La Cultura Egipcia Ii
La Cultura Egipcia Ii
La Cultura Egipcia Ii
La cultura Egipcia o cultura del Antiguo Egipto, se desarrollo en el valle formado por el río Nilo,
situado al extremo noreste de África. El río Nilo recorre el territorio de sur a norte haciendo
prosperar la agricultura, la ganadería y la navegación.
La cultura egipcia existe hace más de 6000 años a. C. se conforma a partir de la forma de vida,
costumbres y tradiciones existentes en la sociedad egipcia de la Antigüedad. Se inició en el
Neolítico y evolucionó a lo largo de 3000 años, hasta la época romana, cuando prácticamente
desapareció al adoptar la del Imperio romano, y sobre todo las costumbres cristianas.
La historia del Antiguo Egipto como Estado unificado comienza en el Neolítico, hacia el año 3150 a.
C., y se divide en tres imperios con periodos intermedios de dominación por parte de gobernantes
extranjeros y conflictos internos:
La decadencia del imperio faraónico comenzó hacia 1075 a. C., a raíz de diversas incursiones de
ejércitos de otros pueblos. A pesar de esto, la cultura egipcia mantuvo sus características
fundamentales hasta la dominación romana, e influyó en todo el Mediterráneo occidental.
Egipto esta situado al noreste del continente africano. Limitaba en la antigüedad, por el norte con
el mar Mediterráneo; por el sur con la región de Nubia; por el este con el mar Rojo y el istmo de
Suez y por el oeste con el desierto de Libia.
El territorio habitable de Egipto tiene la forma de una estrecha faja atravesada de sur a norte por
el río Nilo. Geográficamente tiene dos regiones: el Alto y Bajo Egipto. La primera región se
encuentra al sur. Comprende desde Asuán hasta El Cairo. Esta zona es montañosa en donde el río
Nilo exhibe seis cataratas. La segunda región se encuentra en el norte y se extiende desde El Cairo
hasta el mar Mediterráneo. Forma un valle muy fértil, regado por el Nilo que desemboca en el Mar
Mediterráneo.
Organización política de la cultura egipcia
El Faraón
El gobierno estaba en manos de una persona llamada faraón, que vivía rodeado por una gran corte
de privilegiados nobles, funcionarios, sacerdotes y guerreros.
El faraón era el amo de todos los hombres, dueño de todas las tierras y de todas las aguas del Nilo.
Su voluntad era ley.
El faraón era considerado hijo del dios Ra(Sol), quien le había dado poder para gobernar a los
hombres. Por tanto los mortales le debían suma reverencia y ninguno de ellos podían pronunciar
su nombre sin añadir la siguiente expresión : > que florezcan en él la vida y la salud.
Muchas funciones del gobierno las delegaban a personas de su confianza, quienes les prestaban
eficaz colaboración. Entre los principales funcionarios:
El Escriba Real, que estaba encargado de llevar el cáculo de los ingresos agrícolas y de inspeccionar
las industrias y el comercio. Para ello debían ser expertos en el manejo de los números y de la
escritura.
El Gran Visir, encargado de controlar los nomos (provincias), era el intermediario entre las
autoridades y el faraón.
El Jefe del Sello del Estado, comparado actualmente con el Ministerios de Economía, quien tenía
como función vigilar los ingresos fiscales y los gastos del Estado
El Gran Sacerdote, que tenía a su cargo el culto religioso y se preocupaba de presentar a los
faraones como descendientes de los dioses.
La sociedad en la cultura egipcia estaba dividida en varias clases sociales, entre las que existía una
gran desigualdad. Puedes encontrar u artículo más extenso en «organización política y social del
Antiguo Egipto«. Estas clases sociales eran las siguientes:
Los sacerdotes
Pertenecían a una clase privilegiada, encargada de culto religioso. Cuidaban de los templos y los
animales sagrados. Actuaban de intermediarios entre los dioses y los hombres.
Los escribas
Los guerreros
Eran los defensores del país y las conquistadores de nuevos territorios en la cultura egipcia. Por
sus hazañas recibían tierras y esclavos como premios y en algunas circunstancias, podían tener el
privilegio de contar con un sarcófago de piedra.
El pueblo
Constituía la clase más numerosa en la cultura egipcia, conformada por los agricultores, los
artesanos y los comerciantes. Sus miembros estaban obligados a pagar impuestos, a servir como
reclutas en tiempo de guerra, a realizar trabajos forzados. Aún en periodos de mala cosecha,
debían cumplir con la entrega del diezmo.
Los esclavos
Lo conformaban los prisioneros de guerra o los hombres comprados en los mercados extranjeros.
Servían generalmente a las clases privilegiadas, en trabajos duros, mal alimentados y mal vestidos.
La agricultura
Esta actividad consistía en el trabajo de la tierra. Se araba con azadas y arados tirados por bueyes.
Se cultivaba el trigo, la cebada, el lino, la uva, las hortalizas y diversas legumbres.
