Ricardo Cuenca
Luciana Reátegui
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
Ricardo Cuenca*
Luciana Reátegui*
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
Documento de Trabajo N° 230
* Investigadores del Instituto de Estudios Peruanos.
© Instituto de Estudios Peruanos, IEP
Horacio Urteaga 694, Lima 11
Central telefónica: (51-1) 332-6194
Fax: (51-1) 332-6173
Correo-e: publicaciones@iep.org.pe
Web: www.iep.org.pe
Libro electrónico de acceso libre disponible en:
http://repositorio.iep.org.pe/handle/IEP/9
ISBN: 978-9972-51-607-8
Documento de Trabajo, 230 (ISSN 1022-0356)
Serie: Educación, 11 (ISSN: 2222-4971)
Edición digital
Lima, octubre de 2016
Corrección de estilo: Daniel Soria
ISBN 988-9972-51-607-8
Cuenca, Ricardo; Reátegui, Luciana
La (incumplida) promesa universitaria en el Perú. Lima: IEP, 2016 (Documento de Trabajo,
230. Serie Educación, 11)
1. EDUCACIÓN UNIVERSITARIA; 2. EDUCACIÓN SUPERIOR; 3. CALIDAD DE LA
EDUCACIÓN; 4. MATRÍCULA; 5. DESIGUALDAD; 6. PERÚ
WD/06.02.1/E/11
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
Introducción
En el Perú, los primeros años de la década de 1990 marcaron el inicio de una
transformación fundamental. En 1992, Alberto Fujimori rompió con las
estructuras democráticas e inició el camino hacia un Estado neoliberal
(Murakami 2006). Para legitimar esta acción y ganar la confianza de los
círculos de poder económico a escala nacional, Fujimori estableció un
conjunto de alianzas, entre las que destacan aquellas realizadas con los
mandos militares, a través de Vladimiro Montesinos; con la cooperación
internacional, por intermedio del economista Hernando de Soto, y con la
Iglesia católica, a partir de sus vínculos con representantes del Opus Dei (Cotler
2000). Estas alianzas, sumadas a nuevas formas de relación que se instalaron
entre el Estado y la sociedad (Tanaka 1999), y el estilo neopopulista que
permitió el debilitamiento de la acción colectiva de la sociedad civil originaron
un exitoso control social del Gobierno, creándose de esta forma las
condiciones para que gran parte de la población respalde las decisiones del
régimen fujimorista (Grompone 1998, Rousseau 2012).
Sin embargo, con el autogolpe de 1992 se consolidó también un conjunto de
transformaciones culturales en donde el esfuerzo personal, el mérito, el
consumo y la búsqueda del éxito se convirtieron en los organizadores de la
vida social. Con la idea de la revolución silenciosa, Duncan Green (1997)
4
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
sostuvo que todos los cambios estructurales propios del Estado neoliberal
operaron fundamentalmente en la construcción de una nueva idea de
“buena vida”, que fue haciéndose sentido común. Este imaginario social fue
posible de ser desarrollado solo a partir de la promoción de la idea de éxito
construida sobre la base del esfuerzo individual, en el marco de un sistema
meritocrático (Bresser 1999, Oszlak 1999, Payne 1999, Cunill 1997, Burki y
Edwards 1996, North 1993).
En esta línea, como señala Zygmunt Bauman, el paradigma que se instaura
con el nuevo capitalismo es el del consumo, a través del cual todos los
individuos están llamados a ser “consumidores por vocación”; es decir, sin
importar las condiciones sociales, la vocación consumista se encuentra dada
en última instancia por el desempeño personal. En tal sentido, como señala el
autor, “el propósito crucial y decisivo del consumo en una sociedad de
consumidores [...] no es satisfacer necesidades, deseos o apetitos, sino
convertir y reconvertir al consumidor en producto, elevar el estatus de los
consumidores al de bienes de cambio vendible” (2007: 83).
Probablemente el mecanismo más directo para alcanzar esa particular meta
de éxito es la educación y, sobre todo, la educación superior universitaria. Fidel
Tubino (2007) llamó a este fenómeno el mito de la educación superior,
aludiendo a una idea acuñada por Carlos Iván Degregori.1 Este mito suponía
que, a partir de la educación, se eliminarían las injusticias sociales y que, a
través de ella, se conseguiría el progreso de la nación. Hoy en día es la
educación superior la que toma este lugar en la narrativa del progreso, y,
como señala Tubino (2007), es desde esta idea que las comunidades más
alejadas de las capitales demandan la creación de universidades en sus zonas
y que los jóvenes indígenas empiezan a realizar esfuerzos considerables para
acceder a estas.
El proceso peruano de expansión de la educación superior universitaria se
inició durante la década de 1980.2 Entre la década de 1960 y la de 1980, la
matrícula universitaria pasó de ser de 30.000 a 255.000 y en el promedio de
esos treinta años, el 79% de la matrícula se concentraba en la oferta pública.
Sin embargo, no es sino a partir del año dos mil que el crecimiento de la
matrícula universitaria realmente despegó.
Este último y explosivo crecimiento de la matrícula universitaria no fue un
asunto fortuito; fue una decisión del Estado peruano, que en 1996 liberalizó el
1
A mediados de la década de 1980, Carlos Iván Degregori (1986) desarrolla la idea de que la
educación se constituye en un instrumento fundamental entre las poblaciones andinas para
orientarse hacia el progreso.
2
García-Guadilla (1991) sostiene que toda América Latina inició el proceso de expansión de la
educación universitaria durante la década de 1980.
5
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
mercado educativo. De esta manera, se permitió el lucro en las universidades
con la finalidad de atraer a la inversión privada en educación para que
pueda atender a una creciente demanda de servicios de educación superior,
que a su vez debería contribuir al crecimiento económico, dinamizando los
mercados de trabajo.
Esta decisión trastocó el sistema universitario peruano no solo respecto de sus
magnitudes, sino que impactó directamente en la “idea” de universidad. Con
relación a esto, Juan Abugattas (1996) sostuvo que la transformación que se
produjo en la universidad, de una orientación ligada a la producción de
conocimiento hacia una pensada en la satisfacción del mercado laboral,
provocó un desfase entre la universidad y la sociedad. Así, esta lógica
empresarial instalada en la cultura universitaria cuestionó la naturaleza de la
universidad pública (Burga 2008), de tal forma que no solo el equilibrio entre la
demanda y las necesidades del mercado de trabajo se alteró, sino que la
investigación quedó postergada como un objetivo secundario en la formación
universitaria.
