Francisco de Goya
Francisco de Goya
Francisco de Goya
TEMA 1:
GOYA,
ANTECEDENTE DE
LA PINTURA
CONTEMPORÁNEA
Goya:
Asalto al
coche
(1787)
GOYA: ANTECEDENTE DE LA PINTURA CONTEMPORÁNEA
Vida y obra: Corte de Carlos IV
En 1795 conoce a la duquesa de Alba, una de las
mujeres más notables de su tiempo y protectora de
artistas. Los escritores románticos franceses
inventaron la historia de una pasión compartida
entre ambos personajes. No hay ningún documento
que lo confirme. De ella realiza magníficos retratos.
Es invitado por la duquesa a su casa de Sanlúcar
donde Goya realiza una serie de dibujos que
constituyen el primer álbum de Sanlúcar. La duquesa
es el centro de interés de estos dibujos hechos a la
aguada, técnica revolucionaria en estos momentos.
Goya: Dos
imágenes del
álbum de
Sanlúcar (izq.
Duquesa de
Alba
peinándose,
drcha. Mujer
desnuda ante
el espejo) h.
1797
La familia de Carlos IV. 1800. Óleo sobre lienzo, 2´80 x 3´26 m. Museo del
Prado. Esta obra supone la culminación de todos los retratos pintados por Goya en
esta época. Fue realizada en Aranjuez desde abril de 1800 y durante ese verano. Está
perfectamente documentado su proceso de gestación y realización. Antes de trabajar
en ella el artista realizó una serie de bocetos previos (10) sobre los principales
protagonistas de la obra.
La familia de Carlos IV. 1800. Se trata de un retrato colectivo en el que los personajes de la familia real se distribuyen
en tres grupos. En el centro, el rey Carlos IV y su esposa Mª Luisa de Parma, acompañados de sus dos hijos pequeños
(María Isabel y Francisco de Paula). A la izquierda, el futuro Fernando VII, hijo primogénito de los reyes, y a su lado
un personaje sin rostro que podría ser su futura esposa cuando éste contrajera matrimonio por lo que aparece con la
cabeza vuelta. Tras ella está la hermana del rey y junto al futuro Fernando VII su hermano Carlos María Isidro. En el
grupo de la derecha aparecen otros personajes de la familia real.
La familia de Carlos IV. 1800. A la izquierda, detrás de un lienzo de grandes dimensiones y oculto en la penumbra
vemos a Goya. La referencia a Las Meninas es evidente y refleja la profunda admiración que el artista aragonés
sentía por Velázquez, al que consideraba su maestro.
La familia de Carlos IV. 1800. Se ha discutido mucho acerca de si hubo por parte de Goya alguna intención de
caricaturizar a la familia real española. La verdad es que el encargo fue aceptado sin objeciones. El artista se limitó a
dar testimonio de una realidad, fielmente plasmada, penetrando con sutileza en la psicología de los personajes. Así por
ejemplo, queda patente la falta de carácter del rey o la personalidad dominante de la reina que ocupa el centro de la
composición. Goya emplea una pincelada suelta, a base de manchas de color. Los contrastes de luz y sombra
contribuyen a dar variedad a los volúmenes y diferenciar distintos planos en profundidad. Es espléndido el uso del
color: blancos y dorados armonizan a la perfección con las tonalidades rojas, azules y negras. Destaca el lujoso color
dorado de la vestimenta de la reina y el rojo intenso del traje de su hijo pequeño, Francisco de Paula.
El dos de mayo de 1808 o La Carga de los mamelucos. 1814. Óleo sobre lienzo, 2´68 x 3´47 m. Museo del Prado
GOYA: ANTECEDENTE DE LA PINTURA CONTEMPORÁNEA
EL DOS DE MAYO. Finalizada la guerra de la Independencia, Goya escribió a la Regencia manifestando sus
ardientes deseos de perpetuar por medio del pincel las más notables y heroicas acciones o escenas de nuestra gloriosa
insurrección contra el tirano de Europa. Al mes siguiente se le concedía la ayuda para la compra de los materiales
necesarios, además de 1.500 reales de vellón mensuales mientras durase la realización de los cuadros que
compondrían la serie. Dentro del ideario liberal Goya pretendía exaltar la reacción heroica del pueblo español contra
el ejército francés. En estas dos obras se representan los terribles acontecimientos que tuvieron lugar los días dos y
tres de mayo de 1808 en Madrid. Los cuadros no agradaron al absolutismo ni tampoco al liberalismo moderado, por
lo que permanecieron más de cuarenta años ocultos en los almacenes del Museo, y sólo fueron expuestos a partir de
1868, cuando tras la revolución se nacionalizó el Museo del Prado. Los nuevos aires progresistas, y la exaltación del
pueblo como protagonista de la Historia, los rescataron del olvido.
En el centro de la composición,
un mameluco, soldado egipcio
bajo órdenes francesas, cae
muerto del caballo mientras un
madrileño continúa
apuñalándole y otro hiere
mortalmente al caballo,
recogiéndose así la destrucción
por sistema, lo ilógico de la
guerra.
