PARADIGMAS
PARADIGMAS
PARADIGMAS
PARADIGMA CONSTRUCTIVISTA
Es una teoría pedagogía y filosofía de aprendizaje que los educadores hoy en día implementan en
el proceso de la enseñanza; se basa en la idea de que los educandos puedan construir o crear
activamente su propio conocimiento, atreves de su experiencia vivida.
En sí los educandos, utilizan su conocimiento previo como fundamento para aprender nuevas
cosas. Lo cual los hace únicos y se vuelve su aprendizaje significativo y especial; El constructivismo
es innovador y muy esencial para que los educadores hoy en la actualidad escuchen la realidad y
puedan entender o comprender de qué modo visualizan la información existente y puedan ver de
qué forma aprendan los estudiantes.
1. CONSTRUCTIVISMO PEDAGÓGICO:
• El rol del mediador ayuda al educando a que se convierta en sujeto activo e innovador y que sea
el mismo el protagonista de su propio aprendizaje.
• El papel del mediador en esta corriente es quién deberá aplicar las herramientas adecuadas al
educando para que esta valla indagando y desenvolviéndose para fortalecer sus nuevos métodos
para enseñar.
• También podemos ver al mediador como un papel pasivo, pero en realidad requiere experiencias
que muestre al educando la adquisición de una muestra de destreza y también irlo
acompañándolo en su proceso.
• El educando aprende aprender a medida que aprende. (Cada cosa que aprendemos nos da una
mejor comprensión de otros aprendizajes en el futuro)
• El aprendizaje reside en la mente. (las experiencias aportadas son necesarias para la retención
de la mente)
• La motivación es la clave para aprender. (Sin motivación para cualquier alumno acceder a su
experiencia pasada y hacer conexiones que le faciliten aprender.
1. Aprendizaje por descubrimiento versus aprendizaje por recepción; puede ser en forma
guiada o autónoma.
2. Aprendizaje significativo versus aprendizaje memorístico
• El estudiante actúa como constructor de su propio conocimiento relacionando los nuevos con los
previos.
Vygotsky plantea un modelo psicológico del desarrollo humano donde la cultura juega un papel
principal desde el comienzo de la vida humana, el aprendizaje está relacionado como un aspecto
necesario y universal del proceso de desarrollo de las funciones psicológicas, culturalmente
organizadas y específicamente humanas. Por los procesos de maduración del organismo del
individuo de la especie humana, pero es el aprendizaje lo que posibilita el despertar de procesos
internos de desarrollo.
Dice que la interacción con el docente, un adulto o un compañero serán ejes que ayudarán a la
construcción de forma cualitativa en los estudiantes que permiten el proceso de enseñanza
aprendizaje.
La educación es una fuerza que empuja al desarrollo y es eficiente cuando se logra el proceso de
maduración y desarrollo potencial, es decir; activar aquellas habilidades que están en construcción
y que el niño pueda alcanzar y desarrollarse.
Royer y Allan dicen que la teoría del Procesamiento de la información, señalando cómo el hombre
procesa, almacena y recupera la información que recibe.
Sus componentes son: La información de entrada: es cualquier información sensorial que se
perciben a través de los sentidos: la vista, el oído, el olfato, el tacto y el gusto ejemplo: lo que se
ve, se escucha, etc. Receptores sensoriales: son los órganos a través de los cuales se percibe la
información. Memoria a corto y largo plazo: es la capacidad que se tiene de retener la
información. En síntesis, la perspectiva del procesamiento de la información aporta al
constructivismo pedagógico la concepción de que el aprendiz no es un sujeto que registra eventos,
sino que, para lograr aprendizaje, es necesario que sea un participante activo, reconociendo en él
aspectos emotivos y experiencias que influyen en el procesamiento de datos.
Para Jerome el aprendizaje se logra a través de tres tipos de representaciones mentales que va
adquiriendo progresivamente el niño: la emotiva, la icónica y la simbólica. Para aprender, el
alumno debe desarrollar la habilidad de relacionar el pasado, el presente y el futuro, a fin de
integrarlos en un todo coherente que le sea significativo. Por lo tanto, necesita un ambiente que le
brinde la posibilidad de plantearse problemas, relacionar conceptos y transferir el aprendizaje a su
vida.
El aprendizaje es un fenómeno social Desde que nace, el ser humano aprende de su medio y de
las relaciones próximas, de actividades cotidianas, labores domésticas, por eso el aprendizaje debe
ser contextuado y empezar por lo concreto. El aprendizaje es situado Se aprende el lenguaje por lo
que se escucha, posteriormente se amplía el léxico.
