años franquistas aparece en La noche en casa
(1977), El río de la luna (1981) de José María Guelbenzu; la transición democrática en
Los dioses de sí mismos (1989), de Armas Marcelo, Obabakoak (1988), de Bernardo
Atxaga, recuerdos ambientados en un lugar ficticio; El hombre solo (1993) supone un
cambio en su narrativa hacia el realismo, ambientada en la Barcelona olímpica.
La novela de intriga con esquemas policíacos está representada por las obras de
Manuel Vázquez Montalbán, en las obras que tienen por protagonista al detective
Calavalho (Asesinato en el Comité Central (1981) o El hombre de mi vida (2000)). Las
fórmulas de la novela policíaca se encuentran también en La tabla de Flandes (1990),
de Arturo Pérez Reverte, y con mezclas de la novela negra en La verdad sobre el caso
Savolta, de Eduardo Mendoza, autor también de obras como El misterio de la cripta
embrujada (1979), El laberinto de las aceitunas (1982) y La aventura del tocador de
señoras (2001), y El invierno en Lisboa (1987), de Antonio Muñoz Molina.
Las novelas realistas son, tras los experimentos, más complejas. Se trata de
diferentes tipos de realismo que postulan una concepción abierta de la realidad, en la
que también tienen cabida lo imaginario y lo soñado y hasta lo irracional y lo absurdo.
La recreación del pasado durante la dictadura franquista constituye uno de los temas
preferidos por Luis Mateo Díez en La fuente de la edad (1986), El expediente del
náufrago (1992). De realismo imaginario podemos calificar la obra de Luis Landero y
su novela Juegos de la edad tardía (1989), por su propuesta de escapar de la vulgaridad
cotidiana por la vía de la imaginación. El recuerdo y recuperación de nuestras auténticas
raíces en El jinete polaco (1991), de Antonio Muñoz Molina.
También se ha reivindicado la novela de personaje y de introspección
psicológica. De ello son ejemplos algunas obras de Soledad Puértolas, Javier Marías,
Javier García Sánchez, autor del diario novelado El mecanógrafo (1989), Álvaro Pombo
en El metro de platino iridiado (1990), Alejandro Gándara, con Ciegas esperanzas
(1992), densa alegoría con un hombre enfrentado a su propio miedo.
4.3 Autores
Luis Mateo Díez, nacido en Villablino, León en 1942, que desde 1969 trabajó
como técnico en el ayuntamiento de Madrid. En 2000 fue elegido miembro de la RAE.
Sus obras presentan, en general, una visión crítica de la vida provinciana.
Sobresalen la degradación, el egoísmo, la soledad, las limitaciones culturales y físicas.
Su estilo se caracteriza por los artificios retóricos, con rasgos esperpénticos y paródicos.
278
Entre sus obras citamos Las estaciones provinciales (1982), La fuente de la edad
(1986), El expediente del náufrago (1992). En El espíritu del páramo (1996) y La ruina
del cielo (1999) aparece el territorio mítico de Celama.
Con Las horas completas (1990) logra una de sus mejores obras. En ellas siempre
destaca el diálogo, el humor, la pintura de caracteres y de personajes curiosos.
En 2009 escribe El animal piadoso y en 2012 publica La cabeza en llamas.
Alterna la novela con el periodismo. Se dio a conocer en 1979 con Crónica del
desamor, novela influida por su oficio y centrada en una mujer periodista. En 1983
publica una obra de acento realista, Te trataré como a una reina. En Bella y oscura
(1993) da cabida a la fantasía. La hija del caníbal (1997), novela de intriga, nos lleva al
misterio de la desaparición de un personaje. En 2005 publica Historia del rey
transparente, en 2011, Lágrimas en la lluvia y en 2013, La ridícula idea de no volver a
verte.
http://www.lenguayliteratura.net/index.php?
option=com_content&view=article&id=32:novela-actual&catid=18:historia-de-la-
literatura&Itemid=61
280
Forman esta generación autores nacidos en los años cuarenta que provienen del
teatro independiente. Destacan por las siguientes características:
José Luis Alonso de Santos (1942). Es uno de los autores más importantes del
último tercio del siglo XX. Su teatro parte de un conflicto existencia del hombre entre la
realidad y el deseo, y contiene un enfoque crítico hacia la sociedad en el que sobresalen
el humorismo y la ternura. Se distinguen tres etapas en su teatro:
1. Teatro con referencias literarias. Son obras que tienen como objetivo conmover y
divertir: Viva el duque, nuestro dueño (1975), El combate de don Carnal y doña
Cuaresma (1977), La verdadera y singular historia de la princesa y el dragón (1979).
2. Teatro realista desde una nueva perspectiva. Son crónicas del Madrid de los
ochenta. Presentan una nueva temática social como la droga o el desencanto con
personajes humildes, perdedores y fracasados. La estanquera de Vallecas (1981), El
álbum familiar (1982), Bajarse al moro (1985).
282
3. Teatro comercial. Utiliza la comedia más amable ya en los años noventa en obras
como La sombra del Tenorio (1995), Yonquis y yanquis (2012).
José Sanchís Sinisterra (1940). Actor, director, con influencia de Brecht, pretende
hacer un teatro revolucionario en el que se mezcla el compromiso ético y político con
preocupaciones estéticas. Utiliza recursos como la intertextualidad, el humor, el teatro
dentro del teatro y las canciones. Entre sus obras, ¡Ay Carmela! (1986), El cerco de
Leningrado (1994), El lector por horas (1999).
Autores
Ernesto Caballero (1958). Graduado en la RESAD (Real Escuela Superior de Arte
Dramático), es autor y director. El humor, la ironía y la ternura son constantes en su
teatro. Entre sus obras destacamos El cuervo graznador grita venganza (1985), Aquash
(1986), El insensible (1995).
6. LA POESÍA ACTUAL
poetas de esta generación evolucionan hacia planteamientos más cercanos como Luis
Alberto de Cuenca.
2. Ambientación urbana y contemporánea. En los poemas de esta tendencia el lector
encuentra bares, taxis, teléfonos que los sitúan en el contexto de las España de la época.
3. Ficcionalización del yo e inclusión de elementos narrativos. Con frecuencia se
configura un yo poético diferente del autor. Los poemas cuentan una historia o anécdota
don una progresión argumental.
4. Función civil de la poesía y temática amorosa. La poesía debe enraizarse en la
realidad histórica y servir como reducto de los valores éticos esenciales (dignidad,
solidaridad...) frente a una sociedad deshumanizada. El amor es uno de los temas
fundamentales, como Usted (1986) de Almudena Guzmán; Un caso sencillo (1986), de
Benjamín Prado; o Completamente viernes (1998), de García Montero.
5. Tono conversacional. Se usa, en general, un lenguaje conversacional, coloquial,
que recurre a la ternura a fin de garantizar la comunicación con el receptor.
6. Recuperación de formas métricas tradicionales. Frente a la tendencia al verso
libre de los Novísimos, se vuelve al verso medido (heptasílabos, endecasílabos y
alejandrinos).
formal que cuajó en la llamada poesía del silencio, también llamada abstracta,
metafísica o neopurista.
Entre los temas destacamos:
1. Reflexión metalingüística sobre el lenguaje. El lenguaje es, para algunos de estos
autores, el fundamento del ser, de modo que las palabras dan realidad a las cosas y
permiten al ser humano orientarse en el mundo.
