3era Clase Magistral Evangelio de Lucas
3era Clase Magistral Evangelio de Lucas
3era Clase Magistral Evangelio de Lucas
Evangelio de Lucas
Importancia en la Biblia
Lucas presenta a Cristo como el Hijo del Hombre (19.10), es decir, el Mesías de Dios y
el Hombre ideal que vino a identificarse con la humanidad y a ser Salvador de ella (2.32;
3.6). Se traza la experiencia de Jesús a través de toda una vida normal, desde su genealogía,
la cual Lucas remonta hasta Adán, el primer gentil (3.23–28), su nacimiento (2.1–20),
infancia (2.21–39) y niñez (2.40–52) hasta su madurez. Jesús participa plenamente de la
vida humana. Es Salvador de toda clase de personas: judíos, samaritanos (9.52–56; 10.30–
37; 17.11–19) y quienes tenían otras religiones (2.32; 3.6, 8; 4.25–27; 7.9); hombres y
mujeres; publicanos (3.12; 5.27–32; 7.37–50; 19.2–10), y fariseos (7.36; 11.37; 14.1); ricos
(19.2; 23.50), y pobres (1.53; 2.7; 6.20; 7.22). Es a la vez Salvador universal e individual.
Lucas da prominencia a la oración. Relata nueve oraciones de Jesús, de las cuales solo dos
se encuentran en los otros Evangelios. Dos de sus parábolas particulares tratan de la oración
(11.1–13; 18.1–8). Solo Lucas nos informa que Jesús intercedió por Pedro (22.31, 32), que
exhortó a los discípulos a orar en Getsemaní (22.40), y que oró por sus enemigos (23.34).
El Espíritu Santo es otro tema importante (4.1, 14; 10.21; 11.13; 24.49). La humanidad del
Señor se revela en su dependencia del Padre en la oración, y del Espíritu Santo. El gozo y la
alabanza ocupan un lugar especial (1.14, 44, 47; 6.21, 23; 10.21; 15.23, 32; 24.52s); solo en
Lucas figuran los cuatro himnos: el Magnifica del latín Magnificat (1.46–55), el Bendito
del latín Benedictus (1.68–79), el Gloria a Dios en el cielo del latín Gloria in Excelsis Deo
(2.14) y el ahora dejas del latín Nunc Dimittis (2.29–32).
Autor: Lucas, médico gentil y compañero del apóstol Pablo. El Evangelio de Lucas y el
libro de Hechos claramente fueron escritos por el mismo individuo (1:1-4; Hch 1:1).
Aunque él nunca se identificó a sí mismo por nombres, es claro a partir de su uso de los
verbos en primera persona plural ("nosotros") en muchas de las secciones de Hechos que él
fue un compañero cercano del apóstol Pablo (Hch 16:10-17; 20:5-15; 21:1-18; 27:1-28:16).
Lucas es la única persona entre los colegas que Pablo menciona en su propias epístolas (Col
4:14; 2 Ts 4:11; Flm 24), quién encaja con el perfil del autor de estos libros. Eso está de
acuerdo de manera perfecta con la tradición más antigua de la iglesia la cual de manera
unánime atribuyó este Evangelio a Lucas.
Fecha: El libro de Hechos termina con Pablo aún en Roma, lo cual lleva a la conclusión
de que Lucas escribió estos libros desde Roma durante el encarcelamiento de Pablo allí
(alrededor del 60-62 d.C.). Lucas registra la profecía de Jesús de la destrucción de Jerusalén
en el 70 d.C. (19:42-44; 21:20-24) pero no hace mención del cumplimiento de esta
profecía, sea aquí o en Hechos. Lucas se enfocó en registrar tales cumplimientos proféticos
(Hch 11:28), por esta razón es extremadamente improbable que él escribiera estos libros
después de la invasión romana de Jerusalén.
Tema: Jesús, el Salvador divino y humano. Jesús no sólo vivió y ministro como el ser
humano perfecto, sino que como el Salvador de los pecados además murió y resucitó a una
nueva vida.
Trasfondo histórico: Lucas dedicó sus obras al "excelentísimo Teófilo" (lt. "amante de
Dios", 1:3; Hch 1:1). Esta designación, la cual puede ser un apodo o un seudónimo, es
acompañada por una expresión formal ("excelentísimo"). Posiblemente quiere decir que
"Teófilo" fue un dignatario romano bien conocido, quizás uno de aquellos que se había
vuelto a Cristo en la "casa de César" (Fil 4:22).
