Narrativa Adrián
Narrativa Adrián
Narrativa Adrián
Nube dejó caer una gota de lluvia sobre el cuerpo de una mujer. A los nueves
meses, ella tuvo mellizos.
Cuando crecieron, quisieron saber quién era su padre.
Mañana por la mañana -dijo ella, miren hacia el oriente. Allá lo verán, erguido en el
cielo como una torre.
A través de la tierra y del cielo, los mellizos caminaron en busca de su padre.
Nube desconfió y exigió:
-Demuestren que son mis hijos.
Uno de los mellizos envío a la tierra un relámpago. El otro, un trueno. Como Nube
todavía dudaba, atravesaron una inundación y salieron intactos.
Entonces Nube les hizo un lugar a su lado, entre sus muchos hermanos y
sobrinos. (Eduardo Galeano)
Diluvio
Eran tantas las lluvias que cayeron sobre Castelldefels, que una noche en
sueños recibió un mensaje divino. Al igual que Noe debería botar una
embarcación con dos animales de cada especie, pues el diluvio era inminente.
Quedaba solo un mes. Visitó todos los bancos y cajas de ahorro. Promocionó todo
tipo de rifas, timbas, recolectas. Creo asociaciones, fundaciones y en tres
semanas empeñándose por varias vidas compro un superpetrólero con bandera
Chipriota.
Como en el Zoológico de Barcelona, pensaban en un inmediato traslado., con
suma astucia y artimañas, los embauco para hacer un viaje promocional. Cargo el
superpretólero y mientras se ultimaban detalles, pensó en los pasajeros que
llevaría. Al ser un huérfano que había vivido hasta los dieciocho en la inclusa; al
estar soltero, al no tener amigos; no quiso meter extraños en el barco que se
pelearan por minucias. Por eso adelanto la salida y ya en alta mar comenzó el
diluvio. El día cuarenta, salió el sol, dejó a los primates en una isla alejada del
resto de los animales. Al no poder reproducirse él, les daba así una segunda
oportunidad. (Carlos Fernández Guillén)
Padre nuestro que estás en el cielo.
A dos Amigos se aparece un Oso:El uno, muy medroso, en las ramas de un árbol
se asegura; el otro, abandonado a la ventura, se finge muerto repentinamente.
El Oso se le acerca lentamente; mas como este animal, según se cuenta, de
cadáveres nunca se alimenta, sin ofenderlo lo registra y toca, huélele las narices y
la boca;
no le siente el aliento,ni el menor movimiento;y así, se fue diciendo sin recelo:
«Este tan muerto está como mi abuelo.»
Entonces el cobarde, de su grande amistad haciendo alarde, del árbol se
desprende muy ligero, corre, llega y abraza al compañero, pondera la fortuna de
haberle hallado sin lesión alguna, y al fin le dice: «Sepas que he notado que el
Oso te decía algún recado. ¿Qué pudo ser?» «Diréte lo que ha sido;
Estas dos palabritas al oído:
Aparta tu amistad de la persona que si te ve en el riesgo, te abandona.»
La gallina de los huevos de Oro Manuel Rodríguez Saldivar
Un buen día, un hombre paseaba por el bosque y se encontró una
hermosa gallina. Se la llevó a su casa y a los pocos días se dio
cuenta de que cada día ponía un huevo de oro . Se creyó que
dentro del estómago de la gallina habría mucho oro y se haría rico
y la mató.
Pero cual fue su sorpresa cuando al abrirla vio que por dentro era
igual que las demás gallinas.Resulta que la gallina ponía huevos de
oro pero ella no era de oro. De modo que como la había matado se
quedó sin la riqueza que la madre naturaleza le había otorgado al
dejarle en el bosque la gallina de los huevos de oro.
MORALEJA:
Estad contentos con lo que tenéis y huid de la insaciable codicia
Mito
Dédalo y Talo
Era un gran constructor. Fue reconocido como el primer escultor que trabajó el
mármol haciendo hermosas estatuas. También era arquitecto. Muy habilidoso en
el uso de las herramientas. Pero Dédalo era muy celoso.
Junto a Dédalo trabajaba su sobrino Talo, un joven muy ingenioso. Talo un día
encontró en el campo una mandíbula de serpiente y se inspiró para inventar el
serrucho, forjando en el hierro una serie de dientes semejantes a los de la
serpiente. Cuando Dédalo vió el invento le agarro un ataque de celos y arrojó a
Talo desde un precipicio.
Perseo y Atlas
Perseo se presentó diciendo que venía de visita en calidad de huesped, pero Atlas
, desconfiado, temiendo que quisiera robarle sus frutos dorados lo echó.
Mamita
Habla de la aparición de una virgen viva en casa de Silvia Rua, tres días después
de haber dado a luz en el año 1912.
Según la leyenda, la señorita Rua vio una claridad en su cuarto y al despertarse
vislumbró la imagen de su madre muerta en el dintel de la puerta de la habitación.
“Hija mía - dijo- no temas por la claridad, soy tu madre, he venido a traerte una
virgen, para que te cuide, te guarde y te acompañe, hasta que mueras”. La luz
desapareció y en la mesa de noche, apareció un bustico de la Virgen de la
Candelaria.
La noticia se regó por todo el pueblo, convirtiéndose la casa en un santuario de la
Virgen y sitio de romerías de decenas de personas buscando salud para los
suyos.
El busto del la Virgen fue llevado ante el cura de la población y fue bendecido por
éste tras celebrar una misa en honor a la Virgen María.
La leyenda de la Mojana
La Mojana es una mujer diminuta, de cabellos dorados, tan largos que le llegan a
hasta los pies volteados. Vive en una casa de piedra construida debajo del agua,
donde cría diversos animales domésticos y donde se baña con una totuma de oro.
Antes se le veía con frecuencia por el cerro de Juanché, donde era muy fácil
percibir sus huellas después de los aguaceros. Rapta a los niños que se van a
bañar en sus dominios y los lleva a su morada subacuática. Para evitar la acción
de la Mojana sobre los niños, es necesario amarrarles un cordón especial, tanto
en el cuello como en la cintura.