Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

I Ching

Versión traducida y comentada por Richard Wilhelm (Libro 1)

I CHING El Libro de los Cambios Version de Richard WILHELM (Libro 1) 1 Indice Introducción ………………………………………………………………………. Cómo utilizar el I Ching ………………………………………………………… Método de las varillas de aquilea (milenrama) ……………………………. Método de las monedas a cara y cruz ……………………………………… Tirar el I Ching on-line I-Ching: ¿qué texto usar? Por Enzo Fernando Costa ………………………….. Los textos del I Ching (libro 1) versión de Richard Wilhelm Traducción del alemán por MB ……………………………………………………… Tabla de trigramas para ubicar los hexagramas …………………………. 3 4 6 8 10 14 14 2 Introducción El I CHING o Libro de los Cambios, constituye el más antiguo de los textos clásicos del pensamiento chino. Se discute la paternidad de la obra pues en ocasiones se le atribuye a Weng Wang, fundador de la dinastía Chou; otras veces al mítico emperador celeste Fu Hi, y en algunas oportunidades a Confucio. En todo caso su antigüedad puede situarse por lo menos entre los años 1.000 y 2.000 A. C. Por una serie de manipulaciones -que detallamos más adelante- se llega a establecer dos trigramas resultantes de la combinación de líneas rectas y cortadas. Cada uno de ellos tiene su explicación en el Libro, hasta completar un total de 64 posibilidades diferentes. Posteriormente diversas escuelas de comentaristas agregaron más y más glosas al texto original del I Ching. En esta oportunidad sólo se presentan los 64 hexagramas básicos con las explicaciones que de ellos hizo el alemán Richard Wilhelm en su presentación del I Ching a Occidente (Libro 1). Para los chinos, el I Ching significa la fuente de consulta ante cualquier decisión de importancia. El libro -como reverentemente se le califica- puede indicar en cada momento la dirección correcta para el actuar. Quien le consulta premunido de respeto y atención a lo que el I Ching pueda indicarle encuentra en su texto una apreciación ponderada de su actual situación y recomendaciones para su conducta futura. No se trata de un libro de adivinación, de una bola mágica que muestre el futuro, ni nada parecido. Simplemente que de acuerdo a la concepción china, adoptada por muchos occidentales, en los 64 hexagramas se resumen todas las posibilidades vitales. La manipulación de varillas o monedas -según el sistema, que se adopte- pone en contacto al individuo, un microcosmos específico, con el todo, el macrocosmos: el resultado, la palabra del I Ching se encuentra a través del hexagrama que se construye mediante las varillas o monedas. El I Ching usa fundamentalmente las imágenes, algunas asociadas con la antigua mitología china, otras con la poesía, las instituciones sociales y religiosas, incluso con arquetipos o momentos históricos específicos. El psicólogo C. Gustav Jung -quien prologó la traducción de Wilhem- se declaró uno de sus adeptos. Concretamente Jung calificó el I Ching tanto como una técnica de oráculos -auxilios para el futuro- como un método de exploración del inconsciente. Se recalca en el libro la preocupación por el cambio constante en el aspecto de los acontecimientos. En el mundo occidental considerable parte del esfuerzo humano se encamina a combatir 3 o restringir la posibilidad de peligro que implica todo cambio. Para la mentalidad china, en cambio, cualquier momento que se tome como punto, de observación es en sí mismo resultante de toda una cadena causal que abarca hasta los detalles más mínimos del devenir anterior. Al tirar las monedas o manejar las varillas se hacen presentes todas las posibilidades. Una parte, que para la mente occidental puede parecer insignificante, entra en contacto con el todo y adquiere por ese contacto las cualidades del momento. El hexagrama que se obtiene indica las cualidades dominantes al momento de su origen. Para comprender el I Ching resulta fundamental el concepto que Jung llamó de "sincronicidad". Atañe a que la coincidencia de acontecimientos en el tiempo y en el espacio es más que una casualidad. Existiría una interdependencia de los acontecimientos objetivos entre sí y en relación con los estados subjetivos con la psiquis de él o los observadores. Los 64 hexagramas (seis líneas) son otros tantos instrumentos para comprender el significado de otras tantas situaciones básicas. La verdad del hexagrama emana de las condiciones físicas del momento en que se obtuvo, en que se construyó línea por línea. De acuerdo a la tradición china se trata de "agentes espirituales" que de una manera misteriosa dan un sentido de respuesta a las manipulaciones, una verdadera alma del Libro. Aunque el occidental no entiende la esencia de tales conceptos, se encuentra con que la situación que describe “su” hexagrama corresponde a “su” momento vital. El “por qué” permanece sin respuesta. El I Ching, no requiere interpretaciones particulares, ni artificios, ni conocimientos particulares para su consulta. Cualquiera que aplique su sentido común puede entender el sentido de las respuestas. Ello tiene especial aplicación en cuanto al sector oculto, al inconsciente del hombre. El I Ching no encara fundamentalmente el problema de realizar o no determinadas acciones, sino el cómo, la manera correcta apropiada de realizarlas. Por otro lado, no ofrece pruebas ni resultados: simplemente se abre a quien desea consultarlo, sin poner más exigencias. En China, el I Ching constituyó -y sigue vigente como antaño- parte esencial de la vida diaria. Con frecuencia se veía en las esquinas a un anciano que, libro y varillas en mano, estaba presto a leer el antiguo Libro para dar consejo e información al pasante. Sus símbolos sirven de adorno en las casas, lo mismo que sus sentencias. EL USO DEL I CHING Los símbolos del I Ching se obtienen por la combinación de trigramas -grupos de tres líneas- rectas y quebradas. De su mezcla se obtienen ocho trigramas te simbolizan otras tantas etapas de cambio, de movimiento. 4 Cada una de ellas tiene una característica definida y un nombre particular, que los individualizan, La clasificación siguiente los define básicamente: NOMBRE ATRIBUTO IMAGEN RELACION FAMILIAR Ch'ien Lo Creativo fuerza cielo padre K’ un Lo Receptivo devoción, docilidad tierra madre Chen Lo que despierta K'an el Abismo peligro agua segundo hijo Ken Manteniéndose quieto reposo montaña tercer hijo Sun Lo suave, lo dócil penetración Li Lo Oscilante dar luz fuego segunda hija Tui Lo Gozoso alegría lago tercera hija incita al trueno movimiento primer hijo viento, primera hija madera Los hijos representan el movimiento en sus variados estados: comienzo del movimiento, peligro en movimiento, descanso y completación del movimiento. Las hijas representan a la devoción en sus varias etapas: penetración apacible, claridad y adaptabilidad, alegría tranquila. De la combinación de dos de estas imágenes aparecen los hexagramas -seis líneas cada uno- hasta completar un total de 64. Las líneas positivas (rectas) se obtienen cuando resulta una suma impar (7 o 9) y las negativas (quebradas) cuando el resultado es par (6, 8) como a continuación se explica. Cuando se trata de interpretar el oráculo, al momento de leer las líneas sólo interesan las que corresponden a los números 6 o 9; las demás no tienen significado independiente. En los demás casos no entrañan movimiento, y por lo tanto no deben ser tomadas en consideración. 5 Las manipulaciones con varillas o monedas permiten que lo inconsciente del hombre se active a fin de traer a luz todos los factores, conocidos y ocultos de una situación. Siempre para consultar el oráculo hay que enfrentarlo con espíritu tranquilo y claridad de mente, abiertos a recibir los influjos ocultos, sin prejuicios. Subyace en todo el I Ching la idea del cambio, que a su vez implica permanencia. Originalmente existen todas las cosas, que se transmutan y modifican constantemente para retornar a sí mismas. Es el equilibrio fundamental del ying y el yang, la luz y la oscuridad, representadas por el círculo dividido. PRIMER METODO: con varillas vegétales Se usaban cincuenta varitas de madera especial (achilea). En Occidente, los más devotos consultores del I Ching las importan y guardan en cajas especiales. Informalmente se emplea en cualquier tipo de vara, especialmente 50 fósforos. Se comienza por apartar una vara, que no entra en el movimiento. Quedan 49 que, quien consulte el I Ching debe dividir en dos lotes, al azar, dejando uno a su derecha y el otro a su izquierda. Se saca una vara del haz que se encuentra a mano derecha y se coloca entre el dedo meñique y el anular de la mano izquierda. Luego, del haz que está a la izquierda se van eliminando varas en grupos de a cuatro, hasta que queden en un haz cuatro o menos. Este sobrante se coloca entre el dedo anular y el medio de la mano izquierda. Luego se realiza la misma operación con el haz de: la derecha, y cuando quedan cuatro o menos, estas varas se colocan entre el dedo medio y el índice de la misma mano izquierda. La suma de varitas sujetas entre los dedos de la mano izquierda dará necesariamente 9 o 5. Enseguida debe desecharse la vara colocada entre el meñique y el anular; se obtiene así un número 8 o 4. El cuatro se considera como una unidad numérica completa y se le asigna y anota valor de 3. El ocho se considera como una doble unidad y se anotan 2. Por ende, si en la primera vez la suma de varillas dio 9, se anotará un dos; si 5, un 3. Las varillas colocadas en la mano se apartan. Las restantes -que habían sido separadas en lotes de a cuatro- se juntan para nuevamente dividirlas en dos haces y repetir la operación completa. Vale decir: se saca una vara del haz de la derecha y se coloca entre el 6 meñique y el anular; luego las varas de izquierda se eliminan en grupos de a cuatro, hasta que queden cuatro o menos que se colocan entre el anular y el medio y luego se hace lo mismo con las varas de la derecha. Al sumar las varillas que sujeta la mano el resultado debe ser 8 o 4. El 8 se anota como 2 y el 4 como 3. Esta vez se incluye la primera varilla que se sujeta entre el meñique y el anular.La operación se repite una vez más, y nuevamente el resultado será de 8 o 4, anotándose 2 o 3 para la persona que consulta. Al sumar los tres valores obtiene la primera línea. Si ella suma 9 (3 + 3 + 3) el resultado se denomina viejo transforma en una línea positiva y se le asigna el símbolo de 0 dibujar el hexagrama se van trazando líneas rectas o cortadas; en como la línea es positiva debe dibujarse una línea recta yang; se o 0. Para este caso, . Si la suma da 6 (2 + 2 + 2) se denomina viejo yin, que se transforma en una línea negativa y se representa por el signo de X o X. Para formar el hexagrama se dibuja en este caso una línea quebrada. Si la suma es 7 (2 + 3 + 2, o 3 + 2 + 2, o 2 + 2 + 3) se llama joven yang; se trata de una línea positiva que no se considera para su interpretación individual. Se le da como símbolo y en él hexagrama se dibuja como línea recta. Si la suma es 8 (3 + 3 + 2, o 3 + 2 + 3, o 2 + 3 + 3) se denomina joven yin; es una línea negativa que tampoco se considera para su lectura individual y que se designa por el símbolo . En el hexagrama toma la forma de una línea quebrada. Todo el procedimiento recién descrito se repite cinco veces más, hasta construir el hexagrama (seis líneas). La primera vez se dibuja la línea que va en base del hexagrama, y después las que van más arriba: Por ejemplo : N° 62 N°17/1,3,5 Si en la sexta manipulación la suma de varillas da ocho-, el hexagrama final será este Si la quinta vez resulta nueve Si al tirar por cuarta vez las varillas se obtiene digamos 7, se dibuja o línea recta Al sumar por tercera vez las varillas, si se vuelve a obtener por ejemplo 6 se completa el trigrama inferior: Al completar el procedimiento por segunda vez se obtuvo ocho, y es una línea cortada: La primera vez que se sumaron las varillas se obtuvo 9 y se dibujó una línea recta con un círculo 7 Quien consultó el I Ching deberá luego ubicar el hexagrama en el cuadro correspondiente. El hexagrama aquí formado lleva el número 17 y se llama Sui, seguimiento. Representa la situación actual sobre la que evoluciona la cuestión del consultante. Este debe leer la explicación que viene inmediatamente después del signo, así como el juicio general y la imagen. En la parte en que se habla de las líneas, sólo deben interesarle aquellas que el número 6 o el 9, ya que las restantes no se adaptan a su situación. Eso es todo. Los antiguos yins y yangs, representados por las líneas 1, 3 y 5 se transforman en yins y yangs jóvenes, que asociados con los yins y yangs jóvenes originales formarán un nuevo hexagrama (que en el ejemplo es el número 62). Este nuevo hexagrama que representa la situación hacia la cual tiende la situación actual, por los cambios aportados por las líneas 1,3 y 5. El consultante deberá leer entonces la explicación del hexagrama 62, el juicio general y la imagen (sin tener en cuenta las líneas cambiantes que no conciernen a la situación futura). SEGUNDO METODO: con monedas. Se trata de un procedimiento más corto, para el que se emplean tres monedas idénticas. Las monedas se lanzan seis veces al aire. Cada vez se obtiene una línea. La "cara" de la moneda se considera como ying y se le asigna valor 2. El "cruz" de la moneda se considera yang, con valor 3. Si las tres monedas aparecen en yang (cruz) el valor es 9. Si las tres monedas aparecen en ying, (cara), el valor es 6. Dos ying y un yang dan 7, y Dos yang y un ying, 8. Cara Cara Cara 3 + 3 + 3 → 9 Cara Cara Cruz 3 + 3 + 2 → 8 Cara Cruz Cruz 3 + 2 + 2 → 7 Cruz Cruz Cruz 2 + 2 + 2 → 6 Viejo Yang (mutante). Joven Yin (estable). Joven Yang (estable). Viejo Yin (mutante). Si se quiere simplificar más todavía : La "cara" de la moneda se considera como yang y se le asigna valor 1. El "cruz" de la moneda se considera yin, con valor 0. En una tirada del I Ching, las monedas se contarán con el método simple de la siguiente manera: Si las tres monedas aparecen en yang (cara) el valor es (1 + 1 + 1= 3) → (trazo yang cambiante). Si las tres monedas aparecen en yin, (cruz), el valor es (0 + 0 + 0= 0) → (trazo yin cambiante). Dos yin y un yang dan (0 + 0 + 1 = 1) → (trazo yang fijo), (trazo yin fijo). y Dos yang y un yin dan (0 + 1 + 1 = 2) → 8 Los dos métodos son evidentemente equivalentes Cara Cara Cara = 3 o 9 → Cara Cara Cruz = 2 o 8 → Cara Cruz Cruz = 1 o 7 → Cruz Cruz Cruz = 0 o 6 → Viejo Yang (mutante). Joven Yin (estable). Joven Yang (estable). Viejo Yin (mutante). El resto del procedimiento es igual al anterior. La primera vez que se lanzan las monedas al aire constituye la línea de la .base; la segunda a la siguiente, y así hasta llegar a la cima. Las líneas siempre se cuentan de abajo hacia arriba. El trazo inicial es entonces el más inferior. Si el consultante obtiene 7 (1) el resultado es una línea Yang fuerte (joven) que entra en la edificación del hexagrama, pero no es mutante (vieja), sino que es estable y no posee ninguna significación particular. Si por el contrario obtiene 9 (3) la línea es fuerte mutante (vieja) e inestable : su significación particular es así puesta en valor y debe ser considerada a parte. Esto vale por todas las otras líneas del hexagrama. El significado de la mutación particular de un hexagrama así constituido se obtiene en la sección “las líneas” de cada hexagrama. Esto es válido para todas las otras líneas luminosas y fuertes del libro entero [e igualmente para todas las líneas oscuras y débiles determinadas por 8 (2) o 6 (0)] En cada hexagrama los dos primeros trazos corresponden a la tierra, los dos siguientes al mundo de los hombres y los dos últimos y superiores corresponden al cielo. Como ya se ha dicho, todo hexagrama corresponde a una situación y a un conjunto de acciones presentes. Un trazo viejo y mutante engendra un trazo joven y estable. Si el hexagrama contiene líneas o trazos mutantes o viejos, engendra un nuevo hexagrama que constituye el resultado de la situación y de las acciones presentes. 9 I-Ching: ¿qué texto usar? Por Enzo Fernando Costa (Sinaruspica) La primera inquietud de quienes quieren iniciarse en el estudio del I-Ching es, naturalmente, qué texto usar. O, mejor dicho, qué versión utilizar. Esta es una cuestión primordial, por cuanto, aunque parezca una revelación de Perogrullo, el I-Ching es un libro perteneciente a la literatura china clásica, originalmente escrito en ideografía arcaica. Esto supone que primero debió ser compilado a través de generaciones por eruditos letrados, y vertido en caracteres clásicos, adquiriendo su forma más aceptada y confiable en la llamada “versión de Palacio” realizada bajo el reinado de Qing Xi (1662-1722 d.C) con la finalidad de dotar al Emperador de un texto lo más confiable posible para la consulta de los oráculos. Es generalmente sobre esta versión y sus posteriores copias, que trabajaron los pioneros de la sinología, aquellos occidentales que emprendieron la ardua tarea de aprender desde la nada un idioma tan atípico como el chino, para el que no existían gramáticas al uso occidental, y , lo que era peor, para el cual las categorías gramaticales de las lenguas clásicas (latín y griego especialmente) no cuadraban. De aquí la importancia de que quienes quieran acercarse con seriedad de estudiosos al texto del I-Ching, partan de la base más fidedigna posible, es decir, que lo hagan desde una buena traducción. Aquí nos encontramos con la primera dificultad: quienes mejor tradujeron el Libro de los Cambios lo hicieron en inglés, alemán, o francés. De modo que quienes pertenecemos al mundo de habla hispánica debemos leer las páginas del Libro a través de una doble degradación: primero del chino al alemán o inglés, por ejemplo, y luego de éste al castellano o español. Siempre, claro está, de que no estemos en condiciones de leer corrientemente el idioma del traductor, en cuyo caso habremos abreviado el camino, y obtenido una información de segunda mano, en lugar de tercera. Y, como dice el refrán italiano, “traduttore, traditore” (traductor, traidor), es inevitable que la subjetividad del traductor influya al momento de escoger el equivalente más preciso de un término; y si a esto le añadimos que ya el primer traductor debió lidiar con la habitual multivocidad del ideograma chino, podemos hacernos una idea de lo complejo que puede llegar a resultar el extraer toda la esencia filosófica del I-Ching, sin caer en la trampa de las traducciones simplistas o los “falsos conocidos”. En consecuencia, es de la mayor importancia saber elegir una buena versión del I-Ching, que se ajuste al objetivo propuesto por el estudiante, el que podrá variar según sus motivaciones y preferencias. En efecto, habrá quienes se acercan al Libro de los Cambios con el propósito de encontrar en él respuesta a sus interrogantes e inspiración para la acción pragmática (sin duda los más); pero los habrá que se acercan en busca de un complemento a sus aficiones filosóficas, o los que buscan inspiración para su creatividad artística, o los que lo escudriñan en busca de aportes históricos, o los que se interesan en él desde un punto de vista puramente literario, por dar sólo 10 algunos ejemplos. Para todos ellos es de capital importancia trabajar sobre la base de una versión sólida, basada en un conocimiento de primera mano del idioma chino clásico escrito. Aquí va entonces mi primera recomendación: si quieren trabajar en serio, provéanse de una versión directa del chino. A continuación les enumero los autores cuyas versiones resultan más confiables, más allá de las grandes divergencias que puedan encontrarse entre ellas, y cuya explicación daremos más adelante. Quienes cursen en Sinaruspica pueden utilizar el texto que prefieran de entre estos, ya que en las clases nos remitiremos al original chino, aclarando todas las dudas que surjan, y señalando el por qué de las diferencias y matices de cada traducción. Pero, insisto, debemos partir de una versión confiable desde el inicio. Por eso, les aconsejo que dejen de lado los numerosos “refritos” hechos con retazos parafraseados de diferentes autores originales, y lanzados al mercado editorial con un sentido puramente oportunista; aquí, una vez más, lo barato sale caro. Las siguientes son las versiones que considero más confiables, de entre las que se encuentran volcadas a la lengua hispánica: Richard Wilhelm (1873-1930): “I-Ching, el Libro de las Mutaciones”, traducción al español por D.J.Vogelmann, Edit. Sudamericana, Buenos Aires, 1976. Idem, con traducción al español de Helena Jacoby de Hoffmann, Edit. Cuatro Vientos, Stgo. de Chile, 1976. Ambas son confiables, pero la primera es decididamente más completa y recomendable. La versión de Wilhelm es un clásico en el tema, y sin lugar a dudas la mejor traducción existente hasta el presente, y que quizá no tenga competidores por largo tiempo. Ello se debe a que este autor, que vivió más de veinte años en China, la mitad de ellos bajo el régimen imperial, y la otra mitad bajo el régimen postrevolucionario surgido en 1911, tuvo la inapreciable ayuda de uno de los últimos exponentes de la clase de los letrados confucianos, Lao Nai Xuan. Gracias a este aporte, Wilhelm pudo encontrar para cada ideograma el sentido más verosímil de acuerdo a la tradición literaria china. Wilhelm cumplía funciones de pastor protestante, y habla muy en favor de su amplitud de criterio el que haya reconocido, a pesar de la previsible desaprobación de sus colegas, las curiosas propiedades parapsicológicas del Libro que había traducido. Por esta razón, además de su excelente versión literaria, y de haber contado con el espaldarazo académico de Carl Jung, el IChing de Wilhelm es de primera elección para quien quiera iniciarse y explorar las posibilidades mánticas del Libro de las Mutaciones (o Libro de los Cambios). James Legge (1815-1897): “I-Ching, el Libro de los Cambios”, Edit. Obelisco, Barcelona, 1997. A semejanza del anterior, este autor vivió una treintena de años en China, y en plena época imperial, en el corazón del siglo XIX. También él fue en carácter de misionero evangélico. Su traducción es tan confiable como la de Wilhem, y su prosa por momentos aún más fluida y 11 precisa que la de aquél. La versión es literaria, un tanto equidistante, y los comentarios lúcidos, atinentes, y precisos. Sin embargo, presenta un inconveniente para quienes buscan aspectos esotéricos en el Libro: Legge era un misionero escocés hecho y derecho, y tomaba con burlona ironía esos posibles contenidos. Esto se aprecia en la versión inglesa original, ya que suele ser expurgado de las copias traducidas. De modo que su versión, por otra parte excelente y sin duda muy plagiada por sus sucesores, es particularmente recomendable para quienes encaran el estudio del I-Ching desde sus ángulos puramente culturales, filosóficos, y sociológicos. Carmelo Elorduy: “Libro de los Cambios”, Editora Nacional, Madrid, 1983. Sacerdote jesuíta, Elorduy se desenvolvió como misionero y docente en la China republicana del siglo pasado, primeramente en la China continental, y luego en el refugio nacionalista de Taiwan. Su versión del I-Ching se caracteriza por un fuerte sesgo interpretativo personal, de una racionalidad un tanto desapegada. Habiendo practicado el chino oral y escrito “in situ”, su versión resulta académicamente muy estimable, significando un valorable esfuerzo por repensar la trascendencia del texto original. Nacido español, su versión tiene la ventaja de llegar primigenia al público hispanoparlante, pero, al igual que la de Legge, su enfoque es descriptivamente cultural, fríamente interpretativo. Recomendable, por tanto, para quienes buscan ese encuadre. John Blofeld (1913-1987): “I-Ching, el Libro de los Cambios”. trad. al español de Rafael Lassaletta, EDAF, Madrid, 1981. Este autor, de vida trashumante, volcado esencialmente a las filosofías y religiones orientales, estuvo algunos años en China, aprendió el mandarín, y cuenta entre sus trabajos más estimados esta versión del I-Ching. Convencido de las virtudes mánticas del libro, su traducción es muy asequible al neófito, y cuenta con una jugosa introducción. No obstante, se aparta con cierta frecuencia del sentido tomado por los autores más clásicos, sin aclarar, por lo general, sobre qué originales basa su discordancia. En consecuencia, es una obra recomendable, en segunda línea. Rudolf Ritsema (1918-2006): “I-Ching”, traducción al español de Edith Zilli, Javier Vergara Editor, Madrid/Buenos Aires, 1995. Holandés de nacimiento, fuertemente influído por la cultura germanoparlante de Suiza, país donde buscó refugio ante el avance totalitario nazi, quedó estrechamente vinculado a la Fundación Eranos, creada por Olga Froebe Kapteyn, y de la que fuera colaborador destacado Carl Jung. Ritsema, estudioso del chino, en colaboración con otros lingüistas más expertos, produjo una versión sumamente literal, pero ricamente explicada en sus aspectos idiomáticos. Esta versión, muy cuidada graficamente y precedida por un interesante estudio teórico, adolece sin embargo de una literalidad tan rígida que llega a menudo a la ininteligibilidad, la cual se agrava por la múltiple traducción. Pero, por otro lado lleva anexas aclaraciones que lo convierten en una suerte de diccionario de términos usados en el IChing, por lo que resulta muy valioso para estudiantes avanzados. De cualquier modo, no resulta de fácil acceso, y requiere de detalladas 12 explicaciones para su adecuado uso, por lo que en nuestros cursos lo reservamos preferentemente para el ciclo profundizado. Xi Wen y Li Yan: “Libro de los Cambios con ilustraciones”, Ediciones de Lenguas Extranjeras, Beijing, 1998. Se trata de una obra interesante, que rescata cierto valor originario del I-Ching, y que cuenta con las ingeniosas ilustraciones de Li Yan. Se limita a la traducción del texto primigenio del Libro, sin mezclarlo con comentarios posteriores, tanto confucianos como postconfucianos, lo cual no deja de ser una ventaja para el principiante. Como interés suplementario, al pie de cada ilustración figura el texto original chino, en caracteres manuscritos, y en capítulo aparte una serie de comentarios hallados en un ejemplar del I-Ching escrito en seda, que data de la dinastía Han del Oeste (206 aC-8 dC). Esta versión tiene la particularidad de atribuír a ciertos ideogramas su valor y significado más arcaicos, contraviniendo así la interpretación sancionada por la tradición erudita en la que abrevaron Legge, Wilhelm, y sus continuadores. Esto puede ser de gran interés para el enfoque histórico del Libro, pero constituye un escollo para quienes buscan un contenido esotérico o filosófico del mismo. Comparar una versión tradicional del I-Ching con esta de Xi Wen y Li Yan puede confundir mucho al lector no iniciado, ya que no atinará a entender cómo un mismo texto puede llegar a tener traducciones tan disímiles e incongruentes. Además, hay que señalar que la versión al español deja bastante que desear, conteniendo errores groseros de sintaxis que deberían ser corregidos en otras ediciones. Por todo esto, y sin dejar de considerar esta obrita como interesante, la dejamos en una tercera línea de elección, y sólo como ilustrativa de las innumerables posibilidades exegéticas que ofrece el Libro de los Cambios. 13 TEXTOS del I CHING El Libro de los Cambios Version de Richard WILHELM (Libro 1) Traducción del alemán por MB Superior Inferior Ch'ien Chen K'an Ken K'un Sun Li Tui ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ Ch'ien ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ 1 34 5 26 11 9 14 43 Chen ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ 25 51 3 27 24 42 21 17 K'an ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ 6 40 29 4 7 59 64 47 Ken ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ 33 62 39 52 15 53 56 31 12 16 8 23 2 20 35 45 44 32 48 18 46 57 50 28 13 55 63 22 36 37 30 49 10 54 60 41 19 61 38 58 K'un Sun Li Tui ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ ▬▬▬ Tabla que permite encontrar el hexagrama con respecto a los trigramas. 14 1.- CH'IEN / EL CREADOR Superior : ch’ien, lo creador, el cielo Inferior : ch’ien, lo creador, el cielo El hexagrama se compone de seis líneas llenas. Las líneas llenas corresponden a la potencia original yang que es luminosa, fuerte, espiritual, activa. El hexagrama es uniformemente fuerte de naturaleza y corresponde a una síntesis del poder y la energía. En cuanto que ninguna debilidad está presente en él, tiene como propiedad la fuerza. Su imagen es el cielo. La fuerza está representada como desligada a las condiciones espaciales determinadas: ella es por consiguiente concebida como movimiento. Lo que se considera como fundamento de ese movimiento es el tiempo. El hexagrama incluye entonces igualmente la noción del poder del tiempo y la potencia de la perseverancia o persistencia en el tiempo: la duración. En la interpretación del hexagrama siempre hay que considerar un doble sentido: el sentido macrocósmico y el microcósmico, es decir, el sentido de la acción en el mundo de los hombres. Aplicado a los acontecimientos del universo, este signo explica la potente acción creadora de la divinidad. Y con relación a los hombres, designa la acción creadora de los santos sabios, del soberano o guía de los hombres que por su poder despierta y desarrolla su naturaleza superior. Este hexagrama corresponde al 4° mes (mayo-junio) en el curso del cual la potente luz alcanza su punto culminante antes que el solsticio marque el punto de comienzo de la decadencia del año. EL JUICIO: “Lo creativo, favorecido por la perseverancia, produce un éxito sublime” Aquí están presentes los cuatro aspectos fundamentales del creador: “el éxito sublime favorecido por la perseverancia”. 1) Éxito, poder de realizar; 2) Sublimidad, excelencia. 3) Poder favorecer, aventajar y 4) perseverancia. Estos cuatro atributos del poder en su aspecto activo se presentan de dos en dos: “lo creativo que produce un éxito sublime” y la “ventaja de la perseverancia”. Para aquél que obtiene esta respuesta en el oráculo, significa que recibirá en participación un éxito proveniente de las profundidades subyacentes en los eventos del universo, y que todo depende del hecho que él busque su felicidad y la de los otros con perseverancia en el camino correcto. 15 Desde épocas muy ancianas, los significados específicos de los cuatro atributos se convirtieron en objetos de especulación. La palabra china que nosotros traducimos por “sublime” significa “cabeza, origen, grande”. Es por eso que Confucio dice “Verdaderamente grande es el poder original del creador; todos los seres le deben su comienzo. Y este poder penetra completamente el cielo”. Este primer atributo penetra también los otros tres. El comienzo de todas las cosas se encuentra todavía, por decirlo de alguna manera, en el “más allá” bajo la forma de ideas que deben de alguna manera pasar al estado de realidades. Pero en el creador se encuentra también el poder de darle forma a esos arquetipos de ideas. Esta noción se expresa en el modo “éxito” (*). Este proceso está representado por una imagen de la naturaleza: “Las nubes pasan y la lluvia actúa, todos los seres individuales toman forma”. (**) Estos conceptos aplicados en el dominio humano muestran al “hombre noble” el camino del “éxito sublime”: “Porque él ve con una gran claridad las causas primeras y sus efectos, él realiza en tiempo oportuno los seis grados y se eleva sobre ellos hacia el cielo en tiempo oportuno, como sobre seis dragones”. Los seis grados son las seis posiciones diferentes en el interior del hexagrama, que están representadas más lejos como la imagen de dragones. Lo que está designado aquí como el camino del éxito es el conocimiento y la realización del “camino” (Tao) del universo que, en tanto que ley que se recorre desde el principio hasta el fin, produciendo los fenómenos condicionados por el tiempo. De manera tal que cada grado alcanzado es al mismo tiempo la preparación del grado siguiente, y el tiempo no es más un obstáculo; sino el medio que permite la realización de lo posible. El acto de la creación encuentra expresión en los términos “sublime” y “éxito”. La obra de conservación es mostrada como una actualización y una diferenciación continuas de la forma. Ella se traduce con los dos términos: “favorecer” que debe interpretarse como “creando lo que corresponde a la naturaleza” y “perseverancia” que debe interpretarse como “lo justo y lo firme”. “La marcha del creador modifica los seres y les da forma, hasta que cada uno haya alcanzado su justa naturaleza, la que le está destinada; el “creador” entonces las conserva en conformidad con la gran armonía. El se revela así como “favorecido por la perseverancia”. En el dominio humano, se ve así como el “gran hombre” confiere al mundo la paz y la seguridad con su acción ordenadora; “Mientras que él se eleva, observando con la cabeza alta sobre la muchedumbre, todas las regiones se reúnen en paz”. Otra especulación lleva todavía más lejos la distinción entre los términos “sublime, éxito, favorecido y perseverando” metiéndolos en paralelo con las cuatro virtudes cardinales. A la “sublimidad” que, en tanto principio fundamental incluye todos los otros atributos, se la hace corresponder con el “amor”. Al atributo del “éxito” se le atribuyen los ritos que regulan y ordenan las expresiones del amor y en consecuencia aseguran su “éxito”. Al término “favoreciendo” se le hace corresponder la “justicia” que crea situaciones en las cuales cada uno recibe de la naturaleza lo que le corresponde, lo que le es debido y lo que lo hace feliz. 16 Al atributo de la “perseverancia” se le hace corresponder el de la sabiduría que reconoce las leyes fijas de todos los eventos y puede por consecuencia crear situaciones durables. Estas especulaciones, que aparecen ya en uno de los comentarios formando la segunda parte del I Ching, le Wen Yen, han constituido el punto que a permitido realizar la unión de la filosofía de los cinco grados de transformación (elementos), sólidamente establecida en el Libro de los anales, con la del I Ching que, fundada solamente sobre la dualidad polar de los principios positivo y negativo, a abierto la puerta a un simbolismo de números que se ha desarrollado en el curso del tiempo (***). (*): Hemos elegido la palabra éxito en el sentido de realizarse. En inglés “success”, alemán “Erfolg”, er-folgen = tener lugar, realizar. “Folg” = suivre. “Exit” en inglés “salida” . Nota de MB (**) Cf. La Bibia, Génesis, 2. (***) El creador causa el origen y la generación de todos los seres. Se puede en consecuencia llamarlo “el cielo”, poder luminoso, “padre”, “señor”, etc. La cuestión es de saber si el creador tal como es concebido por los chinos bajo una forma personal como Zeus por los griegos, concepto del cual nosotros heredamos el término “Dios”. En castellano, la palabra “Dios”, a diferencia de otras lenguas indoeuropeas, deriva directamente del griego Θεος -Theos(Dios), forma genitiva de Zeus. Esta palabra por su parte tiene un radical que deriva de Dev(a) Pitar –“dios padre”- en sánscrito y Júpiter en latín. La raíz de estas palabras es la misma que la de la palabra “día”, palabra que en su etimología hace referencia al cielo despejado y luminoso. Para la mentalidad china, en ese concepto de Dios no está lo más importante, porque el principio divino creador no es algo “personal”. Lo creador se discierne y se hace perceptible a través de su actividad creadora todopoderosa. De todas maneras hay algo de alguna manera “exterior” que es el “cielo”. El “cielo”, comprendido como actividad creadora, es un ser viviente con una consciencia psíquica de sí mismo que se hace presente en toda la creación. Así se puede establecer un nexo conceptual entre “Dios” como soberano supremo, el “cielo” como principio luminoso y la creación objetiva (Schöpferisch). LA IMAGEN: “El movimiento del cielo es poderoso. Así el hombre noble se transforme en fuerte e incansable”. Puesto que hay solamente un cielo, la repetición del signo Ch’ien que tiene el cielo como imagen significa el movimiento del cielo. Un día es un giro completo del cielo. La repetición del trigrama significa que un día es seguido por otro, y que ello engendra la idea de tiempo. Además, ello representa la fuerza inagotable con la que el cielo se mueve y de ello se desprende todavía otra idea: la de una duración potente en el tiempo y por encima de él, es decir de algo perdurable que está más allá y por encima del tiempo que es su manifestación. Este movimiento que no cesa ni retarda jamás, que se manifiesta con la regularidad incansable con la que 17 un día sigue al otro, es una representación de la eternidad. Esta duración en el tiempo es la manifestación de la fuerza todopoderosa que es una propiedad esencial del creador. El sabio toma de esta representación el modelo de la manera de como él deberá comportarse con el fin de ejercer una acción de efecto durable. Debe transformarse en alguien integralmente fuerte descartando conscientemente todos los elementos vulgares o degradantes. Así llegará a ser infatigable, que es una cualidad que se adquiere regulando el conjunto de sus acciones (actividades). LAS LINEAS: Nueve en la base significa: “Dragón escondido. No actuar”. En China el dragón posee un significado completamente diferente que en la concepción occidental. Simboliza la energía eléctrica que se manifiesta en las tormentas. Es una fuerza motriz, dinámica y creciente. En invierno esta energía se sumerge en la tierra y en verano se torna nuevamente activa en forma de tormenta y relámpagos. Estos fenómenos son seguidos por la lluvia que trae otra vez a la tierra las virtudes celestes. En este símbolo la fuerza creadora está aún oculta y no tiene efecto. En términos humanos, representa a un gran hombre cuyos méritos aún no son reconocidos. Sin embargo él tiene confianza en sí mismo. Confía en su fuerza, no se deja desalentar por los éxitos o fracasos exteriores y espera fuerte y sereno que llegue la hora. Es conveniente entonces para el que consultante que trace esta línea esperar con una paciencia pacífica y fuerte. El tiempo de actuar llegará muy pronto. No hay dudas que una voluntad firme llegará a imponerse. Es importante, sin embargo, evitar de usar prematuramente su fuerza queriendo obtener por la fuerza un resultado para el cual todavía no ha llegado el tiempo. Nueve en el segundo lugar significa: «El dragón aparece en el campo. Es ventajoso ver al gran hombre». Los efectos de la fuerza luminosa comienzan a manifestarse. Aplicado a la actividad humana, eso quiere decir que el gran hombre aparece en el campo de acción, aunque no ocupe todavía una plaza predominante, sino que permanece por el momento entre sus iguales. Lo que lo distingue de los demás es la seriedad de sus propósitos, su naturaleza digna de una confianza sin reserva y la influencia que ejerce a su alrededor sin esfuerzo consciente. Es un hombre destinado a acrecentar su influencia y poner orden en el mundo. Es por eso que es ventajoso verlo. Nueve en el tercer lugar significa: “A lo largo de todo el día el hombre noble se mantiene creativamente activo. Cuando la noche cae su mente continúa todavía ocupada. Peligro. Sin reproches”. Un campo de actividad se abre para el hombre remarcable. Su reputación comienza a extenderse. La gente comienza a acudir hacia él. Su fuerza 18 interior está a nivel de su acción exterior acrecentada. Los negocios se le ofrecen a manos llenas y llegada la noche, cuando los otros se reposan, él está todavía agobiado por los planes y las preocupaciones. Pero existe un peligro en este paso de la posición inferior à una posición elevada. Más de un gran hombre ya se perdió porque la gente acudía a el y lo arrastraba en su mismo camino. La ambición ha destruido la pureza interior. Pero las tentaciones no causan perjuicio a su verdadera grandeza. Si se permanece en contacto con los gérmenes de la nueva era y sus exigencias, se posee la prudencia suficiente para evitar de apartarse del camino correcto y se permanece sin reproches. Nueve en el cuarto lugar significa: «Vuelo hesitante sobre los abismos. Sin reproches». Se llega aquí al momento del pasaje al acto, donde se puede actuar libremente. El hombre importante se encuentra delante de un dilema por la elección que debe hacerse entre una doble posibilidad: o bien se toma impulso y tomar parte importante en el mundo o bien retraerse y cultivar la personalidad en la quietud: la vía del héroe o la del santo que se aísla del mundo. No hay una regla general para decidir el camino más justo. El que se encuentre en tal situación debe decidir libremente siguiendo la ley más intima de su naturaleza. Si lo hace de una manera libre, sincera y consecuente, se encuentra la vía conveniente y esta vía es para él libre de reproches. O Nueve en el quinto lugar significa: “Un dragón vuela en el cielo. Es ventajoso ver al gran hombre”. El gran hombre ha alcanzado la esfera de naturalezas celestes, es por eso que su influencia se extiende a lo lejos y se hace visible en el mundo. Todo el que lo vea puede sentirse afortunado. Confucio dice al respecto: “Las cosas que son consonantes vibran juntas. La cosas que tienen afinidad entre ellas en su esencia íntima se buscan mutuamente. El agua se infiltra hacia lo que es húmedo, el fuego se torna hacia lo que es seco. Las nubes (aliento del aire) siguen al dragón, el viento (aliento de la tierra) sigue al tigre. Así el sabio se eleva y todos los seres tornan los ojos hacia él. Lo que nace del cielo se siente aparentado con lo superior. Lo que nace de la tierra se siente aparentado con lo inferior. Cada uno sigue su especie”. Nueve en la cúspide significa: “El dragón arrogante deberá arrepentirse”. Cuando un hombre alcanza cumbres tan altas que no se relaciona con el resto de la humanidad, queda aislado, y esto necesariamente lo lleva al fracaso. Esta línea previene contra las aspiraciones que exceden la propia capacidad. La consecuencia sería una caída brutal y profunda. Cuando todas las líneas son nueve significa: “Aparece un vuelo de dragones sin cabezas. Fastuoso”. 19 Eso significa que todo el hexagrama está en movimiento, y se cambia en el hexagrama K'un, lo receptivo, cuya característica es la sumisión plena de abandono. La fuerza de Lo Creativo y la mansedumbre de lo Receptivo unidas. La fuerza está indicada por el vuelo de los dragones y la mansedumbre, por el hecho de estar privados de sus cabezas. El significado total es que la mansedumbre unida a la fuerza en las decisiones trae buena fortuna. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 2.- K´UN / LO RECEPTIVO Superior : K'un Lo receptivo, Tierra. Inferior : K'un Lo receptivo, Tierra. Este hexagrama está constituido exclusivamente por líneas quebradas, que representan la oscuridad, la docilidad, el poder receptivo primario del yin. El atributo del hexagrama es la docilidad, imagen de la tierra. Es el complemento perfecto de Lo Creativo, no el opuesto, no hay combate sino complementación. Representa la naturaleza en contraste con el espíritu, la tierra en contraste con el cielo, el espacio frente al tiempo, lo femeninomaternal frente a lo masculino-paternal. Aplicado a los asuntos humanos el principio de complementación no se refiere solamente a la relación hombremujer sino, por ejemplo a la relación que existe entre príncipe y ministro o entre padre e hijo. Incluso la dualidad aparece en la coexistencia entre lo espiritual y lo sensible. En todo caso no se puede hablar de un verdadero dualismo, porque existe una clara relación de jerarquía entre los dos hexagramas: lo Receptivo es tan importante como lo Creativo, pero su atributo de docilidad define inmediatamente el lugar que ocupa en relación a lo Creativo. Lo Receptivo tiene que ser activado y conducido por lo Creativo; entonces ahí produce buenos resultados. Pero cuando abandona su posición y trata de marchar al lado y en igualdad con lo creativo, entonces lo receptivo deviene peligroso. Se levanta entre lo receptivo y lo creativo una oposición y una lucha que producen efectos nefastos para ambos. EL JUICIO: “Lo receptivo produce un éxito sublime, favorecido por la perseverancia de una yegua. Si el hombre noble emprende algo y trata de guiar, errará el camino. Pero si dócilmente se deja guiar, entonces seguirá una buena una dirección. Es favorable encontrar amigos en el oeste y en el sur, y alejarse de 20 los amigos del este y del norte. La tranquila perseverancia trae buena fortuna.” Los cuatro aspectos fundamentales de lo creativo (*), “el éxito sublime favorecido por la perseverancia”, sirven igualmente para caracterizar los atributos del poder en su aspecto pasivo, lo receptivo. Aquí la perseverancia está definida con más precisión, como siendo la perseverancia de una yegua. Lo receptivo designa la realidad espacial frente a la potencia espiritual de lo creativo. El caballo pertenece a la tierra tal como el dragón pertenece al cielo. La yegua fue elegida como símbolo porque combina la fuerza y ligereza del caballo con la docilidad y devoción de la vaca. Las múltiples formas de la tierra responden a las múltiples impulsiones creativas porque la tierra tiene el poder de lo receptivo de convertirlas en algo real. La riqueza de la naturaleza reside en su poder de nutrir todos los seres, y su grandeza reside en que les da belleza y esplendor. Ella hace prosperar todo lo viviente. Lo Creativo engendra las cosas, pero nacen gracias a la naturaleza. Aplicado a los asuntos humanos el hexagrama significa acción en conformidad a la situación. La persona en cuestión no se encuentra en una posición independiente, sino que actúa como asistente. Significa que debe concluir algo. Su tarea no significa que debe dirigir -lo que sólo puede desviarla de su camino- sino dejarse guiar, tal es su rol. Si sabe enfrentarse al destino en una actitud de aceptación, puede estar segura de encontrar la dirección correspondiente. El hombre noble se deja guiar; no va con los ojos vendados sino que sino que aprende de las circunstancias lo que se exige de él, sigue sus directivas, conoce todo lo que la situación requiere y cede al destino. Cuando hay algo que debe ser bien hecho, se requieren amigos y ayudantes en la hora de trabajo y esfuerzo, una vez que los planes de lo que debe ser realizado han sido determinados con firmeza. El tiempo del trabajo y del esfuerzo está expresado por el oeste y el sur, puesto que es allí donde lo receptivo se abre para lo creativo, de la misma manera que lo hace la naturaleza en verano y en otoño. Si no se movilizan todas las capacidades, la tarea no será bien cumplida. Encontrar amigos significa aquí realizar su tarea. Pero fuera del trabajo y del esfuerzo, también existe un tiempo para los planes y el orden: para ello el aislamiento es necesario. El Este simboliza el lugar donde se reciben las órdenes del maestro y el Norte donde uno se da cuenta de lo que uno ha hecho. Allí hace falta estar solo y ser objetivo. Esta hora sagrada no debe ser turbada por odios ni favoritismos. 1) Éxito, poder de realizar; 2) Sublimidad, excelencia. 3) Poder favorecer, aventajar y 4) perseverancia. LA IMAGEN: “La condición de la tierra es el abandono receptivo. El hombre noble de vasta naturaleza sostiene al mundo exterior”. 21 De la misma manera que hay un solo cielo, hay una sola tierra. Mientras que en el primer hexagrama el redoblamiento del trigrama fuerte significa la duración temporal, en el segundo, el redoblamiento del trigrama débil significa la extensión del espacio y la firmeza con la que la tierra lleva todo lo que vive y se mueve sobre ella. La tierra, en su abnegación, lleva el bien y el mal sin excepción. Así el hombre noble transforma su carácter en vasto, sólido y resistente para ser capaz de llevar y soportar los hombres y las cosas. LAS LINEAS: Seis en la base significa: “Cuando se camina sobre la escarcha, el hielo sólido no está lejos”. De la misma manera que la fuerza luminosa representa la vida, la fuerza oscura significa la muerte. En el otoño, cuando llegan las primeras heladas, la fuerza de la oscuridad y del frío comienza solamente a desplegarse. Después de los primeros signos, las manifestaciones de la muerte se multiplican gradualmente siguiendo leyes determinadas, hasta el momento en el que finalmente el pleno invierno está allí con su hielo. Exactamente lo mismo pasa en la vida. Una vez que ciertos signos de decadencia apenas perceptibles han hecho su aparición, el movimiento se acentúa hasta que, finalmente, la decrepitud se instala. Pero en la vida es posible prevenir la decadencia estando atento a esos signos y afrontándolos en el momento debido. O Seis en el segundo lugar significa: “Directo, cuadrado, grande. Sin designio, sin embargo, todo lo permanente es favorecido”. El símbolo del cielo es un círculo, el de la tierra el cuadrado. Así la forma cuadrada es el atributo fundamental de la tierra. Por otro lado, el movimiento rectilíneo y lo grande son, en principio, propiedades del creador. Las cosas cuadradas radican en la línea recta y forman a su vez los cuerpos sólidos. En matemáticas se distinguen las líneas, los planos y los volúmenes; las líneas rectas generan los planos rectangulares, y éstos a los volúmenes cúbicos. Lo receptivo se adapta a las propiedades del creador y las hace suyas. Así, un cuadrado se desarrolla a partir de una línea recta y un cubo a partir de un cuadrado. Todo se ajusta a la ley del creador, nada se retrae y nada se agrega. Es por eso que en lo receptivo todo se realiza sin necesidad de un designio ni de un esfuerzo particular. La naturaleza genera sin error los entes que debe realizar, esa es su rectitud. Ella no rehúsa soportar a ninguno de los seres que ha generado, allí está su grandeza. Es por eso que ella alcanza sin artificios ni designios particulares lo que es propio de todas las cosas. En cuanto al hombre, éste alcanza la suprema sabiduría cuando todas sus acciones corresponden a la esencia creadora de la naturaleza. Detenerse implica retroceder. 22 Seis en el tercer lugar significa: “Líneas ocultas. Uno es capaz de permanecer perseverante. Si por azar uno está al servicio de un rey, no ocuparse de nuevas tareas, sino acabar las que están empezadas”. Si un hombre se encuentra libre de vanidad es capaz de disimular sus habilidades y no atraer la atención sobre sí demasiado pronto, lo que le permitirá madurar en paz. Si las condiciones lo exigen, es capaz de ponerse en evidencia, pero todavía allí con reserva. El hombre sabio sabe dejar la fama a los otros. No busca ser honrado por las cosas que hace, sino que espera liberar las fuerzas activas que operan en lo receptivo, para que se realicen completamente. Siente su trabajo completo cuando sabe que ellas darán su fruto en el futuro. Seis en el cuarto lugar significa: «Un talego amarrado. Ni loas ni reproches». El principio oscuro se abre cuando se mueve y se cierra cuando reposa. Aquí se encuentra indicada una actitud de extrema reticencia. La época es peligrosa: todo avance se traducirá en una reacción hostil de los adversarios más fuertes, si uno combate, o en un falso reconocimiento basado en un malentendido, si uno se muestra complaciente. Entonces es conveniente permanecer en reserva, sea en la soledad como en la agitación del mundo, puesto que allí también nos podemos ocultar para que nadie nos reconozca. Seis en el quinto lugar significa: “Una orla amarilla en el traje acarrea la mayor buena fortuna”. Amarillo es el color de la tierra, del justo medio y de la justicia. El símbolo de lo realizable y genuino. La orla amarilla simboliza un adorno poco notorio, la reserva aristocrática. Cuando alguien ha sido llamado a trabajar en una posición prominente pero no independiente, el éxito depende sobre todo de la discreción. Si uno está en posición prominente independiente el éxito está asegurado y la felicidad es perfecta, pero es en tales momentos que uno debe cuidarse puesto que después de lo feliz viene lo infeliz. La calidad humana no debe revelarse directamente; debe dejarse que se exprese sólo por reflejo de sus efectos. Seis en la cúspide significa: “Los dragones luchan en el espacio. Su sangre es negra y amarilla”. En el lugar superior, la línea oscura da lugar a la línea luminosa. Si ella intenta mantener una posición que no le es propia, de dirigir en vez de servir, podrá acarrear sobre sí la ira del más fuerte. La lucha con el que está en la posición más poderosa traerá daño para ambas partes. El dragón símbolo del cielo, lucha con un falso dragón, una duplicación del principio de la tierra. El azul oscuro es el color del cielo; amarillo, el color de la tierra. Cuando corre sangre negra y amarilla es el síntoma de que acontece algo anormal, que los dos poderes primarios resultan heridos. Nefasto. 23 Cuando todas las líneas son seis significa: “La perseverancia constante de lo durable es ventajosa”. En esta situación el hexagrama receptivo se transforma en el símbolo de lo creativo. Gana poder a través de la duración. El poder de lo que perdura ateniéndose firmemente a lo justo. No hay avance ni retroceso, solo una persistencia durable de lo perfecto. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 3.- CHUNG / LAS DIFICULTADES INICIALES Superior : K´an El abismo, Agua. Inferior : Chen El movimiento, Trueno. El nombre del hexagrama en realidad se refiere a una brizna de pasto empujando contra un obstáculo para salir de la tierra, de aquí el significado de “la dificultad inicial”. El hexagrama indica la manera en que el cielo y la tierra producen los seres humanos. Es su primer encuentro, acompañado de dificultad. El trigrama inferior, lo que despierta, se dirige hacia arriba. Tiene como imagen el trueno. El signo superior es K’an, lo insondable, el agua, lo peligroso. Su movimiento va hacia abajo. Tiene como imagen la lluvia. La situación describe por consecuencia una profusión densa y caótica. El trueno y la lluvia llenan el aire. Pero el caos se aclara: el movimiento que está dirigido hacia arriba mientras que lo insondable se sumerge tiene como imagen el peligro que se disipa. Las tensiones se descargan en la tormenta y todos los seres respiran aliviados. JUICIO: “Las dificultades iniciales llevan a un éxito sublime mediante la perseverancia. Nada debe ser emprendido. Es ventajoso buscar auxiliares”. Los tiempos de crecimiento están rodeados de dificultades. Semejante a un nacimiento, estas dificultades provienen de la riqueza de factores que luchan por adquirir una forma. Todo está comprometido en un movimiento: por eso existe, a pesar del peligro presente, una perspectiva de gran éxito si se persevera. Pero en las circunstancias actuales el resultado puede ser todavía incierto y sombrío. Por eso se deben tomar precauciones, puesto que todo gesto prematuro puede acarrear el fracaso. Es importante no permanecer solo y pasivo observando los acontecimientos. En cambio, hay que buscar auxiliares con los que se podrá enfrentar el caos y avanzar hacia el triunfo. Uno se debe 24 poner al trabajo participando con coraje y prodigando estímulos y directivas. LA IMAGEN: «Nubes y trueno: la imagen de la dificultad inicial. El hombre noble pone orden a la confusión». Las nubes y el trueno contienen virtualmente la lluvia que calmará las tensiones de la tormenta. Eso significa que el orden ya está presente en la dificultad inicial. El hombre noble debe organizar la profusión dispersa de estos tiempos iniciales, tal como se desenreda la seda del capullo que hizo el gusano para ordenarla en madejas. A los impedimentos hay que saberlos contornear y a los problemas analizarlos y resolverlos. Hay que ser capaz al mismo tiempo de unir y separar. LAS LINEAS: O Nueve en la base significa: “Vacilación y obstáculos. Es conveniente permanecer perseverante. Es conveniente buscar ayuda”. Si una persona se encuentra en una disyuntiva al iniciar una empresa, no debe forzar el avance sino ser prudente y hacer una pausa. De todos modos no se debe dejarse desconcertar, sino que se debe perseverar y mantener constantemente su meta presente. Es importante buscar el concurso conveniente de los asistentes correctos, pero sólo se los podrá encontrar si se desecha la arrogancia y si uno se acerca a ellos manteniendo un espíritu de modestia y sin orgullo. Es así como uno podrá rodearse de aquellos cuya ayuda es necesaria para vencer los obstáculos. Seis en el segundo lugar significa: “Las dificultades se acumulan. El caballo y el carro son desenganchados. No es un ladrón; sino que demandará cuando llegue el momento. La doncella es casta. No quiere comprometerse. Diez años –y entonces ella se compromete”. Cada uno se encuentra a sí mismo a través de las dificultades y los contratiempos. Cuando aparece alguien con auxilio (como si llegara un caballo y un carro y fueran desenganchados) primero se le mira con desconfianza, como a un ladrón. Gradualmente se comprende que no trae malas intenciones y que sólo quiere ser amistoso y ofrecer ayuda. Esta no se acepta, porque todavía no es el momento apropiado. Diez años, todo un ciclo para que retornen las condiciones normales y puede unirse el esfuerzo con el del amigo. Usando la imagen de una muchacha que permanece fiel a su amado aunque enfrente graves conflictos, surge el consejo del hexagrama. Si en tiempos difíciles un alivio sobreviene inopinadamente de un sector que no se esperaba y con el cual no se contaba, se debe permanecer prudente y no 25 asumir compromisos que nos puedan atar. En ese caso, es conveniente aguardar el momento propicio y entonces se logrará lo que se esperaba. Seis en el tercer lugar significa: “Quien quiera cazar al venado sin el guardabosque sólo pierde su camino en el bosque. El hombre noble entiende los signos del tiempo y prefiere abstenerse. Seguir adelante lleva a la humillación”. Cuando se quiere cazar sin un guía en un bosque desconocido uno se pierde. Cuando alguien se encuentra en dificultades no debe tratar de abordarlas solo y sin examen ni consejo. El destino no puede ser engañado; los esfuerzos prematuros sin una guía necesaria terminan en el fracaso y la deshonra. El hombre noble, que distingue los indicios de los acontecimientos por venir prefiere renunciar a un logro que a provocar el fracaso y la humillación al tratar de forzar su consecución. Seis en el cuarto lugar significa: “El caballo y el carro se desenganchan. Procurar la unión. Ir trae buena fortuna de cualquier manera que se actúe”. Estamos en una situación en que nuestro deber es actuar pero faltan las fuerzas. Sin embargo se presenta una ocasión de establecer contacto. Hay que coger las conexiones que se ofrecen. Uno no debe refrenar sus pasos debido a un falso orgullo o a una reserva desubicada. Atreverse a dar el primer paso es un signo de claridad interior que siempre envuelve un cierto grado de coraje, pero también es un signo de buen juicio. Aceptar ayuda en una situación difícil no es una desgracia. Cuando se encuentra la ayuda apropiada, todo va bien. O Nueve en el quinto lugar significa: “Dificultades para bendecir. Un poco de perseverancia trae buena fortuna. Demasiada perseverancia acarrea mala suerte”. Uno está en una posición en la cual se encuentran dificultades para poder expresar sus buenas intenciones ya que éstas recién están tomando forma y uno tratando de hacerse entender. Otra gente se interpone y distorsiona todo lo que hace. Uno debe ser cauteloso e ir paso a paso. No debe tratar de forzar la consumación de una gran empresa, ya que el éxito sólo es posible cuando se cuenta con la confianza general. Es solamente en calma, y a precio de un trabajo sincero y concienzudo que se puede actuar progresivamente de manera que la situación se aclare y que los obstáculos desaparezcan. Seis en la cúspide significa: “El caballo y el carro se desenganchan. Corren lágrimas de sangre”. Para algunos las dificultades iniciales son excesivas. Permanecen prisioneros de ellas sin poder liberarse. Los paralizan y nunca encuentran su camino. Renuncian a la lucha y abandonan. Tal resignación es la más triste de todas las cosas. Por eso Confucio nota a este propósito: “Corren lágrimas de sangre: no se debe persistir en esa actitud.” 