En este contexto, la universidad pública tomó una senda de crisis como
producto del descuido del Estado, puesto en evidencia en el
desfinanciamiento (Sandoval 2002) y la desintegración del tramado
institucional como producto de los años de incursión de la ideología de
Sendero Luminoso (Degregori 2010).
Desde nuestra perspectiva, fueron tres las hipótesis de cambio que estuvieron
detrás de la decisión de liberalizar la oferta educativa universitaria. La primera
consistió en que con la participación privada se conseguiría ampliar la oferta
y, por lo tanto, la cobertura universitaria. La segunda fue que, como
consecuencia de la primera, el acceso a los estudios superiores se
democratizaría; es decir, más jóvenes de todos los estratos económicos
estudiarían en la universidad. Finalmente, se supuso que el mercado sería un
regulador efectivo de la calidad de este servicio, en el que la competencia
dejaría fuera a las malas universidades.
El objetivo de este informe es mostrar qué sucedió con aquellas hipótesis de
mediados de los años noventa mediante el análisis descriptivo de un conjunto
de datos oficiales sobre la educación superior universitaria en el Perú.3
3
Queremos agradecer a Sarita Oré por su valioso aporte en el tratamiento estadístico de la
información.
6
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
1. La liberalización del servicio
incrementaría la oferta: primera
hipótesis
La masificación de la educación universitaria es un campo que contiene
mucha y muy diversa discusión. Por un lado, de acuerdo con lo señalado por
Emilio Gautier, la masificación puede entenderse como precarización; es
decir, se encuentra asociada a la estandarización, el anonimato y la
homogeneización. Bajo esta mirada, el ideal educativo a través del cual una
élite educada constituía el reducto de un tipo especial de cultura y saber va
opacándose. En palabras del autor, se pierde la exclusividad de dichas
instituciones y, con ello, “se disipan sus distinciones de estatus” (Gautier 2012:
30).
Por otro lado, los enfoques económicos apuestan a que la masificación
produce progreso y desarrollo (Cuenca 2015). En tal sentido, la masificación de
la educación superior supondría el despliegue de la ciencia y la cultura, y, de
esta manera, el ideal civilizador iría cimentándose. De la mano de estos
enfoques, Gautier (2012) señala que las miradas utilitaristas cobraron fuerza, al
relacionar el desarrollo educativo a la producción, es decir, a la generación
de sujetos útiles al mercado.
En el caso peruano, el proceso de masificación de la universidad llegó a
concretarse. Del año 1997 a 2015, el número total de universidades casi se
triplicó. Como se puede observar en la tabla 1, tanto las universidades públicas
como las privadas experimentaron dicho aumento. Sin embargo, si bien las
universidades públicas casi duplicaron su número en este periodo (de 29 a 51),
fueron las privadas las que evidenciaron el mayor porcentaje de aumento (de
28 a 91), estando cerca de cuadruplicar su número. Al respecto, cabe
mencionar que, dentro del grupo de universidades privadas, fueron las de tipo
7
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
societario, o con fines de lucro, las que tuvieron un mayor incremento (de 4 en
1997 a 50 en 2015).
Tabla 1. Perú: 1997-2015. Número de universidades según gestión
Año
1997
1998
1999
2000
2001
2002
2003
2004
2005
2006
2007
2008
2009
2010
2011
2012
2013
2014
2015
Estatal
29
29
29
32
33
33
33
34
35
35
36
37
38
44
51
51
51
51
51
Universidades
Privada
Asociativa
Societaria
24
4
25
6
26
7
28
13
28
13
29
16
31
16
31
17
31
18
33
21
33
23
34
24
35
27
35
40
38
44
39
50
39
50
41
50
41
50
Total
Total
28
31
33
41
41
45
47
48
49
54
56
58
62
75
82
89
89
91
91
57
60
62
73
74
78
80
82
84
89
92
95
100
119
133
140
140
142
142
Fuente: Padrón de instituciones educativas y Superintendencia Nacional de Educación Superior
Universitaria (Sunedu)-Oficina de Planeamiento y Presupuesto.
Elaboración propia.
En esta línea, como se observa en la tabla 2, la matrícula en el periodo 20002014 estuvo cerca de triplicarse. Este aumento, acorde con el incremento de
las instituciones universitarias, se concentró en las universidades privadas, las
cuales aumentaron su número de matriculados en 460%. Esto se condice
también con el tema de la cobertura, ya que en el caso de las universidades
privadas, el aumento fue del 20,9 (de 6,5 a 27,4), mientras que, en el caso de
las universidades públicas, este incremento fue del 2,1 (de 9,7 a 11,8).
8
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
Tabla 2. Perú: 2000-2014. Matrícula y cobertura universitaria según gestión
Universidades
Año
Estatal
Total
Privada
Matrícula
Cobertura
Matrícula
Cobertura
Matrícula
Cobertura
2000
254.732
9,7
171.297
6,5
426.029
16,3
2001
256.362
9,7
179.277
6,8
435.639
16,5
2002
273.326
10,3
189.326
7,1
462.652
17,4
2003
276.003
10,3
213.516
7,9
489.519
18,2
2004
282.485
10,4
232.632
8,6
515.117
19,0
2005
281.374
10,3
277.906
10,2
559.280
20,4
2006
288.505
10,4
307.243
11,1
595.748
21,6
2007
285.978
10,3
363.521
13,0
649.499
23,3
2008
286.031
10,2
418.600
14,9
704.631
25,1
2009
291.652
10,3
486.817
17,2
778.469
27,5
2010
309.175
10,9
473.795
16,6
782.970
27,5
2011
314.504
11,0
618.974
21,7
933.478
32,7
2012
331.593
11,6
697.581
24,3
1.029.174
35,9
2013
345.422
12,0
762.002
26,6
1.107.424
38,6
20141/
339.111
11,8
785.899
27,4
1.125.010
39,2
1/ Cifras estimadas.
Nota: Estos cálculos se obtienen dividiendo el número de personas matriculadas en las
universidades privadas sobre el número total de jóvenes de entre 17 y 21 años. Para ello, se hace
uso de la proyección de población por edades simples elaborada por el Instituto Nacional de
Estadística e Informática.
Fuente: Padrón de instituciones educativas y Superintendencia Nacional de Educación Superior
Universitaria (Sunedu)-Oficina de Planeamiento y Presupuesto.
Elaboración propia.
En tal sentido, la primera hipótesis se cumplió. En los últimos años, se ha
producido un incremento tanto en el número de universidades como en la
tasa de matrícula y cobertura. No obstante, este aumento se ha dado sobre
todo en el campo de las universidades privadas societarias o con fines de
lucro.
