Resumen Temario Introducción Al Cristianismo
Resumen Temario Introducción Al Cristianismo
Resumen Temario Introducción Al Cristianismo
- Los apóstoles y misioneros anunciaban el mensaje tanto a los judíos como a los
paganos, para que se convirtieran a Cristo; explicaban la fe en las catequesis
baustismales para fortalecer la esperanza.
LOS EVANGELIOS ESCRITOS= la tercera etapa cuando empezaron a desaparecer los
testigos presenciales y era necesario dejar constancia escrita de todo lo sucedido.
Los autores sagrados compusieron los 4 evangelios, escogiendo datos de la tradición
oral o escrita, reduciéndolos a síntesis, adaptándolos a la situación de las diversas
iglesias.
Contenidos teológicos;
- Relación entre la antigua y la nueva alianza, entre Jesús y el Antiguo
Testamento, en un diálogo permanente entre la promesa y el cumplimiento.
Jesús es el Mesías, el hijo de David, el Hijo de Dios.
- Establece la continuidad de Israel, el Pueblo de Dios, y la Iglesia, el nuevo
Pueblo de Dios.
Israel no ha querido escuchar el mensaje, y es sustituido por el nuevo Israel.
- El tratamiento que hace de los discípulos, en los que la autoridad se concibe
como servicio a los más necesitados.
Criterios interpretativos;
- Fue el primero que se escribió. Él fue el creador del género evangelio. El
anuncio de la buena noticia se hace narración.
- Análisis con mayor detención permite reconocer una explicación teológica muy
elaborada, nada improvisada.
- Constituye la fuente principal de los evangelios según san Mateo y según San
Lucas.
- Estudiado con la misma atención que el resto de relatos.
Autor= Cristiano llamado Juan Marcos, al final etapa apostólica, alrededor año 60.
- Idea de reunir en un solo relato, todas las noticias que conocía sobre la vida, el
ministerio y la enseñanza de Jesús de Nazaret. Es una información preciosa,
venerable y narrada como un tesoro propio.
- Es el creador del género evangélico por su reconstrucción literaria y por su
testimonio de fe
Autor; es un cristiano no judío, que escribe en el último cuarto del siglo I. Le atribuyen
otros oficios como la medicina o la pintura.
Conoce bien la lengua griega y sabe conectar con precisión los acontecimientos de la
vida de Jesús con el devenir del mundo antiguo, que conoce bien.
Fuentes;
- Evangelio según san Marcos, que le sirve de base para la creación del relato.
- La llamada fuente de dichos de Jesús.
- Las noticias propias que san Lucas llegó a recoger de la comunidad o elaboró él
mismo a partir de los relatos que fue conociendo en su investigación.
Momentos en la redacción;
- Texto que selecciona algunos pasajes más relevantes, en un relato
esencialmente histórico, con hechos y dichos de Jesús.
- Una gran remodelación, con la trascripción de los grandes discursos joánicos.
- Una tercera redacción que matizara algunas afirmaciones y añadiera.
Fuentes;
- Influencia judía.
- Influencia helenística.
- Influencia del movimiento gnóstico.
- Influencia de la literatura de Qumrán.
- La influencia paulina.
Circunstancias;
- Primera fase apostólica, no hubo necesidad de dejar por escrito la historia de
Jesús, el evangelio encarnado, que conocían directamente por haber
compartido, con él, su vida terrena.
- La misión de los apóstol, les llevó a anunciar el evangelio hasta los confines del
mundo. Fueron protagonistas del evangelio predicado.
- La generación de los evangelistas tuvo delante la misión de que el mensaje se
transmitiera inalterado. Los evangelistas escribieron para sus comunidades. El
texto definitivo, el evangelio escrito, es un diálogo entre las fuentes y la
comunidad siempre diversa.
Entre los textos judíos, destaca el Talmud babilónico, escrito entre el siglo I y el V.
Alusiones sobre Jesús son despectivas porque consideran una judío que ha extraviado,
con su palabra, al pueblo de Israel.
AUTORES CRISTINAOS;
- Evangelistas presentaron la vida y el ministerio de un personaje histórico y la
historia es la base sobre la que construyen un pensamiento y una confesión de
fe. En ellos se puede identificar la verdadera historia de Jesús de Nazaret.
- Existen otras tradiciones bíblicas, en los Hechos de los Apóstoles y en las cartas
de San Pablo, que conservan algunos dichos de Jesús y numerosas noticias
sobre su vida y ministerio.
- Entre los textos cristianos primitivos que no se insertaron el canon de la
Escritura destacan los evangelios apócrifos; son textos singulares cuya validez
histórica debe ser analizada con cuidado.
Apócrifo es sinónimo de oculto o secreto.
Tipos textos evangélicos apócrifos;
o Evangelios de origen popular; textos que tratan de llenar un espacio
poco conocido de la vida de Jesús y María. Son relatos imaginativos y
fantasiosos en los que aparece el niño Jesús haciendo milagros para
demostrar su poder.
