7 - Caps. 3 y 4 Metodología de La Investigación para Estudiantes de Psicología - Olaz, Medrano. (2014)
7 - Caps. 3 y 4 Metodología de La Investigación para Estudiantes de Psicología - Olaz, Medrano. (2014)
7 - Caps. 3 y 4 Metodología de La Investigación para Estudiantes de Psicología - Olaz, Medrano. (2014)
Lectura y Redacción
de un Artículo Científico
Introducción
Quizás antes de preguntarnos “¿cómo escribir un artículo de
investigación?” podríamos preguntarnos “¿cómo leer un artículo
de investigación?”. Incluso, podríamos empezar preguntado
¿qué es un artículo de investigación?, y ¿por qué es necesario
leerlos?.
En términos generales, los artículos de investigación hacen refe-
rencia a un escrito académico-científico que se caracteriza por
ser breve, periódico, y por transmitir a la comunidad científica
los nuevos conocimientos y avances científicos de una disciplina
(Cubo de Severino, 2005). Dichos artículos cumplen básica-
mente una función comunicativa destinada a transmitir a la co-
47
munidad científica los resultados alcanzados por diversas inves-
tigaciones.
Respecto a la pregunta vinculada a la necesidad de leer artículos
científicos, cabe considerar dos razones principales. En primer
lugar, el rápido desarrollo científico y tecnológico torna imposi-
ble la transmisión de la gran cantidad de conocimientos que se
van generando. Más aún, dichos avances han llevado a un pro-
fundo cambio en los modelos de enseñanza y aprendizaje. El
modelo tradicional de transmisión de contenidos se ha tornado
ineficiente debido al rápido incremento en la producción de co-
nocimientos (Bornas, 1997). En otras palabras, si queremos
mantenernos actualizados sobre los resultados de la investiga-
ción en nuestra disciplina, necesariamente debemos leer artícu-
los de publicación periódica. Por ello los nuevos modelos de
educación sugieren que el rol de los maestros debería centrarse
en la transmisión de las herramientas necesarias para que los
estudiantes puedan recabar información válida y actualizada
mediante la lectura de artículos de investigación (Greenhalgh,
2005).
En segundo lugar, debe considerarse que el desarrollo científico
depende en gran medida de los servicios de documentación en-
cargados de comunicar los avances del conocimiento científico
de un contexto particular. Es decir que en parte, la satisfacción
de las necesidades sociales de un determinado contexto va a
depender de la existencia de órganos institucionales encargados
de la difusión de la producción científica. Sin embargo, para que
se desarrollen dichos órganos de difusión resulta indispensable
el incremento en el número de usuarios de éstos servicios (Cu-
rrás, 1999). En otras palabras, la lectura de artículos de investi-
gación no sólo nos permitirá ser profesionales autónomos y ac-
tualizados, sino también ser usuarios que promuevan el creci-
miento de la investigación científica en nuestro contexto. En
definitiva, son las reglas del juego que deberemos acatar si que-
remos jugar a la ciencia
En relación a como leer un artículo de investigación, si bien
puede parecer una actividad sencilla, no lo es, ya que requiere
48
cierto “background” que no es sistemáticamente entrenado en
los contextos educativos actuales. A pesar de la importancia de
la lectura de artículos científicos, son pocos los esfuerzos desti-
nados a promover estas conductas en los estudiantes.
Como señala Carlino (2007), la preocupación por lo poco o mal
que leen los estudiantes suele estar acompañada por la inactivi-
dad de los docentes, cuando en realidad las acciones de lectura y
comprensión de los estudiantes deberían verse acompañada de la
experiencia y orientación de los docentes. Las dificultades para
leer artículos de investigación no proviene de una falta de habi-
lidad o capacidad, en general los problemas de lectura se deben
a que los estudiantes deben enfrentarse con nuevas “culturas
escritas” que exigen modalidades diferentes de lectura y com-
prensión. Tomando esto en consideración una forma de estimu-
lar la lectura de artículos de investigación en los estudiantes, se
basaría en la transmisión de herramientas que permitan una ade-
cuada compresión de los textos científicos, como así también
una evaluación crítica de los mismos, lo cual constituye la base
para una adecuada elaboración personal de este tipo de texto.