2. Preocupación por la muerte. Se indaga entre la vida y la muerte. Este tema
vertebra los poemarios Libro del frío (1992-2004), de Gamoneda, y fragmentos de un
libro futuro (2000), de Valente.
3. Apertura ala trascendencia y afán de alcanzar el absoluto o la plenitud.
Esta tendencia, iniciada por Jaime Siles (Música de agua, 1983), cuenta con
seguidores como Andrés Sánchez Robayna (Palmas sobrela losa fría, 1989) o Clara
Janés (Rosas de fuego, 1996).
Poesía reciente
En el cambio de siglo, los poetas de la experiencia y del silencio evolucionan hacia
un espacio compartido. Confluyen en una poesía meditativa que oscila entre la
celebración de la existencia y la melancolía por el paso del tiempo (escaparate de
venenos (2000), de Felipe Benítez). Pero resulta difícil sistematizar la gran variedad de
corrientes poéticas de los últimos años como el neosurrealismo de Blanca Andreu, el
erotismo de Ana Rosseti o Almudena Guzmán, el noexistencialismo de Amalia Iglesias
o Luisa Castro, la poesía épica de César Antonio de Molina, etc.
En los últimos años parece manifestarse un rechazo al relativismo moral de las
tendencias dominantes, a favor de un compromiso social. Fernando Beltrán publica una
antología con el título El hombre de la calle (2001), que apuesta por una poesía
comprometida que trata temas como la globalización, la ecología, el subdesarrollo, etc.
Es una poesía rehumanizada, reflexiva, que manifiesta ciertas preocupaciones
existenciales. Entre los poetas destacan Jorge Reichmann (El día que dejé de leer El
País y Poesía desabrigada, 2006), Ana Merino (La voz de los relojes, 2000), Lorenzo
Oliván (Libro de los elementos, 2001), Carlos Marzal (El corazón perplejo, 2005) o
Vicente Gallego (La plata de los días, 1996).
LA POESÍA HISPANOAMERICANA EN EL XX
Índice
César Vallejo (Perú, 1892- París, 1938). Su poesía combina la experimentación con
los contenidos profundamente humanos. Su primer libro (Los heraldos negros, 1919)
presenta todavía rasgos modernistas, pero apunta una gran sensibilidad hacia el dolor.
Rasgo característico de su estilo es la ruptura de frases hechas coloquiales para obtener
efectos expresivos. En Trilce (1922) adopta el verso libre, renuncia a la lógica y
descoyunta la sintaxis. En Poemas humanos (1939) se destaca la solidaridad con el
sufrimiento ajeno. Destaca la sección España, aparta de mí este cáliz, sobre la Guerra
Civil.
Octavio Paz nació en 1914 en Ciudad de México, donde falleció en 1998. Además
de poeta es también un importante ensayista. Viajó por varios países como diplomático
y profesor. Recibió el Premio Nobel en 1990.
En su poesía se aprecian varias influencias: las vanguardias, especialmente el
surrealismo, la poesía barroca española y la cultura oriental (vivió en la India entre 1962
y 1968). Incorpora la influencia surrealista en su libro Libertad bajo palabra (1935-
1958). En él considera la palabra como la forma más alta de comunicación. En
Salamandra (1958-1961) se acentúa el irracionalismo en poemas de gran hermetismo.
La salamandra, capaz de vivir en el fuego, simboliza los polos opuestos del existir: la
vida, el abismo del no ser y la resurrección.
Avanza en la línea experimental en dos libros de 1968, Discos visuales y Topoemas.
En su última época, el lenguaje modera su experimentalismo, aunque mantiene su
complejidad en libros como Vuelta (1976) y Árbol adentro (1987).
3. Pablo Neruda
3.1 Vida
Pseudónimo de Neftalí Ricardo Reyes, nació en Parral (Chile) en 1904. Se crió en
Temuco y falleció en Santiago de Chile en 1973. Fue diplomático, por lo que viajó por
numerosos países, entre ellos España (1934-1938), donde apoyó la causa republicana en
la Guerra Civil y empezó a militar en el Partido Comunista. Recibió el Premio Nobel de
Literatura en 1971.
Su tercer ciclo.
Esta característica continuará en los primeros poemas del volumen titulado Tercera
Residencia. Pero en los poemas "Las furias y las penas", "Reunión bajo las nuevas
banderas", en España en el corazón (1937, incluido en 1947 en su Tercera residencia)y
en los poemas alusivos a la Guerra Mundial incluidos en Tercera Residencia, Neruda
encuentra la materia para su canto épico: a partir de este momento, el poeta será el
cantor del movimiento comunista. Sus cantos tendrán la grandeza de la lucha, del fuego
y del fervor incondicional. Esta poesía comprometida fluye directa, sin las vacilaciones
de Residencia en la Tierra, llena de exclamaciones y de imágenes deslumbrantes. El
universo de Pablo Neruda tiene ya un sentido, su poesía propone un ideal.
Pero donde Pablo Neruda llega a la total posesión del objetivo bajo la forma de un
ideal es en el extenso poema Canto General (1950), terminado de escribir en 1949. El
poema se divide en quince partes.
Canto general es un libro complejo, con toda la grandeza que tiene la poesía de
Neruda, pero a la vez con todo el lastre que lleva siempre la poesía comprometida. A
partir del Canto la obra de Neruda parece emprender un nuevo rumbo. Desde Todo el
amor (1953), poema puramente amoroso, pasando por Las uvas y el viento (1954), que
levantó polémicas (lo escribió en Capri y canta "la libertad del viento, la paz entre las
uvas", con absoluta sencillez y sin olvidarse de sus ardientes alusiones políticas),
parecía en busca de un nuevo tono que se afirmó en las Odas elementales (1954) y en
Nuevas odas elementales (1955), obras que inician una especie de tercera época en la
poesía nerudiana, En un lenguaje perfectamente accesible, Neruda se convierte en un
poeta sencillo y afable que celebra los seres humildes y los objetos cotidianos. Como
indican sus títulos, el autor canta las cosas simples y elementales: la alcachofa, el cobre,
la cebolla, el caldillo de congrio, el hilo, la madera, la pobreza, el tomate, el traje, el
aceite, los calcetines, el jabón, la lagartija, la papa.
290
20
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Escribir, por ejemplo: "La noche está estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos".
El viento de la noche gira en el cielo y canta.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.
En las noches como esta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.
Ella me quiso, a veces yo también la quería.
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.
Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como al pasto el rocío.
Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche está estrellada y ella no está conmigo.
Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.
Mi alma no se contenta con haberla perdido.
Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.
La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.
Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.
De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.
Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.
Porque en noches como esta la tuve entre mis brazos,
mi alma no se contenta con haberla perdido.
Aunque este sea el último dolor que ella me causa,
y estos sean los últimos versos que yo le escribo.
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292
Índice
1. La narrativa hispanoamericana
1.1 La renovación
1.2 El boom
1.3 La novela actual
1. La narrativa hispanoamericana
En los primeros treinta años del siglo surge en América un nuevo realismo centrado
en cuestiones americanas relacionadas con la geografía, los problemas sociales y
políticos, la población indígena.
Se distinguen en este movimiento tres tendencias:
2.ª La novela indigenista o social que denuncia la explotación de los indios, con
Jorge Icaza, Huasipungo (1934) o Ciro Alegría, El mundo es ancho y ajeno (1941).
