Proyecto de Tesis Azalde
Proyecto de Tesis Azalde
Proyecto de Tesis Azalde
PROYECTO DE TESIS
FEDU : No
Otros : No
2.1 Antecedentes
Todos los productos líquidos derivados de la fruta son sistemas bifásicos
compuestos por partículas sólidas dispersas en un medio acuoso. Algunos muestran un
comportamiento newtoniano, pero la mayoría muestra un comportamiento pseudoplástico; a
veces muestra resistencia al flujo inicial y/o flujo dependiente del tiempo. Este artículo
presenta una solución de un problema inverso para estimar las propiedades reológicas de la
pulpa de mango ( Mangifera indica ). El problema directo se resolvió utilizando la ecuación
de Mizrahi-Berk con tres parámetros para determinar el índice de consistencia (K M), el índice
de comportamiento del fluido (nM) y la raíz cuadrada del límite elástico (K OM). El objetivo fue
determinar las propiedades reológicas de la pulpa de mango resolviendo un problema inverso
con parámetro estimado mediante el método de Levenberg-Marquardt. El método inverso
proporcionó estimaciones precisas de los parámetros reológicos, considerando que las curvas
de esfuerzo cortante residual experimental y teórico eran bastante pequeñas (F. de Barros et
al., 2017).
El objetivo de este estudio fue la determinación experimental de la
conductividad térmica de la pulpa de mango del cultivar “ubari” y su posterior comparación
con los valores estimados utilizando diferentes modelos estructurales, como el modelo serial,
paralelo y de Maxwell-Eucken. Se utilizó una sonda de calentamiento lineal calibrada con una
solución de sacarosa al 10%. Se aplicó calor a la sonda, generando un aumento de
temperatura, el cual fue registrado a través de un sistema de acondicionamiento de señal. La
conductividad térmica de la pulpa se calculó a partir de la pendiente obtenida por regresión
lineal del logaritmo natural de la temperatura frente al tiempo. Los datos estuvieron dentro del
rango de 0,465 a 1,595 W/mK para temperaturas de 0 y –30 °C, respectivamente, mostrando
un aumento de la conductividad con la congelación. La temperatura de congelación inicial y
la fracción de hielo se determinaron a cada temperatura de análisis para su uso posterior en los
modelos. El mejor ajuste a los datos experimentales se obtuvo utilizando el modelo de
Maxwell-Eucken, arrojando errores mínimos y máximos de 10,8 y 17,8%, respectivamente.
Se ajustó un modelo exponencial que permitió el cálculo directo de la conductividad térmica
de la pulpa de mango utilizando únicamente el conocimiento de la temperatura registrada
durante el procesamiento térmico (Giarola et al., 2016).
De La Cruz and Puchoc (2014), determinaron las características reológicas de
la compota a base de pulpa de zapallo macre (Cucurbita maxima Duchesne) a diferentes
concentraciones de goma xantana (0,10%; 0,15% y 0,20%). Los ensayos reológicos se
realizaron a 20ºC, 30ºC y 40ºC. La compota a diferentes concentraciones presentó un
comportamiento No Newtoniano. Las curvas de flujo ajustadas al modelo mostraron que al
aumentar la temperatura a una misma concentración el coeficiente de consistencia (k)
disminuye y el índice de comportamiento del flujo (n) aumenta; además se obtuvo valores de
n entre 0 y 1 indicándonos un comportamiento pseudoplástico. Asimismo, al aumentar la
concentración a una misma temperatura aumenta k y n.
La calidad de los alimentos puede verse afectada negativamente por procesos
físicos, químicos, bioquímicos y microbiológicos. Por lo tanto, la tecnología de obstáculos se
desarrolló como un nuevo concepto que emplea una combinación de diferentes técnicas de
conservación para lograr efectos de conservación suaves pero fiables en múltiples objetivos.
