Curso - Herramientas para La Comunicación Eficaz en Entornos Digitales
Curso - Herramientas para La Comunicación Eficaz en Entornos Digitales
Curso - Herramientas para La Comunicación Eficaz en Entornos Digitales
https://www.youtube.com/watch?v=n4UhQYQ4h4Q
El lenguaje es la herramienta que posibilita al hombre realizar o expresar sus ideas, pensamientos,
sentimientos y que se materializa a través de signos verbales produciendo la comunicación.
El lenguaje y la comunicación están muy relacionados entre sí, donde el lenguaje aplica los signos y la
comunicación se vale de diferentes elementos donde se configura los signos lingüísticos. Para que se
configure la comunicación este debe de ir dentro de un contexto adecuado en donde el lenguaje se
aplique como un mensaje claro.
Otro aspecto que puede resultar en la falla de la comunicación es con respecto al contexto.
Su éxito o fracaso dependerá no del azar o de la casualidad, sino del menor o mayor control que
poseamos respecto de la comunicación.
Sin embargo, aprenderlas involucra esfuerzo, tiempo y, por qué no decirlo, muchas frustraciones.
Igualmente, laborioso resulta para el profesional de cualquier área del conocimiento humano exponer
sus ideas, articularlas, seleccionar las palabras apropiadas y ordenarlas en un lenguaje que
argumentativo, coherente y persuasivo. En muchas ocasiones, es preciso contar con la ayuda de un
especialista que sea capaz de hallar las inconsistencias en el discurso para poder rectificar el camino y
proponer nuevas estructuras.
El texto anterior sintetiza los contenidos del curso “Herramientas para la comunicación eficaz en
entornos digitales”, siendo solo un peldaño de tu formación personal y profesional. Estamos seguros de
que su estudio será revelador y despertará en ti el deseo de indagar y desarrollar su propia creatividad
lingüística.
Somos primordialmente seres “sociales”, en el sentido de que pasamos la mayor parte de nuestras vidas
con otras personas. Por consiguiente, es importante aprender a entenderse con los otros y a funcionar
adecuadamente en situaciones sociales. Ciertas habilidades de comunicación nos ayudan a mejorar las
relaciones interpersonales. La comunicación es el acto por el cual un individuo establece con otro un
contacto que le permite transmitir una información. En la comunicación intervienen diversos elementos
que pueden facilitar o dificultar el proceso.
¿Qué es la comunicación?
Proporcionar una noción única de comunicación es, en apariencia, una tarea sencilla. La palabra
“comunicación” es definida por la Real Academia Española simplemente como “acción y efecto de
comunicarse”. Quizá, para hacer más comprensible lo que este acto supone, sea preciso remitirnos a la
raíz latina del término, el vocablo communis: entre sus significados destaca el de “recibido y admitido de
todos o de la mayor parte”. Y es esta idea, la de un todo, una colectividad de participantes sin la cual la
comunicación no sería posible, es lo que confiere a este proceso su carácter social.
Proporcionar una noción única de comunicación es, en apariencia, una tarea sencilla. La palabra
“comunicación” es definida por la Real Academia Española simplemente como “acción y efecto de
comunicarse”. Quizá, para hacer más comprensible lo que este acto supone, sea preciso remitirnos a la
raíz latina del término, el vocablo communis: entre sus significados destaca el de “recibido y admitido de
todos o de la mayor parte”. Y es esta idea, la de un todo, una colectividad de participantes sin la cual la
comunicación no sería posible, es lo que confiere a este proceso su carácter social.
Si desplazamos nuestra atención hacia un ámbito más especializado encontraremos que los autores, sin
importar las corrientes a las que pertenezcan ni su momento histórico, parecen coincidir en que se trata
de un proceso dinámico, en el que necesariamente participan una fuente o emisor que envía un mensaje
a través de un canal o medio a un potencial receptor que, a su vez, puede convertirse también en
emisor.
La posibilidad de respuesta por parte de quien recibe el mensaje y que ésta se traduzca en otro mensaje
por parte de quien inició el intercambio hace que el proceso se extienda casi ilimitadamente. Pero este
hecho obvio no parece tan relevante como la complejidad misma del acto comunicativo.
Algunas de las primeras investigaciones sobre comunicación, como las desarrolladas por Harold Laswell,
Carl Hovland, Kurt Lewin y Paul Lazarsfeld cifraban su interés en las funciones de los medios, de ahí que
la corriente que dio origen a estas nociones, se le conozca como “funcionalista y anticipaban una
respuesta que favoreciera “hacer campaña a favor de los objetivos sociales en la esfera de la política, la
guerra, el desarrollo económico, el trabajo y, a veces, la religión”.
Hoy sabemos que la comunicación involucra elementos múltiples y factores que hacen imposible
predecir una respuesta infalible, que haga que las personas participen en la consecución de los objetivos
políticos, sociales y económicos de una nación.