Autores
Juan Rulfo (1917-1986). Nació en Apulco (México). Durante la revolución
murieron sus padres. En México DF realizó diversos trabajos. En 1970 recibió el premio
Nacional de las Letras de México y en 1983 el premio Príncipe de Asturias de las
Letras.
La obra de Rulfo se reduce a dos títulos: El llanto en llamas (1933) y Pedro
Páramo (1955). Esta última obra presenta una complejidad estructural que la aparta
totalmente de la narrativa anterior, especialmente por su juego con el punto de vista
narrativo. El paisaje es siempre el mismo: una gran llanura en la que nunca llueve,
valles ardientes, remotos pueblos habitados por gentes solitarias. Como harán Márquez
y Onetti sitúa la acción en una ciudad ficticia, Comala.
Ernesto Sábato (Argentina, 1911- ) Los temas principales de sus obras con la
soledad, la incomunicación, la búsqueda de sentido a la vida y la existencia del mal. Se
inicia su trayectoria con El túnel (1948), continúa con Sobre héroes y tumbas (1961) y
Abaldón el exterminador (1974).
Julio Cortázar (Bélgica, 1914- París, 1984).Es autor de una importante obra
cuentística: Bestiario (1951), Final del juego (1956), Historias de cronopios y de famas
(1962), etc. En sus narraciones utiliza lo fantástico para plantear los temas que le
preocupan. En situaciones realistas, en un mundo cotidiano, irrumpe los insólito, lo
irracional, lo inesperado, que altera la vida rutinaria. Su obra más conocida es Rayuela
(1963), novela experimental.
Mario Vargas Llosa (Perú, 1936- ) La fama le llegó con La ciudad y los perros
(1963), premio de la Crítica ese mismo año. La acción se sitúa en el colegio militar
Leoncio Prado de Lima. Allí están los perros –estudiantes recién llegados-, que
constituyen un grupo cuyo jefe es el Jaguar. El Esclavo, joven tímido y débil denuncia
al culpable del robo de un examen de química y es asesinado en unas maniobras. Su
amigo el Poeta denuncia al Jaguar como autor del crimen. En realidad estamos ante un
tema clásico en la literatura hispanoamericana: la oposición entre civilización y
barbarie. Otras novelas son Conversación en la catedral (1969), La casa verde (1966),
295
La fiesta del chivo (2000). Es autor de cuentos como Los jefes (1959), Los cachorros
(1967).
ANTOLOGÍA
Sé que me acusan de soberbia, y tal vez de misantropía, y tal vez de locura. Tales
acusaciones (que yo castigaré a su debido tiempo) son irrisorias. Es verdad que no salgo
de mi casa, pero también es verdad que sus puertas (cuyo número es catorce 18) están
abiertas día y noche a los hombres y también a los animales. Que entre el que quiera.
No hallará pompas mujeriles aquí ni el bizarro aparato de los palacios pero si la quietud
y la soledad. Asimismo hallará una casa como no hay otra en la faz de la tierra.
(Mienten los que declaran que en Egipto hay una parecida). Hasta mis detractores
admiten que no hay un solo mueble en la casa. Otra especie ridícula es que yo, Asterión,
soy un prisionero. ¿Repetiré que no hay una puerta cerrada, añadiré que no hay una
cerradura? Por lo demás, algún atardecer he pisado la calle; si antes de la noche volví, lo
hice por el temor que me infundieron las caras de la plebe, caras descoloridas y
aplanadas, como la mano abierta. Ya se había puesto el sol, pero el desvalido llanto de
un niño y las toscas plegarias de la grey dijeron que me habían reconocido. La gente
oraba, huía, se prosternaba; unos se encaramaban al estilóbato del templo de las Hachas,
otros juntaban piedras. Alguno, creo, se ocultó en el mar. No en vano fue una reina mi
madre; no puedo confundirme con el vulgo, aunque mi modestia lo quiera.
El hecho es que soy único. No me interesa lo que un hombre pueda trasmitir a otros
hombres; como el filósofo, pienso que nada es comunicable por el arte de la escritura.
Las enojosas y triviales minucias no tienen cabida en mi espíritu, que está capacitado
para lo grande; jamás he retenido la diferencia entre una letra y otra. Cierta impaciencia
generosa no ha consentido que yo aprendiera a leer. A veces lo deploro, porque las
noches y los días son largos.
Claro que no me faltan distracciones. Semejante al carnero que va a embestir, corro
por las galerías de piedra hasta rodar al suelo, mareado. Me agazapo a la sombra de un
aljibe o a la vuelta de un corredor y juego a que me buscan. Hay azoteas desde las que
me dejo caer, hasta ensangrentarme. A cualquier hora puedo jugar a estar dormido, con
los ojos cerrados y la respiración poderosa. (A veces me duermo realmente, a veces ha
cambiado el color del día cuando he abierto los ojos). Pero de tantos juegos el que
prefiero es el de otro Asterión. Finjo que viene a visitarme y que yo le muestro la casa.
Con grandes reverencias le digo: Ahora volvemos a la encrucijada anterior o Ahora
desembocaremos en otro patio o bien decía yo que te gustaría la canaleta o Ahora verás
una cisterna que se llenó de arena o Ya verás como el sótano se bifurca. A veces me
equivoco y nos reímos buenamente los dos.
No solo he imaginado esos juegos; también he meditado sobre la casa. todas las
partes de la casa están muchas veces, cualquier lugar es otro lugar. No hay un aljibe, un
patio, un abrevadero, un pesebre; son catorce [son infinitos] los pesebres, abrevaderos,
patios, aljibes. La casa es del tamaño del mundo; mejor dicho, es el mundo. Sin
embargo, a fuerza de fatigar patios con un aljibe y polvorientas galerías de piedra gris
he alcanzado la calle y he visto el templo de las Hachas y el mar. Eso no lo entendí hasta
que una visión de la noche me reveló que también son catorce [son infinitos] los mares
y los templos. Todo está muchas veces, catorce veces, pero dos cosas hay en el mundo
18 Sobran motivos para creer inferir que, en boca de Asterión, el número catorce vale por infinitos.
299
que parecen estar una sola vez: arriba, el intrincado sol; abajo, Asterión. Quizá yo he
creado las estrellas y el sol la enorme casa, pero ya no me acuerdo.
Cada nueve años entran en la casa nueve hombres para que yo los libere de todo
mal. Oigo sus pasos o su voz en el fondo de las galerías de piedra y corro alegremente a
buscarlos. La ceremonia dura pocos minutos. Uno tras otro caen sin que yo me
ensangriente las manos. Donde cayeron, quedan, y los cadáveres ayudan a distinguir
una galería de las otras. Ignoro quiénes son, pero sé que uno de ellos profetizó, en la
hora de su muerte, que alguna vez llegaría mi redentor. Desde entonces no me duele la
soledad, porque sé que vive mi redentor y al fin se levantará sobre el polvo. Si mi oído
alcanza todos los rumores del mundo, yo percibiría sus pasos. Ojalá me lleve a un lugar
con menos galerías y menos puertas. ¿Como será mi redentor?, me pregunto.
¿Será un toro o un hombre? ¿Será tal vez un toro con cara de hombre? ¿O será
como yo?
El sol de la mañana reverberó en la espada de bronce. Ya no quedaba ni un vestigio
de sangre.
