EL DINERO Y LA POLITICA MONETARIA EN MÉXICO 2009

ERNESTO RAMÍREZ SOLANO

UNAM
9
BANCO
DE MÉXICO

El análisis efectuado previamente sobre la oferta monetaria corrobora la función vital que
desempeña el Banco de México en el proceso generador de la oferta monetaria: la autoridad
gubernamental a cargo de la política monetaria. En realidad, más de las tres cuartas partes
de las fluctuaciones en la oferta monetaria puede atribuirse a cambios en la base monetaria
(circulación monetaria, billetes y moneda metálica en circulación, más reservas) que puede
controlar Banxico; Banxico claramente es el "líder" y los demás son "seguidores". Pero,
¿quién controla a Banxico y determina sus acciones? ¿Qué motiva su comportamiento?
¿Quién sujeta las riendas del poder?
En esta parte se examina la estructura formal institucional de Banxico y la estructura
informal más relevante que determina donde reside el verdadero poder dentro de Banxico.
Al comprender quien toma las decisiones, se tendrá una mejor idea de como éstas se llevan
a cabo, de manera que el comportamiento real de la política monetaria que se describe más
adelante resulte más comprensible.

ORÍGENES D E L BANCO D E MÉXICO

Para entender la estructura del Banco de México se debe retroceder en el tiempo hasta
1925 cuando se creó. Para 1910 existía una red bancaria compuesta por 23 bancos
comerciales emisores, dos bancos hipotecarios y seis bancos refaccionarios. Este sistema
estaba regulado por la Ley General de Instituciones de Crédito de 1897. Los bancos de
emisión contaban con un capital social conjunto que ascendía a 118.8 millones de pesos. Su
circulación de billetes era de 103.6 millones de pesos y sus reservas metálicas de 86.8
millones, o sea que los billetes tenían un respaldo de 83.5%. La circulación de los billetes
era de aceptación voluntaria.
Dentro de los bancos emisores destacaban los dos más grandes que operaban en la
ciudad de México, el Banco Nacional de México creado en 1884 ' y el Banco de Londres y

1 Este banco fue resultante de la fusión del Banco Nacional Mexicano y del Banco Mercantil Mexicano.

205
México formado en 1889.- Estos bancos tenían facultad para tener sucursales y agencias
en todo el país, en tanto que el resto de los bancos no podían establecer oficinas en la
ciudad de México, con algunas excepciones.
En materia de emisión de billetes, la ley facultaba al Banco Nacional de México y al
Banco de Nuevo León a tener en circulación hasta tres veces el monto de sus existencias
metálicas en caja; los demás bancos entre ellos el Banco de Londres y México, no podían
exceder de dos veces el monto de su efectivo metálico. Además, el monto de la emisión de
cada banco no podía rebasar el triple de su capital exhibido, excepto el Nacional de
México, que no tenía más limitaciones que la relativa a sus existencias metálicas.
Todos los bancos, sin excepción, quedaban sujetos a la vigilancia de interventores
encargados de comprobar la exactitud de sus balances mensuales, vigilar el cumplimiento
de los términos de la concesión en lo que concierne a la seguridad del público, y firmar
billetes.
A l producirse la Revolución de 1910, y desde la caída del Presidente de México
General Porfirio Díaz en mayo de 1911, los bancos de emisión experimentaron una serie de
dificultades y tropiezos a tal punto que en julio de 1914 se encontraban cerca de la
bancarrota.
Con el fin de poner orden a esta situación crítica de los bancos, en 1915 el
Gobierno constitucional i sta dispuso la caducidad para las concesiones de los bancos
que se encontraron fuera de la ley y a ese efecto creó la Comisión Reguladora e
Inspectora de Instituciones de Crédito para que dictaminara el estado de solvencia de
los bancos. Nueve bancos se ajustaron a la ley y los 15 restantes se declararon en
caducidad.
Es pertinente mencionar que la Comisión Reguladora se encargó en el momento de su
constitución de fungir también como intermediario entre los bancos y la Secretaría de
Hacienda, a fin de proceder al estudio y fundación de un banco único de emisión.
Entre las medidas tendientes a ordenar la situación monetaria y bancaria del país, se
crea en abril de 1916 la Comisión Monetaria, que constituyó una aproximación de lo que
sería un banco único de emisión, ya que tuvo como propósito regularizar la circulación de
moneda fiduciaria y fraccionaria.
El 5 de febrero de 1917 ocurrió un hecho trascendental para alcanzar el objetivo
señalado anteriormente por Don Venustiano Carranza, cuando el Congreso Constituyente
de Querétaro aprobó incluir como excepción dentro del artículo 28 constitucional, que
prohibe los monopolios o estancos de cualquier clase, el correspondiente a la acuñación de
moneda y a la emisión de billetes "por medio de un sólo banco, que controlará el gobierno
federal...".
Con esta disposición desaparecieron múltiples resistencias a la idea de crear el banco
citado. A partir de entonces se presentaron al Congreso numerosos proyectos e iniciativas
para la creación del banco único de emisión. Por último, vencidos todos los obstáculos
internos y externos de carácter político y de carácter financiero, se decretó la ley
Constítutiva del Banco de México el 28 de agosto de 1925, durante el primer año de
gobierno del General Plutarco Elias Calles, siendo Secretario de Hacienda el señor Alberto
J. Pañi.
Durante los primeros años de su vida, el Banco de México, al operar directamente
con el público como un banco más de depósito y descuento, pudo desde luego aliviar de

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modo considerable la escasez de crédito que en aquél tiempo era angustioso. Por otra parte,
el control de las emisiones de billetes en manos del Banco de México, a la vez que acabó
con la práctica de las emisiones múltiples, convirtió a los bancos comerciales en
instituciones ordinarias de depósito y descuento con posibilidades limitadas de creación de
medios de pago (tomando en cuenta el empleo incipiente que por entonces se hacía de los
cheques).
Pero el perfil del Banco de México como banco central en su sentido ortodoxo, no se
alcanzó en 1925, sino hasta después de las reformas legales de su ley Orgánica en 1932 y
en 1936. En virtud de estas reformas se dio a Banxico la función creadora y reguladora de
la moneda y el crédito, además se le encargó la función de la cámara de compensación.
En esta fase, Banxico pudo fortalecer la ya iniciada aceptación del billete por parte
del público. Entonces, dejó de operar como banco de depósito y descuento y se convirtió
en banco de bancos al obligar a los bancos comerciales a asociarse al de México mediante
la suscripción en acciones del 6% de su capital. Las relaciones de Banxico con los demás
se iniciaron principalmente por medio de redescuentos. En breve, estos pasos permitieron
que se materializaran los esfuerzos del gobierno para dotar al país de un sistema monetario
de carácter fiduciario donde apoyarse y regularse la expansión del crédito interno, para
estimular las actividades productivas de la nación.

