Tema 4
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Tema 4
Los primeros pobladores del continente americano son descendientes de inmigrantes de Asia que
cruzaron el estrecho de Bering, de acuerdo con una de las teorías más aceptadas sobre el origen
del poblamiento de América. Eran hombres con un desarrollo cultural incipiente, nómada que se
desplazaban en pequeños grupos buscando alimentos y que practicaban la caza de animales y la
recolección de vegetales. Para América del Sur, los últimos estudios sugieren que las primeras
ocupaciones humanas tienen una antigüedad de 13 mil años (Monte Verde, Chile). Las evidencias
encontradas en el caso de la sierra y la costa de los Andes centrales del Perú no muestran que su
ocupación se haya hecho de manera simultánea. Entre la llegada de los primeros cazadores-
recolectores a nuestro territorio y el inicio de las altas culturas transcurrieron aproximadamente
10 mil años.
El hombre primitivo del antiguo Perú se asentó en el periodo geológico cuaternario (pleistoceno
tardío), en plenitud de sus condiciones físicas y con una cultura propia del Paleolítico Superior.
Hombre primitivo del Perú: Hombre de Pacaicasa, Hombre de Chivateros, Hombre de Toquepala,
Hombre de Lauricocha, Hombre de Paiján, Hombre de Guitarrero, Hombre de Paracas, Hombre de
Jayhuamachay, Hombre de Piquimachay, Hombre de Cabeza Larga, Hombre de Tablada de Lurín,
Hombre de Cerro Paloma, Hombre de Huaca Prieta, Hombre de Kotosh, Hombre de las Aldas,
entre otros
Los primeros indicios de población en el Perú llegaron del continente asiático. De acuerdo a una
de las teorías más aceptadas, migraciones atravesaron el Estrecho de Bering para ingresar a
Norteamérica y posteriormente trasladarse a Sudamérica, hasta asentarse en lo que son hoy
tierras peruanas.
Estos llegaron hace aproximadamente 20,000 años a.C., siendo nómades que practicaban la caza y
la recolección de alimentos. La abundante flora y fauna que encontraron en estas tierras fue
determinante para que puedan desarrollar civilizaciones, dejando importantes vestigios que hoy
en día dan información sobre su origen.
Los primeros pobladores llegaron al Perú hace 20.000 años. Trajeron instrumentos de piedra y
sólo sabían cazar y recolectar frutas. Algunos de ellos se asentaron en Paccaicasa (Ayacucho). Los
restos del peruano más antiguo (7.000 años) lo describen de cara ancha, cabeza alargada y de una
estatura de 1,60 m. Los primeros peruanos han dejado muestras de su arte rupestre en Toquepala
(Tacna, 7.600 a.C.) y de su vivienda en Chilca (Lima, 5.800 a.C.). El proceso de domesticar plantas
culminó con la agricultura y la construcción de aldeas y centros públicos ceremoniales. Al
integrarse las culturas regionales, aparecieron técnicas nuevas como la textilería, metalurgia y la
alfarería, dando lugar al nacimiento de las altas culturas.
Hace 11 mil años el hombre ya había ocupado gran parte de los Andes centrales. De esta época
datan los sitios arqueológicos hallados entre el Callejón de Huaylas y la cuenca del Titicaca en la
sierra, y entre Piura y Moquegua en la costa. En los últimos años también se han encontrado
restos arqueológicos en los actuales departamentos de Cajamarca y San Martín. La temprana
aparición de cultivos y el rápido desarrollo cultural sugieren que se trataba de hombres con un
amplio bagaje cultural. Fabricaban utensilios, tenían conocimientos y técnicas de caza
especializada y controlaban el uso de los recursos vegetales.
Las tradiciones. Los grupos humanos de esta época se adaptaron a determinadas características
del medio a través de conocimientos que fueron transmitidos por generaciones, que los
historiadores llamaron tradiciones. En el área andina central se distinguen dos grandes
tradiciones: la serrana y la costeña.
La tradición costeña. En la tradición costeña la economía se basó en la explotación del mar, valles
y lomas. Las evidencias muestran que la dieta se componía de peces, pequeños roedores,
lagartijas (cañanes), aves y ocasionalmente cérvidos y zorrillos. En la costa se han reconocido dos
subtradiciones: La Paiján, que se extiende desde Piura hasta Ica; y una tradición quizá
emparentada con las industrias líticas costeñas ecuatorianas, que se ubicarían desde el macizo
illescas hacia el norte.
Las armas y utensilios, al igual que en la tradición serrana se elaboraron puntas de proyectil, pero
estas fueron más finas. Su forma es triangular con bordes rectos o ligeramente cóncavos.
Presentan un pedúnculo de bordes rectos en la base. La ausencia de raspadores indica que la caza
de grandes animales no fue una actividad importante o no existió. Para raspar y cortar,
posiblemente utilizaron un utensilio trabajado por una sola cara, con forma foliácea; es decir, de
hoja. Los utensilios más abundantes son los denticulados.
Las viviendas abundaban en los sitios arqueológicos al aire libre, los restos de las ocupaciones son
visibles y es posible estudiarlos en el mismo lugar. Los campamentos variaban en sus extensiones.
