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Sistema Urinario

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Nefrosis o síndrome nefrítico

Descripción general

Sección transversal del riñónOpen pop-up dialog box

El síndrome nefrótico es un trastorno renal que hace que el cuerpo excrete


demasiadas proteínas en la orina.

El síndrome nefrótico generalmente se debe a daños en los racimos de vasos


sanguíneos diminutos de los riñones que filtran los desechos y el exceso de
agua de la sangre. La afección causa hinchazón, particularmente en los pies y
los tobillos, y aumenta el riesgo de otros problemas de salud.
El tratamiento del síndrome nefrótico incluye el tratamiento de la afección que
lo causa y el uso de medicamentos. El síndrome nefrótico puede aumentar el
riesgo de infecciones y coágulos sanguíneos. El médico podría recomendar
medicamentos y cambios en la dieta para prevenir complicaciones.

Síntomas
Los signos y síntomas del síndrome nefrótico incluyen:

 Hinchazón grave (edema), en particular alrededor de los ojos y en los


tobillos y los pies

 Orina con espuma, resultado del exceso de proteínas en la orina

 Aumento de peso debido a la retención de líquidos

 Fatiga

 Pérdida del apetito

Factores de riesgo
Los factores que pueden aumentar el riesgo de sufrir síndrome nefrótico
incluyen:

 Afecciones médicas que pueden dañar los riñones. Ciertas


enfermedades y afecciones aumentan el riesgo de desarrollar el síndrome
nefrótico, como la diabetes, el lupus, la amiloidosis, la nefropatía por
reflujo y otras enfermedades renales.

 Ciertos medicamentos. Los medicamentos que pueden causar el


síndrome nefrótico incluyen los fármacos antiinflamatorios no esteroideos
y los fármacos utilizados para combatir infecciones.

 Determinadas infecciones. Las infecciones que aumentan el riesgo de


síndrome nefrótico incluyen el VIH, la hepatitis B, la hepatitis C y la
malaria.

Complicaciones
Las posibles complicaciones del síndrome nefrótico comprenden:

 Coágulos sanguíneos. La incapacidad de los glomérulos para filtrar la


sangre correctamente puede llevar a la pérdida de proteínas sanguíneas
que ayudan a prevenir la coagulación. Esto aumenta el riesgo de
desarrollar un coágulo sanguíneo en las venas.

 Niveles altos de colesterol y triglicéridos en sangre. Cuando baja el


nivel de la proteína albúmina en sangre, el hígado produce más albúmina.
Al mismo tiempo, el hígado libera más colesterol y triglicéridos.

 Mala nutrición. La pérdida de demasiada proteína en sangre puede


ocasionar malnutrición. Esto puede llevar a la pérdida de peso, que puede
estar enmascarada por el edema. También puede tener muy pocos
glóbulos rojos (anemia), bajos niveles de proteínas en la sangre y bajos
niveles de vitamina D.

 Presión arterial alta. El daño a los glomérulos y la consiguiente


acumulación de exceso de líquido corporal pueden elevar la presión
arterial.

 Lesión renal aguda. Si los riñones pierden su capacidad para filtrar la


sangre debido a un daño en los glomérulos, los productos de desecho
pueden acumularse rápidamente en la sangre. Si esto sucede, es posible
que necesites una diálisis de emergencia (un medio artificial para eliminar
los líquidos y desechos de la sangre) normalmente con una máquina de
riñón artificial (dializador).

 Enfermedad renal crónica. El síndrome nefrótico puede hacer que los


riñones pierdan su función con el tiempo. Si la función renal decae
demasiado, podrías necesitar diálisis o un trasplante renal.

 Infecciones. Las personas que padecen síndrome nefrótico tienen mayor


riesgo de infecciones.

Descripción general
Sistema urinario femeninoOpen pop-up dialog box
Sistema urinario masculinoOpen pop-up dialog box

Los cálculos renales (también llamados nefrolitiasis o urolitiasis) son depósitos


duros hechos de minerales y sales que se forman dentro de los riñones.
La dieta, el exceso de peso corporal, algunas afecciones médicas y ciertos
suplementos y medicamentos se encuentran entre las muchas causas de los
cálculos renales. Los cálculos renales pueden afectar cualquier parte de las
vías urinarias, desde los riñones hasta la vejiga. En general, los cálculos se
forman cuando la orina se concentra, lo que permite que los minerales se
cristalicen y se unan.