GOYA: ANTECEDENTE DE LA PINTURA CONTEMPORÁNEA
EL DOS DE MAYO. Al ser transportado el cuadro y su compañero desde Valencia a Barcelona, por orden del
gobierno de la República en 1936 la camioneta que los llevaba sufrió un accidente, rompiéndose la caja que los
protegía y rasgando el lienzo en la parte izquierda. Tras la restauración de las obras, se dejaron en esa zona sendos
espacios pintados en marrón, de nuevo para recordarnos la sinrazón de la guerra.
Al fondo, las figuras de los madrileños, con los ojos desorbitados por la rabia acuchillan con sus armas blancas a jinetes y
caballos mientras los franceses rechazan el ataque e intentan huir. Es significativo el valor expresivo de sus rostros y de
los caballos, cuyo deseo de abandonar el lugar se pone tan de manifiesto como el miedo de sus ojos. En suma, Goya
recoge con sus pinceles cómo pudo ser el episodio que encendió la guerra con toda su violencia y su crueldad para dar
una lección contra la irracionalidad del ser humano, como correspondía a su espíritu ilustrado. La ejecución es
totalmente violenta, con rápidas pinceladas y grandes manchas.
GOYA: ANTECEDENTE DE LA PINTURA CONTEMPORÁNEA
El tres de mayo de 1808. 1814. Óleo sobre lienzo, 2´68 x 3´47 m. Museo del Prado
GOYA: ANTECEDENTE DE LA PINTURA CONTEMPORÁNEA
EL TRES DE MAYO. La obra representa la brutal represión que sucedió a la jornada de enfrentamientos en diversos
lugares de Madrid el 2 de mayo de 1808 (hechos reflejados en el cuadro anterior). En la madrugada del día 3, todos
aquellos madrileños que habían sido detenidos por los franceses fueron pasados por las armas, sin juicio alguno, por
orden del mariscal Murat. El lugar donde tuvieron lugar los fusilamientos se ha situado en los altos de la Moncloa,
aunque algunos señalan que sucedieron en la Montaña del Príncipe Pío.
Un pelotón de
fusilamiento,
formado por
anónimos soldados
franceses, cuyos
rostros no vemos ya
que están colocados
de espaldas, se
disponen a fusilar a
los madrileños
detenidos en los
enfrentamientos del
día anterior. Así nos
lo indican los fusiles
preparados para
disparar y la posición
de las piernas. Una
gran fila de
detenidos, que vienen
caminando desde el
fondo, corta los dos
grupos de la
composición.
GOYA: ANTECEDENTE DE LA PINTURA CONTEMPORÁNEA
EL TRES DE MAYO. La escena se desarrolla por la noche y la iluminación intensamente dramática sobre los que van
a morir procede de un gran farol situado en el suelo, junto a los soldados franceses, que están en la penumbra. Goya
lleva a cabo un profundo estudio de las distintas reacciones de los seres humanos ante la inminencia de la muerte. El
fraile capuchino, arrodillado, se refugia en la oración y encomienda su alma a Dios. Otros, desesperados y
aterrorizados, se tapan los ojos. El centro de atención está en la figura del patriota madrileño que, con pantalón
amarillo y camisa abierta blanca, abre sus brazos, en un gesto que supone una clara referencia a Cristo en la cruz. Su
actitud denota valentía y arrogancia. En primer término y dramáticamente ensangrentados aparecen tendidos en el
suelo algunos cadáveres.
En el cuadro aparecen en
sucesión cronológica los
2 grupos de patriotas que
3 durante los acontecimientos
del día posterior a la
sublevación fueron fusilados
por las tropas imperiales.
1.Grupo de españoles que ya
han sido ajusticiados
2.Grupo protagonista en el
que podemos apreciar
diversas reacciones ante la
inminente muerte: heroísmo,
resignación, oración, ira,
miedo…
3.Grupo con patriotas que
esperan su turno para ser
fusilados. En ellos también
1 son evidentes diversas
actitudes.
GOYA: ANTECEDENTE DE LA PINTURA CONTEMPORÁNEA
Goya: El Gigante
o Coloso, estampa
suelta (1814-18)
GOYA: ANTECEDENTE DE LA PINTURA CONTEMPORÁNEA
Vida y obra: Fernando VII
El reinado de Fernando VII no hace sino aumentar
su desencanto. Se mantiene como pintor de la corte a
pesar de su pasado en la corte de José I Bonaparte,
pero su relación con Fernando nunca llegará a ser
buena debido a su espíritu crítico con la política
absolutista del nuevo monarca.
Aquelarre. 1820-1823. Pintura mural trasladada al lienzo, 1´40 x 4´38 m. Museo del Prado
GOYA: ANTECEDENTE DE LA PINTURA CONTEMPORÁNEA
Esta escena decoraba uno de los muros al lado de la puerta de la
sala de la planta alta. La cabeza de un perro aparece tras una
mancha de color, que Goya no definió, ante un espacio desnudo
y vacío y mirando hacia arriba, a algo o alguien que estaba
fuera de la composición.