El objetivo de este trabajo fue conservar la pulpa de mango mediante tecnología de obstáculos
como procedimiento alternativo al proceso de congelación. El proceso de aplicación de estos
parámetros de barrera consistió en la depresión escalonada de la actividad de agua mediante la
adición de jarabe de glucosa al 25% y sacarosa con respecto al peso de la pulpa, ajuste del pH
a pH 3 e incorporación de sorbato de potasio al 0,1% como conservante. Los
comportamientos fisicoquímicos y microbiológicos del producto conservado por tecnología
de obstáculos fueron satisfactorios en comparación con el control (pulpa de mango congelada)
(MORAES et al., 2011).
Se estudió el impacto de la madurez en las características de secado del mango
considerando diferentes zonas de la fruta. Para cada zona, la madurez se estimó por la relación
sólidos solubles totales/acidez, el color y la textura de la pulpa de la fruta. Para cada estado de
madurez se establecieron curvas de secado y curvas de tiempo-temperatura tanto en
convección forzada como natural. La difusividad de masa (estimada considerando dos
regiones de difusión), la difusividad térmica y las tasas de secado se dedujeron de estas curvas
de secado considerando la contracción del producto. Los resultados mostraron que el tiempo
requerido para reducir el contenido de humedad a cualquier nivel dependía del estado de
madurez, siendo más alto para las muestras inmaduras y más bajo para las muestras maduras.
En cada momento de secado, la temperatura de la muestra madura fue mayor que la de la
muestra inmadura. difusividad de masa, La difusividad térmica y las tasas de secado
aumentaron fuertemente con el estado de madurez. A 60 °C, las difusividades de masa de
frutos inmaduros y maduros variaron respectivamente de 1,69x10-10 a 9,87x10-10 m²/s y de
3,38x10-10 a 1,77x10-9 m²/s. Las difusividades térmicas variaron de 2,12 x10-11 a 6,44x10-10
m²/s y de 2,74x10-10 a 8,05 x10-10 m²/s respectivamente para muestras inmaduras y maduras.
En convección natural, las velocidades de secado alcanzaron valores máximos de 0,16 kg m -2
s para muestra inmadura y 0,47 kg m-2 s para muestra madura, mientras que en convección
forzada alcanzaron respectivamente 0,43 y 0,67 kg m-2 s. La contracción del producto
disminuyó con la madurez y fue casi ideal durante la mayor parte del proceso de secado. Las
constantes de modelos de ajuste adecuados también variaron considerablemente con la
madurez de la fruta. Este trabajo mostró que el estado de madurez influye fuertemente en las
características de secado de la fruta de mango (Dissa et al., 2011).
La densidad, capacidad calorífica y conductividad térmica de la pulpa de
mango ( Mangifera indica L. cv. Tommy Atkins) se determinaron a contenidos de humedad
de entre 0,9 y 0,52 kg.kg−1 (wb) y temperaturas de entre 20 y 80 °C. Los datos
experimentales se ajustaron satisfactoriamente (valores de variación explicada >99,1%) en
función del contenido de humedad y la temperatura mediante el uso de modelos lineales
multivariados. En el rango de condiciones considerado, el contenido de humedad exhibe una
mayor influencia sobre las propiedades estudiadas que la temperatura (Bon et al., 2010).
Giraldo-Gómez et al. (2010), mencionan que el calor específico del jugo
concentrado de lulo medido a siete contenidos de agua en un rango de 0,55 a 0,90 (w/w) a las
temperaturas de 4,0; 10,3; 19,8; 28,8; 40,40; 54,6; 65,6 y 78,6 °C, donde los datos fueron
correlacionados por una función lineal de temperatura y contenido de agua dada por la
ecuación Cp = 1464,88 -483,82XW - 0,7T, con un coeficiente de determinación R2 de 0,9974.