Cada vez que un individuo escucha un mensaje que forma parte de un discurso, que a su vez ha sido
estructurado en un contexto específico en el que intervienen fuerzas políticas, económicas y sociales
múltiples y cambiantes, tiene la posibilidad de interpretar de acuerdo con sus creencias, su experiencia,
los códigos y sistemas que ha aprendido y una cantidad de elementos que resultan tan extensos como
complejos. Para entender la manera en que las vivencias y todo aquello que rodea al individuo actúan
para dotar de significación un mensaje.
Tipos de comunicación
Las formas de comunicación humana pueden agruparse en dos grandes categorías: la comunicación
verbal y la comunicación no verbal.
La comunicación verbal se refiere a las palabras que utilizamos y a las inflexiones de nuestra voz (tono de
voz).
La comunicación no verbal hace referencia a un gran número de canales, entre los que se podrían citar
como los más importantes el contacto visual, los gestos faciales, los movimientos de brazos y manos o la
postura y la distancia corporal.
Comunicación no verbal: Contacto visual, gestos faciales (expresión de la cara), movimientos de brazos y
manos, postura y distancia corporal.
Pese a la importancia que le solemos atribuir a la comunicación verbal, entre un 65 % y un 80 % del total
de nuestra comunicación con los demás la realizamos a través de canales no verbales. Para comunicarse
eficazmente, los mensajes verbales y no verbales deben coincidir entre sí. Muchas dificultades en la
comunicación se producen cuando nuestras palabras se contradicen con nuestra conducta no verbal.
Estilos de comunicación
A los comunicadores pasivos se les complica expresar sus necesidades y batallan para mantenerse firmes
a sus creencias. Dudan en decir lo que piensan porque no quieren provocar conflictos. Para sus colegas,
las comunicadores pasivos son agradables, incluso tímidos.
Silencio. Si se le dificulta expresar su opinión, especialmente durante las juntas importantes, podrían
ser un comunicador pasivo.
Cambia de opinión. Hay que poner atención a las personas que sí expresan su opinión, pero en cuanto
alguien lo cuestiona, cambia de opinión. Por ejemplo, un comunicador pasivo puede hacer una
sugerencia, pero en cuanto alguien la cuestiona, dice algo del estilo: "Bueno, no importa", o "Estoy de
acuerdo con lo que tú digas".
En el lado opuesto del espectro, los comunicadores agresivos dicen las cosas de manera directa, hasta
cortante. En general se les facilita hablar en público y son los que más participan durante las reuniones
de grupo. No les cuesta trabajo expresar su opinión.
Los comunicadores pasivo-agresivos no son directos, más bien buscan maneras indirectas de decir lo que
les molesta. Son agradables con algunos y desagradables con otros. Esto sucede porque cuando surge un
conflicto entre un comunicador agresivo-pasivo y alguien más, el comunicador pasivo-agresivo evita
resolver el problema directamente.
Tienen un trato frío: parecen amigables y amistosos con todos excepto con las personas con las que
tienen un conflicto.
Hablan con un miembro del equipo sobre su conflicto con otro miembro del equipo, pero no hablan
directamente con la persona del problema sobre su molestia.
Su comportamiento difiere de lo que dice o de lo que su lenguaje corporal, tono de voz o expresiones
faciales expresan. Los comunicadores pasivo-agresivos pueden decir una cosa, pero hacer otra.
Ya vimos los problemas asociados con los estilos de comunicación pasivo, pasivo-agresivo y agresivo.
Ahora veamos es estilo comunicativo ideal: el asertivo.
Un comunicador asertivo toma al toro por los cuernos y no se anda con rodeos, se expresa y pone sus
límites, pero respetando el de los demás.
"Cuando tienes un estilo asertivo, no te da pena pedir lo que necesitas, puedes hablar abiertamente de
lo que quieres y te das cuenta cuando alguien se quiere aprovechar de ti, "Tienes confianza para hacer
las cosas y lograr un impacto en tu entorno."
Resuelven los problemas tan pronto como se presentan en vez de evadirlos y permitir que se hagan
más grandes.
Demuestran inteligencia emocional, que es la habilidad de reconocer emociones (en ellos mismos y en
los demás) y las manejan de manera saludable.
Reconocen y validan otros puntos de vista, pero también saben expresar su propia perspectiva.
El lenguaje corporal puede revelar tanta o más información que las palabras
4. Gestionar la interacción.
7. Producir engaño.
Hablar es mucho más que reunir palabras de forma más o menos afortunada; escuchar es mucho más de
que oír; y comunicar es mucho más que enviar y recibir paquetes de datos.
Evolutivamente hablando, el lenguaje corporal nos acompaña desde mucho antes de convertirnos en
humanos, está fuertemente vinculado con la parte emocional, intuitiva e instintiva de nuestro cerebro, y
se desarrolla principalmente en el plano inconsciente. De ahí su importancia, y también su
desconocimiento.
