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Satisfacción Sexual y Actitudes Hacia La Sexualidad en Personas Consumidoras de Sustancias Psicoactivas en Un Centro de Salud Del D.M.Q.

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UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR

FACULTAD DE CIENCIAS PSICOLÓGICAS

CARRERA DE PSICOLOGÍA CLÍNICA

Satisfacción sexual y actitudes hacia la sexualidad en personas consumidoras de

sustancias psicoactivas en un Centro de Salud del D.M.Q.

Trabajo de Titulación modalidad proyecto de investigación previo a la obtención del

Título de Psicóloga Clínica

AUTORA: Pamela Michelle Ortiz Orellana

TUTOR: MSc. Estuardo Beethoven Paredes Morales

Quito, 2019
A. PRELIMINARES

DERECHOS DE AUTOR

Yo, Pamela Michelle Ortiz Orellana, en calidad de autor y titular de los derechos

morales y patrimoniales del trabajo de titulación Satisfacción Sexual y Actitudes hacia la

Sexualidad en personas consumidoras de sustancias psicoactivas en un Centro de Salud

del D.M.Q., modalidad Presencial, de conformidad con el Art. 114 del CÓDIGO

ORGÁNICO DE LA ECONOMÍA SOCIAL DE LOS CONOCIMIENTOS, CREATIVIDAD

E INNOVACIÓN, concedo a favor de la Universidad Central del Ecuador una licencia

gratuita, intransferible y no exclusiva para el uso no comercial de la obra, con fines

estrictamente académicos. Conservo a mi favor todos los derechos de autor sobre la obra,

establecidos en la normativa citada.

Así mismo, autorizo a la Universidad Central del Ecuador para que realice la

digitalización y publicación de este trabajo de titulación en el repositorio virtual, de

conformidad a lo dispuesto en el Art. 144 de la Ley Orgánica de Educación Superior.

El autor declara que la obra objeto de la presente autorización es original en su forma

de expresión y no infringe el derecho de autor de terceros, asumiendo la responsabilidad por

cualquier reclamación que pudiera presentarse por esta causa y liberando a la Universidad de

toda responsabilidad.

Firma:

Pamela Michelle Ortiz Orellana

CC. 1721963328

Dirección electrónica: pame95michelle@hotmail.com

ii
APROBACIÓN DEL TUTOR

En mi calidad de Tutor del Trabajo de Titulación, presentado por PAMELA

MICHELLE ORTIZ ORELLANA, para optar por el Grado de PSICÓLOGO CLÍNICO, cuyo

título es: SATISFACCIÓN SEXUAL Y ACTITUDES HACIA LA SEXUALIDAD EN

PERSONAS CONSUMIDORAS DE SUSTANCIAS PSICOACTIVAS EN UN

CENTRO DE SALUD DEL D.M.Q., considero que dicho trabajo reúne los requisitos y

méritos suficientes para ser sometido a la presentación pública y evaluación por parte del

tribunal examinador que se designe.

En la ciudad de Quito, a los 21 días del mes de noviembre del 2019.

MSc. Estuardo Beethoven Paredes Morales

DOCENTE-TUTOR

CI. 1709566341

iii
DEDICATORIA

Dedico mi investigación principalmente a Dios, por siempre darme la fuerza para

seguir a delante y por nunca faltarme sus bendiciones. También dedico a quienes siempre

estuvieron a mi lado en todo momento, a mis padres, a mi madre hermosa, por nunca dejar

que me rinda y por siempre motivarme cada día hacer un mejor ser humano y a mi padre por

estar presente en mis triunfos y apoyarme en lo que puede siempre. Y a mi amigo, cómplice,

amante y novio, no sé si en un futuro seguiremos juntos, pero en el pasado y presente sigues

siendo un apoyo para mí y una fortalece, porque me has enseñado lo hermoso de amar y de

vivir.

La vida es hermosa cuando tienes personas extraordinarias en tu vida…

iv
AGRADECIMIENTO

Agradezco a mi familia por siempre estar de una u otra forma a mi lado, a mi madre

Helen por siempre estar en todo momento en mi vida, a mi padre Hugo por nunca dejarnos

solas y a mi hermana Jessica por ser mi mayor orgullo y motivo de ser cada día mejor.

A esa persona especial que desde que apareció en mi vida, me ayudo a crecer como

persona y profesional, por siempre apoyarme en todos los sentidos y darme valor a seguir

adelante, a Charlie por ser mi compañero de aventuras.

A todos mis amigos que siempre han sido cómplices en mis locuras, especialmente a

Steven, Michu, Christian y José, por siempre escucharme y apoyarme; deseo seguir con su

amistad por mucho tiempo más.

A las personas que participaron en mi investigación, por confiar en mí al

brindarme información personal y confidencial, que ayudara a mi crecimiento como

profesional y como ser humano.

Al Centro de Salud de Chimbacalle, especialmente al Servicio Ambulatorio Intensivo,

por permitirme amablemente realizar mi trabajo de investigación es sus instalaciones,

especialmente al Pscl. Javier Mayorga, por ser amigo y enseñarme la diversidad de formas en

que se puede ayudar a los demás, al Pscl. Jorge Gomez Bastidas, por tener confianza en mí y

darme siempre un valor en el crecimiento del SAI y al Pscl. Jorge Gómez Guadalupe por no

ser egoísta con su conocimiento y ser humilde siempre, gracias a los tres por ser mentores

extraordinarios y siempre desear el bien para sus pupilos.

A la Facultad de Ciencias Psicológicas de la Universidad Central del Ecuador, en

especial al MSc. Estuardo Paredes por la amable y grata tutela en la realización de mi trabajo

de investigación.

Solo Dios sabe las bendiciones que deseo en sus vidas…

v
ÍNDICE DE CONTENIDO

A. PRELIMINARES ...............................................................................................................ii
DERECHOS DE AUTOR......................................................................................................ii
APROBACIÓN DEL TUTOR ............................................................................................. iii
DEDICATORIA.................................................................................................................... iv
AGRADECIMIENTO ............................................................................................................ v
ÍNDICE DE CONTENIDO ................................................................................................... vi
ÍNDICE DE TABLAS .......................................................................................................... ix
ÍNDICE DE GRÁFICOS ...................................................................................................... xi
ÍNDICE DE IMAGEN .........................................................................................................xii
ÍNDICE DE ANEXOS ....................................................................................................... xiii
RESUMEN .......................................................................................................................... xiv
ABSTRACT ......................................................................................................................... xv
B. INFORME FINAL DEL TRABAJO DE TITULACIÓN ..................................................... 1
INTRODUCCIÓN ................................................................................................................. 1
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA .............................................................................. 3
Delimitación del problema ..................................................................................................... 3
Delimitación Temporal. ...................................................................................................... 5
Delimitación Geográfica..................................................................................................... 6
Preguntas de Investigación ..................................................................................................... 6
Objetivos ................................................................................................................................ 6
Objetivo General................................................................................................................. 6
Objetivos Específicos. ........................................................................................................ 6
Justificación ............................................................................................................................ 7
MARCO TEÓRICO................................................................................................................... 9
Posicionamiento Teórico ........................................................................................................ 9
CAPÍTULO I: SATISFACCIÓN SEXUAL ............................................................................ 10
1. Definiciones de la satisfacción sexual .............................................................................. 10
1.1. Goce. .......................................................................................................................... 11
1.2. Deseo. ........................................................................................................................ 11
1.3. Placer. ........................................................................................................................ 17
2. Teorías o modelos teóricos que explican la satisfacción sexual ...................................... 19
2.1. Dimensiones de la satisfacción sexual....................................................................... 19

vi
2.2. Elementos que contribuyen a la satisfacción sexual (positivos y negativos). ........... 20
3. Perspectiva actual de la satisfacción sexual ..................................................................... 21
CAPÍTULO II: ACTITUDES HACIA LA SEXUALIDAD ................................................... 23
1. Definiciones de las actitudes hacia la sexualidad............................................................. 23
2. Teorías o modelos teóricos que explican las actitudes hacia la sexualidad ..................... 24
2.1. Estructura de la actitud. ............................................................................................. 24
2.2. Sentimientos de culpa sexual. .................................................................................... 24
2.3. La dimensión erotofobia-erotofilia. ........................................................................... 25
2.4. Efectos derivados de la actitud hacia la sexualidad. .................................................. 29
3. Perspectiva actual de las actitudes hacia la sexualidad .................................................... 30
CAPÍTULO III: SUSTANCIAS PSICOACTIVAS ................................................................ 32
1. Definiciones de las sustancias psicoactivas ..................................................................... 32
2. Definiciones básicas asociados al consumo de sustancias psicoactivas .......................... 32
3. Factores de riesgo del consumo de sustancias psicoactivas ............................................. 33
4. Estudios sobre la satisfacción sexual y las actitudes hacia la sexualidad en personas
consumidoras de sustancias psicoactivas ............................................................................. 34
HIPÓTESIS Y VARIABLES .................................................................................................. 37
Hipótesis ............................................................................................................................... 37
Variables............................................................................................................................... 37
Definición de variables. .................................................................................................... 37
Operativización de Variables............................................................................................ 37
MARCO METODOLÓGICO .................................................................................................. 39
Enfoque de la investigación ................................................................................................. 39
Alcance de la investigación .................................................................................................. 39
Diseño de la investigación.................................................................................................... 39
Población .............................................................................................................................. 40
Tipo de Muestra ................................................................................................................... 40
Criterios de inclusión y exclusión ........................................................................................ 40
Recolección de Datos ........................................................................................................... 41
Procedimiento. .................................................................................................................. 41
Técnicas. ........................................................................................................................... 42
Instrumentos. .................................................................................................................... 42
Análisis de datos................................................................................................................... 46
RESULTADOS........................................................................................................................ 47
Análisis Univarial ................................................................................................................. 47

vii
Análisis Bivarial ................................................................................................................... 56
Comprobación de Hipótesis ................................................................................................. 57
DISCUSIÓN DE RESULTADOS ........................................................................................... 61
CONCLUSIONES ................................................................................................................... 64
RECOMENDACIONES .......................................................................................................... 66
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS..................................................................................... 68
ANEXOS ................................................................................................................................. 77

viii
ÍNDICE DE TABLAS

Tabla 1. Operativización de variables ...................................................................................... 37

Tabla 2. Categorías del inventario de satisfacción sexual ....................................................... 43

Tabla 3. Suma total del inventario de satisfacción sexual ....................................................... 43

Tabla 4. Factores del cuestionario EROS ................................................................................ 44

Tabla 5. Puntos de corte del cuestionario EROS ..................................................................... 45

Tabla 6. Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según edad................................. 47

Tabla 7. Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según nivel de instrucción......... 48

Tabla 8. Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según su estado civil ................. 48

Tabla 9. Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según estado civil de sus padres 49

Tabla 10. Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según nivel socioeconómico ... 49

Tabla 11. Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según ocupación del tiempo libre

.................................................................................................................................................. 50

Tabla 12. Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según procedencia ................... 50

Tabla 13. Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según sustancia que consume

con mayor frecuencia ............................................................................................................... 51

Tabla 14. Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según su percepción de consumo

.................................................................................................................................................. 51

Tabla 15. Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según frecuencia de consumo . 52

Tabla 16. Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según tiempo de consumo ....... 52

Tabla 17. Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según familiar que consume o

consumió sustancia psicoactiva ............................................................................................... 53

Tabla 18. Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según percepción de

funcionalidad de la familia....................................................................................................... 53

ix
Tabla 19. Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según tiempo de permanencia en

el SAI ....................................................................................................................................... 54

Tabla 20. Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según nivel de satisfacción

sexual ....................................................................................................................................... 54

Tabla 21. Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según actitudes hacia la

sexualidad ................................................................................................................................ 55

Tabla 22. Tabla cruzada entre satisfacción sexual y actitudes hacia la sexualidad en la

población estudiada .................................................................................................................. 56

Tabla 23. Puntuación Z de la variable satisfacción sexual ...................................................... 59

Tabla 24. Puntuación Z de la variable actitudes hacia la sexualidad ....................................... 59

Tabla 25. Comprobación de hipótesis mediante el Coeficiente de Correlación de Spearman 60

x
ÍNDICE DE GRÁFICOS

Gráfico 1. Referencia al nivel de interacción y relación lineal de la variable satisfacción

sexual. ...................................................................................................................................... 58

Gráfico 2. Referencia al nivel de interacción y relación lineal de la variable actitudes hacia la

sexualidad. ............................................................................................................................... 58

xi
ÍNDICE DE IMAGEN

Imagen 1. Formula general de distribución normal ................................................................. 57

xii
ÍNDICE DE ANEXOS

Anexo A. Protocolo de investigación aprobado ...................................................................... 77

Anexo B. Instrumentos .......................................................................................................... 149

Anexo C. Matriz de consistencia .......................................................................................... 154

Anexo D. Documento de autorización de la institución donde se realizará la investigación 155

Anexo E. Consentimiento Informado .................................................................................... 156

Anexo F. Declaración de confidencialidad ............................................................................ 157

Anexo G. Declaración de conflicto de intereses – investigadora .......................................... 158

Anexo H. Declaración de conflicto de intereses – tutor ........................................................ 159

Anexo I. Idoneidad ética ........................................................................................................ 160

Anexo J. Experticia del Investigador ..................................................................................... 161

xiii
TÍTULO: Satisfacción sexual y actitudes hacia la sexualidad en personas consumidoras de

sustancias psicoactivas en un Centro de Salud del D.M.Q.

Autora: Pamela Michelle Ortiz Orellana

Tutor: MSc. Estuardo Beethoven Paredes Morales

RESUMEN

Trabajo de investigación de Psicología Clínica, dentro de la línea de investigación de

Psicología Clínica y Salud Mental, el cual tuvo como objetivo principal el relacionar la

satisfacción sexual y las actitudes hacia la sexualidad en personas consumidoras de sustancias

psicoactivas del Servicio Ambulatorio Intensivo del Centro de Salud de Chimbacalle de

Quito. El presente trabajo se realizó con una metodología con enfoque cuantitativo, de

alcance correlacional, diseño no experimental y corte transversal, a su vez se obtuvo una

población de 80 hombres entre los 20 a 40 años, a quienes se les aplicó la Encuesta

Sociodemográfica elaborada, el Inventario de Satisfacción Sexual y la Encuesta Revisada de

Opinión Sexual. Los resultados muestran que un 18,8% tiene baja satisfacción sexual, un

20% tiene mediana satisfacción sexual, un 33,8% tiene un alto nivel de satisfacción sexual y

un 27,5% una muy alta satisfacción sexual; mientras que en las actitudes hacia la sexualidad

se encontró que un 16,3% tiene actitud erotofóbica, un 42,5% tiene actitudes ambivalentes y

un 41,3% tiene actitud erotofílica. Se comprobó la hipótesis del investigador con Rho de

Spearman, obteniendo una dirección positiva, con un coeficiente de correlación de 0.31 y un

p= 0.005043; es decir que sí existe una correlación estadísticamente significativa entre la

satisfacción sexual y las actitudes hacia la sexualidad en personas que consumen sustancias

psicoactivas.

PALABRAS CLAVE: SATISFACCIÓN SEXUAL/ ACTITUDES HACIA LA

SEXUALIDAD/ CONSUMO DE SUSTANCIAS PSICOACTIVAS

xiv
THEME: Sexual satisfaction and attitudes towards sexuality in people who consume

psychoactive substances in a Health Center of Q.M.D.

Author: Pamela Michelle Ortiz Orellana

Tutor: MSc. Estuardo Beethoven Paredes Morales

ABSTRACT

Clinical Psychology Research work, within the line of research of Clinical


Psychology and Mental Health, whose main goal was to relate the sexual satisfaction and
attitudes towards sexuality in people who consume psychoactive substances in the Intensive
Ambulatory Service of Chimbacalle Health Center in Quito. The present work was made
with a methodology with a quantitative approach, of correlational scope, non-experimental
design and cross-section, that involved a population of 80 men between 20 and 40 years
old, to whom the elaborated Sociodemographic Survey was applied, the Sexual Satisfaction
Inventory and the Revised Survey of Sexual Opinion. The results show that 18.8% have low
sexual satisfaction, 20% have medium sexual satisfaction, 33.8% have a high level of sexual
satisfaction and 27.5% have very high sexual satisfaction; while the attitudes towards
sexuality show that 16.3% have an erotophobic attitude, 42.5% have ambivalent attitudes and
41.3% have an erotophilic attitude. The investigator's hypothesis was proven with Rho of
Speraman, obtaining a positive direction, with a correlation coefficient of 0.31 and a p =
0.005043; In other words, there is a statistically significant correlation between sexual
satisfaction and attitudes towards sexuality in people who consume psychoactive substances.
KEY WORDS: SEXUAL SATISFACTION / ATTITUDES TO SEXUALITY /
CONSUMPTION OF PSYCHOACTIVE SUBSTANCES.

TRANSLATION MADE BY:

LETHBRIDGE INTERNATIONAL SCHOOL OF LANGUAGES

________________________________________________
Lic. Rocío Torres Pacheco
Licence no. 1005-16-1437665
Id number: 1711181352

xv
B. INFORME FINAL DEL TRABAJO DE TITULACIÓN

INTRODUCCIÓN

La sexualidad es una parte exhaustiva de las expresiones del ser humano, donde se

expresa a través de los pensamientos, fantasías, creencias, deseos, actitudes, conductas, roles,

valores, prácticas y relaciones interpersonales (Pérez, 2013), es ahí de su importancia.

La presente investigación tiene como objetivo principal relacionar la satisfacción

sexual y las actitudes hacia la sexualidad en personas consumidoras de sustancias

psicoactivas del Servicio Ambulatorio Intensivo (SAI) del Centro de Salud de Chimbacalle y

para lo cual se describió las variables: satisfacción sexual y actitudes hacia la sexualidad y las

características sociodemográficas de la población de estudio, a su vez los datos obtenidos se

utilizaron para establecer un grado de relación entre las dos variables antes mencionadas. La

interrogante de abordar este tema de investigación nació de la experiencia durante las

practicas realizadas en el SAI del Centro de Salud de Chimbacalle.

Con respecto a la metodología, el estudio tiene un enfoque cuantitativo, de alcance

correlacional y un diseño no experimental, pues no se alteró, ni se sometió a manipulación las

variables de investigación; además, el estudio es de corte transversal, es decir, que los datos

fueron recolectados en un momento único y se utilizó una muestra no probabilística, de tipo

intencional; a su vez se aplicó una encuesta sociodemográfica elaborada por la investigadora,

el Inventario de Satisfacción Sexual que identificó el nivel de satisfacción sexual, en 4

niveles (muy alto, alto, medio o bajo) y la Encuesta Revisada de Opinión Sexual (EROS) que

identificó las actitudes hacia la sexualidad desde la erotofobia y la erotofilia; respetando las

normas éticas de beneficencia, no maleficencia, autonomía y justicia.

El marco teórico se estructura en tres capítulos, el primero hace referencia a la

satisfacción sexual, el segundo capítulo corresponde a las actitudes hacia la sexualidad y el

1
tercer capítulo a las sustancias psicoactivas; enfatizando en los tres capítulos las definiciones,

teorías, perspectiva actual e investigaciones internacionales y nacionales.

En cuanto a los principales resultados, se puede mencionar que 57,5% de la muestra

estudiada se encuentra en el rango de edad de 20 a 29 años, el 30% tiene nivel de instrucción

de bachiller, el 68,8% es soltero, el 43,9% de sus padres son separados, divorciados o viudos,

el 51,3% tiene nivel socioeconómico medio, el 48,8% consume base de cocaína, el 35%

consume por tristeza, el 43,8% consume de 5 a 7 veces a la semana, el 73% consume más de

5 años, el 58,8% menciona que no tiene ningún familiar que consume o consumió alguna

droga, el 71,3% percibe a su familia como funcional y el 53% lleva menos de un mes en

tratamiento psicológico. Además, se encontró que las personas investigadas tienen un alto

nivel de satisfacción sexual con un 33,8% y un 42,5% tiene actitudes erotofobicas y

erotofilicas, es decir ambivalentes.

Por otro lado, se comprobó la hipótesis del investigador, con una correlación

estadísticamente significativa entre las variables estudiadas, con un p= 0,005043 y un

coeficiente de correlación de 0.31, el cual se obtuvo al aplicar la prueba de Coeficiente de

correlación Rho de Spearman.

2
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

Delimitación del problema

La salud sexual es un tema muchas veces descuidado, como lo señalan Álvarez-

Gayou, Honold y Millán (2006), que, desde los profesionales de salud, programas educativos,

hasta las políticas públicas, descuidan dicho tema, lo cual se refleja en innumerables

problemáticas relacionadas con la sexualidad de los seres humanos. Es así como México

manifiesta que en la vida sexual el 65,79% de las mujeres nunca o máximo la mitad de las

veces han experimentado un orgasmo, mientras que la eyaculación precoz en los hombres se

presenta en un 40,9%; es decir que el 50% de la población tienen problemas de tipo sexual,

debido a la dificultad de examinar la problemática, la poca experiencia y comprensión de los

profesionales de la salud, ya que tienen carencia en su formación en las actitudes y en la

información sobre la sexualidad (Álvarez-Gayou et al., 2006).

Por lo tanto, es necesario definir las variables a estudiar, es así como Ortiz y Ortiz

(como se citó en Carmen y Coronado, 2016) definen la satisfacción sexual como el poder

cumplir un deseo erótico y el satisfacer una pasión, al tranquilizar un sentimiento o al sentirse

amado. Por consiguiente, es la percepción y evaluación que un individuo realiza de su vida

sexual y a su vez Moral (como se citó en Carmen y Coronado, 2016) menciona que se basa

en la repetición de los encuentros sexuales, la satisfacción de las necesidades, el modo de la

comunicación en pareja, el tipo de acción sexual ejecutada, el cumplimiento de expectativas y

el agrado con su relación de pareja en general.

De manera que la sexualidad es una parte exhaustiva de las expresiones del ser

humano, donde se vive y se expresa a través de los pensamientos, fantasías, creencias,

deseos, actitudes, conductas, roles, valores, prácticas y relaciones interpersonales; teniendo

en cuenta que no todas pueden experimentarse o expresarse completamente (Pérez, 2013).

3
De modo que las actitudes hacia la sexualidad están relacionadas con lo mencionado

anteriormente, así la palabra actitud la definen Morales, Gaviria, Moya, & Cuadrado (como

se citó en Maldonado, 2019) como un acto de poder valorar de forma positiva o negativa un

evento que pueda activar una guía de elección ante la decisión que se anhela elegir. Por

consiguiente, Gaviria, Cuadrado, & López (como se citó en Maldonado, 2019) resaltan que

una actitud antecede a la conducta y que se compone como una predisposición hacia el acto

mismo. Dando paso a que Narváez y Valverde (como se citó en López, 2005) definan las

actitudes hacia la sexualidad como la tendencia a sentir, opinar y realizar acciones ante

objetos sexuales.

Del mismo modo, el consumo de sustancias psicoactivas se considera un problema

social y de salud en todo el mundo; pero también es considerado un problema de orden

público y de seguridad ciudadana, formándose un pensamiento moral del problema que será

trasladado a otras partes del mundo (Gonzalez, como se citó en Slapak y Grigoravicius,

2007).

Es así como la Oficina de las Naciones Unidad contra la Droga y el Delito (UNODC,

2018), señala que las consecuencias adversas por el consumo de drogas siguen siendo

considerables; donde las muertes relacionadas con las drogas cada año aumentan y en algunas

zonas del mundo se ha declarado epidemias de opioides, reflejando que el 5,6%

aproximadamente de la población mundial entre los 15 a 64 años consumió sustancias

psicoactivas por lo menos una ocasión en el 2016. Al igual que cada año 3,3 millones de

personas mueren en todo el mundo por el consumo nocivo de alcohol, siendo un 5,9% de

todas las muertes (Organización Mundial de la Salud [OMS], 2018).

A su vez, un proyecto de investigación que se realizó en Ecuador encontró cifras

preocupantes, ya que en el 2016 más de 8 mil personas murieron por el consumo de alcohol,

tabaco y otras drogas (Ecuavisa, 2018). Mientras que en el 2017 el Ministerio de Salud

4
Pública de enero a mayo ofreció atención a 8.554 personas por problemas relacionados con

estupefacientes.

Además, se debe tener en cuenta otros efectos negativos que causa el consumo de

sustancias psicoactivas, como intoxicaciones, trastornos psicóticos, depresión, bipolaridad,

ansiedad, obsesiones compulsivas, problemas en el sueño y en las neurocogniciones, delirio y

disfunciones sexuales (El telégrafo, 2017). De manera que las autoridades nacionales

correspondientes al área de salud, han implementado gradualmente en distintos Centros de

Salud, el Servicio Ambulatorio Intensivo (SAI); dentro de esta modalidad, el Ministerio de

Salud Pública ofrece servicios de terapia psicológica individual, grupal, familiar y

ocupacional a las personas con problemas en el consumo de sustancias psicoactivas, siendo el

objetivo del SAI, la rehabilitación y inclusión social de las personas con problemas en el

consumo de sustancias psicoactivas (La hora, 2018).

Por esa razón se decidió realizar la presente investigación describiendo y

correlacionando la satisfacción sexual y las actitudes hacia la sexualidad en personas

consumidoras de sustancias psicoactivas, debido a que son temas importantes para una salud

integral del ser humano, ya que se ha demostrado que la sexualidad se encuentra alterada por

el consumo de las drogas y esta problemática no tiene la debida atención por parte de los

profesionales de la salud. Teniendo en cuenta lo antes mencionado la presente investigación

se enfocará en la población consumidora de sustancias psicoactivas que acude al Servicio

Ambulatorio Intensivo del Centro de Salud de Chimbacalle.

Delimitación Temporal.

El estudio tuvo una duración de dos meses.

5
Delimitación Geográfica.

La investigación se llevó a cabo en América Latina, en el país Ecuador, en el

Centro de Salud Tipo C de Chimbacalle, localizado en la ciudad de Quito, Calle Juan

Borgoñón s/n y Juan de Alcázar.

Preguntas de Investigación

En base a la delimitación del problema, se desarrollaron las siguientes preguntas de

investigación:

 ¿Cuáles son los niveles de satisfacción sexual que se relacionan en mayor grado con

alguna de las actitudes hacia la sexualidad en personas consumidoras de sustancias

psicoactivas?

 ¿Qué niveles de satisfacción sexual tienen las personas consumidoras de sustancias

psicoactivas?

 ¿Cuáles son las actitudes hacia la sexualidad en personas consumidoras de sustancias

psicoactivas?

Objetivos

Objetivo General.

 Relacionar los niveles de satisfacción sexual y las actitudes hacia la sexualidad en

personas consumidoras de sustancias psicoactivas del Servicio Ambulatorio Intensivo

del Centro de Salud de Chimbacalle.

Objetivos Específicos.

1. Describir los niveles de satisfacción sexual en personas consumidoras de sustancias

psicoactivas.

2. Describir las actitudes hacia la sexualidad en personas consumidoras de sustancias

psicoactivas.

6
Justificación

La relevancia teórica de la presente investigación se enfocó en primer lugar en la

realización de un análisis de las definiciones de las variables, satisfacción sexual y actitudes

hacia la sexualidad, determinando a su vez la descripción y correlación de dichas variables en

una población consumidora de sustancias psicoactivas, dentro del contexto sociocultural

ecuatoriano, permitiendo así establecer un conocimiento notable en dicho contexto. Siendo

importante mencionar a su vez, que los resultados de la investigación realizada servirán para

poder ahondar en futuros trabajos de investigación.

En cuanto al aporte metodológico, el tipo de investigación se centra en correlacionar

las variables antes mencionadas, dentro del contexto del consumo de sustancias psicoactivas,

permitiendo corregir si es de ser necesario, el abordaje de salud en dicha población, para

poder ofrecer una atención integral y adecuada, por lo tanto, se tomará con mayor relevancia

el tema de la sexualidad.

Por otra parte, la justificación práctica, a través de la descripción y correlación de las

variables: satisfacción sexual y actitudes hacia la sexualidad, se podría contribuir a la

posibilidad de crear planes de intervención psicológica individual y grupal, dirigidos a

personas consumidoras de sustancias psicoactivas, a través de abordajes adecuados sobre

dichas variables, con la finalidad de encaminar a la población de estudio a llevar una vida

sexual satisfactoria, con responsabilidad y respeto mutuo.

Finalmente, la justificación social se fundamenta en la necesidad de una atención

sanitara integral y multidisciplinaria que responda adecuadamente a las necesidades

individuales en personas consumidoras de sustancias psicoactivas. De modo que se considera

importante la investigación realizada, debido a que es necesario evaluar no solo las

repercusiones del consumo de sustancias dentro de su ámbito laboral, familiar y social, sino

que también es necesario determinar cómo se encuentra en cuanto a su salud sexual.

7
La población beneficiaría de la investigación comprende a las personas que consumen

sustancias psicoactivas y que ingresan al Servicio Ambulatorio Intensivo del Centro de Salud

de Chimbacalle, en el Distrito Metropolitano de Quito-Ecuador.

8
MARCO TEÓRICO

Posicionamiento Teórico

La presente investigación tiene como variables la satisfacción sexual y las actitudes

hacia la sexualidad, las cuales tomaron como enfoque, al cognitivo condutal y se elige la

teoría del aprendizaje por reforzadores, planteada por S.B Skinner, basada en que la

“aparición de un estímulo desencadena una respuesta en la persona. Si esta respuesta es

condicionada utilizando reforzadores positivos o negativos, se podrá ejercer una influencia en

dicha reacción o conducta operante, la cual puede potenciarse o inhibirse” (Rovira, 2018,

como se citó en Maldonado, 2019, p.8).

Por otro lado, de esta teoría se desprende el modelo de refuerzo de afecto de

respuestas evolutivas planteado por Byrne (como se citó en Gómez, 2013), el cual menciona

que las personas que se hallan dentro de un contexto social van desarrollando a lo largo de su

vida respuestas evaluativas en correspondencia hacia aspectos sexuales. De la respuesta

evaluativa dependerá el desarrollo de la actitud hacia la sexualidad bien sea positiva o

negativa y por ende una satisfacción sexual.

9
CAPÍTULO I: SATISFACCIÓN SEXUAL

1. Definiciones de la satisfacción sexual

Mencionan De Lamater, Hyde y Fong (como se citó en Carmen y Coronado, 2016)

que la satisfacción sexual es la respuesta afectiva que se genera a través de la evaluación que

el ser humano realiza de los aspectos positivos y negativos de la relación sexual.

Según Ortiz (como se citó en Carmen y Coronado, 2016) es el cumplimiento de un

deseo erótico, la expresión final de la pasión, el aplacamiento de un sentimiento, el sentirse

complacido y amado.

