Dossier Oncecita
Dossier Oncecita
Dossier Oncecita
Ficha técnica
Carta de intención
Siempre me ha llamado mucho la atención, como la mayoría de la gente que he conocido, trata de
vivir el día a día enfocándose en sus quehaceres varios, tratando de vivir por encima , sin entrar
mucho en un terreno de “mayor profundidad”. Aunque sin éxito, ya que es imposible no caer a
veces en las profundidades del inconsciente, aunque sea por unos segundos. Siempre recuerdo
cuando era niño y un adulto empezaba a hablarme de algo super cotidiano, como de repente
empezaba a mezclarlo con algún recuerdo y me daba cuenta de que esa simple anécdota había
caído en “ese terreno profundo”. Eran tan solo un minuto de lapso, y cunado esta persona se daba
cuenta de su “caída” rápidamente hacia un gesto como de despertar y cerraba el tema, muchas
veces haciendo hincapié en irse a realizar otra tarea, algo así como “ya, me voy a poner los
porotos mejor que se van a enfriar”. Esa eterna lucha, ese extraño convivir, ese asombroso
sincretismo entre las tareas cotidianas y nuestros conflictos profundos, combinados
inevitablemente en nuestro día a día, me ha obsesionado toda mi vida. Por lo que quise seguir mi
obsesión y plasmarla en esta pieza audiovisual en donde quiero retratar esa maravillosa mezcla
que se da en nuestras vidas. Para esto cree esta historia, en donde Marisa tiene un día común y
corriente enfocándose en sus tareas hogareñas, pero que irá teniendo pequeños momentos de
“caídas en la profundidad” hasta que ya no podrá aguantarlo mas y se dejará llevar por sus
sentimientos y emocionalidad. Pero de igual manera la vida sigue, y aunque tenga estos pequeñas
“caídas” y esta ultima “gran caída”, de igual forma la vida continua, y Marisa debe seguir
viviendo. Haciendo alusión a lo cíclico de este gran camino llamado vida.
Tesis, Storyline y Sinopsis
Tesis
-Como en el día a día tratamos de evitar pensar en nuestras preocupaciones profundas, pero sin
éxito
Storyline
-Una madre intenta preparar una once simple para su hija distanciada, pero tratando de evitar
pensar profundamente en su relación con ella
Sinopsis
-MARISA (49), una señora divorciada de clase media, intenta prepararle una once a su única
hija, con la cual mantiene una relación distanciada. Marisa, empieza con una once simple e
intenta no pensar mucho en ello, enfocándose en cambio en sus rutinarios quehaceres del
hogar. Pero pronto, el cerrarle la puerta a pensar profundamente en su relación con su hija, será
inevitable.
Argumento
Una taza y un plato sobre una mesa. Un segundo plato es puesto frente a la otra loza, Empieza a pasarla por el piso de la pieza. Friega el aparato con fuerza por una de las
seguido por otra taza. Poco a poco vemos a MARISA (49), seria, mientras, meticulosa -casi alfombras, sin parar, su rostro denota rabia. Empieza a alejarse de la pieza, llegando al
mecánicamente- pone una canasta con algunas hallullas, una caja de te, mantequilla y pasillo. Marisa se concentra totalmente en el pasillo, sin mirar la puerta. Refriega la
jamón al centro de la mesa. Marisa se detiene y contempla la mesa con mirada perdida, de alfombra del pasillo sin parar, hasta que el tubo de la aspiradora choca con la puerta.
repente su rostro despierta en un gesto, y saca su celular del bolsillo. Lo mira un segundo y Empieza a golpearla con el tubo del aparato una ya otra vez con desesperación. Marisa
lo guarda rápidamente, girando y alejándose del comedor. (CORTE A TITULO). Marisa, en aprieta sus ojos frustrada. Respira agitada, sin abrir sus ojos. Un pequeño sollozo se
un tono mecánico, prende la radio ubicada en uno de los mesones de la cocina, sintoniza escapa de ella. De repente... su respiración se detiene. Marisa abre los ojos. Exhala. La
entre estaciones, se detiene en una, escucha su música un segundo, su rostro muestra su mano sobre el pomo. Finalmente, abre la puerta. Silencio. Marisa queda pasmada.