El aprendizaje es activo
Muchas veces se cree que hay que tener idea para actuar, pero se aprende más rápido cuando se
realiza una actividad, pues a través de ella se incorpora el nuevo conocimiento.
El aprendizaje es un proceso
De acuerdo con Reátegui (1997) y Raffo (1998) el docente podría facilitar el aprendizaje de los
alumnos si:
- Reconoce que el desarrollo de las capacidades del alumno está estrechamente ligado al dominio
de los contenidos
- Genera conflictos cognitivos para que los alumnos construyan y desarrollen sus competencias -
Ayuda a que el estudiante emplee la información ya conocida y la nueva información en
situaciones de su vida
- Enfatiza tareas que el alumno comprende o Es flexible en las tareas del programa
- Promueve una atmósfera de reciprocidad, respeto y confianza, 238 creando un clima agradable
que permita plantear retos y problemas
Mejora su gestión pedagógica. Transfiere el control de la actividad al niño. Como es conocido, las
propuestas de intervención pedagógica en los procesos de enseñanzaaprendizaje constructivistas
se centran en el concepto de «aprender a aprender», es decir, en el aprendizaje de estrategias
más que en la adquisición de conocimientos por parte de los alumnos.
Las principales estrategias de aprendizaje autónomo que han de ser potenciadas por los docentes
son las referidas a la lectura, observación, comprensión, planificación de acciones y solución de
problemas.
Su conocimiento, inicialmente, está a cargo de los docentes, quienes los revisan junto a los
estudiantes. Constituyen el «qué» de la formación profesional y están vinculados al proceso y las
actividades que el docente lleva a cabo para revisarlos. Se espera que los estudiantes asimilen los
contenidos propuestos, los integren en sus estructuras cognitivas y generen cambios en la forma
de concebir las cosas ya que, a menudo, constituyen una ampliación de los contenidos que antes
poseían y pueden contribuir a su desarrollo y crecimiento, tanto profesional como personal. En
cuanto se refiere a la cantidad, se trata de definir cuántos temas y subtemas serán abordados
durante el proceso formativo, tanto en forma general como en particular. Generalmente, la
revisión de contenidos se hace desde los más simples a los más complejos. La lógica transversal
indica la necesidad de que haya una relación entre los contenidos vistos en un nivel en particular,
precisamente para que los estudiantes puedan integrarlos. Esta es la razón por la cual, se requiere
seguir aprendiendo a lo largo de la vida, debido a los cambios vertiginosos que ha sufrido el
conocimiento y a su incremento exponencial, en los últimos años. Cuando ya se ha definido los
objetivos y los contenidos, es posible pensar en la metodología, que constituye el cómo del
proceso de formación.
5.2.La metodología
Es un elemento esencial del proceso de formación, porque constituye la manera, la forma cómo se
lleva a cabo la formación. Esto requiere un equilibrio entre la revisión teórica de los contenidos,
pero también su aplicación particular en los contextos específicos en los cuales los estudiantes
tienen que desenvolverse. Para lo cual, es necesario que los docentes estén al tanto de las
materias que ya se han revisado con anterioridad o, si no lo están, hacer una pequeña evaluación
diagnóstica al inicio de la materia para conocer cuáles son los conocimientos que los estudiantes
ya poseen. Existen personas que prefieren las actividades visuales, otros las auditivas y otros más
las táctiles. Todos estos elementos inciden en la elección de las técnicas más adecuadas a unos y
otros.
5.4La evaluación se sustenta en algunos principios básicos de los cuales se deriva la necesidad de
evaluar, y que fueron planteados por Santiago
Pese a este consenso más o menos general sobre las razones para evaluar, es posible hacer
algunas distinciones entre el por qué y el para qué de la evaluación. La evaluación es una
herramienta ventajosa para el desarrollo de la capacidad crítica y autocrítica de las personas,
quienes deben aprender a realizarlas, recibirlas y manejarlas adecuadamente. De esta manera, el
equipo de formación necesita valorar el programa didáctico del proceso formativo para poder
realizar ajustes tanto internos como externos durante el desarrollo del curso y/o una vez que éste
haya finalizado.
Paradigma positivista
El paradigma positivista surgió a principios del siglo XX. Se considera como su fundador a Auguste
Comte, de origen francés, que vivió de 1798 a 1857. Estuvo fuertemente inspirado por la
Revolución Francesa, lo que le acercó a los problemas sociales. Además, recibió formación
matemática y científica en la Escuela Politécnica de París (Navarro, 2014, pp. 113-114).
