Arte Romano
Arte Romano
Arte Romano
1. El mundo romano.
Referentes históricos.
A finales del siglo VIII a.C. la península Itálica estaba habitada por diferentes
pueblos: etruscos, sabinos, latinos… Estos dos últimos fundaron, en el año
753 a.C. un poblado, Roma, que con el tiempo se convertirá en la capital de
unodelosimperiosmáspoderosos.Susorígenesfundacionalessonconfusos,
atribuyendo la leyenda su creación a los hermanos Rómulo y Remo.
De gran interés es el legado que ha dejado la cultura romana. Entre los elementos de la
romanización más importantes destaca principalmente la lengua, el latín, base fundamental del
castellano. Otros elementos son el Derecho Romano que en muchos aspectos ha seguido vigente
hasta nuestros días; el urbanismo, que denota el sentido práctico y racional del pueblo romano,
así como el trazado de la extensa red de carreteras.
Un aspecto sobresaliente del arte romano lo constituye el urbanismo, ya que se llegó a trazar un
modelo de ciudad (plano ortogonal) que se repetirá a lo largo de todo el Imperio.
Características generales
Como principales materiales para sus edificios utilizaron el mortero (mezcla de hormigón con
piedras pequeñas) que, una vez fraguado, convierten al edificio en un bloque de consistencia. El
ladrillo lo emplearon básicamente en las bóvedas, con el fin de aligerar su peso. En ocasiones
emplearon mármol y granito, para cubrir las paredes o los pavimentos de edificios lujosos.
El Urbanismo
Bóveda. Obra de fábrica arqueada que sirve para cubrir un espacio comprendido entre muros o varios pilares o columnas. La engendra el
movimiento o repetición del arco. Entre los principales tipos de bóveda destacamos: anular, cañón, crucería, horno, encamonada…
Las viviendas son de origen etrusco, con un patio central alrededor del cual se organizan las
habitaciones.
Destacan tres tipos de viviendas romanas: las domus (viviendas urbanas para familias
acomodadas); las insulae (casa de vecinos populares);y las residencias campestres o villae,
segundas residencias de las familias más pudientes.
Las fachadas y el aspecto exterior aparecían descuidados, pues los constructores daban más
importancia al espacio interior.
Las viviendas mejor conservadas las encontramos en Pompeya y Herculano, ciudades que
quedaron enterradas bajo la erupción del Vesubio en el año 79 d.C, y que se encuentran en
perfecto estado.
La arquitectura pública
Templo de Diana (Mérida)
La mayor parte de las edificaciones romanas que se conservan son
construcciones públicas civiles. La enorme variedad y su alto grado
de utilidad para la vida cotidiana de los habitantes romanos fueron
motivo de orgullo para los ciudadanos. Entre los edificios civiles
destacan las basílicas, las termas, los edificios destinados al ocio
(teatro, anfiteatro, circo) y los monumentos conmemorativos (arcos
de triunfo y columnas).
Los romanos eran muy aficionados a los espectáculos públicos, que constituían una importante
diversión. Tres son los edificios destinados al ocio, el teatro, el anfiteatro y el circo. En el primero
se hacían representaciones teatrales; en el segundo tenían lugar las luchas de gladiadores, de
fieras salvajes y también batallas navales, y en el último se disputaban carreras de caballos o de
carros.
El teatro en Roma adopta la misma planta semicircular que el griego, pero con una novedad: la
orquesta se hace semicircular. La cavea o graderío se divide en inferior, media y superior. Entre
los conservados, el teatro de Mérida (18a.C.) es el más importante y tiene una capacidad de más
de 5000 espectadores. Otros teatros importantes (Sagunto, Tarragona).
El edificio destinado a las luchas entre gladiadores y a espectáculos con animales es el anfiteatro.
Generalmente de planta elíptica, la arena, donde tenía lugar el espectáculo, está rodeada de
gradas para los espectadores.
