Ser Visibles
Ser Visibles
Ser Visibles
CIUDADANOS. POLÍTICA Y
REDES SOCIODIGITALES EN
AMÉRICA LATINA
TO BE VISIBLE IN ORDER TO BE CITIZENS. POLITICAL AND
SOCIO-DIGITAL NETWORKS IN LATIN AMERICA
SER VISÍVEL, PARA SEREM CIDADÃOS. POLÍTICA E REDES
SOCIODIGITAIS NA AMÉRICA LATINA
56 E-mail: rtrejo@unam.mx.
ABSTRACT
In Latin America, as in other regions, currently there is no social or political movement with
nationwide importance that does not make use of the social media. The client-related political
relations between politicians and voters have been transformed, with some new features
into the Internet field. This texts discusses several political and social uses of such networks,
present recent examples in Mexico, Colombia, Brazil, Chile and Cuba. The intention is of
stressing several differences between the traditional politics and the use of online resources for
proselytism and political discussion. 57
KEYWORDS: LATIN AMERICA INTERNET; POLITICS IN TWITTER; FACEBOOK; POLITICAL CAMPAIGNS; SOCIO-
DIGITAL NETWORKS.
RESUMO
Na América Latina, como em outros lugares, hoje não há nenhum movimento social ou
político, de importância nacional, que não utilize as redes sociodigitais. Relações clientelistas
que existiram entre políticos e eleitores profissionais têm-se transformado, com algumas
novidades, no campo da Internet. Neste texto, são discutidos alguns usos políticos e sociais
dessas redes, apresentando exemplos recentes do México, Colômbia, Brasil, Chile e Cuba.
Pretende-se destacar algumas diferenças entre a política tradicional e o uso de recursos online
para o proselitismo e discussão política.
PALAVRAS-CHAVE: INTERNET NA AMÉRICA LATINA; POLÍTICA NO TWITTER; FACEBOOK; CAMPANHAS
ELEITORAIS; REDES SOCIODIGITALES.
“Estar conectado implica esencialmente estar el quehacer político institucional. Partidos políti-
visible”. La frase es de Rosalía Winocur (2012), in- cos y candidatos abren sitios en línea y compiten
vestigadora de la socialización de los latinoameri- por las preferencias en Twitter y Facebook. El ac-
canos en línea y describe una sensación, que a la ceso a espacios en televisión (que, según las reglas
vez resulta convicción, desplegada por centenares en cada país, puede ser supervisado por las au-
de millones de usuarios de las redes sociales digi- toridades electorales) es complementado con la
tales en esta región del mundo 1. Los latinoameri- colocación de videos en YouTube que no requiere
canos se enlazan a y en Internet para consumir y de inspección previa. Las redes sociales digitales
difundir información. También lo hacen para mi- se han añadido a los territorios de proselitismo
rar, aprender, comprar, entretenerse, relacionarse que ya ocupaba la política institucional. Pero so-
entre sí, de la misma manera que lo hacen usua- bre todo son espacio para que los ciudadanos,
rios de la Red de redes en todo el mundo. La na- con frecuencia más allá e incluso al margen de los
vegación que despliegan cotidianamente los más partidos, hagan política y publiciten definiciones
de 320 millones de habitantes de América Latina acerca de los procesos políticos institucionales.
que al finalizar 2014 utilizaban Internet de forma En la actualidad, no hay movimiento social
regular contribuye a propagar información, do- o político capaz de adquirir relevancia que no
tarlos de instrumentos y espacios de expresión y, tenga alguna expresión en las redes digitales. Así
en una medida a menudo magnificada pero que como durante la segunda mitad del siglo XX la
sin duda es importante, también implica nuevas televisión se volvió indispensable para las cam-
formas de intercambio y deliberación de ideas. pañas políticas, ahora la presencia en las redes
Estar conectado en las redes sociales significa sociales que se asientan en Internet forma parte
ganar y mantener visibilidad. Los usuarios de Fa- de las tareas frecuentes de quienes hacen política,
cebook, Twitter y otras redes participan en colec- o incluso de aquellos que buscan expresarse ante
tividades específicas sin dejar de ser miembros de las acciones y decisiones de los políticos profe-
58 muchos otros circuitos de socialización fuera de sionales. Algunos autores (como Castells, 2012)
línea y sin dejar de ser ciudadanos de sus respec- consideran que, al desarrollarse en las redes so-
tivos países. Pero en las redes sociales construyen ciales digitales tanto como fuera de línea, los mo-
y afianzan variadas identidades al formar parte vimientos ciudadanos pueden incluso reinventar
de diversos circuitos de interés. La ciudadanía, las prácticas de la democracia. Sin embargo la
entendida como el conjunto de atributos y va- política ciudadana en las redes digitales tiene re-
lores del individuo que cuenta con información sultados tan variados y contradictorios como la
e interés suficientes para comprometerse en la que se desarrolla fuera de línea.