La postura corporal indica claramente el estado emocional de una persona. Las palabras solo
representan el 7% de lo que decimos. De ahí que sean tan relevantes nuestras posturas, gestos y
movimientos frente a nuestros mensajes.
La postura nos da señales clave acerca del carácter de una persona y también habla mucho sobre la
actitud que ésta tiene ante los estímulos que recibe del exterior.
La postura es el elemento más fácil de observar e interpretar dentro de la comunicación no verbal, aun
en entornos virtuales, aunque parece que pasa desapercibido, nuestro cerebro recibe y procesa esta
información, muchas veces de manera inconsciente y responde en forma automática ante estos
estímulos. Las posturas nos envían señales y mensajes sobre los juicios, opiniones y sentimientos de
alguien con respecto a una situación u otra persona.
El tono de voz es uno de los elementos con mayor influencia sobre la comunicación.
En tal tono hay una serie de parámetros sonoros que le dan sentido, consciente e inconsciente, al
mensaje que se está transmitiendo.
INTERPRETACIÓN PSICOLÓGICA
INTENSIDAD O VOLUMEN
Define de manera general cómo interactúa una persona consigo misma y con los demás:
Articulación o vocalización
La vocalización tiene que ver con la capacidad de comprensión y el interés en ser comprendido:
Velocidad
• REFORZAR
La Comunicación No Verbal busca repetir, redundar o duplicar el mensaje que se busca transmitir en la
Comunicación Verbal.
Por ejemplo, cuando alguien dice “hola” y también mueve sus manos para expresar saludos, o cuando
pruebas algo insípido y no solo expresas tu malestar, sino que también frunces el ceño.
• CONTRADECIR
Este es el caso de las personas que afirman “estar bien” cuando muestran signos de tristeza o apatía en
su rostro o su forma de caminar.
• SUSTITUIR
Ocurre cuando reemplazamos a la Comunicación Verbal por la No Verbal. Es decir, cuando en lugar de
decir “hasta luego” o “nos vemos”, simplemente agitamos las manos en señal de despedida.
Un bebé moviendo la cabeza de lado a lado para indicar que no quiere comer demuestra la capacidad de
la comunicación verbal para sustituir a la verbal, más aún cuando ésta no existe o aún no está
desarrollada.
• ACENTUAR
Por ejemplo, cuando hablamos con un tono de voz más fuerte o con mayor rapidez estamos
aumentando la fuerza de la comunicación.
Es un caso típico cuando aumentamos el volumen de nuestra voz al decir palabras como “no” o “nunca”,
o al momento de imponer una orden o advertencia.
• REGULAR
La Comunicación No Verbal también cumple una función de ordenar los turnos de la comunicación (así
como su retroalimentación).
Un caso típico es hacer señales con las manos para indicar que hemos termina Un e do la conversación, o
simplemente guardar silencio.
Todas estas funciones tienen como misión ayudarnos a que el proceso de la comunicación pueda ser
llevado de forma eficiente y entendible.
• EXPRESAR ESTADOS DE ÁNIMO
Las personas normalmente expresamos cómo nos sentimos a través de gestos, movimientos, tonos de
voz y, en general, nuestro lenguaje corporal.
Tal vez seas poco comunicativo, pero aun así tus hombros decaídos podrían delatarte.
Antes de entrar en materia, pensemos, cual es uno de los retos más grandes que nos enfrentamos en
relación al trabajo-eficiencia, demos respuesta a lo siguiente:
Actualmente, los equipos de trabajo tradicionales se han convertido en denominados equipos virtuales,
es decir, en un grupo de personas que desarrollan su actividad profesional de manera independiente
pero que comparten la misma tecnología para alcanzar un fin común.
Para poder conseguir este objetivo, han de trabajar de manera eficiente y productiva en remoto y una de
las claves más importantes para lograrlo es la comunicación.
Y, en definitiva, para trabajar en remoto de la manera más eficiente es esencial escoger los canales de
comunicación adecuados. Para ello, lo primero de todo, es saber identificar la diferencia entre
comunicar e informar. Cuando utilizamos la razón para elaborar un mensaje y la emoción para generar
una transformación en el receptor, estamos comunicando; sin embargo, cuando transmitimos el
mensaje sin esperar un comportamiento por parte de nuestro oyente, simplemente estamos
informando.
Para que se puedan estrechar lazos fuertes entre los miembros del equipo, es necesario comunicar y no
informar. De esta manera, los trabajadores se sentirán parte del equipo y no percibirán sensaciones de
soledad y aislamiento provocados por la distancia.
RECORDEMOS, La importancia de la comunicación no verbal cuando nos comunicamos a través de
medios digitales. Ya que tan solo "el 70% de la comunicación se hace a través de los canales no
verbales".
CLAVES:
A la hora de realizar estas videoconferencias, también es importante que nuestra mirada se dirija a la
cámara para poder captar mejor la atención de los receptores.