Romero (como se citó en Carmen y Coronado, 2016) menciona que la satisfacción

sexual es comprendida como todas las sensaciones placenteras que surgen como

consecuencia del acto físico, las mismas que están profundamente relacionadas con la

satisfacción emocional del individuo y que son tomadas en cuenta de forma personal,

generando seguridad en sí mismos.

A su vez Álvarez (como se citó en Carmen y Coronado, 2016) resalta que la

satisfacción sexual es la valoración subjetiva de las actitudes comportamentales que se

produce de determinadas conductas sexuales de la pareja.

Para Carrera (como se citó en Carmen y Coronado, 2016) la satisfacción sexual es la

sensación placentera y agradable, dentro de un disfrute pleno, equilibrio psicofísico, bienestar

y consecuencias del acto sexual.

De modo que, gracias a las definiciones propuestas por distintos autores a través de

los tiempos, se puede decir que la satisfacción sexual genera sentimientos, emociones,

sensaciones, que son desplazadas del acto sexual y de la cercanía afectiva dentro de la

relación de pareja, dando como resultado expresiones positivas, como seguridad y confianza

mutua.

10
1.1. Goce.

Para comprender la sexualidad humana se habla desde lo multidimensional en

Bahamonde, Carmona y González (2011), es decir, desde tres dimensiones, una personal he

individual, donde se expresa el yo del individuo; una de pareja, donde se encuentra la

reproducción y la comunicación filial; y una social donde se expresa la comunicación y lo

mandatos sociales.

Entonces es importante mencionar al goce dentro de la satisfacción sexual como parte

de la sexualidad humana, que se encuentra dentro de la dimensión personal y de pareja,

donde el goce de la otra persona también interesa en la medida en que se demuestra una

capacidad narcisista de soltar y producir. “Se goza del placer del otro, pero no se goza el

placer del otro. Con él, junto a él, a su lado, pero no en lugar del otro, con su conciencia en su

propia carne” (Bedoya, 2010, p. 70).

También según Bahamonde et al. (2011), la autoestima se considera importante, ya

que el sentirse seguros, confiados, con amor propio y conformidad con su propio cuerpo,

hacen que el goce de la relación sexual sea distinto. Es así como la autoestima contribuye en

la desinhibición frente a la pareja, mostrándose como son, para poder lograr una adecuada

relajación y concentración durante la relación sexual que se trasforma en un momento mágico

y así poder disfrutar de un grato momento, donde abunde la entrega de amor y caricias.

1.2. Deseo.

Se habla del deseo sexual según Gómez (2013) desde lo biofisiológico, con una

estructura anatómica-neuro-endocrina; es decir desde su función etológica, que se centra en la

supervivencia de la especie por medio de la reproducción, desde lo psicológico, donde el

deseo sexual se transforma en una motivación muy importante de la propia existencia.

También menciona Bancroft (como se citó en Gómez, 2013) que se debe considerar

en el deseo sexual su concepto experiencial y lo anatómico-neuro-endocrino, ya que influye

11
también lo afectivo en términos de humor o de estados emocionales; lo cognitivo en términos

de pensamientos e imágenes; y lo biofisiológico en términos de activación central.

Así Lief (como se citó en Gómez, 2013) menciona que se encuentra en una dimensión

diferente de la excitación y el orgasmo, por lo cual define al deseo sexual como algo

complejo de la vida del ser humano, que requiere de multifactores para poder comprenderlo,

ya que no solo se debe observar las respuestas sexuales.

Ante todo como hemos visto el deseo sexual no solo es objetivo, es decir desde lo

orgánico, sino también es subjetivo, desde lo emocional, sentimental y afectivo, es así que

Rosen y Leiblum (como se citó en Gómez, 2013) refieren que el deseo sexual es un

sentimiento subjetivo, que puede ser o no activado por estímulos externos o internos y que

como resultado desencadena o no un comportamiento sexual abierto; por lo tanto es necesario

que ocurra un adecuado funcionamiento neuroendocrino, exposición a estímulos sexuales

intensos, dentro de su entorno o desde el propio individuo.

También es importante tener en cuenta que Levine (como se citó en Gómez, 2013),

define al deseo sexual a través de tres puntos: lo que precede y acompaña a la excitación; la

tendencia psicobiológica a buscar la satisfacción sexual; y la energía que traslada al

comportamiento sexual. En otras palabras, es la energía psicológica que acompaña, precede y

que provoca comportamientos sexuales (Levine, como se citó en Gómez, 2013). También se

señala que el deseo sexual es el fruto de la capacidad mental de integrar tres elementos

moderadamente separados: el impulso, el anhelo y la motivación. Los cuales se definen a

continuación:

 Impulso: Es el efecto del trabajo de las bases biofisiológicas que rigen el

comportamiento sexual, desde una base energética que lo mantiene. Se muestra a

través de respuestas endógenas y específicas de la activación sexual. Los atributos

físicos tienen un cambio perceptual, alcanzando un valor alto en los valores eróticos,

12
sueños, fantasías y tendencia a la búsqueda de actividad sexual autoerótica o

compartida. A su vez la testosterona es un activador necesario, pero no único, ya que

los compuestos neurofisiológicos, son responsables de la activación, que proviene de

la programación genética, encargada de la reproducción. El impulso se refiere a la

activación neurofisiológica como base del deseo sexual.

 Anhelo: Son las ganas, el anhelo de tener relaciones sexuales, independientemente

del impulso, es decir, del deseo de desear. Se puede desear relaciones eróticas sin

tener impulso; así el anhelo es la representación cognitiva de las ganas de vivir

escenarios eróticos. Así puede haber mujeres y/o hombres de cierta edad que anhelan

tener relaciones sexuales pero que pueden tener un impulso débil o infrecuente y las

razones pueden ser: el mantener relaciones sexuales hace sentirse bien físicamente,

amado, valorado, importante, enérgico y vital. En los adolescentes en momentos el

impulso podría no estar de acuerdo con el anhelo. Donde el no anhelar la actividad

sexual aun teniendo altos niveles de excitabilidad y activación, se deba a que no se

siente preparado emocionalmente, no saber cómo hacerlo, no tener la persona

apropiada, estar asustado por las sensaciones fuertes de activación erótica, miedo al

embarazo o enfermedades de transmisión sexual, creer que la actividad sexual en ese

instante es inapropiada moralmente, miedo al castigo de los padres, a la intimidad y al

rechazo. Mientras se va creciendo y madurando, los impulsos y anhelos van

concordando cuando se examina la actividad sexual como algo normal y valioso.

 Motivo: Es el anclaje psicológico del deseo, la decisión de tener relaciones eróticas.

Así la motivación de la actividad sexual depende de uno o más de los siguientes

antecedentes: impulso, decisión de tener relaciones sexuales, relación interpersonal,

observación de los demás, la atracción, etc. Es decir, se debe tener representaciones

mentales de la experiencia erótica en el ser humano y el deseo de formar uno solo

13
(anhelo), a su vez sintiendo la activación erótica como resultado de los estímulos

endógenos o exógenos (impulso), por consentir y aceptar unir la experiencia erótica

en su biografía (motivo) (Gómez, 2013). Por lo tanto, la motivación es la disposición

a la voluntad de involucrarse en una experiencia erótica, siendo condicionado por:

a) La identidad de género.

b) La calidad de las relaciones sexuales y no sexuales.

c) Las pautas de regulación propia y del compañero/a.

d) La transferencia con los vínculos del pasado.

En resumen, el deseo sexual es la tendencia psicobiológica a buscar la satisfacción

sexual y que debe ser suplido en su totalidad, lo cual implica un sentimiento de interés, de

necesidad, de apetencia, de búsqueda de estimulación y placer erótico, integrando a su vez el

impulso como parte de lo biofisiológico, el anhelo como parte de lo conductual y el motivo

como parte de lo afectivo.

1.2.1. Configuración del deseo.

Gómez (2013) menciona que dependerá de la interacción de la programación genética

hacia la exploración del placer, el contexto sociocultural donde se desarrolle la persona y las

experiencias importantes que viva durante su vida. Por lo cual es importante tomar como

punto de partida la historia psicosexual del individuo, ya que así se podrá comprender como

se incorpora lo innato, los procesos afectivos, cognitivos y comportamentales en la

satisfacción sexual.

Donde en primer lugar las disposiciones innatas se apoyan en bases biofisiológicas de

una motivación sexual, produciendo sensaciones internas corporales y una capacidad de

respuesta no aprendida, que se transforma en estímulos eróticos, lo cual corresponde al

impulso, considerado como primer nivel de la configuración.

14
En segundo lugar, el contexto donde se desarrolla el individuo, varia en la

permisividad y la intransigencia, lo cual forma parte de los contenidos culturales que pueden

regular la expresión de la motivación sexual y los comportamientos asociados;

correspondiendo así, al anhelo.

Y en tercer lugar se habla de la configuración del deseo sexual como algo armonioso,

cuando se logra el reconocimiento y la aceptación positiva de los resultados que produce la

motivación sexual, en un entorno favorable que integre la dimensión sexual o que puede ser

dividida, si bien impide o restringe la integración en el conjunto de la personalidad; lo cual

corresponde al motivo.

Por ende, se debe realizar un análisis diacrónico de la historia psicosexual de la

configuración del deseo, desde un recorrido histórico, es decir desde las primeras sensaciones

sexuales, juegos eróticos, fantasías, experiencias autoeróticas y heteroeróticas, forma en la

que se orienta el deseo, experiencia intima del deseo en relación a la percepción propia del

individuo hacia el contexto en donde se desenvolvió, etc.

De manera que los factores que intervienen en la configuración del deseo son: las

bases neurofisiológicas innatas de la motivación sexual, el contexto cultural, sexualidad

infantil, pubertad y adolescencia, la cuales se describirán a continuación.

 Bases neurofisiológicas: son la esencia biológica de la programación genética hacia

la búsqueda del placer erótico.

 Contexto cultural: regula la expresión de los sentimientos eróticos, como los

comportamientos explícitos, como resultado de los significados que asignan los

grupos culturales en donde el individuo convive; siendo así que la activación erótica y

sus sensaciones, son procesados y experimentados en base a comportamientos

simples, como el contacto físico, conductas autoeróticas y exploración corporal.

15
 Sexualidad infantil: la seguridad básica y la calidad de la experiencia intima con sus

figuras de apego, son pilares para la construcción de una relación confiada y sensible.

Siendo sus características psicológicas infantiles, la vivencia sexual egocéntrica y

autoerótica, que pertenece al momento evolutivo. Pero no se puede decir que existe en

los niños un deseo sexual tal y como lo entendemos desde la adultez, ya que los

activadores del deseo como los estímulos eróticos, no son significativos en ellos,

aunque exista curiosidad de su propio cuerpo y el del otros. Por lo tanto, en la infancia

se habla de una dimensión sexual-afectivo-social y también desde una visión difusa y

sin perfilar (Gómez, 2013).

El reconocimiento de los adultos sobre la importancia y el respeto de las

manifestaciones sexuales infantiles genera una configuración optima del deseo erótico dentro

de un entorno protector, respetuoso y positivo, debido a que cualquier experiencia de

violencia o abuso sexual hacia una niña o niño, puede causar un daño grave en la

configuración del deseo erótico (Gómez, 2013). A su vez, se produce en la primera fase de la

adolescencia la motivación sexual y el deseo erótico, en una proyección paulatina hacia la

satisfacción en objetos eróticos.

 Pubertad: es el inicio del cambio transitorio hacia la adultez, con la aparición del

erotismo puberal, gracias al incremento de la testosterona en los dos sexos.

 Adolescencia: se aumenta la motivación sexual, gracias a los cambios hormonales,

como el aumento de la testosterona que se manifiesta en los hombres como lo

menciona Gómez (2013) a través de la excitación espontánea, fantasías eróticas y

comportamientos explícitos como eyaculaciones nocturnas involuntarias,

masturbación y la repetición de las relaciones compartidas en distintos niveles

(Gómez, 2013). Y en mujeres se expresa en fantasías y masturbación, pero a

diferencia de los hombres no en el aumento de relaciones compartidas.

16
A su vez John Money (como se citó en Gómez, 2013) mencionó que las fantasías

eróticas surgen en momentos prepuberales y anteceden a cualquier comportamiento

autoerótico o compartido, por lo tanto, el deseo erótico puede orientarse desde lo

heteroerótico u homoerótico. Y la preferencia por cualquier orientación forma parte de la

configuración del deseo sexual.

La cualidad del valor erótico de los distintos estímulos es diferente entre los sexos, o

entre las diferentes orientaciones del deseo erótico. Donde el deseo sexual se integra

adecuada o inadecuadamente en la personalidad, formando parte de la identidad de género

(conciencia que uno tiene de ser femenino, masculino, andrógino, o indiferenciado). Es así

como, el desarrollo de la identidad de género y la experiencia del deseo, pueden reforzar el

sentido del género, o entrar en conflicto y llegar a confundirlo.

En definitiva, la configuración del deseo se caracteriza por el tipo de estímulos

eróticos en función de la orientación del deseo a los que cada individuo responde, donde el

contexto social en el que se desarrolló el individuo influye para saber qué es lo permitido o

no y así, jugar un papel de facilitador o inhibidor en sus conductas sexuales; pero también

está por el otro lado lo heredado, es decir que existen disposiciones comportamentales

preprogramadas genéticamente para responder eróticamente a determinados estímulos y que

se pueden incluso considerar como universales. Por consiguiente, los elementos de la

configuración del deseo son el impulso, anhelo y el motivo, como factores que intervienen en

la configuración se encuentran las bases neurofisiológicas innatas de la motivación sexual, el

contexto cultural, la sexualidad infantil, la pubertad y la adolescencia.

1.3. Placer.

El placer es importante dentro de la satisfacción sexual tanto en hombres, como en

mujeres. Donde las personas que se encuentran en una relación íntima, con apoyo mutuo,

comunicación buena, perciben un grafo mayor de placer sexual (Carmen y Coronado, 2014).

17
Por ese motivo el placer es sustancial dentro del desarrollo del individuo, así como lo señala

Tiger (como se citó en Villarroel y Pinto, 2005) donde el placer es un derecho evolutivo, que

es necesario al igual que la comida, el agua, la socialización, etc., visto desde un derecho a

algo, por lo tanto, según Masters y Johnson (como se citó en Villarroel y Pinto, 2005)

significa tener el privilegio de exigirlo y de esperar que se le dé a uno.

En otras palabras, se menciona en Villarroel y Pinto (2005) que el placer es un tipo de

experiencia primaria agradable, siendo el resultado de una satisfacción sexual real o

adelantada de un deseo o necesidad. Además, Tiger (como se citó en Villarroel y Pinto, 2005)

plantea dos categorías dentro del placer, las cuales son:

 Fisioplacer: son las necesidades básicas que viven individualmente cada ser humano,

por lo tanto, su base es la sobrevivencia (sexo, beber, comer)

 Cultiplacer: existe un aprendizaje de por medio y se cimenta en la cultura. La misma

tiene tres subcategorías, las cuales son:

a) Psicoplacer: experiencia procedente de actividades iniciadas por una sola persona, por

ejemplo, ver cine, leer, jugar en la computadora.

b) Socioplacer: experiencia procedente de actividades compartidas con una o más

personas; por ejemplo, una conversación, bailar, jugar en grupo.

c) Ideoplacer: experiencia procedente de actividades fuertemente privadas que no se

proyecta en el otro, por ejemplo, la búsqueda de la libertad, crear.

Por otro lado, Sánchez (como se citó en Valdés, Sapién y Córdoba, 2004) menciona

que la búsqueda del placer va desde lo social, político e ideológico, el cual tiene dos

componentes: el orgánico o somático (anatómico o fisiológico del cuerpo humano) y el

psíquico o psicológico (producto de la sociedad – cultura donde se desarrolla el individuo en

un tiempo determinado).

18
Es decir que el placer sexual comprende las distintas sensaciones agradables y

placenteras asociadas a las experiencias sexuales, donde a menudo dichas sensaciones se

producen por el contacto sexual; otras veces surgen por pensamientos y fantasías.

2. Teorías o modelos teóricos que explican la satisfacción sexual

2.1. Dimensiones de la satisfacción sexual.

Según Álvarez-Gayou et al. (2006), son seis los factores que intervienen en la

satisfacción sexual, los mismos que se describen a continuación:

a) Afectivo: “Hace referencia a estados emocionales diversos” (Álvarez-Gayou et al.,

2006, p. 14). Como besos, caricias mutuas, sentimientos positivos, confianza y la

importancia que le da uno al otro, durante el acto amoroso.

b) Bienestar: “Se refiere al logro de una sensación agradable y placentera” (Álvarez-

Gayou et al., 2006, p. 14). Ligada al orgasmo, al tiempo de duración del acto sexual,

al grado de satisfacción en base a la frecuencia de los encuentros.

c) Erotismo: “Se refiere a aspectos netamente inherentes a la respuesta sexual”

(Álvarez-Gayou et al., 2006, p. 14). Involucra respuestas apasionadas, el erotismo

logrado, el grado de seducción, el placer obtenido y la entrega de la pareja.

d) Respeto y responsabilidad: “Se refiere a la consideración recibida y dada por la

pareja” (Álvarez-Gayou et al. 2006, p. 14). Se refiere al respeto hacia uno mismo y

hacia el otro dentro de la reparación, con un grado de responsabilidad mutua.

e) Estímulos sensoriales: “Se refiere a la participación de los órganos de los sentidos”

(Álvarez-Gayou et al., 2006, p. 14). Calidad de estímulos que sienten durante el acto

sexual, los cuales se generan por el olfato, sabores utilizados, masturbación y por el

grado de intimidad alcanzado, producto de observar la desnudez del otro.

f) Comunicación: “Se refiere a la expresión de los propios sentimientos y a la

percepción de los sentimientos del otro u otra” (Álvarez-Gayou et al. 2006, p. 14). El

19
dialogo es importante para poder comunicar a la otra persona sobre sus gustos durante

el acto sexual, además ayuda en la planificación para el encuentro.

2.2. Elementos que contribuyen a la satisfacción sexual (positivos y negativos).

Kaplan (como se citó en Ortiz, 2018) plantea que la calidad de la relación sexual y por

ende la satisfacción sexual, depende de: conflictos individuales, patología marital y eventos

cotidianos exteriores, además menciona tres dimensiones:

 Factores intrapsíquicos individuales: Actitudes hacia: el sexo, el propio cuerpo, el

conocimiento sexual, la experiencia sexual, la ansiedad y el placer.

 Sistema de pareja: Comunicación sexual y conexión afectiva.

 Condiciones generales ecológicas: Estrés y actividades diarias.

Por otro lado, Hawton (como se citó en Ortiz, 2018) menciona tres factores que

intervienen en la satisfacción sexual, mismos que se describen a continuación:

 De predisposición: Experiencias prematuras individuales y en compañía, que

provoca vulnerabilidad o motivación para que la conducta suceda, ejemplo, valores y

creencias aprendidas por los padres.

 Precipitantes: Sucesos y experiencias asociadas el inicio de la conducta sexual,

ejemplo, atracción física que existe en la pareja.

 De mantenimiento: Lo que explica el por qué la conducta se conserva con el tiempo,

ejemplo, satisfacción con la relación de pareja.

Asimismo, Ortiz (2018) menciona que las características de las relaciones sexuales

son parte significativa, como elementos dentro de la satisfacción sexual, las mismas que se

detallan a continuación:

 Frecuencia de los encuentros sexuales: La frecuencia de encuentros y satisfacción

sexual es mutua, por ende, las parejas que tienen actividad sexual más frecuente

tienen mayor satisfacción.

20
 Variabilidad de la conducta sexual: El sexo tiene una función reproductiva y de

placer, donde las parejas que tienen cambios en sus conductas sexuales implementan

variedad y una relación más saludable.

 Frecuencia orgásmica: Índice de satisfacción sexual más cuantificable durante el

sexo, ya que se presume que todos pueden experimentar un orgasmo.

 Juego previo: Prepara el cuerpo del individuo para el coito y poder llegar al orgasmo,

donde la excitación se presenta por estímulos físicos y mentales.

3. Perspectiva actual de la satisfacción sexual

Barriga (2013) en su artículo nos habla desde una perspectiva histórica y psicosocial,

sobre la sexualidad como un instinto básico y un producto cultural. Donde a finales del siglo

XIX se origina la sexología, dando paso al derecho a la salud sexual desde una perspectiva

psicosocial de la sexualidad; es así como la sexualidad dentro de las relaciones de pareja y

entre los géneros es importante e incluida. En el mismo siglo el sexo era un tabú, pero esto no

impedía que se practique el sexo fuera del hogar, a su vez en el siglo XX debido a las

enfermedades de transmisión sexual, como la sífilis, se decide introducir la educación sexual

en el contexto social, poco a poco se logra cambios, como la simbología del himen, el aborto

en determinados momentos y la violación como algo grave, entre otros. Considerando a la

sexualidad en los últimos tiempos como algo normal, aceptado y necesario para generar una

satisfacción sexual adecuada, aunque dicha satisfacción dependerá del contexto social y

cultural donde se desarrolle el individuo y su historia psicosexual.

Urbano-Contreras, Iglesias-García y Martínez-González (2019) mencionan que la

satisfacción sexual puede ser independiente del tipo de pareja, del tiempo que lleven juntos o

cualquier otra característica que defina una relación, ya que la sexualidad suele formar un

componente determinante de las relaciones de pareja y un aspecto que condiciona; donde sus

diferencias de género están claramente marcadas por motivos históricos y sociales, e incluso

21
en la actualidad, el deseo sexual explícito o la iniciativa para planificar un encuentro sexual

por parte de la mujer son menos aceptados, incluso por sus parejas. Por otro lado, Carlson et

al. (como se citó en Urbano-Contreras et al. 2010) descubrieron que existe en las mujeres un

aplazamiento de la satisfacción sexual, debido a la educación de los hijos, sobre todo en los

hogares en los que no interviene el padre en el cuidado de los hijos.

Es así como se habla de la satisfacción sexual dentro de la sexualidad, como un

derecho sexual, es decir como la libertad sexual sin vulnerar los derechos del otro, equidad

sexual, privacidad sexual, placer sexual sin causar daño a otros, etc. Donde la sexualidad

tiene un enfoque positivo hacia el pacer y satisfacción mutua, con un enfoque preventivo.

22
CAPÍTULO II: ACTITUDES HACIA LA SEXUALIDAD

1. Definiciones de las actitudes hacia la sexualidad

La actitud predispone un comportamiento, por consiguiente, el ser humano a lo largo

de su progreso en la socialización desarrolla predisposiciones hacia diversos sucesos, los

cuales pueden ser percibidos como favorables o desfavorables, como el racismo, la

homofobia, el liberalismo, el socialismo, etc. Donde las actitudes son un tanto más evidentes

y firmes cuanta más implicación personal exista y cuanta mayor polémica esté sometida la

cuestión objeto de la actitud (Gómez, 2013). Así todo lo relacionado a la sexualidad en la

actualidad sigue siendo un tema de polémica y tabú, que supone una fuerte implicación

personal.

A su vez Significados (2017) menciona que la actitud es el comportamiento frecuente

que se genera en diferentes momentos y que determina la vida anímica de cada ser humano;

donde las actitudes están registradas por las reacciones repetidas del individuo. Por lo cual la

actitud es un procedimiento que conduce a un comportamiento en particular, en otras

palabras, es la realización de una intención o propósito.

Por lo tanto, la sexualidad es la consecuencia de todo el sistema de actitudes del ser

humano. Por otro lado, Narváez y Valverde (2018) mencionan que las actitudes son un

conjunto de sentimientos, creencias y tendencias a actuar de una valoración favorable o

desfavorable hacia un grupo, objeto, realidad etc. Dando paso a que Narváez y Valverde

(como se citó en López, 2005) definan las actitudes hacia la sexualidad como la tendencia a

sentir, opinar y realizar acciones ante objetos sexuales. Teniendo en cuenta que al igual que la

satisfacción sexual, las actitudes sexuales están afectadas por un componente personal, por un

contexto cultural, ideología predominante y creencias, donde la actitud hacia la sexualidad es

una disposición hacia la misma y esta puede ser positiva o negativa.

23
2. Teorías o modelos teóricos que explican las actitudes hacia la sexualidad

2.1. Estructura de la actitud.

Gómez (2013) propone que la actitud está compuesta por el factor cognitivo, afectivo-

emocional y comportamental, donde mientras más cohesión exista en los factores, más sólido

será la actitud y por ende más difícil es su cambio; los mismos que se definen a continuación:

 Cognitivo: Toda actitud se basa en ideas, en cogniciones; donde su origen se forma

de la asimilación de contenidos, como consecuencia del procesamiento de la

información, que se genera en un contexto social determinado y en relación con un

proceso de socialización concreto.

 Afectivo-emocional: Las emociones son reacciones subjetivas a estímulos relevantes,

que implican por lo general una reacción psicobiológica y una atribución cognitiva,

donde desarrollan una función adaptativa para la supervivencia, desde una experiencia

subjetiva personal. Todo el cúmulo de sensaciones, sentimientos, estados emocionales

que reúne el objeto de la actitud, es lo que constituye su base afectivo-emocional.

 Comportamental: El resultado de los dos factores antes mencionados marcan un

antecedente a comportarse de manera coherente.

Es decir que toda actitud es una disposición a actuar de una forma determinada, ya sea

negativa o positivamente; teniendo en cuenta que la actitud mientas más polémica genere e

implicación personal tenga, más marcada es. Por eso toda actitud se sustenta de ideas

correctas o incorrectas, sentimientos positivos o negativos y un comportamiento.

2.2. Sentimientos de culpa sexual.

En la actualidad para muchas personas hablar o acceder a una experiencia erótica es

significado de incumplimiento de la norma, dando como resultado una emoción de culpa,

produciendo una conducta inhibitoria, que interviene al fin y al cabo en la experiencia sexual.

24
Así, la culpa es un mecanismo interno de control de la conducta, que genera efectos

de restricción sobre las conductas relacionadas con el incumplimiento de la norma o de las

conductas que son consideradas como inmorales, incluso la culpa puede ser generada desde el

deseo de incumplir la norma antes de hacerlo. A su vez Etxebarria (como se citó en Gómez,

2013) menciona que el ser humano más proclive a experimentar sentimientos de culpa tiende

a incidir menos en infracciones a sus propias normas morales.

Pero la culpa no solo es negativa, sino, también positiva, ya que colabora en evitar

que se transgreda las normas, en situaciones lógicas, sin embargo, puede ser perjudicial

cuando las situaciones no son lógicas. Para entender más sobre la culpa sexual se define a la

misma como una expectativa extendida de castigo, influida por uno mismo, respecto a la

trasgresión o violación anticipada de los esquemas culturales de la propia conducta sexual

(Mosher y Cross, como se citó en Gómez, 2013).

A su vez la culpa hacia la sexualidad se genera en situaciones que incluyen la

expresión de los efectos de la manifestación del erotismo, como: la excitación, el deseo, el

placer, de los procesos cognitivos, que contienen la toma de conciencia de los mismos,

anticipación de recuerdos de situaciones eróticas, ideas morales y de los comportamientos

precisos en un contexto sexual (Mosher, como se citó en Gómez, 2013).

En efecto los comportamientos sexuales están regulados en cada cultura, donde lo

moral es el código que regula de manera convencional, los comportamientos de un grupo

humano determinado, siendo que el sentimiento de culpa se genera tras trasgredir una norma

o el deseo de hacerlo.

2.3. La dimensión erotofobia-erotofilia.

Se explica a través del aprendizaje, donde se muestra el cómo un individuo puede

tener una disposición negativa o positiva en menor o mayor grado en el erotismo, influyendo

así, en el comportamiento (Fisher, Byrne, White y Kelley, como se citó en Gómez, 2013).

25
Donde se define a la dimensión erotofobia-erotofilia como una destreza a responder a

temas sexuales desde una dimensión positivo-negativa; siendo una consistencia interna que

puede ser considerada como parte de la personalidad. Los autores antes mencionados

obtienen en sus investigaciones que las personas autoritarias tienden a ser erotofóbicas,

existiendo una alta asociación entre la erotofobia y altos sentimientos de culpa sexual.

Asimismo, Beach y Ford (como se citó en Gómez, 2013) mencionan que el ser

humano se encuentra en continuo bipolar, en cuyos extremos se encuentra la erotofobia y la

erotofilia, siendo este proceso conocido como el modelo de refuerzo de afecto de respuestas

evaluativas, formulado desde el principio de aprendizaje, que destaca la importancia de las

reacciones emocionales. La sucesión del origen de la erotofobia-erotofilia es la siguiente:

1. En primer lugar, las respuestas afectivas se relacionan con una variedad de asuntos

sexuales, las cuales son transformadas en conjuntos evaluativos actitudinales

relativamente estables.

2. En segundo lugar, las respuestas informativas, creencias y expectativas que son

significativas para que la sexualidad se aprenda.

3. En tercer lugar, las personas adquieren o generan respuestas fantaseadas, basadas en

la imaginación, en las que se involucran temas sexuales y eróticos.

Erotofobia

Es la actitud negativa hacia la sexualidad, donde se cree que todo lo relacionado con

el sexo es malo y que provoca dolor. En consecuencia la negatividad y los altos sentimientos

de culpa sexual se considerada erotofobia. A su vez es importante mencionar dentro de esta

dimensión al sexismo, heterosexismo y homofobia, los cuales se definen a continuación:

a) El sexismo y heterosexismo

El sexismo es una predisposición a la discriminación del ser humano por su sexo

(macho-hembra) y más por su género (masculino- femenino). Por consiguiente, la

26
discriminación se genera entorno a la jerarquización cultural, sobre la relación entre los

sexos, donde lo femenino se somete a lo masculino (Gómez, 2013). Así, el machismo exalta

el estereotipo masculino (dominancia, fortaleza) según el rol tradicional, en menosprecio del

rol femenino (sumisión, debilidad) que suele ser sometido y relegado en el orden social;

generando desigualdad en función del sexo.

Por otro lado, el heterosexismo, se define como el sostenimiento de una relación

jerarquizada, en donde la heterosexualidad se ubica en un nivel alto. Mientras que la

homosexualidad aparece, como accidental, incompleta, perversa, criminal, patológica,

inmoral y destructiva de la civilización (Borrillo, como se citó en Gómez, 2013).