No obstante, es casi seguro que Lucas tenía en mente a una audiencia mucho más grande
para su obra que este hombre. Las dedicaciones al principio de Lucas y Hechos son como la
dedicación formal en un libro moderno. No son como la expresión o manera de expresarse
de una epístola.
Al reconocer que él había recolectado su relato de varias fuentes a las que tuvo acceso
(1:1), Lucas no estaba diciendo que no había sido inspirado para su obra. El proceso de
inspiración nunca hace a un lado o elimina las personalidades, vocabularios y estilos de los
autores humanos de las Escrituras. Los rasgos característicos de los autores humanos
siempre están marcados de forma indeleble, en todos los libros de las Escrituras. La
investigación de Lucas no es excepción a esta regla. La investigación misma fue dirigida
por la divina providencia. Y en su escritura, Lucas fue movido por el Espíritu de Dios (2 P
1:21). Por lo tanto, su relato es infaliblemente verdadero (1:3).
Religioso: El judaísmo nace con el exilio de Babilonia (586-538 aC.) y cristaliza con la
reforma de Esdras y Nehemías (428 aC). El pensamiento religioso de Israel se consolida y
adquiere una forma más depurada por la acción de los profetas y los sabios, desapareciendo
la atracción hacia los dioses paganos y las tendencias sincretistas. Yahveh, el Dios de
Israel, es el único Dios al que han de adorar y servir, por medio de una conducta fiel a la
alianza y los mandamientos, más que por un culto brillante pero exterior.
Por todo el país existen sinagogas que son casas de reunión, estudio de la Torá y oración.
En ella se celebra la fiesta de cada semana, el Sabbat; día de descanso (sábado).
Pero el culto tenía lugar en el Templo único de Jerusalén, donde se ofrecían sacrificios
diarios. Era atendido por un sacerdocio jerarquizado: había un Sumo Sacerdote, varios
rangos de sacerdotes y por último los levitas
Desde los tiempos de la reforma religiosa del rey Josías (s. VII a.C) todo judío varón debía
subir al Templo de Jerusalén con ocasión de las tres grandes fiestas:1) Pesaj (Pascua,
marzo-Abril) que recuerda la salida de Egipto y celebra la liberación de la esclavitud por
medio de Moisés; 2) Shavuot (Pentecostés, Abril-Mayo), Con la Fiesta de Pentecostés
concluía la época de siega. Tal como en la Fiesta de Primicias, en la que se llevaban
manojos de cebada como primicias al Templo, siete semanas o cincuenta días después se
ofrendaba pan hecho con el trigo recién segado. El trigo representa al pueblo de Dios
esparcido entre las naciones. El cumplimiento profético de esta fiesta comenzó con el
derramamiento del Espíritu Santo que relata el libro de Hechos.; 3) Sucot (Tiendas,
Septiembre-Octubre) La Palabra de Dios nos enseña que el cuerpo que habitamos es una
tienda o tabernáculo. Esta fiesta nos hace entender que al igual que aquel Israel, que
acampaba en el desierto esperando entrar a la Tierra Prometida, nosotros, la iglesia,
también acampamos provisionalmente en este mundo, a la espera de entrar en nuestra
propia Tierra Prometida que es la vida eterna. En tiempo de Jesús se celebraba otra fiesta de
importancia, 4) Matzá (panes sin levadura de15 al 21 del mes de Nisán Marzo-Abril), El
pan simboliza la Palabra de Dios, que es el Alimento espiritual por excelencia, y a su vez la
levadura representa la maldad o el pecado que corrompen. A esta fiesta también nuestro
Señor le dio cumplimiento pues tanto su testimonio como sus obras y enseñanzas fueron
puras y carentes de maldad, ejemplo que igualmente nosotros, quienes le seguimos
debemos cumplir. 5) Bikkurim (primicias, Ocurría a la mañana siguiente de los días de
reposo de Pascua y Panes sin levadura.), En ese día se cortaba una gavilla o manojo de
cebada perfecta y se llevaba al Templo, donde el sacerdote la examinaba para
posteriormente, una vez aprobada, presentarla ante el Poderoso de Israel como primicia.
