El documento analiza el concepto de autoridad y su importancia en la dinámica familiar, especialmente en la relación entre padres e hijos adolescentes. Explora cómo la falta de modelos creíbles de autoridad en la sociedad afecta la formación de la subjetividad y la estabilidad de la célula familiar. También presenta un caso clínico que ilustra los desafíos en el ejercicio de la autoridad parental y la rebelión adolescente.
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El documento analiza el concepto de autoridad y su importancia en la dinámica familiar, especialmente en la relación entre padres e hijos adolescentes. Explora cómo la falta de modelos creíbles de autoridad en la sociedad afecta la formación de la subjetividad y la estabilidad de la célula familiar. También presenta un caso clínico que ilustra los desafíos en el ejercicio de la autoridad parental y la rebelión adolescente.
El documento analiza el concepto de autoridad y su importancia en la dinámica familiar, especialmente en la relación entre padres e hijos adolescentes. Explora cómo la falta de modelos creíbles de autoridad en la sociedad afecta la formación de la subjetividad y la estabilidad de la célula familiar. También presenta un caso clínico que ilustra los desafíos en el ejercicio de la autoridad parental y la rebelión adolescente.
El documento analiza el concepto de autoridad y su importancia en la dinámica familiar, especialmente en la relación entre padres e hijos adolescentes. Explora cómo la falta de modelos creíbles de autoridad en la sociedad afecta la formación de la subjetividad y la estabilidad de la célula familiar. También presenta un caso clínico que ilustra los desafíos en el ejercicio de la autoridad parental y la rebelión adolescente.
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Psicoterapia y Psicodrama
Vol. 1, n 1, 2012. Pgs. 7-10.
Psicodrama, Familia, Adolescencia y Autoridad Dalmiro Manuel Bustos El ser humano ha nacido para crear, J.L. Moreno. Hace unos 30 aos, cuando la terapia centrada en el ncleo familiar era algo lejano que se encontraba en un estado embrionario, me consult una seora con su marido. Habamos pasado por ese traumtico y trgico hecho que fue la guerra de Las Malvinas. Muchas familias estaban en crisis y asist a varias de los ncleos familiares que se encontraban en un grave nivel de angustia debido a que sus hijos se encontraban luchando una guerra absurda que reflejaba el desprecio de ambos pases en conflicto por la vida humana. A pesar de estar en la misma situacin que ellos, el ser un Sociodramatista me colocaba en una posicin activa y me sacaba de la impotencia. Claro que ninguna tcnica ni teora era posible aplicar. Pero ayudaba, sin darme cuenta, los escritos de Moreno sobre sociodrama con familias. Ayud. Cmo? Segn ellos encontraban alguien que aplicara el principio de autoridad en forma creble. Era un parmetro confiable frente al caos. El rol se fue enriqueciendo posteriormente, con la prctica, el distanciamiento que permite ir armando una metodologa que permita un abordaje claro. An cuando la claridad y sistematizacin muchas veces naufraga frente a lo complejo que significa entrar en la intimidad de una familia. Pero lo que ms fuertemente se afirm dentro de m como padre y terapeuta fue lo importante que es el principio de la autoridad como eje de la dinmica familiar. Cmo se va gestando el principio de autoridad? Desde el punto de vista de los condicionantes sociales, el concepto de autoridad fue evolucionando desde el absoluto: o sea la ley del ms fuerte en el que la norma o ley se transforma en un mandato indiscutible. El ms fuerte fsicamente dominaba o destrua al inferior. Y creo vlido preguntarse si hemos recorrido mucho terreno o simplemente hemos cambiado el modo de dominacin. Y tambin es vlido preguntarse si la forma primitiva realmente no permanece. La violencia de gnero, pasando por el bulling, demuestra que el hombre primitivo se ha sofisticado y travestido. El otro en sus diversas formas tales como las tiranas y las frmulas reactivas de salida, que acababan por recrear el poder cambiando simplemente la o las personas que lo ejercan y sus mtodos. Poder que exiga la participacin de las personas a las que va dirigido. La democracia marca principios ideales de