9
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
2. La ampliación del acceso
democratizaría la educación
universitaria: segunda hipótesis
En el lapso de diez años, el acceso a la educación superior universitaria se ha
incrementado para los jóvenes tanto del quintil 1 como del quintil 5. A pesar de
este aumento, si nos detenemos a observar la tabla 3, para el caso de los
quintiles 2 y 3 este incremento ha sido de alrededor del 10%, para el quintil 1
del 5,2% y para el quintil 4 del 17,1%. Es decir, en el mismo periodo de tiempo,
se ha producido un aumento desigual entre los distintos quintiles.
Tabla 3. Perú: 2004-2014. Porcentaje de jóvenes en el nivel de educación
superior1/ según quintil de gastos
Año
2004
2005
2006
2007
2008
2009
2010
Matrícula
No matriculado
Instituto superior
Universidad
No matriculado
Instituto superior
Universidad
No matriculado
Instituto superior
Universidad
No matriculado
Instituto superior
Universidad
No matriculado
Instituto superior
Universidad
No matriculado
Instituto superior
Universidad
No matriculado
Instituto superior
Universidad
Quintil
1
83,0
13,1
3,9
88,0
8,4
3,6
88,6
8,1
3,4
86,9
9,3
3,8
86,3
8,3
5,4
84,7
9,3
6,0
82,9
10,9
6,2
Quintil
2
82,4
11,4
6,2
81,5
12,7
5,8
80,0
12,5
7,5
79,5
14,1
6,4
77,3
13,2
9,5
76,6
13,6
9,8
75,8
13,3
10,9
Quintil
3
75,6
14,0
10,5
74,0
15,7
10,3
73,6
13,9
12,5
73,3
15,6
11,1
70,8
16,2
13,0
67,7
14,7
17,6
67,4
14,7
17,9
Quintil
4
67,5
15,1
17,4
69,5
14,8
15,7
59,6
16,9
23,5
60,0
17,1
22,8
58,7
15,4
26,0
57,0
15,7
27,2
57,3
14,9
27,8
Quintil
5
46,3
12,7
40,9
46,9
12,5
40,6
46,0
14,4
39,6
37,2
10,3
52,4
41,4
12,0
46,6
37,9
9,1
53,0
40,6
9,5
49,9
10
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
Año
2011
2012
2013
2014
Matrícula
No matriculado
Instituto superior
Universidad
No matriculado
Instituto superior
Universidad
No matriculado
Instituto superior
Universidad
No matriculado
Instituto superior
Universidad
Quintil
1
80,4
12,1
7,5
79,4
12,2
8,4
78,9
13,8
7,3
77,0
13,9
9,1
Quintil
2
71,9
15,0
13,1
72,6
13,6
13,9
70,0
14,9
15,1
68,0
15,2
16,8
Quintil
3
70,1
13,3
16,6
64,3
14,2
21,6
63,7
15,4
20,9
64,3
15,0
20,6
Quintil
4
56,2
12,9
30,8
52,1
14,8
33,1
52,5
14,4
33,1
50,0
15,6
34,5
Quintil
5
42,7
9,5
47,8
40,7
7,5
51,8
37,3
8,8
53,9
38,2
10,3
51,6
1/ Número de jóvenes de 22 años o menos con secundaria completa matriculados en un
instituto superior o universidad sobre el número total de jóvenes de 22 años o menos.
Fuente: Encuesta nacional de hogares 2004-2014.
Elaboración propia.
Al observar la diferencia entre el quintil 1 y el quintil 5, se puede constatar que
el aumento en la matrícula ha sido heterogéneo. En ese sentido, si bien en
ambos casos se ha experimentado un incremento, la diferencia también se ha
acentuado, ya que en el año 2004 esta era de 37% y para 2014 es del 42,5%. Es
decir, la brecha entre el quintil 1 y el quintil 5 también ha ido en ascenso. De
este modo, las brechas entre el acceso de pobres y no pobres es evidente:
mientras que 51 de cada 100 jóvenes no pobres están en la universidad, solo 9
de cada 100 jóvenes pobres son universitarios.
Género
Respecto a la relación hombre-mujer, se puede apreciar que desde el año
2004 el porcentaje de hombres y mujeres ha sido similar. No obstante, para ese
mismo año, los hombres llevaban una ligera ventaja de tres puntos
porcentuales respecto a la matrícula de las mujeres, en el caso universitario. A
pesar de ello, en el lapso de diez años esta ventaja se ha invertido, y, de esta
manera, ha favorecido a la matrícula de las mujeres. Para el año 2014, el
porcentaje de mujeres matriculadas en una universidad fue de 52,5%, mientras
que el de hombres fue de 47,5%.
11
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
Tabla 4. Perú: 2004-2014. Porcentaje de jóvenes en el nivel de educación
superior1/, según género
Año
2004
2005
2006
2007
2008
2009
2010
2011
2012
2013
2014
Género
No
matriculado
Hombre
Mujer
Hombre
Mujer
Hombre
Mujer
Hombre
Mujer
Hombre
Mujer
Hombre
Mujer
Hombre
Mujer
Hombre
Mujer
Hombre
Mujer
Hombre
Mujer
Hombre
Mujer
52,3
47,7
53,5
46,5
50,8
49,2
52,4
47,6
52,3
47,7
53,1
46,9
52,6
47,4
52,1
47,9
52,3
47,7
52,9
47,1
52,6
47,4
Matriculado
Instituto superior
53,0
47,0
48,6
51,4
47,3
52,7
50,0
50,0
46,9
53,1
49,2
50,8
49,0
51,0
46,6
53,4
47,2
52,8
48,9
51,1
50,4
49,6
Universidad
51,0
49,0
51,8
48,2
51,4
48,6
48,2
51,8
49,1
50,9
46,7
53,3
45,6
54,4
49,7
50,3
45,2
54,8
47,2
52,8
47,5
52,5
1/ Número de jóvenes de 22 años o menos con secundaria completa matriculados en un
instituto superior o universidad sobre el número total de jóvenes de 22 años o menos.
Fuente: Encuesta nacional de hogares 2004-2014.
Elaboración propia.
En relación con los hombres y mujeres no matriculados, se puede observar que
no ha existido mayor variación durante los diez años analizados, ya que, tanto
en 2004 como en 2014, este porcentaje de hombres y mujeres se ha
mantenido en 52% y 47%, respectivamente. De esta manera, el porcentaje de
acceso a la educación superior de los hombres y mujeres no ha variado
significativamente durante estos últimos años; por el contrario, ha mantenido
una constante en la proporción.