-¿Lo creerás, Ariadna? - dijo Teseo -. El minotauro apenas se defendió.
Cuestiones:
1. Borges reinterpreta el mito de Teseo y el minotauro en el laberinto. Resume el
argumento de la historia mitológica y compáralo con la información del autor.
2. Observa los tres tipos de narradores y justifica su presencia en el texto.
*****
Los primeros niños que vieron el promontorio oscuro y sigiloso que se acercaba por
el mar, se hicieron la ilusión de que era un barco enemigo. Después vieron que no
llevaba banderas ni arboladura, y pensaron que fuera una ballena. Pero cuando quedó
varado en la playa le quitaron los matorrales de sargazos, los filamentos de medusas y
los restos de cardúmenes y naufragios que llevaba encima, y solo entonces descubrieron
que era un ahogado.
Habían jugado con él toda la tarde, enterrándolo y desenterrándolo en la arena,
cuando alguien los vio por casualidad y dio la voz de alarma en el pueblo. Los hombres
que lo cargaron hasta la casa más próxima notaron que pesaba más que todos los
muertos conocidos, casi tanto como un caballo, y se dijeron que tal vez había estado
demasiado tiempo a la deriva y el agua se le había metido dentro de los huesos. Cuando
lo tendieron en el suelo vieron que había sido mucho más grande que todos los
hombres, pues apenas si cabía en la casa, pero pensaron que tal vez la facultad de seguir
creciendo después de la muerte estaba en la naturaleza de muertos ahogados. Tenía el
olor del mar, y solo la forma permitía suponer que era el cadáver de un ser humano
porque su piel estaba revestida de una coraza de rémora y de lodo.
No tuvieron que limpiarle la cara para saber que era un muerto ajeno. El pueblo
tenía apenas unas veinte casas de tablas, con patios de piedras sin flotes, desperdigadas
en el extremo de un cabo desértico. La tierra era tan escasa, que las madres andaban
siempre con el temor de que el viento se llevara a los niños, y a los pocos muertos que
les iban causando los años tenían que tirarlos en los acantilados. Pero el mar era manso
y pródigo, y todos los hombres cabían en siete botes. Así que cuando encontraron el
300
ahogado les bastó con mirarse los unos a los otros para darse cuenta de que estaban
completos.
Aquella noche no salieron a trabajar en el mar. Mientras los hombres averiguaban si
no faltaba alguien en los pueblos vecinos, las mujeres se quedaron cuidando al ahogado.
Le quitaron el lodo con tapones de esparto, le desenredaron del cabello los abrojos
submarinos y le rasparon la rémora con fierros de desescamar pescados. A medida que
lo hacían, notaron que su vegetación era de océanos remotos y de aguas profundas, y
que sus ropas estaban en piltrafas, como si hubiera navegado por entre laberintos de
corales. Notaron también que sobrellevaba la muerte con altivez, pues no tenía el
semblante solitario de los otros ahogados del mar, ni tampoco la catadura sórdida y
menesterosa de los ahogados fluviales. Pero solamente cuando acabaron de limpiarlo
tuvieron conciencia de la clase de hombre que era, y entonces se quedaron sin aliento.
No solo era el más alto, el más fuerte, el más viril y el mejor armado que habían visto
jamás, sino que todavía cuando lo estaban viendo no les cabía en la imaginación.
No encontraron en el pueblo una cama bastante grande para tenderlo ni una mesa
bastante sólida para velarlo. No le vinieron los pantalones de fiesta de los hombres más
altos, ni las camisas dominicales de los más corpulentos, ni los zapatos del mejor
plantado. Fascinadas por su desproporción y su hermosura, las mujeres decidieron
entonces hacerle unos pantalones con un buen pedazo de vela cangreja, y una camisa de
bramante de novia, para que pudiera continuar su muerte con dignidad. Mientras cosían
sentadas en círculo, contemplando el cadáver entre puntada y puntada, les parecía que el
viento no había sido nunca tan tenaz ni el Caribe había estado nunca tan ansioso como
aquella noche, y suponían que esos cambios tenían algo que ver con el muerto.
Pensaban que si aquel hombre magnífico hubiera vivido en el pueblo; su casa habría
tenido las puertas más anchas, el techo más alto y el piso más firme; y el bastidor de su
cama habría sido de cuadernas maestras con pernos de hierro, y su mujer habría sido la
más feliz. Pensaban que habría tenido tanta autoridad que hubiera sacado los peces del
mar con solo llamarlos por sus nombres, y habría puesto tanto empeño en el trabajo que
hubiera hecho brotar manantiales de entre las piedras más áridas, y hubiera podido
sembrar flores en los acantilados. Lo compararon en secreto con sus propios hombres,
pensando que no serían capaces de hacer en toda una vida lo que aquel era capaz de
hacer en una noche, y terminaron por repudiarlos en el fondo de sus corazones como los
seres más escuálidos y mezquinos de la tierra. Andaban extraviadas por esos dédalos de
fantasía, cuando la más vieja de las mujeres, que por ser la más vieja había contemplado
al ahogado con menos pasión que compasión, suspiró:
- Tiene cara de llamarse Esteban.
Era verdad. A la mayoría le bastó con mirarlo otra vez para comprender que no
podía tener otro nombre. Las más porfiadas, que eran las más jóvenes, se mantuvieron
con la ilusión de que al ponerle la ropa, tendido entre flores y con unos zapatos de
charol, pudiera llamarse Lautaro. Pero fue una ilusión vana. El lienzo resultó escaso, los
pantalones mal cortados y peor cosidos le quedaron estrechos, y las fuerzas ocultas de
su corazón hacían saltar los botones de la camisa. Después de la media noche se
adelgazaron los silbidos del viento y el mar cayó en el sopor del miércoles. El silencio
acabó con las últimas dudas: era Esteban. Las mujeres que lo habían vestido; las que lo
habían peinado, las que le habían cortado las uñas y raspado la barba no pudieron
reprimir un estremecimiento de compasión, cuando tuvieron que resignarse a dejarlo
tirado por los suelos. Fue entonces cuando comprendieron cuánto debió haber sido de
infeliz con aquel cuerpo descomunal, si hasta después de muerto le estorbaba. Lo vieron
condenado en vida a pasar de medio lado por las puertas, a descalabrarse con los
travesaños, a permanecer de pie en las visitas sin saber qué hacer con sus tiernas y
301
rosadas manos de buey de mar, mientras la dueña de casa buscaba la silla más resistente
y le suplicaba muerta de miedo siéntese aquí Esteban, hágame el favor, y él recostado
contra las paredes, sonriendo, no se preocupe señora, así estoy bien, con los talones en
carne viva y las espaldas escaldadas de tanto repetir lo mismo en todas las visitas, no se
preocupe señora, así estoy bien, solo para no pasar por la vergüenza de desbaratar la
silla, y acaso sin haber sabido nunca que quienes le decían no te vayas Esteban, espérate
siquiera hasta que hierva el café, eran los mismos que después susurraban ya se fue el
bobo grande, qué bueno ya se fue el tonto hermoso. Esto pensaban las mujeres frente al
cadáver un poco antes del amanecer. Más tarde, cuando le taparon la cara con un
pañuelo para que no le molestara la luz, lo vieron tan muerto para siempre, tan
indefenso, tan parecido a sus hombres, que se les abrieron las primeras grietas de
lágrimas en el corazón. Fue una de las más jóvenes la que empezó a sollozar. Las otras,
alentándose entre sí pasaron de los suspiros a los lamentos, y mientras más sollozaban
más deseos sentían de llorar, porque el ahogado se les iba volviendo cada vez más
Esteban, hasta que lo lloraron tanto que fue el hombre más desvalido de la tierra, el más
manso y el más servicial, el pobre Esteban: Así que cuando los hombres volvieron con
la noticia de que el ahogado no era tampoco de los pueblos vecinos, ellas sintieron un
vacío de júbilo entre las lágrimas.
