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Ley Orgánica de Drogas

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Universidad de Carabobo

Facultad de Ciencias de la Salud

Escuela de Medicina “Dr. Witremundo Torrealba”

Medicina Legal

Ley
Bachiller(es):

Orgáni Rodríguez, Aurenis


Rodríguez, Alicia

ca de
Rojas, Milagros
Rojas, Andrea
Prof. Jesus Valero Rojas, Nesver
Romero, Luz

Drogas Marzo, 2020

Ley Orgánica de Drogas

En el presente trabajo se realizaran análisis de los diferentes artículos presentes en la Ley


Orgánica de Drogas, y la relevancia que estas tienen a nivel del área de salud.
En los artículos 1 y 2, se establecen los objetivos y las aplicaciones de esta ley, en donde se
van a describir las medidas de control, vigilancia y fiscalización de los estupefacientes,
sustancias químicas y/o psicotrópicas determinadas por la Republica, que pueden ser
destinadas a la creación de drogas ilícitas y a su posterior tráfico. También se van a
describir las medidas de seguridad social para las personas que hacen uso de estos
estupefacientes, sustancias químicas y/o psicotrópicas, siempre y cuando sean de
consumo personal.

En el artículo 3 se definen diferentes conceptos que permiten interpretar esta ley, siendo
de vital importancia establecer las diferencias entre droga, estupefaciente, sustancia
química y sustancia psicotrópica, entiéndase a droga como “toda sustancia que
introducida en el organismo por cualquier vía de administración pueda alterar de algún
modo el sistema nervioso central del individuo y es además susceptible de crear
dependencia”; mientras que estupefacientes es cualquier sustancia que se encuentre en
la lista de la Convención Única de 1961, Sobre Estupefacientes, Enmendada por el
Protocolo de 1972. Las sustancias químicas son químicos esenciales, productos químicos o
precursores que se utilizan para la fabricación de drogas licitas e ilícitas, y las sustancias
psicotrópicas son aquellas que se encuentran las listas del Convenio sobre Sustancias
Psicotrópicas de 1971, aprobado por las Naciones Unidas.

Los artículos 4 al 9 definen el órgano rector, la Oficina Nacional Antidrogas, dependiente


del Ministerio del Poder Popular de Interior y Justicia, que está encargada de establecer y
ejecutar las políticas públicas y estrategias contra el tráfico ilícito y uso inapropiado de
drogas, coordinación nacional de la prevención del consumo de drogas ilícitas, así como
también el tratamiento y rehabilitación de los consumidores de drogas, en coordinación
con el Ministerio del Poder Popular para la Salud, ya que estos entes deberán someterse a
lo establecido en las resoluciones emanadas por dicho Ministerio, de lo contrario deberán
pagar una multa entre 100-200 Unidades Tributarias.

Este órgano establecerá oficinas antidrogas en los estados y municipios del país que
deberán recibir información y datos por parte de los entes y organizaciones, ya sean
aquellos encargados del tratamiento y rehabilitación, así como aquellos encargados de la
fiscalización y control. Aquí entran los entes de salud como los hospitales y clínicas, que
pueden recibir pacientes que se encuentren consumiendo drogas ilícitas o que se
encuentren en un estado de sobredosis medicamentosa.

Los artículos 10 al 26 explica la prevención del consumo de drogas ilícitas, la cual es de


interés de toda la población. Las medidas de prevención serán implementadas por el
órgano rector en coordinación con el Estado, el cual creara una Sistema público de
atención y tratamiento de las adicciones de acuerdo con las características del paciente,
su familia y entorno social. Se establecerán centros de rehabilitación que deberán
encontrarse en cada estado del país así como en los centros penitenciaros, de manera que
deberán educar y capacitar al personal trabajador. Esta capacitación también esta descrita
para la población que se encuentra en los institutos militares y policiales. Es importante la
educación y capacitación al personal de salud sobre los distintos programas y proyectos
dedicados a la prevención del consumo y tráfico de drogas ilícitas, lo que no se encuentra
descrito explícitamente en esta ley. El Estado también distribuirá el 25% de las donaciones
para estos programas en cada estado del país.

Es trabajo de los órganos y entes de la Administración Publica la creación de grupos que se


encarguen de la prevención integral del consumo de drogas, a través de una unidad
administrativa que sea capaz de atender al personal que labora en estos entes y a su
entorno familiar; y a través de comités integrado por personal capacitado; los entes
privados también pueden crear comités laborales para así establecer proyectos de
prevención.

Es importante que el Estado y el órgano rector sean capaces de garantizar la protección y


anonimato de las personas en los centros de rehabilitación, y de que posterior a su
tratamiento, puedan reintegrarse a la sociedad, coordinando que las empresas e
instituciones les brinden trabajo a estas personas.

El Ministerio del Poder Popular para la Educación junto con el de Salud deberán diseñar
programas educativos sobre prevención para capacitar a los educadores en todas las
áreas, sobretodo en el área de salud. También se incluirán todo lo relacionado a la
prevención del consumo de drogas en el pensum académico, realizando campañas
dirigidas a toda la población estudiantil, así como al entorno social y familiar de los
estudiantes.

Los artículos 27 al 29 establecen que es trabajo de la Fuerza Armada Nacional, los servicios
de aduana, la Policía Nacional y Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y
Criminalísticas, la prevención y, si se presentara, la represión del tráfico de drogas
mediante un plan de seguridad y defensa que permita vigilar y controlar las áreas que se
encuentran más vulnerables como las zonas fronterizas.

En los artículos 30 al 33 se indican la creación de proyectos de prevención tanto a nivel


laboral como social, los cuales tienen que ser realizados por los comités o personal
capacitado, con previo registro, presentación y aprobación por el órgano rector, para así
obtener financiamiento del Fondo Nacional Antidrogas, el cual va a distribuir el fondo
monetario en proyectos de prevención para los trabajadores y su entorno familiar (40%),
para los niños, niñas y adolescentes (25%), contra el tráfico de drogas (25%) y para los
costos operativos del Fondo Nacional Antidrogas. Cabe destacar que toda empresa ya sea
pública o privada, debe aportar 1% de su ganancia o utilidad a este fondo.

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