Etnicidad
En el caso del acceso a la educación superior en relación con la lengua
materna, se puede observar que de 2004 a 2014 la proporción de jóvenes que
han accedido a la educación superior universitaria con una lengua materna
distinta al castellano no ha experimentado un aumento considerable. Por un
lado, la población que tiene como lengua materna el quechua obtuvo una
tasa de matrícula del 9,5% en 2004, que, en el lapso de diez años, aumentó
solo en 3,7%. Por su parte, como se puede observar en la tabla 5, la población
con lengua aymara ha tenido una matrícula inconstante en el mismo periodo,
pasando del 15,5% en 2004 al 12,8% en 2014. Con relación a esto, como se
puede observar, la tasa de jóvenes no matriculados con una lengua materna
distinta al castellano se ha mantenido por encima del 70% en los últimos años.
12
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
Tabla 5. Perú: 2004-2014. Porcentaje de jóvenes en el nivel de educación
superior1/, según lengua materna
Año
2004
2005
2006
2007
2008
2009
2010
2011
Lengua materna
Castellano
Quechua
Aymara
Otra lengua nativa
Otro1/
Castellano
Quechua
Aymara
Otra lengua nativa
Otro1/
Castellano
Quechua
Aymara
Otra lengua nativa
Otro1/
Castellano
Quechua
Aymara
Otra lengua nativa
Otro1/
Castellano
Quechua
Aymara
Otra lengua nativa
Otro1/
Castellano
Quechua
Aymara
Otra lengua nativa
Otro1/
Castellano
Quechua
Aymara
Otra lengua nativa
Otro1/
Castellano
Quechua
Aymara
Otra lengua nativa
Otro1/
Matriculado
No
matriculado
Instituto superior
Universidad
60,5
68,4
60,1
91,3
70,4
81,2
83,5
86,4
37,9
66,9
81,5
80,9
92,8
56,9
64,6
77,1
82,9
74,0
100,0
64,7
77,1
87,3
65,1
8,7
62,6
77,1
82,0
63,2
48,7
62,6
79,5
86,4
76,9
100,0
63,1
72,8
73,4
57,9
35,0
17,0
22,2
24,4
8,7
13,6
12,1
13,9
13,6
62,1
14,3
9,8
8,1
7,2
0,0
14,2
13,0
13,3
6,1
0,0
13,7
13,8
7, 3
30,1
50,4
13,2
12,4
10,9
8,2
33,6
13,4
10,1
5,4
6,8
0,0
12,7
12,4
12,6
31,5
21,4
22,5
9,5
15,5
0,0
16,0
6,7
2,6
0,0
0,0
18,9
8,7
11,0
0,0
43,1
21,2
9,9
3,8
19,9
0,0
21,6
9,1
5,3
4,7
40,9
24,2
10,5
7,1
28,6
17,7
24,1
10,5
8,2
16,3
0,0
24,2
14,9
14,0
10,6
43,6
13
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
2012
2013
2014
Castellano
59,8
12,8
27,4
Quechua
Aymara
Otra lengua nativa
Otro1/
Castellano
Quechua
Aymara
Otra lengua nativa
Otro1/
Castellano
Quechua
Aymara
Otra lengua nativa
Otro1/
73,4
72,5
87,1
53,4
59,1
69,3
74,8
75,9
38,9
58,0
72,1
73,0
71,4
78,3
12,1
7,4
6,9
38,1
13,7
15,4
8,7
6,8
6,8
14,2
14,7
14,2
20,0
0,0
14,6
20,2
6,0
8,4
27,2
15,3
16,5
17,3
54,4
27,9
13,2
12,8
8,6
21,7
1/ Número de jóvenes de 22 años o menos con secundaria completa matriculados en un
instituto superior o universidad sobre el número total de jóvenes de 22 años o menos.
Fuente: Encuesta nacional de hogares 2004-2014.
Elaboración propia.
De esta manera, la educación superior en el Perú cuenta aún con una
ausencia considerable de los estudiantes de lenguas nativas. Esta situación no
discrimina entre quechua, aymara u otra lengua originaria, ya que, en todos
los casos, encontramos bajos porcentajes de matrícula, así como altos
porcentajes de jóvenes que, teniendo la edad para matricularse en el sistema
superior, no lo han hecho.
14
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
3. El mercado regularía de manera
eficiente la calidad: tercera hipótesis
La definición de calidad es un asunto complejo, ya que su univocidad tiene
que ver con un fondo político detrás de esta categoría “neutral”. De acuerdo
con Marcela Mollis, la noción de calidad de la universidad del siglo XXI se
encuentra directamente mediada por una lógica corporativa, la cual se
sostiene en el lucro, los intereses privados, la exclusión social y el manejo entre
propietarios (Mollis 2006: 98). Es decir, como resultado del proceso de
mercantilización, la identidad pública de la universidad se ha transformado
hacia una más bien empresarial (Brunner 2011); por ende, la calidad se
encuentra asociada a la eficiencia y el logro de resultados concretos y, sobre
todo, medibles.
A pesar de ello, la tercera hipótesis sobre cómo el mercado regularía la
calidad del servicio tampoco pudo lograrse. El crecimiento de la oferta de
instituciones creció sin mayor regulación de calidad. Nuestras universidades no
solo no figuran en ningún ranking mundial o regional, sino que el volumen de
investigación es incipiente y el nivel académico promedio de los docentes es
básico. Como si fuera poco, la empleabilidad de los jóvenes es baja, y tal
como lo mencionan Juan Francisco Castro y Gustavo Yamada (2013), entre
2004 y 2010 hubo un incremento de hasta seis puntos porcentuales de
subempleo profesional (de 29% a 35%).
La investigación como indicador de calidad
La calidad educativa, y particularmente la de la educación universitaria, es un
constructo difícil de consensuar. No obstante, hay criterios mínimos vinculados
a la calidad universitaria que obtienen mayores consensos. Es el caso de la
producción académica de las universidades.
En el Perú, la producción académica universitaria es aún incipiente. El
recuento de documentos de investigación publicados indica que, para el año
15
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
2014, las universidades peruanas aportaron solo con el 1,4% del total de la
producción académica latinoamericana.
Tabla 6. Perú/América Latina: 2009-2013.
Número de documentos publicados
Año
Perú
América Latina
2000
237
32.004
2001
240
33.350
2002
250
37.239
2003
410
42.106
2004
437
47.385
2005
505
53.945
2006
652
65.632
2007
687
70.125
2008
774
80.128
2009
930
88.020
2010
1.021
93.769
2011
1.215
101.463
2012
1.280
110.059
2013
1.459
113.732
2014
1.508
110.356
Fuente: SCImago Journal & Country Rank.