El positivismo derivó directamente del empirismo, enfocándolo a las ciencias experimentales. Esto
queda claro con la definición que da Comte de conocimiento positivo, pues afirma que es lo real,
aquello que podemos constatar por medio de la experiencia sensible. Como paradigma científico,
tiene tres características básicas (Ibídem, p. 115):
• Es realista. Estudia las causas como un fenómeno que antecede a otro, no en el sentido
metafísico de la filosofía tradicional, de hecho, rechaza a la metafísica por estudiar algo no
constatable.
Ejemplo:
-Un ejemplo claro del paradigma positivista que he aprendido en mi labor cotidiana de la docencia
es la investigación científica y la experimentación de algún tema o fenómeno; cuyo método
científico consta de pasos metodológicos para obtener nuevos conocimientos; los cuales son: la
observación que es el darse cuenta o percibir los aspectos de la naturaleza. Es el primer paso del
método científico pero se infiltra en el proceso completo de la ciencia, desde el reconocimiento de
un fenómeno natural hasta la propuesta de una solución y la observación de los resultados luego
de un experimento. Una vez establecidos los hechos, es necesario contrastarlos y reconocer
problemas. La hipótesis es la una explicación tentativa a una observación. Una hipótesis tiene que
ser capaz de ser probada mediante experimentos, esto significa que tiene que ser falsificable. Las
predicciones que son las consecuencias esperadas de las hipótesis. La experimentación que es una
prueba o ensayo en condiciones controladas para investigar la validez de una hipótesis. El análisis
de resultados que nos permite aceptar y rechazar las hipótesis planteadas, reformular los modelos
y sugerir nuevos procedimientos. Y por último es la comunicación de resultados, que es una forma
de compartir y anunciar al mundo lo que hemos obtenido y cómo lo hemos obtenido pudiendo ser
de forma escrita o de forma audiovisual.
Paradigma realista
Su postulado básico es que es posible conocer la realidad, y que esta es gobernada por ciertas
leyes que son independientes a nuestra percepción sobre ellas. Así pues, en el ámbito de la ciencia
los realistas sostienen lo siguiente (Herce, 2016, p. 55):
• El éxito de la ciencia se basa en una red de teorías que convergen, a la que debemos el éxito
actual de la ciencia.
• Si todo lo anterior fuera falso, entonces las predicciones y éxitos científicos serían una inmensa e
increíble cantidad de coincidencias que casualmente funcionan.
Como podrás notar, esta última afirmación va muy acorde a las ideas positivistas, en las que la
ciencia proporciona conocimiento verdadero, no subjetivo. Esto ha sido cuestionado por un lado
por los anti-realistas quienes sostienen que no podemos concluir con absoluta certeza que una
teoría es verdadera (recordemos a los cisnes negros y otros cambios en las ideas científicas
durante el tiempo), además afirman que las entidades científicas como tal son construcciones
nuestras (Herce, 2016, p. 55).
Ejemplo:
-Un ejemplo del paradigma realista en la vida cotidiana es una infección estomacal, lo importante
dentro de este no son las predicciones “se va a enfermar porque comió en la calle” , si no se centra
en por qué sucedió, algo más profundo, esto significa que no solo se queda en una afirmación,
sino que busca la razón de ser de la misma, “ se va a enfermar porque no se lavó las manos antes
de comer, porque comió mucho, la comida estaba muy grasosa, porque no tiene una alimentación
balanceada, los probióticos de su estómago están muy escasos, etc. Esto nos indica que para todo
existe una serie de hechos que llevaron a esa situación.
Paradigma racionalista
De acuerdo con Dobles, Zúñiga y García (1998) la teoría de la ciencia que sostiene el
positivismo se caracteriza por afirmar que el único conocimiento verdadero es aquel que es
producido por la ciencia, particularmente con el empleo de su método. En consecuencia, el
positivismo asume que sólo las ciencias empíricas son fuente aceptable de conocimiento.