convivencia. El problema no est en la democracia, sino en los demcratas, ya que la tendencia ha sido apoderarse de lo que simplemente deberan representar. Ningn latinoamericano ignora los sufrimientos que hemos tenido por este problema. Y como parte del sufrimiento, la falta de modelo creble que obre como referencia para el ejercicio del poder, una forma de autoridad que supere los opuestos de autoritarismo y desidia. La corrupcin imperante en los integrantes de los diferentes gobiernos, llevan a un descreimiento que contamina la subjetividad social que sirve de asiento para la familia. La palabra firmeza no tiene muchos ejemplos prcticos de referencia. La convivencia desde la diversidad existe como utopa pero muy difcilmente es vista en la prctica, que es la gran maestra. La falta de credibilidad social, crea un caos en su clula central que es la familia. La iglesia es otra de las fuentes que histricamente propone valores deseables, normas de vida ideales. Pero son raros los ejemplos crebles como institucin. Muchos de sus valores se basan en principios medievales. Donde la diversidad que propugna la libertad de credos y conductas siempre que no lastimen o someta a los dems, estn muy daados. Pedofilias no PSICODRAMA, FAMILIA, ADOLESCENCIA Y AUTORIDAD DALMIRO BUSTOS Psicoterapia y Psicodrama Vol. 1, n 1, 2012. Pgs. 7-10. castigadas, formas de dominacin econmica, y lo peor, que es el invocar el poder divino para que sus criterios sean incuestionables. Dios lo dice as. Si fueran coherentes y no falaces, esto servira para sostener y crear seguridad. Pero Todo esto siempre ocurri, en algunos casos ms que ahora. Pero los medios de comunicacin, que antes tenan menos poder, ahora difunden y amplifican o simplemente inventan todos los hechos de corrupcin y esto que parece libertad de prensa es en realidad una explotacin de los sucesos negativos en busca de su propio inters. Lo cual aumenta la falta de credibilidad. El control a travs de provocar el pnico, deja sin capacidad de reaccin y tiende a pasivisar a quien es objeto de la manipulacin. La institucin educativa, como fuente de formacin, ha sido durante siglos un alivio y apoyo para los padres. La escuela es el segundo hogar). El principio en general era la pasividad del alumno. Al tener como supuesto bsico que por ser alumno no se sabe y que se debe permanecer pasivo y repetir lo que aquel que sabe lo colonice con sus ideas y teoras sobre la vida. No haba participacin y el mejor alumno era aquel que repeta literalmente los contenidos aprendidos. Recuerdo claramente mi total aburrimiento y mi capacidad de repetir sin comprender el sentido bsico de los conceptos. Era premiado sistemticamente, cuadros de honor, abanderado, etc. Comenc a huir de esos mbitos, acelerando mi estada, haca dos aos en uno, lo que me vali llegar a ser mdico a una edad inusual. Mi refugio eran los libros de los clsicos que dejaban participar y repensar los contenidos. Y la pintura que me sustraa del tenebroso modelo de conservas culturales. Me apartaba del ser un robot para poner en juego mi creatividad, esencia del ser humano. ltimamente el sagrado mbito educativo que de todas maneras permita el acceso al saber, ha comenzado a trastabillar. Mtodos participativos sacan el aprendizaje del lugar de estatismo que lo caracterizaba. Pero siempre con gran resistencia. No olvidemos que an hoy hay escuelas en New York que sostienen que la teora de la evolucin de Darwin es un pecado mortal. Y el adolescente? Volvamos a la clula familiar. Hace unos aos me consulta una familia. Padres profesionales. l fue un militante que estuvo preso durante un ao. La madre, arquitecta, una mujer muy contenida, severa, conduce la casa con mano firme. La familia se compone de tres varones de 12, 13 y 16 aos. El de 16 aos tiene el diagnstico de moda: dficit de atencin. Repite de ao, siendo que su cociente intelectual es muy alto. Lo medican pero el muchacho se niega a tomar la medicacin. Los hermanos comienzan a mostrar seales de angustia y descubren que el menor fuma marihuana. El padre se deprime y su terapeuta indica terapia familiar. En la primera consulta estn presentes solo los dos padres. Una vez que sent que haba un margen razonable de rapport, les pido que hagamos de cuenta me venan a visitar una vez terminada la