Estas actitudes están formadas por un componente cognitivo, que son las creencias

acerca de las características de las mujeres y de los hombres; un componente afectivo-

emocional, que son las reacciones emocionales que nacen de las situaciones relacionales

concretas y de una tendencia comportamental. Por ende, no se puede hablar de que existe

actitudes predominantes en la actualidad, pero si tiene peso el pasado y la sociedad, siendo

las de mayor auge el sexismo y la homofobia.

b) Homofobia

La homofobia se refiere a la actitud psicológica y social de rechazo genérico de la

homosexualidad. Así, Smith definió a la homofobia como el temor de estar con una persona

homosexual en un lugar cerrado, pero también puede existir la homofobia dentro de la

comunidad homosexual, expresando odio hacia sí mismos (Borrillo, 2001, como se citó en

Gómez, 2013). Dicho concepto hace referencia a una dimensión individual y que se ajusta al

concepto clínico de fobia, expresando ansiedad, aprensión psicológica, etc. y una dimensión

social, desde el rechazo social de la homosexualidad.

Así la homofobia como menciona Gómez (2013) estaría sustentada en ideas

psicológicas, sociales, médicas, morales, jurídicas, antropológicas, dentro del componente

27
cognitivo; en reacciones emocionales como el miedo, enojo, rabia, ira desde el componente

afectivo-emocional y en una tendencia comportamental que se expresaría en rechazo

manifiesto, segregación, agresión verbal o física, marginación, discriminación, en el

componente comportamental.

Pero según Borrillo (como se citó en Gómez, 2013), la concepción de homofobia elige

dos aspectos distintos de la misma realidad, como:

a) Dimensión personal, desde lo afectivo, que se manifiesta en rechazo a los

homosexuales.

b) Dimensión cultural, desde lo cognitivo, en la que no es el individuo como

homosexual, el que es objeto del rechazo, sino la homosexualidad como fenómeno

psicológico y social.

La homofobia se expresa a través de bromas crueles, insultos, lenguaje coloquial

ofensivo, insultos, representaciones burlonas, donde plasma a los gays y lesbianas como

criaturas grotescas (Borrillo, 2001, como se citó en Gómez, 2013, p.52).

Lo antes mencionado muestra que la homofobia no es solo una parte psicológica del

individuo, sino que es un tema social, donde debido al contexto sociocultural donde se

desarrolla el individuo dependerá la forma de ver, de pensar y de expresarse con respecto al

rechazo de las personas homosexuales, ya que a través de esas creencias se formará el

individuo y optará por realizar actos de rechazo hacia las personas homosexuales.

Erotofilia.

De manera que las personas que tienen una actitud positiva se caracterizan por

entender que la dimensión sexual del ser humano es una fuente de riqueza, que debe ser

vivida con plenitud y responsabilidad, siendo personas más respetuosas con emociones

positivas y abiertas; donde la positividad y un bajo sentimiento de culpa sexual es

28
considerado erotofilia. A su vez, es importante mencionar al hedonismo dentro de la

erotofilia, la cual se define a continuación:

a) Hedonismo

Como menciona Tafur (2016) que Epicuro fue el primero en pensar en el placer como

principio para una teoría moral, llamada hedonismo. Por lo cual recalca que el hedonismo se

considera una doctrina filosófica, donde su principio es la búsqueda del pacer y el evadir el

dolor (Tafur, 2016). Donde la sociedad respeta la integridad del individuo y por ende sus

placeres y acciones correctas, no perturban la felicidad del otro.

Al igual que menciona Espinoza (2013) que no solo se debe saciar los apetitos

sexuales individuales, sino que también estimular y hacerlos grandes para un mayor placer.

Es decir que el hedonismo intenta que el placer y el bien, sean uno solo, que se encuentre

dentro del desarrollo personal de cada individuo.

2.4. Efectos derivados de la actitud hacia la sexualidad.

En el ámbito de lo personal, se ha encontrado que las personas que tienden a altos

sentimientos de culpa sexual o a la erotofobia tienen menor experiencia sexual, menor interés

por lo erótico, menor volumen de fantasías sexuales. Así se encontró que los individuos que

marcaron un alto sentimiento de culpa sexual mostraron un mayor problema para percibir y

usar el significado erótico de palabras con doble sentido (Galbraith, como se citó en Gómez,

2013). Por ende, se resalta que las personas erotofóbicas no admiten en ellas mismas la

experiencia sexual, no pueden integrarla ni anticiparla.

Por el otro lado las personas que tienen una actitud positiva hacia la sexualidad se

espera que integren mejor la motivación sexual en su personalidad, generando una mayor

anticipación a la actividad sexual. Promoviendo así, el interés por la utilización y la

formación de elementos para la protección, uso del preservativo y otros métodos

anticonceptivos y comportamientos sexuales sin riesgo (Gómez, 2013).

29
De modo que la potenciación de actitudes positivas, erotofilia o sentimientos bajos de

culpa sexual, se convierten en un factor potencial de protección hacia el riesgo de embarazos

no deseados y de enfermedades de transmisión sexual, debido a la responsabilidad que

infringe dicha actitud.

3. Perspectiva actual de las actitudes hacia la sexualidad

García (como se citó en Bahamón, Vianchá y Tobos ,2014) manifiesta que los jóvenes

en la actualidad se definen a sí mismos como andróginos y que por ende se apartan de las

posiciones tradicionales sobre el género y sus factores biológicos. Relacionando lo antes

mencionado con la erotofilia (actitud positiva hacia la sexualidad), funcionando como factor

protector para informarse adecuadamente y practicar comportamientos saludables; alejándose

a la tendencia tradicional biologicista sobre el entendimiento del ser humano, que propone la

naturalización de los roles de hombres y mujeres en función de su sexo, lo que afecta al ser

humano y facilita la marginación social.

También actualmente la representación del “hombre” se considera a través de la

implicación de la presencia de actitudes y comportamientos socialmente normados, los cuales

se afirman a través del uso del cuerpo como instrumento para indicar la virilidad, la

incapacidad de contención ante el deseo y la desvinculación emocional. Por ende, ser

hombre significa tener fuerza física y simbólica dentro del núcleo social, donde el usar

métodos anticonceptivos para evitar embarazos no deseados es normal, pero no el usar

métodos para prevenir enfermedades de transmisión (Bahamón et al. 2014).

A su vez Ayuso y García (2018) mencionan que las actitudes hacia la sexualidad

dependen mucho de la brecha generacional, teniendo en cuenta que las personas mayores

fueron socializadas en una cultura sexual en donde predomina el miedo y su base era la moral

católica, asociando así los conceptos de amor, matrimonio, sexo y reproducción. Por otro

30
lado, los jóvenes han crecido en una cultura hedonista, permisiva y liberal donde cada

concepto como amor, matrimonio, sexo y reproducción se pueden vinculas entre sí o no.

Se concluye que en la actualidad el hombre tiene más libertad y menos sentimientos

de culpa o vergüenza de su sexualidad, debido a que la sociedad cataloga al hombre como la

figura de poder y liderazgo, mientras que para la mujer si bien hay más libertad que antes en

su sexualidad, no significa que exista una aceptación total o sea visto como normal dentro de

lo moral en la sociedad, a lo contrario aun es limitado.

31
CAPÍTULO III: SUSTANCIAS PSICOACTIVAS

1. Definiciones de las sustancias psicoactivas

Se conoce como sustancia psicoactiva o droga a toda sustancia que, al introducirse en

el organismo, independientemente de su vía de administración, genera una alteración en el

funcionamiento del Sistema Nervioso Central y que puede crear una dependencia psicológica

o física, e incluso ambas (Observatorio de drogas de Colombia [ODC], 2019). Asimismo, las

sustancias psicoactivas modifican la conciencia, el estado de ánimo o los procesos de

pensamiento del individuo que la ingiere.

Rodríguez (2013) menciona que la sustancia psicoactiva es una sustancia tóxica que

tiene un origen sintético o natural y que al ingresar al organismo actúa en el Sistema Nervioso

Central, ocasionando modificaciones en el comportamiento y en las emociones; por ende, se

altera la neuroquímica del cerebro, generando una posible dependencia a la sustancia. Dando

a entender que las sustancias psicoactivas al ser ingeridas en el organismo causan alteración

en lo biológico, cognitivo y afectivo.

Por lo cual las sustancias psicoactivas son conocidas también como drogas que, al ser

ingeridas por el individuo, causa alteraciones en el organismo, tanto a nivel biofisiológico,

como emocional-afectivo y cognitivo-conductual. Creando en el transcurso del tiempo una

posible dependencia a la sustancia en el individuo.

2. Definiciones básicas asociados al consumo de sustancias psicoactivas

Es importante mencionar los siguientes términos, debido a que es relevante en la

presente investigación, Rodríguez (2013) los define a continuación:

 Tolerancia: El organismo del ser humano se acostumbra a una determinada sustancia,

debido a la repetición de la sustancia como un estímulo, causando que se incremente

la cantidad y la intensidad del estímulo, para poder obtener las mismas sensaciones

que obtuvo en el inicio del consumo.

32
 Síndrome de abstinencia: Son los síntomas y signos que causan displacer en la

persona, a causa de la inesperada suspensión de la ingesta de la sustancia de consumo.

 Dependencia: Es un estado de sometimiento compulsivo, tanto físico y/o psicológico,

debido al consumo crónico e incesante de una sustancia psicoactiva. Igualmente se

cree que la persona tanto en su parte biofisiológica como psicológica no puede

detener el consumo de la sustancia.

3. Factores de riesgo del consumo de sustancias psicoactivas

Herrera (2016) mención que se considera a un factor de riesgo como una característica

externa o interna de la persona, que puede subir la posibilidad de consumir una sustancia

psicoactiva, permitiendo a su vez la identificación de elementos o factores por los cuales se

realice prevención. De modo que los factores de riesgo se agruparán en factores sociales,

escolares, familiares e individuales, que se definirán a continuación.

 Factores sociales: Como el contexto social, nivel socioeconómico, la diferencia de la

atención a la salud, situaciones de pobreza, desempleo y subempleo, ausencia de

oportunidades académicas y laborales.

 Factores escolares: Como el tipo de escuela a la que asiste, consumo de sustancias

psicoactivas en amistades y facilidad de adquisición, fracaso académico entre otros.

 Factores familiares: Como disfunción familiar, consumo de sustancias en algún

miembro de la familia, maltrato intrafamiliar, ausencia de padres, familia numerosa.

 Factores individuales: Como edad, sexo, actitudes, creencias y valores, percepción

del riesgo del individuo, autoestima, impulsividad o incapacidad de autocontrol, etc.

Por otro lado, Rodríguez (2013) incluye en los factores de riesgo, a dos factores

distintos a los antes mencionados; al factor de la biología y genética, como la historia de

consumo nocivo o de dependencia de sustancias psicoactivas dentro de la familia y al factor

33
de personalidad, como la presencia de baja autoestima, autoeficacia, autoconcepto y la

presencia de comportamientos impulsivos.

Cabe recalcar que Vargas et al. (2015) menciona que la familia es importante en el

desarrollo personal del ser humano, es así que la estructura familiar es el conjunto de pautas

funcionales conscientes o inconscientes que organizan los modos en que interactúan los

miembros de una familia, por ende, los problemas con la autoridad, el maltrato intrafamiliar,

el abandono y sobreprotección, son factores que se asocian a las adicciones de drogas.

Por ende, los factores de riesgo en el consumo de sustancias psicoactivas dependen de

factores individuales, familiares, sociales, escolares, genéticos y de personalidad, que pueden

influir en el consumo de las sustancias, por lo tanto, es importante conocer cuáles son los

posibles riesgos para crear programas de prevención y para sensibilizar a las familias sobre el

tema, ya que el consumo de sustancias es considerado un tema de salud mental y social.

4. Estudios sobre la satisfacción sexual y las actitudes hacia la sexualidad en personas

consumidoras de sustancias psicoactivas

González et al. (2006) mencionan que las drogas pueden influir en el deseo, la

excitación y el orgasmo en la actividad sexual; debido a que las sustancias psicoactivas tienen

un efecto en la mente del individuo que la ingiere, causando cambios en el deseo sexual, pero

no todas reducen el deseo sexual, sino también lo incrementa, lo cual no significa un mejor

placer o actuación sexual.

La excitación sexual se observa al tener una erección del pene del hombre y la falta

de la excitación puede producir impotencia, donde al igual existen drogas que provocan o no

impotencia sexual; de tal manera que la falta de excitación supone una interferencia en la

respuesta sexual normal.

Si una droga obstruye el paso de un neurotransmisor, los mensajes normales se verán

distorsionados y la conducta se trasformará; en concreto, González, Gálvez, Álvarez, Cobas y

34
Cabrera (2005) mencionan que los efectos químicos de las sustancias psicoactivas van

directamente al cerebro, donde se modifica las funciones de los centros que regulan la

sexualidad y también otras sustancias psicoactivas lo hacen en los centros nerviosos

periféricos, los mismos que controlan la actividad de los órganos genitales. A su vez también

nos menciona que el consumo de drogas puede causar estimulación o deprimir una de las

funciones del sistema límbico, el cual ayuda a unir el sentimiento, pensamiento, memoria y el

presente, que está gobernado por el placer o el dolor.

Es importante mencionar los efectos que causa el consumo de ciertas drogas en la

sexualidad; por consiguiente la cocaína tiene fama de aumentar la excitación y la respuesta

sexual, pero también provoca disfunciones sexuales; la marihuana al igual que el alcohol

tiene efectos depresores, ayuda en la desinhibición de los prejuicios sociales y los tabúes

personales, con respecto a la sexualidad, aumenta la sensibilidad táctil y distorsiona la

realidad, por lo que impide concentrarse y realizar coordinación motora, causando reducción

de testosterona y espermatozoides, disminución del deseo sexual y disfunción eréctil.

Por lo cual se observa que el consumo de sustancias psicoactivas dentro de la

sexualidad se cree que causa aumento de excitación sexual y por ende mayor placer, pero

ocurre lo contrario, gracias al consumo prolongado de la droga. Observando también en la

sexualidad femenina cambios en el ciclo menstrual, disminución del deseo sexual, baja los

niveles de lubricación vaginal, anorgasmia, se bloquea la respuesta sexual, disfunción sexual

y fertilidad; en el hombre se identificó la disminución de la testosterona, espermatozoides, del

deseo sexual y de la erección, al igual que impotencia sexual, infertilidad y retraso de la

eyaculación.

Pero no todo lo relacionado a la sexualidad en el consumo de sustancias psicoactivas

tiene que ver con alteraciones en el organismo, ya que las mujeres y hombres dentro del

mundo de las drogas sufren todo tipo de violencia, donde las mujeres al ser educadas para

35
asumir su cuerpo y su sexualidad como un instrumento, para obtener cosas, se observa que,

en las mujeres drogodependientes, como lo manifiesta Fundación Atenea (2016) que la

mayoría de las veces utilizan su sexualidad y su cuerpo para obtener favores, protección,

poder en un grupo, dinero, e incluso la droga para ellas y/o para sus pareja.

La imagen de una mujer bajo los efectos de drogas está asociada también a cuestiones

relacionadas con su cuerpo y su sexualidad, percibiéndola como una persona más accesible

sexualmente y fácil de conquistar, siendo por lo tanto más vulnerable a los abusos y

agresiones sexuales.

36
HIPÓTESIS Y VARIABLES

Hipótesis

H1: A mayores niveles de satisfacción sexual, mayores actitudes positivas hacia la

sexualidad en personas consumidoras de sustancias psicoactivas.

HO: A mayores niveles de satisfacción sexual, menores actitudes positivas hacia la

sexualidad en personas consumidoras de sustancias psicoactivas.

Variables

Variable 1: Satisfacción sexual

Variable 2: Actitudes hacia la sexualidad

Definición de variables.

Satisfacción sexual:

“Evaluación subjetiva de agrado o desagrado que una persona hace respecto de su

vida sexual (Pinney, Gerrard &Danney, 1987); o bien, como la capacidad del sujeto de

obtener placer sexual mediante el coito o cópula. (Renaud, 1997)” (Álvarez-Gayou et al.

2006, p. 5).

Actitudes hacia la sexualidad:

“Gómez (2013) la actitud es una predisposición hacia el comportamiento en temas o

situaciones vinculados hacia la sexualidad. Estos pueden ser percibidos de manera favorable,

desfavorable y ambivalente” (Maldonado, 2019, p.45).

Operativización de Variables.

Tabla 1.
Operativización de variables

Dimensiones Indicadores Ítems Instrumento Tipo de


Variable
datos
Factor afectivo Besos, caricias, 1, 2, 3, 4, Escala Intervalo
Satisfacción confianza, 5, 6, 7, 8 autoaplicable
sexual sentimientos para la
positivos. evaluación de

37
Factor bienestar Orgasmos, 9,10,11,1 la satisfacción
relaciones sexuales, 2,13 sexual (Álvarez
frecuencia y – Gayou et al.,
satisfacción 2006)

Factor erotismo Pasión, erotismo 14,15,16,


propio y en la 17,18,19
pareja, seducción y
placer.

Factor respeto y Respeto mutuo y 20,21,22


responsabilidad responsabilidad
sexual

Factor estímulos Tacto, olfato, vista, 23,24,25,


sensoriales sabores, sonidos y 26
masturbación.

Factor de la Expresión de los 27,28,29


comunicación propios
sentimientos y a la
percepción de los
sentimientos del
otro u otra

Erotofóbia Altos sentimientos 2, 5, 11, Encuesta Intervalo


de culpa sexual. 12, 13, revisada de
Actitudes negativas 14, 15, opinión sexual
y que interfiere en 18, 19 “EROS”
el comportamiento (Fisher, Byrne,
White y Kelley,
Erotofilia Bajos sentimientos 1, 3, 4, 7, 1998, como se
de culpa sexual. 8 citó en Del Río,
Actitudes
Actitudes positivas López, &
hacia la
y que interfiere en Cabello, 2013)
sexualidad
el comportamiento

Homofobia Otras actitudes 9, 10, 17


relevantes respecto
a la sexualidad

Sexo no Prácticas sexuales 6, 16,20


convencional no convencionales
Elaborado por: Ortiz Pamela (2019)

38
MARCO METODOLÓGICO

Enfoque de la investigación

El enfoque de la presente investigación fue cuantitativo; siendo Hernández-Sampieri,

Fernández y Baptista (2014) los que mencionan que dicho enfoque “utiliza la recolección de

datos para probar hipótesis con base en la medición numérica y el análisis estadístico, con el

fin de establecer pautas de comportamiento y probar teorías” (p.4).

Alcance de la investigación

La investigación tuvo un alcance correlacional; de acuerdo con Hernández et al.

(2014) dicho alcance tiene como objetivo conocer la relación entre dos o más categorías,

conceptos o variables, en primer lugar, se debe medir cada una de ellas y después cuantificar,

examinar y establecer las vinculaciones. (p.157). Por lo tanto, se buscó establecer la posible

relación entre la satisfacción sexual y actitudes hacia la sexualidad en personas consumidoras

de sustancias psicoactivas.

Diseño de la investigación

La investigación tuvo un diseño no experimental, ya que según Hernández-Sampieri

et al. (2014) tal diseño, no manipula intencionalmente las variables, si no, observa los

fenómenos tal como se dan en su contexto natural, para analizarlos, por consiguiente,

solamente se enfocó en la valoración de las variables investigadas: satisfacción sexual y

actitudes hacia la sexualidad, a través de los instrumentos presentados. A su vez el estudio

tuvo un corte transversal, mismo que Hernández-Sampieri et al. (2014) mencionan que se

encarga de recolectar los datos en un momento y tiempo único; del mismo modo en la

presente investigación se aplico los reactivos de medición en un solo momento determinado.

39
Población

La población definida está compuesta por un aproximado de 100 pacientes que

acudieron al Servicio Ambulatorio Intensivo del Centro de Salud de Chimbacalle por

problemas de consumo de sustancias psicoactivas en los meses de enero a abril del presente

año, los mismos que son adultos varones de estrato socioeconómico medio y bajo, que se

encuentran dentro de las edades de los 20 a 40 años, pacientes con diagnóstico formal CIE-

10, F10. – F19.-: Trastornos mentales y del comportamiento debido al consumo de

psicotrópicos (Pulamarin, 2019).

A través de la aplicación de los criterios de inclusión se trabajó al final con una

población de 80 personas que asistieron al Servicio Ambulatorio Intensivo del Centro de

salud de Chimbacalle.

Tipo de Muestra

Debido a que se trabajó con toda la población no resultó necesario establecer un tipo

de muestreo.

Criterios de inclusión y exclusión

Criterios de Inclusión.

 Rango de edad entre los 20 a 40 años, consumidores de sustancias psicoactivas que

acuden al Servicio Ambulatorio Intensivo del Centro de Salud de Chimbacalle.

 Diagnóstico según la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE10) de: F10-

F19: Trastornos mentales y del comportamiento debidos al consumo de psicotrópicos.

 Participación voluntaria y consciente para colaborar en la investigación, tras haber

firmado el consentimiento informado.

40
Criterios de Exclusión.

 Al momento del levantamiento de la información, hallarse bajo efecto de alguna

sustancia psicoactiva y/o fármaco.

 Presentar patología dual.

Criterios de Eliminación.

 Ausencia de la rúbrica del participante en el consentimiento informado.

 Encuestas incompletas o llenadas incorrectamente.

Recolección de Datos

Procedimiento.

Se obtuvo los datos mediante la aplicación de la encuesta socioeconómica, el

inventario de satisfacción sexual y la encuesta revisada de opinión sexual “EROS”,

únicamente a los pacientes hombres de 20 a 40 años del SAI del Centro de Salud de

Chimbacalle que cumplieron con los criterios de inclusión antes mencionados; dichos

instrumentos y encuesta fueron de naturaleza auto aplicable; se tomó a los mismos durante el

espacio de las dos terapias grupales (grupo de 10 a 20 pacientes) con una duración de 20 a 30

minutos por grupo, los mismos fueron aplicados los días jueves dentro de dos horarios, de

10am a 12pm y de 3pm a 5 pm; también se aplicó los reactivos de forma individual en cada

sesión psicológica con un tiempo de 20 a 30 minutos por persona de lunes a viernes de

10:30am a 3:30pm.

Se inició con la presentación de la investigadora, seguida de la explicación de los

objetivos, justificación, beneficios y riesgos de la investigación, a los participantes, dando

paso a la información de los criterios que se deben cumplir para poder aplicar la encuesta y

los reactivos psicológicos, comentando a su vez sobre el consentimiento informado, para

después entregar y revisar junto con los participantes y si lo desean, firmar el mismo.

Finalmente se entregó la encuesta, los instrumentos y un esfero a cada participante. Al

41
finalizar, los resultados confidenciales serán almacenados en una carpeta por 5 años después

de haber terminado la investigación.

Técnicas.

En la presente investigación se utilizó como técnica a la encuesta, la cual fue una

encuesta sociodemográfica elaborada por la investigadora; por lo cual se considera a la

encuesta como “una técnica de recogida de datos a través de la interrogación de los sujetos

cuya finalidad es la de obtener de manera sistemática medidas sobre los conceptos que se

derivan de una problemática de investigación previamente construida” (López y Fachelli,

2015, p. 8).

También se utilizó la técnica psicométrica al aplicar dos reactivos psicológicos para la

recolección de información de las dos variables que se investigó; teniendo en cuenta que las

técnicas psicométricas “son instrumentos de evaluación de rasgos o aptitudes (…). En su

concepción está el criterio de la estabilidad de esos rasgos en las personas, lo que permite

predecir su conducta una vez que se han medido” (González, 2007, p. 14).

Instrumentos.

Encuesta socioeconómica (Anexo B):

La encuesta consta de catorce preguntas de elección personal, las cuales tienen la

finalidad de generar datos necesarios que contribuyan en el desarrollo de los objetivos de la

investigación.

Inventario de Satisfacción Sexual (Anexo B):

El Inventario de satisfacción sexual fue elaborado por el Dr. Juan Luis Álvarez -

Gayou Jurgenson y cols., del Instituto Mexicano de Sexología, en el año 2006, el cual consta

de 29 reactivos, con una escala tipo Likert con cinco opciones de respuesta, que van de:

42
Siempre = 5

La mayoría de las veces = 4

En ocasiones sí y otro no = 3

Pocas veces = 2

Nunca = 1.

El objetivo del inventario es poder evaluar la satisfacción sexual en hombres y

mujeres dentro de niveles (muy alto, alto, medio y bajo) y categorías (afectivo, bienestar,

erotismo, respeto y responsabilidad, estímulos sensoriales y comunicación). A su vez el

inventario tiene un corte cualitativo y cuantitativo (véase Tabla 2 y 3).

Tabla 2.
Categorías del inventario de satisfacción sexual

Categorías Ítems
Afectivo 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8
Bienestar 9, 10, 11, 12, 13
Erotismo 14, 15, 16, 17, 18, 19
Respeto y responsabilidad 20, 21, 22
Estímulos sensoriales 23, 24, 25, 26
Comunicación 27, 28, 29
Fuente: (Carmen y Coronado, 2016)

Tabla 3.

Suma total del inventario de satisfacción sexual

Niveles Puntuaciones
Muy alto 145 – 127
Alto 126 – 117
Medio 116 – 103
Bajo 102 – 0
Fuente: (Carmen y Coronado, 2016)
 Validación

Como mencionan Álvarez – Gayou et al. (2006) la validez se estableció por medio del

“análisis factorial del inventario de 29 ítems, mediante el procedimiento de componentes

principales de los factores brutos, se obtuvieron 6 factores que dan cuenta de 58.279 % de la

varianza total.

43
 Confiabilidad

Así también Álvarez-Gayou et al., (2006) mencionan que la “confiabilidad del

Inventario de Satisfacción Sexual se estableció al administrar el instrumento a la muestra de

760 personas. El valor de confiabilidad al aplicar la prueba Alpha de Cronbach fue de α =

0.9231, lo que indica una estabilidad muy alta” (p. 10).

Y también se estableció la confiabilidad por medio del “análisis de reactivos: este

proceso se realizó con el método ítem escala o total, con el objeto de determinar la

contribución de cada ítem al Inventario de Satisfacción Sexual, se encontró que todos los

ítems poseen una correlación significativamente positiva” (Álvarez-Gayou et al., 2006, p.10).

El instrumento no se encuentra validado en el contexto ecuatoriano.

Encuesta revisada de opinión sexual “EROS” (Anexo B):

El cuestionario Sexual Opinion Survey (SOS) fue creado inicialmente por Fisher,

Byrne, White y Kelley en 1998, el mismo tiene como objetivo medir los constructos de

erotofilia y erotofobia para poder determinar la “disposición actitudinal positiva o negativa

hacia la sexualidad la misma que interferirá en comportamiento” (Gómez, 2013, como se citó

en Maldonado, 2019, p.50).

El cuestionario EROS consta de 20 ítems y utiliza la escala de Likert, que va de

totalmente en desacuerdo = 1, en desacuerdo = 2, medianamente en desacuerdo = 3, sin

opinión = 4, medianamente de acuerdo = 5, de acuerdo = 6 y totalmente de acuerdo = 7, los

cuales están divididos en 4 factores (véase Tabla 4).

Tabla 4.
Factores del cuestionario EROS

Factores Ítems
Erotofóbia 2, 5, 11, 12, 13, 14, 15, 18 y 19
Erotofilia 1, 3, 4, 7, 8
Homofobia 9, 10, 17
Sexo no convencional 6, 16,20
Fuente: (Del Río, López y Cabello, 2013)

44
A su vez son ítems directos los siguientes: 1, 3, 4, 6, 7, 8, 9, 10, 16, 17 y 20 y ítems

inversos los siguientes: 2, 5, 11, 12, 13, 14, 15, 18 y 19. Y la corrección se realiza de la

siguiente forma: en primer lugar se suma el total de los ítems directos, al resultado se le resta

la suma de las puntuaciones dadas a los ítems inversos y al resultado se le suma 52. Las

puntuaciones totales oscilarán entre 0 (máxima erotofobia) y 120 (máxima erotofilia).

También se utilizó los puntos de corte de Narváez & Valverde (2018), para determinar

el grado de erotofobia y erotofilia (véase Tabla 5)

Tabla 5.
Puntos de corte del cuestionario EROS

Rangos Puntajes
Rango 1: Erotofóbia 0 a 51,42
Rango 2: Erotofóbia y Erotofília (ambivalente) 51,43 a 68,57
Rango 3: Erotofília 68,58 a 120
Fuente: (Narváez & Valverde, 2018)
 Validación

El instrumento fue validado y adaptado en España por Del Río et al. (2013) donde se

corrigió los sesgos de orientación sexual en algunos ítems, llegando a la conclusión de que

EROS (encuesta revisada de opinión sexual) “presenta parámetros adecuados para ser

utilizado en clínica y en investigación. Tiene como ventaja el ser aplicable a un mayor rango

de población al tener en cuenta la orientación sexual” (Del Río et al., 2013, pag.9).

 Confiabilidad

Del Río et al. (2013) mencionan que en su estudio se demostró una alta consistencia

interna con un coeficiente de alfa de Cronbach de 0,851, indicando que una puntuación

iguales o superiores a 0,70 son admisibles para los estudios. Por otra parte, se “reafirmando

otro estudio realizado por Narváez & Valverde (2018) utilizando el mismo instrumento, pero

aplicado a la población del Ecuador, demostraron una consistencia interna de 0,823 en el

coeficiente de alfa de Cronbach” (Maldonado, 2019, p. 52).

El instrumento no se encuentra validado en el contexto ecuatoriano.

45
Análisis de datos

Se utilizó estadística descriptiva, por lo consiguiente se empleó el programa de

procesamiento de datos Statistical Package for the Social Sciences (SPSS) versión 25, año

2017 y para el análisis descriptivo de los datos se utilizaron frecuencias y porcentajes.

Y para identificar el tipo de estadígrafo que se utilizó para la correlación de las

variables se aplicó la prueba de normalidad de Kolmogorov-Smirnov, nivel de interacción,

relación lineal y puntuación Z, por lo tanto, se aplicó la prueba de Coeficiente Correlación de

Spearman.

46
RESULTADOS

A continuación, se presentan en tablas los resultados obtenidos en la aplicación de la

Encuesta Sociodemográfica y de los reactivos psicológicos, Inventario de Satisfacción Sexual

y la Encuesta revisada de opinión sexual (EROS), en una población de 80 personas que

asisten al Servicio Ambulatorio Intensivo del Centro de Salud de Chimbacalle por consumo

de sustancias psicoactivas.

Análisis Univarial

Tabla 6.
Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según edad

Rango Frecuencia Porcentaje


20-22 12 15,0
23-24 12 15,0
25-27 16 20,0
28-29 6 7,5
30-32 11 13,8
33-34 3 3,8
35-37 7 8,8
38-40 13 16,3
TOTAL 80 100
Elaborado por: Ortiz Pamela (2019)

Interpretación: Se muestra en la tabla 6 que los rangos de edad más relevantes son 2

de cada 10 personas investigadas se encuentran en el rango de edad de 25 a 27 años y 1 de

cada 10 personas en el rango de edad de 33 a 37 años; a su vez los rangos con mayor

frecuencia se encuentran entre los 20 a 29 años, en 6 de cada 10 sujetos investigados.