El secado intermitente es una tecnología alternativa al secado continuo por
suministro de calor que podría mejorar la eficiencia energética del proceso y la calidad del
producto, ya que reduce tanto la ganancia de entalpía del material como el tiempo de
calentamiento. En este estudio, la aplicación de la tecnología de secado intermitente al mango
( Mangifera indica L cv. Tommy Atkins) se analizó y optimizó el secado para diferentes
temperaturas y ciclos de secado. Los tiempos de calentamiento y reposo durante el secado
intermitente se optimizaron minimizando una función objetivo que representa el incremento
de entalpía promedio del material a lo largo del proceso. Para cuantificar la función objetivo,
se desarrolló un modelo para una forma cúbica considerando la transferencia de masa y calor
y mostrando resistencias externas no despreciables y propiedades de transporte dependientes
de la humedad y la temperatura. Además, se identificaron experimentalmente modelos
específicos para isotermas de sorción y capacidad calorífica para M. indica L cv. Tommy
Atkins que, junto con otros modelos informados, se utilizaron para completar la formulación
general del modelo. De acuerdo con las simulaciones de secado continuo e intermitente, la
ganancia de entalpía promedio para el proceso intermitente optimizado disminuyó entre 9%
(45 °C, un ciclo) y 23% (65 °C, tres ciclos), y el tiempo de calentamiento disminuyó entre 3%
(65 °C, tres ciclos) y 11% (45 °C, un ciclo). Los resultados de la optimización muestran que
existe una ventaja del secado intermitente sobre el continuo en cuanto a la entalpía del
material y el tiempo de calentamiento bajo las condiciones y restricciones de operación
consideradas, lo que indica una disminución en el consumo de energía y una eventual mejora
de la calidad (Váquiro et al., 2009).
Se llevaron a cabo pruebas preliminares para el secado de pulpa de mango
alphonso con malla de espuma utilizando un secador de gabinete tipo lote. Del ensayo se
observó que la pulpa de mango espumada utilizando albúmina de huevo (10%) como agente
espumante con metilcelulosa (0,5%) como agente estabilizador, secada a 60 °C con 1 mm de
espesor de espuma resultó ser la mejor. Para esta pulpa espumada se determinaron valores de
parámetros como viscosidad (5,7 ± 0,06 Pa.s), pegajosidad (18,9 ± 0,1 g fuerza) y calor
específico (3,66 ± 0,02 kJ/kg °C). El estudio de secado mostró que el tiempo requerido para
secar las pulpas de mango frescas (sin espuma) y espumadas fue de 75 y 35 min,
respectivamente. Con base en los resultados preliminares del secado, se desarrolló un secador
de estera de espuma tipo continuo (modelo de laboratorio) con una capacidad de secado de
2.5 kg/día de 8 h para secar las pulpas de mango. La difusión general de humedad en hojuelas
de mango frescas y secas con espuma fue de 5.3 y 9.7 × 10 −9 m2/s, respectivamente. Según la
evaluación del rendimiento, se encontró que los copos secados con espuma registraron un
factor de utilización de calor más alto que los copos sin secado con espuma. También a partir
del análisis de calidad, se observó que los cambios fueron comparativamente menores en los
copos secados con espuma que en los copos secados sin espuma utilizando un secador de
malla de espuma de tipo continuo (Rajkumar et al., 2007).
Se evaluó el efecto del tratamiento de alta presión (HP) (100–400 MPa durante
15 o 30 min a 20 °C) sobre las características reológicas y el color de las pulpas de mango
frescas y enlatadas. Se observaron diferencias en el comportamiento reológico de pulpas de
mango frescas y enlatadas tratadas con HP. El modelo de Herschel-Bulkley describió bien los
datos de tensión de cizallamiento-tasa de cizallamiento de las pulpas. El índice de
consistencia (K) de pulpa fresca aumentó con el nivel de presión de 100 a 200 MPa, mientras
que se observó una disminución constante para la pulpa enlatada. Para la pulpa fresca, el
índice de comportamiento de flujo disminuyó con el tratamiento a presión, mientras que se
observó una tendencia creciente con la pulpa enlatada. Los módulos de almacenamiento y
pérdida de pulpa fresca tratada con HP aumentaron linealmente con la frecuencia angular
hasta 200 MPa para un tiempo de tratamiento de 30 min, mientras que se encontró una
tendencia decreciente constante para la pulpa procesada. No se observó ninguna variación
significativa en el color durante el tratamiento a presión (Ahmed et al., 2005).