Destacan Evangelio de la infancia de Tomás y Protoevangelio de
Santiago.
o Evangelios apócrifos judeocristianos; interpretar a Jesús desde los
argumentos teológicos del Antiguo Testamento. Defienden a Jesús
como Hijo de Dios, pero no aseguran el reconocimiento de su verdadera
naturaleza.
Destacan Evangelio de los Hebreos y Evangelio de los Nazarenos.
o Evangelios gnósticos; son más tardíos, fruto de las controversias
teológicas, ofrece algunas noticias sobre la vida de Jesús. Depende de la
literatura canónica.
Destacan; Evangelio de Tomás y Evangelio de Felipe.
La realidad social de Jerusalén era más compleja. Muchos judíos que vivían entonces
en Israel no comprendieron el acontecimiento al que asistieron como testigos
privilegiados.
La autoridad política de Palestina la detenta el rey de los judíos, el gobernador romano
y el sanedrín; Este tribunal, estaba formado por 71 miembros y es a la vez la suprema
autoridad religiosa y política de Israel.
Los dos grandes grupos sociales de Israel fueron; saduceos y fariseos.
- Saduceos; aristócratas judíos, muchos de ellos sacerdotes y hombres de
negocios que no tenían reparo en colaborar con Roma. Negaban la resurrección
de los muertos.
- Fariseos; miembros de una facción judía singularmente comprometida con el
cumplimiento escrupuloso de la ley. Eran líderes espirituales del pueblo.
Entre los fariseos revolucionarios que se levantaron contra Roma, los más
conocidos fueron; Sicarios, zelotes y los escribas.
Los esenios fueron un grupo religioso apartado del culto oficial del templo de
Jerusalén a principios del siglo I, vivían en comunidad cerca del mar muerto.
Los judíos helenistas habían nacido fuera de palestina, hablaban griego común
La libertad de María en Nazaret se convierte en un signo del don de Dios que capacita
la hombre para responder, en libertad, en el más pleno uso de su condición humana.
Dios se ofrece como don, sin abusar, sin destruir aquel que quiere salvar.
- No Quest
- New Quest, la nueva búsqueda.
- Third Quest, la tercera investigación a finales del siglo XX, se beneficiaron de los
nuevos estudios literarios, filológicos, históricos y arqueológicos.
La primera definición de Jesús es que él fue maestro de Israel. Mantuvo algunas de las
características fundamentales de todos los maestros de su tiempo;
- Convoca a un grupo de discípulos.
- Mantiene discusiones sobre la ley.
- Interviene en debates teológicos.
- Habla con autoridad.
En segundo lugar, Jesús fue interpretado como profeta. Los escribas recurrían a la
enseñanza de la Escritura y a las tradiciones de sus antepasados.
Él remite a una autoridad que nace de sí mismo y por eso fue considerado como un
profeta.
- Dios prometió a Moisés enviar un profeta muy particular, un segundo Moisés.
- El pueblo de Israel está esperando al profeta.
- Jesús aceptó que le consideraran profeta.
- La misión de este profeta sería la transmisión de la Palabra de Dios, la
interpretación de los acontecimientos como manifestación de la voluntad del
Padre y como revelación de su permanente cuidado.
- La misión de este profeta, sería la restauración de Israel. No podría ser un
simple profeta. Con él se inauguraban los últimos tiempos.
En tercer lugar, Jesús es reconocido como el Mesías, el Señor, el que tenía que venir al
mundo.
- Jesús se sitúa como un profeta, perseguid por su mensaje.
- Jesús no es uno más entre los enviados. Él es el Hijo, el heredero, el último.
- Jesús interpreta su muerte desde su condición salvadora.
2º) El pecado, como ruptura de la relación con Dios y con el pueblo, se presenta como
negación de la obra de Dios. El pueblo conoce los ritos litúrgicos expiatorios. Jesús
reclama una autoridad capaz de perdonar, como el mismo Dios perdona al que se
arrepiente.
La conciencia de Jesús y su autoridad sobre el pecado y la muerte se manifiesta
también en su cercanía con los pecadores, con los marginados, tanto económicos
como sociales.
- Felices los humildes, porque Dios les dará en herencia la tierra= el que obra
siempre con amor, ternura, comprensivo con todos, a imitación de Cristo.
- Felices los que desean de todo corazón que se cumpla la voluntad de Dios,
porque Dios atenderá su deseo= el que quiere que se imponga en el mundo la
justicia, como un valor del reino de Dios.
- Felices los misericordiosos, porque Dios tendrá misericordia de ellos.
- Felices los que tienen limpia conciencia, porque ellos verán a Dios= la verdad, la
sinceridad, la sencillez, son sus armas ante Dios.