47
Tabla 7.
Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según nivel de instrucción

Categorías Frecuencia Porcentaje


Primaria 9 11,3
Secundaria 19 23,8
Bachillerato 24 30,0
Superior incompleta 17 21,3
Superior 11 13,8
Posgrado 0 0,0
TOTAL 80 100,0
Elaborado por: Ortiz Pamela (2019)

Interpretación: Se obtuvo en la tabla 7 que 3 de cada 10 personas se encuentran en un

nivel de instrucción de bachillerato, mientras que 1 de cada 10 personas tienen nivel de

instrucción primaria.

Tabla 8.
Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según su estado civil

Categorías Frecuencia Porcentaje


Soltero 55 68,8
Casado 5 6,3
Unión libre 13 16,3
Separado 3 3,8
Divorciado 4 5,0
Viudo 0 0,0
TOTAL 80 100,0
Elaborado por: Ortiz Pamela (2019)

Interpretación: Se muestra en la tabla 8 que 7 de cada 10 personas tienen un estado

civil soltero, mientras que 1 de cada 10 personas tienen un estado civil separado y divorciado.

48
Tabla 9.
Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según estado civil de sus padres

Categorías Frecuencia Porcentaje


Soltero 8 10,0
Casado 29 36,3
Unión libre 8 10,0
Separado 15 18,8
Divorciado 11 13,8
Viudo 9 11,3
TOTAL 80 100,0
Elaborado por: Ortiz Pamela (2019)

Interpretación: Se muestra en la tabla 9 que 4 de cada 10 personas investigadas tienen

padres casados, mientras que 1 de cada 10 personas tienen padres solteros y en unión libre;

pero se encontró como datos relevantes que los padres solteros, separados, divorciados y

viudos son 5 de cada 10 personas, dando a notar que en este grupo existe la ausencia de una

de las figuras paterna o materna en el hogar.

Tabla 10.
Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según nivel socioeconómico

Categorías Frecuencia Porcentaje


Nivel bajo 12 15,0
Nivel medio-bajo 20 25,0
Nivel medio 41 51,3
Nivel medio-alto 7 8,8
Nivel alto 0 0,0
TOTAL 80 100,0
Elaborado por: Ortiz Pamela (2019)

Interpretación: Se muestra en la tabla 10 que 5 de cada 10 personas tienen un nivel

socioeconómico medio, mientras que 1 de cada 10 personas tienen un nivel socioeconómico

medio-alto.

49
Tabla 11.
Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según ocupación del tiempo libre

Categorías Frecuencia Porcentaje


Labores domésticas 12 15,0
Recreación y deporte 25 31,3
Estudio 2 2,5
Hobbies varios 34 42,5
Ninguno 7 8,8
TOTAL 80 100,0
Elaborado por: Ortiz Pamela (2019)

Interpretación: Se muestra en la tabla 11 que 4 de cada 10 personas investigadas

realizan varios hobbies en su tiempo libre, mientras que 1 de cada 10 personas ocupan su

tiempo libre en el estudio y en ninguna actividad.

Tabla 12.
Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según procedencia

Categorías Frecuencia Porcentaje


Sierra 65 81,3
Costa 15 18,8
Amazonía 0 0,0
Galápagos 0 0,0
TOTAL 80 100,0
Elaborado por: Ortiz Pamela (2019)

Interpretación: Se muestra en la tabla 12 que 8 de cada 10 personas investigadas

proceden de la región Sierra, mientras que 2 de cada 10 personas investigadas proceden de la

Costa.

50
Tabla 13.
Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según sustancia que consume con mayor
frecuencia

Categorías Frecuencia Porcentaje


Alcohol 21 26,3
Tabaco 0 0,0
Marihuana 16 20,0
Base de cocaína 39 48,8
Heroína 1 1,3
Otra 3 3,8
TOTAL 80 100,0
Elaborado por: Ortiz Pamela (2019)

Interpretación: Se muestra en la tabla 13 que 5 de cada 10 personas investigadas

consume base de cocaína, mientras que una sola persona de la muestra total refiere consumo

de heroína.

Tabla 14.
Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según su percepción de consumo

Categorías Frecuencia Porcentaje


Irritabilidad 8 10,0
Tristeza 28 35,0
Alegría 13 16,3
Aburrimiento 12 15,0
Indiferencia 19 23,8
TOTAL 80 100,0
Elaborado por: Ortiz Pamela (2019)

Interpretación: Se muestra en la tabla 14 que 4 de cada 10 personas consume por

tristeza, mientras que 1 de cada 10 personas consume por irritabilidad.

51
Tabla 15.
Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según frecuencia de consumo

Categorías Frecuencia Porcentaje


1 a 2 veces por semana 17 21,3
3 a 4 veces por semana 23 28,8
5 a 7 veces por semana 35 43,8
Otro 5 6,3
TOTAL 80 100,0
Elaborado por: Ortiz Pamela (2019)

Interpretación: Se muestra en la tabla 15 que 4 de cada 10 personas consume de 5 a 7

veces por semana, mientras que solo 5 personas investigadas refieren consumir más de una

vez al día durante los 7 días de la semana.

Tabla 16.
Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según tiempo de consumo

Categorías Frecuencia Porcentaje


1 a 6 meses 4 5
7 meses a 1 año 6 8
2 a 4 años 12 15
5 a 7 años 22 28
8 a 10 años 20 25
Otro 16 20
TOTAL 80 100
Elaborado por: Ortiz Pamela (2019)

Interpretación: Se muestra en la tabla 16 que 3 de cada 10 personas lleva

consumiendo de 5 a 7 años, mientras que 1 de cada 10 personas lleva consumiendo de 1 a 6

meses; por otro lado, el tiempo de consumo con mayor frecuencia se encuentra a partir de los

5 años en delante, en 7 de cada 10 personas investigadas.

52
Tabla 17.
Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según familiar que consume o consumió
sustancia psicoactiva

Categorías Frecuencia Porcentaje


Si 33 41,3
No 47 58,8
TOTAL 80 100,0
Elaborado por: Ortiz Pamela (2019)

Interpretación: Se muestra en la tabla 17 que 6 de cada 10 personas investigadas

mencionan que sus familiares no consumen o consumió alguna sustancia psicoactiva,

mientras que 4 de cada 10 personas investigadas refieren que ningún familiar consume o

consumió alguna sustancia psicoactiva.

Tabla 18.
Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según percepción de funcionalidad de la
familia

Categorías Frecuencia Porcentaje


Funcional 57 71,3
Disfuncional 18 22,5
Otra 5 6,3
TOTAL 80 100,0
Elaborado por: Ortiz Pamela (2019)

Interpretación: Se muestra en la tabla 18 que 7 de cada 10 personas considera a su

familia como funcional y solo 5 personas de la población total, considera a su familia como

ambivalente.

53
Tabla 19.
Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según tiempo de permanencia en el SAI

Categorías Frecuencia Porcentaje


Menos de 1 mes 42 53
1 a 3 meses 15 19
3 a 6 meses 9 11
6 a 9 meses 2 3
9 meses a 1 año 4 5
Más de 1 año 8 10
TOTAL 80 100
Elaborado por: Ortiz Pamela (2019)

Interpretación: Se muestra en la tabla 19 que 5 de cada 10 personas tienen menos de

un mes en el SAI, mientras que solo 2 de cada 10 personas continúan su tratamiento pasado

los 6 meses.

Tabla 20.
Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según nivel de satisfacción sexual

Niveles Frecuencia Porcentaje


Bajo 15 18,8
Medio 16 20,0
Alto 27 33,8
Muy alto 22 27,5
Total 80 100
Elaborado por: Ortiz Pamela (2019)

Interpretación: Se muestra en la tabla 20 que 3 de cada 10 personas investigadas

tienen nivel alto de satisfacción sexual, lo que significa que sus factores de bienestar,

erotismo, respeto y responsabilidad, estimulación sensorial y comunicación se encuentran

adecuadamente desarrollados; mientras que 2 de cada 10 sujetos investigados tienen nivel

bajo de satisfacción sexual, es decir que no presentar un adecuado desarrollo en los factores

mencionados anteriormente.

54
Tabla 21.
Personas consumidoras de sustancias psicoactivas según actitudes hacia la sexualidad

Categoría Frecuencia Promedio


Erotofobia 13 16,3
Ambivalente 34 42,5
Erotofilia 33 41,3
Total 80 100
Elaborado por: Ortiz Pamela (2019)

Interpretación: Se muestra en la tabla 21 que 4 de cada 10 personas investigadas

tienen una actitud hacia la sexualidad ambivalente, es decir que tiene actitudes erotofobicas y

erotofilicas, en otras palabras, tienen actitudes positivas y negativas ante la sexualidad;

mientras que 2 de cada 10 personas investigadas tienen una actitud erotofobica, lo que

significa que tienen una actitud negativa hacia la sexualidad, donde se cree que todo lo

relacionado con el sexo es malo y que provoca dolor.

55
Análisis Bivarial

Tabla 22.
Tabla cruzada entre satisfacción sexual y actitudes hacia la sexualidad en la población
estudiada

Nivel de
Satisfacción Actitudes hacia la Sexualidad
Sexual

Erotofobia Ambivalente Erotofilia Total

Sujetos 3 9 3 15
Bajo Porcentaje 3,8% 11,2% 3,8% 18,8%

Sujetos 4 7 5 16
Medio Porcentaje 5% 8,8% 6,2% 20%

Sujetos 4 11 12 27
Alto Porcentaje 5% 13,8% 15% 33,8%

Sujetos 2 7 13 22
Muy alto Porcentaje 2,5% 8,8% 16,2% 27,5%

Sujetos 13 34 33 80
Total Porcentaje 16,2% 42,5% 41,3% 100%
Elaborado por: Ortiz Pamela (2019).

Interpretación: Tal como se menciona en la tabla 22, 1 de cada 10 personas tienen una

muy alta satisfacción sexual y una actitud erofilica, lo que significa que las personas

investigadas tienen una adecuada satisfacción sexual y ven a la sexualidad como positiva,

como una fuente de riqueza, que debe ser vivida con plenitud y responsabilidad; mientras que

solo 2 personas de la población tienen una muy alta satisfacción sexual y una actitud

erotofobica, lo cual puede indicar que tienen actitudes negativas hacia la sexualidad,

creyendo que todo lo relacionado con el sexo es malo y doloroso, pero desde su percepción

tienen una adecuada satisfacción sexual.

56
Comprobación de Hipótesis

Para identificar si los datos de las variables satisfacción sexual y actitudes hacia la

sexualidad tienen una distribución normal o no normal, se realizó la prueba de normalidad

Kolmogorov-Smirnov debido a que es una población de más de 30 personas, también se

utilizó el nivel de interacción, relación lineal y puntuación Z.

Se obtuvo como resultado en la prueba de normalidad Kolmogorov-Smirnov para los

datos de satisfacción sexual una D.S= 16 y un p= 0.001, obteniendo un valor de significancia

menor a 0.05, lo que indica una distribución no normal; para los datos de actitudes hacia la

sexualidad una D.S= 16 y un p= 0.20000, obteniendo un valor de significancia mayor a 0.05,

lo que indica una distribución normal.

En referencia al nivel de interacción, así como la relación lineal se ajustan a la ley de

distribución normal, ya que la variable aleatoria continua X tiene una distribución normal de

parámetros μ y sigma cuadrada, basándose en la siguiente formula:

Imagen 1. Formula general de distribución normal


Fuente: Pértegas y Pita (2001)

Es decir que, desde la ley de distribución normal, los coeficientes por bajo de 0.05

explican que la variable satisfacción sexual total es asimétrica, mientras que la variable total

actitudes hacia la sexualidad es simétrica, cumpliendo los supuestos de distribución no

normal, lo cual se observa en los siguientes gráficos:

57
Gráfico 1. Referencia al nivel de interacción y relación lineal de la variable satisfacción sexual.
Fuente: SPSS, versión 25, año 2017 y Elaborado por: Ortiz Pamela (2019).

Interpretación: Se muestra en el grafico 1, una media de 116.65, una desviación

estándar de 16,287, por consiguiente, los coeficientes por bajo de 0.05 explican que la

variable satisfacción sexual total es asimétrica.

Gráfico 2. Referencia al nivel de interacción y relación lineal de la variable actitudes hacia la sexualidad.
Fuente: SPSS, versión 25, año 2017 y Elaborado por: Ortiz Pamela (2019).

Interpretación: Se observa en el gráfico 2, una media de 67,33 y una desviación

estándar de 16,294; por consiguiente, la variable total actitudes hacia la sexualidad es

simétrica.

58
Para identificar el tipo de distribución en las variables: satisfacción sexual y actitudes

hacia la sexualidad además de las pruebas estadísticas antes mencionadas, se realizó la prueba

de puntuación Z con el fin de identificar las puntuaciones individuales en referencia a la

media, distribución estándar y varianza, desde la formula puntuación Z= al dato evaluado de

cada individuo menos la media, sobre la desviación estándar, donde se obtuvo en la variable

satisfacción sexual valores entre -3,42 y 1,56, evidenciando una distribución que no responde

al modelo normal, debido a que sus resultados exceden del -Z3 y Z3, mientras que en la

variable actitudes hacia la sexualidad varía entre -2,97 y 2,56, encontrando que las

puntuaciones Z tiene parámetros que idéntifica un supuesto de distribución normal, ya que

van desde -Z3 a Z3.

Tabla 23.
Puntuación Z de la variable satisfacción sexual

Puntuación
Media 117
Mediana 120
Desviación E. 16,29
Elaborado por: Ortiz Pamela (2019).

Interpretación: Se encontró en la tabla 23, una media de 117 y una desviación estándar

de 16,29, evidenciando una distribución que no responde al modelo normal.

Tabla 24.
Puntuación Z de la variable actitudes hacia la sexualidad

Puntuación
Media 67
Mediana 67
Desviación E. 16,29
Elaborado por: Ortiz Pamela (2019).

Interpretación: Se encontró en la tabla 24, que en la variable actitudes hacia la

sexualidad se obtuvo una media de 67 y una desviación estándar de 16,29, encontrando que

las puntuaciones Z tiene parámetros que idéntica un supuesto de distribución normal.

59
Por tal razón, se procedió a correlacionar las dos variables utilizando el Coeficiente de

correlación Rho de Spearman, ya que esta prueba presupone la normalidad y no normalidad

de la distribución de las variables. Las hipótesis sometidas a comprobación fueron:

H1: A mayores niveles de satisfacción sexual, mayores actitudes positivas hacia la

sexualidad en personas consumidoras de sustancias psicoactivas.

HO: A mayores niveles de satisfacción sexual, menores actitudes positivas hacia la

sexualidad en personas consumidoras de sustancias psicoactivas.

La comprobación de la hipótesis de investigación (Hi) se efectuó con N = 80, p =

0.05, es decir, con un 95% de confianza y un 5% de margen de error, obteniéndose los

siguientes resultados:

Tabla 25.
Comprobación de hipótesis mediante el Coeficiente de Correlación de Spearman

Satisfacción sexual
Actitudes hacia Coeficiente de Nivel de
N p-valor 𝑟2
la sexualidad correlación correlación
80 0,31 Escasa 0,005043 0,106
Fuente: SPSS, versión 25, año 2017
Elaborado por: Ortiz Pamela (2019).

Interpretación: Se obtuvo en la tabla 25 que el coeficiente de correlación es 0.31, con

un p= 0.005043; indicando que se prueba la hipótesis de investigación, ya que existe una

correlación estadísticamente significativa. Se evidencia así, que existe una dirección positiva

entre las variables satisfacción sexual y actitudes hacia la sexualidad, es decir, a mayor nivel

de satisfacción sexual, mayor actitud positiva hacia la sexualidad, con una proporción de 0.20

– 0.40, lo cual significa una escasa correlación, en otras palabras, a mayor sensación

placentera y agradable del acto sexual existe un bajo sentimiento de culpa sexual. A su vez

considerando el valor 𝑟 2 = 0. 106, el nivel de satisfacción sexual explica en un 10.6% la

varianza en las actitudes hacia la sexualidad, siendo este porcentaje considerado bajo.

60
DISCUSIÓN DE RESULTADOS

Se encontró en el presente estudio los siguientes resultados con mayor frecuencia;

siendo las edades con mayor porcentaje entre 20 a 29 años con un 57,5%, donde la población

investigada refirió un mayor consumo de basé de cocaína en un 48,8% y un consumo de

sustancias psicoactivas diario de 5 a 7 veces por semana en un 43,8%; a su vez Ortega (2019)

menciona similares resultados en su investigación realizada en el CETAD de Quito, donde

encontró que 35% de los participantes están en los rango de edad de 20 a 29 años y que la

segunda sustancia que se consume con mayor frecuencia es la base de cocaína con un 26%.

Por otro lado, en la investigación de prevalencia de consumo de drogas realizada por el

Gobierno de la República de Colombia (2014), se obtuvo que el 38,6% se encuentra entre los

18 a 34 años, el 1,2% a consumido alguna vez base de cocaína y el 3,6% ha usado alguna

droga en el último año; cabe mencionar que el estudio es realizado a nivel nacional.

A su vez, se obtuvo en la presente investigación que el 68,8% mencionó tener un

estado civil soltero, con un nivel socioeconómico medio en un 51,3% y un nivel de

instrucción de bachiller en un 30%; lo cual Ortega (2019) obtuvo similares características en

su población, donde el 48% tienen estado civil soltero, con un nivel socioeconómico medio

en un 68% y un nivel de instrucción secundario de 27%; así mismo menciona la

Organización de los Estados Americanos (2014) que en Uruguay se realizó un estudio en el

Centro de Información y Referencia Nacional de la Red Droga, donde se obtuvo que la

mayoría de los participantes eran solteros, desocupados y gran parte accedió a enseñanza

media, pero no lo finalizo y un elevado número de usuarios vivía con sus padres.

Mientras que también se encontró en la presente investigación que el 58,8% de la

población mencionó que ningún miembro de la familia ha consumido alguna sustancia

psicoactiva y el 41,2% que sí ha consumido y a su vez un 71,3% percibió a su familia como

funcional, asimismo un 36,3% tiene padres casados y un 53,9% padres solteros, separados,

61
divorciados y viudos; lo cual Prado (2017) menciona en su investigación en Ecuador datos

distintos, pese a ser las mayores frecuencias, donde el 92% de hogares presentan un consumo

de sustancias por parte de algún miembro que lo integra, igualmente se encontró que en los

pacientes consumidores existe un 42% de familias unidas y un 42% son familias separadas y

desligadas. Por otro lado, Vargas et al. (2015), mencionan en su investigación realizada en

pacientes con dependencia de sustancias psicoactivas en un centro de rehabilitación en

Colombia, que el 70% de las familias de los pacientes son monoparentales, donde

consideraron que las familias estaban desestructuradas por divorcio o separación,

fallecimiento de la figura paterna o por internamiento en centros penitenciarios.

Además, en el presente estudio en la razón de consumo se obtuvo que un 35% lo

hacen por tristeza, lo cual también menciona Játiva (2017) en su investigación realizada a los

pacientes de la Clínica de Adicciones del Hospital Enrique Garcés, donde el 35% lo hace por

evitar la realidad, por el dolor y tristeza que produce la misma. Por otro lado, en tiempo de

consumo de la sustancia psicoactiva, se encontró en la población que el 73% lleva un

consumo de más de 5 años en adelante; y Chimbo (2014) observo resultados similares en su

investigación realizada a pacientes en tratamiento residencial por el consumo de drogas en

Quito, donde el 70% de su muestra lleva un consumo de 6 a 20 años. Y en el tiempo de

tratamiento en el SAI se encontró en la muestra que el 53% tiene menos de un mes; mientras

que resultados distintos menciona Ortega (2019) en su estudio realizado en el CETAD de

Quito, donde el 25% de la muestra se encuentra en tratamiento de 1 a 45 días.

En lo que refiere a la variable investigada en el presente estudio, se encontró que en la

satisfacción sexual de la población estudiada se obtuvo un 33,8% de satisfacción alta y como

menor porcentaje un 18,8% tiene satisfacción baja; por lo cual, los presentes resultados son

similares a los reportados por Ortiz (2018), donde obtuvo en su investigación realizada a

estudiantes entre las edades de 18 a 44 años, que un 11% tiene baja satisfacción sexual y

62
como segundo mayor porcentaje se encontró un 20% con alta satisfacción sexual; mientras

que Carmen y Coronado (2016) en su investigación en estudiantes universitarios en Perú,

obtuvieron en su población que el 27,7% tiene alta satisfacción sexual y el menor porcentaje

en un 23,9% con una muy alta satisfacción y mediana satisfacción. Cabe mencionar que no se

encontró investigaciones en personas consumidoras de sustancias psicoactivas.

Igualmente, en la presente investigación se obtuvo en la variable actitudes hacia la

sexualidad, que un 42,5% son ambivalentes, es decir que tienen actitudes de erotofobia y

erotofilia, un 41,3% tiene actitud erotofilica y un 16,3% tiene actitud erotofobica. De igual

forma se encontraron resultados similares pese a no tener la misma población del presente

estudio en la investigación de Narváez y Valverde (2018), donde su muestra fue los adultos

mayores que asisten a los talleres de memoria del Centro de Atención al Adulto Mayor del IESS

en Cuenca, obteniendo que el 55,3% tiene actitud ambivalente, el 27,3% tiene actitud

erotofilica y un 17,4% tiene actitud erotofobica.

Dado que no se encontraron investigaciones en población de personas consumidoras de

sustancias psicoactivas que relacione las variables tratadas en este trabajo, se hará referencia

a la investigación de Castaño, Arango, Morales, Rodríguez y Montoya (2012) que realiza en

adolescentes que consumen sustancias psicoactivas en Colombia, donde se utilizó la prueba

Chi Cuadrado, obteniendo que no se encontró asociación estadísticamente significativa, (p

=0.711) entre tener relaciones sexuales bajo el efecto de drogas y el uso de métodos de

protección, mientras que en consumir drogas y tener relaciones sexuales presentan una

asociación estadísticamente significativa (p < .001). Mientras que en la presente investigación

se utilizó la prueba Coeficiente de correlación Rho de Spearman, donde se obtuvo una correlación

estadísticamente significativa entre la satisfacción sexual y las actitudes hacia la sexualidad en

personas consumidoras de sustancias psicoactivas con un coeficiente de correlación de 0.31062

y un p= 0.005, rechazando así la hipótesis nula y aceptando la hipótesis del investigador.

63
CONCLUSIONES

Una vez realizado el análisis de los resultados obtenidos y en base a los objetivos

planteados como a la hipótesis planteada para el desarrollo de la investigación, se pudo llegar

a las siguientes conclusiones:

 En base al estudio de las características sociodemográficas, se encontró que la

sustancia que se consume con mayor frecuencia en la población estudiada es pasta

base de cocaína, lo cual puede deberse al alto grado de adicción que tiene dicha

sustancia en el organismo, de igual manera se evidenció que existe mayor frecuencia

de consumo diario en los participantes.

 Se evidencia que los participantes perciben con mayor frecuencia a su familia como

funcional, lo cual puede deberse a la influencia positiva que ha tenido la terapia

familiar brindada por el SAI del Centro de Salud de Chimbacalle.

 A su vez, en cuanto a la razón del consumo, se evidencio como mayor frecuencia que

lo hacen por tristeza, siendo la principal emoción la causante de su consumo y

recaídas.

 En cuanto a los niveles de satisfacción sexual, se evidencio que existe mayor

frecuencia de personas consumidoras de sustancias psicoactivas con niveles altos de

satisfacción sexual, lo que significa que estas personas se sienten conformes en su

manera de vivir su sexualidad, dentro de lo afectivo, bienestar, erotismo, respeto,

responsabilidad, estímulos sensoriales y comunicación.

 Por otra parte, en las actitudes hacia la sexualidad en las personas que consumen

sustancias psicoactivas se encontró que existe mayor frecuencia en actitudes

ambivalentes (erotofobia-erotofilia), es decir que tienen actitudes tanto negativas

como positivas respecto a temas relacionados a la sexualidad.

64
 Igualmente se concluye que existe una relación entre una satisfacción sexual muy alta

y una actitud sexual erofilica, lo que significa que las personas investigadas tienen una

apropiada satisfacción sexual y ven a la sexualidad como positiva, siendo personas

más respetuosas con emociones positivas y abiertas, teniendo un bajo sentimiento de

culpa sexual.

 Para concluir, se obtuvo una correlación estadísticamente significativa entre las

variables satisfacción sexual y actitudes hacia la sexualidad en personas consumidoras

de sustancia psicoactivas, donde se utilizó la prueba estadística del Coeficiente de

Correlación de Spearman, probando así la Hipótesis del investigador.

65
RECOMENDACIONES

Teniendo en cuenta los resultados y conclusiones obtenidas en la presente

investigación, se puede presentar las siguientes recomendaciones:

A la universidad:

 Replicar este estudio a nivel nacional, con el fin de validar o contrastar los resultados,

sobre la satisfacción sexual y actitudes hacia la sexualidad no solo en hombres sino en

mujeres que consuman sustancias psicoactivas y determinar el papel que juegan las

sustancias psicoactivas en los problemas de la salud sexual.

 Realizar con mayor frecuencia proyectos de investigación con las variables que

fueron propuestas en el presente estudio, con poblaciones mayores en la que se pueda

establecer el grado de relación entre ambas variables.

 Realizar con mayor frecuencia proyectos de investigación en los Servicios

Ambulatorios Intensivos, sobre temas relacionados a la sexualidad de las personas que

acuden por problemas de consumo de sustancias.

 Realizar y validar instrumentos psicológicos que evalúen la satisfacción sexual y las

actitudes hacia la sexualidad vinculado con el consumo de sustancias psicoactivas, en

el contexto ecuatoriano.

 Realizar estudios sobre la sexualidad y el manejo de las relaciones sentimentales, en

las personas que consumen sustancias psicoactivas, debido a que se encontró en la

población investigada que más de la mitad son solteros.

66
Al Centro de Salud:

 Socializar los resultados de la presente investigación en otros Servicios Ambulatorios

Intensivos (SAI), debido a que puede ayudar a los profesionales de la salud mental a

tomar en cuenta la salud sexual del paciente que consume sustancias psicoactivas,

como parte importe dentro de su tratamiento psicológico.

 Realizar campañas de sensibilización y concientización de la importancia de la salud

sexual dentro del tratamiento psicológico, como parte de un buen manejo emocional y

conductual de su sexualidad, en los pacientes que acuden por problemas de consumo

de sustancias psicoactivas en el SAI de Chimbacalle.

 Instaurar y profundizar en el SAI de Chimbacalle dentro de la historia clínica un

apartado que investigue la satisfacción sexual y las actitudes hacia la sexualidad,

como parte de un tratamiento integral en la recuperación de los pacientes que

consumen sustancias psicoactivas.

67
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

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la evaluación de la satisfacción sexual en hombres y mujeres mexicanos. Recuperado

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76
ANEXOS

Anexo A. Protocolo de investigación aprobado

Universidad Central del Ecuador

Facultad de Ciencias Psicológicas

Carrera de Psicología Clínica

Proyectos de investigación

Satisfacción Sexual y Actitudes hacia la Sexualidad en personas consumidoras de

sustancias psicoactivas en un Centro de Salud del D.M.Q

Investigadores proponentes:

Autora: Ortiz Orellana Pamela Michelle

Tutor: MSc. Estuardo Beethoven Paredes Morales

2019-2019

77
Universidad central del ecuador

Facultad de ciencias psicológicas

 Carrera:
- Psicología Clínica
 Área de conocimiento:
- Ciencias Sociales y del Comportamiento
- Ciencias de la Salud
 Línea de Investigación:
- Psicología Clínica y Salud Mental
 Investigadores proponentes:
- Nombres y apellidos del estudiante: Pamela Michelle Ortiz Orellana
- Nombres y apellidos del tutor: MSc. Estuardo Beethoven Paredes Morales

78
1. Título del proyecto de investigación

Satisfacción sexual y actitudes hacia la sexualidad en personas consumidoras de

sustancias psicoactivas en un Centro de Salud del D.M.Q.

Capítulo I planteamiento del problema

1. Identificación del problema

La salud sexual es un tema muchas veces descuidado, como lo señalan Álvarez-

Gayou, Honold y Millán (2006), que, desde los profesionales de salud, programas educativos,

hasta las políticas públicas, descuidan dicho tema, lo cual se refleja en innumerables

problemáticas relacionadas con la sexualidad de los seres humanos. Es así como México

refleja que en la vida sexual el 65,79% de las mujeres nunca o máximo la mitad de las veces

han experimentado un orgasmo, mientras que la eyaculación precoz en los hombres se

presenta en un 40,9% (Álvarez-Gayou et al., 2006). Por lo cual se presenta en casi un 50% de

la población, problemas de tipo sexual, debido a la dificultad de examinar la problemática, la

poca experiencia y comprensión de los profesionales de la salud, ya que tienen carencia en su

formación en las actitudes y en la información sobre la sexualidad (Álvarez-Gayou et al.,

2006).

Por lo tanto, es necesario definir las variables a estudiar, es así como Ortiz y Ortiz

(como se citó en Carmen y Coronado, 2016) definen la satisfacción sexual como el poder

cumplir un deseo erótico y al haber satisfecho una pasión, al aplacar un sentimiento o al

sentirse amado. Por consiguiente, es la percepción y evaluación que un individuo realiza de

su vida sexual, así Moral (como se citó en Carmen y Coronado, 2016) menciona que es en

base en la repetición de los encuentros sexuales, la satisfacción de las necesidades, el modo

de la comunicación en pareja, el tipo de acción sexual ejecutada, el cumplimiento de

expectativas y el agrado con su relación de pareja en general.

79
De manera que la sexualidad es una parte exhaustiva de las expresiones del ser

humano, donde se vive y expresa a través de los pensamientos, fantasías, creencias, deseos,

actitudes, conductas, roles, valores, prácticas y relaciones interpersonales; las mismas que

pueden no todas experimentarse o expresarse del todo (Pérez, 2013).

De modo que las actitudes hacia la sexualidad están relacionadas con lo mencionado

anteriormente, así la palabra actitud la definen Morales, Gaviria, Moya, & Cuadrado (como

se citó en Maldonado, 2019) como un acto de poder valorar de forma positiva o negativa un

evento que pueda activar una guía de elección ante la decisión que se anhela elegir. Por

consiguiente, Gaviria, Cuadrado, & López (como se citó en Maldonado, 2019) resaltan que

una actitud antecede a la conducta y que se compone como una predisposición hacia el acto

mismo.