Se ha relacionado con la idea de la fatalidad de la muerte, y es,
sin duda, la más enigmática de las Pinturas Negras.
A partir de las fotografías de
J. Laurent en 1866, tomadas
antes del traslado de las
pinturas desde su
emplazamiento original,
podemos observar una serie
de detalles perdidos en la
actualidad. En concreto el
perro, al que asoma parte del
lomo, parece mirar dos
pájaros sobre una roca.
TEMA 2:
LA TÉCNICA DEL
GRABADO EN
GOYA
“Tristes presentimientos
de lo que ha de
acontecer” Desastres 1.
(1820)
GOYA: GRABADOR
Series de grabados de Goya
4. Constituyen un documento excepcional en el que se nos describe con extraordinaria crudeza todo el horror
de la guerra, las atrocidades cometidas por ambos bandos y sus secuelas de hambre y destrucción
“El buitre
carnívoro”
Desastres 76 .
(1820)
GOYA: GRABADOR
Series de grabados de Goya
4. En esta serie Goya combina la aguada con aguafuerte y aguatinta. Establece violentos contrastes de luces y
sombras para acentuar el terrible efecto que nos producen las escenas.
“Murió la Verdad”
Desastres 79 . (1820)
GOYA: GRABADOR
Series de grabados de Goya “Si resucitará” Desastres 80 . (1820)
GOYA: GRABADOR
Series de grabados de Goya
5. La Tauromaquia será su tercera serie, elaborada seguramente entre 1814 y 1816, cuando el artista tiene casi
setenta años y en él hay un sentimiento de amargo desencanto. Esta serie constituye un paréntesis entre los
Desastres y los Disparates. Refugiándose en la emoción que las corridas de toros le habían causado desde su
juventud, el anciano artista vuelve a encontrar la pasión por vivir en las “suertes” del toreo, en la tensa
embestida del toro o en la multitud sin rostro de los tendidos. Por un lado plasma una visión histórica de la
fiesta, pero también sus recuerdos personales como gran aficionado a los toros.
“Ligereza y
atrevimiento de
Juanito Apiñani en la
plaza de Madrid”
Tauromaquia 20 .
(1816)
GOYA: GRABADOR
Series de grabados de Goya
6. Los Disparates, formados por 22 estampas, son la última serie de grabados y ciertamente los más difíciles de
interpretar y los más enigmáticos. Tampoco se conoce el orden que el artista dio a las estampas. Deben
situarse entre 1819 y 1824 (aunque no verán la luz hasta 1864), inmediatamente tras la Tauromaquia.
Goya:
Disparate
de Miedo
GOYA: GRABADOR
Series de grabados de Goya
6. La Academia las edita con el nombre de Proverbios intentando sugerir que las estampas podrían servir de
comentario a determinados refranes, aunque no se ha podido establecer esta relación.
Goya: Modo de poder volar los hombres con alas
GOYA: GRABADOR
Series de grabados de Goya
6. Algunas pruebas de estado llevan inscripciones, autógrafas al parecer, de Goya, que los titulaba Disparates
lo que ha permitido que se generalice esta denominación, que parece adecuada a lo absurdo e irracional de
sus imágenes. Goya: Disparate de carnaval
GOYA: GRABADOR
Series de grabados de Goya
6. La denominación de Sueños, por su parte, es más imprecisa pero parece reflejar mejor la atmósfera de
pesadilla que presentan. Goya: Bobalicón
GOYA: GRABADOR
Series de grabados de Goya
6. ¿Cuál es el sentido último de estas estampas? Es evidente que traducen un clima espiritual muy próximo al
de las Pinturas Negras, desde el desencanto que el artista vive en los años de la restauración absolutista.
Son visiones de pesadilla, escenas absurdas, personajes que no son de este mundo, reflejo del subconsciente
atormentado de un hombre que contempla la vida con profunda amargura y pesimismo. Desde esta
perspectiva Goya insiste en lo absurdo de la existencia, en el reinado de la hipocresía y en el fatal triunfo de
la vejez, el
dolor y la
muerte.
Goya: Disparate
desordenado
GOYA: GRABADOR
Goya: Disparate pobre. En este grabado dos partes aparecen claramente diferenciadas –un fondo claro a la izquierda
y un primer término más oscuro a la derecha- dando protagonismo a un personaje femenino con dos cabezas, una de
mujer joven y otra anciana. En el fondo aparece una figura aullante y otra de un perseguidor. Esperan a la mujer en
el espacio cerrado un coro de figuras femeninas entre las que predominan las viejas decrépitas y dolientes. El
significado podría entenderse en el paso de la mujer de una juventud de galanterías y pasiones, hacia la vejez y
muerte.
GOYA: CONCLUSIÓN
ZARAGOZA 2011