ESTRUCTURA F O R M A L D E L BANCO D E MÉXICO

La actual estructura formal del Banco de México esta basada en la Ley del Banco de
México de diciembre de 1993.^ De acuerdo con este marco jurídico el ejercicio de las
fiinciones del Banco de México y la administración del mismo, están encomendadas a una
Junta de Gobierno, a una Comisión de Cambios y a un Gobernador, (véase gráfica 9.1).

Junta de gobierno

A la cabeza del Banco de México está la junta de gobierno compuesta por cinco miembros,
los cuales son personas de reconocida competencia en materia monetaria y financiera, y de
absoluta solvencia moral. Los miembros de la junta de gobierno, aunque designados por el
Ejecutivo Federal con la aprobación de la Cámara de Senadores o de la Comisión
Permanente en su caso, no podrán ser removidos por éste sino por falta grave y servirán por
períodos escalonados. El escalonamiento en la designación de los miembros de la junta de
gobierno tiene por objeto dotar al Banco de México de una memoria institucional ajena a
presiones de índole política.^
La junta de gobierno está presidida por el gobernador del Banco y, en sus ausencias
por quién aquél designe o, en su defecto, por el subgobemador con mayor antigüedad. El
secretario y el subsecretario de Hacienda y Crédito Público podrán asistir con voz pero sin
voto a las sesiones de la junta de gobierno. La junta se reúne en cualquier tiempo siempre
que la convoque su presidente, el gobernador del banco o cuando menos dos de los
subgobemadores. Los altos funcionarios de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público

^ En virtud de esta ley, el Banco de México dejo de ser un organismo descentralizado del gobierno federal y se transformó en la nueva
persona de derecho público con carácter autónomo. L a ley Orgánica del Banco de México de 1984, había convertido a! instituto central
de sociedad anónima en organismo público descentralizado.
^ E l cargo de gobernador durara seis años y el de subgobemador será de ocho aiíos. ,

207
GRAFICA 9.1 Organización del Banco de México con referencia a los instrumentos
de control crediticio.

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podrán convocar a reunión de la junta de gobierno y proponer los asuntos a tratarse en la

misma.
La junta de gobierno está activamente involucrada en las decisiones relacionadas con
la conducta de la política monetaria. Entre las principales facultades que tiene la junta se
encuentran la de establecer las políticas y los criterios conforme a los cuales el Banco de
México expida las disposiciones de regulación monetaria o cambiaría y el sano desarrollo
del sistema financiero.

Comisión de cambios

La comisión de cambios fijará las directrices en materia cambiaría conforme a las cuales
Banxico deberá actuar y se podrá reunir en todo tiempo a solicitud del secretario de
Hacienda y Crédito Público o del gobernador del Banco de México. La comisión de
cambios consta de seis miembros, tres de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (el
secretario y dos subsecretarios) y tres del Banco de México (el gobernador y dos
subgobemadores). Las sesiones de la comisión serán presididas por el secretario de
Hacienda y Crédito Público y en su ausencia por el gobernador.
La comisión de cambios está facultada para fijar criterios a los que debe sujetarse
Banxico en el ejercicio de sus facultades relativas a regular las operaciones cambiarías de
las instituciones de crédito y otros intermediarios financieros. De igual manera, señala las
directrices respecto al manejo y la valuación de la reserva internacional. Y también autoriza

208
la obtención de los créditos del Fondo Monetario Internacional, de bancos centrales y de
otras entidades extranjeras que ejerzan funciones de autoridad en materia financiera.

Gobernador

El gobernador del Banco de México tiene a su cargo la administración de la institución y es

el ejecutor de los acuerdos de la junta de gobierno que él mismo preside y de la comisión de
cambios, de la cual forma parte. El gobernador, aunque lo designa el presidente de la
República de entre los miembros de la junta de gobierno, deberá informar periódicamente
no sólo al Ejecutivo Federal sino también al Congreso de la Unión sobre la política
monetaria a seguir, así como rendir cuentas sobre su ejecución. El cargo de gobernador
durará seis años y comenzará el primero de enero del cuarto año calendario del período
correspondiente al presidente de la República. De está manera se busca que el lapso del
gobernador del Banco de México no coincida con el período presidencial para intentar con
ello una mayor autonomía del banco central respecto del Ejecutivo Federal.

Sucursales

El Banco de México cuenta en la actualidad con seis sucursales para atender las regiones
que tienen asignadas en función de su localización geográfica, (véase la gráfica 9.2). Cada
una de las sucursales tiene a su cargo una zona del país, de modo que sus actividades y
responsabilidades son de tipo regional, nunca circunscritas al ámbito de una sola plaza. La
mayor o menor extensión de esas regiones corresponde a las comunicaciones que existen,
las facilidades de transporte, la similitud de actividades económicas, los pronósticos que
pueden hacerse, etc. Así, a lo largo de los años, se han abierto y clausurado oficinas
foráneas conforme lo ha demandado el desarrollo financiero y económico del país.
Las funciones de las sucursales son: la administración y el retiro oportuno de
numerario; la recaudación de los fondos del gobierno federal y la atención de sus pagos; la
recepción de depósitos, los retiros y las transferencias de fondos que requiera la banca de
provincia; la administración directa en ciertos casos e indirecta en otros de 181 cámaras de
compensación; la promoción y el apoyo operativo a los fondos de financiamiento que el
Banco de México administra en fideicomiso; la investigación de precios, la realización de
encuestas y en general, el apoyo que solicitan las áreas de investigación económica y
financiera. Estas actividades se realizan con un elevado grado de automatización,
aprovechando los equipos y los sistemas de informática más avanzados.
En las mismas poblaciones donde se tienen sucursales, el Banco de México ha
constituido consejos regionales integrados por industriales, agricultores, ganaderos y
comerciantes de la región. Coordinados por dichas sucursales, estos consejos constituyen
excelentes organismos de consulta, de los cuales se obtienen diagnósticos e información
económica de primera mano respecto a sus regiones. De esta manera el Banco de México
logra sentir el pulso de la actividad económica del país entero. ^

ESTRUCTURA INFORMAL D E L BANCO D E MÉXICO

La Ley del Banco de México y la Ley de Instituciones de Crédito nos dan una idea de la
estructura formal del Banco de México y sobre quién toma las decisiones en Banxico. Sin
embargo, io que está escrito no es necesariamente un reflejo de la realidad del poder y de la
estructura de toma de decisiones.