Del mismo modo, el consumo de sustancias psicoactivas se considera un problema

social y de salud en todo el mundo. Pero también es considerado un problema de orden

público y de seguridad ciudadana, formándose un pensamiento moral del problema que será

trasladado a otras partes del mundo (Gonzalez, como se citó en Slapak y Grigoravicius,

2007).

Es así como la Oficina de las Naciones Unidad contra la Droga y el Delito (UNODC,

2018), señala que las consecuencias adversas por dicho consumo siguen siendo

considerables; donde las muertes relacionadas con las drogas cada año aumentan y en algunas

zonas del mundo se ha declarado epidemias de opioides, reflejando que 275 millones de

habitantes en el mundo, es decir el 5,6% aproximadamente de la población mundial entre los

15 y los 64 años, consumió sustancias psicoactivas por lo menos una ocasión en el 2016. Al

igual que cada año 3,3 millones de personas mueren en todo el mundo por el consumo nocivo

de alcohol, siendo un 5,9% de todas las muertes. (Organización Mundial de la Salud [OMS],

80
2018). Según la OMS (2018) el consumo de alcohol provoca defunción y discapacidad entre

los 20 a 39 años, siendo que un 25% de las defunciones son a causa del consumo de alcohol.

A su vez el Trabajo de investigación se realizará en Ecuador, por lo cual, se encontró

que las cifras son preocupantes, ya que en el 2016 se obtuvo que más de 8 mil personas

murieron por el consumo de alcohol, tabaco y otras drogas (Más de 8 mil personas fallecieron

en 2016, por consumo de alcohol y drogas, 2018).

Mientras que en el 2017 el Ministerio de Salud de enero a mayo ofreció atención a

8.554 personas por problemas relacionados con estupefacientes. A su vez el director técnico

del Instituto de Neurociencias de Guayaquil menciona que existen otros efectos negativos por

el consumo de sustancias psicoactivas, como intoxicaciones, trastornos psicóticos

(alucinaciones), depresión, bipolaridad, ansiedad (miedos y fobias), obsesiones compulsivas,

problemas en el sueño, neurocogniciones (perdida de la memoria, dificultades en la atención

y en la capacidad de pensar), delirio, disfunciones sexuales (El 39% de consumidores probó

más de una droga, 2017).

En definitiva, ante el consumo de las sustancias psicoactivas, las autoridades

nacionales correspondientes al área han implementado gradualmente en distintos Centros de

salud, el Servicio Ambulatorio Intensivo (SAI); dentro de esta modalidad, el Ministerio de

Salud Pública ofrece servicios de terapia psicológica individual, grupal, familiar, ocupacional

a las personas con problemas en el consumo de sustancias psicoactivas, siendo el objetivo del

SAI, la rehabilitación y reinserción social de las personas con problemas en el consumo de

sustancias psicoactivas (Programa ambulatorio intensivo previene el consumo de alcohol y

otras drogas, 2018).

De manera que se concluyó realizar la presente investigación describiendo y

correlacionando la satisfacción sexual y las actitudes hacia la sexualidad en personas

consumidoras de sustancias psicoactivas, siendo temas importantes para una salud integral

81
del ser humano; por eso, la investigación se realizará en el Centro de Salud de Chimbacalle

en el área de Salud Mental del Servicio Ambulatorio Intensivo en los meses de marzo a

agosto del año 2019.

Preguntas.

 ¿Cómo se relaciona la satisfacción sexual con las actitudes hacia la sexualidad en

personas consumidoras de sustancias psicoactivas?

 ¿Cuáles son las características sociodemográficas de las personas consumidoras de

sustancias psicoactivas?

 ¿Qué niveles de satisfacción sexual tienen las personas consumidoras de sustancias

psicoactivas?

 ¿Cuáles son las actitudes hacia la sexualidad en personas consumidoras de sustancias

psicoactivas?

2. Justificación

La relevancia teórica de la presente investigación se enfocará en primer lugar en la

realización de un análisis conceptual de las variables, satisfacción sexual y actitudes hacia la

sexualidad, determinando a su vez la descripción y correlación de las mimas, que se

manifiestan en una población consumidora de sustancias psicoactivas, dentro del contexto

sociocultural ecuatoriano, permitiendo así establecer un conocimiento notable en dicho

contexto. Siendo importante mencionar a su vez, que los resultados de la investigación a

realizar servirán para poder ahondar en futuros proyectos de investigación.

En cuanto al aporte metodológico, el tipo de investigación se centra en correlacionar

las variables antes mencionadas, dentro del contexto del consumo de sustancias psicoactivas,

permitiendo corregir si es de ser necesario, el abordaje de salud en dicha población, para

poder ofrecer una atención integral y adecuada, por lo cual se tomará con mayor relevancia el

tema de la sexualidad.

82
Por otra parte, la justificación práctica pudiera contribuir a la posibilidad de crear

planes de intervención terapéutica individual y grupal, dirigidos a personas consumidoras de

sustancias psicoactivas, debido a que a través de la comprobación de la correlación existente

entre la satisfacción sexual y las actitudes hacia la sexualidad, se podrían ejecutar abordajes

psicológicas de manera apropiada y campañas de información sobre dichas variables, con la

finalidad de encaminar a la población de estudio a llevar una vida sexual satisfactoria, con

responsabilidad y respeto mutuo.

Finalmente, la justificación social se fundamentará en el aporte de los resultados que

se obtendrán en la investigación, hacia la necesidad de una atención integral y

multidisciplinaria en los tratamientos que respondan a las necesidades individuales, en

personas consumidoras de sustancias psicoactivas y aún más en adicciones hacia las mismas.

Permitiendo que los resultados den paso a una visión que se respalde en los procesos y

requerimientos individuales, restituyendo al sujeto una responsabilidad activa, a través del

compromiso en su propio proceso de recuperación, generando así, un empoderamiento de su

protagonismo en el consumo de dicha sustancia o sustancias psicoactivas. De modo que se

considera importante la investigación a realizar, debido a que es necesario evaluar no solo la

parte del consumo dentro de sus pérdidas laborales, rupturas en la estructura familiar,

callejización, situaciones de riesgo, etc., sino que también es necesario determinar cómo se

encuentra su parte sexual, dentro del consumo de sustancias psicoactivas.

La población beneficiaría de la investigación comprende a las personas que, por su

manifestación sintomática, poseen un consumo de sustancias psicoactivas, donde se

encuentra un consumo perjudicial o dañino para su salud (físico-mental) y que, dentro del

contexto de recuperación, deciden ingresar al Servicio Ambulatorio Intensivo del Centro de

Salud de Chimbacalle, en el Distrito Metropolitano de Quito-Ecuador.

83
3. Limitaciones de la investigación

 Esta investigación es viable porque se cuenta con los recursos financieros, humanos,

materiales y técnicos para poder ejecutarla.

 El acceso a la muestra podría presentar dificultades ya que se requiere un proceso

burocrático de autorización entre el investigador y el Ministerio de Salud Pública del

Ecuador.

 La investigación no pretende predecir la adherencia terapéutica, ni mucho menos

pronosticar el éxito de la rehabilitación en los tratamientos de adicción a sustancias

psicoactivas.

 Debido a la naturaleza de la investigación de tipo transversal y que se desarrollará en

un contexto de tratamiento ambulatorio intensivo dirigido a personas consumidoras de

sustancias psicoactivas que acuden por voluntad propia, sus resultados no se podrán

extrapolar o generalizar en contextos de población sin sintomatología de dicha

problemática o a otros contextos de consumo de sustancias psicoactivas que posean

otras modalidades de tratamiento, como tratamiento residencial o involuntario.

4. Objetivos de la investigación

4.1. Objetivo General.

 Relacionar la satisfacción sexual y las actitudes hacia la sexualidad en personas

consumidoras de sustancias psicoactivas del Servicio Ambulatorio Intensivo del

Centro de Salud de Chimbacalle, en los meses de marzo a agosto del 2019.

4.2. Objetivos Específicos.

1. Describir las características sociodemográficas de las personas consumidoras de

sustancias psicoactivas.

2. Describir los niveles de satisfacción sexual en personas consumidoras de sustancias

psicoactivas.

84
3. Describir las actitudes hacia la sexualidad en personas consumidoras de sustancias

psicoactivas.

85
Capítulo II Marco Teórico

1. Posicionamiento Teórico

La presente investigación tiene como variables la satisfacción sexual y las actitudes

hacia la sexualidad, las cuales tomaran como enfoque, al cognitivo condutal, y se elige como

teoría, al aprendizaje por reforzadores, planteada por S.B Skinner, basada en que la

“aparición de un estímulo desencadena una respuesta en la persona. Si esta respuesta es

condicionada utilizando reforzadores positivos o negativos, se podrá ejercer una influencia en

dicha reacción o conducta operante, la cual puede potenciarse o inhibirse” (Rovira, 2018,

como se citó en Maldonado, 2019, p.8).

Por otro lado, de esta teoría se desprende el modelo de refuerzo de afecto de

respuestas evolutivas planteado por Byrne (como se citó en Gómez, 2013), el cual menciona

que las personas que se hallan dentro de un contexto social van desarrollando a lo largo de su

vida respuestas evaluativas en correspondencia hacia aspectos sexuales. De la respuesta

evaluativa dependerá el desarrollo de la actitud hacia la sexualidad bien sea positiva o

negativa, y por ende una satisfacción sexual.

2. Marco teórico referencial

2.1. Satisfacción Sexual

2.1.1. Definiciones o conceptos de la satisfacción sexual.

Mencionan De Lamater, Hyde y Fong (como se citó en Carmen y Coronado, 2016)

que la satisfacción sexual es la respuesta afectiva que se genera a través de la evaluación que

el ser humano realiza de los aspectos positivos y negativos de la relación sexual.

Según Ortiz (como se citó en Carmen y Coronado, 2016) es el cumplimiento de un deseo

erótico, la expresión final de la pasión, el aplacamiento de un sentimiento, el sentirse

complacido y amado.

86
Romero (como se citó en Carmen y Coronado, 2016) menciona que la satisfacción

sexual es comprendida como todas las sensaciones placenteras que surgen como

consecuencia del acto físico, las mismas que están profundamente relacionadas con la

satisfacción emocional del individuo y que son tomadas en cuenta de forma personal,

generando seguridad en sí mismos.

A su vez Álvarez (como se citó en Carmen y Coronado, 2016) resalta que la

satisfacción sexual es la valoración subjetiva de las actitudes comportamentales que se

produce de determinadas conductas sexuales de la pareja.

Para Carrera (como se citó en Carmen y Coronado, 2016) la satisfacción sexual es la

sensación placentera y agradable, dentro de un disfrute pleno, equilibrio psicofísico, bienestar

y consecuencias del acto sexual.

De modo que, gracias a las definiciones propuestas por distintos autores a través de

los tiempos, se puede decir que la satisfacción sexual genera sentimientos, emociones,

sensaciones, que son desplazadas del acto sexual y de la cercanía afectiva dentro de la

relación de pareja, dando como resultado expresiones positivas, como seguridad y confianza

mutua.

2.1.1.1. Goce.

Para comprender la sexualidad humana se habla desde lo multidimensional en

Bahamonde, Carmona y González (2011), es decir, desde tres dimensiones, una personal he

individual, donde se expresa el yo del individuo; una de pareja, donde se encuentra la

reproducción y la comunicación filial; y una social donde se expresa la comunicación y lo

mandatos sociales.

Entonces es importante mencionar al goce dentro de la satisfacción sexual como parte

de la sexualidad humana, que se encuentra dentro de la dimensión personal y de pareja,

donde el goce de la otra persona también interesa en la medida en que se demuestra una

87
capacidad narcisista de soltar y producir. “Se goza del placer del otro, pero no se goza el

placer del otro. Con él, junto a él, a su lado, pero no en lugar del otro, con su conciencia en su

propia carne” (Bedoya, 2010, p. 70).

También según Bahamonde et al. (2011), la autoestima se considera importante, ya

que el sentirse seguros, confiados, con amor propio y conformidad con su propio cuerpo,

hacen que el goce de la relación sexual sea distinto. Es así como la autoestima contribuye en

la desinhibición frente a la pareja, mostrándose como son, para poder lograr una adecuada

relajación y concentración durante la relación sexual que se trasforma en un momento

mágico, y así poder disfrutar de un grato momento, donde abunde la entrega de amor y

caricias.

2.1.1.2. Deseo.

Se habla del deseo sexual según Gómez (2013) desde lo biofisiológico, con una

estructura anatómica-neuro-endocrina; es decir desde su función etológica, que se centra en la

supervivencia de la especie por medio de la reproducción, y desde lo psicológico, donde el

deseo sexual se transforma en una motivación muy importante de la propia existencia.

También menciona Bancroft (como se citó en Gómez, 2013) que se debe considerar

en el deseo sexual su concepto experiencial y lo anatómico-neuro-endocrino, ya que influye

también lo afectivo en términos de humor o de estados emocionales; lo cognitivo en términos

de pensamientos e imágenes; y lo biofisiológico en términos de activación central.

Así Lief (como se citó en Gómez, 2013) menciona que se encuentra en una dimensión

diferente de la excitación y el orgasmo, por lo cual define al deseo sexual como algo

complejo de la vida del ser humano, que requiere de multifactores para poder comprenderlo,

ya que no solo se debe observar las respuestas sexuales.

Ante todo como hemos visto el deseo sexual no solo es objetivo, es decir desde lo

orgánico, sino también es subjetivo, desde lo emocional, sentimental y afectivo, es así que

88
Rosen y Leiblum (como se citó en Gómez, 2013) refieren que el deseo sexual es un

sentimiento subjetivo, que puede ser o no activado por estímulos externos o internos y que

como resultado desencadena o no un comportamiento sexual abierto; por lo cual es necesario

que ocurra un adecuado funcionamiento neuroendocrino, exposición a estímulos sexuales

intensos, dentro de su entorno o desde el propio individuo.

También es importante tener en cuenta que Levine (como se citó en Gómez, 2013),

define al deseo sexual a través de tres puntos: lo que precede y acompaña a la excitación; la

tendencia psicobiológica a buscar la satisfacción sexual; y la energía que traslada al

comportamiento sexual. En otras palabras, es la energía psicológica que acompaña, precede y

que provoca comportamientos sexuales (Levine, como se citó en Gómez, 2013). También se

señala que el deseo sexual es el fruto de la capacidad mental de integrar tres elementos

moderadamente separados: el impulso, el anhelo y la motivación. Los cuales se definen a

continuación:

 Impulso: Es el efecto del trabajo de las bases biofisiológicas que rigen el

comportamiento sexual, desde una base energética que lo mantiene. Se muestra a

través de respuestas endógenas y específicas de la activación sexual. Los atributos

físicos tienen un cambio perceptual, alcanzando un valor alto en los valores eróticos,

sueños, fantasías y tendencia a la búsqueda de actividad sexual autoerótica o

compartida. A su vez la testosterona es un activador necesario, pero no único, ya que

los compuestos neurofisiológicos, son responsables de la activación, que proviene de

la programación genética, encargada de la reproducción. El impulso se refiere a la

activación neurofisiológica como base del deseo sexual.

 Anhelo: Son las ganas, el anhelo de tener relaciones sexuales, independientemente del

impulso, es decir, del deseo de desear. Se puede desear relaciones eróticas sin tener

impulso; por lo cual el anhelo es la representación cognitiva de las ganas de vivir

89
escenarios eróticos. Así puede haber mujeres y/o hombres de cierta edad que anhelan

tener relaciones sexuales pero que pueden tener un impulso débil o infrecuente y las

razones pueden ser: el mantener relaciones sexuales hace sentirse bien físicamente,

amado, valorado, importante, enérgico y vital. En los adolescentes en momentos el

impulso podría no estar de acuerdo con el anhelo. Donde el no anhelar la actividad

sexual aun teniendo altos niveles de excitabilidad y activación, se deba a que no se

siente preparado emocionalmente, no saber cómo hacerlo, no tener la persona

apropiada, estar asustado por las sensaciones fuertes de activación erótica, miedo al

embarazo o enfermedades de transmisión sexual, creer que la actividad sexual en ese

instante es inapropiada moralmente, miedo al castigo de los padres, a la intimidad y al

rechazo. Mientras se va creciendo y madurando, los impulsos y anhelos van

concordando cuando se examina la actividad sexual como algo normal y valioso.

 Motivo: Es el anclaje psicológico del deseo, la decisión de tener relaciones eróticas.

Así la motivación de la actividad sexual depende de uno o más de los siguientes

antecedentes: impulso, decisión de tener relaciones sexuales, relación interpersonal,

observación de los demás, la atracción, etc. Es decir, se debe tener representaciones

mentales de la experiencia erótica en el ser humano y el deseo de formar uno solo

(anhelo), a su vez sintiendo la activación erótica como resultado de los estímulos

endógenos o exógenos (impulso), y por consentir y aceptar unir la experiencia erótica

en su biografía (motivo) (Gómez, 2013). Por lo tanto, la motivación es la disposición

a la voluntad de involucrarse en una experiencia erótica, siendo condicionado por:

a) La identidad de género.

b) La calidad de las relaciones sexuales y no sexuales.

c) Las pautas de regulación propia y del compañero/a.

d) La transferencia con los vínculos del pasado.

90
En resumen, el deseo sexual es la tendencia psicobiológica a buscar la satisfacción

sexual y que debe ser suplido en su totalidad, lo cual implica un sentimiento de interés, de

necesidad, de apetencia, de búsqueda de estimulación y placer erótico, integrando a su ves el

impulso como parte de lo biofisiológico, el anhelo como parte de lo conductual, y el motivo

como parte de lo afectivo.

2.1.1.2.1. Configuración del deseo.

Gómez (2013) menciona que dependerá de la interacción de la programación genética

hacia la exploración del placer, el contexto sociocultural donde se desarrolle la persona y las

experiencias importantes que viva durante su vida. Por lo cual es importante tomar como

punto de partida la historia psicosexual del individuo, ya que así se podrá comprender como

se incorpora lo innato, los procesos afectivos, cognitivos y comportamentales en la

satisfacción sexual.

Donde en primer lugar las disposiciones innatas se apoyan en bases biofisiológicas de

una motivación sexual, produciendo sensaciones internas corporales y una capacidad de

respuesta no aprendida, que se transforma en estímulos eróticos, lo cual corresponde al

impulso, considerado como primer nivel de la configuración.

En segundo lugar, el contexto donde se desarrolla el individuo, varia en la

permisividad y la intransigencia, lo cual forma parte de los contenidos culturales que pueden

regular la expresión de la motivación sexual y los comportamientos asociados;

correspondiendo así, al anhelo.

Y en tercer lugar se habla de la configuración del deseo sexual como algo armonioso,

cuando se logra el reconocimiento y la aceptación positiva de los resultados que produce la

motivación sexual, en un entorno favorable que integre la dimensión sexual o que puede ser

dividida, si bien impide o restringe la integración en el conjunto de la personalidad; lo cual

corresponde al motivo.

91
Por ende, se debe realizar un análisis diacrónico de la historia psicosexual de la

configuración del deseo, desde un recorrido histórico, es decir desde las primeras sensaciones

sexuales, juegos eróticos, fantasías, experiencias autoeróticas y heteroeróticas, forma en la

que se orienta el deseo, experiencia intima del deseo en relación a la percepción propia del

individuo hacia el contexto en donde se desenvolvió, etc.

De manera que los factores que intervienen en la configuración del deseo son: las

bases neurofisiológicas innatas de la motivación sexual, el contexto cultural, sexualidad

infantil, pubertad y adolescencia, la cuales se describirán a continuación.

 Bases neurofisiológicas: son la esencia biológica de la programación genética hacia

la búsqueda del placer erótico.

 Contexto cultural: regula la expresión de los sentimientos eróticos, como los

comportamientos explícitos, como resultado de los significados que asignan los

grupos culturales en donde el individuo convive; siendo así que la activación erótica y

sus sensaciones, son procesados y experimentados en base a comportamientos

simples, como el contacto físico, conductas autoeróticas y exploración corporal.

 Sexualidad infantil: la seguridad básica y la calidad de la experiencia intima con sus

figuras de apego, son pilares para la construcción de una relación confiada y sensible.

Siendo sus características psicológicas infantiles, la vivencia sexual egocéntrica y

autoerótica, que pertenece al momento evolutivo. Pero no se puede decir que existe en

los niños un deseo sexual tal y como lo entendemos desde la adultez, ya que los

activadores del deseo como los estímulos eróticos, no son significativos en ellos,

aunque exista curiosidad de su propio cuerpo y el del otros. Por lo tanto, en la infancia

se habla de una dimensión sexual-afectivo-social y también desde una visión difusa y

sin perfilar (Gómez, 2013).

92
El reconocimiento de los adultos sobre la importancia y el respeto de las

manifestaciones sexuales infantiles genera una configuración optima del deseo erótico dentro

de un entorno protector, respetuoso y positivo, debido a que cualquier experiencia de

violencia o abuso sexual hacia una niña o niño, puede causar un daño grave en la

configuración del deseo erótico (Gómez, 2013). A su vez, se produce en la primera fase de la

adolescencia la motivación sexual y el deseo erótico, en una proyección paulatina hacia la

satisfacción en objetos eróticos.

 Pubertad: es el inicio del cambio transitorio hacia la adultez, con la aparición

del erotismo puberal, gracias al incremento de la testosterona en los dos sexos.

 Adolescencia: se aumenta la motivación sexual, gracias a los cambios

hormonales, como el aumento de la testosterona, y se manifiesta en los

hombres como lo menciona Gómez (2013) a través de la excitación

espontánea, fantasías eróticas y comportamientos explícitos como

eyaculaciones nocturnas involuntarias, masturbación y la repetición de las

relaciones compartidas en distintos niveles (Gómez, 2013). Y en mujeres se

expresa en fantasías y masturbación, pero a diferencia de los hombres no en el

aumento de relaciones compartidas.

A su vez John Money (como se citó en Gómez, 2013) mencionó que las fantasías

eróticas surgen en momentos prepuberales y anteceden a cualquier comportamiento

autoerótico o compartido, por lo tanto, el deseo erótico puede orientarse desde lo

heteroerótico u homoerótico. Y la preferencia por cualquier orientación forma parte de la

configuración del deseo sexual.

La cualidad del valor erótico de los distintos estímulos es diferente entre los sexos, o

entre las diferentes orientaciones del deseo erótico. Donde el deseo sexual se integra

adecuada o inadecuadamente en la personalidad, formando parte de la identidad de género

93
(conciencia que uno tiene de ser femenino, masculino, andrógino, o indiferenciado). Es así

como, el desarrollo de la identidad de género y la experiencia del deseo, pueden reforzar el

sentido del género, o entrar en conflicto y llegar a confundirlo.

En definitiva, la configuración del deseo se caracteriza por el tipo de estímulos

eróticos en función de la orientación del deseo a los que cada individuo responde, donde el

contexto social en el que se desarrolló el individuo influye para saber qué es lo permitido o

no y así, jugar un papel de facilitador o inhibidor en sus conductas sexuales; pero también

está por el otro lado lo heredado, es decir que existen disposiciones comportamentales

preprogramadas genéticamente para responder eróticamente a determinados estímulos y que

se pueden incluso considerar como universales. Por consiguiente, los elementos de la

configuración del deseo son el impulso, anhelo y el motivo, y como factores que intervienen

en la configuración se encuentran las bases neurofisiológicas innatas de la motivación sexual,

el contexto cultural, la sexualidad infantil, la pubertad y la adolescencia.

2.1.1.3. Placer.

El placer es importante dentro de la satisfacción sexual tanto en hombres, como en

mujeres. Donde las personas que se encuentran en una relación íntima, con apoyo mutuo,

comunicación buena, perciben un grafo mayor de placer sexual (Carmen y Coronado, 2014).

Por ese motivo el placer es sustancial dentro del desarrollo del individuo, así como lo señala

Tiger (como se citó en Villarroel y Pinto, 2005) donde el placer es un derecho evolutivo, que

es necesario al igual que la comida, el agua, la socialización, etc., visto desde un derecho a

algo, por lo tanto, según Masters y Johnson (como se citó en Villarroel y Pinto, 2005)

significa tener el privilegio de exigirlo y de esperar que se le dé a uno.

En otras palabras, se menciona en Villarroel y Pinto (2005) que el placer es un tipo de

experiencia primaria agradable, siendo el resultado de una satisfacción sexual real o

94
adelantada de un deseo o necesidad. Además, Tiger (como se citó en Villarroel y Pinto, 2005)

plantea dos categorías dentro del placer, las cuales son:

 Fisioplacer: son las necesidades básicas que viven individualmente cada ser humano,

por lo tanto, su base es la sobrevivencia (sexo, beber, comer)

 Cultiplacer: existe un aprendizaje de por medio y se cimenta en la cultura. La misma

tiene tres subcategorías, las cuales son:

a) Psicoplacer: experiencia procedente de actividades iniciadas por una sola

persona, por ejemplo, ver cine, leer, jugar en la computadora.

b) Socioplacer: experiencia procedente de actividades compartidas con una o más

personas; por ejemplo, una conversación, bailar, jugar en grupo.

c) Ideoplacer: experiencia procedente de actividades fuertemente privadas que no

se proyecta en el otro, por ejemplo, la búsqueda de la libertad, crear.

Por otro lado, Sánchez (como se citó en Valdés, Sapién y Córdoba, 2004) menciona

que la búsqueda del placer va desde lo social, político e ideológico, el cual tiene dos

componentes: el orgánico o somático (anatómico o fisiológico del cuerpo humano) y el

psíquico o psicológico (producto de la sociedad – cultura donde se desarrolla el individuo en

un tiempo determinado).

Es decir que el placer sexual comprende las distintas sensaciones agradables y

placenteras asociadas a las experiencias sexuales, donde a menudo dichas sensaciones se

producen por el contacto sexual; otras veces surgen por pensamientos y fantasías.

2.1.2. Teorías o modelos teóricos que explican la satisfacción sexual.

2.1.2.1. Dimensiones de la satisfacción sexual.

Según Álvarez-Gayou et al. (2006), son seis los factores que intervienen en la

satisfacción sexual, los mismos que se describen a continuación:

95
a) Afectivo: “Hace referencia a estados emocionales diversos” (Álvarez-Gayou et al.,

2006, p. 14). Como besos, caricias mutuas, sentimientos positivos, confianza y la

importancia que le da uno al otro, durante el acto amoroso.

b) Bienestar: “Se refiere al logro de una sensación agradable y placentera” (Álvarez-

Gayou et al., 2006, p. 14). Ligada al orgasmo, al tiempo de duración del acto sexual,

al grado de satisfacción en base a la frecuencia de los encuentros.

c) Erotismo: “Se refiere a aspectos netamente inherentes a la respuesta sexual”

(Álvarez-Gayou et al., 2006, p. 14). Involucra respuestas apasionadas, el erotismo

logrado, el grado de seducción, el placer obtenido y la entrega de la pareja.

d) Respeto y responsabilidad: “Se refiere a la consideración recibida y dada por la

pareja” (Álvarez-Gayou et al. 2006, p. 14). Se refiere al respeto hacia uno mismo y

hacia el otro dentro de la reparación, con un grado de responsabilidad mutua.

e) Estímulos sensoriales: “Se refiere a la participación de los órganos de los sentidos”

(Álvarez-Gayou et al., 2006, p. 14). Calidad de estímulos que sienten durante el acto

sexual, los cuales se generan por el olfato, sabores utilizados, masturbación y por el

grado de intimidad alcanzado, producto de observar la desnudez del otro.

f) Comunicación: “Se refiere a la expresión de los propios sentimientos y a la

percepción de los sentimientos del otro u otra” (Álvarez-Gayou et al. 2006, p. 14). El

dialogo es importante para poder comunicar a la otra persona sobre sus gustos durante

el acto sexual, además ayuda en la planificación para el encuentro.

2.1.2.2. Elementos que contribuyen a la satisfacción sexual (positivos y negativos).

Kaplan (como se citó en Ortiz, 2018) plantea que la calidad de la relación sexual y por

ende la satisfacción sexual, depende de: conflictos individuales, patología marital y eventos

cotidianos exteriores, además menciona tres dimensiones:

96
 Factores intrapsíquicos individuales: Actitudes hacia: el sexo, el propio cuerpo, el

conocimiento sexual, la experiencia sexual, la ansiedad y el placer.

 Sistema de pareja: Comunicación sexual y conexión afectiva.

 Condiciones generales ecológicas: Estrés y actividades diarias.

Por otro lado, Hawton (como se citó en Ortiz, 2018) menciona tres factores que

intervienen en la satisfacción sexual, mismos que se describen a continuación:

 De predisposición: Experiencias prematuras individuales y en compañía, que

provoca vulnerabilidad o motivación para que la conducta suceda, ejemplo, valores y

creencias aprendidas por los padres.

 Precipitantes: Sucesos y experiencias asociadas el inicio de la conducta sexual,

ejemplo, atracción física que existe en la pareja.

 De mantenimiento: Lo que explica el por qué la conducta se conserva con el tiempo,

ejemplo, satisfacción con la relación de pareja.

Asimismo, Ortiz (2018) menciona que las características de las relaciones sexuales

son parte significativa, como elementos dentro de la satisfacción sexual, las mismas que se

detallan a continuación:

 Frecuencia de los encuentros sexuales: La frecuencia de encuentros y satisfacción

sexual es mutua, por ende, las parejas que tienen actividad sexual más frecuente

tienen mayor satisfacción.

 Variabilidad de la conducta sexual: El sexo tiene una función reproductiva y de

placer, donde las parejas que tienen cambios en sus conductas sexuales implementan

variedad y una relación más saludable.

 Frecuencia orgásmica: Índice de satisfacción sexual más cuantificable durante el

sexo, ya que se presume que todos pueden experimentar un orgasmo.

97
 Juego previo: Prepara el cuerpo del individuo para el coito y poder llegar al orgasmo,

donde la excitación se presenta por estímulos físicos y mentales.

2.1.3. Perspectiva actual de la satisfacción sexual.

Barriga (2013) en su artículo nos habla desde una perspectiva histórica y psicosocial,

sobre la sexualidad como un instinto básico y un producto cultural. Donde a finales del siglo

XIX se origina la sexología, dando paso al derecho a la salud sexual desde una perspectiva

psicosocial de la sexualidad; es así como la sexualidad dentro de las relaciones de pareja y

entre los géneros es importante e incluida. En el mismo siglo el sexo era un tabú, pero esto no

impedía que se practique el sexo fuera del hogar, a su vez en el siglo XX debido a las

enfermedades de transmisión sexual, como la sífilis, se decide introducir la educación sexual

en el contexto social, y poco a poco se logra cambios, como la simbología del himen, el

aborto en determinados momentos y la violación como algo grave, entre otros. Considerando

a la sexualidad en los últimos tiempos como algo normal, aceptado y necesario para generar

una satisfacción sexual adecuada, aunque dicha satisfacción dependerá del contexto social y

cultural donde se desarrolle el individuo y su historia psicosexual.