terapia. Esta futurizacin me permite investigar los motivos subyacentes de la consulta. Apuntan primero a que Jaime, el hijo mayor, descubri que no era falta de atencin lo que padeca sino mucho desprecio por la imagen de los adultos. Su dispersividad era su rebelda por usar sus cualidades al servicio de la hipocresa. Y que sus padres vivan peleando y los senta inseguros. El segundo quedaba en el medio, angustiado por su hermano menor, que no quera salir de la niez, pero cuando oy a su padre asumir su rabia contenida, se alivi mucho. Pregunto cul fue a su juicio, la sesin que marc un antes y un despus en la dinmica familiar. Que me digan cual fue la que cada uno sinti como central. De diversas maneras apareci la necesidad de admitir sin tapujos la agresin contenida. El menor (los padres haciendo su rol) insiste en la soledad que reina, se siente sin conduccin, nadie manda, solo los retan y se pelean entre s. El que se rebela es visto como enfermo o el loco. Y el que muestra su dolor, representa el dbil. PSICODRAMA, FAMILIA, ADOLESCENCIA Y AUTORIDAD DALMIRO BUSTOS Psicoterapia y Psicodrama Vol. 1, n 1, 2012. Pgs. 7-10. Ya en la sesin a la que asisten todos, Jaime cuenta que un da volvi llorando de la escuela. Un compaero dice que sus padres le dijeron que su padre estuvo preso por comunista, era un subversivo y lo deberan haber matado. Era una escuela ultra catlica, a la que asistan sus hermanos. Todos se unieron al bulling. Cuando lo cuenta a sus padres se encuentra con medias palabras y desvos de la conversacin. La madre dice que fueron sueos locos de adolescentes. Siente que es intil buscar proteccin y como descarga patea al gatito llamado Hrcules, el que muere de inmediato. Fue el centro del trabajo. Cada uno en su turno hace el rol de Hrcules. La sensacin de ser objeto impotente del desamparo frente a poderes mayores (militares, desamparo por la ausencia del marido preso, la escuela etc.) Se comienza a trabajar sobre el desamparo y su forma de responder a esa temida condicin. Construyendo el ejercicio de la autoridad a partir de la Teora de Clusters Desde hace mucho tiempo he ido elaborando la teora de CLUSTERS a partir de los desarrollos de la teora de roles de Moreno. Desde all busco comprender el desarrollo del ser humano. (Manual de Psicodrama. Editorial Vergara Argentina. Dalmiro Bustos- Elena Noseda 2007). Desde este ngulo me he de referir aqu a la construccin de la funcin de autoridad. Sabemos que la total dependencia en el que nace el ser humano, hace necesario un entorno contenedor que supla sin angustias las necesidades bsicas, imprimiendo el hecho de ser ayudado y cuidado como siendo parte natural de la vida. Es un perodo inexorable para ir construyendo la seguridad de asumir los muchos momentos en los hemos de necesitar ser cuidados. El desamparo en esta etapa puede conducir a extremos como la muerte por carencias psicofsicas hasta la construccin de una temprana autonoma. No puedo contar con nadie. Sobre la endeble columna de la negacin de las necesidades se erige la dureza y la descarga violenta en lugar de la fuerza constructiva. Ser dueo de s mismo, decidir firmemente sin daar permiten tanto dar apoyo desde los aspectos vinculares, como saber afirmar las decisiones a lo largo de la vida. La firmeza y la violencia son opuestos. Pero sin la ternura esencial (clster uno o materno) asumida sin angustia, no hay lugar para la firmeza (clster dos o paterno), siempre se buscar un Hrcules para descargar la tensin. Y el compartir, ideal de la vida adulta, (clster tres o fraterno) se torna IMPOSIBLE. Poder soar con ideales, trazar objetivos que signifiquen el desarrollo de los potenciales de cada uno, hace falta saber depender, saber tomar decisiones autnomas, correr riesgos y poder tener la osada de compartir y vivir en grupos que puedan cambiar el orden violento que nos caracteriza. Se construye un ensimismamiento donde las metas individuales superan y esconden las que reflejen el bienestar comn. La soledad y el desamparo se insertan dentro de los ideales individuales, generando conquistas plenas de vacios existenciales. Histricamente, en esos momentos se busca alguien que asuma el poder absoluto en el que se encuentren respuestas. Y siempre hubo y habr mistificadores que aprovechen esta situacin