Otra de las características relevantes del positivismo tiene que ver con su posición epistemológica
central. En efecto, el positivismo supone que la realidad está dada y que puede ser conocida de
manera absoluta por el sujeto cognoscente, y que por tanto, de lo único que había que
preocuparse, indican Dobles, Zúñiga y García (1998), era de encontrar el método adecuado y
válido para “descubrir” esa realidad. En particular, asume la existencia de un método específico
para conocer esa realidad y propone el uso de dicho método como garantía de verdad y
legitimidad para el conocimiento. Por tanto, la ciencia positivista se cimienta sobre el supuesto de
que el sujeto tiene una posibilidad absoluta de conocer la realidad mediante un método
específico. (edberth)
Importancia (edineth)
Un aspecto importante del positivismo es el supuesto de que tanto las ciencias naturales
como las sociales pueden hacer uso del mismo método para desarrollar la investigación. De
acuerdo con Tejedor (1986), citado por Dobles, Zúñiga y García (1998), los científicos
positivistas suponen que se puede obtener un conocimiento objetivo del estudio del mundo
natural y social. Para ellos las ciencias naturales y las ciencias sociales utilizan una
metodología básica similar por emplear la misma lógica y procedimientos de investigación
similares. Desde esta perspectiva se considera que el método científico es único y el mismo
en todos los campos del saber, por lo que la unidad de todas las ciencias se fundamenta en
el método: lo que hace a la ciencia es el método con el que tratan los “hechos”.
Como consecuencia de lo anterior, podemos indicar, siguiendo a Gutiérrez (1996), que los
positivistas buscan los hechos o causas de los fenómenos sociales con independencia de los
estados subjetivos de los individuos.
De acuerdo con Dobles, Zúñiga y García (1998) el positivismo se caracteriza por postular
lo siguiente:
2. El sujeto tiene acceso a la realidad mediante los sentidos, la razón y los instrumentos que
utilice.
5. Lo que es dado a los sentidos puede ser considerado como real.
6. La verdad es una correspondencia entre lo que el ser humano conoce y la realidad que
descubre.
8. El método de la ciencia es descriptivo. Esto significa, según Abagnaro, que la ciencia
describe los hechos y muestra las relaciones constantes entre los hechos, que se expresan
mediante leyes y permiten la previsión de los hechos.
1. Primera regla: la regla del fenomenalismo, que expresa que no existe diferencia real
entre esencia y fenómeno.
2. Segunda regla: la regla del nominalismo, por la cual afirman que estamos obligados a
reconocer la existencia de una cosa cuando la experiencia nos obliga a ello.
3. Tercera regla: que niega todo valor cognoscitivo a los juicios de valor y a los
enunciados normativos.
Los paradigmas son por lo tanto, un marco o perspectiva bajo la cual se analiza los
problemas y se trata de resolverlos. Ejemplo. El movimiento aparentemente irregular de los
planetas en el cielo es un problema concreto. Podemos verlo a la luz de paradigma que
ofrece la teoría geocéntrica de Aristóteles, según el cual el movimiento de los planetas es
absolutamente circular. En éste caso por lo tanto la labor del científico será mostrar que la
irregularidad de los planetas no es tal, aclarar a qué se debe dicha apariencia, pero
podríamos verlo también partiendo del paradigma de la teoría heliocéntrica. (yanyelis)
A jose Leonardo no se le dejo punto porque dijo que iba a retirarse por lo tanto su
punto paso a mayre.
EL PARADIGMA IDEALISTA*
Luis
Alberto Padilla
Los orígenes del paradigma idealista en relaciones internacionales pueden ser
ubicados en las primeras concepciones del derecho internacional. Como se sabe, el
autor clásico Hugo Grocio fue el primero en proponer un principio básico para ordenar
las relaciones entre Estados soberanos (y por tanto no subordinados a ninguna
autoridad superior) y fomentar de esta manera la causa de la paz, evitando la guerra.
Grocio propone la célebre máxima pacta sunt servanda (los pactos deben respetarse)
como base del derecho internacional, es decir, del conjunto de normas que regulan
las relaciones entre Estados. A diferencia del derecho interno, el derecho
internacional no posee un aparato coercitivo que haga posible garantizar el
cumplimiento forzoso o la aplicación de sanciones (en caso de incumplimiento de los
gobiernos), por lo tanto, la efectividad de sus normas está basada en el consentimiento,
que las partes expresan cuando se suscriben convenios o tratados internacionales y en
el compromiso que por este medio los Estados asumen de respetar lo pactado.
“...desde la Biblia hasta los acuerdos constitucionales de las democracias modernas, la función
principal de estos sistemas normativos ha consistido en mantener las aspiraciones de poder
dentro de límites socialmente aceptables...El poder se encuentra sujeto a limitaciones en interés
de la sociedad como conjunto y en interés de sus integrantes individuales, que no son resultado de
la lucha por el poder sino que resultan sobreimpuestas en forma de normas o reglas de conducta
por la voluntad de los propios miembros de la sociedad”. (Morgenthau: Política entre las
Naciones, pp. 269-270).