- Felices los que trabajan a favor de la paz, porque Dios los llamará hijos suyos
- Felices los que sufren persecución por cumplir la voluntad de Dios, porque suyo
es el reino de los cielos.
Las bienaventuranzas son ante todo, una actitud que configura y precisa al hombre del
reino, al portador del evangelio. Son la nueva ley, la ley del reino, la ley del amor,
inaugurado por el mismo Jesucristo, el manso, el humilde, el perseguido por la justicia
del mundo, el que trabaja por la paz.
El pecado del hombre, la ruptura con Dios, la violencia con el mundo, la quiebra de la
fraternidad universal no habían dejado otra salida. La cruz, el despojo radical del Hijo
del Hombre se convirtió en causa de salvación eterna para todo el género humano.
En el Jordán, Jesús se situó en la fila de los pecadores, que se acercaban a Juan
para recibir un bautismo de penitencia. Se hizo solidario con los pecadores y
asumió la carne frágil del hombre para liberar al género humano del pecado
que lo esclavizaba.
En el camino hacia Jerusalén, Jesús recibe una petición de Santiago y Juan, los
hijos de Zabedeo, querían sentarse junto a el, en su gloria, uno a la derecha y
otro a la izquierda.
Pedro tuvo también ocasión de escuchar el reproche de Jesús después del
primero de estos tres anuncios que Marcos recoge. Se trata de la confesión de
fe de Cesarea de Filipo, camino de Jerusalén.
Los maestros de la ley y los fariseos pidieron una señal a Jesús. Querían ver
algún milagro, como si fuera un espectáculo. Les reprochó su actitud y a la vez,
nos ofreció una nueva oportunidad para conocer la hora y el sentido de su
entrega.
En la cruz, un soldado exclamó; “verdaderamente este hombre era Hijo de
Dios”. La realeza de Jesús era de otro estilo y así lo manifestó ante Pilatos,
como la última de las grande afirmaciones sobre su muerte.
Hay otras tres expresiones y actitudes de Jesús, que manifiestan la conciencia clara de
la hora de la entrega y el sentido de la cruz;
- Las palabras del buen pastor que se desvive por las ovejas.
- En un momento del camino hacia Jerusalén Jesús, se dirige a sus discípulos para
decirles “Yo he venido a traer fuego al mundo, ¡ y como me gustaría que
estuviera ardiendo”
- Conocemos una nueva expresión, en la última cena, que refleja la hora de la
entrega y el sentido de la muerte redentora.
2) Jesús ante el Consejo Supremo. Parte compleja y confusa. Juan habla de varios
interrogatorios e noche. Mateo y Lucas hablan de un juicio en el Sanedrín en
casa de Caifás.
3) La sentencia del Sanedrín. La legislación romana impedía al Consejo Supremo
de Israel dictar sentencias de muerte. Su decisión fue clara; “Todos juzgaron
que merecía la muerte”. Las acusaciones son graves y la causa principal es su
crítica al templo, las profecías sobre su destrucción y la blasfemia de su
pretensión de ser el Mesías.
4) Jesús ante Pilato. El diálogo parece profundo. Los jefes de los judíos se
presentan con una nueva acusación: la sedición, el peligro para el orden
público, la conspiración contra el César, la pretensión de ser el rey de los judíos.
La cruz estaba reservada para los casos más graves.
5) Jesús ante Herodes. Sólo lo recoge san Lucas, narra una efímera conversación
de Jesús con el rey Herodes.
6) La crucifixión de Jesús. Fue la condena definitiva. La representación de la
escena es compleja. Hay un tiempo largo que confirma la crueldad de la pena.
La crueldad de los azotes que recibió Jesús aceleró la hora. Brotó de él sangre y
agua, anticipo de la eucaristía y del bautismo.
7) La madre de Jesús y el discípulo amado. La mutua entrega de hijo y madre, se
puede interpretar desde un punto meramente humano. María, viuda, ante la
muerte de su único hijo, quedaba sola, desprotegida. Juan quedaba al cuidado
de la madre, por la confianza que Jesús tenía en él. Era el discípulo amado, y la
acogió en su casa, como si fuera su madre.
8) La sepultura de Jesús. La última escena, que recogen todos los evangelistas
vuelve a situar a Jesús, ya difunto, en un huerto a las afueras de la ciudad.
comprender el sentido de todo lo que sucedía y el lugar que este límite ocupa e
el devenir de la humanidad. La desesperación, ha dado paso a la búsqueda de
un horizonte superior, capaz de integrar el sufrimiento la muerte en el
crecimiento de una vida plenamente humana.
Las respuestas parciales del mundo contemporáneo. En ocasiones se produce
una respuesta sencilla; ya que no tiene sentido el dolor y la muerte, debe
prolongarse la vida al máximo y limitar el dolor para que no distorsione el
equilibrio de la vida humana.
La respuesta que ofrece el Antiguo Testamento es parcial. Se atribuye el dolor a
las acciones desordenadas y al pecado, de los que sería una consecuencia
punitiva directa. Dios castigaría al pecador con el dolor y la muerte.