Por lo señalado, en el presente capítulo, intentaremos brindar
ciertas pautas y criterios de utilidad para responder todas las
preguntas con las que iniciamos el mismo.
49
El objeto conceptual: Apartado Introducción
Tal como se señalo en capítulos anteriores, el apartado “Intro-
ducción” permite al lector entender la postura conceptual del
autor, es decir, en este apartado el investigador presenta el “ob-
jeto conceptual”, desde donde aborda al “objeto empírico” de su
investigación. Por esto, en este apartado se presentan los antece-
dentes empíricos, el marco conceptual, el propósito del estudio
y, en caso que el diseño propuesto lo permita, las hipótesis de
trabajo y su fundamentación. Como puede observarse, la expo-
sición de toda esta información muchas veces enfrenta al inves-
tigador a un verdadero desafío, ya que deberá poner en práctica
diferentes competencias de planificación, organización, y toma
de decisiones con el propósito de que este apartado sea consis-
tente y sirva de verdadero “telón de fondo” a la investigación
(Pajares, 2007).
De esta manera en la “Introducción” de una investigación se
presenta a los lectores la propuesta del estudio así como los es-
tudios antecedentes y el marco conceptual de la investigación.
Así mediante la lectura de esta sección los lectores pueden com-
prender como se relaciona la propuesta actual con otras investi-
gaciones (Pajares, 2007). Habitualmente se comunica en esta
sección el propósito de la investigación, el cual puede recono-
cerse fácilmente ya que se presenta en una frase que general-
mente comienza así: “el objetivo del presente estudio es…..”. Si
el propósito ha sido formulado correctamente el lector podrá
reconocer las variables o conceptos centrales, el área de investi-
gación involucrada, la población en estudio y el contexto en el
que se desarrolla la investigación. Por ejemplo, “el presente tra-
bajo tiene por objetivo realizar una adaptación psicométrica de
la Escala de Satisfacción Académica a la población de estu-
diantes universitarios de la ciudad de Córdoba” (Medrano &
Pérez, 2010).
En la introducción de un artículo también se brinda al lector una
revisión bibliográfica sobre el tema en estudio. Aunque la revi-
sión bibliográfica posee diferentes funciones, se caracteriza
principalmente por suministrar el “telón de fondo” del problema
50
de investigación (Pajares, 2007). Dicha revisión debe ser breve y
directa presentando los descubrimientos recientes que sean per-
tinentes al problema en estudio. De esta forma el autor brinda
una fundamentación teórica sobre la importancia del trabajo, así
como un marco de referencia para comparar los resultados reca-
bados con los conseguidos por otras investigaciones.
También suele incluirse en la introducción las hipótesis del tra-
bajo. Las hipótesis son proposiciones contrastables que consti-
tuyen las guías del estudio y nos preparan para interpretar los
resultados de la investigación. Por ejemplo, “la inducción de
estados emocionales positivos y negativos aumentará y dismi-
nuirá, respectivamente, los niveles de autoeficacia académica de
los estudiantes universitarios” (Medrano, 2010). Tomando en
consideración esta afirmación es que podemos interpretar los
resultados del estudio y determinar si los mismos se correspon-
den con la teoría sostenida por el investigador. Dado que estas
proposiciones son derivaciones directas de las teorías considera-
das por el investigador, habitualmente se presentan en esta sec-
ción del artículo junto a la revisión bibliográfica.
Es importante considerar que la introducción debe permitir al
lector identificar la postura desde la cual se interpretarán los
datos de la investigación. Por esto, si las posturas teóricas son
contradictorias, el autor deberá tomar una posición fundamenta-
da, argumentando a favor o en contra de cada postura, a partir
del análisis de la consistencia lógica y los antecedentes empíri-
cos de cada una. En este sentido, si los hallazgos empíricos son
contradictorios, se deberá decidir cuál de ellos parece más acer-
tado y por qué, basándose en cuestiones teóricas o metodológi-
cas. Al argumentar de esta manera, se va construyendo una
postura teórica frente al tema.
