SIFILIS
SIFILIS
SIFILIS
Nombre del TREJO TREJO SHERLYN, GALLARDO CHAVARRÍA FRIDA, GOMEZ ALAN ,
alumno(s): SÁNCHEZ PACHECO JUAN EMMANUEL
Materia: MICROBIOLOGÍA
Profesor(a): SUSANA ESPERANZA RAMIREZ LOPEZ
Fecha: 18 Mayo 2023 Grupo: 2F
Tipo ANÁLISIS DE ARTÍCULO
Título: Sífilis: manifestaciones orales, revisión sistemática
La sífilis es una infección bacteriana, causada por la espiroqueta Treponema pallidum que se
puede transmitir por contacto sexual o de forma congénita, siendo el ser humano el hospedador
natural, tiene sinónimos como “la gran viruela”, Lúes, el gran imitador y Morbus Gallicius entre
otros. Desde 1980 se está experimentando un resurgir atribuible a la infección por VIH y al
incremento de la población inmunodeprimida debido en especial al aumento de las conductas
sexuales de riesgo, en la mayoría de los casos de sífilis ocurren en adultos jóvenes, y esta
enfermedad se caracteriza por transitar varios estadios: primario, secundario y terciario,
relacionados con las manifestaciones orales, y pudiendo permanecer latente durante largos
periodos de tiempo. Se consideran tres teorías principales:
I) Teoría Colombiana: Basada en que la sífilis fue importada por Colón y su ejército a su regreso a
Europa. Al final del siglo XV una pandemia conocida como “la gran viruela” se extendió por Europa
y por Asia, infección de gran virulencia muriendo mucha gente en su estadio secundario, donde
pronto se supo que era una infección que se transmitía por vía sexual.
II) Teoría pre-Colombina: La sífilis ya estaba presente en Europa mucho antes de que Colón
regresará del Nuevo Mundo. Basada en escritos médicos de Europa del siglo XIII y XIV que
describen ciertas formas de lepra que eran altamente contagiosas y que se transmitían por
contacto sexual y de madre a feto.
III) Teoría Evolutiva/Unitaria: Esta teoría postula que los diferentes miembros del género
Treponema evolucionaron de un único organismo que respondiese a los cambios del entorno.
Antes de la introducción de la penicilina a mediados del siglo XX la sífilis era una enfermedad con
prevalencia, infectando a un 8-14% de la población de áreas urbanas de todo el mundo y en 1999
se estimaron 11,8 millones de casos de sífilis alrededor todo el mundo. En Estados Unidos,
durante la primera mitad del siglo XX la sífilis era una infección frecuente y desde 1950 hasta 1990
se han observado picos de incidencia, seguidos por una bajada desde 1993 hasta los 2000.
Ficarra y cols reportan en su trabajo que más del 50-60% de los nuevos casos de sífilis se dan en
hombres que tienen sexo con otros hombres, y lo relacionan fuertemente con coinfección por VIH
y prácticas sexuales de alto riesgo, comportamientos sexuales, abuso de drogas, los viajes y la
migración pueden estar relacionados con la aparición de la sífilis de forma pandémica. De manera
que Angus y cols reportan en su trabajo que la incidencia de la sífilis ha incrementado en
proporciones epidémicas, por un brote que se dio a partir de 1997, con un incremento de 231% en
hombres heterosexuales, 1412% en hombres homosexuales y un 22% en mujeres.
El agente causal de la sífilis es el Treponema pallidum. T. pallidum tiene una morfología delgada y
en espiral, y cuando se examina a través del microscopio de campo oscuro se observa que su
movimiento recuerda al de un sacacorchos, microorganismo que no puede sobrevivir fuera de su
reservorio natural el ser humano, y además no pueden ser cultivadas in vitro. La primera vía de
transmisión de la sífilis es el contacto sexual ya que penetra a través de las mucosas genitales o a
través de la piel, entrando en el sistemas linfático y sanguíneo, diseminándose y afectando a
varios órganos, su periodo de incubación varía de 3 a 90 días y las lesiones primarias aparecen
de forma intra-rectal, vaginal, vulvar, cuello uterino, perianal u oral, en un 10-20%. enfermedad
infecciosa que se puede transmitir de forma muy fácil, mediante el sexo oral, besos o íntimo
contacto con la lesión.