Urbano-Contreras, Iglesias-García y Martínez-González (2019) mencionan que la

satisfacción sexual puede ser independiente del tipo de pareja, del tiempo que lleven juntos o

cualquier otra característica que defina una relación, ya que la sexualidad suele formar un

componente determinante de las relaciones de pareja y un aspecto que condiciona; donde sus

diferencias de género están claramente marcadas por motivos históricos y sociales, e incluso

en la actualidad, el deseo sexual explícito o la iniciativa para planificar un encuentro sexual

por parte de la mujer son menos aceptados, incluso por sus parejas. Por otro lado, Carlson et

al. (como se citó en Urbano-Contreras et al. 2010) descubrieron que existe en las mujeres un

aplazamiento de la satisfacción sexual, debido a la educación de los hijos, sobre todo en los

hogares en los que no interviene el padre en el cuidado de los hijos.

98
Es así como se habla de la satisfacción sexual dentro de la sexualidad, como un

derecho sexual, es decir como la libertad sexual sin vulnerar los derechos del otro, equidad

sexual, privacidad sexual, placer sexual sin causar daño a otros, etc. Donde la sexualidad

tiene un enfoque positivo hacia el pacer y satisfacción mutua, con un enfoque preventivo.

2.1.4. Investigaciones internacionales sobre la satisfacción sexual.

Valdés et al. (2004), en su investigación sobre significados de satisfacción sexual en

hombres y mujeres, tuvo como propósito determinar y comprar las significaciones que la

satisfacción sexual tiene para mujeres y hombres; por lo cual se entrevistó a 4 hombres y 3

mujeres de 22 a 35 años de edad, con experiencia en relaciones heterosexuales, donde los

hombres reportaron siempre alcanzar el orgasmo con eyaculación, significando así su

satisfacción sexual, mientras que para las mujeres el orgasmo fue importante en sus

relaciones sexuales, pero las caricias, el amor, la ternura, la estabilidad, un autoestima

positiva, la libertad en la relación sexual, etc., también son importantes para una satisfacción.

Por lo cual se concluyó que hombres y mujeres dieron diferentes significados con distintos

aspectos; siendo el motivo de este, gracias al aprendizaje de ser hombre o mujer dentro de

contextos socioculturales de inequidad intergenérica.

Álvarez-Gayou et al. (2006) realizaron el diseño de una escala autoaplicable para la

evaluación de la satisfacción sexual en hombres y mujeres mexicanos, la cual planteó como

objetivo el diseño de una escala válida y confiable para la evaluación de la satisfacción sexual

en hombres y mujeres mexicanos a través de una escala de satisfacción sexual, con 29 ítems,

la cual se la aplicó a 760 participantes (318 hombres y 441 mujeres con una media de 28

años, mínima de 18 años y máxima de 65 años), donde se encontró que los hombres poseen

una satisfacción sexual entre moderada y alta, las mujeres de igual forma poseen una

satisfacción sexual entre moderada y alta. Observándose que no existen diferencias

significativas entre ambos géneros.

99
Viloria (como se citó en Paz y Vargas, 2015) menciona en su trabajo de investigación

sobre el estrés y satisfacción sexual en estudiantes universitarios sexualmente activos; donde

su objetivo fue, determinar la relación entre ambas variables en una muestra de 192

estudiantes de pregrado. Se utilizo para la recolección de los datos el inventario de eventos

estresantes y la escala de satisfacción sexual. Los resultados arrojaron que no existe una

correlación significativa global entre las variables estrés y satisfacción sexual, sin embargo,

en los estudiantes de la muestra el nivel de satisfacción sexual que experimentan se relaciona

únicamente con el estrés que viven en su relación marital y en su trabajo, mientras mayor sea

el estrés en estas dimensiones menor en su satisfacción sexual.

De manera que se pudo obtener de las investigaciones internacionales que la

satisfacción sexual tiene diferente significado para hombre o mujer, donde para el hombre la

satisfacción sexual es alcanzada luego de alcanzar el orgasmo, y para la mujer es importante

la caricia, la comunicación, la libertad en la relación sexual, etc., para poder alcanzar la

satisfacción sexual; lo cual se pude explicar a causa del aprendizaje de ser hombre o mujer

dentro del contexto sociocultural en que el individuo se desarrolla. A su vez se encontró que,

tanto en hombres como mujeres, poseen una satisfacción sexual entre moderad y alta; donde

también el estrés en determinadas áreas influye en dicha satisfacción.

2.1.4. Investigaciones nacionales sobre la satisfacción sexual.

Real (2017) en su trabajo de investigación sobre la satisfacción sexual y calidad de

vida en el adulto, que tuvo como objetivo establecer la relación entre la satisfacción sexual y

la calidad de vida en los adultos de la escuela de conducción del Sindicato de choferes

profesionales del cantón Cevallos; utilizó la escala de Satisfacción sexual y la escala de

calidad de vida, que fueron aplicados a 60 personas de edad adulta. Los resultados obtenidos

demostraron la independencia de las variables, sin embargo, se encontró correlaciones

estadísticamente significativas entre algunas dimensiones de calidad de vida y satisfacción

100
sexual como: relaciones interpersonales con intercambio sexual; autodeterminación con

intercambio sexual; y autodeterminación con apego emocional.

Ortiz (2018), en su trabajo de investigación titulado satisfacción sexual y dependencia

emocional, se encontró que el mismo tuvo como objetivo establecer la relación existente

entre la satisfacción sexual y la dependencia emocional en los estudiantes de la Carrera de

Psicología Clínica, Facultad Ciencias de la Salud de la Universidad Técnica de Ambato. Se

recolectaron los datos a través de la Nueva Escala de Satisfacción Sexual y el Cuestionario de

Dependencia Emocional, en una muestra de 189 estudiantes universitarios de una población

de 373 estudiantes, con edades comprendidas entre 18 a 40 años. Se comprobó que no existe

relación entre la satisfacción sexual y la dependencia emocional. A su vez se encontró que

existe una muy alta satisfacción sexual. presentando una normalidad dentro de las

dimensiones de sensaciones y conciencia sexual, intensidad, intercambio, actividad sexual y

apego emocional.

Por lo cual se observa que en las investigaciones nacionales la satisfacción sexual y la

calidad de vida no tienen una relación significativa, pero si entre sus dimensiones, donde el

apego emocional si se relaciona con la autodeterminación y las relaciones interpersonales con

el intercambio sexual. A su vez se observa que no existe relación entre satisfacción sexual y

la dependencia emocional.

2.2. Actitudes hacia la sexualidad.

2.2.1. Definiciones o conceptos de las actitudes hacia la sexualidad.

La actitud predispone un comportamiento, por lo cual el ser humano a lo largo de su

progreso en la socialización desarrolla predisposiciones hacia diversos sucesos, los cuales

pueden ser percibidos como favorables o desfavorables, como el racismo, la homofobia, el

liberalismo, el socialismo, etc. Donde las actitudes son un tanto más evidentes y firmes

cuanta más implicación personal exista y cuanta mayor polémica esté sometida la cuestión

101
objeto de la actitud (Gómez, 2013). Así todo lo relacionado a la sexualidad en la actualidad

sigue siendo un tema de polémica y tabú, que supone una fuerte implicación personal.

A su vez Significados (2017) menciona que la actitud es el comportamiento frecuente

que se genera en diferentes momentos y que determina la vida anímica de cada ser humano;

donde las actitudes están registradas por las reacciones repetidas del individuo. Por lo cual la

actitud es un procedimiento que conduce a un comportamiento en particular, en otras

palabras, es la realización de una intención o propósito.

Por lo tanto, la sexualidad es la consecuencia de todo el sistema de actitudes del ser

humano. Por otro lado, Narváez y Valverde (2018) mencionan que las actitudes son un

conjunto de sentimientos, creencias y tendencias a actuar de una valoración favorable o

desfavorable hacia un grupo, objeto, realidad etc. Dando paso a que Narváez y Valverde

(como se citó en López, 2005) definan las actitudes hacia la sexualidad como la tendencia a

sentir, opinar y realizar acciones ante objetos sexuales. Teniendo en cuenta que al igual que la

satisfacción sexual, las actitudes sexuales están afectadas por un componente personal, por un

contexto cultural, ideología predominante y creencias, donde la actitud hacia la sexualidad es

una disposición hacia la misma y esta puede ser positiva o negativa.

2.2.2. Teorías o modelos teóricos que explican las actitudes hacia la sexualidad.

2.2.2.1. Estructura de la actitud

Gómez (2013) propone que la actitud está compuesta por el factor cognitivo, afectivo-

emocional y comportamental, donde mientras más cohesión exista en los factores, más sólido

será la actitud y por ende más difícil es su cambio; los mismos que se definen a continuación:

 Cognitivo: Toda actitud se basa en ideas, en cogniciones; donde su origen se forma

de la asimilación de contenidos, como consecuencia del procesamiento de la

información, que se genera en un contexto social determinado y en relación con un

proceso de socialización concreto.

102
 Afectivo-emocional: Las emociones son reacciones subjetivas a estímulos relevantes,

que implican por lo general una reacción psicobiológica y una atribución cognitiva,

donde desarrollan una función adaptativa para la supervivencia, desde una experiencia

subjetiva personal. Todo el cúmulo de sensaciones, sentimientos, estados emocionales

que reúne el objeto de la actitud, es lo que constituye su base afectivo-emocional.

 Comportamental: El resultado de los dos factores antes mencionados marcan un

antecedente a comportarse de manera coherente.

Es decir que toda actitud es una disposición a actuar de una forma determinada, ya sea

negativa o positivamente; teniendo en cuenta que la actitud mientas más polémica genere e

implicación personal tenga, más marcada es. Por lo cual toda actitud se sustenta de ideas

correctas o incorrectas, sentimientos positivos o negativos y un comportamiento.

2.2.2.2. Sentimientos de culpa sexual.

En la actualidad para muchas personas hablar o acceder a una experiencia erótica es

significado de incumplimiento de la norma, dando como resultado una emoción de culpa,

produciendo una conducta inhibitoria, que interviene al fin y al cabo en la experiencia sexual.

Así, la culpa es un mecanismo interno de control de la conducta, que genera efectos

de restricción sobre las conductas relacionadas con el incumplimiento de la norma o de las

conductas que son consideradas como inmorales, incluso la culpa puede ser generada desde el

deseo de incumplir la norma antes de hacerlo. A su vez Etxebarria (como se citó en Gómez,

2013) menciona que el ser humano más proclive a experimentar sentimientos de culpa tiende

a incidir menos en infracciones a sus propias normas morales.

Pero la culpa no solo es negativa, sino, también positiva, ya que colabora en evitar

que se transgreda las normas, en situaciones lógicas, sin embargo, puede ser perjudicial

cuando las situaciones no son lógicas. Para entender más sobre la culpa sexual se define a la

misma como una expectativa extendida de castigo, influida por uno mismo, respecto a la

103
trasgresión o violación anticipada de los esquemas culturales de la propia conducta sexual

(Mosher y Cross, como se citó en Gómez, 2013).

A su vez la culpa hacia la sexualidad se genera en situaciones que incluyen la

expresión de los efectos de la manifestación del erotismo, como: la excitación, el deseo, el

placer, de los procesos cognitivos, que contienen la toma de conciencia de los mismos,

anticipación de recuerdos de situaciones eróticas, ideas morales y de los comportamientos

precisos en un contexto sexual (Mosher, como se citó en Gómez, 2013).

En efecto los comportamientos sexuales están regulados en cada cultura, donde lo

moral es el código que regula de manera convencional, los comportamientos de un grupo

humano determinado, siendo que el sentimiento de culpa se genera tras trasgredir una norma

o el deseo de hacerlo.

2.2.2.3. La dimensión erotofobia-erotofilia.

Se explica a través del aprendizaje, donde se muestra el cómo un individuo puede

tener una disposición negativa o positiva en menor o mayor grado en el erotismo, influyendo

así, en el comportamiento (Fisher, Byrne, White y Kelley, como se citó en Gómez, 2013).

Donde se define a la dimensión erotofobia-erotofilia como una destreza a responder a

temas sexuales desde una dimensión positivo-negativa; siendo una consistencia interna que

puede ser considerada como parte de la personalidad. Los autores antes mencionados

obtienen en sus investigaciones que las personas autoritarias tienden a ser erotofóbicas,

existiendo una alta correlación entre la erotofobia y altos sentimientos de culpa sexual.

Asimismo, Beach y Ford (como se citó en Gómez, 2013) mencionan que el ser

humano se encuentra en continuo bipolar, en cuyos extremos se encuentra la erotofobia y la

erotofilia, siendo este proceso conocido como el modelo de refuerzo de afecto de respuestas

evaluativas, formulado desde el principio de aprendizaje, que destaca la importancia de las

reacciones emocionales. La sucesión del origen de la erotofobia-erotofilia es la siguiente:

104
1. En primer lugar, las respuestas afectivas se relacionan con una variedad de asuntos

sexuales, las cuales son transformadas en conjuntos evaluativos actitudinales

relativamente estables.

2. En segundo lugar, las respuestas informativas, creencias y expectativas que son

significativas para que la sexualidad se aprenda.

3. En tercer lugar, las personas adquieren o generan respuestas fantaseadas, basadas en

la imaginación, en las que se involucran temas sexuales y eróticos.

Erotofobia.

Es la actitud negativa hacia la sexualidad, donde se cree que todo lo relacionado con

el sexo es malo y que provoca dolor. Por lo cual la negatividad y los altos sentimientos de

culpa sexual se considerada erotofobia. A su vez es importante mencionar dentro de esta

dimensión al sexismo, heterosexismo y homofobia, los cuales se definen a continuación:

a) El sexismo y heterosexismo

El sexismo es una predisposición a la discriminación del ser humano por su sexo

(macho-hembra), y más por su género (masculino- femenino). Por lo cual la discriminación

se genera entorno a la jerarquización cultural, sobre la relación entre los sexos, donde lo

femenino se somete a lo masculino (Gómez, 2013). Así, el machismo exalta el estereotipo

masculino (dominancia, fortaleza) según el rol tradicional, en menosprecio del rol femenino

(sumisión, debilidad) que suele ser sometido y relegado en el orden social; generando

desigualdad en función del sexo.

Por otro lado, el heterosexismo, se define como el sostenimiento de una relación

jerarquizada, en donde la heterosexualidad se ubica en un nivel alto. Mientras que la

homosexualidad aparece, como accidental, incompleta, perversa, criminal, patológica,

inmoral y destructiva de la civilización (Borrillo, como se citó en Gómez, 2013).

105
Estas actitudes están formadas por un componente cognitivo, que son las creencias

acerca de las características de las mujeres y de los hombres, y un componente afectivo-

emocional, que son las reacciones emocionales que nacen de las situaciones relacionales

concretas y de una tendencia comportamental. Por ende, no se puede hablar de que existe

actitudes predominantes en la actualidad, pero si tiene peso el pasado y la sociedad, siendo

las de mayor auge el sexismo y la homofobia.

b) Homofobia

La homofobia se refiere a la actitud psicológica y social de rechazo genérico de la

homosexualidad. Por lo cual, Smith, definió a la homofobia como el temor de estar con una

persona homosexual en un lugar cerrado, pero también puede existir la homofobia dentro de

la comunidad homosexual, expresando odio hacia sí mismos (Borrillo, 2001, como se citó en

Gómez, 2013). Dicho concepto hace referencia a una dimensión individual y que se ajusta al

concepto clínico de fobia, expresando ansiedad, aprensión psicológica, etc., y una dimensión

social, desde el rechazo social de la homosexualidad.

Así la homofobia como menciona Gómez (2013) estaría sustentada en ideas

psicológicas, sociales, médicas, morales, jurídicas, antropológicas, dentro del componente

cognitivo; en reacciones emocionales como el miedo, enojo, rabia, ira desde el componente

afectivo-emocional, y en una tendencia comportamental que se expresaría en rechazo

manifiesto, segregación, agresión verbal o física, marginación, discriminación, en el

componente comportamental.

Pero según Borrillo (como se citó en Gómez, 2013), la concepción de homofobia elige

dos aspectos distintos de la misma realidad, como:

a) Dimensión personal, desde lo afectivo, que se manifiesta en rechazo a los

homosexuales.

106
b) Dimensión cultural, desde lo cognitivo, en la que no es el individuo como

homosexual, el que es objeto del rechazo, sino la homosexualidad como fenómeno

psicológico y social.

La homofobia se expresa a través de bromas crueles, insultos, lenguaje coloquial

ofensivo, insultos, representaciones burlonas, donde plasma a los gays y lesbianas como

criaturas grotescas (Borrillo, 2001, como se citó en Gómez, 2013, p.52).

Lo antes mencionado muestra que la homofobia no es solo una parte psicológica del

individuo, sino que es un tema social, donde debido al contexto sociocultural donde se

desarrolla el individuo dependerá la forma de ver, de pensar y de expresarse con respecto al

rechazo de las personas homosexuales, ya que a través de esas creencias se formará el

individuo y optará por realizar actos de rechazo hacia las personas homosexuales.

Erotofilia.

De manera que las personas que tienen una actitud positiva se caracterizan por

entender que la dimensión sexual del ser humano es una fuente de riqueza, que debe ser

vivida con plenitud y responsabilidad, siendo personas más respetuosas con emociones

positivas y abiertas; donde la positividad y un bajo sentimiento de culpa sexual es

considerado erotofilia. A su vez, es importante mencionar al hedonismo dentro de la

erotofilia, la cual se define a continuación:

a) Hedonismo

Como menciona Tafur (2016) que Epicuro fue el primero en pensar en el placer como

principio para una teoría moral, llamada hedonismo. Por lo cual recalca que el hedonismo se

considera una doctrina filosófica, donde su principio es la búsqueda del pacer y el evadir el

dolor (Tafur, 2016). Donde la sociedad respeta la integridad del individuo, y por ende sus

placeres y acciones correctas, no perturban la felicidad del otro.

107
Al igual que menciona Espinoza (2013) que no solo se debe saciar los apetitos

sexuales individuales, sino que también estimular y hacerlos grandes para un mayor placer.

Por lo cual el hedonismo intenta que el placer y el bien, sean uno solo, y que se encuentre

dentro del desarrollo personal de cada individuo.

2.2.2.4. Efectos derivados de la actitud hacia la sexualidad.

En el ámbito de lo personal, se ha encontrado que las personas que tienden a altos

sentimientos de culpa sexual o a la erotofobia tienen menor experiencia sexual, menor interés

por lo erótico, menor volumen de fantasías sexuales. Así se encontró que los individuos que

marcaron un alto sentimiento de culpa sexual mostraron un mayor problema para percibir y

usar el significado erótico de palabras con doble sentido (Galbraith, como se citó en Gómez,

2013). Por ende, se resalta que las personas erotofóbicas no admiten en ellas mismas la

experiencia sexual, por lo cual no pueden integrarla ni anticiparla.

Por el otro lado las personas que tienen una actitud positiva hacia la sexualidad se

espera que integren mejor la motivación sexual en su personalidad, generando una mayor

anticipación a la actividad sexual. Promoviendo así, el interés por la utilización y la

formación de elementos para la protección, uso del preservativo y otros métodos

anticonceptivos, y comportamientos sexuales sin riesgo (Gómez, 2013).

De modo que la potenciación de actitudes positivas, erotofilia o sentimientos bajos de

culpa sexual, se convierten en un factor potencial de protección hacia el riesgo de embarazos

no deseados y de enfermedades de transmisión sexual, debido a la responsabilidad que

infringe dicha actitud.

2.2.3. Perspectiva actual de las actitudes hacia la sexualidad

García (como se citó en Bahamón, Vianchá y Tobos ,2014) manifiesta que los jóvenes

en la actualidad se definen a sí mismos como andróginos, y que por ende se apartan de las

posiciones tradicionales sobre el género y sus factores biológicos. Relacionando lo antes

108
mencionado con la erotofilia (actitud positiva hacia la sexualidad), funcionando como factor

protector para informarse adecuadamente y practicar comportamientos saludables; alejándose

a la tendencia tradicional biologicista sobre el entendimiento del ser humano, que propone la

naturalización de los roles de hombres y mujeres en función de su sexo, lo que afecta al ser

humano y facilita la marginación social.

También actualmente la representación del “hombre” se considera a través de la

implicación de la presencia de actitudes y comportamientos socialmente normados, los cuales

se afirman a través del uso del cuerpo como instrumento para indicar la virilidad, la

incapacidad de contención ante el deseo y la desvinculación emocional. Por ende, ser

hombre significa tener fuerza física y simbólica dentro del núcleo social, donde el usar

métodos anticonceptivos para evitar embarazos no deseados es normal, pero no el usar

métodos para prevenir enfermedades de transmisión (Bahamón et al. 2014).

A su vez Ayuso y García (2018) mencionan que las actitudes hacia la sexualidad

dependen mucho de la brecha generacional; por lo cual, las personas mayores fueron

socializadas en una cultura sexual en donde predomina el miedo y su base era la moral

católica, asociando así los conceptos de amor, matrimonio, sexo y reproducción. Por otro

lado, los jóvenes han crecido en una cultura hedonista, permisiva y liberal donde cada

concepto como amor, matrimonio, sexo y reproducción se pueden vinculas entre sí o no.

Se concluye que en la actualidad el hombre tiene más libertad y menos sentimientos

de culpa o vergüenza de su sexualidad, debido a que la sociedad cataloga al hombre como la

figura de poder y liderazgo, mientras que para la mujer si bien hay más libertad que antes en

su sexualidad, no significa que exista una aceptación total o sea visto como normal dentro de

lo moral en la sociedad, a lo contrario aun es limitado.

2.2.4. Investigaciones internacionales de las actitudes hacia la sexualidad.

109
Moral (2010) manifiesta en su artículo sobre la religión, significados y actitudes hacia

la sexualidad, con un enfoque psicosocial, que el objetivo del estudio fue determinar la

relación de la confesión religiosa, la convicción en las creencias religiosas y la frecuencia de

la asistencia a los servicios religiosos con los significados asociados a la palabra sexualidad y

las actitudes frente a la sexualidad y la homosexualidad. Donde se aplicó una encuesta a una

muestra de 395 estudiantes universitarios, de una facultad de psicología de una universidad

pública del noreste de México, de 18 años hasta 28 años. Obteniendo como resultado que, a

mayor religiosidad, se valora más la virginidad, se condena la pornografía, se experimenta

más vergüenza sexual y se acepta menos la homosexualidad y la masturbación. Mientras que

por otro lado las personas sin religión eran las más liberales, a lo contrario de los cristianos,

que eran los más conservadores y los más practicantes. Las asociaciones con los contenidos

verbales eran débiles, pero moderadas con las actitudes hacia la sexualidad.

Castañeda et al. (2009) mencionan en su artículo sobre el conocimientos, actitudes y

prácticas en salud sexual y reproductiva; donde se utilizó en el estudio una muestra con 2812

pobladores entre los 10 y 69 años, ubicados en las zonas rurales y urbanas. Se obtuvo como

resultado que los encuestados tienen debilidad en los conocimientos, actitudes y prácticas en

salud sexual, lo cual provoca índices de riesgo en su sexualidad e incremento en las

enfermedades de transmisión sexual, embarazos no deseados y la no planificación de la

formación de la familia nuclear.

Orozco y Rodríguez (2006) mencionan en su artículo sobre los prejuicios y actitudes

hacia la sexualidad en la vejez, donde su estudio fue exploratorio-transversal y comparativo

en las actitudes de los jóvenes y ancianos hacia la sexualidad en la vejez; con una población

de 120 personas, donde el primer grupo estuvo conformado por edades entre los 60 a 98 años

y el segundo grupo entre 16 y 36 años. Se obtuvo como resultados que los jóvenes tienen

110
actitudes menos prejuiciosas hacia el ejercicio de la sexualidad en esta etapa de la vida,

mientras que los ancianos se mostraron totalmente prejuiciosos a vivir su propia sexualidad.

Se concluye que la religión influye en los significados y actitudes hacia la sexualidad,

donde la actitud más liberal se encuentra en las personas sin religión, y la actitud más

conservadora, entre personas cristianas y personas que siguen con más frecuencia las

costumbres religiosas. A su vez el hecho de no conocer sobre la sexualidad, ocasiona

conductas de riesgo, como enfermedades de transmisión sexual, embarazos no deseados, la

no planificación de la familia nuclear, ocasionando actitudes positivas o negativas en las

actitudes sexuales; como lo es los prejuicios erróneos que se tiene en la vejez, donde la

imagen corporal y el derecho a ejercer la sexualidad se tiene como mito que solo se ejerce en

la juventud y no en la vejez, generando que la salud mental de los ancianos se vea afectada

por la inseguridad e insatisfacción consigo mismo como resultado del rechazo de su propio

cuerpo.

2.2.4. Investigaciones nacionales de las actitudes hacia la sexualidad.

Maldonado (2019) en su trabajo de investigación sobre las actitudes hacia la

sexualidad en estudiantes de octavo semestre de una Universidad del Ecuador, se plasmó que

el objetivo de la investigación fue evaluar las actitudes hacia la sexualidad en los estudiantes

de octavo semestre de la Carrera de Psicología Educativa en base a los factores

sociodemográficos. Dicho estudio fue descriptivo, donde se utilizó la escala EROS que

evalúa las actitudes hacia la sexualidad, desde la erotofobia y erotofilia. Donde participaron

56 estudiantes, con edad promedio de 23 años, los mismos que deben recibir como materia en

su malla curricular Sexualidad Integral II. Se obtuvo como resultado que los estudiantes

muestran actitudes erotofilicas y pocos estudiantes muestran actitudes erotofóbicas.

Narváez y Valverde (2018) indican en su trabajo de investigación sobre las actitudes

erotofóbicas y erotofílicas en adultos mayores en Cuenca, que el objetivo del estudio fue

111
determinar las actitudes hacia la sexualidad, la relación con los factores sociodemográficos,

los estímulos que predominan y la comparación entre sexos. La investigación se realizó

mediante la escala EROS que evalúa las actitudes hacia la sexualidad, desde la erotofobia y la

erotofilia. Con una muestra de 161 adultos mayores, con edades mayores a los 60 años. Se

obtuvo como resultado de la investigación que los adultos mayores tienen una actitud

moderada hacia los aspectos y temas sobre la sexualidad, predominando actitudes

erotofóbicas hacia la homosexualidad, sexo no convencional, masturbación y en el bañarse

desnudo o desnuda con otra persona; mientras que se muestran también actitudes erotofílicas

al placer coital y a los estímulos visuales como, libros y películas de contenido sexual.

También se evidenció que, si existe relación significativa con los factores

sociodemográficos, como el estado civil, siendo los divorciados quienes puntúan más alto en

erotofilia a diferencia de los soltero quienes se manifiestan erotófóbicos.

Se concluye que las personas que tienen actitudes erotofilicas son las personas que

poseen la capacidad para integrar la dimensión sexual positivamente en su estructura de la

identidad, por lo cual se puede expresar abiertamente en los temas referentes a la sexualidad,

además de cultivar adecuadamente su sexualidad. Dichas conductas se encuentran presentes

en los adultos mayores, pero también la erotofóbia en temas controversiales para su

generación, como la homosexualidad, el sexo no convencional, entre otras.

2.3. Sustancias psicoactivas.

2.3.1. Definiciones o conceptos de las sustancias psicoactivas.

Se conoce como sustancia psicoactiva o droga a toda sustancia que, al introducirse en

el organismo, independientemente de su vía de administración, genera una alteración en el

funcionamiento del Sistema Nervioso Central, y que puede crear una dependencia psicológica

o física, e incluso ambas (Observatorio de drogas de Colombia [ODC], 2019). Asimismo, las

112
sustancias psicoactivas modifican la conciencia, el estado de ánimo o los procesos de

pensamiento del individuo que la ingiere.

Rodríguez (2013) menciona que la sustancia psicoactiva es una sustancia tóxica que

tiene un origen sintético o natural, y que al ingresar al organismo actúa en el Sistema

Nervioso Central, ocasionando modificaciones en el comportamiento y en las emociones; por

ende, se altera la neuroquímica del cerebro, generando una posible dependencia a la

sustancia. Dando a entender que las sustancias psicoactivas al ser ingeridas en el organismo

causan alteración en lo biológico, cognitivo y afectivo.

A su vez se debe mencionar el concepto de droga de abuso, la cual Caudevilla (2008)

refiere que es la sustancia con efectos psicoactivos que no tiene un uso médico, que genera

cambios en el estado de ánimo, percepción, comportamiento y en la conciencia, y que pueden

ser autoadministradas.

Por lo cual las sustancias psicoactivas son conocidas también como drogas que, al ser

ingeridas por el individuo, causa alteraciones en el organismo, tanto a nivel biofisiológico,

como emocional-afectivo y cognitivo-conductual. Creando en el transcurso del tiempo una

posible dependencia a la sustancia en el individuo.

2.3.2. Historia y perspectiva actual del consumo de sustancias psicoactivas.

Correa (2007) menciona que desde la antigüedad el consumir sustancias psicoactivas

era considerado normal; donde el alcohol y los opiáceos fueron las primeras sustancias

utilizadas para alterar el sistema nervioso central, por el año 5.000 a.C. Mientras que el

cannabis se cultivaba e China desde hace 4.000 años. En América en el imperio incaico

cosechaban anualmente hojas de coca para uso analgésico y energizante. En la sociedad

Azteca, se ingería hongos y peyote por temas religiosos.

Desde un siempre el ser humano ingiere sustancias psicoactivas con fines mágico

religioso, para huir o enfrentar los problemas, evitar la realidad, desde un ámbito médico o

113
por búsqueda del placer. Por lo cual las más difundida en los tiempos a sido el café, tabaco,

alcohol, cannabis, cocaína y opiáceos. Suponiendo también que la fermentación de algún

fruto o miel es el origen del primer psicoactivo.

Después de la segunda Guerra mundial el alcohol deja de ser usado como bebida en

las comidas y pasa a ser utilizada en grandes cantidades en cualquier momento, y es asociada

con el ocio. Al igual que se descubre que la planta de amapola fue utilizada desde los 3.000

a.C. por sus funciones de adormecer el dolor, producir sueño y jubilo, reducir las aflicciones;

pero en el Oriente Medio era utilizado como medicina, por lo cual se extendió hacia la India y

en el siglo IX a China.

El opio adquirió una importancia terapéutica en Europa occidental en el siglo XVI;

pero en China en el siglo XVII se hizo popular el opio fumado, lo que género que la

producción interna ya no sea suficiente, generando una adicción en la población. Creando dos

guerras entre Inglaterra y China en la batalla de frenar el comercio de opio, y al ser derrotada

China se quito la administración en Hong Kong y la legalización del comercio de opio indio.

