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Tema 11 2024 Derecho Civil IV

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Freddy S.

Villegas Jiménez
Tema 11
NULIDAD Y ANULABILIDAD DE LOS CONTRATOS
1.- Validez y eficacia de los contratos
1.1. Invalidez e ineficacia de los contratos
2.- La nulidad. - Concepto y caracteres
2.1. Imprescriptibilidad
2.2. Insanabilidad
2.3. Es de orden público
Nulidades textuales y virtuales
3.- La anulabilidad. - Concepto y Caracteres
3.1. Prescriptibilidad
3.2. Confirmable
3.3. Acción personal
Casos de anulabilidad del contrato
4.- La confirmación

1.- VALIDEZ Y EFICACIA DE LOS CONTRATOS


Dentro la contratación, cuando se dan todos los elementos constitutivos para la formación del
negocio jurídico, estamos en presencia de un contrato perfecto, es decir frente a un contrato válido,
pero, para que éste contrato sea eficaz es necesario que no se encuentre sometido a ninguna
modalidad y que sea idóneo para producir sus efectos normales.

1.1. Invalidez e ineficacia de los contratos. - La inobservancia de las normas legales o la


infracción de sus preceptos contrariando el orden público, o los elementos esenciales de la
contratación, trae aparejada la idea de invalidez e ineficacia del acto celebrado en semejantes
condiciones. A la validez y eficacia del contrato se contraponen situaciones negativas que originan
la invalidez e ineficacia de los mismos.

El contrato es imperfecto cuando carece de un elemento de validez, ya sea esencial o accidental


elevado por las partes a elemento esencial, o cuando tales elementos están afectados por vicios, o
cuando el contrato es ilícito o in oponible. Si tal cosa acontece, el contrato se invalida; en cambio
cuando los contratos se encuentran sujetos a una modalidad, por ejemplo, a la condición suspensiva,
el contrato siendo válido es ineficaz.

La invalidez de un contrato puede deberse a causales coetáneas al surgimiento del mismo o a


hechos sobrevivientes que llevan al contrato a la nulidad y a la rescindibilidad en el primer caso y a
su resolución en el segundo caso. La nulidad, la anulabilidad y la rescindibilidad requieren que las
causas de invalidez surjan con el nacimiento del contrato. La resolución del contrato obedece, como
ya vimos en el tema de los efectos especiales de los contratos bilaterales, a causas que surgen en
el desarrollo del contrato.

2.- LA NULIDAD. - CONCEPTO Y CARACTERES


Se llama nulidad a la sanción que impone el legislador a los contratos que no contienen los
elementos esenciales de formación o los elementos accidentales elevados por las partes a la
categoría de esenciales, así como para aquellos cuyo consentimiento está viciado, hay incapacidad
en los contratantes o es ilícita la causa. El Código Civil Boliviano adopta la teoría bipartita de las
nulidades comprendiendo la nulidad propiamente dicha y la anulabilidad.

En la nulidad, la causa es la violación de un precepto legal, es decir un acto ilícito. En la anulabilidad,


la causa es un vicio interno como la incapacidad, los vicios del consentimiento, etc.

La nulidad produce la invalidez absoluta del acto y sus caracteres son los siguientes:
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2.1. Imprescriptibilidad. - No solo como acción sino también como excepción, o sea que es
perpetua.

2.2. Insanabilidad. - O sea que no admite la confirmación sino en casos muy excepcionales que se
dan en materia sucesoria.

2.3. Es de orden público. - Porque se da en defensa de la sociedad; por consiguiente, el juez tiene
la posibilidad de intentar la acción de oficio o puede ser invocada por todo aquel que tenga interés
jurídico.

Nulidades textuales y virtuales. - Las nulidades textuales son aquellas que están señaladas
específicamente en la ley. El art. 549 del Código Civil en sus cuatro incisos, se refiere a las nulidades
textuales al disponer:

El contrato es nulo:
1. Por falta de objeto o la forma prevista por ley como requisito de validez
2. Por faltar en el objeto del contrato los requisitos señalados por la ley, que son, cuando se
refieren a dar, que la cosa exista, que esté dentro del comercio humano, que sea determinado
o determinable y que el que transfiere sea el propietario, cuando se refiere a hacer o no
hacer, el objeto debe ser lícito, personal al deudor y que sea posible jurídica y materialmente.
3. Por ilicitud de la causa o por ilicitud del motivo que impulsó a las partes a celebrar el contrato.
4. Por error esencial que recae sobre la naturaleza o sobre el objeto del contrato.

