Kero Globalización
Kero Globalización
Kero Globalización
Mientras tanto, respecto a la política, los distintos gobiernos van perdiendo atribuciones
en algunos ámbitos que son tomados por la sociedad civil en un fenómeno que se ha
denominado sociedad red, el activismo cada vez más gira en torno a movimientos
sociales y las redes sociales mientras los partidos políticos pierden su popularidad de
antaño, se ha extendido la transición a la democracia contra los regímenes despóticos, y
en políticas públicas destacan los esfuerzos para la transición al capitalismo en algunas
de las antiguas economías dirigidas y la transición del feudalismo al capitalismo en
economías subdesarrolladas de algunos países aunque con distintos grados de éxito.
Geopolíticamente el mundo se debate entre la unipolaridad de
la superpotencia estadounidense y el surgimiento de nuevas potencias regionales, y en
relaciones internacionales el multilateralismo y el poder blando se vuelven los
mecanismos más aceptados por la comunidad internacional. La sociedad civil también
toma protagonismo en el debate internacional a través de ONG internacionales
de derechos humanos que monitorean la actividad interna o externa de los Estados. En
el ámbito militar surgen conflictos entre organizaciones armadas no-estatales (y
transnacionales en muchos casos) y los ejércitos pertenecientes al estado (guerra contra
el terrorismo, guerra contra el narcotráfico, etc), mientras las potencias que
realizan intervenciones militares a otros países (usualmente a los considerados
como Estado fallido) procuran ganarse a la opinión pública interna y mundial al formar
coaliciones multinacionales y alegando el combate a alguna amenaza de seguridad no
sin amplios debates sobre la legitimidad de los conceptos de guerra
preventiva e intervención humanitaria frente al principio de no intervención y
de oposición a las guerras.
Esos poderes son tan fuertes que llegan a acuerdos al margen de todo control político
directo de los seres humanos que afectan al empleo, la salud y la vida cotidiana de
grandes sectores de la Humanidad como CETA, TTIP y TISA, acuerdos que no se han
publicado ni conocido ni sancionado por los que sufren sus consecuencias,[4] algo
jurídicamente muy discutible.[5] Contra esto (la falta de perfeccionamiento de los
procedimientos democráticos de control del gobierno de los estados nacionales quienes,
por ejemplo, son incapaces de concordar o ponerse de acuerdo para evitar el fraude
fiscal global, o de otra forma explicado, solo se ponen de acuerdo en no ponerse de
acuerdo) y la venta del sistema político al capitalismo en general, ha surgido la llamada
globalización del descontento,[6] plasmada en movimientos como el 15-M, Occupy
movement o los Indignados y organismos independientes de denuncia como Wikileaks,
o en protestas más desorganizadas y violentas como los disturbios de Francia de 2005.
La globalización afecta a todo el mundo y por tanto exige un derecho global que la
controle, lo que revitaliza el derecho natural inherente a la especie humana y debería
desacreditar definitivamente en esta esfera el demasiado prestigiado derecho
positivo que esgrimen los estados nacionales para no ponerse de acuerdo en medidas
beneficiosas para todos. En ese sentido, afirma Hans Küng en el contexto de la
confección de una Declaración universal de los deberes del hombre:
Historia
Globalización económicaeditar
Globalización políticaeditar
Cada vez más, las organizaciones no gubernamentales influyen en las políticas públicas
más allá de las fronteras nacionales, incluida la ayuda humanitaria y los esfuerzos
de desarrollo.[20] Las organizaciones filantrópicas con misiones globales también están
pasando a la vanguardia de los esfuerzos humanitarios. El Instituto Hudson estima que
los flujos filantrópicos privados totales hacia los países en desarrollo ascendieron a
59.000 millones de dólares en 2010.[21]
Globalización culturaleditar
Otras dimensioneseditar
Los académicos también discuten ocasionalmente otras dimensiones menos comunes de
la globalización, como la globalización ambiental (las prácticas y regulaciones
coordinadas internacionalmente, a menudo en forma de tratados internacionales, con
respecto a la protección ambiental)[35] o la globalización militar (crecimiento en
extensión y alcance global de relaciones de seguridad).[36]
Movimiento de personaseditar
Es importante anotar que entre los partidarios del desarrollo económico y social, existen
corrientes con visiones encontradas y radicalmente diferentes en su percepción sobre los
beneficios de la globalización; es el caso del liberalismo libertario y
el neoconservadurismo en lo político, o la escuela austríaca y el monetarismo/escuela
neoclásica en la doctrina económica.
Los liberales libertarios y otros partidarios del laissez-faire capitalista dicen que los
altos niveles de libertades políticas y económicas, en la forma
de democracia y capitalismo, han sido fines valiosos en sí mismo en el mundo
desarrollado y han producido altos niveles de riqueza material. Ellos ven en la
globalización un proceso benéfico de extensión de la libertad y el capitalismo.[44]
Aquellos que apoyan el libre comercio proclaman que el aumento tanto de la
prosperidad económica como de oportunidades, especialmente en los países en
desarrollo, incrementara las libertades civiles y llevara a un reparto de recursos más
eficiente. Las teorías económicas de la ventaja comparativa sugieren que el mercado
libre produce dicho reparto efectivo de recursos, a mayor beneficio de todos los países
que estén envueltos. En general, esto conduce a reducción de precios, más empleos,
incremento en la producción y de niveles de vida especialmente para los que viven en
países en desarrollo.[44][45] Además, la inversión directa de capitales extranjeros a
aumentado en muchos países en vías de desarrollo debido al aumento del libre
comercio, como sucedió en México a partir del NAFTA.[46]
Existen también los llamados "globalistas" o "mundialistas", que proponen una
"globalización democrática". Ellos creen que la primera etapa de la globalización,
orientada al mercado o a asuntos económicos, debe ser seguida por una etapa de
creación de instituciones políticas globales que representen las visiones o aspiraciones
del "ciudadano mundial". Su diferencia con otros "globalistas" es que ellos no definen
por adelantado una ideología para orientar esta voluntad, dejándola a la voluntad de
esos ciudadanos a través de un proceso democrático.
