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Ambrosia Spanisch PDF

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Roland Schimmelpfennig

AMBROSIA
DRAMA SATRICO

AMBROSIA
SARTYRSPIEL
Spanisch von Orestes Sandoval Lpez
Havanna 2007




Alle Rechte vorbehalten, insbesondere das der Auffhrung durch Berufs- und Laienbhnen, des
ffentlichen Vortrags, der Verfilmung und bertragung durch Rundfunk und Fernsehen. Das
Recht der Auffhrung ist rechtmig zu erwerben vom:
All rights whatsoever in this play are strictly reserved. No performance may be given unless a
licence has been obtained. Application for performance etc., must be made before rehearsals
begin, to:

S. Fischer Verlag GmbH
THEATER & MEDIEN
Hedderichstrae 114; 60596 Frankfurt am Main
Tel. 069/6062-273; Fax 069/6062-355
E- Mail: ulrike.betz@fischerverlage.de

Die Rechte an der bersetzung liegen bei Orestes Sandoval Lpez, Ave. 61 No. 5001,
Guanajay, Prov. Habana, Cuba

Frderung der bersetzung durch: / This Translation was sponsored by:


























- versin provisional -



Ambrosia

Drama satrico

de

Roland Schimmelpfennig



















Personajes

HERING, entre 40 y 45
GALLASCH, el mayor de todos
GUBIG, entre 30 y 40
KREYE, de edad semejante a GUBIG.
KRONBERG, el vendedor de embarcaciones
La SEORA HARTUNG
El SEOR HARTUNG, ambos alrededor de los sesenta.
ROCKWEILER, a mitad de los 30
LA TABERNERA, con toda seguridad ms de 30, si no an mayor
La ESPOSA DE HERING

Retintn es de la segunda parte de Fausto.
En el caso de Lilohada y En mi pequea manzana son las melodas tradicionales
lo que se tiene en mente y se desea.
Las melodas de Cancin de la lechuza roja y de As estamos aqu son libres. As
estamos aqu es objeto de improvisacin. La Cancin de la lechuza roja requiere de
un compositor.

Descripcin de los personajes y del vestuario.

Quien no tenga texto, bebe o manipula su vaso o una botella. Se bebe y fuma
ininterrumpidamente.
Las oraciones viene muchas veces de la nada, con toda rudeza, seguridad de su
objetivo y claridad. Sin embargo a menudo no resulta claro a quin estn dirigidas.
Nadie acta borracho, nada de balbuceos, nada de tambaleos.

Una mesa larga de madera. Sillas de madera. En ambos lados de cabeza GALLASCH y
la SEORA HARTUNG. En las esquinas GUBIG y KREYE. Al costado HERING,
KRONBERG, ROCKWEILER, SEOR HARTUNG

HERING KRONBERG ROCKWEILER SEOR
HARTUNG
GUBIG
KREYE
GALLASCH SEORA HARTUNG













I.
Probablemente un restaurante en una bveda. Aunque estoy pensando ms bien en un
espacio de perfecto color blanco, un white cube, Justine sin embargo en un cuadro
muy oscuro, casi negro con reflejos rembrandtianos de luz. En ningn caso: un
restaurante en una bveda, nada de un lobby, nada de un establecimiento. Un grupo de
seis hombres y una mujer en torno a una larga mesa, ninguna otra mesa, ningn otro
husped. La mesa llena de vasos y botellas vacas y medio vacas en todos los tamaos
y tipos usuales en la gastronoma. Varios ceniceros. Cigarrillos encendidos. En una
pared un telfono.
Esta no es una reunin de alguna asociacin ni una fiesta de cumpleaos. Lo que ha
reunido y mantiene juntos a este grupo no es importante. El transcurso de la
conversacin parece lineal pero no lo es. No hay vacos excepto en los lugares
establecidos.
KRONBERG y GUBIG estn vaciando en ese mismo instante dos vasos metlicos con
aguardiente y luego los colocan sobre la mesa. A la izquierda est bebiendo
GALLASCH, el mayor de todos, de un vaso de cerveza medio lleno. El SEOR
HARTUNG bebe de un vaso de cerveza lleno. La SEORA HARTUNG agita otro con
vino tinto. Ambos estn entre fines de los cincuenta y principio de los sesenta aos de
edad. ROCKWEILER est leyendo una y otra vez la etiqueta de una delgada botella de
vino. Un asiento est vaco. KREYE acaba de salir. HERING se levanta.


HERING:
Seores

Breve pausa.

seoras, seores seores

Breve pausa.

declaro

Breve pausa.

tengo que decir que estoy borracho. Estoy borracho. Sin haberme dado cuenta.

Breve pausa.

As que abandono ahora mismo esta mesa.

Se queda sentado.

Les deseo a todos una buena noche.

Hace ademn de irse.

KRONBERG:
Y eso por qu y eso por qu

Mantiene agarrado a HERING de la manga de la camisa.

ROCKWEILER:
Sintate, sintate, no te vas a ir ahora as

GUBIG:
Sintate, sintate, no puedes estar borracho. Todava no es posible que ests borracho.

HERING:
Pues s, lo estoy, no lo not pero lo cierto es que no estoy solo algo bebido sino que lo
noto, estoy borracho por completo

GALLASCH:
Sintate

ROCKWEILER:
No puedes

SEOR HARTUNG:
No puede estar borracho

HERING:
Pero

GALLASCH:
No

HERING:
Yo

KRONBERG:
No!

Pausa.

SEORA HARTUNG:
Y Usted qu tena?

HERING se siente confundido por la pregunta, la reconstruccin del transcurso de la
noche hasta ese momento est por encima de sus posibilidades. Se auxilia de los dedos
para contar pero no llega muy lejos

HERING:
Yoyo tena

KRONBERG a GUBIG:
Tena lo mismo que t

GUBIG:
Lo mismo?
Lo que yo tena?
Y yo qu tena?

ROCKWEILER:
Lo que tenas

GUBIG a GALLASCH:
Lo mismo que t

GALLASCH:
Yo?

HERING:
Usted

SEOR HARTUNG:
Usted tenatres cervezastres grandeso cuatro! Cuatro grandes? Cuatro
grandessa GUBIGt tenas cuatro grandes

GUBIG seala a KRONBERG:
l tena cuatro

El SEOR HARTUNG seala a HERING:
Pero l no.

SEORA HARTUNG:
Cuntas cervezas tena Usted?

HERING:
Tres.

ROCKWEILER:
Cuatro!

Breve pasua.

HERING:
Tres o cuatro.

SEORA HARTUNG:
Usted tiene que saberlo!

HERING:
Tres.

ROCKWEILER:
Entonces eran tres grandes.

Breve pausa.

Nada ms!

GALLASCH:
Y luego el vino blanco

SEORA HARTUNG:
Cunto vino blanco tuvo Usted?

KRONBERG:
De cul?

SEORA HARTUNG:
De cul, tuvimos dos distintos: el portugueo azul y el Silberberger.

SEORA HARTUNG:
Ah!

GUBIG:
Pero de eso fueron ms de dos botellasfueron ms de dos botellas

KRONBERG:
Cuntas botellas del portugueo tuvimos?

HERING en sincero tono de lamentacin:
No s decir

ROCKWEILER:
Nosotros aqu? Cunto tuvimos? Dos? Quizs tres es que siempre recogenesa
mujer siempre recoge!

El SEOR HARTUNG desde el otro lado de la mesa en direccin al grupo:
Nosotros aqu tuvimos dos botellas del portugueono creo que en ese tiempo ustedes
se hayan bebido tresel Silberberger fue lo primero.

GUBIG:
El Silberberger vino despus del portugueo

SEORA HARTUNG:
Vamos, vamos, que Usted nunca tuvo ms de media botella del portugueo

HERING:
El portugueo? El portugueo estuvo bueno.

GALLASCH:
Pero luego vino el otro.

KRONBERG:
El otro.

La SEORA HARTUNG (u otra persona, GALLASCH por ejemplo) emite con el dedo
en la boca un fuerte sonido como de una botella descorchndose.

SEOR HARTUNG:
De ese tuvimos tambin dos botellas. Dos o tres.

GUBIG:
Suave y ligero.

ROCKWEILER:
Tres.

Una botella se cae.

KRONBERG:
Dos, dos!

KREYE regresa, se deja caer pesadamente en la silla an vaca. Silencio muy breve.
Luego:

KREYE:
Dos, dos qu?

GALLASCH eructa.

ROCKWEILER levantndose:
Tiempo para Lambert.

Sale.

SEOR HARTUNG:
O sea: fueron tres cervezas grandes, media botella del portugueo, media botella del
palatino, no mucho.

GALLASCH:
Solo falta el vino tinto.

GUBIG:
Ese no fue mucho cunto fue?... cunto fue?

KREYE:
Cmo que el vino tinto

KRONBERG:
Dos tres vasos

HERING con dificultad:
Dos tres

KREYE:
Dos tres vasos

Por toda la mesa se encuentran altas copas de vino tinto, algunas todava estn llenas.
Junto con las copas de vino blanco, los vasos y las jarras de cerveza, las llamadas
copas Rialto, llenas de surcos, los vasos de aguardiente, los vasos de agua, las botellas
y garrafas vacas as como los platos dispersos hay todo un paisaje sobre la mesa.

KRONBERG:
l no tena tanto, yo estaba a su lado, dos vasos aqu! El tercero ni lo toc.

Muestra la copa llena de vino tiento, la levanta como demostracin y bebe.

GALLASCH:
Entonces tres cervezas grandes, 2 medias botellas de vino blanco, dos copas de vino
tinto eso no es nada. No es nada!

Breve pausa.

KRONBERG:
No hubo aguardiente? Aguardiente en algn momento? Gubig y yo tenamos
aguardiente.

HERING:
Yo nunca bebo aguardiente, no tena ninguno.

SEORA HARTUNG:
Ningn aguardiente?

GALLASCH:
Ningn Grappa? Ningn Willi? Ningn Syracuser?

SEORA HARTUNG:
Ningn aguardiente?

HERING:
Ningn aguardiente.

GUBIG rpidamente:
El aguardiente es bueno para el hgado!

KRONBERG mirando escptico a la mesa, donde se hallan tantos vasos de cerveza:
Entonces

Breve pausa.

Otra cerveza?

Breve pausa.

Cerveza?

HERING recordando, concede:
Dos pequeas.

Breve pausa.

Una mediada.

Pausa.

SEOR HARTUNG:
Tres cervezas grandes, 2 medias botellas de vino blanco, algunas copas de vino tinto,
dos cervezas pequeas y una mediada

Breve pausa. GALLASCH sacude los hombros.

GALLASCH:
Qu le pasa

KRONBERG:
Vamos: dale, sintate. Acaba de sentarte.

Breve pausa. Nada sucede.

SEORA HARTUNG vehemente:
Adentro o afuera!

KREYE:
Sintate

GALLASCH le grita:
Sintate!

HERING se sienta.

Pausa.

SEORA HARTUNG:
Gracias a Dios en el cielo.

KRONBERG lleno de reproches, concluyendo:
Queriendo irse.

HERING agarra la botella de vino, pero est casi vaca. Vierte el resto en su copa an
llena, de la que KRONBERG acababa de beber, y bebe l mismo.

KREYE eructa.

SEOR HARTUNG responde con eructos.

GALLASCH se tira pedos.

ROCKWEILER regresa y se desploma sobre su silla.

GUBIG eructa.

ROCKWEILER le devuelve el eructo.

Pausa.