Elaboración propia.
Al revisar qué tipo de universidades son aquellas que publican documentos de
investigación, se observa que el 57% de la producción académica proviene
de la oferta privada. No obstante, no se trata de todas las universidades
privadas. Tal como se muestra en la tabla 7, del total de la producción
académica universitaria privada, solo el 8% del total de publicaciones
corresponden a las universidades societarias; es decir, con fines de lucro.
Tabla 7. Perú: 2009-2013. Número de investigaciones por universidades según
gestión, condición y personería jurídica
Universidad
Institucionalizada
En proceso
Total
Estatal
1.839
2
1.841
Privada
2.456
14
2.470
2.266
13
2.279
Asociativa
Societaria
Total
Fuente: SIR Iber Perú 2015 Rank.
Elaboración propia.
190
1
191
4.295
16
4.311
16
17
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
En esta línea, como se observa en la tabla 8, la mayor parte de universidades
(40) ha elaborado, entre 2009 y 2013, entre uno a nueve investigaciones. En
contraparte, si observamos el número de universidades que produce más de
100 investigaciones en este mismo periodo, encontramos que son solo siete las
instituciones (3 públicas y 4 privadas) que llegan a este número. Es decir, la
producción de investigaciones en el Perú se concentra básicamente en estas
siete últimas universidades.
Tabla 8. Perú: 2009-2013. Número de universidades que investigan según
gestión y condición
Universidades
InstitucioTotal
nalizadas
40
34
Investigaciones
Estatales
Privadas
En proceso
Total
De 1 a 9
13
27
6
40
De 10 a 19
8
1
9
9
0
9
De 20 a 29
3
3
De 30 a 39
0
1
6
6
0
6
1
1
0
1
De 40 a 49
1
3
4
4
0
4
De 50 a 59
0
1
1
1
0
1
De 60 a 69
1
0
1
1
0
1
De 70 a 79
1
0
1
1
0
1
De 80 a 89
1
1
2
2
0
2
De 90 a 99
0
0
0
0
0
0
De 100 a 499
3
1
4
4
0
4
De 500 a 999
1
1
2
2
0
2
Más de 1000
0
1
1
1
0
1
Total
32
40
72
66
6
72
Fuente: SCImago Journal & Country Rank.
Elaboración propia.
Si nos detenemos a observar la producción de investigación de las
universidades privadas, podemos encontrar que de las 40 investigaciones que
se han elaborado entre el año 2009 y 2013, 28 son de universidades asociativas
y 12 de societarias o con fines de lucro. De las 12 universidades societarias que
figuran como productoras de investigación en este periodo, 11 han producido
menos de 29 investigaciones y solo una logra ubicarse por encima de las 100.
En comparación con las universidades societarias, las universidades asociativas
cuentan con una mayor distribución, contando con universidades que han
producido entre 500 y más de 1000 investigaciones.
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
Tabla 9. Perú: 2009-2013. Número de universidades que investigan
según personería jurídica
Investigaciones
Asociativas
Societarias
Total
De 1 a 9
18
9
27
De 10 a 19
0
1
1
De 20 a 29
2
1
3
De 30 a 39
1
0
1
De 40 a 49
3
0
3
De 50 a 59
1
0
1
De 60 a 69
0
0
0
De 70 a 79
0
0
0
De 80 a 89
1
0
1
De 90 a 99
0
0
0
De 100 a 499
0
1
1
De 500 a 999
1
0
1
Más de 1000
1
0
1
Total
28
12
40
Fuente: SCImago Journal & Country Rank.
Elaboración propia.
Por último, en relación con la región, se puede apreciar en la tabla 10 que el
Perú ha producido el 28% de los artículos publicados en revistas y el 1% de
documentos citables en el periodo 1996-2014. En esta línea, recibe el 1,4% de
la citaciones en relación con las de América Latina.
Tabla 7. Perú/América Latina: 1996-2014.
Indicadores de publicaciones de investigación
Categoría
Perú
América Latina
H Index 1/
140
496
Documentos
12.367
1.186.920
Documentos citables
11.418
1.135.523
Citaciones
155.938
10.729.665
Autocitaciones
16.849
3.474.635
Citaciones por documento
12,61
9,04
1/ Índice de artículos publicados en revistas.
Fuente: SCImago Journal & Country Rank.
Elaboración propia.
En suma, la producción académica universitaria en el Perú es aún incipiente.
Esto corresponde, según Hernández Asensio (2014: 7), a una tradición de poca
producción científica, considerando tanto su peso demográfico como su
producto bruto interno.
18
19
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
Personal académico
Según datos del censo universitario de 2010, el número de docentes
universitarios es de 60.000. De ellos, el 68% son hombres y el 54% se encuentran
entre los 41 y los 60 años. Al revisar la información por tipo de instituciones, el
64% de los docentes trabajan en universidades privadas y son
mayoritariamente más jóvenes que sus pares de la universidad pública.
Mientras que en la oferta privada los docentes con edades entre los 31 y 40
años representan el 30% del total, en la oferta pública los docentes
comprendidos en este rango de edades representan el 15% de total, tal como
se aprecia en la tabla 11.
Tabla 8. Perú: 2010. Docentes universitarios según sexo,
grupos de edad y tipo de universidad
Sexo
Grupos de edad
Universidad
Hombre
Mujer
21-30
31-40
41-50
51-60
61-70
71- +
NS/NR
Pública
15.835
5.599
615
3.291
5.575
7.564
3.623
737
29
21.434
Privada
24.408
13.243
3.567
11.374
11.017
7.755
3.106
590
242
37.651
Total
40.243
18.842
4.182
14.665
16.592
15.319
6.729
1.327
271
59.085
Total
Fuente: II Censo nacional universitario 2010.
Elaboración propia.
En relación con la estructura de los niveles de carrera, existe una ligera
tendencia piramidal, donde la base está compuesta por la categoría básica
de la carrera docente, tal como se aprecia en la tabla 12. No obstante, al
analizar la estructura según la gestión de las instituciones, se observa que es en
la oferta privada donde existe la mayor cantidad de docentes auxiliares.
Tabla 9. Perú: 2010. Docentes universitarios según categoría
Categoría
Tipo de universidad
Pública
Privada
Total
Principal
5.629
5.885
11.514
Asociado
6.418
4.129
10.547
Auxiliar
7.361
10.874
18.235
Contratado
735
13.877
14.612
Total
20.143
34.765
54.908
Fuente: II Censo nacional universitario 2010.