Expulsar los cálculos renales puede ser bastante doloroso, aunque,


normalmente, los cálculos no producen daños permanentes si se detectan
oportunamente. Según sea el caso, es posible que solo tengas que tomar
analgésicos y mucha agua para expulsar un cálculo renal. En otros casos (por
ejemplo, si los cálculos se alojan en las vías urinarias, están asociados con una
infección de las vías urinarias o causan complicaciones), es posible que
necesites una cirugía.

Tu médico puede recomendarte un tratamiento preventivo para disminuir el


riesgo de tener cálculos renales recurrentes si corres un mayor riesgo de volver
a tenerlos.

Productos y servicios

 Libro: Libro de remedios caseros de Mayo Clinic


Síntomas
Cálculos renalesOpen
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Un cálculo renal no suele causar síntomas hasta que comienza a desplazarse


por del riñón o pasa a los uréteres, los conductos que conectan los riñones y la
vejiga. Si se queda alojado en los uréteres, puede bloquear el flujo de orina y
hacer que el riñón se hinche y el uréter tenga espasmos, lo que puede ser muy
doloroso. En ese momento, podrías experimentar los siguientes signos y
síntomas:

 Dolor punzante e intenso en los costados y la espalda, debajo de las


costillas

 Dolor que se propaga hacia la parte baja del abdomen y la ingle

 Dolor que viene en oleadas y cuya intensidad fluctúa

 Dolor o sensación de ardor al orinar

Otros signos y síntomas pueden incluir los siguientes:

 Orina de color rosado, rojo o marrón

 Orina turbia o con olor desagradable

 Necesidad constante de orinar, necesidad de orinar con mayor frecuencia


u orinar en pequeñas cantidades

 Náuseas y vómitos
 Fiebre y escalofríos si existe una infección

El dolor causado por un cálculo renal puede cambiar (por ejemplo, puede
trasladarse a una ubicación diferente o aumentar su intensidad) a medida que
se desplaza a través de las vías urinarias.

Cuándo debes consultar a un médico

Pide una cita con el médico si tienes signos y síntomas que te preocupan.

Busca atención médica inmediata si presentas:

 Dolor tan intenso que no puedes sentarte en posición derecha o encontrar


una posición cómoda

 Dolor acompañado por náuseas y vómitos

 Dolor acompañado por fiebre y escalofríos

 Sangre en la orina

 Dificultad para orinar

Causas
Los cálculos renales, a menudo, no tienen una sola causa definida, aunque
diversos factores pueden aumentar el riesgo de presentarlos.

Los cálculos renales se producen cuando la cantidad de sustancias que forman


cristales, como el calcio, el oxalato y el ácido úrico, en la orina es mayor de la
que pueden diluir los líquidos presentes en esta. Al mismo tiempo, la orina
puede carecer de sustancias que impidan que los cristales se adhieran unos a
otros, lo que crea un entorno ideal para la formación de cálculos renales.

Tipos de cálculos renales

Conocer el tipo de cálculo renal que tienes ayuda a determinar su causa, y te


da un indicio de cómo reducir la formación de más cálculos renales. Si es
posible, trata de guardar el cálculo renal si logras eliminarlo de tu cuerpo para
que el médico pueda analizarlo.

Los tipos de cálculos renales son:

 Cálculos de calcio. La mayoría de los cálculos renales son cálculos de


calcio, suelen producirse en forma de oxalato de calcio. El oxalato es una
sustancia que produce el hígado diariamente o que se obtiene en la
alimentación. Ciertas frutas y verduras, así como los frutos secos y el
chocolate, tienen un alto contenido de oxalato.

Los factores alimenticios, las altas dosis de vitamina D, la cirugía de


baipás intestinal y varios trastornos metabólicos pueden aumentar la
concentración de calcio u oxalato en la orina.

Los cálculos de calcio también se pueden producir en forma de fosfato de


calcio. Este tipo de cálculo es más común en trastornos metabólicos,
como la acidosis tubular renal. También puede estar asociado con ciertos
medicamentos utilizados para tratar las migrañas o las convulsiones,
como el topiramato (Topamax, Trokendi XR, Qudexy XR).

