San Irineo de Lyon - San Hopólito
San Irineo de Lyon - San Hopólito
San Irineo de Lyon - San Hopólito
LYON
-Padre Apologético-
Seriedad Moral
Entusiasmo
Religioso
Tradición
Eclesiástica
Escritos
DESENMASCARAMIENTO Y
DERROCAMIENTO DE LA
PRETENDIDA PERO FALSA GNOSIS
II.
I. Herejía Gnóstica Valentinianos y
marcionitas
IV
III V
Palabras del
Dios y Cristo Resurrección
Señor
Obras
Demostración de la enseñanza apostólica
3 Personas Divinas
Encarnación y Redención
Obras
Sobre la monarquía o
Que Dios no es el
autor del mal
Otros Escritos
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Más vale no buscar otro conocimiento que el de Jesucristo, el Hijo de Dios, que
fue crucificado por nosotros, que caer en la impiedad por cuestiones sutiles y
en discusiones.
Tri n i dad
La identidad del único Dios verdadero con el Creador del mundo, con el Dios
del Antiguo Testamento y con el Padre del Logos.
Existieron antes de la creación del ser humano, porque las palabras “Hagamos
al hombre a imagen y semejanza nuestra,” el Padre las dirige al Hijo y al
Espíritu Santo, a quienes San Ireneo llama alegóricamente las manos de Dios.
Ireneo explica una y otra vez que el Espíritu Santo, al servicio del Logos,
llena a los profetas con el carisma de la inspiración y que las órdenes para
todo esto las da el Padre.
a) Sobre la relación del Hijo con el
Padre
De la misma manera que defiende contra los gnósticos la identidad del Padre
con el creador del mundo, así también enseña que hay un solo Cristo,
aunque le demos diferentes nombres. Por lo tanto, Cristo es idéntico al Hijo
de Dios, al Logos, al Hombre–Dios Jesús, a nuestro Salvador y Señor.
El corazó n de su cristología y, a
b) Recapitulación la verdad, de toda su teología.
Es el canon de la verdad Para Ireneo, este canon de verdad parece ser el credo
bautismal, porque dice que lo recibimos en el bautismo.
La Iglesia, aunque diseminada por todo el mundo hasta los últimos confines, recibió
de los Apóstoles y de sus discípulos la fe en un solo Dios, Padre todopoderoso, y en
un solo Cristo Jesús, Hijo de Dios…
El primado de Roma
Habla sobre la Iglesia fundada y establecida en Roma por los dos grandes
apó stoles Pedro y Pablo, demostrando que la tradición que tiene recibida
de los Apóstoles y la fe que ha anunciado a los seres humanos han llegado
hasta nosotros por sucesiones de obispos.
Ireneo, en efecto, trata de demostrar que las fábulas y ficciones de los
gnósticos son extrañas a la tradición apostólica.