La ganadería
La industria
Tuvo gran importancia en la época de los faraones. Sobresalieron las industrias del tejido de lino,
comparable a la seda; la elaboración de metales, con los que hacían utensilios, armas, joyas,
espejos y peines; el curtido, la alfarería, la mueblería, la confección de carrocerías y la preparación
de una especie de papel, a base de papiro.
El comercio
Esta actividad se desarrollo tanto por tierra como por mar en la cultura egipcia. Por tierra, sus
caravanas llegaron hasta Siria, Palestina y Mesopotamia. Por mar, sus barcos navegaron por las
costas de Siria y las islas del Mar Egeo. El comercio se realizaba mediante el trueque, por el
intercambiaban, los tejidos y objetos de arte y lujo por ganados, maderas y metales.
Manifestaciones culturales de la cultura egipcia
Los antiguos egipcios, llegaron a desarrollar una cultura sobresaliente, cuya máxima expresión
podemos encontrarlas en las ciencias, las artes, la religión y la escritura. Puedes encontrar un
artículo más extenso por cada etapa:
Entre las principales ciencias en las que sobresalieron la cultura de los antiguos egipcios, están la
siguientes:
La matemática
La astronomía
Inventaron el calendario, de 365 días, divididos en 12 meses de 30 días cada uno, a los que
agregaron un periodo de 5 días festivos. Este calendario lo conocemos hasta ahora por los
romanos.
Los egipcios conocieron tres estaciones: inundación, siembra y cosecha; descubrieron varios
planetas: Mercurio, Venus, Marte, Jupiter y Saturno; inventaron el reloj de sol y sombra y el reloj
de agua; trazaron mapas celestes y determinaron los cuatro puntos cardinales.
La medicina
Surgió debido a la necesidad de atender las lesiones recibidas por los soldados en los campos de
batalla y los accidentes de los obreros, producidos en las grandes construcciones. Supieron tratar
fracturas, heridas, luxaciones, bajo la influencia de las supersticiones y el poder de los amuletos.
Por ejemplo al tomar alguna medicina, debían pronunciar ciertas palabras. Trataron las
enfermedades propias de la época y destacaron en las técnicas de embalsamar y momificar los
cadáveres.
La escultura
Los colosos son estatuas gigantescas que miden hasta 80 metros de altura. Representan a
faraones sentados, colocadas a las entradas de las grandes ciudades como los colosos de
Mnemón, cerca de Tebas.
La esfinge mide 20 metros de ancho por 19 de alto y 73,5 de largo. Es el símbolo del sol naciente,
con cuerpo de león. Se ubica cerca de las pirámides de Gizeh. La roca en la que se ha esculpido la
esfinge, produce ruidos especiales, en razón de que la porosidad del material aloja humedad
atmosférica que al aparecer el sol, se escapa en forma de vapor.
La escritura
Los egipcios escribían con pequeñas cañas puntiagudas, mojada en una especie de tinta,
preparada a base de agua, goma y sustancias vegetales.
Usaban como papel los tallos del papiro, que crecían en las orillas del río Nilo.
La escritura escritura egipcia fue descifrada por el francés Jean-François Champollion en 1822. La
clave fue proporcionada por el hallazgo de la Piedra Roseta en 1799, por el soldado Pierre-François
Bouchard, cuando Napoleón Bonaparte realizaba la expedición al país del Nilo.
Escritura jeroglífica era una escritura de difícil interpretación, pues estaba formada por signos e
imágenes de animales y objetos. Se empleaba generalmente en las tumbas y en los templos.
Escritura Hierática es la misma escritura jeroglífica pero en forma abreviada. Su uso estuvo
limitado a los sacerdotes y personas de gran cultura.
La religión egipcia
Era politeísta, tenían muchos dioses. Creían que todos los cuerpos celestes, los elementos
naturales, algunos animales y algunas plantas, eran sagrados. Así llegaron a explicarse muchos
misterios de la naturaleza.
Era antropomorfista, los dioses eran representados generalmente en forma humana y a veces con
cabezas de animales.
Clases de Cultos
El culto religioso consistía en ceremonias mágicas, dedicadas a los dioses locales y nacionales.
En un principio antes de la unificación del Alto y Bajo Egipto, cada nomo o comunidad, rendía culto
a sus dioses locales. Posteriormente durante el Imperio, muchos de estos dioses se convirtieron en
dioses nacionales.
El buey Apis de color negro con frente blanca, la figura de un águila en el lomo y un escarabajo
debajo de la lengua. a su muerte era momificado y enterrado en un cementerio llamado
Serapeum.
Los cocodrilos que vivían en los grandes templos atendidos por los sacerdotes.
Otros animales adorados eran el Ibis, ave con la que se predecía el futuro; el ave fénix que
resucitaba de sus cenizas; el halcón, el chacal, etc.
La cultura Egipcia veneraba los antepasados por que querían conservar las enseñanzas morales y
recordar los beneficios que habían recibido. Además, pensaban que el ser humano no moría por
completo, pues su alma o ka, quedaba con vida, siempre y cuando el cadáver no se destruyera.