Proponentes de la globalización argumentan que el movimiento antiglobalización es
proteccionista y usa evidencias puntuales y anecdóticas para apoyar sus visiones,
mientras que las fuentes estadísticas proveen un apoyo fuerte a la globalización.
A pesar de que algunos lo discuten, la desigualdad del ingreso a nivel mundial parece
estar decreciendo, como el economista Xavier Sala-i-Martin argumentó en 2007.[47]
Dejando de lado quien tiene la razón, se puede alegar que más importante es la
medida de pobreza absoluta: si todos vivieran en la miseria, la desigualdad de ingresos
sería muy baja.
Desde 1981 al 2001, de acuerdo a figuras del Banco Mundial, el número de personas
que viven con un dólar o menos de ingreso al día ha declinado en términos absolutos
de mil quinientos millones de personas a mil cien millones. Al mismo tiempo, la
población del mundo aumentó. Así pues, en términos porcentuales el número de tales
personas declinó en los países en desarrollo de 40 % a 20 %. de la población.[48] con las
mayores disminuciones teniendo lugar en las economías que han reducido más las
barreras al comercio e inversión. Sin embargo, algunos críticos advierten que sería
conveniente usar medidas más detalladas de la pobreza.[49]
El porcentaje de personas que viven con menos de dos dólares de ingreso al día ha
caído mucho en áreas afectadas por la globalización, mientras que las tasas de pobreza
ha permanecido estable en otras áreas. En Asia del Este, incluyendo China, ese
porcentaje ha decaído en un 50,15 %, comparado con un incremento del 2,29 % en
África subsahariana.[45]
La esperanza de vida se ha casi doblado en los países en desarrollo desde la Segunda
Guerra Mundial y está empezando a cortar la distancia entre ella y la de los países
desarrollados, donde el mejoramiento ha sido menor. Incluso en los países del África
subsahariana, la región menos desarrollada, la esperanza de vida ha aumentado de
menos de 30 años antes de esa guerra a alrededor de 50 años antes de
la pandemia de sida y otras empezaran a reducirla nuevamente al presente nivel de
alrededor de 47 años. La mortalidad infantil ha decrecido en todas las regiones del
mundo en desarrollo.[50]
La presencia de la democracia se ha incrementado de manera espectacular: desde una
posición en la cual había muy pocas naciones con sufragio universal en 1900 a estar
presente en un 62,5 % de todos los países en el 2000.[51]
Los derechos de las mujeres (ver Feminismo) ha avanzado. Incluso en áreas tales
como Bangladés ellas están logrando acceso a trabajos que proveen estabilidad e
independencia económica.[44]
La proporción de la población mundial que vive en países donde la provisión de
alimentos per cápita es menor que 2200 calorías o 9,200 kilo julios por persona por día
disminuyó desde 56 % en 1960 a menos de 10 % en 1990.[52] El promedio de calorías
diarias ingeridas a nivel mundial subió de 2,162 kilocalorías en 1961 a 2,861 en el 2018.
[53]
Actualmente hay 16 países
(Kenia, Ruanda, Liberia, Yemen, Haití, Venezuela, Chad, Tayikistán, Mozambique, Afga
nistán, Corea del Norte, Zambia, Uganda, Madagascar y la República Centroafricana )
donde el promedio de calorías consumidas diariamente es menor a 2200.[54]
Entre 1950 y 1990. la tasa de alfabetización mundial aumento del 52 % al 81 %. Las
mujeres han representado mucho de ese crecimiento: la tasa de alfabetización
femenina, como porcentaje de la masculina, aumento de 59 % en 1970 a 80 % en el
2000.[55]
Hay tendencias similares en lo que respecta a acceso a electricidad, autos, radios,
teléfonos, etc. Al mismo tiempo que una proporción creciente de la población con
acceso a agua potable.[56]
El porcentaje de menores en la fuerza de trabajo ha caído desde un 24 % en 1960 al
10 % en el 2000.[57]
Indur M. Goklany, en su libro The Improving State of the World también encuentra
evidencia que esas, y otras, medidas del bienestar humano están mejorando y que la
globalización es parte de la explicación. También busca responder al argumento que
el Impacto ambiental limitaría ese progreso.
Otros autores, como el senador canadiense Douglas Roche, simplemente ven la
globalización como inevitable y argumentan a favor de crear instituciones tales como
una Asamblea Parlamentaria de las Naciones Unidas elegida a fin de supervisar y
controlar la acción de cuerpos e instituciones internacionales no electos.
A pesar de que los críticos de la globalización se quejan de que esta implica un
predominio de la cultura occidental (u occidentalización) un informe de 2005 de la
UNESCO[58] muestra que el cambio cultural se está haciendo en ambas direcciones. En
el 2002, China fue el tercer país en exportaciones de bienes culturales, detrás de Reino
Unido y EE. UU. Entre 1994 y el 2002, la proporción de esas exportaciones de tanto
Norteamérica como Europa decayó, mientras las exportaciones de Asia crecieron hasta
sobrepasar a la estadounidense.