Wong 2012, El Antepasado de Homo
Wong 2012, El Antepasado de Homo
Wong 2012, El Antepasado de Homo
lorigendel
eneroHomo
El hallazgo de unos f6siles extraordinarios en Sudafrica
avivan el debate sobre la evoluci6n humana
Kate Wong
::: :ri;Sl de nuestro genero, Homo, sigue que Ia especie a Ia que perteneda Lucy, Aus- contradecir esa interpretacion. Los huesos
'!':-=sc::-;:;> uno de los grandes misterios tralopithecus afarensis, dio Iugar al primer re- corresponden a una nueva especie humana,
:a-! :_ ;:,-.:s ·nvestigan Ia evoluci6n humana. presentante de nuestro linaje, Homo habilis. cuya mezcla de rasgos de Australopithccus y
- ~ -de unos pocos datos, se ha plantea- El hallazgo reciente de f6siles en un yaci- Homo hace pensar a sus descubridores que
:r ::..:: - ~ - c aoareci6 en el este de Africa y miento al noroeste de Johannesburgo pod ria podria tratarse del antepasado de Homo.
A. garhi
I K. platyops
tiempo Ia antepasada de todos los homininos posteriores, entre na en Kenya, que ha investigado fosiles de Africa oriental, apun·
ellos A. africanus y Homo. Berger sefiala que el astnigalo de ta a Ia falta de concordancia entre los datos, en especial los cro-
A. sediba es mas antiguo que el de A. ajarensis, lo que indica nol6gicos y los geograficos. Segun ella, rcsulta mas probable que
que A. sediba, o bien experiment6 una regresi6n evolutiva y de- los homininos sudafricanos constituyan una lfnea evolutiva in-
sarrollo un h ueso mas primitivo, o desciende de un linaje dis- dependiente que se desarrollo en cl sur del continente.
tinto del de A. afarensis y A. africanus, del que aun no se han Rene Bobe, de Ia Universidad George Washington, afirma
descubierto fosiles. que si los f6siles de A. sediba fueran mas antiguos, de unos
Berger opina que se ha apostado demasiado alto por los fo- 2,5 millones de afios de ectad, se podrfa aceptar que se t rata del
siles hallados en Africa oriental. Ahara hay que reconocer Ia ancestro de Homo. Pero con 1,977 millones de afios, poseen una
existencia de otras posibilidades que se deben explorar. Quiza morfologfa general demasiado primitiva como para correspon-
Ia hipotesis que situa el origen de los humanos en Africa orien- der a los antepasados de los f6siles identificados en los alrede-
tal (East Side Story) rcsulta err6nea. La idea tradicional consi- dores del !ago Turkana, de una cdad ligeramcnte inferior pero
dera que los f6siles mas antiguos de hominino hallados en Su- con numerosos rasgos indiscutibles del genero Homo. Berger
dafrica representan una lfnea evolut iva que no tuvo descenden- responde que A. sedi ba seguramente ya existfa como especie
cia. Ahara, A. sediba podrfa contradecir ese planteamiento y antes que los individuos de Malapa. Pero Babe y otros mantie-
demostrar que en Sudafrica hubo un linaje que dio origen a los nen que no se dispone de ninguna informacion en ese sentido.
humanos actuales. De hecho, Ia palabra sediba significa <<fuen- Segun el, los paleoantropologos tienden a pensar que sus ha-
te>> o <<manantial». llazgos ocupan una posici6n clave en el arbol filogenetico de los
Pero William Kimbel, de Ia Universidad Estatal de Arizona, homininos, pero Ia mayorfa de las veces noes asf. Desde un pun-
que dirige el equipo que hal16 el maxilar de 2,3 millones de afios to de vista estadfstico, si Africa albergo diferentes poblaciones
en Etiopfa, se manifiesta en desacuerdo. Segl]n el, Ia idea de que de homininos que evolucionaron de distinto modo, lpor que el
se necesita todo un esqueleto para clasificar un fosil carece de fosil que alguien encuentra debe ser el antepasado com(m'!