Así hasta finales del siglo XIX el consumo de opiáceos no era catalogado como problema

sanitario en Occidente, pero por su rápido incremento de casos de adicción se transformo a

una alarma social por dicho consumo.

En 1874 se crea el primer opiáceo semisintético llamado heroína, alcanzando un gran

comercio en todos los continentes, por su alto efecto antiálgico y estimulante. Llegando a ser

popular como una droga recreativa en Estados Unidos y en Inglaterra, para luego ser popular

en todo el mundo, causando un sinfín de muertes por heroína inyectable.

Los derivados de cannabicos se originó en Asia Central, la cual pudo ser cultivada

desde hace 10.000 años, siendo utilizada como fuente de fibras textiles, para hacer alpargatas,

sacos, cuerdas, velas de barcos y ropa. Pero sus propiedades alucinógenas se descubrieron en

el Oriente. Durante todo el siglo XIX se la empleo con fines recreativos y médicos, pero su

114
utilidad terapéutica fue reducida por ser inestable y por la creación de nuevos fármacos

mejores.

A su vez el aumento de los problemas en la sociedad se relaciona con las sustancias

psicoactivas, donde Luna-Fabritius (2015) menciona que la adicción a los narcóticos es

observada como un símbolo de la desaparición de la persona independiente y autogobernante.

Por lo cual para la burocracia los consumidores de sustancias psicoactivas eran actores

sociales importantes a finales del siglo XIX, debido a que eran considerados como carentes

de independencia, donde los consumidores llegaban a sacrificar lo que tenían y lo que les

quedaba, en nombre de las drogas.

Poco a poco se catalogó al individuo consumidor de la sustancia psicoactiva como un

esclavo de esta, que pierde no solo sus vienen materiales, sino su integridad, libertad, por

ende, su autonomía, y en el proceso también su autoestima, autovalia, autoconepto, al igual

que familiares, oportunidades laborales y de estudio, entre otras.

En definitiva, con el transcurso del tiempo, el consumo de sustancias psicoactivas fue

implementándose en casi todas las culturas y civilizaciones conocidas, donde gracias a los

registros arqueológicos, al igual que las creencias artísticas, las vasijas, pinturas, escritos, etc.

se pudo obtener registros de posibles inicios y creaciones de las sustancias psicoactivas;

utilizándolas en sus inicios como sustancias inofensivas para la salud del ser humano, incluso

como elemento para crear ropa o materiales útiles para el desarrollo del individuo, pero que

poco a poco dicho uso se transformó en perjudicial, cuando se descubrió sus otras

propiedades y usos, donde alteraba el Sistema Nervioso Central, creando en muchos casos

adicciones, y como resultado guerras y muerte.

2.3.3. Clasificación de las sustancias psicoactivas.

Según la ODC (2019) las sustancias psicoactivas se clasifican según:

Sus efectos en el sistema nervioso central.

115
 Depresoras: Reduce el ritmo de la actividad psíquica, funciones corporales y del

Sistema Nervioso Central. Conocidas también como psicolépticas.

 Estimulantes: Estimulan la actividad psíquica y del Sistema Nervioso Central, a su

vez incrementa el ritmo de otros órganos y sistemas orgánicos.

 Alucinógenas: Altera y distorsiona la percepción sensorial de la persona, interfiere en

el estado de conciencia y en las facultades cognitivas, pueden ocasionar

alucinaciones.

Según su origen.

 Origen Natural: Se localiza en forma natural en el ambiente y es utilizada sin que

exista una manipulación química. Siendo la marihuana o los hongos.

 Sintéticas: Creadas en un laboratorio por medio de proceso químicos, donde su

estructura química no se relaciona con ningún elemento natural.

Según su situación legal.

 Licitas: Son las drogas que no están penadas por la ley, por ende, son consideradas

legales. Como el alcohol y el tabaco.

 Ilícitas: Son las drogas que están penadas por la ley, por ende, son consideradas

ilegales. Como la marihuana, la cocaína, la heroína, etc.

Nuevas sustancias psicoactivas.

 NPS: Las nuevas sustancias psicoactivas se definen como “sustancias de abuso, ya

sea en forma pura o en preparado, no son controladas por la Convención Única de

1961 sobre Estupefacientes ni por el Convenio sobre Sustancias Sicotrópicas de

1971” (ODC, 2019, párr. 8).

 Emergentes: Incluye las nuevas sustancias y cualquier cambio en el patrón de uso,

presentación, presencia de adulterantes o pureza, que pueden referir una amenaza para

la salud pública.

116
En definitiva, las sustancias psicoactivas tienen distintos tipos de clasificación, que

ayudan abarcar a todas las drogas existentes, ya que cada una tiene propiedades u orígenes

distintos y como se pudo ver, muy pocas son legales, pero eso depende del país donde se

distribuya y/o se consuma.

2.3.4. Conceptos básicos asociados al consumo de sustancias psicoactivas.

Es importante mencionar los siguientes términos, debido a que es relevante en la

presente investigación, por lo cual Rodríguez (2013) los define a continuación:

 Tolerancia: El organismo del ser humano se acostumbra a una determinada sustancia,

debido a la repetición de la sustancia como un estímulo, causando que se incremente

la cantidad y la intensidad del estímulo, para poder obtener las mismas sensaciones

que obtuvo en el inicio del consumo.

 Síndrome de abstinencia: Son los síntomas y signos que causan displacer en la

persona, a causa de la inesperada suspensión de la ingesta de la sustancia de consumo.

 Dependencia: Es un estado de sometimiento compulsivo, tanto físico y/o psicológico,

debido al consumo crónico y incesante de una sustancia psicoactiva. Por lo cual se

cree que la persona tanto en su parte biofisiológica como psicológica no puede

detener el consumo de la sustancia.

2.3.5. Neurobiología del consumo de sustancias psicoactivas.

El consumo de las sustancias psicoactivas produce dependencia, lo cual se

considerada como un trastorno, donde alteran los procesos perceptuales, motivacionales,

emocionales (OMS, 2004). Por lo cual es necesario entender la dinámica de las sustancias en

el organismo, es decir la neuroanatomía y neurobiología.

El cerebro humano tiene distintas regiones con diferentes funciones; es así que el

rombencéfalo tiene estructuras vitales, que se encargan de funciones vitales como el control

de la respiración y la vigilia; a su vez el mesencéfalo ayuda a comprender la dependencia a

117
las sustancias psicoactivas en el organismo, debido a que sus regiones se encargan de la

motivación y el aprendizaje de estímulos ambientales, y de los comportamientos reforzadores

placenteros y de mantenimiento de la vida, como el comer y beber; a demás el prosencéfalo

tiene la corteza cerebral prosencefálica, que se encarga de general el pensamiento abstracto,

la planificación, la asociación de ideas y la memoria, donde gracias a las técnicas de

visualización se a identificado regiones que se activan por estímulos que inducen el deseo

compulsivo de consumir la sustancia psicoactiva en personas dependientes (OMS, 2004).

A su vez las neuronas cumplen la función de comunicar la información en el cerebro,

a través de los neurotransmisores, que son los mensajeros químicos que se liberan en la

sinapsis cuando se estimula las neuronas, enviando una señal eléctrica a través del axón,

llegando al botón terminal del axón, liberando así, en la hendidura sináptica los

neurotransmisores, dando paso a la recaptación del neurotransmisor por medio de la neurona

receptora postsináptica. Se debe tener en cuenta que cada neurotransmisor tiene una

estructura y función específica, por lo cual se adhieren a un receptor especifico (OMS, 2004).

Debido a que existen diversos neurotransmisores, se mencionara los más importantes

en el consumo de sustancias psicoactivas, como: la dopamina, serotonina, GABA, glutamato,

noradrenalina, y opioides endógenos. Por ende, las sustancias psicoactivas pueden aparentar

los efectos de los neurotransmisores endógenos o naturales, o obstruir la función cerebral

normal, alterando o bloqueándola la liberación, el almacenamiento y la eliminación de los

neurotransmisores. Considerándose a las sustancias psicoactivas que se unen a los receptores

y suben su función, como agonistas, mientras que al unirse al receptor bloquean la función

normal, como antagonistas (OMS, 2004).

En conclusión, en lo referente a la neurobiología del consumo y dependencia de las

sustancias psicoactivas, se produce una transformación y modificación de los procesos

cerebrales, en su percepción, emoción y motivación, dando como resultado que el ser humano

118
encuentre formas artificiales de sentir placer, para evitar el dolor; es ahí donde se produce el

enganche con la sustancia, cuando el ser humano consigue más placer de las sustancias, que

en el realizar actividades cotidianas, como ejercicio, comer, tener relaciones sexuales, etc.

2.3.6. Factores de riesgo del consumo de sustancias psicoactivas.

Herrera (2016) mención que se considera a un factor de riesgo como una característica

externa o interna de la persona, que puede subir la posibilidad de consumir una sustancia

psicoactiva, permitiendo a su vez la identificación de elementos o factores por los cuales se

realice prevención. Por lo cual los factores de riesgo se agruparán en factores sociales,

escolares, familiares e individuales, que se definirán a continuación.

 Factores sociales: Como el contexto social, nivel socioeconómico, la diferencia de la

atención a la salud, situaciones de pobreza, desempleo y subempleo, ausencia de

oportunidades académicas y laborales.

 Factores escolares: Como el tipo de escuela a la que asiste, consumo de sustancias

psicoactivas en amistades y facilidad de adquisición, fracaso académico entre otros.

 Factores familiares: Como disfunción familiar, consumo de sustancias en algún

miembro de la familia, maltrato intrafamiliar, ausencia de padres, familia numerosa.

 Factores individuales: Como edad, sexo, actitudes, creencias y valores, percepción

del riesgo del individuo, autoestima, impulsividad o incapacidad de autocontrol, etc.

Por otro lado, Rodríguez (2013) incluye en los factores de riesgo, a dos factores

distintos a los antes mencionados; al factor de la biología y genética, como la historia de

consumo nocivo o de dependencia de sustancias psicoactivas dentro de la familia, y al factor

de personalidad, como la presencia de baja autoestima, autoeficacia, autoconcepto y la

presencia de comportamientos impulsivos.

Por ende, los factores de riesgo en el consumo de sustancias psicoactivas dependen de

factores individuales, familiares, sociales, escolares, genéticos y de personalidad, que pueden

119
influir en el consumo de las sustancias, por lo cual es importante conocer cuales son los

posibles riesgos para crear programas de prevención y para sensibilizar a las familias sobre el

tema, ya que el consumo de sustancias es considerado un tema de salud mental y social.

2.3.7. Estudios sobre la satisfacción sexual y las actitudes hacia la sexualidad en

personas consumidoras de sustancias psicoactivas.

González, Gálvez, Álvarez, Cobas y Cabrera (2006) mencionan que las drogas pueden

influir en el deseo, la excitación y el orgasmo en la actividad sexual; debido a que las

sustancias psicoactivas tienen un efecto en la mente del individuo que la ingiere, causando

cambios en el deseo sexual, pero no todas reducen el deseo sexual, sino también lo

incrementa, lo cual no significa un mejor placer o actuación sexual.

La excitación sexual se observa al tener una erección del pene del hombre y la falta

de la excitación puede producir impotencia, donde al igual existen drogas que provocan o no

impotencia sexual; de tal manera que la falta de excitación supone una interferencia en la

respuesta sexual normal.

Si una droga obstruye el paso de un neurotransmisor, los mensajes normales se verán

distorsionados y la conducta se trasformará; en concreto, González et al. (2005) mencionan

que los efectos químicos de las sustancias psicoactivas van directamente al cerebro, donde se

modifica las funciones de los centros que regulan la sexualidad y también otras sustancias

psicoactivas lo hacen en los centros nerviosos periféricos, los mismos que controlan la

actividad de los órganos genitales. A su vez también nos menciona que el consumo de drogas

puede causar estimulación o deprimir una de las funciones del sistema límbico, el cual ayuda

a unir el sentimiento, pensamiento, memoria y el presente, que está gobernado por el placer o

el dolor.

Es importante mencionar los efectos que causa el consumo de ciertas drogas en la

sexualidad; por lo cual la cocaína tiene fama de aumentar la excitación y la respuesta sexual,

120
pero también provoca disfunciones sexuales; la marihuana al igual que el alcohol tiene

efectos depresores, ayuda en la desinhibición de los prejuicios sociales y los tabúes

personales, con respecto a la sexualidad, aumenta la sensibilidad táctil y distorsiona la

realidad, por lo que impide concentrarse y realizar coordinación motora, causando reducción

de testosterona y espermatozoides, disminución del deseo sexual y disfunción eréctil.

Por lo cual se observa que el consumo de sustancias psicoactivas dentro de la

sexualidad se cree que causa aumento de excitación sexual y por ende mayor placer, pero

ocurre lo contrario, gracias al consumo prolongado de la droga. Observando también en la

sexualidad femenina cambios en el ciclo menstrual, disminución del deseo sexual, baja los

niveles de lubricación vaginal, anorgasmia, se bloquea la respuesta sexual, disfunción sexual

y fertilidad; en el hombre se identificó la disminución de la testosterona, espermatozoides, del

deseo sexual y de la erección, al igual que impotencia sexual, infertilidad y retraso de la

eyaculación.

Pero no todo lo relacionado a la sexualidad en el consumo de sustancias psicoactivas

tiene que ver con alteraciones en el organismo, ya que las mujeres y hombres dentro del

mundo de las drogas sufren todo tipo de violencia, donde las mujeres al ser educadas para

asumir su cuerpo y su sexualidad como un instrumento, para obtener cosas, se observa que,

en las mujeres drogodependientes, como lo manifiesta Fundación Atenea (2016) que la

mayoría de las veces utilizan su sexualidad y su cuerpo para obtener favores, protección,

poder en un grupo, dinero, e incluso la droga para ellas y/o para sus pareja.

La imagen de una mujer bajo los efectos de drogas está asociada también a cuestiones

relacionadas con su cuerpo y su sexualidad, percibiéndola como una persona más accesible

sexualmente y fácil de conquistar, siendo por lo tanto más vulnerable a los abusos y

agresiones sexuales.

2.3.8. Investigaciones internacionales del consumo de sustancias psicoactivas.

121
Lomba, Apóstolo y Mendes (2009) realizaron una investigación sobre el consumo de

drogas, alcohol y conductas sexuales en los ambientes recreativos nocturnos; la cual tuvo

como objetivo describir a los jóvenes que salen los fines de semana y analizar las relaciones

entre dichos lugares, y el consumo de alcohol y drogas, y a su vez estudiar la asociación con

las conductas sexuales. Se utilizo una muestra de 1.142 jóvenes que asisten a locales de ocio

nocturno. Donde se obtuvo que los estudiantes consumen más alcohol, cannabis, cocaína y

éxtasis; a su vez se encontró que habían tenido relaciones sexuales bajo efecto del alcohol y

otras drogas, lo cual lo hicieron sin preservativo, al igual que el consumo precoz de alcohol y

drogas se asoció a experiencia sexuales precoces.

Medina-Pérez y Rubio (2012) refieren en su investigación sobre el consumo de

sustancias psicoactivas en adolescentes farmacodependientes de una fundación de

rehabilitación, que el objetivo de esta fue caracterizar el consumo de sustancias psicoactivas

en población farmacodependiente, en una fundación dedicada a la rehabilitación en el

Quindío, Colombia. La investigación es cuantitativa-descriptiva, utilizando los formularios de

vigilancia epidemiológica para uso indebido de sustancias psicoactivas (VESPA), siendo un

total de 333 adolescentes entre 14 y 18 Se obtuvo como resultados que el tabaco y marihuana

eran las sustancias de mayor consumo, seguido del alcohol, generando a su vez

policonsumidores.

Díaz, Anguiano y Muela (2016) mencionan en su artículo sobre el consumo de drogas

en el alumnado de una Universidad, que su objetivo fue conocer el estado actual del consumo

de drogas entre los grupos de consumidores de alto y bajo riesgo en alcohol y tabaco. Siendo

un estudio descriptivo, con una muestra de 303 estudiantes de la Universidad de Jaén. Se

obtuvo en los resultados que existe un aumento den el consumo de las sustancias psicoactivas

en el año 2016, y que el alcohol y tabaco se relacionan con la ingesta de otras sustancias

122
psicoactivas en los universitarios, de igual manera se encontró que los estudiantes consumen

a pesar de conocer información sobre las drogas.

Se concluye que los estudios muestran que las sustancias con mayor prevalencia de

consumo es el alcohol y el tabaco, siendo una de las razones por ser drogas socialmente más

aceptados y legales, pero que las mismas pueden dar paso al consumo de otras drogas no

legales, generando así también policonsumidores con un consumo más habitual y simultaneo.

2.3.9. Investigaciones nacionales del consumo de sustancias psicoactivas.

Herrera (2016) en su trabajo de investigación sobre prevalencia de consumo de

sustancias adictivas en relación a impulsividad en alumnos de bachillerato de un colegio de

Quito, plasmó como objetivo, determinar la existencia de relación entre consumo de

sustancias adictivas y la impulsividad, donde participaron 212 estudiantes, en su mayoría

hombres, se concluyó que una mayor parte de los estudiantes ya consumieron sustancias

psicoactivas, siendo el alcohol la de preferencia, obtenido a su vez una relación significativa

entre los niveles de impulsividad elevados y el consumo de sustancias, el número de veces de

consumo y la cantidad de sustancias consumidas.

Játiva (2017) menciona en su trabajo de investigación sobre la estructura y

funcionamiento de la familia de origen en pacientes con consumo problemático de alcohol y

otras drogas, que la familia dominante se encuentra en el rango medio de disfuncionalidad y

que las edades de inicio de consumo son de 9 y 11 años, existiendo violencia intrafamiliar en

la mayoría de las familias, siendo a su vez la sustancia inicial de consumo, el alcohol.

Prado (2017) refiere en su trabajo de investigación sobre la incidencia de la estructura

familiar en el consumo de drogas en una escuela, donde el objetivo de la investigación fue

analizar la incidencia de la estructura familiar y el consumo de drogas; identificando niveles,

dimensiones y categorías asociadas, con una muestra de 12 estudiantes. Se obtuvo que más de

la mitad de las familias se encuentran en disfuncionalidad, y los adolescentes de la muestra

123
presentan altos niveles de consumo de sustancias, encontrando a su vez una relación

estadísticamente significativa entre el consumo de sustancias y la familia.

Se concluye que los estudios revisados, muestran que el alcohol es la sustancia

psicoactiva que el individuo consume por primera vez, incluso desde edades muy tempranas,

generando a su vez el consumo de otras sustancias, al igual que se observó que la estructura

familiar juega un papel muy importante en el consumo de las sustancias, ya que existe más

familias disfuncionales en dicha población, que incluso han sufrido VIF.

124
1. Definición conceptual de variables

Variable 1:

 Satisfacción sexual: “Evaluación subjetiva de agrado o desagrado que una persona

hace respecto de su vida sexual (Pinney, Gerrard &Danney, 1987); o bien, como la

capacidad del sujeto de obtener placer sexual mediante el coito o cópula. (Renaud,

1997)” (Álvarez-Gayou et al. 2006, p. 5).

Variable 2:

 Actitudes hacia la sexualidad: “Gómez (2013) la actitud es una predisposición hacia

el comportamiento en temas o situaciones vinculados hacia la sexualidad. Estos

pueden ser percibidos de manera favorable, desfavorable y ambivalente” (Maldonado,

2019, p.45).

1.1. Operacionalización de variables.

Tipo de
Variable Dimensiones Indicadores Ítems Instrumento
datos
Besos, caricias,
confianza, 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7,
Factor afectivo
sentimientos 8
positivos.
Orgasmos,
relaciones
Factor
sexuales, 9,10,11,12,13
bienestar Escala
frecuencia y
autoaplicable
satisfacción
para la
Pasión,
evaluación
erotismo
Satisfacción de la
Factor propio Intervalo
sexual 14,15,16,17,18,19 satisfacción
erotismo y en la pareja,
sexual
seducción y
(Álvarez –
placer.
Gayou et al.,
Respeto mutuo
Factor respeto 2006)
y
y 20,21,22
responsabilidad
responsabilidad
sexual
Tacto, olfato,
Factor
vista, sabores,
estímulos 23,24,25,26
sonidos y
sensoriales
masturbación.

125
Expresión de
los
propios
sentimientos y
Factor de la
a la percepción 27,28,29
comunicación
de los
sentimientos
del otro u
otra

Tipo de
Variable Dimensiones Indicadores Ítems Instrumento
datos
Altos
sentimientos de
culpa sexual. 2, 5, 11, 12,
Erotofóbia Actitudes 13, 14, 15, 18,
negativas y que 19 Encuesta
interfiere en el revisada de
comportamiento opinión
Bajos sexual
sentimientos de “EROS”
Actitudes culpa sexual. (Fisher,
hacia la Erotofilia Actitudes 1, 3, 4, 7, 8 Byrne, White Intervalo
sexualidad positivas y que y Kelley,
interfiere en el 1998, como
comportamiento se citó en Del
Otras actitudes Río, López,
relevantes & Cabello,
Homofobia 9, 10, 17
respecto a la 2013)
sexualidad
Prácticas
Sexo no
sexuales no 6, 16,20
convencional
convencionales

2. Hipótesis

Hipótesis General:

Existe una correlación estadísticamente significativa entre la satisfacción sexual y las

actitudes hacia la sexualidad en personas consumidoras de sustancias psicoactivas.

126
Capitulo III Metodología

1. Enfoque y tipo de la investigación

El enfoque de la presente investigación será cuantitativo, por lo cual como lo

mencionan Hernández et al. (2014) dicho enfoque “utiliza la recolección de datos para probar

hipótesis con base en la medición numérica y el análisis estadístico, con el fin establecer

pautas de comportamiento y probar teorías” (p.4).

1. Diseño de investigación

Investigación no experimental – transversal - descriptivo-correlacional.

De manera que, por ser una investigación no experimental, se ejecutará sin la

manipulación premeditada de las variables satisfacción sexual y actitudes hacia la sexualidad,

y sólo se observará los fenómenos en su ambiente natural para analizarlos; a su vez por ser de

tipo transversal, se recopilará datos en un momento y tiempo único en el Centro de Salud de

Chimbacalle en el Servicio Ambulatorio Intensivo. Por otro lado, su diseño será descriptivo,

debido a que se va a describir los niveles y dimensiones de las variables antes mencionadas, y

un diseño correlacional, ya que se desea hallar el punto de encuentro entre las dos variables.

Así lo mencionan Hernández et al. (2014) que la investigación no experimental es un

estudio en el cual no se varia de forma intencional las variables independientes para ver su

efecto sobre otras variables, si no, se observa los fenómenos tal como se dan en su contexto

natural, para analizarlos. Mientras que la investigación transversal tiene como propósito

describir las variables y analizar su incidencia e interrelación en un momento único. Por

consiguiente, los diseños transeccionales descriptivos “indagan la incidencia de las

modalidades, categorías o niveles de una o más variables en una población, son estudios

puramente descriptivos” (Hernández et al., 2014, p.155). Teniendo en cuenta que también

tendrá un alcance correlacional, donde “estos diseños describen relaciones entre dos o más

127
categorías, conceptos o variables en un momento determinado” (Hernández et al., 2014,

p.157).

3. Población y muestra

3.1. Descripción de la Población.

La población definida está compuesta como menciona Pulamarin (2019), por un

aproximado de 100 pacientes que acudieron al Servicio Ambulatorio Intensivo del Centro de

Salud de Chimbacalle por problemas de consumo de sustancias psicoactivas en los meses de

enero a abril del presente año, los mismos que son adultos varones de estrato socioeconómico

medio y bajo, que se encuentran dentro de las edades de los 20 a 40 años, pacientes con

diagnóstico formal CIE-10, F10 – F19: Trastornos mentales y del comportamiento debido al

consumo de psicotrópicos.

3.2. Muestra.

3.2.1. Método de muestreo.

Se utilizará una muestra no probabilística, la cual Hernández et al (2014) menciona,

que es un “subgrupo de la población en la que la elección de los elementos no depende de la

probabilidad, sino de las características de la investigación” (p. 176). De tipo intencional

(pacientes del mes de julio al mes de agosto), con variante de tiempo, donde se trabajará con

la estimación de asistencia al programa de tratamiento ambulatorio intensivo, “estas muestras

están formadas por los casos disponibles a los cuales tenemos acceso (Battaglia, 2008)”

(Hernández et al. 2014, p. 390).

3.2.2. Tamaño de la muestra.

Se estima que la muestra a investigar será aproximadamente de 80 pacientes, entre el

mes de julio al mes de agosto del 2019.

3.2.3. Criterios de inclusión y exclusión.

Criterios de inclusión:

128
 Rango de edad entre los 20 a 40 años, consumidores de sustancias psicoactivas que

acuden al Servicio Ambulatorio Intensivo del Centro de Salud de Chimbacalle.

 Diagnóstico según la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE10) de: F10-

F19: Trastornos mentales y del comportamiento debidos al consumo de psicotrópicos.

 Participación voluntaria y consciente para colaborar en la investigación, tras haber

firmado el consentimiento informado.

Criterios de exclusión:

 Al momento del levantamiento de la información, hallarse bajo efecto de alguna

sustancia psicoactiva y/o fármaco.

 Diagnóstico según la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE10) de: F10-

F19: Trastornos mentales y del comportamiento debidos al consumo de psicotrópicos,

en presencia de comorbilidad con otras psicopatologías como: Trastornos depresivos,

Trastornos psicóticos, etc.

Criterios de eliminación:

 Ausencia de la rúbrica del participante en el consentimiento informado.

 Encuestas incompletas o llenadas incorrectamente.

Instrumentos y guías

Encuesta socioeconómica (Anexo B):

La encuesta consta de catorce preguntas de elección personal, las cuales tienen la

finalidad de generar datos necesarios que contribuyan en el desarrollo de los objetivos de la

investigación.

Inventario de Satisfacción Sexual (Anexo B):

El Inventario de satisfacción sexual fue elaborado por el Dr. Juan Luis Álvarez -

Gayou Jurgenson y cols., del Instituto Mexicano de Sexología, en el año 2006, el cual consta

de 29 reactivos, con una escala tipo Likert con cinco opciones de respuesta, que van de

129
siempre = 5, la mayoría de las veces = 4, en ocasiones sí y otro no = 3, pocas veces = 2 y

nunca = 1.

El objetivo del inventario es poder evaluar la satisfacción sexual en hombres y

mujeres dentro de niveles (muy alto, alto, medio y bajo) y categorías (afectivo, bienestar,

erotismo, respeto y responsabilidad, estímulos sensoriales y comunicación). A su vez el

inventario tiene un corte cualitativo y cuantitativo (Tabla 1 y 2).

Tabla 1
Categorías del Inventario de Satisfacción Sexual
CATEGORÍAS ÍTEMS

Afectivo 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8

Bienestar 9, 10, 11, 12, 13

Erotismo 14, 15, 16, 17, 18, 19

Respeto y responsabilidad 20, 21, 22

Estímulos sensoriales 23, 24, 25, 26

Comunicación 27, 28, 29

Fuente: (Carmen y Coronado, 2016)

Tabla 2
Suma total del Inventario de Satisfacción Sexual
NIVELES PUNTUACIONES

Muy alto 145 – 127

Alto 126 – 117

Medio 116 – 103

Bajo 102 – 0

Fuente: (Carmen y Coronado, 2016)

 Validación
Como mencionan Álvarez – Gayou et al. (2006) la validez se estableció por medio del

“análisis factorial del inventario de 29 ítems, mediante el procedimiento de componentes

130
principales de los factores brutos, se obtuvieron 6 factores que dan cuenta de 58.279 % de la

varianza total.

 Confiabilidad
Así también Álvarez-Gayou et al., (2006) mencionan que la “confiabilidad del

Inventario de Satisfacción Sexual se estableció al administrar el instrumento a la muestra de

760 personas. El valor de confiabilidad al aplicar la prueba Alpha de Cronbach fue de α =

0.9231, lo que indica una estabilidad muy alta” (p. 10).

Y también se estableció la confiabilidad por medio del “análisis de reactivos: este

proceso se realizó con el método ítem escala o total, con el objeto de determinar la

contribución de cada ítem al Inventario de Satisfacción Sexual, se encontró que todos los

ítems poseen una correlación significativamente positiva” (Álvarez-Gayou et al., 2006, p.10).

El instrumento no se encuentra validado en el contexto ecuatoriano.

Encuesta revisada de opinión sexual “EROS” (Anexo B):

El cuestionario Sexual Opinion Survey (SOS) fue creado inicialmente por Fisher,

Byrne, White y Kelley en 1998, el mismo tiene como objetivo medir los constructos de

erotofilia y erotofobia para poder determinar la “disposición actitudinal positiva o negativa

hacia la sexualidad la misma que interferirá en comportamiento” (Gómez, 2013, como se citó

en Maldonado, 2019, p.50).

El cuestionario EROS consta de 20 ítems y utiliza la escala de Likert, que va de

totalmente en desacuerdo = 1, en desacuerdo = 2, medianamente en desacuerdo = 3, sin

opinión = 4, medianamente de acuerdo = 5, de acuerdo = 6 y totalmente de acuerdo = 7, los

cuales están divididos en 4 factores (Tabla 3).

Tabla 3
Factores del cuestionario EROS
FACTORES ÍTEMS
Erotofóbia 2, 5, 11, 12, 13, 14, 15, 18 y 19

131
Erotofilia 1, 3, 4, 7, 8
Homofobia 9, 10, 17
Sexo no convencional 6, 16,20
Fuente: (Del Río, López, y Cabello, 2013)

 Validación
El instrumento fue validado y adaptado en España por Del Río et al. (2013) donde se

corrigió los sesgos de orientación sexual en algunos ítems, llegando a la conclusión de que

EROS (encuesta revisada de opinión sexual) “presenta parámetros adecuados para ser

utilizado en clínica y en investigación. Tiene como ventaja el ser aplicable a un mayor rango

de población al tener en cuenta la orientación sexual” (Del Río et al., 2013, pag.9).

 Confiabilidad
Del Río et al. (2013) mencionan que en su estudio se demostró una alta consistencia

interna con un coeficiente de alfa de Cronbach de 0,851, indicando que una puntuación

iguales o superiores a 0,70 son admisibles para los estudios. Por otra parte, se “reafirmando

otro estudio realizado por Narváez & Valverde (2018) utilizando el mismo instrumento, pero

aplicado a la población del Ecuador, demostraron una consistencia interna de 0,823 en el

coeficiente de alfa de Cronbach” (Maldonado, 2019, p. 52).

El instrumento no se encuentra validado en el contexto ecuatoriano.