En ocasiones, el aporte puede estar dado en la vinculación de la
temática estudiada a una postura teórica previamente no con-
templada; o en sintetizar posturas contradictorias a partir de un
diseño de investigación aún no utilizado, estableciendo argu-
mentos para defender la aplicabilidad de una u otra metodología
para situaciones o temas diferentes. En todos los casos, la discu-
51
sión y posicionamiento del autor debe permitir elaborar un mar-
co referencial personal.
La elaboración de este marco referencial es fundamental porque
ayuda a identificar exactamente qué es lo que se sabe sobre el
tema y cuál es la mejor forma de abordarlo, según el criterio del
autor. Es decir, el marco referencial permite delimitar el objeto a
construir y brinda algunas ideas de cómo podemos construirlo.
De esta forma, aunque el apartado no sea demasiado extenso, va
a permitir visualizar desde que posicionamiento teórico se for-
mula el problema e interpreta los datos que apuntan a responder
a esta pregunta.
Una vez que se posee una clara idea de investigación, habiendo
revisado la literatura sobre el tema y determinado las variables
en estudio y el diseño a utilizar la redacción de este apartado se
ve facilitada. No obstante, muchas veces el investigador novel
no sabe muy bien cómo empezar. Si bien no existen recetas al
respecto, si podemos pensar en algunos “tips” de utilidad. Una
primera herramienta es plantearnos preguntas tales como las
siguientes:
¿Que debería incluir para que el lector entienda lo que quie-
ro hacer?
¿Donde se encuadra mi estudio a nivel conceptual?
¿Qué temas debo tratar?
¿Desde dónde voy a interpretar los resultados que surjan de
mi estudio?
¿Qué significan los conceptos que utilizo?
¿Qué autores son claves en mi investigación?
¿Qué otras investigaciones se han llevado sobre el tema?
¿En que difieren y en que se parecen a mi investigación?
¿Qué investigaciones anteriores han dado lugar al estudio?
¿Qué aporta el estudio a las investigaciones anteriores?
52
A partir de las respuestas que surjan, se irán constituyendo ejes
de análisis y un esquema de organización con puntos a tener en
cuenta en la elaboración del texto (definiciones, nombres de
autores, modelos, investigaciones a citar). En este punto, es de
gran utilidad realizar un bosquejo de los temas a tratar a partir
de diagramas (diagrama arbóreo por ejemplo, el cual se desarro-
lla en el siguiente capítulo).
53
Para su desarrollo se pueden tener presentes los interrogan-
tes básicos.
El esquema CDE
Otra forma de realizar el diagrama es plateándolo según el es-
quema CDE. En este esquema, el diagrama tiene tres diferentes
niveles, el primero se vincula a la CONTEXTUALIZACION del
tema de interés, donde el autor presenta el contexto actual de la
problemática en estudio. Esto puede llevarse a cabo brindando datos
acerca de la prevalencia de la problemática, por ejemplo, la impor-
tancia que asume el tema en el contexto mundial, o incluso rea-
lizando una breve reseña histórica de la evolución de una idea.
No obstante, cuando se trata de conceptos muy conocidos en nuestra
disciplina, esto último puede omitirse.
54
ción debe ser acorde a la teoría o teorías desde la cual se trabaje y no
una definición de diccionario
55
diendo de los pasos seguidos por el investigador los resultados
serán considerados válidos o no.
56
Una nueva representación. Resultados y Discusión
En la sección de “Resultados” no sólo se provee información
sobre los datos recolectados, sino que también se comunican los
criterios de análisis de datos seleccionados (niveles de significa-
ción y tamaños del efecto considerados, por ejemplo).Existen
diferentes modos de presentar los resultados de la investigación,
generalmente se opta por utilizar gráficos y tablas para mostrar
de manera clara y sintética los datos obtenidos. Sin embargo, los
resultados también pueden ser presentados en el cuerpo del tex-
to.
57
fo “cabe destacar el valor heurístico del presente trabajo así co-
mo las importantes implicaciones prácticas del mismo. En efecto
a partir de la adaptación del PANAS se podrán realizar numero-
sos estudios tendientes a examinar el rol de las emociones en
diferentes ámbitos del ejercicio profesional”. Pajares (2007)
sugiere una serie de preguntas útiles para analizar esta sección
del artículo. Alguna de ellas son: 1) ¿qué importancia tienen
estos resultados para la teoría de base?, 2) ¿los resultados ten-
drán influencia en programas, método o intervenciones?, y 3)
¿cómo se implementarán los resultados del estudio?.
