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“Perú, país de todas las sangres”

¿Qué es lo que nos hace diferentes? ¿El color de piel? ¿La forma de vestir?
¿La forma de expresarse? ¿La educación? ¿El estrato social? Pues sí, todas
las condiciones y atributos esenciales de cada persona, la hacen única e
inigualable, y es lo bello de la realidad, ya que un rompecabezas las mismas
piezas, simplemente no se puede armar. Bajo este concepto de que todos
somos diferentes, debe primar los conceptos de "persona" y "ser humano",
en los cuales todos somos iguales ante el estado. ¿Si esto es así? ¿Por qué
aún existe la discriminación? La respuesta simple es que muchas personas
no soportan convivir con personas ajenas a sus costumbres, personas de
otra vida, vida tal vez más difícil que las suyas. Para tener una mejor noción
del tema, podemos analizar un poco la obra de José María Arguedas, y
darnos cuenta que el clasismo de hace años, persiste en la actualidad.
Cuando leí su obra de “todas las sangres”, me llamo mucho la atención y me
intereso por como implementaba palabras y cantos en quechua, pero para mí
la verdad fue difícil de comprender algunos capítulos, además que fue su
obra más compleja.
Arguedas fue un escritor muy criticado por su literatura que aborda la
discriminación, racismo y violencia que vivían los indígenas. Él pudo vivir en
los dos mundos (el indígena y el blanco) donde en ninguno se sintió
bienvenido, por eso él pudo entender en verdad el sentimiento indígena; tal y
como dijo María Rostworowski “Él entendió el mundo andino, su profundidad,
su sentimiento, su corazón” [1], esto se debe a que desde pequeño fue muy
cercano a sus criados que eran indígenas, ya que su padre siempre viajaba y
no estaba presente. Aprendió muchas cosas de ellos, sus costumbres, sus
ideas, sus pensamientos… su cultura.

Como señaló el ex ministro de cultura Luis Peirano Falconí “Todas las


sangres es quizá uno de los libros más importantes y polémicos de la
segunda mitad del siglo pasado” [2]. Críticos señalan que esta obra en
verdad no representa la realidad del Perú y que solo es una historia ficticia,
mientras que otros señalan lo contrario entrando así a un debate que se ve
hasta en la actualidad. Viendo las dos posiciones en una controversia, a mí al
parecer esta obra refleja la realidad del Perú en termino socio-cultural, en los
que interviene el clasismo y la diferencia del poder.

Este libro nos narra en tercera persona la vida y la situación de las dos razas
(indios y los ricos), se ve cómo los ricos, en especial la Familia Aragón de
Peralta fue muy infeliz, aun siendo la familia más poderosa del pueblo,
dejándose llevar por cosas superficiales y el poder; los hermanos se
odiaban, el padre se suicidó y la madre se volvió alcohólica por la situación
familiar. Por otra parte, se ve que los indios que sufrían maltrato, eran más
unidos y eso se refleja más cuando todos juntos luchaban por su pueblo, en
contra de la mina que les iba a quitar todas sus tierras, pero ellos no se iban
a ir sin luchar antes por su causa en común “…Yo estoy dispuesto a morir
antes que entregar lo poco que tengo. ¡Ni esclavo de la mina ni fugitivo de
mi pueblo! ¿Qué vale San Pedro sin la Esmeralda?”, esto es lo que dijo un
vecino del pueblo que, aunque eran pocos iban a pelear hasta morir. Ese
sentir, se contrasta con Don Fermín, que es el dueño de la mina “Aparcora”,
pues solo pensaba en él, traicionando a su hermano y a todo el pueblo
quitándoles todas sus tierras para el funcionamiento de sus minas. Para mí,
este personaje representa la corrupción, egoísmo y clasismo del Perú, los
intereses y ambiciones personales que no apuntan por el bien del país. Por
ello los indígenas serian un ejemplo de cómo debería actuar un buen
ciudadano, tratando a todos con respeto y cortesía, independencia de sus
diferencias de opinión, cultura, religión o cualquier otro aspecto, practicando
y fortaleciendo nuestros valores de la empatía y comprensión, así mismo
preocupándonos por el bien común del país, cosa que deberíamos hacer
todos los peruanos.

La personalidad de José María Arguedas se refleja en el protagonista


Rendón Willka, en el aspecto que defendía a los indígenas. Pero sí hay que
recalcar que Rendón era un aculturado y Arguedas no… “Yo no soy un
aculturado, yo soy un peruano orgullosamente, con un demonio feliz, que
habla en cristiano y en indio, en español y en quechua” [3]. Por otra parte,
Rendón antes de que se fuera a Lima, sufría de discriminación en su
colegio; fue víctima de humillaciones y maltrato ya sea físico o psicológico al
igual que Arguedas. A pesar que él no se haya sentido bienvenido en
ninguno de los dos mundos, el siempre defendió a los indígenas, como
Rendón, él no tenía la obligación de volver a su pueblo, pero entendía el
sufrimiento que vivían sus hermanos (los indios) y volvió para liberarlos;
hasta que perdió la vida por ellos. Arguedas en otras obras también se
refleja en personajes como en “Los ríos profundos” donde Arguedas es
Ernesto, que relata cuando Arguedas viajaba mucho con su padre por
trabajo, de igual manera en el “Sexto” donde Arguedas fue Gabriel, que nos
cuenta la terrible experiencia cuando fue apresado, viviendo todo tipo de
injusticias y muertes.

En esta obra se mira mucho la problemática de la desigualdad ya que los


jefes y los hacendados tenían el poder por tener mucha plata, miraban a los
indios como animales que los explotaban sin compasión; para ellos el
maltrato era como un juego y algo normal, esto se ve más en Don Bruno
quien era dueño de una hacienda “La providencia”, lugar donde tenía a
todos los indios explotados, pero él a diferencia de los demás personajes
tuvo un cambio como persona ya que, de ser un violador y un maltratador,
empieza a hacer el bien ya que decidió seguir el camino del cristianismo y
llego a enamorarse de una mestiza, siendo este un personaje interesante.
Por otra parte, los indios miraban a sus dueños como dioses, cómo a los
hijos de Dios, por eso ellos les rezaban y les pedían perdón de rodillas para
que nos los castigaran. Igualmente, en los colegios del pueblo a los indios
los discriminaban y hasta los golpeaban por ser indígenas, es por eso que
Rendon Willka se fue de su pueblo cuando era pequeño. Este tipo de
maltrato se mira hasta en la actualidad, los alumnos no tienen respeto,
valores y excluyen a las personas por sus creencias, su religión, su forma de
hablar o por su apariencia, con esto podemos ver que José María Arguedas
quería que nos demos cuenta de lo duro que era para los indios vivir con
todo ese maltrato y da más pena porque eso al parecer no ha cambiado
mucho.

Otro personaje interesante de analizar es Asunta de la Torre hija del alcalde


quien simboliza la virtud y la pureza porque Arguedas la presento como una
mujer independiente que no necesita de un hombre para ser feliz a pesar que
tenía muchos pretendientes “… ¿Acaso me conoce? Alguien le ha guiado
mal. Ingeniero somos honradas todavía. Hay un altar en nuestro corazón.
Hágalo saber a sus empleados…”, así como el ingeniero Cabrejos la
buscaba, igual lo hacía Don Bruno, pero ella siempre los rechazaba teniendo
en alto su dignidad. Yo creo que el autor puso estas escenas como una
representación de la discriminación y machismo que había en ese entonces
en el Perú, que solo las mantenían en la casa haciéndolas menos, pero ella
era todo lo contrario representando el poder que puede tener la mujer
haciéndose respetar sobre todas las cosas.

En la actualidad, aunque muchas personas digan que la discriminación se


acabó porque hay derechos, eso no es verdad, porque sigue persistiendo el
mismo problema, “los dos mundos”. Como, por ejemplo, una situación que
evidencia eso fueron las elecciones presidenciales del 2021 en la que
tuvimos la difícil tarea de decidir entre dos nefastos candidatos, mientras uno
pretendía “ser del pueblo” la otra parte representaba el poder de los medios;
esto hizo que los peruanos obtén por un bando, ocasionando una división en
el país. Ambos bandos despreciaban a sus rivales por su forma de pensar,

manifestando y sacando a flote el odio y resentimiento que el peruano tiene


ante alguien que piensa distinto, cómo esta situación hay muchas otras pero
que ahora no le toman importancia y lo dejan pasar. José María Arguedas
define nuestro país como “Todos somos indígenas del otro, excepto aquellos
que tienen poder” [4], esta discriminación está haciendo que nuestros
orígenes poco a poco desaparezcan como el quechua ya que las personas
que hablan quechua obligan a sus hijos a aprender el español para que
puedan salir adelante teniendo más oportunidades dejando en el olvido su
lengua materna.

Esta obra nos presenta uno de los problemas sociales que tiene el Perú,
haciéndonos reflexionar y entender la realidad de un Perú envuelto en el
clasismo y la discriminación, la existencia pasada que no es ajena a nuestra
actualidad. Así podemos llegar a la conclusión que esta obra, como las
demás de José María Arguedas son una ventana a la compleja realidad del
Perú. Específicamente en lo que respecta a la interacción entre las culturas
indígenas y la sociedad dominante. A parte que, con los personajes de las
diferentes obras, nos reflejan a nosotros mismos en la sociedad actual.
1. https://www.youtube.com/watch?v=ZB6_XUJ3ifw

2. https://tvrobles.lamula.pe/2015/03/21/todas-las-sangres/tvrobles/

3. http://blog.pucp.edu.pe/blog/willaqanti/wp-
content/uploads/sites/1365/2021/01/No-soy-un-
aculturado.pdf
4. https://ejemplius.com/muestras-de-ensayos/arguedas-y-su-rechazo-a-
la- discriminacion-en-el-peru/

Seudónimo:YITAS

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