Procedimiento

5.1. Procedimiento de recolección de datos.

Se obtendrá los datos mediante la aplicación de la encuesta socioeconómica, el

inventario de satisfacción sexual y la encuesta revisada de opinión sexual “EROS”

únicamente a los pacientes hombres de 20 a 40 años del SAI del Centro de Salud de

Chimbacalle y que hayan firmado previamente el consentimiento informado; dichos

instrumentos y encuesta son de naturaleza auto aplicable, por lo cual se tomará los mismos

durante el espacio de las dos terapias grupales (grupo de 10 a 20 pacientes) con una duración

de 30 a 45 minutos por grupo, los mismos que se tomaran los días jueves dentro de dos

132
horarios, de 10am a 12pm y de 3pm a 5 pm; también se aplicará los reactivos de forma

individual en cada sesión psicológica con un tiempo de 30 a 45 minutos por persona, los

mismos que se aplicaran de lunes a viernes de 10:30am a 3:30pm.

Por lo cual se iniciará con la presentación del investigador, seguido de la explicación

de los objetivos, justificación, beneficios y riesgos de la investigación a los participantes, para

continuar con informar los requisitos para la aplicación de la encuesta y reactivos

psicológicos, comentando a su vez sobre el consentimiento informado para después entregar

y revisar junto con los participantes, y si lo desean, firmar el mismo. Finalmente se

entregarán la encuesta y los instrumentos y un esfero a cada participante. Después de lo cual,

los resultados obtenidos serán confidenciales por lo cual serán almacenados en una carpeta

por 2 años después de haber terminado la investigación.

133
Capitulo IV Plan de Análisis de datos

1. Procedimiento de análisis de datos

Se utilizará estadística descriptiva, por lo cual se empleará el programa de

procesamiento de datos Statistical Package for the Social Sciences (SPSS) versión 25, año

2017, para el análisis descriptivo de los datos de la encuesta sociodemográfica se utilizara

frecuencias y porcentajes y para el procesamiento de los objetivos de tipo descriptivo de las

dos variables a investigar, se utilizara de ser necesario las medidas de tendencia central

(media, mediana y moda) y medidas de dispersión (varianza y desviación estándar), o en

tablas de frecuencia.

Y finalmente para la correlación de las variables se aplicará la prueba de normalidad

de Kolmogorov-Smirnov debido a que es una población de más de 30 personas y también se

utilizará el Coeficiente de correlación de Pearson o el Coeficiente de Correlación de

Spearman.

134
Capítulo V Consideraciones éticas

1. Respetar a la persona y comunidad que participa en el estudio

Durante todo el transcurso de este estudio, en cada momento se tendrá en cuenta el

respeto hacia la integridad, entendiéndola como la “pureza original y sin contacto o

contaminación con un mal o un daño, ya sea físico o moral” (Significados, 2016), de los

pacientes consumidores de sustancias psicoactivas que voluntariamente tomen la decisión de

participar en el mismo, al mismo tiempo tal respeto se dirigirá también hacia los familiares y

otros profesionales relacionados directa o indirectamente con el estudio.

Es así como, cada decisión tomada por las personas que componen la población de

estudio será respetada y comprendida en su totalidad, sobre todo si alguna de dichas personas

toma la decisión voluntaria de dejar de participar en algún momento del desarrollo de la

investigación.

Cabe mencionar que también se procurará el favorecimiento de condiciones

adecuadas de privacidad con relación a los resultados que arrojen los instrumentos acerca de

cada persona participante en la investigación.

Finalmente, todas las condiciones y afirmaciones que se mencionaron con

anterioridad se hallarán sujetas a permanente supervisión por parte de los profesionales

psicólogos clínicos del servicio ambulatorio intensivo del centro de salud de chimbacalle,

quienes en cada momento del desarrollo del estudio estarán pendientes por el respeto hacia la

integridad y dignidad de cada uno de los participantes.

En supuesto caso de evidenciarse alguna situación que vaya en contra de lo

mencionado en los apartados anteriores, la investigadora se pondrá a disposición de las

medidas judiciales y legales correspondientes.

2. Autonomía

135
Tomando en cuenta la libertad de las personas participantes de tomar decisiones de

manera racional y gobernar su propio cuerpo de acuerdo a sus intereses, se procurará que las

decisiones de los participantes de esta investigación giren alrededor de a sus capacidades y no

a las de la investigadora; todo esto respetando la autonomía de la población de estudio.

Por otro lado, se procurará brindar toda la información de manera correcta y oportuna

acerca de los distintos pasos a seguir durante el transcurso del estudio, además de sus

implicaciones a corto, mediano y largo plazo; los posibles riesgos y beneficios; y sobre el

derecho que poseen de dejar de participar en el estudio, sin que dicha decisión suponga

alguna repercusión de cualquier tipo dentro de su tratamiento individual y grupal.

Finalmente, se procederá a entregar el formulario correspondiente al consentimiento

informado a los pacientes que de forma voluntaria hayan decidido participar en el estudio, y

dentro del mismo se hará hincapié en la total confidencialidad sobre la información que va a

ser brindada por los participantes.

3. Beneficencia

Dentro de la investigación, la beneficencia se entiende como el deber del investigador

de actuar en función del beneficio de la población participante, es así que, los resultados de la

investigación resultarán fructuosos a la población de estudio, ya que lo mismos podrán ser

utilizados para optimizar los abordajes psicoterapéuticos de tipo individual y grupal que

realizarán los profesionales psicólogos clínicos de esta casa de salud sobre dichos pacientes,

además, la descripción de las variables propuestas brindaran un conocimiento transversal que

podrá ser utilizado para estar al tanto sobre el estado actual de los participantes en relación a

dichas variables.

4. Confidencialidad

Durante el transcurso de cada etapa del proceso de la investigación se garantizará a las

personas que participan en la misma que todos los datos obtenidos se hallarán bajo total

136
reserva, esto incluye información personal de cada participante. Lo anterior mencionado se

realizará a través de una codificación alfanumérica a cada instrumento psicométrico aplicado

evitando que dentro del mismo consten los datos de identificación de las personas

participantes.

5. Aleatorización equitativa de la muestra

Con respeto a la selección muestra, se tomará en cuenta a la totalidad de la población

que surja dentro del periodo establecido con anterioridad, de las personas que componen al

grupo de personas consumidoras de sustancias psicoactivas que acuden al servicio

ambulatorio intensivo del centro de salud de Chimbacalle, sin realizar ningún tipo de

discriminación, respetando en cada momento sus características psicosociales e individuales,

de igual manera se procederá con la muestra seleccionada que acceda a participar

voluntariamente del estudio, ya que a cada miembro que la compone se le dará el mismo

trato, cabe mencionar que se ofrecerá un acompañamiento psicológico a los participantes que

así lo requieran o lo necesiten antes, durante y después de la realización de las actividades

relacionadas con el estudio.

6. Protección de la población vulnerable

Con la finalidad de ofrecer protección y velar por el cumplimiento de los respectivos

derechos de la población vulnerable, en caso de que forme parte de la muestra, se tendrá a

disposición un equipo integral de salud para poder analizar individualmente cada caso y

poder establecer los mecanismos de acción en caso de presentarse alguna adversidad

relacionada con su situación de vulnerabilidad, en ese caso se ofrecerá ayuda en la

movilización de las personas con discapacidad física, previniendo posibles accidentes, se

precautelará la salud e integridad física de las personas con enfermedades catastróficas a

través de la observación y motivación al cumplimiento de sus respectivos regímenes

terapéuticos establecidos, y en caso de no haberse establecido alguno se enlazará

137
inmediatamente con los servicios de salud correspondientes, por otro lado, resulta necesario

mencionar que el servicio de urgencias del centro de salud de Chimbacalle se encuentra a

disposición de los pacientes y podrá ser utilizado si algún caso lo amerita.

7. Riesgos potenciales del estudio

Cabe mencionar que los riesgos son mínimos al no ser una investigación experimental

y no haber manipulación de las variables; por lo cual es una investigación descriptiva-

correlacional, y los instrumentos de evaluación que se utilizarán no representan daño alguno

para la integridad física y psicológica de las personas consumidoras de sustancias

psicoactivas que acuden al servicio ambulatorio intensivo del centro de salud de chimbacalle,

cabe aclarar que se establecerán las condiciones correspondientes para poder ofrecer un

adecuado acompañamiento psicológico a lo largo del proceso de investigación con la

finalidad de precautelar la salud mental de los pacientes que participarán en el estudio.

8. Beneficios potenciales del estudio

El investigador se considera como beneficiario directo ya que puede seguir

estableciendo proyectos de investigación que den continuidad a los resultados obtenidos a

partir del presente estudio.

De igual manera se considera como beneficiaria directa la institución donde se realiza

la investigación, en este caso es el Centro de Salud de Chimbacalle, y más específicamente el

Servicio Ambulatorio Intensivo que se encarga de atender a las personas con consumo

problemático de sustancias psicoactivas, ya que tendrán los resultados de la investigación a su

disposición para poder emprender acciones con el conocimiento resultante.

Como beneficiarios indirectos se consideran a los pacientes que participan y a quienes

no participan en la investigación, ya que a través de los conocimientos generados se podrían

establecer a futuro y con otras investigaciones, modelos psicoterapéuticos de tipo individual y

138
grupal que puedan ser aplicados en distintas sesiones de psicoterapia de los pacientes con

adicciones que acuden al servicio ambulatorio intensivo del centro de salud de Chimbacalle.

9. Idoneidad ética y experiencia del investigador

Sobre este apartado se encuentra en los anexos I y J

10. Declaración de conflicto de intereses

Sobre este apartado se encuentra en los anexos G y H

139
Capítulo VI Aspectos administrativos

1. Cronograma de actividades

ACTIVIDADES MARZO ABRIL MAYO JUNIO JULIO AGOSTO RESPONSABLES


Ortiz Pamela
Revisión Bibliográfica X
Dr. Estuardo Paredes

Elaboración del Plan del Ortiz Pamela


X X
Proyecto de Investigación Dr. Estuardo Paredes

Ortiz Pamela
Elaboración del marco teórico X
Dr. Estuardo Paredes
Presentación del Plan del
X Ortiz Pamela
Proyecto de Investigación

Revisión del Plan del Proyecto


X Dr. Estuardo Paredes
de Investigación

Aprobación del Plan del


X Dr. Estuardo Paredes
Proyecto de Investigación

Solicitud de Permiso a la
X X Ortiz Pamela
Institución

Elaboración del informe final X Ortiz Pamela

Dr. Estuardo
Revisión del Informe Final X
Paredes
Presentación y Evaluación del Dr. Estuardo
X
Informe Final Paredes

140
2. Presupuesto y Recursos

Aport
Unidad de Costo Aporte Valor
Cantida e
Rubro
medida d unitario externo total
UCE

Recursos Humanos
Estudiante USD 1 - $ 0,00
Docentes: USD 1 - $ 0,00
Recursos de espacio
Auditorio USD 1 - $ 0,00
Consultorio USD 1 - $ 0,00
Recursos de Infraestructura
Computador
USD 1 - $ 0,00
a
Recursos materiales
Esferos USD 30 $ 0,25 $ 7,25
Copias USD 120 $ 0,02 $ 2,40
Resma de
USD 1 $ 4,50 $ 4,50
papel
Cuaderno USD 1 $ 1,00 $ 1,00
Memory
USD 1 $ 8,50 $ 8,50
flash
Recursos temporales
De marzo
2019 a agosto Meses 4 1 4
2019
Recursos económicos
$
Transporte USD 200 $ 0,25
50,00
$
Almuerzos USD 45 $ 2,5
112,50
$
Total
186,15

El presupuesto detallado para la realización de la investigación será costeado por la

principal responsable de la misma (Pamela Ortiz).

141
Referencias bibliográficas

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la evaluación de la satisfacción sexual en hombres y mujeres mexicanos. Recuperado

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148
ANEXOS

Anexo B. Instrumentos

Código:
UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR
FACULTAD DE CIENCIAS PSICOLÓGICAS
Encuesta sociodemográfica

Instrucciones: Lea atentamente las siguientes interrogantes y conteste honestamente cada una de
ellas con una X, es necesario mencionar que la información recopilada a continuación será utilizada
únicamente para dar cumplimiento a los objetivos y fines investigativos del estudio “Satisfacción
sexual y actitudes hacia la sexualidad en personas consumidoras de sustancias psicoactivas en un
Centro de Salud del D.M.Q”, a su vez se manejara la información bajo criterios de confidencialidad y
anonimato.

DATOS GENERALES

1.EDAD:
2. NIVEL DE INSTRUCCIÓN
a) Primaria b) Secundaria c) Bachillerato d) Superior incompleta e) Superior f) Posgrado
3.ESTADO CIVIL DE USTED:
a) Soltero b) Casado c) Unión libre d) Separado e) Divorciado f) Viudo
4.ESTADO CIVIL DE SUS PADRES:
a) Soltero b) Casado c) Unión libre d) Separado e) Divorciado f) Viudo
5. NIVEL SOCIOECONÓMICO:
a) Nivel bajo b) Nivel medio-bajo c) Nivel medio d) Nivel medio-alto e) Nivel alto
6. ¿CÓMO EMPLEA SU TIEMPO LIBRE ?:
a) Labores domésticas b) Recreación y deporte c) Estudio d) Hobbies varios e) Ninguno
7. PROCEDENCIA EN RELACIÓN A LA REGIÓN:
a) Sierra b) Costa c) Amazonia d) Galápagos
8. TIPO DE SUSTANCIA PSICOACTIVA QUE CONSUME O CONSUMÍA CON MAYOR
FRECUENCIA:
a) Alcohol b) Tabaco c) Marihuana d) Basé de cocaína e) Heroína f) Otra. Especifique_______
9. ¿CUÁL ES LA RAZÓN POR LA QUE CONSUME O CONSUMÍA DICHAS
SUSTANCIAS?:
a) Irritabilidad b) Tristeza c) Alegría d) Aburrimiento e) Indiferencia
10. FRECUENCIA EN LA QUE CONSUME O CONSUMÍA LA SUSTANCIA
PSICOACTIVA:
a) 1-2 veces por semana b) 3-4 veces por semana c) 5 a 7 veces por semana d) Otro. Especifique__
11. ¿CUÁNTO TIEMPO CONSUME O CONSUMÍA LA SUSTANCIA PSICOACTIVA?
a) 1 a 6 meses b) 7 meses a 1 año c) 2 a 4 años d) 5 a 7 años e) 8 a 10 años f) Otro. Especifique_
12. ¿EXISTE ALGÚN MIEMBRO EN TU FAMILIA (MAMÁ, PAPÁ, TÍOS, PRIMOS, ETC.)
QUE CONSUME SUSTANCIAS PSICOACTIVAS?:
a) Si b) No
13. ¿COMO CATALOGAS A TU FAMILIA?:
a) Funcional b) Disfuncional c) Otra. Especifique___________________
14. TIEMPO QUE LLEVA EN TERAPIA PSICOLÓGICA EN EL SERVICIO
AMBULATORIO INTENSIVO:
a) Menos de 1 mes b) 1 a 3 meses c) 3 a 6 meses d) 6 a 9 meses e) 9 meses a 1 año f) Más de 1 año

149
Inventario de Satisfacción Sexual

FICHA TÉCNICA

 Nombre: Inventario de Satisfacción Sexual


 Autor: Juan Luis Álvarez-Gayou Jurgenson y cols. (2006)
 Adaptación: Vargas Pérez Norma Haydeé y Vásquez Díaz Keylith Margarita (2009)
 Objetivo: Evaluar la satisfacción sexual en hombres y mujeres dentro de los niveles
(muy alto, alto, medio y bajo) y categorías (afectivo bienestar, erotismo, respeto y
responsabilidad, estímulos sensoriales y comunicación)
 Administración: Individual, colectiva y autoaplicable.
 Duración: Variable (promedio 30 minutos)
 Significación: Evalúa la Satisfacción Sexual en base a 6 factores y en niveles de
satisfacción sexual.
 Usos: Clínico y en investigaciones.
 Aplicación: Hombres de 18 a 65 años.
 Puntuación: Calificación manual.
 Total, de ítems: 29
Instrucciones: A continuación, se presenta una serie de frases las cuales debes leer y
responder de acuerdo con tu forma de actuar y sentir más frecuente en tus relaciones
sexuales. SI NO PUEDES contestar una pregunta o si la pregunta no tiene sentido para ti, por
favor pregúntale a la persona que te entregó ese material y te explicará la importancia.
En
La mayoría ocasiones si Pocas
Ítem Siempre Nunca
de las veces y en otras veces
no
1. Durante la relación sexual doy y
5 4 3 2 1
me dan besos
2. Recibo y doy muchas caricias
5 4 3 2 1
durante mis relaciones sexuales
3. Disfruto mucho el acariciar a mi
5 4 3 2 1
pareja durante la relación sexual
4. Siento mucho cariño por parte
5 4 3 2 1
de mi pareja en la relación sexual
5. Disfruto mucho recibir caricias
de mi pareja durante la relación 5 4 3 2 1
sexual
6. En mis relaciones sexuales tengo
muchos sentimientos positivos
5 4 3 2 1
hacia mi pareja y los recibo
también
7. Siento y tengo mucha confianza
5 4 3 2 1
con mi pareja
8. En mis relaciones sexuales
siento que me importa mucho la 5 4 3 2 1
otra persona y que le importo a ella

150
9. En mis relaciones sexuales tengo
5 4 3 2 1
orgasmos
10. Tenemos tiempo suficiente
5 4 3 2 1
para nuestras relaciones sexuales
11. La frecuencia con la que tengo
5 4 3 2 1
relaciones sexuales me satisface
12. Me siento satisfecho(a) después
5 4 3 2 1
de tener relaciones sexuales
13. En mis relaciones sexuales me
5 4 3 2 1
siento libre
14. Las relaciones sexuales que
5 4 3 2 1
tengo son apasionadas
15. En mis relaciones sexuales
5 4 3 2 1
siento erotismo propio
16. En mis relaciones sexuales me
5 4 3 2 1
siento seducido(a)
17. Mis relaciones sexuales son
5 4 3 2 1
placenteras
18. En mis relaciones sexuales
5 4 3 2 1
siento erotismo en la pareja
19. Se da una entrega total en mí y
5 4 3 2 1
mi pareja
20. En mis relaciones sexuales se
5 4 3 2 1
da el respeto
21. Siento respeto mutuo en las
5 4 3 2 1
relaciones sexuales
22. Me parece que mi pareja actúa
en forma responsable durante las 5 4 3 2 1
relaciones sexuales
23. Son importantes los olores
5 4 3 2 1
durante mis relaciones sexuales
24. Son importantes en mis
5 4 3 2 1
relaciones sexuales los sabores
25. La masturbación contribuye a
5 4 3 2 1
mi satisfacción sexual
26. Ver a mi pareja desnuda, y yo
estarlo, es importante para disfrutar 5 4 3 2 1
de una relación sexual
27. Me cuesta trabajo aceptar que
mi pareja me diga lo que le gusta y 5 4 3 2 1
no durante la relación sexual
28. Planeamos nuestras relaciones
5 4 3 2 1
sexuales
29. En mis relaciones sexuales
expreso lo que me gusta y no 5 4 3 2 1
durante la relación sexual

151
Encuesta revisada de opinión sexual (EROS)

FICHA TÉCNICA

 Nombre: Encuesta revisada de opinión sexual (EROS)


 Autor: Fisher, Byrne, White y Kelley (1998)
 Adaptación: Del Río, López, & Cabello (2013)
 Objetivo: Medir los constructos de erotofilia, erotofobia, homofobia y sexo no
convencional para determinar la disposición actitudinal positiva o negativa hacia la
sexualidad.
 Administración: Individual, colectiva y autoaplicable.
 Duración: Variable (promedio 30 minutos)
 Significación: Evalúa las actitudes hacia la sexualidad en base a 4 factores.
 Usos: Clínico y en investigaciones.
 Aplicación: Hombres de 18 a 65 años.
 Puntuación: Calificación manual.
 Total, de ítems: 20

Instrucciones: por favor, responda a cada una de las siguientes preguntas, con sinceridad. A

continuación, encontrará una serie de afirmaciones sobre diferentes aspectos de la sexualidad:

Totalme Mediana
En Sin Medianame De Totalment
nte en mente en
desacuer opini nte de acuer e de
desacuer desacuer
do ón acuerdo do acuerdo
do do
1. Pienso que ver una película
o leer un libro con contenido
erótico/sexual podría ser
1 2 3 4 5 6 7
entretenido.
2. El material erótico (libros
y/o películas) de contenido
sexual es algo sucio y la gente
1 2 3 4 5 6 7
no debería utilizarlo.
3. Bañarse desnudo/a con una
persona del mismo u otro sexo
podría ser una experiencia
1 2 3 4 5 6 7
excitante.
4. La masturbación puede ser
una experiencia excitante.
1 2 3 4 5 6 7
5. Sería agobiante para mí que
la gente pensara que tengo 1 2 3 4 5 6 7
interés por el sexo oral.
6. Me atrae la idea de
participar en una experiencia 1 2 3 4 5 6 7
sexual en grupo.

152
7. Me resulta excitante pensar
en tener una relación sexual 1 2 3 4 5 6 7
con penetración.
8. Me excitaría sexualmente
viendo una película de 1 2 3 4 5 6 7
contenido sexual.
9. Pensar que puedo tener
tendencias sexuales distintas a
la de mi propia orientación no 1 2 3 4 5 6 7
me resultaría del todo
embarazoso.
10. No me resulta incomoda la
idea de sentir atracción física
por personas de mi propio
1 2 3 4 5 6 7
sexo.
11. Casi todo el material
erótico me produce 1 2 3 4 5 6 7
incomodidad.
12. Me sentiría
emocionalmente mal viendo a
alguien exhibirse
1 2 3 4 5 6 7
públicamente.
13. No sería una experiencia
muy excitante ver a una 1 2 3 4 5 6 7
persona desnuda.
14. No me agradaría ver una
película erótica.
1 2 3 4 5 6 7
15. Me incomoda pensar que
puedo ver una película en la
que aparezca masturbándose
1 2 3 4 5 6 7
una persona.
16. Es muy excitante imaginar
prácticas sexuales poco 1 2 3 4 5 6 7
comunes.
17. Probablemente sería una
experiencia excitante acariciar 1 2 3 4 5 6 7
mis propios genitales.
18. No me agrada tener sueños
sexuales.
1 2 3 4 5 6 7
19. No siento ninguna
curiosidad por el material de
contenido sexual (libros,
1 2 3 4 5 6 7
revistas, películas, vídeos).
20. No me disgusta imaginar
que tengo relaciones sexuales 1 2 3 4 5 6 7
con más de una persona.

153
Anexo C. Matriz de consistencia

Título de la tesis: Satisfacción sexual y actitudes hacia la sexualidad en personas consumidoras de sustancias psicoactivas en un Centro de Salud del D.M.Q.

Preguntas de Procedimientos de
Objetivos Hipótesis Procedimiento de análisis de
Investigación recolección de Variables Instrumentos
datos
Pregunta general Objetivo general Hipótesis general datos
Y para identificar el tipo de 1. Escala
¿Cuáles son los niveles estadígrafo que se utilizó para Los instrumentos y autoaplicable
Relacionar la satisfacción sexual
de satisfacción sexual que A mayores niveles de la correlación de las variables encuesta son de V1 Satisfacción para la
y las actitudes hacia la
se relacionan en mayor satisfacción sexual, mayores se aplicó la prueba de naturaleza auto Sexual evaluación de la
sexualidad en personas
grado con alguna de las actitudes positivas hacia la normalidad de Kolmogorov- aplicable, por lo satisfacción
consumidoras de sustancias
actitudes hacia la sexualidad en personas Smirnov, nivel de interacción, cual se tomará los sexual (2006)
psicoactivas del Servicio
sexualidad en personas consumidoras de sustancias relación lineal y puntuación Z, mismos durante el
Ambulatorio Intensivo del V2 Actitudes 2.Encuesta revisada
consumidoras de psicoactivas. por lo tanto, se aplicó la espacio de las dos
Centro de Salud de Chimbacalle. hacia la de opinión sexual
sustancias psicoactivas? prueba de Coeficiente terapias grupales
sexualidad “EROS” (2013)
Correlación de Spearman (grupo de 10 a 30
pacientes) con una Tipo-Método de
Procedimiento de análisis de duración de 30 a 45 muestreo y
Preguntas específicas Objetivos específicos Hipótesis específicas Metodología
datos minutos por grupo, Tamaño de la
los mismos que se muestra
tomaran los días
jueves dentro de dos
Se utilizará el tipo de
horarios, de 10am a
muestreo No
1. ¿Qué niveles de 12pm y de 3pm a 5
1. Describir los niveles de Probabilístico
satisfacción sexual tienen pm; también se
satisfacción sexual en personas intencional o de
las personas Frecuencias y porcentajes. aplicará los Enfoque:
consumidoras de sustancias conveniencia. Se
consumidoras de reactivos de forma Cuantitativo
psicoactivas. estima que la
sustancias psicoactivas? individual en cada Diseño: No
muestra a investigar
sesión psicológica experimental -
será
con un tiempo de 30 transversal -
aproximadamente
a 45 minutos por correlacional
de 80 pacientes,
3. ¿Cuáles son las persona, los mismos
3. Describir las actitudes hacia la entre el mes de
actitudes hacia la que se aplicaran de
sexualidad en personas agosto al mes de
sexualidad en personas Frecuencias y porcentajes. lunes a viernes de
consumidoras de sustancias septiembre.
consumidoras de 10:30am a 3:30pm.
psicoactivas.
sustancias psicoactivas?

154
Anexo D. Documento de autorización de la institución donde se realizará la investigación

155
Anexo E. Consentimiento Informado
CONSENTIMIENTO INFORMADO

Fecha: _________ Hora: ________

Sr. ………………………………………………………………, mayor de edad, de ….... años,


manifiesto que he sido informado/a sobre el estudio “Satisfacción sexual y actitudes hacia la
sexualidad en personas consumidoras de sustancias psicoactivas en un Centro de Salud del
D.M.Q”. Dirigido por la estudiante Pamela Michelle Ortiz Orellana de la Facultad de Ciencias
Psicológicas de la Universidad Central del Ecuador.

He facilitado la información completa que conozco, y me ha sido solicitada, sobre los antecedentes
personales, familiares y de mi estado de salud. Soy consciente de que omitir estos datos puede
afectar los resultados de la investigación. Estoy de acuerdo con el proceso que se me ha propuesto;
se me ha explicado de forma clara en qué consiste. He escuchado, leído y comprendido la
información recibida y se me ha dado la oportunidad de preguntar sobre la investigación. He
tomado consciente y libremente la decisión de autorizar mi participación. Consiento que, durante
la investigación, me remitan al profesional de salud permitente en caso de ser considerado
necesario según el juicio del profesional de la salud, para mi beneficio. También conozco que
puedo retirar mi consentimiento cuando lo estime oportuno.

Nombre completo del paciente:

Cédula de ciudadanía:

Firma del paciente o huella:

156
Anexo F. Declaración de confidencialidad
Yo, Pamela Michelle Ortiz Orellana, portador/a de la Cédula de Identidad No. 1721963328, en mi

calidad de investigadora. Dejo expresa constancia de que he proporcionado de manera veraz y

fidedigna toda la información referente a la presente investigación; y que utilizaré los datos e

información que recolecté para la misma. Así como cualquier resultado que se obtenga de la

investigación EXCLUSIVAMENTE para fines académicos.

Además, soy consciente de las implicaciones legales de la utilización de los datos, información y

resultados recolectados o producidos por esta investigación con cualquier otra finalidad que no sea

la estrictamente académica y sin el consentimiento informado de los pacientes.

En fe y constancia de aceptación de estos términos, firmo como Autor/a de la investigación

NOMBRE DEL CÉDULA DE IDENTIDAD FIRMA


INVESTIGADOR
Pamela Michelle Ortiz 1721963328
Orellana

Quito, 27 de junio de 2019

157
Anexo G. Declaración de conflicto de intereses – investigadora

UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR


FACULTAD DE CIENCIAS PSICOLÓGICAS
PSICOLOGÍA CLÍNICA

Declaración de conflicto de intereses

La abajo firmante, autora de la investigación “Satisfacción sexual y actitudes hacia la sexualidad

en personas consumidoras de sustancias psicoactivas en un Centro de Salud del D.M.Q”, declara

no tener ningún tipo de conflicto de intereses, ni ninguna relación económica, personal, política,

interés financiero ni académico que pueda influir en su juicio.

Declara, además, no haber recibido ningún tipo de beneficio monetario, bines ni subsidios de

alguna fuente que pudiera tener interés en los resultados de esta investigación.

Pamela Michelle Ortiz Orellana Fecha

C.I. 1721963328

158
Anexo H. Declaración de conflicto de intereses – tutor

UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR


FACULTAD DE CIENCIAS PSICOLÓGICAS
PSICOLOGÍA CLÍNICA

Declaración de conflicto de intereses

Yo Estuardo Paredes, tutor de la investigación “Satisfacción sexual y actitudes hacia la

sexualidad en personas consumidoras de sustancias psicoactivas en un Centro de Salud del

D.M.Q”, declaro no tener ningún tipo de conflicto de intereses, ni ninguna relación económica,

personal, política, interés financiero ni académico que pueda influir en su juicio.

Declaro, además, no haber recibido ningún tipo de beneficio monetario, bines ni subsidios de

alguna fuente que pudiera tener interés en los resultados de esta investigación.

MSc. Estuardo Paredes Fecha

C.I. 1709566341

159
Anexo I. Idoneidad ética

UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR


FACULTAD DE CIENCIAS PSICOLÓGICAS
PSICOLOGÍA CLÍNICA

Yo, Estuardo Paredes con CI 1709566341, docente de la Facultad de Ciencias Psicológicas de la

Universidad Central del Ecuador, con 15 años de experiencia como docente, he tutorado más de

30 tesis de pregrado, certificando la capacidad de tutorar a la señorita Pamela Michelle Ortiz

Orellana en el presente estudio “Satisfacción sexual y actitudes hacia la sexualidad en personas

consumidoras de sustancias psicoactivas en un Centro de Salud del D.M.Q”.

Estuardo Paredes Fecha

C.I. 1709566341

160
Anexo J. Experticia del Investigador

UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR


FACULTAD DE CIENCIAS PSICOLÓGICAS
PSICOLOGÍA CLÍNICA

Yo, Pamela Michelle Ortiz Orellana, con CI 1721963328, estudiante de la carrera de Psicología

Clínica de la Universidad Central del Ecuador, realizo por primera vez una investigación de este

tipo, sin embargo, cuento con los conocimientos teóricos bastos para emprender el mismo.

Pamela Michelle Ortiz Orellana Fecha

C.I. 1721963328

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