Clases Lecciones-16p
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Se trata de tres elementos ―el ruido del viento, las lenguas de fuego, el
carisma del lenguaje―, ricos por su valor simbólico, que conviene tener
presente. A la luz de estos elementos se comprende mejor qué pretende
decir el autor de los Hechos cuando afirma que los presentes en el
Cenáculo “quedaron todos llenos del Espíritu Santo”.
En particular, el soplo del viento es la expresión del poder divino que saca
del caos el orden de la creación (Gén 1:2). Y es también la expresión de
la libertad del Espíritu: “EI viento sopla donde quiere, y oyes su voz, pero
no sabes de dónde viene ni a dónde va” (Jn 3:8).
Pero también es simbólico porque las personas, que son “de Galilea” y por
tanto capaces de servirse en la lengua o dialecto de su propia región,
hablan “en otras lenguas” de manera que, en la muchedumbre reunida
rápidamente en torno al Cenáculo, cada uno oye “la propia lengua”,
aunque se encontraban representados en ella diferentes pueblos (Hech 2:
6).
A. PROPIEDADES PERSONALES.
2. El posee voluntad. "Pero todas estas cosas las hace uno y el mismo Espíritu,
repartiendo a cada uno en particular como él quiere." (I Corintios 12:11)
3. El posee poder. "Y el Dios de esperanza os llene de todo gozo y paz en el creer,
para que abundéis en esperanza por el poder del Espíritu Santo... con potencia de
señales y prodigios, en el poder del Espíritu de Dios; de manera que, desde
Jerusalén, y por los alrededores hasta Ilírico, todo lo he llenado del evangelio de
Cristo." (Romanos 15:13-19) Véanse: Zacarías 4:6; Isaías 11:2; Efesios 3:16.
4. El posee conocimiento. "Pero Dios nos las reveló por el Espíritu; porque el Espíritu
todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios. Porque ¿quién de los hombres sabe las
cosas del hombre, sino el espíritu del hombre que está en él? Así tampoco nadie
conoció las cosas de Dios, sino el Espíritu de Dios. Y nosotros no hemos recibido el
espíritu del mundo, sino el Espíritu que proviene de Dios, para que sepamos lo que
Dios nos ha concedido." (I Corintios 2:10-12)
5. Él es la fuente del amor cristiano. "Pero os ruego, hermanos, por nuestro Señor
Jesucristo y por el amor del Espíritu, que me ayudéis orando por mí a Dios."
(Romanos 15:30)
B. PRONOMBRES PERSONALES.
C. ACTOS PERSONALES.
¿Por qué nosotros actuamos como seres humanos? Porque somos humanos. ¿Por
qué el Espíritu Santo actúa como una persona? Porque Él es una persona.
2. El intercede. "y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues
qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo
intercede por nosotros con gemidos indecibles." (Romanos 8:26)
4. Él ordena. "Y atravesando Frigia y la provincia de Galacia, les fue prohibido por
el Espíritu Santo hablar la palabra en Asia; y cuando llegaron a Misia, intentaron ir
a Bitinia, pero el Espíritu no se lo permitió." (Hechos 16:6,7)
5. El supervisa. "Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el rebaño en que el
Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la iglesia del Señor, la cual
él ganó por su propia sangre." (Hechos 20:28)
D. REACCIONES PERSONALES.
Pueden cometerse actos contra el Espíritu Santo que solamente pueden cometerse
contra una persona. Él tiene sentimientos.