El normativismo idealista posee pues funciones que van más allá de las
funciones teórico-descriptivas de la ciencia cuando busca establecer lineamientos para
la orientación de la conducta de las personas que se encargan de tomar decisiones
políticas. Independientemente del hecho de que en determinadas coyunturas
políticas tanto los principios jurídicos como los discursos de contenido ético-axiológico
puedan utilizarse como piezas de retórica desprovistas de contenidos efectivos, lo que
es cierto que tanto la política nacional como la política internacional reciben una
21
influencia permanente (y en ocasiones determinante) de los órdenes normativos.
Por otra parte, dado que tanto las estructuras políticas (a nivel del sistema
político internacional) como la propia sociedad internacional poseen una dimensión
dinámica que se encuentra en permanente transformación, es importante constatar que
es justamente la investigación que se realiza a partir de proposiciones de carácter
normativo, basadas en el paradigma idealista por tanto, las que permiten orientar
acciones destinadas a promover de manera efectiva la causa de la paz, es decir, la
investigación para la paz, y por ende, investigaciones que contribuyen a la
transformación (en sentido positivo, es decir, de progreso o evolución ascendente
que se juzga con base en parámetros de valoración propuestos por estas mismas
teorías: derechos humanos, justicia internacional, desarrollo a escala humana,
democracia y participación social, libertad política y económica, libre determinación,
etc.). A continuación veremos con más detalle algunas de las concepciones teóricas
que se pueden enmarcar en el llamado paradigma idealista.
“El legislador debe esforzarse principalmente porque la legislación que se promulgue sobre la
guerra... tenga por fin el reposo y la paz, pues la mayoría de las ciudades de tipo militar
permanecen incólumes mientras hacen la guerra, más perecen una vez que han conquistado el
22
imperio...”.
2.3 El Pacifismo
A partir de la creación de la Sociedad de Naciones, cuya sede como se recordara, se
estableció en Ginebra, surgen una serie de corrientes de pensamiento que en mayor o
menor grado se pueden ubicar dentro del paradigma idealista. Así, Sir Alfred
Zimmerman, titular de la primera cátedra de relaciones internacionales que se
estableció en el medio académico mundial (en el año de 1919 en la Universidad de
Gales, Inglaterra) declaró que el propósito primordial de sus enseñanzas sería “servir a
la causa de la paz” y agregaba que la nueva disciplina académica tendría como tarea
primordial el ocuparse “...del estudio de los problemas interdependientes de derecho y
de política, de moral y de economía que son representados en el proyecto de una
26
Sociedad de Naciones...” evidenciando que la preocupación central del pensamiento
político en materia internacional de aquella época de posguerra es, justamente, evitar
que una nueva conflagración de la magnitud de la primera guerra mundial vuelva a
repetirse, de allí que las relaciones internacionales se concibieran como una “ciencia de
la paz”. La Sociedad de Naciones es pues recibida con beneplácito ya que se le ve
como un medio para que la sociedad internacional salga de la anarquía, al mismo
tiempo que en los debates públicos de la Asamblea de la Sociedad de Naciones, se
ventilarían los asuntos mundiales evitando así caer en la llamada “diplomacia secreta”,
que carece de control por parte de los ciudadanos y la opinión pública.
“la guerra como medio de acción arbitraria y egoísta no debe ser considerada ya legal. Ya no
pesará su amenaza sobre la vida económica, política y social de los pueblos. En lo sucesivo las
29
pequeñas naciones gozarán de plena independencia en la discusión internacional”.