SEORA HARTUNG:
Qu bien que se qued.

Breve pausa.
De repente GALLASCH empieza a entonar una alegre cancin. Los otros se suman
alternativamente, pero a veces tienen dificultades de coordinacin.

GALLASCH:
Que nada venga hoy a contrariarme!
Me siento tan libre y tan a mis anchas!
Nuevos goces y alegres canciones
He venido a buscar.
Y as, yo bebo, bebo y vuelvo a beber.

HERING se suma entonando desigualmente:
Que choquen los vasos con su retintn!
T que ests ah fuera, llgate ac!
Chocan los vasos y listo

TODOS:
Que cada compaero beba y beba!
Haced alegremente un brindis. El retintn!
Manteneos firmes, sentados en el banco y la tabla.
Para aquel que est debajo de la mesa, la cosa est lista.

KREYE y KRONBERG no muy sincronizadamente:
Mi mujercita gritaba, furiosa,
Poniendo mal festo ante este traje de colorines,
Y como yo me pavoneaba,

ROCKWEILER se suma:
Me ha motejado de mamarracho.
Pero yo bebo, bebo y vuelvo a beber.
Que choquen los vasos con su retintn!
Hacedlos chocar, mamarrachos! Suenan, y listo!

TODOS:
Que cada compaero beba y beba!
Haced alegremente un brindis. El retintn!
Manteneos firmes, sentados en el banco y la tabla.
Para aquel que est debajo de la mesa, la cosa est lista.

GUBIG y la SEORA HARTUNG asumen la siguiente estrofa:
No digis que me he extraviado,
Pues me hallo donde me cuadra.
Si no me fa el tabernero, me fiar la tabernera,
Y si no, en fin, me fiar la criada.

Tambin SEOR HARTUNG y KRONBERG y GALLASCH:
Yo siempre bebo, bebo y vuelvo a beber.
Arriba, vosotros! El retintn!
Cada cual a la salud de cada cual, y as todos, uno tras otro.
Pero me parece que la cosa est lista.

HERING solo:
Cmo y dnde me divierte,
Eso me importa un bledo.
Dejadme estar tumbado aqu donde estoy,
Porque no me puedo tener ya en pie.

GALLASCH slo repite simplemente las ltimas estrofas, mientras los otros ya quieren
entrar en el estribillo. Breve desorden:
Cmo y dnde me divierte,
Eso me importa un bledo.
Dejadme estar tumbado aqu donde estoy,
Porque no me puedo tener ya en pie.

TODOS:
Que cada compaero beba y beba!
Haced alegremente un brindis. El retintn!
Manteneos firmes, sentados en el banco y la tabla.
Para aquel que est debajo de la mesa, la cosa est lista.

Durante las ltimas estrofas la tabernera se ha ido aproximando y ha empezado a
recoger la mesa, lo cual resulta difcil teniendo en cuenta la cantidad de copas y
botellas. La tabernera lleva una falda negra, una blusa negra y un delantal blanco.

ROCKWEILER:
Quisiramos pedir algo.

LA TABERNERA:
Un momento, por favor.

KRONBERG:
Nos gustara beber algo ms.

LA TABERNERA:
S, un momento, por favor, en cuanto termine de recoger, regreso.

ROCKWEILER:
S, s, recoja, pero al mismo tiempo podramos pedir algo.

LA TABERNERA:
Enseguida regreso

ROCKWEILER:
Eso ahorra tiempo y a Usted caminar de ms, lleva horas caminando

LA TABERNERA tiene dificultades con la bandeja repleta.

LA TABERNERA:
Es muy amable de su parte, pero realmente no

KREYE abrevia todo:
Yo quisiera una cerveza, puede ser?

LA TABERNERA:
Una cerveza, s

KREYE:
Pero no cerveza clara, sino oscura, alguien ms desea cerveza oscura?

Est casi orgulloso del pedido hecho.

Tiene cerveza oscura

LA TABERNERA, que sigue ocupada con las copas pero que solo puede colocar en la
bandeja una parte insignificante de las mismas:
S, claro, cerveza oscura, tenemos

KRONBERG:
Entindalo, mi amigo no se refiere a cerveza vieja,

LA TABERNERA:
Nada de cerveza vieja

Pausa breve, casi misteriosa.

KREYE:
Me refiero a cerveza bien oscura: cerveza fuerte.

Breve pausa.

LA TABERNERA:
Cerveza fuerte

KRONBERG:
Alguien ms una fuerte?

SEORA HARTUNG:
Buf

GALLASCH:
Una doble.

SEOR HARTUNG:
Superfuerte, magnfico.

LA TABERNERA:
Ahora no sabra decirle

SEOR HARTUNG:
Una Einbecker superfuerte.
Si la tuviera...

HERING:
Einbecker superfuerte... la hay oscura y la hay clara.

SEOR HARTUNG alegremente:
Cierto!

KREYE:
Lo tiene?

LA TABERNERA:
Primero tengo que

KRONBERG:
Una superfuerte oscura

LA TABERNERA:
Si la tenemos

GALLASCH:
Superfuerte clara. No tendrn por casualidad superfuerte de primavera?

LA TABERNERA:
No lo creo

SEOR HARTUNG:
Una superfuerte oscura si la tienen, y si no una Pils.

LA TABERNERA:
Un momento, por favor, no tengo mi libreta.

SEOR HARTUNG:
La cosa suave para la cosa fuerte.

LA TABERNERA:
Voy a llevarme primero la bandeja y luego

ROCKWEILER:
No hace falta, no hace falta, para las pocas bebidas

SEORA HARTUNG:
Yo no quiero cerveza fuerte. Odio la cerveza fuerte, la oscura y la cara, y la peor de
todas es la Einbecker superfuerte de primavera.

GALLASCH:
Magnfica, hasta la misma botella.

SEORA HARTUNG:
La botella?

SEOR HARTUNG:
La botella con el anillo de un verde irisado, una de las mejores cervezas del mundo.

SEORA HARTUNG:
Verde como un escarabajo.

GUBIG levantndose:
Tiempo para Lambert.

KREYE:
Y t qu quieres? Quieres algo?

GUBIG:
S, pero eso lo puedo

KRONBERG:
Pero es ahora mismo que ella est aqu!

LA TABERNERA:
No, de verdad, no importa, enseguida regreso.

ROCKWEILER:
Dale, acaba de decirlo.

GALLASCH:
La de primavera

SEORA HARTUNG:
Empez con el portugueo, ahora no vaya a pasarse del otro lado y dejarme sola!

GUBIG se siente sobrexigido.

SEORA HARTUNG:
Queremos una botella de tinto.

LA TABERNERA:
Una botella de tinto

GALLASCH:
O se refera Usted al portugueo

SEORA HARTUNG:
Me refera al tinto no es ese el portugueo.

ROCKWEILER:
El portugueo era blanco.

SEORA HARTUNG:
Tinto! Ya lo dije, tinto!

GUBIG sale.

SEOR HARTUNG:
Hay alguien ms sin ticket de viaje?

KREYE:
Fuerte.

ROCKWEILER:
Fuerte.

HERING:
Tinto.

SEOR HARTUNG:
Oscuro o claro.

HERING:
Tinto.

SEOR HARTUNG:
La cerveza fuerte

ROCKWEILER:
Clara.

KREYE:
Oscura.

LA TABERNERA ha llegado a la proximidad de HERING. En voz baja e
insistentemente.
Seor Hering, Usted quera irse hace rato.

HERING:
S, es verdad.

LA TABERNERA:
Hace rato que Usted quera irse.

HERING:
S, pero todava estoy aqu.

SEOR HARTUNG:
Bueno, creo que lo tenemos

ROCKWEILER:
No s qu pude haberle encontrado a esa

LA TABERNERA:
Pero por qu, qu sigue haciendo aqu

SEOR HARTUNG:
Oscura, oscura, oscura, una, dos, tres, clara, clara, son dos, tinto, tinto, y tinto.

LA TABERNERA:
No lo entiendo nada, es que hace rato Usted quera irse

HERING:
S, es cierto, pero no lo he hecho. Estoy aqu.

Breve pausa.

LA TABERNERA:
Pero por qu

HERING:
Por qu? Por qu no me he ido?
Porque mis amigos no me dejan.

Breve pausa.

Pero probablemente

Breve pausa.

Pero probablemente estoy aqu porque

Breve pausa.

Porque en realidad no

Breve pausa.

No quera irme.

Breve pausa.

Porque en realidad nunca quise irme.

LA TABERNERA:
No puede decir eso! Debe haber alguien esperndolo en casa! No puede decir eso!

Pausa.

HERING:
Pero lo digo!

Breve pausa.

Pero lo digo!

LA TABERNERA:
Noeso no puede

HERING:
Lo digo porque es as.

LA TABERNERA:
No, no es cierto, hace rato que Usted quera estar en casa.

GUBIG regresa:
Retintn, retintn.

HERING:
Estoy aqu porque yo quiero estar aqu!

SEOR HARTUNG:
Casi rima: oscura, oscura, oscura, uno, dos, tres, clara, clara, son dos, tinto, tinto y tinto.

LA TABERNERA se marcha pasando por delante de GALLASCH:

GALLASCH:
Dios mo! Dios mo! Qu promesa!

HERING:
Por necesidad, por deber o por inclinacin.

Breve pausa.

Todo est bien.

KRONBERG levantndose:
Tiempo para Lambert.

Los otros callan en ese instante. l da la vuelta algo complicadamente alrededor de la
mesa para luego atravesar el escenario por delante de la mesa. A los dos tercios del
camino recorrido sin complicaciones cae a todo lo largo. Eventualmente tena una copa
en la mano, que se rompe en la cada. Se levanta y sale.
Largo silencio. Se bebe y se fuma.

ROCKWEILER se manosea todo el tiempo algo en el rostro.

SEORA HARTUNG:
Dgame, qu est haciendo ah, qu hace Usted, es un tick nervioso o est tratando de
exprimirse una espinilla? Es una espinilla? Deje de estar exprimindola!

Silencio. KRONBERG regresa. Esta vez no sucede nada.

GALLASCH:
Qu voy a hacer con la chica qu tengo que ver con la niala madre muri al parir
y luego se muere el padre, mi hermano, cuando acababa de cumplir diecisiete. Entonces
vino conmigo. Conmigo qu voy a hacer con la chica?

Breve pausa.

La envi de vuelta, con mi prima, a los EE.UU., ella tena hijos y luego qu iba a
hacerni siquiera haba terminado el bachillerato. Pero correcta s era. Ideal para la
contabilidad, o para secretaria, quizs incluso ms tarde conmigo en la antecmara
Y luego me escribe mi prima: esa ms bien se convierte en trapecista que en contable.
Trapecista. Trapecista: tremenda palabra: te, pe, ce, te, a.

Breve pausa. SEORA HARTUNG sale rpidamente.

Vi todo el futuro delante de m:

Breve pausa.

La nia amenazaba con quedar colgada toda la vida de mi cartera. Toda mi vida. Y qu
sucede?
La nia regresa de los Estados Unidos y empieza a sacarme el dinero con una bomba.
Que necesita dinero, dice, y que lo devolver. S, a ver, cmo? No quiere empezar a
estudiar nada, tiene otros planes.
Bien, dije, haz lo que quieras, ya eres adulta, voy a prestarte dinero una vez, tambin te
lo prestar una segunda vez
Pero despus se acab. Te vas a trabajar.

SEORA HARTUNG ya vuelve de regreso.