1. Él puede ser contristado. "Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios con el cual
fuisteis sellados para el día de la redención." (Efesios 4:30)
2. Él puede ser enojado. "Mas ellos fueron rebeldes, e hicieron enojar su Santo
Espíritu; por lo cual se les volvió enemigo, y él mismo peleó contra ellos." (Isaías
63:10)
3. Él puede ser tentado. "Y Pedro le dijo: ¿Por qué convinisteis en tentar al Espíritu
del Señor? He aquí a la puerta los pies de los que han sepultado a tu marido, y te
sacarán a ti." (Hechos 5:9)
5. Él puede ser blasfemado. "Pero cualquiera que blasfeme contra el Espíritu Santo,
no tiene jamás perdón, sino que es reo de juicio eterno. Porque ellos habían dicho:
Tiene espíritu inmundo." (Marcos 3:29-30)
E. RELACIONES PERSONALES.
1. Con el Padre. "Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones,
bautizándoles en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo." (Mateo
28:19)
2. Con Cristo. "El me glorificará; porque tomará de lo mío, y os lo hará saber." (Juan
16:14)
F. DESIGNACIONES PERSONALES.
2. Otras especificaciones.
"Jesús" del nuevo testamento es "Jehová" del antiguo testamento. El Espíritu Santo
del nuevo testamento es el Jehová del antiguo testamento. "Pero este es el pacto
que haré con la casa de Israel después de aquellos días, dice Jehová: Daré mi ley
en su mente, y la escribiré en su corazón; y yo seré a ellos por Dios, y ellos me
serán por pueblo." (Jeremías 31:33)
Compárese: Heb. 10:14-16. "Porque con una sola ofrenda hizo perfectos para
siempre a los santificados. Y nos atestigua lo mismo el Espíritu Santo; porque
después de haber dicho: Este es el pacto que haré con ellos después de aquellos
días, dice el Señor: Pondré mis leyes en sus corazones, y en sus mentes las
escribiré." Este texto cita al anterior, intercambiando los nombres "Espíritu Santo" y
"el Señor" por el nombre "Jehová."
B. EL ES LLAMADO DIOS.
1. En Hechos 5:3-4. "Y Pedro dijo: Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para
que mintieses al Espíritu Santo, y sustrajeses del precio de la heredad? ... No has
mentido a los hombres, sino a Dios." Ananías y Safira murieron instantáneamente
por haber mentido al Espíritu Santo. Ellos mintieron en el tiempo de la consagración.
No fueron heridos de muerte por haber retenido su dinero, sino porque declararon
haberlo dado todo. Mintieron al Espíritu Santo, y por lo tanto a Dios.
2. En I Corintios 3:16. "¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de
Dios mora en vosotros?" Somos templo de Dios debido a que el Espíritu de Dios
mora dentro de nosotros.
5. Amor. "Pero os ruego, hermanos, por nuestro Señor Jesucristo y por el amor del
Espíritu, que me ayudéis orando por mí a Dios." (Romanos 15:30)
6. Santidad. "Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados
para el día de la redención." (Efesios 4:30)
1. Creación. "En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Y la tierra estaba
desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu
de Dios se movía sobre la faz de las aguas." (Génesis 1:1-2) "Envías tu Espíritu,
son creados, y renuevas la faz de la tierra." (Salmos 104:30) "El Espíritu de Dios me
hizo, y el soplo del Omnipotente me dio vida." (Job 33:4)
3. Resurrección. "Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora
en vosotros, el que levantó de los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros
cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros." (Romanos 3:11)
"Pero todas estas cosas las hace uno y el mismo Espíritu, repartiendo a cada uno
en particular como él quiere." (I Corintios 12:11) Véase: Zacarías 4:6.
1. Como lo establece la Gran Comisión. "Y Jesús se acercó y les habló diciendo:
Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. Por tanto, id, y haced discípulos
a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu
Santo;" (Mateo 28:18-19)
3. Como lo establece la designación bíblica. "El que tiene oído, oiga lo que el
Espíritu dice a las iglesias." (Apocalipsis 3:22)
"Y dijo Pedro: Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para que mintiese al
Espíritu Santo, y sustrajeses del precio de la heredad? (Hechos 5:3)
LEDCCION No. 4 DEL SABADO 29-08-20
¿ES EL ESPIRITU SANTO UNA TERCERA PERSONA PARA FORMAR UNA
TRINIDAD?
