Final Historia Del Arte, Guadalupe Corradi
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DEL ARTE.
El David a través del Renacimiento y Barroco
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Contenido
Introducción: ................................................................................................................................2
El Renacimiento .......................................................................................................................2
El David, Donatello. ..............................................................................................................3
El David, Miguel Ángel. .........................................................................................................4
El Barroco. ................................................................................................................................5
El David, Bernini ...................................................................................................................6
Conclusión ....................................................................................................................................7
Anexo ...........................................................................................................................................8
Bibliografía. ..................................................................................................................................9
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Introducción:
A través del David, figura icónica del Renacimiento, buscaremos en este ensayo
aproximarnos al canon de belleza y proporción del Renacimiento y Barroco en algunas
de las diferentes representaciones que consideramos representativas. Así, del
Quatroccento, siglo XV, tomaremos al David de Donatello. Luego para ilustrar el
Cinquecento del siglo XVI analizaremos el David de Miguel Ángel. Y, por último, para
ilustrar el Seicento, o el Barroco, tomaremos como punto de partida a la representación
de Bernini.
El Renacimiento
El Renacimiento fue movimiento artístico y cultural que se dio entre el Gótico y el
Barroco en los siglos XV y XI. Según Hauser fue un período amplio de transición desde
la Edad Media a la Moderna (Gótico-Renacimiento-Manierismo-Barroco). Giedion
describe a Florencia, la capital cultural y artística de este movimiento, como lugar donde
“el Spirit Nouveau del renacer del arte clásico se manifestó de manera más decisiva.” 1
3
bóveda resalta su majestad. Este fresco, que representa la crucifixión de Cristo,
manifiesta una vuelta a la arquitectura clásica a través del arco de medio punto, y las
columnas griegas. Cabe aclarar que los temas propios de este movimiento son religiosos,
mitológicos o bien representaciones diarias de la vida burguesa, por ser los mecenas
hombres aristocráticos o miembros del clero.
Sin embargo, este progreso del naturalismo no es original del Renacimiento. Hauser
menciona que su origen está en el canon de belleza ideal griego. “(…) El clasicismo (…)
está dominado por un continuo progreso naturalista (…) la tendencia a ser fiel a la
naturaleza es casi tan fuerte como el afán de medida y de orden (…) se alcanza un estado
(..) donde la forma en si (…) bella, equilibrada, decorativa (…) no puede justificar fallo
alguno contra las leyes de la experiencia”5 .
El David, Donatello.
Donato di Niccolò di Betto Bardi, conocido como Donatello (Florencia, 1386- 1466),
fue uno de los más conocidos escultores de la primera etapa del renacimiento, es decir el
Quattrocento. Nosotros centraremos el estudio de este artista exclusivamente al David 6,
una figura esencial en la historia del arte por ser el primer desnudo escultórico desde la
antigüedad romana.
3
GIEDION, Espacio, tiempo y arquitectura, 1978, “La perspectiva”
4 MICHAEL BAXAND: Pintura y vida cotidiana en el renacimiento, 1978, p. 149.
5 ARNOLD HAUSER, Grecia y roma III, clasicismo y democracia. P. 117
6 Florencia, Museo Nazionale del Bargello
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Donatello, según dice Giedion, tuvo que romper con el modo simbólico gótico, y lo
consiguió gracias a su admirable sentir naturalista.7 Fue el primero en inaugurar los
nuevos cánones de belleza renacentistas, y en volver a profundizar el estudio del cuerpo
con fines artísticos. Hemos dicho anteriormente que el Renacimiento antropocéntrico
tiene un nuevo interés por la anatomía humana y es esta novedad la que impulsa la
utilización del desnudo, en este caso para representar a la figura bíblica.
David fue un pastor del antiguo testamento muy pequeño y frágil quien con una
honda y una piedra aturdió a Goliat, el temible gigante, y luego con una espada lo mató.