Además, como es sabido, los Estados Unidos y la Unión Soviética han firmado
varios acuerdos bilaterales para limitar la producción de armamento nuclear estratégico
(ICBM o proyectiles intercontinentales) como los tratados SALT 1 (ABM prohíbe el
desarrollo, ensayo y despliegue de mísiles basados en tierra, aire o mar de defensa de
mísiles balísticos) y el SALT 2 (limita la cantidad agregada de lanzamisiles nucleares
estratégicos); el tratado de desarme total (opción cero) llamado INF firmado por los
Estados Unidos y la URSS en 1987 (establece la eliminación de todos los proyectiles de
alcance intermedio instalado en Europa en un período de tres años); el tratado START
(Moscú, Junio de 1991) que establece la reducción hasta en una tercera parte del
armamento estratégico (ICBM) de ambas superpotencias. A todo esto habría que
agregar las medidas de desarme unilateral como las anunciadas en octubre de 1991
por el presidente Bush (eliminación de todas las armas nucleares tácticas –de alcance
corto-, de los proyectiles móviles Midgetman y MX, suspensión del estado de alerta
permanente de los bombarderos B-52, etc.) gesto que fue respondido de manera
positiva por el ex presidente Gorbachov quien decidió también una eliminación total del
armamento de corto alcance y una suspensión total de las pruebas nucleares
31
subterráneas en reciprocidad. Estos acuerdos han sido ampliados recientemente por
nuevos acuerdos bilaterales de los presidentes Bush y Yeltsin, de Rusia, como veremos
en el cuadro 2.1
2.5 Los Derecho Humanos
En los casos de Guatemala y El Salvador esta política del más alto organismo
mundial adquiere cada vez mayor relevancia, dada la subsistencia de graves problemas
de violación grave y reiterada de derechos humanos en ambos países. Así, en el caso
de El Salvador el reciente acuerdo de Nueva York –celebrado bajo los auspicios
directos del secretario general de Naciones Unidas- establece el compromiso de la
parte gubernamental para desmantelar 6 batallones de despliegue rápido y una
reducción del 40% de la fuerza armada, en el seno de las fuerzas armadas, reduciendo
el número de efectivos, castigando a responsables de violaciones a derecho humanos
(como en el caso de los 6 sacerdotes jesuitas asesinados en noviembre de 1989) e
incorporando a los guerrilleros del FMLN a una nueva fuerza de policía. Por otra parte,
el cumplimiento de estos acuerdos está siendo supervisado por las Naciones Unidas, a
través de la misión de ONUSAL instalada en San Salvador, así como el, despliegue de
más de 300 observadores y supervisores militares.
Cuadro 2.1
Disminución de armas nucleares estratégicas
USA-Rusia/CEI para el año 2,003 según
41
Acuerdo Bush –Yeltsin, junio 92
País Tipo de arma Cantidad Cantidad Tratado de
estratégica (largo (número de según tratado seguimiento
alcance) misiles START para cantidades 2003
existentes en 1999
1992) (reducción)
Rusia CEI ICBM (misiles 6,115 3,15 531
intercontinentales) 6
EE.UU. ICBM (idem) SLBM 2,370 500
Rusia CEI (misiles 2,696 1,40 1,744
landados por 0
submarinos) SLBM 1,44
EEUU (trident) Aviones 3,840 1,728
Rusia CEI bombarderos 1,552 752
Aviones
EE.UU. bombarderos 3,776 1,272
Cantidad total
Rusia CEI Cantidad total 10,237 3,70 3,027
EE.UU. 9.986 0 3,500
Por consiguiente, una definición más completa del concepto de paz supone que la paz
implica la ausencia de violencia, tanto directa o personal como indirecta o estructural, y por
esto mismo la paz en sentido positivo es igual al desarrollo pleno del ser humano tanto en el
plano individual como en el colectivo, y equivale por lo tanto a la ausencia de relaciones de
41
dominación inequitativas o groseramente desiguales (explotación) y a la justicia social.
47
En este sentido la democratización política de Nicaragua es fundamentalmente el
resultado del proceso de paz de Esquipulas, aunque –y es importante reconocer esto- ya se había
iniciado con el proceso electoral de 1984. Por otra parte, es interesante también señalar de qué
manera las decisiones de Esquipulas influyeron en la política exterior de las superpotencias y
contribuyeron de manera decisiva para estabilizar los procesos democratizadores de la región, ya
que solo la cooperación entre Estados Unidos y la URSS explica que no haya habido oposición en
el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas cuando se aprobaron medidas como el envió de
observadores militares (ONUCA) para garantizar el cumplimiento de los acuerdos en materia de
trasiego de armas o desmantelamiento de grupos armados irregulares (la “contra”) o los
observadores permanentes en materia de derechos humanos para El Salvador (ONUSAL). Esta
colaboración de las superpotencias ha sido dada a conocer en un artículo en el cual se relatan los
términos del acuerdo secreto celebrado entre Yuri Pavlov –vicecanciller soviético- y Bernard
Aroson –Subsecretario de Asuntos Latinoamericanos- ya al inicio de la Administración Bush, en
48
mayo de 1989, que fundamentalmente consiste en la decisión de ambos países de respetar los
acuerdos de Esquipulas II como base para obtener la solución negociada a los conflictos en
Centroamérica.
