LA CIVILIZACION MAYA

La cultura maya se desarrolló en la península de Yucatán, en lo que hoy es el sur de México,

Guatemala, Belice y parte del Salvador y Hondura. La mayoría de su territorio se localizó en medio
de la selva. Ello ocurrió entre los años 250 y 750 de nuestra era.

Este tiempo los mayas fueron grandes arquitectos como lo prueban las construcciones de grandes
ciudades con esplendorosas pirámides y centros ceremoniales; sin embargo incluso hoy día existen
en dichos países indígenas campesinos herederos de esa antigua cultura, quienes a pesar de no
vivir de la misma manera que sus ancestro de hace Más de mil años, conservan una cantidad
apreciable de sus conocimientos.

Los mayas nunca fueron un solo reino con todas sus 35 esplendorosas ciudades: estaban
organizados en “Ciudades Estados”: cada una de esta ciudad tenía un gobierno independiente y,
por lo tanto, autonomía de sus decisiones; pero también estaba unida a otras por lazos culturales,
es decir, nexos de religión, lengua, arte, costumbres, comercio y visión del mundo.
 Su sociedad estaba estrictamente dividida y era casi imposible pasar de un sector de la sociedad a
otro. Los gobernaba un rey, que decía tener antepasados divinos. El y su familia eran las personas
de más alto rango. Les seguía una serie de nobles, quienes tenían el saber: sacerdotes,
intelectuales y científicos; también entre ellos se encontraban los comerciantes y los militares. Por
último se hallaban los trabajadores de los campos y las ciudades.

En la sociedad maya había esclavos, pero era una situación temporal, pues la esclavitud era un
castigo para aquellas personas que violaban las leyes. Por esta razón no existía una clase social
específica de esclavos.

En el campo de las ciencias y de las artes, los mayas alcanzaron grandes logros y descubrimientos
(sobre todo en la astronomía y en las matemáticas) que son motivo de sombro para la humanidad:
- AVANCES ASTRONOMICOS: Descubrieron que la Tierra tardaba 365, 2420 días para dar la vuelta
completa al sol. Crearon el sistema vigesimal e inventaron el cero y crearon el calendario.
 LA CIVILIZACION AZTECA

El nombre de “Azteca” proviene de un lugar mítico situado al norte de la actual república

mexicana, llamado Aztlàn, una isla situada en un lago.

Los aztlaco-chichimecas como se llamaban entonces se caracterizaron por ser el pueblo más
guerrero de Centro América. Habitaron el territorio que hoy le corresponde a México, desde el
siglo XIV hasta el siglo XVI.

En sus inicios, los aztecas eran un pueblo nómada que recibió de su principal dios, el de la guerra,
la “revelación” de que el lugar de su pueblo, donde debía quedarse a vivir, era un sitio donde se
viera con claridad la unión de las fuerzas del aire, el agua y la tierra. Recorrieron muchos
territorios, hasta que un día encontraron a un águila comiéndose una serpiente sobre un cactus de
nopal. En la simbología azteca, el águila representa el aire, la serpiente el agua y el cactus de
nopal, muy sagrado para ellos, representaba la tierra. Allí fue donde fundaron Tenochtlitán. La
fuerza del símbolo parece perdurar hoy día, ya que en el escudo y la bandera de México se
encuentran el águila, la serpiente y el nopal.

En un comienzo fueron un pueblo rechazado por otros pueblos establecidos en la región quienes
los consideraban como unos intrusos pobres y sin tierras. Esta dura etapa duro dos siglos, hasta
que llegaron al lugar donde fundaron Tenochtitlán que en pocos siglos se convirtió en la capital del
imperio azteca: la ciudad era una verdadera metrópoli y era mucho más grande que las ciudades
europeas de la época. Se ubicaba en una isla comunicada con las tierras por medio de puentes tan
anchos que 10 personas podían pasarlo 43 caminando una al lado de la otra. Los aztecas fueron
excelente ingenieros y arquitectos. En Tenochtitlán vivía el emperador Moctezuma, este era
representante de los dioses y la máxima autoridad en todo el imperio.
La religión fue un elemento muy importante en la vida Azteca. Estos estaban convencidos que
tenían que alimentar a sus dioses con sangre humana. Generalmente los prisioneros de guerra
eran sacrificados en honor de los dioses. Las víctimas eran colocadas boca arriba y un sacerdote
lujosamente le clavaba un cuchillo en el pecho, le extraía el corazón y lo ofrecía a los dioses,
mientras la multitud danzaba a ritmo de tambores. Para los aztecas los sacrificios humanos no
eran crueldad, ni vergüenza, sino un acto religioso, puesto que el sentido de los sacrificios era
alimentar al Dios del Sol para asegurar la continuidad de su aparición cada día con ella la
permanencia de la vida humana, animal y vegetal sobre la tierra. Los principales dioses fueron
HUITZILOPÓCHTLI, dios del sol y de la guerra, y QUETZALCÓATL, dios de la sabiduría. Tratando de
encontrar soluciones a sus necesidades, los aztecas lograron un importante desarrollo de las
ciencias. Uno de sus logros fue el calendario aunque no tan exacto como el de los mayas. Tenía
365 días, divididos en 18 meses de 20 días, a los que se añadían 5 días “huecos” de los que se creía
que traían mala suerte.