Urbano et al. (2004), concluyen que los néctares tienen valores de pH de 3,22 a
3,49; observó una disminución en la acidez a medida que la proporción de pulpa de papaya
aumentó (por encima del 33,75%) en el néctar y, en consecuencia, disminuyó en la cantidad
de jugo de maracuyá. A pesar de la variación en la acidez titulable total de los productos, los
valores fueron todos relativamente bajos, del 0,33% al 0,63%, lo que demuestra que todos los
néctares formulados pueden recomendarse para el consumo de niños y ancianos, como es el
caso de la pulpa de papaya.
García (2010), Determinó la difusividad térmica de la pulpa de Noni, en un
rango de temperatura de 50 a 80°C, basándose en diseños presentados en bibliografía,
construye un equipo para medir la difusividad térmica. La pulpa de Noni presenta valores de
difusividad térmica, para 50°C de 1,38 ± 0,1 x 10-7 m2/s; para 55°C de 1,47 ± 0,2 x 10-7 m2/s;
para 60°C 1,53 ± 0,09 x 10-7 m2/s; para 65°C de 1,59 ± 0,2 x 10 -7 m2/s; para 70°C 1,71 ± 0,2
x10-7 m2/s; para 75°C de 1,80 ± 0,09 x 10-7 m2/s y para 80°C de 1,83 ± 0,1 x 10-7 m2/s.
El comportamiento reológico de pulpas enteras y centrifugadas de mango
( Mangı́fera indica L. var. Keitt) y piña ( Ananas comusus L. merr var Pérola) se analizó a
30°C, en un viscosímetro rotacional Haake Rotovisco RV-20. Los experimentos se realizaron
con un sistema de medición de placas paralelas de 45 mm de diámetro (PQ45) con separación
de 0,5 mm, a velocidades de corte de hasta 874 s −l. Los reogramas se ajustaron con los
modelos Casson, Ostwald-of-Waelle y Mizrahi-Berk (M-B). El Brix de pulpa de piña y
mango fue de 16,6 y 13,3 °Brix, respectivamente, y el contenido de sólidos insolubles fue de
0,108 g/kg para mango y 0,054 g/kg para piña. El mejor ajuste se obtuvo con el modelo M–B.
Se observó que las pulpas presentaron comportamiento pseudoplástico, y los sólidos en
suspensión tuvieron gran influencia en el índice de consistencia (Pelegrine et al., 2002).
Se investigó la estructura y propiedades reológicas de polisacáridos solubles en
agua de pulpa de mango industrializada. La fracción soluble (SF) 2 fue heterogénea en la
cromatografía de exclusión por tamaños de alta resolución, dando dos picos determinados por
detectores de índice de refracción y dispersión de luz láser multiángulo. La presencia de
almidón en SF2 se demostró mediante una reacción positiva de yodo y mediante
espectroscopia de resonancia magnética nuclear (RMN) de 13 C. La presencia de
polisacáridos pécticos se demostró por método calorimétrico, espectroscopia 13 C-NMR y
reducción de carboxilo. El principal polisacárido péctico fue el ácido poligalacturónico;
También se detectó ramnogalacturonano tipo I. El análisis de las propiedades reológicas del
SF2 mostró un comportamiento pseudoplástico hasta 3 gl −1. Las pruebas y análisis de 'creep
and recovery' realizados bajo un estado dinámico revelaron un débil carácter de gel para
soluciones a concentraciones de 15, 20 y 30 gl- 1 (Iagher et al., 2002).
