Unidad 9 Derecho Internacional Privado
Unidad 9 Derecho Internacional Privado
Unidad 9 Derecho Internacional Privado
extranjeras
(Ver de Fernandez Arroyo)
Fundamentos del Instituto: aumento de las relaciones internacionales y aumento de las situaciones
jurídicas.
Principio: las sentencias son eficaces dentro del territorio. Excepción: continuidad de las relaciones
jurídicas en el tiempo y en el espacio.
Tutela judicial efectiva.
Tradicionalmente : Tercer nivel de cooperación. Actualmente es un instituto autónomo.
El encargado de tramitar el reconocimiento es la parte interesada.
Reconocimientos: aceptación del derecho de foro, de una sentencia para que genere efectos en el
territorio donde se pretende reconocer la sentencia.
Juez del E requerido (donde se pretende reconocimiento) y juez del E requirente (juez donde se
tramitó la causa)
El juez del E requerido va a aceptar la sentencia como propia, esto es aplicable para sentencias
declarativas y constitutivas. La ejecución va a ser aplicable para las sentencias de condena, el
trámite es el exequatur. La sentencia adquiere el carácter de ejecutivo.
- Exequatur de revisión: control de los hechos y el derecho. Control bastante abusivo
- Exequatur de control de requisitos procesales: competencia del juez de origen, garantía del
debido proceso, que la sentencia se encuentre firme.
- Exequatur de plano: análisis simbólico, es decir, que la sentencia sea auténtica confianza
mutua en que la sentencia fue dictada conforme a derecho, es el más utilizado en la Unión
Europea.
Dimensión Convencional:
- CIDIP II:
Articulo 1: La presente Convención se aplicará a las sentencias judiciales y laudos arbitrales
dictados en procesos civiles, comerciales o laborales en uno de los Estados parte, a menos que al
momento de la ratificación alguno de estos haga expresa reserva de limitarla a las sentencias de
condena en materia patrimonial. Asimismo, cualquiera de ellos podrá declarar al momento de
ratificarla que se aplica también a las resoluciones que terminen el proceso, a las dictadas por
autoridades que ejerzan alguna función jurisdiccional y a las sentencias penales en cuanto se
refieran a la indemnización de perjuicios derivados del delito.
a) Que vengan revestidos de las formalidades externas necesarias para que sean considerados
auténticos en el Estado de donde proceden;
b) Que la sentencia, laudo y resolución jurisdiccional y los documentos anexos que fueren
necesarios según la presente Convención, estén debidamente traducidos al idioma oficial del
Estado donde deban surtir efecto;
c) Que se presenten debidamente legalizados de acuerdo con la ley del Estado en donde deban
surtir efecto;
d) Que el juez o tribunal sentenciador tenga competencia en la esfera internacional para conocer
y juzgar del asunto de acuerdo con la ley del Estado donde deban surtir efecto;
e) Que el demandado haya sido notificado o emplazado en debida forma legal de modo
sustancialmente equivalente a la aceptada por la ley del Estado donde la sentencia, laudo y
resolución jurisdiccional deban surtir efecto;
h) Que no contraríen manifiestamente los principios y las leyes de orden público del Estado en
que se pida el reconocimiento o la ejecución.
ARTICULO 18
Las disposiciones del presente Capítulo serán aplicables al reconocimiento y ejecución de las
sentencias y de los laudos arbitrales pronunciados en las jurisdicciones de los Estados Partes en
materia civil, comercial, laboral y administrativa. Las mismas serán igualmente aplicables a las
sentencias en materia de reparación de daños y restitución de bienes pronunciadas en jurisdicción
penal.
ARTICULO 19
La solicitud de reconocimiento y ejecución de sentencias y de laudos arbitrales por parte de las
autoridades jurisdiccionales se tramitará por vía de exhortos y por intermedio de la Autoridad
Central.
