Actividad N°3 - Romina Melián
Actividad N°3 - Romina Melián
Actividad N°3 - Romina Melián
En esta cultura institucional se idealiza “lo familiar”, entendido como “lo conocido” y sus
rasgos positivos, gratificantes y tranquilizadores. Cumplen un lugar importante, los vínculos
afectivos, los valores familiares y la lealtad personal o afectiva. En consecuencia, se otorga
una mayor prioridad a los objetivos personales, a lo subjetivo, por sobre los objetivos
institucionales.
Otro inconveniente es que no se explicitan ni sus características, ni los términos de
intercambio entre los miembros, es decir los contratos, los cuales son ambiguos,
dificultando el encuadre de las tareas y su seguimiento. No se recurre al currículum
prescripto para establecer derechos y obligaciones de las partes y por lo tanto, no hay una
clara asignación de responsabilidades.
Tampoco se recurre a canales de comunicación formalmente establecidos, la circulación de
la información se realiza a través de una red informal de articulaciones individuales y se
asienta en la interacción “espontánea” entre sus miembros.
Por último, no hay una clara división de tareas, jerarquización y correlación de las mismas.
Esta indefinición o definición insuficiente de la estructura formal de roles y funciones a
cumplir por los diferentes miembros de la institución genera incertidumbre.El principal riesgo
que existe en los establecimientos educativos que se acercan a este tipo de cultura
institucional es diluir su especificidad.
Clivaje: Pensar las relaciones de intercambio asimétricas implica reflexionar acerca de los
clivajes presentes en las instituciones para poder trabajar en las articulaciones respectivas.
El término clivaje designa distintos planos o zonas que se constituyen en posibles planos de
ruptura o fractura. Las instituciones están atravesadas por diferentes clivajes:
Conflicto: Los conflictos son inherentes al funcionamiento de toda institución, son parte de
su dinámica e inciden de forma determinante en la conducta de los miembros en las
organizaciones y en el grado de eficiencia institucional. Esto se debe a que tanto los
individuos como los grupos tienen intereses que se contraponen entre sí o con los objetivos
de la institución de la que forman parte.
b) El conflicto se elude: El conflicto es percibido como tal por los actores pero se evita
que aparezca claramente explicitado.
c) El conflicto se redefine y disuelve: El conflicto no se resuelve y al perder
importancia deja de obstaculizar la tarea y la situación evoluciona.
Fuentes de poder: Los clivajes institucionales están relacionados con el hecho que en
cada institución, cada actor y grupo de actores, hace uso de una fuente de poder. Algunas
posibles fuentes de poder son: el conocimiento de la normativa, la posesión de los medios
de sanción, la posesión de los recursos económicos, el manejo de los medios de control de
los recursos, el acceso a la información, el control de la circulación de las informaciones, el
control de las relaciones con la comunidad en la que está inserta la escuela , la legitimidad
que emana la autoridad formal, la competencia técnica o el grado de “expertez”.
Norma-regla-ley: El término institución remite todo lo que está establecido, reglamentado
es decir, que nos remite a norma, regla y ley.
Las acepciones remiten por un lado al hecho de que estamos “sujetados” a las instituciones
y por otro lado, nos recuerdan las cuestiones de disciplinamiento, entendido como la
regulación o normalización de los comportamientos de los sujetos que se propone cada
institución.
En cuanto a las reglas, podemos afirmar que son necesarias en las instituciones para que
se pueda cumplir con la función específica, en la medida que favorecen, facilitan y hacen
posible la realización de una actividad significativa.
Por otra parte, en la relación que establecemos con la ley se entretejen aspectos objetivos y
subjetivos, los primeros son aquellos que se refieren a “la letra” de la norma tal como está
formulada y los segundos hacen referencia a cómo influyen nuestras representaciones en la
manera que internalizamos “esa letra”, nuestra forma de entenderla de un modo u otro y los
matices que adquiere nuestra valoración.
Planos de clivaje: Tanto en el grupo de los agentes como en el de los usuarios se pueden
encontrar nuevos clivajes. Algunas planos de clivaje comunes en las instituciones son:
equipos de conducción-docentes, equipos de conducción-coordinadores de área,
coordinadores de área-docentes, entre otros.
Redes de poder: Las distintas redes de poder se configuran en función de los modos
particulares en que cada institución aparecen los clivajes y cómo se posicionan los actores
frente a los mismos.
Zonas de certidumbre e Incertidumbre: En toda institución hay una tensión entre zonas
de certidumbre e incertidumbre. Las zonas de certidumbre son establecidas por las leyes y
las normas con el propósito de volver previsibles los comportamientos de los actores. Sin
embargo, como no es deseable ni posible prever el conjunto de conductas requeridas para
el desempeño de cualquier rol, las normas siempre dejan zonas de incertidumbre. En
relación a estas puede hacerse referencia a los movimientos simultáneos y contradictorios
de atracción-repulsión que se producen en la relación de los actores con las institución.