Otra vía de transmisión es la vertical, en el momento del parto, si el recién nacido entra en
contacto directo con una lesión, transfusiones sanguíneas y los trabajadores de la salud y el
personal de laboratorio también pueden contagiarse si no se adoptan medidas de protección
adecuadas.
El primer estadio, sífilis primaria, tratándose de una infección local en la zona de inoculación del
microorganismo su periodo de incubación es habitualmente de 2 a 3 semanas, tras el cual
aparece una pápula en el lugar de inoculación. La ulceración de esta pápula da lugar a un chancro
sifilítico, indoloro, indurado y no purulento y que puede aparecer en los genitales, el ano, los labios
o la boca, y se suelen acompañarse de adenopatías en más del 80% de los casos, apareciendo
7-10 días después del chancro, se curan de forma espontánea entre 2 y 8 semanas, su
diseminación sistémica ocurre durante el estadio primario de la infección, la mayoría de los
chancros extragenitales aparecen en la boca (40-75%) aunque pueden aparecer en cualquier
parte del cuerpo.
Alrededor del 25% de los pacientes que no se tratan, desarrollan sífilis secundaria unas 4-6
semanas después de la aparición de la lesión primaria y de 2-12 semanas después del primer
contacto con el organismo, se debe a la diseminación por vía hemática del microorganismo y a la
colonización de varios órganos, sus síntomas incluyen rash cutáneo generalizado, fiebre,
adenopatías generalizadas, malestar general, alopecia, uveítis, sordera, neuritis óptica, entre
otros. Las lesiones maculopapulares de las palmas de las manos y de las plantas de los pies
aparecen aproximadamente en el 60-80% de los pacientes y entre el 21-58% de los pacientes
presentan lesiones mucocutáneas y/o mucosas, parches mucosos y condiloma lata en áreas
orales y/o genitales.
La sífilis terciaria o tardía se desarrolla en un tercio de los pacientes no tratados y se caracteriza
por complicaciones a largo plazo y puede ocurrir después de la sífilis primaria o secundaria, suele
ocurrir desde 1 año después de la infección inicial hasta 25-30 años después. Pudiendo afectar al
sistema nervioso central, sistema cardiovascular, piel, membranas mucosas, hígado, bazo, huesos
y otros órganos y sistemas, sus lesiones que aparecen son gomas, lesiones granulomatosas
indoloras que varían de tamaño, y pueden aparecer en piel, mucosas, sistema visceral y sistema
esquelético.
La sífilis congénita, ocurre cuando se infecta el feto dentro del útero de la madre, en la mayoría de
los casos debido a una sífilis no tratada, y suele ocurrir durante los estadios primarios de la
infección, su transmisión al feto ocurre normalmente a través de la placenta, pero también puede
ocurrir durante el parto, debido a lesiones genitales de la madre. Las manifestaciones clínicas de
este tipo serán similares a la de la sífilis secundaria en adultos y destacan linfoadenopatías, rash
maculopapular, hepatoesplenomegalia, glomerulonefritis, alteraciones óseas y alteraciones en el
sistema nervioso.Se debe tener en cuenta a la triada de Hutchison, que consiste en sordera,
incisivos en forma de destornillador y molares en forma de mora y queratitis ocular intersticial.
Las lesiones que aparecen en la sífilis secundaria son más extensas y más variadas que las que
se dan en la primaria siendo las más prevalentes, los parches mucosos y las lesiones
maculopapulares. Estas pueden aparecer en paladar duro, mucosa yugal, comisuras labiales,
faringe, encías y amígdalas.
Manifestaciones Orales
La sífilis primaria oral puede percatarse como una úlcera solitaria en el labio y de forma más rara
en la lengua o paladar. Las lesiones que aparecen en la sífilis secundaria son más extensas o
variadas que las que se dan en la primaria siendo las más prevalentes, los parches mucosos y las
lesiones maculopapulares . Estas pueden aparecer en paladar duro, mucosa yugal, comisuras
labiales, faringe, encías y amígdalas se conocen más en estas partes que conforman al cuerpo.
Las lesiones que aparecen en la sífilis secundaria son más extensas y más variadas que las que
se dan en la primaria siendo las más prevalentes, los parches mucosos y las lesiones
maculopapulares. Estas pueden aparecer en paladar duro, mucosa yugal, comisuras labiales,
faringe, encías y amígdalas.
