FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES

ESCUELA DE DERECHO.
Ética

Modalidad: Virtual

Sección: 12.

Actividad: Ensayo Grupal, Capítulo 1 Ética para la vida

VALORES, EDUCACIÓN Y DERECHOS HUMANOS

Docente: Mtro. Carlos Alberto Rivas Zamora

N. Integrantes Carnet
1. Pérez Ascencio, Biegler Francisco 22-0853-2006
2. Portillo Guzmán, Eithan Moisés 32-1758-2020
3. Ramírez Campos, Marvin Isaac 32-1103-2020
4. Rauda Campos, Marta Elizabeth 10-1143-2020

San Salvador, 19 de febrero 2020

 INTRODUCCIÓN

Los valores son aquellos que empezamos a descubrir desde el seno

familiar y poco a poco con otros factores como la educación o la interpretación

de las cosas en la sociedad actual vamos conociendo y aprendiendo de ellos, el

hecho de poseer valores éticos o morales es algo que rigen una red de

conocimientos disciplinarios, por lo cual en el presente trabajo busca nutrirnos

de información acerca de los valores representados en un ensayo grupal que

posee un conjunto de argumentos que han sido interpretados con base a la

lectura asignada para la presentación , basándonos tanto en opiniones

personales como en fundamentos y opiniones de expertos, para dar nuestro

punto de vista como estudiantes y como sociedad en general.

 CONOCIMIENTO DE VALORES

Los valores son dados en un mundo objetivo, si nos damos cuenta

incluso los mismos valores tienden a ser objetivos, ya que depende mucho de la

cultura, la religión o incluso de las tradiciones de cada persona, inclusive el

mismísimo filósofo griego Platón posee el dogma de que la mayoría de

nosotros no aprendemos un tema, sino que lo recordamos, y si este

pensamiento se reflexiona a la perfección, podemos deducir que existe razón en

el mismo, puesto que la mayoría de veces solamente recordamos la respuesta a

lo que se nos pregunta, por ende, respondemos por puro instinto, sin embargo,

cuando nosotros de verdad hemos aprendido del tema, tenemos la posibilidad

de poder desenvolvernos mejor al momento de recibir una cuestión que haga

que nosotros ordenemos la idea planteada, aunque al momento de aprender

algo sea recordar, no es lo mismo recordar algo que saber hacerlo.

A lo planteado por Platón de que no conocemos si no recordamos las

cosas podemos llegar a la conclusión que al tomarnos a la ligera algo no

llegamos a nada, lo más sabio y virtuoso es proponernos llegar a la capacidad

de poseer conocimientos como el aprendizaje de virtudes o representaciones

como el poseer valor, ser justo, bondadoso e inclusive reconocer la belleza

física e intelectual al recordar y conocer enlazando un camino, ya que en el

momento de recordar algún tema de algún ámbito, nuestro psique unifica los

algoritmos para abrir paso a que nuestra mente acceda a otros ámbitos de

conocimientos, la filosofía de Platón es un vivo ejemplo que los valores son

recordados e impulsados a tener una participación en el día a día.

 ¿ESTÁ EL VALOR EN LA COSA?

Muchas veces la vida nos pone en situaciones que nos generan dudas,

una de ellas puede ser, ¿En realidad le damos valor a las cosas por lo que

sentimos o por lo que cuestan? Esta incógnita puede ser respondida

dependiendo de las ideas y los valores que un individuo posea, por ejemplo si

la persona tiene una mentalidad que lo material vale más que lo sentimental, si

le dan a elegir un anillo de oro o algo que represente arte, puede que esta

persona elija el anillo de oro, pero también está la mentalidad contraparte de

esto, las personas que le dan más valor a lo que lleva una historia por detrás,

por ello, depende de la interacción que tengamos con las cosas es como

decidimos a que darle valor, también intervienen factores como la mentalidad,

creencias, religión, educación, etc.

La forma en cómo vemos las cosas, la forma en cómo tratamos al

prójimo, la manera de cómo saludamos, el platicar, el interactuar con los

objetos, todo ello circula con base a la personalidad de cada quien, el valor que

le damos a las cosas siempre será visto de distintas maneras por las personas,

ya que todos poseemos un pensamiento libre, todos analizamos de la manera

que creemos que está bien visto por nosotros o por lo “políticamente correcto”

aquello que la sociedad rige y que ya está determinado a ser o no ser, aquello

que está en disposición a una mayoría y no a la minoría, las ideas vuelan y se

entrelazan entre sí, es decisión de cada quien tomar una perspectiva al respecto,

pero siempre habrá variedad de pensamientos, los valores determinan a la

sociedad éticamente y la convierten en una red disciplinaria que poco a poco va

evolucionando a lo largo de los años.

 ¿POR QUÉ VALEN LAS COSAS?