El sentido del sufrimiento del justo y el éxito intramundado del malvado no se
explicaban. Tampoco se entendía la muerte de los mártires.
El significado del sufrimiento humano y la cruz. Lo que da sentido a la vida
humana no es el sufrimiento sino el destino de la vida eterna. El hombre se
hubiera librado del trauma de la muerte corporal si no hubiera pecado.
El sentido de la muerte del Hijo único del padre. Dios no juega con el hombre,
lo ama profundamente y sufre también las consecuencias del uso impropio de
la libertad y del pecado.
En definitiva, Jesús murió en la cruz y fue sepultado; pero Dios lo resucitó al tercer día
y lo hizo ver a unos cuantos testigos que ya había designado. Se trataba de comprobar
que el resucitado era el mismo que el crucificado y poder así dar testimonio , a todos
los hombres, de la victoria de Cristo sobre el pecado y la muerte.
Los evangelios recogen los tres primeros encuentros con Jesús, después de su muerte,
el día de la resurrección. Los discípulos fueron los primeros que se encontraron con el
resucitado. Los primeros testigos y portadores de la buena noticia. Fueron María
Magdalena, discípulos de Emaús y los Once, menos Tomás, reunidos en una casa.
La primera proclamación pública de la resurrección fue el discurso de Pedro el día de
Pentecostés. Fue escrito, hacia el año 63 poco después de que Pablo terminara el
arresto domiciliario que sufría en Roma. A los 50 días de la Pascua, lleno del espíritu
santo, el que lo había negado tantas veces, lo proclamó con valentía ante todo
Jerusalén.
El primer testimonio escrito fue la primera carta de san Pablo a los Corintios. El texto
fue redactado en la Pascua del 57. Autor menciona fuerte tradición que ha conocido,
revelada por los testigos directos y anunciada por él mismo después de su conversión.
2. El libro de los Hechos de los Apóstoles añade algunos datos con cierta
relevancia, como la presencia de los ángeles quienes, después de contemplar la
ascensión de Jesús preguntaron a los discípulos “¿Qué hacéis ahí plantados,
mirando al cielo? Estad seguros de que el mismo Jesús, que ha sido arrebatado
junto a vosotros para subir al cielo, volverá”
3. Estos dos relatos son las únicas descripciones visuales de la ascensión de Jesús
y la doble representación de:
- Un hecho histórico situado en el tiempo; a los 40 días de la Pascua, y en un
espacio: el monte de los Olivos.
- Un acontecimiento teológico; la exaltación de Cristo y el envío del espíritu
santo
- Una promesa escatológica; la parusía, que su significado aparece descrita e
interpretada en numerosos parajes del Nuevo Testamento y de la Tradición
cristiana.
4. San Pablo resume el itinerario de Cristo desde la preexistencia en gloria, la
encarnación, la muerte y la glorificación a la derecha del Padre.
5. Los demás autores del Nuevo Testamento, interpretan que Cristo, una vez
resucitado de entre los muertos, ya ha sido exaltado, ya participa en la nueva
condición y por tanto, participa en su carne humana, de la gloria de Dios.
6. Esta glorificación representa, para Cristo, la asunción de las propiedades dividas
de la incorruptibilidad y la inmortalidad; y, para los hombres, la posibilidad de
participar de esta misma condición inmortal.
En definitiva; cristo, por su resurrección, abre, para todos los hombres, la posibilidad
de una nueva filiación. Jesucristo, en su humanidad, tiene como dos estados de vida
distintos;
- Por la encarnación, en debilidad, le hace solidario con el hombre.
- Por la resurrección y ascensión, en gloria, le hace solidario con Dios.
El que era hijo eterno del Padre, de su misma naturaleza divina, es glorificado ahora en
su naturaleza humana, y por tato, introduce la humanidad en una nueva relación con
Dios.
8.CONSECUENCIAS DE LA RESURRECCIÓN.
Este acontecimiento extraordinario tienen una triple consecuencia tanto para el propio
Cristo como para todo el género humano y para la creación, que ha quedado afectada
por una renovación esencial de su existencia.
1.Las consecuencias para Jesús de Nazaret. Este hecho tiene una doble dimensión,
humana y sobrenatural. La resurrección, que transforma su carne atravesada en un
cuerpo glorioso, revela y confirma su verdadera naturaleza. Y cabe interpretar la
resurrección como la hora de la legitimación de la vida y de la obra de aquel que porta
una palabra definitiva de parte de Dios para los hombres.
- Resurrección tiene doble dimensión; se trata de un acontecimiento histórico,
humanamente constatable, que sucedió en un tiempo y en un espacio.
- Jesús fue condenado por la blasfemia de decir que era Hijo de Dios.
- La resurrección ratifica todo lo que Jesús hizo y enseñó.