Con tal fin practicaron la momificación.
Depositaban ofrendas en las tumbas y colocaban junto al muerto el Libro de los Muertos, que
contenía la fórmula con que el alma debería defenderse ante el Tribunal de Osiris. Después de un
año, la momia se colocaba en una barca, para ser arrastrada por las aguas del Nilo, con rumbo a la
eternidad.
De acuerdo a la mitología egipcia el alma comparecía ante el Tribunal de Osiris. Hasta allí era
conducido por el dios Anubis, donde 42 jueces examinaban su conducta eterna. El dios Thot,
pesaba los pecados en la balanza de la justicia. Si el platillo se inclinaba por el lado de la
culpabilidad, el alma era destrozada por un perro; de lo contrario podía disfrutar la felicidad de los
dioses.
La musica
La música en el antiguo Egipto no era solamente lo que nosotros entendemos por ella: unos
sonidos ordenados de determinada forma, sino que también era la representación de unos
conocimientos que formaban parte del pensamiento cultural.
Tanto la danza como el canto, eran de tipo melódico; pueden reconstruirse con ayuda de los
textos, y, en el caso de la danza, por las coreografías representadas en pinturas y relieves.
La afición de los egipcios a la música podemos medirla por el hecho de que el jeroglífico con que la
designaban era el mismo que para la palabra bienestar, además de considerarla una ciencia tan
importante que era estudiada por los sacerdotes.
Pintura
Los egipcios se sirvieron de la pintura desde las primeras dinastías no solo para decorar las
cámaras sepulcrales, los templos y palacios, sino para conseguir mayor realismo en estatuas y
bajorrelieves, en las momias y ataúdes, y para embellecimiento de vasijas y rollos de papiro.
Artesanía
Cerámica
Se han hallado hermosos objetos de cerámica correspondientes a épocas diferentes, desde los
albores de su civilización. En sus cámaras sepulcrales se han descubierto representaciones de
alfareros modelando vasijas a torno que se remontan por lo menos a la dinastía IV. No obstante, la
cerámica era de uso corriente, para los objetos de lujo se utilizaban otros materiales: esto tiene
como consecuencia la falta de adornos y pintura en la mayor parte de los encontrados.
Desde la época predinástica se empleó con profusión el oro en utensilios valiosos, y también para
recubrir o chapar otros de bronce, piedra o madera. Las minas de cobre de la península del Sinaí se
explotaron ya en la época de las primeras dinastías, así como las de piedras preciosas.
Las vasijas de uso cotidiano en templos y palacios eran de oro con relieves y grabados de figuras
dispuestas alrededor de las mismas. En oro, bronce dorado y marfil (raramente en plata, muy
escasa en Egipto) se labraron muchísimas estatuillas en honor a las divinidades y a los altos
personajes. Asimismo, fueron adornadas con pedrería muebles, brazaletes, collares, anillos, etc. Se
revestían con planchas de oro o de electro las puertas de los templos, los relieves de piedra y aun
los zócalos y obeliscos más estimados. Se empleaba el bronce como material ordinario en
utensilios domésticos y en estatuas, adornándolas a veces con incrustaciones de oro y plata.
Vidrio
El vidrio fue utilizado desde épocas muy antiguas para la elaboración de cuentas para collares y
brazaletes, ojos para estatuas, figurillas y amuletos variados, plaquitas para adorno de muebles,
imitaciones de piedras finas y como vasijas y pequeñas estatuas de colores diferentes.
Las primeras vasijas fueron elaboradas durante el reinado de Thutmose III (1500 a. C.), y se
utilizaba la técnica de moldeado sobre un núcleo de arcilla. Suelen ser frascos cilíndricos y
anforitas alargadas y estrechas, a menudo decoradas con rayas multicolores, a veces con figuras e
imitaciones de filigranas u otros ornamentos. Se han encontrado en las tumbas, y casi siempre
ofrecen poca transparencia y curiosas irisaciones en la superficie, descomponiéndose en escamitas
al tocarlos: todo ello es debido, en parte, a las impurezas.
El vidrio incoloro y transparente, comenzó a utilizarse en la época saita (dinastía XXVI, siglo vii a.
C.).
conclusion
El aporte cultural a la cultura occidental se manifiesta a través de tres ideas fundamentales; la idea
del alma, el juicio de los muertos y el calendario.
Consideraban que toda persona tenía dos partes; el cuerpo y el alma; este último seguía
existiendo al producirse la muerte.
Así mismo, creían que el alma era juzgada por un tribunal de los dioses. Si se comprobaba que
había llevado una vida diga y pura, pasaba a gozar de la eterna felicidad.
Por último los antiguos egipcios le debemos la confección de un calendario de 365 días que
subsiste hasta ahora, solo modificado en dos ocasiones; en el siglo I a.C. cuando se elaboró el
Calendario Juliano y en 1582 cuando se estableció el Calendario Gregoriano (Gregorio XIII).