Y ella ella empieza a preparar panes. Prepara panes y los vende.
Panecillos. Con queso, con embutido y encima de todo un pepinillo.
Y debajo mayonesano solo de las de tubos sino hecha por ella misma. Con mi dinero.
Pero un ao despus me devuelve todo el prstamo. Todo. Y tiene tres empleados que
hacen para ella el trabajo de preparar los panes. Y los pepinillos ahora se llaman
cornichons y concombres.
Tiene tantos encargos que no da abasto con los panecillos, asume el abastecimiento de
empresas organizadoras de matrimonios y de equipos de filmacin. La gente se come
todos los panecillos que prepara. Tiene tantas ventas que ya no sabe qu hacer con el
dineroy luego vienen los EE.UU. Hollywood. Hay gente en Hollywood que no mueve
un dedo hasta que no tiene a su lado uno de los panecillos de ella. Dice que el secreto
est en la masa. La masa la hace tambin ella misma. Hace que la hagan. Todo es hecho
a mano: los panecillos, la mayonesa, todo. Hoy es tan rica que no tendra que trabajar ni
un solo da ms de su vida. Ni uno solo.

Pausa quejumbrosa.

Bueno, ella no me deja morir de hambre. De eso nada.

Breve pausa.

Pero esa espera. Esa espera por debajo de la mesa, por si algunas migas caen al suelo.

Breve pausa.

No es que yo necesite dinero. De verdad no necesito dinero. Pero nunca es suficiente
y si yo tuviera cien mil ms ella no lo notara.
Ella ni siquiera lo notara.

Breve pausa. Dentro de esa pausa el sonido del encendedor de la SEORA
HARTUNG, que se enciende un cigarrillo.

Esta espera es tan indigna. Ella me ha quitado mi dignidad.

Breve pausa.

Pero no puedo hacer las cosas de otra manera: espero a que las sobras caigan de la mesa.
No logro apartarme de la mesa. Como un perro.

Breve pausa.

Como un perro.

Breve pausa.

Es en lo que ella me ha convertido. En un perro.

Aullando.

Un perro debajo de la mesa es lo que ha hecho de m.

ROCKWEILER:
Este actor poda mover el ojo izquierdo y el derecho

Breve pausa.

separados, uno separado del otro. Cada uno independientemente!

SEOR HARTUNG:
La Tierra crece. Por supuesto que la Tierra gana en volumen.

HERING:
Cmo?

SEOR HARTUNG:
Est claro

KREYE:
Cmo que la Tierra crece? Es la primera vez que escucho eso.

Breve pausa.

Eso es una tontera.

SEOR HARTUNG:
Surgen nuevas capas terrestres. Constantemente.

HERING:
Y por qu?

SEOR HARTUNG:
Plantas muertas. Animales. Biomaterial en todas sus formas. Basura. Cadveres.
Ruinas. Todo eso se acumula poco a poco. Se vuelve cada vez ms.

ROCKWEILER:
A la derecha as y a la izquierda as. O un ojo permaneca quieto y el otro se mova de
aqu para all. Pobre tipo.

SEORA HARTUNG:
Dnde estar

ROCKWEILER:
Es decir: no era un impedimento fsico o algo as: l lo vea como un talento. Vaya
pobre tipo.

SEORA HARTUNG:
Dnde podr estar

SEOR HARTUNG:
Schliemann encontr Troya debajo de siete capas. La Tierra crece y crece y en algn
momento pesar demasiado

SEORA HARTUNG interrumpiendo:
Disculpa, podras ayudarme a buscar un momento

SEOR HARTUNG:
y se derrumbar por su propio peso.

SEORA HARTUNG:
Te he pedido algo!

SEOR HARTUNG:
Qu te pasa?

SEORA HARTUNG:
Por favor, podras ayudarme a buscar algo ahora mismo, hace 30 segundos tena mi
encendedor en la mano y ahora no aparece.

SEOR HARTUNG:
Lo habrs guardado?

GUBIG:
El Tringulo Negro.

SEORA HARTUNG con refulgente histeria:
No, no lo guard. Por eso mismo Lo tena en la mano y hasta pens, ahora mismo
acabo de pensar, atiende al encendedor que se te va a perder. Y ahora se perdi!

SEOR HARTUNG:
No puede estar lejos.

SEORA HARTUNG:
No entiendes
Acabo de tenerlo en la mano.

SEOR HARTUNG:
S

HERING:
Los derechos fundamentales de los hoplitas.

SEORA HARTUNG:
Ahora mismo

SEOR HARTUNG:
S, s, seguro que en algn lugar

GUBIG:
Cada da! Cada da! Eso se subsume!

SEORA HARTUNG:
No, no se trata de eso, se trata de que acabo de tenerlo en mi mano y pasta pens, ten
cuidado, y ahora desapareci porque a m siempre me pasa esto

SEOR HARTUNG:
Bueno, bueno

SEORA HARTUNG:
Me pasa constantemente, y poco a poco empiezo a preguntarme si algo anda mal
conmigo.

KRONBERG:
Insolacin. Tres das viendo televisin sin parar en un hotel de Hurgada.

SEOR HARTUNG:
Es solo un encendedor

KRONBERG:
Peor que una prisin.

SEORA HARTUNG:
Me da igual si es un encendedor

SEOR HARTUNG:
Es solo un encendedor, aqu, toma el mo.

SEORA HARTUNG:
No se trata de eso, no lo entiendes, se trata de que algo anda mal en mi cabeza

SEOR HARTUNG:
Cambiaste el encendedor de lugar, eso es todo

SEORA HARTUNG:
Claro, claro, rstale importancia al asunto, t idiota, rstale importancia para que ests
tranquilo esa basura se perdi! Y constantemente se me pierden las cosas! Cada da
se me pierden diez cosas. No pueden esfumarse en el aire! Algo anda mal en mi
cabeza. El bolso entero con las cosas viejas de invierno que quera vender,
desaparecido! O se lo habr robado la mujer de la limpieza? Esa siempre ha dicho que
su talla es la misma ma, esa solo quiere ser igual que yo, quiere ser yo, quiere ser igual
que yo

SEOR HARTUNG:
Eso no tiene nada que ver con el encendedor

SEORA HARTUNG con voz spera y temblorosa:
Vete al carajo, al carajo! T sabes bien lo que eso tiene que ver con esto!
Acabo de ponerlo ah, y ya no est.

LA TABERNERA regresa, cargada de botellas de cerveza y vasos, pues la cerveza
fuerte no la hay de barril.

LA TABERNERA:
Tres fuertes oscuras, quin pidi las oscuras?

KRONBERG:
Yo ped una.

SEOR HARTUNG:
Y yo

ROCKWEILER:
Y yo

Breve pausa.

KREYE:
Cmo es eso? Y la ma entonces?

Breve pausa.

ROCKWEILER:
Falta una! Falta una oscura!

SEOR HARTUNG:
Un momento Tenamos tres oscuras

LA TABERNERA:
Tres oscuras

KRONBERG a KREYE:
T no pediste una oscura!

KREYE:
Yo? Claro que s

LA TABERNERA:
Eran tres cervezas fuertes oscuras

KREYE:
Yo ped una cerveza oscura

GALLASCH:
Yo, una clara

SEORA HARTUNG:
Quedamos en tinto

GALLASCH:
Aj.

Sin notarlo ella misma enciende un cigarrillo con su propio encendedor.

KREYE:
T!

ROCKWEILER:
Qu?

KREYE:
T queras una clara!

ROCKWEILER:
Yo?

HERING:
Tinto.

GUBIG:
Tinto.

ROCKWEILER:
Yo? Y eso entonces por qu?

KREYE:
No tengo idea

ROCKWEILER:
Eso no puede ser

KREYE:
T lo dijiste!

ROCKWEILER:
De ningn modo.

KREYE:
Pues s, s, yo lo escuch.

KREYE cambia su botella de cerveza fuerte por la clara de ROCKWEILER.

ROCKWEILER:
As de repente! Yo quera una oscura No voy a beber fuerte clara si no la ped!

SEOR HARTUNG:
Oscura, oscura, oscura, una, dos, tres, clara, clara, son dos, tinto, tinto y tinto.

ROCKWEILER:
Ni lo pienso!

Con ms fuerza:

Ni lo pienso!

LA TABERNERA sale.

GALLASCH:
Una mirada al paraso. Una breve mirada al Jardn de Dios.

KRONBERG:
Has visto las imgenes del meln cuadrado? Ese meln cuadrado, lo viste? Esa
imagen del asitico con el meln cbico que cosech? La viste? S?

Breve pausa.

Ese meln es el futuro.
Ese es el futuro.

GALLASCH:
No entiendo.

SEORA HARTUNG a ROCKWEILER:
Deje de seguir escarbndose!

KRONBERG:
La cuestin es: por qu haces eso? Por qu cultivan un meln cuadrado?

Breve pausa. Reflexiona.

Ya sabes la respuesta

GALLASCH:
No, no tengo idea

KRONBERG:
Ese meln, ese meln asitico, cbico, no se queda en Asia. Viene a nosotros. Y cmo
viene a nosotros?

Breve pausa.

En barco. 90 por ciento del trfico mercantil internacional se realiza por barco, la
tendencia es a aumentar a pesar de los derrumbes internacionales de mercados.
Cualquier cosa, el auto coreano, los troncos de rboles canadienses, el televisor
taiwans, los melones vietnamitas: todo, todo se transporta actualmente en
contenedores. El contenedor es ideal para las cadenas de transportacin interrumpidas,
l va de los camiones al ferrocarril al barco y luego otra vez al ferrocarril o al camin,
no hay problema.

SEORA HARTUNG:
Y por qu entonces el meln es cuadrado?

KRONBERG:
S, por qu

SEORA HARTUNG:
Por qu, s s, por qu?

KRONBERG:
Eso se lo puedo decir yo:

Devela el secreto:

El meln cuadrado ahorra espacio.

Risas.

El meln cuadrado se puede amontonar perfectamente. Aprovecha ptimamente el
espacio en el contenedor. Este es el futuro: 20 pies de largo, 8 pies de ancho, 8 pies de
alto. En metros: 6,10 por 2,44 por 2,44. Esas son las medidas del futuro. Esas son las
medidas del contenedor. 36 metros cbicos, ptimamente aprovechados.

HERING:
Bien, bien, bien, pero dnde est el quid?

KRONBERG:
El quid?

HERING:
El quid, s, el quid.

KRONBERG:
El quid est en que se puede ganar mucho dinero con este asunto.

SEOR HARTUNG divertido:
Con el contenedor? O con los melones?

KRONBERG serio:
Con los barcos

SEOR HARTUNG incrdulo:
Con los barcos

KRONBERG:
Con los barcos se puede ganar mucho dinero.

Breve pausa.

Presuponiendo que uno participe en ellos.

SEOR HARTUNG:
Participar en un barco

Breve pausa.

KRONBERG:
El mercado es increble. Fjense nada ms en las bases de contenedores. La demanda de
esos barcos es enorme. Un camin transporta dos contenedores. Para transportar 1000
hacen falta 500 camiones, pero solo un barco. Un solo barco en el que trabajan
catorce personas. Da por da, noche por noche. Pero qu digo 1000? 3000
contenedores en un barco no es raro. Tampoco 4000. Los barcos disponen de gras
propias, atracan, liberan una parte de su carga, vuelven a cargar y otra vez se marchan, y
as los 365 das del ao. Fantstico. Algunos de esos barcos ya son capaces de cargar
5000 contenedores y ms.

SEORA HARTUNG
Se aburre.

KRONBERG:
Y cada da da dinero. Pues el barco se chartea. Las tasas de charter estn ms altas que
nunca, ya lo dije, la demanda es enorme. Por lo menos diecinueve, veinte mil dlares
por da.

SEORA HARTUNG:
Aburrido!

SEOR HARTUNG:
El ritmo diferente Cada cual tiene que marchar a su propio ritmo, de lo contrario
nadie aguanta.

ROCKWEILER gritando:
Me traicionaste! T! T me traicionaste!

GUBIG:
Yo no te traicion!

ROCKWEILER:
T me traicionaste!

GUBIG:
Yo no te traicion!

ROCKWEILER:
Claro que s. T eres el Judas. Judas! Me traicionaste!

GUBIG tambin con voz penetrante:
Yo no te traicion!

KREYE:
La estudiante Juliane s que era una cosita fresca.
Redonda.
Joven.
Sensual.

Breve pausa.

Tuve suerte de que hubiera alguien all los sbados con la inflamacin, todo
supurando, seno frontal, seno nasal lateral, seno maxilar, todo lleno de pus, y en el odo
una burbuja de sangre que dola para morirse, y la doctora dice, hay que pincharla, a la
burbuja en el odo, pero antes tenemos que anestesiar el lugar, de lo contrario los
dolores le harn dar brincos hasta el techo, as que empapan un palillo de papel de tres o
cuatro centmetros de largo con el anestsico y te lo meten a lo profundo del odo para
anestesiar la burbuja, pero ya el hecho mismo de meterlo duele tanto que rabias del
dolor, en un segundo ests cubierto de sudor y las lgrimas te saltan de los ojos, y luego
hay que esperar a que haga efecto, dura como diez minutos, dicen, los diez minutos te
los pasas acostado en una camilla estrecha con vista a los auxiliares, y all est sentada
tambin la estudiante Juliane hablando por telfono. El dolor pasa y no pasa. La
anestesia no surte efecto. Si entonces te van a pinchar con la aguja.

Breve pausa.

Redondita como una pelota pequea y firme, con el pelo teido de un rubio barato y piel
tersa y un pantaloncillo del que sobresala la mitad de las nalgas. La mitad de las nalgas
las tena fuera, ella lo saba, estudiante Juliane deca aqu en la placa.

Seala al pecho.

Aqu en la placa.

Seala al pecho.

Estudiante Juliane, la blusa debajo de la bata medio abierta.

Breve pausa.

Y luego, diez minutos ms tarde, la doctora extrae el palillo, que goteaba pus y sangre, y
dice, oh, la burbuja de sangre estaba tan llena que la rompimos. Con el palillo. Sin
querer. Sin anestesia.

KRONBERG:
Podemos sacar la cuenta rpido:
Supongamos que inviertes 100 000.

ROCKWEILER:
100 000?

KRONBERG:
Bueno, que sea un poco menos, pero saquemos la cuenta con 100.

ROCKWEILER:
Est bien

KRONBERG:
Suscribes por 100 000, ms cinco por ciento de AGIO, es lo usual en el sector, da 150
000.

ROCKWEILER:
Hace ademn de decir algo, toma aire, pero KRONBERG es ms rpido.

KRONBERG:
En los prximos 12 aos es el tiempo aproximado de uso del barco recibes
dividendos que ascienden a unos 103 000. Pero no lo olvides: tambin participas en las
ganancias por la venta del barco y as ganas por lo menos otros 70 000. O ms. A ellos
les gusta calcular por debajo el ingreso restante. Y eso que el valor de chatarra de un
barco as es enorme: todo el acero. El barco completo lo desmontan en la India. Todo.
Calculemos no 70 sino 90 95 como ingreso por venta.

Breve pausa.

Entonces tienes un reflujo de capital antes de los impuestos de 198 000.

Breve pausa.

Y ahora: ahora viene lo mejor: has odo hablar alguna vez del impuesto por tonelaje?
Todo el dividendo est prcticamente libre de impuesto. Pagas en general, en total,
noms de 4800. Pues despus de la conversin al impuesto por tonelaje lo que se grava
no es la ganancia real sino una calculada en general, a partir del tamao del buque.
Para no hablar de la dotacin por prdidas de cerca de 16 por ciento en el ao de
suscripcin.

ROCKWEILER:
No.

KRONBERG:
Da un rdito de 8,7 por ciento cmodo. Antes de los impuestos. O: 8,0 por ciento
descontados los impuestos. Cmodo.

ROCKWEILER en realidad no ha entendido mucho el asunto pero no lo reconoce sino
que se pone a mirar inseguro a su alrededor.

SEORA HARTUNG:
Si hay algo que odio

Breve pausa.

Si hay algo que de verdad odio,

Breve pausa.

Odio

Breve alto.

Mujeres en la flor de sus aos. En la flor. La flor. La flor de los aos. En la flor de sus
aos. Cosas jvenes. Cosas jvenes con cosas llenas, saludables! Mujeres en la flor de
sus cosas!

HERING:
Mira, aqu

Empuja el labio superior hacia arriba a un lado, de modo que puede verse su colmillo.
Y prosigue:

Ese es el diente.

GALLASCH intentando mirar a la boca oblicuamente desde abajo:
Mmmh.

HERING:
Ruina total, extraccin de raz, todo esmerilado. Diente de espiga. Pero se supone deba
ajustarse a los dems. Y esos no son blancos.

GALLASCH:
Blanco? Blanco? Amarillo!

SEORA HARTUNG:
Dientes amarillos!

HERING:
Pero hay miles de tipos de amarillo.

SEORA HARTUNG:
Amarillo gris.

HERING:
Los otros s, pero no el viejo, no el que me hicieron hace diez aos, ese no. Ese no es
amarillo gris

GUBIG:
Va hacia el verde blancuzco.

HERING:
Ves, eso es lo que digo

KRONBERG:
El otro apunta hacia el ocre

HERING:
Eso es lo que quiero decir

GALLASCH:
Djame ver otra vez

Levanta el labio de HERING:

GALLASCH:
Mal trabajo.

KREYE:
Hay alguien que no sabe hacer su trabajo.

SEOR HARTUNG:
Mala suerte para el que alguna vez crey en eso!

ROCKWEILER:
Me dice: el pescado empieza a apestar por la cabeza. En la cabeza es donde el pescado
apesta primero: y as se refera a m.
Me dice que apesto. Pues soy la cabeza del pescado.
No puede decirme que apesto.
No puedo permitir eso.
No me puede decir eso.

SEORA HARTUNG:
Puede ser

ROCKWEILER:
Qu cosa?

SEORA HARTUNG:
Puede ser

ROCKWEILER:
Qu cosa?

SEORA HARTUNG:
Puede ser que Usted apeste

Breve pausa.

Eso pasa ms rpido de lo que uno cree

SEOR HARTUNG:
Y eso qu es?

ROCKWEILER:
Que cosa?

HERING:
Eso en tu cabeza.

ROCKWEILER:
En mi cabeza?

KREYE:
S! Ah!

Breve pausa.

Te ests volviendo calvo?

ROCKWEILER:
Dnde?

GALLASCH:
Ahuna parte peladano es grande pero calvaun poco escamosa

Breve pausa. ROCKWEILER se palpa la cabeza. Se sobresalta brevemente al
encontrar el lugar.

ROCKWEILER:
Ah, eso.

GUBIG:
Se ve horrible

ROCKWEILER:
Siempre he tenido

Est mintiendo?

GUBIG:
Siempre?

SEORA HARTUNG:
La parte calva.

GALLASCH:
Siempre

ROCKWEILER:
Siempreya desde nioah nunca creci un pelo. Algn defecto. Algn diminuto
defecto en la masa gentica.

KRONBERG:
El Crossing Over de Rutherford.

SEORA HARTUNG:
Qu otras cosas no andarn bien en Usted

ROCKWEILER:
Por qu dice eso?

Breve pausa.

Qu otra cosa no iba a estar bien conmigo?

SEORA HARTUNG:
Tres pezones, testculos encarnados, membrana natatoria entre los dedos de los
pies

Breve pausa.

SEOR HARTUNG:
Todo una cuestin del ritmo todo una cuestin del ritmo

Breve pausa.

GALLASCH:
Tena un cuerpo poco comn, un cuerpo realmente poco comn, era

Reflexiona

Deforme. Era deforme, tena un culo de verdad, de verdad extraordinariamente
grasiento

Reflexiona a ver si encuentra una palabra mejor, al hacerlo y a causa del esfuerzo
tuerce hacia abajo despectivamente la comisura de los labios

Grasiento

No, no se le ocurre una palabra mejor,

Un culo grasiento

KREYE:
Pregunta: es posible pensar dos cosas al mismo tiempo?

SEORA HARTUNG:
S!

KRONBERG casi al mismo tiempo:
No!

Breve pausa.

SEOR HARTUNG:
Mitad de edad, doble de exitoso.

HERING:
Quiero decir, hace aos hablan de eso. Hace aos hablan sobre la reforma. Hace aos
que hablan de reestructuraciones y redistribuciones. Hace aos que hablan de reducir las
tarifas. Desde hace aos. Y ahora eso:

GUBIG:
Mala suerte para el que alguna vez crey en eso!

KRONBERG:
150. 150 mil. No es tanto cuando uno mira bien las cosas a su alrededor. 150 mil los
tiene en realidadcualquiera. Cualquiera: solo que nadie lo sabe.

150 veces 1000 no son un problema: cuntas veces no pasan por encima de la mesa
1000 y uno ni sabe por qupara qusolo hay que ser cuidadoso. Tener 150 veces
cuidado y ya vers cmo de pronto tienes 150 mil: en tres aos los tienes. Nada de
vacaciones caras, nada de salir constantemente a comer, o ropas nuevas: nada de trajes
nuevos caros, zapatos caros. Eliminar todos los extras: un segundo auto, taxis, televisor
de cristal lquido, se puede vivir sin eso: incluso mejor. Solo que an no lo sabes: y por
otra parte: el dinero trabaja. El dinero trabaja como la madera bajo el sol: se extiende, se
abre espacio.

Pausa.

Ay, Dios, dinero.

SEOR HARTUNG:
Treinta y un aos ms joven.

KRONBERG:
Dinero!

SEOR HARTUNG:
Treinta y un aos ms joven.

KRONBERG:
Dinero! El dinero es magnficamente primitivo.

SEOR HARTUNG:
Hay que imaginrselo.

Breve pausa.

Eso tienes que

Breve pausa.

Eso tienes que imaginrtelo primero.

GUBIG:
Eso se sientese sienteno, estoy hablando y hablando pero la voz, mi voz, suena tan
extraa, tan extraa en mi cabeza, como si estuviera hueca, hueca como un cueva, suena
parecido a como en un saln.

GUBIG se golpea con el puo varias veces ligeramente un lado de la cabeza.

SEOR HARTUNG:
Cuando nace, ya tienes treinta y uno. Cuando tienes cuarenta, ella solo tiene nueve.
Cuando tienes cincuenta, ella tiene diecinueve. Siete aos ms tarde: ella ya tiene
veintisis y t con cincuenta y siete ya ests encima de los sesenta, y te pasa por el lado
sin verte.
Y t: se lo metes.
Increbleincreble. Qu triunfo.

HERING se levanta lentamente. Se queda un momento parado. Los otros lo miran.
Empieza a cantar.