Autores y afiliación
institucional: esta
información permite
identificar el lugar de trabajo
y las personas que realizaron
el artículo
Resumen:
habitualmente no supera
las 200 palabras:
Presenta de manera
concisa realizados y
precisa el contenido del
artículo. Con frecuencia
los lectores deciden en
58
Introducción: en esta sección se presenta el problema de
estudio, se desarrollan los estudios antecedentes o cono-
cimientos teóricos previos sobre el tema, se brinda una
definición de las variables en estudio y se fundamenta la
relevancia del problema.
59
Ejemplo: definición conceptual de variables
60
Metodología: en esta sección se describe en detalle la
manera en que se efectuó el estudio. Esta sección involu-
cra tres sub-secciones: participantes, instrumentos y pro-
cedimientos
61
Procedimiento: se describe el diseño y la estrategia de
investigación seguida, resumiendo cada paso efectuado
por los investigadores. Por ejemplo, cómo se midieron
las variables, cómo se manipularon, cómo se controlaron
variables enmascaradas, etc.
62
Resultados: esta sección resume los datos recolectados,
así como su tratamiento estadístico. Dicha información
puede presentarse en forma de texto, o bien utilizando ta-
blas o figuras.
63
Discusión: en esta sección se examinan e interpretan los
resultados obtenidos en el estudio. Se enfatizan las con-
secuencias teóricas y aplicados del trabajo, se hacen infe-
rencias de los resultados y se presentan futuras líneas de
trabajo
64
Comentarios Finales
Un trabajo de investigación sólo puede considerarse completo
cuando los resultados obtenidos se comparten con la comunidad
científica (APA, 2002). Aunque las comunicaciones entre profe-
sionales puede efectuarse por medio de diferentes canales, for-
males e informales, el medio tradicional para la comunicación
de resultados es el artículo científico. En este tipo de documen-
tos se presenta de manera clara y ordenada información sobre
los éxitos o fracasos de diversas investigaciones. Por ello, la
lectura de artículos de investigación constituye una actividad
ineludible para ser profesionales idóneos y actualizados.
65
Actividad
Señale en cada párrafo a que sección de un artículo empírico
corresponde el extracto (Estraídos de O
66
una muestra total de 1067 estudiantes previo consenti-
miento de los mismos. La aplicación fue llevada a cabo
en el horario de clases, con autorización del docente.
67
8. Amaris Macias, M., Camacho Puentes, R. & Fernández
Soto, I. (2000). El rol del padre en las familias con ma-
dres que trabajan fuera del hogar. Psicología desde el
Caribe, 5, 157-175.
68
4
Redacción Científica
Introducción
Nuestro lenguaje está compuesto de meras aproximaciones,
convenciones, usos, palabras que en el mejor de los casos logran
hacer representaciones significativas (Kreimer, 1998). Cuando
lo que obtenemos no condice con lo que esperábamos o deseá-
bamos decir ¿no sabemos qué decir o no sabemos cómo decirlo?
69
Basándonos en estas consideraciones, el objeto del presente tra-
bajo es brindar algunos elementos conceptuales y herramientas
prácticas que faciliten dominar el proceso mental necesario para
la producción escrita. A su vez, se presentan una serie de activi-
dades vinculadas a diferentes etapas de la redacción de forma tal
que el lector pueda ejercitar diferentes técnicas de utilidad para
la elaboración de un texto. El lector deberá explorarlas y juzgar
cuál resulta efectiva en mayor medida para la composición de
sus textos. Después de haber observado las estrategias que le
sirven y adaptado aquellas susceptibles de serlo, el ejercicio
continuo de la redacción facilitará la internalización de las mis-
mas.
70
directamente en su versión final y que la escritura es
una actividad más vinculada a la inspiración que a la
práctica.
