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Acv Isquemico Y Hemorragico

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ACV ISQUEMICO Y HEMORRAGICO

Un accidente cerebrovascular isquémico ocurre cuando se interrumpe o se reduce el


suministro de sangre a una parte del cerebro, lo que impide que el tejido cerebral reciba
oxígeno y nutrientes. Las células cerebrales comienzan a morir en minutos.

Un accidente cerebrovascular es una emergencia médica, y el tratamiento inmediato es


crucial. La acción temprana puede reducir el daño cerebral y otras complicaciones.

La buena noticia es que actualmente muchos menos estadounidenses mueren a causa de


un accidente cerebrovascular que en el pasado. Los tratamientos efectivos también pueden
ayudar a prevenir la discapacidad por un accidente cerebrovascular.

Síntomas

Si tú o alguien con quien estás puede estar sufriendo un accidente cerebrovascular, presta
especial atención al momento en que comenzaron los síntomas. Algunas opciones de
tratamiento son más eficaces cuando se administran poco después de que comienza el
accidente cerebrovascular.

Los signos y síntomas del accidente cerebrovascular incluyen:

 Dificultad para hablar y entender lo que otros están diciendo. Se puede


experimentar confusión, dificultad para articular las palabras o para entender lo
que se dice.
 Parálisis o entumecimiento de la cara, el brazo o la pierna. Puedes desarrollar
entumecimiento repentino, debilidad o parálisis en la cara, el brazo o la pierna.
Esto a menudo afecta solo un lado del cuerpo. Trata de levantar ambos brazos
por encima de la cabeza al mismo tiempo. Si un brazo comienza a caer, es
posible que estés sufriendo un accidente cerebrovascular. Además, un lado de la
boca puede caerse cuando trates de sonreír.
 Problemas para ver en uno o ambos ojos. Repentinamente, puedes tener visión
borrosa o ennegrecida en uno o ambos ojos, o puedes ver doble.
 Dolor de cabeza. Un dolor de cabeza súbito y grave, que puede estar
acompañado de vómitos, mareos o alteración del conocimiento, puede indicar
que estás teniendo un accidente cerebrovascular.
 Problemas para caminar. Puedes tropezar o perder el equilibrio. También
puedes tener mareos repentinos o pérdida de coordinación.
Cuando consultar al médico

Busca atención médica de inmediato si notas cualquier signo o síntoma de un accidente


cerebrovascular, incluso si parece que vienen y se van, o desaparecen por completo.
Verifica lo siguiente:

 Cara. Pídele a la persona que sonría. ¿Se cae un lado de la cara?


 Brazos. Pídele a la persona que levante ambos brazos. ¿Un brazo tiende a caer?
¿O no puede levantar un brazo?
 Habla. Pídele a la persona que repita una frase simple. ¿Arrastra las palabras o
habla de manera extraña?
 Tiempo. Si observas cualquiera de estos signos, llama al 911 o a un servicio de
emergencias médicas de inmediato.
Llama al 911 o al número local de emergencias de inmediato. No esperes a ver si los
síntomas desaparecen. Cada minuto cuenta. Cuanto más tiempo se demore en tratar un
accidente cerebrovascular, mayores serán las posibilidades de daño cerebral y
discapacidad.

Si sospechas que la persona con la que te encuentras está teniendo un accidente


cerebrovascular, vigílala cuidadosamente mientras esperas la ayuda de emergencia.

Causa
Accidente cerebrovascular isquémico
Accidente cerebrovascular isquémico
Este es el tipo más común de accidente cerebrovascular. Ocurre cuando los vasos
sanguíneos del cerebro se estrechan o se bloquean, lo que causa una importante reducción
del flujo sanguíneo (isquemia). Los vasos sanguíneos se bloquean o se estrechan debido a la
acumulación de depósitos de grasa o de coágulos sanguíneos u otros desechos que se
desplazan por la sangre (con más frecuencia desde el corazón) y se alojan en los vasos
sanguíneos del cerebro.

Algunas investigaciones iniciales muestran que la infección por COVID-19 puede aumentar
el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular isquémico, pero se requieren más estudios.