disgusto y la cambia. Se detiene en otra emisora, suspira en disgusto y vuelve a cambiarla. Contempla la habitación con nostalgia. Cubre su boca con su mano, sus ojos acumulan
Se detiene por tercera vez, mostrando decepción, resignada, deja la última estación, lágrimas, como si su corteza se hubiera desgarrado, como si su alma hubiera quedado
poniéndola a un volumen de fondo. Marisa lava la loza, deja un par de platos al costado, expuesta. Marisa echa café de un frasco medio vacío en frasco más pequeño. Abre el
empezando a lavar unos cuchillos y cucharas, de repente se detiene, el agua corre, refrigerador, saca una bolsa de manjar media vacía y exprime fuerte la bolsa, sacando su
mientras su mirada queda fija hacia abajo. El rostro de Marisa vuelve a despertar de la contenido sobre un recipiente de loza chico. Marisa exprime unas naranjas en un saca
nada, corta el agua y toma una canasta con ropa sucia. Marisa con rapidez pasa por el jugo manual. Unas galletas tritón sobre un pequeño plato. El café, el manjar, unos vasos
pasillo. A la vista queda una puerta cerrada. Marisa, canasta en mano, se detiene y observa de jugo y el plato de galletas se ponen en la mesa. Marisa acomoda con delicadeza una
la habitación desordenada. Mosqueada, resopla y deja la canasta sobre la cama. Empieza taza con dibujos infantiles. Se toma un segundo, se aleja un poco de la mesa, pensativa.
a echar ropa de la cama dentro de la canasta. Se acerca a la cabecera y recoge una De repente, su rostro reacciona, como que le cayó una idea. Sobre la mesa, Marisa
prenda. Marisa se detiene al ver un porta-retratos en su cómoda. El rostro de Marisa lo acomoda con delicadeza el porta-retratos, revelando la foto de ella abrazada con su hija.
observa con cierta tristeza unos segundos. De la nada, vuelve a despertar y deja el porta- Marisa empieza a alejarse de la mesa, y la contempla bajo la luz cálida del atardecer. Su
retratos. Con rapidez toma el resto de las prendas y las echa en el canasto, saliendo de la rostro denota satisfacción, esperanza, ilusión. Una notificación del celular la sorprende en
habitación. Frente a la puerta cerrada, Marisa, canasta en mano, se detiene. Marisa aprieta un leve sobresalto. Marisa saca y mira su celular. Su rostro se desconcierta. La emoción
sus labios pensante por un momento. Sin mirar la puerta, Marisa reacciona y retoma su de su mirada cambia a decepción, la luz del atardecer está a punto de apagarse, mientras
paso. Marisa mete la ropa a la lavadora, una tras otra sin parar. Cierra la lavadora, la la vemos junto a la mesa. Marisa despierta. La expresión fría regresa. Se gira y va hacia la
programa y la deja andando. Toma la radio y sale de la cocina. Marisa deja la radio sobre radio. Sintoniza entre estaciones. Finalmente hay una que le gusta, y por primera vez le
una repisa. Vuelve a sintonizar la radio, cambiando entre estaciones rápidamente, sube el volumen. Con resignación, Marisa empieza a recoger las cosas de la mesa y las
disgustándose de a poco. Suelta un suspiro dejando la última estación dejándola lleva hacia la cocina. Nos quedamos en la mesa. Se escucha la loza siendo guardada.
nuevamente a un volumen de fondo. Marisa gira y contempla la mesa por un momento, de Marisa vuelve al living y saca otros platos y la foto. Marisa empieza a tararear la melodía y
la nada nuevamente despierta y sale. Marisa camina por el pasillo y vuelve a detenerse le sube aún mas el volumen a la radio y vuelve a salir del living. Se escuchan sus pasos
frente a la puerta. Esta vez la mira y muerde con fuerza su labio. Suelta un resoplido alejarse y como guarda la loza en la cocina. Queda solo una taza sobre la mesa, al
intenso y sale enérgicamente. Del interior del closet, Marisa saca una aspiradora. momento que escuchamos el cierre de la puerta.
Concepto Visual
Marisa: (49) Una señora divorciada perteneciente a la clase media chilena, vive en un
departamento en San Miguel, Santiago, Chile. Le gusta pasar sus días manteniéndose siempre
haciendo cosas para evitar pensar en sus preocupaciones. La mayor de todas hoy en día es su
relación en distanciamiento progresivo con su hija. Es una mujer ordenada y proactiva, le gusta
siempre tener música de fondo para evitar el silencio.
Actriz