Hábitos de Autonomía
Hábitos de Autonomía
Hábitos de Autonomía
Cuando vemos sistemas educativos como el finlandés, cabe preguntarse ¿y dónde está la clave?
¿Cuál será el “secreto” de este sistema cuyos resultados sobresalen a la media de los países de
la OCDE? Lamentablemente, no existe una respuesta única… o tal vez, no existe respuesta
alguna.
Para quienes trabajan desde las políticas públicas, es probable que la respuesta la encuentren en
el presupuesto destinado a educación, la autonomía municipal y la flexibilidad curricular que
tienen. Aquellos que representan al cuerpo docente, podrían focalizarse en las altas
remuneraciones que los profesores tienen, y el valor social que tiene la docencia.
Para profundizar en esto, es interesante hacer un especial acercamiento y ver cómo se entiende
y observa la autonomía de los niños en la sala de clases. Deci y Ryan (1987 citado en Stefanou,
2004) definen autonomía como la “acción que es elegida”, ampliando la definición a todo
aquel ámbito en que los niños y adultos pueden optar por una opción frente a diversas
alternativas presentadas por un tercero. Trasladando esto a una sala de clase, se observa la
autonomía en un estudiante cuando éste elige o decide hacer frente a las solicitudes o
alternativas provistas por su profesor.
Sin embargo, Stefanou y sus colaboradores (2004) señalan que se pueden observar tres tipos de
autonomía en el contexto escolar; a) autonomía organizacional, que contempla las decisiones
que los alumnos pueden tomar en función del ambiente físico en que trabajan, b) autonomía
procedimental, observada en aquellos casos en que los niños pueden elegir la manera de
presentar sus ideas, y c) autonomía cognitiva, que dice relación con la manera en que los
profesores fomentan en sus estudiantes la justificación o argumentación de sus respuestas,
abriendo la alternativa a que ellos busquen el procedimiento mental para llegar a la solución a
un problema presentado, a hacer visible el pensamiento de los niños e invitándolos a evaluar (o
autoevaluar) sus propios procesos y resultados. En el desarrollo de la autonomía cognitiva, es
clave el rol mediador y el andamiaje focalizado que realiza el profesor, fomentando el trabajo
metacognitivo en los estudiantes, el cual debe estar acompañado de un adecuado feedback.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
STEFANOU, C. R., PERENCEVICH, K. C., DICINTIO, M., & TURNER, J. C. (2004). SUPPORTING
AUTONOMY IN THE CLASSROOM: WAYS TEACHERS ENCOURAGE STUDENT DECISION MAKING
AND OWNERSHIP. EDUCATIONAL PSYCHOLOGIST, 39(2), 97-110.
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Un niño poco autónomo es un niño dependiente, que requiere ayuda continua, con
poca iniciativa, de alguna manera sobre protegido.
Como norma general todo aquello que el niño pueda hacer solo, siempre que no entrañe
peligro, debe hacerlo él mismo. También es válido como criterio enseñar aquellos
hábitos que tienen adquiridos la mayoría de niños de una edad.
Como guía, pueden servir los siguientes hábitos que están expuestos de menos a más en
distintas áreas:
¿Cómo se enseña?
La mayoría de los niños funcionan muy bien con rutinas, luego lo ideal será conseguir
que esos hábitos se conviertan en rutinarios. Con una práctica adecuada, los hábitos se
adquieren de 20 a 30 días.
Hay que explicarle muy clarito y con pocas palabras qué es lo que queremos que
haga, dándole seguridad: "Desde hoy vas a ser un chico mayor y te vas a lavar la
cabeza tú solito, sé que lo vas a hacer muy bien".
Enseñadle realizándolo vosotros primero.
Pensad en voz alta mientras lo hacéis: "Primero me mojo bien la cabeza, después
me echo un poco de champú en la mano?"
Aseg aos de que comprende las instrucciones: pedidle que os la repita.
3ur
º Practicar
4º Supervisar
Y si no quiere
Area del autocuidado: Incluye todas las habilidades de adaptación relacionadas con la
autonomía personal en el aseo, comida, higiene y aspecto físico. Desde muy pequeños
debemos facilitar que los niños se vistan, elijan ropa, coman solos y tengan interés por ir
bien arreglados, peinados y aseados. Aunque al principio no sepan hacerlo muy bien (les
pondremos un babero bien grande para que coman a gusto y nosotros tranquilos con las
manchas, les dejaremos los coleteros para que elijan el que más les guste y que pegue con
su ropita...), poco a poco, irán avanzando en destreza y habilidad.