- ¡Bendito sea Dios -suspiraron-: es nuestro!
Los hombres creyeron que aquellos aspavientos no eran más que frivolidades de
mujer. Cansados de las tortuosas averiguaciones de la noche, lo único que querían era
quitarse de una vez el estorbo del intruso antes de que prendiera el sol bravo de aquel
día árido y sin viento. Improvisaron unas angarillas con restos de trinquetes y botavaras,
y las amarraron con carlingas de altura, para que resistieran el peso del cuerpo hasta los
acantilados. Quisieron encadenarle a los tobillos un ancla de buque mercante para que
fondeara sin tropiezos en los mares más profundos donde los peces son ciegos y los
buzos se mueren de nostalgia, de manera que las malas corrientes no fueran a devol-
verlo a la orilla, como había sucedido con otros cuerpos. Pero mientras más se
apresuraban, más cosas se les ocurrían a las mujeres para perder el tiempo. Andaban
como gallinas asustadas picoteando amuletos de mar en los arcones, unas estorbando
aquí porque querían ponerle al ahogado los escapularios del buen viento, otras
estorbando allá para abrocharle una pulsera de orientación, y al cabo de tanto quítate de
ahí mujer, ponte donde no estorbes, mira que casi me haces caer sobre el difunto, a los
hombres se les subieron al hígado las suspicacias, y empezaron a rezongar que con qué
objeto tanta ferretería de altar mayor para un forastero, si por muchos estoperoles y
calderetas que llevara encima se lo iban a masticar los tiburones, pero ellas seguían
tricotando sus reliquias de pacotilla, llevando y trayendo, tropezando, mientras se les iba
en suspiros lo que no se les iba en lágrimas, así que los hombres terminaron por
despotricar que de cuándo acá semejante alboroto por un muerto al garete, un ahogado
de nadie, un fiambre de mierda. Una de las mujeres, mortificada por tanta indolencia, le
quitó entonces al cadáver el pañuelo de la cara, y también los hombres se quedaron sin
aliento.
Era Esteban. No hubo que repetirlo para que lo reconocieran. Si les hubieran dicho
Sir Walter Ralelgh, quizás, hasta ellos se habrían impresionado con su acento de gringo,
con su guacamaya en el hombro, con su arcabuz de matar caníbales, pero Esteban
solamente podía ser uno en el mundo, y allí estaba tirado como un sábalo, sin botines,
con unos pantalones de sietemesino y esas uñas rocallosas que solo podían cortarse a
cuchillo. Bastó con que le quitaran el pañuelo de la cara para darse cuenta de que estaba
avergonzado, de que no tenía la culpa de ser tan grande; ni tan pesado ni tan hermoso, y
si hubiera sabido que aquello iba a suceder habría buscado un lugar más discreto para
302
El almohadón de plumas
Horacio Quiroga
Su luna de miel fue un largo escalofrío. Rubia, angelical y tímida, el carácter duro
de su marido heló sus soñadas niñerías de novia. Ella lo quería mucho, sin embargo, a
veces con un ligero estremecimiento cuando volviendo de noche juntos por la calle,
303
echaba una furtiva mirada a la alta estatura de Jordán, mudo desde hacía una hora. Él,
por su parte, la amaba profundamente, sin darlo a conocer.
Durante tres meses -se habían casado en abril- vivieron una dicha especial.
Sin duda hubiera ella deseado menos severidad en ese rígido cielo de amor, más
expansiva e incauta ternura; pero el impasible semblante de su marido la contenía
siempre.
La casa en que vivían influía un poco en sus estremecimientos. La blancura del
patio silencioso -frisos, columnas y estatuas de mármol- producía una otoñal impresión
de palacio encantado. Dentro, el brillo glacial del estuco, sin el más leve rasguño en las
altas paredes, afirmaba aquella sensación de desapacible frío. Al cruzar de una pieza a
otra, los pasos hallaban eco en toda la casa, como si un largo abandono hubiera
sensibilizado su resonancia.
En ese extraño nido de amor, Alicia pasó todo el otoño. No obstante, había
concluido por echar un velo sobre sus antiguos sueños, y aún vivía dormida en la casa
hostil, sin querer pensar en nada hasta que llegaba su marido.
No es raro que adelgazara. Tuvo un ligero ataque de influenza que se arrastró
insidiosamente días y días; Alicia no se reponía nunca. Al fin una tarde pudo salir al
jardín apoyada en el brazo de él. Miraba indiferente a uno y otro lado. De pronto Jordán,
con honda ternura, le pasó la mano por la cabeza, y Alicia rompió en seguida en
sollozos, echándole los brazos al cuello. Lloró largamente todo su espanto callado,
redoblando el llanto a la menor tentativa de caricia. Luego los sollozos fueron
retardándose, y aún quedó largo rato escondida en su cuello, sin moverse ni decir una
palabra.
Fue ese el último día que Alicia estuvo levantada. Al día siguiente amaneció
desvanecida. El médico de Jordán la examinó con suma atención, ordenándole calma y
descanso absolutos.
-No sé -le dijo a Jordán en la puerta de calle, con la voz todavía baja-. Tiene una
gran debilidad que no me explico, y sin vómitos, nada... Si mañana se despierta como
hoy, llámeme enseguida.
Al otro día Alicia seguía peor. Hubo consulta. Constatose una anemia de marcha
agudísima, completamente inexplicable. Alicia no tuvo más desmayos, pero se iba
visiblemente a la muerte. Todo el día el dormitorio estaba con las luces prendidas y en
pleno silencio. Pasábanse horas sin oír el menor ruido. Alicia dormitaba. Jordán vivía
casi en la sala, también con toda la luz encendida. Paseábase sin cesar de un extremo a
otro, con incansable obstinación. La alfombra ahogaba sus pasos. A ratos entraba en el
dormitorio y proseguía su mudo vaivén a lo largo de la cama, mirando a su mujer cada
vez que caminaba en su dirección.
Pronto Alicia comenzó a tener alucinaciones, confusas y flotantes al principio, y que
descendieron luego a ras del suelo. La joven, con los ojos desmesuradamente abiertos,
no hacía sino mirar la alfombra a uno y otro lado del respaldo de la cama. Una noche se
quedó de repente mirando fijamente. Al rato abrió la boca para gritar, y sus narices y
labios se perlaron de sudor.
-¡Jordán! ¡Jordán! -clamó, rígida de espanto, sin dejar de mirar la alfombra.
Jordán corrió al dormitorio, y al verlo aparecer Alicia dio un alarido de horror.
-¡Soy yo, Alicia, soy yo!
Alicia lo miró con extravío, miró la alfombra, volvió a mirarlo, y después de largo
rato de estupefacta confrontación, se serenó. Sonrió y tomó entre las suyas la mano de
su marido, acariciándola temblando.
