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Dilema Moral

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¿La situación socioeconómica del joven del cuento Rashomoon puede justificar que

este despoje de sus pertenencias a la anciana?

Alejandro Martínez López

Universidad Cooperativa Colombia

Humanidades III

Nombre del profesor

2021
¿La situación socioeconómica del joven del cuento Rashomoon puede justificar que
este despoje de sus pertenencias a la anciana?

En el cuento Rashomoon, el joven perteneciente a su sociedad tiene la obligación de regirse


bajo ciertas premisas éticas con el fin de que se permanezca un orden y una homogeneidad
dentro de la misma, sin embargo el hombre no es un individuo perfecto, ya que este tiene
un pensamiento racional y una inclinación emocional y natural, esta inclinación se
encuentra regida por ciertas situaciones a las que se enfrenta, una de ellas es el haber sido
despedido de su trabajo, esta condición hace que este personaje opte por realizar acciones
inmorales como robar a la anciana todas sus pertenencias y huir, no sin antes haberse
cuestionado si esta era la mejor opción ya que el mismo no se consideraba como un ladrón.
Se puede establecer que las circunstancias socioeconómicas a las que se enfrenta el
personaje joven del cuento al haber sido despedido de su trabajo como sirviente
efectivamente pueden hacer que el mismo quebrante aquellas concepciones de moralidad
que tenia establecidas con anterioridad, ya que la ética y la moral son conceptos dinámicos
que cambian según la sociedad en la que cada individuo se encuentra, por lo tanto, esto esta
basado según la experiencia personal y recursos personales y que, si este personaje no
realiza esta acción se vera obligado a morir de hambre, es una acción que realiza para
subsistir. De esta manera este individuo opta por despojar a la anciana de sus vestiduras y
pertenencias con el fin de subsistir, ya que si no lo hacia se vería obligado a morir de
hambre. El propósito del texto será desarrollar la respuesta al interrogante: ¿La situación
socioeconómica del joven del cuento Rashomoon puede justificar que este despoje de
sus pertenencias a la anciana?

Cuando el joven encuentra la oportunidad de robar a la anciana, decide hacerlo y huir, sin
embargo este previamente se cuestiona si realmente esto es lo que debe y quiere hacer, “Por
eso, quizás, hubiera sido mejor aclarar: “el sirviente espera en el portal sin saber qué hacer,
ya que no tiene adónde ir".” (Akutagawa, R. 1915) finalmente gana su optativa de no morir
de hambre y hurtar “Seguidamente, despojó a la vieja de sus ropas, y como ella tratara de
impedirlo aferrándosele a las piernas, de un puntapié la arrojó entre los cadáveres.”
(Akutagawa, R. 1915) por lo tanto, se entiende que un individuo tiene la capacidad de
racionalizar sus acciones previamente y decidir si aquellas acciones están bien o mal
hechas, y esto fue lo que hizo el personaje, sin embargo ganó su necesidad de subsistir y
sobrevivir “En ella expuso la visión platónica de la educación moral, que consiste en el
intento de estimular niveles más altos de moralidad (juzgar, dar valores de bien o mal según
un nivel basado en principios de justicia), a través de la confrontación e interrogación”.
(Albers, 1997) (1) Efectivamente cada individuo tiene la capacidad de pensar si aquella
acción que realizará esta bien o mal dentro de las concepciones de una sociedad, sin
embargo ya es una decisión individual juzgar si debe o no hacerla, y que el escenario ideal
es que no se hiciese a pesar de resultar mas beneficioso para si mismo, pues si todos los
individuos hicieran lo que creen correcto finalmente no habría un orden dentro de la
sociedad.