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 Estas 6 sucursales están localizadas en las siguientes plazas
Guadalajara, Jalisco
Hermosillo, Sonora
Mérida, Yucatán
Mexicali, B.C.
Monterrey, Nuevo León
Veracruz, Veracruz

Gráfica 9.2 Banco de México y su red de sucursales.

Fuente: Banco de México, Circular 2026/2026 , 22 Mayo 2007.

210
 Como se contempló en 1925, Banxico vino a unificar la emisión de billetes que antes
se permitía a todos los bancos comerciales. El plan original no incluía que Banxico fiaera
responsable de la salud de la economía por medio del control de la oferta monetaria y su
habilidad para afectar la tasa de interés.
A lo largo del tiempo ha adquirido la responsabilidad de promover una economía
estable y su responsabilidad ha causado que Banxico evolucione gradualmente hasta
convertirse en un banco central. En 1932 el Banco de México dejó de operar como banco
de depósito y descuento, y se convirtió en banco de bancos al obligar a los bancos
comerciales a asociarse a él mediante la suscripción en acciones del 6% de su capital. Las
relaciones de Banxico con los bancos se iniciaron principalmente por medio de descuentos.
El control de los préstamos de descuento a los bancos asociados se contemplaba
como instrumento básico de la política monetaria. El uso de las operaciones de mercado
abierto como instrumento de control monetario todavía no se preveía y los requisitos de
reserva los fijó la ley en un 5% sobre los depósitos del público, además se consideraban
como "un método de aplicación excepcional".
La Ley Orgánica de Banxico de 1936 da al instituto central autoridad discrecional
para manejar los requisitos de reserva, los cuales desde entonces se convierten
gradualmente en el principal instrumento de control monetario hasta fines de la década de
1970, y Banxico adopta en ese período mecanismos originales de control monetario (como
los topes de crédito y la liberación condicionada del depósito obligatorio), que
posteriormente dio lugar a los regímenes de inversión obligatoria y al control selectivo del
crédito.
A partir de la década de 1980, y una vez que se desarrolla el mercado de los cetes
(certificados de la tesorería de la federación), se empieza a hacer efectivo el uso de las
operaciones de mercado abierto autorizado desde años antes.
En 1991 se eliminan los requisitos de reserva obligatorios y las operaciones de
mercado abierto quedan como instrumento principal de control monetario. A lo largo del
tiempo Banxico ha tomado las riendas sobre los instrumentos para conducir la política
monetaria.
Desde su fundación en 1925 y hasta 1982, el Banco de México estuvo organizado
como una sociedad anónima en que 51% de las acciones pertenecían al gobierno federal y
49% restante a los bancos comerciales asociados. La administración y el ejercicio de las
funciones y prerrogativas del Banco de México estaban encomendadas al consejo de
administración y al director general.
Sobre el particular cabría preguntarse qué poder tenían los "propietarios privados" de
Banxico. La respuesta es que casi ninguno. Aunque los bancos asociados poseían acciones
de Banxico, no aspiraban a ninguno de los beneficios usuales derivados de la propiedad.
Primero, no tenían derechos sobre las ganancias de Banxico y únicamente recibían un
dividendo anual fijo, independientemente de lo que ganará el banco. Segundo, no tenían un
informe sobre como usaba su propiedad Banxico en comparación con los accionistas de las
empresas privadas. Tercero, su capacidad para elegir miembros en su consejo de
administración era limitada. La estructura del consejo de administración del banco en 1981
era de cinco consejeros de la serie A correspondiente al gobierno federal y cuatro de la serie
B perteneciente a los bancos asociados. Los cinco consejeros de la serie A estaban
representados por los altos funcionarios de hacienda.

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 En realidad los bancos asociados estaban en esencia excluidos del proceso político en
el Banco del México y no tenían poder real. Su presencia desempeñaba principalmente una
íunción ceremonial.
Desde todos los ángulos, el gobierno federal controlaba al Banco de México por
medio del secretario de Hacienda y Crédito Público, que presidía el consejo de
administración del Banco de México.
Sin embargo, el director del Banco de México, aun cuando también lo designaba el
presidente de la República, mantenía cierta autonomía e independencia con base en su
capacidad y personalidad. En el pasado, los directores de Banxico, entre los que destaca
Rodrigo Gómez, tuvieron una fuerte personalidad y esgrimieron una gran influencia en la
conducción de la política monetaria y económica del país. En la gestión de Rodrigo Gómez
(1952-1970) hubo una gran estabilidad de precios con crecimiento económico.
El director también ejercía poder porque supervisaba al cuerpo de economistas y
asesores de Banxico. Dado que este cuerpo estaba encargado de recolectar y procesar
información para el consejo de administración y realizaba los análisis que el consejo
empleaba en sus decisiones, también tenía cierta influencia sobre la política monetaria.
Además, muchas designaciones de funcionarios del ejecutivo, como secretarios de
hacienda, habían recaído en personal del Banco de México, haciendo que la influencia del
director del Banco de México fuera de mayor alcance y de mayor duración que su período
ordinario de seis años.
Al momento de la estatización de la banca comercial en 1982, el Banco de México
dejó de ser una sociedad anónima y se convirtió en un organismo público descentralizado
del gobierno federal, con personalidad y patrimonio propios. Esta nueva organización
acrecentó el poder del ejecutivo en el funcionamiento del Banco de México y en la
conducción de la política monetaria. En efecto, cuando el banco era sociedad anónima, la
autoridad residía en el consejo de administración como ahora reside en la junta de gobierno.
Pero en aquella situación, el director de Banxico tenía poder a discreción para actuar de allí
en adelante; en cambio, en la nueva estructura existía una autoridad intermedia, la comisión
de crédito y cambios directamente involucrada en el manejo de los instrumentos de control
monetario, donde intervenía directamente la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
Una vez concluido el proceso de reprivatización de la banca comercial en 1992, se
reformó la organización del Banco de México a partir de Abril de 1994.

FUNCIONES D E L BANCO D E MÉXICO

C O N F O R M E A SU L E Y A C T U A L
La actual ley del Banco de México, publicada en el diario oficial de la federación el 15 de
diciembre de 1993, asignó al banco central la finalidad de proveer a la economía del país
con moneda nacional, con el objetivo prioritario de procurar la estabilidad del poder
adquisitivo de dicha moneda. El banco también promovería el sano desarrollo del sistema
financiero y propiciaría el buen funcionamiento de los sistemas de pagos. En abril de 1994,
el Banco de México, organismo descentralizado del gobierno federa, se transformó en la
nueva persona de derecho público con carácter autónomo y conservó la titularidad de todos
los bienes, los derechos y las obligaciones integrantes del patrimonio de dicho organismo.

Aunque la ley del Banco de México se expide el 15 de diciembre de 1993, de acuerdo con los artículos transitorios de dicha ley, la
misma entra en vigor el primero de abril de 1994.