Entre sus alucinaciones más porfiadas, hubo un antropoide, apoyado en la alfombra
sobre los dedos, que tenía fijos en ella los ojos.
304
Los médicos volvieron inútilmente. Había allí delante de ellos una vida que se
acababa, desangrándose día a día, hora a hora, sin saber absolutamente cómo. En la
última consulta Alicia yacía en estupor mientras ellos la pulsaban, pasándose de uno a
otro la muñeca inerte. La observaron largo rato en silencio y siguieron al comedor.
-Pst... -se encogió de hombros desalentado su médico-. Es un caso serio... poco hay
que hacer...
-¡Solo eso me faltaba! -resopló Jordán. Y tamborileó bruscamente sobre la mesa.
Alicia fue extinguiéndose en su delirio de anemia, agravado de tarde, pero que
remitía siempre en las primeras horas. Durante el día no avanzaba su enfermedad, pero
cada mañana amanecía lívida, en síncope casi. Parecía que únicamente de noche se le
fuera la vida en nuevas alas de sangre. Tenía siempre al despertar la sensación de estar
desplomada en la cama con un millón de kilos encima. Desde el tercer día este
hundimiento no la abandonó más. Apenas podía mover la cabeza. No quiso que le
tocaran la cama, ni aún que le arreglaran el almohadón. Sus terrores crepusculares
avanzaron en forma de monstruos que se arrastraban hasta la cama y trepaban
dificultosamente por la colcha.
Perdió luego el conocimiento. Los dos días finales deliró sin cesar a media voz. Las
luces continuaban fúnebremente encendidas en el dormitorio y la sala. En el silencio
agónico de la casa, no se oía más que el delirio monótono que salía de la cama, y el
rumor ahogado de los eternos pasos de Jordán.
Alicia murió, por fin. La sirvienta, que entró después a deshacer la cama, sola ya,
miró un rato extrañada el almohadón.
-¡Señor! -llamó a Jordán en voz baja-. En el almohadón hay manchas que parecen
de sangre.
Jordán se acercó rápidamente Y se dobló a su vez. Efectivamente, sobre la funda, a
ambos lados del hueco que había dejado la cabeza de Alicia, se veían manchitas oscuras.
-Parecen picaduras -murmuró la sirvienta después de un rato de inmóvil
observación.
-Levántelo a la luz -le dijo Jordán.
La sirvienta lo levantó, pero enseguida lo dejó caer, y se quedó mirando a aquel,
lívida y temblando. Sin saber por qué, Jordán sintió que los cabellos se le erizaban.
-¿Qué hay? -murmuró con la voz ronca.
-Pesa mucho -articuló la sirvienta, sin dejar de temblar.
Jordán lo levantó; pesaba extraordinariamente. Salieron con él, y sobre la mesa del
comedor Jordán cortó funda y envoltura de un tajo. Las plumas superiores volaron, y la
sirvienta dio un grito de horror con toda la boca abierta, llevándose las manos crispadas
a los bandós. Sobre el fondo, entre las plumas, moviendo lentamente las patas velludas,
había un animal monstruoso, una bola viviente y viscosa. Estaba tan hinchado que
apenas se le pronunciaba la boca.
Noche a noche, desde que Alicia había caído en cama, había aplicado sigilosamente
su boca -su trompa, mejor dicho- a las sienes de aquella, chupándole la sangre. La
picadura era casi imperceptible. La remoción diaria del almohadón había impedido sin
duda su desarrollo, pero desde que la joven no pudo moverse, la succión fue vertiginosa.
En cinco días, en cinco noches, había vaciado a Alicia.
Estos parásitos de las aves, diminutos en el medio habitual, llegan a adquirir en
ciertas condiciones proporciones enormes. La sangre humana parece serles
particularmente favorable, y no es raro hallarlos en los almohadones de pluma.
NI DECADENCIA NI CATÁSTROFE
El lenguaje jurídico, como ya hemos dicho, no difiere del lenguaje natural y deriva
de él. Sin embargo la preferencia en el uso de determinadas formas verbales, o de un
léxico definido, le imprimen un carácter determinado. Algunos rasgos son:
1. Uso del gerundio. Es muy abundante su uso en las leyes.
2. Uso frecuente del subjuntivo. En ocasiones se utiliza el pretérito imperfecto de
subjuntivo en lugar de pretérito indefinido de indicativo en lugar de presente de
subjuntivo ("en el modo que el gobierno fijará anualmente", en lugar de "fije
anualmente"). Se emplean los futuros de subjuntivo ("hallare", "hubiere hallado").
3. Uso de galicismos a causa del empleo incorrecto de la preposición "a"; como "el
inmueble a derribar", "la indemnización a percibir", etc.
4. Complejidad sintáctica. Los textos jurídicos se caracterizan por estar formados
por largos períodos sintácticos. Es muy frecuente que la proposición principal se vea
envuelta en un cúmulo de proposiciones subordinadas (sustantivas, adjetivas y
adverbiales) que expresan los más diversos matices, aspectos y circunstancias.
5. Uso de aforismos. Aunque los aforismos denotan siempre un carácter
esencialmente doctrinal, algunos han surgido como adagios en el pueblo, cuyos juicios o
sentimientos de lo injusto y lo justo han constituido lo que todavía se llama "conciencia
jurídica popular". El aforismos en general, es una definición o un elemento constitutivo
u orientador de la definición; evita una explicación y muchas veces expresa un principio
que domina en numerosas disposiciones de una ley. La mayoría de los aforismos fueron
tomados del Derecho Romano, y se caracterizan por la concisión, brevedad y elegancia
de su enunciación. Ej. "La posesión vale título", "Nadie puede transferir lo que no
tiene", o aforismos latinos como: "Omnis definitio in jure civile periculosa est" (Toda
definición es peligrosa en derecho civil).
6. Uso de determinadas fórmulas fraseológicas y léxicas como: "Y por todo ello, ha
de fallar y fallo", "En su defecto...", "Respecto a la presunción de muerte del ausente y
sus efectos, se estará a lo dispuesto en el título VIII de este libro". En ocasiones se
puede hallar en una misma frase el uso de un adjetivo y sustantivo pertenecientes al
mismo lexema: "... de ser conforme de toda conformidad..."
7. El léxico jurídico. Hemos dicho anteriormente que el lenguaje jurídico se mueve
entre el natural y el técnico; por ello, no es de extrañar que su léxico participe de ambas
categorías:
- Existen términos jurídicos "per se", es decir, originariamente jurídicos, pero que se
han integrado en la lengua común desde sus orígenes.
- Hay términos jurídicos procedentes de préstamos -también jurídicos- de otras
lenguas. Las lenguas románicas acudieron al Derecho romano, como fuente inagotable
de varios términos: daño, delito, injuria, etc.
8. Incidencia del lenguaje jurídico en la lengua común. El lenguaje jurídico puede
incidir en la lengua común de varios modos:
a) Por medio de su simple inserción en la lengua común. Así, un término jurídico
puede usarse en el lenguaje común con la misma significación que tiene en el jurídico:
"Hipotecó una casa para comprar una parcela", o en sentido figurado "Hipotecó su
libertad".
b) Por ampliación del significado; ej. "Juan" = cualquier persona que es nombrada
para resolver una duda.
del momento los principios jurídicos. De ahí que mientras el lenguaje jurídico se
esfuerza por la exactitud, claridad y rigor en la formulación de sus principios, el
lenguaje administrativo está menos preocupado por la precisión lingüística, que muchas
veces arropa con expresiones vagas u oscuras.