Elaboración propia.
20
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
Un tema importante en la consolidación de los espacios académicos es la
permanencia de un mínimo de profesores que logren constituirse en un cuerpo
docente dedicado a tareas de investigación y preparación para la docencia.
Tal como se aprecia en la tabla 12, en el Perú, 1 de cada 4 docentes
universitarios tienen contratos temporales de trabajo, y del total de docentes
contratados, el 95% trabajan en las universidades privadas.
En relación con los grados académicos del personal docente, solo el 5,2% de
los profesores, independientemente de su condición laboral y del tipo de
universidad en la que trabajan, cuenta con el grado de doctor. En
contraposición a ello, 3 de cada 4 profesores universitarios tienen una maestría.
Cabe destacar que son los docentes contratados de universidad pública
quienes representan el 47% del total de docentes con maestría, tal como se
muestra en la tabla 13.
Tabla 10. Perú: 2010. Docentes universitarios según tipo de universidad,
condición laboral y niveles de especialización
Tipo de universidad
Condición
laboral
Pública
Privada
II
especialización
Maestría
Doctorado
II
especialización
Maestría
Doctorado
Total
Nombrado
2.025
10.520
850
750
2.764
470
17.379
Contratado
482
2.217
95
4.268
14.761
693
22.516
Extraordinario
Jefe de
práctica
Total
8
25
8
38
91
10
180
109
474
8
372
481
9
1.453
2.624
13.236
961
5.428
18.097
1.182
41.528
Fuente: II Censo nacional universitario 2010.
Elaboración propia.
En suma, la situación del actual cuerpo docente universitario está
fundamentalmente orientado hacia la docencia. El reducido número de
doctores y el alto número de docentes contratados dificultan el
fortalecimiento de las áreas de investigación. A este problema se añade una
marcada tendencia hacia la endogamia académica y una ausencia de
mecanismos efectivos para la renovación de los profesores universitarios,
especialmente en el ámbito estatal (Mori 2014).
Al respecto, la nueva ley universitaria propone atender este asunto con normas
que favorecen la movilidad de docentes, el mejoramiento de las condiciones
para actividades de investigación entre los profesores y el establecimiento de
mecanismos meritocráticos en la carrera docente.4
4
Más información en http://repositorio.minedu.gob.pe/
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
Reflexiones finales
Nuestro análisis indica que, salvo la primera de ellas, las hipótesis no resultaron
ciertas. En efecto, la matrícula universitaria se incrementó como producto del
crecimiento de la oferta universitaria privada, pero no todos los jóvenes
lograron ingresar al sistema universitario y tampoco el servicio educativo fue de
calidad.
En efecto, tal como lo muestra Cuenca (2014), la expansión del sistema no
supuso mayor equidad en el acceso. Particularmente, Benavides, León, Haag
y Cueva sostienen que “la mayor diversificación de la oferta institucional de
universidades no ha significado una mayor equidad en el acceso a diferentes
tipos de universidad” (2015: 57).
En el tema de calidad, Yamada, Castro, Bacigalupo y Velarde (2013)
concluyen que, en la última década, el sistema universitario peruano ha
experimentado un deterioro en las habilidades con las que los jóvenes ingresan
a la educación superior, como resultado de una mayor flexibilización en los
procesos de selección de estudiantes. En la misma línea, estudios sobre
desempleo profesional indican que en los últimos años (entre 2004 y 2012) el
subempleo profesional se ha incrementado, y la probabilidad de subempleo
profesional para estudiantes que vienen de universidad con problemas de
calidad aumenta, como consecuencia de la desregulación del mercado
universitario (Yamada, Lavado y Martínez 2014).
En un nuevo contexto de reforma universitaria, la búsqueda de soluciones a la
limitada democratización de la educación superior y a la precaria calidad del
servicio universitario debiera traducirse en políticas públicas. La nueva ley
universitaria abre la posibilidad de que esto sea posible, en tanto le otorga al
Estado el rol rector de la educación superior universitaria.
21
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
Como parte de la rectoría y sobre la base del respeto irrestricto de la
autonomía universitaria son, al menos, dos las líneas de políticas que permitan
atender los problemas centrales que este documento ha mostrado.
Políticas de inclusión en educación superior
Como se ha señalado líneas arriba, si bien se observan tendencias favorables
en relación con la igualdad de género en el acceso a la educación superior,
aún el tema de la inclusión de poblaciones indígenas y en situación de
pobreza constituye un reto importante para la política de Estado. En el lapso
de diez años no se ha producido una incorporación real de los estudiantes con
lengua materna distinta al castellano y equitativa entre los jóvenes que se
encuentran entre los quintiles más pobres. En tal sentido, como señalan
diversos estudios (Trivelli 2008, Thorp y Paredes 2011), en el Perú el componente
étnico y los niveles de pobreza se encuentran fuertemente asociados.
No obstante, en los últimos años se han producido una serie de iniciativas en el
ámbito estatal que han buscado incorporar a poblaciones históricamente
excluidas en la educación superior. Uno de los casos más vistosos es el del
Programa Nacional de Becas y Crédito Educativo (Pronabec), que, a través de
el programa Beca 18,5 ha financiado los estudios superiores de los jóvenes que
se encuentran en condición de vulnerabilidad. Para la elección de sus futuros
becarios, Beca 18 toma en cuenta su condición de pobreza, pertenencia a
algún grupo étnico y su trayectoria familiar y escolar (Cotler 2016).
De 2012 a 2015, el programa Beca 18 ha beneficiado a 45.079 estudiantes. De
estos, el 72,5% son beneficiados de la modalidad ordinaria y el 2% de la EIB
(Educación Intercultural Bilingüe) (Pronabec 2015). Al respecto, Cotler (2016)
señala que este programa ha tenido un impacto positivo y significativo en los
jóvenes de los sectores más pobres del país. Así también, ha sido una
oportunidad importante para acercar al Estado a estos grupos poblacionales
aún excluidos.
Cabe señalar, como indica Román (2016), que Beca 18 se enmarca en un
nuevo paradigma estatal, a través del cual el Estado es el encargado de
facilitar la inclusión para que los sectores excluidos puedan competir en el
mercado laboral y en la esfera productiva en las mismas condiciones. No
5
El programa Beca 18 fue creado en el año 2011. Dentro de este programa, existen siete
modalidades de beca: Ordinaria (para jóvenes que se encuentra en situación de pobreza o
pobreza extrema), Albergue (para jóvenes que crecieron en casas hogares), Vraem (para
jóvenes residentes en los 57 distritos de la zona del Vraem), Huallaga (para jóvenes de los 25
distritos de la zona del Huallaga), Repared (para jóvenes víctimas del conflicto armado interno),
FF. AA. (para jóvenes que hayan cumplido con el servicio militar obligatorio), EIB (para jóvenes
que hablen alguna lengua nativa) y Comunidades Nativas Amazónicas (para jóvenes miembros
y residentes de las comunidades nativas amazónicas).