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 La nueva Ley del Banco de México establece que corresponde a la institución
desempeñar las siguientes funciones:
I . Regular la emisión y circulación de la moneda, los cambios, la intermediación y los
servicios financieros, así como los sistemas de pagos.
I I . Operar con las instituciones de crédito como banco de reserva y acreditante de última
instancia.
I I I . Prestar servicios de tesorería al gobierno federal y actuar como agente financiero del
mismo en operaciones de crédito interno y extemo.
IV. Actuar cómo asesor del gobiemo federal en materia económica y, particularmente,
financiera.
V. Participar en el Fondo Monetario Intemacional y en otros organismos de cooperación
financiera intemacional o que agmpen a bancos centrales.
V I . Operar con el FMI y otros organismos de cooperación financiera intemacional, con
bancos centrales que ejerzan fijnciones de autoridad en materia financiera.

Regulación de la emisión y circulación de la moneda

a. Respecto a la regulación de la emisión y circulación de la moneda^ corresponde

privativamente al Banco de México emitir billetes y ordenar la acuñación de moneda
metálica, así como poner ambos signos en circulación por medio de sus operaciones. ^ El
Banco de México fabrica sus propios billetes desde 1969.
El Banxico, en forma directa o mediante sus corresponsales, cambia a la vista los
billetes y monedas que pone en circulación por otras de la misma o de distinta
denominación, sin limitación alguna y a voluntad del tenedor.
Por decretos publicados el 22 de junio de 1992 en el Diario Oficial de la federación,
el Ejecutivo Federal dispuso la creación de una nueva unidad monetaria que equivale a
1000 pesos anteriores y conserva el nombre de peso. La nueva unidad monetaria no puede
ni debe considerarse como una "reforma monetaria", ya que no se modificaron en forma
alguna las condiciones de la emisión de dinero. El propósito fue reducir la magnitud de las
cifras en moneda nacional, simplificar las transacciones en dinero y lograr un uso más
eficiente de los sistemas de cómputo y de registro contable. Transitoriamente se les llamó
"nuevos pesos" durante 1994 y 1995. A partir de 1996 se eliminó el término "nuevos" y
quedó el de "pesos" simplemente.
b. Por lo que se refiere a la regulación crediticia, el Banco de México está dotado de las
diversas armas de regulación del medio circulante y del crédito, muy semejantes a las que
utilizan ios bancos centrales de otros países. A reserva de hacer un análisis más detallado
en capítulos siguientes, en esta parte se enumerarán en forma sucinta los instmmentos de
regulación con que cuenta el instituto central:

1) Variaciones de la tasa de redescuento.

2) Operaciones de mercado abierto.
3) Variaciones del porcentaje del depósito obligatorio o encaje que los bancos
comerciales deben mantener en el banco central respecto a los depósitos del público.
4) Emisión de bonos de regulación monetaria del propio banco central.

El Gobiemo Federal tiene en principio el monopolio de la acuñación de moneda (Artículo 28 de la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos), monopolio que ha cedido al Banco de Méxieo desde su constitución, por las ventajas que implica la unificación de
la autoridad monetaria.

213
5) Señalamiento de la'inversión obligatoria del importe del pasivo de los bancos.
6) Esquema de requerimiento de reserva legal llamado encaje promedio cero.

La adopción del régimen cambiario de flotación libre a partir del 22 de diciembre de

1994, ha permitido al Banco de México adquirir el control sobre la base monetaria, al no
verse obligado a inyectar o sustraer liquidez mediante intervenciones en el mercado de
cambios.
c. Regulación de los cambios. México, que había tenido una larga tradición de ilimitada
libertad en su mercado de cambios tanto para operaciones en cuenta corriente como para
trasferencias de capital, en 1982 implantó un sistema de control de cambios dual que operó
hasta noviembre de 1991. La Ley Orgánica del Banco de México de 1984, facultó al
instituto central para administrar el control de cambios que el gobiemo federal implante
cuando sea necesario o conveniente para la debida protección de la economía nacional. El
control de cambios consiste en la prohibición o restricción de las importaciones, las
exportaciones y el comercio de divisas dentro de la República; la importación y la
exportación de moneda nacional y el establecimiento de obligaciones y requisitos respecto
al uso y la aplicación de las divisas correspondientes a operaciones comprendidas en el
control de cambios. Sobre la base de la asignación de esta facultad, el Banco de México
establece los términos y las condiciones en que las instituciones de crédito, las demás
empresas cuyo objeto principal sea la intermediación financiera y las casas de cambio,
deban intervenir, en su caso, en la operación del mismo.
El Banco de México cuenta con una reserva de activos intemacionales ya no con el
objeto de garantizar la circulación monetaria, sino de procurar la compensación de
desequilibrios entre los ingresos y egresos de divisas del país, y propiciar con ello la
realización de las operaciones intemacionales de forma que contribuyan al desarrollo
económico nacional.
La reserva de activos intemacionales está constituida por la posición neta de las
divisas, el oro y la plata propiedad de Banxico que se hallen libres de todo gravamen y cuya
disponibilidad no esté sujeta a restricción alguna. Se entienden por divisas los billetes y
monedas metálicas extranjeros, depósitos bancarios, títulos de crédito y toda clase de
documentos de crédito sobre el exterior y denominados en moneda extranjera, así como los
demás medios intemacionales de pago, siempre que sean de amplia liquidez.
Corresponderá a la comisión de cambios de Banxico señalar las directrices respecto al
monto, la composición y la valuación de las reservas de activos intemacionales.
La crisis generalizada por la que atravesó la economía mexicana durante 1982 se vio
refiejada en el mercado cambiario. En diciembre de 1982 se estableció un régimen
cambiario dual que comprendía un mercado controlado y otro libre. En el primero se
incluyeron las transacciones en divisas que seria viable controlar, permitiendo que el resto
de las operaciones se realizaran libremente en el segundo mercado. Este esquema sustituyó
al control generalizado de cambios que había entrado en vigor en el mes de septiembre
anterior.
En este régimen cambiario dual se establecieron dos cotizaciones: por una parte el
tipo de cambio controlado y por otra el tipo de cambio libre. Ambos tipos de cambio
sufrieron un desliz devaluatorio a lo largo de los últimos años, básicamente para ajustarse a
la situación paritaria prevaleciente y procurar normalizar las transacciones con el exterior,
así como reconstituir las reservas internacionales del Banco de México.