1) El lenguaje administrativo se caracteriza por la complejidad sintáctica de la
redacción de sus disposiciones.
2) Emplea multitud de fórmulas estereotipadas, como: "De conformidad con lo
dispuesto"; "En ejercicio (uso) de las facultades que me están conferidas"; "En
cumplimiento de lo dispuesto en la norma...". otras veces usa frases que se podrían
sustituir por otras más simples, ej. "Este Ministerio ha tenido a bien disponer..." (Este
Ministerio dispone...)
3) El uso de impersonales: "Se hace público..."; "Se anuncia...". El propio
solicitante se dirige a la autoridad competente en tercera persona (expone, solicita…),
en vez de en primera.
4) El uso de la voz pasiva: "Por el ayuntamiento de X ha sido ofrecido al Estado ...",
etc.
5) El uso de gerundios y la multitud de referencias legislativas.
6) Los principales defectos que se pueden señalar en el lenguaje administrativo son:
un tema distante (por ejemplo, las instancias se redactan en tercera persona, cuando lo
normal sería hacerlo en 10 persona), que, unido muchas veces a una tendencia a la
sucesión de largas oraciones y a la impericia de quienes, en algunas ocasiones, redactan
los documentos administrativos, produce oscuridad y, en no pocas ocasiones, ambigüe-
dad.
Tipología textual
La mayoría de los textos jurídicos y administrativos utilizan la exposición y la
argumentación como modos de discurso. Ofrecen estructuras muy formalizadas que
suelen responder al esquema: preámbulo, cuerpo del texto y final.
Textos legales
-Preceptos fundamentales: Constitución (1978), Estatutos de autonomía, exigen
aprobación por las Cortes, referéndum y sanción real. Publicación en el BOE.
-Leyes. Exigen aprobación por las Cortes, sanción real y promulgación.
-Decretos-Ley. Elaborados por el Gobierno, ratificados por las Cortes, sancionados
por el Rey y publicados en el BOE.
Los Reales Decretos los elabora un Ministerio y aprueba el Consejo de Ministros,
sanciona el Rey y son publicados en el BOE.
Otros textos legales: órdenes ministeriales, resoluciones, circulares, instrucciones…
Actividad
Busca estas palabras en tu diccionario.
Busca en el BOE estos textos legales y analiza su estructura.
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Textos administrativos
En este apartado entrarían actas, circulares, contratos, citaciones, testamentos,
escrituras, instancias, declaraciones juradas, oficios, certificados, etc.
TEXTO
A fondo perdido
Siempre me sorprenden esas personas que demuestran un acendrado amor a los
animales, sobre todo hacia los perros, y una indiferencia absoluta cuando no desprecio u
odio hacia sus semejantes del género humano. Una esperaría que quien es cariñoso,
compasivo y cuidadoso con su perro, con los perros ajenos, e incluso con los perros
perdidos y vagabundos, lo fuera también con su mujer, sus amigos, sus vecinos y los
desgraciados congéneres con quienes se cruza. Pero no siempre es así sino que muchas
veces la misma persona capaz de enfrentarse a alguien o de ponerse en peligro para
defender a un perro, una gaviota, o una ballena, no mueve un dedo, por ejemplo, para
defender a una mujer a quien su pareja está dando una paliza de muerte, o para impedir
un robo, o, sencillamente, para sostener la puerta que va a darle en las narices al que
viene detrás. Como ejemplo de esta conducta les recuerdo que hace unos años en
Inglaterra veintisiete personas vieron a dos niños maltratando a un tercero más
pequeño, al que finalmente acabaron matando. Nadie intervino para evitar el daño, pero
ese mismo día hubo en la ciudad un montón de denuncias por malos tratos a animales.
Un día oí comentar a un hombre mayor que su perro era el que más se alegraba
cuando él entraba en su casa. Obviamente no vivía solo, pero parece que echaba de
menos en su relación con la familia un afecto que solo encontraba en el animal.
Conozco mujeres que viven solas y que se llevan mal con hermanos, sobrinos y
demás parientes, a los que califican de desagradecidos e interesados, y que hablan a su
perro como si se tratara de una persona, y le dejan dormir en su cama y sentarse a su
mesa. Y también conozco a algún hombre divorciado que se desvive para viajar con su
perro, de grandes dimensiones, y que nunca ha querido hacerlo con su hijo, que vive con
la madre. Quizá la clave de esas conductas está en el grado de infidelidad, egoísmo o
ingratitud que estemos dispuestos a soportar de nuestros semejantes. Quizá llega un
momento en que uno se cansa de querer y de dar a fondo perdido y entonces volcamos
nuestra necesidad de amor en los animales: un perro no te engaña, ni te busca las
vueltas, ni te falla cuando más necesitas compañía, ni te dice ay qué pasada eres, ni se
rebela, ni te echa en cara tus defectos, ni te dice esta comida está intragable, ni te pide
dinero, ni pone cara de me tienes hasta el gorro...
Pero también puede ser que algunas personas exijan de los demás una fidelidad, una
atención y una sumisión que solo un animal puede dispensarles. Y que en comparación
con esa fidelidad perruna cualquier crítica o falta de atención la encuentran
insoportable.
En fin, que no lo entiendo y que me gustaría entender cómo alguna gente puede
querer tanto a su perro y ser, por ejemplo, tan cabrona con su pareja. ¡Misterios de la
vida!
1. NIVEL VULGAR
Se trata del nivel inferior que presenta incorrecciones en todos los niveles
lingüísticos. Los vulgarismos pueden ser espontáneos o intencionados. Los
hispanohablantes que no han tenido acceso a la posesión de la cultura, y que se
mantienen en un estrato lingüístico bajo, usan vulgarismos espontáneos de diverso
origen. Así, conservan arcaísmos que desaparecieron en la lengua culta común: trujo
por trajo, mirastes por miraste, etc. Se forja analógicamente el indefinido andé,
cuando la norma exige anduve; la serie traiga, caiga, ha servido de modelo para haiga
por haya. Los regionalismos suelen funcionar también como vulgarismos cuando se
introducen en la lengua común.
Junto a estos vulgarismos que responden a una ignorancia inocente, muchos
hablantes emplean otros vulgarismos que, en su origen, han sido deliberados o
intencionados. Con ellos, sus usuarios pretenden diferenciarse como grupo frente a otros
hablantes a quienes consideran inferiores.
Los principales rasgos de este nivel son:
1) Variaciones de las vocales átonas, causadas por confusión de prefijos o por
acción de los fonemas vecinos: restrojo, espavimentos, intierro, etc.
2) Alteraciones de los diptongos: por reducción, pacencia, anque; por
modificación, azaite.
3) Formación de diptongo con vocales en hiato: baul, maistro ...
4) Desarrollo de una g o b ante diptongo que empieza por u: güele, buevo, ...
5) Cambio de consonante. Así b se convierte en g en güeno, g se convierte en b en
abuja, etc.
6) Alteraciones de grupos formados por dos consonantes, ya por modificación
(colurna), ya por reducción (suscrición).
7) Metátesis o cambio de posición de fonemas dentro del lexema: Grabiel,
humadera, ...
8) Distorsiones sintácticas, muy numerosas y variadas: hubieron muchos
aprobados (hubo); le dije de que no viniese...