71
ceso de composición. Planifican antes y durante la re-
dacción, controlan permanentemente su producción y
el propio proceso mental que siguen, y van revisando
sus decisiones mientras escriben con el objeto de mejo-
rar su composición. En resumen, para escribir correc-
tamente no es suficiente con tener buenos conoci-
mientos en gramática, el estudiante debe aprender a
gestionar y regular el proceso mental implicado en la
composición escrita.
72
Reflexionar para resolver los problemas o dificultades que
van surgiendo a cada paso (corresponde a la etapa de revi-
sión del texto).
PLANIFICACIÓN
REVISIÓN TEXTUALIZACIÓN
Figura 1
Planificación
Probablemente el primer paso necesario para la tarea de escribir
sea decidir qué escribir y cómo escribirlo. Resulta evidente la
dificultad que significaría trasladar al papel una idea o mensaje
que ni siquiera esta claro en la mente. La planificación de un
escrito implica tres subprocesos (González Cabanach et. al.,
2005): el establecimiento de un propósito, la generación de ideas
y la organización de dichas ideas.
73
que escribimos. Para determinar un propósito se deben tomar
una serie de consideraciones, como son, la demanda a la que uno
se enfrenta, la audiencia a la que uno se dirige y la intención u
objetivo con que se escribe (González Cabanach et. al., 2005).
Tener conciencia de que existe un lector es uno de los aspectos
destacados por Calkins (2001), las preguntas que se hará al leer-
nos son interrogantes que no pueden ignorarse y que resultan de
utilidad para reflexionar las demandas y las intenciones con las
que se escribe. No es recomendable comenzar a escribir sin ha-
ber indagado estas consideraciones que conjuntamente configu-
ran el propósito del texto; el resto de las decisiones a tomar a lo
largo del proceso de escritura dependerán de que el escritor no
pierda de vista estos aspectos.
74
Una vez seleccionadas las ideas nucleares el escritor debe refle-
xionar y decidir como organizarlas. Determinar la estructura
general del texto constituye el objetivo principal de este subpro-
ceso nominado organización de ideas. Para ello el escritor debe
seleccionar las ideas más pertinentes y darles un ordenamiento
utilizando criterios adecuados al propósito del texto. Algunos
criterios que permitirán al estudiante agrupar u ordenar el mate-
rial pueden ser:
la modalidad de la información; agrupando y separando se-
gún sean ideas, imágenes, conceptos, vivencias, principios,
etc.
el contenido temático; reuniendo ideas o temáticas similares
el nivel de generalidad o concreción de los contenidos de un
mismo tema, diferenciando las ideas globales o generales de
las concretas o específicas.
También puede ser útil en este punto hacer esquemas en los que
se ponga de manifiesto relaciones entre las distintas informacio-
nes. Una técnica de esta tipo se denomina “diagrama arbóreo”.
75
Esta técnica además de facilitar la elección de un tema, permite
el encuentro de ideas nucleares que resultarán sumamente útiles
para la organización de la información.
76
Actividad
Esta técnica desarrollada por Alex Osborn tiene por objeto desa-
rrollar y ejercitar la imaginación creadora o producción de ideas
originales. Este autor postula que el poder creativo del hombre
podía verse limitado si no se dejaba a las personas en un clima
totalmente informal y con absoluta libertad, dado que el estricto
razonamiento lógico constriñe los pensamientos a los moldes de
la razón dejando poco espacio para el despliegue de los impul-
sos creadores (Cirigliano & Villaverde, 1995).
77
tópico de interés, en este caso, el tema específico delimitado
(brainstorm session) independientemente de la coherencia de
estos pensamientos o ideas. El segundo paso consiste en escribir
todas las ideas que vengan a la mente. Por ejemplo: para el tópi-
co anteriormente señalado (Asertividad y abuso de drogas lega-
les en la adolescencia) se ejemplifica el resultado de una tor-
menta de ideas:
Actividad
4. Diagrama Arbóreo
78
existentes entre esas ideas (Walker, 2005). A menos que se po-
sea un conocimiento acabado de los temas que se desarrollarán
en el escrito, resulta dificultoso elaborar un esquema enumeran-
do los temas en un orden secuencial. La alternativa propuesta
por el diagrama arbóreo consiste en ramificar ideas a partir de
un tema principal.