discusión y eventualmente en la solución de los En la primavera de 2012, el eficaz activismo
asuntos públicos, se desarrolla y ejerce, al menos que desarrolló en las redes sociales le permitió
en parte, en las redes sociales. al movimiento #YoSoy132 erigirse en uno de los
protagonistas más importantes de la elección en
De la Red, a la televisión México para la presidencia de la República. Se
En toda América Latina se advierte un creciente trataba de un movimiento iniciado por alum-
entrelazamiento entre la comunicación digital y nos de la Universidad Iberoamericana que, dis-
gustados ante las versiones que los acusaban de
1 En este texto denominamos indistintamente “redes sociales”, “redes
sociales digitales” y “redes sociodigitales” a plataformas de Internet no ser universitarios cuando protestaban contra
como Facebook, Twitter y YouTube. la visita del candidato presidencial del PRI a esa
A través de Twitter y Facebook, el video de los 131 alumnos universitarios
sacudió el interés de otros sectores, aprovechando la irradiación
instantánea que hacen posible esas plataformas digitales.
bién, merced al canje de prebendas por votos. Así es D) Los medios de comunicación, principal-
la política en todas las latitudes. Pero en la mayor mente la televisión, propician el culto a la per-
parte de América Latina esos rasgos se acentúan de- sonalidad, la preponderancia del marketing so-
bido a por lo menos cuatro circunstancias. bre las propuestas y la escasez, por lo tanto, de
A) La inmadurez de la cultura política entre la deliberación de ideas entre los ciudadanos. Las
la mayor parte de los ciudadanos. Muchas per- democracias contemporáneas están inevitable-
sonas prefieren opciones políticas autoritarias, mente ligadas a la exposición de los asuntos pú-
en las que encuentran una solución al menos en blicos en los medios de comunicación de masas.
apariencia fácil para sus requerimientos más ur- La capacidad de propagación que alcanzan tales
gentes. La democracia es vista como una opción medios es una ventaja para la democracia, al es-
deseable pero se incrementa el recelo acerca de parcir mensajes políticos en sociedades de masas
sus limitaciones. En 2011 el 57% de los latinoa- en donde, de no ser por la televisión o la radio,
mericanos, en una encuesta levantada en 18 na- los ciudadanos estarían marginados de la infor-
ciones de la región, se declaraba insatisfecho con mación política. Pero esa dependencia respecto
el funcionamiento de la democracia en su país de los medios supedita al quehacer político a las
(Latinobarómetro 2011, p. 97). prioridades y los intereses de las corporaciones
B) Las crisis económicas, la pervivencia e incluso comunicacionales de carácter privado, que en la
el ensanchamiento de las desigualdades sociales y región suelen ser muy poderosas.
la extensión de la violencia suscitada por grupos El acceso a Internet y especialmente la parti-
delincuenciales, se conjugan para que los ciuda- cipación en redes sociodigitales permite recibir 61
danos favorezcan la elección de gobiernos arbitra- informaciones, conocer puntos de vista e incluso
rios aunque surjan de elecciones democráticas. En intervenir en intercambios de opiniones sobre los
2011 el problema señalado como de mayor grave- más variados asuntos públicos. Todas esas activi-
dad por los latinoamericanos, en cada uno de sus dades favorecen la formación de una ciudadanía
países, fue la delincuencia y la seguridad pública, más sólida. En sistemas políticos de larga tradi-
reconocido como tal por el 28%. En segundo sitio, ción democrática, o en condiciones propicias al
en un distante 16%, fue mencionado el desempleo fortalecimiento de valores como la deliberación
(Latinobarómetro, 2011, p. 65). y la tolerancia, las redes sociales son espacios de
C) La pobreza, al mismo tiempo, hace vulnera- interacción y contraste que afianzan el ejercicio
ble a la democracia. En 2012, el 11.3% de los la- de la ciudadanía. En la mayor parte de América
tinoamericanos vivía en situación de indigencia Latina, la utilización plena de esos recursos de
y el 28.2% en condiciones de pobreza (CEPAL, intercambio de informaciones e ideas se encuen-
2012). Tales carencias propician que amplios seg- tra restringida por una insuficiente disposición
mentos de ciudadanos sean especialmente sensi- de la mayor parte de los ciudadanos al esfuerzo