Las principales lesiones que se producen en la sífilis terciaria son: goma sifilítico, leucoplasia
sifilítica, neurosífilis y la sífilis cardiovascular con la aparición de aneurismas de la aorta torácica
[asociada o no a insuficiencia aórtica severa].
Características Histopatológicas
Los hallazgos histológicos en todos los estadios de la sífilis se conocen por la afectación vascular
con endarteritis y periarteritis con inflamación granulomatosa, sobre todo en el estadio gomatoso.
La presencia de treponemas se puede observar mediante la tinción de plata en un 70% de los
pacientes. En la sífilis tardía el infiltrado se vuelve granulomatoso.
Diagnóstico
Las pruebas no treponémicas se basan en antígenos sintetizados de la lecitina, el colesterol y la
cardiolipina que reaccionan con los anticuerpos en respuesta a la infección por T. Las pruebas
corresponden a la etapa de la enfermedad, aumentando a lo largo de la infección primaria y
alcanzando su punto máximo en las etapas secundarias o tempranas de la infección . Las pruebas
treponémicas, que detectan anticuerpos contra los antígenos treponémicos, también se utilizan
comúnmente y son de utilidad para quitar los falsos positivos. Las pruebas treponémicas tienden
a ser cualitativas, en lugar de cuantitativas, pero a menudo siguen siendo positivas de por vida, a
pesar de una terapia exitosa y, por lo tanto, no son del todo útiles para evaluar la respuesta a un
posible tratamiento, existiendo diferentes algoritmos para el manejo de la enfermedad.
Tratamiento
Sífilis: manifestaciones orales, revisión sistemática intramuscular y en caso de alergias a las
penicilinas, se podrá administrar doxiciclina. En el caso de la sífilis latente, gomatosa o
cardiovascular se administra una inyección de Penicilina G Benzatina 1 a la semana durante tres
semanas y en alérgicos se optará por tetraciclinas.
Manejo Odontológico
El manejo dental en pacientes con enfermedades de transmisión sexual comienza con la
identificación de la misma, ya que este tipo de pacientes presenta un alto potencial de contagio
al contraerlas. Sin embargo, esto en muchos casos resulta complicado y por un lado algunos
pacientes pueden no dar información completa acerca de su estado de salud durante la historia
clínica y por otro lado en ocasiones este tipo de enfermedades no se presenta con signos
clínicos de importancia. Por ello, se debe tratar a todos los pacientes como si fuesen
portadores de cualquier problema infectocontagioso para así encontrar un resultado después
del tratamiento dado y sus resultados.
Conclusión
La sífilis en una de las infecciones más frecuentes que se encuentran de transmisión sexual, esta
tiene una relevancia muy importante en el area odontologica ya que por las relaciones sexuales
orales presenta manifestaciones orales que son sencillas de observar en consulta odontologica.
Esta es caracterizada por sus tres estadios los cuales presentan manifestaciones diferentes ya
que la evolución de la enfermedad va avanzando si no es tratada, si bien no es una de los
microorganismos habituales en boca y suelen no ser tan importantes para los dentistas ya que
directamente no afecta a la cavidad oral como otros microorganismos que causan caries o
gingivitis o periodontitis, si debe de conocerse ya que presenta manifestaciones orales que ante
un tratamiento pueden afectar al paciente. Con este estudio vemos como el odontólogo no solo
debe preocuparse de los microorganismos típicos en boca si no que debe saber identificar a otros
y las manifestaciones orales ya que esto también influirá en la salud del paciente y el dentista
como personal de la salud debe cuidar la salud completa del paciente y saber con quién remitir
cuando no esté dentro de su área.
Se debe de conocer los microorganismos no solo tipicos en la cavida oral si no todos aquellos que
presenten manifestaciones orales ya que de esta manera se contribuye a mejorar la salud no solo
bucal del paciente si no general.
BIBLIOGRAFÍA
Sanz, M. A., Navarro, B. G., Jané-Salas, E., Roig, A., Devesa, A. E., & López-López, J. (2020).
Sífilis: manifestaciones orales, revisión sistemática. Avances en Odontoestomatología, 36(3),
159-173. https://doi.org/10.4321/s0213-1285202000030000