3.Las consecuencias para la creación. También la creación queda afectada. Todas las
cosas son renovadas por la resurrección.
Los apóstoles expresaron esta convicción a través de los diferentes nombres con los
que conocieron a Jesús. Que además de su nombre propio, le llamaron Mesías o Cristo
y Señor e Hijo de Dios.
JESÚS; El ángel del Señor se apareció en sueños a José y le indicó el nombre
que tenía que poner al hijo de su esposa, concebido por obra del Espíritu Santo.
Jesús; este nombre es también una confesión de fe: ÉL es Dios, hijo de María,
que salva. En su nombre, los discípulos anunciarán la salvación a todos los
hombres.
CRISTO; En Israel, el ungido del señor, era sobre todo, el rey. También lo eran
los sacerdotes. El profeta Isaías anuncia una unción especial, la del Mesías, el
Cristo.
HIJO DEL HOMBRE; Jesús sabe que el Mesías tiene una misión singular. Fue el
Mesías sufriente. Por eso prefiere denominarse Hijo del Hombre. Esto solo se
utiliza para hablar de sí.
HIJO; este reconocimiento nos lleva a levantar la mirada para contemplar el
cuarto nombre de Jesús, el Hijo único del Padre. Él es el hijo amado del padre.
Entre el hijo y el padre hay una relación única, exclusiva, de conocimiento
profundo, de amor que aquel revelará.
SEÑOR; el último nombre de Jesús es el reconocimiento de que él es el Señor,
el Hijo de Dios vivo, el que tenía que venir al mundo.
El Papa Pablo VI, al hablar de esta doble naturaleza de Cristo, de la unión de Dios y el
hombre en Jesucristo, nuestro Salvador, llegó a formular, con precisión, esta
convicción profunda de los cristianos; Jesús de Nazaret, verdadero hombre, es el Hijo
único de Dios.
- Los milagros.
- La resurrección de entre los muertos.
- La ascensión a la derecha del padre.
Hijo de Dios. Sólo el Padre conoce la verdad profunda sobre el Hijo, que ahora
revela.
Dos relatos evangélicos en los que se pone en diálogo la voluntad del Padre con
la voluntad humana de Cristo;
- Las tentaciones en el desierto, Jesús responde, una y otra vez, confirmando su
deseo de cumplir la voluntad del Padre.
- La oración de Jesús en Getsemaní, en medio de la tristeza de muerte que le
invadía, Jesús pidió a Dios que si era posible, pasara de él aquel trance.
Al distinguir entre voluntad del Padre y la de Cristo, reconoce que, aunque son un
solo Dios, una sola naturaleza, una sola esencia, son dos personas distintas.
El Padre es dueño de su voluntad, como Dios. Pero en Cristo, una sola persona, un
solo sujeto, aparecen las dos voluntades, como Dios verdadero y como hombre
verdadero.
Parece que las dos voluntades de Cristo luchaban en su interior; la humana que
se vería tentada o que no quería beber del cáliz de la amargura; y la divina, que
sabía cual era su misión, y para qué había sido enviado por el Padre.
En Jesús, único sujeto, persona única, coexisten dos naturalezas sin mezclas ni
confusión, sin separación ni división. Esa doble naturaleza, divina y humana,
conlleva una doble voluntad, una plenamente divina y otra meramente
humana.
Los testimonios de la Sagrada Escritura son numerosos, sobre todo en los evangelios
de San Mateo y San Lucas.
- San Mateo dice que san José tuvo un revelación en la que el ángel del Señor le
dijo; “José, descendiente de David, no tengas reparo en convivir con María, tu
esposa, pues el hijo que ha concebido es por la acción del Espíritu Santo, y
cuando dé a luz a su hijo, tú le pondrás por nombre Jesús.
- Se mantuvo virgen antes del parto, en el parto y después del parto. Jesús fue
concebido por el sólo poder del Espíritu Santo. Sin concurso de varón.
- Es la madre de todos los creyentes. Acogió a todos los hombres como hijos y se
ha convertido en figura de la Iglesia, madre de todos los creyentes.
La Iglesia, Pueblo de Dios. Hace referencia al hecho de que Dios que Dios quiso
salvar a los hombres no individualmente y aislados sino constituidos en un
pueblo que le conociera de verdad y le sirviera con una vida santa.
Este pueblo se distingue claramente de los demás grupos religiosos, étnicos,
políticos o culturales de la historia.
Habrá 7 características de este pueblo;
- Es el pueblo de Dios, es decir, Dios no pertenece a ningún pueblo. Pero él ha
adquirido para sí un pueblo, formado por aquellos que antes no eran pueblo.
- No se empieza a ser miembro de este pueblo por nacimiento o por la familia
biológica, sino por nacer de arriba, por nacer del agua y el espíritu, por la fe en
Cristo Jesús y por el bautismo.
