Licencia Poetica
Licencia Poetica
Licencia Poetica
La licencia poética se considera como aquel recurso que el poeta tiene para
ajustar sus versos a una cierta medida y rima. Estas licencias son importantes
para el escritor porque le permiten dar a sus creaciones poéticas las
características en términos forma, estilo y belleza.
Al hablar de estas licencias, debo destacar los puntos que caracterizan a los
poemas en términos de medida y ritmo. En cuanto a la medida, o call metric
de los versos, se puede decir que ayudan a ajustar su medida con respecto al
número de sílabas de otros versos de la misma estrofa, entre ellos podemos
mencionar el synalepha, el hiato, sinéresis y diéresis. Por otra parte, el ritmo
tiene que ver con la musicalidad que deben tener los versos del poema, es
decir, su rima, que puede ser consonante y asonante.
Por ejemplo: digamos que el poeta quiere hacer una composición, un
a) para crear un soneto no solo se debe respetar la estructura de ABBA
ABBA CDC DCD, sino también el medidor de once sílabas en cada
verso, es decir, una versificación de arte principal.
Ejemplo
Es un descuido, que nos da cuidado, (A)
• Sinalefa. Se utiliza cuando se quiere restar una sílaba y consiste en unir dos
vocales contiguas que pertenecen a palabras diferentes, para pronunciarlas en
una misma sílaba. No es realmente una licencia, porque es un fenómeno que
suele ocurrir en el lenguaje hablado. Por ejemplo: “bella ilusión por quien alegre
muero” es un verso de once sílabas, porque se unen la “a” y la “i” en una sola
sílaba (be-llai-lu-sión-por-quien-a-le-gre-mue-ro).
Ejemplos de sinalefa
1. “Noche arriba los dos con luna llena”. Se unen la E y la A para formar un verso
de once sílabas (no-chea-rri-ba-los-dos-con-lu-na-lle-na).
•
• Dialefa. Consiste en separar dos vocales contiguas, que en la lengua corriente
formarían sinalefa, en dos sílabas distintas. Por ejemplo: “El cielo invernal” es un
verso de seis sílabas, porque la “o” y la “i” no se unen formando sinalefa (el-cie-lo–
in-ver-nal).
Ejemplos de dialefa
1. “El cielo está cambiante”. No se produce sinalefa entre la O y la E y queda un
verso de ocho sílabas (el-cie-lo–es-tá-cam-bian-te).
2. “Con poco entusiasmo, entró”. No se produce sinalefa entre la O y la E y
queda un verso de diez sílabas, ya que se cuenta una más porque “entró” es
una palabra aguda (con-po-co–en-tu-sias-mo-en-tró).
3. “Escribí unos versos de amor”. No se produce sinalefa entre la I y la U ni entre
la E y la A y queda un verso de once sílabas, ya que se cuenta una más
porque “amor” es una palabra aguda (es-cri-bí–u-nos-ver-sos-de–a-mor).
• Sinéresis. Se utiliza cuando se quiere restar una sílaba y consiste en unir en una
sílaba dos vocales que forman hiato, es decir, que pertenecen a sílabas diferentes.
Por ejemplo: “Los hermosos días de primavera” es un verso de diez sílabas,
porque el hiato “í-a” se pronuncia en una sola sílaba “ía” (los-her-mo-sos-días-de-
pri-ma-ve-ra).
Ejemplos de sinéresis
1. “Que la gente lo ha oído”. Se unen las vocales del hiato producido entre la O y
la I para formar un verso de ocho sílabas (que-la-gen-te-lo-ha-oí-do).
2. “Ella miraba el rocío en el pasto”. Se unen las vocales del hiato producido
entre la I y la O para formar un verso de doce sílabas (e-lla-mi-ra-ba-el-ro-cío-
en-el-pas-to).
3. “El lugar le generaba hastío”. Se unen las vocales del hiato producido entre la I
y la O para formar un verso de diez sílabas (el-lu-gar-le-ge-ne-ra-ba-has-tío).
•
• Diéresis. Se utiliza cuando se quiere sumar una sílaba y consiste en trasformar
un diptongo, la unión de dos vocales en una sílaba, en un hiato, la pronunciación
de dos vocales en sílabas diferentes. Por ejemplo: “La causa de su llanto” es un
verso de ocho sílabas, porque el diptongo “au” se trasforma en hiato “a-u” (La-ca–
u-sa-de-su-llan-to).
Ejemplos de diéresis
1. “En la ciudad antigua”. Se separan la U y la A en dos sílabas diferentes para
formar un verso de ocho sílabas (en-la-ciu-dad-an-ti-gu–a).
2. “Quedó en el recuerdo”. Se separan la U y la E en dos sílabas diferentes para
formar un verso de ocho sílabas (que-dó-en-el-re-cu–er-do).
3. “Regresó a su pueblo natal”. Se separan la U y la E para formar un verso de
once sílabas, ya que se suma una más porque termina en palabra aguda (re-
gre-só-a-su-pu–e-blo-na-tal).
Para terminar