Los indicios sugieren que se protegían de los fuertes vientos alisios del sur con una especie de
paravientos semicirculares que construyeron con material perecedero. Dentro de los semicirculos
instalaban fogones para calentarse y prepararse sus alimentos. Usaron piedras para calentar
líquidos en envases hechos con calabazas o cuero. La presencia de cuchillos, raspadores y otros
artefactos indica que se realizan actividades ligadas a la preparación de alimentos.
Principales poblados
Lauricocha. Se trata de cuevas y yacimientos al aire libre, situados a unos 4 mil metros sobre el
nivel del mar, en las nacientes del río Marañón, en Huánuco. Los restos óseos más antiguos de
Lauricocha están fechados entre el año 6000 y 7000 a.C.
Fases. En la primera se hallaron pocas puntas foliáceas y cuchillos bifaciales de tipo hoja de sauce,
junto con otras de forma triangular y de base recta, abundantes cuchillos bifaciales y raspadores.
La tercera se caracteriza por utensilios más pequeños. En las fases tardías hubo preferencias por
el consumo de camélidos, mientras que se eligió a los cérvidos en las fases tempranas.
Entierros. Se hallaron once entierros en las cuevas. Cuatro son de adultos enterrados en posición
lateral flexionada. Augusto Cardich interpretó algunos artefactos líticos y huesos quemados como
ofrendas asociadas a niños. Se sabe que eran individuos de cabeza alargada y cara medianamente
ancha.
Guitarrero. Es una cueva ubicada a unos pocos kilómetros al sur de Yungay, a 2580 metros de
altitud. Alrededor del año 9700 a.C. el hombre llegó al Callejón de Huaylas. En esta época los
glaciares se habían extendido, por lo que no se podía vivir en las zonas altas durante largos
periodos. En estas zonas se descubrieron algunos lugares vinculados a la cacería, pero los
hombres buscaron zonas más cálidas para complementar el ciclo anual de subsistencia.
Economía. Los hombres vivían en la cueva de Guitarrero solo una parte del año, durante la cual
recolectaban plantas de los alrededores, según lo demuestran los restos botánicos hallados en la
cueva. Al finalizar la estación lluviosa, el grupo se desplazaba a los campos altos, donde realizaban
otras actividades, como la caza. Este tipo de economía se mantuvo desde los niveles más
tempranos de la cueva hasta los fechados en el 4000 a.C.
Alimentación. Además de los vegetales, la dieta de quienes habitaron la cueva incluyó camélidos
y cérvidos, así como una variedad de pequeños animales, como la vizcacha, el zorro, el conejo y
aves.
Telarmachay. En las alturas de San Pedro de Cajas, a más de 4400 metros de altitud, se
encuentran una pequeña cueva conocida como Telarmachay. Se estima que los primeros
habitantes de esta zona llegaron 7 mil años a.C., cuando se retiraron los hielos y aumentaron las
lluvias. Los artefactos de piedra hallados en esta cueva son abundantes y muy diversos.
Durante el año 8000 a.C., grupos de hombres asentados en los valles interandinos iniciaron el
proceso de domesticación de las plantas. Este proceso culminará con la agricultura y la
construcción de las primeras aldeas y centros públicos ceremoniales, aproximadamente 2500 a.C.
Cerca al año 6000 a.C. se inició la domesticación de camélidos y cuyes. Esto llevó a la constitución
de las primeras sociedades pastoriles en el cuarto milenio antes de Cristo. Para el hombre de la
sierra, la agricultura y el pastoreo son actividades complementarias a su modo de vida.
También cerca al año 4000 a.C., los valles costeños fueron ocupados por horticultores que
aprovechaban las inundaciones de estas zonas bajas y llanas para cultivar calabazas, frejoles y
maíz.
A la introducción del cultivo de algodón, a mediados del año 3000 a.C., siguió la aparición de
redes y anzuelos, los que mejoró las actividades en el mar. La pesca era ya la fuente más
importante de proteínas; pero con el uso de los anzuelos, redes y probablemente embarcaciones,
esta labor se intensificó.
Años Alimento
El maíz, palto, maní, pacae, yuca, guayabo, ají, dos especies de zapallo,
6000 – 4000 a.C.
lúcuma, algodón y la chira
A partir del año 6000 o 7000 a.C., el hombre es marcadamente dependiente de los camélidos. La
construcción de corrales y la formación de las primeras sociedades de pastores debió de ocurrir a
comienzos del año 4000 a.C. Por esta fecha el cuy y el pato debieron ser también domesticados.
La domesticación de todos estos elementos naturales, según cambios climáticos en los Andes,
hacia el año 7000 a.C. Esto ocurrió especialmente en la sierra norte (cueva Guitarrero), el primer
sitio de América donde se domesticó el maíz.
Para que esto fuese posible, los primeros habitantes andinos variaron el cauce del agua, para que
llegara a tierras no cultivables. Los antiguos pobladores realizaron estos cambios preservando el
entorno natural.
Como los demuestran los hallazgos de Caral, pobladores de neolítico asentados en zonas costeras
lograron dominar el mar y obtener de él gran cantidad y variedad de productos alimenticios.
TAREA:
Luego de haber observado el video “La odisea de la especie” (buscar en internet) responda: