Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

La Construccion de Dos Bajos de Violin

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 6

LA CONSTRUCCIÓN DE DOS BAJOS DE VIOLÍN

Dirección: Miguel Zenker


Construcción: Pedro Cisneros y Hugo Mendoza
Escuela Nacional de Música, UNAM

Introducción
En la Escuela Nacional de Música, la Mtra. Rocío Orozco solicitó la
construcción de un bajo de violín. Se decidió construir dos de estos instrumentos, uno
con maderas tradicionales y otro con maderas nacionales y comparar la respuesta sonora
de cada uno de los dos instrumentos. Ambos fueron construidos con la misma horma, es
decir, se usó el mismo modelo para reducir variables. Las razones para la construcción
de instrumentos de este tipo, son las siguientes:
• El término “bajo de violín” es uno de los términos usados desde el Renacimiento
hasta ya avanzado el Barroco para denominar a la voz grave de los instrumentos
de cuerda de brazo, antecesor del violoncello actual. (Ver artículo adjunto)
• Estos instrumentos, aún sin tener ejemplares sobrevivientes, es de suponerse que
se usaron durante la Colonia, de acuerdo a las expresiones encontradas en los
textos de los cronistas durante el virreinato, principalmente durante el siglo XVI,
pues de acuerdo a los cronistas, en el primer siglo de la Colonia se construyeron
“todo tipo de instrumentos y de tan buena calidad, que no era menester traerlos
más de la Península”.
• Los materiales usados para la construcción de los instrumentos coloniales fueron
de origen local: no se tiene evidencias de que fueran importadas ciertas especies
maderables para la construcción de estos instrumentos.

Desarrollado de la viola de brazo, el bajo de violín es el instrumento que ocupa,


de no tener un contrabajo, la voz baja en la orquesta o música de cámara. Ramón
Andrés menciona:
“Su denominación [del violoncello] no es otra cosa que el diminutivo de violone, en el sentido
que dicho término adquirió en el siglo XVI, procedente del modelo de contrabajo de la familia de
la viola da gamba y que, por extensión y de forma genérica, se dio al contrabajo de los violines.
En Italia durante el siglo XVI hallamos diversas designaciones, como la acuñada por Ludovico
Zacconi (1592), que le da el nombre de basso di viola da braccio, pues en definitiva el
violoncello fue una consecuencia del desarrollo de la familia instrumental de la viola de brazo
hacia la región grave. Inspirándose en esa misma terminología, Michael Praetorious (1618) lo
llamará Bass Geig de braccio. Por ello, al hablarnos de las violas de brazo o vihuelas bastardas,
Pietro Cerone (1613) dice que los modelos más bajos se denominan violoncino (tenor) y violon
(bajo). Athanasius Kircher (1650) le aplica las voces de violone y chelys mayor, en
contraposición al violín o chelys minor. La asociación de su nombre con la ejecución
desarrollada en una tesitura grave hizo que este pequeño bajo fuese conocido en italiano con
otros apelativos, como basseto, basseto di mano, violino basso, basso di violino, etc. Ello hará
que estas locuciones trasciendan a otras lenguas. Mientras el compositor Philibert Jambe de Fer
(c. 1520-1566) mencionaba con anterioridad en su Épitome musical des tons, sons et accords ès
vois humaines, fleustes d’alleman, fleustes à neuf trous, violes & violons (1556) un <bas de
violon>, en el siglo siguiente Marin Mersenne (1636) usará la expresión <basse de violon>, la
misma que Titon du Tillet en la Parnasse françois (1732), si bien en tiempos de este autor, […]
tuvo una aplicación específica. Todavía en el siglo XVIII, en el ámbito germánico se llamaba al
violoncello habitualmente Bassette, Bassel y Bassetl, todos ellos diminutivos de Bass. Leopold
Mozart (1719-1787) confirma en Versuch einer gründlichen Violinschule (1756) que los
nombres Bassel y Bassette eran sinónimos de violoncello.

1
En Italia, el término violoncello apareció por primera vez en Giulio Cesare Arresti (1617-c.
1692), en el op. 4 de sus Doce Sonate a due, a tre (1665), editadas por Magni en Venecia.”