- La cabeza de este pueblo es Jesucristo. Él es el ungido, el mesías, que hace
partícipe a du pueblo de esa misma unción.
- Los signos de identidad de este pueblo son la dignidad y la libertad de los hijos
de Dios en cuyos corazones habita el Espíritu Santo como un templo.
- La ley de este pueblo es el mandamiento nuevo del amor; amar como Cristo
nos ama. Es la nueva ley, la ley del espíritu.
- La misión del pueblo de Dios es ser sal de la tierra y luz del mundo. Es el
germen de unidad, esperanza y salvación para todo el género humano.
- El destino es el reino de Dios que él comenzó en este mundo, que se ha de ir
extendiendo hasta que él mismo lo lleve a su perfección.
1) La iglesia fue prefigurada desde el origen del mundo. Dios creó el mundo para
que todos los hombres participaran en su vida divina y , esta comunión, se
realiza por la convocatoria de todos los hombres en Cristo, mediante la Iglesia.
2) La iglesia fue preparada en la Antigua Alianza cuando el pueblo de Israel fue
elegido por Dios como signo de la convocatoria futura de todas las naciones.
Las dos alianzas anunciaban la Nueva Alianza, la alianza definitiva instituida por
el mismo Dios en la persona del Hijo.
3) La iglesia fue establecida a través de las obras y las palabras de Jesucristo, el
Hijo de Dios, hecho hombre; y realizada sobre todo, a través de su muerte
redentora y su gloriosa resurrección. En la plenitud de los tiempos, él realizó el
plan de salvación establecido por el Padre antes de todos los siglos. Este es el
motivo de su misión.
Las obras y palabras de Jesús manifiestan su voluntad explícita de fundar la Iglesia.
Él solo tenía intención de anunciar el reino y que fueron los hombres los que
establecieron la Iglesia. Podemos descubrir 9 momentos en los que se manifiesta
esta intención;
- La proclamación del evangelio. El origen de la Iglesia está en la predicación del
mismo Cristo, en su propuesta de salvación.
La Iglesia está en el orden de la unión de los hombres con Dios. Cristo realiza en
la iglesia su misterio y su proyecto, que es la salvación de todos los hombres;
que es recapitular todas las cosas en él.
La Iglesia es sacramento universal se salvación y presenta una estructura
sacramental, según la voluntad del propio Cristo. Él al fundar la Iglesia,
estableció una estructura sacramental para transmitir a los hombres la vida
eterna. Él es la vida, y quien permanezca en él, dará mucho fruto.
Cristo es el sacramento de la salvación, es el mediador definitivo entre Dios y los
hombres.
Su humanidad es la mediación definitiva para la salvación
La Iglesia, pueblo de dios, cuerpo de Cristo, templo del espíritu santo, tiene la
misión de anunciar el evangelio, de libertar a todos los hombres de la
esclavitud del pecado, y de comunicar la salvación eterna.
LA IGLESIA ES UNA;
Lo es por su origen, y así se vivió desde el principio, y en medio de la separación, la
Iglesia es una también por su destino.
- Jesús de Nazaret instituyó una sola iglesia. Es una por su origen. El modelo y
principio está en Dios, Padre, Hijo y espíritu Santo.
- Esta unidad fue vivida desde el principio en una verdadera multiplicidad,
enriquecedora, obra de los dones diversos de Dios y de la complejidad de las
personas. Es un lugar de partida.
- Esta unidad está en Dios, y la división y la ruptura no proceden de él, sino del
pecado, de la desviación de la voluntad de Cristo. La iglesia debe rezar y
trabajar en cada momento por mantener la unidad de la fe y para recuperar la
unidad de los cristianos, dispersos por el mundo.
LA IGLESIA ES SANTA;
Por muchas razones
- Por su origen, porque Cristo es santo y el Espíritu Santo también lo es, fuente
de santidad de la Iglesia.
- Por sus medios, por cuantos instrumentos tiene en su interior para la
satisfacción de los hombres, como sacramentos, la Palabra de Dios y la Oración.
- Por la santidad de sus hijos.
- Por su destino, que es la participación plena de la vida de Dios, en santidad.
LA IGLESIA ES CATÓLICA;
- Porque Cristo está presente en ella. En ella subsiste la plenitud del Cuerpo de
Cristo, unido a su cabeza por lo que ella recibe en plenitud todos los medios de
salvación para el hombre.
- La iglesia convoca a todos los hombres. No se trata de que todos los seres
humanos formen parte de la iglesia, ni que esté extendida por todas las
naciones. La iglesia es católica desde el principio.
LA IGLESIA ES APOSTÓLICA;
Ha sido edificada por Cristo, en Cristo sobre los apóstoles. Ellos han recibido la
revelación y la han transmitido. Conserva el depósito de la fe. Los encargados de
custodiar esta Tradición y transmitirla al Pueblo de Dios son los sucesores de los
apóstoles, bajo la gracia del Espíritu Santo.