HERING:
Una noche de octubre
La ciudad an duerme,
Caminos vacos bajo las blancas farolas,
Solo en las tabernas luz amarilla,
Ruido, que como aliento
Sale a la calle oscura,
Gritos,
Se empina el codo,
Uno se levanta
Se suba a la silla,
Se sube a la mesa,
Quin viene de caza conmigo?
Quin viene de caza conmigo?
Quin no se cansa esta noche?
Quin me sigue fuera de la ciudad?
No hay respuesta. Msica de fondo.
Chupadas inquietas al cigarrillo,
Un trago ms de cerveza:
Ahora al bosque?
Qu vas a cazar ahora
Ahora en medio de la noche?
Qu vas a cazar ah
Voy a cazar al ciervo blanco, al zorro de oro
Cazar a la lechuza roja.
He ree, he ree, as nos perderemos
He ree, he ree, nunca ms nos veremos

Una noche de octubre
La ciudad an duerme,
Caminos vacos bajo las blancas farolas,
Solo en las tabernas luz amarilla,
Ruido, que como el humo
Sale a la calle,
Gritos,
Se empina el codo,
El ciervo blanco!
El zorro de oro!
La lechuza roja!
Cuidado, si no te lleva la lechuza roja
Otra cerveza
Msica de fondo.
Desde afuera: ventanas amarillas,
La puerta
Se abre, doce hombres vienen
Se tambalean hasta casa
Sacan a los perros soolientos,
A las armas
Y a las lmparas de los stanos,
Se renen frente a la iglesia, campanadas las y cuarto,
En medio de la noche, se marchan:
Al bosque.
Hace fro esta noche. La luna se ve vieja.
Por entre las ramas tupidas de los rboles
La luz no logra atravesar
Amigos, mantnganse junto a m,
Cuidado, en silencio,
He ree, je ree, as nos perderemos
He ree, he ree, nunca ms nos veremos

En lo profundo del bosque es tan oscuro
Como en la oscuridad ms profunda del mar,
El ruido de las botas,
El peso de las armas en los hombros,
Toser, callar, andar,
El jadeo y el peso
De los perros en las correas,
Ese es el rastro, dice l,
Pguense a m,
Jadeo,
Los pasos se hacen ms rpidos,
Ramas que crujen,
Ves algo, oyes algo?
Qu fue eso?
Dnde?
Dice:
Suelten a los perros,
He, he, la caza comienza!

Pero ya no hay nadie all:
Ni perros, ni hombres.
Dnde estis? No hay respuestas.
Gritos. Ecos.
Nadie. El aliento sobre el follaje.
Hola?
Eco.
Y nada ms.
Tiempo. Miedo.
He, he, la caza comienza.
Sobre l, sola,
En una rama la lechuza roja:
Dice:
No llames a tus amigos,
No llames a tus perros.
Dice:
Queras cazarme
Y eres ahora mismo la caza.
Dice:
Desde ahora
Eres mo.
Dice:
Nunca jams te dejar ir.
He ree, he ree, as nos perderemos
He ree, he ree, nunca ms nos veremos

Una noche de octubre
Que no quiere acabar.
En lo profundo del bosque es tan oscuro
Como en la oscuridad ms profunda del mar,
Ni luna, ni estrellas, ni cielo.
rboles, juntos como una bveda.
Luz amarilla. Una mesa larga.
Copas. Platos.
El ciervo blanco.
El zorro de oro.
He, he, la caza
El aliento cae pesado sobre la mesa.
La lechuza roja levanta su copa.
Dice:
Nunca jams te dejar ir.
He ree, he ree, as nos perderemos
He ree, he ree, nunca ms nos veremos

Amanecer temprano.
El da empieza. Gris.
l est solo.
Llama.
Eco.
Hola?
Eco.
Nadie. El bosque entero es mudo
A la primera luz del da.
Nadie all. Silencio total.
Ni un animal.
Ni un pjaro.
Ni viento, ni murmullo en los rboles. Nada de nada.
Hacia el medioda
Encontr el camino de regreso a la ciudad. Todava
El da es gris. Claro,
Pero sin sol.
No hay nadie.
Calles vacas.
Plazas vacas.
Nadie pasea.
Las casas
Vacas.
No hay nadie acaso aqu?
Eco.
La taberna vaca,
La puerta abierta.
Y tampoco
Nadie en casa.
El perro no ha regresado.
La mujer se march.
El chico
Se fue.
La casa
Est vaca.
He ree, he ree, as nos perderemos
He ree, he ree, nunca ms nos veremos

HERING vuelve a sentarse.

GUBIG:
De algn modo era falsa. Nada era autntico en ella, no lo era el cuello de piel, no lo
era la seda, la raya a un lado, todo falso.

Breve pausa.

Metida en carnes. Sentada en el tresillo para la premiere y esperando tan solo al tipo
correcto. Solo que la sonrisa era demasiado reservada. Nadie la quera. Nadie la quera.

LA TABERNERA se aproxima a HERING.

LA TABERNERA:
Seor Hering, all fuera hay alguien que desea hablarle.

HERING:
Quin?

LA TABERNERA en voz baja:
Eso no es importante, all fuera hay alguien que desea hablarle.

GALLASCH:
Quisiera otra cerveza.

HERING:
Quin va a querer hablar conmigo ahora? Ahora?

Mira al reloj.

A esta hora?

Bebe.

LA TABERNERA:
Ella dice que es muy importante.

GALLASCH:
Quisiera otra cerveza y un aguapi.

HERING
Ella? Quin es ella?

LA TABERNERA:
Su esposa

GALLASCH:
Me oy?
Quisiera otra cerveza y un aguapi.

KRONBERG:
Una cerveza para m.

HERING:
Mi esposa?

LA TABERNERA:
Su esposa est all fuera y quiere hablarle.

KREYE:
Cerveza est bien.

ROCKWEILER:
Cerveza. Y un aguapi.

HERING:
S pero si es tan importante, si para ella es tan importante, por qu no entr. Por qu
no entra?

LA TABERNERA:
Ellaella no puede entrar.

HERING:
Por qu no?

LA TABERNERA:
Ya cerraron. Ya hemos

Breve pausa.

en realidad ya cerramos

SEORA HARTUNG:
Vino tiento para m y para los dos seores.

HERING:
Pero esa puerta se puede abrir.

LA TABERNERA:
S, claro, se puede,

Breve pausa.

Pero solo desde dentro.

HERING:
Entonces abra la puerta! Que entre! Por favor!

LA TABERNERA:
Usted no quiere.

HERING:
Yo? No! No! Por qu?

LA TABERNERA:
Porquequiero decir, si Usted no quiere que ella entre, o si es mejor que ella no entre,
entonces Usted podra ir

HERING
No!

LA TABERNERA:
O sea, debe quedarse fuera?

HERING:
No! Por qu

SEORA HARTUNG:
Vino tinto para m y los dos seores.

LA TABERNERA:
Pens que si Usted no quiere que ella

HERING:
Quin dice eso? Quin? Que entre, por favor! Vino hasta aqu, por tanto que entre
hasta ac.

KREYE se levanta y eructa.

KREYE:
Tiempo para Lambert.

HERING:
No hay nada en contra!

De pasada KREYE se lleva una copa de vino tinto, se detiene un momento y escupe
dentro. Luego sale.

HERING:
Nada!

LA TABERNERA:
O sea entonces la dejo pasar.

HERING:
Se lo ruego!

Bebe de la copa de vino en la que KREYE acaba de escupir.

Si quiere hablar conmigo! Por favor!

LA TABERNERA se marcha.

GALLASCH:
Uno quiere y no puede. Uno querra, tendra! Y hay que renunciar!

Observa su mano lisa.

Renuncia!

SEOR HARTUNG:
Tictac. Tictac. Tictac. As de fcil

Breve pausa.

tan complicado.

KRONBERG:
Son modelosmodelos.

SEORA HARTUNG:
S, en eso se puede pensar, se puede, pero solo si hay que hacerlo, entiende, si hay
que hacerlo!

GALLASCH:
Ese es un problema antiqusimo. El problema es antiqusimoaqu

Se saca una vieja prtesis dental parcial y la coloca sobre la mesa.

SEORA HARTUNG:
Y yo no tengo que hacerlo. No lo necesito. No est en mi lista.

GUBIG:
Con luz artificial se ve de una manera y a la luz del da de otra muy distinta

SEORA HARTUNG:
Pero esa es luz artificial.

GUBIG:
Qu?

SEORA HARTUNG:
Aqu

GUBIG:
Aqu

SEORA HARTUNG:
Aqu, esta es luz artificial.

KRONBERG:
Luz artificial pero el modelo.

SEORA HARTUNG:
Esto aqu es luz artificial.

GUBIG:
S, y qu?

SEORA HARTUNG:
Entonces tiene que ajustarse

GUBIG:
Por qu

HERING:
Qu hay que lamentar: el auge?
El auge hacia arriba, subiendo a la Nada de Nada.

Trata de entender su propia idea. La esposa de HERING llega a la mesa, pero l no la
nota.

Tronando? Con fuerza quizs! Deslizndose a lo largo de los bordes blancos de
nubespero las nubes no son ms que nubes.

Breve pausa.

Ya lo veremos! Ya lo veremos!
No!
Ya lo estamos viendo!

Breve pausa.

Tictac.

Breve pausa.

Peropero eso ya exigir su amargo precio.

Ve a su esposa.

HERING:
T qu quieres?

Silencio.

HERING:
Qu quieres de m?

Silencio.

HERING:
Qu?

Breve pausa.

Por qu viniste hasta aqu? Tendrs una razn. No habrs venido sin una razn A
pie? En fin, vamos, di, qu quieres?

Silencio. KREYE regresa y toma asiento.

HERING:
Di algo!

MUJER:
Por favor. Vamos a casa.

Pausa.

Ven conmigo ahora a casa.

HERING vehemente:
No!

Al decirlo coloca su copa con fuerza sobre la mesa. GALLASCH, KRONBERG y
GUBIG cantan una parte de Retintn, Retintn!

HERING:
Silencio!

Silencio.

No voy a regresar contigo a casa!
No pienso hacerlo!
Has venido a buscarme?
No!
No!
No!

La mujer empieza a llorar.

Me quedo aqu!

GALLASCH:
Tiempo para Lambert.

GALLASCH se levanta. LA TABERNERA regresa con el pedido. GALLASCH vuelve
a sentarse. La mujer se queda parada a un lado.

LA TABERNERA:
El vino tinto

Distribuye el vino tinto.

Las cervezas

Distribuye las cervezas.

Y el aguardiente

Sirve el aguardiente. Cuando termina, HERING ruge.

Por qu no me sirven nada a m!

Breve pausa.

Por qu no me sirven nada a m!?

ROCKWEILER le grita:
Porque t no pediste nada!
Si quieres algo, tienes que pedirlo!

GUBIG:
El parto dur treinta y seis horas. Treinta y seis horas. La mujer estuvo treinta y seis
horas gritando de un golpe, y cuando la criatura al fin naci, la raj, la raj de verdad, la
cabeza era muy grande todo rajado sangr como un cerdo, no daban abasto con
ella, la partera, la doctora, desgarro perineal, desgarramiento del cltoris, todo destruido.

Mientras tanto GALLASCH sale.