2.2 El mango
El Mangifera indica L. (mango) es probablemente el cultivo de frutas
tropicales más importante del mundo; su producción alcanzó aproximadamente 38 millones
de toneladas en 2017, cultivadas principalmente en Asia (74,4 %), África (13,1 %) y América
Latina (12,4 %). El procesamiento industrial del mango en jugo, puré de néctar, helado,
mermelada, rebanadas enlatadas, chutneys y polvos secos genera una cantidad considerable de
subproductos (35–60 % p/p), incluidos bagazo, cáscaras y, semillas (Herrera-Cazares et al.,
2021).
La diversidad de variedades de mango que se pueden adquirir en los
supermercados centroeuropeos es muy limitada; los cultivares Kent, Keitt, Palmer y Tommy
Atkins son los más importantes en los mercados nacionales. Como fruta climatérica, los
mangos generalmente se cosechan en la etapa de madurez verde y se importan a Europa
central con mayor frecuencia a través de centros comerciales con sede en los Países Bajos. El
transporte y almacenamiento de los frutos inmaduros se realiza a temperaturas de 10 a 15 °C,
y los frutos deben someterse a procedimientos de maduración poscosecha en sus destinos
finales para que su exótico y agradable sabor pueda desarrollarse por completo (Lehner &
Siegmund, 2020).
El fruto del mango pertenece a la familia Anacardiaceae y al orden Sapindales ,
y es común en varias partes del mundo, particularmente en los países tropicales. Solo unas
pocas se cultivan a escala comercial entre las 1000 variedades existentes. Cada parte del árbol
de mango, como sus hojas, flores, tallo y fruto (pulpa, semilla y piel), contiene nutrientes
esenciales y funcionales que se utilizan en diversos productos. La piel del mango, por
ejemplo, es rica en fibra, minerales, terpenos, carotenoides, enzimas, vitamina E, vitamina C,
proteínas, carbohidratos y pectina. Además, la cáscara del mango es una gran fuente de
compuestos bioactivos fenólicos, como: mangiferina, y puede agregarse en forma de extracto
o polvo a otros alimentos como antioxidante natural (da Silva Sauthier et al., 2019).
El mango es una fruta pequeña que puede pesar hasta 150 g, y
aproximadamente el 13% de su masa está compuesta por la cáscara, que es amarillenta y
firme cuando está madura. La pulpa tiene fibras cortas, delgadas y suaves. Además, el fruto
presenta un color amarillo pálido tras el procesado, viscosidad adecuada para el consumo y
buena conservación del sabor. Debido a estas cualidades sensoriales, el mango ha sido
ampliamente utilizado por la industria para la producción de pulpa y jugos, así como para el
consumo in natura por parte de la población (Oliveira et al., 2016).
2.3 Reología
La reología es la ciencia que estudia el flujo y las deformaciones de sólidos y
fluidos bajo la influencia de fuerzas mecánicas. La caracterización reológica de los alimentos
es importante para el diseño de las operaciones unitarias, la optimización del proceso y la
garantía de un producto de alta calidad. Los fenómenos de transferencia de impulso se definen
por las propiedades reológicas del producto, combinadas con las condiciones del proceso
(Ibarz & P.E.D, 2017). La reología es la ciencia del flujo y la deformación de la materia y, por
lo tanto, una buena comprensión de la tensión y la deformación es un requisito previo esencial
para el estudio de la reología (Ferenc, 2017).
La reología es el estudio del flujo y deformación de materiales. A diferencia
de los conceptos ideales de sólidos elásticos y líquidos viscosos, los materiales reales
generalmente se comportan de manera intermedia entre estos dos extremos teóricos del
comportamiento mecánico (Wyss, 2016).