Como sucede con cualquier doctrina bíblica, es preciso que profundicemos en las
Escrituras a fin de descubrir la verdad eterna. Una lectura superficial nos llevará, sin
duda, a un falso entendimiento.
¿Una Tercera Persona? En las Escrituras encontramos que Yahveh (el Padre) y
Yahshua (el Hijo) son dos personas; por tanto, Yahshua no es Yahveh, sino que son
dos seres totalmente diferentes. Puesto que el Padre es Yahveh y el Hijo no lo es,
eso significa que el Padre y el Hijo deben ser dos personas aparte, dos seres
diferentes. Por lo tanto, el concepto de una trinidad (tres personas co-iguales y co-
eternas, por así decirlo, que forman la Divinidad), no es la verdad eterna.
El concepto triuno del Espíritu Santo, como persona aparte del Padre y del Hijo,
aunque al mismo tiempo formando la Deidad, es realmente un misterio. Es un
misterio tal que aquellos que están a favor de esta idea tampoco lo pueden explicar.
De manera que, comencemos haciendo unas cuantas preguntas:
1.- Si el Padre es una persona aparte del Hijo, y el Espíritu Santo es una persona
aparte de ellos, entonces, ¿quién es el padre del Mesías?
Mateo 1:18-20 dice: "El nacimiento de Yahshua el Mesías fue así: su madre María
estaba desposada con José, y antes de que se unieran se halló que ella había
concebido del Espíritu Santo. José su marido, como era justo y no quería difamarla,
se propuso dejarla secretamente. Mientras él pensaba en esto, he aquí un ángel de
Yahveh se le apareció en sueños y le dijo: ‘José, hijo de David, no temas recibir a
María tu mujer, porque lo que ha sido engendrado en ella es del Espíritu Santo.’”
2.- ¿Por qué no invoca el Apóstol Pablo al Espíritu manera que invoca al Padre y al
Hijo? Esto parecería un tanto ofensivo para el Espíritu Santo si fuese una persona
de igual categoría.
3.- ¿Por qué no se presenta nunca al Espíritu Santo como si estuviese sentado o
de pie cerca del trono como lo están el Padre y el Hijo? (Ver Hechos 7:55, 56; Col.
3:1; y Apocalipsis 5:1-9; 7:10). Ni siquiera vemos un trono vacío referido también
para él.
4.- En 1 Corintios 11:3 se ofrece un relato en el que la jerarquía: los hombres, las
mujeres y el Mesías cada uno tiene posición, por así decirlo, una categoría
juntamente con Yahveh, el Padre, siendo Dios la suprema autoridad, pero
preguntamos: ¿en dónde está el Espíritu Santo, como tercera persona, en vista de
que no se lo menciona?
5.- Efesios 5:5 nos dice que el "reino" que habrán de heredar los creyentes es "de
Cristo" y "de Dios". ¿Por qué no es el reino también del Espíritu Santo?
6.- El Padre y el Hijo hablan entre sí, pero ¿por qué no lo hacen con el Espíritu
Santo?
7.- ¿Por qué el Hijo de Dios sólo se refiere a dos testigos en Juan 8:15-18 y 15:23,
así como el apóstol Pablo sólo invoca a dos seres divinos y luego pasa a los ángeles
en 1 Timoteo 5:21 y 6:13-16?
Esas son tan solo unas pocas de las muchas preguntas que surgen si el Espíritu
Santo es realmente una persona distinta al Padre y al Hijo. Pero existen, sin
embargo, varios puntos que pueden dar cierto apoyo a la creencia de que el Espíritu
Santo es una persona. Examinemos unos pocos de ellos. Pero antes, respondamos
otras importantes preguntas:
Ahora bien, el Espíritu Santo, ¿tiene espíritu? Algunos dicen que sí, en tanto otros
dicen que no. Y, ¿qué dice la Escritura? “El Espíritu Santo de Dios.” (Efesios 4:30.)
En ninguna parte de la Biblia se encuentra que diga “el Espíritu del Espíritu Santo.”