 Cálculos de estruvita. Los cálculos de estruvita se forman a partir de una


infección de las vías urinarias. Estos cálculos pueden crecer rápidamente
y volverse bastante grandes, a veces, con muy pocos síntomas o
pequeñas advertencias.

 Cálculos de ácido úrico. Los cálculos de ácido úrico se pueden formar


en personas que pierden demasiado líquido debido a la diarrea crónica o
a la malabsorción, en aquellos que llevan una dieta rica en proteínas y en
aquellos con diabetes o síndrome metabólico. Ciertos factores genéticos
también pueden aumentar el riesgo de presentar cálculos de ácido úrico.

 Cálculos de cistina. Estos cálculos se forman en personas con un


trastorno hereditario llamado cistinuria que hace que los riñones excreten
un aminoácido específico en grandes cantidades.

Factores de riesgo
Los factores que aumentan el riesgo de desarrollar cálculos renales son los
siguientes:

 Antecedentes familiares o personales. Si alguien de tu familia ha tenido


cálculos renales, es más probable que tú también los tengas. Si ya has
tenido uno o más cálculos renales, el riesgo de que se forme otro es
mayor.

 Deshidratación. No beber suficiente agua todos los días puede aumentar


el riesgo de tener cálculos renales. Las personas que viven en climas
cálidos y secos y las que sudan mucho pueden correr un mayor riesgo
que otras.

 Ciertas dietas. Consumir alimentos con grandes niveles de proteínas,


sodio (sal) y azúcar puede aumentar el riesgo de que se formen algunos
tipos de cálculos renales, como ocurre con las dietas ricas en sodio. El
exceso de sal en la dieta aumenta la cantidad de calcio que deben filtrar
los riñones e incrementa considerablemente el riesgo de tener cálculos
renales.

 Obesidad. Un índice de masa corporal alto, un perímetro de la cintura


ancho y el aumento de peso se pueden asociar con un incremento del
riesgo de tener cálculos renales.

 Cirugía y enfermedades digestivas. La cirugía de baipás gástrico, la


enfermedad intestinal inflamatoria o la diarrea crónica pueden causar
cambios en el proceso digestivo que afectan a la absorción de calcio y
agua, lo cual aumenta las cantidades de sustancias que forman cálculos
en la orina.

 Otras afecciones médicas como la acidosis tubular renal, la cistinuria, el


hiperparatiroidismo y las infecciones recurrentes de las vías urinarias
también pueden aumentar el riesgo de tener cálculos renales.

 Ciertos suplementos y medicamentos, como la vitamina C, los


suplementos alimentarios, los laxantes (cuando se usan en exceso), los
antiácidos a base de calcio y ciertos medicamentos utilizados para tratar
las migrañas o la depresión, pueden aumentar el riesgo de tener cálculos
renales.
 La uretritis es una infección de la uretra, el conducto que lleva la orina desde la vejiga al exterior
del cuerpo.
 La uretritis puede estar causada por bacterias, hongos o virus. En las mujeres, los
microorganismos generalmente se desplazan a la uretra desde la vagina. En la mayor parte de
los casos, las bacterias llegan desde el intestino grueso y alcanzan la vagina desde el ano. Los
varones son mucho menos propensos a desarrollar uretritis. Los microorganismos transmitidos
por vía sexual, como la Neisseria gonorrhoeae, que causa la gonorrea, alcanzan la vagina o el
pene durante un acto sexual con una persona infectada y se pueden extender hacia la uretra. El
microorganismo gonococo es la causa más frecuente de uretritis en los varones. Este
microorganismo puede infectar la uretra en las mujeres, pero la vagina, el cuello uterino, el
útero, los ovarios y las trompas de Falopio tienen una mayor probabilidad de ser infectados. La
clamidia y el virus del herpes simple también se pueden transmitir sexualmente y provocar
uretritis.

Uretritis
La uretritis es la inflamación a lo
largo del conducto uretral.