El bajo de violín obtuvo varios nombres, entre ellos el de violone en Italia,


violón en España.
A lo largo del siglo XVII se desarrollan varios géneros musicales, entre ellos la
sonata, cuya base armónica se ubica en el bajo continuo, voz que fue representada tanto
por un teclado o instrumento armónico como la guitarra o tiorba, y por un instrumento
melódico como el bajoncillo (posteriormente el fagot) o el bajo de violín. A medida que
se desarrolla la sonata y el concerto, se añaden más instrumentos solistas, entre ellos el
bajo de violín mismo que, por sus dimensiones, siempre resultó más difícil, y por lo
tanto más lento para tocar pasajes rápidos, por lo que se comenzó a construir un
instrumento de menor tamaño que el violone, al que se le dio la terminación –ino o ello,
resultando violoncino y posteriormente violoncello (ver artículo adjunto).
El violone o bajo de violín siguió en uso hasta pasada la mitad del siglo XVIII,
decayendo su uso a medida que la sonata fue siendo sustituida por nuevos géneros
musicales como el cuarteto clásico, la sinfonía y el concierto clásico de Haydn y
posteriormente Mozart y Beethoven por nombrar los más célebres compositores.
Los primeros bajos de violín los conocemos por representaciones en
iconografías desde 1537 así como por instrumentos que se han preservado, por ejemplo
el violoncello “El Rey” de Andrea Amati, datado alrededor de 1560/70, si no es que
antes, en 1538, actualmente en el Museo Nacional de Música en Vermillion, Dakota del
Sur, USA. (Este instrumento tiene huellas que deja ver que el instrumemto,
supuestamente construido en los años 30 del siglo XVI, inicialmente tuvo sólo tres
cuerdas. Ver artículo adjunto; ver página del Museo Nacional de Música en Vermillion).

Clavijero del violoncelo (bajo de violín) de Andrea Amati El Rey, inicialmente de 1538, de
acuerdo a la página del National Music Museum de Vermillion, USA (ver página), con tres perforaciones
inciciales para las clavijas: la primera junto a la clavija la, la segunda junto a la clavija sol, la tercera
arriba de la clavija para la cuerda re, obturadas para perforar las cuatro nuevas actuales, posiblemente con
las que se entregó el instrumento, con otros más, para el Rey de Francia alrededor de 1570.

La longitud de la caja de resonancia del bajo de violín osciló alrededor de los


80cm, siendo ésta más veces mayor que menor a esa medida. Con el descubrimiento del
entorchado de las cuerdas (Monical, 1989:3) principalmente las graves, las dimensiones
se redujeron a los 75 cm establecidas en los instrumentos que construyó Stradivarius
(Grove, 1980), dimensiones que socialmente se aceptaron como las más aptas para

2
cumplir con los requerimientos sonoros y ergonómicos de la época hasta la actualidad.
Posteriormente, gran número de bajos de violín, entre ellos el ya mencionado
“violoncello” El Rey de Andrea Amati, fueron reducidos de tamaño para acoplarlos a
los requrimientos modernos de la época, intervención que se realizó desde el siglo
XVIII hasta muy avanzado el siglo XIX.

El prototipo
Para el prototipo de los bajos de violín construidos en la Escuela Nacional de
Música, nos basamos en un instrumento existente en la Catedral de Freiberg, en
Alemania. En esta Catedral se bajaron en el año de 2002, para trabajos de conservación
e investigación, 30 instrumentos con los ángeles que los acompañaban, ubicados sobre
la cornisa principal de la capilla mortuoria en la Catedral de Freiberg. De estos 30
instrumentos, 21 son auténticos y 9 son imitaciones. Las imitaciones están basadas,
aparentemente, en instrumentos originales y se supone que fueron realizadas por
artesanos con conocimiento en los instrumentos musicales respectivos, posiblemente
músicos que tocaron los instrumentos que reprodujeron (Fontana, Heller, &
Lieberwirth, 2004).

Ángel con el bajo de violín prototipo.

Entre los auténticos se encuentran cinco instrumentos de la familia del violín:


dos violines (uno grande y otro pequeño), un alto/tenor, y dos bajos, también de
tamaños distintos.

Ángel con violín soprano grande. Ángel con violín soprano chico.

3
Sólo el violín tenor tiene en el interior de su caja una etiqueta con el nombre de
Paul Klemm (1552-1623) de Randeck: “Baul Klemmes / Zu ran deck G”. La fecha de
su construcción es incierta. Por ello, tomando en cuenta la terminación e instalación del
conjunto, realizadas el año de 1594, se fija la fecha como “anterior a 1594”.
Los primeros resultados de este trabajo, que incluyó a personal de más de 20
instituciones, coordinado por la Dra. Eszter Fontana, Directora del Museo de
Instrumentos Musicales de la Universidad de Leipzig, fueron publicados en 2004 por la
propia Dra. Fontana, Veit Heller y Steffen Lieberwirth. Este libro fue obsequiado a los
participantes de la Reunión Anual del Comité de Colecciones y Museos de Instrumentos
Musicales, CIMCIM, del Consejo Internacional de Museos, ICOM, tras la visita a las
instalaciones del Museo de Instrumentos de la Universidad de Leipzig, en 2005, donde
pudimos observar, con acceso físico y posibilidad de fotografiar sin flash los
instrumentos en estado posterior a su proceso de conservación.
A raíz de la solicitud de la construcción de estos instrumentos por la Mtra. Rocío
Orozco, decidí tomar los dos bajos de violín de esta colección de la Catedral de Freiberg
como prototipos.