Es apostólica en triple sentido;
- Permanece edificada sobre el fundamento de los apóstoles, como testigos
seleccionados y enviados para la misión por Jesucristo.
- Conserva el depósito de la fe y la palabra de los apóstoles, y los transmite con
ayuda del Espíritu Santo que habita en ella.
- Es guiada, instruida, y santificada por los sucesores de los apóstoles, el colegio
de los obispos en comunión con el sucesor de Pedro.
Las diferencias que se puedan percibir entre los distintos cristianos son ocasión
para la construcción de la unidad y para el desarrollo de la misión compartida.
Los misterios son diversos para que se pueda cumplir la misma misión;
- A los apóstoles, y a sus sucesores, Cristo les encomendó la función de enseñar,
santificar y regir en su nombre y autoridad.
- A los laicos, partícipes de la condición docente, santificante y regente de Cristo,
les encomendó la construcción del reino desde su condición laical.
- Dios suscitó la vocación de algunos hombres y mujeres quienes, por la
profesión de los consejos evangélicos, desarrollan esta misión desde una
consagración propia.
Todos los cristianos, por su bautismo, comparten una misma condición y una
misma misión, que deben desarrollar, cada uno según su vocación y su
misterio, como obra de toda la Iglesia, en medio de un mundo legítimamente
autónomo.
Cada uno de los tres órdenes jerárquicos tiene una misión propia.
MINISTERIO OBISPOS;
- Su misión es triple; predicar el evangelio, santificar a los fieles y gobernar el
pueblo de dios en el camino de la patria.
- Ejercen en la iglesia el primer grado del sacerdocio y deben orientar a la
comunidad en materia de fe y de costumbres, tanto en la realidad cotidiana
como en las grandes decisiones morales, sociales y teológicas.
MINISTERIO PRESBÍTEROS;
- Su misión es triple; la predicación ,la santificación y el gobierno, como enviados
de los obispos para ejercer el segundo grado del sacerdocio.
- Como sacerdote , tiene capacidad de consagrar las especies eucarísticas y de
celebrar los sacramentos del bautismo, penitencia, unión de enfermos y el
matrimonio.
- El obispo delega en ocasiones la autoridad para ungir en la confirmación.
MINISTERIO DIÁCONOS;
- Se ejerce en la iglesia, en el orden del ministerio. Son ministros, servidores,
clérigos. Pero no han sido ordenados sacerdotes.
- Su espacio propio es el ministerio de la palabra y el de la claridad.
- Está ordenado como paso previo al prebiterado. En hombres casados se ejerce
permanente, por sí mismo.
LA MISIÓN SACERDOTAL;
- Los laicos, hombres y mujeres del Pueblo de Dios, han sido consagrados a Cristo
y ungidos por el espíritu santo, y han sido llamados a producir frutos de
santidad y a unir sus vidas a la ofrenda de Cristo en la eucaristía.
- Cuando son esposos y padres, participan de manera especial en esta misión,
son los responsables de consagrar a dios en su vida familiar y educar a sus hijos
en el espíritu.
- En la celebración ejercen su condición sacerdotal bautismal y participan
activamente en el misterio de Cristo.
LA MISIÓN PROFÉTICA;
- Cristo hace a los laicos los primeros testigos de su resurrección.
- En las familias cristianas, los padres, los abuelos ,son los mejores colaboradores
de Cristo en el anuncio de la esperanza del reino.
LA MISIÓN REGIA;
- Primer espacio de gobierno es la propia vida.
- Los laicos son los primeros responsables del gobierno de las estructuras del
mundo, desde la justicia.
- Las mujeres y hombres del pueblo de dios participan activamente desde su
secularidad, en la construcción de la iglesia.
- En las comunidades, algunos seglares pueden recibir una vocación singular en
el ejercicio de las funciones de gobierno.
Han ido surgiendo formas diversas de concretar esta misma consagración religiosa,
tanto en la soledad como en comunidad.
- Ermitaños; han vivido el concepto de separación desde la antigüedad. No
emitían públicamente los consejos evangélicos, pero los vivían según cierta
inspiración particular del Espíritu santo.
La oración continua, soledad, penitencia.
De estos cuatro relatos se refleja una primera revelación de Dios único y verdadero,
Padre de todos los hombres, que mantiene, con la humanidad, una relación íntima,
personal.
- Todo comienza con un acto de Dios que llama. En la vocación de los tres
personajes (Abraham, moisés y oseas) está Dios, un ser personal, que entra en
diálogo con el hombre.
- La relación de Dios con su pueblo adquiere rasgos de Padre. Dios es creador y
misericordioso y espera que el pueblo pueda contestar en fidelidad.
Esa misericordia es fuente de santificación para el pueblo.
- Ese Dios tienen un nombre; “El que ES”. Es un nombre de misterio.