26 4.- MENG LOCURA JUVENIL (la Ingenuidad) Superior : Ken, La Inmovilidad, la Montaña. Inferior : K'an El abismo, Agua. La idea de juventud y de locura está sugerida de dos maneras en este signo. La figura del trigrama superior, Ken, es una montaña y la del inferior, K’an es el agua. La fuente que surge del pié de la montaña es el símbolo de la juventud sin experiencia. El atributo del signo superior es la inmovilidad, la del inferior es el peligro. Detenerse sorprendido ante un peligroso abismo es igualmente un símbolo de la candidez juvenil. Pero los dos trigramas nos muestran igualmente el camino que nos permite superar las locuras juveniles: el agua es algo que naturalmente fluye. En principio, cuando el agua surge de la fuente, ella no sabe donde debe ir; pero por su fluir natural llena los lugares profundos que obstaculizan su camino. Entonces el éxito es obtenido. EL JUICIO: “La locura juvenil triunfa. No soy yo quien busca al joven inexperto sino que es él quien debe buscar mi ayuda. En el primer oráculo, yo informo. Si él pregunta dos o tres veces, importuna. Si importuna, no le daré información. La perseverancia es ventajosa”. En la juventud, la locura (la inexperiencia) no es un peligro. Se puede triunfar a pesar de ella, siempre que se encuentre un maestro experimentado y se mantenga una actitud respectuosa frente a él. Esto significa, en primer lugar, que el joven debe tener él mismo consciencia de su falta de experiencia, buscar y respetar a su maestro. Sin esta modestia y este interés, no puede garantizarse que tenga la receptividad necesaria que se expresa solamente en su respetuosa atención al maestro. Por ello, el maestro debe esperar ser llamado en lugar de ofrecerse. Sólo de esta manera la instrucción puede llegar en el tiempo y el modo correctos. El maestro contesta la pregunta de su discípulo, y ésta debe ser aceptada tan clara y definitivamente como la de un oráculo; como una llave para las resoluciones de las dudas y como una base de decisión. Si se le plantean preguntas poco inteligentes o que demuestren desconfianza, sólo molestará al maestro. Debe ignorarlas en silencio, tal como lo hace el oráculo. Sólo con enorme perseverancia se asegura el triunfo. Por ello, el maestro debe esperar ser llamado en lugar de ofrecerse. Sólo de esta manera la instrucción puede llegar en el tiempo y el modo correctos. 27 El maestro contesta la pregunta de su discípulo, y ésta debe ser aceptada tan clara y definitivamente como la de un oráculo; como una llave para las resoluciones de las dudas y como una base de decisión. Si se le plantean preguntas poco inteligentes o que demuestren desconfianza, sólo molestará al maestro. Debe ignorarlas en silencio, tal como lo hace el oráculo. Sólo con enorme perseverancia se asegura el triunfo. LA IMAGEN: “Un manantial al pie de la montaña: imagen de la juventud. El hombre noble cultiva su carácter por la escrupulosidad en todo lo que hace”. Un manantial corre y escapa de la estagnación moviéndose, llenando los huecos y limando los obstáculos que encuentra en su trayecto. En la misma forma el carácter no se desarrolla esquivando los obstáculos, sino sabiéndolos vencer. La seriedad que no descuida nada, sino que es como el agua que llena todos los vacíos progresivamente y sin pausa, siguiendo así su marcha adelante. LAS LINEAS: Seis en la base significa: “Para hacer triunfar lo insensato es necesario imponer una disciplina. Hay que eliminar todas las trabas. Seguir en ese camino acarrea humillación”. La ley es el comienzo de la educación. La juventud en su inexperiencia se encuentra inclinada a tomar todo con despreocupación. Hay que mostrarle que la vida es algo serio. Un cierto control a través de la disciplina es bueno. El que juega con la vida nunca llega a nada. La disciplina no debe degenerar en tiranía, que tiene un efecto humillante y estropea las facultades del hombre. O Nueve en el segundo lugar significa: “Soportar a los insensatos con dulzura trae buena fortuna. Saber como tratar a una mujer trae buena fortuna. El hijo es capaz de hacerse cargo de la familia”. El oráculo muestra aquí a un hombre que no manifiesta el poder exteriormente pero que posee la fuerza suficiente para asumir sus responsabilidades. Tiene la fuerza y superioridad interior del que es capaz de tolerar con dulzura los defectos de la inexperiencia y de la insensatez humana. Tiene la misma actitud con la mujer, el sexo más débil. La combinación de estas cualidades lo capacita para tomar la responsabilidad de dirigir un amplio grupo social con éxito real. Seis en el tercer lugar significa: “No debes tomar a una doncella cuando ella ha visto a un hombre de bronce y ha perdido el dominio de ella misma. No pongas obstáculos para que él tome posesión de ella. Nada que sea ventajoso”. 28 Un hombre débil, sin experiencia, que trata de sobresalir, fácilmente pierde su individualidad cuando trata de imitar a un individuo que ocupa una posición poderosa. Es como una muchacha que se abandona fácilmente cuando encuentra a un hombre fuerte. Una aproximación tan servil no debe ser estimulada, resulta mala para tanto para el joven como para el maestro. Una muchacha gana en dignidad cuando es cortejada. No es bueno rebajarse y aceptar cualquier cosa que se ofrezca. Seis en el cuarto lugar significa: “Complicarse ingenuamente trae humillación». Para los jóvenes ingenuos, una de sus entretenciones preferidas es lanzarse en imaginaciones vacías y en proyectos irrealizables. Los más obstinados persisten y lo más seguro es que la humillación los persiga. A menudo el maestro, cuanto se encuentra enfrentado a tanta obstinación juvenil, no tiene otro recurso que dejar entregado al obstinado al curso de los acontecimientos, no pudiendo protegerlo de la humillación que resultará. A menudo es la única manera de salvarlo. O Seis en el quinto lugar significa: “La candidez pueril trae buena fortuna”. Una persona ingenua que sigue las instrucciones de una manera infantil y sin pretensiones está en la senda correcta; el hombre libre de arrogancia que es capaz de subordinarse a la autoridad del maestro será ciertamente favorecido. Nueve en la cima significa: “No se deben cometer excesos de poder cuando se castigan las transgresiones de un insensato. Lo único benéfico es prevenir los excesos de poder y evitar las transgresiones». En algunas ocasiones un loco incorregible debe ser castigado, pero nunca el castigo debe imponerse con cólera; su objetivo fundamental es impedir las transgresiones injustificadas desde el comienzo. El castigo no es nunca un fin en sí mismo sino un medio de restablecer el orden. Esto se aplica no sólo a las personas sino también en el caso de las medidas que toma un gobierno respecto a su pueblo. La intervención gubernamental debe ser siempre preventiva y tender a la mantención de la seguridad pública y la paz. 5.- HSÜ / LA ESPERA (NUTRICION) Superior : K´an El abismo, Agua. Inferior : Ch'ien Lo Creativo, Cielo. 29 Todos los seres necesitan ser nutridos. Pero el alimento llega a su tiempo y hay que saber esperarlo. Este hexagrama muestra las nubes en el cielo, dando lluvia y refrescando todo lo que crece y proveyendo a la humanidad comida y bebida. La lluvia llega por sí misma, no podemos hacerla venir a la fuerza sino que tenemos que esperarla. La idea de “espera” está además sugerida por las propiedades de cada uno de los trigramas: en el interior la fuerza y adelante el peligro. (*) La fuerza frente al peligro no consiste en arremeter contra él incontroladamente sino en esperar el momento propicio. No se trata de agitarse e impacientarse en la debilidad. (*) El trigrama inferior es considerado como estando al interior de una situación, mientras que el superior es considerado como estando adelante. EL JUICIO: “La Espera. Si eres sincero, tendrás brillo y éxito. La perseverancia trae buena fortuna. Es ventajoso atravesar la gran corriente”. La espera no consiste en una esperanza vacía. Hay una certeza interior de alcanzar la meta. Solo esta certeza interior da la claridad que conduce al éxito. Ella conduce a la perseverancia que trae fortuna y confiere la fuerza para atravesar la gran corriente. Alguien se enfrenta a un peligro que debe ser superado. La debilidad y la impaciencia no ayudan. Sólo un hombre fuerte puede superar al destino, puesto que puede mantenerse firme hasta el fin gracia a su seguridad interior. Esta fuerza se revela como una sinceridad inflexible. Contrae consigo mismo el compromiso de ser sincero. Sólo cuando tenemos el coraje de enfrentar las cosas tal como son, sin ninguna especie de autoengaños ni desilusiones, tenemos la claridad suficiente para observar toda la línea de acontecimientos y reconocer el camino al éxito. Este reconocimiento debe ser seguido por una acción decidida y perseverante, puesto que es solamente cuando el hombre afronta resueltamente su destino que puede dominarlo. En ese momento el hombre estará preparado para cruzar la gran corriente, es decir, será capaz de tomar las decisiones necesarias para superar el peligro. LA IMAGEN: «Las nubes suben en el cielo: la imagen de la espera: El hombre noble come y bebe. Se alegra con un buen banquete y reconforta su mente». Las nubes en el cielo indican una próxima lluvia. Lo único que se puede hacer es esperar que la lluvia caiga. Es lo mismo en la vida cuando el destino se prepara. No podemos forzar el futuro interfiriendo en las cosas antes que llegue su tiempo. Podemos, sí, fortificar el cuerpo comiendo y bebiendo e igualmente reconfortar la mente. El destino llega por sí mismo y entonces estamos preparados para afrontarlo. 30 LAS LINEAS: Nueve en la base significa: “Esperando en la Pradera. Enseña a aguardar con paciencia. Es ventajoso permanecer en lo perdurable. Sin reproches». El peligro todavía no se presenta. Las condiciones todavía son simples, pero ya existe el presentimiento que se producirán problemas. Uno debe tratar de llevar su vida normalmente por todo el tiempo posible. Sólo así se puede evitar un prematuro desgaste de energías, librarse de los reproches y los errores que pueden acarrear la debilidad más adelante. Nueve en el segundo lugar significa: “Esperando en la arena. Hay algunas habladurías. El final trae buena fortuna”. El peligro se acerca gradualmente. La arena está cerca de los bancos del río y cuya agua significa peligro. Comienzan a manifestarse los inconvenientes. En tales circunstancias nace fácilmente un malestar general donde la gente se echa la culpa mutuamente. Entonces, el que permanezca en calma y resignado (*) puede lograr que para él las cosas finalmente marchen bien. Las calumnias pueden ser silenciadas si no caemos en la complacencia de replicarlas con injurias. (*) Wilhelm utiliza el término “gelassen” (abandonar) para caracterizar la actitud de aquél que renuncia a su propia voluntad para entregarse dócilmente a la voluntad del cielo. Nueve en el tercer lugar significa: “Esperar en el lodo, provoca la llegada del enemigo”. El cieno, que ya está impregnado del agua del río, no es un lugar favorable para esperar. Hay que acumular las energías para cruzar la corriente de una sola vez, y cuidarse de no partir en una tentativa prematura cuyo impulso podría conducirnos a ciénaga donde nos empantanemos. El que se encuentra en una posición tan desfavorable atrae naturalmente, a los enemigos que tratarán de explotar la situación y sacar ventaja. La precaución y una seria prudencia en esta situación grave es todo lo que se puede hacer para evitar el daño. Nueve en el cuarto lugar significa: “Esperar en la sangre. Salir del agujero”. La situación es extraordinariamente peligrosa. Es de suma gravedad, una cuestión de vida o muerte. El derramamiento de sangre parece inminente. No se puede avanzar ni retroceder. Estamos atrapados en un agujero del cual debemos salir rápidamente. Sólo podemos resistir y dejar que el destino siga su curso. Esta calma resistente, que impide agravar aun más el daño por una acción personal, es la sola manera de salir de ese agujero peligroso. 31 O Nueve en el quinto lugar significa: “Esperar comiendo y bebiendo. La perseverancia trae buena fortuna”. Incluso en el medio del peligro se presentan momentos de paz cuando las cosas marchan relativamente bien. Si ponemos suficiente empeño, podemos sacar ventaja de estos momentos para renovar fuerzas esperando un nuevo combate. Debemos saber aprovechar cada momento teniendo siempre en vista la meta; la perseverancia es indispensable para lograr la victoria. Ocurre lo mismo en la vida pública. No se puede alcanzar todo de una sola vez. La suprema sabiduría consiste a acordar al pueblo momentos de recreación que reaniman la alegría necesaria para el trabajo de llevar la obra a buen fin. Aquí se encuentra la clave del hexagrama entero. Este se distingue del hexagrama 39 (el obstáculo) en que aquí la espera es consciente y uno sabe lo que hace sin necesidad de privarse de momentos de paz que procuran alegría interior. Seis en la cúspide significa: “Se cae en el pozo. Llegan tres huéspedes inesperados. Honrémoslos, y finalmente habrá buena fortuna”. La espera se termina, el peligro ya no puede ser evitado. Se cae en un pozo y hay que resignarse con lo que aparece como inevitable. Todo pareciera haber sido en vano. Pero precisamente en este estado de desamparo y en último extremo sobreviene un cambio imprevisto de la situación. Sin que se haya actuado expresamente, hay una intervención extraña de la cual al comienzo no podemos estar seguros si significa el rescate o la destrucción. En esta situación uno debe mantenerse alerta y no tener un prematuro gesto de oposición o rechazo, sino mirar con respeto este nuevo cambio en los acontecimientos. Así se escapa finalmente del peligro y todo va bien. A menudo los acontecimientos favorables se presentan bajo una forma que al principio parece extraña. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 6.-SUNG/ EL CONFLICTO Superior : Ch'ien Lo Creativo, Cielo. Inferior : K'an El Abismo, Agua. El trigrama superior -cielo- tiene un movimiento hacia arriba; el trigrama inferior -agua- descendente conforme a su naturaleza. Los movimientos de los dos trigramas van en sentido opuesto, de allí la idea de conflicto, de con32 tradicción. El atributo del creador es la fuerza, mientras que el atributo del abismo es lo insondable, el peligro, la perfidia. Cuando la astucia se enfrenta a la violencia hay conflicto. Hay todavía otra indicación de esta idea de conflicto, cuando la perfidia que, es un aspecto interior insondable del carácter se une a una firme resolución exterior. Un carácter de este tipo es seguramente pendenciero. EL JUICIO: «Conflicto. Eres sincero y encuentras obstáculos. Un alto prudente en la mitad del camino trae fortuna. Llevar a término el asunto trae infortunio. Hay que ver al gran hombre. No es prudente atravesar el gran océano.» El conflicto se desarrolla cuando uno está convencido de estar en lo cierto y corre a la oposición. Si no se está convencido de tener razón y estar en el buen derecho, la resistencia estimula la astucia o los excesos violentos pero no el conflicto. Cuando uno está implicado en un conflicto, el único medio de salvación reside en la circunspección y en la fuerza interior, gracias a las cuales se está dispuesto a arreglar la protesta y a concluir un compromiso encontrándose a medio camino con su oponente. Llevar a un conflicto a un desenlace penoso tiene malos efectos aunque estemos en la razón, porque la enemistad se perpetúa. Es importante ver al gran hombre que con imparcialidad y autoridad puede terminar el conflicto amigablemente o asegurar una justa decisión. En las épocas de lucha no se aconseja cruzar el gran océano, no es prudente acometer grandes empresas ya que el éxito requiere aunar todas las fuerzas. El conflicto paraliza la fuerza y debilita la capacidad de conquistar sin peligro. LA IMAGEN: «El cielo y el agua van por caminos opuestos: la imagen del Conflicto. Esto es lo que el hombre noble considera siempre cuidadosamente el comienzo de todos los asuntos que trata». La imagen alude a las causas del conflicto que están latentes en las dos tendencias opuestas de los trigramas. Cuando existen tales disposiciones divergentes surge fatalmente un conflicto. Para evitarlo, hay que reflexionar cuidadosamente el comienzo de cada asunto. Si los derechos y los deberes están claramente definidos, o si en un grupo, las tendencias espirituales se armonizan, la causa profunda del conflicto desaparece por adelantado. LAS LINEAS: Seis en la base significa: «Si alguien no quiere proseguir un asunto habrá un poco de habladurías. Al fin, llega la fortuna». Cuando un conflicto se encuentra en estado incipiente, lo mejor es evitarlo. Especialmente cuando el adversario es más fuerte no es prudente empujar el 33 conflicto a una decisión. Puede haber una ligera disputa pero al fin todo irá bien. Nueve en el segundo lugar significa: «Uno no puede comprometerse en un conflicto; uno vuelve al hogar, se va. La gente de su pueblo, trescientas familias, permanecen libres de culpa». En la lucha con un enemigo más fuerte, la retirada no es una deshonrosa. Retirarse a tiempo es una manera de prevenir peores consecuencias. Si un hombre, por un errado sentido del honor, se compromete en un conflicto desigual, estará concitando el desastre sobre sí mismo. En éste caso una actitud sabia y conciliadora beneficiará a toda la comunidad que no debe ser arrastrada al conflicto. Seis en el tercer lugar significa: «Nutrirse a sí mismo en las antiguas virtudes induce a la Perseverancia. Peligro. Al final viene la buena fortuna. Si por azar está al servicio de un rey, no hay que buscar trabajos». Se trata de una advertencia para no llamar al peligro que comporta la tendencia a la expansión. Sólo lo que ha sido honestamente adquirido a través del mérito resulta una posesión permanente. Puede que se discutan tales posesiones, pero si realmente son propias, uno no podrá ser despojado. Todo lo que un hombre posea a través de la fuerza puede ser perdido. Si se entra al servicio de alguien superior, se puede evitar el conflicto no solicitando trabajos por la pura aspiración del prestigio. Es suficiente con cumplir con el trabajo asignado y dejar el honor a los otros. Nueve en el cuarto lugar significa: «Uno no puede comprometerse en el conflicto. Uno vuelve y se somete al destino, cambiando su propia actitud, y encuentra la paz en la perseverancia. Fortuna». Se refiere a alguien cuya propia actitud es al comienzo falta de mesura. No está contento con su situación y quisiera mejorarla a través del conflicto. Está enfrentado a un oponente más débil y podría triunfar por la fuerza (a la diferencia de la situación del segundo trazo fuerte). Pero no debe dejarse llevar a la lucha porque ella no justificará el conflicto frente a su conciencia. Es por eso que retrocede y acepta el destino. Cambia de opinión y encuentra la armonía siendo consecuente con las leyes eternas. Esto trae buena fortuna. O Nueve en el quinto lugar significa: «Lidiar frente a él trae una gran fortuna». El oráculo representa aquí al árbitro de un conflicto. Es alguien poderoso y justo que tiene el poder suficiente de conferir la fuerza al derecho. Se le puede confiar un asunto litigioso. Si alguien está en lo justo, encontrará allí la mejor fortuna. 34 Nueve en la cima significa: «Si por casualidad un ceñidor de cuero le es regalado, al fin de la mañana le será arrebatado tres veces». Aquí tenemos a alguien que condujo un conflicto a un final amargo y triunfó. Ganó una condecoración, pero no la felicidad. Es atacado una y otra vez y el resultado es un conflicto sin fin. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 7.- SHIH / EL EJÉRCITO Superior : K'un Lo Receptivo, Tierra. Inferior : K´an El Abismo, Agua. El hexagrama está compuesto del trigrama K’an, el agua y K’un la tierra. Simboliza el agua que se acumula en el interior de la tierra. De la misma forma que la fuerza militar se sustenta en la masa del pueblo -invisible en tiempos de paz pero siempre disponible como fuente de poder-. Los atributos de este hexagrama son el peligro al interior y a exterior la obediencia. Esto corresponde a la naturaleza de un ejército, que en su sustancia es peligroso y donde deben primar la disciplina y la obediencia. La línea que controla el hexagrama es el nueve fuerte en el segundo lugar, al cual están subordinados todos los otros trazos. Este trazo fuerte representa el comandante, porque está emplazado en el centro de uno de los trigramas. Pero como está en el trigrama inferior, no está en el lugar supremo del soberano sino en el lugar del hábil general que, por su autoridad, mantiene al ejército bajo su poder. EL JUICIO: «El ejército necesita de la perseverancia y de un hombre fuerte. Fortuna sin reproches». Un ejército es una masa que necesita organización para devenir una fuerza de lucha. Sin una estricta disciplina nada puede lograrse, pero la disciplina no debe sustentarse en la fuerza. Se requiere un hombre fuerte que gane los corazones del pueblo y despierte su entusiasmo. Para desarrollar sus habilidades, este hombre requiere la completa confianza del gobernante que deberá transferirle sus responsabilidades durante todo el tiempo que dure la guerra. Pero la guerra es siempre peligrosa y trae destrucción y devastación. Es por eso que no debe ser considerada a la ligera sino usada como una droga tóxica, que sólo debe emplearse como último recurso. La 35 causa justa y la meta clara de una guerra deben ser explicadas al pueblo por un líder experimentado. Solo cuando existe un objetivo de guerra preciso por el cual el pueblo pueda exponerse en plena conciencia nacen la unidad y la fuerza de convicción que conducen a la victoria. Pero el general debe tener cuidado de que la pasión de la guerra y el delirio de la victoria no conduzcan a actos injustos que merezcan la reprobación general. Si la justicia y la perseverancia están en las bases de la acción, todo irá bien. LA IMAGEN: «En el medio de la tierra está el agua: la imagen del Ejército. El hombre noble acrecienta su influjo por la generosidad hacia el Pueblo». El agua constituye una presencia invisible sobre la tierra, de la misma manera que el poder militar se encuentra invisible en las masas. Cuando el peligro llega, cualquier persona se convierte en un soldado; cuando la guerra termina, vuelve a sus ocupaciones. El que es generoso con el pueblo gana su afecto y el pueblo que vive bajo una ley benigna llega a ser fuerte y poderoso. Sólo un pueblo económicamente fuerte puede alcanzar el poder militar. Este poder debe cultivarse mejorando las condiciones de la gente con un gobierno humanitario. Sólo cuando hay este lazo invisible entre gobierno y pueblo es posible conducir una guerra victoriosa. LAS LINEAS: Seis en la base significa: «Un ejército debe moverse en buen orden. Cuando el orden no es bueno, la mala fortuna acecha». Al comienzo de una empresa militar el orden es imperativo. Debe existir una causa justa y válida, obediencia y la coordinación de las tropas debe estar bien organizada. Si no, el resultado inevitable es el fracaso. Nueve en el segundo lugar significa: «Al centro del ejército. Buena fortuna. Sin reproches. El rey otorga una triple condecoración». El líder debe estar al centro de su ejército, en contacto con él compartiendo lo bueno y lo malo que ocurra a las masas que él dirige. Sólo así estará a la altura de las importantes exigencias que pesan sobre él. Necesita también el reconocimiento del gobernante. Las condecoraciones que recibe son merecidas: ellas no constituyen solamente un privilegio acordado a su persona, sino que todo el ejército es honrado a través de su persona. Seis en el tercer lugar significa: «Acaso el ejército transporte cadáveres en un carro. Mala fortuna». Una de las explicaciones evoca el daño que resulta por el hecho de que otro se haya inmiscuido en el comando de la tropa en lugar del jefe designado. Otra explicación corresponde al sentido general de la primera a diferencia de la interpretación de la frase “transporte cadáveres en un carro”. Durante 36 las obsequias y los ritos funerarios, la costumbre china era de que el difunto estuviera representado por un jovenzuelo de la familia: se lo ubicaba en el lugar del difunto y se le rendían los homenajes y honores destinados al desaparecido. En los dos casos el verdadero líder se ha eclipsado y el mando está ocupado de hecho por otra persona que ha tomado el lugar directivo. Si alguien interfiere entre el líder y el conductor, o bien si mucha gente asume el liderazgo del ejército, acarreará la desgracia. Seis en el cuarto lugar significa: «El ejército retrocede. Sin reproches». Enfrentado a un enemigo superior, con el cual sería absurdo trabar una batalla, una orden de retirada es el único procedimiento correcto ya que salvará al ejército del desastre y la desintegración. No es un signo de coraje o fuerza trabarse a todo precio en una lucha sin esperanzas. O Seis en el quinto lugar significa: «Hay caza en el campo. Es necesario que alguien los capture. Sin reproches. Que el más viejo conduzca el ejército y que los más jóvenes transporten los cadáveres. Aquí la perseverancia acarrea mala fortuna». La caza está en el campo, es decir, que dejó su sitio habitual en el bosque y devasta los campos. Esto se refiere a una invasión enemiga. Entonces, un combate enérgico y punitivo se justifica. Pero también puede referirse a una deriva peligrosa del comando. Es importante recordar que la guerra debe ser conducida según ciertas reglas y que el ejército debe ser dirigido por un líder experimentado. La batalla no debe degenerar en una confusión salvaje en la cual cada uno pelee sólo por sí mismo. Tampoco se debe permitir que la multitud haga una carnicería con todo lo que caiga entre sus manos. Si algo de esto ocurre, y a pesar del enorme grado de perseverancia y de valor del ejército, ello puede conducir al fracaso y al infortunio. Seis en la cúspide significa: «El gran príncipe triunfa en el mando, funda estados, otorga feudos. No debe emplearse a la gente inferior». La guerra terminó victoriosamente y el rey funda estados y entrega feudos a sus vasallos. Es importante que la gente inferior no llegue al poder. Si ayudaron, págueseles con dinero, pero no con tierras ni con los privilegios de los dirigentes, porque abusarían del poder. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 37 8.- PI / LA SOLIDARIDAD (la Unión) Superior : K'an El Abismo, Agua. Inferior : K'un Lo Receptivo, Tierra. Las aguas en la superficie de la tierra reúnen sus cursos cada vez que pueden hacerlo, como por ejemplo en el mar, donde todos los ríos se reúnen. Hay allí el símbolo que traduce la solidaridad y su ley. La misma idea es evocada por el hecho de que todas las líneas son débiles hasta la 5ª, la del gobernante del hexagrama. Los débiles se reúnen para ayudarse mutuamente porque ellos están sometidos bajo la influencia de la voluntad firme en el lugar de la autoridad que es su punto de unión. Pero esta personalidad fuerte y directiva conserva además la unión con otras personas gracia a las cuales ella encuentra un complemento de su propia naturaleza. EL JUICIO: “La solidaridad trae buena fortuna. Pregunta otra vez al oráculo para saber si tienes la sublimidad, la constancia y la perseverancia. Entonces no hay reproches. Los inseguros se aproximan poco a poco. Quien viene demasiado tarde encuentra el infortunio”. Se trata de asociarse con otros con el fin de complementarse y de ayudarse mutuamente. Tal unión requiere un centro alrededor del cual uno se agrupa con los otros. Convertirse en un centro para la unión de los hombres es un asunto grave y de gran responsabilidad. Ello exige una grandeza interior, ser lógico y fuerte. Es por eso que aquél que quiere reunir a los otros alrededor suyo debe ponerse a prueba para saber si está a la altura de la situación. Quien quiera reunir a los otros sin tener la aptitud y la vocación, causa más confusión que si no hubiera ninguna reunión. Pero allí donde existe un auténtico punto de reunión, se ve aproximarse por ellos mismos y poco a poco a los inseguros, de una manera vacilante al comienzo. Los que lleguen demasiado tarde sufrirán por ello. Se trata de una unión que debe realizarse en el tiempo oportuno. Las relaciones se establecen y se afirman siguiendo leyes internas determinadas. Las experiencias comunes las consolidan. Quien llegue demasiado tarde y no pueda tomar parte a esas experiencias fundamentales tendrá que reprocharse su inseguridad y su tardanza cuando encuentre la puerta cerrada. Si un hombre reconoce la necesidad de reagrupamiento y no se encuentra suficientemente fuerte como para situarse al centro de la unión, su deber será convertirse en un miembro más de la comunidad. 38 LA IMAGEN: «En la tierra está el agua: la imagen de la solidaridad. Los reyes de la antigüedad dividían los estados en feudos y cultivaban relaciones amistosas con los señores feudales». El agua llena los espacios vacíos de la tierra y se adhiere fuertemente a ella. La organización social de la antigüedad estaba fundada sobre esta máxima de unión entre vasallos y señores. El agua une de ella misma sus cursos porque en todas sus partes ella permanece sujeta a las mismas leyes. Así la sociedad humana debe igualmente observar la unión gracia a una comunidad de intereses que hace que los diferentes individuos se sientan miembros de un todo. El poder central de un organismo social debe vigilar a que cada miembro encuentre su verdadero interés en la unión, como era el caso en las relaciones paternales que el rey de China antigua mantenía con sus vasallos. LAS LINEAS: Seis al comienzo significa: «Sostenlo en la verdad y la lealtad: aquí no hay reproches. La verdad es como una escudilla de arcilla llena. Al final, la buena fortuna viene del exterior». Cuando se trata de entablar relaciones la sinceridad es fundamental. Esta actitud, simbolizada por la escudilla de arcilla llena, muestra el importante valor del contenido contra la forma vacía y sin gran valor. Indica que el valor no reside en las palabras hábiles y prometedoras sino en la firmeza de los actos. Esta firmeza es tan grande que puede atraer la fortuna de cualquier parte. Seis en el segundo lugar perseverancia trae la fortuna». significa: «Sostenerlo interiormente. La Si alguien responde a los altos requerimientos que lo llaman a la acción, sus relaciones con los demás deben permanecer en el ámbito personal y así no se extraviará. Por otra parte, si alguien busca asociarse con los superiores como si fuera un solicitante obsequioso en busca de ventajas, se perderá. El hombre noble conserva su dignidad y no se envilece. Seis en el tercer lugar significa: “Estás ligado con gente inconveniente”. A menudo nos mezclamos con gente que no corresponde a nuestra esfera. En ese caso hay que precaverse de no dejarse arrastrar a una falsa intimidad que nazca sólo del hábito. Es innecesario decir que esto puede traer malas consecuencias. Mantener trato social sin intimidad es la única actitud correcta que se puede adoptar respecto a esta gente, porque sino más tarde no se estaremos libres para unirnos con la clase de gente que deseamos. 39 Seis en el cuarto lugar significa: “Tú también debes ligarte abiertamente a él. La perseverancia trae fortuna.” Aquí las relaciones con alguien que es el centro de interés ya están sólidamente establecidas. Además, aquí se puede y se debe mostrar abiertamente la dependencia. Solamente es necesario permanecer firme y no dejarse inducir al error por nada. O Nueve en el quinto lugar significa: “Manifestación de solidaridad. En las cacerías reales, el rey emplea batidores para acorralar la caza solo por tres lados y deja libre a la que huye por el frente. Los ciudadanos no necesitan advertencia. Fortuna”. En las cacerías reales de la vieja China, la costumbre era de acorralar la caza solamente de tres lados. La caza acorralada podía huir por el cuarto lado, el del frente. Los animales que no tomaban esta dirección, estaban obligados a pasar por la puerta de atrás en la que el rey se apostaba listo a tirar. Pero sólo eran abatidas las bestias que penetraban por allí. En cuanto a aquellas que huían por delante, se las dejaba ir en libertad. Esta costumbre era conforme a la actitud real: el rey no quería hacer de la caza una masacre, sino que mataba solamente a las bestias que de algún modo se le ofrecían por ellas mismas. Aquí aparece la figura de un gobernante, de alguien influyente que atrae al pueblo. El que viene hacia él es recibido, y al que no viene se lo deja ir. El no ruega ni halaga a nadie sino que deja la libertad de elección. Establece así una libre subordinación de los que se adhieren a él y desarrolla una voluntaria dependencia hacia quienes lo sostienen. Expresa sus opiniones abiertamente. No son necesarias las medidas policiales y el pueblo se adhiere al gobernante por su propia voluntad. El mismo principio de libertad es válido para la vida en general. No podemos esforzarnos por obtener el favor de la gente. Si alguien cultiva en sí mismo la pureza y la fuerza que se requiere para crear un centro de unión, las personas que le están destinadas se acercan por ellas mismas. Buena fortuna. Seis en la cúspide significa: “No encuentra cabeza para la solidaridad. Infortunio”. La cabeza es el comienzo. Si el comienzo no es justo, no hay esperanzas de llegar a un final correcto. Si se pierde el momento apropiado para la unión y si se vacila ante la perspectiva de una entrega de sí mismo verdadera y sin reservas, se lamentará el error cuando sea demasiado tarde. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 40 9.- HSIAO CH'U / EL PODER DOMINANTE DE LO PEQUEÑO Superior : Sun Lo Suave, Viento. Inferior : Ch'ien Lo Creativo, Cielo. Este hexagrama representa la fuerza de lo pequeño -el poder de lo sombríoen cuanto algo que restringe, domestica y frena. En el 4º lugar, que es el del ministro, hay una línea débil que limita todas las otras, que son fuertes. La imagen es la del viento que sopla alto en el cielo. Retiene el creciente hálito creador, mueve las nubes, las hace más densas pero no lo suficiente para que se transformen en lluvia. El hexagrama representa una constelación donde un elemento fuerte es por un cierto tiempo refrenado por un elemento débil. Sólo a través de la suavidad y de la gentileza que tal situación puede ser acompañada por el éxito. EL JUICIO: “El influyente poder domesticador de lo pequeño tiene éxito. Nubes densas, pero nada de lluvia para nuestra región del oeste.” La situación es comparada con la de la China en los tiempos del rey Wen, que era originario del Oeste, pero que se encontraba en esos momentos en el Este, en la corte del gran soberano, el tirano Tcheu Sin. La hora de una acción en gran escala todavía no había llegado y Wen solo podía refrenar hasta cierto punto al tirano con sugestiones impregnadas de bondad. De allí la imagen de nubes abundantes que se levantan prometiendo a la tierra humedad y bendición, pero que por el momento todavía no hacen llover. La situación no es desfavorable y se puede prever el éxito futuro aunque haya todavía obstáculos que superar. Se pueden comenzar los trabajos de aproximación y empezar a tomar medidas preventivas. Pero solamente se podrá actuar utilizando modestos medios de persuasión amistosa y sugestiones llenas de bondad. Todavía no ha llegado la hora de emplear medidas enérgicas y arrolladoras. Sin embardo, es posible ejercer una influencia moderadora y suavizante en un radio limitado. Para sacar adelante nuestros propósitos necesitamos tener una firme determinación interior y adaptar nuestra acción exterior a una conducta suave y a mantener relaciones gentiles. LA IMAGEN: “El viento ejerce su empuje alto en el cielo. La imagen del poder domesticador de lo pequeño. El hombre noble refina el aspecto visible de su naturaleza”. 41 El viento puede empujar a las nubes en conjunto por el cielo, pero no siendo más que aire, no puede producir efectos grandes y duraderos. Así, en la época donde no es posible ejercer una acción poderosa, a uno no le queda más que refinar la expresión de su naturaleza efectuando cosas pequeñas y cumpliendo solo con detalles. LAS LINEAS: Nueve en la base significa: «Vuelta al camino. ¿Cómo podríamos ser reprochados por esto? Buena fortuna». Está en la naturaleza del hombre fuerte arremeter. Pero de esta manera se encuentran obstáculos. Entonces vuelve al camino normal, correspondiente a su situación, donde es libre de avanzar o retroceder. No pretender obtener algo por la fuerza y la violencia es algo bueno e inteligente. Actuar conforme a la naturaleza de las cosas trae buena fortuna. Nueve en el segundo lugar significa: «El consiente en ser enviado de retorno. Buena fortuna». Uno que quiere arremeter, pero antes de ir más lejos se da cuenta por el ejemplo de otras personas de la misma naturaleza que el camino está bloqueado. En este caso, si el esfuerzo para adelantar no está en armonía con la época, un hombre razonable y decidido no se expondrá personalmente al rechazo de los otros, sino que se replegará con los demás. Esto trae buena fortuna, ya que no es necesario que se exponga personalmente y pierda el control de sí mismo. Nueve en el tercer lugar significa: “Los rayos se desprenden de las ruedas del carro. Marido y mujer ponen los ojos en blanco». Hay un intento de avanzar por la fuerza porque el obstáculo que se presenta no es todavía considerable. Pero en estas circunstancias es el elemento débil que posee la fuerza, y este avance forzado está condenado al fracaso. Las condiciones externas impiden el progreso, tal como la pérdida de los rayos de sus ruedas impide el avance del carro. Se le resta importancia a las advertencias del destino, como ocurre a menudo con las advertencias de la mujer en un matrimonio. Naturalmente no se trata de una situación favorable. Aunque a favor de sus argumentos la parte más débil logre a mantenerse firme, las dificultades son demasiado numerosas para alcanzar un feliz resultado. En estas condiciones, el ser más fuerte no podrá utilizar su poder para ejercer una autoridad correcta a su alrededor. Experimenta un rechazo cuando esperaba una victoria fácil, esto compromete su dignidad y se ha dado un paso en falso. * Seis en el cuarto lugar significa: “Si eres sincero, la sangre y el temor se van. Sin reproches”. 42 Si alguien se encuentra en la posición difícil y de responsabilidad de consejero de un hombre poderoso, debe restringirse y enmarcarse en el camino más correcto. A sus lados hay un peligro tan inminente que acecha la posibilidad de un derramamiento de sangre. Sin embargo, el poder de la verdad desinteresada causa tal efecto que los esfuerzos consiguen felizmente ser obtener el éxito. Entonces se esfuma el temor y desaparece el peligro de derramamiento de sangre. O Nueve en el quinto lugar significa: “Si eres sincero y leal, eres rico en tus cercanías”. La lealtad crea lazos firmes, puesto que ella proviene del hecho de que los seres se complementan mutuamente. En los colaboradores más débiles, la lealtad se traduce por abnegación; en los más fuertes por una fidelidad sin fallas y por la confianza. Esta manera mutua de completarse conduce a la verdadera riqueza que se manifiesta como algo que no se guarda para sí mismo con egoísmo, sino que se la comparte con el prójimo. Placer compartido es doble placer. Nueve en la cima significa: “La lluvia llega, viene el reposo. Esto se debe al efecto duradero del carácter. La mujer se pone en peligro por la perseverancia. La luna está casi llena. Si el hombre noble insiste, llega el infortunio”. El éxito se ha obtenido. El empuje del viento ha hecho llover. Se ha alcanzado una cierta estabilidad. Este hecho se ha producido por la acumulación progresiva de pequeñas acciones surgidas por respeto a un carácter superior y elevado. Pero un tal éxito, construido poco a poco, exige mucha prudencia y abandonarse a la ilusión de será perdurable sería peligroso. El principio femenino, el elemento débil que ganó la victoria no debe obstinarse y sobreestimarse o ello acarreará el peligro. El poder de las sombras en la luna es mayor cuando el plenilunio se aproxima. Cuando la luna se tiene en oposición directa con el sol su mengua es inevitable. Bajo tales circunstancias hay que darse por satisfecho con el resultado obtenido. Avanzar más todavía, antes que llegue la época apropiada, puede traer mala fortuna. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 10.- LÜ / LA MARCHA (La manera de conducirse) Superior : Ch'ien Lo Creativo, Cielo. Inferior : Tui. La Alegría, Lago. 43 El nombre del hexagrama significa por una parte la manera correcta de conducirse. El trigrama superior, el cielo, simboliza el padre y el inferior, el lago, la hija más joven. Así está indicada la distinción entre lo superior y lo inferior y la manera en que ella aporta la tranquilidad cuando la conducta en la sociedad es correcta. Por otro lado, significa literalmente trillar, caminar sobre algo. (*) Lo pequeño y feliz se apoya sobre lo grande y fuerte. Los dos trigramas traducen un movimiento hacia lo alto. El I Ching no hace menciones especiales sobre el hecho de que lo fuerte marche sobre lo débil porque ello se considera como algo natural en sí mismo. Pero cuando lo débil se interpone a lo fuerte no es peligroso si ello ocurre con serenidad y sin arrogancia, de tal manera que lo fuerte no se irrita y lo acepta de buen grado. (*) El nombre del hexagrama en alemán es “Auftreten” que se entiende en el sentido primero y etimológico de “treten auf: apoyar el pie, marchar sobre…” (en inglés “to tread on). “Autreten”, lo mismo que “Liu” significa a la vez “marchar” y “conducirse”. EL JUICIO: “Caminando sobre la cola de un tigre. Este no muerde al hombre. Éxito”. La situación es realmente difícil. El más fuerte y el más débil están estrechamente ligados. El débil molesta. El fuerte, sin embargo, lo acepta y no hiere al débil porque su conducta es alegre e inofensiva. La situación descripta aquí es la de alguien que está tratando con gente inconsiderada e inaccesible. En tal caso se puede alcanzar la meta si uno observa buenos modales. Las buenas maneras y la conducta agradable conducen al éxito incluso cuando se trata con gente intratable. LA IMAGEN: “El cielo arriba, el lago abajo. La imagen de la marcha. El hombre noble discrimina entre lo superior y lo inferior y esto fortifica los pensamientos del pueblo”. El cielo y el lago muestran una diferencia de altura inherente a su propia naturaleza, y ello no suscita ninguna envidia ni disturbio. Entre los hombres, también se requieren estas diferencias. La igualdad universal es imposible de realizar. Pero es importante que las diferencias existentes no sean arbitrarias ni injustas, porque si así ocurre llegará la lucha y sus consecuencias inevitables. Si, por el contrario, las diferencias externas corresponden a diferencias reales y a auténticos valores personales, la gente las aceptará y el orden reinará en la sociedad. LAS LINEAS: Nueve en la base significa: “Conducta simple. Progreso sin reproches”. 44 Se presenta una situación donde todavía no estamos obligados a ningún intercambio social. Podemos seguir nuestras predilecciones tanto como lo deseamos y ser felices sin pedir nada a nadie. Marchar no es quedarse inmóvil sino progresar. De todas maneras se posee la fuerza interior que garantiza el progreso. Al partir, el hombre se encuentra en una posición inferior. Si puede contentarse con la simplicidad, podrá progresar sin problemas. Cuando un hombre ambicioso está insatisfecho con sus circunstancias modestas, permanece sin descanso y trata de avanzar, no solo para escapar a la pobreza y a la modestia de su condición, sino también para obtener otras metas determinadas por su ambición. Pero cuando obtenga sus propósitos se volverá fatalmente arrogante y amante del fasto. Es por eso que su progreso está estigmatizado por los reproches. Por el contrario, un hombre virtuoso prefiere conducirse con simplicidad y se contenta con los frutos de su trabajo. Si alcanza su meta, ha realizado con ello una obra de valor y todo está bien. Nueve en el segundo lugar significa: “La senda despejada hace el camino fácil. La perseverancia de un hombre oscuro trae buena fortuna”. Aquí se indica la situación de un sabio solitario. Permanece apartado del torbellino de la vida, no busca nada, no pregunta nada a nadie ni se deslumbra por metas fabulosas. Confía en sí mismo y pasa por la vida inmutable, por un camino plano. Mientras esté contento y no trate de modificar el destino, permanecerá libre de complicaciones. * Seis en el tercer lugar significa: “Un hombre tuerto puede ver; un cojo puede caminar. Tira de la cola a un tigre. El tigre muerde al hombre. Mala fortuna. Un acto heroico en defensa del gran príncipe”. Un tuerto ve, pero no tiene una visión clara. Un cojo, camina pero no progresa bastante. Si un hombre se considera fuerte a sí mismo a pesar de sus defectos y en consecuencia se expone al peligro, está llamando al desastre. En efecto, él se enfrenta con algo que excede a sus capacidades. Esta manera temeraria de precipitarse sin considerar sus propias limitaciones sólo se justifica en el caso de un guerrero que defiende a su príncipe. Nueve en el cuarto lugar significa: “Tira la cola a un tigre. Precaución, circunspección llevan finalmente a la buena fortuna”. Aquí se trata de una empresa peligrosa. La fuerza interior para realizarla existe, pero debe estar acompañada por una actitud exterior de precaución vacilante en lo aparente, en contraste con el trazo precedente que es interiormente débil y que actúa con temeridad excediendo sus fuerzas. Aquí se asegura el éxito final, que consiste en alcanzar la meta venciendo el peligro cuando se avanza con precaución. O Nueve en el quinto lugar significa: “Conducta resuelta. Perseverancia con conciencia del peligro”. 45 Este trazo gobernante del hexagrama representa a alguien que tiene la necesidad de llevar una marcha (conducta) resuelta. Pero al mismo tiempo que es consciente del peligro que entraña su resolución, sobre todo si persevera en ella. Esta conciencia del peligro hace posible el éxito. Nueve en la cima significa: “Observa tu conducta y considera los signos favorables. Cuando todo se cumple, llega la mejor fortuna”. La obra se ha terminado. Para saber si la consecuencia será afortunada deben observarse nuestras acciones anteriores; si tuvieron buenos efectos, la buena fortuna está asegurada. Nadie lo sabe por si mismo. Sólo por el resultado de sus actos y el fruto de sus acciones, el hombre puede discernir lo que puede esperar. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 11.- TAI / LA PAZ Superior : K'un Lo Receptivo, Tierra. Inferior : Ch'ien Lo Creativo, Cielo. Lo receptivo, cuyo movimiento está dirigido hacia abajo, está arriba; lo creativo, cuyo movimiento tiende hacia arriba, está abajo. Las influencias de ambos trigramas están en armonía, de manera que todas las cosas brotan y prosperan. Este hexagrama está asociado al primer mes (febreromarzo) en el curso del que las potentes energías de la naturaleza preparan la nueva primavera. EL JUICIO: “Paz. Lo pequeño se va y viene lo grande. Buena fortuna. Éxito”. El hexagrama indica la presencia en la naturaleza de una era donde el cielo está en cierto modo sobre la tierra. El cielo ubicado bajo la tierra. Así los dos principios unen sus virtudes en una armonía íntima. De allí nace la paz y la bendición para todos los seres. En el mundo de los hombres es una época de concordia social. Los grandes se rebajan hacia los humildes, mientras que los humildes y los pequeños nutren sentimientos amistosos con respecto a los grandes, tan bien que se apacigua toda hostilidad. Al interior, al centro, en el lugar decisivo se encuentra el elemento luminoso (2ª línea gobernante); el elemento oscuro está al exterior. Así, el 46 principio luminoso ejerce una influencia creadora y el principio oscuro conserva una actitud sumisa. De manera que las dos partes reciben lo que es debido y lo que merecen. Cuando en la sociedad los buenos ocupan un lugar predominante y tienen las riendas del poder, los malos por ellos mismos pasan bajo la influencia de los buenos y se mejoran. Cuando, en el hombre, reina el espíritu que viene del cielo, la naturaleza animal pasa por ella misma bajo su influencia y ocupa el lugar que le es propio. Las diferentes líneas entran en el hexagrama por abajo y lo dejan por arriba. Son los elementos pequeños, débiles, malos que se aprestan a partir, mientras que suben los factores grandes, fuertes y buenos. Ello trae buena fortuna y éxito. LA IMAGEN: “Cielo y tierra unidos; la imagen de la paz. El gobernante divide y completa el curso del cielo y de la tierra; proporciona y regula los dones del cielo y de la tierra y así ayuda al pueblo”. El cielo y la tierra tienen relación uno con el otro y unen sus efectos. Se trata de una época de prosperidad general. Toda esta corriente de energía debe ser regulada por un gobernante apropiado, de manera de aprovecharla lo más posible. Este resultado es obtenido gracias a la repartición. Así el tiempo indiferenciado está dividido en estaciones por el hombre, según la sucesión de fenómenos naturales; el espacio que envuelve todas las cosas está dividido en puntos cardinales por obra humana. Así, la naturaleza y la abundancia profusa de los fenómenos debe ser contenida y dominada. Por otra parte, la naturaleza debe ser ayudada en sus realizaciones. Ello tiene lugar si se acuerdan las producciones con el momento y el lugar conveniente. Se acrecienta así el rendimiento natural. Esta actividad humana que apunta a dominar y a favorecer es un trabajo sobre la naturaleza que devuelve lo bueno al hombre. LAS LINEAS: Nueve en la base significa: «Cuando se tira del pasto, la tierra también sale. Cada uno de acuerdo a su naturaleza. Emprender trae buena fortuna». En tiempos de prosperidad todo hombre valioso que sea llamado a cumplir una misión atrae hacia él las personas que comparten sus sentimientos y eso es favorable. De la misma manera, cuando se arranca una rama de pasto, también vienen con ella las ramas cuyas raíces estaban mezcladas. En las épocas prósperas, el propósito de un hombre valioso debe ser emprender la acción y realizar la obra para la cual está capacitado. Ello trae buena fortuna. O Nueve en el segundo lugar: “Soportar con tolerancia a los groseros, atravesar resueltamente el río, no descuidar lo que está distante y no tener en cuenta sus acompañantes. Así se consigue marchar por el medio”. 47 En tiempos de prosperidad es necesario tener un carácter hábil para tratar con toda la gente, incluso los groseros. En las manos de un gran maestro ningún material es inútil, él siempre puede encontrarle alguna utilidad. Sin embargo, esta generosidad no debe transformarse ni en negligencia ni en debilidad. En los tiempos de prosperidad debemos estar bien dispuestos a emprender tareas peligrosas, como cruzar un río si es necesario. Tampoco conviene descuidar lo que está más alejado, sino que hay que tomar todo en consideración. Hay que prestar atención especial en evitar las facciones y las camarillas. Lo mismo con la familia, que a menudo pretende ocupar los puestos preponderantes, se debe evitar que formen clanes y vigilar que cada uno cumpla con su deber. Observando los cuatro principios mencionados en este trazo, se puede triunfar de los peligros que acechan en las épocas de prosperidad. De esta manera cada uno encuentre el justo medio donde desarrollar la acción favorablemente. Nueve en el tercer lugar significa: “No hay llanura que no sea seguida de una cuesta, ni de ida que no sea seguida de un retorno. Sin reproches para quien permanezca constante en el peligro. No te desueles frente a esa verdad, aprovecha de la felicidad que todavía posees”. Todo lo que es terreno está sometido al cambio. La prosperidad es seguida por la decadencia. Tal es la ley eterna sobre la Tierra. Sin duda, el daño podrá ser alejado temporalmente, pero no abolido. Siempre vuelve. Esta convicción permite no ilusionarnos cuando llegan las épocas favorables, ni quedar deslumbrados por la buena fortuna pensando que es duradera. Si continuamos temiendo el peligro, evitaremos los errores. Mientras que el hombre noble sea interiormente superior al destino, permaneciendo más fuerte y rico que la felicidad exterior, la fortuna no lo abandonará. Seis en el cuarto lugar significa: “Se rebaja agitando las alas sin jactarse de su riqueza, en comunidad con su vecino, cándido y sincero». Cuando existe confianza mutua los superiores devienen simples y comunican con los inferiores sin jactarse de su riqueza. Esta actitud no es provocada por las circunstancias sino que corresponde a una disposición interior. Entonces el contacto no es forzado sino que es espontáneo, porque está basado en una convicción profunda. O Seis en el quinto lugar significa: “El soberano Yi da su hija en matrimonio. Esto es beneficioso y aporta fortuna suprema”. El soberano Yi es T’ang, el que acaba. Había decretado que las princesas imperiales, bien que superiores a sus esposos por el rango, debían obedecerlos como todas las otras esposas. La hija dada así en matrimonio, aunque su marido fuera de rango inferior, debía acatar su voluntad. Aquí hay igualmente una alusión a la unión con modestia de lo alto con lo bajo. Ello trae felicidad y la máxima fortuna. 48 Seis en la cima significa: “La muralla se cayó en el foso. No usar las armas ahora. Proclama tus órdenes en tu propia ciudad. La perseverancia trae humillación”. El cambio anunciado en el trazo N° 3 ha comenzado. La muralla que contorna la ciudad se ha caído en el foso del cual había sido erigida. La fatalidad se abate. Debemos sometemos al destino y no tratar de oponer resistencia violenta. El único recurso consiste en mantenerse en el círculo más estrecho. Si perseveramos tratando de eludir el daño por los medios habituales, el colapso será peor y la consecuencia será la humillación. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 12.- P'I / LA ESTAGNACION (La inmovilidad) Superior : Ch'ien Lo Creativo, Cielo. Inferior : K'un Lo Receptivo, Tierra. Este hexagrama es el opuesto del anterior. El cielo, en lo alto, se retira cada vez más y la tierra se hunde sin cesar. Las fuerzas creadoras no tienen relaciones mutuas. Es el tiempo de la estagnación y de la decadencia. El hexagrama está ligado al 7° mes (agosto-septiembre), periodo en el cual el año ha pasado su punto culminante y se marchita con la llegada del otoño. EL JUICIO: “La estagnación. La mala gente no favorece la perseverancia del hombre noble. Lo grande se va y viene lo pequeño”. Cielo y tierra ya no se comunican y todas las cosas se paralizan. Lo alto y lo bajo ya no tienen relaciones mutuas. La confusión y el desorden prevalecen en la tierra. La oscuridad está adentro y la luz afuera. En el interior reina la debilidad y en el exterior la dureza. Adentro está lo vulgar y afuera la nobleza. La naturaleza de lo vulgar está en crecimiento mientras que la de lo noble disminuye. Pero el hombre noble no debe dejarse apartar de sus principios. Si ya no tiene la posibilidad de actuar, debe permanecer fiel a sus principios y retirarse discretamente. 49 LA IMAGEN: «Cielo y tierra no están unidos. La imagen de la estagnación. El hombre noble se retira en su fuero interior para escapar de las dificultades. No permite que se lo gratifique con sobornos”. Cuando reina la influencia de los hombres inferiores, la actividad fructífera se hace imposible, ya que las bases son erróneas si prevalece la desconfianza mutua. El hombre noble sabe lo que debe hacer en tales circunstancias. No se deja seducir por las proposiciones brillantes que lo invitan a participar en la vida pública. No debe exponerse al peligro y soportar la mezquindad de los demás. Es por eso que debe ocultar sus méritos y retirarse en secreto. LAS LINEAS: Seis en la base significa: «Cuando se tira del pasto, la tierra sale con él. Cada uno de acuerdo a su naturaleza. La perseverancia trae buena fortuna y éxito». El texto es similar al 1° trazo del hexagrama anterior, “la paz” pero en sentido opuesto. En el hexagrama N° 11 los hombres nobles se atraen mutuamente para realizar una actividad. Aquí el hombre insta a los otros a retirarse con él de la vida pública. Es por eso que aquí no se dice “Emprender trae buena fortuna” sino que “la perseverancia trae buena fortuna y éxito”. Si no podemos actuar ni influir positivamente, sólo el retiro oportuno puede librarnos de la humillación y del fracaso. El éxito en un sentido más amplío puede ser nuestro, porque supimos salvaguardar nuestra personalidad y poner al abrigo nuestros valores. O Seis en el segundo lugar significa: «Ellos toleran y soportan; esto significa buena fortuna para la gente inferior. La estagnación sirve al gran hombre para obtener el éxito». Los inferiores están dispuestos a halagar a los superiores de una manera servil. Ellos también soportarían al hombre superior si éste pudiera ayudarlos a poner fin a sus problemas. Eso los puede beneficiar. Pero el gran hombre soporta tranquilamente las consecuencias de la estagnación. No debe mezclarse con la gente vulgar, porque ese no es su lugar. Aceptando sufrir personalmente, él asegura el éxito de sus principios. Seis en el tercer lugar significa: «Ellos sienten vergüenza». La gente inferior cuando llega al poder ilegítimamente no se siente igual frente a las responsabilidades que si su ascenso hubiera sido justo. Y comienza, al principio sin mostrarlo, a sentirse humillada. Esto marca un cambio ventajoso. 50 Nueve en el cuarto lugar significa: “Aquel que actúa al mando de lo más elevado permanece sin reproches. Aquellos que se le impongan toman parte de la herida”. El tiempo de la estagnación está a punto de terminar. Quien está en los puestos de comando permanece sin reproches. Quienes comparten sus sentimientos también compartirán los beneficios. Pero el hombre que quiera restablecer el orden de acuerdo a su propio criterio cometerá errores y finalmente fracasará. Sólo el hombre con las condiciones necesarias para la época puede asumir la tarea y los demás saldrán heridos. O Nueve en el quinto lugar significa: “La estagnación va yéndose. Buena fortuna para el gran hombre. ¿Y si él fracasa? En el camino puede enredarse en una mata de moras”. Los tiempos cambian. El hombre apto para resolver el desorden ha llegado. Por eso se augura la fortuna. Pero es justamente en los tiempos de transición donde se debe mantener la vigilancia contra el peligro porque los riesgos asechan. El éxito se asegura sólo con grandes precauciones. Las ramas de mora forman a veces matas que pueden obstaculizar el camino. Ellas simbolizan las dificultades que asechan cuando cambian los tiempos. Confucio dice al respecto: “El peligro reside allí donde uno se siente seguro. La decadencia amenaza cuando se busca sobremanera conservar la estabilidad de una situación. La confusión nace allí donde alguien a puesto todas las cosas en orden. Es por eso que el hombre noble no se olvida del peligro cuando está seguro, ni de la decadencia cuando su posición es estable y teme a la confusión cuando ha puesto el orden en sus asuntos. Así asegura la marcha y afirma sin cesar la estabilidad del Imperio”. Nueve en la cima significa: “La estagnación termina. Ponerse de pie, buena fortuna”. La estagnación no dura para siempre. Sin embargo, ella no se termina por sí misma sino que requiere la intervención de alguien capaz de ponerle término. Allí está la diferencia entre la paz y la estagnación. La consolidación de la paz demanda un esfuerzo constante, porque librada a ella misma, la paz se transforma en estagnación y ésta deriva en decadencia. Una época de decadencia no cambia espontáneamente en paz y prosperidad, sino que son necesarios múltiples esfuerzos para ello. Por consiguiente, alguien correcto y capaz canalizar esos esfuerzos, debe tomar la iniciativa del cambio. Así se pone de relieve la actitud creativa del hombre que puede poner el mundo en orden. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 51 13.- T'UNG JEN / LA COMUNIDAD CON LOS HOMBRES (La alianza) Superior : Ch'ien Lo Creativo, Cielo. Inferior : Li. Lo Oscilante, Fuego. La imagen del trigrama superior Ch’ien es el cielo y la del trigrama inferior Li es el fuego. La naturaleza del fuego es elevarse flameante hacia el cielo. Así esta evocada la idea de la comunidad. El segundo trazo débil, por su posición central reúne entorno de él las cinco líneas fuertes. Este hexagrama es el opuesto al N° 7, el ejército. Allí, el peligro interior y la obediencia exterior caracterizan una armada marcial que tiene necesidad, para mantenerse unida, de un único trazo fuerte rodeado de trazos débiles. Aquí, la claridad interior caracteriza la unidad pacífica entre los hombres, que necesita, para ser mantenida, de un único trazo débil entre múltiples trazos fuetes. No hay en el hexagrama ningún otro signo de debilidad, sino una unión pacífica entre personas fuertes. EL JUICIO: “La comunidad con los hombres en pleno día. Éxito. Es ventajoso atravesar la gran corriente. La perseverancia del hombre es ventajosa”. La verdadera comunidad con los hombres debe basarse en intereses universales. No son los objetivos egoístas de sí mismo, sino los designios que conciernen a la humanidad los que forman una comunidad durable con los hombres. Es por eso que se augura el éxito a una comunidad con los hombres en pleno día. Cuando reina la concordia, pueden ser llevadas a cabo con éxito las empresas difíciles como atravesar la gran corriente. De todas maneras, para realizar tal comunidad es necesaria la presencia de un se requiere un líder iluminado con convicciones definidas y entusiastas, que esté dispuesto a llevar adelante la empresa. El trigrama inferior tiene el sentido de claridad y el trigrama superior el sentido de la fuerza creadora. LA IMAGEN: «El cielo junto con el fuego: la imagen de la comunidad con los hombres. Así el hombre noble organiza la división en grupos y establece las distinciones entre las cosas». En este hexagrama el cielo y el fuego se mueven en la misma dirección y sin embargo son distintos. De la misma manera que los cuerpos luminosos del cielo sirven para la división y la repartición del tiempo, la comunidad 52 humana y todas las cosas que la conciernen deben ser dispuestas orgánicamente. La comunidad no debe ser una pura mezcla espontánea – sino ella sería un caos y no una comunidad- sino que requiere una organización dentro de la diversidad. LAS LINEAS: Nueve en la base significa: “Comunidad de los hombres en la puerta. Sin reproches”. La comunidad de los hombres debe comenzar delante de la puerta, es decir, desde la entrada. Allí todos son iguales y próximos entre sí. No hay todavía metas divergentes y por eso todavía no se cometen faltas. Los fundamentos de toda unión deben ser accesibles por igual a todos los participantes, así no hay reproches. Los acuerdos secretos traen mala fortuna. O Seis en el segundo lugar significa: “Comunidad de los hombres en el clan. Humillación”. El peligro reside en la formación de facciones separadas en que predominan los intereses personales y egoístas. Tales clanes que son cerrados y que no se abren a todos deben rechazar una parte de los hombres para poder agrupar el resto. Estos fraccionamientos fundados sobre de motivos bajos, motivan en consecuencia a los excluidos a aliarse con otros grupos, y al final todos se condenan a la humillación. Nueve en el tercer lugar significa: “Esconde armas en la entrada. Trepa sobre la alta montaña del frente. Durante tres años él no se levanta”. La comunidad se transformó en desconfianza. Se desconfía del otro, se le preparan emboscadas secretas y se lo asecha de lejos. Pero estamos ante un rudo adversario con el cual no conviene maniobrar de esa manera. El oráculo muestra aquí los obstáculos que se presentan en el camino de la comunidad con los hombres. Cada uno tiene sus propias intensiones y reservas y se busca la ocasión de sorprender a los otros. Es justamente esta manera de actuar que crea la desconfianza. Se sospecha de los otros las mismas artimañas y astucias que uno esconde. En consecuencia, la verdadera comunidad con los hombres se hace difícil y mientras más se mantenga esta situación, ella se alejará más y más. Nueve en el cuarto lugar significa: “Trepa sobre la muralla. No puede acometer. Buena fortuna”. Se aproxima la reconciliación después de la discordia. Pero todavía hay murallas que separan. Las dificultades son demasiado grandes. Usando el buen sentido uno considera que luchar no es razonable y allí reside la buena fortuna. 53 O Nueve en el quinto lugar significa: “Al comienzo los hombres reunidos en comunidad lloran y se lamentan pero después ríen. Al cabo de grandes conflictos, ellos logran reencontrarse”. Ciertas personas pueden estar separadas exteriormente pero sus corazones están unidos. La situación en la vida los mantiene separados. Los obstáculos y los impedimentos los hacen sufrir. Pero si no se dejan abatir por los impedimentos y las dificultades, sino por el contrario, se mantienen fieles a sí mismos y en confianza, podrán superar todos los obstáculos. Para triunfar y superar los obstáculos se deben llevar a cabo duros combates, pero al final llegará la victoria y la tristeza se transformará en alegría cuando llegue el reencuentro. Confucio dice al respecto: “La vida lleva a los seres nobles por caminos tortuosos y diversos. Con frecuencia la marcha encuentra obstáculos pero al superarlos, todo deviene más fácil. Aquí un pensamiento elocuente derrama palabras; allí una sabiduría profunda debe cantonarse en el silencio. Sin embargo, cuando dos personas están unidas por la intimidad del corazón, pueden romper la dureza del hierro y del bronce. Cuando dos personas se comprenden totalmente en la intimidad del corazón, sus palabras son dulces y fuertes como el perfume de orquídea”. Nueve en la cima significa: “Comunidad con los hombres en el desdeño. Sin reproches”. Aquí falta el cálido lazo afectivo de los corazones. Uno esta fuera de la comunidad de los hombres pero sin embargo hace alianza con ellos. La comunidad aquí no comprende a todos sino solo aquellos que se reúnen en el exterior. (Es decir que tienen algo en común diferente a los demás). El desdeño es como el pasto que crece fuera de la ciudad. Todavía no ha alcanzado el objetivo último de la humanidad, pero no se puede hacer ningún reproche. Uno se une a la empresa, pero excluyendo las aspiraciones especiales. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 14.- TA YU / LA POSESION DE LO GRANDE (El gran haber) Superior : Li Lo Oscilante, Llama Inferior : Ch'ien Lo Creativo, Cielo. La llama en el cielo ilumina todo y todas las cosas se manifiestan bajo su luz. La 5ª línea débil, está en el lugar de honor y todas las líneas fuertes están en armonía con ella. Aquél que, ocupando un alto puesto es humilde y 54 moderado, ve todas las cosas venir hacia él. (El sentido de este hexagrama coincide con las palabras de Jesús : “Bienaventurados los mansos porque ellos heredarán la Tierra”.) EL JUICIO: “Posesión en gran medida. Éxito sublime”. Los dos trigramas indican que la fuerza y la claridad se unen. El gran haber es determinado por el destino y corresponde a la época. ¿Cómo puede ser que la línea fuerte tenga el poder de mantener juntas y de poseer los elementos fuertes? Eso viene de su voluntad libre de egoísmo. La virtud de una modestia excepcional contribuye. La época es favorable. Fuerza al interior, claridad y cultura al exterior. El poder se exterioriza con fineza y dominio de si mismo. Eso trae un éxito sublime y riqueza. (*) (*) Se podría pensar que el Nº 8 “la solidaridad” es todavía más favorable, puesto que una línea fuerte allí reúne cinco línea débiles. Sin embargo aquel juicio trae aquí una indicación de “éxito sublime”, que es mucho más fasto. Eso proviene de que los elementos mantenidos juntos por el poderoso soberano no son allá más que simples sujetos, mientras que aquí el jefe benévolo tiene cerca de él hombres robustos y hábiles. LA IMAGEN: “Fuego alto en el cielo. La imagen de la posesión de lo grande. Así el hombre noble reprime el mal y favorece el bien y obedece de esa manera a la benevolente voluntad del cielo”. El sol dominando en el cielo, iluminando con sus rayos todas las cosas terrestres es la imagen de la posesión de lo grande. Pero una posesión de esta naturaleza debe ser administrada en forma apropiada. El sol trae lo bueno y lo malo a la luz del día. El hombre debe reprimir y combatir el mal y promover y favorecer el bien. Sólo de esta manera estará conforme a la benévola voluntad divina que quiere solamente el bien y no el mal. LAS LINEAS: Nueve al comienzo significa: “No relacionarse con lo dañino. No hay reproches por ello. Si uno permanece consciente de las dificultades permanecerá sin reproches”. La gran posesión se encuentra en sus comienzos; aún no hay reproches porque no ha habido oportunidad hasta el presente de cometer errores. Pero muchas dificultades deben ser superadas. Sólo mientras se esté consciente de esas dificultades puede mantenerse libre de arrogancia y prodigalidad, y se superan radicalmente las principales causas de reproche. 55 Nueve en el segundo lugar significa: “Hay un gran carro a cargar. Podemos emprender algo. Sin reproches” La gran posesión no sólo consiste en la cantidad de bienes de que se dispone sino sobre todo en su movilidad y disponibilidad. Se los puede emplear en algún emprendimiento y uno estará exento de vergüenza y de error. Con la imagen del gran carro donde se pueden cargar muchas cosas y con el cual se puede viajar lejos, se puede interpretar que tendremos a nuestro lado auxiliares eficaces que están a la altura de la tarea. Estas personas pueden llevar la gran responsabilidad que es indispensable en las empresas importantes. Nueve en el tercer lugar significa: «Un príncipe lo ofrece al Hijo del Cielo. Un hombre pequeño no puede hacerlo». Es propio de un hombre generoso y libre no considerar sus bienes como de propiedad exclusivamente personal sino de ponerlos a disposición del soberano, es decir, de la colectividad. Así, él adopta la actitud correcta con respecto a sus propiedades que no pueden permanecer siempre bajo su dominio privado. Un hombre con espíritu mezquino es incapaz de albergar tales sentimientos. La posesión de lo grande es en detrimento del hombre pequeño porque en vez de ofrecerlo pretende conservarlo con gran sacrificio. (Esto está expresado en el Evangelio (Lucas XVII, 33) “Quien busca salvar su vida la perderá y quien la pierda la salvaguarda”) Nueve en el cuarto lugar significa: «Hace diferencia entre el y el prójimo. Sin reproches». Aquí se caracteriza la situación que se interpone entre vecinos ricos y poderosos. Es algo peligroso. Es conveniente no mirar a la derecha y a la izquierda para evitar la envidia y los esfuerzos por competir con los otros. (Otra interpretación que se acepta generalmente dice que es conveniente no depender de su riqueza). Así uno permanece libre de errores, tanto por lo que tiene como por lo que no tiene. O Seis en el quinto lugar significa: “Aquél cuya verdad sea accesible y sin embargo, digna, tiene buena fortuna”. La situación es muy favorable. Sin coerciones y simplemente por una sinceridad sin afectación, se concilia con la gente de tal manera que uno se siente ligado a ellos por un verdadero y sincero afecto. Pero de todas maneras, en los tiempos de la gran posesión, la simple benevolencia no es suficiente. De lo contrario la insolencia se manifestaría poco a poco. La aparición de la insolencia debe contenerse con la dignidad, entonces la fortuna está asegurada. Nueve en la cima significa: “Está bendecido por el cielo. Fortuna. Todo es ventajoso.” 56 En la abundancia de bienes y de poder se permanece modesto y se venera al sabio que se mantiene retirado de la agitación del mundo. Uno se pone así bajo la influencia rica en bendiciones del cielo y todo va bien. Confucio dijo a ese respecto: “Bendecir significa ayudar. El cielo ayuda al ser abandonado (*), los hombres ayudan al ser sincero. Aquél que se conduce sinceramente, que es abandonado en sus pensamiento y continúa entonces a respetar los hombres de mérito, es bendecido por el cielo. Encuentra la fortuna y todo es ventajoso. (**) (*) que no opone resistencia a los designios divinos y favorece la ley natural. (**) En la cúspide de la posesión, en el apogeo del poder, quien permanece modesto y honra a los sabios que permanecen fuera de los negocios mundanos se coloca bajo la influencia benéfica del cielo y todo va bien. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 15.- CH´IEN / LA HUMILDAD (La modestia) Superior : K'un Lo Receptivo, Tierra Inferior : Ken, La Inmovilidad, la Montaña. Este hexagrama está compuesto de Ken, “lo inmóvil, la montaña” y de K’un “lo receptivo, la tierra”. La montaña es el hijo más joven del Creador, representación del cielo sobre la tierra. Dispensa en sus pies las bendiciones del cielo, las nubes y la lluvia que se reúnen en su cima y luego aparece radiante con la luz celeste. Eso indica la modestia y sus efectos en los hombres fuertes y nobles. Muestra cómo la humildad que los rodea puede iluminarlos y a la vez elevar los más modestos. Arriba está K’un “lo receptivo, la tierra”. La propiedad de la tierra es la bajura, pero en este hexagrama ella está representada precisamente por esta razón como elevada, puesto que está ubicada en lo alto, sobre la montaña. Ello muestra el efecto de la humildad en los hombres modestos y simples : ellos se elevan por este hecho. EL JUICIO: «La modestia trae el éxito. El hombre noble lleva a buen fin sus asuntos». La ley del cielo vacía lo que está lleno y colma lo que es humilde. Cuando el sol está en lo más alto, debe declinar y cuando está en lo más profundo bajo la tierra, debe dirigirse hacia un nuevo levante. Siguiendo la misma ley, la luna comienza a menguar cuando está llena y cuando ella está oscura debe comenzar a crecer. Esta ley celeste actúa igualmente en los destinos 57 humanos. La ley de la tierra es de cambiar lo que está lleno y de fluir hacia lo que es humilde. Las altas montañas son gastadas por las aguas y los valles rellenados. La ley de los poderes del destino es disminuir lo que está lleno y dispensar felicidad al humilde. El destino de los hombres también rehúsa lo que está lleno y favorece lo modesto. Prosperan los modestos y declinan los poderosos. La gente prefiere a los modestos y abomina de los que lo poseen todo. Los destinos siguen leyes fijas que actúan de manera necesaria. Sin embargo, el hombre puede escapar a su destino, modificando su conducta. Cuando un hombre llega a una alta posición y permanece modesto, brilla con la luz de la sabiduría; si se encuentra en una posición inferior y la mantiene con modestia no será dejado de lado. Así el hombre noble logra poner un buen fin a su obra sin glorificar lo que ha sido hecho. (*) (*)En el Libro de las transformaciones hay pocos hexagramas cuyos trazos sean todos favorables como en el caso de este hexagrama. Eso muestra la importancia que tiene la modestia en la sabiduría china. LA IMAGEN: «Sobre la tierra, una montaña: La imagen de la modestia. El hombre noble reduce sus deseos cuando son excesivos y los aumenta cuando son muy pequeños. Pesa las cosas y las equilibra». La riqueza que está escondida en una montaña no es visible porque está oculta en las profundidades. La altura de una montaña sirve para equilibrar la profundidad de un valle. Así, la altura y la profundidad se completan y el resultado es el suelo plano. La imagen de la humildad se muestra aquí como algo que necesitando un largo trabajo aparece como algo natural y fácil. Así hace el hombre noble, cuando establece el orden en el mundo, iguala los extremos que pueden ser causa de descontento social y crea condiciones justas y equitativas. LAS LINEAS: Seis en la base significa: «El hombre noble, modesto en su humildad, puede cruzar la gran corriente. Buena fortuna». Una empresa peligrosa como cruzar la gran corriente, puede dificultarse todavía más cuando se tienen en cuenta un exceso de consideraciones y se toman demasiadas precauciones. La tarea se facilita si se lo hace de una manera simple y rápidamente. Es por eso que la actitud sin pretensiones de la humildad permite llevar a cabo incluso las empresas más difíciles, porque ella no presenta ni exigencias ni condiciones, sino que actúa con facilidad y soltura. Donde no hay pretensiones tampoco hay resistencias. Seis en el segundo lugar: «Humildad manifiesta. La perseverancia trae buena fortuna. La boca habla de la abundancia del corazón». 58 Si alguien es interiormente tan modesto que su disposición se manifiesta en su conducta exterior, eso le causa buena fortuna. De esa actitud nace la posibilidad de ejercer una influencia perdurable que nadie podrá impedir. O Nueve en el tercer lugar significa: «Un hombre noble y humilde en su mérito lleva las cosas a su conclusión. Fortuna». El centro del signo indica aquí lo que se mantiene en secreto. Se adquiere un renombre considerable a causa de las grandes acciones. Si uno se deja deslumbrar por la gloria, las críticas no tardan a nacer y se encuentran dificultades. Si por el contrario, se permanece modesto a pesar de sus méritos, uno se hace apreciar y se consiguirán los apoyos indispensables para llevar a cabo la obra emprendida. Seis en el cuarto lugar significa: “Nada que no sea ventajoso puede detener la modestia en movimiento”. Todo debe tener una medida justa. Incluso la modestia en el comportamiento a veces puede ser excesiva. Aquí ella está en marcha, puesto que en esta situación hay un colaborador meritorio en lo bajo y un gobernante benévolo en lo alto que soportan una gran responsabilidad. Pero no se debe abusar de la confianza del superior ni menospreciar el mérito del inferior. Hay funcionarios mediocres que siguen escrupulosamente los reglamentos pero que no asumen ninguna responsabilidad. Sin cumplir con el servicio que se espera de ellos, llevan títulos que ninguna realidad justifica. Tal actitud es contraria a la humildad que aquí se trata. La humildad en esta situación se manifiesta en la eficacia con la cual se realiza el trabajo. Seis en el quinto lugar significa: “No hacer alarde de la riqueza delante del vecino. Favorece atacar con fuerza. Nada que no sea ventajoso”. La modestia no debe confundirse con la bondad débil que todo lo permite. Cuando alguien tiene un puesto de responsabilidad, en ciertas circunstancias debe saber actuar con energía. Sin embargo, es necesario tratar de no imponerse a los demás haciendo alarde personal de la superioridad, sino de asegurar la posición en su alrededor. Las medidas a tomar deben ser puramente objetivas sin herir la susceptibilidad de las otras personas. La humildad también debe manifestarse en la severidad. Seis en la cima significa. “La humildad que se exterioriza. Es favorable poner en marcha los ejércitos para castigar a la propia ciudad y al propio país”. Quien sea consecuente con su humildad debe estar atento a que ella se manifieste en la realidad actuando enérgicamente en ese dominio. Cuando surge un conflicto nada es más fácil que echar la culpa sobre los otros. Puede haber alguien débil que se siente ofendido y se repliegue sobre él mismo, compadeciéndose y creyendo actuar con modestia si no se defiende. 59 La verdadera modestia se manifiesta en la energía a imponer el orden comenzando por sí mismo y por el entorno inmediato. No se cumplirá una obra importante si no se tiene el coraje de poner en marcha los ejércitos contra sí mismo (para corregir las faltas). O Trazo gobernante * Trazo constituyente 16.- YÜ /EL ENTUSIASMO Superior : Chen, Lo que despierta, Trueno Inferior : K'un. Lo Receptivo, Tierra El trazo fuerte en el cuarto lugar, el puesto de los altos funcionarios, encuentra en todos los otros trazos, que son débiles, la cortesía y la obediencia. El trigrama superior, Chen, tiene la propiedad del movimiento, el inferior, K’un, la obediencia y la devoción. Por lo tanto, el hexagrama muestra el comienzo de un movimiento que se enfrenta con una actitud de devoción y, por consiguiente, despierta actos de inspiración y entusiasmo. Además representa una ley muy importante: que el movimiento debe efectuarse siguiendo la línea de la menor resistencia. Este carácter se expresa en este hexagrama como una ley presente en los fenómenos naturales y en las vidas humanas. EL JUICIO: “El entusiasmo. Es favorable enrolar auxiliares y poner en marcha los ejércitos.” El tiempo del entusiasmo llega con la presencia de un hombre notable, que está en simpatía con el alma del pueblo y de acuerdo con ella. Es por eso que encuentra la obediencia general libremente consentida. Para despertar el entusiasmo es necesario acordar las órdenes que uno imparte con la naturaleza de los gobernados. El rigidez de las leyes naturales tiene por fundamento la regla del movimiento que sigue la línea de menor resistencia. Estas leyes no son exteriores a las cosas sino que ellas constituyen la armonía inmanente del movimiento. Por eso los cuerpos celestes no se desvían de sus órbitas y todos los fenómenos naturales se cumplen con una regularidad fija. Lo mismo ocurre en la sociedad humana. Solo son ejecutadas las leyes que se enraízan en el sentimiento popular, mientras que aquellas que lo contradicen, sólo despiertan resentimiento. El entusiasmo permite enrolar auxiliares para efectuar el trabajo sin temer a las oposiciones secretas. El entusiasmo es también lo que permite uniformizar 60 los movimientos de masas populares, sobre todo durante las guerras, con el fin de obtener la victoria. LA IMAGEN: “El trueno sale resonando de la tierra: la imagen de entusiasmo. Así, los antiguos reyes hacían música en honor de los méritos, y los presentaban con magnificencia ante el Dios supremo, invitando a sus antepasados.” En el principio del verano, cuando el trueno y la energía eléctrica salen resonando de la tierra, la primera tormenta refresca la naturaleza y termina una larga tensión. El alivio y la alegría se instauran. Del mismo modo, la música tiene el poder de disipar la tensión del corazón y los sentimientos sombríos de la violencia. El entusiasmo del corazón se expresa espontáneamente en el sonido de la canción, la danza y el movimiento rítmico del cuerpo. Desde tiempos inmemoriales, el efecto invisible y estimulante del sonido que une y conmueve el corazón de la gente, es percibido como un enigma. Y los gobernantes supieron aprovechar ese gusto natural por la música. Lo realzaron y lo ordenaron. La música fue considerada como algo serio y sagrado que debía servir a purificar los sentimientos de la gente; estaba destinada a elogiar las virtudes de los héroes y a establecer un vínculo con el mundo invisible. En el templo la gente se aproximaba a lo divino acompañándose de música y de pantomimas (éstas dieron ulteriormente nacimiento al teatro). El sentido religioso hacia el Creador del mundo se unía al más sagrado de los sentimientos humanos, la veneración por los antepasados. Estos eran invocados en las ceremonias religiosas como huéspedes del Señor del cielo y representantes de la humanidad ante lo supremo. Vinculando así el propio pasado con la divinidad en los solemnes momentos de entusiasmo religioso, se establecía la unión entre Dios y la humanidad. El gobernante que veneraba la divinidad en sus ancestros era considerado como el Hijo del Cielo, en quien el mundo celeste entraba en contacto místico con el mundo terrestre. Estos pensamientos son el resumen último y supremo de la cultura china. Confucio mismo dijo respecto al gran sacrificio que se cumplía durante estos ritos: “Aquél que haya comprendido completamente este sacrificio podrá gobernar el mundo como si lo hiciera girar en la palma de la mano”. LAS LINEAS: Seis en la base significa: “El entusiasmo que se expresa, trae desgracia”. Alguien en una posición subordinada tiene relaciones distinguidas de las que se jacta con entusiasmo. Esta arrogancia le atrae fatalmente el desastre. El entusiasmo nunca debe ser un sentimiento egoísta, sino que sólo se justifica como un sentimiento general que nos comunique con los otros. 61 Seis en el segundo lugar significa: “Sólido como una roca. No es un día entero. La perseverancia trae buena fortuna”. Aquí se alude a alguien que no se deja engañar por ninguna ilusión. Mientras que otros están cegados por el entusiasmo, él reconoce con perfecta claridad los primeros signos de la época. No elogia a los superiores ni desdeña a los inferiores. Es sólido como una roca. Desde que aparece el primer indicio de desacuerdo y sin perder ni un solo día, sabe retirarse en el momento oportuno. Con esta forma de actuar, la perseverancia trae buena fortuna. Confucio dice al respecto: «Conocer los gérmenes es algo divino. El hombre noble no es halagüeño cuando comercia con los superiores ni arrogante con los inferiores. Conoce con certeza los gérmenes . Los gérmenes son la causa imperceptible de un primer movimiento, un primer signo de aquello que traerá la fortuna o la desgracia. El hombre noble reconoce los gérmenes y actúa rápidamente. No espera ni un solo día. Se dice en el Libro de las Transformaciones: “Sólido como una roca. No es un día entero. La perseverancia trae buena fortuna”. “Sólido como una roca, ¿Porqué un día entero? El juicio puede conocerse: el hombre noble conoce lo oculto y lo visible, conoce lo débil y también lo fuerte. Por eso una miríada de seres fijan los ojos en él.” Seis en el tercer lugar: “Un entusiasmo que mira hacia arriba trae remordimiento. Las dudas crean remordimiento.” Se tiene aquí el reverso del trazo anterior, allá la autonomía, aquí la mirada entusiasta hacia arriba. Si se duda demasiado también se crea el remordimiento. Hay que discernir el momento más oportuno para actuar y hacerlo. Es la única manera justa de proceder. O Nueve en el cuarto lugar significa: “La fuente del entusiasmo. El logró grandes cosas. No dudes. Reúnes amigos en tu alrededor como un pasador sujeta los cabellos”. Alguien que sea capaz de despertar el entusiasmo por la seguridad y la libertad de pensamiento, es de hecho, sin dudas, muy atractivo para los hombres. Porque suscita en ellos la confianza, los gana para una colaboración entusiasta y triunfa en ello. Como un pasador de pelo sujeta y une los cabellos, así él une a la gente por el apoyo que le brinda. Seis en el quinto lugar significa: “Permanentemente enfermo, todavía no llega a morir”. El entusiasmo aquí está obstruido. Uno se encuentra bajo una presión constante que no le permite actuar con libertad. Sin embargo, esta presión puede tener una ventaja: prevenir del hecho de ser consumido por un entusiasmo vacío. La presión constante puede servir, precisamente, para mantenerse vivo. 62 Seis en la cima significa: “Entusiasmo enceguecido. Pero si se cambia después de que se haya alcanzado el fin, entonces no habrá reproches”. Si nos dejamos enceguecer por el entusiasmo, es algo malo. Pero si después de consumarse esta torpeza todavía se puede cambiar, entonces no habrá reproches. Recuperarse de un falso entusiasmo es posible y es algo muy favorable. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 17.- SUI / LA SUCESION (Lo Siguiente, el Séquito) Superior : Tui, Lo Alegre, el Lago Inferior : Chen, Lo que Despierta, Trueno. Arriba está lo feliz cuyo carácter es la alegría; abajo esta lo que despierta, cuyo carácter es el movimiento. La alegría unida al movimiento llama a seguirla. Lo alegre es la hija menor, lo que despierta es el hijo mayor. Un hombre de cierta edad se inclina ante la joven y le muestra su consideración y respeto. De esta manera él es tan conmovedor que ella lo sigue. EL JUICIO: “La sucesión logra un éxito sublime. La perseverancia es ventajosa. Sin reproches.” Para hacerse un séquito uno debe primero saberse adaptar. Es solamente sirviendo que uno llega a mandar, puesto que de esa sola manera se puede obtener el consentimiento satisfactorio de los que siguen. Si uno trata de obtener que lo sigan por la fuerza o las intrigas, por las conspiraciones o creando facciones invariablemente encontrará resistencia y obstáculos que impide la libre adhesión. No debemos forzar a los otros para que nos sigan, sino que ellos deben venir espontáneamente. Pero un movimiento alegre puede igualmente conducir a resultados enojosos. Es por eso que se agrega “la perseverancia es ventajosa”, es decir la permanencia en lo que es bueno y sin reproches. De la misma manera que solamente bajo esta condición se puede adquirir una adhesión, es solamente bajo esta condición que uno puede seguir a otros sin daños. La idea de crearse un séquito adaptándose a las exigencias de la hora es grande e importante; por eso es que el juicio es tan favorable. 63 LA IMAGEN: “El lago está en el medio del trueno : imagen la sucesión. Así, al anochecer el sabio entra para recrearse y reposar.” En el otoño la electricidad vuelve a la tierra para descansar. Corresponde al trueno en medio del lago. No es el trueno en movimiento, sino el trueno en su reposo invernal. El séquito se muestra en esta imagen con el sentido de una adaptación a las exigencias del tiempo. El trueno en el medio del lago indica el tiempo de la oscuridad y del reposo. Así el sabio, después de haber manifestado todo el día una actividad creadora, se concede recreación y se reposa cuando viene la noche. Una situación solo puede hacerse buena si uno se sabe adaptar y si uno no se desgasta en una resistencia desplazada. LAS LINEAS: O Nueve en la base significa: “Las normas cambian. La Perseverancia trae buena fortuna. Salir a la puerta produce obras”. Existen situaciones excepcionales donde la actitud del guía y de aquél a quien conduce se modifican. En la idea de sucesión y de adaptación hay la noción de que aquél que quiere dirigir los otros permanece accesible y se deja influenciar por las opiniones de sus subordinados. Al mismo tiempo debe tener ideas firmes allí donde sólo se trata de opiniones efímeras. A partir del momento donde uno está dispuesto para escuchar a los demás, uno no se debe contentarse con encontrar personas que tienen nuestra misma opinión o que son de nuestro propio partido, sino que se debe salir a la puerta y comenzar a tratar con personas de toda clase, sean amigos o enemigos. Es la única manera que permite llevar una obra a bien fin. Seis en el segundo lugar significa: “Si alguien se adhiere a un niño, pierde al hombre fuerte”. En la camaradería y otras relaciones estrechas, el individuo debe elegir cuidadosamente. Lo rodean tanto buenas como malas compañías, y no puede tener ambas al mismo tiempo. Si se envilece con los indignos, se pierde la unión con los hombres de gran valor espiritual, los únicos cuya influencia nos es provechosa para hacer lo bueno. Seis en el tercer lugar significa: “Si uno se aferra a un hombre fuerte, se pierde el niño. Siguiendo se encuentra lo que se busca. Es ventajoso permanecer perseverante”. Cuando se ha establecido la conexión correcta con la gente importante, eso provoca naturalmente una cierta pérdida. Uno debe separarse de los seres inferiores y superficiales. Sin embargo uno se sentirá satisfecho interiormente porque se tiene lo que se busca y lo que es necesario para el desarrollo personal. Solo se requiere permanecer firme. Se debe saber lo que quiere y no debe ser inducido al error por inclinaciones momentáneas. 64 Nueve en el cuarto lugar significa: “Siguiendo se obtiene el éxito. La perseverancia trae desgracia. Recorrer el camino con la verdad aporta claridad. ¿Cómo se podría reprochar?” Sucede a menudo cuando uno posee una cierta influencia, que obtenga seguidores siendo condescendiente con los inferiores. Pero los que así se adhieren no son honestos sino que buscan el beneficio personal tratando de hacerse indispensables a través del la adulación y del servilismo. Si uno se acostumbra a tales adherentes de modo que ya no pueda prescindir de ellos, eso le trae infortunio. Sólo cuando uno es sincero, completamente libre de egoísmo y que considera exclusivamente lo que es justo y realista, puede tener la claridad necesaria para distinguir entre la gente y entonces estará libre de culpas. O Nueve en el quinto lugar significa: “La verdad en el bien. ¡Fortuna!” Cada hombre debe tener algo para seguir, que le sirva como una estrella guía. Los que persiguen con convicción la belleza y la bondad, podrán sentirse fortalecidos por estas palabras. Seis en la cima significa: “Se encuentra una firme lealtad y todavía se sobrepasan los límites. El rey lo presenta a la Montaña del Oeste.” Se alude a un hombre que por su propia iniciativa ha dejado detrás suyo las agitaciones del mundo y que es por ello un sabio exaltado. Pero que encuentra a un seguidor que lo comprende y que no lo deja retirarse. Así regresa otra vez al mundo y ayuda al otro en su trabajo. Se crea con ello una conexión eterna. Esta alegoría está tomada de la dinastía Tcheu, que honoraba los servidores meritorios dándoles un lugar en el templo de los ancestros del gobernante en la montaña occidental. Tal hombre compartía entonces el destino de la dinastía gobernante. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 18.- KU / EL TRABAJO SOBRE LO CORRUPTO (La Reparación) Superior : Ken, La Inmovilidad, la Montaña. Inferior : Sun, La docilidad, Viento El carácter chino Ku representa un plato en cuyo contenido crecen los gusanos. Es la representación de lo que se ha corrompido. Ello proviene de que la dócil indiferencia del trigrama inferior se unió estrechamente a la rígida inercia del trigrama superior de manera tal que las condiciones se han 65 degenerado en estagnación. Puesto que uno se encuentra aquí delante un estado de cosas que deja que desear, la situación contiene al mismo tiempo lo que es necesario para terminarla. Es por eso que el hexagrama no significa simplemente “lo que se ha corrompido” sino más bien “lo que se ha corrompido en tanto que tarea” o “el trabajo sobre lo corrupto”. EL JUICIO: “Trabajar en lo que está corrompido tiene un sublime éxito. Es conveniente atravesar la gran corriente. Antes del punto de partida, tres días. Después del punto de partida, tres días”. Lo que se corrompe por culpa de los hombres puede repararse con el trabajo de los hombres. No se trata de un destino inexorable, como la época de la Estagnación (N° 12), sino de las consecuencias de un abuso de la libertad humana que ha causado el estado de corrupción. Trabajar mejorando las condiciones es favorable al éxito porque está de acuerdo con las posibilidades de la época. No debemos retroceder ante el trabajo y el peligro (simbolizado por la travesía de la gran corriente) sino que debemos enfrentarlos enérgicamente. Sin embargo, el éxito tiene como condición previa una justa reflexión de la que depende la decisión correcta. Eso es el significado de «antes del punto de partida, tres días. después del punto de partida, tres días». Debemos primero conocer las causas de la corrupción antes de poder remediarla. De allí que debemos prestar atención a lo que precede el punto de partida. Además hay que vigilar a tomar el buen camino con el fin de evitar la recaída, de allí que debemos prestar atención a lo que pasa después de la partida. La resolución y la energía deben sustituir a la indiferencia y a la inercia para que al fin aparezca un nuevo comienzo. LA IMAGEN: “El viento sopla al pie la montaña: imagen de la Corrupción. El hombre noble agita a la gente y fortalece su espíritu”. Cuando el viento sopla al pié de la montaña forma remolinos que arruinan los cultivos. Eso reclama una mejoría. Pasa lo mismo con las bajas disposiciones y las modas de mala calidad : ellas introducen la corrupción en la sociedad humana. Para desterrar la corrupción hay que regenerar la nobleza de la sociedad. Los métodos para hacerlo son indicados con dos signos primitivos, pero sus efectos deben desplegarse en una sucesión ordenada: primero se debe remover el estado de estancamiento, conmoviendo la opinión pública así como el viento que arrasa con todo, y luego fortalecer y tranquilizar el ánimo popular como la montaña nutre y protege las plantas que crecen a su alrededor. 66 LAS LINEAS: Seis en la base significa: “Reparar lo que fue corrompido por el padre. Si es un hijo, no hay reproches sobre el padre muerto. Peligro. Al final buena fortuna”. La rígida adhesión a lo que se ha realizado ha tenido como consecuencia la corrupción. Pero la corrupción todavía no está profundamente arraigada y puede remediarse fácilmente. Es como cuando un hijo aleja la corrupción que su padre había dejado introducirse. No hay reproches que formular al padre. Pero no se debe menospreciar el peligro tomando el asunto demasiado a la ligera. Solo cuando uno es consciente del peligro inherente a las reformas es que puede llevar las cosas a un buen término. Nueve en el segundo lugar: “Reparar lo que fue corrompido por la madre. Uno no debe ser demasiado perseverante”. Se refiere aquí a los errores que han sido provocados por la debilidad. De ahí el simbolo de lo que ha sido corrompido por la madre. En este caso es necesario tener ciertas consideraciones, cierta delicadeza cuando se procede a la reparación. Uno no se debe mostrar demasiado severo con el fin de no herir con la brusquedad. Nueve en el tercer lugar: “Reparar lo que fue corrompido por el padre. Habrá un pequeño remordimiento pero ningún reproche considerable”. Se describe aqui un hombre que procede con un energía un poco excesiva corrigendo los errores del pasado. Con seguridad provocará ciertas discordias y molestias. Pero un exceso de energía es preferible a muy poca. Si en el momento puede tener algunos remordimientos, permanecerá libre de culpas graves. Seis en el cuarto lugar: “Tolerando lo que fue destruido por el padre. Continuando se ve humillado”. Se muestra aquí la situacion en la que alguien, por debilidad, no se opone a la corrupción proveniente del pasado y que se manifiesta en el presente; por el contrario, la deja seguir su curso. Si continúa así hallará por consiguiente la humillación. O Seis en el quinto lugar: “Reparando lo que fue destruido por el padre se encuentra con el elogio”. Un individuo se confronta con la corrupción que tuvo su origen en la negligencia de los tiempos pasados. Uno solo no posee la fuerza para remediarlo, sin embargo encuentra ayudantes hábiles con cuyo apoyo puede provocar tal vez no una renovación total pero por lo menos una reforma profunda, lo que es igualmente digno de elogios. 67 Nueve en la cima: “No sirve a reyes ni príncipes, déjenlo buscar metas más altas”. Ningún hombre está obligado a asumir la responsabilidad de los problemas de mundo. Hay personas que han alcanzado un tal grado de evolución interior que tienen el derecho de dejar al mundo seguir su curso sin inmiscuirse en los asuntos políticos para reformarlos. Sin embargo, eso no significa que ellos deban permanecer inactivos u observar una actitud puramente critica. Solamente el trabajo sobre sí mismo apuntando a las metas superiores de la humanidad pueden justificar tal retiro. Pues mismo cuando el sabio se mantiene alejado de las agitaciones cotidianas, continúa creando valores humanos incomparables para el futuro. (En Europa, la actitud de Goethe después de las guerras napoleónicas ilustra esta manera de actuar.) O Trazo gobernante * Trazo constituyente 19.- LIN / LA APROXIMACIÓN Superior : K'un Lo Receptivo, Tierra Inferior : Tui Lo Gozoso, Lago La palabra china Lin posee una serie de significaciones que ningún término español puede expresar por sí solo. Las viejas interpretaciones del Libro de las Transformaciones indican la idea de “crecer” como primer sentido. Lo que crece son los dos trazos fuertes que empujan desde abajo en el hexagrama. Con ellos la fuerza luminosa se expande. De allí se pasa a la idea de aproximación, es decir, la aproximación de lo que es fuerte y superior con respecto a lo que es débil e inferior. Se tiene entonces el sentido de condescendencia de un hombre superior hacia el pueblo y el de la puesta en marcha de negocios. El hexagrama está atribuido al 12º mes (enero-febrero), puesto después del solsticio de invierno, la fuerza luminosa es considerada como ascendente. EL JUICIO: “La aproximación tiene un éxito sublime. La perseverancia es ventajosa. Cuando llega el octavo mes habrá desgracia”. El hexagrama en conjunto indica una época de progreso llena de alegre esperanza. Llega la primavera. La alegría y el buen humor acercan lo alto de lo bajo. El éxito está asegurado. El carácter favorable de la época es 68 suficiente. Debemos trabajar con determinación para aprovechar todo lo auspicioso que tiene la época. Otra cosa más: la primavera no durará para siempre. Al octavo mes las cosas se invertirán. No quedarán más que dos líneas fuertes que no avanzan, sino que retroceden. (Ver el hexagrama siguiente) Hay que recordar esto a tiempo. Si se previene el mal antes que se manifieste o si anticipamos el peligro antes de que se insinúe, entonces podremos dominarlo. LA IMAGEN: “Sobre el lago está la tierra, la imagen de la aproximación. El hombre noble es inagotable en su deseo de enseñar y sin límites para sostener y proteger el pueblo”. La tierra limita al lago por arriba. Es la imagen de la aproximación y de la condescendencia del hombre superior hacia aquellos que están en el fondo. La analogía del hexagrama con esas dos categorías de seres proviene de cada una de sus partes. Tal como el lago es inacabable en su profundidad, el sabio tiene una disposición inagotable a enseñar a la humanidad; tal como la tierra es ilimitadamente vasta para sostener y cuidar a todas las criaturas, el sabio sustenta y cuida a todo el mundo, sin excluir a parte alguna de la humanidad y sin límites de ninguna naturaleza. LAS LINEAS: O Nueve en la base significa: “Aproximación en común. La perseverancia trae la fortuna”. El bien comienza a predominar y encuentra buena recepción en los puestos influyentes. Esto constituye un incentivo para los hombres de valor. Entonces uno puede unirse a la marcha hacia adelante. Solamente hay que estar atento a no perderse en la corriente de la época y permanecer con perseverancia en la buena dirección. Esto trae buena fortuna. O Nueve en el segundo lugar significa: “Aproximación en común. Buena fortuna. Todo es favorable”. Uno se encuentra en la situación de ser incitado por lo superior a aproximarse y porque se tiene en sí una fuerza y una lógica sin reparos, se obtiene la buena fortuna. Incluso el futuro no debe ser causa de preocupación. Se sabe con certeza que todo lo terrestre es pasajero y que toda ascensión está seguida por un descenso, pero uno no se deja desviar por ese destino universal. Todo es favorable. Así se marchará por el camino de la vida rápido, con valentía y osadamente. Seis en el tercer lugar significa: “Aproximación adecuada. Nada que sea favorable. Si alguien es inducido a lamentarse por ello, queda libre de culpa”. 69 Se va alegremente adelante. Se adquiere poder e influencia. Pero eso esconde el riesgo de relajarse y que, confiando en su situación, se caiga en un sentimiento de comodidad y de negligencia en sus relaciones con la gente. Esto es dañino bajo todo punto de vista. Sin embargo se da la posibilidad de un cambio de disposición. Si se siente pena por esa actitud negligente y si se siente la responsabilidad que acarrea el poder y la influencia, entonces se libera de las culpas. Seis en el cuarto lugar significa: “Aproximación perfecta. Sin reproches”. Mientras que el trigrama inferior designa la ascensión hacia el poder y la influencia, el trigrama superior muestra la actitud del superior con respecto a los inferiores que están bajo su influencia. Aquí se muestra la aproximación perfecta y sin prejuicios de una persona de alto rango a un hombre hábil al que introduce en su propio círculo, sin ningún prejuicio de clase. Esto es muy favorable. Seis en el quinto lugar significa: “Sabia aproximación. Es lo correcto para un gran príncipe. Buena fortuna”. Un príncipe, o cualquiera que ocupe una posición dirigente debe tener la sabiduría de atraer hacia sí gente hábil y experta para dirigir los negocios. Su sabiduría consiste tanto en seleccionar la gente correcta como en dejar que los elegidos trabajen sin interferir en sus tareas. Sólo observando esta condición podrá encontrar a los expertos necesarios, para sus requerimientos. Seis en la cima significa: “Aproximación generosa. Buena fortuna. Sin reproches”. Un sabio que dejó el mundo tras de sí y cuyo espíritu puede retirarse ya de la vida, bajo ciertas circunstancias decide retornar una vez más a este bajo mundo y aproximarse a los otros hombres. Esto significa una inmensa fortuna para los hombres que reciban su enseñanza y ayuda. Pero en lo que a él concierne, esta acción magnánima de rebajarse no da lugar a ningún reproche. O Trazo gobernante 20.- KUAN / LA CONTEMPLACION (La visión) Superior : Sun La Docilidad, Viento Inferior : K'un Lo Receptivo, Tierra 70 El nombre chino de este hexagrama tiene, por medio de una ligera modificación en la entonación, un doble sentido. Significa, por un lado, contemplar y por otro significa ser visto, en el sentido de servir de ejemplo. Estas ideas están sugeridas por el hecho de que el hexagrama puede ser interpretado como la imagen de una torre como las numerosas que existían en la vieja China. De lo alto de esas torres se tenía una amplia visión del entorno y, por otra parte, una torre semejante, situada en lo alto de una montaña, era visible desde lejos. El hexagrama muestra a un gobernante que contempla la ley del cielo por encima suyo y las costumbres del pueblo debajo, y que, por medio de un gobierno acertado, da un alto ejemplo a las masas. Este signo está ligado al octavo mes (septiembre-octubre). La fuerza luminosa se retira y la de la oscuridad está de nuevo en ascensión. De todas maneras este aspecto no entra aquí en cuenta para la interpretación del hexagrama en conjunto. EL JUICIO: “Contemplación. Se hicieron las abluciones, pero aún no las ofrendas. Llenos de confianza dirigen hacia él la mirada”. El ritual del sacrificio en China comenzaba por una ablución y una libación que constituía una invocación a la divinidad. Después de ello se ofrecía el sacrificio. El intervalo de tiempo entre esos dos ritos era el más sagrado, el momento de supremo recogimiento interior. Cuando la piedad está inspirada por la fe, la contemplación sincera del espectáculo que se ofrece transforma a los testigos y les inspira respeto. Así, hay en la naturaleza un sagrado y serio sentido en la regularidad con la cual todos los eventos naturales se suceden. La contemplación de este sentido divino de los acontecimientos del universo pone entre las manos de aquél que es llamado a actuar sobre los hombres el medio de ejercer los mismos efectos. Es necesario para ello un recogimiento interior semejante a aquél que produce la contemplación religiosa en los hombres dotados de una fe grande e intensa. Así, ellos ven las leyes divinas y misteriosas de la vida y las hacen manifestar en su propia personalidad gracias a la extrema intensidad de su recogimiento. Como consecuencia de esta visión, emana de ellos un poderoso poder espiritual que actúa sobre los hombres y los somete sin que tengan consciencia de la manera como ello se produce. LA IMAGEN: “El viento sopla sobre la tierra: la imagen de la contemplación. Así los reyes antiguos visitaban las regiones del mundo, contemplaban la gente e impartían la enseñanza”. Cuando el viento sopla sobre la tierra se hace presente en todos los lugares y la hierba debe plegarse bajo su fuerza. Estos dos hechos se confirman en 71 este signo. Las dos imágenes simbolizan la manera de actuar de los reyes de la antigüedad: por una parte, gracia a sus viajes regulares ellos se procuraban una vista general de su pueblo de tal manera que ninguna costumbre en vigor se le podía escapar. Por otra parte, de ese modo ellos ejercían su influencia gracias a la cual los hábitos inadecuados eran modificados. El conjunto indica el poder de la personalidad superior. Tal hombre tendrá una vista general de la gran multitud y de sus verdaderas disposiciones, de tal suerte que no podrá engañarse. Por otra parte, él ejercerá su influencia sobre ella por su simple presencia, de modo que la multitud pueda reglarse con él como la hierba lo hace con el viento. LAS LINEAS: Seis en la base significa: “Contemplación de un niño. Para un hombre vulgar, no hay reproches. Para un hombre noble, hay humillación.” Aquí se muestra una contemplación sin inteligencia y de lejos. Hay alguien que está actuando, pero sus actos no son comprendidos por los hombres vulgares. Eso no es importante para las masas, que comprenden o no las acciones de los sabios gobernantes, puesto que están orientadas de todas maneras a su bien. Pero para un hombre superior ello es vergonzoso. No debe contentarse con una contemplación estúpida y sin comprehensión de las influencias predominantes. Debe considerarlas en su contexto y tratar de comprenderlas. Seis en el segundo lugar significa: “Contemplar a través de la rendija de la puerta. Es ventajoso para la perseverancia de una mujer”. A través de la rendija de la puerta se tiene una visión limitada. Se ve del interior hacia lo exterior. El modo de contemplación es limitado subjetivamente. Se lo relaciona todo a sí mismo pero uno no sabe ponerse en el lugar de los otros y comprender sus motivos. Eso es conveniente para una buena dueña de casa. Ella no tiene necesidad de comprender los asuntos del mundo. Para un hombre que debe actuar en la vida pública, tal contemplación egoista y limitada es naturalmente mala. (La descripción de la visión limitada de una dueña de casa no se circunscribe solamente a una evaluación del rol que tenían las mujeres en la vieja China. Esta imagen también es caracterizada por Schiller en “El canto de la Campana” que muestra la visión una ama de casa que se movía perfectamente en círculos semejantes.) Seis en el tercer lugar significa: “Contemplando mi vida elijo entre el progreso y el retroceso”. Es aquí el lugar de transición. Ya no se mira hacia el exterior para recibir imágenes más o menos limitadas y confusas sino que se orienta la 72 contemplación hacia si mismo con el fin de encontrar una dirección para las decisiones a tomar. Esta interioridad de la contemplación es el ejemplo de una victoria sobre el egoísmo inocente que observa todo desde su punto de vista personal. Se llega a la reflexión y a través de ella a la objetividad. De todas maneras, el conocimiento de sí mismo no es el exámen de nuestro propio pensamiento sino de los actos que producimos. Solo las acciones de nuestra vida dan una imagen que nos autoriza a dicidir sobre el progreso o el retroceso. Seis en el cuarto lugar significa: “Contemplando la luz del reino, es ventajoso actuar como un huésped del rey”. Aquí se describe a un hombre que comprende el secreto gracias al cual se hace prosperar un reino. Tal hombre debe ocupar una posición de autoridad donde pueda actuar. Debe ser, de alguna manera, como un huésped, es decir, que es necesario que actúe con toda independencia, que sea respetado y no utilizado como un instrumento. O Nueve en el quinto lugar significa: “Contemplando mi vida. El hombre noble no tiene reproches”. Un hombre que ocupe un puesto de autoridad, hacia el cual los otros elevan su mirada debe estar constantemente preparado para examinarse a si mismo. Sin embargo, la manera correcta de examinarse no consiste a reflexionar sobre sí mismo sino a examinar los resultados que se producen. Solamente si los resultados son buenos y si se ejerce una buena una influencia sobre los otros, la contemplación de nuestra propia vida podra procurarnos satisfacción y estaremos libres de reproches. O Nueve en la cima significa: “Contemplando su vida. El hombre noble no tiene reproches”. La línea anterior representaba a un hombre que se contemplaba a sí mismo. Aquí, en el lugar más elevado, todo elemento personal y ligado a sí mismo está excluído. Se muestra un sabio que, fuera de la agitación del mundo y libre de sí mismo, contempla la ley de la vida y reconoce que el bien supremo consiste en saber como permanecer libre de reproches. 