Arte Romano
Arte Romano
Arte Romano
Desde el siglo II a. C. (en Próximo Oriente y Egipto), hasta el siglo III d. C. (la caída del Imperio
romano de Occidente). Abarca casi 1000 años y tres continentes, desde Europa hasta África y Asia.
El primer arte romano se remonta al año 509 a.c. con la legendaria fundación de la República
romana, y perduró hasta el año 330 d. C.
Origen:
Arte desarrollado en Roma a partir de su independencia respecto al poder etrusco, bajo cuya
dominación permanece hasta el 509 a.C. Poco a poco Roma se convierte en un vasto imperio que
desarrolla un arte influido por las culturas itálicas primitivas, por el arte etrusco y por el arte
griego.
Durante su proceso de expansión, Roma asimila las aportaciones culturales de los pueblos que
conquista, por lo que se puede decir que el arte romano es una respuesta simbiótica de estas
culturas. A ello se une un espectacular poder político-económico de Roma, que genera una élite de
familias imperiales de alto poder adquisitivo que sabrán admirar obras de arte y desearán
poseerlas.
Ese deseo de posesión llevará a los romanos a multiplicar los talleres dedicados la reproducción de
copias maestras, a importar obras y solicitar artistas, a sentirse inclinados hacia la ornamentación
y a desarrollar un cierto eclecticismo sustentado en la idiosincrasia del espíritu romano.
Desde los primeros tiempos de la República, la arquitectura romana asimila de los etruscos el
empleo del arco, la bóveda y la cúpula, así como la disposición interna de los templos; y en
escultura, la proliferación de retratos (fuertemente realistas al principio y después influidos por la
idealización helenística) y el desarrollo de una decoración con escenas de vida alegre y con ánimo
de ahuyentar la tristeza de la muerte. Se desarrolla también la estatua ecuestre y, en cuanto al
relieve, se expresa sobre todo en columnas y los arcos de triunfo con una temática principalmente
histórica.
El romano es un arte condicionado por la política. A medida que el Imperio Romano se
consolidaba, ganó importancia como medio de comunicación, sobre todo durante la dictadura de
Sila, las luchas por la hegemonía entre triunviratos y la etapa de Julio Cesar. Se produce un auge
de las ciudades como célula básica de organización del poder romano, y en ellas se evocan y
glorifican victorias mediante frescos e imágenes, columnas conmemorativas de campañas y arcos
de triunfo.
En cuanto a elementos sustentantes, el arte romano utiliza los órdenes griegos, incorpora el
toscano (que en general sustituye al dórico y suele desempeñar una función más constructiva que
decorativa) y desarrolla un orden propio: el compuesto, combinación del jónico y el corintio.
Utilizan pilares y pilastras y el arco de medio punto como elemento sustentante por excelencia.
Emplean la cubierta de madera a dos aguas y la cubierta de piedra en forma de bóveda. Las más
frecuentes son la bóveda de cañón y la cúpula, y como sistema de enlace entre la cúpula y la base
cuadrada de los muros desarrollan las pechinas y las trompas. Estos elementos pasarán al Imperio
Romano de Oriente y al arte bizantino. Se centran principalmente en glorificar a personajes
históricos influyentes o representar batallas.
Características del arte romano
El arte romano expresa la idea de Roma como centro: el poder de la cultura y el Estado
romano son protagonistas.
El arte romano tuvo una gran influencia griega y etrusca a partir de la conquista de los
romanos a otros territorios mediterráneos.
Los artistas que trabajaban en el arte romano eran, en su mayoría, griegos que copiaban
esculturas de ese origen.
El arte romano, fue más variado y moderno que el arte griego, por lo que tuvo mayor
influencia en el arte del Renacimiento y la Edad Media.
Entre las clases altas, los romanos consumían y estimulaban el consumo del arte romano.
El arte romano en arquitectura introdujo nuevas tipologías y géneros al combinar las
características del estilo griego y el etrusco.
A diferencia del arte griego, cuyos temas solían ser en su mayoría religiosos o
mitológicos, el arte romano exalta a los hombres, gobernadores y políticos.
El arte romano narra y conmemora las batallas de los hombres a través de
representaciones como arcos triunfales y columnas conmemorativas.
El arte romano en escultura se manifestó a través de relieves en las tumbas,
que representaban situaciones de la vida cotidiana y de la cultura romana.
El arte romano se destaca principalmente por sus obras de arquitectura y escultura, ya que la
pintura en el arte romano no fue muy popular y quedan pocos registros pictóricos de este estilo
artístico.
Sin embargo, dentro del arte romano en pintura las obras más famosas son aquellas que se
pudieron rescatar de la ciudad de Pompeya.
Estas obras rescatadas de arte romano en Pompeya son murales y frescos preservados a partir de
la erupción del volcán Vesubio que petrificó la ciudad en el 79 d.C. Las piezas tenían temáticas
vinculadas a la vida cotidiana de los romanos, a la cultura y a los dioses romanos.
