01.3 Quiasmo y Profecía
01.3 Quiasmo y Profecía
01.3 Quiasmo y Profecía
Es muy interesante aprender algo nuevo, para poder entender, tal vez, algo nuevo.
Al momento de leer, muy pocas veces miramos la estructura del texto en cuestión.
Lo más normal es que leamos textos que tienen una Introducción, luego, un
Desarrollo y un Final, o que primero desarrolla todo lo que se quiere exponer y
después termina con las conclusiones.
¿Alguna vez te dieron un regalo tan bien empaquetado que tuviste que desarmar
varias cosas antes para llegar a eso que te querían regalar?
Otra pista:
1 2 3 4 3 2 1 Es un número capicúa
La primera parte del libro se corresponde con la última, lo más importante del
mensaje es lo que está en el medio.
Para aprender un poco más, vamos a ver un ejemplo con el Capítulo 7 de Daniel,
"La profecía de las Naciones y el Rey de los Siglos", y para que sea más rápido el
aprendizaje, las imágenes nos van a ayudar; con este esquema, que divide al
capítulo en 7 secciones, vas a poder entender no solo la estructura quiásmica de
este capítulo sino aprender cuál es el mensaje que el profeta nos quiere dar con
esta profecía (No te olvides que lo del medio es lo más importante).
Aclaraciones previas: las profecías apocalípticas necesitan claves para poder ser
interpretadas y están dirigidas a todas las generaciones por medio de símbolos, tal
como es el caso de Daniel capítulo 7. Algunos significados: bestias → Poderes de
tipo gobernantes. cuernos→ poder que gobierna (ver Zacarías 1:18 y Lucas 1:69).
Quiasmo y profecía: Daniel 7
A) Detalles de la visión y descripción de las tres primeras bestias: León con alas
(Babilonia, Daniel 7:4), Oso con un lado levantado (Medo-Persia, Daniel 7:5),
leopardo con 4 cabezas y 4 alas de ave (Grecia, Daniel 7:6) (El imperio Greco a la
muerte de Alejandro se constituyó en 4 sub-imperios)
C) Descripción del cuerno pequeño: tenía ojos como de hombre y hablaba con
mucha arrogancia. Daniel 7:8
Visión final del reino INVISIBLE celestial, donde el Hijo de Hombre (Jesús)
establece su reino eterno desde el 70 D.C. Daniel 7:14.
Mensaje central: Como se puede ver, cada bestia y cada elemento de esta profecía
parece más cruel y violento que el anterior. La clave es que la buena noticia se
encuentra en Daniel 7:9-10 especialmente donde leemos "hasta"; la violencia y la
blasfemia siguieron HASTA que llegó el juicio donde se establecieron tronos para
juzgar, los libros fueron abiertos, y el tribunal comenzó a trabajar (este fue el día del
Señor cuando vino Jesucristo, cuando fue la boda y el banquete mesiánico, cuando
fue la resurrección de justos e injustos de Israel, y fueron hechos los Cielos Nuevos
y la Tierra Nueva y empezó la Nueva Creación). Este Juicio fue la respuesta (la
vindicación) de Dios a aquellos que mataron a Sus profetas y maltrataron a Israel.
Interpretando un quiasmo
En el anterior segmento de este estudio vimos acerca de un recurso literario antiguo
que se llama– QUIASMO.
Este quiasmo contiene cuatro conceptos básicos que están descritos como A, B, C
y D y luego estos conceptos se vuelven a presentar de manera distinta pero en
orden inverso como D, C, B, A.
Debido a la estructura quiástica, podemos ver fácilmente que Juan 5:19-30 es una
clara unidad literaria. Aunque todavía debería ser entendida en el contexto de lo
que precedió y lo que siguió, debe ser vista principalmente como un texto que está
destinado a ser leído y estudiado como una unidad.
D1 24 “En verdad, en verdad, les digo, el que oye Mi Palabra, y le cree a quien me
ha enviado, tiene vida eterna, y no viene a juicio, sino que ha pasado de la muerte a
la vida”.
D2 25 “En verdad, en verdad, les digo, la hora viene y ahora es, cuando los muertos
escucharán la voz del Hijo de Dios, y aquellos que escuchan vivirán”.
1. Escuchar y Creer las palabras del Hijo Real (Jesús) salvan de la muerte y
justifica en la Corte Legal de Dios.
2. El Dios de Israel mostrará su poder del Pacto permitiendo que los muertos
escuchen, y, por lo tanto, creer en las palabras de su Hijo Real (D1 y D2).
Daniel 7:13-14 “13 Miraba yo en la visión de la noche, y he aquí con las nubes del
cielo venía uno como un hijo de hombre, que vino hasta el Anciano de días, y le
hicieron acercarse delante de él. 14 Y le fue dado dominio, gloria y reino, para
que todos los pueblos, naciones y lenguas le sirvieran; su dominio es dominio
eterno, que nunca pasará, y su reino uno que no será destruido.”.
Después de leer ambos textos de Daniel, vemos:
Narrador: ¿Por qué se enfurecen las naciones y las gentes pelean en vano? Los
reyes de la tierra se levantan, y los gobernantes toman consejo juntos, contra el
Señor y contra su Ungido, diciendo,
Las Naciones: “Rompamos sus ligaduras y echemos de nosotros sus cuerdas”
Narrador: El que se sienta en los cielos se ríe; el Señor los sujeta en burla. Luego
Él les hablará en su ira, y les aterrará en su furor, diciendo,
El Dios de Israel: “En cuanto a mí, Yo he puesto mi Reino sobre Sión, mi Monte
Santo”
El Rey de Israel: Te diré el decreto: El Señor me dijo, “Tu eres mi Hijo; Yo te
engendré, hoy. Pídeme, y yo haré de las naciones tu heredad, y los confines de la
tierra tu posesión. Tú los romperás con vara de hierro y los harás pedazos como
una vasija de alfarero”.
Narrador: Por tanto ahora, oh reyes, sean sabios; estén advertidos, oh
gobernantes de la tierra. Sirvan al Señor con temor, y regocíjense con temblor.
Besen al Hijo, para que no se enoje, y ustedes perezcan en el camino, pues su ira
se inflama pronto. Bienaventurados son todos aquellos que se refugian en Él.
De esto podemos ver que las ideas claramente presentadas en Juan 5:19-30 son la
combinación de las ideas, reunidas y fusionadas en una sola. Juntas encuentran en
este brillante Quiasmo Juanino un nuevo, y mejor énfasis sistematizado. Jesús es la
autoridad real, no hoi Ioudaioi (en griego ὁ Ἰουδαῖος ‘los judíos’); ellos fracasaron
en proveer un valioso liderazgo para el pueblo del Dios de Israel. Jesús llegó para
encargarse.