21.- SHIH HO / MORDIENDO A TRAVES Superior : Li Lo Oscilante, Fuego Inferior : Chen Lo Excitante, Trueno. 73 El hexagrama representa una boca abierta (cf. N° 27) con algo que la obstruye entre los dientes (en el cuarto lugar). Como resultado los labios no pueden juntarse. Para llegar a unirlos debe morderse enérgicamente el obstáculo. Además, este hexagrama se compone del trigrama Chen, el Trueno y el fuego, Li, interpretado aquí como el rayo, con el fin de indicar la manera vigorosa como la naturaleza se separa de todo lo que la molesta. Esta mordida vigorosa triunfa de lo que impide la reunión que se realiza en la boca. La tormenta con sus truenos y sus rayos triunfa de la tensión que enturbia la naturaleza. Los procesos y los castigos triunfan de las intrusiones que enturbian con crímenes y calumnias la armonía de la vida social. A la diferencia del hexagrama N° 6, “el conflicto”, donde es cuestión de procesos civiles, el tema de este hexagrama es un proceso criminal. EL JUICIO: “Morder a través tiene éxito. Es favorable dejar que se ejerza la justicia” Cuando un obstáculo se opone a la reunión, separarlo enérgicamente es lo más apropiado. Eso es válido en todas las situaciones. Allí donde la unidad no puede ser realizada, es siempre por el impedimento causado por un calumniador o por un traidor que actúa como traba y como freno. Entonces hay que morder enérgicamente para evitar que crezca un perjuicio durable. Tales obstáculos conscientes no desaparecen por ellos mismos. Juicio y castigo son necesarios para intimidarlos o separarlos. Pero en una empresa semejante hay que proceder de la manera correcta. El hexagrama está constituido por la unión de Li, la claridad y de Chen, la excitación. Li es blando, Chen es duro. La dureza y la irritación serían por ellos solos demasiado violentos en la administración de un castigo. La claridad y la blandura, por ellas mismas, serían demasiado débiles. Unidas, estas dos propiedades realizan la medida justa. Es importante que el hombre a quien incumbe tomar la decisión (representado aquí por la 5° línea) sea blando de naturaleza mientras que, gracias a su posición, ejerza una acción que inspire el respeto. (Ver carácter y posición de los trazos) LA IMAGEN: “Truenos y rayos. La imagen de morder a través. Así los viejos reyes establecían leyes firmes y con penalidades bien definidas”. Los castigos constituyen las aplicaciones individuales de la leyes. Las leyes deben contener la mención de los castigos (previstos para quienes las infringen). La claridad reina si al fijar las penalidades, se distinguen las faltas leves y de las graves según la naturaleza de las transgresiones. Eso es simbolizado por la claridad, por el rayo. La firmeza de las leyes es realizada por la justa aplicación de las penas. Esta claridad y esta severidad tienen por objeto de mantener a los hombres dentro del respeto; los castigos no son importantes por ellos mismos. Los obstáculos cobran importancia en la vida colectiva de los hombres cuando las penas no están claramente 74 determinadas y que ellas son aplicadas con negligencia. La única manera de consolidar las leyes es haciendo que los castigos sean claros, fijos y rápidos. LAS LINEAS: ( Independientemente del sentido general del hexagrama, los trazos se explican aquí individualmente de la manera siguiente: el primero y el sexto trazo representan los que reciben un castigo por haber infringido la ley; los otros trazos representan los que infligen los castigos (cf. N° 4, Mong, “la locura juvenil”). Nueve en la base significa: “Su pie está asegurado en el cepo. Sus dedos desaparecen. Sin reproches”. Cuando se impone una sentencia a alguien que por primera vez infringe la ley, la pena será leve. Sólo los dedos de los pies se colocan en el cepo. Así se impide que el culpable siga pecando y quedará libre de reproches. Es sólo una advertencia para que se detenga a tiempo en el camino del mal. Seis en el segundo lugar significa: “Muerde en la carne tierna, hasta que su nariz desaparece. Sin reproches». Es fácil discriminar entre lo correcto y lo errado en este caso, lo mismo que morder una carne tierna. Pero alguien acosado por el hambre va demasiado lejos. Bajo el efecto de la irritación la cólera puede ser excesiva. La desaparición de la nariz en la mordida significa la indignación que se despierta en nuestra sensibilidad y se pierde la sutileza del olfato. Pero no hay gran daño aquí, ya que la pena es simplemente justa. Seis en el tercer lugar significa: “Muerde una carne seca y rancia y se topa con algo venenoso. Leve humillación. Sin reproches”. El castigo es ejecutado por alguien no que tiene ni el poder y ni la autoridad para imponerlo. Es por eso que los condenados no se someten. Es un viejo asunto simbolizado aquí por una carne salada mal conservada y se encuentran dificultades. Esta carne vieja está averiada. Hay riesgos de atraerse rencores venenosos ocupándose de este asunto y uno se puede encontrar en una situación un poco humillante. Pero como la época requería este castigo, se permanece libre de reproches. Nueve en el cuarto lugar significa: “Muerde carne seca y cartilaginosa. Recibe flechas de metal. Es ventajoso reflexionar sobre las dificultades y perseverar. Fortuna”. Hay grandes obstáculos para superar y oponentes poderosos que deben ser castigados. La tarea es ardua, pero sin embargo se lleva a cabo. Para triunfar hace falta ser duro como el metal y directo como una flecha. Si se reconocen las dificultades y se persevera, se alcanza el éxito. La tarea es delicada pero al final es llevada a cabo. 75 O Seis en el quinto lugar significa: “Muerde carne seca y magra. Recibe oro amarillo. Reconocer el peligro constantemente. Sin reproches”. Uno tiene que decidir sobre un asunto que no es fácil pero que sin embargo es claro. Pero se posee una naturaleza con tendencia a la serenidad. En consecuencia hay que componerse y ser como el oro amarillo, es decir, veraz como el oro e imparcial como el color amarillo (color del medio del espectro de la luz). Solo permaneciendo constantemente consciente de los peligros derivados de la responsabilidad que se asume, uno puede evitar de cometer errores. Nueve en la cúspide significa: “Su cuello está atrapado por una canga de madera de tal manera que sus orejas desaparecen. Desgracia”. A diferencia de la situación que se encuentra en el primer trazo (leve castigo para alguien que infringe la ley por primera vez), aquí se trata de alguien incorregible. Lleva como castigo la canga de madera que le oprime el cuello. Pero sus orejas desaparecen, es decir que, a pesar del castigo, permanece sordo a las advertencias y a los consejos. Su obstinación conduce al infortunio. Existe otra interpretación basada sobre la idea de que “en lo alto está el sol y en lo bajo el movimiento”. Según esta interpretación, el hexagrama representa en lo bajo un mercado bullicioso y animado mientras que el sol ilumina en lo alto del cielo. Se trata de un mercado alimentario. Los alimentos están simbolizados por la carne. El oro y las flechas son también artículos de comercio. La desaparición de la nariz simboliza la ausencia de olfato, es decir, la falta de codicia. El veneno simboliza el peligro de las riquezas, etc. Según Confucio, el primer trazo significa : “El vulgo no se avergüenza por la falta de amor ni teme a la injusticia. Si no percibe ventajas no se mueve. Se mejora solamente con amenazas. Pero si es bien conducido en los asuntos menores, permanecerá atento en los asuntos mayores. Esto es una ventaja para los hombres vulgares”. Con respecto al trazo superior dice: “Si el Bien no se acumula, no alcanza para hacer la reputación de un hombre. Si el Mal no se acumula, no alcanza para destruir la reputación de un hombre. El hombre vulgar piensa por esta razón que el Bien en las cosas mínimas no tiene ningún valor y es por eso que lo menosprecia. Piensa que las faltas menores no son dañinas y es por eso que no pierde el hábito de cometerlas. Así es que sus faltas se amontonan hasta que ellas no pueden más esconderse y la culpabilidad es tan grande que ya no puede ser omitida.” O Trazo gobernante * Trazo constituyente 76 22.- PI / LA GRACIA Superior : Ken, La Inmovilidad, la Montaña. Inferior : Li Lo Oscilante, Fuego. El hexagrama muestra el fuego que nace de las secretas profundidades de la tierra y arde iluminando la montaña y lo alto del cielo, revistiéndola de belleza. La gracia, la belleza de la forma es necesaria para que toda unión sea armoniosa y amable y no caótica y desordenada. EL JUICIO: “La gracia tiene éxito. En asuntos pequeños es favorable emprender algo”. La gracia trae éxito. Sin embargo ella no es esencial para los asuntos fundamentales, sino un ornamento que debe ser usado con parsimonia en las cosas pequeñas. En el trigrama inferior, el fuego, una línea débil se mete entre dos líneas fuertes y las hace bellas; pero las líneas fuertes son la esencia, la línea débil es la forma que embellece. En el trigrama superior, la montaña, la línea fuerte aparece en la cumbre, en un lugar determinante, de tal manera que aquí todavía ella debe ser considerada como el factor decisivo. En la naturaleza el sol ocupa una posición fuerte y la vida del mundo depende de él. Pero la posición fuerte del sol está rodeada de la luna y de las estrellas que alternan graciosamente con el. En la vida humana, la belleza de la forma aparece cuando los caracteres fuertes como montañas se hacen agradables por una clara belleza. Contemplando lo que ocurre en el cielo llegamos a comprender la época y las exigencias cambiantes. La contemplación de las formas en la vida humana confiere la posibilidad de moldear_el_mundo. Nota: El hexagrama muestra la belleza en reposo. Adentro claridad y afuera quietud. Es la quietud de la contemplación pura. Cuando el deseo se calla y la voluntad se reposa, el universo se revela como Idea en las apariencias. En tanto que tal eso es bello y sustrae al combate por la existencia. Es el mundo del arte. Pero, en definitiva, la contemplación por ella sola no pone la voluntad en reposo. Esta se despertará y toda la belleza habrá sido solamente un momento de exaltación pasajera. Por eso es que la belleza y la gracia no son verdaderas vías de liberación. En consecuencia, Confucio se sintió muy molesto cuando, consultado el oráculo, obtuvo como respuesta “la gracia”. LA IMAGEN: “Fuego al pie de la montaña. La imagen de la gracia. Así el hombre noble progresa cuando aclara los asuntos corrientes pero no es de esta manera que logrará decidir las cuestiones importantes”. 77 El fuego, cuya luz ilumina las montañas y las hace agradables, no brilla lejos. En la misma forma, las formas hermosas bastan para iluminar las cuestiones más inmediatas pero no para decidir las cuestiones de importancia. Estas requieren mayor seriedad. LAS LINEAS: Nueve en la base significa: “Da gracia a sus pies, deja el carro y camina”. El hecho de encontrarse en el comienzo en un puesto subordinado implica que uno debe encargarse por sí mismo del esfuerzo de avanzar. Se podría encontrar una ocasión de aliviarse, representada por la imagen del carro. Pero un hombre resuelto desprecia las facilidades obtenidas de manera dudosa. Es más digno caminar que viajar en carro sin tener el derecho. O Seis en el segundo lugar significa: “Presta gracia a su barba”.Una barba no es una cosa independiente. Ella solamente puede moverse con el mentón. La imagen significa que la forma es considerada como resultado y consecuencia del contenido. La barba es un ornamento superficial. Cuidarla por ella misma, sin considerar el contenido interior del cual ella proviene sería un signo de una cierta vanidad. Nueve en el tercer lugar significa: “Elegante y húmedo. La perseverancia constante trae buena fortuna». Aquí es cuestion de un momento de la vida lleno de encanto. Uno se encuenntra en un estado relajado rodeado de gracia y de gloria. Sin duda este encanto puede ser merecido pero también puede hacernos zozobrar. De allí la advertencia de no hundirse en la humedad (la blandura y el bienestar), sino de ser constante en la perseverancia. Es sobre ello que se basa la buena fortuna. Seis en el cuarto lugar significa: “¿Gracia o simplicidad? Un caballo blanco viene como si tuviera alas. No es un ladrón, quiere llegar en el momento justo”. Un individuo se encuentra en una situación en que comienzan a despertarse las dudas sobre lo que es mejor perseguir la gracia y la apariencia exterior o retornar a la simplicidad. La duda en sí misma lleva implícita la respuesta. La confirmación viene de fuera: el caballo blanco y alado. El blanco es él color de la simplicidad. Al principio resultará molesto renunciar a las comodidades obtenidas por otros medios, pero finalmente se encuentra la paz del espíritu en una relación sincera con los amigos. El caballo alado simboliza los pensamientos que trascienden de los límites del espacio y el tiempo. Seis en el quinto lugar significa: “Gracia en las colinas y los jardines. El capullo de seda es pequeño y modesto. Humillación, pero finalmente, buena fortuna”. 78 Se dejan las gentes de las regiones bajas que buscan solamente la pompa y el lujo y uno se retira en la soledad de las alturas. Allí se encuentra un hombre hacia el cual uno siente admiración y con el cual se quisiera establecer una amistad. Pero los presentes que uno quisiera ofrecer son demasiado escasos y modestos, por lo que uno se siente avergonzado. Sin embargo no son los presentes exteriores los que cuentan sino los verdaderos sentimientos. Por eso es que al final todo va bien. O Nueve en la cúspide significa: «Gracia simple. Sin error». Aquí, en el grado más elevado, toda la gracia se simplifica. La forma ya no disimula el contenido, sino que lo deja exponerse en todo su valor. La gracia suprea no consiste a ornamentar exteriormente los materiales, sino a darles una forma simple y práctica. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 23.- PO / LA DISPERSION (El desgaste, dividiendo y apartando) En haut TCHEN L'ÉVEILLEUR, LE TONNERRE Inferior : K'un Lo Receptivo, Tierra. Las líneas oscuras se aprestan a subir y a causar la caída de la última línea, que es firme y luminosa, desagregándola con su influencia. El hombre vulgar y oscuro no combate directamente al hombre noble, sino que lo mina progresivamente por una acción imperceptible, de tal manera que al final se derrumba. Las líneas del hexagrama dan la imagen de una casa cuyo techo comienza a ser amenazado por el colapso. La línea superior es el techo. El techo una vez que se fisura hace que la casa se derrumbe. Los oscuros poderes inferiores comienzan a superar la fuerza, no por medios directos, sino de manera gradual e imperceptible. Este signo es atribuido al 9° mes (octubre-noviembre). La fuerza ying empuja con un vigor creciente y ella está a punto de derrocar completamente la fuerza yang. EL JUICIO: “La dispersión. No es conveniente de emprender algo ni de ir a ninguna parte.” Muestra una época en que la gente débil e inferior avanza y está en camino de superar a los robustos y nobles. Esta situación es una causa del curso del tiempo. En estas circunstancias, no es favorable al hombre noble 79 emprender ningún asunto. La conducta correcta en estos tiempos adversos debe deducirse de la imagen y de sus atributos. El trigrama inferior representa la tierra cuyos atributos son la docilidad y el abandono; el trigrama superior representa la montaña cuyo atributo es la tranquilidad, la inmovilidad. Ello sugiere de conformarse con el mal tiempo y permanecer tranquilo. No se trata de lo que el hombre haga, sino de las condiciones de la época que, de acuerdo con las leyes del cielo, muestran alternativas de progreso y decadencia, plenitud y vacío. Esas condiciones temporales no permiten ninguna reacción y es imposible de contrarrestarlas. No es cobardía sino sabiduría saberse adaptar y abstenerse de la acción: LA IMAGEN: “La montaña descansa en la tierra: La imagen de la dispersión. Los superiores pueden asegurar su posición sólo mediante generosas concesiones con los que están abajo”. La montaña reposa sobre la tierra. Si ella es estrecha, escarpada y desprovista de una base amplia, debe derrumbarse. Es solamente si ella sabe elevarse amplia y vasta de la tierra, y no orgullosa y abrupta, que su posición es asegurada. Los gobernantes reposan sobre la larga base del pueblo. Ellos deben también mostrar generosidad y grandeza de alma, tal como la tierra que sostiene a todos los seres. Solamente de esa manera ellos mantendrán su posición tan segura y tranquila como una montaña. LAS LINEAS: Seis en la base significa: “La pata de la cama se destroza. Los que perseveran serán destruidos. Desgracia”. La gente inferior avanza en secreto y comienza clandestinamente su labor destructiva para minar el orden y destruir el sitio donde reposa el hombre noble. Los fieles del gobernante que permanecen leales son destruidos por la calumnia y la intriga. La situación es desastrosa. Sin embargo, no hay nada mejor que esperar. Seis en el segundo lugar significa: “La orilla de la cama se destroza. Los que perseveran serán destruidos. Desgracia”. El poder de la vulgaridad avanza. El peligro se acerca incluso a la propia persona. Aquí aparecen señales claras. La tranquilidad es perturbada. Mientras que uno se encuentre en tal situación peligrosa, se permanece impotente frente a ella, sin ayuda y sin el contacto amistoso provenientes de lo superior o de lo inferior. En este aislamiento es necesario tomar extremas precauciones. Uno debe adaptarse a las exigencias del momento, percibir el peligro a tiempo y saber evitarlo en el momento requerido. Si se quisiera mantener su posición mostrándose inflexible y perseverante, eso conduciría al desastre. 80 Seis en el tercer lugar significa: “Se separa de ellos. Sin reproches”. Uno se encuentra en el medio de una mala circunstancia a la cual uno está ligado por vínculos exteriores. Pero de todas maneras subsiste una relación con un hombre superior. Por este medio se adquiere una estabilidad interior que permite liberarse de la mala influencia de la gente que nos rodea. Probablemente uno encontrará oposición frente a ellos pero se adopta la actitud correcta y no hay reproches. Seis en el cuarto lugar significa: “La cama se destroza hasta la piel. Desgracia”. El infortunio alcanza aquí el mismo cuerpo y no solamente el lugar donde él se mantiene. El oráculo no agrega ni advertencias ni comentarios. La desgracia aquí ha alcanzado el máximo punto y ella no se deja esquivar. Seis en el quinto lugar significa: “Un banco de peces. El favor llega a través de las damas de la corte. Todo es favorable”. La naturaleza oscura este trazo se transforma aquí debido a la proximidad inmediata con el principio fuerte y luminoso que está en la cúspide. La oscuridad ya no se opone con intrigas al principio fuerte sino que se somete a su dirección. Se la ve incluso, en tanto que primera línea débil, conducir el conjunto de ellas hacia el principio fuerte, como lo haría una princesa que conduce las damas de la corte -tal como un banco de peces- a su esposo, para obtener de él sus favores. Sometiéndose libremente al principio superior, el principio inferior recibe lo que merece. Es por eso que aquí todo es favorable. O Nueve en la cúspide significa: “Hay una gran fruto que todavía no ha sido comido. El hombre noble recibe un carruaje. La casa del hombre inferior se hace pedazos”. Aquí ha llegado el fin de la dispersión. Cuando el infortunio ha agotado por sí mismo toda su maldad, los tiempos mejores retornan. La semilla del bien está todavía allí. Como el fruto maduro cae a la tierra, el bien sale de nuevo de su simiente. El hombre noble reprende influencia y tiene la posibilidad de actuar. La opinión general lo lleva como si fuera un carro. Pero el hombre vulgar es castigado por su propia maldad. Su casa vuela en mil pedazos. Allí hay una ley de la naturaleza. El mal no es solamente un corruptor del bien, sino que finalmente él se destruye por él mismo. Puesto que el mal vive solo de la negación, no puede subsistir. Para el hombre vulgar también, la mejor situación es de estar bajo el control del hombre noble. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 81 24.- PU / EL RETORNO (El cambio de tiempo) Superior : K'un Lo Receptivo, Tierra Inferior : Chen Lo que Despierta, Trueno. La idea de retorno está indicada por el hecho de que después que las líneas oscuras han desalojado hacia arriba todas las líneas luminosas, una de éstas retorna al hexagrama por abajo. El tiempo de la oscuridad pasó. Ahora viene la victoria de la luz. El solsticio de invierno trae la victoria de la luz. El hexagrama está asignado al 11º mes, el mes del solsticio (diciembre-enero). EL JUICIO: “Retorno. Éxito. Saliendo y volviendo sin error. Los amigos vienen sin reproches. El camino va y viene. Al séptimo día regresa. Es ventajoso tener donde ir”. Después de una época de decadencia comienza el regreso. El poder de la luz, que había sido alejado, se halla de vuelta. Hay movimiento, pero no es algo impuesto: el trigrama superior, K’un tiene el carácter de abandono y de dar de sí mismo. Es entonces un acto natural que nace espontáneamente. Es por eso que la transformación de las cosas viejas se hace fácilmente. Lo viejo es depuesto a favor de lo nuevo introducido. Uno y otro corresponden al tiempo y no producen ningún daño. Grupos se forman de seres animados por los mismos sentimientos. Pero esas reuniones se hacen abiertamente, ellas corresponden a la época y es por eso que todo esfuerzo particular y egoísta está excluido y no hay en ello ninguna falta. El retorno tiene su fundamento en el curso de la naturaleza. El movimiento es circular. La vía se cierra sobre ella misma. Por eso no debe precipitarse nada artificialmente. Todo viene espontáneamente cuando ha llegado el tiempo. Tal es la Vía del cielo y de la tierra. Todos los movimientos se cumplen en seis etapas, y la séptima trae como consecuencia el retorno. Así, al séptimo mes después del solsticio de verano, donde comienza a declinar el año, viene el solsticio de invierno. De la misma manera que la salida del sol viene a la séptima hora doble que sigue al ocaso. Es por eso que el siete es el número de la joven luz que nace cuando el seis, número de la oscuridad, se acrecienta de una unidad. Así el movimiento llega al reposo. LA IMAGEN: “Trueno sobre la tierra. La imagen del punto de retorno. Así, los reyes de la antigüedad cerraban los pasajes en el tiempo del solsticio. Mercaderes y extranjeros no circulaban y el gobernante no viajaba por las provincias”. El solsticio de invierno ha sido celebrado desde siempre en China como el tiempo de reposo del año, costumbre que se celebra con en el tiempo de reposo observado a la ocasión del año nuevo. En invierno, la potencia vital (simbolizada por el trueno, lo que despierta) está todavía bajo tierra. Los movimientos están apenas en sus primeros inicios. Es por eso que se debe todavía fortificarse con el reposo, con el fin de no malgastarlo haciendo de él un uso prematuro. Esta máxima, que prescribe permitir a la energía que se renueva fortificarse con el reposo, se aplica a todas las situaciones análogas. La salud que retorna después de una enfermedad, la comprensión que renace después de un diferendo, todo debe ser tratado, a sus comienzos, con la delicadeza y las comodidades para que el retorno conduzca a la prosperidad. LAS LINEAS: O Nueve en la base significa: “Retorno de corta distancia. No hay necesidad de remordimientos. Gran buena fortuna”. Pequeñas desviaciones de lo conveniente no deben ser considerados como graves, pero hay que corregirlos a tiempo antes de ir demasiado lejos. Eso es especialmente importante para desarrollar el carácter; todo error debe ser dejado de lado de inmediato, antes que se aposente de manera firme en la mente. Así no habrá causa para remordimientos y todo irá bien. Seis en el segundo lugar significa: “Retorno tranquilo. Buena fortuna”. El regreso siempre requiere una resolución; es un acto de dominio de sí mismo. Es más fácil cuando uno está en buena compañía. Cuando uno puede plegarse a hombres de bien y arreglarse con ellos, eso aporta buena fortuna. Seis en el tercer arrepentimiento”. lugar significa: “Regreso reiterado. Peligro. Sin Existen personas marcadas por una cierta inestabilidad interior. Les hace falta constantemente invertir la dirección de su voluntad. Hay un peligro en ese alejamiento continuo del bien debido a deseos incontrolados, al que le sucede un retorno a las buenas intenciones. De todos modos, puesto que esta habitud tampoco produce una radicación en el mal, una tendencia prolongada a corregir los defectos no está excluida. Seis en el cuarto lugar significa: “Caminando errante en medio de los otros, se retorna solo”. Se está marchando en el medio de una compañía de hombres vulgares, pero se está ligado interiormente a un amigo fuerte y bueno. En consecuencia, se retornará solo. Aunque no se haga mención de castigos o recompensas, la situación es ciertamente favorable, puesto que tal resolución, dirigida hacia lo bueno, llevará en ella misma su recompensa. 83 Seis en el quinto remordimientos”. lugar significa: “Retorno magnánimo. Sin Cuando llega el tiempo de retornar, uno no debe abrigarse detrás de excusas triviales sino examinarse prolijamente a sí mismo. Si se hizo algo erróneo se debe, tomando una resolución magnánima, confesar su falta. No habrá remordimientos siguiendo este camino. Seis en la cúspide significa: “Retorno fallado. Infortunio. La desgracia viene de afuera y de adentro. Si se hace marchar al ejército por este camino, finalmente se sufrirá una gran derrota, desastrosa para el gobernante del país. Por diez años no será posible atacar de nuevo”. Si uno se equivoca en el momento correcto para regresar encuentra la desgracia. Este infortunio está interiormente causado por una actitud incorrecta hacia el mundo. Y la consecuencia del infortunio interior es el infortunio exterior. Su ciega obstinación lo pierde. Lo que se señala aquí es esta obstinación y la consecuencia desgraciada que provoca. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 25.- WU WANG / LA INOCENCIA ( Lo Inesperado ) Superior : Ch'ien Lo Creativo, Cielo. Inferior : Chen Lo que Despierta, Trueno. Arriba está Ch’ien, lo creativo; abajo Chen, el movimiento. El trigrama inferior, Chen, está bajo la influencia de la línea fuerte que ha recibido de arriba, del cielo. Cuando, conforme a este estado de cosas, el movimiento sigue las leyes del cielo el hombre es inocente y sin falsedad. Su espíritu es natural y veraz, no está ensombrecido ni por la reflexión ni por otras intenciones. Cuando trata de seguir otro designio, se pierden la veracidad y la inocencia naturales. La naturaleza sin las directivas del espíritu no es verdadera naturaleza, sino una naturaleza desvirtuada. A partir del pensamiento de lo que es natural, el significado del hexagrama comprende además la noción de imprevisto, de inesperado. EL JUICIO: “Inocencia. Éxito supremo. La perseverancia es ventajosa. Si alguien no es lo que debe ser, tiene mala fortuna y eso no le ayudará a emprender ninguna cosa”. 84 El hombre recibió del cielo una naturaleza intrínsecamente buena, para guiarlo en sus movimientos. Adhiriéndose a este principio divino en él, el hombre alcanza una inocencia pura que, sin detenerse en pensamientos de recompensa e interés, hace lo que es justo, simplemente y con una seguridad instintiva. Es esta seguridad instintiva que le trae un éxito supremo y que lo favorece mediante la perseverancia. Sin embargo todo lo que es instintivo no es natural en el sentido propio de la palabra, sino solamente aquello que es justo y de acuerdo con la voluntad del cielo. Si hay una falta de justicia, la actividad instintiva irracional produce solamente desgracias. Confucio dice al respecto “¿Qué obtiene aquél que se aparta de la inocencia? La voluntad y la bendición del cielo no acompañan sus actos”. LA IMAGEN: “Bajo el cielo vibra el trueno. Todas las cosas llegan al estado natural de inocencia como los reyes antiguos, ricos en virtudes y en armonía con sus tiempos, (cuidaban y nutrían) a todos los seres”. En la primavera cuando el trueno, la fuerza vital, se mueve de nuevo bajo el cielo, todas las cosas germinan y crecen y todos los seres reciben de la naturaleza creadora la inocencia infantil de la esencia original. De la misma manera que los buenos soberanos actúan entre los hombres desplegando la riqueza interior de su naturaleza, proporcionan todo el cuidado requerido por la vida y la civilización y proveen en el tiempo justo todo lo que ellas necesitan para mantenerse y progresar. LAS LINEAS: O Nueve en la base significa: “Cambio inocente trae buena fortuna”. Los primeros impulsos originales del corazón (las corazonadas) son siempre buenos, y se puede seguirlos con confianza, y estar seguros de alcanzar la meta con buena fortuna. Seis en el segundo lugar significa: “Si cuando se labra un campo no se piensa en la cosecha y cuando se lo desbroza no se lo hace pensando en el uso que se hará del campo, entonces es ventajoso emprender algo”. Todo trabajo debe ser realizado por él mismo, según lo requieran el tiempo y el lugar, y sin miras sobre el resultado que pueda obtenerse. Entonces él fructifica y todo lo que se emprenda es coronado por el éxito. Seis en el tercer lugar significa: “Desgracia inmerecida. La vaca amarrada da ganancia al vagabundo y pérdidas al aldeano”. A veces nos espera una desgracia inmerecida causada por otros, como por ejemplo cuando pasa un vagabundo y que se lleva consigo una vaca que estaba amarrada. Su ganancia es la pérdida del propietario. En todas las 85 cosas, incluso en los asuntos inocentes, uno debe conformarse con las exigencias del momento, de otra manera, sobreviene el infortunio. Nueve en el cuarto lugar significa: “El que puede ser perseverante permanece sin culpa”. No podemos abandonar lo que realmente nos pertenece, incluso si se lo rechaza. Por eso no debe haber inquietud. Solo hay que cuidarse de permanecer siempre fiel a su propia naturaleza y no escuchar a los demás. O Nueve en el quinto lugar significa: “En una enfermedad inmerecida no hay necesidad de medicina.” Un mal inesperado puede llegar accidentalmente del exterior y sin causa ni origen en la naturaleza del hombre. En ese caso no se debe recurrir a medios exteriores sino dejar tranquilamente que la naturaleza siga su curso. Entonces las cosas se arreglarán por sí mismas. Nueve en la cima significa: “Una acción inocente trae desgracia. Nada es favorable”. Cuando se está en una situación donde la época no es propicia para el progreso es importante esperar tranquilamente y sin intenciones ulteriores. Si se actúa de una manera irracional para ir contra el destino no se obtendrá el éxito. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 26.- TA CHU / EL PODER DOMINANTE DE LO GRANDE Superior : Ken, La Inmovilidad, la Montaña. Inferior : Ch'ien, Lo Creativo, Cielo. El creador está aprisionado por la inmovilidad. Eso da un gran poder, completamente diferente al del N° 9 donde es solamente lo suave que contiene al creador. Mientras que allá un solo trazo débil debe contener los cinco trazos fuertes, aquí hay dos: además del ministro también está el príncipe. Es por eso que este hexagrama es mucho más potente. El signo encierra un triple significado: el cielo en el medio de la montaña da la idea de “tener firme” en el sentido de “mantener juntos”. El trigrama Ken que inmoviliza Ch’ien da la idea de “tener firme” en el sentido de “retener”. En fin, como hay un trazo fuerte que rige el hexagrama, se tiene la idea de “tener firme” en el sentido de “cultivar”, de “nutrir”. Este último pensamiento 86 vale especialmente para el regente del hexagrama, el trazo superior, que representa el sabio. EL JUICIO: “El poder dominante de lo grande. La perseverancia es ventajosa. No comer en casa trae buena fortuna. Es ventajoso atravesar la gran corriente”. Para aprender y atesorar firmemente los poderes creativos se requiere un hombre fuerte y de claro entendimiento que pueda ser honrado por el soberano. El trigrama Ch’ien indica el gran poder creador, mientras que el trigrama Ken, la firmeza y la verdad. Los dos traducen la luz, la claridad y la renovación cotidiana del carácter. Sólo a través de la renovación diaria el hombre puede aumentar sus poderes. La fuerza de los hábitos ayuda a mantener el orden en los tiempos tranquilos, pero en los tiempos donde se usa el poder acumulado, todo depende de la fuerza de la personalidad. Puesto que los hombres de mérito son honrados, como lo prueba la fuerte personalidad a la que el soberano confía responsabilidades gubernamentales, es ventajoso no comer en casa, sino ganarse el pan en una ocupación pública ocupando un cargo oficial. Tal hombre está en armonía con el cielo y triunfará aunque efectúe empresas difíciles y peligrosas como cruzar la gran corriente. LA IMAGEN: “Cielo en el medio de la montaña. La imagen del poder influyente de lo grande. El hombre noble se informa sobre con muchos refranes antiguos y experiencias pasadas, para fortalecer con ellos su carácter”. El cielo en medio de la montaña evoca tesoros escondidos. En las palabras y sentencias del pasado yace el tesoro escondido que podemos usar para fortalecer nuestro carácter. El camino para estudiar el pasado no consiste en limitarse a conocer la historia, sino hacer de la historia una realidad actual utilizando sus datos. LAS LINEAS: Nueve en la base significa: “Hay peligro en ciernes. Es conveniente alejarse”. Se desea avanzar vigorosamente, pero las circunstancias se oponen y uno es retenido. Si se quiere avanzar a pesar de todo, se atraerá la desgracia. Es mejor resignarse, reponer sus energías y esperar que las fuerzas acumuladas ofrezcan una salida. Nueve en la segunda línea significa: “Los ejes de las ruedas fueron sacados del carro”. 87 El progreso está obstaculizado como en el n° 9, Siao Tch’ou, “poder dominante de lo pequeño” (nueve en el tercer lugar). Allá la fuerza de obstrucción es débil, de manera que hay conflicto entre el empuje y el obstáculo, y se rompen los rayos de las ruedas. Aquí la fuerza de obstrucción es netamente predominante. En consecuencia no hay combate y uno se adapta. Se comienza por sacar los ejes del carro, es decir, que por el momento uno debe contentarse con esperar. De esta manera se acumulan energías y se crea una tensión que permitirá ulteriormente un avance vigoroso. Nueve en el tercer lugar significa: “Un buen caballo que sigue a otro. La conciencia del peligro y la perseverancia son convenientes. Debes ejercitarte todos los días guiando el carro y manejando las armas. Es conveniente tener un lugar adonde ir”. El camino está abierto. Los obstáculos han desaparecido. Se está ligado a una fuerte voluntad que actúa en la misma dirección. Se avanza como un buen caballo que sigue a otro. Pero todavía amenaza el peligro y se debe permanecer consciente de ello para no ser despojado de la resolución. Así hay que adiestrarse avanzando y a la vez vigilar y protegerse contra los ataques inesperados. Es bueno en estos casos tener una meta a la cual dirigirse. Seis en el cuarto lugar significa: “La tablilla sobre el testuz de un toro joven. Gran buena fortuna”. Este trazo y los siguientes dominan los trazos inferiores. Antes que crezcan los cuernos de un toro joven se le pone sobre el testuz una tablilla para evitar que más tarde, cuando los cuernos comiencen a crecer, puedan herir y ser peligrosos. Es una buena manera de dominar y de oponerse a la naturaleza salvaje antes de que ella se manifieste. Así se obtiene un éxito fácil y considerable. O Seis en el quinto lugar significa: “Los colmillos de un jabalí castrado. Buena fortuna”. Aquí se domina indirectamente el avance impetuoso. Un colmillo de jabalí es en sí mismo peligroso, pero si la naturaleza del jabalí ha sido alterada, ella pierde su carácter nocivo y el colmillo ya no es una amenaza importante. También, en lo que a los hombres concierne, las fuerzas salvajes no deben ser combatidas directamente, pero sus raíces deben ser erradicadas. O Nueve en la cima significa: “Se alcanza el camino del cielo. Éxito”. El tiempo de la obstrucción pasó. La energía tanto tiempo reprimida por fuerzas inhibitorias se abre camino y obtiene un gran éxito. Es un sabio quien es honorado por el soberano y sus principios se imponen y ordenan el mundo. 88 27.- I / LAS COMISURAS DE LOS LABIOS (La administración de la alimentación) Superior : Ken, La Inmovilidad, la Montaña. Inferior : Chen Lo que Despierta, Trueno. El hexagrama representa una boca abierta. Abajo y arriba las líneas fuertes de los labios y entre ellos la abertura de la boca. De la imagen de la boca se pasa a la idea de la nutrición misma. La administración de alimentos es utilizada para representar en las líneas inferiores la alimentación de sí mismo y más precisamente la del cuerpo. Las líneas superiores representan la alimentación y la cultura en el dominio superior, el del espíritu. EL JUICIO: “Las comisuras de los labios. La perseverancia trae buena fortuna. Observar la administración de alimento y de lo que el hombre se procura para llenar su propia boca”. Cuando se observa la administración de la cultura y de la alimentación, es importante de ocuparse del mérito de las personas y de vigilar la propia nutrición de una manera conveniente. También es importante que se encargue de ello la mejor gente posible, para esperar una nutrición correcta. Si queremos saber cómo es alguien, basta observar de qué y de quienes se ocupa y a qué partes de su naturaleza cultiva y nutre. La naturaleza alimenta a todas las criaturas. El hombre noble cultiva sus partes nobles a veces en detrimento de sus partes más viles. El hombre noble nutre y protege a la gente de valor para que éstos a su vez se ocupen del resto de los hombres. Esa es su manera de cuidar a todos los hombres a su alrededor. Mencio dice al respecto (VI, A, 14) : “Cuando se quiere saber el valor de alguien, hay que observar qué parte de él mismo considera como particularmente importante. El cuerpo tiene partes nobles y partes viles; hay partes más importantes que otras. No se debe causar perjuicio a lo que es importante en detrimento de lo que es secundario, ni a lo que es noble por amor de lo que es vil. Quien cultiva las partes viles de su ser es un hombre vil. Quien cultiva las partes nobles de su ser es un hombre noble.” LA IMAGEN: “Al pie de la montaña, trueno. La imagen de la administración de los alimentos. El hombre noble es cuidadoso con sus palabras y mesurado para comer y beber”. Lo divino aparece en el trigrama de lo que despierta. “En la primavera, cuando las potencias vitales recomienzan a moverse, todos los seres nacen 89 de nuevo”. Y “ello se realiza en el trigrama de lo inmóvil”. Así, en el comienzo de la primavera, cuando las semillas caen en la tierra, todas las cosas se aprestan para un nuevo ciclo de vida. Eso provee un modelo de la administración de la alimentación por medio del movimiento y de lo inmóvil. El sabio ve allí un modelo para seguir en la alimentación y el cultivo de su carácter. Las palabras constituyen un movimiento del interior hacia el exterior. La comida y la bebida constituyen movimientos del exterior hacia el interior. Ambas clases de movimiento pueden ser temperadas por la moderación: las palabras salen de la boca sin exceder su propia medida y los alimentos entran de igual manera. Así es como se cultiva el carácter. LAS LINEAS: Nueve en la base significa: “Dejas irse tu tortuga mágica, y me miras, con las comisuras de tus labios caídas. Desgracia”. La tortuga mágica es una criatura que no tiene necesidad de alimentos terrestres, sino que tiene poderes sobrenaturales que le permiten vivir del aire. La imagen puede simbolizar a alguien que, por su naturaleza y posición, podría vivir libre e independiente gracias a sus recursos propios. En lugar de eso, renuncia a su autonomía interior y dirige su mirada con envidia y descontento hacia los otros que exteriormente están mejor ubicados que él. Esta envidia mezquina provoca en los otros burla y desprecio. Los resultados son malos. Seis en el segundo lugar significa: “Dirigirse a la cumbre por alimentación, desviándose del camino para buscar alimentos provenientes de la colina. Continuar haciéndolo trae desgracia». Normalmente uno busca por sí mismo proveerse de sus propios alimentos o de lo contrario, es alimentado de manera correcta por aquellos que tienen el deber o el derecho de hacerlo. Si, por una cierta debilidad interior, alguien no puede mantenerse a sí mismo, lo acosa un sentimiento de inquietud, puesto que eludiendo la obligación de ganarse la vida por medios lícitos, deja que los otros lo hagan en su lugar como un favor para mantenerle la subsistencia. Esto es indigno porque uno elude sus propias obligaciones y se aparta de su verdadera naturaleza. Si se mantiene este camino indefinidamente, vendrá la desgracia. Seis en el tercer lugar significa: “Apartándose del alimento. La perseverancia trae desgracia. No actúes así durante diez años. Nada es ventajoso”. Quien busca alimentos que no nutren cae en el círculo vicioso de desear el placer y cuando está gozando del placer busca tener deseo del placer. Una búsqueda ciega de la satisfacción de los sentidos jamás conduce a la meta. Uno no debe desear el placer por el placer durante demasiado tiempo (diez años es una medida de tiempo), puesto que nada ventajoso resultará de ello. 90 Seis en el cuarto lugar significa: “Volviéndose hacia la cumbre para obtener alimentos trae buena fortuna. Asechando, con ojos penetrantes como los de un tigre, con un deseo insaciable. No hay reproches”. Este trazo, a diferencia del seis del 2° lugar, donde se muestra alguien preocupado únicamente por obtener ventajas para si mismo, representa alguien que desde su posición elevada se esfuerza por hacer brillar su propia luz. Pero para ello tiene necesidad de ayuda, puesto que solo no puede alcanzar sus fines elevados. Lleno de deseo como un tigre hambriento, está al asecho de las personas convenientes. Pero de todas manera, como él no se preocupa solamente por sí mismo sino por la comunidad, su actitud es irreprochable. O Seis en el quinto lugar significa: “Desviarse del camino. Perseverar trae la buena fortuna. No se debe atravesar la gran corriente” El hombre debe estar consciente de sus propias deficiencias. Se debiera ocupar de alimentar a su gente pero no se tienen las fuerzas necesarias. Uno debe apartarse de su camino habitual y pedir el consejo y la ayuda de alguien elevado espiritualmente pero que permanece en la oscuridad. Cuando se uno se mantiene en una disposición semejante se obtiene la buena fortuna. Pero es importante de permanecer consciente de esa condición de dependencia. Uno no debe ponerse al frente y emprender por si mismo grandes acciones como la travesía de una gran corriente. O Nueve en la cima significa: “La fuente de la nutrición. Tomar consciencia del peligro trae buena fortuna. Es ventajoso atravesar la gran corriente”. Describe un sabio de posición superior, del cual emanan todas las influencias para sustentar a los demás. Su posición le crea una grave responsabilidad. Si uno permanece consciente de este hecho tendrá buena fortuna y podrá emprender con confianza obras grandes y difíciles como la travesía de una gran corriente. Esa empresa trae alegría general para él y para los demás. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 28.- TA KUO / EL GRAN SOBREPESO (La preponderancia de lo grande) Superior : Tui. Lo Gozoso, Lago Inferior : Sun. Lo Suave, Viento, Madera 91 El hexagrama está formado por cuatro trazos fuertes en el interior y dos trazos débiles en el exterior. Cuando los trazos fuertes están al exterior y los trazos débiles en el interior todo va bien, no hay exceso de peso y la situación no tiene nada de extraordinario. Pero aquí se produce la inversa. El hexagrama representa una viga gruesa y pesada en el centro pero demasiado débil en los extremos. Este estado no es duradero. Debe pasar y transformarse, de lo contrario el desastre amenaza. EL JUICIO: “El gran exceso de peso. La viga cumbrera se inclina por sí misma . Es ventajoso tener donde ir. Éxito”. El peso de lo grande es excesivo. La carga es demasiado pesada para la fuerza que debe soportarla. La viga cumbrera, sobre la cual reposa el techo entero, se pliega sobre ella misma y amenaza ceder porque sus extremidades son demasiado débiles para el peso que deben soportar. El techo está a punto de romperse. Se trata de una época y una situación excepcional que requieren medidas extraordinarias si se quiere triunfar. Es necesario encontrar un camino de transición lo más rápidamente posible y emprender la acción. Eso promete éxito, puesto que si bien lo fuerte es excesivo, ocupa el centro y está al interior, de manera no debe temerse una revolución. Nada se obtendrá con medidas forzadas y violentas. Hay que proceder con suavidad, desatando los nudos y penetrando el sentido de la situación, lo que está evocado por el trigrama inferior Sun. Entonces el pasaje a otras condiciones será exitoso. Esto exige una real superioridad, por lo cual, el tiempo donde predomina el gran sobrepeso es una época importante. LA IMAGEN: “El lago crece por encima de los árboles. La imagen del gran sobrepeso. El hombre noble no se inquieta cuando está solo ni se deja desanimar si debe renunciar al mundo”. Los tiempos excepcionales donde lo grande predomina son semejantes a una inundación donde el lago crece sobre los árboles. Pero tales situaciones son pasajeras. Cada uno de los trigramas indica la conducta a seguir en tales momentos: la imagen de Sun es el árbol que resiste aun estando aislado, y el atributo de Tui es la serenidad alegre que nunca se desalienta, aun a pesar de que a veces deba renunciar al mundo. LAS LINEAS: Seis en la base significa: “Colocar debajo juncos blancos. Sin reproches” Cuando alguien debe emprender una acción en tiempos excepcionales debe proceder con una extrema precaución, como cuando se apresta a colocar algo pesado sobre el suelo, extendiendo antes una estera para impedir que algo se rompa. Esta prudencia puede parecer exagerada pero no constituye 92 una falta. Una empresa extraordinaria solo puede tener éxito si al principio se comienza actuando con una extrema precaución. O Nueve en el segundo lugar significa: “Un sauce seco retoña en sus raíces. Un hombre viejo toma una esposa joven. Todo es ventajoso”. El bosque se está al borde del agua, la imagen de un viejo sauce que retoña en sus raíces. Se trata de una reanimación extraordinaria del proceso de crecimiento. El agua está cerca de la madera. Se trata de una reanimación extraordinaria del proceso de crecimiento. De la misma manera se presenta una situación extraordinaria cuando un hombre viejo toma como mujer una muchacha joven que lo sigue. Pese a lo inusitado de la situación, todo marcha bien. Del punto de vista político, el significado corresponde a que en tiempos extraordinarios debemos unirnos incluso con los hombres de baja condición, puesto que en ellos reside la posibilidad de renovación. Nueve en el tercer lugar significa: “La viga cumbrera se rompe. Desgracia”. Aquí se representa a una persona que en tiempos de gran tensión y de cargas excesivas insiste en empujar y adelantarse a todo coste. No acepta advertencias de los otros y a su turno los otros no desean ayudarlo. La carga crece y bajo la estructura de las cosas puede arquearse o quebrarse. Tratar de adelantarse en estos tiempos de peligro sólo puede acarrear la catástrofe. O Nueve en el cuarto lugar significa: “La viga cumbrera está apuntalada. Buena fortuna. Si hay intensiones ocultas, es humillante”. Las relaciones amistosas con gente de rango inferior permiten al hombre responsable de conseguir el control de la situación. Pero si en lugar de asegurar el bienestar general este hombre quisiera abusar de esas relaciones para conseguir el éxito personal y tomar el poder, ello lo conducirá a la humillación. Nueve en el quinto lugar significa: “Un álamo marchito produce flores. Una mujer vieja toma marido. Sin reproches. Sin alabanzas”. Un álamo marchito que produce flores agota con ello su fuerza y apresura su fin. Una mujer vieja toma marido pero con ello no se renueva. Todo permanece estéril. Así, aunque todo suceda según las formas honorables, la anomalía subsiste. En el plano político, se muestra con ello que en tiempos de incertidumbre si uno renuncia a relacionarse con los inferiores y mantiene sólo relaciones con la gente de rango superior se crea con ello una situación que no es perdurable. Seis en la cima significa. “Se debe atravesar el agua. Pero el agua sobrepasa la cabeza. Desgracia. Sin reproches” 93 La situación indicada aquí es aquella donde lo extraordinario ha llegado al colmo. Se tiene el coraje por alcanzar la meta a todo precio, pero así se arriesga de una manera peligrosa. Uno se encuentra sumergido en el agua (es decir que los acontecimientos exceden sus propias capacidades). Esa es la desgracia. De todas maneras, dejar la vida con la intención de hacer triunfar lo bueno y lo justo es algo irreprochable. Hay cosas que son más importantes que la vida. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 2 9 . - K’ AN / LO IN S O NDA BLE ( e l a bismo, e l a g ua ) Superior : K'an, El Abismo, Agua Inferior : K'an, El Abismo, Agua El hexagrama se compone de la repetición del trigrama K’an. Es uno de los hexagramas dobles. El trigrama K’an significa la acción de hundirse bruscamente. La línea yang está sumergida entre dos líneas yin y se encuentra encerrada por ellas como el agua en un canal estrecho. Es el hijo menor. Lo receptivo ha adquirido la línea media yan de lo creativo : así nace K’an. Este trigrama tiene como imagen el agua en tanto que ella viene de lo alto y circula sobre la tierra en canales y ríos, siendo así la causa de la vida sobre la tierra. Aplicado a los hombres, K'an representa el corazón, el alma o la vida encerrada en el cuerpo, el principio de la luz incluido en lo tenebroso, la razón. El trigrama entraña peligro y su repetición significa “la repetición del peligro”. Con eso se quiere significar una situación objetiva a la uno debe acostumbrarse y eso no es una disposición subjetiva, puesto que el peligro, en tanto que disposición subjetiva, significa temeridad o perfidia. Como disposición objetiva también representa una garganta montañosa que el agua debe sortear, es decir que el peligro de la situación puede ser evitado o eludido con maña, como lo hace el agua, a condición de adoptar la conducta correcta. EL JUICIO: “Lo insondable repetido. Si eres sincero, conseguirás lo que quieres y obtendrás el éxito en lo que hagas”. A través de la repetición del peligro, uno termina por acostumbrarse a él. El agua da el ejemplo de conducta apropiado a las circunstancias. Va y viene, y llena todos los espacios por donde pasa. Ella no retrocede ante ningún peligro ni ninguna caída, nada la modifica y permanece fiel a su naturaleza 94 esencial. Si uno es sincero cuando se enfrenta a las situaciones difíciles, el corazón puede comprender el sentido de la situación. Si uno comprende este sentido y se adapta a él sinceramente, entonces naturalmente se encontrará la acción que lo lleve al éxito. Lo que cuenta en el peligro de una situación incierta es la actitud moral que cumple efectivamente todo lo que debe hacerse, y la marcha hacia adelante gracias a la cual no se sucumbirá al peligro por haberse demorado. El peligro reside en ir en contra de lo lógico, en menospreciar el peligro. El peligro puede tener gran importancia como medida de protección. El cielo posee su peligrosa altura para protegerlo contra los intentos de invasión, y la tierra tiene las aguas y las montañas qué con sus peligros separan los países. Los gobernantes también emplean el peligro para protegerse de los ataques externos y de toda agitación interior. LA IMAGEN: “Las aguas fluyen ininterrumpidamente y llegan a su meta: la imagen de lo insondable repetido. El hombre noble camina a través de la virtud y ejerce la función de la enseñanza”. El agua alcanza su meta fluyendo sin interrupción. Llena cada cavidad antes de seguir su curso. El hombre noble sigue el ejemplo del agua, adoptando una norma de conducta sólida y establecida. Aprecia que lo bueno se convierta en una propiedad permanente y sólida de su carácter y no solamente algo que depende del azar o del momento. Cuando se instruye a los otros, todo depende igualmente de la consistencia y la reiteración: es sólo por la repetición que la materia enseñada se convierte en un bien del alumno. (*) (*) Con su ejemplo, el hombre noble ejerce una función de enseñanza. LAS LINEAS: Seis en la base significa: “Repetición de lo insondable. En lo insondable uno cae en un abismo. Desgracia”. Acostumbrarse al peligro hace que el hombre fácilmente lo integre como una parte de sí mismo. Uno se familiariza con él y se acostumbra a lo malo. Se pierde de esta manera el buen camino y el infortunio es la consecuencia natural de esta situación. O Nueve en el segundo lugar significa: “El abismo es peligroso. Uno debe esforzarse solamente para obtener pequeñas cosas”. Cuando estamos en peligro no debemos tratar de librarnos inmediatamente de él sin mirar las consecuencias. Al principio debemos estar satisfechos de no haber sido vencidos por el peligro. Se deben considerar con calma las circunstancias del momento y conformarse con las cosas mínimas puesto que todavía un gran éxito no puede ser obtenido. También de la fuente surge 95 al principio un chorrillo de agua y le hace falta cierto tiempo para hacerse un camino hacia el espacio libre. Seis en el tercer lugar significa: “Adelante a atrás, abismo sobre abismo. En un peligro como éste, hacer una pausa y esperar, de otra manera caerás en un hoyo en el abismo. No te conduzcas así”. Todo paso hacia adelante o hacia atrás es peligroso. Escapar está fuera de cuestión. Es por eso que no debemos dejarnos arrastrar a la acción, ya que sólo lograremos hundirnos todavía más en el peligro. Aunque sea desagradable permanecer en una situación semejante, debemos detenernos y esperar hasta que una salida se insinúe. Seis en el cuarto lugar significa: “Un jarra de vino, una escudilla de arroz. Simples vasijas de barro tendidas a través de la ventana. Por cierto que no hay reproche en ello”. En los tiempos de peligro las formas ceremoniales se restringen. Lo que importa es una sincera disposición interior. Antes de ser empleado, se acostumbra que un funcionario presente las recomendaciones y los regalos de introducción. Pero aquí todo esta simplificado al extremo. Los regalos son modestos y el candidato no tiene a nadie que lo recomiende. Debe presentarse solo y no avergonzarse si sólo tiene el deseo sincero de ayudar a los demás en momentos de peligro. Todavía hay otra idea sugerida por este trazo: la venta es el lugar por el cual penetra la claridad en una habitación. Si se quiere aclarar a alguien en una situación difícil se debe comenzar por lo que es perfectamente claro y evidente y proceder simplemente a partir de ese punto. O Nueve en el quinto lugar significa: “El abismo no está lleno hasta desbordar sino que solo está lleno hasta la orilla. Sin reproches”. El peligro proviene del hecho de que se quiere ir demasiado alto. El agua no se acumula en los estrechos sino que llega solo al punto más bajo de la orilla. El hombre en peligro debe escoger la línea de menor resistencia, así alcanzará la meta. En esta época no pueden acometerse grandes tareas. Esto basta para alejar el peligro. Seis en la cúspide significa: “Limitado con cuerdas y cables, encerrado en entre los muros de una prisión erizada de púas. Por tres años no se logra encontrar el camino. Desgracia” Un hombre que pierde el buen camino (en los momentos) de peligro extremo y que permanece aferrado a sus pecados no tiene ninguna perspectiva de salir de la situación peligrosa. Se encuentra en la misma situación que un criminal cercado por los muros erizados de púas de una prisión. 