Accidente cerebrovascular hemorrágico

El accidente cerebrovascular hemorrágico ocurre cuando un vaso sanguíneo en el cerebro


gotea o se rompe. Las hemorragias cerebrales pueden ser el resultado de muchas
afecciones que afectan los vasos sanguíneos. Los factores relacionados con el accidente
cerebrovascular hemorrágico incluyen los siguientes:

 Presión arterial alta no controlada


 Sobretratamiento con anticoagulantes
 Bultos en puntos débiles de las paredes de los vasos sanguíneos (aneurismas)
 Traumatismo (como un accidente automovilístico)
 Depósitos de proteína en las paredes de los vasos sanguíneos que provocan
debilidad en la pared del vaso (angiopatía amiloide cerebral)
 Accidente cerebrovascular isquémico que causa hemorragia
Una causa menos común de sangrado en el cerebro es la ruptura de una maraña anómala
de vasos sanguíneos de paredes delgadas (malformación arteriovenosa).

Accidente isquémico transitorio

Un accidente isquémico transitorio, al que a veces se lo llama mini accidente


cerebrovascular, es un período temporal de síntomas similares a los de un accidente
cerebrovascular. Un accidente isquémico transitorio no causa daño permanente.
Un accidente isquémico transitorio se produce por una disminución temporal del
suministro de sangre a una parte del cerebro, que puede durar tan solo cinco minutos.

Al igual que con el accidente cerebrovascular isquémico, el accidente isquémico


transitorio ocurre cuando un coágulo o restos reducen o bloquean el flujo sanguíneo a
parte del sistema nervioso.
Solicita atención de emergencia incluso si crees que tuviste un accidente isquémico
transitorio porque tus síntomas mejoraron. No es posible saber si estás teniendo un
accidente cerebrovascular o un accidente isquémico transitorio según solo los síntomas. Si
tuviste un accidente isquémico transitorio, significa que puedes tener una arteria
parcialmente bloqueada o estrechada que va al cerebro. Tener un accidente isquémico
transitorio aumenta el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular más adelante.

Factores de riesgo

Muchos factores pueden aumentar el riesgo de padecer un accidente cerebrovascular. Los


factores de riesgo potencialmente tratables de un accidente cerebrovascular incluyen los
siguientes:

Factores de riesgo relacionados con el estilo de vida

 Tener sobrepeso u obesidad


 Inactividad física
 Beber en exceso o darse atracones de bebida
 Uso de drogas ilegales como la cocaína y la metanfetamina
Factores de riesgo médicos

 Hipertensión arterial
 Fumar cigarrillos o la exposición al humo de segunda mano
 Colesterol alto
 Diabetes
 Apnea obstructiva del sueño
 Enfermedad cardiovascular, que incluye insuficiencia cardíaca, defectos
cardíacos, infección cardíaca o ritmo cardíaco irregular, como fibrilación
auricular
 Antecedentes personales o familiares de accidente cerebrovascular, ataque
cardíaco o accidente isquémico transitorio
 Infección por COVID-19
Entre otros factores asociados con un riesgo más alto de accidente cerebrovascular, se
incluyen los siguientes:
 Edad: las personas de 55 años o mayores corren un riesgo más alto de sufrir un
accidente cerebrovascular que las personas más jóvenes.
 Raza o etnia: las personas afroamericanas e hispanas corren un riesgo más alto
de sufrir un accidente cerebrovascular que las personas de otras razas o etnias.
 Sexo: los hombres corren un mayor riesgo de sufrir un accidente
cerebrovascular que las mujeres. Por lo general, las mujeres son mayores
cuando tienen accidentes cerebrovasculares, y tienen más probabilidades de
morir a causa de ellos que los hombres.
 Hormonas: el uso de píldoras anticonceptivas o terapias hormonales que
incluyen estrógeno aumenta el riesgo.