214
 A partir de 1987, cuando se pone en practica el Pacto de solidaridad económica (PSE)
y luego el Pacto de Estabilidad y Crecimiento Económico (PECE), el sistema cambiario de
flotación regulada se tradujo en un desliz devaluatorio rítmico descendente tanto del tipo de
cambio controlado como del libre, pasando de dos pesos diarios en 1987 a 20 centavos
diarios en 1991. En este sistema de flotación regulada se sobreentiende que el Banco de
México está interviniendo en el mercado cambiario para hacer posible dicho deslizamiento
devaluatorio ordenado.
En noviembre de 1991, al considerarse que las transacciones con el exterior se habían
normalizado y que las reservas intemacionales de Banxico se habían reconstituido, se
suprimió el control de cambios y también desapareció el tipo de cambio controlado. A
partir de entonces se adoptó un esquema que dejaría que el tipo de cambio flotara dentro de
una banda que se ensanchaba diariamente. El piso de la banda quedaba fijo al nivel de
3.0512 nuevos pesos por dólar, mientras que al techo de la banda se le dio un ascenso diario
de 0.0002 nuevos pesos por dólar. El 20 de octubre de 1992 este nivel se incrementó a
0.0004 nuevos pesos. Este régimen se mantuvo vigente casi hasta el final de 1994. Del
primero de enero al 19 de diciembre de 1994 este deslizamiento significó una depreciación
del peso de 12.6 % dentro de la banda de flotación.
El 19 diciembre de 1994 las autoridades monetarias pretendieron elevar el techo de la
banda 15.3 % sin cambiar el ritmo de deslizamiento de 0.0004 nuevos pesos; se produjo un
ataque especulativo de gran escala debido a factores políticos, factores de volatilidad en los
mercados financieros intemacionales y de incertidumbre de los inversionistas ante la
magnitud del déficit de la cuenta corriente de la balanza de pagos mexicana, que culminó
con una drástica devaluación del peso.
En consecuencia, el 19 de diciembre de 1994 la comisión de cambios acordó
abandonar el régimen cambiario de flotación regulada con un deslizamiento devaluatorio
diario, para pasar a un régimen de flotación libre con efectos a partir del 22 de diciembre de
1994. Tomando como referencia el tipo de cambio interbancario, el peso mexicano sufrió
una depreciación de aproximadamente 7 1 % en 1994.
La flotación libre tiene la gran virtud de hacer improbable que el tipo de cambio se
aleje de manera persistente y considerable de los niveles que en distintas épocas resultan
congmentes con las condiciones fiandamentales de la economía. Asimismo, la flotación
desalienta las inversiones internacionales de corto plazo al disminuir la rentabilidad
previsible una vez ajustada por riesgo cambiario. También favorece la inversión en activos
reales porque amortigua los choques que se generan interna y extemamente mediante
variaciones tanto de las tasas de interés, como del tipo de cambio y, sólo en casos
extraordinarios, de las reservas.

Banco de reserva y acreditante de ultima instancia;

cámara de compensación

a. El Banco de México como banco de reserva. El mantenimiento de reservas en efectivo

de los bancos comerciales en el instituto central, que en principio se lleva a cabo para
garantizar los depósitos que a su vez reciben del público, se estableció de manera
obligatoria por ley. Sin embargo, a partir de 1990, se suprimió el encaje legal y se sustituyó
con un coeficiente de liquidez obligatorio de 30% sobre el pasivo computable, que en 1991
a su vez se eliminó para los incrementos marginales de septiembre de 1991 en adelante;
para los saldos a agosto del mismo año el coeficiente se redujo de 30 a 25%. En esas

215
condiciones se dejo a juicio'de los propios bancos comerciales la fijación de los porcentajes
de sus coeficientes de liquidez.
Con objeto de coadyuvar al logro de la meta de inflación y para ordenar las
condiciones prevalecientes en los mercados cambiario y de dinero, el Banco de México
adoptó un esquema de requerimiento de reserva legal llamado de encaje promedio cero,
para manejar con mayor flexibilidad las condiciones bajo las cuales Banxico otorga su
crédito interno neto. Por medio de dicho esquema los saldos deudores que aparezcan al
cierre de cada jornada, en las cuentas corrientes de las instituciones de crédito en el Banco
de México, deben compensarse dentro de períodos de veintiocho días, con la constitución
en otros días de saldos acreedores en esas mismas cuentas de por lo menos igual monto.
El esquema descrito facilita a la conducción de la política monetaria. Así, por ejemplo,
si en determinadas circunstancias conviene presionar las tasas de interés al alza, el Banco
de México induce un sobregiro de la banca en las cuentas corrientes que les lleva.^ Para
evitar la penalización, las instituciones de crédito tratan de generar excedentes de efectivo
que puedan depositar en el banco central. Para hacerse de la liquidez requerida, los bancos
deben contraer su crédito o atraer nuevos depósitos. Cualquiera de estas acciones propicia
el alza de las tasas de interés.
b. El Banco de México como acreditante de última instancia. Una de las tareas básicas que
debe desempeñar un banco central es la de garantizar que el sistema bancario y financiero
mexicano funcione fluidamente. En otras palabras, Banxico tiene que impedir los pánicos
financieros que pudieran ocurrir en el sistema bancario mexicano. A l realizar esta
encomienda, se dice que Banxico es acreditante de última instancia. El acreditante o
prestamista de última instancia presta a los bancos comerciales y a las demás instituciones
financieras cuando el pánico amenaza al sistema financiero.
Para el desempeño de esta función, Banxico está autorizado para otorga créditos a los
bancos comerciales, a los bancos de desarrollo y a otras instituciones del mercado de
valores. La crisis financiera sufrida en diciembre de 1994, puso en pleno juego esta función
del Banco de México. Banxico en coordinación con la Secretaría de Hacienda, por medio
de diferentes canales suministró recursos líquidos al sistema bancario mexicano.
Banxico descontó cartera de manera directa a los bancos comerciales, compró cartera
con problemas de recuperación por medio del Fondo bancario para la protección del ahorro
(Fobaproa) dotándolo de mayores recursos, y también apoyó las operaciones del Programa
de capitalización temporal (Procapte) para dotar a los bancos comerciales de una mayor
capitalización. Todo ello debido a que ante el brusco y elevado aumento de las tasas de
interés, los deudores de la banca de manera masiva se vieron en serios problemas para
pagar en tiempo sus adeudos, lo cual colocó a los bancos comerciales en una posición
crítica de liquidez y solvencia dados los bajos niveles de capitalización que mantenían.
Posteriormente, mediante varias medidas inspiradas en el acuerdo de Basilea, donde se
establece que el requerimiento de capital debe ser del 8% respecto al total de activos de los
bancos. Así como la inyección de recursos frescos provenientes de la extranjerización de la
banca. Para 2005 los bancos han logrado alcanzar niveles de capitalización y solvencia muy
por encima de los mínimos exigidos.
c. Regulación del servicio de cámara de compensación. Desde 1932 se encomendó al
Banco de México operar como cámara de compensaciones de cheques de los bancos

* Este sobregiro puede ser fácilmente inducido si el Banxico no repone en su totalidad los vencimientos, que ocurren casi a diario de los
créditos que previamente ha otorgado a los bancos comerciales.