96 30.- LI / LO ADHERENTE (Lo oscilante, el fuego) Superior : Li, Lo Oscilante, Fuego Inferior : Li, Lo Oscilante, Fuego Aquí se tiene igualmente un hexagrama doble. El trigrama Li significa “sujetarse a algo”, “estar condicionado”, “reposar sobre algo”, “claridad”. Una línea oscura se sujeta a una línea luminosa por arriba y por abajo, imagen de un espacio vacío entre dos líneas fuertes, lo que las hace claras a las dos. El trigrama representa a la hija del medio. El creador a puesto en ella la línea receptiva central, así nace Li, cuya imagen es el fuego. El fuego no tiene forma definida, pero oscila para intentar quemar el objeto que alumbra. De la misma manera que el agua desciende del cielo, el fuego sube flameante de la tierra. Mientras que Kan, el agua, significa el alma encerrada en el cuerpo, Li significa esplendor de la naturaleza. EL JUICIO: “Lo que adhiere. La perseverancia es ventajosa. Ella trae el éxito. Cuidar la vaca trae buena fortuna”. La oscuridad se sujeta a lo que es luminoso y perfecciona la claridad. Un cuerpo luminoso que esparce la claridad necesita tener en su interior algo que perdure para evitar ser consumido enteramente y brillar de una manera durable. Todo lo brillante que contiene el mundo depende de un elemento al cual se adhiere a fin de poder brillar durablemente. El sol y la luna están sujetos en el cielo, y el pasto, los cereales y los árboles, de la tierra. La claridad duplicada de un hombre puede iluminar el mundo entero. La vida humana sobre la tierra es condicionada, falta de libertad y cuando un hombre reconoce sus limitaciones y se coloca a sí mismo en dependencia con las armoniosas y benefactoras fuerzas del universo, obtiene el éxito. La vaca es el símbolo de la extrema docilidad. Cultivando en sí mismo una actitud de docilidad y voluntaria dependencia, el hombre adquiere una claridad sin sutilezas y encuentra su lugar en el mundo. LA IMAGEN “Lo que brilla se eleva dos veces: la imagen del fuego. El gran hombre, ilumina las cuatro regiones del mundo perpetuando esta claridad ”. Cada uno de los trigramas representa al sol en el curso del día. Ambos representan el movimiento repetido del sol, la función de la luz con respecto al tiempo. El hombre noble continúa el trabajo de la naturaleza en el mundo 97 de los hombres. A través de la claridad de su ser, hace que la luz se extienda cada vez más y penetre más profundamente en la naturaleza del hombre. LAS LINEAS: Nueve en la base significa: “Las huellas se entrecruzan. Si alguien lo intenta seriamente no habrá error”. Temprano en la mañana el trabajo comienza. La. mente ha estado cerrada al mundo exterior durante el sueño; ahora recomienza su conexión con el mundo. Las huellas de impresiones se entrecruzan. La actividad y la prisa prevalecen. Es importante preservar la propia compostura y no dejarse llevar por la agitación de la vida. Si se mantiene serio y compuesto se puede adquirir la claridad de mente necesaria para entender las cosas por confusas que aparezcan. Es precisamente al comienzo cuando es importante la seria compostura, ya que el comienzo lleva la simiente de lo que vendrá a continuación. O Seis en el segundo lugar significa: “Luz dorada. Suprema fortuna”. Llegó el mediodía. El sol brilla con una luz dorada. El dorado es el color de la medida y el entendimiento. También es el símbolo de la cultura y del arte, cuya suprema armonía llevan al equilibrio. Nueve en el tercer lugar significa: “En la luz del sol poniente el hombre puede sentir palpitar su marmita y cantar y escuchar suavemente cómo se aproxima la vejez. Desgracia”. El fin del día llega. La luz del sol poniente recuerda el hecho que la vida es transitoria. Capturado por sus obligaciones externas el hombre generalmente se ve despojado de su libertad sin darse cuenta. El sentido de transitoriedad de la vida inevitablemente lleva a tratar de aprovecharla mientras dure, o bien caer en la melancolía desperdiciando un tiempo precioso lamentándose por la vejez que se aproxima. Ambas actitudes están equivocadas. Para el hombre noble no hay diferencia en que la muerte llegue tarde o temprano. Se cultiva a sí mismo y aprovecha correctamente cada momento y así asegura su destino. Nueve en el cuarto lugar significa: “Viene de repente. Arde, muere, es rechazado”. La claridad de la inteligencia tiene las mismas relaciones con la vida que el fuego con el bosque. El fuego ilumina el bosque pero al mismo tiempo lo consume. La claridad de la inteligencia tiene sus raíces en la vida, pero ella también puede consumirla. Todo depende cómo se use esa claridad. Se tiene la imagen de un meteoro o de un fuego de paja. Un hombre de carácter inquieto y excitable se destaca rápidamente pero no deja efectos durables. En esas condiciones, es malo malgastarse demasiado rápido y consumirse como un meteoro. 98 O Seis en el quinto lugar significa: “Torrentes de lágrimas, suspiros y lamentos. Buena fortuna”. Aquí es la culminación de la vida. Si no recibiera una advertencia, alguien en esta situación se consumiría como una llama. Contemplando la vanidad de las cosas uno puede abandonar toda esperanza y temor, suspirar y gemir esforzándose en conservar la claridad interior. Así esta aflicción podrá cambiarse en fortuna. Aquí se trata de una verdadera conversión y no de un cambio efímero como era el caso del 9 en el tercer lugar. Nueve en la cima significa: “El rey lo emplea para vigilar y castigar. Es mejor matar a los dirigentes y capturar a los subordinados. Sin reproches”. El propósito del castigo no es imponer una penalidad sino crear disciplina. El mal puede ser erradicado en sus comienzos. En la vida política, es preferible eliminar a los jefes del complot pero perdonar a sus seguidores. Para perfeccionarse a sí mismo, es preferible eliminar nuestros malos hábitos y tolerar sólo los que son inofensivos. Una ascesis demasiado dura, así como un castigo demasiado brutal, no llevan a nada bueno. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 31.- HSIEN / LA INFLUENCIA ( El galanteo ) Superior : Tui, Lo Gozoso, Lago Inferior : Ken, La Inmovilidad, la Montaña. El nombre del hexagrama significa “universal”, “general”, y en sentido figurado influir, estimular. El trigrama inferior Ken, lo inmóvil y el superior Tui, lo gozoso. El trigrama inferior fuerte sensibiliza al trigrama superior débil ejerciendo sobre él una acción persistente tendiente a detenerlo, y el segundo trigrama responde con gustosa y alegremente a la invitación del primero. El trigrama inferior Ken, corresponde al hijo menor, y el superior Tui, a la hija menor. Así se encuentra representada la mutua y universal atracción entre los sexos. El hombre debe en ese sentido tomar la iniciativa y ubicarse bajo la mujer en el galanteo (pedido en matrimonio). De la misma manera que la primera parte del libro comienza con los hexagramas del cielo y de la tierra en tanto que fundamentos de todo lo que existe, la segunda parte comienza por un hexagrama representando el cortejo y el matrimonio en tanto que fundamentos de la vida social. EL JUICIO: 99 “Influencia. Éxito. La perseverancia es ventajosa. Tomar una doncella como esposa trae buena fortuna”. El elemento débil está arriba, el fuerte abajo. Mutuamente atraen sus fuerzas hasta unirse. Eso trae la victoria. En efecto, todo triunfo se funda sobre el efecto de atracciones mutuas. La tranquilidad interior que acompaña la alegría exterior hace que la satisfacción no sea excesiva sino que permanezca dentro de límites justos. Tal es el sentido de la indicación agregada: “la perseverancia es ventajosa”, puesto allí está la diferencia entre el cortejo hecho con el fin de un matrimonio, donde el hombre fuerte se ubica bajo la mujer débil, y la seducción. En ésta atracción, que se efectúa según las afinidades electivas, constituye una ley general de la naturaleza. El cielo y la tierra se atraen mutuamente y así todos los seres vienen a la existencia. El sabio obra sobre el corazón de los hombres por medio de una atracción análoga y la paz se establece en el universo. Se puede conocer la naturaleza de todas las cosas del cielo y de la tierra según las atracciones que ellas ejercen. LA IMAGEN: “Sobre la montaña hay un lago: la imagen de la influencia. Por su disposición a recibir el sabio hace que los hombres se le acerquen” Una montaña sobre la cual hay un lago obtiene de él un estímulo que proviene de su humedad y posee esta ventaja por el hecho de que su cima no es un pico sobresaliente sino una cavidad. La imagen aconseja estar interiormente dispuesto y libre, permaneciendo receptivo a los buenos consejos. La gente deja rápidamente de aconsejar a quien pretende saberlo todo. LAS LINEAS: Seis en la base significa: “La influencia se manifiesta a sí misma en el dedo grande del pie”. El movimiento, al iniciarse, se advierte primero en los pies. La idea de influencia está siempre presente, pero no se hace evidente a los demás. Mientras que la intención no tenga efectos visibles tampoco tiene importancia para el mundo exterior y no lleva en sí misma ni al bien ni al mal. Seis en el segundo lugar significa: “La influencia se manifiesta en las pantorrillas. Desgracia. Demorarse trae buena fortuna”. Las pantorrillas siguen el movimiento del pie. Ellas no pueden avanzar por sí mismas y tampoco pueden por ellas mismas permanecer en un lugar. Es un movimiento que no es autónomo, y porque no es autónomo trae el infortunio. Uno debe esperar tranquilamente hasta que una influencia efectiva lo lleve a la acción. Entonces uno puede salir ileso. 100 Nueve en el tercer lugar significa: “La influencia se muestra en los muslos. Detiene al que sigue. Continuar es humillante”. Cualquier variación del corazón influye en nuestros movimientos. Cuando el corazón desea, los muslos corren sin un momento de vacilación, obedeciendo al corazón. Aplicado a la vida humana, esta manera impulsiva de actuar bajo la influencia de un humor no es buena y a la larga trae la humillación. En ello está implícita una triple idea: no se debe correr precipitadamente detrás de las personas sobre las que uno quisiera ejercer influencia, sino que al contrario en ciertos casos uno debería retirarse. Tampoco uno debe ceder de inmediato y más de lo conveniente a todos los caprichos de las personas de las que uno depende y está al servicio. Y finalmente, al frente de las disposiciones de nuestro propio corazón, uno no debe renunciar a la posibilidad de reprimir, sobre la cual reside la libertad humana. O Nueve en el cuarto lugar significa: “La perseverancia trae buena fortuna. Los remordimientos desaparecen. Si un hombre tiene su mente agitada y sus pensamientos van de un lado a otro, sólo lo seguirán los amigos hacia los cuales dirige pensamientos conscientes”. Aquí se alcanza el dominio del corazón. El impulso que proviene de esta fuente es el más importante de todos. Hay que tratar especialmente de que esta influencia sea buena y constante; entonces, a pesar del peligro que encierra la versatilidad de los sentimientos del corazón, no habrá motivo de reproches. Cuando actúa la fuerza apacible de la personalidad de un hombre los efectos producidos son normales. Todos los hombres que son receptivos a las vibraciones de tal espíritu serán influenciados. La influencia sobre todos los demás no debe tomar la forma de un trabajo consciente y deliberado con el fin de manipularlos. Semejante agitación provoca solo un estado emocional limitado en el cual uno se dispersa sacudido por los sentimientos fluctuantes y sus efectos alcanzan solamente a los amigos a quienes la influencia se dirige de una manera consciente. Nueve en el quinto lugar significa: “La influencia se manifiesta en la nuca. Sin remordimientos”. La nuca es la parte más rígida del cuerpo. Cuando la influencia se manifiesta de esa manera, la voluntad permanece firme y su efecto no lleva a la confusión. Es por eso que aquí no hay lugar para el remordimiento. Lo que se produce en la profundidad del ser, en el subconsciente, no puede ser ni provocado ni impedido por el alma consciente. Es cierto que si alguien no es influenciable tampoco podrá influir en el mundo exterior. Seis en la cima significa: “La influencia se manifiesta en las mandíbulas, las mejillas y la lengua”. La manera más superficial de tratar de influir en los otros es con las meras palabras que no se apoyan en nada real. Tal excitación, producida solamente 101 por el aparato vocal, permanece necesariamente insignificante. Es por eso que nada se agrega concerniente al bien o al mal efecto (de esa influencia). O Trazo gobernante * Trazo constituyente 32.- HENG / LA DURACIÓN Superior : Chen, Lo que Despierta, Trueno Inferior : Sun, Lo Suave, Viento. El trigrama fuerte Chen está arriba y el trigrama débil Sun abajo. Este hexagrama es lo inverso del precedente, “la influencia”. Aquí la unión es un estado durable. Las imágenes son las del trueno y del viento que son igualmente fenómenos naturales que se presentan casi siempre asociados. El trigrama inferior indica suavidad en el interior, el trigrama superior señala un movimiento en el exterior. Aplicando estos signos a las relaciones sociales, estamos en presencia del matrimonio como una institución duradera de los sexos. Durante el cortejo, el hombre joven subordina a la muchacha, pero en el matrimonio, representado aquí por la reunión del hijo mayor y de la hija mayor, el marido se coloca al exterior dando dirección e impulso, mientras que la mujer permanece al interior suave y obediente. EL JUICIO: “Duración. Éxito. Sin reproches. La perseverancia es ventajosa. Conviene tener donde ir”. La duración es un estado cuyo movimiento no es anulado por los obstáculos. No se trata de un estado de descanso, ya que la mera detención significa regresión. La duración es más bien un movimiento que se cumple siguiendo leyes determinadas, coherente consigo mismo y además que se renueva constantemente; indica un movimiento enmarcado y organizado, firmemente centrado sobre él mismo, en el cual todo fin es seguido constantemente de un nuevo comienzo. El fin se indica por un movimiento de inhalación, sístole, contracción que lleva a un nuevo comienzo en que el movimiento va hacia afuera: exhalación, diástole, expansión. De este modo los cuerpos celestes se mueven en sus órbitas en el cielo y pueden brillar de una manera durable. Las estaciones se desarrollan siguiendo una ley fija de cambio y transformación y pueden en consecuencia obrar durablemente. Así el hombre que se siente concernido encarna una significación durable en su manera de vivir y el mundo recibe con ello una forma . A partir de lo que da la duración a las cosas, es posible reconocer la naturaleza de todos los seres en el cielo y sobre la tierra. 102 LA IMAGEN: “Trueno y viento: La imagen de la duración. El hombre noble permanece firme y no cambia de dirección”. Los truenos fluctúan y el viento sopla; ambos son ejemplos de extrema movilidad y parecen lo opuesto de la duración, pero las leyes que gobiernan su aparición y desaparición, su venida y su ida son durables. En la misma forma la independencia de un hombre noble no se basa en la rigidez e inmovilidad de su carácter. Siempre sigue los cambios del tiempo y se transforma con él. Lo que permanece es su conducta sin desvíos, la ley interna de su ser que determina todas sus acciones. LAS LINEAS: Seis en la base significa: “Buscar la duración prematuramente trae desgracia persistente. Nada que sea provechoso”. Lo que dura se crea gradualmente por trabajo largo y reflexión asidua. Lao Tsé dice en ese sentido: “Si se quiere comprimir algo, antes debe dejárselo dilatar libremente”. Aquel que exige demasiado en un primer intento actúa de manera precipitada y porque quiere tener demasiado, finalmente no obtendrá nada. O Nueve en el segundo lugar significa: “Los remordimientos desaparecen”. La situación es anormal. Un hombre fuerza su carácter más allá de las posibilidades materiales que dispone. Está temeroso de pretender ir más allá de sus fuerzas. Sin embargo, como se trata de la época de la duración, puede controlar su energía interior y no desgastarse en exceso. Entonces desaparecen los motivos de arrepentimiento. Nueve en el tercer lugar significa: “Quien no da duración a su carácter se encuentra con la desgracia. Humillación persistente”. Si un hombre está motivado por las esperanzas y temores provenientes del mundo exterior, se olvida de la consistencia propia de su carácter. Esta inconsistencia, invariablemente lleva a experiencias desastrosas. Estas humillaciones llegan a menudo de donde no se las esperaba. No es tanto el efecto del mundo exterior sino de las proyecciones de nuestra propia naturaleza. Nueve en el cuarto lugar significa: “No hay caza en el campo”. Si se quiere dar en el blanco cuando se está cazando hay que efectuar las acciones convenientes. Si se persiste en correr tras la caza en un lugar donde no la hay, se podrá esperar largo tiempo sin encontrarla. La duración 103 de una búsqueda no es suficiente. Si no se busca de la manera correcta no se encontrará. Seis en el quinto lugar significa: “Dar duración al propio carácter a través de la perseverancia. Esto es buena fortuna para la mujer e infortunio para el hombre”. Una mujer puede seguir a un hombre a través de toda su vida, pero el hombre debe siempre hacer lo que debe según sea el momento. Si quisiera acordar constantemente su conducta con la de la mujer, eso sería para el una falta. La persistencia conforma a la mujer pero es un error para él. De acuerdo con esto es correcto que la mujer busque conservar la tradición, pero el hombre debe ser flexible y adaptable y sólo dejarse guiar por su deber. Seis en la cima significa: “La impaciencia como condición duradera trae mala fortuna”. Hay personas que viven en un estado de perpetua impaciencia , sin que nada logre calmarlas. No solamente la impaciencia impide toda profundidad moral sino que se convierte en un peligro, especialmente en quienes están en posición de autoridad. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 33.- TUN / EL RETIRO (El repliegue) Superior : Ch'ien, Lo Creativo, Cielo Inferior : Ken, La Inmovilidad, la Montaña. El poder de la oscuridad está en ascenso. La luz se retira ante ella para ponerse en seguridad antes que la oscuridad pueda dominarla. En la retirada no se trata de una acción que obedece a la voluntad humana, sino más bien de una ley natural. Es por eso que en este caso retirarse constituye la manera correcta de actuar, que no desgasta las fuerzas. (La idea expresada en este hexagrama evoca la palabra de Jesús: “Y bien, yo les digo de no resistir al mal…” S. Mateo 5, 39) EL JUICIO: “Retirada. Éxito. En lo pequeño, la perseverancia es ventajosa”. 104 Las condiciones son tales que favorecen a las fuerzas hostiles en su avance, favorecidas por la época. En este caso, la retirada es el camino correcto y así se logra el éxito. Este retiro no debe confundirse con la huida, en que se intenta salvarse a cualquier precio. Hay que tener cuidado para no dejar pasar el momento propicio mientras uno permanece en posesión de su fuerza y de su posición. Entonces seremos capaces de interpretar los signos de la época antes de que sea demasiado tarde para preparar esa retirada provisoria en lugar de entablar un combate desesperado entre la vida y la muerte. Pero no se trata simplemente de una huída desesperada abandonando el campo de batalla al adversario, sino de hacerle el avance más difícil oponiendo todavía resistencia en puntos aislados. De esta manera en la retirada uno ya prepara la contra-ofensiva. No es fácil entender las leyes de una retirada activa. El significado que contiene tal acción es importante. LA IMAGEN: “Montaña bajo el cielo: la imagen de la retirada. El hombre noble mantiene al hombre inferior a distancia, sin cólera pero con reserva”. La montaña se erige hacia el cielo, pero está en su naturaleza que al final ella termine de erigirse. Por el contrario, el cielo se retira hacia lo alto antes que ella de manera que permanece inalcanzable. Es la imagen de la manera como debe conducirse el hombre noble con relación al hombre vulgar que se levanta. Se recoge en sí mismo superando siempre al inferior. No lo odia, porque el odio es una especie de participación por la cual uno se liga al objeto odiado. Con dignidad, el hombre noble muestra su fuerza (el cielo) obligando al hombre vulgar a quedarse inmóvil (la montaña). LAS LINEAS: * Seis en la base significa: “En la cola durante la retirada. Es peligroso. No debe desearse emprender nada”. El hexagrama muestra algo que se retira, el primer trazo es la cola y el trazo superior es la cabeza. Durante la retirada es conveniente estar adelante. Aquí está el peligro porque se esta atrás, en contacto directo con los perseguidores hostiles. En tales circunstancias peligrosas no es favorable emprender algo. Es deteniéndose que se tienen las mejores chances de escapar al peligro que amenaza. * Seis en el segundo lugar significa: “Lo retiene firmemente con un cuero de buey amarillo. Nadie puede hacerle soltar la presa”. Amarillo es el color del centro. Indica lo que es correcto, conforme al deber. El cuero de buey es sólido e irrompible. Mientras que los hombres nobles se retiran perseguidos por los hombres vulgares, se muestra a uno de éstos que se aferra a los hombres superiores tan firmemente que éstos no pueden deshacerse de él. Y porque lo que él pretende es justo y que se mantiene 105 firme en su voluntad de conseguirlo, alcanza su cometido. Es así que este trazo confirma el dictamen del juicio: “En lo pequeño (es decir en este caso para los hombres vulgares), la perseverancia es ventajosa”. Nueve en el tercer lugar significa: “Una retirada interrumpida es molesta y peligrosa. Retener a la gente tales que sirvientes y criados trae buena fortuna”. Cuando ha llegado el momento de retirarse y uno es retenido, se encuentra en una situación molesta y peligrosa, puesto que uno está privado de la libertad de actuar. En tal caso, la única solución consiste a tomar de alguna manera, a nuestro servicio la gente que nos impide retirarnos, con el fin de conservar por lo menos la iniciativa y de no pasar indefensos bajo su poder. Sin embargo, a pesar de esa sea una solución, no tiene nada de placentera. ¿Qué podemos esperar de tales servidores? Nueve en el cuarto lugar significa: “La retirada voluntaria trae buena fortuna al hombre noble y ruina al hombre vulgar”. Cuando hay que retirarse, el hombre noble acepta la separación de una manera voluntaria y amistosa. Además, no le resulta difícil adaptarse interiormente a la retirada porque con ello no hace violencia a sus convicciones. Quien sufre por ello es la comunidad de la cual él se retira, y que se deteriora sin la guía de los hombres nobles. O Nueve en el quinto lugar significa: “Retirada amistosa. La perseverancia trae buena fortuna”. Es un asunto del hombre noble reconocer a tiempo que el momento de la retirada ha llegado. Cuando se elige el momento oportuno para retirarse, la operación puede efectuarse de forma amistosa y sin das lugar a explicaciones desagradables. Pero aunque sea indispensable observar las formas exteriores, es necesaria la firmeza absoluta de la resolución para evitar extraviarse con argumentos irrelevantes. Nueve en la cima significa: “Retirada alegre. Todo es favorable”. La situación es inequívoca. El desprendimiento interior es un hecho establecido. Se tiene en consecuencia la libertad de partir. Cuando se ve el camino ante sí de una manera tan clara e indudable, se instala en el alma una alegre tranquilidad y se elige sin titubear lo que es más conveniente. Tal camino lleva siempre a lo bueno. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 106 34.- TA CHUANG / EL PODER DE LO GRANDE Superior : Chen, Lo que Despierta, Trueno Inferior : Ch'ien Lo Creativo, Cielo Las líneas fuertes, luminosas, son potentes. Cuatro líneas luminosas entran en el hexagrama por abajo y se aprestan a proseguir su ascensión. El trigrama superior es Chen, lo que despierta, el trueno; el inferior es Ch’ien, lo creativo, el cielo. Lo creativo es fuerte y lo que despierta incita al movimiento. La unión de la fuerza y el movimiento da el sentido de “poder de lo grande” Este hexagrama está asignado al 2° mes (abril-mayo). EL JUICIO: “El Poder de lo grande. La perseverancia es ventajosa”. El hexagrama se refiere a una época donde el valor interior sube con fuerza y llega al poder. Pero la fuerza ya superó la línea media. Es por eso que existe el riesgo que uno confíe demasiado en su propia fuerza sin preguntarse en cada instante donde está el bien, y también que se quiera actuar sin esperar el momento oportuno. Por eso se agrega que la perseverancia es ventajosa. Para que el poder de lo grande no degenere en pura violencia es necesario que permanezca estrechamente unido a los principios del derecho y de la justicia. Si se comprende que la grandeza y la justicia deben estar inseparablemente unidas, se entiende el verdadero sentido de todo lo que pasa en el cielo y sobre la tierra. LA IMAGEN: “Trueno está arriba, en el cielo. La imagen del poder de lo grande. El hombre noble no marcha por caminos que no están conformes con el orden”. El trueno, la energía eléctrica, tiene un movimiento ascendente en la primavera. Este movimiento está en armonía con el cielo. Es entonces un movimiento en armonía con el movimiento del cielo lo que produce el gran poder. Pero la verdadera grandeza reside en la conformidad con lo que es justo. Es por eso que en los tiempos de gran poder el hombre noble evita hacer todo lo que no esté en armonía con el orden. LAS LINEAS: Nueve en la base significa: “Poder en los Pies. Continuar trae desgracia. Eso es ciertamente verdadero”. 107 Los pies están en la más baja posición y están listos para avanzar. Así como el gran poder, cuando ocupa un lugar inferior, tiende a provocar por la fuerza un movimiento hacia adelante. Pero si se continúa de esta manera, seguramente ello llevará al infortunio. Es por eso que la advertencia va a guisa de consejo. Nueve en el segundo lugar significa: “Perseverancia trae buena fortuna”. La situación presupuesta aquí es aquella donde las puertas al éxito comienzan a entreabrirse. La resistencia despeja el camino y se avanza rápidamente. Es el punto donde se cae demasiado fácilmente en una presunción exagerada. De allí que el oráculo indique que la perseverancia, es decir el equilibrio interior sin el uso exclusivo del poder, trae la buena fortuna. Nueve en el tercer lugar significa: “El hombre vulgar actúa usando la fuerza, el hombre noble no actúa así. Continuar es peligroso. Un chivo arremete contra un cerco y sus cuernos quedan atrapados”. Jactarse de su poder lleva a complicaciones. Así lo muestra el ejemplo del chivo que arremete contra un cerco haciendo que sus cuernos queden atrapados. Mientras que el hombre vulgar que detiene el poder se deja embriagar por su por su triunfo, el hombre noble no actúa de esa manera, sino que permanece consciente del peligro que representa querer avanzar sin precaución y a todo precio, y sabe renunciar a tiempo a desplegar abiertamente su fuerza. O Nueve en el cuarto lugar significa: “Perseverancia trae buena fortuna. Los remordimientos disminuyen. El cerco se abre sin complicaciones. El poder radica en el eje de un gran carro. Cuando se trabaja con calma y perseverancia para vencer las resistencias finalmente se alcanza el éxito. Los obstáculos ceden y desaparecen los remordimientos ocasionados por el uso excesivo del poder. No es necesario que la fuerza se manifieste exteriormente, aunque sea capaz de mover cargas pesadas, como en un gran carro, cuya poder reside en el eje. Mientras menos se exterioriza la fuerza, más potentes son sus efectos. Seis en el quinto lugar significa: “Pierde el chivo fácilmente. Sin remordimientos”. El chivo se destaca por su robustez exterior y por su debilidad interior. En la situación presente todo se hace fácil, no hay más resistencias. Se puede entonces abandonar la naturaleza belicosa, semejante a la del chivo, y no habrá de qué arrepentirse. Seis en la cima significa: “Un chivo embiste un cerco. No puede avanzar ni retroceder. Nada es ventajoso. Pero si se reconoce la dificultad, eso trae la buena fortuna”. 108 Si nos aventuramos demasiado lejos podemos estancarnos, incapaces de avanzar o retroceder y todo lo que hagamos sólo complicará aun más las cosas. Tal obstinación acarrea dificultades insuperables. Si analizando la situación nos apaciguamos y decidimos no continuar, todo se corregirá en el momento oportuno. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 35.- CHIN / EL PROGRESO Superior : Li, Lo Oscilante, Fuego Inferior : K'un, Lo Receptivo, Tierra. El hexagrama representa el sol naciendo sobre la tierra. Es el símbolo de la rapidez, del progreso rápido y fácil que al mismo tiempo significa claridad y expansión creciente y amplia. EL JUICIO: “Progreso. El Príncipe Poderoso es honrado con numerosos de caballos. En un solo día es recibido tres veces en audiencia”. Como ejemplo de progreso se recurre a la figura de un poderoso príncipe feudal reúne todos los otros príncipes en torno del soberano en paz y obediencia. El soberano le ofrece entonces ricos presente y lo atrae en su entorno inmediato. La idea es doble. El impulso que determina el progreso emana de un hombre ubicado en una posición subordinada en quien los otros consideran como su semejante, lo que hace que lo sigan de buena voluntad. Este caudillo posee suficiente claridad interior para no abusar de la gran influencia que él ejerce y para utilizarla en provecho del soberano. Éste, por su parte, está libre de celos, ofrece ricos presentes al gran hombre y lo atrae constantemente a su corte. Un gobernante esclarecido y un servidor obediente, tales son las condiciones de un gran progreso. LA IMAGEN: “El sol nace sobre la tierra. La imagen del Progreso. El hombre noble hace brillar por sí mismo sus propias disposiciones luminosas”. La luz del sol que se eleva sobre la tierra es naturalmente brillante. Mientras más se eleva el sol, más se desprende de las sombras y de las brumas proyectando la pureza original de sus rayos sobre una más amplia extensión. Así, la verdadera naturaleza del hombre es buena en su origen, 109 pero ella es enturbiada por el elemento terrestre, y en consecuencia, pide ser purificada con el fin de brillar con su claridad primitiva. LAS LINEAS: Seis en la base significa: “Progresando, pero volviendo atrás. La perseverancia trae buena fortuna. Si alguien no encuentra confianza debe permanecer en calma. Sin error”. En un tiempo donde todos los elementos empujan al progreso, podemos todavía estar inseguros si al avanzar no nos exponemos al rechazo y estemos obligados a volver atrás. Entonces, lo más simple es continuar haciendo lo correcto; eso, al fin, trae la buena fortuna. Puede ocurrir que no encontramos la confianza; no debemos tratar de ser reconocidos a cualquier precio sino permanecer en calma y sin temor a que nos acose la ansiedad. Así permaneceremos libres de error. Seis en el segundo lugar significa: “Progresando pero con tristeza. La perseverancia trae buena fortuna. Se obtiene gran felicidad de un antepasado”. El progreso se detiene. Se encuentran impedimentos para unirse con el hombre que ocupa un puesto de autoridad con el cual se está relacionado. Eso trae la tristeza. Cuando esto sucede se debe perseverar y finalmente el hombre en cuestión, con una dulzura maternal nos brindará una gran felicidad. Sobreviene esta felicidad de una manera merecida, porque esta mutua atracción no está cimentada sobre motivos egoístas, sino en principios firmes y correctos. Seis en el tercer lugar remordimiento desaparece”. significa: “Todos están de acuerdo. El Uno se esfuerza por avanzar en compañía con otras personas cuyo acuerdo nos alienta. No habrá motivo para remordimientos por el hecho que uno no tiene bastante autonomía como para triunfar solo contra todo destino adverso. Nueve en el cuarto lugar significa: “Progresa como una ardilla. La perseverancia trae peligro”. En tiempos de progreso, ciertos hombres fuertes que ocupan lugares que no merecen pueden amasar una gran cantidad bienes. Pero tal conducta es tenebrosa. Y como los tiempos de progreso son siempre también tiempos donde el sol saca a luz las maniobras tenebrosas, obstinarse en tal manera de actuar trae con ella necesariamente el peligro. O Seis en el quinto lugar significa: “Los remordimientos desaparecen. No tomar a pecho ni la ganancia ni la pérdida. Las empresas traen buena fortuna. Todo sirve al progreso”. 110 Aquí se describe la situación de alguien que encontrándose en una posición influyente en una época de progreso permanece gentil y reservado, Puede reprocharse a sí mismo de no haber suficientemente utilizado el aspecto favorable de la época y de no haber obtenido todas las ventajas posibles. Pero este remordimiento se disipa. No se deben tomar a pecho ni las ganancias ni las pérdidas porque son cosas secundarias. Es más importante de asegurarse de esta manera la posibilidad de efectuar obras ricas en realizaciones y en bendiciones. Nueve en la cima significa: “Progresar arremetiendo (a cornadas) está permitido sólo con el propósito de castigar su propio dominio. Estar consciente del peligro trae buena fortuna. Sin reproches. La perseverancia trae humillación”. Progresar embistiendo con los cuernos, es decir avanzar de manera agresiva es una actitud que por la fuerza sólo se permite para enmendar los errores cometidos por la propia gente, siempre hay que tener en cuenta que este procedimiento puede ser peligroso. La perseverancia en una conducta tan enérgica, especialmente contra personas con quienes no se tiene una relación estrecha, lleva a la humillación. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 36.- MING / OSCURECIENDO LA LUZ Superior : K'un, Lo Receptivo, Tierra. Inferior : Li, Lo Oscilante, Fuego. El sol se ha hundido bajo la tierra y se ha oscurecido. El nombre del hexagrama significa literalmente “hiriendo a la luz”. Un hombre de naturaleza oscura está en posición de autoridad y trae perjuicio al hombre sabio y capaz. La situación es inversa a la representada en el hexagrama anterior (N° 35, el Progreso), en la que un hombre sabio que tiene asistentes de valor en compañía de los cuales progresa. Aquí la autoridad está ocupada por un hombre tenebroso que trae perjuicios al hombre hábil y virtuoso. EL JUICIO: “Oscureciendo la luz. En la adversidad conviene ser perseverante”. No debemos dejarnos agobiar por las circunstancias desfavorables, doblegar nuestra voluntad y darse por vencido en estas circunstancias desfavorables doblegando nuestra resolución. Ello es posible cuando se mantiene la luz 111 interior y se es flexible y adaptable al exterior. A través de esta actitud lograremos superar las mayores adversidades. En algunas situaciones habrá que esconder la luz, para hacer prevalecer su voluntad pese a las dificultades que nos rodean. La perseverancia debe estar profundamente arraigada en la consciencia sin que se la distinga desde afuera. Sólo así el hombre puede mantener su voluntad intacta en medio de las dificultades. LA IMAGEN: “La luz se ha sumergido en la tierra. La imagen de oscureciendo la luz. El hombre noble para vivir con la multitud vela su luz pero sigue brillando”. En tiempos de oscuridad, cautela y reserva son esenciales. No hay necesidad de despertar la enemistad por una conducta desconsiderada. Pero tampoco hay que caer en las prácticas de los demás. En las relaciones sociales, no se debe tratar de saberlo todo ni tratar de poner todo en claro con críticas. Hay que dejar pasar muchas cosas y dejarlas como ellas son, como si hubiéramos sido engañados. LAS LINEAS: Nueve en la base significa: «Oscureciendo la luz durante el vuelo. Abate sus alas. El hombre noble no come durante tres días en sus viajes, pero tiene un lugar donde ir. El huésped tiene ocasión de chismorrear acerca de él». El hombre resuelve superar todos los obstáculos, pero se topa con un destino hostil. Se retrae y evade el enfrentamiento. La época es difícil. Sin descanso, se apresura, pasando de una cosa a otra sin lugar donde poder permanecer. Si no quiere comprometerse y permanecer fiel a sus principios debe sufrir privaciones. En todo caso, mismo teniendo una meta precisa, la gente que encuentra podrá no entenderlo y hablará mal de él. O Seis en el segundo lugar significa: “El oscurecimiento de la luz le hace daño en el muslo izquierdo. Da ayuda con la fuerza de un caballo. Buena fortuna”. Aquí el Señor de la Luz se encuentra aquí en un lugar subordinado y es herido por el Señor de la Oscuridad. El daño no es fatal ni pone su vida en peligro, sino que es sólo una herida. El rescate es posible. El hombre herido no piensa en sí mismo, sino sólo en salvar a los demás que también están en peligro. Trata con todas sus fuerzas de salvar lo que puede ser salvado. La buena fortuna viene cuando se actúa conforme al deber. Nueve en el tercer lugar significa: “Oscureciendo la luz durante la caza en el sur. El gran caudillo es capturado. No debe esperarse perseverancia demasiado pronto”. Parece que la suerte trabajara. Cuando el hombre fuerte y leal trata ansiosamente y de buena fe de crear el orden, se encuentra de manera 112 aparentemente azarosa con el caudillo del desorden y lo captura. La victoria es obtenida. Pero no hay que apresurarse demasiado en hacer desaparecer los abusos. Sería prematuro porque los abusos llevan ya una larga existencia. Seis en el cuarto lugar significa: “Penetra por el lado izquierdo del vientre. Se llega al verdadero corazón del oscurecimiento de la luz y se deja la puerta y la corte”. Llegamos hasta quien comanda la oscuridad y descubrimos sus más secretos pensamientos. Por este camino nos damos cuenta que no hay más esperanzas de progreso y se está en condiciones de abandonar la escena del desastre antes que éste se desate. O Seis en el quinto lugar significa: “Oscureciendo la luz como en lo del príncipe Chi. La perseverancia fructifica”. El Príncipe Chi vivía en la corte de un malvado tirano; era pariente de él y no podía alejarse de la corte. Por eso disimulaba sus sentimientos virtuosos y falsificaba lo insensato fingiendo la locura. Fue tratado como esclavo, pero prefirió la miseria a desistir de sus convicciones. Esto es un ejemplo para quienes no quieren abandonar sus puestos en tiempos de oscuridad. Para escapar al peligro se requieren una invencible perseverancia interior y redoblada prudencia. * Seis en la cima significa: “No luz, sino oscuridad. Primero trepa hacia el cielo y luego cae en las profundidades de la tierra”. Se alcanzó la cúspide del oscurecimiento. El poder de la oscuridad al comienzo ocupa un lugar tan alto que puede herir a todo lo que esté en el lado de lo bueno y luminoso. Pero al final perece en su propia oscuridad, justo cuando estaba a punto de superar a lo bueno y así consume totalmente la energía a la que debía su existencia. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 37.- CHIA JEN / LA FAMILIA ( El parentesco ) Superior : Sun Lo Suave, Viento Inferior : Li Lo Oscilante, Fuego El hexagrama representa las leyes que rigen dentro de la familia. La línea más alta representa al padre y la más baja al hijo. La ubicada en quinto 113 lugar, al esposo, y la del segundo, a la esposa. Las otras dos líneas corresponden a un hermano y su mujer. Todas las relaciones y situaciones existentes en una familia tienen su lugar en este hexagrama. Por ejemplo, los trazos fuertes del 5° y del 3° lugar corresponden a dos hermanos, mientras que los trazos débiles del 4° y del 2° lugar representan sus respectivas mujeres. La presencia de un trazo fuerte en 6to. lugar donde podría esperarse un trazo débil designa de manera clara la autoridad que emana del jefe de la familia. Este trazo no entra aquí en tanto que 6to. lugar sino en tanto que trazo superior que engloba a todos los otros. La familia está regida por leyes que rigen la vida de una casa; leyes que, se aplican también al clan, al pueblo y al universo. La influencia que se ejerce desde el interior de una familia hacia el exterior está representada por la imagen del viento que atiza el fuego. EL JUICIO: “La familia. La perseverancia de la mujer es ventajosa”. La familia tiene por fundamentos las relaciones entre el esposo y la esposa. El lazo que mantiene la unidad de la familia es la fidelidad y la perseverancia de la mujer. El lugar de ésta en el interior (2° trazo) y el del hombre está al exterior (5° trazo). El hombre y la mujer se deben conformar con las grandes leyes de la naturaleza ocupando el lugar que les corresponde. La familia necesita tener una autoridad firme, la de los padres. Cuando el padre es verdaderamente padre y el hijo verdaderamente hijo, cuando el hermano mayor ocupa su lugar de hermano mayor y el menor el lugar del menor, el esposo es verdaderamente esposo y la esposa verdaderamente esposa, entonces reina el orden en la familia. Cuando la familia está en orden, todas las relaciones sociales de la humanidad se ordenan. Tres de las cinco relaciones sociales tienen lugar en el interior de la familia: padre e hijo relación de amor-, entre el marido y la mujer -relación de respeto- y entre el hermano mayor y el menor -relación de orden. El amor que une al padre y al hijo se traduce socialmente por la fidelidad por el deber. La afección y el orden que reinan entre los hermanos son aplicadas a la amistad bajo el aspecto de lealtad y la actitud hacia los superiores bajo la forma de deferencia. La relación respetuosa entre los esposos se traduce como la solidaridad que sirve de cohesión social. La familia es la célula inicial de la sociedad, el terreno donde se sustenta el ejercicio de los deberes morales. La familia es un círculo estrecho donde se encuentran en estado embrionario las bases a partir de las cuales serán creadas todas las relaciones humanas en general. LA IMAGEN: “El viento viene con fuerza del fuego. La imagen de la familia. El hombre noble da sustancia a sus palabras y duración a su manera de vivir”. El calor se transforma en fuerza, tal es el significado del viento que sale del fuego con forma de llama. Es la influencia que actúa del interior hacia el 114 exterior. La misma actitud es necesaria en el gobierno de la familia. Aquí la influencia emana igualmente de la personalidad para ejercerse sobre los otros. Para que tal acción sea posible, es necesario que las palabras tengan fuerza, pero ello es así solamente si ellas se sustentan sobre algo real, como la llama sale de la materia ardiente. Las palabras solo tienen influencia cuando son pertinentes y se relacionan claramente a una situación determinada. Los discursos y las advertencias generalmente no tienen efecto. Además las palabras deben estas sostenidas por el conjunto de la conducta, de la misma manera que el viento actúa de manera eficaz cuando es durable. Solo una actividad firme y consecuente hará una impresión sobre los demás, porque ellos podrán acomodarse y regularse de acuerdo a ella. Si las palabras y las actitudes no son concordantes y consecuentes unas de las otras, ellas no tendrán ninguna influencia ni efecto. LAS LINEAS: Nueve en la base significa: “Neta distinción en el interior de la familia. Los remordimientos desaparecen”. La familia debe ser una unidad claramente definida en el interior de la cual cada miembro debe conocer su lugar. Desde el principio, los niños deben acostumbrarse a reglas precisas, antes que su voluntad haya tomado otra dirección. Si se comienza demasiado tarde a introducir el orden, la voluntad de los jóvenes ya ha contraído malas habitudes. Los humores y las pasiones, cuando ya han crecido, crean obstáculos y dan motivo de reproches. Ciertamente las ocasiones de reproches también pueden aparecer cuando se comienza a tiempo a imponer las reglas puesto que la vida en común las hace inevitables. Pero el remordimiento desaparece cuando las cosas de aclaran y todo se arregla. Nada es más fácil de eludir y difícil de realizar que la tarea de “doblegar la voluntad” de los niños. O Seis en el segundo lugar significa: “Ella no debe seguir sus caprichos. Debe ocuparse de los alimentos en el interior. La perseverancia trae buena fortuna”. La mujer debe ser guiada por la voluntad del dueño de casa, sea el padre, marido o hijo mayor. Su lugar está en el centro de la casa. Allí tiene, sin buscarlos, grandes e importantes deberes. Debe preocuparse de la alimentación de los miembros de la familia y preparar las ofrendas dedicadas a los sacrificios. Así se convierte en el centro de la vida social y religiosa de la familia y su perseverancia trae buena fortuna a todo el hogar. Aplicado a la conducta social en general, este consejo se refiere a no tratar de obtener nada por la fuerza sino limitarse tranquilamente a cumplir con los deberes inmediatos. Nueve en el tercer lugar significa: “Cuando los ánimos se caldean en la familia la severidad excesiva acarrea remordimientos. La buena fortuna se aleja. Cuando mujer y niño retozan y ríen, al final conduce a la humillación”. 115 En la familia debe dominar un justo medio entre indulgencia y severidad. Una severidad excesiva dentro de la familia conduce al remordimiento. Lo mejor es edificar barreras sólidas en el interior de las cuales se deja la plena libertad de movimiento de los individuos. De todas maneras, en los casos dudosos, resulta preferible la severidad excesiva que permite conservar la disciplina a pesar de los desaciertos. La excesiva debilidad conduce a la humillación. Seis en el cuarto lugar significa: “Ella es el tesoro de la casa. Inmensa fortuna”. De la dueña de casa depende el bienestar de la familia. La prosperidad reina siempre cuando los gastos y los ingresos se equilibran satisfactoriamente. Eso conduce a la gran fortuna. En lo relativo a la vida social, el oráculo se refiere a una intendencia correcta cuyas medidas favorecen el bienestar general. O Nueve en el quinto lugar significa: “Como un rey se acerca a su familia. Sin temor. Buena fortuna”. El rey es la imagen de un hombre paternal y dotado de riqueza interior. No hay motivo para temerle sino que la familia entera tenga confianza en él puesto que es el amor que rige las relaciones. Su naturaleza ejerce espontáneamente la influencia justa. Nueve en la cima significa: “Su trabajo inspira respeto. Al final llega la buena fortuna”. En el último análisis, el orden dentro de la familia depende del carácter del dueño de casa. Si cultiva su personalidad, de manera que su influencia se imponga por la fuerza de su verdad interior, todo marcha bien en la familia. Cuando se ocupa una posición directiva se deben asumir espontáneamente las responsabilidades. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 38.- K'UEI / LA OPOSICIÓN Superior : Li Lo Oscilante, Llama Inferior : Tui Lo Gozoso, Lago 116 El hexagrama se compone del trigrama superior Li, el fuego, la llama que flamea hacia lo alto, y del trigrama inferior Tui, el lago, la humedad que se infiltra hacia lo bajo. Se trata de dos movimientos en contraste directo. Li corresponde a la hija mayor y Tui a la hija menor, que viven en la misma casa pero que pertenecen a distintos hombres; sus deseos no son los mismos sino que divergen. EL JUICIO: “Oposición. En asuntos pequeños, buena fortuna”. Cuando la gente vive en oposición y aisladamente, no puede realizar grandes empresas en común. Sus puntos de vista difieren demasiado. En tales circunstancias no debe procederse bruscamente, con lo que sólo se aumentaría la oposición existente, sino limitarse solamente a producir efectos graduales en asuntos de poca importancia. Sin embargo, en esta situación todavía puede esperarse el éxito, puesto que la oposición no excluye toda comprensión. En general, la oposición que aparece como una obstrucción en tanto que polaridad de elementos de un conjunto, tiene su función buena e importante. Las oposiciones de cielo y tierra, espíritu y naturaleza, u hombre y mujer, cuando logran ser conciliadas, realizan la creación y la eclosión de la vida. En el mundo de cosas visibles, la oposición hace posible la diferencia por especies y categorías gracia a la cual el orden se establece en el mundo. LA IMAGEN: “Arriba, el fuego, abajo, el lago: la imagen de la oposición. En medio de cualquier compañía el hombre noble mantiene su individualidad”. Los dos elementos, fuego y agua, nunca se mezclan y cuando están en contacto conservan sus esencias propias. El hombre culto nunca permitirá asemejarse a aquellos cuya naturaleza difiere de la suya. En las relaciones y los intereses comunes que pueda tener con ellos, él mantendrá siempre su propia individualidad. LAS LINEAS: Nueve en la base significa: “Los remordimientos desaparecen. Si pierdes tu caballo, no corras tras él; volverá por su propia voluntad. Cuando veas gente malvada, protégete contra los errores”. Aunque la oposición domine pueden evitarse los errores y por ende los remordimientos. Cuando la oposición comienza a manifestarse, no se debe tratar de conseguir la unidad por la fuerza porque sólo se logrará lo contrario. tal como un caballo que se aleja cada vez más cuando uno corre tras él. Si se trata del propio caballo, puede dejársele ir con confianza: volverá por sí mismo. Cuando alguien se aleja momentáneamente de nosotros a causa de un malentendido, también volverá por sí mismo, si lo 117 dejamos actuar espontáneamente. (*) Por otra parte, es bueno ser cauteloso cuando el mal pueda asechar. Es importante evitar los errores y no pretender separarlos por la fuerza a riesgo de provocar la hostilidad, sino soportarlos con paciencia puesto que ellos se retirarán por sí mismos. (*) Quien se va sin que lo echen, vuelve sin que lo llamen. (Refrán español) O Nueve en el segundo lugar significa: “Uno encuentra a su señor en una calle estrecha. Sin reproches”. Por causa de malentendidos resulta imposible que la gente unida por su naturaleza semejante pueda reunirse de manera correcta. Pero un encuentro informal puede servir al mismo propósito, siempre que subsista la afinidad esencial. Seis en el tercer lugar significa: “Se ve que el carro tira en contra, los bueyes se detienen, un hombre con el pelo y la nariz cortados. No hay un buen comienzo pero sí un buen final”. A menudo pareciera que todo conspirara contra nosotros. Nos vemos impedidos y contrariados para progresar, acosados, insultados, vejados. (Cortar el pelo y la nariz constituían castigos graves y humillantes) Pero no debemos dejarnos apartar del camino y a pesar de la oposición, debemos mantenernos unidos con aquellos que de los cuales conocemos sus valores. Así, a pesar del mal comienzo, el final será bueno. Nueve en el cuarto lugar significa: “Aislado por la oposición, uno encuentra a alguien de con ideas semejantes con el cual uno puede relacionarse en confianza. Ningún reproche a pesar del peligro”. Cuando uno se halla en compañía de gente con la cual uno se siente separado por una oposición interior, uno se encuentra aislado. Si en tal situación uno encuentra a alguien con quien tenga similitudes fundamentales y en quien pueda confiar completamente, uno puede superar todos los peligros del aislamiento. Nuestra voluntad logra lo propuesto y estamos libres de reproches. Seis en el quinto lugar significa: “Los remordimientos desaparecen. El compañero encuentra su camino mordiendo a través de los velos. Si uno va hacia él ¿Cómo sería eso un error?”. Se encuentra alguien sincero al cual uno reconoce en primer lugar por el alejamiento que lo diferencia de todo lo demás. Pero él se traza un camino rasgando los velos que causan la separación. A quien un compañero semejante muestra du verdadera naturaleza, es un deber ir a su encuentro y trabajar con él. Nueve en la cima significa: “Aislado a través de la oposición, uno ve a su compañero como un cerdo cubierto de mugre, como un carro lleno de 118 demonios. Primero se dispara el arco contra él. Después se deja el arco a un lado. No es un bandolero; quiere llegar en el momento exacto. Durante la marcha, la lluvia cae y llega la buena fortuna”. El aislamiento se debe a malentendidos. No se debe a circunstancias exteriores sino a disposiciones interiores. Se desprecia a sus mejores amigos tomándolos por cerdos sucios, impuros y peligrosos como un carro lleno de demonios. Se adopta una actitud defensiva. Finalmente uno se da cuenta de su error, deja su arco a un lado convencido de que el otro se acerca con las mejores intenciones para consumar una unión estrecha. La tensión se alivia, disuelta por la unión, tal como la lluvia disipa el calor asfixiante que reinaba antes de la tempestad. Todo marcha bien, puesto que es en el punto más crítico que la oposición se transforma en su contrario. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 39.- CHIEN /EL OBSTÁCULO (La obstrucción) Superior : K'an El Abismo, Agua Inferior : Ken La Inmovilidad, la Montaña. El hexagrama pinta un abismo peligroso que se abre ante nosotros y muy cerca adelante nuestro una montaña que se levanta abrupta e inaccesible. Estamos rodeados por obstáculos. Pero la propiedad de la montaña, que es la inmovilidad, sugiere igualmente la manera como uno puede liberarse de la obstrucción. El hexagrama representa los obstáculos que aparecen en el curso del tiempo pero que pueden y deben ser superadas. Todas las indicaciones que se dan tienen por consecuencia la manera de vencer esos obstáculos. EL JUICIO: “Obstrucción. El suroeste es ventajoso. El noreste no es ventajoso. Es ventajoso ver al gran hombre. La perseverancia trae buena fortuna”. El suroeste es la región de la retirada, el noreste la del avance. Un individuo se encuentra confrontado con obstáculos que no pueden ser superados directamente. En tal situación es sabio hacer una pausa ante el peligro, hacer marcha atrás y esperar. Se trata de una preparación para superar las obstrucciones. Uno debe unir sus fuerzas a las de los amigos y ubicarse bajo el mando de alguien capaz de dirigir la situación. Entonces se triunfará y se logrará remover los obstáculos. Esto requiere el deseo de perseverar aunque aparentemente la meta no esté cercana. El propósito claro y decidido trae 119 finalmente la buena fortuna. Una obstrucción transitoria es útil al propio desarrollo personal. Allí reside el valor de la adversidad. LA IMAGEN: “Agua sobre la montaña. La imagen de la obstrucción. El hombre noble dirige su atención a sí mismo y templa su carácter”. Las dificultades y obstrucciones impulsan al hombre sobre si mismo. Pero mientras que el hombre inferior trata de echar las culpas sobre otras personas, lamentándose de su destino, el hombre noble busca el error en sí mismo, y a través de esta introspección el obstáculo externo se transforma en un medio para el propio enriquecimiento y desarrollo interior. LAS LINEAS: Seis en la base significa: “Ir conduce al obstáculo, venir encuentra el elogio”. Cuando se encuentra con un obstáculo lo más importante es reflexionar sobre la manera como podremos desembarazarnos de él. Si un peligro nos amenaza, no debemos esforzarnos en proseguir adelante ciegamente, eso solo puede llevarnos a complicar las cosas. Lo correcto, al contrario, es retraerse durante cierto tiempo, no para renunciar al combate, sino para reunir fuerzas esperando el tiempo apropiado para actuar. Seis en el segundo lugar significa: “El sirviente del rey se encuentra bloqueado por obstáculo tras obstáculo, pero no es culpa suya”. Generalmente lo mejor es rodear el obstáculo y tratar de superarlo a través de la línea de menor resistencia. Pero aquí se trata de una situación en que el hombre debe hacer frente a las dificultades, aunque los obstáculos se acumulen: eso ocurre cuando el deber nos impide actuar según nuestro libre arbitrio y nos obliga a enfrentar el peligro por el servicio de una causa importante. Se puede hacer eso y quedarse completamente en paz puesto que no se trata de su propia falta la que lo coloca en tales dificultades Nueve en el tercer lugar significa: “Ir conduce el obstáculo, es por eso que él vuelve”. Mientras que la línea precedente muestre un funcionario obligado de tomar el camino del peligro por fidelidad a su deber, aquí se muestra al hombre que debe actuar como padre de familia o jefe de su grupo. Si quisiera arrojarse en el peligro a la ligera, eso seria vano, puesto que los que están confiados a su cuidado no podrían continuar la marcha solos. Por eso el se bate en retirada hasta que llegue el momento propicio para actuar y regresa a los suyos que lo reciben con una gran alegría. 