Complicaciones

Un accidente cerebrovascular a veces puede causar discapacidades temporales o


permanentes, según cuánto tiempo el cerebro carece de flujo sanguíneo y qué parte fue
afectada. Entre las complicaciones, se incluyen las siguientes:

 Parálisis o pérdida del movimiento muscular. Puedes quedar paralizado de un


lado del cuerpo o perder el control de ciertos músculos, como los de un lado de
la cara o de un brazo.
 Dificultad para hablar o tragar. Un accidente cerebrovascular puede afectar el
control de los músculos de la boca y la garganta, lo que dificulta hablar con
claridad, tragar o comer. También puedes tener dificultad con el lenguaje, lo que
incluye hablar o entender el habla, leer o escribir.
 Pérdida de memoria o dificultad para pensar. Muchas personas que tuvieron un
accidente cerebrovascular padecen cierto grado de pérdida de la memoria.
Otras pueden tener dificultades para pensar, razonar, opinar y comprender
conceptos.
 Problemas emocionales. Las personas que tuvieron un accidente
cerebrovascular pueden tener más dificultad para controlar sus emociones o
pueden sufrir depresión.
 Dolor. Se puede presentar dolor, entumecimiento u otras sensaciones inusuales
en las partes del cuerpo afectadas por el accidente cerebrovascular. Por
ejemplo, si un accidente cerebrovascular hiciera que pierdas la sensibilidad en el
brazo izquierdo, podrías desarrollar una sensación incómoda de hormigueo en
ese brazo.
 Cambios en la conducta y en la capacidad de cuidado personal. Las personas
que tuvieron un accidente cerebrovascular pueden volverse más taciturnas. Es
posible que necesiten ayuda con el aseo personal y las tareas diarias.
Prevención

Conocer tus factores de riesgo de accidente cerebrovascular, seguir las recomendaciones


del proveedor de atención médica y adoptar un estilo de vida saludable son las mejores
medidas que puedes tomar para prevenir esta afección. Si has tenido un accidente
cerebrovascular o un accidente isquémico transitorio, estas medidas podrían ayudar a
prevenir otro accidente cerebrovascular. La atención de seguimiento que recibas durante tu
estancia en el hospital y después también pueden influir.

Muchas estrategias de prevención de accidentes cerebrovasculares son las mismas que las
estrategias de prevención de enfermedades cardíacas. En general, las recomendaciones
para un estilo de vida saludable incluyen:

 Controlar la presión arterial alta (hipertensión). Esta es una de las cosas más
importantes que puedes hacer para reducir el riesgo de accidente
cerebrovascular. Si has tenido un accidente cerebrovascular, bajar la presión
arterial puede ayudar a prevenir un accidente isquémico transitorio o un
accidente cerebrovascular posteriores. Con frecuencia, para tratar la presión
arterial alta, se utilizan cambios saludables en el estilo de vida y medicamentos.
 Reducir la cantidad de colesterol y grasas saturadas en tu alimentación. Comer
menos colesterol y grasas, especialmente grasas saturadas y grasas trans, puede
reducir la acumulación en las arterias. Si no puedes controlar tu colesterol solo a
través de cambios en la alimentación, el médico te puede recetar un
medicamento para bajar el colesterol.
 Dejar de fumar. Fumar aumenta el riesgo de accidente cerebrovascular para
fumadores y no fumadores expuestos al humo de segunda mano. Dejar de
fumar reduce el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular.
 Controlar la diabetes. La dieta, el ejercicio y la pérdida de peso pueden ayudarte
a mantener el nivel de glucosa en la sangre dentro de un rango saludable. Si los
factores del estilo de vida no parecen ser suficientes para controlar la diabetes,
es posible que el médico te recete medicamentos para la diabetes.
 Mantener un peso saludable. El sobrepeso contribuye a otros factores de riesgo
de accidente cerebrovascular, como la presión arterial alta, las enfermedades
cardiovasculares y la diabetes.
 Seguir una alimentación rica en frutas y verduras. Una alimentación que
contenga cinco o más porciones diarias de frutas o verduras puede reducir el
riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular. La dieta mediterránea, que hace
hincapié en el aceite de oliva, las frutas, los frutos secos, las verduras y los
cereales integrales, puede ser útil.
 Hacer ejercicio de forma regular. El ejercicio aeróbico reduce el riesgo de sufrir
un accidente cerebrovascular de muchas maneras. El ejercicio puede reducir la
presión arterial, aumentar los niveles de colesterol bueno y mejorar la salud
general de los vasos sanguíneos y el corazón. Además, te ayuda a perder peso,
controlar la diabetes y reducir el estrés. Progresivamente, haz hasta por lo
menos 30 minutos de actividad física moderada, como caminar, trotar, nadar o
andar en bicicleta la mayoría de los días de la semana, si no todos.
 Beber alcohol con moderación, si es que lo haces. El consumo excesivo de
alcohol aumenta el riesgo de presión arterial alta y accidentes cerebrovasculares
isquémicos y hemorrágicos. El alcohol también puede interactuar con otros
medicamentos que estés tomando. Sin embargo, beber cantidades pequeñas a
moderadas de alcohol, como una bebida al día, puede ayudar a prevenir
accidentes cerebrovasculares isquémicos y disminuir la tendencia a la
coagulación de la sangre. Habla con el médico acerca de lo que es adecuado
para ti.
 Tratar la apnea obstructiva del sueño. El médico puede recomendarte un
estudio del sueño si tienes síntomas de apnea obstructiva del sueño, un
trastorno del sueño que hace que dejes de respirar repetidamente durante
períodos breves mientras duermes. El tratamiento para la apnea obstructiva del
sueño incluye un dispositivo que administra presión positiva en las vías
respiratorias a través de una mascarilla para mantenerlas abiertas mientras
duermes.
 Evitar las drogas ilícitas. Ciertas drogas ilícitas, como la cocaína y la
metanfetamina, son factores de riesgo establecidos para un accidente isquémico
transitorio o un accidente cerebrovascular.
Medicamentos preventivos