para prometer falsas salidas. Los mercenarios del desamparo, lucran con estas falsas salidas. Los ejemplos abundan: Hitler, Thatcher, Videla, Franco, etc etc. Todos necesitaban construir un enemigo claro para justificar el dominio y el autoritarismo. En un nivel menos lejano el bulling representa esa dinmica. Buscar alguien al que se caracteriza como dbil, por tanto despreciable, en vez de vulnerable, por tanto mereciendo una ayuda solidaria. La autoridad flexible, creble y participativa, que no sea solo un ideal sino que genere credibilidad y hechos compartidos, no es solo necesaria para que el adolescente pueda crecer con lmites claros, sino para la convivencia adulta. Y debe ser participativa y DELEGADA para no generar un rol complementario pasivo dependiente. El respeto por los que ejercen la autoridad en todos los mbitos, se ha perdido peligrosamente, dando lugar a salidas ilusorias como la droga que permita soar qumicamente sin un posible devenir de un proyecto parido por el sueo. La ESPONTANEIDAD debe necesariamente pasar a travs de la ADECUACIN, la PSICODRAMA, FAMILIA, ADOLESCENCIA Y AUTORIDAD DALMIRO BUSTOS Psicoterapia y Psicodrama Vol. 1, n 1, 2012. Pgs. 7-10. cual contiene las normas deseables de convivencia, LA TICA QUE CONTIENE. Son lmites necesarios que no permiten que la libertad se convierta en daino caos. Las descargas agresivas de los adolescentes frente a la hipocresa de los que ejercen la autoridad, son muestras trgicas de la necesidad de reconstruir el ejercicio de la autoridad. Y frente a esta amenaza que leemos diariamente en los peridicos y en la televisin, el que debe ejercerla teme hacerlo. Al no poner lmites con conviccin, el adolescente se siente dueo del poder, que al no poder ejercerlo adultamente, se descarga destructivamente. Hrcules no puede morir. Moreno vivi soando con un mundo formado por seres libres en donde se conviva con las diferencias y se posibilite el nutrirse de ellas. Como el mundo adulto que genere estas condiciones se ve amenazado constantemente por guerras absurdas o injusticias flagrantes el adolescente sustituye los ideales con contenidos crebles, desplazndolos hacia la imagen, que sustituye el contenido. Como un Dorian Grey al revs. La realidad es escondida y se muestra la imagen, que al tratar de no envejecer, evita el aprendizaje que diga por experiencia tangible, que el ideal del ser humano se basa en su trascendencia, en logros que permitan vivir mejor. El Psicodrama no es una panacea, pero es un instrumento vlido en esencia, que nos conduzca hacia crear condiciones de convivencia diferentes a la actuales. Ayer mismo estaba tomando un bao con hidromasaje, relajndome despus de un da de trabajo. Enciendo la televisin y las imgines muestran que a escasos kilmetros de mi casa haba enorme cantidad de familias que trataban de sobrevivir sin agua potable. Las caritas de esos nios teniendo que recorrer grandes distancias para conseguir el preciado lquido me conmovi. Una imagen vale ms que mil palabras. Esto ocurre en muchas partes del mundo y muchas veces a pocos pasos de nosotros. El frescor del agua que me haba acariciado minutos atrs se convirti en una sensacin de malestar. Mezcla de culpa, impotencia, banalidad. Desde el individualismo imperante solo se puede responder con depresin que solo no sirve para resolver nada sino para hacer del sufrimiento una forma abrigo frente a la realidad. La negacin es otro recurso. Yo me ocupo de lo mo, ojos que no ven corazn que no siente dicho esto se enciende un cigarrillo y se bebe tranquilamente una bebida alcohlica. Es decir que la negacin es solo una fantasa que el cuerpo denuncia en su falacia. Solo el grupo puede generar respuestas posibles. No puedo resolver el problema solo, pero eso no quiere decir que no puedo desde mi modesto lugar hacer algo. Como es por ejemplo tratar de contribuir escribiendo estas palabras. Moreno dijo que si volviera a nacer querra hacerlo como un grupo. No dejemos a Hrcules morir. Bibliografa Bustos, D. y Noseda E. (2007). Manual de Psicodrama. Buenos Aires: Vergara. Bustos, D. (2005). Manual para un hombre perdido. Buenos Aires: Letra Viva. Bustos, D. (1992). Peligro Amor a la vista. Sao Paulo: Lugar Editorial. Moreno J.L. (1978). Who Shall Survive. New York: Beacon House Editors.