120 Seis en el cuarto lugar significa: “Ir conduce a los obstáculos, venir conduce a la unión”. Aquí se muestra todavía una situación más en la cual no se puede hacer frente al obstáculo sin la cooperación de gente fiable. En tal caso, el camino directo no es el más corto. Si se quisiera proseguir contando solo con sus propias fuerzas y sin las precauciones indispensables, no se encontrarían los apoyos necesarios y se percibiría demasiado tarde que se había hecho un cálculo erróneo, puesto que las condiciones sobre las cuales se esperaba contar se muestran insuficientes. Por eso, en tal caso es mejor comenzar haciendo una pausa y reunir alrededor de sí mismo a los compañeros fieles sobre los cuales uno podrá apoyarse para vencer los obstáculos. O Nueve en el quinto lugar significa : “En medio de los más grandes obstáculos aparecen los amigos.” Aquí vemos al hombre indicado para remediar una situación crítica. No debe eludir los obstáculos que se amontonan peligrosamente ante él. Pero como él posee una efectiva vocación superior, la fuerza de son espíritu es suficientemente activa como para atraer los amigos y la gente que lo ayudarán. Él está en medida de organizarlos con el fin de que el trabajo en común, planificado juiciosamente, permita superar los obstáculos. Seis en la cima significa: “Ir conduce a los obstáculos, venir conduce a una gran fortuna. Es ventajoso ver al gran hombre”. Se refiere a un hombre que ha dejado el mundo y su tumulto tras él. Cuando llega la época de los obstáculos lo más simple sería volverles la espalda y refugiarse en otra parte. Pero este camino está cerrado para él. No puede buscar su propia salvación abandonando el mundo a la adversidad. El deber lo llama a incorporarse al tumulto de la vida. Precisamente por su experiencia y libertad interior es capaz de crear algo más grande y más adecuado que traiga buena fortuna. Es favorable ver al gran hombre en compañía del cual se podrá terminar el trabajo de rescate. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 40.- HSIEH / LA LIBERACIÓN Superior : Chen Lo que Despierta, Trueno Inferior : K'an El Abismo, Agua. El movimiento lleva fuera de la esfera del peligro. El obstáculo fue removido y las dificultades están en curso de solucionarse. Todavía no se ha 121 terminado la liberación, sino que está justo en el comienzo, y el hexagrama representa los diferentes estados de su evolución progresiva. EL JUICIO: “Liberación. El sudoeste es ventajoso. Cuando ya no hay más ningún lugar donde se deba ir, el retorno trae la buena fortuna. Si todavía queda algún lugar donde se deba ir, apresurarse trae buena fortuna”. Se refiere a una época en que las tensiones y complicaciones comienzan a superarse. En tales circunstancias, debemos retornar al camino normal tan pronto como sea posible, tal es el significado del suroeste. Estos períodos de cambios repentinos tienen una gran importancia. Tal como la lluvia despeja la tensión atmosférica, la época de la liberación tiene un efecto estimulante sobre toda la vida. Una cosa importante: en un período así no debemos extralimitarnos en nuestro triunfo. No es necesario empujar más lejos de lo que sea necesario. Volver al orden regular de la vida tan pronto como se complete la liberación trae buena fortuna. Si quedan algunos asuntos restantes por atenderse, hay que hacerlo lo más pronto posible, para que la limpieza final ocurra sin retardo. LA IMAGEN: “Caen el trueno y la lluvia: la imagen de la liberación. El hombre noble perdona los errores y absuelve el pecado”. Una tormenta tiene por efecto purificar el aire; el hombre noble produce un efecto similar cuando barre con los errores y los pecados de la gente que provoca la tensión. A través de la claridad trae la liberación. Cuando se hace la luz sobre los defectos no hay que insistir en ellos, sino simplemente pasar por sobre los errores y las transgresiones involuntarias tal como se calma el trueno; y absolver los pecados y las transgresiones intencionales, tal como el agua limpia lava la suciedad. LAS LINEAS: Seis en la base significa: “Sin reproches”. Manteniéndose de acuerdo con la situación se necesitan pocas palabras. Los obstáculos se superaron, llega la liberación. Uno recuperan las fuerzas en paz y uno se queda tranquilo. Esa es la actitud correcta después que las dificultades han sido superadas. O Nueve en la segunda línea significa: “Alguien mató tres zorros en el campo, y recibió una flecha dorada. La perseverancia trae buena fortuna”. La imagen proviene de la caza. Los obstáculos en la vida pública corresponden a los zorros, especialmente a quienes tratan de influir adulando al gobernante. Tienen que ser apartados antes de que se produzca 122 la liberación. Pero el obstáculo no debe ser removido por medios incorrectos. El color amarillo se refiere a la forma y a la manera de proceder contra el enemigo; la flecha significa el camino apropiado. Cuando alguien se dedica con todo corazón a la labor de liberación encuentra el sustento a su fuerza en la rectitud de sus actos contra todo lo que es falso y vulgar. Nota: el amarillo es el color del intelecto. Lo dorado significa la nobleza y la calidad del oro. Seis en el tercer lugar significa: “Si un hombre viaja en carro y a pesar de eso lleva una carga en su espalda, incita a los ladrones a acercarse. La perseverancia lleva a la humillación”. Se refiere a un hombre que se ha liberado de condiciones miserables, que se encuentra en una situación cómoda y libre de necesidades. Si como un advenedizo trata buscar solamente la comodidad sin adaptarse interiormente a las nuevas condiciones, atrae con su actitud a los ladrones. Y si continúa en esa actitud se encontrará humillado. Confucio dice a ese propósito: “Llevar una carga en los hombros es propio del hombre vulgar. El carro es lo propio de un hombre eminente. Cuando un hombre vulgar utiliza los medios de un hombre eminente los ladrones intentan quitárselo. Cuando alguien es insolente ante sus superiores y duro con sus inferiores incita a la gente a atacarlo. Una vigilancia descuidada atrae a los ladrones. La atractiva vestimenta de una joven incite a desposeerla de su virtud.” Nueve en el cuarto lugar significa: “Libérate de los lastres amarrados a tus pies. Entonces se acerca el compañero y puedes confiar en él”. En situaciones donde la inmovilidad es necesaria se requieren lastres para mantenerse quieto. Así, puede ocurrir que hombres vulgares se amarren al hombre noble y que, mediante el contacto cotidiano y la rutina que crean, entren en su intimidad y se le hagan indispensables. Pero cuando llega el tiempo de la liberación, con su requerimiento de acción y movimiento, el hombre noble tiene que liberarse de los hombres vulgares con los que no tiene ninguna afinidad. Debe estar libre para poder tomar cualquier oportunidad que se le presente sin conexiones extrañas. Entonces llegan los amigos que buscaba, con los que realmente podrá hacer algo, en confianza mutua y así seguir adelante. De otra manera, esos amigos se mantendrían apartados y llenos de desconfianza. O Seis en el quinto lugar significa: “Sólo el hombre noble puede liberarse a sí mismo. Eso trae buena fortuna. Así se muestra al hombre inferior que para él ese asunto es serio”. La época de la liberación requiere resolución de sí y por sí mismo. Los hombres vulgares no deben interferir a la liberación del hombre noble. Eso trae buena fortuna. Pero la gente inferior no puede ser alejada ni manipulada con prohibiciones u otros medios externos. Si uno quiere destacarse de ellos, primero uno debe desprenderse interiormente y así ellos 123 notarán por sí mismos la seriedad del asunto. Entonces harán confianza y el hombre noble podrá conducirlos o separarse de ellos sin reproches. Seis en la cima significa: “El príncipe tira contra un halcón en el muro alto. Lo mata. Todo es ventajoso”. El halcón (ave de mal augurio) sobre un muro alto es la imagen de un hombre vulgar que toma importancia, ocupa un puesto elevado y obstruye la liberación. Se opone a la influencia liberadora por su actitud interior puesto que está endurecido por su maldad. Hay que removerlo enérgicamente y esto requiere los medios apropiados. Confucio dice al respecto: “El halcón es la meta de la caza. El arco y la flecha son los instrumentos adecuados. El tirador es el hombre que debe utilizar correctamente los medios con el fin de alcanzar la meta. El hombre noble esconde esos instrumentos en su interior, espera el momento apropiado y actúa en consecuencia. Entonces ¿cómo no irían bien las cosas? El actúa y es libre. Es por eso que es suficiente de salir y abatir la presa. Así es con el hombre que actúa después de haber puesto a punto sus posibilidades.” O Trazo gobernante * Trazo constituyente 41.- SUN / LA MENGUA (La disminución) Superior : Ken, La Inmovilidad, la Montaña. Inferior : Tui Lo Gozoso, Lago. Este hexagrama N° 41 es considerado como una modificación del Nº 11, Tai, “la paz”. Aquí se muestra una disminución del trigrama inferior (Tui Lo Gozoso, Lago) en provecho del superior (Ken Manteniéndose quieto, Montaña.) Es una disminución pura y simple: si los cimientos de un edificio son débiles y las murallas altas más fuertes, toda la estructura pierde su estabilidad. De la misma manera que el empobrecimiento del pueblo en provecho del enriquecimiento de los gobernantes constituye una disminución para toda la nación y un riesgo de conflicto por pérdida de equilibrio. Entonces, todo el tema del hexagrama tiende a mostrar de qué manera los cambios de fortuna pueden ocurrir sin perturbar el equilibrio general. De qué manera puede operarse el desplazamiento de riquezas en la nación sin arriesgar las fuentes de riqueza, sin provocar el fracaso de las clases inferiores y sin perturbar el equilibrio de toda la nación. EL JUICIO: 124 “La mengua combinada con la sinceridad acarrea la mayor fortuna sin reproches. Se puede perseverar en ello. Es ventajoso emprender algo. ¿Qué se puede hacer? Se pueden usar dos pequeñas escudillas para el sacrificio”. La disminución no siempre significa algo malo. Crecimiento y mengua vienen a su debido tiempo. Lo que importa es entender la época y no disimular la pobreza con pretensiones infundadas. Si el tiempo de escasez de recursos nos trae la propia verdad, no debemos avergonzarnos de su simplicidad. La simplicidad es lo más esencial para iniciar empresas importantes. Nada de la belleza de la civilización, ni siquiera sus rituales religiosos, sufren a causa de la simplicidad. Hay que encontrar en si mismo fuerza suficiente para compensar los vacíos externos. La firmeza de la conducta ayuda entonces a superar lo que la simple forma tiene de excesivo. No hay necesidad de presentarse ante Dios bajo falsas apariencias. Incluso con medios escasos puede expresarse la sinceridad del corazón. LA IMAGEN: “Al pie de la montaña, el lago: la imagen de la mengua. El hombre noble controla su ira y restringe sus instintos”. El lago al pie de la montaña se evapora. En este sentido, la mengua beneficia a la montaña, que se enriquece con su humedad. La montaña permanece como el símbolo de la fuerza obstinada que puede llevar a la ira. El lago simboliza la alegría desenfrenada que puede llevarnos a alocadas carreras y a malgastar nuestras fuerzas. La mengua es necesaria; la ira puede ser atenuada gracias a la calma y el instinto es domeñado por la restricción. Gracias a esta disminución de las potencias inferiores del alma, sus aspectos superiores se enriquecen. LAS LINEAS: Nueve en la base significa: “Yéndonos rápido cuando nuestra tarea terminó no merece reproches, pero por lo menos se debe reflexionar sobre cuánto pueden menguar los demás”. Es generoso y bueno que cuando un hombre, después de completar sus tareas propias y urgentes, use sus energías al servicio de los demás y sin hacer alarde ayude a los que lo necesitan. Pero cuando quien recibe la ayuda es alguien que está en una posición superior, se debe considerar cuidadosamente hasta qué punto tiene derecho de aceptar esta ayuda sin ofender sirviente o perjudicar a quien lo ayuda. Sólo cuando existe esta sutileza de sentimientos uno puede entregarse incondicionalmente y sin vacilaciones. Nueve en el segundo lugar significa: “La perseverancia es ventajosa. Emprender algo trae desgracia. Sin disminuirse a si mismo, se puede aumentar a los demás”. 125 Una disposición consciente y seria no menoscaba la dignidad del hombre si éste se ve en la necesidad de ponerse al servicio de otros. Quien se pone a las órdenes del superior disminuyendo su propia posición no da un beneficio durable al otro. Eso es fuente de infortunio. Para dar a otro un servicio de real valor es necesario no descuidarse a sí mismo. Seis en el tercer lugar significa: “Cuando tres personas viajan juntas, su numero disminuye en uno. Cuando un hombre viaja solo, encuentra compañía”. Un lazo muy estrecho sólo es posible entre dos personas. Cuando hay tres personas juntas, los celos se despiertan. Uno debe irse. O también, cuando hay tres personas juntas hay uno que gobierna los otros dos. Pero cuando un hombre está solo puede estar seguro de encontrar compañía que lo complemente. Seis en el cuarto lugar significa: “Cuando un hombre atenúa sus defectos, hace que los demás se apresuren en venir y reunírsele: sin reproches”. Los defectos de un hombre a menudo pueden impedir que gente bien dispuesta hacia él se le acerque. Muchas veces esos defectos se ven agravados por el entorno en el que uno se encuentra. Si con humildad uno trata de corregirlos, encuentra a sus amigos bien dispuestos, se le acercan más pronto y todos encuentran mutua alegría. O Seis en el quinto lugar significa: “Alguien seguramente crece. Diez pares de tortugas no pueden oponérsele. Suprema fortuna”. Cuando la suerte destina a alguien a tener buena fortuna, ésta llegará de todas maneras. Todos los oráculos, como los que dan los caparazones de tortugas, le otorgan los signos favorables que le corresponden. No debe temer nada, puesto que una voluntad superior ya ha decidido su destino. * Nueve en la cima significa: “Cuando alguien crece sin menguar a los otros, no hay reproches. La perseverancia trae fortuna. Es ventajoso emprender algo. Se obtienen servidores, pero ya no se tiene un hogar separado”. Hay personas que dispensan bendiciones a todo el mundo. Todo el incremento de poder y el beneficio que se obtienen van en beneficio del grupo y no es en detrimento de nadie. A través de la perseverancia y del trabajo se puede encontrar el éxito y los ayudantes que requieran, pero lo que logre no es una ganancia personal sino que se trata de un bien público y de un beneficio accesible a todos. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 126 42.- I CHI / EL INCREMENTO (el aumento) Superior : Sun Lo Suave, Viento Inferior : Chen Lo que Despierta, Trueno. Este hexagrama es considerado como una modificación del N° 12, Pi, “la estagnación”. La idea de incremento está expresada por el hecho de que la línea luminosa superior se ha ubicado en el primer lugar inferior de donde incrementará su fuerza transmitiendo la luz a todo el hexagrama. Una de las ideas fundamentales del I Ching es que gobernar bien es bien servir al pueblo. El sacrificio del ser superior que realiza un incremento del ser inferior es considerado como un puro y simple aumento. El sacrificio de los más altos elementos produce el incremento de los más bajos; sólo el espíritu tiene poder para ayudar al mundo. EL JUICIO: “El incremento. Es ventajoso emprender algo. Es ventajoso cruzar la gran corriente”. El sacrificio de los seres superiores para incrementar los seres inferiores produce en el pueblo un sentimiento de alegría y de gratitud que es extremadamente valioso para el florecimiento de la comunidad. Cuando la gente es devota a sus gobernantes, todas las empresas son posibles; y por peligrosas que sean tendrán éxito. En tales tiempos de progreso y desarrollo exitoso es necesario trabajar y hacer el mejor uso posible del tiempo. Esta época se parece al matrimonio del cielo y la tierra, cuando la tierra comparte el poder creativo del cielo formando y dando nacimiento a los seres vivientes. El tiempo del incremento no es duradero, por eso es conveniente de aprovecharlo plenamente cuando se presenta. LA IMAGEN: “Viento y truenos, la imagen del incremento. El hombre noble si ve lo bueno, lo imita; si hay defectos, se deshace de ellos”. Observando como el viento y el trueno se amplifican y se fortifican mutuamente, el hombre puede descubrir el camino para perfeccionarse y desarrollarse personalmente. Cuando se descubre lo bueno en los demás puede imitarlos, así se debe imitar y apropiarse de todo lo bueno que haya sobre la tierra. Si percibe algo malo en sí mismo, uno debe deshacerse de ello. Es el camino para permanecer libre de error y liberarse del mal. Este progreso ético representa el más importante incremento de personalidad. 127 LAS LINEAS: * Nueve en la base significa: “Es ventajoso realizar grandes hazañas. Suprema fortuna. Sin remordimientos”. Cuando se siente un gran impulso proveniente de lo superior, este incremento de fuerza debe ser empleado para culminar algo grande para lo cual nunca habíamos encontrado ni las energías ni la responsabilidad necesaria. Porque se es libre para la acción personal, se encontrará una gran fortuna y obteniéndola uno permanecerá libre de reproches. O Seis en el segundo lugar significa: “Alguien verdaderamente crece; diez pares de tortugas no pueden oponérsele. La perseverancia constante trae buena fortuna. El rey lo presenta ante Dios. Fortuna”. El verdadero crecimiento se produce cuando uno mismo produce las condiciones que ello exige: receptividad y el amor del bien. Lo que se persigue viene entonces espontáneamente como una inevitable ley natural. Cuando este crecimiento está en armonía con las más altas leyes del universo, ningún contratiempo puede impedirlo. Sin embargo, es necesario que ningún acontecimiento fortuito e inesperado, por bueno que sea, nos induzca a la negligencia, sino que lo realicemos con fuerza interior y firmeza. Se adquiere entonces una importancia adelante de Dios y al frente de los hombres. Así se puede realizar una obra de bien para el mundo. Seis en el tercer lugar significa: “Uno se enriquece a través de acontecimientos infortunados. Sin reproche, si eres sincero, que camines por el medio y rindas cuentas al príncipe munido con un sello”. El tiempo de las bendiciones y del enriquecimiento tiene efectos tan poderosos que incluso los acontecimientos ordinariamente desgraciados se convierten en ventajas para las personas a quienes afectan. Ellos se convierten en ejemplos de errores que actúan de hecho conforme a la verdad que confieren una fuerza interior como si ellos estuvieran confirmados por una carta y un sello. Cuando se acepta sinceramente el infortunio se llega a estar libre de error y se actúa en armonía y conforme a la ley. * Seis en el cuarto lugar significa: “Si caminas en medio e informas al príncipe, te seguirán. Es ventajoso de ser empleado en el traslado de la capital”. Es importante ser uno de los hombres que median entre los dirigentes y los dirigidos. Ellos deben ser gente desinteresada, especialmente en épocas de auge, donde el beneficio destinado al pueblo emana del gobernante. Nada puede ser desperdiciado ni retenido de una manera egoísta, sino que la totalidad debe revenir verdaderamente a los que estaba destinada. Tal personalidad de intermediario que además ejerce una buena influencia sobre el gobernante, es especialmente importante en las épocas en que se trata de 128 grandes empresas, decisivas para el futuro, que requieren atención hasta en sus más mínimos detalles y el asentimiento de todos los participantes. O Nueve en el quinto lugar significa: “Si en realidad tienes buen corazón, no preguntes. Suprema fortuna. Realmente la bondad será reconocida cómo tu virtud”. La verdadera bondad consiste en no preguntarse sobre los méritos y las recompensas, sino actuar siguiendo una necesidad interior. Tal corazón bondadoso se encuentra entonces recompensado por el reconocimiento, y su influencia benéfica se expande sin obstáculos. Nueve en la cima significa: “No lleva incremento a nadie. Alguien seguramente lo hiere. Su corazón no se mantiene constantemente firme. Desgracia”. El sentido de esta situación es que los superiores deberían aumentar los beneficios a los inferiores renunciando a ellos mismos. Descuidando su deber y no ayudando a nadie pierden su influencia benefactora en los demás y pronto se encuentran solos. Este camino invita al ataque. Una actitud que no esté permanentemente en armonía con las exigencias de la época necesariamente lleva la desgracia consigo. Confucio dice a propósito de esta línea: “El hombre noble se reposa antes de moverse. Se recoge en su espíritu antes de hablar. Consolida sus relaciones antes de pedir algo. Habiendo puesto sus cosas en orden, está en perfecta seguridad. Pero si alguien es brusco en sus movimientos, los otros no cooperan con él. Si tiene un discurso agitado sus palabras no encuentran eco entre la gente. Si pide algo sin haber por anticipado fortalecido sus relaciones la gente no le da nada. Si nadie está con él, entonces los que quieren arruinarlo se aproximan”. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 43. KUAI, LA IRRUPCIÓN (Pasando a través) Superior : Tui Lo Gozoso, Lago Inferior : Ch'ien Lo Creativo, Cielo. Este hexagrama significa por una parte algo que irrumpe tras una larga acumulación de tensión, como las brechas que hace un río en sus diques cuando impiden el pasaje de una crecida violenta o como una nube que de repente hace llover para aliviar la tensión acumulada. Por otra parte, en el plano de las situaciones humanas, es la época donde la gente vulgar está 129 desapareciendo y su influencia disminuye. Una acción resuelta produce el cambio de condiciones y la irrupción de un efecto esperado. Este hexagrama está asociado al tercer mes (abril-mayo). EL JUICIO: “Irrumpir. Uno debe resueltamente dar a conocer el asunto en la corte del rey. Debe ser anunciado correctamente y conforme a la verdad. Peligro. Es necesario avisar a su propia ciudad. No es oportuno recurrir a las armas. Es ventajoso emprender algo”. A veces solo un hombre inferior que ocupa una posición directiva puede oprimir a los hombres nobles. A veces una sola pasión que alberga el corazón puede llegar a oscurecer la razón. Pasión y razón no existen cada una por su lado, sino que luchan sin cuartel para que prevalezca el bien. En una lucha decidida del bien contra el mal hay reglas absolutas que no pueden ser ignoradas si uno quiere triunfar. 1. La resolución debe basarse en la unión de fuerzas y buena voluntad. 2. Un compromiso con el mal no es posible. Lo malo siempre debe ser rehusado, bajo cualquier circunstancia. Ni nuestras pasiones ni nuestros defectos deben ser alabados. 3. La fuerza no debe ser empleada de manera directa. Allí donde el mal es condenado y estigmatizado, si se intenta recurrir a la fuerza respondiendo a un golpe con otro golpe, uno se implica a sí mismo en un juego de odio y pasión y hay riesgos de perder la batalla si uno se deja arrebatar por la pasión. Por eso es importante comenzar por arreglar nuestros propios asuntos y ocuparse de los propios defectos que nosotros mismos hemos estigmatizado. Así la fuerza del mal se contrarresta por sí misma al no encontrar adversarios. Incluso nuestros propios defectos no deben ser combatidos directamente: mientras luchemos contra ellos, ellos serán victoriosos. 4. La mejor manera de combatir el mal es un progreso enérgico del bien. LA IMAGEN: “El lago ha subido al cielo. La imagen de la irrupción. El hombre noble dispensa bienes por debajo de sí y se abstiene de reposar en su virtud”. Cuando el agua del lago sube al cielo hay razón para temer que se forme una nube e irrumpa un chaparrón. Tomando esto como una advertencia el hombre noble previene un colapso violento. Si un hombre desea acumular riquezas exclusivamente para sí, sin considerar a los demás, también experimentará un colapso. Toda acumulación es seguida por la dispersión. El hombre noble ya comienza a distribuir cuando está acumulando. En la misma forma, desarrollando su carácter no es obstinado, sino que permanece receptivo a las impresiones que puedan ayudarlo por un riguroso y constante auto-análisis. 130 LAS LINEAS: Nueve en la base significa: “Fuerza en los pies que avanzan. Si se va sin estar a la altura del asunto, se comete una falta”. En tiempos de avance resuelto el comienzo es especialmente difícil. Nos sentimos compulsados a avanzar rigurosamente pero la resistencia es todavía demasiado fuerte. Debemos mesurar nuestra propia fuerza y no aventurarnos a avanzar más lejos de lo que nos sea posible hacerlo con éxito seguro. Lanzarse a ciegas es un error, porque precisamente al comienzo los errores pueden traer resultados inesperados con las consecuencias más nefastas. Nueve en el segundo lugar significa: “Un grito de alarma. Armas en la tarde y la noche. Nada que temer”. Es necesario estar bien dispuesto. La resolución es inseparable de la precaución. Si un individuo es cuidadoso y prudente no hay motivo de alarmarse ni de inquietarse. Cuando se está alerta aun cuando no haya peligro, se estará armado cuando llegue el peligro y no habrá nada que temer. El hombre noble que está en guardia y preparado para hacer frente a lo que todavía no ha visto ni oído, pasa por el medio de las dificultades como si éstas no existieran. Si alguien cultiva bien su carácter, la gente lo sigue espontáneamente. Si triunfa la razón las pasiones se retraen naturalmente. Ser circunspecto y llevar una armadura desde el comienzo es el camino correcto para asegurar el éxito. Nueve en el tercer lugar significa: “Ser poderoso en los pómulos trae desgracia. El hombre noble está firmemente resuelto. Camina solo y encuentra la lluvia. Es difamado y la gente murmura contra él. Sin reproches”. Aquí se trata de un hombre que se encuentra en una posición ambigua. Cuando todos los demás están comprometidos en una lucha decidida contra lo que es inferior, él es el único que mantiene ciertas relaciones con un hombre inferior. Si pretende mostrarse fuerte hacia el exterior y se vuelve contra este hombre inferior antes del momento oportuno, puede comprometer toda la situación porque el hombre inferior puede recurrir rápidamente a medidas extremas. La tarea del hombre noble es aquí extremadamente difícil. Debe resolver firmemente en su interior cómo mantener su asociación con el hombre inferior eludiendo toda participación en sus vilezas. Naturalmente será juzgado erróneamente. Incluso se pensará que también pertenece a ese estrato inferior. Estará solo porque nadie lo comprenderá. Su relación con el hombre inferior lo rebajará a los ojos de todos, que se volverán contra él. Pero puede superar este error y no habrá culpa porque habrá permanecido fiel a sí mismo. Nueve en el cuarto lugar significa: “No hay piel en sus muslos, y caminar resulta difícil. Si un hombre quiere dejarse conducir como una oveja los 131 remordimientos desaparecerán. Pero si se oyen sus palabras los demás no le creerán”. Aquí se trata de alguien que sufre por su inquietud interior que no lo deja en paz. Quisiera avanzar bajo cualquier circunstancia pero encuentra obstáculos insuperables. Esta situación desencadena en él un conflicto interior, que se debe a la obstinación con la que trata de realizar sus deseos. Si desistiera de esa obstinación, todo iría bien. Pero las advertencias, como cualquier otro buen consejo, no serán escuchadas. La obstinación vuelve al hombre incapaz de oír por mucho que se le diga. O Nueve en el quinto lugar significa: “Al tratar con la cizaña se requiere firme resolución. Caminar por el centro permanece libre de reproches”. La maleza siempre crece nuevamente y es difícil exterminarla. Lo mismo la lucha contra los hombres inferiores que se encuentran en una posición superior requiere una firme resolución. Si uno se mantiene relacionado con ellos, hay que temer a la consecuencia de renunciar a luchar contra el mal como algo sin esperanzas. Eso debe evitarse. Se debe avanzar firmemente sin desviarse del camino. Sólo así se permanecerá libre de reproches. * Seis en la cima: “Sin llamado. Al final llega la desgracia”. La victoria parece alcanzada. Sin embargo quedan residuos del mal que deben ser destruidos como lo requiere el momento. Todo parece fácil. Sin embargo aquí reside el peligro. Si no estamos en guardia el mal puede lograr hacerse subrepticiamente un camino, escaparse y traernos nuevas desgracias; el mal no muere tan fácilmente. También luchando contra el mal de nuestro propio carácter debe hacerse un trabajo radical. Cualquier cosa que descuidemos puede significar un nuevo repunte del mal. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 44.- KOU / VENIR AL ENCUENTRO Superior : Ch'ien Lo Creativo, Cielo. Inferior : Sun Lo Suave, Viento. El hexagrama indica una situación en que el principio oscuro, después de haber sido eliminado, retorna furtiva e inesperadamente desde el interior y desde abajo. Por su propia decisión el principio femenino va a reunirse con el masculino. Se trata de una situación desfavorable y peligrosa que debe comprenderse a tiempo para prevenir sus posibles consecuencias. Este signo 132 está relacionado con el 5° mes (junio, julio) porque con el solsticio de verano el principio oscuro recomienza poco a poco su ascensión. EL JUICIO: “Viniendo a la cita. La muchacha es poderosa. Uno no debe casarse con esa muchacha”. La ascensión del hombre vulgar (el crecimiento de un elemento inferior) está pintado por la imagen de una muchacha atractiva que se da fácilmente y que así toma el comando. Eso no sería posible si, por su parte, el principio fuerte y luminoso no hubiera venido, él también, a su encuentro. El hombre vulgar parece tan inofensivo y tan dócil que uno hace de él un amigo. Parece tan pequeño y tan débil que uno piensa divertirse con él sin inquietud. El hombre inferior solo asciende porque el hombre noble no lo mira como peligroso y éste le otorga poder. Si se le resistiera desde el principio nunca ganaría influencia. La época de “venir al encuentro” es importante además en otro sentido que merece examinarse. Si en regla general el débil no puede superar al fuerte, hay tiempos en los cuales esta actitud cobra gran significación. Cuando el cielo y la tierra se van a encontrar todas las criaturas prosperan; cuando un príncipe y su ministro vienen al encuentro uno del otro, el orden se establece en el mundo. Pero es indispensable que traten de elementos destinados a unirse y a depender mutuamente uno del otro. Es conveniente que este acontecimiento se realice sin malas intenciones ocultas, sino no sería bueno. LA IMAGEN: “Bajo el cielo está el viento: La imagen de la acción de venir al encuentro. Así actúa el príncipe cuando publica sus órdenes y las proclama por los cuatro puntos cardinales”. La situación es análoga a la del hexagrama N° 20 Kuan “la contemplación”. Allá el viento sopla sobre la tierra y aquí el viento sopla bajo el cielo. El viento está presente en los dos casos. Pero allá el viento estaba sobre la tierra; entonces era un viento bajo, que tomaba conocimiento de las condiciones del reino. Aquí es un viento alto, que indica la influencia que el soberano ejerce en todos lados. El cielo está lejos de las cosas que están sobre la tierra, pero las mueve con el viento. El soberano está alejado del pueblo, pero lo mueve con sus órdenes y decretos. LAS LINEAS: * Seis en la base significa: “Debe ser detenido con un freno de bronce. La perseverancia trae buena fortuna. Si se lo deja seguir su curso, se experimentará desgracia. Incluso un cerdo recostado encuentra qué mordisquear a su alrededor”. 133 Si un elemento inferior se ha introducido en el camino debe ser detenido inmediata y enérgicamente. Si se impide su marcha de una manera consecuente se pueden evitar los malos efectos. Si se le consiente que siga el camino, seguramente habrá infortunio. La insignificancia de su posición no debe movernos a contemplaciones. Cuando un cerdo es joven y flaco todavía no puede hozar demasiado, pero desde que está bien alimentado su naturaleza reaparece como si jamás hubiera sido retenido. O Nueve en el segundo lugar significa: “Hay un pez en el estanque. Sin reproches. Los huéspedes no prosperan”. El elemento inferior se supera no por la violencia sino manteniéndolo bajo un control moderado. Entonces no debe temerse ningún mal. Pero se debe vigilar a que no se ponga en contacto con los que están más alejados, puesto que, dejado en libertad, desplegará sin trabas su aspecto negativo. Nueve en el tercer lugar significa: “No hay piel en sus muslos y la marcha resulta penosa. Si uno está consciente del peligro, no puede cometer una falta grave”. Uno está tentado interiormente de entrar en contacto con el elemento dañino que se le ofrece. Se trata de una situación muy peligrosa. Afortunadamente hay circunstancias que lo impiden. Uno quisiera hacerlo, pero no puede. Esto lleva a una penosa indecisión de conducta. Pero si tenemos clara conciencia del peligro de la situación no podemos incurrir en errores serios. Nueve en el cuarto lugar significa: “No hay peces en el estanque. De ello resulta el infortunio”. La gente insignificante debe ser tolerada para mantenerla bien dispuesta hacia nosotros. Así podremos usarla en el momento debido o cuando la necesitemos. Si somos indiferentes y rehusamos reunimos con ella, esta gente nos volverá la espalda y no estará a nuestra disposición cuando la necesitemos. Será entonces nuestra propia culpa. O Nueve en el quinto lugar significa: “Un melón cubierto con hojas de sauce. Líneas ocultas. Entonces eso nos cae del cielo”. El melón, como el pescado, simboliza el principio de la oscuridad. Es dulce pero se descompone con facilidad y por esta razón hay que protegerlo con hojas de sauce. Se trata de una situación en que el fuerte, superior y mejor situado de los hombres tolera y protege a los inferiores a su cargo. El posee los rasgos firmes del orden y de la belleza. Pero sin embargo no los hace prevaler. No agobia sus subordinados con recomendaciones y advertencias fastidiosas, sino que los deja en completa libertad haciendo plena confianza en el poder de transformación que tiene una personalidad fuerte y correcta. El destino es favorable. Los inferiores responden a su influencia y permanecen a su disposición como la fruta en sazón. 134 Nueve en la cima significa: “Viene a reunirse con cuernos. Humillación. Sin reproches”. Cuando un hombre se ha retirado del mundo el tumulto profano le resulta a menudo insoportable. Hay mucha gente que con un orgullo noble se aleja de todo lo bajo y lo rechaza con brusquedad cuando se le acerca. Se les reprocha a esas personas ser orgullosas y distantes; de todas maneras como ellos ya no están ligados al deber de actuar en el mundo, eso no tiene gran importancia. Ellos saben soportar con calma la aversión de la masa. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 45.- TS'UI / LA REUNIÓN (La concentración, el acopio) Superior : Tui Lo Gozoso, Lago Inferior : K’un Lo Receptivo, Tierra. Este hexagrama se aparenta por su forma y por su significado al N° 8 Pi, “la Solidaridad”. En aquél, el agua está sobre la tierra y en éste el lago está sobre la tierra. El lago es el punto donde se reúnen las aguas, es por eso que aquí la idea de reunión está expresada con más fuerza que en el hexagrama Pi. La misma idea fundamental se desprende de que hay aquí en el 4° y en el 5° lugar dos trazos fuertes que realizan la unión, mientras que en el N° 8 Pi hay solamente un trazo fuerte en el 5° lugar, en medio de dos trazos débiles. EL JUICIO: “La reunión. Éxito. El rey se aproxima al templo. Es ventajoso ver al gran hombre. Eso trae éxito. La perseverancia es ventajosa. Hacer grandes sacrificios trae buena fortuna. Es beneficioso emprender algo”. La reunión de los hombre en las comunidades de cierta importancia es natural como en el seno de una familia o artificial como en un estado. La perpetuación de estas reuniones se cumple por medio del culto a los antepasados, a la ocasión del cual se reúne el clan entero. Por medio de la piedad colectiva, los ancestros se integran en la vida espiritual de la comunidad de sus descendientes permitiendo que la comunidad no se disgregue ni se disuelva. Cuando los hombres deben estar reunidos el poder religioso es necesario pero no suficiente. Una autoridad o un jefe humano deben también estar presentes como centro de la reunión. Para poder reunir a los otros, ese centro de reunión debe previamente concordarse moralmente consigo mismo. Por medio del recogimiento la fuerza moral se acrecienta y permite reunir la gente. Las grandes épocas de unificación fructifican en 135 grandes obras. Ese es el sentido de hacer grandes sacrificios u ofrendas. En el dominio público y profano las grandes obras también se efectúan sobre la base de una reunión en torno de un acuerdo colectivo. LA IMAGEN: “Sobre la tierra, está el lago: la imagen de la reunión. El hombre noble renueva sus armas previniendo encontrarse con lo imprevisto”. Si el agua del lago se reúne y crece sobre la tierra hay peligro que desborde. (cf. hexagrama N° 43, la irrupción) Deben tomarse precauciones para evitarlo. De manera similar, cuando los hombres se reúnen en número elevado los conflictos pueden surgir. Los ladrones merodean donde los bienes se acumulan. Es por eso que en las épocas de recolección y cosecha hay que precaverse de lo inesperado renovando las defensas y las armas. Los males humanos y el sufrimiento provienen a menudo de acontecimientos inesperados para los que no estábamos preparados. Si se está preparado se los puede prevenir. LAS LINEAS: Seis en la base significa: “Si eres sincero, pero no lo suficiente, a veces habrá confusión, a veces colaboración. Si pides ayuda, puedes reír de nuevo después que te hayan dado una mano. Sin remordimientos. Marchar no tiene reproches”. Aquí la situación es aquella donde la gente debe reunirse en torno de un guía de confianza. Pero uno se encuentra con numerosos compañeros por los cuales uno se deja influenciar hasta tal punto que se llega a vacilar sobre las resoluciones. Así no se tiene un centro con fuerzas para reunir y se pierde la capacidad de recogimiento. De todas maneras, si se expresa el desarraigo y se pide ayuda, es suficiente que el guía dé una mano para superar el desamparo. Se debe estar atento para no desorientarse ni dejarse inducir al error. Evidentemente, la actitud justa es la de plegarse al guía que detiene la fuerza de reunir. Seis en el segundo lugar significa: “Dejarse arrastrar trae buena fortuna y permanece sin reproches. Si se es sincero, es ventajoso ofrecer un sacrificio aunque sea pequeño” En el tiempo de la reunión no podemos elegir arbitrariamente el camino. Hay fuerzas secretas trabajando y reuniendo a los seres que tienen afinidad entre ellos. Debemos obedecer a esa atracción y no cometeremos errores. Cuando existen relaciones íntimas no se requieren grandes preparativos ni formalidades. La gente se entiende espontáneamente y la divinidad acepta graciosamente las ofrendas pequeñas cuando son sinceras. 136 Seis en el tercer lugar significa: “Reuniendo entre los suspiros. Nada puede aprovecharse. Irse no tiene reproches, pequeña humillación”. A menudo se siente la urgencia de reunirse a los demás, pero los individuos que están alrededor ya han constituido grupos y en consecuencia uno permanece aislado. La situación parece insostenible. Se debe elegir el camino del progreso y tomarlo resueltamente con un hombre que esté cerca del centro del grupo y que puede ayudar a que uno sea admitido en ese círculo cerrado. No es un error, aunque al principio se piense que la posición de extraño sea un poco humillante. O Nueve en el cuarto lugar significa: “Gran fortuna. Sin reproches”. Aquí se describe a un hombre que reúne al pueblo a su alrededor en nombre del guía. Desde el momento en que no trate de obtener ventajas personales, sino que trabaje para la unidad general, su trabajo se verá coronado por el éxito y todo marchará como debe ser. O Nueve en el quinto lugar significa: “Si una reunión se forma alrededor de alguien por el justo valor que éste tiene ello no ocasiona reproches. Pero si ello no es sincero, se requiere actuar con una perseverancia sublime y duradera. Así los remordimientos desaparecen” Cuando la gente espontáneamente se reúne alrededor de alguien, y que éste se convierte en el centro del grupo sin buscarlo, eso es algo bueno e irreprochable. Por ese medio se puede adquirir una gran influencia y eso es beneficioso. Pero puede ocurrir que la gente se reúna en torno de alguien por la posición influyente que ocupe y no por una sincera confianza interior. Eso es lamentable. El único medio de ganarse la confianza sincera de esa gente es actuando con una fidelidad constante y sublime al deber. La desconfianza secreta es así gradualmente superada y causa de remordimientos desaparece. Seis en la cima significa: “Lamentos y suspiros, diluvio de lágrimas. Sin reproches”. Puede suceder que un individuo desee aliarse con otro, pero sus buenas intenciones son mal interpretadas. Uno se pone triste y se lamenta. Pero ese es el buen camino, puesto que ello puede llevar al otro a reflexionar, a reconsiderar la situación y a realizar la unión deseada y tan lamentablemente desechada. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 137 46.- SHENG / EMPUJANDO HACIA ARRIBA (Levantando) Superior : K'un Lo Receptivo, Tierra. Inferior : Sun Lo Suave Viento, Madera. El trigrama inferior, Sun, tiene por imagen el bosque, la madera; el trigrama superior, K’un simboliza la tierra. A eso está ligada la idea de que el bosque en la tierra crece hacia arriba. Este “empujar hacia arriba”, por oposición al “progreso” (N° 35), está ligado a la noción de esfuerzo, como las plantas, que tienen necesidad de fuerza para crecer en la tierra. Indica un ascenso, mediante el esfuerzo, de la oscuridad y de la sumisión al poder y la influencia. EL JUICIO: “El empuje hacia arriba posee un éxito sublime. Debe ver al gran hombre. Sin temor. Partida hacia el sur trae buena fortuna”. El empuje hacia arriba de los elementos de valor no encuentra ningún obstáculo, es por eso que está acompañado por un gran éxito. La actitud que hace posible el empuje hacia arriba no es violenta, sino humilde y comodante. Pero como uno es llevado por las disposiciones favorables de la época, se progresa. Hay que avanzar y buscar las personas que detienen la autoridad. No hay que temer de hacerlo, puesto que el éxito está asegurado. Solamente hay que ponerse a trabajar, puesto que la actividad (simbolizada por el sur y el verano) es fuente de buena fortuna. LA IMAGEN: “En el medio de la tierra crece el bosque: imagen del empuje hacia arriba. Así el hombre noble se abandona a la naturaleza, acumula pequeñas cosas para hacer cosas grandes y elevadas”. El bosque en la tierra crece sin apuro y sin precipitación hacia lo alto contorneando dócilmente los obstáculos. El hombre noble hace lo mismo, abandonándose a la corriente natural de las cosas, avanzando sin pausa y sin descanso. LAS LINEAS: * Seis en la base significa: “El empuje hacia arriba que encuentra la confianza trae una gran fortuna”. 138 Es el comienzo del ascenso. Tal como el árbol que en el ímpetu de crecer procura la fuerza de las raíces que están en la base y empuja hacia arriba, el poder de realizar viene desde lo más bajo y oscuro. Si hay una afinidad entre el designio y la fuerza interior se encuentra la confianza y el poder de realizar lo propuesto. Nueve en el segundo lugar significa: “Si uno es sincero, es ventajoso presentar una ofrenda aunque sea pequeña. Sin reproches” Aquí se supone la presencia de un hombre fuerte que no está adaptado a su entorno, puesto que es demasiado brusco y que no le da demasiada importancia a las formalidades. Pero es correcto interiormente, y es por eso que encuentra una buena respuesta a pesar de la negligencia de las formas exteriores. La rectitud emana aquí de cualidades sólidas, mientras que en la línea correspondiente del hexagrama precedente ella es el resultado de la humildad interior. Nueve en el tercer lugar significa: “Alguien empuja hacia arriba en una ciudad vacía”. Todas las obstrucciones que bloquean el progreso caen. Las cosas salen con notable facilidad. Debe seguirse el camino sin vacilaciones para aprovechar el propio éxito. Visto desde fuera todo parece estar en perfecto orden. No se agrega, sin embargo, ninguna promesa de buena fortuna. Se trata de saber cuánto puede durar el éxito sin encontrar obstáculos. Pero no es conveniente dejarse llevar por tales reflexiones que pueden inhibir la propia fuerza sino que deben aprovecharse rápidamente las circunstancias favorables. Seis en el cuarto lugar significa: “El rey lo ofrece al Monte Ch'i. Fortuna. Sin reproches». El Monte Ch'i queda en el oeste de China; es la tierra natal del rey Wen cuyo hijo, el Duque Chou que completó las líneas del Libro. La sentencia evoca la época en que la dinastía Chou llegó al poder. Los aliados del rey Wen fueron presentados al dios de su montaña natal y obtuvieron un lugar cerca del soberano en la sala de los ancestros. Indica un estado en que el empuje hacia arriba ha alcanzado su meta. Se alcanza la gloria entre los hombres y los dioses, se es recibido entre quienes dirigen la vida espiritual de la nación. Se obtiene una fortuna que perdura en el tiempo. O Seis en el quinto lugar significa: “Perseverancia trae fortuna. Se empuja hacia arriba gradualmente”. Cuando un hombre avanza más y más es importante que el éxito no lo encandile. Precisamente cuando experimenta el gran éxito debe permanecer sobrio y no tratar de saltar etapas; debe ir lentamente, paso a paso, como si vacilara. Sólo este progreso calmo, juicioso y prudente lleva a la meta. 139 Seis en la cima significa: “«Empujando hacia arriba en la oscuridad. Aprovecha perseverar sin desmayo”. El que empuja a ciegas se dispersa interiormente. Sólo se sabe avanzar pero no se sabe ni detenerse ni retroceder. Esto trae el agotamiento. En este caso es importante recordar que se debe ser consciente, cuidadoso y consecuente consigo mismo. Sólo así puede uno puede preservarse de impulsos ciegos que son siempre inconducentes. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 47.- K'UN / EL AGOBIO (El abatimiento, el agotamiento) Superior : Tui Lo Gozoso, lago Inferior : K´an El Abismo, Agua. El lago está arriba y el agua abajo; el lago está vacío, agotado, seco. Pero la idea de agotamiento aparece también de otra manera: en el trigrama superior se encuentra un trazo oscuro abajo del cual están dos trazos luminosos. En el trigrama inferior un trazo luminoso se encuentra entre dos trazos oscuros. Además, el trigrama superior corresponde al principio de la oscuridad y el inferior al principio de la luz. Los hombres superiores se encuentran oprimidos y sometidos a las restricciones que les oponen los hombres inferiores. EL JUICIO: “Abatimiento. Éxito. Perseverancia. El gran hombre realiza una feliz fortuna. Sin reproches. Cuando alguien tiene algo que decir no es creído”. Los tiempos de adversidad son el reverso de los tiempos de éxito. Pero pueden llevar al éxito si se encuentra al hombre apropiado. Cuando un hombre fuerte está desamparado permanece sereno y alerto pese a todos los peligros, y esta precaución es la fuente de su éxito posterior. Su firmeza es más fuerte que el destino. Quién deja que su espíritu se quiebre por el abatimiento no tendrá éxito. A quien la adversidad solo encorva, pero en el cual engendra la fuerza de reaccionar, con el tiempo esa persona seguramente encontrará la luz. Los hombres vulgares no son capaces de esto. Sólo el hombre noble trae consigo la buena fortuna y permanece sin reproches. Es cierto que por el momento su influencia no es reconocida y que sus palabras no tienen efecto. Es por eso que en épocas de adversidad es importante permanecer interiormente fuerte y sobrio en las palabras. 140 LA IMAGEN: “No hay agua en el lago: la imagen del agotamiento. El hombre noble arriesga su vida para cumplir sus propósitos”. Cuando el agua se ha evacuado por debajo, el lago se agota y se seca. Es el destino. Simboliza la suerte adversa en la vida humana. En tales épocas, no se puede hacer otra cosa que asumir el destino y permanecer fiel a si mismo. Se refiere aquí a la capa más profunda de la verdadera naturaleza del ser, porque solo ella es superior a todo destino exterior. LAS LINEAS: Seis en la base significa: “Uno está sentado deprimido bajo un árbol desnudo y se llega a un valle oscuro. Por tres años no ve nada”. Cuando uno se encuentra desamparado es importante ante todo se ser fuerte y superar el desamparo interior. Si somos débiles la adversidad nos supera. En lugar de continuar la marcha, nos demoramos sentados bajo un árbol desnudo y nos hundimos aun más en las tinieblas y en la melancolía. Eso hace la situación todavía más desesperada. Esta actitud proviene de una ceguera interior a la que hay que superar a todo precio. Nueve en el segundo lugar significa: “Uno está deprimido cerca del vino y de los alimentos. Y llega el hombre de las rodilleras escarlatas. Es ventajoso ofrecer un sacrificio. Partir apresuradamente es fuente de infortunio. No hay reproches” Se pinta el estado de depresión interior en el cual uno se encuentra. Externamente todo marcha bien, uno tiene comida y bebida. Pero uno está abatido por la banalidad de la vida que se lleva y de la cual no se ve salida. Pero la ayuda viene de arriba; un príncipe -en la vieja China los príncipes llevaban rodilleras escarlatas- está en la búsqueda de ayudantes de valor. Pero todavía quedan obstáculos para vencer. Por eso es conveniente afrontar esos obstáculos invisibles por medio de sacrificios y de plegarias. Partir precipitadamente y sin prepararse conduciría al infortunio, a pesar de que moralmente semejante actitud sea deseable. Aquí uno debe superar una situación repulsiva con un espíritu paciente. Seis en el tercer lugar significa: “Uno se deja oprimir por una piedra y se apoya sobre espinas y cardos. Entra a su casa y no ve a su esposa Desgracia”. Muestra se muestra alguien inquieto e indeciso en tiempos de adversidad. En principio se quiere avanzar pero después se encuentran obstáculos que son agobiantes solamente si se los enfrenta de manera irracional. Uno se da la cabeza contra un muro y se encuentra abatido por ese muro. Se apoya entonces sobre cosas que, por su naturaleza, no ofrecen ninguna seguridad 141 y que son escabrosas para quienes las toman como soporte. Lleno de dudas uno regresa a su casa y allí encuentra una nueva decepción al descubrir que su mujer no está allí. Confucio dice al respecto: “Si un hombre se deja abatir por algo que no debiera agobiarlo, su nombre conocerá seguramente la vergüenza. Si se apoya sobre lo que no hay que apoyarse, su vida estará seguramente en peligro. Quien se encuentra en la vergüenza y el peligro ve aproximarse a él la hora de la muerte. ¿Cómo podrá todavía ver a su mujer?”. Nueve en el cuarto lugar significa: “Viene muy lentamente, agobiado en un carruaje dorado. Humillación, pero finalmente llega”. Un hombre pudiente ve las necesidades de las clases bajas y quisiera voluntariamente ayudarlas. Sin embargo no procede con la rapidez y la energía allí donde es necesario, sino que actúa de manera titubeante y calculada. Las personas ricas y poderosas que conoce lo atraen a su propio círculo. Debe unirse a ellos y no puede de atraerlos. En consecuencia se encuentra muy desconcertado. Pero la adversidad es pasajera. La fuerza original de la naturaleza repara los errores y la meta es alcanzada. Nueve en el quinto lugar significa: “Se tiene la nariz y los pies cortados. Se está agobiado por los hombres de rodilleras púrpuras. La alegría viene lentamente. Es ventajoso presentar ofrendas y libaciones”. Se trata de alguien que desea de todo corazón el bien de la gente pero que está presionado por arriba y por abajo (es el sentido de la nariz y de los pies cortados). No encuentra el apoyo de los hombres cuyo deber sería de contribuir a la obra de ayuda (los ministros llevaban rodilleras púrpuras). Sin embargo las cosas progresan hacia una mejoría. Hasta este momento, es importante conducirse ante dios con un recogimiento interior firme y de ofrecer plegarias y sacrificios por el bienestar general. Seis en la cima significa: “Está agobiado por los juramentos. Se mueve con dificultad y dice: “El movimiento trae remordimientos”. Si se sienten remordimientos por ello y que uno se pone en marcha se obtiene la buena fortuna”. Se está presionado por lazos que se pueden romperse fácilmente. El agotamiento se termina. Sin embargo uno está todavía irresoluto, uno permanece influenciado por la situación anterior y se piensa que podrá arrepentirse de lo que haga. Pero desde que se tenga una visión clara de las cosas, si uno se deshace de esta actitud interior y si toma una firme resolución, se conseguirá a superar las dificultades. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 142 48.- CHING / EL POZO Superior : K'an El Abismo, Agua Inferior : Sun Lo Suave, Viento, Madera. Arriba está el agua, abajo está el bosque, la madera. La madera se entierra para hacer subir el agua. Es la imagen de los pozos de la vieja China donde se extraía el agua con la aguda de un cubo suspendido a una pértiga. La madera no representa los cubos, que eran de arcilla, sino las pértigas cuyo movimiento permitía tirar el agua del pozo. La imagen se aplica igualmente al mundo de las plantas que hacen subir el agua de la tierra por sus fibras. El pozo donde se encuentra el agua contiene además la idea de la nutrición prodigada de manera inagotable. EL JUICIO: “El pozo. El pueblo puede ser cambiado, pero no el pozo. Este no aumenta ni disminuye. Van y vienen del pozo. Si se llega casi hasta el agua y la soga no es suficiente para alcanzarla o si el cántaro se rompe, eso trae desgracia”. En la antigua China las capitales a veces eran transferidas, sea porque un nuevo emplazamiento parecía más favorable, sea porque la dinastía había cambiado. El estilo de los edificios se ha modificado en el curso de los siglos pero la forma del pozo perdura siendo la misma desde la mas alta antigüedad hasta nuestros días. El pozo se encuentra así siendo una imagen de la organización social de la humanidad con relación a una de las necesidades vitales más primitivas. Esta organización es independiente de todas las formas políticas. Las formas políticas, las naciones cambian, pero la vida de los hombres con sus exigencias permanece eternamente la misma. Ella no se deja modificar. Esta vida es igualmente inagotable. Ella no disminuye ni aumenta, y ella existe para todos. Las generaciones van y vienen, y todas gozan de la vida en su abundancia inagotable. De todas maneras, una buena organización política y social requiere una doble condición. Se debe descender hasta los fundamentos de la vida misma. Toda actitud superficial en el establecimiento de las reglas de vida, dejando insatisfechas las necesidades vitales, es tan imperfecta que la ausencia de toda tentativa de reforma. Es igualmente mala la negligencia que hace que el cántaro se rompa. Si por ejemplo la defensa militar de un Estado es llevada a tal exceso que provoque la guerra y lleve así a la destrucción del Estado, eso equivale al cántaro que se rompe. El hexagrama se aplica de la misma manera a los individuos. Las diferentes disposiciones y la educación distinta entre los hombre inducen a una diversidad entre los pueblos. Pero la naturaleza humana en el fondo es siempre la misma todos los hombres. El hombre puede, en el curso de su formación, extraer de la fuente inagotable de la naturaleza divina que es la esencia del hombre. Pero allí dos peligros lo 143 amenazan : el primero es que el hombre no la penetre, en el curso de fu formación, hasta las verdaderas raíces de la humanidad, sino que se quede prisionero de las convenciones (tal formación es tan mala como la ausencia de formación) y el segundo, que se hunda bruscamente abandonando la formación de su ser. LA IMAGEN: “Agua sobre madera: la imagen del pozo. El hombre noble anima a la gente a su trabajo y los exhorta a ayudar a los demás”. Abajo está el trigrama Sun, el viento, el bosque; arriba, el trigrama K’an, el agua. El bosque aspira el agua hacia lo alto. Lo mismo que el bosque, en tanto que organismo, imita la acción del pozo y procura el bien de todas las partes de la planta, el hombre noble ordena la sociedad humana de tal manera que, como en el organismo vegetal, sus miembros cooperen con el bien de todos. LAS LINEAS: Seis en la base significa: “El barro del pozo no es bebido. Ni siquiera los animales van a un pozo viejo”. Si alguien yerra en llanuras pantanosas, su vida se hunde en el cieno. Tal persona ya no significa nada para la humanidad. Quien se desprecia a sí mismo ya no ve a los que vienen hacia él. Finalmente la persona ya nadie de preocupa de él. Nueve en el segundo lugar significa: “Alguien pesca en la boca del pozo. El cántaro se rompe y gotea”. El agua por sí misma es clara, pero no es utilizada. Por eso solo los peces viven en los pozos y si alguien viene es solo para capturar los peces. Pero el cántaro está roto y ya no puede guardar los pescados. Así es descrita una situación donde alguien dotado de buenas cualidades pero las descuida. Nadie se preocupa de él. En consecuencia se degrada interiormente. Se asocia con seres ordinarios y ya no puede cumplir una tarea valorable. Nueve en el tercer lugar significa: “El pozo está limpio, pero nadie bebe en él. Esta es la pena de mi corazón, que nadie lo aproveche. Si el rey tuviera un entendimiento claro la buena fortuna se lograría en común”. Aquí se está en presencia de alguien de valor. Es semejante a un pozo limpio del cual podría beberse el agua pero que no es utilizado. Es la pena de aquél que lo sabe. Se enuncia el deseo de que el príncipe se dé cuenta, puesto que eso sería una fuente de alegría para todos los que son concernidos. Seis en el cuarto lugar significa: “El pozo fue revestido. Sin reproches”. 