Si tuviste un accidente cerebrovascular isquémico o un accidente isquémico transitorio, es


posible que el médico te recomiende medicamentos para ayudar a reducir el riesgo de
sufrir otro accidente cerebrovascular. Estos incluyen los siguientes:

 Medicamentos antiplaquetarios. Las plaquetas son células en la sangre que


forman coágulos. Los medicamentos antiplaquetarios hacen que estas células
sean menos pegajosas y menos propensas a coagularse. El medicamento
antiplaquetario más comúnmente utilizado es la aspirina. Tu médico te puede
ayudar a determinar cuál es la dosis correcta de aspirina para ti.
Después de un accidente isquémico transitorio o un accidente cerebrovascular
menor, el médico puede administrarte aspirina y un fármaco antiplaquetario
como clopidogrel (Plavix) durante un tiempo para reducir el riesgo de tener otro
accidente cerebrovascular. Si no puedes tomar aspirina, es posible que tu
médico te prescriba solo clopidogrel.
 Anticoagulantes. Estos medicamentos reducen la coagulación de la sangre. La
heparina es de acción rápida y se puede utilizar a corto plazo en el hospital.
La warfarina de acción más lenta (Jantoven) se puede usar a largo plazo. La
warfarina es un medicamento anticoagulante poderoso, por lo que deberás
tomarla exactamente como se indica y estar atento a sus efectos secundarios.
También necesitarás hacerte análisis de sangre regulares para controlar los
efectos de la warfarina.
Existen varios medicamentos anticoagulantes más nuevos para prevenir los
accidentes cerebrovasculares en personas que tienen un riesgo alto. Estos
medicamentos incluyen dabigatrán (Pradaxa), rivaroxabán (Xarelto), apixabán
(Eliquis) y edoxabán (Savaysa). Son de acción más corta que la warfarina y por lo
general no requieren exámenes de sangre regulares ni control por parte de tu
médico. Estos medicamentos también se asocian con un menor riesgo de
complicaciones hemorrágicas en comparación con la warfarina.

ACV hemorrágico o ictus hemorrágico

Corazón y Circulación
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El ACV hemorrágico, también conocido como ictus hemorrágico, derrame cerebral o


hemorragia cerebral, es un tipo de ictus o enfermedad cerebrovascular (ECV) que afecta al
suministro de sangre al cerebro. Entre los dos tipos de ECV isquémico y hemorrágico, el
ACV hemorrágico es el tipo de accidente cerebral hemorrágico menos común. Éste se
produce cuando un vaso sanguíneo se rompe y sangra en el cerebro, comprimiendo y
afectando así al tejido de células del cerebro rápidamente.
¿Qué es un ACV hemorrágico?