Parece lícito por tanto inferir que estamos aquí en presencia no solo del resurgir
de una política exterior idealista en los gobiernos de la región sino, más importante aún,
del éxito de esta política frente a las concepciones realistas que influyeron
decisivamente para la formulación de la política externa de Washington durante la
administración del presidente Reagan y que, por esta vía, también condicionaron las
ideas en materia de política externa de los gobiernos centroamericanos a principios de
la década.
El segundo aspecto que nos interesa destacar es el concerniente a la adopción
de una definición de la paz como equivalente de desarrollo que no solo debe orientar
las políticas internas de cada uno de los gobiernos involucrados en el proceso de paz
sino que, fundamentalmente, explica las razones de viraje en las políticas externas
respecto a las antiguas concepciones que alineaban casi automáticamente a las
chancillerías centroamericanas con el realismo de corte norteamericano.
En efecto, la explicación de los conflictos armados de países como Guatemala y
El Salvador sobre la base de la intervención externa (soviético-cubana) y la
extrapolación del conflicto Este-Oeste es algo que jamás convención no a los
cuidadanos comunes ni a las mismas élites centroamericanas. De una manera u otra,
sea por la información proporcionada por los propios servicios de inteligencia militares,
sea por la naturaleza ostensible de la realidad económico-social, lo cierto es que el
Acuerdo de Esquipulas lo único que hace es recoger una explicación del conflicto que
es vox populi, es decir, que el mismo se origina en las condiciones de pobreza,
marginalidad, ausencia de canales de participación política, opresión cultural y violación
de derechos humanos que caracteriza el contexto socio-económico de ambos países.
De allí que no debe haber sido difícil el que los presidentes se pusiesen de acuerdo en
cuanto a que la solución de los conflictos radica esencialmente en la toma de medidas
destinadas a la creación de garantías para la participación popular, el ejercicio del
pluralismo político o la creación de un sistema de bienestar y la justicia económica y
social “para alcanzar sociedades más igualitarias y libres de miseria”, verdadero punto
nodal de la superación de las incompatibilidades.
Por supuesto, si deseamos rastrear los orígenes de tales concepciones en la
filosofía de cada uno de los presidentes no resulta difícil encontrar raíces en las
doctrinas social-cristianas que influyen en el pensamiento de presidentes como Cerezo
y Duarte (que de una manera u otra se vieron influidas no solo por la doctrina social de
la Iglesia o por el Concilio Vaticano II sino también por la teología de la liberación) y en
el pensamiento socialdemócrata o socialista de los presidentes Arias y Ortega. O sea
que no es difícil ubicar el origen de estas ideas, aunque lo determinantes fue, sin lugar,
a
dudas la propia realidad económico-social y política de nuestros países que hacía
evidente que eran las condiciones materiales de vida de la mayoría de la población, los
factores determinantes de la revuelta popular y de los movimientos insurgentes.
2.6.3 La Teoría del Conflicto y su aplicación al ámbito centroamericano.
Los trabajos existentes hasta ahora que han hecho un examen de los procesos de paz
y de la problemática centroamericana desde el punto de vista de los conflictos armados
son varios. Sobresalen algunos nombres, como los de Ricardo Córdova, Raúl Benítez,
51
Gilberto Castañeda, Xavier Gorostiaga, Marta Elena Salguero y Gabriel Aguilar. Por
nuestra parte, en un trabajo publicado en la revista Estudios Internacionales, tratamos
de aplicar los conceptos de la teoría del conflicto formulada por Peter Wallensteen a la
52
situación actual de Guatemala.
En dicho trabajo hablamos de 4 incompatibilidades fundamentales: 1) la
incompatibilidad a nivel de la cuestión militar, dada la contestación armada del poder
estatal que plantean los insurgentes de la URNG al gobierno. Si un Estado no posee el
“monopolio de la violencia legítima” como diría Max Weber esto plantea una seria
dificultad al ejercicio del poder estatal que, si no se resuelve, es fuente de una
problemática permanente dentro de la cual se encuentra la cuestión de los derechos
humanos (y la necesidad de poner fin a la existencia de grupos para militares [para-
estatales] que de manera clandestina e ilegal aplican métodos de represión contrarios a
las normas de derechos humanos nacionales e internacionales); 2) la cuestión de la
legitimidad del poder político y la necesidad de consolidar el sistema político
democrático;
3) la cuestión del desarrollo económico y la necesidad de poner fin a la exclusión de
grandes sectores de la población que debido a las condiciones de extrema pobreza no
tienen acceso (o poseen un acceso muy limitado y deficiente) a satisfactores básicos en
materia de educación, alimentación, vivienda, salud y trabajo; 4) la cuestión nacional,
que se refiere fundamentalmente a la problemática étnica de exclusión y opresión de la
población indígena, que requiere del diseño e implementación de políticas de pleno
respeto a la cultura y a la eventual organización socio-política autónoma de estos
grupos de población, como requisito sine qua non de una nacionalidad integrada.