 Síntomas

 En los varones, la uretritis generalmente comienza con una secreción purulenta de la uretra,
cuando la causa es el microorganismo gonococo, o de mucosidad cuando se trata de otros
microorganismos. Otros síntomas de uretritis son dolor durante la micción y una frecuente y
urgente necesidad de orinar. Una infección de la vagina puede provocar dolor durante la
micción a medida que la orina, que es ácida, pasa por encima de los labios inflamados.
 Una infección de la uretra por gonococo que no se trata, o que se trata de manera inapropiada,
puede causar a largo plazo un estrechamiento (estenosis) de la uretra. La estenosis aumenta el
riesgo de producir una uretritis más aguda y, a veces, la formación de un absceso alrededor de
la uretra. El absceso puede producir abombamientos de la pared uretral (divertículos en la
uretra) que también se pueden infectar. Si el absceso perfora la piel, la orina podría fluir a
través del nuevo conducto formado (fístula uretral).

 Diagnóstico y tratamiento

 El diagnóstico de uretritis por lo general se realiza considerando únicamente los síntomas. Se


recoge una muestra (frotis uretral) de la supuración, si existe, y se envía al laboratorio para su
análisis con el fin de identificar el organismo infeccioso.
 El tratamiento depende de la causa de la infección. Si se trata de una infección bacteriana, se
administran antibióticos. Una infección causada por el virus del herpes simple se puede tratar
con un fármaco antivírico, como el aciclovir.

Descripción general
La enuresis, también conocida como «incontinencia nocturna» o «enuresis
nocturna», es la micción involuntaria mientras se duerme a una edad en la que
se espera que el niño ya no se orine durante la noche.

Las sábanas y los pijamas mojados —así como la vergüenza del niño— son
una escena muy común en muchos hogares. Pero no desesperes. Orinarse en
la cama no es un indicio de que falló el entrenamiento para saber usar el baño.
A menudo, solo se trata de una parte normal del desarrollo del niño.

En general, la enuresis antes de los 7 años no es causa de preocupación. A


esa edad, puede que tu hijo todavía esté desarrollando el control nocturno de
la vejiga.

Si continúa mojando la cama, trata el problema con paciencia y con


comprensión. Los cambios en el estilo de vida, el entrenamiento de la vejiga,
las alarmas de humedad y, a veces, los medicamentos pueden ayudar a
reducir la enuresis.

Productos y servicios

 Libro: Mayo Clinic Guide to Raising a Healthy Child (Guía de Mayo  Clinic para
criar a un niño saludable)
Síntomas
La mayoría de los niños ya están plenamente entrenados para ir al baño a los
5 años, pero, en realidad, no hay una fecha precisa para desarrollar el control
completo de la vejiga. Entre los 5 y los 7 años, la enuresis sigue siendo un
problema para algunos niños. Después de los 7 años, un pequeño grupo de
niños todavía moja la cama.
Cuándo consultar al médico

La mayoría de los niños dejan de mojar la cama por sí solos, pero necesitan un
poco de ayuda. En otros casos, la enuresis puede ser signo de un trastorno no
diagnosticado que requiere atención médica.

Consulta al médico de tu hijo si sucede lo siguiente:

 Tu hijo todavía moja la cama después de los 7 años

 Tu hijo comienza a mojar la cama unos meses después de haber dejado


de hacerlo

 La enuresis está acompañada de dolor al orinar, sed inusual, orina rosa o


roja, heces duras o ronquidos

Solicite una Consulta en Mayo Clinic


Causas
Nadie sabe con exactitud cuál es la causa de la enuresis, pero hay diversos
factores que pueden ser claves, como los siguientes:

 Una vejiga pequeña. La vejiga de tu hijo puede no estar lo


suficientemente desarrollada para contener la orina que se produce
durante la noche.

 Incapacidad de reconocer cuando la vejiga está llena. Si los nervios


que controlan la vejiga tardan en madurar, tu hijo puede no despertarse
por tener la vejiga llena —en especial, si tiene el sueño profundo—.

 Desequilibrio hormonal. Durante la infancia, algunos niños no producen


suficiente hormona antidiurética, que es la que retrasa la producción de
orina durante la noche.

 Infección de las vías urinarias. Este tipo de infección puede dificultar


que tu hijo controle la orina. Los signos y síntomas pueden ser la
enuresis, accidentes diurnos, necesidad de orinar a menudo, orina roja o
rosa y dolor al orinar.
 Apnea del sueño. A veces, la enuresis es un signo de apnea obstructiva
del sueño, un trastorno por el cual la respiración del niño se ve
interrumpida durante el sueño —a menudo, debido a la inflamación o a la
dilatación de las amígdalas o de las adenoides—. Otros signos y síntomas
pueden comprender ronquidos y somnolencia durante el día.