79
Actividad
Textualización
Concluida la selección y organización de las ideas que se pre-
tenden transmitir, el escritor debe transformarlas en un lenguaje
visible y comprensible para el lector (González Seijas, 2003).
La etapa de textualización involucra actividades propiamente
lingüísticas encargadas de llevar las representaciones mentales
internas pensadas para la composición, a un resultado escrito.
Todo texto o exposición escrita va a estar constituido por dife-
rentes párrafos que van a intentar desarrollar paulatinamente y
en forma sistemática la idea que el autor intenta exponer. El au-
tor debe intentar siempre que, en la medida de lo posible, la ex-
posición sea ordenada, fluida, precisa y clara.
80
lo más directa posible, es decir, sin dar lugar a malos entendi-
dos, de esa manera es una expresión que intenta ser objetiva.
Debe poseer estilo y elegancia; para esto, siempre es conve-
niente intentar un equilibrio entre la sencillez y la exactitud en la
expresión, o sea:
Ser claros con términos científicos no significa ser sencillo
en términos coloquiales.
Ser preciso y exacto en los conceptos no significa abusar de
la reiteración y la redundancia.
Puntualizaciones: Tal como se sugiere en la sexta edi-
ción del Manual de Estilo para las publicaciones científi-
cas de la American Psychological Association (APA,
2010), existen cinco requerimientos básicos para la ex-
presión textual de ideas científicas, estos son:
1) Presentación ordenada de las ideas.
Se consigue dando continuidad en las palabras y con-
ceptos, y para esto es recomendable no abusar ni prescin-
dir de los signos de puntuación, existen las comas, puntos
y comas, dos puntos, no sólo el punto seguido. Por otro
lado, ayudan a este enlace de ideas, los nexos o palabras
de transición o estructurales que por sí solas no poseen
significado pero le dan la estructura y el sentido a lo es-
crito. Por ejemplo: entonces, sin embargo, por el contra-
rio, no obstante, y, por lo tanto, etc., son conectores que
permiten un enlace adecuado entre las partes del texto.
2) Fluidez en la expresión.
Se refiere a que la comunicación debe ser clara y racio-
nal, sin omisiones o irrelevancias, ni cambios bruscos del
tono. Tal como se sugiere en el manual, se debe tener
siempre en mente que el objetivo de un texto científico es
diferente al de un texto literario, por lo cual se debe evi-
tar la ambigüedad en la expresión, los cambios abruptos
y sorpresivos de tono o de redacción, buscando una ex-
posición de ideas ordenada, clara, lógica y concisa. En
81
este sentido, es importante un adecuado uso de tiempos
verbales. En general, se sugiere el uso del tiempo preté-
rito o del presente perfecto en el apartado introducción,
cuando se está hablando de investigaciones ya realizadas,
como así también en la sección resultados. Por otra parte,
se recomienda el uso del tiempo presente en la redacción
de la discusión.
3) Tono.
Si bien la redacción científica difiere de la escritura lite-
raria es necesario que la misma posea un tono que man-
tenga el interés del lector. En este sentido, el tono debe
ser impersonal pero a la vez reflejar el involucramiento
del investigador en el trabajo realizado
4) Economía en la expresión.
Se obtiene expresando sólo lo que requiere ser dicho,
eliminando las descripciones exhaustivamente detalladas,
la palabrería y la redundancia.
5) Precisión y Claridad.
Para llegar a esto es necesario cuidar que todas las pala-
bras signifiquen lo que se quiere decir. Es necesario
además evitar el uso de expresiones coloquiales, jergas,
antropomorfismos (“los resultados nos muestran”, por
ejemplo).
82
Uso de paráfrasis
Parafrasear es “reproducir el sentido exacto de un pasaje escrito
o formulación oral con nuestras propias palabras” (Walker,
2005, p. 169). Durante un proceso de investigación, frecuente-
mente se desea reformular con palabras propias el significado de
un pasaje de otro autor. Registrar hecho o ideas con nuestras
propias palabras ayuda a clarificar ideas y desarrollar un estilo
propio de expresión. A menudo ocurre que una paráfrasis resulta
más clara y concisa para nuestros fines que un pasaje original.