Esta fiesta simboliza la resurrección de nuestro Señor Jesucristo, que habiendo sido
examinado y aprobado por el Padre celestial le permitió presentarse delante de Él. 6) Yom
Teruá (trompetas, Esta celebración inauguraba la época de la cosecha, Septiembre-
Octubre) El cumplimiento profético de esta fiesta ya está por iniciar. Significa la alerta o
alarma que nos avisa el comienzo de los acontecimientos de los últimos días que anteceden
al regreso del Señor Jesucristo en Poder y Gran Gloria. Tendrá su cumplimiento pleno
cuando la Resurrección de los justos sea efectuada. 7) Ion Kippur (día de perdón,
Septiembre-Octubre), Ese día, el sumo sacerdote vertía en un tarro la sangre del macho
cabrío recién sacrificado por los pecados del pueblo y pasando por el Lugar Santo caminaba
-con temor y temblor- hacia el Lugar Santísimo, donde el arca de la alianza -el trono del
Poderoso de Israel- se asentaba. La sangre del macho cabrío representa el Espíritu del
Señor Jesucristo que nos limpia de todo pecado. 8) Janucá (Dedicación, Noviembre-
Diciembre), fiesta de dedicación o de las luces y conmemora la rededicación del templo de
Jerusalén por los Macabeos. Es una fiesta tanto religiosa como nacional, se celebra durante
8 días consecutivos. Los macabeos lograron la victoria sobre los helenistas griegos,
preservando así su identidad judía y pusieron fin a la corriente pagana que había
comenzado a arrastrar a los israelitas hacia las costumbres y el paganismo religioso. 9)
Purim (suerte, Febrero-Marzo) Es la fiesta de la reina Ester. Conmemora un episodio de la
vida hebrea en Persia y su heroína es la reina Ester esposa del rey Asuero. 10) Shabat
(descanso, todos los sábados), la prohibición de trabajaren sábados tiene el propósito no es
restringir la vida, sino, dar oportunidad para la adoración, la meditación, el descanso, entre
otros.
Dentro del judaísmo existían varias corrientes religiosas siendo las principales los saduceos,
los fariseos y los esenios.
Fariseos. Pertenecían a esta corriente los sacerdotes de rango inferior, los especialistas en
la Ley o escribas y la clase media de origen urbano. En lo religioso, admitían la tradición
oral como una extensión de la Ley dada por Moisés; la resurrección, la recompensa y el
castigo en la otra vida; el valor del arrepentimiento y el perdón de Dios; un futuro
mesiánico y también en la existencia de los ángeles. La Torá era el centro de su enseñanza
y la aplicaban a todos los aspectos de la vida. Para salvaguardarla establecieron numerosos
preceptos, cayendo a veces en una casuística minuciosa. El amor al prójimo era el
mandamiento clave, pero con frecuencia ese prójimo era sólo quien pertenecía a su propio
grupo. En lo político era un movimiento seglar, renovador y nacionalista, aunque sin
actitudes extremas o métodos violentos. Eran los verdaderos maestros del pueblo y sus
dirigentes. Sobrevivieron a la destrucción del Templo en el año 70 y desarrollaron y fijaron
el pensamiento judío posterior.
Esenios. Esta corriente no aparece mencionada en los Evangelios ni en otros libros del
Nuevo Testamento, aunque existían desde varios siglos antes. Tuvo su origen en un grupo
de judíos piadosos que habiendo apoyado la rebelión de los Asmoneos fueron
decepcionados por su conducta posterior y se retiraron al desierto para fundar una
comunidad de piedras vivas. El grupo más conocido (gracias al hallazgo de los
manuscritos, en 1947) es el de Qumrán, frente al Mar Muerto. Llevaban una vida ascética
de pobreza, retiro, estudio de la Torá y oración. Se llamaban a sí mismos “miembros de la
nueva alianza” o “comunidad de los elegidos”. Esperaban dos Mesías, uno sacerdotal y otro
político. Parece ser que desaparecieron con la guerra del año 70.
En los evangelios aparecen otras corrientes. Una de ellas son los zelotes, que es un
movimiento nacionalista exaltado, vinculado a los fariseos, y promotor de todos los
levantamientos contra los romanos, culminando en la guerra de los años 66-70 que acabó
con la destrucción de Jerusalén y del Templo.
Hay una estrecha relación entre la iglesia cristiana y el pueblo judío, sobre todo a lo que
religión respecta. En el centro de la fe judía está la afirmación de que “Dios es el único
Señor” (Dt. 6:4; Mr. 12:29), que sus leyes son sabias y dignas de obediencia (Sal.78:5-8), y
que Él ha escogido un pueblo para sí mismo.