En el marco concreto de las negociaciones actuales entre las dos partes
contendientes (gobierno-URNG) es claro que, sin bien los insurgentes han planteado en
la agenda las cuatro incompatibilidades centrales aquí mencionadas, solo la primera
puede ser resuelta realmente en el marco de las mutuas concesiones de ambas partes,
indispensables para que un proceso negociador tenga éxito. Decimos esto porque los
problemas atingentes a la cuestión económica (del desarrollo), de la democracia y de la
integración nacional solo podrán irse resolviendo con el transcurso de los años por
venir en el futuro inmediato en el marco de negociaciones tipo “pacto social”, asamblea
constituyente o llegada al poder –por la vía electoral- de algún partido o coalición de
partidos que represente los intereses de la mayoría de la población. Como resultado de
las negociaciones actuales URNG-Gobierno solo cabe esperar, por tanto (y no es ésta
precisamente una “issue” de menor categoría) que se resuelvan las incompatibilidades
derivadas de la existencia de grupos armados responsables de la violación de derechos
humanos. A cambio de esto, parece evidente (a partir del contenido de sus
declaraciones políticas) que los insurgentes han modificado ya sus objetivos
revolucionarios en cuanto a la transformación radical del sistema económico-político
(abandonando el modelo marxista-leninista de economía centralmente planificada,
propiedad gubernamental de medios de producción y “dictadura del proletariado” que
estuvo en los orígenes de su lucha revolucionaria) y han reconocido la legitimidad del
sistema político emanado de la Asamblea Constituyente de 1985. Hasta ahora solo han
obtenido, a cambio, el reconocimiento que va implícito en la celebración de las
negociaciones mismas.
Por otra parte, en el caso salvadoreño, el proceso de paz resultado del acuerdo
firmado en Nueva York en presencia del secretario general de Naciones Unidas
(Septiembre de 1991) y su posterior implementación (Acuerdo de CHAPULTEPEC,
enero de 1992). El acuerdo de paz concierne sobre todo a la re-estructuración de las
fuerzas armadas, a la incorporación de las fuerzas militares del FMLN a las nuevas
fuerzas de seguridad del Estado ya reestructurado (policía civil) y a la eficaz supervisión
del cumplimiento de los puntos convenidos a partir de los observadores de Naciones
Unidas en lo concerniente a los derechos humanos.
En cuanto a la situación nicaragüense, el conflicto armado también fue resuelto
gracias al proceso negociador impulsado por Esquipulas II. Es interesante constatar
que en el caso de Nicaragua la ausencia de políticas sistemáticas de violación de
derechos humanos fue un factor que, sin lugar a dudas, facilitó el éxito del proceso
negociador.
Finalmente, y en cuanto a los acontecimientos que se avisoran para el futuro
próximo, es posible esperar una dinamización de los procesos en la medida que el
contexto internacional (especialmente gracias a la nueva política norteamericana hacia
la región, desembarazada ya la carga del conflicto Este-Oeste) es favorable a la
solución negociada de ambos conflictos.
“Nosotros los pueblos de las Naciones Unidas, resueltos a preservar a las generaciones venideras
del flagelo de la guerra, que dos veces durante nuestra vida ha infligido a la Humanidad
sufrimientos indecibles, a reafirmar la fe en los derechos fundamentales del hombre, en la
dignidad y el valor de la persona humana, en la igualdad de derechos de hombres y mujeres y de
las naciones grandes y pequeñas; a crear condiciones bajo las cuales puedan mantenerse la
justicia y el respeto a las obligaciones emanadas de los tratados y de otras fuentes del derecho
internacional; y con tales finalidades: a practicar la tolerancia y convivir en paz como buenos
vecinos; a unir nuestras fuerzas para el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales, a
asegurar, mediante la aceptación de principios y la adopción de métodos, que no se usará la
fuerza armada sino en servicio del interés común; y a emplear un mecanismo internacional para
promover el progreso económico y social de todos los pueblos...”.