Y luego estamos en casa de nuevo, afuera todo est oscuro, en invierno, y la mujer y la
criatura, un nio, en realidad duermen todo el tiempo, toda la casa est tranquila,
duermen el da entero, y yo yo cocino, lavo, me ocupo de todo, hago las llamadas por
telfono, me quito de encima a las madres, a la ma y a la suya, y todas las visitas, y
pongo todas las flores en los jarrones, y hago sopa porque alguien dijo que la sopa de
gallinas, cuando hay que permanecer una semana en cama, es muy buena, luego pasa
por casa la partera y habla y habla y habla, y luego, al caer la tarde, o por la noche, la
casa est tan tranquila y ella no sale de la cama, o si se levanta es solo para ir al bao y
al hacerlo se atiborra la bata de compresas porque sigue sangrando, tiene que ponerse
paales como un beb, y as va del dormitorio al bao y de paso me dice lo que necesita,
agua o t o sopa o paales, todo en voz baja, los dos duermen y yo me siento en mi
escritorio y me pongo a buscar algo y luego en la parte de atrs una de mis gavetas
encuentro una carpeta con viejas facturas y garantas y en medio de todo eso encuentro
una revista: HARDCORE, una revista porno. Empiezo a mirar las fotos, imgenes
fuertes de mujeres jvenes y rabos vinindose y mujeres dejndose chingar, y mujeres
hacindolo con animales, con animales, y de pronto la veo a ella detrs de m. Haba
dejado la cama y haba entrado en la habitacin sin que yo pudiera escucharla y ahora
estaba ah, en pantaln deportivo y todas las compresas y vendas, y ve la revista. Mira la
pgina en la que una joven se deja chingar por un macho cabro.

Breve pausa.

Y ella est atnitaatnita. Y despus dice: quera pedirte si me podas calentar un
caldo de pollo, pero no me escuchaste, fue lo que dijo: y mientras lo haca su mirada
permaneca clavada en la revista, en el macho cabro por el que se dejaba chingar
aquella muchacha.

La esposa de HERING haba desaparecido en algn momento. De repente se ha
marchado sin que nadie lo notara.

HERING a su ya ausente esposa:
Fuera! Fuera!

Su mirada no la encuentra.

SEORA HARTUNG retomando el hilo:
S, criar hijos es un tema espinoso.
Pero tambin se ha vuelto ms espinoso en los ltimos aos.
Antes era ms sencillo. O digamos: antes se haca ms sencillo. Hacer sencillo. No
pensar tanto.
Con una copa de aguardiente as de pequea Usted garantiza que su hijo lo deje en paz
con toda seguridad durante las prximas ocho horas.

Alza la copa. GALLASCH regresa.

2 cl. No hace falta ms. En la leche caliente, as de sencillo. Nunca han visto a un beb
borracho? No? Entre nosotros era normal. Lindo. Se balancean. Se tambalean de una
forma. Se ponen bizcos. Y luego

Con la mano abierta hace un corte horizontal en el aire.

Tranquilidad. Nada de gritos. Nada de despertar por la noche. Y por la maana:
desayuno de resaca:
Frotarlos con agua fra, caf fuerte y luego al aire fresco. As los pequeos recuperan la
vivacidad, eso es seguro. Hasta ahora eso no le ha hecho dao a nadie, esos hgados
infantiles lo asimilan todo cmodamente estn frescos

ROCKWEILER a HERING:
T tienes suerte. La suerte ha sido prdiga contigo. Tt tienes a alguien. La suerte ha
sido prdiga contigo. Eres feliz.

GALLASCH:
Pero presiento que esta noche me espera un gran sueo. Despus que durante aos
enteros me tiro ah sin soar nada, presiento hoy, hoy por la noche, un gran sueo que
me liberar de dormir como si estuviera muerto.

Breve pausa.

Eso ser magnfico

Silencio algo extenso.

KRONBERG:
Ahora

Breve pausa

Ahora mira.

Coloca una cuchara sobre el borde de la mesa de modo tal que la punta descuella, y
tras una fase de concentracin golpea la cuchara desde abajo con el dorso de la mano
derecha mientras deja caer la izquierda desde arriba a la altura de la mueca sobre la
derecha en ascenso. As la cuchara sale dando vueltas en el aire a la vez que emite un
sonido chasqueante. Repite el procedimiento, GUBIG, a su lado, lo intenta tambin,
pero fracasa ruidosamente. Lo vuelve a intentar y vuelve a fracasar, mientras que
KRONBERG domina el nmero a la perfeccin: dando vueltas asciende la cuchara por
el aire.
Los dos mejores bateristas del grupo empiezan entretanto a tocar sobre la mesa con
dos cucharas cada uno. Tocan a do, con bastante virtuosismo, y finalmente emplean
todo lo que es capaz de emitir un sonido: botellas, platos, ceniceros y sobre todo
tambin copas tanto vacas como llenas, algunas de las cuales se rompen durante el
ejercicio. El tamborilero se convierte en algo as como un timbre percusivo, como si
algunos de los objetos el cenicero metlico, el plato, etc. formaran algo as como un
xilfono. Entonan muy delicada y claramente el acompaamiento para la prxima
cancin.

GALLASCH:
En mi pequea manzana
Las cosas son divertidas,
En ella hay cinco salones
Como si fueran viviendas.

En cada vivienda habitan
Dos semillas, negras y pequeas,
Que estn dentro y suean
Con los clidos rayos del sol.

KREYE:
Ella no chinga

Pausa.

Ese es su problema.
No chinga, y no deja que se la chinguen.
Ese es su problema.
Y no tendra problemas si chingara.
No si chingara ms, sino si chingara simplemente. Ese es el problema. Ese es el
problema!!
She dont fuck.
As de simple.

SEOR HARTUNG:
Quisiera volver a hablar de los barcos

KRONBERG:
Bueno, si eso te interesa pinsalola oferta es insuperable.

Breve pausa.

Pero puedes pensar bien el asunto: o mejor todava: mralo bien de cerca

SEOR HARTUNG
Mirarlo?

KRONBERG:
S, mirarlo.

SEOR HARTUNG:
Cmo voy a mirar eso

KRONBERG:
Tengo algo para ti podra mover algunos hilos.

SEOR HARTUNG:
S?

KRONBERG:
Bautizo de barco y viaje de exhibicin del buque contenedor MS ALABAMA, prximo
sbado en Hamburgo. Encuentro de los invitados a partir de las 11 de la maana en el
muelle norte del puerto de Hamburgo. 11 y treinta bautizo, y a continuacin viaje de
recorrido para los invitados.
Desde el muelle norte viajar algunas horas hacia la desembocadura del ro Elba,
pasando por el costado de la terminal de contenedores y el distrito de Blankenese.
Aparte de las bellas vistas ojal que con tiempo magnfico Usted tendr la
posibilidad de participar en visitas dirigidas, por ejemplo, a la imponente sala de
mquinas. Por supuesto que se garantiza comida campestre as como bebidas.

ROCKWEILER:
Hace tiempo que todos nos conocemos. Todos nos conocemos hace suficiente tiempo.
Por tanto

KRONBERG:
Voy a decirte algo: no te estoy vendiendo aqu ninguna basura: yo mismo he invertido
todo mi capital en el MS ALABAMA. Todo. Todo. Nada va a salir mal.

Breve pausa.

E incluso si sucediera: todo est asegurado. Qu te crees? Todo est asegurado!

ROCKWEILER:
Fuiste t el que empez!

Asombrado enmudecimiento alrededor.

T! T empezaste con eso, no yo. No yo! No yo! T! No yo!

Pausa.

No yo! T! T empezaste con eso!

SEOR HARTUNG:
Un brioso Acuario buscaba esposa
Para habitar su alczar lacustre.
El amor de la real princesa,
De Lilohada, la bella ilustre.

Escuch campanas repicar
All en la laguna muy honda.
A padre y madre quera reencontrar
Lilohada, la joven oronda.

Y al llegar a las puertas
Del alczar lacustre
Reverencian hojas y yerbas
A Lilohada, la bella ilustre.

Y en la iglesia a la entrada
En el alczar lacustre
El brioso Acuario estaba
Ante Lilohada, la bella ilustre.

Dime ahora si deseas conmigo marchar
Hacia el alczar lacustre.
De tus nios all se siente el gimotear
Por Lilohada, la bella ilustre.

Y antes que a los nios deje llorando
All en la laguna muy honda,
Estar a hojas y yerbas adis diciendo
Yo, Lilohada, la joven oronda.

Pausa. La cancin se va apagando.

KREYE:
Ah, habra

Breve pausa.

Habra!

HERING asintiendo y al mismo tiempo defensivo, protegindose:
S

KRONBERG:
Digamos 5,5 por ciento, aunquelas tasas de inters actualmente andan por el suelo.
5,5 por ciento, eso no es nada. Antes andaban por ocho. Nueve. 5,5 es nada. Y algunas
hasta son menores todava. El dinero es barato. El dinero ahora s que est barato.

GALLASCH, sin lugar a dudas el de mayor edad en todo el grupo, salta de pronto y se
quita el saco de cuadros color verde oscuro. Nada logra mantenerlo en su asiento.
Agita el saco en una mano y en la otra una copa de vino tinto, como si fuera un
derviche gira y gira, el saco vuela en crculo, mientras que la copa, casi como si fuera
el ojo de la tormenta, se mantiene inmvil en el medio del baile.
Los otros observan interesados, preocupados y desconcertados. Ahora empieza a
golpear el saco contra el suelo, los botones suenan y algunos saltan, y luego,
tranquilizndose poco a poco, grita, mientras el cabello le cuelga sobre el rostro como
si fuera un desaliado general de caballera:

El lenguaje!

Breve pausa. Lo grita a su alrededor.

El lenguaje!

Breve pausa.

Es eso!
El lenguaje!

Algo confuso.

Ahora no desenocuparse.

Grita:

Lenguaje. Encontrar el lenguaje.

Breve pausa.

Encontrar el lenguaje y no perderlo!

GUBIG:
Un sabor en la boca como ratn muerto.

SEOR HARTUNG:
Y eso que una vez yoque una vez pudeeso no puedoeso ni siquiera ya me lo
puedo imaginarpero una vez pudeuna vez s.

ROCKWEILER:
A Usted ya habr de irle bastante mal, le dije:

SEOR HARTUNG:
Joven, despreocupada

ROCKWEILER:
Mal. Mal de verdad.

GALLASCH:
Y ahora? Y ahora qu puede seguir?

SEOR HARTUNG:
Tambin desconsiderada.

GALLASCH:
Escorial.

SEOR HARTUNG:
Des-con-si-de-ra-da.

Breve pausa.

Fra. Desvergonzada.

Se tributa reconocimiento a s mismo. Bebe.

SEOR HARTUNG:
Pero yo tena 15 kilogramos de menos! Aqu!
Todo lo que hay enterrado debajo de la grasa:
Toda la juventud.

ROCKWEILER resollando:
Basta. Regresa.

HERING:
Escorial verde: 56 por ciento.

SEOR HARTUNG fulminante:
Tiene que ser posible lograr algo de gran belleza.
Tiene que ser posibletiene que serde algn modofactible.

GALLASCH:
Escorial.

SEORA HARTUNG:
Dnde estn mis espejuelos

SEOR HARTUNG:
No los tenas ahora mismo?

SEORA HARTUNG:
S, ahora mismo los tena aqu, ahora mismo los tena

GALLASCH:
Escorial. Una vuelta de Escorial para todos.

SEOR HARTUNG:
Y en el estuche en el estuche

SEORA HARTUNG:
El estucheel estuche se perdi, ese es el problema, claro que los puse en el estuche,
siempre los pongo en el estuche, pero ahora se perdi, el estuche completo debera estar
aqu. Y no est

SEOR HARTUNG:
No lo habrs guardado?