Ejemplo de paráfrasis:
Pasaje Original de Inteligencia Reformulada, de Howard
Gardner
Nota parafraseada
83
clara, precisa, coherente y que conduzca suavemente de un tema
a otro. Se deben evitar, en lo posible, los saltos lógicos y las
incoherencias entre las ideas y conceptos que se exponen. El
desarrollo temático debe efectuarse siempre intentando que haya
continuidad entre las palabras y conceptos y que este desarrollo
vaya desde las premisas iniciales hasta la conclusión. A su vez,
este orden debe mantenerse cuando integremos los diferentes
párrafos en un texto de mayor extensión.
84
debe estar constituido por párrafos que combinen ambos tipos de
oraciones. Es importante considerar que un párrafo no consiste
en la mera yuxtaposición de oraciones, sino que el mismo tiene
una estructura, y un orden lógico. Así, podemos decir que un
párrafo estará estructurado por los siguientes componentes:
La oración tópica o principal (Topic sentence): Nos da la
idea de que es lo que el autor va a desarrollar en el párrafo.
Esta oración va a contener las ideas o tópicos que se van a
desarrollar en forma mas extendida en el cuerpo del párrafo.
85
La oración conclusiva: Es la oración final del párrafo, cuyo
propósito es dar un cierre al mismo. Para efectuar esto, el
autor puede referirse a la idea expresada como oración tópica
proveyendo una conclusión a la misma.
86
incluirá la idea tópica de todo el trabajo, debemos proceder a
redactar párrafos en donde la idea tópica va a pasar a ser alguna
de las sentencias que utilizamos en el desarrollo del párrafo.
Ejemplo:
Párrafo 1:
Actividad
1. Colocar los signos de puntuación, según corresponda.
La exploración de esta situación social emergente llevó a
definir un ámbito de estudio y de unidad de inserción en
1986 en la Argentina gran parte de los programas de aten-
87
ción primaria de la salud tenían como área de acción el ba-
rrio y como unidad operativa el centro de salud la escuela o
algún nucleamiento de vecinos de la zona en general las ac-
ciones se dirigían fundamentalmente a la población materno-
infantil en la práctica era poco común que el varón jefe de la
familia participara de estos programas las acciones empren-
didas en el campo de la salud mental no fueron una excep-
ción a esa situación y las alternativas propuestas para la pre-
vención del alcoholismo debieron emprenderse la mayoría
de las veces en ausencia de quienes debían ser sus principa-
les destinatarios.
2. Completar el siguiente fragmento con los marcadores
textuales más adecuados (incluidos al final del ejercicio).
El estudio señala que, en los 10 días anteriores a la encuesta,
un 10% de los entrevistados había consumido alguna sustan-
cia estimulante. __________, podemos considerar que el pa-
trón de ingesta de este tipo de sustancias en los adolescentes
de nuestro medio hace necesario algún tipo de medida pre-
ventiva. __________, es importante observar que el tipo de
sustancia consumida se presenta en forma diferencial de
acuerdo al genero de los entrevistados. __________, un
50,4% de entrevistados varones reporto consumir estimu-
lantes, __________, un 20 % reporto consumir cocaína y un
10 % éxtasis. __________, un 10,4% de mujeres entrevista-
das, reporto consumir estimulantes, __________, solo un 10
% reporto consumir cocaína y un 5 % éxtasis
Marcadores textuales:
88
Lean el siguiente párrafo y tratando de “economizar” sus expre-
siones, para esto eliminen palabras innecesarias y/o cambien
expresiones “rebuscadas” (muy largas) por otras más sencillas.
A modo de ejemplo:
PARRAFO 1
Es significativo que ninguno de los autores consultados haya
destacado la importancia de u problema que se considera decisi-
vo: la relación salud-estructura social. Esta relación, compleja,
abarca varios planos.
89
PARRAFO 2
Es sumamente significativo que ninguno de los autores que
hasta aquí han tratado el tema se haya preocupado por un pro-
blema que consideramos como decisivo y que no es otro que la
relación salud-estructura social vista como expresión de las rela-
ciones entre el hombre y la naturaleza, en sus diversos planos
económico, técnico y social.