La reología es la técnica más útil para dilucidar el comportamiento de flujo de
una solución de polisacárido (Evageliou, 2020). La reología está muy relacionada con la
estructura. En general, al determinar las propiedades reológicas de biopolímeros como
polisacáridos y proteínas, se pueden dilucidar la composición, textura y cambios estructurales
observados durante la agitación, procesamiento, envasado, almacenamiento y consumo
(Rodríguez-González & Bello-Perez, 2016). El comportamiento del flujo es fundamental para
la procesabilidad de una solución de biopolímero (Lundahl et al., 2018).
Los datos reológicos son importantes para los procesos que implican el flujo
de fluidos, por ejemplo, la filtración y la extracción, y también son útiles para diseñar
procesos como la pasteurización, la evaporación y el secado (Marcotte et al., 2001).
2.3.1 Viscosidad
La viscosidad se define como la resistencia al flujo, por lo que es una
medida de la tenacidad y la aparente fricción interna de un líquido o gas al aplicar fuerzas
externas. La viscosidad dinámica indica la relación entre la fuerza aplicada necesaria para que
un líquido supere una distancia definida; La viscosidad cinemática se define como el cociente
de viscosidad dinámica y densidad de la solución (Wüstenberg, 2014).
La viscosidad dinámica ( μ) indica la relación entre la fuerza aplicada
necesaria para que un líquido supere una distancia definida:
Esfuerzo cortante (τ ) (1)
viscosidad dinámica ( μ )=
tasa de corte (γ̇ )
La viscosidad cinemática ( v ) se define como el cociente de viscosidad
dinámica y densidad de la solución:
viscosidad ( μ) (2)
viscosidad cinemática ( v )=
densidad (ρ)
Fluido Newtoniano y no Newtoniano
2.3.2 Fluido Newtoniano y no Newtoniano
Se trata de un fluido de baja viscosidad que puede deformarse
fácilmente cuando se somete a una fuerza aplicada, y cuyo esfuerzo cortante es proporcional a
la velocidad de deformación. El fluido que no satisface la ley del experimento de viscosidad
de Newton, es decir, un fluido cuyo esfuerzo cortante y velocidad de deformación cortante no
tienen una relación lineal, se conoce como fluido no newtoniano. Incluye espesamiento por
cizallamiento (dilatante), adelgazamiento por cizallamiento, pseudoplástico, plástico,
tixotrópico y líquido coagulante (Wang et al., 2019).
2.4 Propiedades termofísicas
Las propiedades termofísicas dependientes de la temperatura (conductividad
térmica, densidad, calor específico y difusividad térmica) es un componente importante del
diseño de procesos para la fabricación de alimentos (Phinney et al., 2017). Las propiedades
térmicas de los alimentos son útiles para identificar el grado de uniformidad del proceso
durante los procesos térmicos como la pasteurización y la esterilización. Los científicos de
alimentos y los ingenieros de procesos deben caracterizar adecuadamente o recopilar
información sobre las propiedades termofísicas relevantes de los materiales alimentarios que
se procesan (Park et al., 2014).
La determinación de las propiedades termofísicas de los alimentos es
necesaria para diseñar la transferencia de calor, masa y momento involucrada en procesos
alimenticios (Martins et al., 2020).
2.4.1 Calor específico
La capacidad calorífica específica es información útil en el diseño de
intercambiadores de calor, la elección de un medio de transferencia de calor y las condiciones
de procesamiento (Bikila et al., 2020).
La calorimetría diferencial de barrido (DSC) es un método bien
establecido para la medición de cambios de entalpía inducidos por calentamiento o
enfriamiento, actualmente aplicado a una amplia gama de diferentes materiales (Abd-Elghany
& Klapötke, 2018). Los resultados obtenidos proporcionan información útil para comprender
las transformaciones estructurales y químicas de los materiales examinados. Con respecto a la
aplicación de DSC a polímeros, los resultados de DSC brindan acceso a información sobre
transiciones vítreas, cambios en la estructura de enlaces de hidrógeno, así como información
sobre el rango de temperatura de degradación térmica (Drzeżdżon et al., 2019). Además,
permite relacionar el comportamiento de fusión observado con el estado cristalino de los
polímeros (Kong & Hay, 2002) y, por lo tanto, proporciona un método valioso para el control
de calidad durante los procesos de producción (Pompe et al., 1998).