Es necesario cuidar el lenguaje corporal, ya que, como decimos, será la clave para que el mensaje
pueda llegar al destinatario. Para el emisor, se recomienda elegir un plano medio en el que se vea la cara
y los brazos.
Es importante también crear un espacio o background que no distraiga la atención de los receptores y
que transmita seriedad y profesionalidad.
Disponer de una buena iluminación es otra de las claves para no perder la atención de los receptores.
Elegir un vestuario adecuado nos ayuda también a transmitir un mensaje sin perder niveles de
seguridad sobre lo que estamos comunicando.
Las reuniones, igual que las físicas, han de ser rápidas, eficaces, escuetas y operativas.
El uso del micrófono en las videoconferencias también es uno de los aspectos clave de esta
comunicación. Si no vas a intervenir en ella, es recomendable que permanezca apagado. De esta manera,
cuando lo enciendas, el líder de la reunión interpretará que quieres aportar algo.
Otra de las funciones que debe realizar el líder de una reunión, debe ser la de dar luz a todos los
miembros del equipo. Tiene que asegurarse de que todos los profesionales tienen su momento para ser
el centro de atención en su turno de palabra. Así, evitará que se sientan solos y discriminados dentro del
equipo.
Como hemos dicho anteriormente, es fundamental utilizar los elementos visuales a la hora de
transmitir un mensaje. Por eso, se recomienda incluir imágenes, vídeos y mapas en las presentaciones
que vayamos a exponer. De esta manera, facilitaremos el mensaje.
También es necesario utilizar adecuadamente los canales de comunicación. Los canales síncronos son
los que transmiten el mensaje de manera instantánea y nos ayudan a recibir feedback de manera más
rápida, enriqueciendo la información (por ejemplo, el Skype o el teléfono). Sin embargo, si lo que
queremos es priorizar las tareas, mejorar la organización e involucrar a más miembros del equipo,
deberemos utilizar los canales asíncronos (como el correo electrónico o los foros).
A la hora de utilizar el lenguaje, es necesario utilizar también palabras inclusivas para hacer sentir a los
trabajadores parte del equipo y contrarrestar la individualidad que se genera trabajando a distancia. Así,
debemos incorporar palabras como "nosotros" y no términos como "tú" o "yo".
"Los mejores comunicadores son casi siempre los mejores oyentes". Por eso es imprescindible poner
en práctica la escucha activa si queremos transmitir un mensaje. Si este no se entiende, la
responsabilidad debe caer sobre el emisor, no sobre el receptor.
https://www.youtube.com/watch?v=-GYCQVojl5Q
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Las nuevas tecnologías han abierto un camino desconocido para las herramientas de comunicación. La
inteligencia artificial, el análisis de datos y los algoritmos forman parte de tu entorno y no estaría de
más que consideraras adaptar tus contenidos a la era digital, evitando que ciertos comportamientos se
conviertan en bloqueadores de la comunicación, tales comportamientos o errores pueden ser:
Mantener el silencio
Olvidarse de la mediación
Mantengamos siempre presente que no es lo mismo comunicar que informar, y que el desarrollar una
escucha activa es una de las principales habilidades de un buen comunicador.
Sabemos que el lenguaje no verbal tiene un papel indispensable en nuestra comunicación diaria. Y
además, las personas cambiamos constantemente las pistas no verbales que emitimos a través del
movimiento corporal y las expresiones faciales.
Aunque es un aspecto significativo de la psicología social humana, los primeros estudios sobre el
lenguaje corporal se hicieron populares en la década de los 60.
Pero el, probablemente considerado, trabajo más importante fue publicado mucho antes del siglo XX:
“La expresión de las emociones en el hombre y los animales”, de Darwin. Él observó, por ejemplo, que la
gente de todo el mundo utilizaba las expresiones faciales de forma similar.
Tal es el papel de la comunicación no verbal, que muchos investigadores coinciden en que son los
movimientos corporales los que permiten formar relaciones, no las palabras.
Los gestos serían una de las formas más importantes de comunicación no verbal. Incluyen movimientos
de manos, cabeza y otras partes del cuerpo que permiten a las personas comunicar sus sentimientos y
emociones.
La mayoría de los gestos básicos son los mismos en todo el mundo: cuando estamos felices, sonreímos;
cuando estamos enfadados, fruncimos el ceño.
La posición de la cabeza también revela mucha información sobre el estado emocional. Por ejemplo, las
personas tienden a hablar más si el oyente les anima asintiendo con la cabeza. Si se levanta la barbilla,
puede significar que la persona está mostrando superioridad o incluso arrogancia, mientras que exponer
el cuello puede interpretarse como una señal de sumisión.
Señalamos, como siempre, la necesidad de tener en cuenta el contexto y diferentes partes del cuerpo
para interpretar correctamente el estado emocional.