Las cosas valen por su verdadero sentido de existir, por su función,

por todo lo que representa que es las personas que ayudaron a fabricarlas, valen

por todo lo que genera, beneficio, ayuda, trabajo y sentimientos, la persona que

ayuda a la fabricación recibe su remuneración económica, la persona que la

consume o compra, satisface una necesidad y es por eso por lo que valen las

cosas.

VALOR Y BIENES.

Para unos el valor de las cosas se encuentra en lo que para ellos es

necesario, llamativo o que llene sus satisfacciones todo esto varia de la forma

en que la persona piensa la equivalencia del valor. Los bienes por otro lado

cumplen un rol muy importante y es algo germinante y por eso se valora,

porque no solamente se ocupa una vez, no solamente cumple su función con

algo o alguien en específico, sino que es algo que se necesita ocupar varias

veces y su función será la misma, eso es el valor por lo que genera.

SUBJETIVISMO AXIOLÓGICO INTOLERANCIA Y

UNIVERSALIDAD DE LOS VALORES.

Los valores son subjetivos o relativos para cada persona, en el libro

menciona el caso de Lutero que es un claro ejemplo de intolerancia, ya que

Lutero era obstinado y la razón por la que no era tolerado es porque lo que se

dice o se presenta está muy claro y no hay motivos para contradecir, pero lo

que no entendemos es que no hay que absolutizar los valores sino más bien a

pensar la apoyatura de los valores.

 SOBRE LOS SENTIMIENTOS MORALES

El mundo esta lleno de sentimientos y pensamientos tan diversos,

podemos encontrar tantas opiniones diferentes aun así sea de un mismo tema,

de igual forma podemos encontrar diversos sentimientos que influyen en gran

parte a nuestros comportamientos como personas de bien, es importante

mencionar que nuestros sentimientos morales tienen mucho que ver al

momento de tomar una decisión, ya sea buena o mala, de esto depende la forma

en la que nos sentiremos luego de tomar dicha decisión.

Como seres humanos somos capaces de identificar lo bueno y lo malo,

aunque muchas veces estemos conscientes de que nuestras actitudes no son las

correctas, en el fondo nuestra sentimientos morales se ven afectados por las

malas decisiones que podemos llegar a tomar, pero ¿Cómo sabemos que

nuestras decisiones o comportamientos son malos?, puede que para un persona

cierto comportamiento no parezca tan malo desde su posición en la sociedad,

pero por otro lado pueden haber personas que no están del todo acuerdo con

esos sentimientos o actitudes, todo depende de nuestra moral, como humanos

tenemos la dicha de tener conciencia para separar lo malo de lo bueno, Tal

como nos lo dice Shatesbury, “el sentido de lo que esta bien y esta mal es algo

natural del hombre”.

Por lo tanto, tenemos claro que cada ser humano tiene su propia

opinión, su propia forma de ver y de sentir las cosas, pero de esa misma forma

debemos ser empáticos y respetar a cada persona de nuestra sociedad, solo así

crearemos ambientes armoniosos.

 SENTIMIENTOS Y VIDA MORAL

Definir si estamos siendo correctos y morales en la vida, a veces

puede ser complicado ya que el mundo es demasiado diverso, es necesario

recurrir al cuestionamiento propio, es decir involucrar nuestros sentimientos en

la vida en general y preguntarnos si lo que yo hago, siento o pienso puede

afectar a alguien exterior a mi vida, es decir la sociedad en general, así también

conectar nuestros sentimientos con nuestro físico, por ejemplo cuando

hablamos de belleza podemos asociarlo a la vista e incluso al sentido del tacto,

de esta manera estamos conectando nuestros sentimientos con algo físico,

dándole mas valor a cierta opinión, Shaftessbury, nos habla de los sentidos y

los sentimientos, y nos dice que “los sentidos son órganos sensorios, pero los

sentimientos apuntan a algo más profundo y radical” es decir ciertamente

nuestros sentimientos morales son muy importantes para convivir en sociedad.

Como personas debemos encontrar el balance para llevar una vida con

sentimientos y acciones correctas, que nos permitan ser personas de bien y con

una buena moral, de esta manera sabremos si lo que hacemos a diario esta

correcto, ya que conectamos sentimientos con acciones, esto nos permite tener

mayor claridad de las cosas buenas y malas.

Hacer las cosas bien depende de nuestra educación, sentimientos, y

moral, cada persona debe poner en practica a diario cada una de estas cosas

para cada día mejorar como ser humano en la sociedad.

 LA RAZÓN AL SERVICIO DE LOS SENTIMIENTOS

Las emociones nos influyen más que la razón porque están en una

zona de nuestro cerebro más primitiva y, por tanto, más profunda. Se hallan en

la base de todo lo que somos. La razón es como un cincel con el que se pueden

pulir esas emociones para pacificarlas y permitir que nos ayuden a llevar una

vida mejor

Como dice el autor en muchas ocasiones nos dejamos llevar por los

impulsos y el consumismo ¿si lo que quería era tomarme un café, por qué no lo

preparé en casa? ¿Acaso no he preparado unos deliciosos cafés para donárselos

a las doñas del hospital? de ese modo me hubiera ahorrado los $2.00 y,

seguramente, hubiera tomado un café tan bueno como este.