Se jugaba con una pelota grande y de caucho, en un patio especialmente construido, entre dos
equipos opuestos. La pelota no se podía coger con las manos, los golpes se daban con la cadera,
los jugadores se 46 colocaban un cinturón ancho y pesado de madera y cuero, protectores de las
caderas y de las rodillas, guantes y en algunas zonas también cascos. Parece que los perdedores o
al menos el capitán del equipo perdedor era sacrificado después de terminado el juego.
 LA CIVILIZACION INCA

En la misma época en que los aztecas comenzaban su camino hacia lo que sería Tenochtitlán, en el
sur del continente, en los fríos altiplanos de los Andes, otro pueblo inicia también la conquista de
lo que sería después el inmenso imperio Inca.

El territorio inca fue tan extenso, que en el lenguaje europeo se le denomina “imperio”. Llego a
extenderse hacia el norte hasta lo que hoy es el Ecuador y Colombia, y hacia el sur hasta lo que
hoy es chile, Bolivia y argentina. Hacia el oriente, hasta la cuenca del rio amazonas. Su gran estado
se llamó TAHUANTINSUYU, que quiere decir “las cuatros partes del mundo”. Su capital era CUZCO,
que quiere decir “ombligo”, así para los incas su capital era el centro u ombligo del mundo.

Este imperio inca logro mantener al mismo tiempo un inmenso territorio unificado bajo el mando
de una sola persona, el INCA. Prácticamente todas las propiedades pertenecían a él: tierras, minas,
caminos, rebaños. El inca era considerado hijo del dios sol.

El origen de los incas sigue siendo un misterio. Parece que proviene de alguna tribu de la región,
de la familia QUICHUA, de donde proviene la lengua a un viva en Perú y Bolivia. Con la caída de las
culturas Chavin y Nazca, esta tribu tomo el poderío e inicialmente se instaló en el Cuzco. Fue
creciendo su poderío e influencia sobre los pueblos vecinos, hasta la llegada del español PIZARRO,
quien los domino fácilmente porque estaban divididos y acababan de tener una guerra civil.

El estado inca era fuerte. Su sociedad estaba dividida en los gobernantes, cuya cabeza era el inca,
y los más cercanos colaboradores. Luego seguían los funcionarios de la administración o
burocracia real, conformada por los familiares cercanos al inca; después estaban los campesinos y
artesanos, quienes pagaban tributos y trabajaban; y por último, los esclavos, este grupo social está
conformado por los delincuentes y capturados en combate con otras tribus.

Las niñas de la nobleza y del pueblo que tenían entre 10 y 15 años, eran reclutadas y preparadas
para ser esposas del Inca o de los funcionarios reales. También estaban las MAMACONAS, mujeres
dedicadas toda la vida al cuidado de los templos y al culto del Sol.

El pueblo inca se organizaba en clanes o AYLLUS (o barrios), el ayllu estaba formado por
agrupaciones de familias que vivían en una misma aldea con el fin de mantener la unidad familiar y
la adoración de sus dioses locales, pues a los pueblos conquistados se le permitía mantener su
religión y creencias.

Los incas son los únicos que se conocen que en la América precolombina practicaban la
domesticación de animales, como una de las formas de mantenerse económicamente. Poseían
enormes rebaños de LLAMAS y ALPACAS, de los que se surtían de materia para el tejido.
Los incas se caracterizaron por la construcción de magnificas obras de ingeniería tales como
caminos empedrados que comunicaban con los más remotos lugares del imperio, puentes
colgantes que cruzaban impresionantes abismos, terrazas de cultivos y sistemas de riego.

También emplearon el QUIPU, que era un conjunto de cuerdas con nudos para hacer cálculos
matemáticos, para registrar cifras de censos y población, pago de tributos u otros.

También fue notable su sistema de comunicación y de correos. Todo el Tahuantinsuyu estaba

intercomunicado por amplios caminos, muy bien diseñados, por donde pasaban corriendo los
CHASQUIS, que eran los mensajeros. Los chasquis corrían de una parte a otra, y trasmitían el
mensaje al siguiente puesto de información, donde salía otro chasquis, con la misma misión, hasta
llegar al destino requerido. La religión inca era naturalista y dedicaba su culto principal al dios Sol,
de quien era hijo el Inca. También se rendía culto a las montañas, los ríos, los animales y demás
seres naturales. De la cultura inca se destaca la arquitectura, la medicina y los trabajos en oro.
Fueron grandes conocedores de las plantas medicinales, con lo que lograban mantener una salud
correspondiente al medio en que habitaban. Fueron muchas sus plantas sagradas, entre las que se
destacó la coca y el tabaco. Mascando la hoja de coca combinada con cal, cuando estaban
trabajando, mitigaban el hambre y el cansancio y cuando se encontraban conversando o
analizaban algún problema, ellos decían que el espíritu de la planta, los guiaba a encontrar el saber
requerido. No hay que confundir sin embargo los fines de la práctica incaica de mascar la hoja de
coca, con los graves perjuicios que conlleva la moderna cocaína.