bles a ofertas de carácter clientelar, como el obse- y al compromiso que se requieren para conocer,
quio de los más diversos bienes de consumo para comparar y compartir ideas acerca de los asun-
que voten por determinados candidatos. tos públicos. Las redes son utilizadas para venti-
lar esos temas únicamente por los segmentos de terizó por la innovación: tono conciliador y casi
ciudadanos más directamente atraídos por tales humorístico, interpelación a los jóvenes, propues-
cuestiones. La política en las redes digitales que- tas sofisticadas, uso intensivo de internet y de las
da confinada a los ciudadanos con más tiempo y redes sociales. Una propuesta innovadora en una
condiciones materiales, o con interés más directo democracia muy tradicional como la colombiana;
en tales temas. una buena noticia para la política…”
Gracias a esos recursos Mockus entusiasmó a
En la Red, mas no en las calles los jóvenes, que en las democracias contemporá-
La apertura y flexibilidad de las redes digitales neas suelen desconfiar tanto del quehacer políti-
se aviene de manera casi natural con la política co que ni siquiera se inquietan por informarse y
moderna de estilos innovadores, propicia a la menos aún por expresar simpatías electorales. El
discusión y sobre todo maleable en forma y fon- ex alcalde era y se mostraba distinto a los políti-
do. Se trata de un quehacer político en donde se cos tradicionales. Con ese perfil conmovía e in-
amalgaman el intercambio reticular con la plas- volucraba a los electores más jóvenes, a quienes
ticidad de la creatividad digital. La política asen- hallaba no en las plazas públicas sino en espacios
tada en redes tiende a ser menos descentralizada como Facebook y Twitter. A esos muchachos, ex-
y más participativa que la de carácter tradicional. plica el mismo autor:
La unilateralidad del discurso político conven- Los pudo vincular porque encontró que las
cional suele ser más versátil cuando se desplie- redes sociales y el activismo de internet eran la
ga en una plataforma creativa y que favorece la arena política donde los jóvenes saben actuar,
participación. Se trata de una política más atrac- crear, comunicar y politizar sus vidas. Para de-
tiva para los ciudadanos que buscan renovar la cirlo con una frase ya transformada en cliché,
vida pública. Pero en condiciones de insuficiente los jóvenes son nativos digitales; ellos son como
contexto para que sean modificadas costumbres las redes e internet, implican otros modos de
62 e inercias ciudadanas como el apego a formas de hacer política: todos hacen campaña, todos de-
relación patriarcales y clientelares con el poder, vienen creativos y activistas, todos son la red
la política reanimada en las redes sociodigitales que mueve, todos habitan la moda de internet
puede ser insuficiente. La preponderancia de vie- para sentirse interactivos, fluidos y móviles
jos intereses y estilos del quehacer político con- (Rincón, 2011, p. 78).
vencional todavía tiene más peso que el llamado
de la renovación. Esos nativos digitales, usufructuarios ya de la
Así ocurrió en Colombia en 2010, cuando frente Red, se apropiaron de la campaña de Antanas
al candidato conservador Juan Manuel Santos se Mockus. La “ola verde”, como se le llamó a esa
postuló el ex alcalde de Bogotá y ex-rector univer- campaña, creció en Internet. En Facebook, Mo-
sitario Antanas Mockus. Impulsada por el Partido ckus llegó a ser el séptimo personaje con más
Verde, el contraste con la política tradicional que seguidores en todo el mundo. Decenas de miles
planteaba esa candidatura, su convocatoria a los de jóvenes extendieron esa ola, para ellos tan
jóvenes y el uso de redes sociales en Internet, la hi- prometedora. Las redes sociodigitales eran de la
cieron diferente y exitosa frente a otras opciones. campaña verde. Pero las calles, como apunta Rin-
En palabras del profesor Omar Rincón (2011, p. cón, siguieron siendo dominadas por la política
76) estudioso de los medios y la sociedad colom- tradicional. La elección se resolvió con el 24.5%
bianos, la campaña de Antanas Mockus “se carac- de la votación para Mockus y el 69% para Santos.
La libertad en las redes sociales contrasta con las verdades únicas
o las razones de Estado que a menudo imperan en los regímenes
anclados en prácticas conservadoras.