Las nulidades virtuales son aquellas que provienen de la violación de normas imperativas contenidas
en leyes expresas y terminantes. A ellas se refiere el inciso 5) del artículo 549 del Código Civil
cuando dice: “En los demás casos determinados por ley”

3.- LA ANULABILIDAD. - CONCEPTO Y CARACTERES


La anulabilidad produce un grado de invalidez menos grave que la nulidad. La anulabilidad sirve
para impugnar un acto o contrato viciado, con el objeto de eliminar el daño que deriva de él para
quien fuese obligado a respetar el negocio. El contrato expuesto a la anulabilidad por éste, cuando
prospera la acción, cae con efecto retroactivo.

La anulabilidad produce la invalidez relativa del acto y sus caracteres son los siguientes:
3.1. Prescriptibilidad. - La anulabilidad prescribe como acción a los cinco años, pero no así la
excepción que es imprescriptible y que puede oponerse en cualquier momento. El cómputo de
tiempo de la prescripción se opera en el caso de incapacidad desde el momento en que cae en la
incapacidad; en el error y el dolo, cuando éstos se descubren; y en el caso de la violencia, desde el
momento en que ella cesa.

3.2. Confirmable. - El vicio es susceptible de ser subsanado mediante la confirmación por parte del
sujeto a quién el legislador ha querido proteger con tal acción.

3.3. Acción personal. - La anulabilidad se da en defensa de las personas expresamente señaladas


por la ley, de ahí que solo éstas o sus representantes legales son las únicas que pueden hacer uso
de la acción.

Casos de anulabilidad del contrato. - El artículo 554 del Código Civil señala los siguientes casos
de anulabilidad del contrato:

1. Por falta de consentimiento para su formación. Cuidadosamente considerado éste caso,


se ve que encierra una grave e inexplicable importancia. Según nuestra legislación, el
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contrato se forma (existe) en cuanto han concurrido, como expresión del consentimiento la
oferta y la aceptación para constituir el acuerdo. En otras palabras, si falta el consentimiento
de una de las partes, porque el solicitado no da su aceptación o porque el oferente retira la
oferta, el contrato no se forma, esto es, no cobra existencia al tenor del artículo 455 del
Código Civil. Por tanto, ¿cómo puede ser anulado un acto inexistente, un contrato que no se
ha formado? Lo prudente y correcto era hacer figurar la falta de consentimiento como causal
de nulidad.

2. Por incapacidad de uno de los contratantes. En éste caso, la persona capaz no puede
reclamar la incapacidad del prohibido con quién ha contratado. Los incapaces están
protegidos por el legislador, por tanto, solo ellos pueden intentar la acción de anulabilidad.

3. Por qué una de las partes, aún sin haber sido declarado interdicto, era incapaz de
querer o entender en el momento de celebrarse el contrato, siempre que resulte mala
fe en la otra parte, apreciada por el perjuicio que se ocasiona a la primera, según la
naturaleza del acto o por otra circunstancia. Se refiere éste inciso a la incapacidad natural
de obrar, sujetándolo al caso de mala fe con que debe obrar la otra parte y cuya apreciación
se mide en el perjuicio al incapaz.

4. Por violencia, dolo o error sustancial sobre la materia o sobre las cualidades de la
cosa. Aquí el legislador se refiere a la violencia moral, porque la violencia física hace que no
nazca el consentimiento sancionando al contrato con nulidad absoluta. Nuestra legislación,
lamentablemente, no distingue estas situaciones jurídicas, por lo que corresponderá a la
jurisprudencia clarificar éstas omisiones.

5. Por error sustancia sobre la identidad o las cualidades de la persona cuando ellas
hayan sido la razón o motivo principal para la celebración el contrato. El error sobre las
cualidades de la persona excepcionalmente es trascendente en los contratos intuito
personae, donde la celebración jurídica gira alrededor de la persona; el error en su identidad
anula el contrato.

6. En los demás casos determinados por ley. Se refiere a las causales virtuales de
anulabilidad.

4.- LA CONFIRMACIÓN
Antes de la prescripción, la persona que goza de la acción de anulabilidad puede renunciar a ella
mediante la confirmación. El derecho de confirmación es un atributo máximo de la autonomía de la
voluntad del individuo en la regulación de su vida jurídica de orden privado.

Para la confirmación se precisan de determinados requisitos: el instrumento de confirmación debe


contener la sustancia de la obligación principal, las causas anulables que le afectan y el deseo de
reparar el vicio. La confirmación hace perder la acción de nulidad dejando firme la obligación
principal.

La confirmación puede ser expresa o tácita. Es expresa, cuando se la hace en un instrumento con
los requisitos indicados anteriormente. La confirmación es tácita cuando sin renuncia expresa se
demuestra la intención de ejecutar la obligación voluntariamente. Ésta demostración la encontramos
en la ejecución parcial o total de la obligación.

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