21 Exploracion Aves
21 Exploracion Aves
21 Exploracion Aves
Cada vez más acuden a las clínicas otras especies de animales que requieren unos cuidados y manejos dis-
tintos que los perros y gatos. En España no hay gran tradición de llevar las aves al veterinario y no siempre
el dueño es consciente de que al igual que con perros o gatos, ellos también requieren cuidados veterinarios.
Generalmente el nivel de conocimientos veterinarios es medio- bajo y la mayoría de éstos provienen del bo-
“
ca a boca o (como no) de internet. Tanto si se
dispone de un auxiliar como si es el mismo
veterinario la primera persona que atiende al
cliente debe tener claros unos cuantos con-
ceptos de las aves: es mejor conocer poco y
bien que realizar algo incorrecto. El objetivo Como en todos los animales, la consulta tiene
del artículo es dar unas breves nociones pa- tres pilares fundamentales: historia clínica,
ra el veterinario para que podamos empezar
a realizar exploraciones básicas y así orientar observación y exploración, pero la diferencia
el caso o remitirlo a una clínica que trabaje
con estos animales; no pretendemos hacer
es que en las aves cobra aún más importancia
expertos en medicina aviar, si no proporcio- la historia clínica y la observación ya que la
nar seguridad . El manejo de las aves en la
clínica no siempre es fácil y su exploración exploración será muchas veces muy limitada
puede ser más peligrosa (para el paciente y
para nosotros) que en otros animales, pero si
nos acostumbramos a seguir una rutina podremos encontrar signos suficientes que permitan orientar nues-
tro diagnóstico. Como en todos los animales la consulta tiene tres pilares fundamentales: historia clínica,
observación y exploración, pero la diferencia es que en las aves cobra aún más importancia la historia clínica
y la observación ya que la exploración será muchas veces muy limitada.
Hay una serie de premisas que debemos tener en cuenta antes de manipular cualquier ave. Son cosas muy
sencillas pero que no podemos descuidar:
Exploración básica en aves - Cabezas, H. y González, J.V.
La anamnesis
La anamnesis en las aves a de ser lo mas completa posible aunque tenemos algunas limitaciones. Hay datos
que podemos conocer:
• El origen del ave (de un criadero, de una tienda,…) la especie, el sexo (sobre todo en especies di-
mórficas como el periquito) , la edad, etc. Alguno de estos datos no siempre será posible obtenerlos
pero podremos tener una idea aproximada.
• La localización de la jaula en la casa, presencia de otras aves, tipo de palos que tiene, sustratos de
la jaula, dieta (semillas, pienso, etc.), si el ave está acostumbrado al manejo…
al animal sino que se encuentre sujeto y no pue- FOTO 3: sujeción de aves de mayor tamaño con una toalla.
da moverse libremente para evitar que se puedan
lesionar las patas, las alas,…
Otra cosa es manejar aves más grandes como FOTO 4: las rapaces suelen venir con su material
amazonas, yakos, guacamayos,… Para coger es-
tos animales sí que necesitaremos protección y
generalmente lo haremos con una toalla (foto 3).
Enrollaremos suave pero firmemente al paciente
impidiendo el aleteo y realizando poco a poco la
exploración. Debemos inmovilizar la cabeza del
ave haciendo un anillo alrededor del cuello pa-
ra impedir que nos pueda picar. Si el auxiliar o
el dueño nos ayudan la exploración será más fá-
cil pero esto no siempre es posible por lo que (de
nuevo) adecuaremos cada exploración a las cir-
cunstancias personales. Es frecuente en grandes
aves como las psitácidas que después de la ma-
artículo científico
nipulación presenten un enrojecimiento alrededor de los ojos, más marcado en estas aves ya que en reposo
presentan un color blanco. Suele durar unas 24-48 horas y no supone ningún problema.
Un manejo algo más especial requieren las rapaces(foto 4). Sobre todo hay que inmovilizar las garras ya que
si nos consiguen atrapar nos podrán lesionar gravemente. Estos animales suelen venir con caperuza cubrien-
do la cabeza y con un guante de cuero donde apoyan las garras. Para una inmovilización completa primero
sujetaremos las patas por los tibiotarsos y después pondremos una toalla alrededor de las alas para impedir
que las batan.