SEORA HARTUNG:
No! No est aqu, si no, no lo estara buscando, no soy una estpida sin remedio, aun
cuando t quizs s lo pienses, a lo mejor alguien me lo habr robado?

SEOR HARTUNG:
A tu estuche quin se lo va a ?

GALLASCH gritando:
Escorial verde para todos.

SEORA HARTUNG:
No el estuche, los espejuelos! Tienes una idea de lo que cuestan
Pregntale a la tabernera, pregntale

SEOR HARTUNG:
La tabernera no se llev tus espejuelos

GALLASCH gritando:
Verde! No amarillo!

SEORA HARTUNG:
Bien, entonces le pregunto yo si eres demasiado cobarde para hacerlo t, como siempre,
siempre es lo mismo, nunca te atreves

SEOR HARTUNG:
S me atrevo, s me atrevo, pero s, lo s, que ese estuche va a aparecer en veinte
segundos!

SEORA HARTUNG llorando:
No lo har!


La SEORA HARTUNG golpea la mesa con la superficie de las dos manos. Un plato
delante de ella salta ligeramente y el estuche de los espejuelos sale a la luz.
Solloza, lloriquea, levanta lentamente el estuche.

ROCKWEILER:
Y por ello lo voy a estrangular. Y por ello lo voy a estrangular de tal forma que la cosa
va a estallar. Va a hacerse aicos. As lo voy a estrangular.

Breve pausa.

Ese no se vuelve a levantar. Ese va a escupir uno a uno los dientes, y no va a vomitar
solo del dolor. Va a llorar. Va a llorar. Ya llorar.

GUBIG:
Es tan sencillo. Es perfecto. Es tan sencillo. Solo estoy hablando mierda, lo nico que
vendo es mierda y la gente solo compra mierda. Y la compran. La compran.
Carrera al trote. Un jockey corre por delante decmo se llamadelante de sucaray,
cmo se llama

KREYE:
No puedo llevrmela por el invierno. No lo lograr. A m mismo me faltan las fuerzas.
Me faltan las fuerzas. El invierno es largo.

GUBIG:
La cosala cosa que halan los caballos en la carrera al trote, cmo se llama, el carro,
pero no se llama carro, delante de esa cosa corre ahora el jockey bajo la luz de los
reflectores y no el caballo.

Breve pausa.

Y habla siempre consigo mismo, o se escucha lo que piensa, siempre dice: hay algo mal
aqu, hay algo mal aqu.

Pausa.

Eso es entretenimiento.

Breve pausa.

Eso es entretenimiento.

Breve pausa.

Y eso lo vendemos.

ROCKWEILER y GUBIG se levantan al mismo tiempo.

ROCKWEILER:
Tiempo para Lambert.

Los dos salen.

KREYE a SEORA HARTUNG:
Y luego pens si Usted si Usted con su experienciaquiero decir con su experiencia
de la vida

Breve pausa.

Me pregunto simplementeno s cmo yoella est en una situacin realmente muy
difcil, es verdad que conoce el problema pero cuando est bien no encuentra ninguna
razn para hacer algo, y cuando est mal entonces no entiende que es un empujn y
luego es demasiado tarde, pierde la visin de conjunto, piensa, y ah est la trampa en el
desplazamiento de la percepcin, que es entonces que ve claro, esas espirales
mentales, los encadenamientos son realmente brillantes, en el primer momento uno no
es capaz as como as de penetrar hasta el fondo, todo suena plausible, el problema en el
fondo no es la construccin sino el fundamento, y luego vuelvo a pensar, quizs en
realidad el problema sea yo, quizs todo sea culpa de que yo haya dejado ir las cosas tan
lejos, pero entonces la habra abandonado a pesar de estar enferma, s, creo que as
hay que llamarlo, hay llamar as las cosas, ella est enferma

SEORA HARTUNG:
Pero Usted se pregunta si ella tambin estara enferma si ustedes no estuvieran juntos

KREYE:
S, quizs eso cambiara algo las cosas, quizs entonces las cosas nunca habran llegado
tan lejos, quizs por fin las cosas seguiran delante de alguna manera si constantemente
yo no

Breve pausa.

Pero quizs ella tambin quiera matarse.

Breve pausa.

No s que debo hacer.

SEORA HARTUNG:
Y eso quiere Usted que yo se lo diga? No?

Pausa.

Eso no se lo puedo decir: eso no puedo respondrselo.

Breve pausa.

Pero estoy feliz de no tener sus problemas, joven.

Breve pausa.

Estoy bien feliz de ello.

Re. ROCKWEILER regresa del bao.

SEOR HARTUNG:
Dnde est Gubig?

ROCKWEILER:
Gubig? Gubig est con Lambert

SEOR HARTUNG:
Con Lambert?

Breve pausa.

Todava? Gubig todava con Lambert?

Breve pausa.

Por qu?

ROCKWEILER:
Estamos uno al lado del otro, y primeramente nada. Y luego empieza a funcionar,
empieza a salir, no s en realidad, primero yo, puede ser, y luego l, aunqueno s, no
importa tampoco, en todo caso oigo borbotones, lquido cayendo, digo algo sobre los
Staufer y de pronto l vomita.
Vomita sin expulsar nada slido, se apoya con una mano en la pared azulejeada y
vomita dentro del urinario, y yo pienso, es bueno que lo haga, y sigo orinando, eso solo
puede hacerle bien, y luego, cuando vuelvo a mirar, ya no est.

Breve pausa.

Dnde se meti, pienso, y entonces lo veo, en el suelo, delante de los azulejos llenos de
orina delante del urinario, Gubig haba resbalado, para vomitar se haba inclinado hacia
delante y entonces los dos pies le resbalaron hacia atrs en los azulejos mojados y se
golpe la frente con la punta del urinario, y ah estaba, sangrando, pero sobre todo: tena
que seguir vomitando, segua vomitando acostado y al hacerlo me miraba, me miraba
desde abajo con el rabillo de los ojos en busca de ayuda, incrdulo, con pnico tambin,
con ojos de vaca y vomitando todo el tiempo, probablemente tena miedo de ahogarse, y
la sangre le brotaba de la frente rota, quera pararse pero no lo lograba, y yo, yo quera
ayudarlo, pero

Breve pausa.

No poda dejar de orinar.

Breve pausa. Casi se echa a rer.
LA TABERNERA regresa con una bandeja repleta de Escorial verde y distribuye las
copas tan bien como puede teniendo en cuenta lo llena que est la mesa.

No poda dejar de orinar.

Breve pausa.

Conocen eso? Conocen eso?

Breve pausa.

Qu poda hacer entonces? Qu poda hacer? l est all, vomita que te vomita, ya
para entonces solo le sala una espuma blanca, y yo no lo puedo ayudar porque no
puedo dejar de orinar, no s cuntos litros de orina ya yo haba soltado, toda la cerveza,
cuatro litros quizs, pero l necesita ayuda pues en sus infructuosos intentos de ponerse
de pie se golpea constantemente y ya est sangrando tambin de la barbilla, rota de
golpearse contra los azulejos llenos de orina, y luego empieza a resollar, y creo que est
diciendo auxilio o algo parecido, aydame, no lo entiendo bien, en fin, que tengo que
ayudarlo, me vuelvo hacia l y trato por lo menos de alejar mi rabo de l pero, por
supuesto, eso es imposible y no me lo puedo despegar del cuerpo, y en todas partes hay
orine, en la pared, en el piso, en l, debajo de l, en todas partes. Yo soy el nico que me
he librado. Nadaaqu:

Se levanta, muestra sus pantalones sin manchas.

Aqunada.

GALLASCH:
Muchas gracias, mi nia.

GUBIG regresa. Su aspecto es terrible. LA TABERNERA le pasa por al lado.

KREYE:
Pero qu aspecto tienes

GUBIG:
Y qu?

KREYE:
Tienes que lavarte.

GUBIG:
Le puede pasar a cualquiera.

KRONBERG:
Anda a lavarte un poco.

GUBIG:
Ya lo hice.
Ms no se puede. Lo siento.

Pausa. Los otros lo miran. Entonces empieza a desvestirse.

KRONBERG:
Bueno, bueno, bueno.

GUBIG tercamente:
S!

KREYE:
Vamos, est bueno

GUBIG:
Claro que s!

Breve pausa.

Ms no se puede!

Sigue desvistindose, al final no tiene nada ms.
El hombre desnudo al final de la mesa. Canta para s una suave cancin con una
meloda de la que podra suponerse que acaba de inventarla. Un momento de soledad.

Estamos ah
Estamos mano con mano
As estamos ah
Estamos ah
Estamos mano con mano
As estamos ah
A la orilla
Mirando hacia fuera
Mirando hacia fuera

Tengo tu mano
As estamos ah
As
As estamos a la orilla
Mirando hacia fuera
Al agua
Al agua all fuera

Salimos
Nos vamos
O nos quedamos aqu
Ven, nos vamos
Ven, salimos hacia all
Ay,
Ay, quedmonos.

Tiene un poco de fro y bebe el Escorial delante de l.
Mientras tanto GALLASCH cambia su asiento sin ser percibido. Descansa la cabeza
sobre la nuca, su boca est ligeramente abierta, las piernas estiradas, los brazos
cuelgan flccidos a ambos lados. Est durmiendo? Est muerto?

SEOR HARTUNG nervioso a su entrada:
S? S?

Breve pausa.

S?

Breve pausa.

Eso puedo mostrrtelo. Eso puedo mostrrtelo! Mira para ac. Mira para ac!

Se coloca de tal forma que todos pueden verlo y empieza a hacer flexin de rodillas.

Aqu! Uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete, ocho, nueve, diez, once, doce,

ROCKWEILER
As mismo!

El SEOR HARTUNG sigue contando y haciendo sus flexiones. Breve pausa.

As mismo!

Breve pausa.

El proctoscopio! Eso me interesara, el proctoscopio cmo funcionar!

Breve pausa.

Cmo funcionar!

SEOR HARTUNG se ha saltado simplemente algunos nmeros:
Treinta y tres, treinta y cuatro, treinta y cinco, treinta y seis.

No puede ms. No logra alzarse y finalmente cae de lado. Brevemente se mantiene en el
suelo con las piernas en ngulo. Luego se arrastra y logra levantarse apoyndose en su
silla.

ROCKWEILER:
No tengo idea de qu fue lo que alguna vez encontr en ella

HERING a GALLASCH, que no ha cambiado su posicin:
No?

No hay respuesta.

No?

SEORA HARTUNG:
Qu tiene?

KREYE:
Est durmiendo o se muri?

KRONBERG sacudindolo. Coloca el odo en su boca.
No tengo idea.

KRONBERG gritndole.
Gallasch!!! Despierta, t so puerco! Despierta!

Gran confusin. Todos a la vez:

KRONBERG:
No nos dejes embarcados aqu

SEOR HARTUNG:
Mejor lo dejamos as. Ya despertar.

SEORA HARTUNG:
Se cay de la silla y se parti la nuca. Partida! Se acab!

KREYE:
Que eso se abriera, casi espumandoenorme.

HERING:
Le sopla a uno hasta que se queda, y nada, no dejar nada que intentar.

ROCKWEILER:
A m eso me interesara

Re casi carcajeando.
Sonido del telfono. Poco a poco se hace silencio. ROCKWEILER vuelve a
manosearse, como ha hecho todo el tiempo, la espinilla en su mejilla. La SEORA
HARTUNG le golpea la mano.

SEORA HARTUNG:
No! Deje de manosearse! Deje de manosearse siempre!