216
comerciales. Este sistema de compensaciones simplifica la realización de pagos entre los
bancos comerciales, ocasionados por los depósitos de cheques recibidos de sus clientes a
cargo de otros bancos. La eficiencia del sistema de pagos es un factor que contribuye a la
eficiencia y productividad globales de la economía.
La cámara de compensaciones de la oficina matriz del Banco de México sólo opera
con los bancos de la ciudad de México. En las ciudades donde existen sucursales del
Banco de México, éstas operan como cámaras locales de compensación.
Tanto en la ciudad de México como en Monterrey, N . L . se crearon Centros de
computo bancario (Cecoban), administrados por Banxico, cuyo objetivo principal es prestar
los servicios de compensación de cheques en las áreas metropolitanas de la ciudad de
México y de la ciudad de Monterrey, respectivamente, así como otros servicios de computo
de interés para el sector financiero.

Servicio de tesorería al gobierno y agente financiero

a. Servicio de tesorería al gobierno federal. Desde su constitución, el Banco de México se

encargó del servicio de tesorería del gobiemo federal. Esto implica que Banxico se
constituye en depositario de todos los fondos que el gobiemo federal no use de irmiediato;
se encarga de llevar a cabo la situación y concentración de fondos de todas las oficinas
gubernamentales; y de la emisión, colocación y servicio de la deuda intema y externa del
gobiemo. Las remuneraciones que Banxico percibe por estos servicios se convienen con la
Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
Además, Banxico lleva una cuenta general a la tesorería de la federación, sujetándose
a varias reglas, entre las que destaca: el saldo a cargo del gobierno federal no deberá
exceder al 1.5% de las erogaciones del propio gobiemo previstas en el presupuesto de
egresos de la federación para el ejercicio de que se trate. Esta disposición forma parte del
esquema insertado en la Ley de Banxico de 1993, que trata de evitar que el gobiemo federal
encuentre caminos de financiamiento directo con el Banco de México.
Desde luego, el Banco de México está autorizado para otorgar crédito al gobiemo
federal, pero sólo mediante el ejercicio de la cuenta corriente que lleve a la tesorería de la
federación, con el principal propósito de cubrir las diferencias temporales entre los ingresos
y los gastos públicos.
b. Agente financiero en operaciones de crédito interno y externo. En este aspecto
corresponde privativamente al Banco de México encargarse, por cuenta del gobiemo
federal, de la emisión, colocación, compra y venta de valores representativos de la deuda
intema del gobiemo y, en general, del servicio de la misma. Dentro de este marco, el banco
opera como casa de bolsa para el gobiemo federal, al efectuar las subastas semanales para
la colocación primaria de Cetes, Bondes y Udibonos.
Asimismo, al Banco de México también le corresponde ser agente financiero del
gobiemo federal en lo relativo a la negociación, la contratación y el manejo de la deuda
extema del gobiemo, y el servicio de la misma, salvo que conforme a la ley se
encomienden a otra u otras instituciones. Propiamente el Banco de México se encarga de
aquellos empréstitos del gobierno federal que tienen fines monetarios. Dejando a otras
instituciones como Nacional Financiera la gestión de créditos del exterior cuyo objetivo sea
fomentar el desarrollo económico.

217
Asesor ecoDÓmico y fínanciero del gobierno

Desde la ley orgánica de agosto de 1936 se dio al Banco de México la función de consejero
del gobiemo federal en materia económica y financiera. En este aspecto es necesario
advertir la forma estrecha en que Banxico siempre ha asesorado al gobiemo federal, sobre
todo en los planes que el gobierno ha ejecutado en obras públicas y organización de la
producción agrícola.
La autonomía del Banco de México, establecida en las reformas constitucionales
aprobadas en el mes de agosto de 1993 y puestas en vigor el primero de abril de 1994 en la
nueva ley del Banco de México, no implica el divorcio de éste con el gobiemo federal. Con
el objeto de procurar una adecuada coordinación entre el Banco de México y el gobiemo
federal, se prevé que el secretario y subsecretario de Hacienda y Crédito Público sean
invitados en todas las sesiones de la junta de gobiemo, con voz pero sin voto, a la vez que
pueden convocar a reunión y proponer los asuntos a tratarse en ellas.

Representación gubernamental ante el Fondo Monetario Internacional y otros

organismos internacionales

En este aspecto, el Banco de México participa en representación del gobiemo mexicano

ante organismos de cooperación monetaria y financiera internacionales, como el Fondo
Monetario Intemacional, el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo, entre
otros.
En 1944, en la Conferencia de Bretton Woods, se crearon el Fondo Monetario
Internacional y el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento. En la ley aprobada
por la cámara para el ingreso de México en ambas instituciones en 1946, se encargó al
Banco de México conducir las relaciones con ellas. De la misma manera, el Banco de
México se ha encargado de las relaciones con instituciones financieras como: Asociación
Intemacional de Fomento (AIF), Corporación Financiera Internacional (CFI), Banco
Interamericano de Desarrollo (BID), Corporación Interamericana de Inversiones (CII),
Banco de Desarrollo del Caribe (BDC) y Banco Europeo de Reconstmcción y Desarrollo
(BERD).

¿DEBE E L B A N X I C O M A N T E N E R S E D E P E N D I E N T E ?
Como se ha visto, el Banco de México estaba inserto en la esfera de acción del Ejecutivo
Federal. Las principales autoridades del Banco de México estaban constituidas por los
altos funcionarios de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. Además, la anterior Ley
Orgánica del Banco de México establecía que el ejercicio de las funciones de Banxico
debería efectuarse de acuerdo con los objetivos y las prioridades de la planeación nacional
del desarrollo y de conformidad con las directrices de política monetaria y crédito que
señalara la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. En ese sentido, podría decirse que el
Banco de México no era independiente.
En virtud de las adiciones al artículo 28 de la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos y a la expedición de la Ley del Banco de México de 1993, se busca que
el banco central sea menos dependiente del ejecutivo federal en el ejercicio de sus
funciones y en su administración. Se establece que ninguna autoridad podrá ordenar al
Banco conceder financiamiento.

218
 El planteamiento de la independencia del Banco de México surge en los círculos
académicos y políticos, sobre todo por el alto grado de independencia que tiene el banco
central de nuestro vecino del norte. ¿Es conveniente que el Banco sea dependiente o será
mejor contar con un banco central independiente?