“La campaña de Mockus perdió cuando pensó que en las sociedades en esta región la informa-
que todo era Internet y no tuvo base social ni par- ción y discusión de los asuntos públicos puedan
tido que movilizara votos; perdió cuando creyó afianzarse en el acceso a Internet. En el otro lado
que bastaba con los jóvenes y resultó que muchos de esa balanza, la disponibilidad de espacios para
de estos no salieron a votar porque se quedaron enterarse de los asuntos públicos y cuestionarlos
mirando ‘radicalmente’ la pantalla” (Rincón, está contribuyendo a modificar tanto la depen-
2011, pp. 84-85). dencia que los ciudadanos han tenido respecto
Por supuesto muchos simpatizantes del ex- de los medios de comunicación convencionales,
-alcalde de Bogotá no se conformaron con in- como la unilateralidad y parcialidad del discurso
tercambiar mensajes en Twitter y Facebook ni político tradicional.
se limitaron a la discusión de videos de YouTu-
be y salieron a las calles, tanto para persuadir a Interacción, ventaja democrática
sus conciudadanos como para votar el día de la Durante algún tiempo persistirán zonas de
elección. Pero la notoria disociación entre el auge América Latina, tanto geográficas como sociales,
de la campaña de Mockus en las redes digitales insuficientemente conectadas al entorno digital.
y su presencia insuficiente en las urnas, con des- Esa brecha disminuye día tras día pero no con la
consuelo para sus partidarios, permitió confir- rapidez que sería deseable para que la conectivi-
mar que la influencia en Internet no basta para dad deje de ser un factor adicional de margina-
tener éxito político. El ascendiente en las redes ción entre los segmentos más empobrecidos en
digitales permite afianzar las convicciones de los esta región. En Brasil se registra uno de los de- 63
ya simpatizantes de una causa política, llamar la sarrollos más espectaculares en el crecimiento de
atención de quienes tienen otros puntos de vista enlaces digitales. Al comenzar el siglo XXI, menos
y especialmente de aquellos que no cuentan con del 3% de los brasileños tenía acceso a Internet.
una convicción definida y atraer el interés de los En diciembre de 2013, la Red llegaba al 54% de
medios de comunicación fuera de la Red. La te- los habitantes de ese país2. Se trata de un aumen-
levisión en primer lugar, pero además la radio y to en más de 105 millones de usuarios que colo-
la prensa, siguen resultando indispensables para can a Brasil como el país en donde se encuentra
que una causa o una postulación política pros- la tercera parte de los accesos a Internet en toda
peren en la sociedad. Eso ocurre especialmente América Latina.
en países que si bien han experimentado avances Conforme Internet se extiende en ese país, los
muy significativos en la conectividad a Internet, brasileños se involucran de manera masiva e in-
todavía padecen brechas digitales que marginan tensa en las redes digitales. Hasta 2009 la red que
a porciones importantes de sus sociedades. A fi- más frecuentaban era Orkut, de la cual formaba
nes de 2014, el 52% de los latinoamericanos tenía
2 Entre enero de 2007 y diciembre de 2013 la cobertura de Internet
acceso a alguna conexión a Internet, de manera
en Argentina pasó del 34% al 75% de la población; en Chile, del 42%
regular (IWS, 2014). Se trata de un porcentaje al 67%; en Colombia, del 13% al 62%; en México, del 19% al 49%, en
notable, pero todavía insuficiente para considerar Venezuela, del 12% al 45% (CIA, 2014 e IWS 2014).
parte el 80% de quienes en ese país se conectaban de Twitter que hizo en 2010 la campaña del as-
a Internet (Andrade Lopez, 2011, p. 22). Sin em- pirante presidencial Jose Serra, concluyó: “Las
bargo en diciembre de 2011 Facebook se convir- elecciones brasileñas de 2010 consolidan el ar-
tió en la red más exitosa, al llegar a más de 36 mi- gumento de que los candidatos, simplemente, ya
llones de usuarios en esa nación. Tres años más no pueden dejar de estar presentes en las redes
tarde, los usuarios de Facebook en Brasil ascen- sociales. Si adoptan esa postura, corren el riesgo
dían a 71 millones con lo cual ese era, ya, el tercer de ser tachados de ultraconservadores o acusa-
país con más suscripciones a dicha red social en dos de resistirse a las contribuciones (o críticas)
todo el mundo --superado sólo por Estados Uni- que muchos usuarios están dispuestos a ofrecer”
dos con 152 millones y la India con 108 millones (Marques, et. al. 2011, p. 361).