ARTICULO 20
Las sentencias y los laudos arbitrales a que se refiere el artículo precedente tendrán eficacia
extraterritorial en los Estados Partes si reúnen las siguientes condiciones:
a) que vengan revestidos de las formalidades externas necesarias para que sean considerados
auténticos en el Estado de donde proceden;
b) que éstos y los documentos anexos que fueren necesarios, estén debidamente traducidos al
idioma oficial del Estado en el que se solicita su reconocimiento y ejecución;
c) que éstos emanen de un órgano jurisdiccional o arbitral competente, según las normas del
Estado requerido sobre jurisdicción internacional;
d) que la parte contra la que se pretende ejecutar la decisión haya sido debidamente citada y se
haya garantizado el ejercicio de su derecho de defensa;
e) que la decisión tenga fuerza de cosa juzgada y/o ejecutoria en el Estado en el que fue dictada;
f) que no contraríen manifiestamente los principios de orden público del Estado en el que se
solicitare el reconocimiento y/o ejecución.
Los requisitos de los literales a), c), d), e) y f) deben surgir del testimonio de la sentencia o del
laudo arbitral.
ARTICULO 21
La parte que en un juicio invoque una sentencia o un laudo arbitral de alguno de los Estados
Partes, deberá acompañar un testimonio de la sentencia o del laudo arbitral con los requisitos del
artículo precedente.
ARTICULO 22
Cuando se tratare de una sentencia o de un laudo arbitral entre las mismas partes, fundada en los
mismos hechos y que tuviere el mismo objeto que el de otro proceso jurisdiccional o arbitral en el
Estado requerido, su reconocimiento y ejecutoriedad dependerán de que la decisión no sea
incompatible con otro pronunciamiento anterior o simultáneo recaído en tal proceso en el Estado
requerido.
ARTICULO 23
ARTICULO 24
Los procedimientos, incluso la competencia de los respectivos órganos jurisdiccionales, a los
efectos del reconocimiento y ejecución de las sentencias o de los laudos arbitrales, se regirán por
la ley del Estado requerido.
- TRATADOS DE MONTEVIDEO
Dimensión Autónoma:
- CÓDIGO PROCESAL CIVIL DE LA NACIÓN.
APITULO II - SENTENCIAS DE TRIBUNALES EXTRANJEROS. LAUDOS DE TRIBUNALES ARBITRALES
EXTRANJEROS
Art. 517. - Las sentencias de tribunales extranjeros tendrán fuerza ejecutoria en los términos de los
tratados celebrados con el país de que provengan.
1) Que la sentencia, con autoridad de cosa juzgada en el Estado en que se ha pronunciado, emane
de tribunal competente según las normas argentinas de jurisdicción internacional y sea
consecuencia del ejercicio de una acción personal o de una acción real sobre un bien mueble, si
éste ha sido trasladado a la República durante o después del juicio tramitado en el extranjero.
(Regla de la bilateralización de foro)
2) Que la parte demandada contra la que se pretende ejecutar la sentencia hubiese sido
personalmente citada y se haya garantizado su defensa.
3) Que la sentencia reúna los requisitos necesarios para ser considerada como tal en el lugar en
que hubiere sido dictada y las condiciones de autenticidad exigidas por la ley nacional. (Recaudo
formal)
4) Que la sentencia no afecte los principios de orden público del derecho argentino. (Recaudo
sustancial)
Art. 518. - La ejecución de la sentencia dictada por UN (1) tribunal extranjero se pedirá ante el juez
de primera instancia que corresponda, acompañando su testimonio legalizado y traducido y de las
actuaciones que acrediten que ha quedado ejecutoriada y que se han cumplido los demás
requisitos, si no resultaren de la sentencia misma.
Art. 519. - Cuando en juicio se invocare la autoridad de una sentencia extranjera, ésta sólo tendrá
eficacia si reúne los requisitos del artículo 517.
Art. 519 BIS. - (Artículo derogado por art. 107 de la Ley N° 27.449 B.O. 26/7/2018)
- CÓDIGO PROCESAL CIVIL DE CÓRDOBA.