Dentro de la pintura en el arte romano se distinguen dos corrientes pictóricas o estilos:
El arte romano está inspirado en sus raíces etruscas y griegas, las obras romanas más famosas son
las que se pudieron rescatar de la ciudad de Pompeya, pues bien, dadas las circunstancias e
influencias que rodearon el arte romano, hoy en día podemos mencionar que la pintura romana se
desarrolló en forma de cuatro estilos conocidos como estilos pompeyanos:
1. incrustación: más antiguo del arte romano (del siglo II a.C.). Se llama así porque a menudo
se incrustaban piedras (como el mármol o la serpentina) en los muros, así como metales
preciosos, en un intento por imitar un modelo arquitectónico o estilo estructural inspirado
en la pintura griega. Tenía imágenes que solían extenderse de forma coherente por las
distintas paredes de una sala, divididas en tres niveles verticales, de abajo a arriba: el
asiento, el ortostato (bloques rectangulares de piedra ubicados en la parte inferior del
muro) y la cornisa. Según el portal ArteEspaña, la incrustación es un estilo romano muy
colorista, de aspecto muy lujoso, en el que el muro suele estar dividido en tres:
2. Arquitectónico: este estilo del arte romano se caracteriza por imitar la arquitectura.
Comenzó a principios del siglo I a. C., y se le conoce también como "estilo de perspectiva
arquitectónica", ya que trata de encontrar amplitud y profundidad en sus imágenes. Las
pinturas romanas que se encontraron en este estilo hacían ver los espacios mucho más
grandes. A menudo, se aprecian ventanas a través de las cuales se pueden observar
representaciones que mezclan motivos arquitectónicos, personajes, animales y objetos. A
menudo, aparecen también paisajes entre las columnas, lo que le da un aspecto más
teatral y la sensación de “realismo”. A esto se le conoce como el arte del trampantojo,
una técnica artística con la que se busca engañar la percepción visual. Así, daban
profundidad a las estancias que decoraban.
3. Mixto (u ornamental): El tercer estilo de arte romano apareció a finales del siglo I a. C. y
recibe el nombre de “mixto”, “ornamental” u “ornamentado''. Aquí vas a darte cuenta
cómo los artistas romanos empiezan a reemplazar la perspectiva arquitectónica para
experimentar más con los motivos decorativos u ornamentales. El estilo mixto se da en la
época de Augusto y sus sucesores, época en la que los artistas romanos se caracterizaban
por romper la coherencia de una sala como obra romana completa, convirtiendo cada
pared en un lienzo ampliamente autónomo. También, se introducen elementos como la
representación de paisajes, figuras y escenas mitológicas. Algunos historiadores coinciden
en que el estilo ornamental se dio más en la época de Roma que en Pompeya.
Estos retratos son como unas “fotos” del antiguo Egipto, toda una joya de la época, cuando Egipto
era una provincia romana. Se produjeron entre los siglos I y V en todo Egipto y, pues, no podíamos
evitar incluirlos como parte importante del arte romano.
En primer lugar, porque son las únicas pinturas romanas de caballete que se conservan de la
antigüedad, con la gran la particularidad de mostrar la mezcla existente entre la cultura romana y
egipcia. Aunque el nombre de El Fayum se utiliza solo por cuestiones de convención, lo cierto es
que estos retratos del arte romano se caracterizan por ser pinturas fúnebres pintadas al nivel del
rostro de las momias egipcias. Los rostros que aparecen en ellos parecen representar a personas
de clases acomodadas, ya que así lo demuestran su ropa y las joyas representadas. La mayoría de
estos retratos están pintados en encáustica, una técnica que utiliza la cera para agregar los
pigmentos al cuadro. Sin embargo, también se realizaban en témpera (acuarela) sobre paneles de
madera, que eran importados por la escasez de madera en Egipto. Uno de los rasgos
característicos de estos retratos egipcios del arte romano es la desproporción de los ojos en
relación con el resto del rostro. Por lo demás, los artistas consiguen replicarlos al tamaño natural,
pero, como podrás observar en el ejemplo siguiente, el rostro aparece ligeramente más grande en
relación con el resto del cuerpo. Sin embargo, se supone que servían para decorar a las momias en
el arte fúnebre, lo que durante un tiempo puso en duda la pertinencia del término “retrato”. Pero
algunos estudios de estas pinturas romanas demostraron que fueron pintadas antes de que las
personas fallecieran, ya que en muchas de ellas se encontraron restos de yeso o marcas de
marcos, por lo que podrían haber sido utilizadas como retratos en vida de las personas.
Pinturas destacadas:
las bodas aldobrandinas (Museos Vaticanos)
Paris juzgando a las tres Diosas.
Io libertada por Hermes.