de usuarios de Facebook (Statista, 2014). Cuando los contenidos que candidatos o ciuda-
Con esa cobertura de Internet es entendible danos colocan en línea pasan de las redes sociales
que todas las campañas políticas en Brasil, tan- a los medios convencionales, ganan mayor pre-
to de alcance nacional como regional, busquen sencia pública. También es relevante el ejercicio
ecos en las redes sociodigitales. Sin embargo sería deliberativo que puede desarrollarse entre unos
difícil asegurar que las expresiones en línea de ta- y otros, aunque sea con limitaciones de espacio y
les campañas han influido de manera definitoria con la interlocución restringida que propician los
en los resultados electorales. En octubre de 2010 diseños de Twitter o Facebook. Los investigado-
hubo elecciones presidenciales Brasil. Poco antes res antes citados han considerado:
de que se realizaran, en julio, el 76% de los in- No obstante dificultades como la exclusión
ternautas brasileños aseguraba que la influencia digital, el debate que se produce en el ámbi-
de una campaña en línea no los haría modificar to de redes sociales como Twitter puede gene-
su voto (Andrade Lopez, 2011, p. 42). Un estudio rar repercusiones diversas, que trascienden a
sobre el empleo de Internet en aquella competen- la propia Internet… El hecho de utilizar una
64 cia electoral insistió en que la irrupción de la po- gran variedad de herramientas y de fomentar
lítica en las redes sociales permitió dar voz a los el diálogo con los usuarios no garantiza nece-
ciudadanos y consolidar posturas políticas que ya sariamente el éxito electoral. Puede ocurrir,
habían definido, pero no necesariamente suscitar con todo, que la facilidad de interacción entre
nuevas preferencias electorales: candidatos y ciudadanos se convierta en una
El papel de las redes, antes que nada, consiste en ventaja para la democracia como un todo ya
hacer visible la exposición de ideas de una ma- que eso propicia, de alguna manera, que los as-
nera que la televisión no permite. En la radio, el pirantes a cargos de elección se encuentren en
diario o la televisión, el espacio abierto a la plu- situaciones en las que serán puestos a prueba
ralidad de ideas es limitado. Vamos a Internet con preguntas que no siempre les gustaría tener
para exponer puntos de vista y, más que eso, para que responder Marques, et. al. 2011, p. 364).
buscar contenidos que fundamenten nuestras
opiniones previas (Andrade Lopez, 2011, p. 42). Engañosa horizontalidad
Las redes sociales, entonces, son instrumentos
En muchas ocasiones, más que para obtener de interlocución en los temas de la agenda políti-
nuevos adherentes los partidos políticos y sus ca de un país por lo menos en tres sentidos.
candidatos abren cuentas en las redes sociales 1) Sirven como vehículos para llevar, a los
porque otros lo hacen. Un análisis del empleo ciudadanos que no tienen compromisos políti-
cos explícitos, los mensajes de los políticos que gos” o “seguidores” que aquellos a los que tiene
buscan su aceptación. En tal sentido, las redes capacidad para seguir, a su vez, y tener interlocu-
sociales fundamentalmente permiten reforzar ción con ellos.
simpatías, antipatías o indiferencias forjadas por En diciembre de 2014, la cuenta en Twitter de
los ciudadanos en su exposición a mensajes de la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff (@dilma-
los medios convencionales y/o a partir del prose- br) tenía 3 millones 200 mil seguidores y seguía a
litismo directo que hacen partidos y candidatos. 368. La presidenta de Argentina, Cristina Kirch-
2) En las redes sociales los ciudadanos pue- ner (@CFKArgentina) era seguida por 3 millones
den discutir invitaciones, comportamientos, 400 mil y ella, a su vez, seguía a 91 twitteros. El
propuestas o alusiones formuladas por candi- presidente de Colombia, Juan Manuel Santos (@
datos, aspirantes o dirigentes políticos. Twitter JuanManSantos) tenía más de 3 millones 400 mil
o Facebook, entre otras, son redes abiertas a los seguidores y esa cuenta seguía a 1558. Después
comentarios de quienes se adhieren a ellas. Esos de cierto rango, seguir a muchos es casi idéntico
usuarios no requieren de conocimientos técni- a no seguir a nadie. Es imposible que un usuario
cos peculiares, ni de autorización alguna, para ordinario pueda estar al tanto de los tuits de va-
expresar opiniones sobre cualquier o casi cual- rios millares de personas. El presidente de Méxi-
quier tema. La confección y colocación en línea co, Enrique Peña Nieto, (@EPN) contaba con casi
de videos en YouTube, en cambio, precisa de una 3 millones 400 mil seguidores y su cuenta seguía
mínima destreza técnica aunque el auge de telé- a únicamente 2213.
fonos celulares también ha facilitado su propa- Esas disparidades confirman que, cuando se
gación. Las redes sociodigitales funcionan como trata de personajes públicos, la equidad en las
ágoras en donde caben las inquietudes más va- redes sociodigitales se convierte en solamente
riadas pero con tres limitaciones. La primera de un discurso atractivo y justificatorio pero resulta
ellas es la ya mencionada restricción de espacio. imposible ponerla en práctica. Tales diferencias
Una más, radica en la dificultad para jerarquizar entre adherentes de cuentas como las que hemos 65
temas y aportaciones en la constante profusión mencionado y usuarios a los que siguen en Twit-
de mensajes en tales redes. En tercer término las ter los personajes notorios, no cancelan otros
redes digitales no reemplazan, en cobertura o rasgos de las redes sociodigitales como vehículos
visibilidad social, a los medios de comunicación y espacios de información y discusión entre la
tradicionales. mayor parte de sus usuarios.