22
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
obstante, al ser una inversión focalizada, no necesariamente ha implicado una
lógica de igualdad; más bien, se ha priorizado que “cada quien sea capaz de
responsabilizarse de su seguridad a través del mercado” (Román 2016: 121).
Por otro lado, es importante reconocer los esfuerzos por incorporar la EIB en el
sistema educativo. Sin embargo, si bien se han visto avances a nivel primario,
aún no se ha asegurado la continuidad tanto a nivel secundario —ya que no
ha habido una oferta educativa EIB consistente para esta etapa— como
terciario (Montero et ál. 2015). En tal sentido, la interculturalización de la
educación superior peruana es aún un tema pendiente (Tubino 2012, Cuenca
y Ramírez 2015).
Políticas de regulación de la calidad del servicio educativo
En el Perú, se instaló desde mediados de la década de 1990 un modelo de
influencia sobre el sistema de educación superior orientado al mercado (Clark
1983). Este modelo produjo que el Estado, al ofrecer mayores niveles de
autonomía a las universidades y promover mayores niveles de autogestión de
las instituciones, se aleje de un rol planificador en la educación superior para
transitar hacia un rol evaluador, preocupándose por el control de “productos
finales” antes que por la transparencia y la rendición de cuentas (Neave 1988).
No obstante, este rol no fue cumplido a cabalidad, así como tampoco la
autorregulación logró estimular procesos de calidad del servicio educativo. La
autarquía en la que cayó el sistema dejó fuera al Estado, salvo para lo
provisión de recursos públicos (Brunner 2015).
A partir de la promulgación de la nueva ley universitaria en julio de 2014, el
Ministerio de Educación desarrolló y aprobó una política de aseguramiento de
la calidad de la educación superior universitaria,6 que complementa el trabajo
que realiza la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria
(Sunedu).
Dicha política muestra la rectoría del Estado en materia de regulación de
calidad, distribuye funciones entre las distintas instancias del sistema y presenta
las bases en las que los lineamientos de aseguramiento de calidad se
sostienen. Por un lado, se promueve la construcción y difusión de información
confiable y pertinente, junto con el fomento de la calidad, a través de
estrategias de incentivos. Dos asuntos estructurales al sistema de
aseguramiento de la calidad están también consignados, y se refieren al
6
Véase http://www.sunedu.gob.pe/aprueban-la-politica-de-aseguramiento-de-la-calidad-dela-educacion-superior-universitaria/
23
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
desarrollo pleno del licenciamiento, entendido como procedimiento de
garantía pública de las condiciones básicas de calidad de la oferta
universitaria y la instalación de un renovado sistema de acreditación
universitaria.
Son justamente en estos dos temas donde se concentran los mayores retos de
esta política. De un lado, la consolidación de la Sunedu como institución
responsable del licenciamiento y la creación de un sistema de acreditación
acorde a las exigencias de la reforma. Para el caso de Sunedu, el
licenciamiento de universidades ya se ha iniciado, a diferencia de la
acreditación, que sigue operando bajo los enfoques anteriores a la
promulgación de la ley y de la política de aseguramiento de calidad.
De este modo, el rol rector del Estado en la reforma peruana se acerca más a
un rol supervisor (Van Vught 1989) preocupado por el aseguramiento de la
calidad del servicio. Lo cierto es que el rol del Estado en la regulación de la
calidad parece orientarse inevitablemente hacia la discusión sobre las
múltiples formas de gobernanza del sistema universitario, que transitan entre el
aseguramiento de la calidad y la regulación basada en sanciones (Brunner
2015).
24
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
Bibliografía
ABUGATTAS, J.
1996
“Elementos para un debate sobre la universidad”. Alma mater,
Revista de investigación de la UNMSM, n.º 11: 58.
BAUMANN, Z.
2007
Vida de consumo. México D. F.: Fondo de Cultura Económica.
BENAVIDES, M. et ál.
2015
Expansión y diversificación de la educación superior universitaria,
y su relación con la desigualdad y la segregación. Lima: Grade.
BRESSER, L.
1999
Reformas del Estado para la ciudadanía. La reforma gerencial en
América Latina en la perspectiva internacional. Buenos Aires:
CLAD-Eudeba.
BRUNNER, J. J.
2011
“Gobernanza universitaria: tipología, dinámicas y tendencias”.
Revista de educación, n.º 355: 137-159.
2015
BURGA, M.
2008
“Medio siglo de transformaciones de la educación superior
chilena: un estado del arte”. En A. Bernasconi (ed.), La
educación superior en Chile. Transformación, desarrollo y crisis.
Santiago de Chile: Ediciones UC, pp. 21-108.
La reforma silenciosa. Descentralización, desarrollo y universidad
regional. Lima: Red para el Desarrollo de las Ciencias Sociales.
BURKI, S. y S. EDWARDS
1996
Dismantling the Populate State in Latin-America. Washington D. C.:
World Bank.
25
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
CASTRO, J. F. y G. YAMADA
2013
“Evolución reciente de la calidad de la educación superior en el
Perú: no son buenas noticias”. En G. Yamada y J. F. Castro (eds.),
Calidad y acreditación de la educación superior: retos urgentes
para el Perú. Lima: Universidad del Pacífico, Consejo de
Evaluación, Acreditación y Certificación de la Calidad de la
Educación Superior Universitaria.
CLARK, B. R.
1983
The Higher Education System: Academic Organization in Cross
National Perspective. Berkeley: University of California Press.
COTLER, J.
2000
2016
“La gobernabilidad en el Perú: entre el autoritarismo y la
democracia”. En J. Cotler y R. Grompone, El fujimorismo: ascenso
y caída de un régimen autoritario. Lima: Instituto de Estudios
Peruanos.
Educación superior e inclusión social. Un estudio cualitativo de los
becarios del programa Beca 18. Lima: Ministerio de Educación.
Disponible en:
http://www.pronabec.gob.pe/modPublicaciones/descarga/serie
7_educacionsuperior.pdf
CUENCA, R.
2014
“La educación superior en el Perú: expansión, calidad e
inclusión”. En J. J. Brunner y C. Villalobos (eds.), Políticas de
educación superior en Iberoamérica, 2009-2013. Santiago de
Chile: Universidad Diego Portales.