Argumentos a favor de la dependencia

El público considera al presidente de la República responsable del bienestar económico del

país, y por lo tanto debe tener el control sobre el organismo gubernamental que puede ser el
factor más importante en la determinación de la salud de la economía. En efecto, para
obtener un programa económico coherente que promueva la estabilidad económica, la
política monetaria debe estar coordinada con la política fiscal (manejo del gasto
gubemamental y los impuestos). Sólo ubicando la política monetaria bajo el control del
ejecutivo, quien también controla la política fiscal, puede evitarse que estas dos políticas se
contrapongan.
Los proponentes de un Banxico controlado por el ejecutivo argumentan que es
antidemocrático tener una política monetaria (que afecta casi a todos en la economía)
controlada por un grupo selecto que no es responsable ante nadie. La ausencia de una
evaluación permanente de Banxico tendría serias consecuencias: Si Banxico lo hace mal,
no existe el expediente de sustitución de funcionarios (como el caso de los políticos). En
realidad, Banxico es capaz de perseguir objetivos de largo plazo, así como los miembros
del congreso votan también sobre aspectos de largo plazo, como es el caso de la política
exterior.
Otro argumento contra la independencia del banco central es que un banco así no
siempre ha usado su libertad de manera adecuada. Como se sabe, el banco central de
Estados Unidos (el Sistema de la Reserva Federal) falló lamentablemente en su función
establecida de prestamista de última instancia durante la gran depresión, y su independencia
ciertamente no lo detuvo de seguir una política monetaria demasiado expansionista en las
décadas de 1960 y 1970 que contribuyó a la rápida inflación en este período.

Argumentos en favor de la independencia

El argumento más fuerte para que el banco central sea independiente descansa en el
enfoque de que sujetar a Banxico a una presión política mayor se traduce en un sesgo
inflacionario en la política monetaria. Para muchos, los políticos en una sociedad
democrática están presionados por la necesidad de ganar elecciones, por lo que buscarán
soluciones de corto plazo a problemas, como elevado desempleo y elevadas tasas de
interés, aun si las soluciones a corto plazo pudieran tener consecuencias indeseables a
largo plazo. Por ejemplo, se ha visto que un elevado crecimiento del dinero puede conducir
inicialmente a una caída en las tasas de interés, pero puede causar un incremento en ellas
posteriormente a medida que la inflación se acrecienta. En cambio, consideran más
probable que un Banxico sin presiones políticas esté interesado en objetivos de largo plazo
y por lo tanto en defender un peso sano y un nivel de precios estable.
Poner a Banxico bajo el control del ejecutivo (más sujeto a la influencia de la
Secretaría de Hacienda) se considera también peligroso debido a que Banxico puede servir

219
para facilitar el financiamiento de grandes déficits presupuéstales por medio de la compra
de deuda gubemamental (bonos).'

L a independencia de la banca central en diecisiete países

Los partidarios de un banco central independiente consideran que el desempeño

macroeconómico es mejor si el banco central es más independiente. Invesfigaciones
recientes apoyan esta suposición: según la gráfica 9.3, cuando los bancos centrales están
ordenados del Gmpo 1 (menos independientes) al Grupo 4 (más independientes) se advierte
que el desempeño inflacionario es mejor en países con un banco central más
independiente.^
Como se puede ver en la gráfica de barras, Alemania y Suiza con los dos bancos centrales
mas independientes también son los países con las tasas de inflación mas bajas en el
período 1973-1988. En contraste, los países con inflación más alta: España, Nueva Zelanda,
Australia e Italia son también los países con los bancos centrales menos independientes.
Aunque un banco central independiente parece conducir a una tasa de inflación mas baja,
esto no se logra a costa de un desempeño económico real mas pobre. No es probable que
los países con bancos centrales independientes tengan un desempleo elevado o
fluctuaciones del producto mayores que los que tienen bancos centrales menos
independientes.
Gráfica 9.3 Tasa de rendimiento en instrumentos del mercado de dinero, 2005

Menos independientes Más independientes

Fuente: Alesina Alberto y Lawrence H. Summers, "Central Bank Independence and Macroeconomic
Performance. Some Comparative Evidence, " en Journal of Money, Credit and Banking 25 (1993),
Págs. 151-162.

^ En la actualidad esta posibilidad se trata de evitar al prohibir la Ley Orgánica del Banxico, que el Instituto Centra!
compre valores gubernamentales en forma directa
^ Alberto Alesina y Lawrence H. Summers, ''Central Bank Independence and Macroeconomic Performance. Some
Comparative Evidence". Journal of Money, Credit and Banking 25 (1993): pp. 151-162.

220
RESUMEN
1. El Banco de México se creó en 1925 para terminar con la multiplicidad de bancos
emisores de billetes, y hasta 1936 alcanzó la conformación ortodoxa de un banco central.
2. La estructura formal del Banco de México consiste en una matriz en la ciudad de
México y seis sucursales regionales, la junta de gobiemo, la comisión de cambios y el
gobemador. La acción del Banco de México se ejerce sobre bancos comerciales, bancos
de desarrollo y otros intermediarios financieros.
3. A l Banco de México, de acuerdo con su ley vigente le corresponde desempeñar las
siguientes funciones:

I . Regular la emisión y circulación de la moneda, los cambios, la intermediación y los

servicios financieros, así como los sistemas de pagos.
I I . Operar con las instituciones de crédito como banco de reserva y acreditante de
última instancia.
ni. Prestar servicios de tesorería al gobiemo federal y actuar como agente financiero
del mismo en operaciones de crédito intemo y extemo.
IV. Actuar como asesor del gobiemo federal en materia económica y,
particularmente, financiera.
V. Participar en el Fondo Monetario Internacional y en otros organismos de
cooperación financiera intemacional o que agmpen a bancos centrales.
VI. Operar con el Fondo Monetario Intemacional, con bancos centrales y con otras
personas que ejerzan funciones de autoridad en materia financiera.