- Aunque los patriarcas pudieran contemplar los dioses de los paganos Israel fue
comprendiendo pronto que existía un solo Dios y que solo a él debía atribuirse
culto.
En definitiva, Dios es Padre, Hijo y Espíritu Santo. No son tres dioses sino un
solo Dios verdadero. Esta verdad, constituyente de la fe cristiana, es también
constitutiva de la existencia de cada hombre. Todo en la vida del hombre es
trinitario porque en Dios Trinidad tiene su origen permanente que le hace
vivir.
La Iglesia, según el deseo de Cristo, anima a los fieles cristianos a preparar su muerte,
su propio desenlace.
Después del juicio final, los seres humanos recibirán la sentencia definitiva. Esta será la
vida de la plena comunión con Dios, en la que su cuerpo glorificado se unirá
definitivamente a su alma inmortal; o la condena definitiva, para siempre.
No se sabe cuándo tendrá lugar este juicio.
También parece interesante llegar a alcanzar el conocimiento sobre el momento de
nuestra propia muerte y, por tanto, del juicio particular a toda nuestra vida. Esta
incógnita puede ser ocasión para una triple ventaja;
- El hombre puede estar más despierto, más atento a su propia salvación, a la
santidad de una vida coherente con el evangelio.
- El hombre puede convertirse de su vida
- El hombre puede avivar su esperanza, su deseo de Dios.
SEGUNDO;
Cuando hablamos de la muerte eterna nos referimos a la separación definitiva de Dios,
al estado de autoexclusión de la comunión con Dios y con los bienaventurados.
Dice el Catecismo que, salvo que elijamos amarle con libertad, no podemos estar
unidos a él.
TERCERO;
La iglesia, en coherencia con la doctrina cristiana, ha sostenido siempre que Dios
quiere que todos los hombres se salven y lleguen al conocimiento de la verdad.
CUARTO;
El infierno es real y eterno. Aquellos que rechazan a Dios gravemente, aquellos que
mueren en pecado mortal, descienden inmediatamente al infierno donde sufren la
pena más grave que es la separación eterna de Dios.
Las penas del infierno son fundamentalmente de dos tipos;
1. La pena de daño representa la ausencia de Dios, la ausencia del motor de su
vida, de la felicidad eterna. Es la pena de soledad, de silencio, de oscuridad, de
ausencia.
2. La pena de sentido representa el dolor, la ansiedad, el tormento derivado del
propio mal.
QUINTO;
La iglesia hace una llamada a la responsabilidad con la que el hombre debe usar de su
libertad en relación con su destino eterno.
Hay una llamada al arrepentimiento, a volver a Dios, a respetar escrupulosamente a
nuestros humanos, a trabajar en la construcción de un reino de Dios ya en este mundo.
PRIMERO;
Según la teología católica, los justos recibirán la retribución eterna inmediatamente
después de la muerte o, si lo necesitan, después de un proceso de purificación en el
purgatorio.
Esto acontece, después del juicio particular antes de la reasunción de sus cuerpos y
antes del juicio final.
Esta vida se llama cielo. El cielo no es un lugar, sino una nueva relación con Dios, un
nuevo modo de vida.
Jesucristo por su muerte y resurrección, por su ascensión a la derecha del Padre, ha
abierto el cielo para que el hombre pueda participar de la vida de Dios.
Aquellos que rechazan a Dios también resucitarán para una resurrección de juicio.
SEGUNDO;
Cuando hablamos de la resurrección de la carne queremos expresar que, después de la
resurrección, no solo tendremos vida del alma inmortal sino que nuestros cuerpos
mortales serán glorificados,
La resurrección es de todo el hombre.
Dios dará al cuerpo de cada ser humano, muerto en el tiempo, una vida incorruptible,
gloriosa, unido para siempre a su alma inmortal.
Esta resurrección de la carne, según la expresión bíblica, tendrá lugar en el último día.
TERCERO;
En el huerto de los Olivos, la noche de la Pascua, Jesús pidió al Padre por los suyos. En
un momento de la oración nos dejó otra expresión del significado profundo de la vida
eterna.
Frente a la idea de que el mundo será destruido una vez completado su misión de
albergar al hombre y al resto de la creación, la Escritura y la Tradición de la Iglesia han
sostenido siempre que, después del juicio final, al final de los tiempos, también el
universo será renovado.
SEGUNDO;
Este universo, añade la constitución dogmática sobre la Iglesia, del Concilio Vaticano II,
íntimamente unido al hombre, “que alcanza su meta a través del hombre”, quedará
también “perfectamente renovado en Cristo”
No será destruido sino que alcanzará su plenitud.
TERCERO; estos cielos nuevos y esta tierra nueva afectarán a toda la realidad creada,
tanto a los hombres como al universo material.
CUARTO;
No sabemos cuándo tendrá lugar esa consumación del cielo y de la tierra, de la
humanidad entera; pero la Iglesia ha sostenido siempre esta renovación de la creación.