Un accidente cerebrovascular o ACV hemorrágico ocurre cuando se revienta un vaso


sanguíneo y sangra dentro del cerebro (una hemorragia). Esto daña las células del cerebro y
comienzan a morir.

Existen dos tipos principales de ACV hemorrágico:

 Hemorragia intracerebral. Quiere decir que el ACV hemorrágico fue provocado por
una hemorragia en el cerebro
 Hemorragia subaracnoidea. Quiere decir que el accidente cerebro vascular
hemorrágico fue provocado por una hemorragia en la superficie del cerebro en el
espacio subaracnoideo (formado por dos membranas que cubren el cerebro)

Aproximadamente una de cada seis personas que tiene un accidente cerebrovascular tiene
un ACV hemorrágico.

El cerebro controla todo lo que hace el cuerpo, incluyendo el movimiento, habla, visión y
emociones. Presentar síntomas de EVC significa que puede haber un daño en el cerebro
que afecta a cualquiera de estas funciones.

Aproximadamente, una de cada seis personas que tiene un accidente cerebrovascular tiene
un ACV hemorrágico. Por lo general, el evento vascular cerebral hemorrágico afecta a más
las personas mayores, pero puede ocurrir a cualquier edad.

Síntomas del accidente cerebrovascular (ACV) hemorrágico

Cuando ocurre un ACV se interrumpe el suministro de sangre al cerebro y los síntomas del
accidente cerebrovascular por lo general se presentan repentinamente, en segundos o
minutos.

Una buena forma de reconocer qué pasa si te da un derrame cerebral o si alguien ha tenido
un accidente cerebrovascular es utilizar la prueba cara-brazos-habla-tiempo para llamar al
teléfono de emergencias (se abrevia FAST, del inglés). Esto requiere verificar si hay alguno
de los tres síntomas principales de un ACV: debilidad facial, debilidad en el brazo o
problemas en el habla.

Si tienes entumecido un lado del cuerpo o de la cara, dificultad para hablar o mantener las
piernas derechas o imposibilidad de mover un brazo o pierna llama inmediatamente a
emergencias ya que puede tratarse de un EVC hemorrágico.

Los síntomas del ACV hemorrágico pueden incluir:

 dolor de cabeza intenso y repentino


 pérdida de conocimiento (si es prolongado, se llama coma)
 vómitos
 tortícolis
 entumecimiento, debilidad o imposibilidad de mover la cara, brazo o pierna de un
lado del cuerpo
 dificultad para hablar y que te entiendan
 mareos y vértigo
 dificultad para mantener las piernas derechas y elevarlas
 fiebre
 sensibilidad a la luz
 inquietud y confusión (delirio)
 ataques (convulsiones)

Si notas que alguien tiene alguno de estos síntomas, debes llamar a emergencias de
inmediato ya que puede tratarse de un EVC hemorrágico.

Complicaciones y secuelas del ACV hemorrágico

Las secuelas que deja el ACV o accidente cerebrovascular hemorrágico pueden ser bastante
leves y los efectos sólo temporales, mientras que otros ACV hemorrágicos pueden ser más
graves y provocar daños duraderos. Las consecuencias del ACV o complicaciones del
accidente cerebrovascular incluyen:

 debilidad o parálisis, generalmente a un lado del cuerpo


 falta de conciencia de un lado del cuerpo (generalmente el lado izquierdo)
 pérdida de la sensibilidad a un lado del cuerpo
 dificultad para tragar
 cansancio extremo y problemas para dormir
 problemas para hablar, leer y escribir
 problemas con la visión, por ejemplo, visión doble o ceguera parcial
 dificultades con la memoria y la concentración
 dificultad para controlar la vejiga y movimientos intestinales (incontinencia), o
estreñimiento
 cambios de comportamiento

Los problemas tales como de ansiedad, depresión y convulsiones pueden a menudo


mejorar a medida que te recuperas.

Si no puedes moverte debido a un ACV hemorrágico, podrías estar en riesgo de:

 escaras (úlceras por presión)


 trombosis venosa profunda (TVP)
 neumonía
 contracturas (posición alterada de manos, pies, brazos o piernas debido a la rigidez
muscular)

Causas del ACV hemorrágico

¿Qué provoca un ACV hemorrágico?