Por otra parte la esperanza en la venida del Mesías significaba para los judíos el deseo de
ver cumplida la justicia por la mano misma de Dios. De modo que las naciones e individuos
que se oponían al pueblo judío recibiera su castigo; y el pueblo escogido y los justos
tendrían su recompensa. Pero con la muerte y resurrección de Cristo, los primeros
cristianos entendieron que la salvación prometida y el juicio mismo incluían a todos los
seres humanos de todas las épocas (Jn.3:14-18; 12:32; 1Tm. 1:15 y 2:4)
Clase alta: se componía de las familias de los jefes políticos y religiosos, los comerciantes
solventes, los terratenientes y recaudadores de impuestos (publicanos) una media y una
pobre.
Clase media: contaba con los medianos y pequeño comerciantes, los artesanos, sacerdotes,
maestros de la Ley.
Clase pobre: la más numerosa, estaba formada por jornaleros que vivían al día (Mt.20:1-
16), y por muchos otros que vivían al margen de la sociedad, como los mendigos, los
leprosos (Mr. 10:46)
Según las leyes, el lugar más bajo lo ocupaban los esclavos, aunque su situación real
dependía de la posición y carácter de sus amos. Los esclavos que no eran judíos, rara vez
recuperaban su libertad. En cambio que los esclavos israelita podían recuperar su libertad el
año sabático.
Existían los bancos, aunque en una forma muy poco desarrollada y de forma privada,
funcionaban como cambistas y prestamistas, el imperio romano no retiraba las monedas de
los nuevos territorios conquistado.
Político: Herodes el Grande, que había gobernado Palestina con cierta autonomía ente los
años 37 aC. Y 4 d.C amparado por un tratado de amistad con Roma, tuvo tres hijos:
Herodes, Filipo yArquelao. Al morir Herodes el Grande dividió sus territorios entre sus tres
hijos: Arquelao el mayor, le correspondió Judea, Samaria e Idumea, al segundo Herodes
Antípas, le correspondió Galilea y Perea, y al tercero Filipo, le correspondió Iturea y
Traconite. La región más conflictiva era, sin duda, Judea, pues en ella se encontraba
Jerusalén, donde se daban cita las instituciones y grupos que conservaban más
rigurosamente las tradiciones judías. No tardaron en surgir los conflictos y en el año 6 dC.
Las autoridades romanas, a instancia de una embajada de nobles judíos, destituyeron a
Arquelao y pusieron al frente de Judea a un gobernador romanos, por lo que circulaban
varias monedas a la vez, por lo que era necesaria la figura del cambista. El comercio en el
imperio necesitaba transportar las mercancías de un lugar a otro, principalmente se hacía
por mar y por las vías romanas, por ello las ciudades más importantes eran las costeras o las
que estaban en la intersección de las principales vías romanas.
Tono: Epistolar, fue una epístola que se escribió en particular al excelentísimo Teófilo.
Lucas parece enfocarse en una audiencia gentil. Él identificó lugares que habrían sido
conocidos para todos los judíos (p.ej. 4:31; 23:51; 24:13), dando a entender que su
audiencia iba más allá de aquellos que ya tenían conocimiento de la geografía de Palestina.
Él normalmente prefirió usar terminología griega en lugar de hebraísmos (p. ej. "Calvarios"
en lugar de "Gólgota" en el 23:33).
Aunque en el relato de Lucas son prominente los milagros de Jesús durante su ministerio en
Galilea, el enfoque principal de este evangelio está en las enseñanzas y las parábolas de
Jesús durante su extenso ministerio camino a Jerusalén (9:51-19:27). Esa sección abarca el
texto más extenso que aparece en Lucas de manera exclusiva, e incluye muchas historias y
parábolas muy apreciadas. El versículo decisivo (9:51) “cuando se cumplió el tiempo en
que él había de ser recibido arriba, afirmó su rostro para ir a Jerusalén” y el versículo clave
(19:10 “porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido” del
evangelio ocurren al principio y hacia el final de esa sección exclusiva de Lucas.
Relación con otro libros del A.T: Como gentil, las referencias de Lucas al Antiguo
Testamento son relativamente pocas, comparadas con el Evangelio de Mateo, y la mayoría
de las referencias del Antiguo Testamento están en las palabras dichas por Jesús, más que
en la narración de Lucas. Jesús utiliza el Antiguo Testamento para defenderse contra los
ataques de Satanás, respondiéndole con “Escrito está” (Lucas 4:1-3); para identificarse a Sí
mismo como el Mesías prometido (Lucas 4:17-21); para recordar a los fariseos su
imposibilidad de guardar la Ley y su necesidad de un Salvador (Lucas 10:25-28, 18:18-27);
y para confundir su conocimiento cuando trataban de engañarlo y probarlo (Lucas 20)