3) Las redes sociodigitales también pueden ser
útiles para que los políticos profesionales dia- Apertura, de signos contradictorios
loguen con el resto de los ciudadanos. En redes La política convencional, como hemos seña-
como las que hemos mencionado hay la posibili- lado, tiende a entrar en colisión con la partici-
dad de entablar relaciones horizontales, de usua- pación, la interacción y el compromiso que po-
rio a usuario, aunque esa capacidad pocas veces sibilitan las redes sociodigitales. Autoritarismo
se pone en práctica por parte de personajes pú- y paternalismo, clientelismo y corrupción, así
blicos como los candidatos a cargos de gobierno como, incluso, coacción y represión, son rasgos
o los gobernantes en ejercicio. A menudo se exa- del quehacer político tradicional que resultan
geran las capacidades de ese trato de uno a uno. muy conocidos para las sociedades latinoameri-
En realidad, cuando tiene notoriedad pública un 3 Datos observados en cuentas de Twitter el 21 de diciembre de 2014.
personaje político acumula muchos más “ami- Se eligieron únicamente cuentas certificadas.
canas. No obstante la modernización de los siste- luego no constituyen el principal contrapeso a la
mas políticos, esos defectos de la política no han vieja política autoritaria. Pero desempeñan un
desaparecido en la región. papel cada vez más relevante.
La apertura de la redes contradice, práctica- En las redes digitales la gente puede expresarse,
mente por definición, el carácter excluyente y aunque no siempre lo haga con la sensatez que
elitista de la política habitual. La circulación de hace falta para construir un contexto deliberati-
mensajes sin restricciones tiende a enfrentarse vo. En las redes, también, se crean relaciones de
con el control autoritario de la información. La interlocución que acercan al poder político a los
libertad en las redes sociales contrasta con las ciudadanos. Para hacer política en un partido es
verdades únicas o las razones de Estado que a necesario afiliarse, ser aceptado, transitar por los
menudo imperan en los regímenes anclados en caminos de la meritocracia interna, mostrar fide-
prácticas conservadoras. Pero las diferencias en- lidad y disciplina, aguardar pacientemente. Ha-
tre la vida pública abierta que se ejerce en las re- cer política en línea, en cambio, requiere emplear
des digitales y la sociedad cercada por la política la cuenta en alguna red social para colocar o pro-
autoritaria están lejos de constituir un panorama palar un mensaje. Desde luego no es lo mismo.
polarizado. No nos encontramos ante una dico- Quienes quieren hacer política profesional deben
tomía maniquea porque las redes sociodigitales cumplir las reglas de un partido y antes que nada
no son exclusivamente espacios de deliberación identificarse con él. Hacer política en línea po-
ciudadana, racional, ordenada y constructiva. A cas veces implica resultados que trasciendan de
menudo en tales redes predominan la intoleran- inmediato, pero le permite al ciudadano decir
cia, la irreflexión o sencillamente vulgaridades sus verdades aunque sea a los seguidores de su
y simplezas. Y, por otra parte, en casi toda Lati- red, respaldar o rechazar una causa específica de
noamérica el ejercicio autoritario de la política manera modesta pero comprometida, participar
encuentra contrapesos en las sociedades y en los aunque sea desde la distancia de su computado-
66 regímenes políticos mismos. ra. La política así entendida (es decir, la atención
La diversificación de opciones en el campo de a los asuntos públicos) deja de ser patrimonio de
la política institucional; las ya señaladas reglas los partidos y sus militantes.