En un nivel subterráneo se halla el foso, desde donde salían los gladiadores o las fieras. En alguna
ocasión la arena se cubría de agua para recrear batallas navales: eran las llamadas naumaquias.
Los monumentos conmemorativos se erigían para celebrar victorias militares o en honor de algún
emperador. Por lo general, se disponían en las principales vías de acceso a las ciudades y en el
foro.
El más característico es el arco de triunfo, utilizado como puerta de entrada a la ciudad. Puede ser
de un solo vano, aunque los más sofisticados llegan a tener tres vanos. Sus paramentos aparecen
lisos, en los más sencillos, y profusamente decorados con relieves históricos y conmemorativos en
los más importantes. En el aticus, o parte alta del arco, se halla inscrito el nombre del emperador
al que se dedicaba.
Obras de ingeniería
Arco de Cáparra. El arco tenía una altura de unos 13 metros. Se trata de un arco cuadriforme que se eleva sobre cuatro
pilares que forman cuatro arcos de medio punto. Cada pilar se asienta sobre un basamento coronado por una cornisa. En
los laterales que dan a la calzada romana aparecen pedestales en los que se situaban probablemente estatuas o efigies
representativas de la época. Es el único arco de este tipo que se conserva en España.
Acueducto de
Es también destacable el puente de la Alcántara, en Extremadura, sobre el río Tajo, de una altura
máxima en sus pilares de 48 m. y con un arco triunfal en su parte central y un templo en la
entrada.
Otras obras de ingeniería ideadas por los romanos son las presas, como la de Proserpina en
Mérida; los faros, como el de la Torre de Hércules en A Coruña.
3. La escultura romana.
Características.
*
Año146 a.C.
Aunque en culturas anteriores ya se había practicado la técnica del retrato, en Roma adquirió su
mayor desarrollo y un marcado realismo.
Relieve. Escultura realizada sobre una superficie de manera que resalte sobre el plano, sin despegarse totalmente del
fondo. Puede ser un altorrelieve, medio relieve o bajorrelieve.
Además de los retratos, a los romanos les gustaba decorar sus estancias con
reproducciones de obras griegas hechas en mármol. Estas eran realizadas por
artistas helenos emigrados a Roma. De hecho, muchas de las esculturas del
periodo clásico griego y helenístico las podemos rastrear gracias a las copias
romanas.
Entre los relieves de tema histórico destacan los que decoran la columna de Trajano (Roma);
la Columna de Marco Aurelio (Roma), relieves del Ara Pacis Augustae.
Ara Pacis Augustae. En el año 13 a.C., el Senado romano decidió erigir un altar en señal de agradecimiento por las exitosas campañas del emp
4. LA PINTURA ROMANA.
La pintura romana se caracterizaba por ser pintura al fresco, es decir, se realizaba en las
paredes de las casas de las familias más adineradas. También existen registros de pintura sobre
tabla. En cuanto a las técnicas utilizadas, la pintura romana se valía de trazo dibujístico grueso,
silueteando las figuras en negro o rojo. Se utilizaban colores planos, sin mezcla, y se
representaban figuras hieráticas, es decir, sin movimiento. Además, carecían de profundidad, es
decir, sin perspectiva. Los romanos también realizaban mosaicos, aunque estos eran usados
principalmente sobre los suelos.
Los mayores ejemplos de pintura romana proceden de los frescos de la zona del Vesubio
(Pompeya y Herculano), retratos de las tablillas egipcias del Fayum (madera al temple) y de
modelos romanos.
Los frescos megalográficos
Representan figuras de tamaño natural.
Otros géneros pictóricos
Pintura de caballete y frescos de menor tamaño con temática de paisaje, (Paisaje idílico sacro,
paisaje campesino, paisaje ciudadano, paisaje de los jardines) histórico, mitológico, bodegón y
retrato.
Referencias:
García, T. (2016) Historia de la pintura. Editorial LIBSA
Hoving, T. Arte. Editorial Norma
Pérez, J. (2022) Introducción al Arte. Recuperado de https://javier2pm-arte.blogspot.com/