Los Sujetos Del Derecho Internacional
Los Sujetos Del Derecho Internacional
Los Sujetos Del Derecho Internacional
Con esto claro podemos ver que en el derecho internacional de los derechos humanos
establece la obligación de los Gobiernos a actuar de una manera determinada o abstenerse
de emprender ciertas acciones, para promover y proteger los derechos humanos y las
libertades fundamentales de los individuos o de los grupos. Legalmente, se reconocen en el
derecho interno de numerosos Estados y en tratados internacionales. Para muchos, además,
la doctrina de los derechos humanos se extiende más allá del derecho y conforma una base
ética y moral que debe fundamentar la regulación del orden geopolítico contemporáneo.
Desde 1945, fecha de la creación de las Naciones Unidas, se ha buscado siempre avanzar
en el campo de la protección internacional de los derechos humanos, desde el punto normativo
como desde el de la instauración de mecanismos concretos para su protección.
Asimismo hemos podido apreciar los grandes logros de las Naciones Unidas con la creación
de una normativa integral sobre los derechos humanos: un código protegido a nivel universal
e internacional al que todas las naciones pueden adherirse y al que toda persona aspira. Las
Naciones Unidas han definido un amplio abanico de derechos aceptados internacionalmente,
entre los que se encuentran derechos de carácter civil, cultural, económico, político y social.
También han establecido mecanismos para promover y proteger estos derechos y para ayudar
a los Estados a ejercer sus responsabilidades.
LOS SUJETOS DEL DERECHO INTERNACIONAL
Antecedentes.
La concepción y la definición del derecho internacional, tal como han sido propuestas por los
escritores en cualquier periodo de la historia, han ejercido una profunda influencia en el
problema de determinar quiénes son los sujetos de derecho internacional. Así, de acuerdo con
la definición clásica que considera el derecho internacional como un conjunto de normas que
rigen la conducta de los estados, en sus relaciones mutuas, solo estos, los Estados, son
sujetos de derecho internacional.
Sujeto.
El ser un sujeto en un sistema de derecho, o el ser una persona jurídica implica tres elementos:
El estado soberano
La convención de Montevideo de 1933 sobre Derechos y Deberes de los Estados, estableció
que un Estado, como persona de derecho internacional, debe poseer una población
permanente, un territorio definido, un gobierno y la capacidad para establecer relaciones con
otros estados.
El Estado soberano es, por regla general, un Estado en el cual una autoridad política central,
que es el gobierno, representa a dicho Estado interna y externamente. Pero los Estados
pueden adoptar muchas formas constitucionales y políticas diferentes; y resulta útil examinar
estas diversas formas en relación con sus respectivas posiciones como sujetos de derecho
internacional.
Una “unión personal” es el enlace conjunto de dos Estados soberanos a un mismo monarca.
De 1714 a 1837, las coronas de Gran Bretaña y de Hanover estuvieron enlazadas por una
unión personal. En tal unión, los Estados soberanos que la integran continúan siendo personas
internacionales distintas.
La fusión de dos Estados soberanos de manera que se conviertan en una y la misma persona
internacional es descrita como “unión real”. Suecia y Noruega constituyeron un unión real de
1814 a 1905, y la unión real austrohúngara no termino hasta el desplome del Imperio Austro-
Húngaro al finalizar la primera guerra mundial.
Un Estado federal es una unión de varios Estados, la cual esta investida de órganos y poderes
propios que se ejercen tanto sobre los Estados miembros como sobre sus ciudadanos. En los
más importantes Estados federales existentes en la actualidad tales como Estados Unidos de
América y las repúblicas federales latinoamericanas la autoridad federal asume la
responsabilidad de dirigir las relaciones exteriores de la federación, de manera que en lo
concerniente al derecho internacional, generalmente los Estados miembros de la federación
no se tienen en cuenta para nada. En algunos casos, sin embargo, hay Estados miembros de
un Estado federal que poseen algún grado de personalidad en el plano internacional, por
ejemplo, Ucrania y Bielorrusia, republicas integrantes de la URSS, gozan de la condición de
miembros individuales de las Naciones Unidas.
Instituciones internacionales
Por algún tiempo ha sido materia de controversia la cuestión de determinar si las instituciones
internacionales eran sujetos de derecho internacional. De la premisa básica del punto de vista
clásico, se deducía que las instituciones internacionales no podían ser consideradas con el
atributo de la personalidad dentro de dicho sistema legal. Esta opinión se reflejaba,
naturalmente, en la bibliografía del derecho internacional en una época en la cual el desarrollo
y la expansión de las instituciones internacionales habían hecho todavía poco efecto en este
derecho.
El artículo 104 de la carta de las Naciones Unidas obliga a cada miembro de ella a otorgar a la
organización, dentro de su respectivo territorio, “la capacidad jurídica que sea necesaria para
el ejercicio para el ejercicio de sus funciones”.
La capacidad de una institución para unirse a otra o para formar con algunos Estados una
entidad internacional distinta, con personalidad internacional propia, ha sido reconocida y
también ejercida.
El individuo
Todos los individuos gozan de derechos que la comunidad Internacional debe respetar, al
margen si existen Tratados Internacionales o no que obliguen a ello, es decir son derechos
inherentes al ser humano como el derecho a la vida, a no ser esclavizado, a la no
discriminación etc.