Si bien las emociones se pueden expresar de diferentes formas, el reconocimiento automático de ellas
se ha centrado principalmente en las expresiones faciales y el habla, dejando en un segundo plano los
trabajos sobre gestos/movimientos corporales y la postura.
El receptor
En la comunicación se define como receptor a quien cumple la función de recibir información la cual
proviene del emisor. Estos datos están contenidos en un mensaje, el cual puede ser descifrado
empleando un código en específico. Por lo tanto, quien cumple este rol deberá tener la capacidad de
interpretarlo o decodificarlo, de acuerdo a los estándares comunicativos establecidos por ambas partes.
El receptor pasa a ser el responsable de que el mensaje puede ser entendido y a su vez de generar una
respuesta que se adecue a su contenido. Es decir, se encargará de descifrar e interpretar cada uno de
los signos que se han recibido. Para que el proceso comunicativo sea factible también hay que considerar
el tipo de canal y de código empleado.
Toda la información que es transmitida por el emisor, conservará sus mismas características semánticas
si el receptor posee las capacidades para hacerlo. En ciertas ocasiones, cuando hay un error en la
interpretación del mensaje, se debe a que el receptor no ha sido capaz de lograrlo. Ante esta situación,
es posible que el intercambio comunicativo comience a presentar otras dificultades.
Consideremos las características principales, que nos ayudan a identificar el rol del receptor:
Se considera que el receptor depende de la iniciativa tomada por el emisor, por lo tanto, siempre va a
esperar a que el proceso se inicie por cuenta de él.
Para que una comunicación sea considerada como efectiva, ambas partes deberán emplear una
codificación que sea comprensible para ambos.
El receptor decide cuál será el uso de la información que ha recibido. Podría desechar o en cambio
emplear este conocimiento para una finalidad determinada. Si bien es cierto que la comunicación
comienza por decisión del emisor, la continuación del proceso depende del receptor.
De igual forma, el receptor emite una señal de aceptación para la recepción del mensaje. Por lo tanto,
habrá las mismas posibilidades para la admisión o el rechazo del envío de la información.
Generalmente el receptor se adecúa a las condiciones generadas por el emisor. Esto quiere decir que
se ajustará al tipo de codificación y canal seleccionado por quien cumple el rol del emisor.
El receptor interpreta el mensaje de acuerdo a su propio criterio. El éxito del proceso comunicativo en
parte es responsabilidad del receptor. Si ésta no es capaz de interpretar correctamente el mensaje del
emisor, lo más probable es que haya una interrupción en el proceso.
En determinado momento durante esta interacción, el receptor va a efectuar un proceso inverso al del
emisor. Se supone entonces que podría ocupar el puesto del emisor porque debe haber un intercambio
de información mutua.
El receptor debe ayudar o brindar apoyo al emisor, esto es especialmente relevante cuando se trata
de una comunicación no verbal. Se considera que se genera una colaboración, si el mensaje es expresado
por medio de recursos visuales; se enfatiza el uso de medios que faciliten a ambas partes decodificar el
mensaje recibido.
Es responsabilidad del receptor analizar y reconstruir cada uno de los significados incluidos en el
mensaje. Para ello deberá sintetizar y tratar de crear una respuesta coherente que se corresponde al tipo
de interacción que se está llevando a cabo.
Es importante acotar que en una comunicación puede haber uno o varios receptores de un mismo
mensaje. En estos casos, se requiere de la ayuda mutua para que todos puedan tener una comprensión
clara y precisa del mensaje.
Después de hacer el proceso de decodificación o traducción del mensaje, el receptor es quien decide
sí va a emitir una respuesta con respecto al mismo. Es decir, el receptor decide si ha comprendido o no
dicho mensaje, depende de él si el proceso comunicativo tendrá una continuación.
Tipos de escucha
En ese acto humano te haces presente -o ausente- frente al otro; damos señales y entablamos una danza
que, si es virtuosa, puede ayudarte a mejorar sustancialmente los vínculos.
Dentro del mundo de la escucha hay otro aspecto fundamental, y es el de la atención. Se trata del nivel
de involucramiento consciente al estar totalmente presente. Solo así es posible construir un vínculo de
comunicación más sólido, consistente, auténtico y cercano, que si lo haces en medio de interferencias,
distracciones y ruidos.
Posiblemente hayas escuchado mucho acerca de la escucha activa, aunque hay más. Siempre viene bien
ampliar nuestro mapa de referencia para poder conocer en distintas perspectivas y así, escoger la forma
más apropiada según el contexto del intercambio con otras personas.
ESCUCHA APRECIATIVA
Se da cuando escuchas sin prestar atención; oímos simplemente. Escuchar es más profundo y
comprometido. No se presta atención. “Oyes” un ruido sin importante demasiado lo que el otro diga.
Ejemplo: una persona de atención al público poco comprometida con su tarea, al recibir un reclamo de
un usuario.