Finalmente hay que dejar al ave de nuevo en la jaula. Ahora hay que tener cuidado al soltarlas para que no
se enganchen en los barrotes, que no se golpeen al soltarlos contra el suelo,… También tenemos que prote-
gernos nosotros para que en ese momento no nos
agarren con el pico.
La exploración
FOTO 6: síndrome
vestibular en canario
narina, aspecto de los ojos, posición de las alas, cojeras,… En este punto de la consulta, entre la información
que hemos conseguido de la anamnésis y la observación seguramente tengamos una idea bastante aproxima-
da del proceso que pueda presentar nuestro paciente (foto 5 y 6). Ya sólo nos quedará confirmarlo mediante
la exploración. Por ejemplo la iniciaremos desde abajo hacia arriba por lo que empezaremos con las garras.
Debemos observar el estado general de los dedos y uñas, inflamación de las extremidades, posible compre-
Exploración básica en aves - Cabezas, H. y González, J.V.
haya excrementos en la zona pegados a las plumas que nos podría indicar una posible diarrea, valorar si existe
distensión celómica, etc. Aquí podemos realizar una palpación y sospechar de presencia de huevos, masas,…
También es valorable el reflejo cloacal. En la parte dorsal del ave en la zona caudal se encuentra la glándula
uropigial que tiene una función fundamental en el mantenimiento del plumaje. Si seguimos hacia arriba po-
demos encontrar la región pectoral con la quilla. Aquí podemos valorar de una manera rápida la condición
corporal del ave. También podemos observar el estado del buche si está vacío, lleno, impactado, etc. Los si-
guientes elementos a valorar son las alas: forma, aspecto de las plumas, simetría, inflamación… podemos
valorar también el reflejo postural al extenderle las alas independientemente y viendo si vuelven a su posi-
ción normal.
Ya en la cabeza debemos revisar bien el pico. Debemos revisar su longitud, posibles desviaciones, fisuras, etc
(foto 9). Debemos explorar los ojos y vigilar la presencia de secreción, revisar el color de la mucosa conjunti-
val, y valorar el tamaño y simetría para descartar exoftalmos, hipopion, hifema, derrames intraoculares, etc.
Un elemento que debemos conocer es que las aves a diferencia de los mamíferos, poseen un control voluntario
Trabajo científico
Es muy importante recordar que éste puede ser un ejemplo de exploración completa. Según nuestra ex-
periencia y habilidad esta exploración puede llevarnos más o menos tiempo pero SIEMPRE deberemos
amoldarla a cada animal y sus circunstancias. Por ejemplo la exploración de un ave muy pequeña con disnea
severa puede consistir simplemente en la observación y en una mínima manipulación.
En algunas ocasiones, por el tamaño o carácter del animal, necesitaremos una tranquilización del ave usando
una anestesia inhalatoria con isofluorano, que nos proporciona bastante seguridad en la inducción y la recu-
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Trabajo científico
La auscultación de las aves se realizará con un fonendoscopio adecuado. Existen varios tamaños y para las
aves de pequeño tamaño puede ser más recomendable usar uno pediátrico o alguno de los modelos más mo-
dernos con sistemas de amplificación. La respiración en las aves es más compleja que en los mamíferos: las
aves poseen pulmones (no expandibles y sin lobulaciones) y además tienen un número variable de sacos aé-
reos . Otra diferencia importante es que no poseen diafragma por lo que la disnea la observaremos por el
movimiento evidente de las alas y de la cola. Por lo tanto aparte de la observación tendremos que auscultar
ambos campos pulmonares y fundamentalmente los sacos aéreos caudales
Una acción que es bastante frecuente y que podemos realizar sin problemas es el corte de las uñas. Para aves
pequeñas lo podemos realizar con un cortauñas igual que el de perros y gatos. Para aves más grandes otra
opción es rebajar las uñas usando un pequeño torno con una fresa poco agresiva (foto 12). No conviene apu-
rar demasiado pero aún así debemos tener preparado por si acaso algún agente cauterizante (cauterizador
eléctrico, nitrato de plata,…).
Bibliografía
• MEMORIX, Medicina de animales exóticos. Molina, Rafael; Grifols, Jordi; Martinez Silvestre, Albert; Padrós, Francesc. Grass edicions.
Barcelona, 2002.
• Diseases of Cage and Aviary birds. Third edition. Rosskopf, Walter J.; Woerpel, Richard W. William and Wilkins.
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