144 Cuando se reviste un pozo su agua no puede ser bebida mientras duren los trabajos, pero no es un trabajo en vano puesto que el agua permanece clara. En la vida también hay períodos donde se debe poner el orden en sí mismo. Sin duda durante ese tiempo uno no puede hacer nada por los otros, pero esos momentos son de gran riqueza, puesto que su propia fuerza y sus capacidades se intensifican por el desarrollo interior, de tal manera después que se puede actuar mejor. Nueve en el quinto lugar significa: “En el pozo hay una fuente clara y fresca, uno puede beber de él”. Es un pozo excelente en el fondo del cual hay una fuente de agua vida. Un hombre que posee tales virtudes ha nacido para liberar y guiar sus semejantes. El posee el agua viva. Sin embargo, el carácter “afortunado” no está mencionado. Lo esencial de un pozo es que su agua sea extraída. Para refrescar los seres humanos, la mejor agua de un pozo es solo una posibilidad si ella no es extraída. De la misma manera, lo esencial para los guías de la humanidad es que se beba de su fuente, que sus palabras se transformen en vida. Seis en la cima significa: “Saca el agua del pozo sin obstáculos. Es seguro. Gran fortuna”. El pozo está allí para todos. A nadie se prohíbe sacar agua de él. No importa cuántos vengan, todos encontrarán lo que necesiten, puesto que es un pozo fiable. Posee una fuente y nunca se seca, es una gran fortuna para todo el pueblo. Es igual con el hombre realmente grande, que posee un tesoro inagotable de excelencia interior; mientras más se obtenga de él, más rico se hace. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 49.- KO / LA REVOLUCIÓN ( La muda ) Superior : Tui, Lo Gozoso, Lago. Inferior : Li, Lo Oscilante, Fuego. El sentido primitivo del signo correspondiente al hexagrama es el de la piel que muda en el transcurso del año transformando al animal. A partir de allí el término se aplica a los cambios que se producen en la vida del estado, a las grandes revoluciones ligadas a un cambio de régimen. Los dos signos cuya unión forma el hexagrama son, como en el hexagrama N° 38, (K'uei “la 145 Oposición”), las dos hijas más jóvenes, Li y Tui. Pero mientras que en K'uei la mayor de las dos está arriba, de lo que resulta esencialmente una oposición de tendencias, aquí es la más joven que ocupa el lugar superior y los efectos se enfrentan mutuamente; las fuerzas se combaten como el fuego y el agua (el lago), cada una buscando destruir a la otra. De allí la idea de revolución. EL JUICIO: “Revolución. En tu propio día eres creído. La perseverancia favorece el mayor éxito. Los remordimientos se disipan”. Las revoluciones políticas son asuntos extremadamente graves. Solo deben ser emprendidas en caso de extrema necesidad y únicamente cuando no hay otra salida. No todos están llamados a tal acción, sino sólo aquél que goza de la confianza del pueblo y no la emprenderá hasta que la época sea propicia. En un asunto semejante, es necesario proceder de manera correcta para que pueda complacer al pueblo y aclararlo evitando los excesos. Además se debe permanecer libre de toda intención egoísta y preocuparse realmente de las necesidades del pueblo. Es solamente en esas condiciones que no hay lugar para los remordimientos. Los tiempos cambian y en consecuencia las exigencias devienen diferentes. Así como cambian las estaciones en el curso del año, también hay una primavera y un otoño en los pueblos y las naciones del universo, que exigen transformaciones sociales. LA IMAGEN: “Fuego en el Lago. La imagen de la revolución. Así el hombre noble regula el calendario y aclara el tiempo”. El fuego arriba y el lago abajo se combaten y se destruyen mutuamente. Así, de una manera semejante, en el curso del año se libra un combate entre las fuerzas luminosas y las fuerzas oscuras que da lugar al cambio de estaciones. El hombre puede controlar los cambios de la naturaleza cuando reconoce su regularidad y concierta con ella el paso del tiempo. Es así como el orden y la claridad son introducidos en la apariencia caótica de la sucesión temporal y como uno puede adaptarse por anticipado a las diferentes exigencias de cada época. LAS LINEAS: Nueve en la base significa: “Uno está envuelto en el cuero de una vaca amarilla”. Los cambios deben emprenderse solo cuando ya no quede otra posibilidad. Es por eso que al principio una extrema reserva es necesaria. Se debe mantener la moderación y la firmeza interior (el amarillo es el color del medio y la vaca es el símbolo de la docilidad). Al comienzo nada debe emprenderse 146 precipitadamente, consecuencias. puesto que toda ofensiva prematura trae malas Seis en el segundo lugar significa: “En el día propicio se puede emprender una revolución. Partir trae buena fortuna. Sin reproches”. Cuando se ha intentado por todos los medios de realizar las reformas sin éxito, la revolución se hace necesaria. Sin embargo, tal revolución radical debe ser bien preparada. Es necesaria la presencia de alguien que posea los méritos requeridos y que tenga la confianza del pueblo. Uno debe orientarse hacia tal hombre. Eso trae la fortuna y no constituye una falta. Lo que importa ante todo es la actitud interior hacia el nuevo orden que ha de establecerse. Es decir, que ir a su encuentro es la sola manera de prepararse. Nueve en el tercer lugar significa: “Partir trae desgracia. La perseverancia acarrea el peligro. Si el discurso de la revolución ha dado la vuelta tres veces, uno puede confiar en él y hallará la fe”. Cuando el cambio es necesario hay que evitar dos errores. El primero es la excesiva prisa y la precipitación que pueden conducir al desastre. El otro es una hesitación extremadamente conservadora que es igualmente peligrosa. No se debe escuchar cualquier discurso invitando al cambio del statu quo. Sin embargo, tampoco se deben desechar las quejas repetidas y bien fundadas. Cuando las palabras por el cambio han sido emitidas tres veces ante si y uno ha bien reflexionado sobre ello, entonces puede se confiar y actuar en consecuencia. (*) (*) En el cuento “La serpiente verde” de Goethe, la frase “los tiempos han llegado” es repetida tres veces antes de que se produzca la gran transformación. Nueve en el cuarto lugar significa: “El remordimiento se disipa. La fe se reencuentra. Cambiar el orden del estado trae buena fortuna”. Los cambios radicales requieren la autoridad necesaria. Deben estar presentes tanto la fuerza interior del carácter como una posición de influencia. Lo que se haga debe corresponder a una verdad superior y no emanar de intenciones arbitrarias o mezquinas. Entonces se logrará una gran fortuna. Si a una revolución le falta una verdad interior semejante, los resultados siempre serán el fracaso y la maldad. Puesto que los hombres, en definitiva, siempre dan el apoyo a empresas que intuitivamente sienten legítimas. O Nueve en el quinto lugar significa: “El gran hombre cambia como un tigre. Incluso antes de interrogar el oráculo encuentra la convicción”. Una piel de tigre en la que se distinguen claramente las rayas negras sobre el fondo amarillo es visible desde lejos. Lo mismo ocurre cuando la 147 revolución es conducida por un gran hombre. En ese caso, las líneas directivas aparecen grandes y claras de manera que cada uno pueda comprender. Es por eso que el gran hombre no tiene necesidad de consultar el oráculo, puesto que todo el pueblo viene espontáneamente hacia él. Seis en la cima significa: “El hombre noble cambia como una pantera. El hombre cambia de rostro. Partir trae desgracia. Permanecer perseverante trae buena fortuna”. Después que las grandes cuestiones fundamentales han sido arregladas, quedan todavía las cuestiones menores y ciertos detalles a reformar. Estos pueden ser comparados con las manchas de una piel de pantera, igualmente visibles pero más chicas. Por consecuencia, un cambio se produce igualmente en los hombres vulgares. Ellos cambia también de acuerdo al cambio general. Este cambio, ciertamente, no es muy profundo, pero no hay que esperar demasiado. Uno debe contentarse con lo posible. Si se quisiera ir demasiado lejos y esperar demasiadas cosas uno caería en la inquietud y el infortunio. Puesto que aquello a lo cual tiende una gran revolución son las condiciones claras y precisas que afirman una seguridad general dentro de los límites de las posibilidades de la época. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 50.- TING / EL CALDERO Superior : Li Lo Oscilante, Fuego. Inferior : Sun Lo Suave, Viento, Madera. El conjunto del hexagrama ofrece la imagen del caldero. Abajo están los pies, luego la panza, después la orejas - es decir las asas -, y arriba el anillo que sirve para llevarlo. La imagen del caldero evoca al mismo tiempo la idea de la alimentación. El caldero de bronce era el recipiente que en los templos de los ancestros y a la ocasión de los festines, contenía los alimentos cocidos. El jefe de la familia los extraía y los ponía en los cuencos de los invitados. “El pozo” (N° 48) tenía igualmente el sentido secundario de distribución de la alimentación, pero principalmente para el pueblo. El caldero, en tanto que realización de una civilización refinada, evoca los cuidados y la alimentación prodigadas por el gobierno a los hombres de valor (como lo señalan los 4 signos relativos a la alimentación: N°s 5, 27, 48, 50) Junto con «El pozo» son los dos únicos hexagramas que representan objetos artesanales concretos. Pero de todas maneras, la idea de alimentación tiene 148 también un aspecto abstracto. Abajo, Sun es la madera y el viento; arriba, Li, es la llama. El signo representa la llama encendida en la madera y el viento, que evocan igualmente la idea de preparación de los alimentos. EL JUICIO: “El caldero. Suprema fortuna. Éxito”. Mientras que “el Pozo” trata de los fundamentos sociales de la comunidad humana, que es como el agua que sirve de alimento al bosque, aquí se muestra la superestructura cultural de la sociedad. Aquí es el bosque que sirve como alimento a la llama, al principio espiritual. Todo lo visible debe proseguir su evolución y pasar a lo invisible. Así recibe su consagración y la claridad legítimas y arraiga sólidamente en el conjunto del universo. Aquí se muestra la cultura que culmina en la religión. El caldero sirve a los sacrificios divinos. Lo más elevado en el orden terrestre debe ser ofrecido a la divinidad. Pero lo que es verdaderamente divino no se manifiesta por separado de lo humano. La manifestación suprema de dios se encuentra en los profetas y los santos. Honrarlos es la verdadera manera de honrar a Dios. La voluntad de Dios que se revela a través de ellos debe ser acogida con humildad; se produce entonces una iluminación interior y una inteligencia verdadera del universo que conducen a una gran fortuna y un gran éxito. LA IMAGEN: “Sobre la leña está el fuego. La imagen del caldero. Así el hombre noble asegura su destino manteniendo una posición correcta”. La leña es el destino del fuego; en tanto que abajo hay leña, arriba arde el fuego. Ocurre lo mismo en la vida humana. Igualmente hay en el hombre un destino al que la vida da fuerza. Y cuando eso sucede, la vida y el destino tienen su justo lugar, y el destino se fortifica poniendo íntimamente la vida de acuerdo con él. Estas palabras contienen las indicaciones sobre la manera de cultivar la vida, tal como ellas se transmiten oralmente en la enseñanza secreta del yoga práctico chino. LAS LINEAS: Seis en la base significa: “Un caldero con patas hacia arriba es ventajoso para vaciarlo de sus restos. Se toma una concubina por amor a su hijo. Sin reproches”. Si se invierte el caldero antes de usarlo no hay en ello ningún daño, por el contrario, así se hacen caer los restos. Una concubina ocupa en principio un lugar inferior, pero si ella tiene un hijo se la honra. 149 Estas dos comparaciones expresan la idea que en las épocas de cultura superior como la evocada en este signo, alguien que tenga buena voluntad puede tener éxito de una manera u otra. No importa lo bajo que esté la posición de la cual provenga, se tendrá éxito a partir del momento que se esté listo para purificarse. Se llega a un estado donde uno puede ocuparse de manera eficaz a sus tareas y ser debidamente reconocido por ello. Nueve en el segundo lugar significa: “En el caldero hay comida. Mis camaradas tienen envidia pero no pueden hacerme daño. Fortuna”. En épocas de cultura superior es de gran importancia poder efectuar algo exitoso. Si uno se concentra sólo en esas tareas positivas, se puede experimentar, es cierto, la envidia y la desaprobación de los demás, pero ello no es peligroso. Mientras más uno se limite a sus tareas positivas, menos será molestado por los envidiosos. Nueve en el tercer lugar significa: “El asa del caldero fue cambiada. Uno encuentra su camino obstaculizado. La grasa, del faisán no se come. Desde que cae la lluvia los remordimientos se disipan. Finalmente llega la fortuna”. El asa es el lugar por el cual se levanta el caldero. Cuando se cambia el asa de lugar ya no puede levantar y utilizar el caldero, y la excelente alimento que contiene, como la grasa de faisán, ya no pueden ser comida por nadie. Con esto se designa alguien que, en una época de alta civilización, se encuentra en una posición donde nadie lo reconoce ni le presta atención. Esto pone un serio obstáculo en su acción. Todas sus buenas cualidades y todos los dones de su espíritu están desperdiciados. Sin embargo, se debe solamente poner atención a poseer realmente en sí mismo los bienes espirituales de valor. Entonces vendrá seguramente el tiempo donde los obstáculos desaparezcan y donde todo irá bien. El fin de la tensión está representado aquí, como en otras partes, por la caída de la lluvia. Nueve en el cuarto lugar significa: “Los pies del caldero se rompen. La comida del príncipe se derrama y su persona se ensucia. Desgracia”. Se está frente a una tarea grave y llena de responsabilidades y uno no se siente capaz de llevarla a cabo. Además, uno no se dedica a ella con todas sus fuerzas sino que prefiere a la gente inferior. En consecuencia la ejecución de la tarea fracasa. Y uno se mete por sí mismo en una situación de oprobio y humillación. Confucio dice al respecto: “un carácter débil en un lugar honorable, poco saber para realizar grandes designios, fuerza débil y grandes responsabilidades, escapan raramente al infortunio”. O Seis en el quinto lugar significa: “El caldero tiene asas amarillas, anillos dorados. La perseverancia es ventajosa”. 150 Se tiene aquí, ocupando puesto de autoridad, a un hombre de naturaleza asequible y humilde. Como resultado de esta actitud logra encontrar asistentes fuertes y capaces que lo complementan y lo secundan en su tarea. Es importante que un hombre que haya adoptado tal actitud que requiere una abnegación constante se mantenga firmemente en ella sin dejarse desviar. O Nueve en la cima significa: “El caldero tiene asas de jade. Inmensa fortuna. Nada puede dejar de ser ventajoso”. La precedente línea describía las asas como doradas para denotar su fuerza; aquí el jade simboliza la combinación dé dureza con suavidad. Los consejos, considerados con respecto a la persona que los recibe, pueden ejercer un efecto muy favorable. Aquí está presentado con relación al sabio que los da: cuando aconseja, éste es suave y puro como el jade precioso. De esta manera la obra encuentra la gracia a los ojos de lo divino que otorga una gran fortuna, y ella es agradable a los ojos de los hombres. Es por eso que toda va bien. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 51.- CHEN / LA EXCITACIÓN (La conmoción, el Trueno) Superior : Chen El Despertar, Trueno Inferior : Chen El Despertar, Trueno. El hexagrama Chen representa al hijo mayor que toma el comando con energía y poder. Un trazo yang aparece sobre dos trazos yin y ejerce un potente empuje hacia arriba. Este movimiento es tan violento que suscita el terror. Tiene por imagen el trueno que surge de la tierra y cuya conmoción provoca el pánico y el temblor. EL JUICIO: “El conmoción trae éxito. La conmoción viene -oh, oh! Riendo- ah, ah! La conmoción aterroriza por cien millas y no hay que dejar caer la cuchara de los sacrificios y el cáliz”. El conmoción que proviene de las manifestaciones de Dios desde las profundidades de la tierra hace temer al hombre, pero es bueno que tema a Dios, su alegría y regocijo pueden venir a continuación. Cuando un hombre aprendió interiormente lo que significan el temor y el temblor, está a salvo de las conmociones que podrían causar las influencias exteriores. Aunque el 151 trueno retumbe al punto de sembrar el terror a cien millas alrededor, se permanece interiormente tan lleno de calma y de veneración que no interrumpe los ritos de sacrificio. Tal gravedad profunda e íntima sobre la cual vienen a rebotar, impotentes, los motivos exteriores de temor es la disposición espiritual que deben poseer los guías de los hombres y los soberanos. LA IMAGEN: “Trueno repetido: la imagen de la conmoción. A través del temor y el temblor el hombre noble pone su vida en orden y se examina a sí mismo”. La conmoción que traen los truenos repetidos aporta con ella el miedo y el temblor. Así el hombre noble observa siempre una actitud de reverencia ante las manifestaciones de Dios; pone el orden en su vida y examina su corazón para preservar de que nada se oponga a la voluntad divina. Así, el temor es el fundamento de la verdadera vida. LAS LINEAS: O Nueve en la base significa: “El conmoción viene - oh, oh! Le suceden las palabras risibles -ah, ah! Fortuna”. El temor y temblor engendrados por una conmoción hacen que el individuo comience por sentirse colocado en desventaja en relación a los demás. Pero esto es sólo transitorio. Cuando uno a atravesado la prueba del juicio, se produce un alivio. Así, cuando el terror sentido al principio se disipa, trae la fortuna Seis en el segundo lugar significa: “La conmoción viene trayendo peligro. Cien mil veces pierdes tus tesoros y debes trepar las nueve colinas. No los persigas. Después de siete días volverán otra vez”. Aquí se indica una situación donde alguien a sido puesto en peligro por una conmoción y que debe soportar graves prejuicios. Las condiciones son tales que toda resistencia sería contraria a la dirección del movimiento de la época y, por consecuencia, infructuosa. Por eso hay que aceptar de retirarse sobre alturas inaccesibles al peligro que amenaza. Se debe aceptar la pérdida de sus bienes y ello no deberá lamentarse demasiado. Sin correr detrás de los bienes perdidos se los recuperara naturalmente una vez que pase la época de las conmociones que se los habían llevado. Seis en el tercer lugar significa: “La conmoción viene y provoca el desamparo. Si se actúa en consecuencia de la conmoción uno estará libre de disgustos”. Hay tres tipos de conmociones: la conmoción del cielo, que es el trueno; la conmoción del destino y finalmente la conmoción de los corazones. Aquí se trata menos de una conmoción interior que de una conmoción del destino. 152 En tales momentos de conmoción se pierde muy fácilmente la presencia de ánimo, uno desecha todas las posibilidades de acción y deja silenciosamente que el destino siga su curso. Pero si uno permite que la conmoción del destino se transforme en reacción del corazón se superarán los golpes del destino sin grandes dificultades. Nueve en el cuarto lugar significa: “La conmoción se empantana”. El éxito del impulso interior depende también parcialmente de las circunstancias. Cuando éstas son talles que uno no se encuentra en presencia ni de una resistencia que pueda combatir enérgicamente ni de una capitulación que permita obtener ampliamente la victoria, todo deviene viscoso y blando como el fango y el movimiento se paraliza. Seis en el quinto lugar significa: “La conmoción va de aquí para allá: peligro. Pero finalmente nada se pierde, solo hay cosas para hacer”. Aquí no se trata de una sola conmoción sino de muchas, que no dejan ni siquiera el tiempo de recuperar el aliento. Sin embargo, la conmoción no ocasiona pérdidas pues se toma la precaución de permanecer en el centro del movimiento y, por consecuencia, de liberarse del riesgo de verse lanzado de aquí para allá, sin defensas, por el destino. Seis en la cima significa: “La conmoción trae ruina y miradas angustiadas a todo lo que rodea. Avanzar trae el infortunio. Si éste todavía no ha alcanzado nuestro cuerpo, pero comienza a tocar a nuestro vecino, no hay reproches. Los compañeros tienen de qué hablar”. Cuando la conmoción interior ha alcanzado su punto más alto de intensidad, uno se encuentra privado de la facultad de reflexión y de una visión clara. Naturalmente, en una conmoción semejante, no es posible actuar con prudencia. Entonces, la actitud justa es guardar silencio hasta que se haya recuperado la calma y la claridad. Sin embargo, solamente se puede actuar de esta manera si uno todavía no se ha dejado ganar por la conmoción de la cual ya pueden observarse los efectos nefastos en nuestro entorno. Cuando uno se retira a tiempo de la acción, permanece libre de faltas y de daños. Pero uno puede estar seguro que los compañeros que, envueltos en ese torbellino, ya no admiten las advertencias, no estarán satisfechos de una conducta semejante. Uno debe limitarse a ignorar tal actitud. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 153 52.- KEN / LA INMOVILIDAD, LA MONTAÑA Superior : Ken, La Inmovilidad, la Montaña. Inferior : Ken, La Inmovilidad, la Montaña. La imagen del hexagrama es la montaña, el más joven de los hijos del cielo y de la tierra. El principio masculino está arriba y sigue en ello su dirección natural; el principio femenino está abajo, conforme al sentido de su movimiento. Entonces, un estado de reposo se ha establecido puesto que el movimiento a alcanzado su fin normal. Aplicado al hombre, el hexagrama trata del problema de conseguir la paz del corazón. El corazón es muy difícil de calmar. Mientras que el budismo se esfuerza por alcanzar el reposo por la cesación de todo movimiento en el estado de nirvana, el punto de vista del Libro de las Transformaciones es que el reposo constituye solamente un estado polar que siempre tiene como complemento el movimiento. Es posible que el texto contenga alusiones a las prácticas de yoga. EL JUICIO: “La espalda está tan bien inmovilizada que ya no siente más su cuerpo. Entra en la corte y no ve más a los suyos. Sin reproches.” El verdadero reposo es aquél donde el hombre se detiene cuando el movimiento se detiene y se mueve cuando ha llegado el momento de moverse. Así el reposo y el movimiento están en armonía con las exigencia del tiempo y entonces se ve nacer la luz y la vida. El hexagrama es el fin y el comienzo de todo movimiento. Se menciona la espalda porque ella es la sede de todos los centros nerviosos que transmiten el movimiento. Cuando se hace detener el movimiento de los nervios dorsales, se ve en cierta manera que el ego y su inquietud se desvanecen. Cuando el hombre ha alcanzado una semejante paz interior puede retornarse hacia el mundo exterior. Entonces deja de percibir en él la lucha y el tumulto de los seres individuales y tiene en consecuencia la calma necesaria para comprender las grandes leyes de los fenómenos universales y acordar con ellos su conducta. Quien actúa a partir de tal profundidad ya no comete faltas. LA IMAGEN: “Las montañas reunidas, la imagen de la inmovilidad. Así el hombre superior no deja que sus pensamientos desborden su situación.” El corazón piensa constantemente. Esto no puede ser cambiado, pero el movimiento del corazón, es decir, los pensamientos, deben restringirse a la 154 situación vital inmediata. Todos los sueños y las especulaciones que van demasiado lejos solo hieren el corazón. LAS LINEAS: Seis en la base significa: “Inmovilidad de sus dedos del pié. Sin reproches. La perseverancia perdurable es ventajosa”. Mantener los dedos de los pies quietos significa mantenerse de pie antes comenzar a moverse. El comienzo es la época donde se cometen menos errores. Se está todavía en armonía con la inocencia original. Las cosas se ven intuitivamente tal como son, sin estar todavía influenciadas por el oscurecimiento que introducen el interés y el deseo. Quien se mantiene inmóvil al comienzo todavía no ha abandonado la verdad y puede encontrar la dirección justa. Es necesario solamente una firmeza constante para no dejarse bambolear sin voluntad. Seis en el segundo lugar significa: “Inmovilidad de sus pantorrillas. No se puede rescatar al que sigue. Su corazón no está contento”. La pierna no puede moverse de una manera autónoma, sino que depende del movimiento del cuerpo. Cuando el cuerpo ha entrado en un movimiento rápido y que la pierna es interrumpida bruscamente, el cuerpo prosigue el movimiento pero el hombre se cae. Lo mismo ocurre con un hombre que está al servicio de alguien mucho más poderoso que él mismo y es arrastrado en su movimiento. Incluso si se encuentra en el camino de la injusticia, ya no podrá detenerse puesto que su movimiento está ligado al movimiento general. Cuando el patrón incite al avance, el sirviente no podrá detenerse aunque tenga las buenas intenciones de hacerlo. Nueve en el tercer lugar significa: “Inmovilidad de sus caderas. Entumecimiento del hueso sacro. Peligro. El corazón se sofoca”. Aquí se trata del reposo obtenido por la fuerza. El corazón inquiero debe ser domado con energía. Pero cuando se trata de sofocar el fuego se transforma en una humareda acre que sofoca a quien la aspira. Por la misma razón no se debe usar la violencia en los ejercicios de meditación y de concentración. La calma debe surgir y extenderse naturalmente desde un estado de recogimiento interior. Si uno trata de imponer la calma mediante una rigidez artificial, la meditación sólo conducirá a resultados deplorables. Seis en el cuarto lugar significa: “Inmovilidad del tronco. Sin reproches”. Como se ha dicho más arriba en “el juicio”, mantener la espalda en reposo significa olvidar el ego. Es el más alto estado de reposo. Aquí esa etapa todavía no se ha alcanzado. Sin dudas, uno se siente capaz de mantenerse con sus pensamientos e impulsos en un estado de descanso, pero todavía no 155 se ha liberado completamente. Mantener el corazón en reposo es una función importantísima que lleva con el tiempo a la eliminación total de los deseos egoístas. Incluso si uno aun no se encuentra totalmente libre de todos los peligros de la duda y de la inquietud, la disposición interior que abre el camino a otra más elevada no es una falta. Seis en el quinto lugar significa: “Inmovilidad de sus mandíbulas. Las palabras tienen un orden. Los remordimientos desaparecen”. En una situación peligrosa, sobre todo cuando uno no es capaz de hacerle frente, uno echa mano fácilmente a palabras y chistes presuntuosos. Pero los propósitos imprudentes conducen a menudo a situaciones de las cuales uno tiene mucho que lamentar. Además, si uno mantiene la reserva en el discurso, las palabras siempre tendrán un significado más consistente y entonces desaparecerá todo motivo arrepentimiento. O Nueve en la cima significa: “Inmovilidad magnánima. Fortuna! ”. Aquí se expresa la consumación del esfuerzo por obtener la tranquilidad. No solamente uno está en paz en lo que concierne a los detalles, las cosas comprendidas dentro de un círculo restricto, sino también un renunciamiento general que produce la paz en todos los dominios y una buena fortuna en todos los asuntos. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 53.- CHIEN / EL DESARROLLO (El progreso gradual) Superior : Sun, Lo Suave, Viento, Madera Inferior : Ken, La Inmovilidad, la Montaña. El hexagrama se compone arriba o al exterior de Sun, la madera, la penetración y abajo o al interior de Ken, la montaña, la inmovilidad. Un árbol sobre una montaña se desarrolla lentamente y siguiendo un orden; es por eso que después se erige sólidamente enraizado. De allí nace la idea de un desarrollo que progresa gradualmente, paso a paso. Las propiedades de los trigramas se refieren igualmente a esas nociones: al interior se encuentra el reposo que preserva de las acciones precipitadas y al exterior la penetración, que hace posible el desarrollo y el progreso. 156 EL JUICIO: “El desarrollo. La doncella fue dada en matrimonio. Buena fortuna. La perseverancia es ventajosa”. El desarrollo de los acontecimientos que llevan a una muchacha a seguir a un hombre a su hogar es lento y titubeante. Varias formalidades deben ser dispuestas antes que el matrimonio tenga lugar. Este principio de desarrollo gradual puede aplicarse a otras situaciones; especialmente cuando se trata de relaciones correctas, de cooperación, como por ejemplo la manera como se enrola a un funcionario. Hay que vigilar a que el procedimiento siga una progresión armoniosa. La precipitación no conduce a algo bueno. Es lo mismo cuando se quiere ejercer una influencia sobre los otros, el camino correcto es la progresión armoniosa de la cultura de su propia personalidad. Toda influencia fundada sobre la agitación no tendría efectos duraderos. Asimismo, la evolución interior debe tomar el mismo camino si se quieren obtener resultados durables. Lo suave que se adapta al mismo tiempo que ejerce un empuje es el exterior que debe proceder de la paz interior. Es precisamente el carácter gradual del desarrollo lo que hace posible la perseverancia necesaria, puesto que solamente la perseverancia hace que el progreso lento no se pierda en la arena. LA IMAGEN: “En la montaña, un árbol. La imagen del desarrollo. El hombre noble se sostiene en la dignidad y la virtud para mejorar las costumbres”. El árbol sobre la montaña resulta visible desde lejos y su desarrollo modifica el paisaje de toda la región. No aparecen de repente como las plantas de una región pantanosa, sino que su crecimiento progresa lentamente. Igualmente, la acción sobre los hombre solo puede gradual. Ninguna influencia repentina ni ningún despertar inesperado tienen efecto durable. Para realizar este progreso en la mentalidad y las costumbres publicas, es indispensable que la personalidad adquiera influencia y aplomo. Eso se obtiene mediante un trabajo minucioso y perseverante que tiende al desarrollo personal. LAS LINEAS: Seis en la base significa: “El ganso salvaje gradualmente se acerca a la orilla. El hijo joven esta en peligro. Hay habladurías. Sin reproches”. Los diferentes trazos del hexagrama representan el vuelo progresivo del ganso salvaje. El ganso salvaje es el símbolo de la fidelidad conyugal. Se dice que después de la muerte de su compañera, esta ave no se une a otra. El trazo inicial designa la primera estación de un ave acuática cuando vuela del agua hacia el cielo. Ha alcanzado la orilla. La situación es la de un joven hombre solitario que quiere comenzar su camino en la vida. Como no hay nadie que viene ante él (para ayudarlo), sus primeros pasos son lentos y 157 vacilantes y está rodeado de peligros. Naturalmente es el objeto de críticas frecuentes. Pero son precisamente las dificultades que le impiden una prisa excesiva y eso hace que su progreso sea coronado por el éxito. O Seis en el segundo. lugar significa: “El ganso salvaje se dirige progresivamente hacia el acantilado. Comer y beber en paz y concordia. Buena fortuna”. Los acantilados son lugares seguros de la orilla. El desarrollo ha progresado un paso. Se ha superado la incertidumbre inicial y uno se encuentra en una posición segura gracia a la que se tiene lo suficiente para vivir. Este primer éxito que se obtiene por vías de la actividad procura un cierto buen humor y uno se dirige tranquilamente hacia el avenir. Se dice que el ganso salvaje llama a sus compañeros cuando encuentra alimento, es la imagen de la paz y de la concordia en la felicidad. No se quiere solamente la felicidad para sí mismo, sino que se está dispuesto a compartirla con los otros. Nueve en el tercer lugar significa: “El ganso salvaje gradualmente se acerca a la meseta. El hombre sale y no vuelve. La mujer lleva un niño (en su vientre) pero no da a luz. Desgracia. Es conveniente defenderse contra los ladrones”. La alta meseta es un lugar seco e inapropiado para el ganso salvaje. Si toma esa dirección es que ha perdido el camino y se ha avanzado demasiado lejos. Esto es contrario a las leyes del desarrollo. Es lo mismo en la vida humana. Si no dejamos que las cosas evolucionen espontánea y gradualmente sino que se toma por sí mismo la iniciativa y uno se lanza precipitadamente en la lucha, se atraerá el infortunio. Se arriesga la propia vida y además se lleva a su familia a la ruina. Pero de ninguna manera tal resultado es inevitable, sino que es solamente la consecuencia de la transgresión del hombre de la ley del desarrollo natural. Si uno no busca por sí mismo el conflicto sino que se mantiene rigurosamente en su lugar defendiéndose contra los ataques injustos, todo irá bien. Seis en el cuarto lugar significa: “El ganso salvaje se acerca gradualmente al árbol. Puede que encuentre una rama plana. Sin reproches”. Un árbol no es un lugar adecuado para un ganso salvaje. Pero si es inteligente podrá encontrar una rama plana en la que pueda posarse. La vida de un hombre también lo enfrenta a menudo con situaciones inadecuadas en las cuales resulta difícil mantenerse sin peligro. Es importante ser inteligente y flexible. Ello permitirá encontrar en medio del peligro un lugar seguro donde sea posible vivir. Nueve en el quinto lugar significa: “El ganso salvaje gradualmente se acerca a la cumbre. Por tres años la mujer no tiene hijos. Al final nada puede impedírselo. Buena fortuna». 158 La cumbre está en el lugar más alto, En tal posición es fácil quedarse aislado. Uno no es reconocido ni por las personas más próximas: la mujer por su marido, el funcionario por su jefe. Ello ocurre a menudo con las personas que han escalado posiciones y que se encuentran por medios fraudulentos en puestos que no merecen. El resultado es que las relaciones son estériles y que no se logra nada positivo. Pero el desarrollo tiene como consecuencia que a la larga tales malentendidos se resuelvan y que la reconciliación permita superarlos. Nueve en la cima significa: “El ganso salvaje gradualmente se acerca a las cumbres entre las nubes. Sus plumas pueden ser usadas para las danzas sagradas. Buena fortuna”. La vida llega a su fin. El trabajo terminado está allí. El camino lleva cada vez más alto hacia el cielo como el vuelo de los gansos salvajes cuando se han alejado dejando bien abajo el suelo terrestre. Ellos vuelan manteniendo una formación estricta y ordenada. Y si sus plumas caen, ellas podrán servir como ornamentos para las danzas sagradas de los templos. La vida de un hombre que se ha perfeccionado a sí mismo constituye una luz para la gente de la tierra que lo toman como un modelo a seguir. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 54.- KUEI MEI / LA DONCELLA CASADERA Superior : Chen Lo que Despierta, Trueno Inferior : Tui Lo Gozoso. Lago. Arriba está Chen, el hijo mayor y abajo Tui, la hija menor. El hombre conduce y la muchacha lo sigue con satisfacción. Se pinta la entrada de una muchacha en la casa de su esposo. Muestra la entrada una joven en la casa de un hombre mayor. Hay en totalidad cuatro signos que describen las relaciones entre esposos. El N° 31, Hsien, la influencia, que describe la atracción mutua que experimentan los miembros de una pareja joven. Le N° 32, Heng, la duración, representa la situación durable que es la del matrimonio. El N° 53, Chien, el desarrollo, ofrece un cuadro completo de las formas de duda y de ceremonia que acompañan la conclusión de un matrimonio celebrado según las reglas. Y en fin, Kuei mei (el matrimonio de la joven) que muestra un hombre de cierta edad seguido por la joven muchacha con la que se casa. Nota: en la China la monogamia es una regla. Cada hombre tiene solamente una esposa oficial. Esta unión, que concierne menos a los dos contrayentes 159 que a la institución familiar, es contraída siguiendo una estricta observación de las formas. Sin embargo, el hombre está autorizado a escuchar las tiernas inclinaciones personales, y es el más gracioso deber de una buena esposa de prestarle ayuda en estas ocasiones. La relación que se establece así se ornamenta de belleza y de claridad. La joven muchacha que, elegida por el hombre, entra en una familia se somete modestamente a la dueña de casa como una hermana menor. Se trata, bien entendido, de cuestiones delicadas y espinosas, que necesitan de mucho tacto de una parte y otra. Sin embargo, si las circunstancias son favorables, una solución se aporta así a un problema que la civilización europea no pudo resolver. Es sobreentendido que en la China una mujer puede no corresponder completamente al ideal, como en consonancia, el común de las parejas europeas no corresponde con el ideal europeo de matrimonio. EL JUICIO: “La doncella casadera. Las empresas traen desgracia. Nada que sea ventajoso”. Una muchacha a quien llevan a una familia, sin que sea la esposa principal debe conducirse con mucha circunspección y reserva. No debe decidir de suplantar a la dueña de casa porque ello significaría el desorden y la situación devendría insostenible. Ello se aplica a todas las relaciones libres entre los humanos. Mientras que las relaciones ordenadas regularmente traducen una unión de deber y de derecho, las relaciones humanas fundadas sobre una inclinación se basan, si ellas deben durar, sobre una reserva llena de tacto. Esta inclinación como principio de las relaciones es de una gran importancia en todas las condiciones del universo, puesto que la existencia de la naturaleza entera reposa sobre la unión del cielo y de la tierra; igualmente en los seres humanos, la libre inclinación como principio de unión constituye el alfa y el omega. LA IMAGEN: “Trueno sobre el lago: la imagen de la doncella casadera. Así el hombre noble comprende las cosas pasajeras a la luz de la eternidad final”. El trueno remueve el agua del lago, que sigue su impulso con olas resplandecientes. Es la imagen de la joven muchacha que sigue al hombre de su elección. Sin embargo, toda unión recíproca de los humanos contiene en ella un peligro, que elementos turbios se infiltren, trayendo malentendidos y desagrados infinitos. Por eso es importante de nunca perder de vista la finalidad. Si se cede a los impulsos uno se reúne y se separa siguiendo la inspiración del momento. Si por el contrario se tiene siempre presente ante los ojos la finalidad, se llegará a evitar los escollos que surgen inevitablemente en las relaciones recíprocas entre los humanos. 160 LAS LINEAS: Nueve en la base significa: “La doncella casadera como concubina. Un cojo que es capaz de caminar. Las empresas traen fortuna”. Los príncipes de la antigüedad instituían un orden de presencia muy estricto entre las damas del palacio que estaban subordinadas a la reina como las hermanas más jóvenes a la mayor. Además, ellas pertenecían frecuentemente a la familia de la reina que las presentaba ella misma a su esposo. El sentido es que una muchacha joven que, de acuerdo con la esposa principal, hace su entrada en una familia, no fichará la igualdad de rango con la dueña de casa, sino que se eclipsará modestamente ante ella. Sin embargo, si ella comprende la manera como ella debe adaptarse al conjunto de la situación, ella recibirá un lugar del cual ella estará completamente satisfecha y se refugiará en el amor del esposo a quien ella de hijos. El mismo significado aparece en las relaciones entre los señores y los servidores. Puede ocurrir que un príncipe tenga en su entorno a un hombre a quien él testimonia personalmente amistad y acuerda su confianza. Este hombre debe observar las apariencia y eclipsarse con tacto detrás del ministro oficial. Pero, bien que tal situación lo mantenga impedido como a un cojo, el no deja de ser capaz de cumplir una obra gracia a la excelencia de su naturaleza. Nueve en el segundo lugar significa: “Un tuerto es capaz, de ver. La perseverancia de un hombre solitario es ventajosa”. La situación es la de una muchacha casada con un hombre que la desilusiona. Marido y mujer deben complementarse como los dos ojos. Aquí la muchacha queda abandonada a la soledad; el hombre que eligió ha devenido infiel o se murió. Pero ella no pierde la verdadera luz interna. A pesar de que su segundo ojo se haya apagado, ella permanece resueltamente leal, incluso en la soledad. Seis en el tercer lugar significa: “La doncella casadera como una esclava. Ella se casa como concubina”. Una muchacha en posición inferior que no puede encontrar marido, todavía puede, en ciertas circunstancias, encontrar refugio aceptando el rol de concubina. La situación descripta en la de una persona que desea con demasiado ardor lo que es imposible de obtener de manera normal. Se somete a una situación que no es compatible con la estima que se tiene a sí misma. El oráculo no aporta ni juicio ni advertencia sino que se limita a exponer la situación con el fin de cada uno pueda aprender la lección y elegir por sí mismo. 161 Nueve en el cuarto lugar significa: “La doncella casadera retarda el momento. Un matrimonio tardío viene a su debido tiempo”. Se trata de una joven virtuosa que no fallar y que deja pasar por esta razón el momento normal del casamiento. Pero ello no le trae ningún perjuicio. Ella es recompensada por su pureza y al fin encuentra, a pesar de la época tardía, el esposo que le estaba destinado. O Seis en el quinto lugar significa: “El soberano I dio a su hija en matrimonio. Las vestimentas bordadas no eran tan bellas como las de aquéllas que la seguían. La Luna casi llena trae fortuna.” El soberano I es T’ang, el que cumple. Dicta una ley prescribiendo que las princesas imperiales, ellas también, estén sometidas a sus esposos (Ver N°11, trazo 5). El emperador no espera que si hija sea pedida sino que la da en matrimonio en el momento que juzga bueno. Es por ello que si la familia toma la iniciativa, como en el caso presente, el asunto debe conformarse al orden general. Vemos una joven muchacha de alto rango que hace un matrimonio modesto y que sabe adaptarse con gracia a su nueva situación. Está libre de toda vanidad que inspiran los ornamentos exteriores, olvida su rango en el matrimonio y se somete a su esposo, como la Luna que no está todavía llena y que no se ubica directamente frente al Sol. * Seis en la cima significa: “La mujer tiene un cesto pero no hay frutas en él. El hombre apuñala a la oveja pero no mana sangre. Nada que sea ventajoso”. Como sacrificio a los antepasados la mujer debe ofrecer frutos en una cesta y el hombre debe sacrificar animales con sus propias manos. Pero aquí las formas son respetadas sólo superficialmente. La mujer tiene un cesto vacío y el hombre apuñala una oveja ya abatida, solamente para guardar las formas. Esta actitud impía y frívola no es un buen presagio para los esposos. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 55.- FENG /LA ABUNDANCIA ( La plenitud) Superior : Chen, Lo que Despierta, Trueno Inferior : Li, Lo Oscilante, Llama. 162 Chen es movimiento; Li, llama, cuyo atributo es la claridad; Claridad adentro y movimiento afuera producen crecimiento y abundancia. El hexagrama representa una época de civilización avanzada. De todas maneras el hecho de que se trate de un de un pico máximo, ello trae la idea de que estas condiciones de abundancia tan excepcionales que no pueden ser permanentes. EL JUICIO: “La abundancia tiene éxito. El rey alcanza la plenitud. No debes estar triste sino que debes ser como el sol a mediodía”. Instaurar una era de grandeza y de abundancia suprema es un destino que no está reservado a todo mortal. El ser capaz de realizar un obra de ese tipo debe ser un hombre nacido para gobernar los otros porque su voluntad está dirigida hacia lo que es grande. A menudo el tiempo de tal plenitud es corto. Por eso un sabio tendría derecho de estar triste ante la perspectiva de la decadencia que seguirá. Sin embargo, tal tristeza no le conviene. Solo un hombre interiormente libre de inquietud y de tristeza es capaz de traer una era de abundancia. Tiene que ser como el sol a mediodía que ilumine y reconforte todos los seres que están bajo el cielo. LA IMAGEN: “Rayo y trueno vienen juntos: la imagen de la abundancia. El hombre noble decide en los litigios y aplica los castigos”. Este hexagrama presenta una cierta relación con el N° 21 “morder de través” donde el trueno y el rayo están igualmente reunidos, pero en orden inverso. Mientras que allá las leyes eran dictadas con vigor, aquí ellas son aplicadas y ejecutadas. Al interior, la claridad hace posible un estudio exacto de los hechos, y al exterior el estremecimiento asegura la rigurosa ejecución del castigo. LAS LINEAS: Nueve en la base significa: “Cuando un hombre encuentra al gobernante que le estaba destinado pueden permanecer juntos diez días y no hay reproches. Si se avanza, se encuentra el reconocimiento”. Para instaurar una era de abundancia es necesaria la unión de la claridad y del movimiento enérgico. Cuando estas dos propiedades se encuentren en dos personas, éstas se convienen mutuamente y si ellas permanecen juntas durante una época de plenitud, incluso si es durante todo un ciclo, ello no es excesivo ni erróneo. Por eso es que se puede avanzar para actuar y se encontrará el reconocimiento. 163 Seis en el segundo lugar significa: “El telón es tan denso que puede verse la estrella polar a mediodía. Avanzando se encuentra la desconfianza y el odio. Cuando uno los suscita con la verdad, viene la fortuna”. A menudo sucede que entre el soberano que quiere la grandeza y el hombre que puede realizarla, se insinúen intrigas y disputas que ensombrecen la relación de una manera semejante a un eclipse de sol. Se ve entonces la estrella polar en el cielo donde debería brillar el sol. El príncipe está eclipsado por un partido que ha usurpado el poder. Si en tal momento se quisiera emprender una acción enérgica, solo podría toparse con la desconfianza y la envidia que harían todo movimiento imposible. Entonces, es importante mantenerse interiormente en la fuerza de la verdad, tan fuerte en definitiva, que ella actuará de una manera invisible sobre el soberano de manera que al final todo se arregla. Nueve en el tercer lugar significa: “Las malezas son de tal abundancia que permiten ver las pequeñas estrellas a mediodía. Rompe su brazo derecho. Sin reproches”. La imagen corresponde al progresivo ocultamiento del sol. El eclipse alcanza su totalidad, hasta el punto que se pueden ver las estrellas más diminutas al mediodía. En la esfera de las relaciones sociales significa que el príncipe se encuentra tan eclipsado que los hombres más insignificantes pueden pasar sobre él. Esto hace imposible que un hombre capaz, que podría actuar como brazo derecho del rey, pueda emprender una acción. Es como si su brazo se hubiera roto. Pero no es su culpa que si por esta causa no pueda emprender ninguna acción. Nueve en el cuarto lugar significa: “El telón es tan espeso que la estrella polar puede ser vista a mediodía. Encuentra un gobernante semejante. Buena fortuna”. La oscuridad comienza a decrecer, por eso los elementos afines tienden a reunirse. Aquí también hay que encontrar el complemento, puesto que en ello reside la sabiduría indispensable para procurarse la satisfacción de actuar. Entonces todo irá mejor. Se indica aquí el complemento inverso al que se refiere el primer trazo. Allí había que completar la sabiduría con la energía, aquí se debe completar la energía con la sabiduría. O Seis en el quinto lugar significa: “Las líneas vienen, la bendición y la gloria se acercan. Fortuna!”. El gobernante es humilde y abierto al consejo de las personas competentes. También se ven aparecer en su entorno hombres que le hacen comprender las líneas directas de acción. Así viene la bendición, la gloria y la fortuna para él y para todo el pueblo. 164 Seis en la cima significa: “Su casa está en la abundancia. Esconde su familia. Fisga a través de la puerta y ya no ve a nadie. Por tres años no ve nada. Desgracia”. Describe a un hombre que a causa de su arrogancia y obstinación, alcanza lo opuesto de la meta de sus esfuerzos. Busca la abundancia y el lujo para su casa. Por sobre todo desea ser el amo absoluto de su hogar, con tanto empeño que al final se encuentra totalmente aislado. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 56.- LU / EL VIAJERO (El peregrino) Superior : Li, Lo Oscilante, Fuego Inferior : Ken, La Inmovilidad, la Montaña. La montaña (Ken) se mantiene inmóvil; sobre ella, flamea el fuego (Li) que no permanece en su lugar. No permanecen juntos. Alejamiento y separación, tal es el lo propio del viajero. EL JUICIO: “El viajero. Éxito a través de lo pequeño. La perseverancia es ventajosa para el viajero”. Cuando uno es viajero y extranjero no debe ser hosco ni pretencioso. No se tiene un círculo de relaciones, de tal suerte que uno no puede ponerse en relieve. Hay que ser prudente y reservado, de esta manera uno se preservará del mal. Su uno es cortés con los demás, tendrá éxito. El viajero no tiene domicilio fijo, el camino es su hogar. Por eso debe estar atento a ser siempre interiormente justo y firme, a no detenerse sino en los lugares propicios y a tratar solamente con buena gente. Entonces alcanza la buena fortuna y puede continuar su camino sin ser molestado. LA IMAGEN: “Sobre la montaña hay fuego, la imagen del viajero. Así el hombre noble tiene el espíritu claro y es prudente imponiendo penas y no deja prolongar ningún diferendo”. Cuando la hierba se incendia sobre la montaña, se percibe un resplandor brillante. Sin embargo el fuego no permanece en un solo lugar sino que 165 se desplaza buscando más combustible. Es un fenómeno de corta duración. Algo parecido deben ser las penas y sentencias. Deben superarse rápidamente y no prolongarse indefinidamente. Las prisiones deben ser lugares donde la gente aloje sólo temporalmente como huéspedes. No deben convertirse para los humanos en residencias permanentes. LAS LINEAS: Seis en la base significa: “Si un peregrino se ocupa en cosas triviales atrae el infortunio sobre sí”. Un viajero no debe envilecerse ocupándose de pequeñas cosas en el camino. Es justamente en la medida en que se encuentra reducido y más desarmado exteriormente que debe defender con más energía su dignidad interior. Puesto que si un extranjero espera encontrar una recepción amistosa rebajándose en chistes y burlas se equivoca. Solamente recibirá desprecio y tratamientos insultantes. Seis en el segundo lugar significa: “El viajero llega al albergue. Tiene sus bienes con él. Gana la perseverancia de un joven sirviente”. El viajero aquí descrito es modesto y reservado. No pierde el contacto con su esencia interior, es por eso que encuentra un lugar para reposar. Exteriormente conserva la estima de la gente de manera que todos lo favorecen e incluso puede adquirir bienes. Incluso tiene cerca de él un servidor fiel y seguro, lo que constituye para un viajero un tesoro inestimable. Nueve en el tercer lugar significa: “Se incendia el albergue del viajero. Pierde la perseverancia de su joven sirviente. Peligro”. Un extranjero rudo no sabe conducirse con propiedad. Se mezcla en negocios y asuntos que no le conciernen. Pierde así su lugar de reposo. Trata á su sirviente con altivez y arrogancia, en consecuencia, pierde su confianza. En tanto que extranjero ya no tiene a nadie sobre quien contar y por eso su situación se vuelve muy peligrosa. Nueve en el cuarto lugar significa: “El peregrino reposa en un refugio. Obtiene sus bienes y un hacha. Mi corazón no está contento”. Describe a un peregrino que sabe cómo limitar sus deseos aparentemente, aunque en su interior sea fuerte y tenga muchas aspiraciones. Encuentra por lo menos un refugio donde puede albergarse. Consigue igualmente adquirir bienes, pero no está en seguridad con sus posesiones. Debe mantenerse en guardia con las armas en la mano, listo para defenderse. No se siente cómodo y a lo largo toma consciencia del hecho de que es un extranjero en tierra extranjera. Seis en el quinto lugar significa: “Le tira a un faisán. Lo alcanza con la primera flecha. Al final eso le trae alabanzas y una carga”. 166 Los hombres de estado en viaje acostumbraban presentarse a los príncipes locales llevándoles de regalo un faisán. Aquí el viajero desea entrar al servicio de un príncipe. Con ese fin le tira a un faisán y lo abate con el primer tiro. Encuentra amigos que lo alaban y lo recomiendan y finalmente es recibido por el príncipe que le confiere un cargo. A menudo hay circunstancias que llevan a un hombre a buscar morada en el extranjero. Si comprende la manera cómo considerar la situación y si sabe comportarse como es debido, podrá encontrar un círculo a amigos y una esfera de acción aunque se encuentre en un país extranjero. Nueve en la cima significa: “El nido del pájaro se quema. El viajero ríe primero, pero después tendrá que lamentarse y gemir. Por descuido perdió la vaca. Desgracia.” Se pinta a un pájaro cuyo nido se quema, lo que muestra la pérdida del lugar de reposo. Si el pájaro ha sido descuidado e imprudente construyendo su nido, puede ocurrirle tal desgracia. Lo mismo ocurre con el viajero. Si de deja llevar por las burlas y la risa y ya no piensa que es un viajero, tendrá más tarde que gemir y lamentarse. Si por negligencia uno pierde la vaca, es decir, su modesta facultad de adaptación, los resultados serán malos. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 57.