En muchas ocasiones nos dejamos llevar por las acciones

inconscientemente sin pensar o recapacitar lo que estamos haciendo en aquellas

motivaciones últimas que nos la disparan. Y es que por el hecho de no ser

conscientes de dicho mecanismo no dejamos de optar, lo hacemos siendo o no

consciente de ello, y como las opciones tienen que ver con nuestra realidad

moral.

En este sentido tiene razón Hume cuando afirma que “la moral es un

tema que nos interesa sobre todos los demás”. También Recordemos que

Aristóteles pensaba que somos responsables en la medida en la que somos

libres y conscientes de nuestros actos.

Nuestra mente es extraordinariamente poderosa y hábil para dirigir

nuestra conducta, tanto para hacer el bien como para hacer el mal. Gracias a
ella realizamos todos los procesos de pensamiento racional, pero también en

ella se dejan sentir unas fuerzas extraordinariamente poderosas: las emociones.

Así, podemos decir que somos razón y emoción. Fuerzas que en

ocasiones apuntan hacia el mismo lugar, pero que en otras se enfrentan y nos

obligan a tomar una decisión. Tenemos la opción de seguir a nuestro “corazón”

o de hacer caso a la lista de pros y contras que hay en lo que está bueno o malo,

todo depende de lo que nosotros tengamos como prioridad.

La razón no debería tener nada sobre ella, pero muchas veces somos

esclavos de nuestras paciones y esto nos hace que la razón se ponga al servicio

de los sentimientos y esto se mide a través de la moralidad con lo que es bueno

o no a los ojos de los demás

CONSTRUCCIÓN DE VALORES

Para D. Gracia (2013, 58), los valores ni se intuyen ni se sienten, sino

que “se hallan construidos”. Quiero reparar en el primer verbo de esta

afirmación. Cuando los seres humanos decimos que somos solidarios, no

queremos decir que nosotros nos hayamos inventado la solidaridad, sino que,

de alguna, manera nos la hemos encontrado.

Esto nos quiere decir que los valores es una virtud que nos la enseña

desde los primeros años de nuestra convivencia, como una especie de tradición,

también es algo que corremos el riesgo de perderlos sino tenemos una

adecuada orientación.

Esto nos orienta que a pesar de que nos trasmiten los valores, no

significa que no podamos descubrir nuevos valores, pero para que podamos

descubrir, solo será posible si los valores que previamente nos hemos
apropiado nos capacitan en la dirección correcta de aquel descubrimiento. La

construcción tiene un valor tanto a nivel individual como en el orden social e

histórico.

Los valores son la estructura de la persona. Las creencias forman parte

de los valores, pero también, y, sobre todo, son las prácticas, las formas de

hacer, de actuar, de pensar, de sentir, las que constituyen una persona. Estas

formas de actuar, etc. son comunes a otras personas de la sociedad, y forman la

cultura.

Pueden ser valores positivos o negativos, y frecuentemente la mezcla

de unos y otros. La autoestima, el amarse a uno mismo, puede ser aprendido

desde niño o desde niña, o a lo largo de la vida. Este valor es, para nosotros, la

base de sustentación de todo el edificio de la persona.

El poder botar la basura en su lugar y si no podemos botarla, tenerla y

cargarla en un depósito cuando no tenemos un basurero cerca, esto solo lo

podemos aprender si lo vivimos de cerca con algún adulto o nuestros padres y

así trasmitimos lo que nos enseñaron o nos mostraron.

Cabe mencionar que también así se aprenden cosas negativas que con

el pasar del tiempo o nos concientizamos o simplemente nos olvidamos y

comenzamos a construir la sociedad que actualmente tenemos sin valores y sin

preocuparse por las generaciones futuras.

 CONCLUSIÓN

Para concluir con el presente ensayo, está claro que los valores son una

parte fundamental del ser humano, para poder desarrollarse en la sociedad

satisfactoriamente, es importante conocer la relación que estos tienen en

nuestra moral y en nuestros sentimientos al momento de actuar y de tomar

decisiones para hacerlo correctamente, ayudándonos así a diferenciar lo bueno

y lo malo, la evolución de los valores ha sido constante y con ello nuevos

descubrimientos, conocimientos y costumbres se han mantenido cambiantes,

logrando así una amplitud en la forma de como nos comunicamos y la manera

de ver la sociedad desde una cosmovisión mayormente llena de diversas ideas

y de igual manera fortaleciendo las mismas.

 REFERENCIA BIBLIOGRÁFICA

Fúnez, R. A. (2nda Ed.).(2019). Ética para la vida cotidiana. San Salvador, El

Salvador: MULTILIBROS, S.A. DE C.V.