Responda brevemente:
90
nuestro programa genético. Su funcionamiento fue con-
figurado por selección natural para resolver los proble-
mas de la vida que nuestros antepasados tuvieron como
cazadores y recolectores, y que abarcó la mayor parte de
nuestra historia evolutiva.
Nota parafraseada
Nota parafraseada
91
Pasaje Original de Inteligencia y Afectividad, de Jean
Piaget
Nota parafraseada
92
Si bien el estudio de las HHSS y de las variables cognitivas que
integran una respuesta socialmente habilidosa se ha realizado
con poblaciones de diferentes edades, en los últimos años gran
cantidad de investigaciones se han interesado por el estudio de
éstas en estudiantes universitarios.
93
Es quizás por ello que el ámbito de las habilidades sociales ha
sido probablemente uno de los más productivos en los últimos
años, siendo utilizado profusamente debido a sus posibilidades
de aplicación práctica (Viscarro, 1994).
94
“Una comprensiva investigación de Imbroscia y Siniuk
(2001), concluyó que la Orientación para la Carrera, tal co-
mo se practica en Argentina, enfrenta severos obstáculos.
Junto a los problemas económicos e institucionales que en-
frentan los orientadores en su tarea cotidiana, uno de las
principales dificultades remarcadas por los autores es la li-
mitada formación de estos profesionales. En efecto, Orienta-
ción Vocacional es una asignatura de grado en las carreras de
Psicología, Ciencias de la Educación y Psicopedagogía pero
las posibilidades de formación de postgrado son casi nulas.
La escasez de maestrías ofrecidas y la ausencia de programas
de doctorado en el área dificultan considerablemente la nece-
saria actualización de los profesionales de la orientación en
nuestro país. Además de todo esto sorprende la escasez de
cursos de formación en Psicología Laboral y en otras áreas
de la Psicología”.
“La teoría social cognitiva postula importantes relaciones de
reciprocidad entre la autoeficacia, las expectativas de resul-
tados y el sistema de metas (Bandura, 1987). Las relaciones
entre las creencias de autoeficacia y el rendimiento posterior
también se han demostrado en muchas investigaciones.
95
Revisión
El proceso de componer un texto rara vez termina con la primera
versión. El escritor estratégico relee constantemente lo que ha
escrito hasta ese momento examinando las ideas y frases que ha
redactado y reflexionando sobre lo que había pensado escribir.
El objetivo principal de la etapa de revisión es detectar los pro-
blemas que muestra nuestra composición y encontrar formas de
mejorarla. Para ello el escritor debe llevar a cabo dos subproce-
sos: uno de evaluación de la calidad del texto, y otro propia-
mente de resolución o mejora del mismo (González Cabanach
et. al., 2005). Debe tenerse en cuenta que ambos subprocesos
pueden ocurrir en cualquier momento de la producción escrita.
En efecto, son susceptibles de revisión tanto las primeras pala-
bras como las versiones finales de un texto (González Seijas,
2003).
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ceso de escritura con el objeto de especificar los procesos que
hay que corregir en cada caso.
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Ser consecuente en el tiempo verbal, el nivel léxico, la elec-
ción de fuentes y el estilo de documentación a lo largo de
todo el texto
Desarrollar un estilo legible, escribir de modo que otros
puedan comprender lo queremos decir tan fácilmente como
sea posible
Evaluar la organización o reorganizar las partes del texto en
caso de ser necesario
Eliminar el material innecesario, la escritura resulta más
efectiva si no es repetitiva y si cada parte contribuye al todo
Evitar palabras innecesariamente largas o imprecisas
Buscar lo que se puede eliminar sin debilitar el significado
Mejorar los párrafos buscando clarificar el significado, pre-
guntándose si se expresó de la manera más claramente posi-
ble lo que se quería decir
Variar la longitud de las oraciones, buscar una mayor varie-
dad combinando oraciones cortas o dividiendo las largas
Reducir las oraciones que extendió con cláusulas o frases
superfluas
Simplificar formas verbales innecesariamente complejas
Evite repeticiones utilizando sinónimos para generar varie-
dad
No pasar por alto la corrección gramatical y ortográfica
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