 Diabetes. Para un niño que, por lo general, no se orina durante la noche,


la enuresis puede ser el primer síntoma de diabetes. Otros signos y
síntomas pueden ser orinar mucha cantidad de una sola vez, mayor
sensación de sed, fatiga y adelgazamiento, a pesar de tener buen apetito.

 Estreñimiento crónico. Se usan los mismos músculos para controlar la


orina que para defecar. Cuando el estreñimiento ocurre durante largos
períodos de tiempo, estos músculos pueden presentar alguna disfunción y
contribuir a causar la enuresis durante la noche.

 Un problema estructural en las vías urinarias o en el sistema


nervioso. Rara vez, la enuresis está relacionada con un defecto en el
sistema neurológico o urinario del niño.

Factores de riesgo
La enuresis puede afectar a cualquier persona, pero es dos veces más
frecuente en los niños que en las niñas. Se vincularon muchos factores a un
mayor riesgo de enuresis, entre ellos, los siguientes:

 Estrés o ansiedad. Los eventos estresantes —como tener un hermanito,


comenzar la escuela o dormir fuera del hogar— pueden provocar que tu
hijo moje la cama.

 Antecedentes familiares. Si uno de los padres del niño o ambos


mojaban la cama cuando eran niños, su hijo tiene una probabilidad alta de
hacerlo también.

 Trastorno de déficit de atención con hiperactividad. La enuresis es


más frecuente en niños que tienen un trastorno de déficit de atención con
hiperactividad.

Complicaciones
Si bien puede ser frustrante, la enuresis no conlleva ningún tipo de riesgo para
la salud cuando no tiene una causa física. Sin embargo, mojar la cama puede
generar algunos problemas para tu hijo, entre ellos, los siguientes:

 Culpa y vergüenza, lo que puede llevar a que tenga la autoestima baja

 Pérdida de oportunidades de participar de actividades sociales, como


quedarse a dormir en la casa de sus amigos o ir de campamento

 Erupciones cutáneas en las nalgas y en el área genital del niño —en


especial, si tu hijo duerme con la ropa interior húmeda—
Escrito por el personal de Mayo Clinic

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Diagnóstico y tratamiento
Oct. 26, 2017

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 Análisis de orina

 Radiografía

Productos y servicios

 Libro: Mayo Clinic Guide to Raising a Healthy Child (Guía de Mayo  Clinic para
criar a un niño saludable)

Acción de orinar involuntariamente

 Síntomas y causas
 Diagnóstico y tratamiento

EVITAR LA HUMEDAD
utilizar ropa interior de algodón. Las prendas de tejidos naturales favorecen la
transpiración y evitan la humedad.
También hay que prescindir de las prendas ajustadas, que pueden provocar un aumento de
la temperatura y la humedad en la zona.
 
MANTENERSE HIDRATADO
Beber la suficiente cantidad de agua para poder realizar todos los procesos de limpieza
que se llevan a cabo en el hígado y riñones.
 
LIMPIARSE CORRECTAMENTE
Limpiarse en el correcto sentido, de la vejiga al ano, y no al revés, porque sino se
transmiten las bacterias del ano a la vagina, y ahí colonizan la uretra y surge la infección.
 
MANTENER UNA BUENA HIGIENE ÍNTIMA
Utilizar productos específicos para la zona íntima con el fin de mantener el correcto PH y
la flora vaginal, un ligero cambio en el ph o disminución de la flora bacteriana puede ser
motivo de molestias vaginales
 
MANTENER EN BUEN ESTADO LA FLORA INTESTINAL
Cada vez son más las investigaciones sobre la importancia de tener una flora intestinal
saludable y fuerte. Esto hace que se refuerce nuestro sistema inmune y poder
defendernos mejor de cualquier infección.
Consume alimentos con probióticos, como el yogur, el chucrut, el kefir, y todo lo que esté
fermentado, esto te aportara microorganismos vivos que te ayudarán a mantener la flora
de tu intestino.
Además para alimentar a tu flora es bueno comer alimentos prebióticos como, avena,
frutas, verduras, almidón resistente, etc…
Si ves que con la alimentación no es suficiente, existen preparados con probióticos solo o
con pre y probióticos juntos, llamados simbióticos. Como por ejemplo Fermentos lácticos
Arko

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