El mayor riesgo del ACV hemorrágico es tener hipertensión.

Dos de cada tres ACV hemorrágicos están causados por hipertensión.

Alrededor de dos de cada tres ACV hemorrágicos son provocados por este factor. Otros
factores que pueden aumentar el riesgo de un ACV hemorrágico incluyen los siguientes:

 Inflamación de un vaso sanguíneo en el cerebro (aneurisma intracraneano) Esto


puede ser provocado por hipertensión arterial, o puede ser de nacimiento.
 Debilitamiento de los vasos sanguíneos en el cerebro. Esto puede suceder debido a
presión arterial no controlada o, a veces, por acumulación de una proteína llamada
amiloide en las paredes de los vasos sanguíneos (amiloidosis cerebral).
 Anormalidades en la forma en que los vasos sanguíneos se han formado en su
cerebro (malformación arteriovenosa).
 Cualquier cosa que aumente tu tendencia a sangrar. Esto puede incluir un
tratamiento con un medicamento anticoagulante (por ejemplo, Aspirina, Warfarina,
Vitamina K , Inhibidores de los receptores del di fosfato de adenosina) o tener una
enfermedad como leucemia o hemofilia.
 Uso de algunas drogas ilegales, tales como cocaína.
 Tener un trauma en la cabeza. Esto puede provocar que los vasos sanguíneos se
revienten y sangren dentro y alrededor de tu cerebro.

Diagnóstico del ACV hemorrágico

Serás sometido a numerosas pruebas en el hospital para tratar de descubrir el tipo de


accidente cerebrovascular (ACV) que tuviste y la parte afectada de tu cerebro. Esto
permitirá a tu médico planificar tu tratamiento.

Te medirán la presión arterial y te harán un electrocardiograma (ECG) para registrar el


ritmo y la actividad eléctrica de tu corazón. Luego te pueden realizar pruebas de sangre
para medir tu colesterol y niveles de azúcar en sangre, y para detectar cómo coagula tu
sangre.

También te harán una tomografía cerebral (por ej., CT o MRI) lo antes posible. La diferencia
entre un ACV isquémico y hemorrágico es cómo se ha producido la interrupción del flujo de
sangre y esto ayudará a descubrir si tu ACV se produjo por sangrado (ACV hemorrágico) o
por obstrucción (isquémico). Los ACV hemorrágicos, aunque menos comunes, tienden a ser
más graves que los accidentes cerebrovasculares isquémicos y es importante identificar la
causa, así como el grado del daño que se ha producido.

Si tu médico cree que tuviste una hemorragia subaracnoidea, te harán una punción lumbar
(una prueba donde se toma una muestra de líquido cefalorraquídeo de la parte baja de la
espalda). Luego, una vez confirmada la enfermedad, te harán un angiograma (un examen
donde se inyecta un tinte especial en los vasos sanguíneos para verlos claramente a través
de imágenes de rayos X o CT). Esto ayudará a tu médico a encontrar la hemorragia en el
cerebro.

Tratamiento del ACV hemorrágico

Cuando vayas a un hospital, estudiarán cómo tratar el ACV hemorrágico en tu caso. Puedes
recibir tratamiento en una sala general o en una unidad especializada en accidentes
cerebrovasculares.

Si no puedes tragar, se te administrará líquido a través de un suero en el brazo para evitar


que te deshidrates. Te pondrán un tubo en la nariz para recibir todos los nutrientes y
medicamentos que necesitas. Si es necesario, también te administrarán oxígeno a través de
una máscara facial para ayudarte a respirar.

Tan pronto puedas, te ayudarán a sentarte y moverte. Si no puedes moverte, te ayudarán a


cambiar de posición en la cama con regularidad, para disminuir las posibilidades de tener
escaras y trombosis venosa profunda.

Medicamentos para el ACV hermorrágico

Los medicamentos que tomes dependerán del tipo de ACV hemorrágico y de los
medicamentos que ya estés tomando. Por ejemplo, si tienes una hemorragia intracerebral y
estás tomando anticoagulantes (como warfarina), puedes necesitar medicamentos para
contrarrestar los efectos. Esto permitirá que la sangre coagule y ayudará a detener la
hemorragia en tu cerebro.