- SUN / LO DOCIL ( Lo penetrante, el viento ) Superior : Sun, Lo Suave, Viento, Madera Inferior : Sun, Lo Suave, Viento, Madera Sun es un hexagrama doble que corresponde a la hija mayor. Tiene como imagen el viento o el bosque y como propiedad la suavidad que, a pesar de ser suave, penetra con persistencia como la del viento que sopla, o la de los árboles del bosque que desarrollan sus raíces. El principio oscuro, que está en él rígido e inmóvil, está disuelto por la penetración del principio luminoso que lo somete suavemente. En la naturaleza, es el viento que dispersa las nubes acumuladas, dejando el cielo claro y sereno. En la vida humana es la claridad penetrante del juicio que aniquila los sombríos motivos ocultos. En la vida de una comunidad es la poderosa influencia de una gran personalidad que descubre y disipa todas las intrigas tramadas en la sombra. EL JUICIO: 167 “Lo penetrante. Éxito a través de lo pequeño. Es ventajoso tener un lugar donde ir. Es ventajoso ver al gran hombre”. La penetración produce efectos graduales y que pasan desapercibidos. No se la debe realizar por medios violentos sino por una influencia ininterrumpida. Estos efectos resaltan menos a la vista que aquellos obtenidos por sorpresa, pero ellos son más duraderos y completos. Para poder actuar así hay que tener una meta claramente determinada, puesto que solo una influencia penetrante actuando siempre en la misma dirección logra un resultado. Una fuerza de débil intensidad solo puede producir un efecto si ella se pone bajo la autoridad de un hombre eminente que sea capaz de crear el orden. LA IMAGEN: “Los vientos que se siguen. La imagen de la suave penetración. Así el hombre noble difunde sus ordenes por todas partes y ejecuta sus empresas”. La cualidad penetrante del viento reside en su carácter continuo. Es por eso que el viento se hace poderoso. Toma el tiempo como un medio de acción. Es igualmente de esta manera que el pensamiento del soberano debe penetrar el alma del pueblo. Ello requiere también una acción duradera en el dominio de las explicaciones y de las órdenes. Solamente cuando la orden ha pasado en el alma del pueblo será posible contar con su apoyo. Una acción no preparada previamente provoca solo terror y repulsión. LAS LINEAS: * Seis en la base significa: “En el avance y en la retirada es ventajoso tener la perseverancia de un guerrero”. Una naturaleza suave llega a veces hasta la indecisión. Uno no se siente con la fuerza de ir resueltamente adelante. Mil dudas surgen. Sin embargo no se tienen tampoco ganas de retroceder, sino que uno está bamboleado, indeciso, de aquí para allá. En tal caso, una resolución militar es la actitud justa para permitir de hacer con decisión lo que exige el orden de las cosas. Una disciplina resuelta es mucho más preferible que el abandono y la indecisión. Nueve en la segunda línea significa: “Penetrar bajo la cama. Se necesitan sacerdotes y magos en gran cantidad. Fortuna. Sin reproches.” Aquí sucede que se está tratando con enemigos ocultos, que tienen influencias secretas y que permanecen escondidos en los ángulos más oscuros y desde allí ejercen un efecto de sugestión sobre la gente. En tales casos, es necesario de perseguir esos elementos hasta los rincones más secretos para determinar de qué influencias se trata –es el rol de los sacerdotes- y para separarlos – es el rol de los magos. En razón precisamente de su carácter anónimo, estas acciones requieren una energía particularmente infatigable que, sin embargo, encuentra su recompensa. 168 Puesto que una vez que esas influencias incontrolables han sido puestas en claro y estigmatizadas, ellas pierden su poder sobre los hombres. Nueve en el tercer lugar significa: “Repetida penetración. Humillación”. La reflexión penetrante no debe ir demasiado lejos, sino ella puede interferir la capacidad de decisión. Cuando un asunto ha sido examinado a fondo, es importante de decidir y actuar. Una reflexión repetida lleva siempre a la duda y, por consiguiente, a la humillación, puesto que uno se encuentra en la incapacidad de actuar. * Seis en el cuarto lujar significa: “El remordimiento se desvanece. Durante la cacería se capturan tres clases de cazas silvestres”. Cuando una posición de responsabilidad y la acumulación de experiencia llevan a alguien a combinar la modestia innata con la acción enérgica, se encuentra asegurado un gran éxito. Las tres clases de animales silvestres que se cazan sirven de ofrenda a los dioses, de presentes de hospitalidad para los huéspedes y de alimento para consumo cotidiano. Cuando la caza lograba satisfacer estos tres propósitos, era considerada particularmente buena. O Nueve en el quinto lugar significa: “La perseverancia trae buena fortuna. El remordimiento se desvanece. Nada de lo que se haga será desperdiciado. Sin comienzo pero con final. Antes del cambio, tres días, después del cambio, tres días. Fortuna!”. Mientras que en Ku, “el trabajo sobre lo corrupto” (N° 18), se debe crear un punto de partida completamente nuevo, aquí se trata solamente de una reforma. El comienzo no era bueno pero se ha llegado a un momento donde se puede tomar una nueva dirección. Un cambio y una mejora se imponen. Esto debe hacerse con persistencia, es decir, teniendo una actitud correcta y sólida, entonces el remordimiento desaparece. Hay que señalar que estas mejoras requieren una consideración cuidadosa. Antes de efectuar el cambio, es necesario reflexionarlo escrupulosamente. Y después, cuando la transformación se produce, todavía se debe vigilar atentamente y durante un cierto tiempo, el efecto que ese cambio produce en la realidad. Tal trabajo cuidadoso trae consigo la buena fortuna. Nueve en la cima significa: “Penetración bajo la cama. Pierde sus bienes y su hacha. La perseverancia trae desgracia”. El conocimiento es suficientemente penetrante. Se persiguen las malas influencias hasta en los rincones más secretos, pero ya no se tiene la fuerza para combatirlos de manera decisiva. En este caso, todo intento por penetrar en el dominio propio de la oscuridad solo puede tener consecuencias nefastas. 169 58.- TUI / LO PLACENTERO, EL LAGO (*) Superior : Tui, Lo Gozoso, Lago Inferior : Tui, Lo Gozoso, Lago. Tui es como Sun uno de los ocho hexagramas dobles. Tui representa la hija menor; su imagen es un lago sonriente, su propiedad es la alegría. La alegría no reside, como podría creerse, en la maleabilidad que se manifiesta en el trazo superior. En efecto, la propiedad del principio maleable y oscuro no es la alegría sino la melancolía. La alegría reside más bien sobre la presencia, en el interior, de dos trazos fuertes que se exteriorizan por intermedio de un trazo débil. La verdadera alegría proviene entonces de la firmeza y la fuerza que se encuentran al interior y que se exteriorizan bajo una forma tierna y dulce. (*) Nota: el nombre chino del hexagrama, Tui, como el nombre alemán que lo traduce (das Heitere), encierran a la vez las nociones de serenidad, alegría, gozo y placer. Aquí se traducen una u otra de estas nociones según el contexto. EL JUICIO: “Lo gozoso. Éxito. La perseverancia es favorable.” El ánimo gozoso es contagioso y comunicativo, es por eso que conduce al éxito. Pero es necesario que la alegría esté fundada sobre la firmeza para no degenerar en algo desenfrenado. La verdad y la fuerza deben residir en el corazón mientras que la dulzura se manifiesta en las relaciones con los demás. De esa manera se adopta una actitud correcta hacia Dios y hacia nuestros semejantes que conduce a un cierto resultado. En algunas circunstancias se obtienen efectos momentáneos por intimidación exenta de dulzura, pero ellos no son duraderos. Por el contrario, si se conquistan los corazones de nuestros semejantes con amistad, se conseguirá que ellos acepten las cosas penosas de buen grado e incluso podrán enfrentar a la muerte sin espantarse. Tan grande es el poder de la alegría sobre los humanos. LA IMAGEN: “Lagos descansando unos sobre otros. La imagen de la alegría. Así procede el hombre noble reuniendo sus amigos para deliberar y para actuar”. Un lago se evapora y se seca gradualmente. Pero cuando dos lagos se hallan en comunicación entre ellos no se secan tan fácilmente puesto que ellos se 170 enriquecen mutuamente. Lo mismo sucede en el dominio del conocimiento. El saber debe ser una fuerza vivificante y refrescante. Esto se logra solamente a través de un intercambio estimulante con amigos con quienes discutir y practicar las verdades vitales. El saber se convierte así en un asunto de muchas facetas, dotado de una alegre sutileza que esclarece y pondera el mundo exterior, mientras que la ciencia del autodidacta siempre tiene algo unilateral y pesado. LAS LINEAS: Nueve en la base significa: “Alegría gozosa. Buena fortuna”. Una alegría serena, sin palabras y contenida, que no desea nada exterior y se muestra contenta con lo que tiene, permanece exenta de todo deseo o rechazo egoísta. En esta libertad radica la buena fortuna, porque emana de la tranquila seguridad del corazón que se fortalece a sí mismo. O Seis en el segundo lugar significa: “Sincera alegría. Buena fortuna. Los remordimientos desaparecen”. Sucede a menudo que uno se encuentre rodeado de seres vulgares con los cuales uno se siente tentado por placeres indignos de un hombre noble. Participar en tales placeres acarrea remordimientos puesto que un hombre noble no puede contentarse realmente con la compañía de seres inferiores. Si uno está fortalecido por tal conocimiento, no dejará desviar la voluntad y rehusará encontrar el placer en tales maneras de actuar. Entonces, incluso un círculo de tales compañías no osará ofrecer tales placeres vulgares puesto que uno ya no le será de su agrado. En consecuencia uno evitará así toda ocasión de arrepentimiento. * Seis en el tercer lugar significa: “Alegría que viene. Desgracia”. La verdadera alegría debe emanar de una fuente interior. Pero si uno está interiormente vacío y si uno se pierde en el mundo exterior, las alegrías provienen de afuera. Esto es lo que mucha gente llama diversión. Los seres que como consecuencia de su inconsistencia interior necesitan diversiones tendrán siempre ocasión de distraerse. Con el vacío de su esencia íntima ellos atraen hacia sí mismos los placeres exteriores de la vida. Así se pierden cada vez más y eso tiene naturalmente malas consecuencias. Nueve en el cuarto lugar significa: “La serenidad deliberada no es apacible. Después de superar los errores uno se siente contento”. Sucede a menudo que uno se siente en suspenso entre diferentes clases de alegría. Mientras que no se haya decidido qué clase se elegirá, si será una clase superior o inferior, uno permanece interiormente inquieto. Es solamente cuando se ha reconocido claramente que las pasiones llevan al sufrimiento que uno puede decidir de deshacerse de lo que es inferior y puede buscar las alegrías superiores. Una vez que la decisión se ha tomado, 171 uno encuentra en sí mismo la verdadera serenidad y el verdadero reposo, y la oposición interior será vencida. O Nueve en el quinto lugar significa: “Oponer lo verdadero a lo destructivo es peligroso”. Los elementos de peligro se acercan incluso a los mejores hombres. Si alguien se permite componer con ellos, su influencia destructora obrará sigilosa pero seguramente y traerá con ella el peligro. Pero quien reconozca la situación y sepa discernir el peligro sabrá precaverse y permanecerá ileso. * Seis en la cima significa: “Seductora serenidad”. Quien sea interiormente vanidoso atrae hacia sí mismo los placeres de la disipación, y con ellos experimentará el sufrimiento (ver: seis en el tercer lugar). Si uno no está afirmado interiormente, los placeres exteriores que no han sido rechazados ejercerán una acción tan fuerte que uno se dejará arrastrar por ellos. Aquí ya no es cuestión de peligro, de fortuna o de infortunio. Se ha dejado escapar el timón de su propia vida y lo que acontecerá dependerá del azar y de las influencias externas. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 59.- HUAN / LA DISOLUCIÓN (La dispersión) Superior : Sun Lo Suave, Viento Inferior : Kan El Abismo, Agua. El viento que sopla sobre el agua la dispersa, disolviéndola en niebla y espuma. Se sugiere que cuando la energía vital de un hombre se encuentra obstruida en su interior, la suavidad sirve para despertarla y traerla a luz. EL JUICIO: “Disolución. Éxito. El rey se acerca al templo. Será provechoso cruzar las grandes aguas. La perseverancia es ventajosa”. El texto del hexagrama está relacionado con Ts’ui, la reunión, el recogimiento (N° 45). Allá se trata de juntar lo que ha estado separado, como el agua se junta en los lagos sobre la tierra. Aquí se trata de la dispersión y de la disolución del egoísmo que separa. El hexagrama “la disolución” 172 muestra en cierta manera el camino que conduce a la reunión y al recogimiento. Eso explica la analogía entre los textos. Para vencer el egoísmo que separa, el hombre necesita una cierta fuerza religiosa. La celebración en común de sacrificios solemnes y ritos sagrados que expresan simultáneamente la cohesión y la estructura social de la familia y del estado era el medio empleado por los grandes soberanos para hacer comulgar los corazones en las mismas emociones gracias a la música sagrada y a la pompa de las ceremonias, y con ello hacerles tomar conciencia del origen común de todas las criaturas. Así eran vencidas todas las separaciones y se fundían todas las asperezas. Otro medio era el trabajo en común propio a las grandes empresas colectivas que proponen una gran meta a la voluntad. La concentración sobre este objetivo supera todas las barreras que separan, lo mismo que en un barco atravesando la gran corriente y donde todos sus pasajeros se unen en un esfuerzo común. De todas maneras, solo es capaz de hacer fundir así la dureza del egoísmo el que está exento de todo pensamiento parásito y que permanece en la justicia y la firmeza. LA IMAGEN: “El viento sopla sobre el agua: La imagen de la disolución. Así, los reyes antiguos rendían sacrificios al Señor y construían templos.” En otoño y en invierno el agua se coagula y se hiela. Cuando llegan las suaves brisas de la primavera, la rigidez cesa y lo que estaba disperso en témpanos se funde y se reúne. Es lo mismo en el espíritu del pueblo. La dureza y el egoísmo endurecen el corazón y esta rigidez lo separa de todo el resto. La codicia y el egoísmo aíslan los humanos; por eso es necesaria una emoción religiosa que se apodere de los corazones. Ellos deben disolverse invadidos de un temor sagrado ante la eternidad, sentirse ocupados por una emoción ante la presencia intuida del creador común de todos los seres, y experimentar la unidad gracias al poder del sentimiento de comunión percibido durante el culto de adoración rendido a la divinidad. LAS LINEAS: Seis en la basé significa: “Fortuna. Trae ayuda con la fuerza de un caballo.” Aquí se trata de la importancia de superar la desunión antes de que se haya realizado completamente, venciendo los primeros síntomas desde su aparición como si se dispersaran las nubes antes que aparezcan la tormenta y la lluvia. En tales momentos, cuando las divergencias de sentimiento comienzan a hacerse sentir y aparecen las consecuencias de los malentendidos, hay que actuar con rapidez y vigor para disipar las incomprensiones y la desconfianzas recíprocas. * Nueve en el segundo lugar significa: “En la disolución se recurre a su apoyo. Los remordimientos desaparecen.” 173 Cuando alguien descubre en sí mismo los comienzos de una alienación de los demás, de la misantropía y del descontento, es importante procurar disolver esos bloqueos. Uno debe ponerse interiormente en ruta para encontrar un apoyo. Tal soporte no se encuentra jamás en el odio sino en un juicio siempre moderado y justo sobre los hombres, aliado con la buena voluntad. Si se recupera una visión libre sobre la humanidad y si se disipan todos los descontentos malhumorados, también desaparecen todos los motivos de remordimiento. Seis en el tercer remordimientos”. lugar significa: “Se disuelve a sí mismo. Sin Hay circunstancias donde el trabajo es tan arduo que ya no se puede más pensar en sí mismo. Se deben dejar completamente de lado la propia personalidad y dispersar todo lo que el yo quisiera reunir a su alrededor para formar una barrera contra los demás. Es solamente sobre la base de un gran renunciamiento que se adquiere la fuerza necesaria para realizar grandes tareas. De esa manera, poniendo nuestras metas fuera de nosotros en una causa importante, podremos alcanzar esa posición. Seis en el cuarto lugar significa: “Se destaca de su grupo. Sublime fortuna. Por la disolución se pasa a la acumulación. Es algo en lo que la gente común no piensa.” Cuando se trabaja en una tarea que tiene un alcance colectivo, uno debe apartarse de las amistades privadas. Es solamente cuando uno se mantiene por encima de los grupos que uno puede cumplir una obra decisiva. Quien se atreve a renunciar así a lo que es próximo ganará lo que está alejado. De todas maneras, para poder comprender esta manera de ver, es necesario tener una vista amplia sobre el conjunto de los diferentes aspectos de la vida y de sus conexiones, y de ello solo son capaces las personas que son fuera de lo común. O Nueve en el quinto lugar significa: “Sus fuertes gritos disuelven como el sudor. Disolución. El rey permanece sin reproches.” En tiempos de dispersión y separación generales, una gran idea es un punto alrededor del cual se organiza la recuperación. Como una enfermedad que termina su crisis con abundante sudor, en épocas de obstrucción general, las ideas estimulantes constituyen una verdadera liberación. Los hombres tienen un punto alrededor del cual pueden reunirse: un hombre en posición gobernante, capaz de disipar los malentendidos. Nueve en la cima significa: “Disuelve su sangre. Irse, manteniéndose a distancia, salir, permanecen sin reproches”. Disolver la sangre significa disolver lo que podría traer sangre y heridas, es decir, evitar el peligro. Sin embargo, el pensamiento expresado aquí no es evitar las dificultades solo para sí mismo, sino que uno libera los seres 174 queridos ayudándoles a partir antes que llegue el peligro, mantenerse a distancia de un peligro que ya está presente y a salir de un peligro que ya los ha atacado. De esta manera se actúa correctamente. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 60.- CHIEH / LA LIMITACIÓN Superior : K'an El Abismo, Agua Inferior : Tui Lo Gozoso, Lago. El lago ocupa un espacio limitado. Si recibe más agua se desborda. Es por eso que se debe ponérsele límites. La imagen muestra agua arriba y abajo, limitando el firmamento entre ellas. La palabra china que expresa la limitación designa claramente los nudos que demarcan una caña de bambú. En la vida corriente, la misma palabra designa la economía que fija límites para los gastos. En la vida moral, son los límites rigurosos que el hombre noble impone a sus actos, que son la lealtad y el desinterés. EL JUICIO: “Limitación. Éxito. Una limitación amarga no debe practicarse con perseverancia”. Las limitaciones son molestas pero efectivas. Si vivimos económicamente en tiempos normales estaremos preparados para los tiempos de penuria. Ser prudentes nos salvará de la humillación. Las limitaciones son indispensables para regular el orden del mundo. En la naturaleza están fijados límites para verano e invierno, día y noche, y estos límites dan al año su significado. De la misma manera, la economía que pone límites precisos a los dispendios preserva los bienes e impide perjuicios a la gente. Sin embargo, en la limitación también hay que observar mesura. Si alguien impone a su propia naturaleza limitaciones demasiado severas, ella sufriría. Si quiere ir demasiado lejos imponiendo limitaciones a los otros, éstos se rebelarían. Es por eso que, incluso en la limitación, los límites son necesarios. LA IMAGEN: “Agua sobre el lago. La imagen de la limitación. El hombre noble crea número y medida y examina la naturaleza de la virtud y la conducta correcta”. 175 Un lago es algo limitado. El agua es inagotable. Un lago puede contener sólo una parte definida de la infinita cantidad de agua; esa es su peculiaridad. El individuo adquiere su significado con el establecimiento y el trazado de límites en la vida. Es por eso que aquí se trata de fijar claramente esos límites que son como la columna vertebral de la moralidad. Las posibilidades ilimitadas no son lo que conviene al hombre. Su vida se fundiría en lo indefinido. Para devenir fuerte, se necesitan límites que sean establecidos libremente y que configuren el deber. El individuo adquiere su significación en tanto que espíritu libre si se rodea de límites fijados libremente y responde voluntariamente a las disposiciones del deber. LAS LINEAS: Nueve en la base significa: “No salir de la puerta y del patio de la corte es sin reproches”. A menudo un hombre puede emprender algo y encontrarse enfrentado a una situación insuperable. Debe saber cuando detenerse. Si esto se entiende correctamente y no se trata de ir más allá de los límites fijados, se acumula en nosotros una fuerza que nos capacita para actuar enérgicamente cuando llegue la época apropiada. La discreción tiene una importancia fundamental para preparar empresas importantes. Confucio dice al respecto: “Allí donde nace el desorden, son las palabras que nos conducen a él por etapas. Si el príncipe no es discreto, pierde su servidor. Si el servidor no es discreto, pierde la vida. Si las cosas en germen son tratadas sin discreción, eso perjudica a su realización. Por eso el hombre noble se mantiene en la discreción y no sale de ella”. Nueve en el segundo lugar significa: “No salir del portal y del patio de la corte trae desgracia”. Cuando ha llegado el tiempo de actuar hay que hacerlo rápidamente. En un principio el agua se junta en un lago sin desbordarse, pero cuando el lago está lleno, ella se abre seguramente un camino. Es lo mismo en la vida humana. Es bueno hesitar hasta que el momento de actuar no ha llegado, pero no demasiado. Cuando los obstáculos han sido separados de tal suerte que la acción ha devenido posible, la hesitación ansiosa es una falta que lleva seguramente al infortunio porque se ha perdido la oportunidad justa. Seis en el tercer lugar significa: “Quien no conoce limitaciones tendrá motivo para lamentarse. Sin reproches”. Si un individuo busca sólo los placeres y la diversión es fácil que pierda el sentido de la limitación necesaria. Pero cuando se abandona a la disipación tendrá que sufrir las consecuencias junto con el remordimiento. No se debe buscar de echar la culpa sobre los otros. Es solamente examinando sus propias errores y mediante las experiencias desagradables que uno devendrá exento de faltas. 176 Seis en el cuarto lugar significa: “Limitación satisfecha. Éxito”. Toda limitación tiene su valor, pero cuando una limitación requiere un esfuerzo persistente exige un gasto de energía demasiado grande. Cuando se trata de una limitación natural (por ejemplo, la que hace que las aguas se escurran hacia abajo) necesariamente eso lleva al éxito, en cuanto significa un ahorro de energía. La energía no debe consumirse en lucha vana con los objetos, sino aplicarla al provecho del asunto que se tenga entre manos y así se asegura el éxito. O Nueve en el quinto lugar significa: “Dulces limitaciones traen buena fortuna. Ir trae estima”. Las limitaciones deben ser conducidas de manera correcta para que sean efectivas. Si sólo tratamos de imponer restricciones a los demás y evadirlas nosotros mismos estas limitaciones serán mal percibidas y provocarán resistencia. Si un hombre que ocupa una alta posición se aplica primero las limitaciones a sí mismo exigiendo poco de los demás y consigue un resultado con medios modestos, obtendrá así la fortuna. Cuando así ocurre, su ejemplo es emulado y todo lo que emprende triunfa. Seis en la cima significa: “Limitación amarga: la perseverancia trae desgracia. Los remordimientos desaparecen”. Cuando se imponen límites demasiado severos, los hombres no los soportan. Mientras más se aplique esta severidad con lógica, más malo será el resultado y a la larga una reacción es inevitable. Así igualmente el cuerpo torturado se rebela cuando se sigue el camino de un ascetismo demasiado severo. Pero, si esta severidad implacable no es usada con persistencia y de manera normal, hay momentos en que ella constituye el único medio de preservarse del error y de los reproches. Hay situaciones donde la ausencia de piedad con respecto a sí mismo es el solo medio de salvar su alma que, sin eso, caería en la indecisión y la tentación. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 61.- CHUNG FU / LA VERDAD INTERIOR Superior : Sun Lo Suave, Viento Inferior : Tui Lo Gozoso, Lago. El viento sopla sobre el lago y ondea su superficie. Los efectos visibles de lo invisible se manifiestan por sí mismos. El hexagrama se compone de trazos llenos en las partes suprior e inferior, mientras que al centro él es libre. 177 Indica un corazón libre de prejuicios y en consecuencia abierto a la verdad. Por el contrario, cada uno de los trigramas tiene un trazo lleno en su centro. Así se encuentra traducida la fuerza de la verdad interior en los efectos que ella opera. Los atributos de los trigramas son: arriba, gentileza, tolerancia para con los inferiores. Abajo, alegría, gozo en obedecer a los superiores. Estas condiciones crean las bases para la mutua confianza que hace posible el progreso. El hexagrama es la imagen de una pata de pájaro sobre una cría. Sugiere la idea de incubación. La virtud vivificante del principio luminoso debe actuar desde el exterior. Pero es necesario que el huevo no esté vacío, que exista un germen de vida al interior para que de él pueda despertarse la vida. A estas ideas están asociadas especulaciones de gran envergadura. EL JUICIO: “La verdad interior. Cerdos y peces. Buena fortuna. Será provechoso cruzar la gran corriente. La perseverancia es conveniente”. Los cerdos y los peces son los animales menos espirituales de la creación, y en consecuencia los más difíciles de influir. La fuerza de la verdad interior debe alcanzar un alto grado antes de extender su acción a los seres de ese género. Tratando con personas recalcitrantes difíciles de influir como cerdos y peces el secreto del éxito reside en encontrar la manera correcta de aproximarse a ellos. En primer lugar hay que liberarse interiormente de todo prejuicio y prácticamente dejar que la psiquis de la otra persona entre en nosotros sin restricciones. Sólo así podremos aproximarnos interiormente del interlocutor, comprenderlo y ganar poder sobre él. Cuando una puerta ha sido abierta de este modo, la fuerza de la propia personalidad puede influirlos. De esta manera no se encuentran obstáculos insuperables y se pueden emprender las cosas más peligrosas, como cruzar la gran corriente, y triunfar. Pero es importante comprender cual es el fundamento de la verdad interior. Esta fuerza no es igual a la intimidad o a un lazo secreto. Incluso entre los ladrones pueden existir lazos secretos. Y actúa sin dudas como la fuerza de unión, pero no es un lazo invencible y no acarrea buena fortuna. Toda asociación basada en un interés común puede cesar en cualquier momento, en cuanto termine la comunidad de intereses y la más íntima amistad puede tomarse odio. Sólo cuando los lazos se basan en lo correcto pueden superar firmemente todos los obstáculos. LA IMAGEN: “Viento sobre el lago: la imagen de la verdad interior. El hombre noble discute el caso criminal para retardar la ejecución de las penas”. El viento ondea el agua penetrando en ella. El hombre noble cuando está obligado a juzgar los errores del prójimo procura comprender con profundidad el sentido interior para formarse así un juicio lleno de simpatía sobre las circunstancias. En la antigua China toda la administración de 178 justicia estaba guiada por ese principio. Una comprensión profunda que sabe perdonar era considerada como la suprema justicia. Tal actitud no era estéril porque ella apuntaba a provocar una fuerte impresión moral y la gente temía abusar de tal bondad. Ella no emanaba de la debilidad, sino de un sentido moral superior. LAS LINEAS: Nueve en la base significa: “Estar preparado trae buena fortuna. Si hay pensamientos ocultos, es inquietante”. Lo principal de la fuerza de la verdad interior es que uno está en sí mismo fuerte y preparado. De esta actitud interior procede la conducta justa en el mundo exterior. Si por el contrario uno quisiera cultivar relaciones secretas de naturaleza particular, ello lo privaría de su autonomía interior, y mientras más se sienta seguro del apoyo de los otros, mayor será para él la inquietud y la preocupación, hasta el punto de preguntarse si esos lazos secretos son realmente convenientes. Así se pierde la libertad interior y la fuerza de la verdad interior. Nueve en el segundo lugar significa: “Una grulla llamando en la oscuridad. Su cría le contesta. Tengo una buena copa. Yo la compartiré contigo”. Aquí es cuestión de la influencia involuntaria de la naturaleza interior de la persona sobre los seres que abrigan las mismas disposiciones. La grulla no tiene necesidad de subir sobre una colina elevada. Puede permanecer completamente oculta mientras llama, su cría escucha su grito, lo reconoce y le responde. Allí donde reina un humor feliz, siempre habrá un compañero con quien compartir una copa de vino. Así se manifiesta el eco de la simpatía despierto en el hombre. Allí donde se expresa un sentimiento con toda sinceridad y en toda su pureza, allí donde una acción es la clara expresión de la disposición interior, se ejerce una influencia secreta a lo lejos que llega primero a aquellos que están interiormente preparados para recibirla. Pero esos círculos se extienden. La raíz de toda influencia se encuentra en el interior del ser. Cuando ello se traduce en palabras y en actos con sinceridad y entera firmeza, la influencia es grande. Pero la influencia es el reflejo de lo que sale de nuestro corazón. Toda voluntad deliberada por producir una influencia no hará otra cosa que destruirla. Confucio dice al respecto: “El hombre noble permanece en su cuarto. Si pronuncia bien sus palabras, encuentra el asentimiento a una distancia de más de mil millas. ¡Cuánto más en la proximidad! Si un hombre noble permanece en su cuarto y no pronuncia bien sus palabras, encuentra la contradicción a una distancia de más de mil millas. ¡Cuánto más en la proximidad! Las palabras vienen de la esencia de la persona y ejercen su influencia sobre los humanos. Las obras se crean en la cercanía y devienen visibles a lo lejos. Las palabras y las obras son las bisagras del hombre y la 179 cuerda de su arco. Cuando esas bisagras y esa cuerda funcionan traen honor o vergüenza. Con la ayuda de las palabras y de las obras, el hombre noble mueve el cielo y la tierra. Entonces, ¿no es conveniente ser prudente? ” * Seis en el tercer lugar significa: “Encuentra un compañero. Algunas veces toca el tambor, otras veces se detiene. Algunas veces solloza, otras veces canta”. Aquí la fuerza no se encuentra en la esencia de la persona sino en las relaciones con otras personas. Tan próximos estemos de ellas, tanto nuestro centro de gravedad dependerá de ellas. Es inevitable que seamos bamboleados entre la alegría y la pena. Tan pronto somos transportados al séptimo cielo, tan pronto estamos agobiados a morir. Tal es el destino de quienes dependen servilmente de un acuerdo interior con las personas que aman. Aquí se confirma solamente esta ley. La cuestión de saber si este estado es resentido como penoso o por el contrario, como la felicidad suprema del amor, se deja al libre arbitrio de la persona concernida. * Seis en el cuarto lugar significa: “La Luna está casi llena. El caballo del atelaje va perdido. Sin reproches”. Para aumentar la fuerza de la verdad interior uno debe dirigirse hacia lo alto de donde puede recibir iluminación, como lo hace la luna con el sol. Pero haciendo esto es conveniente observar una cierta humildad, como cuando la Luna no está todavía llena. Tan pronto la Luna deviene llena ubicándose directamente frente al sol, ella comienza a menguar. De la misma manera debemos ser humildes y estar llenos de respeto frente a la fuente de luz. Se debe también renunciar a los clanes. Solamente cuando se prosigue el camino como el caballo que corre derecho sin mirar de soslayo a su compañero de atelaje, se posee la libertad interior que hace avanzar. O Nueve en el quinto lugar significa: “Se posee la verdad que une. Sin reproches”. Se muestra aquí al príncipe que reúne todas las cosas gracias a la fuerza de su naturaleza. Él es lo que debe ser solo cuando su fuerza de carácter es tan amplia que puede influenciar a todos los que están bajo su autoridad. La fuerza de sugestión debe emanar del soberano. Ella reunirá y unirá todos los sujetos con firmeza. Sin esta fuerza central, toda unión exterior será engañosa y se romperá en el momento decisivo. Nueve en la cima significa: “El canto del gallo penetra hasta el cielo. La perseverancia trae desgracia”. Se puede tener confianza en el gallo. Canta cuando llega el amanecer. Pero no puede por sí mismo volar hasta el cielo. Solamente canta. De la misma manera se puede suscitar la fe con simples palabras. Eso se logra algunas veces. Pero si se persiste de esa manera las consecuencias son enojosas. 180 62.- HSIAO KUO / LA PREPONDERANCIA DE LO PEQUEÑO Superior : Chen Lo que Despierta, Trueno Inferior : Ken La Inmovilidad, la Montaña. En el hexagrama “la preponderancia de lo grande” (N° 28), los trazos fuertes son predominantes y se encuentran ubicados en el interior, comprendidos entre dos trazos débiles, uno en el comienzo y otro al fin. En este hexagrama son los trazos débiles, igualmente ubicados en el exterior, los que predominan sobre los trazos fuertes que también están en el interior. Es allí donde reside la situación excepcional descripta por este hexagrama. Cuando los trazos fuertes están al exterior tenemos los signos I “La administración del alimento” (N° 27) y Chung Fu “La verdad interior” (N° 61); ambos designan situaciones que no representan un carácter excepcional. Cuando por el contrario, los trazos fuertes están situados en el interior tienden naturalmente a imponerse, y por consiguiente hay un combate. Por otra parte se anuncian condiciones excepcionales en general, puesto que el elemento débil está obligado a asegurar las relaciones con el mundo exterior. Si uno ocupa una situación de autoridad para la que no está adaptado por naturaleza, una prudencia extraordinaria es indispensable. EL JUICIO: “Preponderancia de lo pequeño. Éxito. La perseverancia es ventajosa. Se pueden hacer cosas pequeñas, no se pueden hacer cosas grandes. El pájaro que vuela trae el mensaje. No es bueno empeñarse en subir, es bueno permanecer en lo bajo. Gran fortuna”. Una humildad y una delicadeza de conciencia excepcionales serán seguramente recompensadas por el éxito. Lo que importa de todos modos es que estas aptitudes no constituyan un formalismo vacío y que no resulten de una naturaleza servil; sino que ellas permanezcan ligadas a la dignidad que conviene en la conducta personal, de manera a que uno no se envilezca. Se deben comprender las exigencias del momento y encontrar los complementos justos a las carencias y a los aspectos nocivos del tiempo. En todo caso uno no debe dejarse ilusionar con la idea de un gran éxito, porque falta la energía para ello. Es por eso que se debe prestar una atención especial al mensaje adjunto de no aspirar a realidades elevadas sino contentarse con las más bajas. El hecho de que el mensaje es aportado por un pájaro se desprende de la forma del signo. Los cuatro trazos fuertes y pesados en el interior, que en el signo Ta Kuo “La preponderancia de lo grande” (N° 28) están soportados solamente por dos trazos débiles al exterior, ofrece la imagen de la viga cumbrera. Aquí los trazos livianos portadores están al exterior y son más numerosos, eso da la imagen de un pájaro que planea. De todas maneras el pájaro no debe mostrarse presuntuoso y volar más alto que el sol, sino que 181 debe descender sobre la tierra donde está su nido. Así él da el mensaje proclamado por el hexagrama. LA IMAGEN: “Trueno sobre la montaña. La imagen de la preponderancia de lo pequeño. En su conducta el hombre noble da preponderancia al respeto; en el luto da preponderancia a la aflicción; en sus gastos da preponderancia a la economía”. El trueno en la montaña es diferente al trueno en el llano. En la montaña los truenos están mucho más cercanos; mientras que fuera de las regiones montañosas, los truenos de una tormenta ordinaria son menos audibles. El hombre noble toma de esta imagen la exigencia de tener presente su deber ante todo y de una manera más directa e inmediata que el hombre corriente, aunque su conducta aparezca como mezquina ante todos. Debe ser excepcionalmente preciso en sus acciones. En los duelos, la verdadera compasión debe tener para él más valor que las formas exteriores y en los gastos concernientes a su propia persona debe ser extremadamente simple y sin pretensiones. Ello puede aparecer como un fenómeno raro a los ojos de la gente corriente. Pero lo esencial de esta actitud es que si ella es considerada desde el exterior, podría ser juzgada como algo mediocre. LAS LINEAS: Seis en la base significa: “Volando el pájaro encuentra el infortunio”. El pájaro debe permanecer en su nido hasta que sus plumas hayan crecido. Si quiere volar demasiado temprano él se atrae la desgracia. Las medidas extraordinarias solo deben ser empleadas como último recurso. Uno debe conformarse a las reglas tradicionales tanto como sea posible, sino uno se gasta y malgasta su energía sin lograr resultados. O Seis en el segundo lugar significa: “Ella pasa delante de sus antepasados y encuentra la matriarca. No llega hasta su príncipe, pero sí a un oficial. Sin reproches”. Aquí se mencionan dos casos excepcionales: en el templo de los antepasados donde las generaciones son alternadas, el nieto se ubica del mismo lado que el abuelo, por ello es que mantiene con él la relaciones más estrechas. Aquí se muestra la mujer del nieto que, durante el sacrificio, pasa delante del antepasado y encuentra la matriarca. Ella se aventura más bien a presentarse delante la abuela, con la que ella se siente relacionada por el sexo. Es por ello que este desvío de la regla no es una falta. La otra imagen es la del funcionario que, conforme al protocolo, pide primero una audiencia con el príncipe. Pero si no lo encuentra tampoco trata de forzar los acontecimientos sino a cumplir correcta y cuidadosamente su deber acomodándose entre los funcionarios. Allí todavía esta reserva 182 extraordinaria, que está justificada por las circunstancias excepcionales, no es una falta. (La regla exige que todo funcionario sea recibido primero por el funcionado que lo ha empleado. En este caso, el compromiso ha sido hecho por el Ministro.) Nueve en el tercer lugar significa: “Si uno no es extraordinariamente cauteloso alguien puede venir por detrás y golpearlo. Desgracia”. Hay ciertos momentos donde una prudencia extraordinaria es absolutamente indispensable. Pero es precisamente en tales situaciones que las personalidades directas y fuertes desdeñan tomar precauciones pensando que tal actitud es mezquina. Ellas prefieren seguir su camino orgullosas y descuidadas. Pero esta confianza en sí es una fuente de decepción. Existen peligros que se acercan por detrás a los cuales uno no es capaz de evitar. De todas maneras no se trata de un peligro al cual uno esté expuesto sin recursos: se lo puede evitar si se comprende la situación del momento, que exige que se consideren las cosas pequeñas e insignificantes con una atención excepcional. Nueve en el cuarto lugar significa: “Sin reproches. Sin pasar delante de él se lo encuentra. Ir acarrea el peligro. Uno debe estar en guardia. No actuar. Ser constantemente perseverante”. La dureza de carácter debe ser temperada por una posición condescendiente, de tal manera que no se puedan cometer errores. Uno se encuentra en una situación donde hay que mostrarse extremadamente reservado. Nada se debe emprender por sí mismo para alcanzar lo que se desea. Si se quisiera actuar para lograr la meta por la fuerza uno se expondría al peligro. Es por eso que uno debe ponerse en guardia y no actuar, pero conservar constantemente la perseverancia interior. O Seis en el quinto lugar significa: “Nubes densas, no hay lluvia del territorio de oeste. El príncipe dispara y alcanza quienes están en la caverna”. Porque aquí se tiene una posición elevada, la imagen del pájaro que vuela se ha transformado en aquella de las nubes que vuelan. Pero aunque las nubes sean espesas, ellas siguen su curso en el cielo sin esparcir lluvia. Así, en épocas excepcionales, puede existir un soberano nato que tenga como vocación establecer el orden en el mundo y que, sin embargo, permanezca impotente puesto que está solo y sin encontrar ayudantes. En tales momentos, hay que buscar asistentes con los cuales se podrá efectuar la obra. Pero esos asistentes deben ser buscados con humildad, en el secreto donde ellos se han retirado. No es la reputación ni los nombres famosos que cuentan, sino las realizaciones efectivas. Gracias a esa 183 humildad uno encuentra al hombre conveniente y entonces se puede lograr una obra excepcional, a pesar de todas las dificultades. Seis en la cima significa: “Pasa junto a él sin encontrarlo. El pájaro que vuela lo abandona. Desgracia. Eso significa infortunio y daño.” Si alguien pasa más allá de la meta, no acierta. Si un pájaro no vuelve a su nido sino que vuela cada vez más alto, puede caer fácilmente en las redes del cazador. En épocas extraordinarias, quien no sabe pasar por alto lo pequeño y que sin descanso quiere ir siempre más lejos, atrae sobre sí la desgracia por parte de los dioses y de los hombres, porque se aleja del orden natural. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 63.- CHI CHI / DESPUES DE LA TERMINACIÓN Superior : K'an El Abismo, Agua Inferior : Li Lo Oscilante, Fuego. Este signo es el derivado del hexagrama N° 11, Tai, “la paz”. El pasaje de la confusión al orden se ha terminado, ahora todo está en su justo lugar hasta el más mínimo detalle. Los trazos fuertes están en los lugares fuertes y los débiles en los lugares débiles. Es un aspecto muy favorable, aunque todavía ofrece materia para reflexionar. Es precisamente cuando se ha logrado el equilibrio perfecto que cada movimiento puede engendrar la aparición de la decadencia a partir del estado en el cual reina el orden. El único trazo fuerte que se dirige hacia arriba ha acabado el orden en todos los detalles y es seguido por los otros trazos que se mueven conforme a su naturaleza. Es así que aparece súbitamente el hexagrama N° 12, P’i, la estagnación. Por eso este hexagrama indica las condiciones de un apogeo que hacen necesaria una extrema prudencia. EL JUICIO: “Después de la terminación. Éxito en asuntos pequeños. La perseverancia es ventajosa. Al comienzo fortuna, al final disturbios”. El pasaje de la vieja época a la nueva ya se ha realizado. En principio, todo está ya puesto en orden y es solamente en los detalles que él éxito todavía no se ha obtenido. Todas las cosas están encaminadas y marchan por ellas mismas. Eso conduce fácilmente a relajarse y a dejar que las cosas sigan su camino sin preocuparse por ellas en detalle. Esta negligencia es la raíz de 184 todos los males. Ella provoca necesariamente la aparición de los síntomas de decadencia. Aquí se tiene la regla que rige el curso habitual de la historia. Pero quien la comprende puede evitar los efectos gracias a una perseverancia y a una prudencia infalibles. LA IMAGEN: “Agua sobre el fuego: la imagen de la situación después de la terminación. Así el hombre noble reflexiona sobre la desgracia y se prepara por anticipado contra ella”. Cuando el agua está en un hervidor sobre el fuego, los dos elementos se relacionan entre si y de ellos resulta la creación de una energía (la producción de vapor). De todas maneras la tensión que resulta exige una vigilancia. Si el agua desborda, el fuego se apaga y la energía se pierde. Si el calor es demasiado grande el agua se evapora y la energía se pierde en el aire. Los elementos puestos en relación recíproca son entre ellos enemigos. Sólo una grande prudencia puede prevenir los daños. Lo mismo ocurre en la vida de las coyunturas, cuando todas las fuerzas se equilibran, obran armoniosamente y todo está en un perfecto orden aparente. En tales circunstancias, solo el sabio sabe reconocer los momentos que encierran peligro y evitarlo gracias a las precauciones tomadas a tiempo. LAS LINEAS: Nueve en la base significa: “Frena sus ruedas. Mete su cola en el agua. Sin reproches”. En los tiempos que siguen a una gran transición todo empuja hacia adelante, en la dirección del desarrollo y el progreso. Pero esta presión ávida de emprender no es buena y conduce seguramente a la pérdida y a la caída porque esta fuerza apunta más allá de la meta. Es por eso que un carácter firme n se deja ganar por el vértigo general sino que frena a tiempo la su carrera. Probablemente no evitará con ello ser afectado por las consecuencias perjudiciales del impulso general, pero éste solo lo alcanzará por detrás, como un zorro que habiendo ya atravesado el agua, solamente se moja la cola, la presión no puede infligirle gran daño porque él puede adoptar la actitud correcta. Seis en el segundo lugar significa: “La mujer pierde la cortina de su carruaje. No corras tras ella; al séptimo día la encontrarás”. Cuando una mujer viajaba en un carruaje, llevaba una cortina para protegerse de las miradas de los curiosos. Si se perdía la cortina y se continuaba la ruta, ello se consideraba como una violación de la propiedad privada. Aplicado a la vida pública, eso significa que alguien queriendo realizar una tarea no recibe, por parte de las autoridades competentes, la confianza necesaria para protegerse personalmente. Después de la terminación, los gobernantes pueden mostrarse demasiado arrogantes y 185 seguros de sus valores como para manifestar apoyo y atención a los talentos desconocidos. En regla general de eso resulta un arribismo manifiesto. Si alguien no encuentra la confianza de sus superiores, puede buscar de todas maneras los medios para de realizar su tarea y así ponerse en valor. Tal actitud inconveniente no es recomendada. “No corras detrás”. No te precipites hacia el mundo exterior. Espera apaciblemente y desarrolla por ti mismo tu valor personal. Los tiempos cambian. Cuando las seis etapas del signo son superadas aparece una nueva era. Lo que pertenece a alguien no puede ser perdido a lo largo del tiempo. Solamente hay que ser capaz de esperar. Nueve en el tercer lugar significa: “El ilustre antepasado castiga el país del diablo. Al cabo de tres años lo conquista. No hay que emplear gente vulgar”. El “ilustre antepasado” es el título dinástico del emperador Wu Ting de la dinastía Yin. Después de haber puesto con mano vigorosa su imperio en orden, realizó largas guerras coloniales con el fin de someter las zonas fronterizas del norte, ocupadas por los hunos, que con sus incursiones constituían una constante amenaza. La situación indicada es que después de la terminación, cuando se ha impuesto un nuevo poder y que todo el interior está en orden, comienza a manifestarse una cierta necesidad de expansión colonial. En una empresa semejante, hay que prever en general largos combates. Es por eso que una política colonial justa es particularmente importante. El territorio duramente conquistado no debe ser considerado como un hospicio de caridad para aquella gente que por una u otra razón no puede seguir viviendo en sus propios hogares, pero a las que se les considera lo suficientemente buenas para las colonias. Tal actitud arruinaría por anticipado toda posibilidad de éxito. Eso es válido tanto en las pequeñas como en las grandes cosas, puesto que no son solamente los estados en desarrollo que tienen una política colonial. Toda empresa ambiciosa comporta con ella un impulso hacia la expansión, con todos los peligros que le son asociados. Seis en el cuarto lugar significa: “Las mejores vestimentas se vuelven harapos. Sé cuidadoso durante todo el día”. En tiempos de cultura floreciente, pueden ocurrir convulsiones ocasionales que ponen al descubierto males ocultos de la sociedad y que provocan en principio una emoción general. Sin embargo, como la situación global es favorable, esos males pueden ser superados y disimulados al público. Después todo desaparece de la memoria y aparentemente reina otra vez la paz habitual. descubriendo males ocultos en la sociedad y de los que al comienzo se habla con gran escándalo. Pero la situación en su totalidad es favorable, ya que tales males pueden ser superados y prevenidos por el público. Luego todo se olvida y la paz 'reina aparentemente una vez más. Sin embargo, el hombre 186 inteligente toma esos incidentes como serias advertencias que no hay que descuidar. Es la única manera de evitar las malas consecuencias. Seis en el quinto lugar significa: “El vecino del Este que mata un buey no alcanza la felicidad verdadera que puede esperar el vecino del Oeste con su pequeña ofrenda”. En las épocas después de la terminación, la actitud religiosa está influenciada por las disposiciones del alma. La simplicidad de las viejas formas son reemplazadas, en el culto divino, por ritos cada vez más elaborados y por una pompa exterior cada vez más grande. Pero este despliegue de fasto está desprovisto de seriedad interior. El capricho humano remplaza la observación escrupulosa de la voluntad divina. Mientras que el hombre ve lo que aparece ante sus ojos, Dios mira en el corazón. Por eso es que el sacrificio simple ofrecido con piedad es fuente de más grandes bendiciones que un culto más fastuoso pero frío. Seis en la cima significa: “Mete la cabeza en el agua. Peligro”. A guisa de conclusión, se agrega aquí el consejo de que después de haber cruzado la corriente no es necesario volver a meter la cabeza en el agua a menos que uno sea tan imprudente como para intentar regresar. Mientras que se vaya derecho adelante y que no se mire hacia atrás, escapará al peligro. Pero hay algo fascinante en permanecer inmóvil y mirar hacia atrás el peligro que se ha superado. Una admiración de sí mismo tan frívola no conduce a nada agradable. Si uno se expone así al peligro, sin decidir finalmente de avanzar sin detenerse, uno será víctima de ese peligro. 64.- WE I CHI / ANTES DE LA TERMINACIÓN Superior : Li Lo Oscilante, Llama. Inferior : K'an El Abismo, Agua. Este hexagrama indica una época de transición todavía no completa del desorden al orden. Sin duda, el cambio ya está preparado : todas las líneas del trigrama superior se encuentran en efecto relacionadas con las del trigrama inferior. Sin embargo ellas no están todavía en su lugar. Mientras que en el hexagrama precedente es análogo al otoño que constituye la transición del verano al invierno, el hexagrama presente es semejante a la primavera que lleva de la estagnación del invierno a la fecundidad del verano. Es sobre esta perspectiva que se cierra el Libro de los Cambios. EL JUICIO: 187 “Antes de la terminación. Éxito. Pero si el pequeño zorro mete su cola en el agua antes de completar el cruce, no hay nada que sea ventajoso”. Las condiciones son difíciles. La tarea es grande y llena de responsabilidades. Se trata nada menos que de llevar el mundo de la confusión al orden. Pero es una tarea que promete éxito, ya que su meta es unir a las fuerzas por ahora dispersas en diferentes direcciones. Para lograrlo, solo hay que moverse cautelosamente como un zorro joven que cruza sobre el hielo. En la China, la prudencia del zorro que marcha sobre el hielo es proverbial. Sus oídos están permanentemente alertas a los crujidos del hielo y con todo cuidado busca los lugares más seguros. Un zorro joven, que todavía no conoce esta prudencia, avanza intrépidamente y puede ocurrir que se caiga al agua cuando ya casi ha terminado de atravesar, mojándose la cola. Naturalmente, todos los esfuerzos habrán sido en vano. Igualmente, en los momentos que preceden el cumplimiento de una tarea, la reflexión y la cautela son las condiciones fundamentales del éxito. LA IMAGEN: . “Fuego sobre el agua. La imagen de las condiciones antes del cumplimiento. El hombre noble es cuidadoso en diferenciar las cosas con el fin de que cada una encuentre su lugar”. Cuando el fuego, que tiende a elevarse, está arriba y el agua, que tiende a descender, está abajo, sus efectos van en sentido diferente y permanecen ambos sin relación. Si deseamos lograr algo debemos primero investigar la naturaleza de las fuerzas en cuestión y luego asignarles a cada una el lugar apropiado. Si se las dispone en el lugar correcto, ellas producirán el efecto deseado y el cumplimiento será realizado. Pero, para poder disponer de las fuerzas exteriores de una manera apropiada, es necesario ante todo de adoptar sí mismo el punto de vista correcto. Únicamente a partir de ese momento se podrá actuar correctamente. LAS LINEAS: Seis en la base significa: “Mete su cola en el agua. Humillación”. En tiempos de desorden es tentador de avanzar con toda la prisa posible para realizar algo visible. Pero este entusiasmo lleva solamente al fracaso y a la humillación mientras si no ha llegado el momento oportuno de actuar. En tal momento, es pertinente ahorrarse, por medio de una actitud de reserva, la humillación del fracaso. (1) (1) Debe notarse la diferencia entre esta situación con relación a la figurada por el primer trazo del hexagrama precedente, donde el zorro mete la cola en el agua pero su experiencia le evita mayores percances. Nueve en el segundo lugar significa: “Frena sus ruedas. La perseverancia trae buena fortuna”. 188 Aquí igualmente el tiempo de actuar todavía no ha llegado. Pero la paciencia necesaria no es una espera perezosa que perdura de día en día. Tal actitud no lleva a lo largo a ningún éxito. Pero en cambio hay que desarrollar en nosotros mismos las fuerzas que nos hagan avanzar. Se debe tener, de alguna manera, un carro listo para efectuar el pasaje. Pero todavía uno lo debe frenar. La paciencia, en el sentido más elevado, es una fuerza contenida. Es por eso que no hay que adormecerse y perder la meta de vista. Si uno se mantiene fuerte y firme en su resolución, al final todo irá bien. Seis en el tercer lugar significa: “Antes de la terminación el ataque trae desgracia. Es ventajoso atravesar las grandes aguas”. La hora de la travesía ha llegado. Pero no se tiene la fuerza de realizar el pasaje. Si intentara forzarlo se iría hacia el fracaso puesto que el colapso sería inevitable. ¿Qué hacer entonces? Se debe crear una nueva situación, se deben atraer energías asistentes capaces y con ellas dar el paso decisivo – atravesar las grandes aguas. Entonces la realización completa será posible. Nueve en el cuarto lugar significa: “La perseverancia trae buena fortuna. Los remordimientos desaparecen. Conmoción para castigar el país del diablo. Durante tres años se es premiado con grandes reinos”. Ahora es la época del combate. Es necesario que el pasaje sea realizado. Hay que afirmarse completamente en la resolución; tal actitud procura la fortuna. Todas las dudas que pueden levantarse en estos graves momentos de combate deben ser silenciadas. Se trata de una lucha ardiente para sacudir y castigar el país del diablo, las fuerzas de la decadencia. Pero la lucha tiene también su recompensa. Ahora es el momento de poner los fundamentos del poder y de la soberanía para el futuro. O Seis en el quinto lugar significa: “La perseverancia trae buena fortuna. Sin remordimientos. La luz de un hombre noble es verdadera. Fortuna”. Se gana la victoria. La fuerza de la firmeza no ha sido reducida al fracaso. Todo va bien. Se superaron todas las dudas. El éxito ha justificado la acción. La luz de una personalidad superior brilla de nuevo y hace sentir su influencia sobre los hombres que creen en ella y se reúnen a su alrededor. La nueva era ha llegado y con ella la fortuna. Igual que el sol después de la lluvia brilla con doble belleza o que el bosque después del incendio reverdece con una frescura acrecentada a partir de los sus restos carbonizados, el esplendor de la nueva era se aumenta por el contraste que forma con la miseria de la vieja época. Nueve en la cima significa: “Se bebe vino en plena confianza. Sin reproches. Pero si uno se hace mojar la cabeza, la perderá en verdad”. Antes de completar la realización, en el umbral de los nuevos tiempos, el hombre se encuentra reunido en plena confianza mutua con los suyos y pasa el tiempo de espera bebiendo felizmente. Como la nueva era está en el 189 umbral de la puerta, no hay en ello ningún reproche. Pero hay que ser cuidadoso en mantener la justa medida. Si en su exceso un hombre se deja llevar por la ebriedad, pierde por su desmesura lo que la situación tiene de favorable. Nota: El hexagrama “después de la terminación” describía la transición progresiva de un tiempo de elevación a un tiempo de estancamiento pasando por una culminación de la civilización. El hexagrama “antes de la terminación” describe igualmente la transición del caos al orden. Este hexagrama aparece al fin del libro del “Libro de los Cambios”. Con él se señala que cada final es un nuevo comienzo, dando así la esperanza a los hombres. El “Libro de los Cambios” es un libro de futuro. O Trazo gobernante * Trazo constituyente 190 El emperador Fu-Hi 191