Ceres en su trono (de Pompeya, hoy en el Museo de Nápoles)
Esculturas destacadas:
Una de las esculturas romanas más famosas que conocemos es el “Augusto de Prima
Porta”. Esta estatua fue descubierta en 1963 en Villa de Livia, Roma. Se cree que fue
encargada por la mujer de César Augusto tras su muerte. La podemos encontrar en el
Museo del Vaticano. Altar de la Salud de Cartagena.
Anaglifos de Trajano.
Apolo de Pinedo.
Apoteosis de Claudio.
Ara Pacis.
Augusto de Prima Porta.
Augusto de via Labicana.
El arte romano en arquitectura es la disciplina en la que mejor se manifestó el poder del Estado. La
arquitectura romana se basó en la construcción de grandes obras públicas que hasta el día de hoy
pueden ser documentadas con mayor facilidad que las esculturas o las pinturas. Los romanos, de
hecho, escribieron un tratado teórico de arquitectura en el siglo I a.C., que fue muy importante y
significativo para la historia de la arquitectura.
Sin dudas, los anfiteatros, basílicas, termas, arcos del triunfo y circos fueron las tipologías de
arquitectura romana que más se conocen. Un ejemplo muy cercano de eso es el Coliseo romano,
que se muestra como un ícono del arte romano hasta nuestros días.
La arquitectura romana es una fusión de elementos tradicionales griegos y etruscos, donde se
desarrollaron arcos y vigas horizontales fueron soportadas por columnas. Más tarde, se introdujo
la contraparte tridimensional del arco, a saber, la cúpula.
Arquitectura destacada:
COLISEO: El Coliseo se convirtió en el mayor anfiteatro romano, con una estructura
elíptica de 188 metros de longitud, 156 metros de ancho y 57 metros de altura. Realizado
en ladrillo y cubierto con travertino se dividía en cinco niveles con una capacidad para
más de 50.000 personas.
Panteón de Roma: El Panteón es uno de los monumentos romanos mejor conservados
del mundo. Se construyó en el año 27 a.C. a instancias de Marco Vipsanio Agripa. Entre
el 112 y el 125 d.C., Adriano ordenó su reconstrucción, ampliándolo, invirtiendo su
orientación y abriendo una gran plaza de pórticos delante del nuevo templo.
el anfiteatro y el templo de Roma y Augusto en Nimes (Maison Carrée)
la Puerta negra en Tréveris.
el Templo de Vesta en etapa pontificia.
el Arco de Trajano en Ancona y en Benevento.
el palacio y el mausoleo de Diocleciano en Spalato (hoy, catedral)
Su decadencia:
Después de pasar por una fase "barroca" a finales del siglo II, en el siglo III el arte romano
abandonó en gran medida, o simplemente se volvió incapaz de producir, esculturas en la
tradición clásica, un cambio cuyas causas siguen siendo muy discutidas. El período de
esplendor del arte romano abarca los dos primeros siglos del Imperio, pero ya a principios
del siglo II de nuestra era se inicia una lenta decadencia del buen gusto que se acentúa con
la crisis del siglo III y se confirma en los siglos IV y V por efecto de cierto barroquismo o
irregularidad y pesadez en los estilos, aunque aumente el fasto y la magnitud de las obras.
Sin embargo, la arquitectura, en cuanto arte de construir, siguió desarrollándose hasta la
invasión de los bárbaros, por lo menos, en los principales centros de cultura. Pruebas de
esto son las grandes basílicas de Roma construidas en el siglo IV, no solo las destinadas al
culto cristiano, sino también las civiles. Los restos de la colosal basílica civil de Constantino
(también llamada de Majencio) que todavía se alzan en Roma, sirvieron como fuente de
inspiración a los arquitectos del Renacimiento en el siglo XVI. Se considera que con el
emperador Constantino se inicia propiamente la decadencia de la arquitectura romana,
pues bajo este emperador comienza a reciclarse mucho material antiguo para la
construcción de obras nuevas, como se hizo en Constantinopla, ciudad que se construyó
en gran medida con fragmentos, esculturas, columnas y despojos llevados de todos los
rincones del Imperio. En Roma, el Arco de Constantino fue construido reciclando
materiales de edificios erigidos en tiempos de Trajano, Adriano y Marco Aurelio, sobre
todo los altorrelieves, pues ya por entonces era cada vez más difícil encontrar escultores
capacitados para esculpir obras semejantes. Sin embargo, aunque en el caso de la
escultura la decadencia fue evidente en muy poco tiempo, la arquitectura mantuvo su
consistencia por más tiempo debido a que resultaba más fácil para los arquitectos que
para los escultores imitar las obras que aún les rodeaban.11
Fuentes:
https://www.crehana.com/blog/estilo-vida/arte-romano-pintura/
https://www.worldhistory.org/trans/es/1-10804/arte-romano/
https://humanidades.com/arte-romano/
https://masdearte.com/movimientos/arte-romano/
https://www.monumentosderoma.es/arte-romano/