En la Práctica Internacional observamos que el ser humano puede ser por lo menos titular de
deberes y obligaciones jurídicas impuestas por el derecho internacional, donde se sanciona
directamente al individuo, lo que se denomina subjetividad Internacional pasiva.
El D.I identifica dos figuras, las cuales constituyen un delito sancionado directamente por este
ordenamiento jurídico Internacional. Éstos son los delitos de piratería y crímenes de guerra
como ser los atentados graves contra las personas y los bienes, en especial el homicidio
intencional, la tortura, los tratos inhumanos, incluidos los experimentos biológicos, entre otros.
La piratería sólo puede ser cometida por particulares y el derecho internacional autoriza a los
Estados a apresar y castigar este delito cometido fuera de su jurisdicción, de acuerdo a sus
leyes internas y ante sus tribunales nacionales.
Algunos autores expresan que estos actos sólo representan casos de ejercicio de jurisdicción
estatal amplia, pero no explica la personalidad jurídica Internacional del individuo.
En el caso segundo, desde que se crearon los Tribunales de Tokio y Núremberg luego de
finalizada la segunda guerra mundial que juzgaron a individuos como criminales de guerra
hasta los actuales Tribunales por crímenes cometidos en la ex -Yugoeslavia, Sierra Leona y
otros, dieron por sentado que los individuos por lo menos son titulares de deberes según las
normas de derecho internacional.
El ser humano por su sola voluntad no puede celebrar tratados, ni acceder directamente a la
Corte Internacional de Justicia, ni a la jurisdicción consultiva de la misma. En la actualidad la
evolución y desarrollo del sistema hace que el individuo sea considerado particularmente en
ciertos ámbitos como en Sistema interamericano de Derechos Humanos. En el ámbito
Europeo se presentan ante la Corte Europea de Derechos Humanos.
Además de los ya descritos, hay otros sujetos menos importantes del derecho internacional
que, sin embargo, ocupan una posición especial en el orden jurídico internacional. Si alguna
característica común puede señalárseles, es que todos carecen de uno u otro de los requisitos
esenciales de un Estado soberano. Es de decir carecen, ya sea de autoridad gubernamental,
de población, de territorio o de soberanía y, especialmente, de soberanía en sus relaciones
exteriores.
La Santa Sede
La Santa Sede y el Estado de la Ciudad del Vaticano (ECV) son, para el Derecho internacional,
sujetos distintos. Tienen diferente naturaleza jurídica (mientras la Santa Sede es el órgano del
gobierno universal de la Iglesia Católica, el ECV es un Estado que garantiza la actuación de la
Santa Sede). Sus fines son distintos: los de la Santa Sede, espirituales y morales; los del ECV,
cubrir el funcionamiento técnico del propio Estado. Por esto, también varía su ámbito de
actuación: sobre materias técnicas el ECV, sobre todo lo relacionado con el hombre
especialmente en el aspecto moral y espiritual, la Santa Sede.
Es una de las más antiguas instituciones de la civilización occidental y cristiana. Como orden
religiosa de la Iglesia católica desde 1113 y sujeto de derecho internacional, la Soberana Orden
de Malta mantiene relaciones bilaterales con más de 100 Estados y con la Unión Europea, así
como una misión permanente de observación ante Naciones Unidas.
Es neutra, imparcial y apolítica. Actualmente, la Orden de Malta está presente en 120 países
con proyectos médicos, sociales y humanitarios en favor de los necesitados. Día tras día, sus
proyectos sociales de amplio espectro ofrecen un apoyo constante a las personas olvidadas o
excluidas de la sociedad.
La Soberana Orden Militar y Hospitalaria de San Juan de Jerusalén, dicha de Rodas, dicha de
Malta, nace anteriormente a la primera cruzada. Ejerció soberanía territorial primeramente en
Rodas y posteriormente en Malta. Después de la pérdida de sus dominios temporales ha
mantenido independencia y soberanía reconocida internacionalmente. La soberanía de la
Orden posee un valor unitario que deviene del propio ordenamiento. Esto se presenta de
manera soberana porque predispone del instrumento para el autogobierno y la
autodeterminación con la capacidad de regular el siguiente elemento que determina
esencialmente la soberanía de un ente: poder de gobierno que no deriva su autoridad de otro
poder; sistema de normas jurídicas que tiene en sí mismo su propia justificación; poder judicial
que decide sobre la aplicación de la normal del ordenamiento en caso de controversia. En ello
la Orden encuentra los requisitos para ser reconocida como sujeto de derecho internacional.
Los Beligerantes
Son grupos rebeldes contra su gobierno central que llegan a dominar una parte importante del
territorio, de manera efectiva, Los Estados que los reconocen deben permanecer neutrales
ante el Estado central y los Beligerantes. Su objetivo es un cambio político, económico o social
que el gobierno central no ha permitido por la vía democrática. Están sujetos a todas las
normas del derecho internacional público en materia de guerra. Por ejemplo, la convención de
Ginebra de 1949 sobre prisioneros de guerra.
Son pueblos coloniales que luchan por independizarse de su Metrópoli para convertirse en un
nuevo Estado. Sus derechos están contemplados en diversas resoluciones de la Asamblea
General de la ONU sobre el derecho de los pueblos coloniales a la libre determinación. Se
diferencian de los beligerantes en que ellos pretenden un nuevo gobierno y estos pretenden
un nuevo Estado.