2.4.2 Difusividad térmica
La difusividad térmica es una medida de qué tan rápido se difunde el
calor o la temperatura se propaga a través de un material. La velocidad de difusión del calor a
través de un material es información relevante en la predicción del tiempo de procesamiento
(Bikila et al., 2020). La conductividad térmica ( K ) y la difusividad térmica ( α ) son dos
importantes propiedades físicas esenciales para el diseño de cualquier proceso de ingeniería
de alimentos (Huang & Liu, 2009).
2.4.3 Conductividad térmica
La conductividad térmica, la capacidad intrínseca de un material, es
esencial para transferir calor y para predecir o controlar el flujo de calor y el tiempo de
procesamiento (Bikila et al., 2020). El diseño de procesos térmicos requiere propiedades
térmicas importantes como la conductividad térmica, la capacidad calorífica específica y los
parámetros de inactivación microbiana (valores D y z). Estas propiedades son valiosas para
desarrollar modelos matemáticos para predecir el perfil de temperatura, la letalidad
microbiana y el tiempo de calentamiento (Rivera et al., 2020). Los datos de conductividad
térmica son importantes para el modelado y diseño de procesos alimentarios. Cuando no se
dispone de datos fiables de conductividad térmica, es necesario predecirlos (Carson et al.,
2016). La conductividad térmica de los materiales alimentarios es una de las propiedades
térmicas importantes que se utilizan para estimar la tasa de transferencia de calor por
conducción en los procesos alimentarios, como la congelación, la esterilización, el secado, la
cocción y la fritura. Se sabe que en los alimentos el agua juega el papel más importante en la
determinación de la conductividad térmica mientras que la parte no acuosa del alimento es
menos importante. Esto puede deberse a la magnitud relativa de las conductividades del agua
y otros componentes de los alimentos (Maroulis et al., 2002).
III. MATERIALES Y MÉTODOS
[ T m −T 0
]
2
r
t=0,398 log 1,6 (3)
αT T m−T
Donde:
αT : Difusividad térmica (m2/s)
r : Radio del cilindro (m)
t : Tiempo (s)
T m : Temperatura del medio de calentamiento (°C)
T0 : Temperatura en el centro térmico al tiempo 0 (°C)
T : Temperatura del centro térmico al tiempo t (°C)
La ecuación (1) se reordenó para diferenciar la variable dependiente e
independiente como sigue:
[
log 1,6
T m−T 0
T m−T
=
]
1 αT
0,398 r 2
t (4)
[
log 1,6
T m−T 0
T m−T ] :
Representa la variable dependiente (eje de ordenadas) es
la variación de temperatura no conseguida
1 αT
: Representa la pendiente (m) de la ecuación lineal
0,398 r 2
t : Representa la variable independiente (eje de abscisas)
S0
S1
.
T1 (25 °BRIX)
.
S12
S0
S1
.
Pulpa de mango T2 (45 °BRIX)
.
S12
S0
S1
.
T3 (65 ° BRIX
.
Sn= n Semanas
.
S12
Tabla 2. Cronograma de actividades ejecución del proyecto de tesis. Dic. 2022 - ago. 2023
Actividades Dic Ene Feb Mar Abr May Jun Jul Ago
Obtención de la
materia prima de X
estudio
Preparación de las
X
muestras
Almacenamiento de
X
las muestras
Pruebas
X X X X
fisicoquímicas
Pruebas reológicas X X X X
Pruebas termofísicas X X X X
Redacción de la tesis X X X X X X X X
Sustentación X
V. PRESUPUESTO