2015
“Democratización del acceso y la precarización del servicio. La
masificación universitaria en el Perú, una introducción”. En R.
Cuenca (ed.), La educación universitaria en el Perú: democracia,
expansión y desigualdades. Lima: Instituto de Estudios Peruanos,
pp. 9-18.
CUENCA, R. y A. RAMÍREZ
2015
“¿Interculturalizar
la
universidad
o
universalizar
la
interculturalidad? Sistema universitario y población indígena”. En
R. Cuenca (ed.), La educación universitaria en el Perú:
democracia, expansión y desigualdades. Lima: Instituto de
Estudios Peruanos, pp. 59-94.
CUNILL, N.
1997
Repensando lo público a través de la sociedad: nuevas formas
de gestión pública y representación social. Caracas: Centro
Latinoamericano de Administración para el Desarrollo.
26
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
DEGREGORI, C. I.
1986
“Del mito del Inkarri al mito del progreso: poblaciones andinas,
cultura e identidad nacional”. Socialismo y participación, n.º 36:
49-56.
2010
GAUTIER, E.
2012
Qué difícil es ser Dios. El Partido Comunista del Perú-Sendero
Luminoso y el conflicto armado interno en el Perú: 1980-1999.
Lima: Instituto de Estudios Peruanos.
“Masificación y calidad de la educación superior”. En R. Cuenca
(ed.), Educación superior, movilidad social e identidad. Lima:
Instituto de Estudios Peruanos, pp. 15-47.
GARCÍA-GUADILLA, C.
1991
“Modelos de acceso y políticas de ingreso a la educación
superior. El caso de América Latina y el Caribe”. Educación
superior y sociedad, vol. 2, n.º 2: 72-93.
GROMPONE, R.
1998
Fujimori, neopopulismo y comunicación política. Lima: Instituto de
Estudios Peruanos.
HELM, D. (ed.)
1989
The Economic Border of the State. Oxford: Oxford University Press.
HERNÁNDEZ ASENSIO, R.
2014
¿Quién escribe más y sobre qué? Cambios recientes en la
geopolítica de la producción científica en América Latina y el
Caribe. Lima: Instituto de Estudios Peruanos.
MOLLIS, M.
2006
“Geopolítica del saber: biografías recientes de las universidades
latinoamericanas”. En H. Vessuri (ed.), Universidad e investigación
científica. Buenos Aires: Consejo Latinoamericano de Ciencias
Sociales, pp. 85-101.
MONTERO, C. et ál.
2015
Estudio sobre oferta y demanda de educación secundaria rural y
periurbana en el Perú. Informe de consultoría no publicado. Lima.
MORI, J.
2014
“Mirando el bosque en su conjunto. La endogamia académica y
la renovación docente en las universidades públicas”. En blanco
y negro. Revista digital sobre docencia universitaria, n.º 5: 12.
MURAKAMI, Y.
2006
Perú en la era del chino. La política no institucionalizada y el
pueblo en busca de un salvador. Lima: Instituto de Estudios
Peruanos, CIAS.
27
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
NEAVE, G.
1988
NORTH, D.
1993
OSZLAK, O.
1999
“On the Cultivation of Quality, Efficiency and Enterprise. An
Overview of Recent Trends in Higher Education in Western Europe
1986-1988”. European Journal of Education, vol. 25, n.º 2-3: 273283.
Instituciones, cambio institucional y desempeño económico.
México D. F.: Fondo de Cultura Económica.
“De menor a mejor. El desafío de la segunda reforma del Estado”.
Nueva sociedad, n.º 160: 81-100.
THORP, R. y M. V. PAREDES
2011
Etnicidad y la persistencia de la desigualdad: el caso del Perú.
Lima: Instituto de Estudios Peruanos.
PAYNE, M.
1999
“Instituciones políticas e instituciones económicas: nueva visión
sobre las relaciones entre el Estado y el mercado”. Reforma y
democracia, n.º 13: 117-140.
PROGRAMA NACIONAL DE BECAS
2015
Memoria institucional 2012-2015. Lima: Ministerio de Educación.
ROMÁN, A.
2016
Trayendo de vuelta al individuo: los soportes externos en el
proceso de inserción y permanencia en la educación superior de
los becarios y becarias de Beca 18. Tesis para optar por el grado
de Magíster en Sociología. Lima: Pontificia Universidad Católica
del Perú.
ROUSSEAU, S.
2012
Mujeres y ciudadanía. Las paradojas del neopopulismo en el Perú
de los noventa. Lima: Instituto de Estudios Peruanos.
SANDOVAL, P.
2002
Modernización, democracia y violencia política
universidades peruanas (1950-1995). Buenos Aires:
Latinoamericano de Ciencias Sociales.
en las
Consejo
TANAKA, M.
1999
“Del movimientismo a la media-política: cambios en las
relaciones entre la sociedad y la política en el Perú de Fujimori”.
En J. Crabtree y J. Thomas (ed.), El Perú de Fujimori: 1990-1998.
Lima: Universidad del Pacífico e Instituto de Estudios Peruanos.
28
LA (INCUMPLIDA) PROMESA
UNIVERSITARIA EN EL PERÚ
TRIVELLI, C.
2008
TUBINO, F.
2007
2012
La persistente desigualdad entre indígenas y no indígenas en
América Latina. Santiago de Chile: Rimisp.
“Las ambivalencias de las acciones afirmativas”. En J. Ansión y
F. Tubino (eds.), Educar en ciudadanía intercultural. Experiencias
y retos en la formación de estudiantes universitarios indígenas.
Lima: Fondo Editorial de la Pontificia Universidad Católica del
Perú, pp. 91-110.
“La universidad frente a los retos de la diversidad cultural en
América Latina”. En R. Cuenca (ed.), Educación superior,
movilidad social e identidad. Lima: Instituto de Estudios Peruanos,
pp. 117-130.
VAN VUGHT, F.
1989
Governmental strategies and innovation in higher education.
Londres: Jessica Kingsley Publishers.
YAMADA, G., P. LAVADO y J. MARTÍNEZ,
2014
¿Una promesa incumplida? La calidad de la educación superior
universitaria y el subempleo profesional en el Perú. Lima: Centro
de Investigación de la Universidad del Pacífico.
YAMADA, G. et ál.
2013
“Mayor acceso con menor calidad en la educación superior:
algunas evidencias desde las habilidades de los estudiantes”.
Apuntes, vol. 40, n.º 72: 7-32.
29