que favorecen la competencia electoral democrá- Las redes sociales digitales son espacios abier-
tica; el surgimiento de organismos no guberna- tos, flexibles, repletos de información y a menu-
mentales cada vez más perseverantes e influyen- do sin jerarquías claras, pero capaces de llevar
tes; el compromiso de instituciones académicas de inmediato y a los más diversos ámbitos las
y religiosas, entre otras, con los procesos de mo- opiniones de quienes hasta ahora no tenían voz
dernización política; los medios de comunica- en asuntos como los que configuran las agendas
ción cuando, con independencia, participan de la políticas. La organización reticular contrasta con
sanción ciudadana al poder político: todos esos la estructura jerárquica tanto de las institucio-
son factores de poder que contribuyen a equi- nes políticas tradicionales (gobiernos, partidos)
librar tendencias autoritarias y a propiciar una como de los medios de comunicación convencio-
apertura constante, incluso en países en donde nales (prensa, radiodifusión). En palabras de un
los gobiernos de comportamiento arbitrario si- analista de las movilizaciones de los estudiantes
guen encontrando respaldo entre los ciudadanos. en Chile que se han apoyado en las redes digita-
En ese panorama complejo y cambiante, las redes les: “Ya no estamos ante modelos de comunica-
sociodigitales están lejos de ser el único y desde ción centralizados, verticales y masivos al estilo
‘Broadcast’ sino ante modelos horizontales, no tal que ese país alcanzó antes que otras naciones
jerarquizados y personalizados, el estilo ‘Podcast’ latinoamericanas permitió que algunos grupos
” (Cuadra, 2012, p. 14). de la sociedad, que habitualmente eran margina-
Si en los medios convencionales ha sido exitoso dos en los grandes medios, pudieran crear “cir-
el modelo broadcast, es decir, la transmisión de cuitos de identidad y memoria”. Se trataba, en-
mensajes por parte de pocos emisores y dirigi- tre otros, de estudiantes de escuelas secundarias,
dos a grandes números de destinatarios, se debe “miembros universitarios de la etnia mapuche o
al arraigo social que adquirieron tales medios e sectores específicos de las diferentes culturas po-
incluso a su capacidad de adaptación. La radio o líticas”. Todos ellos, explica Weibel, conformaban
la prensa tradicionales pueden estar al servicio de “sectores que no podían acceder a circuitos ma-
regímenes autoritarios, reforzando sus mensajes, sivos de distribución simbólica [y] lo hicieron, a
pero también pueden debilitarlos al propagar in- través de Twitter, blogs, Facebook u otras redes/
formaciones incómodas y opiniones críticas para soportes digitales”. Sin embargo, siguiendo al
el poder político. A las redes sociales, los medios mismo autor:
convencionales las aprovechan difundiendo a ...este proceso fue apropiado en parte por los
través de ellas sus contenidos e incluso haciéndo- medios, los que se acercaron al fenómeno de
las vehículo para encontrar retroalimentación en dos formas principales. Por un lado integrando
sus audiencias. a sus plataformas digitales a las comunidades
En toda América Latina se ha podido identifi- de blogueros y cibernautas de diferentes redes
car un proceso de apropiación de los recursos di- digitales (aunque también con un criterio de
gitales por parte de medios convencionales, una visibilización/invisibilización). Por otro, in-
suerte de hipermediatización de la política. Ese corporando a los usuarios de estas TICS como
término ha sido utilizado desde fines del siglo XX proveedores/productores de contenido a través
para designar la sujeción del quehacer político a preferentemente de Twitter. En síntesis, la hi-
reglas y estilos de los medios de comunicación, permediatización de la política, que estuvo en 67
muy especialmente la televisión (Trejo, 2001, p. consonancia con las prácticas de la campaña del
109 y ss.). La preeminencia del marketing, la presidente Barack Obama en Estados Unidos,
transformación del discurso político tradicional fue un proceso que abrió brechas discursivas y
para ajustarse a las exigencias de la propaganda de circulación, pero al mismo tiempo que am-
electrónica –frases breves, gestos enfáticos, la es- plió los espacios de penetración de los regíme-
cenografía por encima de la ideología—, el aban- nes de significación y politicidad dominantes, a
dono paulatino de las plazas públicas para con- través de la apropiación de redes que hicieron
centrarse en los sets de televisión y la necesidad los medios, en su mayoría conservadores en lo
de acumular recursos para sufragar los altos cos- político (Weibel, 2010, pp. 44-45).