También puedes tomar algunos de los siguientes medicamentos.

 Los anticonvulsivos como fenitoína se usan para prevenir las convulsiones.


 Los antihipertensivos como labetalol se usan para controlar la presión arterial si es
muy elevada. Esto ayuda a evitar más hemorragias.
 Los diuréticos como manitol pueden ayudar a reducir la inflamación del cerebro.
Si tienes una hemorragia subaracnoidea, es posible que debas tomar un medicamento
llamado nimodipina por alrededor de tres semanas después de haber tenido el accidente
cerebrovascular. Esto ayuda a que la sangre siga fluyendo al cerebro.

Cirugía para el ACV hermorrágico

Si tienes un ACV hemorrágico, existe el riesgo de que la hemorragia a veces forme un


bloqueo a medida que coagula (hematoma). Esto puede detener el flujo normal del líquido
cefalorraquídeo alrededor del cerebro y provocar una acumulación de presión (una
enfermedad conocida como hidrocefalia). Si esto sucede, tu médico puede sugerir que te
hagas una cirugía para drenar el líquido excedente.

Si tienes una hemorragia intracerebral en la parte trasera de tu cerebro (cerebelo) o cerca


de la superficie, es posible que necesites cirugía para drenar el líquido. Sin embargo, esto
no es apropiado para todos.

Si tienes una hemorragia subaracnoidea provocada por un aneurisma intracraneano, es


posible que necesites cirugía para reducir el riesgo de más hemorragia. Es posible que te
hagan un tratamiento endovascular. En este procedimiento, tu cirujano pasa un tubo a
través de un pequeño corte en tu ingle para llegar al aneurisma en tu cerebro. Se colocan
pequeños espirales dentro del aneurisma para detener la hemorragia. Como alternativa, es
posible que te hagan cirugía abierta. En este procedimiento, tu cirujano abre el cráneo para
llegar al aneurisma. Tu cirujano te indicará qué procedimiento es el indicado para ti.

Rehabilitación de accidente cerebrovascular

Después de tener un accidente cerebrovascular (ACV), es posible que debas volver a


aprender habilidades y destrezas, o aprender nuevas habilidades y adaptarte al daño que
causó el accidente cerebrovascular. Esto se conoce como rehabilitación de accidente
cerebrovascular.

La mayoría de las personas se recupera mayormente en las primeras semanas y primeros


meses, pero a veces la recuperación tarda más tiempo.

La recuperación de un ACV hemorrágico puede ser difícil de predecir. La mayoría de las


personas se recupera mayormente en las primeras semanas y primeros meses después del
accidente cerebrovascular. Sin embargo, a veces, la recuperación puede tardar más tiempo.

El equipo de accidente cerebrovascular del hospital diseñará un programa de rehabilitación


para ti según tus necesidades particulares. Esto continuará después de salir del hospital. Tu
programa de rehabilitación puede involucrar a fisioterapeutas, terapeutas del habla y del
lenguaje, terapeutas ocupacionales, oftalmólogos y psicólogos, así como médicos y
enfermeros.
Preguntas y respuestas

¿Un ACV hemorrágico es peor que un accidente cerebrovascular isquémico?

Los ACV hemorrágicos tienden a ser más graves que los accidentes cerebrovasculares
isquémicos. Sin embargo, los efectos de cualquier tipo de accidente cerebrovascular, y la
recuperación, varían según la persona.

Explicación

Los ACV hemorrágicos tienden a ser más graves que los accidentes cerebrovasculares
isquémicos y además es más probable que sean mortales. Sin embargo, el daño causado
por cualquier tipo de accidente cerebrovascular, y la recuperación, varían según la persona.
Por ejemplo, el accidente cerebrovascular hemorrágico y el isquémico pueden ser mortales
para algunas personas, mientras que otras se pueden recuperar y aprender a vivir con los
daños provocados.

Cuanto antes la persona que ha tenido un accidente cerebrovascular reciba un tratamiento


aumentan las posibilidades de que se recupere. Por lo tanto, es muy importante llamar a
emergencias tan pronto reconozcas los síntomas de un accidente cerebrovascular.

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