La fundamentación
Siendo España, a lo largo de fines del Medievo y el primer siglo del
Renacimiento, la cuna de la formación de los instrumentos de cuerda frotada europeos,
las familias de la viola da gamba y la viola de brazo, el desarrollo posterior que
experimentaron los instrumentos de la familia de la viola de brazo en Italia no influyó
necesaria e inmediatamente a España. Esta aseveración lo demuestra la iconografía
Virreinal presente en nuestro país, actualmente la fuente principal de información, pues
actualmente no se tienen ejemplares de instrumentos de esa época ni en nuestro país, ni
en España.

Ángel con violín, Tepozotlán, Méx. La estructura morfológica es muy similar a la de los bajos de
violín alemanes. La tapa da la impresión de ser abovedada.

4
Bajo de violín, Tepozotlán, Méx. La estructura morfológica de la parte superior de la caja
armónica se asemeja a la de la parte superior de un corazón. Esto demuestra la gran variedad de formas
aplicadas a los instrumentos musicales en el siglo XVI y hasta principios del XVII. Las “efes” en este
instrumento son mucha más largas, proporcionalmente, al violín en la imagen anterior. La tapa da la
impresión de ser completamente plana. Las “esquinas” (al centro de la tapa, junto a las “efes”) son
puntiagudas.

Bajo de violín construido con maderas nacionales, Escuela Nacional de Música / UNAM.

Gaudenzio Ferrari, Catedral de Sarrono, Cúpula, 1535-36. Imagen más antigua conocida, con los
tres instrumentos de diferente registro: soprano, tenor y bajo. El violín está a la izquierda del eje vertical
central, parte superior, y sólo se ve el mango y parte del fondo y las costillas. La imagen da una impresión
de un fondo curveado (aumentar la imagen a 500% en sistema electrónico). La estructura morfológica es
similar a la de los instrumentos de la Catedral de Freiberg, y por lo tanto también a la de los bajos de
violín construidos. En la viola como en el bajo de violín, la parte superior de la tapa es más reducida,
proporcionalmente, que en los instrumentos aquí mostrados de la Colonia y en los alemanes de la
Catedral de Freiberg.

5
Los instrumentos presentes en la iconografía tienen un aspecto que se asemeja
más a los instrumentos de Europa del norte, región en la que se encuentra la Catedral de
Freiberg, en el ahora Estado de Sajonia en Alemania, que de los instrumentos italianos
de Andra Amati del siglo XVI. Sin embargo, la información adquirida in situ en Sajonia
y en el documento respectivo ya mencionado no ofrecía suficiente garantía para una
copia fiel de los originales. Es por ello que se decidió optar por una mezcla de modelo y
de diseño, tan típico en Europa a lo largo del siglo XVI y parte del XVII, con múltiples
y constantes cambios a lo largo de este período (Fontana, 2004:77). En este sentido, se
tomó la forma de la caja, mango, clavijero y cabeza de los instrumentos de Freiberg,
pero se realizó el labrado de las tapas con base en la técnica italiana, un elemento que se
conocía ya en la región de Sajonia (Fontana, 2004:82) y que se encuentra presente en
estos mismos instrumentos alemanes, aún cuando el aspecto final de los instrumentos
construidos no es el mismo que el de los originales.

Fuentes bibliográficas

Andrés, R. (1995). Diccionario de Instrumentos Musicales, de Píndaro a J. S. Bach.


Barcelona, España: Bibliograf.
Drescher, T. (2000). Giovanni Battista Vitali - "Sonatore di violone da brazzo",
Beobachtungen zum Problemkreis 'Violone' und 'Violoncello'. In V. J.
Stenkovics (Ed.), Geschichte, Bauweise und Spieltechnik der tiefen
Streichinstrumente, 64.
Fontana, E., Heller, V., & Lieberwirth, S. (2004). Wenn Engel Musizieren. (Stenkovics,
Ed.) Stenkovics.
Groves. (1980). Violoncello.
Monical, & Monical, W. (1989). Shapes of the Baroque: The historical development of
bowed stringed instruments. New York: The American Federation of Violin &
Bowmwkers.

También podría gustarte