Son igualmente vulgarismos fenómenos como la pérdida de la -d- intervocálica, el
seseo, el ceceo, el leísmo, el laísmo, y sobre todo, el loísmo.
312
Hablamos de lenguaje vulgar cuando la cultura del interlocutor es tan limitada que
no sabe cambiar de registro, de nivel. El vulgarismo no es por sí solo un síntoma de
incultura, ni descalifica al que lo emplea culturalmente. Se emplean con frecuencia en el
habla familiar.
- Tendencia a impersonalizar con formas neutras como uno indefinido: (Pues sí que
puede uno fiarse de ti! Empleo de la segunda persona impersonal: vas y no te hacen
ni caso.
- Empleo de interrogaciones retóricas: muy bonito ¿eh?
EL LENGUAJE PROVERBIAL
Los refranes aparecen desde siempre en nuestra lengua. Son muy frecuentes en la
Edad Media y desde aquí, a lo largo de toda la historia literaria.
Los refranes formulan aserciones que se aceptan como válidas y prácticamente
indiscutibles por la comunidad. Tienen una forma fija, que permite retenerlos en la
memoria.
Se trata de frases breves, generalmente construidas con artificios como un ritmo
muy marcado; suelen componerse de dos proposiciones; y es frecuente la rima: ande o
no ande, caballo grande. No es raro que contengan arcaísmos, regionalismos, palabras
inventadas, etc. El verbo suele estar elíptico; usa con frecuencia el tiempo presente, etc.
TEXTO
COMENTARIO CRÍTICO
De conformidad con la opinión actual, la evolución del homo sapiens -el hombre
moderno- comenzó con su inmediato predecesor pre sapiens en un proceso que se
produjo hace aproximadamente cuatro millones de años con la aparición de los ahora
famosos australopitecos - los llamados hombres mono del África meridional y oriental-
y que culminó con el surgimiento del sapiens mismo, hace solamente doscientos o
trescientos mil años. De manera que, por lo menos formas elementales de actividad
cultural o protocultural (simple fabricación de herramientas, caza, etc.) parecen haberse
registrado entre algunos de los australopitecos, y esto indica que hubo un traslado o
superposición de un millón de años entre el comienzo de la cultura y la aparición del
hombre tal como lo conocemos hoy. Las fechas precisas -que son tentativas y que la
ulterior investigación puede alterar en una dirección o en otra- no son importantes; lo
que importa aquí es que hubo un solapamiento, y que fue muy prolongado. Las fases
finales (finales hasta la fecha, en todo caso) de la historia filogenética del hombre se
verificaron en la misma gran era geológica -llamada período glacial- en que se
desarrollaron las fases iniciales de su historia cultural. Los hombres tienen días de
nacimiento. El Hombre no lo tiene.
Esto significa que la cultura, más que agregarse, por así decirlo, a un animal
terminado o virtualmente terminado, fue un elemento constitutivo y un elemento central
en la producción de ese animal mismo. El lento, constante, casi glacial crecimiento de la
cultura a través de la Edad de Hielo alteró el equilibrio de las presiones selectivas para
el homo en evolución de una manera tal que desempeñó una parte esencial de esa
evolución. El perfeccionamiento de las herramientas, la adopción de la caza organizada
y de las prácticas de recolección, los comienzos de organización de la verdadera familia,
el descubrimiento del fuego y lo que es más importante aunque resulte todavía
extremadamente difícil rastrearlo en todos sus detalles, el hecho de valerse cada vez más
de sistemas de símbolos significativos (lenguaje, arte, mito, ritual) en su orientación,
comunicación y dominio de sí mismo fueron todos factores que crearon al hombre un
nuevo ambiente al que se vio obligado a adaptarse. A medida que la cultura se
desarrollaba y acumulaba pasos infinitesimalmente pequeños, ofreció una ventaja
selectiva a aquellos individuos de la población más capaces de aprovecharse de ella -el
cazador eficiente, el persistente recolector de los frutos de la tierra, el hábil fabricante de
herramientas, el líder fecundo en recursos- hasta que lo que fuera el protohumano
Australopitecus de pequeño cerebro se convirtió en el homo sapiens plenamente
humano y de gran cerebro. Entre las estructuras culturales, el cuerpo y el cerebro, se
creó un sistema de realimentación positiva en el cual cada parte modelaba el progreso
de la otra; un sistema en el cual la interacción entre el creciente uso de herramientas, la
cambiante anatomía de la mano y el crecimiento paralelo del pulgar y de la corteza
cerebral es solo uno de los ejemplos más gráficos. En definitiva, al someterse al
gobierno de programas simbólicamente medianos para producir artefactos, organizar la
vida social o expresar emociones, el hombre determinó sin darse cuenta de ello los
estadios culminantes de su propio destino biológico. De manera literal, aunque
absolutamente inadvertida, el hombre se creó a sí mismo.
COMENTARIO CRÍTICO
LA SOCIEDAD INFANTILIZADA
Cada vez que nieva en España, las televisiones se llenan de personas indignadas que
responsabilizan a las autoridades de sus problemas, tanto si eran evitables como si no;
incluso –en el primero de los supuestos– cuando el culpable de esos problemas es el
propio reclamante por no haber atendido las advertencias de precaución o por no
cumplir con su obligación (llevar cadenas en el coche, por ejemplo).
La escena se repite en muchas ocasiones, ya sea a causa de una inundación, un
vendaval, un pedrisco o cualquier otro fenómeno meteorológico. Tanto si se tomaron
como si no todas las medidas de precaución y de ayuda por parte de las autoridades en
el tema, nuestras pantallas se llenarán igualmente de gente vociferante que, aparte de
pedir la dimisión de todas aquellas, desde el Gobierno hasta el alcalde de su pueblo,
exige que el Estado, o sea, todos los demás, le resarza de los perjuicios sufridos; da
igual que no hayan previsto suscribir un seguro de cobertura en caso de ser posible.
E igual pasa cuando un barco es secuestrado en alta mar, un autobús o un tren se
accidentan, un grupo de pasajeros pierde sus vuelos o sus maletas, un militar fallece en
el cumplimiento de su misión o la sequía agosta los campos en algún sitio […] Hasta
cuando la avaricia lleva a algunos a invertir en sociedades de alto riesgo que luego
quiebran o les estafan, la responsabilidad será del Estado, o sea, de los demás, por no
haberles advertido, se supone. Ellos nunca serán los responsables de sus actos, pues para
eso vivimos en una sociedad sin culpa.
Conviene analizar esta actitud, puesto que no parece muy coherente […] El
problema de esta situación es que, al tiempo que el Estado se ha convertido en un padre
que nos lo soluciona, o al menos eso pretende, al estilo de las familias tradicionales y
protectoras, los ciudadanos hemos devenido en niños: niños inermes e irresponsables,
incapaces de hacer nada por nuestra cuenta, puesto que nos falta el hábito. Pero en
nuestra infantilización también nos hemos vuelto quejicas, seres despóticos y exigentes
que, como los infantes de verdad, pensamos que todo nos debe ser resuelto por ese
padre que es el Estado, incluido aquello que no tiene solución […]
En todo caso, y volviendo al origen de esta diatriba, lo que la gente tiene que
comprender es algo tan evidente como que, cuando nieva, no se pueden hacer las
mismas cosas que cuando el cielo está despejado y el suelo limpio.
COMENTARIO LITERARIO