Y uno sigue hablando:

KREYE:
una pieza de oro era esa estudiante Juliane. Una pieza de oro. S.

KREYE nota que es el nico que sigue hablando. Calla. El telfono suena. Largo rato.
LA TABERNERA va hacia l.

LA TABERNERA:
S, hola?

Silencio.

Un momento, por favor.

Seala a KRONBERG.

KRONBERG sorprendido:
Para m? No puede ser

LA TABERNERA:
Para Ustedes para Usted.

KRONBERG se levanta, va al telfono, todos miran.

KRONBERG seguro de s mismo:
S, dgame.

Breve pausa.

S

Breve pausa.

S

Larga pausa.

S

Deja caer el auricular. Profundamente conmovido a los dems:

El MS ALABAMA zozobr estando an en el dique seco.

Breve pausa.

Y luego durante los intentos de rescate resbal hacia la zona portuaria.

Breve pausa.

Y all se hundi inmediatamente

Breve pausa.

Se acab. 21 millones. Se acab. Hundidos.

Pausa.

SEOR HARTUNG en el silencio:
Y el seguro?

KRONBERG:
El seguro solo paga en caso de daos en alta mar. No en tierra. El seguro no pagar un
centavo.

Larga pausa. Se sienta. Nadie dice una palabra.

KRONBERG:
Todo perdido. Hundido.

KREYE estridente:
Sabotaje!

Pausa.

Ya nadie est seguro!

HERING:
Mala suerte para el que alguna vez crey en eso.

ROCKWEILER finalmente ha logrado extraerse la espinilla.

SEORA HARTUNG:
Quququ es eso? No puede ser, Dios mo, voy a vomitar, debe estar loco, me lo tir
en la cara, me cay en la cara, aqu, aqu, este es el pus de su espinilla, este es el pus de
su espinilla!, este es el pus de su espinilla!, este es el pus de su espinilla! Pus! Pus
suyo en mi cara! So puerco! Puerco, la espinilla, las espinillas se queman, puerco, aqu!

Oprime su cigarrillo encendido sobre la espinilla de ROCKWEILER, que grita en voz
muy alta.

Aqu!

Le arrebata de la mano a ROCKWEILER la colilla encendida del cigarrillo de este y
se la vuelve a oprimir sobre la herida.

ROCKWEILER:
Aaaaaarrrrrghhhh.

ROCKWEILER da un salto gritando, se cubre la mejilla quemada y corre al bao.

SEORA HARTUNG:
Liquidado el asunto! Termin por hoy, me voy!

Se levanta, al hacerlo derriba algunos vasos, se tambalea en direccin al perchero
situado en una esquina y se coloca un abrigo sumamente llamativo y caro.
Regresa. A su marido:

Y t qu? Vas a quedarte? Te vas a quedar ah sentado?

Breve pausa.

Como quieras!

Sale disparada. Silencio. Otro vaso rueda de la mesa y se rompe.
Oscuridad.






























II.
Algo ms tarde: KRONBERG se ha ido. Aparte de eso todo como antes. El rostro de
ROCKWEILER no se ve bien.

HERING:
La pereza es un peligro al que hay que mirar abiertamente al rostro

SEOR HARTUNG:
La pereza es una enfermedad hereditaria.

HERING:
La pereza se hereda y no se aprende.

SEOR HARTUNG:
Madre e hijo, ella fue considerada durante aos como bella pero vaga. Rubia. El joven,
en cambio, es avispado. Luego de repente: el marido pierde el trabajo y ella despierta a
nueva vida, empieza a trabajar, a alimentar a la familia, tienen ms dinero que antes,
y el joven, ella trabaja todo el da, pero el bello jovencito se vuelve de pronto perezoso.
Perezoso y obeso.

Breve pausa.

Qu significa eso?

Breve pausa.

No s.

Oscuridad.





















III.
Ms tarde: GALLASCH est acostado de espaldas sobre la mesa.
HERING, SEOR HARTUNG, ROCKWEILER, KREYE.
LA TABERNERA trata de limpiar la mesa y recoger las copas del piso.

ROCKWEILER:
Usted deberarealmente deberaPor qu noPodra empezar conmigo. Tengo
trabajo para Usted. Siga estudiando. Aproveche sus talentos.

Ella le sonre.

Solo necesita decir que s. Puede empezar maana. Puede empezar inmediatamente.
Qutese simplemente el delantal y venga conmigo.

l extiende la mano.
Oscuridad.


































IV.
Algo ms tarde. ROCKWEILER se ha marchado. Aparte de eso todo como antes.
GALLASCH sin cambio.

KREYE:
Lambert tena la cabeza de un sapo, una panza y debajo patas de cigea. Le gustaba
usar medias de hombre finas. Cuando abra la boca, recordaba un orinal.

Oscuridad.









































V.
Ms tarde: GALLASCH sobre la mesa. KREYE se ha ido. HERING y SEOR
HARTUNG y GUBIG. Igualmente a la mesa: LA TABERNERA.

LA TABERNERA:
Es bueno que existan ciertas cosas, pienso a veces. Ciertas cosas de las que siempre me
alegro. Siempre. Miel, por ejemplo, o ms exactamente: un pan untado con miel
temprano en la maana. O caf.
Claro que no soy la ms bonita.

Breve pausa.

Lo s.

Breve pausa.

Lo s.
Pero eso no cambia nada.
No cambia nada sobre todo en el hecho de quede queuno se hace esperanzas.
O no? No es nada del otro mundo: esperanzas, lo ms normal. Incluso cuando te
decepcionan. Entonces ms que nunca.





























VI.
Ms tarde. GALLASCH sobre la mesa, al pie de la mesa sentado en el suelo SEOR
HARTUNG. HERING junto a la mesa. GUBIG se ha ido. LA TABERNERA se ha
puesto entretanto sus cosas privadas. Sobre una silla hay una cartera y un bolso de
plstico.

HERING gritando:
Sclaro que s

HERING:
No puede

LA TABERNERA:
Pues s

HERING:
Aquaquaqu hay

SEOR HARTUNG:
Aqu, aqu, aqu

HERING:
Hambre!

Pausa.

Hambre!

Pausa.

Hambre!

Nada sucede.

Hambre!

LA TABERNERA:
Cuando yo lo digo

SEOR HARTUNG:
Morirse de hambre a la entrada de la cocina. Ese es nuestro destino.

HERING:
Hambre.

LA TABERNERA:
Aqu ya no hay nadie y maana salimos de vacaciones, nosotros, aqu no hay nada ms,
todo se acab, se termin, aqu no almacenamos nada, se echa a perder

HERING: mirando al bolso plstico de la tabernera.

SEOR HARTUNG:
Nos morimos de hambre a la entrada de la cocina.

LA TABERNERA:
Quizs todos juntos deberamos

Pausa.

Quiero decirquiero decir, podramos ir a mi casa y les hago desayuno.

Breve pausa.

Un desayuno.

Pausa. La partida no se produce.

LA TABERNERA descorcha una botella de vino y bebe de ella.
Solo quera hacerles una oferta.

HERING no sabe con exactitud si tiene necesidad de vomitar o no. Luego, tropezando
en direccin a la mesa, atrapa una botella de vino sobre esta, sigue sin saber si debe
vomitar o no y finalmente se encarama sobre la mesa. Se para encima del inanimado
GALLASCH.

SEOR HARTUNG desde abajo:
Hace poco vi una mujer en un prado. En un parque. O mejor dicho: no era un parque, un
parque sera ms grande, era ms bien una pradera, un terreno verde, limitndolo haba
un parque infantil.
All estaba. En la pradera. Sola.

HERING al saltar de la mesa casi se cae.

SEOR HARTUNG desde abajo:
No haba nadie msexcepto algunos nios en el parque infantil, pero ese estaba un
poco alejadoLa mujer estaba sola. Al sol. Estaba sola en la pradera. Una mujer
todava joven, eso se poda ver desde la distancia. Una mujer todava joven sola en la
pradera. Haba trado consigo una manta. An era temprano. Soleado. Ms clido de lo
esperado. All estaba ella sentada sobre la manta.

HERING vuelve a saltar. Se cae. Golpeteando se levanta. Vuelve a arrastrase hasta
encima de la mesa.

SEOR HARTUNG desde abajo:
All estaba ella sentada sobre la manta.
Erguida. Tena un peridico. Libros. Quera leer. O trabajar.

Breve pausa.

Pareca una flor. Pareca una flor. Pareca una flor deseosa de ser polinizada. Estaba all
sentada a la espera de ser polinizada. Fecundada. As estaba all. A la espera. Sola.

HERING salta por tercera vez.
Fecundacin. A pesar de todos los libros.
As que pas muy cerca por delante de ella. Una vez. Dos veces. Y siempre me mir.

Breve pausa.

Joven. Todava joven.
Y entonces le pregunt. He, qu tal. No respondipero la mirada. La mirada estaba
llena de horror.

HERING sobre la mesa al inanimado GALLASCH:
No entiendes? No entiendes?

Breve pausa.

Podemos volar!
Podemosvolar!

Pausa.

Somos seres superiores! Somos dioses!

Cae.

Gallasch! Gallasch! No te puedes perder esto por dormir!

SEOR HARTUNG se levanta tirando desde una de las patas de la mesa, se suma,
ambos le gritan al odo a GALLASCH.

HERING:
Podemos volar!

SEOR HARTUNG:
l puede volar

SEOR HARTUNG se cae y vuelve a arrastrase a su posicin debajo de la mesa.

HERING:
Esa es la magnificencia.

Pausa.

Esa es la magnificencia.

Breve pausa.

Y ahora: ven

Extiende a LA TABERNERA el largo brazo con la mano abierta. ROCKWEILER no
haba hecho un rato antes el mismo gesto?

Ven ac.

Ella lo mira y bebe un largo sorbo de la botella.

Ven ac!

Ella se hace de rogar, bebe y lo mira. Se est moviendo GALLASCH
imperceptiblemente?
Vacilante ella avanza hasta l. l la atrae hacia s, ella cae entre sus brazos.
HERING y LA TABERNERA se besan.

SEOR HARTUNG:
Retintn, retintn.

Breve pausa.

Todo una cuestin del ritmo. A veces pienso en el campo de cardos frente a nuestra
casa.

El beso se convierte en un mutuo manoseo de borrachos. LA TABERNERA se apoya
en el inanimado GALLASCH o se sujeta de l.

LA TABERNERA:
Eso es lo malo de la gastronoma: que tenemos que vivir de envenenar a los seres que
amamos!
Que tenga que suceder!

SEOR HARTUNG se toquetea mientras tanto los zapatos o algo as.
HERING y LA TABERNERA pierden las fuerzas. l agarra una de las botellas a su
alrededor.
SEOR HARTUNG eructa constantemente.

SEOR HARTUNG:
Y yo idiota todava estoy tratando de ayudarlapero esa anda dando vueltas alrededor
de un tornillo histrico, ya no hay manera de entrar ah.

Breve pausa.

No tengo por qu aguantar esto.

HERING se sienta pesadamente en una de las sillas. Bebe de uno de los vasos en la
mesa.

HERING:
Adelante. Adelante ahora.

Nada sucede.
Oscuridad.
















































VII.
SEOR HARTUNG y HERING se han marchado. Solo GALLASCH sobre la mesa.
LA TABERNERA regresa, est limpiando, barriendo y recogiendo.
Sale varias veces llevando copas y vasos. Cuando la mesa exceptuando a
GALLASCH est completamente recogida, se marcha llevando consigo la cartera y
el bolso plstico.
Oscuridad.

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