ESCUCHA SELECTIVA
En este caso, seleccionas la información que te interesa. Ante algunos aspectos del mensaje que nos
transmiten, tomas eso y dejas de lado el resto. Es decir que aplicas filtros, e incluso juicios e
interpretaciones para seleccionar. Como resultado, es una escucha parcial, fragmentada por tu propio
mapa de interés. Ejemplo: Vas a hacer una compra y tu prioridad absolutas un presupuesto preasignado
que tienes en mente; todo lo demás que te digan se filtrará de acuerdo a si se ajusta o no a ese número.
ESCUCHA DISCERNITIVA
Es en la que escuchas el mensaje completo, y luego determinas qué detalles te resultan relevantes.
Posiblemente el foco está puesto en el fondo de la cuestión -de allí que necesitas escuchar todo y, recién
luego, seleccionas-. Ejemplo: cuando vas a un abogado y te expone los pros y contras de una situación
que buscas resolver; escuchas sus argumentos y posiciones, y luego escoges lo relevante para ti.
ESCUCHA ANALÍTICA
Para este modelo de escucha prestas atención al orden y sentido de la información, y lo que buscas es
entender la relación en las ideas para reflexionar sobre el mensaje. Generalmente prevalece el
hemisferio izquierdo del cerebro, de tipo racional, para separar la información que se recibe. Ejemplo:
cuando te explican cómo completar un documento o escuchas una argumentación con detalles. Luego,
analizas si esas conclusiones te parecen apropiadas y puedes realizar preguntas para corroborarlo.
ESCUCHA SINTETIZADA
A través del acto de escuchar, diriges tú la conversación para lograr obtener cierta información
específica. Una técnica es hacer preguntas directas para relevar las ideas de los demás. Ejemplo: tienes
pensado comprar o rentar un apartamento y haces preguntas al agente inmobiliario, que guían la
conversación y te permiten sacar conclusiones rápidamente a partir de las respuestas, y de tus deseos
sobre la propiedad y tus percepciones.
ESCUCHA EMPÁTICA
La empatía es la habilidad de ponerse en el lugar de los demás, y en este tipo de escucha logras una
conexión que va más allá de lo racional: hay un involucramiento de tipo emocional, sin que esto
signifique mimetizarte con lo que le pasa al otro. Estás totalmente presente y vas al compás del diálogo
que mantienen. Interpretas el mensaje desde el mundo de la persona que lo emite. Ejemplo: tu pareja
narra un acontecimiento del trabajo que le afecta emocionalmente; y estás presente allí, escuchándole,
para brindar soporte y apoyo.
ESCUCHA ATENTA
ESCUCHA ACTIVA
Conectada con la atenta y la analítica, y aspectos de todas las demás. Podría decirse que este tipo de
escucha va más allá de las palabras: observas el lenguaje corporal, la velocidad al hablar, el tono de voz,
y, claro, el mensaje. Se da una conexión profunda, atenta, sensible, buscando interpretar desde qué
universo propio se comunica la otra persona.
Seguro que te han dicho “no sabes comunicarte, ni expresarte” o quizás “debes mejorar tu
comunicación para alcanzar tus objetivos”.
En el avance de este curso has podido conocer más detalles sobre lo que es la comunicación, elementos,
características, barreras, es importante que reconozcas tus áreas de oportunidad y puedas mejorar tu
comunicación. Lo primero que debes pensar para mejorar es: ¿Quién nos va a entender si no nos
comunicamos correctamente? por esta razón el mejorar nuestra comunicación nos aportará muchos
beneficios.
Asertividad
La comunicación es vital para las personas, es por ello que tener el mensaje estructurado y bien definido,
nos facilitara el proceso para comunicarnos
· Comunicación formal:
Este tipo de comunicación abarca un diálogo técnico, profesional de forma más educada. Por ejemplo,
una entrevista.
· Comunicación informal:
Se realiza en un ambiente más cercano, donde el entorno es de confianza. Por lo general, se utilizan
palabras muy frecuentes. Por ejemplo, la conversación entre familiares.
· Comunicación vertical:
Se puede apreciar en las empresas. Ejemplo: Un empleado le reporta a su supervisor, este al jefe y así
hasta llegar al director de la empresa.
· Comunicación lateral:
Se observa en las corporaciones, donde un jefe de departamento se comunica con otros jefes de
diferentes departamentos.
NOTA: Antes de escoger el tipo de comunicación, ten en consideración el lugar y las personas con las que
quieres conversar. Además, ten presente estas características:
1. Clara y precisa: Los mensajes deben ser claros y precisos. Con un orden de ideas.
2. Finita: Para comprender el orden de ideas, estas deben tener un fin. De nada sirve un mensaje que
no tiene fin, ya que no ocurriría la retroalimentación por parte del receptor.
3. Secuencia: Para comprender el mensaje este debe tener una secuencia. De lo contrario ocasiona
ruido y no sería una comunicación eficaz.