Algunos autores hacen una lectura simbólica y sostienen que la obra encargada por Cosme
de Medici representa a Florencia, la ciudad que se libró de las garras de Milán,
representada a través de la cabeza del gigante Goliat. Esta idea está ilustrada en el David
a través del sombrero toscano que lleva sobre sus cabellos rizados. Éste tiene una corona
de laureles encima, signo de victoria.
El joven vencedor tiene una postura relajada y elegante. Su cuerpo está desnudo y
como única vestimenta porta un sombrero y botas. El joven erguido apoya su pie
izquierdo sobre la cabeza del gigante, a quien ha matado segundos antes. Por este motivo,
su cuerpo presenta una suave ondulación en la cadera, la cual logra armonía en la
escultura y genera un ligero contraposto equilibrado. El adolescente bello, no lleva más
que la espada con la que ha acabado al gigante, en la mano derecha, y en la otra, la pierda
con la que lo ha aturdido. Relajado, apenas presenta rasgos de felicidad, su mirada fija
sobre la cabeza del gigante deja ver un atisbo de ironía.
7
GIEDION, Espacio, tiempo y arquitectura, 1978, La perspectiva p. 35
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Como este artista abrió la puerta a la representación de desnudos, Miguel Ángel esculpió
desnudos realistas monumentales, hechos a gran escala.
Sus desnudos y sus obras en general demuestran gran realismo, armonía y equilibrio.
A través de sus obras se ve un estudio exhaustivo tanto del cuerpo humano, como del arte
griego y romano clásico.
El David de Miguel Ángel, del 1501, (mármol, 4 mts.) implicó un reto ya que otros
artistas habían intentado trabajar el bloque de mármol sin poder sacar nada proporcional
de él. Miguel ángel, que decía ver lo que había dentro del mármol antes de trabajarlo,
aceptó el reto, y logró crear en base a él una escultura excepcional.
David tiene un gesto pensante, sus manos están tensas y su mirada es firme. La
serenidad en el rostro, a pesar del gesto de tensión, da una pauta de reflexión, mira a su
enemigo como sabiendo que lo va a derribar, pero, sin embargo, está angustiado.
El Barroco.
El Barroco fue un movimiento artístico y cultural posterior al renacimiento que
surgió contemporáneo a la crisis espiritual y económica de los primeros decenios del siglo
XVI. El “Barroco fue un largo período de honda crisis social, cuya sola existencia nos
permite comprender las específicas características de aquel siglo8”. Hauser a su vez, dice
8
JOSÉ ANTONIO MARVALL, Conflictividad de la sociedad barroca, p. 26
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que este movimiento tiene “la concepción del mundo como impresión y experiencia, el
aspecto subjetivo como lo primario, y el carácter transitorio de la obra, la idea de
movimiento y crisis sobrecargado y dramático. (…) su intención es lograr teatralidad. El
artista barroco se deja llevar por los impulsos, es ilimitado y caprichoso.”9
El David, Bernini
Gian Lorenzo Bernini (1598-1680) “comprende y admira a Miguel Ángel,
considerándolo una de las mayores personalidades del clasicismo de Cinquecento” 10
Con una formación clásica y renacentista y con Miguel Ángel como referente, el
artista en sus esculturas se muestra naturalista y realista. Dice Argán: “Para Bernini la
obra del artista es una creación libre que repite el acto divino y proporciona a los
hombres un testimonio de su capacidad de poseer de forma plena la naturaleza (…); y es
así precisamente porque esa creación debe permanecer en el ámbito de lo “natural”” 11
Conclusión
Donatello, Miguel Ángel y Bernini al representar a David cada uno en su época, reflejan el
esplendor y la transformación que hay desde el Renacimiento temprano al Barroco. La evolución
del sentimiento, del movimiento, del estudio anatómico humano y de los gestos faciales están
evidenciados en estas obras.
Anexo.
Bibliografía.