¿Por qué es así? ¿Será porque el Espíritu Santo es el Espíritu de Dios Padre y de
Su unigénito Hijo? Como claramente establece la Escritura, el Padre tiene un
Espíritu, y Su Hijo tiene un Espíritu, no obstante “hay un sólo Espíritu.” (1 Corintios
12:8, 11; Efesios 4:4).
Sabemos que Dios Padre tiene un Espíritu, ¿y puede ese Espíritu ser algo menos
que Santo? El término “Santo” es un adjetivo. “Santo Espíritu” no es un nombre
propio, sino la descripción del Espíritu de Dios. Sabemos que Dios Padre tiene un
nombre propio, que es “YHWH” conocido como Yahveh, y el nombre propio de Su
único Hijo es “Yahshua”. Cabe preguntar, ¿cuál es el nombre propio del Espíritu
Santo? No lo tiene si se tratara de alguien distinto.
Los Atributos Personales: Se dice que el Espíritu Santo posee atributos de persona
y que, por lo tanto, es una persona. Entre unos cuantos de estos atributos está el
hecho de que el Espíritu Santo examina las cosas profundas de Dios (1 Cor. 2:10),
habla (Apo. 2:7) clama (Gál. 4:6), intercede (Rom. 8:26), da testimonio (Juan 15:26),
nos guía o dirige (Rom. 8:14), nos manda (Hechos 16:6, 7), se le puede mentir
(Hechos 5:3), se le puede contristar (Efe. 4:30), etc., etc.
Sin embargo, el Espíritu Santo también tiene atributos que no se pueden aplicar a
una persona; es decir, llena a las personas (Hechos 2:4), puede ser derramado
(Hechos 2:17, 18), está sobre los pueblos (Hechos 19:6), las personas lo pueden
beber (1 Cor. 12:13), es como un primer pago (2 Cor. 1:22), es un sello (Efe. 1:13),
es un eslabón simbólico (2 Cor. 3:3), etc. etc. Para explicar esto, queremos llamar
su atención al pasaje que se encuentra en Romanos 8:9, 10: "Sin embargo, vosotros
no vivís según la carne, sino según el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios mora en
vosotros. Si alguno no tiene el Espíritu del Mesías, no es de él. Pero si Cristo está
en vosotros, aunque el cuerpo está muerto a causa del pecado, no obstante, el
Espíritu vive a causa de la justicia."
El Espíritu de Cristo mora en nosotros, pero el versículo 10 nos dice que es Cristo
mismo. Esto es algo que también se aplica al Espíritu de Yahveh, el Padre. Son la
mente, los afectos y la voluntad del Todopoderoso Yahveh. De modo que los
atributos personales del Espíritu Santo son los de Yahveh y Yahshua morando en
nosotros con sus personalidades y disposiciones. Yahveh le ha concedido a Cristo
toda la plenitud del Espíritu Santo (Juan 3:34; Col. 1:19).
Ahora que Cristo ha sido glorificado gracias a la resurrección, el Espíritu que tiene
es el de Su Padre y no el suyo propio. Sus Espíritus han quedado unidos en uno y
son también introducidos en los creyentes no en toda su plenitud. Por otro lado,
puesto que el Espíritu posee atributos que no son personales, eso es algo que
debiéramos atribuir a que el Espíritu Santo es la gloria y el poder de Yahveh. "Y si
el Espíritu de Aquel que resucitó a Yahshua de entre los muertos mora en vosotros,
el que resucitó a Cristo de entre los muertos también dará vida a vuestros cuerpos
mortales mediante su Espíritu que mora en vosotros." (Romanos 8:11). "Pues como
Dios levantó a Cristo, también a nosotros nos levantará por medio de su poder." (1
Corintios 6: 14). "Y cual la inmensurable grandeza de su poder para con nosotros
los que creemos, conforme a la operación del dominio de su fuerza, Dios la ejerció
en Cristo cuando lo resucitó de entre los muertos y le hizo sentar a su diestra en los
lugares celestiales." (Efesios 1:19-20).