ASERTIVIDAD
La comunicación asertiva se basa en una actitud personal positiva a la hora de relacionarse con los
demás y consiste en expresar las opiniones y las valoraciones, evitando descalificaciones, reproches y
enfrentamientos, es la una de las vías más adecuadas para la interacción y la comunicación entre las
personas, optimizar nuestras relaciones, no es solamente decir lo que pensamos y de qué manera lo
decimos, es también comprender mis necesidades, las de las demás personas (la empatía), ser
responsable de mis emociones y conectar con los demás.
La comunicación asertiva con relación al comportamiento externo, nos encontramos que las personas
hablan de manera fluida, mantienen un contacto visual que no es amenazante, y hay comodidad en su
postura. Pasando a otros componentes, nos encontraríamos que en cuanto al pensamiento y a la
emoción, la comunicación asertiva se manifiesta por lo siguiente:
Control emocional
El lenguaje persuasivo puede hacer que cualquier tipo de mensaje sea más atractivo y convincente. Sin
embargo, su propósito final es influir en cómo piensas, así que es importante que reconozcas los tipos
más comunes de lenguaje persuasivo, veas más allá de la retórica y decidas por ti mismo.
Cuando hablamos de retórica nos referimos al arte de escribir o hablar tan bien que se puede convencer
o conmover a alguien.
· Contar historias
Por ejemplo, contar historias es una de las formas más recurrentes de convencerte. El entretenimiento
hace más sencillo que aceptes un mensaje en particular, ya sea a través de una película o un comercial
de 30 segundos. Sin embargo, aunque es fácil ser cautivado por una buena historia, es importante que te
preguntes: ¿es esta historia cierta e imparcial, o ha sacrificado datos exactos por el bien de transmitir el
mensaje?
· Datos o hechos
Presentar evidencia puede tener una gran influencia en cómo percibes el mensaje, pero solo porque los
medios incluyan pruebas, eso no significa que estén siendo totalmente honestos. A veces, mezclarán
hechos con verdades a medias o exageraciones para hacer que el mensaje parezca más creíble. Examina
con cuidado todas las pruebas antes de aceptar un mensaje como confiable.
· Ataques
Los ataques pueden apuntar a las fallas de la competencia. Además, suelen jugar con los miedos y la ira
de la audiencia, especialmente los medios políticos. La siguiente vez que veas un ataque, ten en mente
que eso está intentando alterar tus emociones para convencerte de una idea en específico. También
pueden adornar hechos o tomar una visión sesgada, entonces intenta no juzgar antes de investigar la
verdad.
· Los halagos
La adulación ha sido un método confiable de persuasión por mucho tiempo, ya que los medios quieren
que te sientas bien sobre un producto o una idea. Sin embargo, ¿cuán sinceros pueden ser los halagos
producidos en masa? Haz tu mejor esfuerzo para no ser atraído por las palabras amables y considera si
te están diciendo solamente lo que quieres oír.
· Lenguaje inclusivo
La comunicación está presente en todo quehacer humano, e incluso animal. La diferencia radica en la
palabra, que puede ser hablada o escrita, en las emociones que transmitimos a través de esas palabras,
pero también a través de los gestos, la actitud y en lo racional. Para relacionarnos con otros necesitamos
comunicarnos, hacernos entender, expresar nuestros pensamientos, conocimientos y compartirlos,
además de recibir una respuesta de esa manifestación.
Sin lugar a dudas, la comunicación es la clave para nuestro desarrollo personal y profesional. En este
sentido, en el proceso de negociación, la comunicación desempeña un rol fundamental. En la medida en
que el proceso de negociación se enmarque en la comunicación ética y en los principios del ganar-ganar,
se pueden lograr acuerdos beneficiosos, tanto en los resultados, como en el establecimiento de las
relaciones personales y profesionales de larga duración.
¿Qué elementos no verbales se deben tener en cuenta dentro del campo de la negociación?
Distancia interpersonal: Esto puede resultar de vital importancia en una negociación, ya que
mantener una distancia excesiva puede dar la impresión de desinterés. Una distancia excesivamente
cercana puede representar una gran presión para el individuo.
Imagen y contacto físico: resultar atractivo tiene diversas consecuencias, como ser considerado más
persuasivo, con más habilidades sociales, mejor adaptados, más deseables y exitosos, y más
competentes. Esto, a su vez, también puede entenderse de nuestro modo de vestir, que puede afectar a
nuestra credibilidad. Por otro lado, el contacto físico puede ser indicador de interés o de dominio,
aunque también está sujeto al contexto cultural. Por ejemplo, en Latinoamérica en general hay más
contacto físico que en Europa.
• Los gestos y las posturas: uno de los gestos más importantes en las relaciones comerciales es el
apretón de manos, que permite determinar la actitud de los individuos (predominancia, igualdad,
sumisión, etc.). Por otra parte, la postura también informa del estado emocional de las personas, y
puede mostrar signos de indiferencia, respeto, agradecimiento, etc.