CAPÍTULO II EJECUCIÓN DE SENTENCIAS DICTADAS EN EL EXTRANJERO
Conversión en título ejecutorio
ARTÍCULO 825.- Las sentencias de tribunales extranjeros tendrán fuerza ejecutoria en los términos
de los tratados celebrados con el país de que provengan.
1) Que la sentencia con autoridad de cosa juzgada en el Estado en que se ha pronunciado, emane
de tribunal competente según las normas argentinas de jurisdicción internacional y sea
consecuencia del ejercicio de una acción personal o de una acción real sobre un bien mueble, si
éste ha sido trasladado a la República durante o después del juicio tramitado en el extranjero.
2) Que la parte demandada contra la que se pretende ejecutar la sentencia hubiese sido
personalmente citada y se haya garantizado su defensa.
3) Que la sentencia reuna los requisitos necesarios para ser considerada como tal en el lugar en
que hubiere sido dictada y las condiciones de autenticidad exigidas por la ley nacional.
4) Que la sentencia no afecte los principios de orden público del derecho argentino.
Trámite
ARTÍCULO 826.- Para el trámite del exequátur se aplicarán las normas de los incidentes.
Artículo IV
1. Para obtener el reconocimiento y la ejecución previstos en el artículo anterior, la parte que pida
el reconocimiento y la ejecución deberá presentar, junto con la demanda:
a) El original debidamente autenticado de la sentencia o una copia de ese original que reúna las
condiciones requeridas para su autenticidad;
b) El original del acuerdo a que se refiere el artículo II, o una copia que reúna las condiciones
requeridas para su autenticidad.
2. Si esa sentencia o ese acuerdo no estuvieran en un idioma oficial del país en que se invoca la
sentencia, la parte que pida el reconocimiento y la ejecución de esta última deberá presentar una
traducción a ese idioma de dichos documentos. La traducción deberá ser certificada por un
traductor oficial o un traductor jurado, o por un agente diplomático o consular.
Artículo V
1. Sólo se podrá denegar el reconocimiento y la ejecución de la sentencia, a instancia de la parte
contra la cual es invocada, si esta parte prueba ante la autoridad competente del país en que se
pide el reconocimiento y la ejecución:
a) Que las partes en el acuerdo a que se refiere el artículo II estaban sujetas a alguna incapacidad
en virtud de la ley que les es aplicable o que dicho acuerdo no es válido en virtud de la ley a que
las partes lo han sometido, o si nada se hubiera indicado a este respecto, en virtud de la ley
del país en que se haya dictado la sentencia; o
b) Que la parte contra la cual se invoca la sentencia arbitral no ha sido debidamente notificada de
la designación del árbitro o del procedimiento de arbitraje o no ha podido, por cualquier otra razón,
hacer
valer sus medios de defensa; o
c) Que la sentencia se refiere a una diferencia no prevista en el compromiso o no comprendida en
las disposiciones de la cláusula compromisoria, o contiene decisiones que exceden de los términos
del compromiso o de la cláusula compromisoria; no obstante, si las disposiciones de la sentencia
que se refieren a las cuestiones sometidas al arbitraje pueden separarse de las que no han sido
sometidas al arbitraje, se podrá dar reconocimiento y ejecución a las primeras; o
d) Que la constitución del tribunal arbitral o el procedimiento arbitral no se han ajustado al acuerdo
celebrado entre las partes o, en defecto de tal acuerdo, que la constitución del tribunal arbitral o el
procedimiento arbitral no se han ajustado a la ley del país donde se ha efectuado el arbitraje;
o
e) Que la sentencia no es aún obligatoria para las partes o ha sido anulada o suspendida por una
autoridad competente del país en que, o conforme a cuya ley, ha sido dictada esa sentencia.
2. También se podrá denegar el reconocimiento y la ejecución de una sentencia arbitral si la
autoridad competente del país en que se pide el reconocimiento y la ejecución, comprueba:
a) Que, según la ley de ese país, el objeto de la diferencia no es susceptible de solución por vía de
arbitraje; o
b) Que el reconocimiento o la ejecución de la sentencia serían contrarios al orden público de ese
país.