METODOLOGIA
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LÍNEA DE INVESTIGACIÓN:
Salud Integral Humana
Actualmente las tasas de fertilidad en adolescentes sigue siendo elevada el 18% de los
nacimientos en América Latina son de madres menores de 20 años, destacando México y
Colombia con un 25,4% y un 25% respectivamente siendo uno de los principales problemas
sociales, políticos y económicos. Por ello, la OPS propone medidas preventivas que van desde la
elaboración de leyes y reglamentos hasta la educación a nivel individual, familiar y comunitario.
A nivel nacional, Montalvo (2022), nos dice que se han reportado un total de 30 mil embarazos
adolescentes en lo que va del año 2022. En ese sentido, el número de partos en niñas
adolescentes de entre 15 a 19 años aumentó de 1.158 a 1.438 entre el año 2021 y 2022.
En nuestro país, según la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar (Endes), 13 de cada 100
adolescentes de 15 a 19 años ya son madres o están embarazadas por primera vez, lo que
contribuye a perpetuar el ciclo de pobreza, abandono escolar y postergación de los proyectos de
vida si los establecimientos de salud no brindan asesoramiento adecuado en salud sexual y
reproductiva.
El director de la Red de Salud Puno, Yuri Cano Zirena, reportó que, al primer semestre del presente
año 2022, se ha reportado 51 casos de embarazos en adolescentes, cifra que se ha incrementado
a comparación del año 2021 donde se registró 39 casos, donde explicó que, adolescentes entre las
edades de 12 a 17 años, se convierten en madres de familia, sin llegar a la madurez sexual y peor
aún sin haber concluido sus estudios secundarios.
San Juan de Lurigancho es el que presenta mayor número de embarazos adolescentes. Siguen Ate
y San Martín de Porres. Los tres están ubicados en la capital de la nación.
A nivel regional, Cutivalú (2022), nos dice que en la región de Piura se han registrado más de 612
partos de adolescentes de entre 14 a 18 años de edad. Se encontró un aumento del 40% con
proporción al número de jóvenes que tienen que afrontar ser madres a temprana edad.
A nivel regional, Gutiérrez (2022) nos dice que en la región de Piura se han registrado más de 612
partos de adolescentes de entre 15 a 19 años de edad. Se encontró un incremento del 40% con
respecto al número de jóvenes que tienen que afrontar ser madres a temprana edad.
A nivel local, según datos del Ministerio de Salud del Perú, el 20% de las adolescentes de 14 a 18
años en la región Piura, donde se encuentra Sullana, han tenido al menos un embarazo. Esto
genera preocupación en la comunidad y profesionales médicos de la posta Bellavista-Sullana,
quienes buscan desarrollar estrategias y programas para prevenir el embarazo precoz y mejorar la
autoestima de los adolescentes.
Ante la problemática descrita se fórmula el siguiente pregunta: ¿Pueden reducirse los embarazos
de adolescentes prestando más atención a la prevención de salud?,¿Qué consecuencias se
presenta en un embarazo adolescente ?
El embarazo precoz en adolescentes es un problema social y de salud pública que puede tener un
impacto significativo en la autoestima y calidad de vida de los jóvenes. Las adolescentes
embarazadas pueden experimentar una variedad de problemas emocionales, sociales y físicos,
como la pérdida de oportunidades educativas y laborales, la discriminación social y la exclusión de
la sociedad.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año se producen en el mundo
unos 16 millones de nacimientos en adolescentes de entre 15 y 19 años, lo que representa
aproximadamente el 11% de todos los nacimientos.
En América Latina y el Caribe, la tasa de embarazo adolescente es del 66 por cada 1,000
adolescentes de 15 a 19 años, siendo la segunda región con la tasa más alta después de África
subsahariana.
Como equipo de trabajo determinamos la siguiente hipótesis general: Las medidas preventivas
influyen en la reducción del embarazo adolescente entre 15 a 17 años en el Centro de Salud
Bellavista- Sullana 2022.
Nuestra investigación está motivada por el propósito de brindar la información para que se formen
planes de mejora que incluyan estrategias para crear un espacio saludable para el desarrollo de los
profesionales en la salud.
Los adolescentes experimentan estos cambios, pueden probar muchos comportamientos de riesgo
entre los que se encuentran la actividad sexual. La proporción de adolescentes que han tenido
relaciones sexuales antes de los 18 años ha mostrado un aumento progresivo desde los años setenta.
Hoy en día, más de la mitad de las mujeres y casi el 75% de los varones han tenido relaciones
sexuales antes de cumplir los 18 años. Los adolescentes que adoptan comportamientos de alto riesgo,
como es el coito no protegido, tienen el riesgo de quedar embarazadas y contraer enfermedades de
transmisión sexual (ETS), incluida el virus de inmunodeficiencia humana (VIH), riesgo de enfermedad
pélvica inflamatoria (EPI) e infertilidad futura.
Desarrollo Cognoscitivo: En esta etapa los adolescentes se vuelven más introspectivos y egocéntricos,
creen que sus experiencias son únicas. Crean una ausencia imaginaria y piensan que todas las
personas los están mirando. En general, algunos adolescentes no dominan el pensamiento
operacional normal. El razonamiento lógico y abstracto les permite especular, formular hipótesis e
imaginar posibilidades. Piaget (1969), sostiene que la maduración del cerebro y el cuerpo crean
condiciones para la aparición del pensamiento operacional formal, pero muchos jóvenes permanecen
fijos en el pensamiento operacional concreto y no pueden educación son factores esenciales para
fomentar el desarrollo del pensamiento operacional formal.
A medida que maduran y ganan experiencia, desarrollan su propio código moral y personal.