5.- La comunicación en entornos virtuales
Un martillo sirve lo mismo para romper que para construir. Un martillo en una mano poco hábil echará a
perder el más fino de los materiales. Y aunque el martillo y los materiales de construcción sean de gran
calidad, y la mano que lo sostenga sea hábil, si no se le dan instrucciones claras de qué debe construir, se
corre el riesgo de obtener un armario en donde se quería una mesa.
El punto es que las herramientas por si mismas no solucionan nada si detrás no hay una estrategia, con
procesos claros y un equipo humano calificado y alineado con los objetivos de negocio de la empresa. En
el caso de la comunicación digital, las herramientas deben estar allí para facilitar los procesos
comunicativos, para hacer que la información se traslade de forma eficiente, clara y veloz.
Actualmente, los equipos de trabajo tradicionales se han convertido en denominados equipos virtuales,
es decir, en un grupo de personas que desarrollan su actividad profesional de manera independiente
pero que comparten la misma tecnología para alcanzar un fin común.
Para poder conseguir este objetivo, han de trabajar de manera eficiente y productiva en remoto y una de
las claves más importantes para lograrlo es la comunicación.
Comunicación virtual
CORREO ELECTRÓNICO
WIKIS
BLOGS
Pero también se pueden formar comunidades virtuales, entre las que podemos identificar:
FOROS DE DISCUSIÓN
REDES SOCIALES
VIDEOCONFERENCIAS
Se establecen vínculos de manera sincrónica y acrónica. Esto quiere decir que puede ser una
comunicación en tiempo real o en diferido.
Permite establecer vínculos con personas de los orígenes más variados pero que tienen un
interés en común.
El intercambio de datos e información puede incluir los formatos más variados: texto, video,
imagen, sonido, fotografía, etc.
El intercambio de datos e información puede ser bidireccional o multidireccional, dependiendo
de los casos.
Las relaciones entre los miembros de la comunidad virtual tienden hacia la horizontalidad.
Se produce (y se fomenta) el trabajo en equipo y colaborativo.
Sus costos son muy bajos.
Facilita el aprendizaje y promueve la democratización de la información.
Fomenta la actitud activa de los actores.
Ventajas:
Permite conocer y vincularse entre sí a gente que tiene las mismas inquietudes e intereses, más
allá de las distancias físicas.
Facilita el acceso a información vinculada a los temas más variados.
Fomenta el estudio, los vínculos, los intercambios, el trabajo colaborativo y hasta la compra y
venta de bienes y servicios.
Permite acceder no solo a información sobre los tópicos más variados, sino también a los puntos
de vista más diversos sobre esos tópicos. Rompe con los sesgos.
Facilita y fomenta retroalimentación, así como también la actualización de los contenidos.
Deja de lado las barreras que tienen que ver no solo con el tiempo y el espacio, sino también las
vinculadas al origen social, género, religión, edad.
Desventajas:
El primer requisito para saber comunicarse es saber escuchar. Comunicar no implica únicamente saber
expresar, es necesario saber observar y sobre todo aprender a escuchar.
Es necesario saber observar, y sobre todo aprender a escuchar. Pese a que puede parecer que escuchar
activamente es tarea fácil, este tipo de escucha requiere un esfuerzo de nuestras capacidades cognitivas
y empáticas. Saber escuchar es muy importante en la comunicación, y aunque no lo parezca, en muchas
ocasiones pasamos mucho tiempo pendientes de lo que nosotros pensamos y de lo que nosotros
decimos en vez de escuchar activamente al otro. La escucha activa no es escuchar de manera pasiva, sino
que se refiere a la habilidad de escuchar no sólo lo que la persona está expresando directamente, sino
también los sentimientos, ideas o pensamientos que subyacen a lo que se está intentando expresar. En
la escucha activa, la empatía es importante para situarse en el lugar del otro, pero también la Validación
emocional, la aceptación y el feedback, pues se debe escuchar sin juzgar y es necesario comunicar a la
otra persona que se le ha entendido. Por esto, existen dos elementos que facilitan la escucha activa, son
los siguientes:
Técnica: preguntar, escuchar, reformular Utilizando una técnica sencilla, podremos favorecer la
comunicación y ejercitar la escucha. La técnica consiste en:
1. Formular preguntas, evitando sonsacar, dejando tiempo para pensar y para responder.
2. Escuchar activamente, sin interrumpir, mostrando asentimiento
3. Repetir y reformular lo que nos ha dicho nuestro interlocutor con sus propias palabras. Se pueden
utilizar expresiones como “si no te he entendido mal…” o “Entonces, lo que quieres decir es…”.
Con esta técnica conseguimos una comunicación mucho más fluida y nos permite contrastar la
información que recibimos.