sentido; lo fundamental consiste en identificar partes anatomi- Wood, en cambia, apoya las ideas de Berger. En especial,
cas que contengan rasgos diagn6sticos. Y el maxilar de Hadar pre- cuando afirma que el hallazgo de A. sediba nos ensefia que los
senta caracterfsticas que lo relacionan con Homo, como Ia forma lmesos aislados no permiten predecir el resto del esqueleto y
parab6lica de Ia arcada dental. Kimbel, que ha vista los f6silcs de que Ia combinaci6n de rasgos en fosiles anteriores no hacen
Malapa, aunque no los ha podido estudiar con profundidad, ad- descartar otras posibilidades. Pero rechaza que A. sediba sea el
mite la sorprendente semejanza de los rasgos con los de Homo, antepasado de Homo, por presentar escasos caracteres que lo
si bien no sabe c6mo interpretarla. Pero se mofa ante Ia sugeren- relacionen con eL Opina que los rasgos de A. sediba pudieron
cia de que puedan corresponder al antepasado de H. erectus. <<No evolucionar de forma independiente dellinaje de Homo. Segun
imagino c6mo un taxon de Sudafrica con alguna caracterfstica de el, A. sediba deberfa haber cambiado mucho para convertirse
Homo podrfa ser su antepasado, cuando en Af1ica oriental existe en H. erectus.
un f6sil 300.000 afios mas antiguo que pertenece claramente a! La respuesta a Ia cuestion de si A. sediba pertenece a nues-
genera>>, declara rcfiriCndosc al maxi!ar de Hadar. tra linea evolutiva seve obstaculizada porIa falta de una clara
Kimbel noes el (mica en rechazar que A . sediba represente definicion del genero Homo. Pero llegar a un consenso cntrafia
el ancestro de Homo. Meave Leakey, del Instituto del Lago Turka- mayor dificultad de lo que parece. Debido a Ja escasez de fosi-
H. habilis"
'
H. antecessor
.. ~~-:=~~;:-'107':---
H. ergaster , r· , ·; .., ·- · .: : ~"' .· H. erectus
...._ -~-~~~~~».!..... ----·· - ~
I H. rtJdolfensis 1
H. floresiensis \ ........
1 Ma
- e5<> perfodo de transici6n, Ia mayorfa de enos muy frag- solo ha recuperado fosiles visibles en Ia superfieie pero no ha
::ios. resulta complicado determinar los primeros rasgos buscado de modo sistematico l'osiles enterrados a mayor pro-
que lo diferenciaron de sus a ntepasados australopite- fundidad. Con esas pruebas, y j unto con otros datos, sera posi-
cambios que lo hicieron humano. Los esqueletos de
5 ble averiguar el modo en que A. sediba se desarrollaba, Ia ma-
jX)nen de manifiesto un heeho desconeertante: al ser nera como se desplazaba por su e ntorno y la variabilidad
IIlib completos que cualquier fosil de los primeros Homo, morfologica ent re miembros de Ia especie.
muy diffcil comparar los con ellos. Berger afirma que Pero no solo cabe esperar que los f6siles aporten nuevos da-
nos obligara a estableeer una defmici6n. tos. Malapa t ambien ha proporcionado materiales que pueden
ayudar a entender mejor A . sediba. Los paleontologos pensaban
1'000 EN LOS OETALLI<:S que durante cl proceso de fosilizacion todos los componentes or-
.::calsea Ia posicion evolutiva de los fosiles de Malapa, sin ganicos del cuerpo (Ia pie!, el pelo, los 6rganos) se descompon fan
~;mi ti ra n confeceionar el retrato mas completo de los y desaparecfan, cxcepto Ia parte mineral del hucso. Pero cuando
-~-~., s mas antiguos, en parte, gracias a! hecho de con tar Berger examin6 el escancr tomogn1fico del craneo masculino,
~ individuos. Ademas de los dos esqueletos parciales descubrio en Ia parte superior un cspacio vacfo entre Ia supcrfi-
t::.aeho joven y de una hem bra adulta, el equipo de Ber- cie del fosil y la del hueso. Al inspeccionar el espacio de cerca dis-
- ;ttUperado huesos deal menos otros cuatro individuos, tinguio un patron superficial que recordaba a los elementos es-
ellcs una crfa. Un hecho destacable, si se tiene en cuenta tructuralcs de Ia pie!. En Ia actualidad esta rcalizando analisis
~de datos poblacionales en el registro fosil humano, a adicionales para saber si esc patron tan extrafio que ha hallado
se :uiade el magnifico estado de conservacion de los res- en el cranco del macho, asf como en el menton de Ia hembra y en
Si: t.an desenterrado huesos que no sue len sobrevivir a los otros huesos de antflope del yacimiento, corresponde a pie!.