tos de escenarios, equipo y espacios televisivos,
propiciaron aquella supeditación de la política, a Tener voz, para decir y gritar
los medios. Ahora se le ha podido denominar de Las experiencias antes mencionadas son so-
la misma forma al empleo conjunto de medios lamente ejemplos entresacados de panoramas
tradicionales y de nuevos medios digitales como nacionales cada vez más nutridos de casos en
espacios que se pretende resulten simbióticos en donde la vida pública, desde luego también la de
la confección del proselitismo contemporáneo. carácter expresamente político, transita y se nu-
En Chile, por ejemplo, la alta conectividad digi- tre o diversifica en las redes sociodigitales. Nos
hemos referido al empleo de tales redes en países política en la isla. Por una parte, Twitter les resulta
en donde se han experimentado renovaciones en útil a ella y otros usuarios en Cuba porque para
las prácticas e incluso en las estructuras políticas colocar mensajes no se requiere conexión a Inter-
y en donde, además, las acciones de la sociedad net. Además allí se pueden difundir llamados de
cuando trata de influir en la vida pública obtie- apremio que, reenviados por otros tuiteros en el
nen alguna presencia en los medios de comu- mundo, alcanzan una presencia global que el go-
nicación de masas. Las redes digitales mismas, bierno de Cuba no puede soslayar:
incluso, han propiciado una mayor resonancia A diferencia de otros servicios en la web, Twit-
pública de movimientos autónomos y grupos ter ofrece la posibilidad de publicar a través de
ciudadanos de variada índole, como les sucedió SMS sin necesidad de estar conectado a la gran
en México a los estudiantes del #YoSoy132 que, telaraña mundial. Parecería una herramienta
de YouTube y Twitter, pasaron a las calles y de allí, hecha a la medida de esta ‘Isla de los desconec-
rápidamente, a la televisión nacional. tados’, si no fuera por el alto precio del envío
Pero no toda nuestra región es así. Todavía hay de mensajes de sólo texto hacia móviles en el
países sin opciones institucionales para el queha- extranjero. No obstante, se han vuelto comunes
cer político que no se subordine al predominio del en el ciberespacio esos breves mensajes emiti-
Estado y sin opciones, tampoco, ante la unilatera- dos desde Cuba, que tienen como característica
lidad de los medios de comunicación cuando es- principal la ausencia de trivialidad, pues es-
tán plenamente allanados al Estado. En Cuba las tán marcados por la necesidad de contar algo
redes sociodigitales han sido privilegio de pocos, apremiante. Si otras twittósferas a lo largo del
lo que algunos dicen en ellas no trasciende a la mundo se alimentan de comentarios sobre la
prensa ni a la televisión pero permite llevar fuera calidad del café en ciertos restaurantes o del
del país el testimonio de quienes no coinciden con número de goles en un partido de fútbol, los
la unanimidad política forzosa. Las redes sociales, oriundos de la mayor de las Antillas desbordan
68 en esas condiciones, no refuerzan convicciones premura. Bajo la etiqueta #cuba pueden leerse
porque antes de emplearlas con propósitos de dis- desde anuncios apremiantes como ‘Estoy dete-
crepancia política es preciso estar persuadido de lo nido’, pasando por el recurrente ‘Mi casa está
que se dirá en ellas y armarse de valor para esperar rodeada de agentes de la seguridad del Estado”
posibles represalias. hasta la exigencia de renuncia de ciertos fun-
Las redes sociales se han convertido en espacios cionarios públicos… Por el momento twittear
para decir verdades distintas a las del régimen desde Cuba no tiene un carácter lúdico, sino
cubano. En blogs primero y más recientemente de urgencia, grito, pedido de ayuda. (Sánchez,
beneficiándose de la rapidez de Twitter, algunos 2010, 105-106).
centenares de internautas en ese país difunden y
comparten mensajes que aún permanecen al mar- En mayo de 2014 Yoani Sánchez inició la pu-
gen de la mayoría de los cubanos pero que alcan- blicación en línea del diario 14ymedio.com. A esa
zan relevancia política dentro y fuera de aquella periodista y sus compatriotas tuiteros la red so-
nación. Yoani Sánchez, una joven periodista que ciodigital en la que participan les ha provisto de
ha ganado reconocimientos internacionales es la cobijo político, les permite decir sus verdades, les
usuaria de Twitter más conocida de Cuba y explica da visibilidad. Ese ha sido el rédito más impor-
de qué manera esa red ha sido idónea para pro- tante que las redes sociales constituidas en Inter-
pagar un nuevo ángulo acerca de la vida social y net han traído a la vida pública en América La-
tina4. En contraste con la política habitualmente cadas, pero comienzan a formar parte de esa re-
cerrada o distante para las mayorías, en las redes novación. La construcción de una nueva política
sociales se entablan lazos, se abren foros, se in- en América Latina comienza por la identificación
tercambian inquietudes. Las redes sociodigitales de los ciudadanos precisamente como eso: indi-
no transforman automáticamente prácticas de la viduos que son sujetos de derechos políticos en-
vieja política que han permanecido durante dé- tre los cuales se encuentran los elementales pero
no siempre posibles derechos a la expresión, a la
4 En diciembre de 2014 el presidente de Estados Unidos, Barack Oba-
ma, anunció la regularización de relaciones diplomáticas con Cuba y,
organización, a la incidencia en las decisiones que
por consiguiente, el inicio de posibles cambios en los vículos econó- los afectan. Estar conectado significa estar visible.
micos de esa isla con el resto del mundo. Una de las primeras medidas Y eso, en una vida pública hasta hace no mucho
que Obama le propuso al gobierno de Cuba fue la ampliación del ac-
monopolizada por pocas voces, no resulta poco.
ceso a Internet en Cuba que según estimaciones no oficiales, apenas
llegaba al 5% de los cubanos (Oppenheimer, 2015).
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Recebido: 23/04/2015
Aceito: 01/07/2015