Entendemos por tanto que, esta moralidad individual esta regida bajo un concepto de
identidad personal, que la moralidad se encuentra relacionada con la individualidad “Ni el
sentido formal de moralidad (en el sentido de un sistema moral), ni lo que llamaríamos
"nuestra moralidad" pueden entenderse sin recurrir al concepto de identidad personal-
social.” Vásquez, G. H. (1990). y que, esto justifica que la situación económica del joven
del cuento lo obligase a robar a la anciana y que de igual manera la anciana robara los
cabellos de las personas fallecidas para venderlos como pelucas “-Ciertamente, arrancar los
cabellos a los muertos puede parecerle horrible; pero ninguno de éstos merece ser tratado
de mejor modo. Esa mujer, por ejemplo, a quien le saqué estos hermosos cabellos negros,
acostumbraba vender carne de víbora desecada en la Barraca de los Guardianes, haciéndola
pasar nada menos que por pescado. Los guardianes decían que no conocían pescado más
delicioso. No digo que eso estuviese mal pues de otro modo se hubiera muerto de hambre.”
(Akutagawa, R. 1915) Sin embargo, este joven hace una reflexión muy importante, la cual
es que su situación económica lo obliga a robar y que por tanto, la anciana al encontrarse en
la misma situación lo pudiese entender ya que ella hace lo mismo: “¿Qué otra cosa podía
hacer? De igual modo podría justificar lo que yo hago ahora. No tengo otro remedio, si
quiero seguir viviendo. Si ella llegara a saber lo que le hago, posiblemente me perdonaría.”
(Akutagawa, R. 1915) Sin embargo no considero que este bien hecho siendo justificado por
la situación en la que se encuentran ambos personajes, ya que si se realiza un análisis, todas
las acciones inmorales tienen una justificación de un bienestar individual, de esta manera
no habría un orden en la sociedad ya que cada individuo se sustentaría en que esa acción
corresponde a su bienestar. (2)

Kant fue un autor que logra postular que se debe de intentar explicar el origen de la razón
que esta determinada por la acción de cada individuo. Ya que la importancia va a impactar
en la autonomía de cada sujeto, de esta manera la conciencia moral es una forma de
oposición a la naturaleza. “Para Kant, lo importante era la autonomía del sujeto. Afirmaba
que la conciencia moral es el reino de lo que debe ser, como una forma de oposición a la
naturaleza, en tanto esta se constituye en el reino del ser.” Zerpa, C. E. (2007). Esto se
extrapola al cuento ya que los personajes claramente buscan justificar su accionar, y esto se
considera una acción natural ya que hacer lo contrario se considera ir en oposición a la
naturaleza. Según lo anterior, encontramos que inicialmente el joven no estaba de acuerdo
con que la anciana robara, “Ese odio -pronto lo comprobó- no iba dirigido sólo contra la
vieja, sino contra todo lo que simbolizase “el mal", por el que ahora sentía vivísima
repugnancia. Si en ese instante le hubiera sido dado elegir entre morir de hambre o
convertirse en ladrón -el problema que él mismo se había planteado hacía unos instantes-
no habría vacilado en elegir la muerte.” (Akutagawa, R. 1915) Sin embargo al conocer su
situación y al ser esta semejante a la de el, consideró que será correcto hacer lo mismo “El
sirviente no sólo dejó de dudar (entre elegir la muerte o convertirse en ladrón) sino que en
ese momento el tener que morir de hambre se había convertido para él en una idea absurda,
algo por completo ajeno a su entendimiento.” (Akutagawa, R. 1915) De esta manera,
pienso que cada individuo es libre de hacer lo que considere apropiado, sin embargo, que es
inexacto que a partir de la empatía de encontrar a un individuo en su misma situación sea
correcto justificar una acción inmoral; en este caso el robar a la anciana para sobrevivir, aun
sabiendo que ella es pobre igual a el. (3)

En conclusión, se puede establecer que el joven sirviente del cuento justifica su accionar
inmoral en base a que si no roba morirá de hambre, sabiendo de igual manera que si roba a
la anciana será esta la que padecerá. A pesar de todas las premisas investigadas, en las que
se presentan argumentos en torno a las acciones morales e inmorales del hombre,
encontramos que en el cuento estas acciones giran en torno a un bien individual, que luego
de haberse considerado que están mal, al hombre encontrarse en esta situación toma la
decisión de realizarlas, sabiendo sus consecuencias sociales y justificándose (en este caso)
en su situación socioeconómica.

Referencias
1. Noguera, M. E. (2018). Desarrollo moral y sociedad. Revista educación en valores,
(29), 39-51.
2. Tugendhat, E., & Vásquez, G. H. (1990). El papel de la identidad en la constitución
de la moralidad. Ideas y valores, 39(83-84), 3-14.
3. Zerpa, C. E. (2007). Tres teorías del desarrollo del juicio moral: Kohlberg, Rest,
Lind. Implicaciones para la formación moral. Laurus, 13(23), 137-157

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