- -del tiempo: una escapula del grosor de una hoja de pa- Si sc confirma Ia conservacion del tejido cutaneo, podriamos
- celicada primcra costilla, huesos de dedos del tamafio averiguar el color de Ia pie! y Ia densidad y caracterfsticas del
::=:sa.me- y \·ertebras con apoflsis eonservadas. Yvarios h ue- pelo de A. sediba. Tambicn podrfa conocerse Ia distribucion de
- los que antes solo se disponfa de fragmentos aparecen las glandulas del sudor, un dato que permit irfa dcducir Ia capa-
~s. Antes del descubrimiento de Malapa, nose habfa cidad de Ia cspccie para regular Ia temperatura corporal, lo que
----'-"'"o ninglin brazo entero de los primcros homininos. debi6 de intluir sobre su actividad. Ademas, las glandulas sudo-
tndas las longitudes de las extremidades utilizadas rfparas ofrecen informacion sobre Ia evolueion del cerebro. La
~-:preta r aspectos esenciales como Ia locomocion se ba- aparicion de un cerebro de mayor tamafio cxigirfa un mecanis-
~ ~timaci ones . Ineluso a Lucy, el esqueleto de hominino mo que mitigara el calor del ambient e (una earactcrfstica distin-
~!eto que se conocfa desde su descubrimiento en 1974, Liva de Homo), puesto que el ccrebro es un organo muy sensible
=buena parte de brazos y piernas. En cambio, Ia hem- a los cambios de temperatura. Si se conserva mat erial organieo,
ra de :\lalapa conscrva toda una extremidad superior, Berger podrfa incluso obtener ADN de los restos. Hasta ahora,
...& esc.lpula hasta Ia mano. Solo le faltan algunas falanges el ADN de hominino mas antiguo que se ha secuenciado tiene
de ,u dedos y huesos del carpo, aunque Berger espera 100.000 afios de antih'i.iedad y pertenece a un ncandertal. Pero
~mrarlos. De hecho, cree que podrfa hallar el resto de debido a las condiciones de conservacion excepcionales en Mala-
-s::::rieto:-- cuando excave el yacimiento, ya que su equipo pa, Berger alberga Ia esperanza de recuperar datos geneticos de
los f6siles de A. sediba. De ser asf, se podrfa determinar si Ia hem· nes de afios mas antiguos que los f6siles de Malapa. Seg(m el. I -
bra adulta y el macho joven fueron madre e hijo, tal y como se vestigios organ ieos podrian resultar mas habituates de lo que
ha propuesto, asi como su relaci6n con los individuos restantes pensamos; simplemente, nadie los habfa buscado antes.
del yacimiento. Ademas, tal deseubrim iento motivaria Ia b(IS- Otro de los aspectos que nadie habfa examinado en un h ~
queda de ADN en otros yacimientos y, si esta rcsultara fruetuo- minino de tal a ntigiiedad es Ia presencia de sarro. La super.: ~
sa, podria zanjarse el debate sabre el parentesco entre las dife- de los dientes del macho joven muestra manchas marrone:: os-
rentes espccies de homininos. curas. Dura nte Ia preparaci6n de los f6siles, se suelen lirr:pia;
La conservaci6n de restos organicos constituiria un hecho los dientes para poder estudiar los restos de hominino. Pero Ber-
(mica en Ia paleontologfa de los homininos. Yel equipo de Mala- ger pens6 que esas manchas podrfan corresponder al materiru
pa sabc que para convenccr a Ia comunidad cientffica necesita- que los h umanos de hoy eliminamos con cepillos de diente.' o
ra pruebas extraordinarias. Pero los primeros resultados analf- visitas aJ dentista. El sarro f6sil proporcionarfa una informa-
ticos apoyan csa hip6tesis, y Berger piensa que muy probable- cion valiosa sabre la evoluci6n de Ia dicta.
mente los futuros amilisis Ia confirmaran. De hecho, se han Los estudios previos sabre Ia alimentaci6n de los pri mero,
identilicado restos organicos semejantes en huesos de dinosau- humanos se basan en el analisis isot6pico de los dientes. S'te
rios rvease «F6siles con restos de vida>>, por Mary H. Schweit- indica si un animal ha consumido plantas C3 (arboles o arbus-
zer; 1NVESTIGACI6N Y CIENCIA, febrero de 2011], decenas de m ilia- tos) o plan tas C4 (hierbas y gramfneas). 0 sefiala si una especie