4. A l Banco de México le corresponde privativamente emitir billetes y ordenar la

acuñación de moneda metálica, así como poner ambos signos en circulación. La facultad
de acuñación de moneda metálica, corresponde al gobiemo federal, pero el control de su
distribución fue cedida al Banco de México por las ventajas que implica la unificación
de la autoridad monetaria.
5. El Banco de México está dotado con las diversas armas de regulación monetaria y
crediticia semejantes a las que utilizan los bancos centrales de otros países y otras de
acuñación nacional. Entre ellas se tienen: 1) variaciones de la tasa de redescuento, 2)
operaciones de mercado abierto, 3) variaciones comerciales del porcentaje del depósito
obligatorio o encaje que los bancos comerciales deben mantener en el banco central
respecto a los depósitos del público, 4) fijación de las tasas de interés que pueden
cobrar los bancos comerciales sobre sus operaciones activas, pasivas y de servicios, 5)
señalamiento de la inversión obligatoria del importe de pasivo exigible de los bancos, 6)
determinación del monto máximo de financiamiento intemo que el propio banco central
puede otorgar, 7) emisión de bonos de regulación monetaria, 8) encaje promedio cero.
Muchas de estas facultades no las está ejerciendo el instituto centra!.
6. En materia cambiaría, el Banco de México cuenta con una reserva de activos
intemacionales para procurar la compensación de desequilibrio entre los ingresos y
egresos de divisas del país. En la actualidad Banxico no interviene apoyando el tipo de
cambio del peso frente al dólar. Este último lo determina la acción del libre juego de
oferta y demanda de la divisa estadounidense. El régimen cambiario vigente desde
finales de 1994 es de fiotación Ubre. A lo largo del periodo 1995-2005, Banxico se ha

221
 abstenido de intervenir en el mercado de divisas, salvo por las operaciones derivadas del
mecanismo de opciones de venta de moneda extranjera de la banca al Banco de México.
7. El mantenimiento de reservas en efectivo de los bancos comerciales en el instituto
central se ha establecido por ley. A partir de 1990 se sustituyó por un coeficiente de
liquidez equivalente a 30% del pasivo computable, mismo que en septiembre de 1991 se
eliminó para los incrementos marginales de ese mes en adelante, y se redujo a 25% para
los saldos a agosto de ese año. En marzo de 1995 el instituto central decidió adoptar un
esquema de requisito de reservas llamado de encaje promedio cero, para manejar con
mayor flexibilidad las condiciones bajo las cuales otorga su crédito.
8. Como acreditante o prestamista de última instancia, Banxico tiene la tarea básica de
evitar los pánicos financieros y para ello debe prestar a los bancos comerciales y a las
demás instituciones financieras cuando se presente una amenaza de ese tipo. Esta
fimción del Banco de México se puso a prueba con la crisis económica y financiera
experimentada a finales de 1994 cuando se generó un serio riesgo de insolvencia del
sistema bancario, por lo que el Banco de México junto con la Secretaría de Hacienda y
Crédito Público pusieron en marcha un amplio paquete de medidas para fortalecer la
confianza de los agentes económicos en el sistema bancario mexicano.
9. El Banco de México, junto con sus sucursales, presta el servicio de cámara de
compensación de cheques para facilitar principalmente a los bancos comerciales el
cobro de esa clase de documentos.
10. Cuando el Banco presta servicios de tesorería al gobiemo federal se constituye en
depositarío de todos los fondos que no use de inmediato el gobiemo federal, se encarga
de llevar a cabo la situación y concentración de fondos de todas las oficinas
gubernamentales y lleva una cuenta general a la tesorería de la federación. El saldo de la
cuenta general no debe exceder de 1.5% de las erogaciones del propio gobierno previstas
en el presupuesto de egresos de la federación para el ejercicio de que se trate.
11. Como agente financiero del gobiemo federal corresponde privativamente al Banco de
México encargarse de la emisión, colocación, compra y venta de valores representativos
de la deuda intema y extema del gobiemo y, en general, del servicio de la misma.
12. El Banco de México participa, en representación del gobiemo mexicano, ante
organismos de cooperación monetaria y financiera intemacionales como el F M l , el
BIRF, el BID, entre otros.
13. La conformación del Banco de México como una persona de derecho público con
carácter autónomo establece que ninguna autoridad podrá ordenarle conceder
financiamiento.
14. Por una parte, se argumenta que la política monetaria debe estar coordinada con la
política fiscal y por lo tanto el banco central debe estar bajo el control del ejecutivo. Y
por la otra, se esgrime como un firme argumento en favor de la independencia del Banco
de México el hecho de que ello lo sustrae de una fuerte influencia política que por lo
general se traduce en un sesgo inflacionario en la política monetaria. El Banco de
México independiente del ejecutivo federal puede permitir políücas de estabilización de
precios de largo plazo y dejar de reaccionar a problemas de corto plazo que resulten en
una política monetaria expansionista.

222
CONCEPTOS BASICOS
Acreditante o prestamista de última Coeficiente de liquidez, 213, 215
instancia, 215, 216 Control de cambios, 214, 215
Autonomía del Banco de México, 218- 220 Cuenta única, 216
Banco central, 208-210 Deslizamiento del tipo de cambio, 214, 215
Cámara de compensación, 215-217 Encaje promedio cero, 216
Cambios, 214 Flotaciónlibre, 214, 215
Comisión de cambios, 208, 209, 215 Fobaproa, 216
Junta de gobiemo, 207, 208

PREGUNTAS Y P R O B L E M A S
1. ¿Qué autoridades del Banco de México controlan la tasa de descuento? ¿Los
requisitos de reserva? ¿Las operaciones de mercado abierto?
2. ¿Qné autoridad del Banco de México controla las operaciones que impliquen
riesgos cambiarlos?
3. ¿Puede legalmente el Banco de México adquirir directamente del gobierno federal
bonos emitidos por éste?
4. ¿Qué limitantes legales tiene Banxico para otorgar créditos al gobierno federal?
5. ¿Cuáles son las funciones del Banco de México?
6. ¿Qué instrumentos de regulación monetaria posee el Banco de México,
independientemente de que los ejerza o no?
7. ¿En qué consistía el control de cambios y qué características presentaba el aplicado
a México?
8. ¿Por qué es básica la función del Banco de México como acreditante o prestamista
de última instancia?
9. ¿Cuáles son los mecanismos establecidos en la ley del Banco de México para evitar
que el gobiemo federal recurra al crédito directo del Banco de México?
10. Dé su opinión sobre la relación de dependencia del Banco de México con el
gobiemo federal por medio de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
¿Preferiría que el Banco de México fuera más independiente? ¿Cómo?

B I B L I O G R A F I A RECOMENDADA

Alesina, Alberto y Laurence H. Summers, "Central Bank Independence and

Macroeconomic Performance. Some Comparative Evidence," en Journal of Money.
Credit and Banking 25, 1993.
Banco de México, Informes Anuales de 1925 a 2005.
Borja Martínez, F., El nuevo sistema financiero mexicano, México, Fondo de Cultura
Económica, 1991. Págs. 74 - 111.
^ El Banco de México, México, Nacional Financiera y Fondo de Cultura
Económica, 1996.
^ Derecho Monetario, México, McGraw Hill, Instituto de Investigaciones
Jurídicas, U N A M , 1997.
Buras, A. F., "The Independence of the Federal Reserve System"^ en Challenge, ]\xY\o~
agosto de 1976, E.U.A., págs. 21-24.

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